Post on 28-Mar-2016
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Doctora Colette Arpaillange
Educaa tu cachorroPaso a paso, mes a mes
Colette Arpaillange es doctora veterinaria especialista en etología y dirige el servicio de consultas sobre patología del comportamiento de la Escuela Nacional Veterinaria de Nantes. Le apasiona su trabajo y está muy interesada en la divulgación de sus conocimientos. También ha participado en la realización del Tratado Rustica del perro.
Colette Arpaillange
Educa a tu cachorro
Paso a paso, mes a mes
La autora, doctora veterinaria y especialista en comportamiento animal, proporciona las claves para comprender a tu cachorro y educarlo de modo que se convierta en un compañero alegre y desenvuelto, con el que sea agradable convivir.
Los distintos capítulos especifican las particularidades del cachorro en función de su edad, desde el nacimiento al umbral de la edad adulta, y los aprendizajes adecuados para cada etapa.
Mes a mes, descubrirás cómo realzar sus aptitudes y animarlo a desarrollar sus capacidades para convivir en armonía con la familia.
Al final del libro encontrarás 14 lecciones que te ayudarán a enseñarle a responder por su nombre, a pasear con correa sin tirar, a recibir a las visitas sin saltar…
Te presentamos una guía al alcance de todos para educar correctamente a tu cachorro.
Educ
a a
tu c
acho
rro
www.servet.es
14 consejos para ayudarle
a crecerColección dirigida por Laetitia Barlerin, doctora veterinaria, diplomada en la Escuela Nacional Veterinaria de Alfort. Además de ejercer como veterinaria, participa en un programa de radio dedicado a los animales y en un programa de televisión. Colabora con diversas publicaciones tanto profesionales como dirigidas al público en general y con revistas especializadas en animales.
Títulos en español de la misma colección:100 ideas falsas sobre el gato100 ideas falsas sobre el perroInterpreta el lenguaje de tu gatoInterpreta el lenguaje de tu perroTu gato y tú
OpOrtunidades que nO pOdemOs dejar pasar
La presencia de la madre junto a los cachorros es indispensable durante las siete primeras semanas de vida.
La socialización con la especie humana comienza en la tercera semana de vida y se completa, aproximadamente, durante el tercer mes.
10
CapÍtuLO 1 • COnOCer aL CaChOrrO para eduCarLO
11
por ejemplo, la capacidad de au-
tocontrol aparece alrededor de la 5ª
semana, gracias a la intervención de
la madre, que enseña a los pequeños a
regular sus movimientos. Los circuitos
nerviosos que permiten la inhibición
se activan si el animal aprende a do-
minarse. por eso, un cachorro aban-
donado a su suerte, que no reciba esta
educación temprana, se convertirá en
un perro hiperactivo difícil de contro-
lar. si bien el cerebro conserva cierta
plasticidad durante toda la vida, que
facilita los nuevos aprendizajes, el ca-
bleado de base es esencial.
Enfrentar al cachorro a diversas situacionesdurante la última etapa del desarrollo comportamental o periodo de socialización, que
tiene lugar entre la 3ª y la 12ª semana de vida, el cachorro establece una serie de refe-
rencias propias, de acuerdo a los estímulos recibidos del entorno. para que un estímulo
se incorpore en esta “base de datos” es necesario que se presente con regularidad y en
baja intensidad.
por ejemplo, la circulación de vehículos por una carretera cercana permite que el
animal se acostumbre a los coches, pero sufrir un accidente con el automóvil de su
criador le produciría una fobia permanente. Cuanto más completa es la base de datos
inicial, mayor capacidad tiene el cachorro para adaptarse a un entorno nuevo, diferen-
te al del lugar en que nació. si el pequeño ha visto coches pasar, es probable que se
sienta relativamente cómodo en la calle. Cuando se cruce con un autobús, quizás se
sorprenda al principio, pero después se fijará probablemente, en que tiene puntos en
común con los automóviles y considerará, por tanto, que ese objeto desconocido no
debe provocarle ningún temor.
durante este mismo periodo tiene lugar la socialización con el hombre. un perro que no
haya mantenido contacto con humanos entre la 3ª y 12ª semana de vida será, en adelante,
un animal incapaz de comportarse normalmente entre ellos.
Oportunidades que no podemos dejar pasar
el comportamiento del perro se construye progresivamente desde el nacimiento hasta
la edad adulta y algunas etapas, como la socialización o la adquisición de autocontrol,
son pasos obligados para que el cachorro evolucione de forma adecuada. La presencia
de la madre hasta el final de la séptima semana de vida o la necesidad de exponer al
animal joven a estímulos variados, son requisitos indispensables para que el desarrollo
del cachorro sea óptimo.
Un sistema nervioso en construcciónLos circuitos neuronales que se estimulen durante los primeros meses de vida perma-
necerán activados indefinidamente, mientras que otros, inoperantes, se destruirán de
forma automática al final del desarrollo. este proceso de selección recalca la importancia
de la biografía precoz del individuo y del impacto de la experiencia.
A lo largo del desarrollo, el cachorro supera una serie de fases durante las cuales es especialmente receptivo a ciertas experiencias. Se trata de periodos en los que el aprendizaje y la memorización se dan con facilidad; son momentos clave para el desarrollo cerebral.
OpOrtunidades que nO pOdemOs dejar pasar
La presencia de la madre junto a los cachorros es indispensable durante las siete primeras semanas de vida.
La socialización con la especie humana comienza en la tercera semana de vida y se completa, aproximadamente, durante el tercer mes.
10
CapÍtuLO 1 • COnOCer aL CaChOrrO para eduCarLO
11
por ejemplo, la capacidad de au-
tocontrol aparece alrededor de la 5ª
semana, gracias a la intervención de
la madre, que enseña a los pequeños a
regular sus movimientos. Los circuitos
nerviosos que permiten la inhibición
se activan si el animal aprende a do-
minarse. por eso, un cachorro aban-
donado a su suerte, que no reciba esta
educación temprana, se convertirá en
un perro hiperactivo difícil de contro-
lar. si bien el cerebro conserva cierta
plasticidad durante toda la vida, que
facilita los nuevos aprendizajes, el ca-
bleado de base es esencial.
Enfrentar al cachorro a diversas situacionesdurante la última etapa del desarrollo comportamental o periodo de socialización, que
tiene lugar entre la 3ª y la 12ª semana de vida, el cachorro establece una serie de refe-
rencias propias, de acuerdo a los estímulos recibidos del entorno. para que un estímulo
se incorpore en esta “base de datos” es necesario que se presente con regularidad y en
baja intensidad.
por ejemplo, la circulación de vehículos por una carretera cercana permite que el
animal se acostumbre a los coches, pero sufrir un accidente con el automóvil de su
criador le produciría una fobia permanente. Cuanto más completa es la base de datos
inicial, mayor capacidad tiene el cachorro para adaptarse a un entorno nuevo, diferen-
te al del lugar en que nació. si el pequeño ha visto coches pasar, es probable que se
sienta relativamente cómodo en la calle. Cuando se cruce con un autobús, quizás se
sorprenda al principio, pero después se fijará probablemente, en que tiene puntos en
común con los automóviles y considerará, por tanto, que ese objeto desconocido no
debe provocarle ningún temor.
durante este mismo periodo tiene lugar la socialización con el hombre. un perro que no
haya mantenido contacto con humanos entre la 3ª y 12ª semana de vida será, en adelante,
un animal incapaz de comportarse normalmente entre ellos.
Oportunidades que no podemos dejar pasar
el comportamiento del perro se construye progresivamente desde el nacimiento hasta
la edad adulta y algunas etapas, como la socialización o la adquisición de autocontrol,
son pasos obligados para que el cachorro evolucione de forma adecuada. La presencia
de la madre hasta el final de la séptima semana de vida o la necesidad de exponer al
animal joven a estímulos variados, son requisitos indispensables para que el desarrollo
del cachorro sea óptimo.
Un sistema nervioso en construcciónLos circuitos neuronales que se estimulen durante los primeros meses de vida perma-
necerán activados indefinidamente, mientras que otros, inoperantes, se destruirán de
forma automática al final del desarrollo. este proceso de selección recalca la importancia
de la biografía precoz del individuo y del impacto de la experiencia.
A lo largo del desarrollo, el cachorro supera una serie de fases durante las cuales es especialmente receptivo a ciertas experiencias. Se trata de periodos en los que el aprendizaje y la memorización se dan con facilidad; son momentos clave para el desarrollo cerebral.
El vínculo afEctivo, una rElación fundamEntal
El vínculo afectivo entre el cachorro y su madre se desarrolla a partir de la 3ª semana de vida.
28
caPítulo 2 • El cachorro rEcién nacido
29
El vínculo materno posibilita la identificación con la especiePodríamos pensar que los animales son conscientes de su pertenencia a una especie
de manera innata o automática, pero no es así. la identificación con la especie surge
gracias al fenómeno llamado de impronta, en aquellos animales de rápido desarrollo
como es el caso de las aves; o al de impregnación, en el caso de animales de crecimiento
más lento, como el perro.
Entre la segunda y la tercera semana de vida, se establece un vínculo extraordinario entre el cachorro y su madre, que será la única capaz de consolarlo de forma persistente. Esta relación especial es indispensable para el correcto desarrollo del comportamiento del perro.
El vínculo afectivo, una relación fundamental la noción de impronta se desprende de los trabajos del etólogo Konrad lorenz, quien
puso de manifiesto este proceso de identificación con la especie en los gansos cenicien-
tos. Su experimento es muy famoso: Konrad lorenz se introdujo en el campo de visión
de unas crías de ganso justo en el momento de romper el cascarón, lo que provocó en
adelante un determinado comportamiento: una vez alcanzada la madurez, los gansos
intentaban acoplarse… ¡con el hombre! Y es que, unas horas después del nacimiento, los
pequeños se apegan al primer objeto en movimiento que encuentran, generalmente la
madre, y demuestran esa unión siguiendo paso a paso cada uno de sus desplazamien-
tos. Este vínculo se mantiene durante mucho tiempo y atestigua la aparición de ciertas
relaciones especiales y exclusivas.
Reconocer a su semejante
El cachorro encuentra un referente en el individuo al que se siente unido, quien a su vez
le prodiga caricias, cuidados y el consuelo de reconocer a un semejante. El pequeño se
identifica con la especie a la que pertenece el animal objeto del vínculo y en el futuro,
elegirá a parejas sociales y sexuales que clasifíquele como congéneres.
la ausencia absoluta de perros en el entorno del cachorro, durante el periodo recep-
tivo, conlleva un defecto de impregnación y provoca que éste no se reconozca como tal.
Sin embargo, la recuperación es posible, gracias a la extraordinaria plasticidad del com-
portamiento del cachorro. Si el perro entra en contacto con sus semejantes antes de las 16
semanas de edad, podrá recuperar la impregnación a su especie y reconocer a los suyos.
Convertirse en un perro entre perros, gracias al vínculo afectivola cercanía que proporciona esta unión especial, favorece el aprendizaje. El cachorro
puede observar a su madre y el modo en que se relaciona con el resto de miembros del
grupo. Este aprendizaje por imitación facilita la adquisición de las posturas de comuni-
cación y el conocimiento de las normas sociales en vigor en la manada.
El vínculo afectivo facilita el descubrimiento del mundouna de las funciones más importantes del
vínculo afectivo es permitir la exploración
del mundo, pues ofrece un punto de apo-
yo tranquilizador. la seguridad afectiva
que procura el objeto de apego, propicia
los primeros descubrimientos y las expe-
riencias tempranas.
Ha perdido a su madre
un cachorro huérfano se apegará, de for-ma natural, a la persona que lo críe. debe-mos respetar este vínculo tan importante, no obstante, para que llegue a convertirse en un adulto equilibrado, llévalo a menudo a jugar con otros perros durante el periodo de socialización.
El vínculo afEctivo, una rElación fundamEntal
El vínculo afectivo entre el cachorro y su madre se desarrolla a partir de la 3ª semana de vida.
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caPítulo 2 • El cachorro rEcién nacido
29
El vínculo materno posibilita la identificación con la especiePodríamos pensar que los animales son conscientes de su pertenencia a una especie
de manera innata o automática, pero no es así. la identificación con la especie surge
gracias al fenómeno llamado de impronta, en aquellos animales de rápido desarrollo
como es el caso de las aves; o al de impregnación, en el caso de animales de crecimiento
más lento, como el perro.
Entre la segunda y la tercera semana de vida, se establece un vínculo extraordinario entre el cachorro y su madre, que será la única capaz de consolarlo de forma persistente. Esta relación especial es indispensable para el correcto desarrollo del comportamiento del perro.
El vínculo afectivo, una relación fundamental la noción de impronta se desprende de los trabajos del etólogo Konrad lorenz, quien
puso de manifiesto este proceso de identificación con la especie en los gansos cenicien-
tos. Su experimento es muy famoso: Konrad lorenz se introdujo en el campo de visión
de unas crías de ganso justo en el momento de romper el cascarón, lo que provocó en
adelante un determinado comportamiento: una vez alcanzada la madurez, los gansos
intentaban acoplarse… ¡con el hombre! Y es que, unas horas después del nacimiento, los
pequeños se apegan al primer objeto en movimiento que encuentran, generalmente la
madre, y demuestran esa unión siguiendo paso a paso cada uno de sus desplazamien-
tos. Este vínculo se mantiene durante mucho tiempo y atestigua la aparición de ciertas
relaciones especiales y exclusivas.
Reconocer a su semejante
El cachorro encuentra un referente en el individuo al que se siente unido, quien a su vez
le prodiga caricias, cuidados y el consuelo de reconocer a un semejante. El pequeño se
identifica con la especie a la que pertenece el animal objeto del vínculo y en el futuro,
elegirá a parejas sociales y sexuales que clasifíquele como congéneres.
la ausencia absoluta de perros en el entorno del cachorro, durante el periodo recep-
tivo, conlleva un defecto de impregnación y provoca que éste no se reconozca como tal.
Sin embargo, la recuperación es posible, gracias a la extraordinaria plasticidad del com-
portamiento del cachorro. Si el perro entra en contacto con sus semejantes antes de las 16
semanas de edad, podrá recuperar la impregnación a su especie y reconocer a los suyos.
Convertirse en un perro entre perros, gracias al vínculo afectivola cercanía que proporciona esta unión especial, favorece el aprendizaje. El cachorro
puede observar a su madre y el modo en que se relaciona con el resto de miembros del
grupo. Este aprendizaje por imitación facilita la adquisición de las posturas de comuni-
cación y el conocimiento de las normas sociales en vigor en la manada.
El vínculo afectivo facilita el descubrimiento del mundouna de las funciones más importantes del
vínculo afectivo es permitir la exploración
del mundo, pues ofrece un punto de apo-
yo tranquilizador. la seguridad afectiva
que procura el objeto de apego, propicia
los primeros descubrimientos y las expe-
riencias tempranas.
Ha perdido a su madre
un cachorro huérfano se apegará, de for-ma natural, a la persona que lo críe. debe-mos respetar este vínculo tan importante, no obstante, para que llegue a convertirse en un adulto equilibrado, llévalo a menudo a jugar con otros perros durante el periodo de socialización.
Pequeñas PreocuPaciones, grandes Problemas
un cachorro miedoso y tímido puede que no esté suficientemente socializado con la especie humana.
caPÍTulo 4 • EntrE 8 y 12 sEmanas, El primEr mEs En familia
7170
Si el comportamiento de tu cachorro te inquieta, es importante reaccionar con rapidez en lugar de esperar con la excusa de que “ya se le pasará con la edad”. De este modo, evitaremos que las pequeñas preocupaciones se conviertan en grandes problemas y arruinen la hermosa aventura que es convivir con un perro.
Pequeñas preocupaciones, grandes problemas
cualquier cambio, como un nuevo elemento en la
decoración habitual, provoca que se retraiga y trate de
escabullirse. si hay cartones, una bolsa de basura o un
contenedor de plástico delante del portal, el cachorro
se resiste a salir e incluso, durante varios días, vacila
en el vestíbulo antes de asomarse a la calle.
en casa, es sorprendentemente bueno, se mueve
poco y cuando alguien se le acerca, se aparta y evita
las caricias. a veces sólo come por la noche, cuando
todo está tranquilo y el resto del tiempo, se refugia
debajo de un mueble.
¿Por qué hace todo eso?
Probablemente, tu cachorro ha crecido en un ambien-
te demasiado apacible y su madre, también muy mie-
dosa, le enseñó que el mundo era un lugar hostil. el
desajuste en relación a su nuevo hogar es demasiado
grande y es incapaz de adaptarse a la novedad. Pre-
senta lo que se llama síndrome de privación sensorial que, como su propio nombre indica, es resultado de la falta de estímulos tempranos
durante las primeras semanas de vida.
¿Cuándo tengo que preocuparme?
es normal que un cachorro de entre 8 y 12 semanas de edad sea reticente a los cambios,
pero tras una fase de indecisión, se atreverá a explorar los nuevos elementos. si al cabo
de unos días, el cachorro sigue sin acostumbrarse a una situación recurrente, debemos
preocuparnos.
un perro joven que se queda acurru-
cado en su rincón, que se retira en cuanto
el ambiente en casa se anima y sólo come
por la noche, sufre un grave síndrome de
privación del que es necesario ocuparse
correctamente. consulta rápidamente a tu
veterinario, cuanto antes reacciones, más
posibilidades hay de que el cachorro se
recupere sin secuelas.
Tus esfuerzos son en vano
si tus intentos de familiarizar al cachorro
con lo desconocido son complicados y pa-
rece que no funcionan, debes saber que
¿Lo sabías?su actitud es el reflejo de su miedo. camina pegado al suelo, con las orejas gachas y hacia atrás y el rabo bajo entre las patas. un cachorro presa del miedo tiembla, jadea, emite algunas gotas de orina, saliva…
si el cachorro se esconde cuando hay alboroto en casa, probablemente sufre el síndrome de privación sensorial.
“Todo le da miedo”Tu cachorro es anormalmente tímido… odia salir a la calle e ir a sitios bulliciosos y se
sobresalta con el menor ruido. cuando se cruza con un coche, se asusta, trata de huir
o se queda inmóvil y visiblemente aterrorizado. es poco sociable y rehúye el contacto
con desconocidos; si un extraño se acerca, desvía la mirada, intenta escaparse y gruñe
o muestra los dientes como último intento de expulsar al enemigo…
Es miedoso porque le pegaron
esta es una idea muy extendida, porque la actitud de un perro que tiene miedo de los humanos se parece mucho a la de un exceso de sumisión. sin embargo, no es necesario que sea víctima de la violencia para que un perro tenga miedo del hombre. la falta de encuentros con éste durante el periodo de socialización, es decir, antes de las 12 semanas de edad, produce que el perro evite el contacto con desconocidos o incluso que sufra ataques de pánico o de agresividad.
Pequeñas PreocuPaciones, grandes Problemas
un cachorro miedoso y tímido puede que no esté suficientemente socializado con la especie humana.
caPÍTulo 4 • EntrE 8 y 12 sEmanas, El primEr mEs En familia
7170
Si el comportamiento de tu cachorro te inquieta, es importante reaccionar con rapidez en lugar de esperar con la excusa de que “ya se le pasará con la edad”. De este modo, evitaremos que las pequeñas preocupaciones se conviertan en grandes problemas y arruinen la hermosa aventura que es convivir con un perro.
Pequeñas preocupaciones, grandes problemas
cualquier cambio, como un nuevo elemento en la
decoración habitual, provoca que se retraiga y trate de
escabullirse. si hay cartones, una bolsa de basura o un
contenedor de plástico delante del portal, el cachorro
se resiste a salir e incluso, durante varios días, vacila
en el vestíbulo antes de asomarse a la calle.
en casa, es sorprendentemente bueno, se mueve
poco y cuando alguien se le acerca, se aparta y evita
las caricias. a veces sólo come por la noche, cuando
todo está tranquilo y el resto del tiempo, se refugia
debajo de un mueble.
¿Por qué hace todo eso?
Probablemente, tu cachorro ha crecido en un ambien-
te demasiado apacible y su madre, también muy mie-
dosa, le enseñó que el mundo era un lugar hostil. el
desajuste en relación a su nuevo hogar es demasiado
grande y es incapaz de adaptarse a la novedad. Pre-
senta lo que se llama síndrome de privación sensorial que, como su propio nombre indica, es resultado de la falta de estímulos tempranos
durante las primeras semanas de vida.
¿Cuándo tengo que preocuparme?
es normal que un cachorro de entre 8 y 12 semanas de edad sea reticente a los cambios,
pero tras una fase de indecisión, se atreverá a explorar los nuevos elementos. si al cabo
de unos días, el cachorro sigue sin acostumbrarse a una situación recurrente, debemos
preocuparnos.
un perro joven que se queda acurru-
cado en su rincón, que se retira en cuanto
el ambiente en casa se anima y sólo come
por la noche, sufre un grave síndrome de
privación del que es necesario ocuparse
correctamente. consulta rápidamente a tu
veterinario, cuanto antes reacciones, más
posibilidades hay de que el cachorro se
recupere sin secuelas.
Tus esfuerzos son en vano
si tus intentos de familiarizar al cachorro
con lo desconocido son complicados y pa-
rece que no funcionan, debes saber que
¿Lo sabías?su actitud es el reflejo de su miedo. camina pegado al suelo, con las orejas gachas y hacia atrás y el rabo bajo entre las patas. un cachorro presa del miedo tiembla, jadea, emite algunas gotas de orina, saliva…
si el cachorro se esconde cuando hay alboroto en casa, probablemente sufre el síndrome de privación sensorial.
“Todo le da miedo”Tu cachorro es anormalmente tímido… odia salir a la calle e ir a sitios bulliciosos y se
sobresalta con el menor ruido. cuando se cruza con un coche, se asusta, trata de huir
o se queda inmóvil y visiblemente aterrorizado. es poco sociable y rehúye el contacto
con desconocidos; si un extraño se acerca, desvía la mirada, intenta escaparse y gruñe
o muestra los dientes como último intento de expulsar al enemigo…
Es miedoso porque le pegaron
esta es una idea muy extendida, porque la actitud de un perro que tiene miedo de los humanos se parece mucho a la de un exceso de sumisión. sin embargo, no es necesario que sea víctima de la violencia para que un perro tenga miedo del hombre. la falta de encuentros con éste durante el periodo de socialización, es decir, antes de las 12 semanas de edad, produce que el perro evite el contacto con desconocidos o incluso que sufra ataques de pánico o de agresividad.
¿Por qué educar a mi cachorro? cachorroS eNTre 3 Y 4 meSeS
Objetivo Mi cachorro aprende el significado de “no”
Cuando Entre los 3 y 4 meses
Enseñar al cachorro a respetar las prohibiciones es uno de los fundamentos de su educación. Te será de gran utilidad que aprenda a interrumpir su con-ducta al oír “¡stop!” o “¡no!”.
ProcedimientoSimplemente, asocia el término elegido a una señal
susceptible de interrumpir por sí misma una actua-
ción, como una palmada. A continuación, llama al
cachorro y felicítalo.
Adopta un tono de voz severo y una postura acor-
de: mantente recto, con las manos en las caderas, el
gesto firme y el ceño fruncido…
Plantéate el uso de “¡no!” seguido de alguna otra
orden para que tu cachorro no reanude espontánea-
mente la actividad.
Posibles fracasos…La palabra “¡no!” pertenece a lo que llamamos estí-
mulos disruptivos, es decir, que tiende a interrumpir
una conducta que está en proceso. Sin embargo, el
cachorro necesita que le propongan a continuación
una ocupación alternativa, a riesgo de que retome
sus actividades. Si no le das a tu perro una instruc-
ción concreta después de decir “¡no!”, probable-
mente esta enseñanza fracase.
Lección Prohibiciones4
Acostúmbrate a usar una sola palabra y siempre la misma, para referirte a una prohibición. Si es necesario, haced una reunión en familia para elegir un término que os venga bien a todos. De cualquier forma, aunque sea natural precipitarse para interrumpir un comportamiento indeseable, ¡intenta no utilizar frases!
Precauciones
El perro aprende a suspender una actividad con un sólo apercibimiento.
Objetivo Mi cachorro pasea con collar y correa
Cuando Entre los 3 y 4 meses
Lección Introducción al paseo con correa (1)5
Trataremos de familiarizar al cachorro con el uso de la correa durante el paseo, actividad que perfeccionaremos más adelante. Enseñar a tu cachorro a caminar con una correa ligera te ayudará a evitar que se convierta, ya en el comienzo, en una prueba de fuerza que desencadene el aborrecimiento del ejercicio.
ProcedimientoEl objetivo es evitar que la correa esté tensa; la pre-
sión excesiva sobre el collar ¡incita al cachorro a
tirar aún más!
Por tanto, tienes que procurar que la correa siem-
pre esté floja. Párate en cuanto notes cierta tirantez,
llama al cachorro y felicítalo mientras se acerca. Co-
mienza a caminar otra vez.
Realiza estos ejercicios en algún lugar tranquilo
y conocido para el cachorro: en casa o en el jardín.
Posibles fracasos…Recuerda que este ejercicio es sólo una iniciación
que será de gran utilidad para la vida diaria, ya que
tendrás que pasear a tu cachorro con collar y correa.
Si se acostumbra a tirar, el aprendizaje posterior
resultará más complicado. De todas formas, no se
trata de realizar un paseo con correa perfecto, como
el que se pretende en un cachorro de más edad.
Así pues, no esperes que al principio tu mascota
camine perfectamente a tu lado.
A los 3 meses de edad, el paseo con correa es sólo una iniciación y por eso es imperfecto.
104 105
CAPÍTULO 6 • educa a Tu cachorro eN 14 LeccioNeS
¿Por qué educar a mi cachorro? cachorroS eNTre 3 Y 4 meSeS
Objetivo Mi cachorro aprende el significado de “no”
Cuando Entre los 3 y 4 meses
Enseñar al cachorro a respetar las prohibiciones es uno de los fundamentos de su educación. Te será de gran utilidad que aprenda a interrumpir su con-ducta al oír “¡stop!” o “¡no!”.
ProcedimientoSimplemente, asocia el término elegido a una señal
susceptible de interrumpir por sí misma una actua-
ción, como una palmada. A continuación, llama al
cachorro y felicítalo.
Adopta un tono de voz severo y una postura acor-
de: mantente recto, con las manos en las caderas, el
gesto firme y el ceño fruncido…
Plantéate el uso de “¡no!” seguido de alguna otra
orden para que tu cachorro no reanude espontánea-
mente la actividad.
Posibles fracasos…La palabra “¡no!” pertenece a lo que llamamos estí-
mulos disruptivos, es decir, que tiende a interrumpir
una conducta que está en proceso. Sin embargo, el
cachorro necesita que le propongan a continuación
una ocupación alternativa, a riesgo de que retome
sus actividades. Si no le das a tu perro una instruc-
ción concreta después de decir “¡no!”, probable-
mente esta enseñanza fracase.
Lección Prohibiciones4
Acostúmbrate a usar una sola palabra y siempre la misma, para referirte a una prohibición. Si es necesario, haced una reunión en familia para elegir un término que os venga bien a todos. De cualquier forma, aunque sea natural precipitarse para interrumpir un comportamiento indeseable, ¡intenta no utilizar frases!
Precauciones
El perro aprende a suspender una actividad con un sólo apercibimiento.
Objetivo Mi cachorro pasea con collar y correa
Cuando Entre los 3 y 4 meses
Lección Introducción al paseo con correa (1)5
Trataremos de familiarizar al cachorro con el uso de la correa durante el paseo, actividad que perfeccionaremos más adelante. Enseñar a tu cachorro a caminar con una correa ligera te ayudará a evitar que se convierta, ya en el comienzo, en una prueba de fuerza que desencadene el aborrecimiento del ejercicio.
ProcedimientoEl objetivo es evitar que la correa esté tensa; la pre-
sión excesiva sobre el collar ¡incita al cachorro a
tirar aún más!
Por tanto, tienes que procurar que la correa siem-
pre esté floja. Párate en cuanto notes cierta tirantez,
llama al cachorro y felicítalo mientras se acerca. Co-
mienza a caminar otra vez.
Realiza estos ejercicios en algún lugar tranquilo
y conocido para el cachorro: en casa o en el jardín.
Posibles fracasos…Recuerda que este ejercicio es sólo una iniciación
que será de gran utilidad para la vida diaria, ya que
tendrás que pasear a tu cachorro con collar y correa.
Si se acostumbra a tirar, el aprendizaje posterior
resultará más complicado. De todas formas, no se
trata de realizar un paseo con correa perfecto, como
el que se pretende en un cachorro de más edad.
Así pues, no esperes que al principio tu mascota
camine perfectamente a tu lado.
A los 3 meses de edad, el paseo con correa es sólo una iniciación y por eso es imperfecto.
104 105
CAPÍTULO 6 • educa a Tu cachorro eN 14 LeccioNeS