Investiga TEC 5MAYO 2014 -

Una de las labores ms ingratas a las que se enfrenta quien investiga es hacer el in-forme final (sobre todo cuando el plazo ha vencido y nos atormentan los recordato-rios diligentes, sellados y firmados, sobre nuestra tardanza). He pensado mucho al respecto en estos das, no solo luchando con el texto que se niega a avanzar tanto como quisiera, sino con la frustracin in-herente de descubrir que tantos objetivos planteados en la ambiciosa propuesta fue-ran a dar tan lejos del blanco. Aunque podra ensayar explicaciones sobre tan pobres resultados (nunca falta a quien culpar: la burocracia, los malos asistentes, la falta de recursos) o refugiarme en la au-toflagelacin, y confesarme desordenado y vctima de mi tendencia a dejar todo para el final, he de pronto encontrado salvacin para mi ego dolorido en dos autores que, de una manera bastante convincente, me aplacaron las culpas y me permiten ahora aferrarme a esa trillada verdad refranera de que el mal de muchos es consuelo para al-gunos tontos, como este servidor. Y como pienso que es injusto guardarse un remedio que quizs pueda servirle a otros tantos que, no dudo, habrn pasa-do por estas aguas turbias de justificar un proyecto fallido, decid revelar esta nueva pomada, empezando por la verdad ms amarga: los humanos somos psimos pla-nificadores. Hablar entonces primero de uno de los autores, el Dr. Nassim Taleb, operador de bolsa, especialista en probabilidad y esta-dstica y antiguo profesor universitario. Cuenta Taleb en su ms reciente libro, An-tifragilidad: cosas que ganan con el desorden, que cuando Yogi Berra (otros dicen que se trat ms bien de Niels Bohr), asever que predecir es muy difcil, especialmen-te el futuro, no haca ms que revelar una verdad que la estadstica comprueba: la mayora de los proyectos nunca terminan

en el plazo esperado y muchos terminan gastndose entre el doble y diez veces lo originalmente proyectado. Taleb acusa de lo anterior a la moderni-dad, al crecimiento exponencial de las consultoras y los expertos, a la burocra-cia y las comunicaciones digitales, y sobre todo a nuestra creciente arrogancia epis-tmica y la apuesta ciega al modelo lineal baconiano de creacin del conocimiento (en castellano castizo: creerse que sabemos ms que los dems, que la ciencia engen-dra la tecnologa, que es posible predecir con exactitud y que somos capaces de ex-plicarle a los pjaros cmo deben volar). La planificacin estratgica a largo plazo, de hecho, nos dice Taleb, es lo que vuel-ve tan complicado y propenso al fracaso a cualquier proceso humano actual, por-que quien planifica, sin importar cuntos cursos de manejo de riesgo haya llevado, siempre minimizar estos inconsciente-mente, es inevitable y nunca podr pre-ver los verdaderos imprevistos en su cami-no. Taleb no es precisamente una persona polticamente correcta: dice lo que piensa sin rodeos (y generalmente, los hechos le dan la razn, como cuando explic en su famoso Cisne negro que algo andaba mal en Wall Street, un ao antes del crash in-mobiliario). Pero lo peor, sentencia Taleb, es que estos mismos expertos y planificadores nun-ca pagan el precio por sus consejos; por ejemplo, por entrar en un tema espinoso como el de la economa: quin revisa las predicciones econmicas de un ao atrs? Alguien le lleva la cuenta a la infinidad de veces que los expertos del FMI, del Ban-co Mundial, de Wall Street, han acertado con un pronstico? O lo que resulta ms importante: si alguien dice que un instru-mento financiero es calidad AAA, y luego resulta que se convierte en un bono basu-ra, no debera ser responsable del dinero

La inteligencia bioinspirada desarrolla siste-mas con medios tecnolgicos y electrnicos para emular e implementar la forma de pen-sar y de actuar de los sistemas biolgicos. El propsito de estos sistemas es resolver proble-mas de la biologa mediante el procesamien-to y tratamiento de seales. Para el diseo de estos sistemas se utiliza la computacin numrico-simblica y mtodos como las re-des neuronales artificiales, la lgica difusa y la computacin evolutiva, entre otros.Es difcil indicar la fecha exacta de la apari-cin del concepto, pero surge con fuerza des-de principios del siglo XXI, aglutinando los sistemas inspirados en sistemas biolgicos ya existentes desde mediados y finales del siglo XX. En los congresos y conferencias recientes es donde este nombre ha empezado a cobrar fuerza.El ejemplo ms claro es la implementacin de las redes neuronales artificiales (RNA). Las RNA son sistemas de procesado de in-formacin basado en mtodos matemticos y humanos. Estn formadas por nodos de pro-cesamiento (neuronas), conectadas entre s (pesos) y que dependiendo de su tipo, nece-sitan un patrn para realizar un aprendizaje.Fueron creadas despus de observar que el ce-rebro procesa informacin de un modo muy diferente a como lo hacen los computadores digitales. Adems, se calcula que el cerebro contiene una eficiencia energtica (medida en julios por operacin por segundo) 1010 veces superior a los computadores ms po-tentes existentes actualmente.El objetivo de las redes neuronales artificia-les es construir sistemas que sean capaces de aprender, generalizar y resolver problemas a los que hoy en da no pueden dar solucin los computadores convencionales. En general, a los sistemas con inteligencia bioinspirada se les valora que sus caracters-

Carlos Travieso (*)

I nteligencia bioinspirada Gua de los perplejosAlfonso Chacn RodrguezHumildades epistmicas I

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ticas se parezcan a las de los seres vivos, tales como la computacin asncrona masivamen-te paralela, comportamientos tolerantes a fa-llos y funcionamiento en tiempo real incluso en entornos complejos y cambiantes.Los mbitos de aplicacin de estas tcnicas son muy amplios y en la actualidad son apli-cados a diversos campos como la medicina, la seguridad, el sector automovilstico, etc., siendo un punto clave en el sector innova-dor de la industria y, por tanto, provoca un importante aspecto socioeconmico en las sociedades de nuestro mundo actual.Debido a esta importancia, y a que muchos detalles de la inteligencia bioinspirada no son bien tratados por los modelos convencionales

que pierda quien haya invertido en aquel? Taleb es filoso con sus afirmaciones: para l, muchos expertos y planificadores profe-sionales generalmente no saben realmente mucho del tema sobre el que ofrecen con-sejo o toman decisiones, pero venden muy bien su aparente certeza mientras que otro paga la fiesta (Dick Cheney estim que la guerra contra Irak costara mximo unos 100 mil millones de dlares por una cam-paa de dos aos a lo sumo; termin cos-tando entre tres y cuatro billones de dla-res por ms de siete aos de guerra con sus consecuencias posteriores, y obviamente ni Cheney ni Bush tuvieron que pagar un cinco por su error de clculo). Pero si volvemos a lo nuestro, a la aca-demia, leer a Taleb es sacar del bal pre-guntas inquietantes: Podemos realmente planificar la investigacin? Es investigar una cuestin de manual, instructivos, for-mularios y herramientas estadsticas para producir grficos bonitos? Qu objeto tiene plantearse como meta el descubrir algo especfico, en un tiempo dado? Taleb dice que la investigacin burocrti-ca est condenada al fracaso y ofrece una alternativa, la que usaron Edison y mu-chos otros: la de la investigacin como un proceso azaroso de prueba y error, de descubrimientos accidentales, donde el verdadero talento del investigador reside en darse cuenta si el error es til o no. La investigacin debe hacerse entonces con

objetivos flexibles, en tramos cortos, sin cerrarse vas y siempre con la disposicin a rectificar la direccin. Los descubrimien-tos revolucionarios, dice Taleb, han lle-gado por inspiracin, por la va negativa de hallar lo que no funciona y el trabajo necesario para darse cuenta cundo, tras tantos topetazos de nariz, nos encontra-mos con la botija al final del arcoiris: as fue con la Viagra, la fotografa a color, la radiactividad y hasta las rueditas en las valijas (cmo puede ser, se pregunta Ta-leb, que tuvieran que pasar miles de aos desde la invencin de la rueda, para que a alguien se le ocurriera ponerle rodines al equipaje?). Es que las cosas solo parecen obvias y or-denadas una vez que han sido hechas. Y aunque suene a anatema, lo cierto es que generalmente la tecnologa antecede a la ciencia (Taleb ofrece un argumento con-vincente y documentado al respecto), y el conocimiento revolucionario no tiende a obtenerse por medios planificados.En fin. Ms combustible para reflexionar para quienes transitamos esto de la in-vestigacin... pero me devuelvo a lo que compete: que tengo que continuar con mi informe. Quedar para una prxima oca-sin el segundo autor (y hablando de falta de planificacin, aqu estoy de nuevo, ya pasado del nmero de caracteres que tena dispuesto para esta columna: hay gente que nunca aprende).

que se utilizan en la actualidad en el campo de la inteligencia artificial, se est trabajando en generar una conferencia de trabajo con el propsito de presentar y discutir nuevas ideas, el trabajo y los resultados relaciona-dos con las tcnicas alternativas de enfoques bioinspiradas, que se apartan de los procedi-mientos ordinarios. Hoy en da, los estudios basados en sistemas complejo se abren nuevas puertas en el cam-po de la investigacin y, en particular, para mejorar la calidad y los resultados de diver-sas aplicaciones. La inteligencia bioinspirada hace fcil esta tarea en reas como la conser-vacin de la biodiversidad, la biomedicina, las aplicaciones de seguridad, etc.

Conferencia y tallerEn 2014, se llevar a cabo la tercera edicin de IWOBI (International Conference and Workshop on Bioinspired Intelligent) en Libe-ria, Costa Rica, organizado por la Universi-dad Nacional (UNA) de Costa Rica. En el ao 2012, se realiz en San Jos de Costa Rica (en la Universidad de Costa Rica) y en el 2011 en Colombia, organizado por la Uni-versidad de Antioquia (Medelln).Esto representa un hito importante para mostrar las lneas de trabajo existentes en Costa Rica, adems de poder compartir con investigadores de ndole mundial los ltimos avances cientficos que han aconteciendo. La UNA, el Instituto Tecnolgico de Cos-ta Rica, la Universidad de Costa Rica y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (Espaa), son los organizadores de tal evento que tiene previsto acercar a investigadores de ms de 20 pases hasta la sede de la UNA en Liberia para la realizacin del IWOBI 2014.Las principales potencias econmicas son las que ms invierten en investigacin y, por tanto, donde ms a la vanguardia van con respecto a este tipo de sistemas; es cierto que, cada vez, otros pases van avanzando ms en esta lnea, como el caso de Costa Rica, don-de gracias al IWOBI 2014, los investigadores y profesionales del pas estarn en contacto con las ltimas tendencias mundiales en este tema.

(*) El Dr. Carlos Travieso es profesor e investi-gador de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Forma parte, junto con investigado-res del Instituto Tecnolgico de Costa Rica, la Universidad de Costa Rica y la Universidad Nacional, del proyecto de investigacin Sistema automtico de clasificacin de abejas sin aguijn (Apidae: Meliponini) basado en el contorno y vejacin de sus alas.