Post on 26-Dec-2015
Glaciación
Una glaciación, o edad de hielo, es un periodo de larga duración en el cual baja
la temperatura global del clima de la Tierra, dando como resultado una expansión
del hielo continental de los casquetes polares y los glaciares. Las glaciaciones se
subdividen en periodos glaciales, siendo el wisconsiense el último que hubo en la
edad de hielo actual.
De acuerdo a la definición dada por la Glaciología, el término glaciación se refiere a
un periodo con casquetes glaciares tanto en el hemisferio norte como en el sur;
según esta definición, aún nos encontramos en una glaciación porque todavía hay
casquetes polares en Groenlandia1 y la Antártida.
Mapa de las vegetaciones durante el Último Máximo Glacial.
Los casquetes polares se expanden durante las glaciaciones. Esta imagen es del
casquete antártico.
Más coloquialmente, cuando se habla de los últimos millones de años, se utiliza
«glaciación» para referirse a periodos más fríos con extensos casquetes glaciares
en Norteamérica y Eurasia: según esta definición, la glaciación más reciente acabó
hace 10.000 años. Este artículo usará el término glaciación en el primer sentido, el
glaciológico; el término glaciales por los periodos más fríos de las glaciaciones; e
interglaciares para los periodos más cálidos.
Historia
Louis Agassiz, naturalista que difundió la teoría glacial en sus inicios.
La idea de que en el pasado los glaciares fueron más extensos era saber popular en
algunas regiones alpinas de Europa: Imbrie y Imbrie (1979) recogen el testimonio
de un leñador que explicó a Jean de Charpentier la antigua extensión del glaciar
suizo del Grimselpass La teoría no fue postulada por una única persona. En 1821,
un ingeniero suizo, Ignaz Venetz, presentó un artículo en el que sugería la
presencia de rasgos de paisaje glaciar a distancias considerables de los glaciares
existentes en los Alpes; esto era indicativo de que los glaciares fueron mayores en
el pasado y que ocuparon posiciones valle abajo. Entre 1825 y 1833, Charpentier
reunió pruebas para apoyar esta idea. Eln 1836, Charpentier y Venetz
convencieron a Louis Agassiz de su teoría, y Agassiz la publicó en su libro Étude sur
las glaciers ("Estudio sobre los glaciares"). Según Macdougall, Charpentier y Venetz
rechazaron las ideas de Agassiz, quien había ampliado el trabajo de éstos,
afirmando que la mayoría de los continentes habían estado cubiertos de hielo en
tiempos remotos.
Agassiz presentó como prueba de la teoría glaciar un ejemplo clásico del
uniformitarismo. Es decir, puesto que las estructuras observadas no podían ser
explicadas de un modo ajeno a la actividad glaciar, los investigadores
reconstruyeron la extensión de los glaciares en el pasado, ahora desaparecidos, en
función de la presencia de características propias de zonas sometidas a la acción de
los glaciares fuera de la situación actual de éstos.7
En la época de Agassiz, lo que se estudiaba eran los periodos glaciales de los
últimos centenares de miles de años, durante la glaciación actual. Todavía no se
sospechaba la existencia de antiguas edades glaciales. No obstante, a principios del
siglo XX se estableció que la orografía terrestre mostraba características sólo
explicables por la sucesión de varios eventos glaciales; de hecho, se dividió el
periodo glacial cuaternario para Europa y Norteamérica en cuatro elementos,
basados fundamentalmente en los depósitos glaciales (en orden de aparición,
Nebrasquiense, Kansaniense, Illinoiense y Wisconsiense). Estas divisiones
tradicionales fueron sustituidas a finales de siglo cuando los sondeos de
sedimentos del fondo marino revelaron ser un registro mucho más completo sobre
el clima del periodo glacial cuaternario.7
Efectos de las glaciaciones
Hay tres tipos principales de efectos de las glaciaciones que han sido empleadas
como pruebas de su pasada existencia: geológicas, químicas y paleontológicas.
Geología. Las pruebas geológicas se encuentran en varias formas, como las
rocas erosionadas (ya por arranque, en fases iniciales, ya por abrasión y
generación de estrías glaciares, ya por pulverización y formación de harina
de roca), valles glaciares, aristas glaciares y horst, rocas aborregadas,
morrenas glaciares, drumlins, depósito de tills o bloques erráticos, factura
de llanuras aluviales, trenes de valle,8 7 lagos en las llanuras y fiordos en las
costas. Es decir, las condiciones del clima propio de una época glacial
provocan la aparición de las fisonomías antes descritas en la orografía. Las
glaciaciones sucesivas tienden a distorsionar y eliminar las pruebas
geológicas, haciendo que sean difíciles de interpretar.
Química. Las pruebas químicas consisten principalmente en variaciones en
la proporción de isótopos en rocas sedimentarias, núcleos sedimentarios
oceánicos y, para los periodos glaciales más recientes, núcleos de hielo
(comúnmente situados en las llamadas nieves perpetuas). Puesto que el
agua con isótopos más pesados tiene una temperatura de evaporación más
alta, su cantidad se reduce cuando las condiciones son más frías; esto
permitió la elaboración de un registro térmico. Aun así, estas pruebas
pueden estar adulteradas por otros factores que cambian la proporción de
isótopos. Por ejemplo, una extinción en masa incrementa la proporción de
isótopos ligeros en los sedimentos y en el hielo porque los procesos
biológicos tienden a preferir estos últimos;9 por lo tanto, una reducción en
los procesos biológicos libera más isótopos ligeros, que pueden depositarse
a los sedimentos.
Paleontología. Las pruebas paleontológicas se basan en los cambios en la
distribución geográfica de los fósiles; durante un periodo de glaciación, los
organismos adaptados al frío migran hacia latitudes más bajas, y los
organismos que prefieren un clima más cálido se extinguen o viven en
zonas más ecuatoriales. Esto da lugar a la aparición de refugios glaciales y
movimientos biogeográficos de retorno.10 También es difícil interpretar
estos indicios puesto que precisan de: secuencias de sedimentos que
representen un largo período, diferentes latitudes y que se puedan
correlacionar fácilmente; organismos primitivos presentes durante amplios
periodos con caracteres lo suficientemente homogéneos como para poder
atribuirlos a un mismo taxón, y de los cuales se conozca el clima ideal (es
decir, que puedan emplearse como marcadores); y descubrimientos de
fósiles adecuados, cosa que depende mucho del azar.
Pese a las dificultades, los análisis de núcleos de hielo y de sedimentos oceánicos
muestran claramente la alternancia de períodos glaciales e interglaciares durante
los últimos millones de años. También confirman la relación entre las glaciaciones
y fenómenos de la corteza continental como por ejemplo las morrenas glaciales, los
drumlins y los bloques erráticos. Por esto se suelen aceptar los fenómenos de la
corteza continental como prueba válida de edades glaciales anteriores, cuando se
encuentran en capas creadas mucho antes que el abanico de tiempo que permiten
estudiar los núcleos de hielo y los sedimentos marinos.
Cronología
Mapa de la edad de hielo del norte de Europa central. En rojo: límite máximo de la
glaciación Weichseliana; en amarillo: máximo de la glaciación de Saala; en azul:
glaciación máxima de la edad de hielo de Elster.
Ha habido al menos cuatro grandes edades glaciales en el pasado. Aparte de estos
periodos, parece que la Tierra siempre ha estado libre de hielo incluso en sus
latitudes más altas.
La glaciación hipotética más antigua, la Glaciación Huroniana, tuvo lugar entre
hace 2.700 y 2.300 millones de años, a principios del eón Proterozoico.
La glaciación bien documentada más antigua, y probablemente la más severa de los
últimos mil millones de años, tuvo lugar entre hace 850 y 630 millones de años
(período Criogénico), y podría haber producido una glaciación global (es decir, un
periodo en el cual el globo entero quedó cubierto de hielo). Acabó muy
rápidamente a medida que el vapor de agua volvía a la atmósfera terrestre y se
incrementaba el efecto invernadero provocado por la acumulación de dióxido de
carbono emitido por los volcanes, ya que los mares gélidos no tenían capacidad de
absorción del citado gas. Se ha sugerido que al final de esta glaciación se
desencadenó la explosión cámbrica, aunque esta teoría es reciente y
controvertida.11
Los registros sedimentarios muestran las secuencias alternantes de periodos
glaciales e interglaciares en los últimos millones de años.
Una glaciación menor, la andeana-sahariana, sucedida hace entre 460 y 430
millones de años, durante el Ordovícico superior y el Silúrico, tuvo intervalos con
extensos casquetes polares entre hace 350 y 260 millones de años, durante el
Carbonífero y Cisuraliano, relacionados con la glaciación de Karoo.
La glaciación actual empezó hace 40 millones de años con la expansión de una capa
de hielo en la Antártida. Se intensificó a finales del Plioceno, hace tres millones de
años, con la extensión de capas de hielo en el hemisferio norte, y continuó durante
el Pleistoceno. Desde entonces, el mundo ha pasado ciclos de glaciación con el
adelanto y retroceso de las capas de hielo durante miles de años. El periodo glacial
más reciente en sentido amplio acabó hace unos diez mil años, por lo que,
dependiendo del autor documentado, podríamos aseverar que nos situamos en un
periodo interglacial.12 13 Existen sin embargo otras posturas que afirman estamos
en una era postglacial.14
Las edades glaciales también se pueden subdividir según el ámbito geográfico y el
tiempo; por ejemplo, los nombres Riss (hace 180.000 - 130.000 años) y Würm
(hace 70.000 - 10.000 años) se refieren específicamente a glaciaciones de la región
alpina. Cabe destacar que la extensión máxima del hielo no se mantiene durante
todo el periodo. Desafortunadamente, la acción erosiva de cada glaciación tiende a
eliminar la mayoría de las pruebas de capas de hielo anteriores casi
completamente, excepto en regiones en que la capa más reciente no llega a la
expansión máxima. Es posible que no se conozcan periodos glaciales más antiguos,
especialmente del Precámbrico, debido a la escasez de rocas situadas a latitudes
altas durante los periodos más antiguos.
Sucesiones glaciales
En la
Clima DenominaciónAntigüeda
dÉpoca
Postglacial Actual 10.000 Holoceno
GlacialGlaciación de Würm o
Wisconsin80.000
Pleistoceno
Interglaciar Riss-Würm 140.000
Glacial Glaciación de Riss o Illinois 200.000
Interglaciar Mindel-Riss 390.000
Glacial Glaciación de Mindel o Kansas 580.000
Interglaciar Günz-Mindel 750.000
Glacial Glaciación de Günz o Nebraska 1,1 m.a.
Interglaciar Donau-Günz 1,4 m.a.
Glacial Donau 1,8 m.a
Interglaciar Biber-Donau 2 m.a.
Glacial Biber 2,5 m.a.
Glacial Oligoceno 37 m.a.
CenozoicoInterglaciar Eoceno superior 40 m.a.
siguiente tabla se lista la sucesión de épocas glaciales e interglaciares:
Glaciales e interglaciares
El patrón de los cambios en la temperatura y el volumen de hielo relacionados con
los glaciales e interglaciares recientes.
Dentro de las edades glaciales (o al menos dentro de la última), hay periodos más
templados y más severos. Los más fríos se denominan "periodos glaciales", y los
más cálidos, "interglaciares".
Los glaciales se caracterizan por climas más fríos y secos en gran parte de la tierra,
así como por grandes masas de hielo que se extienden desde los polos por tierra y
mar. Los glaciares de las montañas llegan a altitudes más bajas a causa de una cota
de nieve menor. El nivel del mar baja debido al agua atrapada al hielo. Hay pruebas
que las glaciaciones distorsionan los patrones de circulación oceánica. Como que la
Tierra tiene grandes zonas heladas en el Ártico y la Antártida, nos encontramos en
un mínimo glacial. Estos periodos se denominan "interglaciares". El interglaciar
actual recibe el nombre de Holoceno.12 13
Se atribuía a los periodos glaciales una duración de unos doce mil años, pero las
conclusiones derivadas del estudio de núcleos de hielo parecen contradecirlo. Por
ejemplo, un artículo en Nature sugiere que el interglaciar actual puede ser parecido
a un interglaciar anterior que poseyó una duración de 28.000 años.15
Los cambios debidos a la variación orbital de la Tierra sugieren que la próxima
glaciación empezará de aquí a cincuenta mil años, pese al calentamiento global
provocado por el ser humano.16 Aun así, los cambios provocados por los gases de
efecto invernadero deberán compensar la variación orbital si se continúan usando
combustibles fósiles.17
Regulación
Cada periodo glacial está sujeto a una retroalimentación positiva que lo hace más
severo y una retroalimentación negativa que mitiga los efectos y que acaba por
restablecer el equilibrio.
Procesos que acrecientan la glaciación
El hielo y la nieve aumentan el albedo, es decir, hacen que se refleje más luz solar y
se absorba menos. Por lo tanto, cuando baja la temperatura del aire, se extienden
las capas de hielo y nieve, y esto continúa hasta que se logra un equilibrio. La
reducción de los bosques que provoca la expansión del hielo también incrementa
el albedo.18
Otra teoría sugiere que un océano Ártico sin hielo provocaría más precipitaciones
en forma de nieve en latitudes altas. Cuando el océano Ártico está cubierto de hielo
a baja temperatura, hay poca evaporación o sublimación, y esto hace que las
regiones polares sean bastante secas en cuanto a las precipitaciones, más o menos
como los desiertos. Estas escasas precipitaciones permiten que la nieve se evapore
durante el verano. Cuando no hay hielo, el océano absorbe energía solar durante
los largos días estivales, y se evapora más agua. Con más precipitaciones, una parte
de la nieve no se evapora durante el verano, si bien el hielo glacial se forma a
latitudes inferiores, reduciendo las temperaturas por la vía del aumento del albedo
(las predicciones actuales indican que el calentamiento global eliminará el hielo
del océano Ártico de aquí a cincuenta años). El agua dulce adicional que llega al
norte del océano Atlántico durante un ciclo más cálido también puede reducir la
circulación termohalina.19 Tal reducción (mitigando los efectos del corriente del
Golfo) también enfriaría el norte de Europa, cosa que causaría más nieve. También
se ha sugerido que, durante una larga glaciación, los glaciares pueden atravesar el
Golfo de San Lorenzo, llegando hasta el norte del Atlántico y bloqueando la
corriente del golfo.
Procesos que la mitigan
Las capas glaciales que se forman durante las glaciaciones erosionan la tierra que
tienen debajo. Tras un tiempo, esto produce un hundimiento isostático de la
corteza por debajo del nivel del mar, reduciendo el espacio en que se pueden
formar capas de hielo. Esto mitiga la retroalimentación del albedo, igual que la
reducción del nivel del mar que acompaña la formación de las capas de hielo.
Otro factor es que la aridez provocada por el máximo glacial reduce las
precipitaciones, haciendo más difícil que se mantenga la glaciación. El retroceso
glacial provocado por este o cualquier otro proceso puede ser amplificado por
procesos similares.
Causas de las glaciaciones
Cualquier teoría científica que pretenda explicar las causas de las glaciaciones debe
encarar dos cuestiones fundamentales. ¿Qué causa el comienzo de las condiciones
glaciares? y ¿qué causó la alternancia de etapas glaciales e interglaciares que han
sido documentadas para el Pleistoceno?7 Las causas de las edades glaciales todavía
son un tema controvertido. Hay consenso en que varios factores son importantes:
la composición de la atmósfera; los cambios en la órbita de la Tierra alrededor del
Sol (llamados ciclos de Milankovitch; y posiblemente la órbita del Sol alrededor del
centro de la galaxia); la dinámica de las placas tectónicas y su efecto sobre la
situación relativa y la cantidad de corteza oceánica y terrestre a la superficie de la
Tierra; variaciones en la actividad solar; la dinámica orbital del sistema Tierra-
Luna; y el impacto de meteoritos de grandes dimensiones o las erupciones
volcánicas.
Algunos de estos factores tienen una relación de causa-efecto. Por ejemplo, los
cambios en la composición de la atmósfera de la Tierra (especialmente la
concentración de gases de efecto invernadero) pueden alterar el clima, mientras
que el cambio climático puede cambiar la composición de la atmósfera.
William Ruddiman, Maureen Raymo y otras han sugerido que las mesetas del Tíbet
y Colorado son inmensos sumideros de CO2, con una capacidad de eliminar
suficiente dióxido de carbono de la atmósfera como por ser un factor significativo
de la tendencia de enfriamiento de los últimos cuarenta millones de años. También
argumentan que aproximadamente la mitad de su elevación (y el crecimiento de su
capacidad de eliminar CO2) tuvo lugar a lo largo de los últimos diez millones de
años.20 21
Cambios en la atmósfera terrestre
El cambio más importante es en la cantidad de gases de efecto invernadero en la
atmósfera. Hay indicios que el nivel de gases de efecto invernadero de los
casquetes glaciares, pero es difícil establecer relaciones de causalidad. El nivel de
gases de efecto invernadero también podría haber sido alterado por otros factores
propuestos como causa de las edades glaciales, como por ejemplo el movimiento
de los continentes o el vulcanismo.
La teoría de la "Tierra Bola de Nieve" afirma que la severa glaciación de finales del
Proterozoico10 llegó a su fin a causa de un aumento del nivel de CO2 de la
atmósfera, y algunos de los que apoyan a la teoría argumentan que la Tierra Bola
de Nieve fue causada por una reducción del CO2 en ella. Esta hipótesis prevé la
repetición de este evento.William Ruddiman20 21 ha propuesto la hipótesis del
Antropoceno antiguo (nombre dado por algunos al periodo más reciente de la
historia de la Tierra), según la cual los humanos empezaron a tener un impacto
global significativo en el clima y los ecosistemas de la Tierra no ya en el siglo XVIII
con la Revolución industrial, sino ya hace ocho mil años, debido a las intensas
actividades agrícolas de los humanos antiguos. Ruddiman afirma que los gases de
efecto invernadero generados por la agricultura impidieron el comienzo de una
nueva glaciación.
Posición de los continentes
El registro geológico parece indicar que las edades glaciales empiezan cuando los
continentes se encuentran en una posición que bloquea o reduce el flujo de agua
cálida del ecuador a los polos, permitiendo la formación de casquetes glaciares. Las
capas de hielo aumentan el albedo de la Tierra, reduciendo la absorción de
radiación solar. Esta reducción de la absorción de radiación enfría la atmósfera;
este enfriamiento hace crecer los casquetes de hielo, aumentando el albedo todavía
más. Este ciclo continúa hasta que la reducción en la erosión causa un aumento del
efecto invernadero.
Se conocen tres configuraciones de la posición de los continentes que bloqueen o
reduzcan el flujo de agua cálida del ecuador a los polos:
cuando un continente se encuentra en un polo, como la Antártida
actualmente;
cuando un mar polar se encuentra casi totalmente rodeado de masas de
tierra, como el océano Ártico;
cuando un supercontinente cubre la mayoría del ecuador, como Rodinia
durante el período Criogénico
La formación de los glaciares
El hielo de los glaciares proviene de la compresión de la nieve por efecto de su
popio peso. Para que un glaciar se genere, hace falta que la canitdad de nieve caída
a lo largo del año en una determinada zona, sea mayor que la que se pierde. En
efecto, para que se forme un glaciar no es solo necesario que las nevadas sean
intensas sino que la temperatura media anual permita conservar la nieve caída y
acumularla. Por ello, las grandes extensiones de hielo actuales solo pueden
encontrarse en la Antártida o en Groenlandia. Actualmente en general, en las altas
codilleras de latitudes intermedias las nevadas pueden ser abundantes en
temporada invernal pero al fenómeno se sucede la fusión estival. Unicamente en
las latitudes extremas, la escasa radiación social impide que la nieve desaparezca.
Cuando las precipitaciones níveas comienzas a comprimirse apenas tocan el suelo
su pequeños cristales comienzan a perder sus extremidades y en contacto, unos
con otros se funden liberando el aire y adquiriendo una forma granulada. A medida
que se acumulan capas y capas de nieve, el peso continúa eliminando las burbujas
de aire entre los cristales generando una masa compacta a partir del cual se forma
el hielo del glaciar.
Primer plano del hielo glaciar
El tiempo que requiere la nieve para transformarse en hielo no es exacto, éste varía
de un glaciar a otro. El fenómeno depende de la nivosidad y de a temperatura. Para
los glaciares templados, como es el caso de los glaciares patagónicos, ésto puede
demorar una decena de años. En efecto, y contra el “sentido común”, cuanto más
templado es un glaciar más rápido es el proceso de formación del hielo, ésto se
debe a la fusión de los cristales: con temperaturas superiores a 0°C, la fusión se
transforma en agua, la cual se infiltra hacia el fondo y se hiela nuevamente
liberando pequeñas cantidades de calor. Este calor, debilita la dureza de los
cristales inferiores y facilita a su vez la fusión y compactación entre ellos, lo que
tienen como consecuencia una mayor rapidez en la formación del hielo.
El glaciar en movimiento
Un glaciar es una masa de hielo en movimiento. Como todo cuerpo en movimiento
a lo largo de una pendiente, el hielo es atraído por la fuerza de gravedad. De esta
forma, cuanto más pronunciada sea la pendiente más veloz será este movimiento.
En este aspecto, el movimiento de un glaciar sería comprable al curso de un río,
aunque en rigor, existen diferencias que obedecen a la particularidad del
comportamiento del hielo las cuales analizaremos a continuación.
Existen dos tipos de procesos:
El proceso de deslizamiento
Predomina en los glaciares templados, como es el caso de los glaciares patagónicos.
El deslizamiento responde a la acción de la fuerza de gravedad. Pero este
deslizamiento solo su produce si existe agua en la base, lo cual, en los glaciares
templados sucede por una serie de causas a saber:
Porque la fusión de las capas superiores va filtrando agua hacia el fondo
Porque la base de la glaciar, al friccionar la roca determina un cierto
recalentamiento que también ayuda para la fusión de pequeñas cantidades de
agua.
El proceso de deformación interna
En los climas muy fríos, las temperaturas extremas impiden toda fusión y el glaciar
queda fijado en la base. Opera entonces un proceso de deformación interna del
hielo la cual genera, en estos casos, el movimiento.
La deformación interna es comprable al proceso que sufren algunos metales o
minerales sometidos a temperaturas ligeramente inferiores a su punto de fusión a
través de lo cual estos cuerpos adquieren capacidad de deformarse. En el caso del
hielo, es su mismo peso el que en algunos glaciares puede llegar a ejercer una
presión de hasta 650 tn por metro cuadrado. Estas tensiones llevan al glaciar a
deformarse a medida que los cristales de hielo redisponen sus moléculas en capas
relativamente paralelas a la superficie del glaciar deslizándose unas sobre otras.
Así, el movimiento acumulado de las capas de las moléculas en el interior de cada
cristal se suman a un movimiento de “patín” que conforma, en síntesis, el
fenómeno de deformación, principal causante de movimiento en los glaciares de
los casquetes polares (Groenlandia y Antártida) en donde las pendientes son
mínimas.
Un témpano (iceberg) del glaciar Upsala
La velocidad del glaciar
La velocidad es un fenómeno muy variable de un glciar a otro, incluso en el miso
glaciar, Esta se ve afectada no sólo en función de la época sino también del lugar: al
igual que en las corrientes de agua, el frotamiento de sus bordes con la tierra, frena
el movimiento de éstos haciendo la corriente más rápida en su centro que en sus
bordes. El frotamiento de su base es a su vez la causa de que la velocidad de la
superficie sea mayor que la del fondo.
Tres son los factores así que condicionan la velocidad del avance del hielo:
El espesor: cuanto mayor sea el espesor de un glaciar, más rápido avanzará.
La pendiente: a mayor pendiente, mayor velocidad de desplazamiento.
La temperatura del hielo: cuanto más templado sea un glaciar, más rápidamente
se fusionará por el agua circulante en su base, facilitando el deslizamiento y
aumentando la velocidad.
El punto de mayor velocidad del glaciar se encuentra sobre la línea de equilibrio.
Esta línea imaginaria divide la zona de acumulación (aquella en la cual la cantidad
de nieve caída anualmente es mayor que la que se pierde por evaporación y fusión)
que corresponde con las zonas más altas y la zona de ablación en donde la pérdida
es mayor que la acumulación.
Partes del glaciar
La erosión glacial
Las morenas o morrenas son acumulaciones de bloques, rocas, arenas y arcillas
transportadas por los glaciares a través de sus desplazamientos. El estudio de
estos sedimentos permite determinar la cronología de los movimientos de cada
glaciar.
Las morrenas se pueden clasificar en:
Laterales: siendo afluentes de la morrena central
Centrales: siendo resultantes de la unión de un glaciar y sus afluentes.
Terminales: señala la posición más extrema alcanzada por el hielo y el punto en el
que el mismo alcanzó a retroceder.
Las grietas
Comoa velocidad de movimiento de un glaciar no es uniforme, las diferencias entre
los distintos segmentos generan tensiones que la plasticidad del hielo no siempre
puede absorber. La consecuencia es un resquebrajamiento de la superficie. La
longitud de las grietas es variable y son especialmente peligrosas para los
andinistas cuando la nieve fresca forma sobre ella puentes, porque se ocultan a la
vista o por que son los suficientemente fuertes como para soportar el peso de una
eprsona.
Sobre el Glaciar Perito Moreno