Post on 30-Sep-2018
Quinto Sol geológico
Narrativa de Investigación
M. C. Jesús Morfín Garduño
Resumen
Mediante una libre investigación interdisciplinaria, personal e independiente, sin los límites de algún
paradigma científico, ideología política o creencia religiosa, el autor formula una teoría alternativa sobre el
desarrollo humano durante los últimos 18 mil años y la solución a su problemática actual, resultando en una
narrativa de cultura general.
Con argumentos paleoclimáticos, antropológicos, arqueológicos, históricos y simbólico religiosos propone
que nos encontramos al comienzo de una quinta era geológica según clasificación de los indígenas
mesoamericanos, implicando que son descendientes directos de los sobrevivientes de una civilización
mundial colapsada por los cataclismos climáticos de finales del Pleistoceno, hace entre 14 mil y 10 mil años
antes del presente.
La herencia traumática de aquellas hecatombes ambientales en los descendientes de tal civilización
habría generado las prehistóricas religiones apocalípticas y mesiánicas de sacrificios humanos, motivando
a las razas europeas (que la glaciación mantuvo aisladas de dicha civilización pleistocénica) a emprender
guerras de conquista hacia el oriente, para después regresar ya mestizadas a sus lugares de origen y
fundar la cultura occidental, hoy global.
Tales culturas de sacrificios humanos evolucionaron en las actuales religiones como el Cristianismo, que
es la que más conserva su simbología sacrificial, o el Budismo, que es la que más la ha rechazado.
Finalmente en América esperaron a la civilización occidental mediante profecías como las de Quetzalcóatl,
Kukulcan y Viracocha, que habrían de regresar a reinar.
Como aplicación a la solución de la actual problemática mundial, el autor propone a la sociedad civil
generalizar la ancestral economía comunitaria en coexistencia con el capitalismo de libre mercado,
demandando la actualización de la legislación sobre transparencia para requerir a gobernantes y
funcionarios públicos, bajo pena de ser destituidos y procesados, a consensuar sus decisiones y manejo de
recursos públicos ante la sociedad civil mediante la libre participación ciudadana, voluntaria y honoraria, y
así poder iniciar un desarrollo realmente sustentable.
Contenido
Pág.
1.- La ciencia: una religión inacabada 2
2.- Una prehistórica civilización mundial 4
3.- La falacia arqueológica en el contexto ambiental 8
4.- El Códice Vaticano: un dato duro 10
5.- Destino sincrético entre el amor y la guerra 15
6.- América fue la Atlántida 17
7.- Aplicaciones al presente 19
8.- Origen de la investigación 25
9.- Referencias 27
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1. La ciencia: una religión inacabada
Desde hace ya varias décadas en que se empezó a hablar de los problemas ambientales que en un
futuro afrontaría nuestra civilización, sentíamos la protección del desarrollo científico que para entonces
habríamos alcanzado, pero para poder aplicar satisfactoriamente este moderno conocimiento es necesario
mejorar la comprensión que tenemos sobre él.
Particularmente hay que aclarar que la ciencia es la principal religión del mundo contemporáneo,
resultado de sus últimos 2360 años de historia, a partir de la ciencia de Aristóteles, que fue manejada por la
iglesia Católica, convirtiéndose en la primer academia que se opuso a su evolución.
Al igual que cualquier religión la ciencia supone poseer la verdad, a pesar de sus mitos que en el caso de
la ciencia se han venido derrumbando al reconocerse como simples y llanos errores, de los cuales aún
podría haber varios muy importantes por aclarar.
Pero en el caso de las religiones los mitos persisten envueltos en el misterio de su sentido original, ya
que éstas son herencia de prehistóricas civilizaciones de sacrificios humanos que aunque ya manejaban
formas de escritura, éstas sólo nos dan interpretaciones indirectas de sus valores culturales, que fueron
aniquilados por el exterminio de las guerras de conquista.
Al igual que llega a ocurrir en cualquier religión, las autoridades científicas, académicos y/o
investigadores, están cayendo en un estado parasitario, conformándose con desarrollarse en su
especialidad y cobrar puntualmente su quincena, desatendiendo la urgente necesidad del trabajo y la
investigación interdisciplinarios para poder afrontar oportunamente la amenaza ambiental y climática.
Al igual que cualquier religión la ciencia también tiene sus feligreses y monaguillos, que aunque no
entiendan mucho de ella les sirve para obtener ingresos y hacer negocios, logrando posiciones
relativamente privilegiadas en escenarios de crisis económicas, de valores humanos y de incertidumbre
política.
La definición de religión está en la misma composición del término, es un medio de reunión o integración
organizacional de una comunidad por medio de un conocimiento común. La ciencia se restringe al
conocimiento del espacio físico-temporal y conceptual, pero haciendo el requerido ejercicio de abstracción
en la alegoría de la “Caverna de Platón”, puede incluirse en el espacio conceptual al pretendido espacio
espiritual de las religiones:
El mundo sensible o físico-temporal corresponde a las sombras al fondo de la caverna, del mundo de los
conceptos o ideas, representado en la alegoría por lo que existe y sucede en la caverna y hacia su exterior,
ante la naturaleza mortal de los hombres, representados por los prisioneros.
Pero las nuevas generaciones, al descubrir o reconstruir los mismos conocimientos antes perdidos por el
efecto de grandes cataclismos naturales o guerras de conquista, pueden identificarse con sus antepasados,
constituyendo la resurrección de su espíritu, cuyo espacio queda contenido entonces en el espacio
conceptual.
Y ya que el aspecto espiritual da el principal sentido a la vida y a la muerte de los seres humanos, podrán
entonces colaborar satisfactoriamente las distintas religiones, empezando por la ciencia, para unificar a la
población mundial en una guerra evolucionada (no sangrienta) de trabajo bien organizado contra sus
mismas inercias que la están dirigiendo a un auténtico apocalipsis ambiental.
El Calendario Azteca o Piedra del Sol, refiere cuatro épocas pasadas, llamadas soles, que terminaron a
causa de cataclismos ambientales o climáticos, y una época futurista llamada Quinto Sol, como una época
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prometida y fruto de su práctica religiosa de sacrificios humanos, continuados por el genocidio que ha
implicado la Conquista de América, la Colonia y aún la América Independiente y el mundo moderno.
Figura 1. La consigna del Quinto Sol en el Calendario Azteca.
¿Qué significado y trascendencia puede tener esto? ¿Cómo debería rediseñarse la actual organización
social para planificar la superación de los embates del cambio climático?
El cambio climático es un fenómeno cuya relevancia social resulta más clara e impactante ante la
fragilidad del moderno mundo globalizado, el cual requiere de una organización más sólida que planifique la
superación de los riesgos de este fenómeno que cada vez cobra mayor vigencia.
No se tiene precedente en toda la Historia Universal de cambios climáticos semejantes a los que podrían
derivar del actual proceso de descongelamiento de los polos, habría que ir hasta la Prehistoria, a finales del
periodo geológico anterior o Pleistoceno, hace entre 14 mil y diez mil años antes del presente, para
identificar eventos similares y observar sus consecuencias en el medio ambiente en general y en nuestra
especie humana en particular. Y en función de ello definir las medidas pertinentes para un adecuado
rediseño de nuestra actual organización global y local.
El clima y sus cambios han influido en las sociedades humanas a lo largo de los 200 mil años de
evolución del homo sapiens, y éstas sociedades también han podido influir en el clima y podrían seguir
haciéndolo en el futuro de una manera planificada, mediante una organización social estructurada en las
diversas comunidades locales y transnacionales, cuya diversidad de culturas y religiones resultan afines a
una planeación de organización comunitaria en todos los niveles para evadir y superar las amenazas
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ambientales del cambio climático y contribuir a la reconstrucción ambiental y el retorno a una relativa
estabilidad climática.
De antemano la explosión demográfica y los recursos naturales limitados hacen imperativa la necesidad
de una organización bien estructurada entre las distintas comunidades y al interior de ellas para optimizar el
consumo y la producción.
Vivir en comunidad es trabajar por el bien común como única manera de garantizar el bien personal. Por
lo que el objetivo empresarial comunitario no es obtener excedentes de capital, sino satisfacer las
verdaderas necesidades presentes y futuras de las diversas comunidades con las que interactúa la
empresa en cuestión.
Esta es la base de la economía comunitaria, en la que todos trabajan y comercian por el bien común, la
cual es necesario generalizar en coexistencia con la economía capitalista, pues ésta sola es incapaz de
enfrentar y superar la emergencia ambiental mundial a la que estamos ingresando. Ni siquiera, como ya se
ha comprobado durante las últimas tres décadas de Neoliberalismo, es capaz de superar la problemática
económica nacional y mundial.
No obstante, en el mundo actual sólo pequeñas comunidades marginales practican la economía
comunitaria. ¿Por qué sucede esto a nuestra especie de homo sapiens, que se jacta de ser la más
inteligente del reino animal?
La explicación es que somos una humanidad o civilización mundial que aún se encuentra en una etapa
fetal de su desarrollo, en que el embrión sólo ha podido devorar para alimentarse y no ha podido tener
voluntad para hacer otra cosa, y ya es urgente romper el cascarón de sobre proteccionismos de sus clases
dirigentes para evitar un aborto que significaría un genocidio global, y poder Dar a luz a una nueva etapa
evolutiva de nuestra especie.
2. Una prehistórica civilización mundial
Ya comprobado que además de fenómenos naturales como los ciclos de radiación solar y el vulcanismo,
la actividad humana también tiene una importante participación como causante del calentamiento global
(IPCC, 2001) y (NASA, 2008); las tormentas invernales que en el hemisferio norte por tres años
consecutivos tienden a ir en aumento, son indicios de la validez de la formulación teórica de que el
calentamiento global puede producir como reacción a una nueva glaciación (Hartmann, 2004), (Broecker,
2006) y (Crowley y Hyde, 2008).
Además de la incertidumbre que esto genera, por los drásticos cambios climáticos que provocaría, cabe
el cuestionamiento de que si ésta tendría que ser la primera vez que le ocurriera a una civilización mundial
de nuestra especie humana, ya que el potencial destructivo del cambio climático mundial puede ser capaz
de llevar a los restos de la humanidad a empezar de nuevo su penoso camino constructor de
civilizaciones, que significaría repetir invasiones y guerras a lo largo de milenios.
Por lo que tiene sentido averiguar si los cataclismos climáticos de hace entre 14 mil (Clark et al, 2002) y
10 mil años antes del presente, que marcaron el final del periodo geológico anterior o Pleistoceno, en que
se extinguieron gran cantidad de especies animales, pudieron también causar la destrucción de una
civilización mundial, cuyo traumatismo habría provocado en sus sobrevivientes y descendientes la creación
de apocalípticas y mesiánicas religiones de sacrificios humanos que parecen haber favorecido desde la
prehistoria el desarrollo de la Civilización Occidental, al violentar a las razas blancas y motivar sus primeras
guerras de conquista.
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Con la pretensión de salvar a la humanidad de una nueva hecatombe ambiental mediante la creación de
una nueva época o Quinto Sol a partir del sacrificio de sus mártires, ya que el sentido de esta prehistórica
cultura mundial del sacrificio habría sido la aceleración de la integración y desarrollo de las razas europeas
(que se habrían mantenido aisladas de la civilización mundial de finales del Pleistoceno por efectos de la
glaciación) con las razas de color del resto de los continentes, que habrían sido las protagonistas de dicha
ancestral civilización, para alcanzar a tener la capacidad de enfrentar y superar la actual amenaza
ambiental y climática.
El que hasta la fecha sólo se hayan podido identificar vestigios orgánicos de cazadores recolectores de
finales del Pleistoceno, no demuestra que para entonces no pudo haber existido una civilización mundial
similar a la de principios del siglo XX en tiempos de la primera guerra mundial, cuando todavía no se
manejaba la energía atómica, ya que la probabilidad de conservación de los correspondientes vestigios
tecnológicos a más de 10 mil años es prácticamente nula, además de que pudieron ser reutilizados hasta
consumirlos por los sobrevivientes de las catástrofes climáticas.
Por lo que la condición de confirmar toda argumentación de la Prehistoria con evidencias arqueológicas
en el objetivo de garantizar la veracidad de las propuestas, puede precisamente mantener el conocimiento
al margen de verdades trascendentales, es decir, el criterio arqueológico no es suficiente, lo cual motiva
ante el estado de emergencia ambiental mundial al que estamos ingresando, llevar a la mesa de la política
internacional sobre el cambio climático, la reconsideración de documentos como el Timeo o el Critias, de los
Diálogos de Platón, que hablan de una prehistórica civilización que se ha tomado oficialmente por falsa.
Históricamente se vienen rechazando éste y otros importantes indicios de la existencia de una civilización
mundial de finales del Pleistoceno que pueden sistematizarse en una evidencia científica, como la medición
de la antigüedad de Tiahuanaco (Bolivia), según argumentos de Arqueo-astronomía, de hace 17 mil años
(Posnansky, 1945), de la edad de la Esfinge de Gizeh de hasta 9500 años, según medición geológica
basada en sus patrones de erosión, implicando que las Pirámides de Egipto fueron construidas sobre las
ruinas de construcciones más antiguas (Schoch y McNally, 2003).
Aquí se mostrará que la cronología de la Historia de los Soles del Códice Vaticano, o épocas
cosmogónicas por las que ha pasado la población mesoamericana, describe los últimos 14 mil años de la
historia geológica en Mesoamérica y la producción cultural religiosa durante la Historia Universal,
implicando que nos encontramos al final de un Cuarto Sol geológico y principios del Quinto, lo cual fue
pronosticado por los cinco soles rituales aztecas, que se conformaron por a lo más 13 períodos de 52 años,
igual a 676 (Soustelle, 1982), confirmando la influencia de dicha civilización pleistocénica sobre el destino
de la actual.
La consecuencia obvia de la posible validez de estos argumentos en su aplicación a las políticas públicas
para un desarrollo sustentable, es que éstas tendrán que ser mucho más drásticas y eficaces, mediante un
ejercicio democrático mucho más pleno que articule y eficiente el poder ciudadano.
Es bien conocido por los especialistas el cambio climático que sufrió la Tierra a finales del Pleistoceno,
que terminó con la última glaciación y que el ser humano tuvo que padecer sus inclemencias, en que hubo
tal inestabilidad climática que provocó la extinción de gran cantidad de especies animales.
Por no haber encontrado hasta ahora evidencias arqueológicas directas de lo contrario, se supone que el
máximo desarrollo que alcanzó el hombre en aquella época fue el estadio cultural del Paleolítico y a lo más
llegó a construir pequeñas aldeas de cazadores recolectores, pero no se ha considerado que aquellos
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cataclismos climáticos de finales del Pleistoceno pudieron haber borrado la generalidad de los vestigios de
una incipiente civilización mundial en los últimos tiempos de la era glacial.
Según la psicología mimética del historiador René Girard, a partir de los cataclismos climáticos de finales
del Pleistoceno, los sobrevivientes de una devastada civilización mundial pudieron haber caído en una
mediación interna que los habría enfrentado a sus líderes y sacrificarlos en una obsesión ya patológica por
su supervivencia, creando apocalípticas y mesiánicas religiones de sacrificios humanos.
Que motivaron posteriormente, como una rebelión a estos sacrificios, a que las razas europeas y sus
primeros mestizajes emprendieran guerras de conquista hacia las cuencas de ríos como el Indo, el Ganges,
el Éufrates, el Tigres y el Nilo. Con la disminución gradual de estas religiones se continuaron motivando
dichas conquistas con recursos como el secuestro de las esposas de los reyes, tradición recogida en obras
literarias como El Ramayana y la Iliada.
Desde todas las épocas han proliferado las peyorativamente llamadas seudociencias, que afirman la
pasada existencia de civilizaciones prehistóricas, tomando especial auge durante el siglo XIX, en base a
documentos como los Diálogos de Platón que refieren a un continente inundado a causa de terremotos y
maremotos (Larroyo, 1979).
Ante el actual estado de incertidumbre ambiental, en que uno de los escenarios posibles recuerda aquella
legendaria Atlántida, pudiendo volver a identificarla con el continente americano, como ya se propuso antes
cuando se quiso establecer la identidad del “Nuevo mundo” (O’ Gorman, 1958, La invención de América). Y
el que sus culturas autóctonas mesoamericanas fueran asiduas practicantes de apocalípticas y mesiánicas
religiones de sacrificios humanos (Duverger, 1979), semejantes a las que milenios atrás existieron
principalmente en Europa, la India y el Medio Oriente, es decir, en una envolvente del desarrollo de la
Cultura Occidental, tienden a integrar los suficientes indicios para llegar a constituir una evidencia científica
desde el marco de la Teoría General de Sistemas.
El conocimiento de este antecedente tiene el potencial de unificar a la sociedad civil mundial para
generalizar a la economía comunitaria aplicando sus raíces culturales y religiosas para ejercer todo su
potencial físico y espiritual en el trabajo de reconstrucción ambiental, movilidad de comunidades en riesgo
ambiental y oportuna satisfacción de las necesidades básicas de cada comunidad que permitan su correcta
evolución evitando involucionar a la barbarie.
Las catástrofes climáticas de finales del Pleistoceno y la liberación de las razas blancas o europeas que
habrían permanecido aisladas por la glaciación, explican la desaparición de una civilización mundial
pleistocénica y el devenir de la Historia Universal a favor de la integración de las razas europeas al resto del
género humano mediante su colonización del resto de los continentes, favorecidas por prehistóricas
religiones apocalípticas y mesiánicas de sacrificios humanos iniciadas por las razas de color, que han
evolucionado en las religiones actuales y su último reducto aguardó en América y Filipinas la llegada de la
Cultura Occidental, como una cultura madre que con su sangre ha alimentado el desarrollo “fetal” de la
actual cultura mundial. Planificando la superación del actual estado de emergencia ambiental mediante el
resurgimiento de su conciencia en las sociedades actuales.
Es necesario buscar un punto de equilibrio estable en una proporción óptima de los sistemas económicos
formal o capitalista y comunitario o ciudadano, para superar de manera definitiva las crisis económicas y
poder implementar un programa de autosuficiencia social y reconstrucción ambiental, recreando un
ambiente comunitario regulador por medio de una serie de reformas estructurales a la legislación vigente,
que promuevan e incentiven una mayor participación social demandando el liderazgo de los gobernantes
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para frenar la carrera consumista y depredadora del medio ambiente, supliendo al anacrónico capitalismo
de estado cuyo autoritarismo ya no es compatible con el actual desarrollo democrático y por lo tanto no
satisface ya los ideales que dieron origen al ahora más vigente proceso revolucionario.
Historia Universal
Origen y expansión de la
Civilización Occidental
hasta su globalización
Cataclismos climáticos
de finales del
Pleistoceno
Destrucción de una
civilización mundial
Religiones apocalípticas
y mesiánicas de
sacrificios humanos
Liberación del hombre
europeo de la glaciación
Figura 2. Diagrama de la Teoría General de Sistemas aplicada a la Historia Universal.
Desde hace ya algunas décadas que en diversos países se han venido gestando iniciativas comunitarias
de atención y solución a los problemas ambientales (Taveras, 2006), y su labor podrá fortalecerse,
multiplicarse y unificarse mediante una visión humanista que consciente de la pasada existencia y
desaparición de una civilización mundial pleistocénica, así como de la influencia que sus sobrevivientes y
descendientes tuvieron en la conformación de la Historia Universal, luche por la conservación y evolución
de la actual civilización mundial como una resurrección de aquella.
Finalmente las circunstancias del presente y pronósticos del futuro determinarán con mayor exactitud las
respuestas a los cuestionamientos del pasado, pues el paradigma arqueológico de que los restos fósiles
registran todo lo que nuestra especie humana pudo crear en el pasado y ser destruido por la naturaleza, no
tiene ningún fundamento científico. Mucho más válida resulta la conocida oración religiosa: "Recuerda que
polvo eres y en polvo te convertirás".
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3. La falacia arqueológica en el contexto ambiental
El estado actual de la ciencia arqueológica establece que fue hasta el presente periodo geológico
conocido como Holoceno y que cubre los últimos 10 mil años, en que nuestra especie humana empezó a
construir civilizaciones con importantes desarrollos tecnológicos, como la aparición del Neolítico o Edad de
piedra pulimentada, caracterizada por el inicio de la vida sedentaria y la institución de la agricultura, la
ganadería y la cerámica.
Esto es porque aún no se han podido identificar vestigios orgánicos más antiguos de estos desarrollos, lo
cual no demuestra científicamente que no se hayan dado desde el período geológico anterior o Pleistoceno,
es decir, estrictamente hablando, la identificación de estos vestigios orgánicos sólo puede establecer la
edad mínima de tales desarrollos y no su edad máxima o a partir de cuando fueron creados. Porque es
importante no olvidar que en general la probabilidad de que cualquier vestigio orgánico pueda fosilizarse,
conservarse y ser identificado varios miles de años después es despreciable.
Es decir, las más reconocidas autoridades en Arqueología o Antropología pueden opinar que
probablemente nuestra especie humana no fue capaz de construir ninguna civilización al final del
Pleistoceno, dado que los únicos vestigios orgánicos que han podido datarse de ese período corresponden
a cazadores recolectores del paleolítico. Pero esto no puede dejar de ser más que una opinión en base a la
experiencia limitada de la ciencia arqueológica, y es incorrecto establecerlo como conocimiento científico,
siendo necesario enfatizar que las dataciones de vestigios orgánicos sólo reflejan la edad mínima que han
podido tener los desarrollos humanos correspondientes.
Al parecer la ciencia actual aún se encuentra influida por la psicología creacionista de las tradiciones
religiosas y no acaba de asimilar su propia Teoría de la Evolución. Sólo ha trasladado el concepto de la
divina creación referida en el génesis bíblico a un acelerado desarrollo reciente de la inteligencia humana
durante el Holoceno.
Cuando la ideología de la Teoría de la Evolución sugiere que la inteligencia humana, artífice de
civilizaciones, puede ser mucho más antigua, máxime que en la actualidad aún no ha sido capaz de ofrecer
una solución efectiva contra la amenaza ambiental, y precisamente los cataclismos ambientales del fin del
Pleistoceno, aunados a los 10 mil años del actual Holoceno, pudieron haber borrado la mayoría de los
vestigios orgánicos de las civilizaciones de entonces.
Tendrían que quedar vestigios de edificios de piedra, pero por sus semejanzas artísticas con otros
yacimientos arqueológicos que han podido datarse según sus vestigios orgánicos, se han clasificado de la
misma edad, quitándoles muchos miles de años. Con todo la actual teoría arqueológica resulta
aproximadamente válida en el caso de la Cultura Occidental, ya que con excepción de sus costas, durante
los últimos 90 mil años anteriores al calentamiento global de hace 14 mil años, Europa estuvo cubierta por
los hielos de la glaciación de Würm. Pero no es correcto extrapolarla, como se ha hecho, a latitudes de
África, Asia y América, que estuvieron libres de hielo durante la glaciación.
La teoría más aceptada del origen del homo sapiens en África hace 200 mil años y su expansión al resto
del mundo (Gonder et al. 2006) no contradice la existencia de una civilización mundial de finales del
Pleistoceno. En el siguiente mapamundi se describen los desplazamientos que siguió el homo sapiens
desde su salida de África, en base a modernos estudios genéticos. De manera que según las líneas verdes,
desde hace entre 30 mil y 10 mil años, todas las latitudes continentales libres de la glaciación
quedaron pobladas por el homo sapiens.
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Figura 3. Desplazamiento del Homo Sapiens a partir de su origen en África.
La generalidad de dataciones arqueológicas de antiguas construcciones de piedra se hacen en base a la
desintegración de radioisótopos de Carbono de vestigios orgánicos encontrados en dichas construcciones,
pero en varios casos, tales vestigios orgánicos pudieron haberse originado mucho tiempo después de
realizadas tales construcciones. Y generalmente la acumulación estadística de dataciones de vestigios
orgánicos adyacentes a ruinas de piedra, resulta ser muy escasa para poder hacer inferencias válidas, ya
que la cantidad de vestigios orgánicos que llega a conservarse generalmente resulta despreciable con
respecto a la población de seres vivos que la originó, y a mayor antigüedad resulta más improbable poder
identificar dichos vestigios por haberse pulverizado y diseminado.
Por otro lado, la metodología arqueológica ha tendido a minimizar la diferencia entre el tiempo de
datación de vestigios orgánicos y la construcción de edificios de piedra adyacentes, porque se han supuesto
dentro de un proceso civilizador ascendente, pero en la suposición de que ya pudo haber existido una
civilización mundial pleistocénica, muchos yacimientos arqueológicos, americanos, asiáticos y africanos,
tendrían que verse bajo la nueva óptica de un proceso civilizador descendente, a favor de la expansión de
la cultura occidental, que según la mitología americana (Quetzalcóatl, Kukulcán y Viracocha) estaban
esperando para que viniera a reinar.
El trabajo del reconocido prehistoriador y arqueólogo Gordon Childe, en la primera mitad del siglo XX,
permitió una primera e importante aproximación al pasado prehistórico mediante el concepto de progreso
cultural, económico e industrial, a partir de la visión del materialismo dialéctico de Carlos Marx, que
sistematizó la disciplina arqueológica y se mantiene vigente hasta el presente. Pero la incapacidad de
respuesta que ha tenido la actual civilización para revertir la amenaza global de una emergencia ambiental,
lleva al cuestionamiento del modelo de desarrollo siempre ascendente de Gordon Childe, permitiendo
proponer una segunda aproximación al pasado prehistórico mediante la inclusión de una civilización
mundial que decayó a causa de los cataclismos climáticos del fin del Pleistoceno.
Hoy ya puede proponerse el origen de las razas blancas en el Hombre de Neandertal, la denominada
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especie genuinamente europea, después de que se descubrió en él el gen MCR1 de la pigmentación
rubianco-pelirroja (Lalueza et al, 2005), y de que se logró trazar el primer borrador del genoma neandertal,
descubriendo que gran parte de los seres humanos actuales no africanos provienen de él (Green et al,
2010). Permitiendo completar la propuesta de que el Homo sapiens creador de la pasada civilización
mundial pleistocénica se constituía principalmente por las razas de color.
Las razas blancas habrían permanecido aisladas durante los más de 90 mil años que duró la glaciación
en el Hemisferio Norte, y evolucionaron como resultado de la hibridación del Hombre de Neandertal, extinto
desde hace 28 mil años (Finlayson et al, 2006), y el Homo Sapiens, que proveniente de África, pobló
Europa por el Cercano Oriente entre los 55 mil y 30 mil años antes del presente (según el mapa anterior).
Así en general se habrían mantenido ajenas, aunque no necesariamente ignoradas, de la civilización
mundial pleistocénica que se desarrolló en las latitudes libres de la glaciación, pero en cuanto ésta terminó
llegaron a Europa sobrevivientes de los correspondientes cataclismos climáticos en los demás continentes,
reencontrándose con la existencia de las razas blancas.
Después de algunos milenios de convivencia y mestizaje en Europa, las razas antiguas o de color
habrían retomado la práctica de sus religiones de sacrificios humanos para violentar a las razas blancas,
motivándolas a conquistar las cuencas de los ríos desde el Indo y Ganges, hasta el Nilo, dando origen a las
correspondientes antiguas civilizaciones. Finalmente las razas blancas ya más mestizadas regresaron a
Europa buscando sus lugares de origen y dando nacimiento a la Cultura Occidental, que quedaba así
preparada para la conquista y colonización del resto de los continentes, lo cual realizó después del fin de la
Edad Media e impulsada por la previa colonización europea de los árabes.
Aquellas prehistóricas religiones de sacrificios humanos, tendientes a practicarse principalmente entre los
pueblos de color, habrían preparado la realización de un nuevo injerto del retoño de las nuevas razas en el
tallo de las antiguas, para lo cual éste tuvo que cortarse de tajo y su espíritu pudiera venir reencarnando en
las nuevas razas, lo que significó un acto supremo de amor, en el que las razas antiguas ofrendaron sus
vidas para integrarse racial y espiritualmente con las nuevas. Es decir, el amor ha sido la causa de la gran
tragedia humana de nuestro proceso histórico, y naturalmente también será la solución para la superación
de la actual etapa fratricida.
Por supuesto que la mayoría de los mártires no habrían tenido conciencia de esto, sólo los iniciadores y
dirigentes de aquel sistema sacrificial, desde antes de Stonehenge hasta Tenochtitlan, en que su memoria
también pudo haber sido suplida por la fe religiosa en su herencia cultural.
La actual amenaza del cambio climático afecta a la visión de las ciencias, particularmente cambia el
contexto de estudio de la Antropología y la Arqueología, y tiene implicaciones en su postmoderna corriente
de investigación, la Arqueología Postprocesual o Contextual, lo cual da cabida a la apertura de la línea de
investigación que aquí se presenta.
4. El Códice Vaticano: un dato duro
Según las anotaciones marginales del Códice Vaticano, dictadas por los cronistas indígenas a Fray Pedro
de los Ríos (León Portilla, 1983), la cronología de la Historia de los Soles de dicho códice está basada en
un numeral llamado tzontli, que significa 400, la segunda potencia del sistema de numeración vigesimal
mesoamericano (Chavero, 1880). Dando una duración total de 18 mil años a la sucesión de los cuatro soles
que relata. Los especialistas no han podido interpretar esto de una manera realista y han concluido que
constituyen datos erróneos pertenecientes a la “Leyenda de los Soles”.
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Al parecer este códice fue pintado en Italia hacia el año 1570, al copiar el original tenochca a punto de
desintegrarse, al cual a mediados del siglo XX el escritor e investigador Robert H. Barlow llamó "Códice
Huitzilopochtli". Debió ser enviado a la Nueva España precisamente para hacerle las anotaciones
marginales que explicarían su contenido de boca de los nativos indígenas, para regresar finalmente al
Vaticano http://www.adeva.com/faks_detail_en.asp?id=142
Los códices mesoamericanos son pinturas que se componen de una escritura ideográfica, que autores
como el Dr. Joaquín Galarza han demostrado que incluso varios pictogramas representan palabras en las
lenguas nativas, aunque en principio como escritura ideográfica transmite la información principal sin
referirse a ningún idioma hablado, que permite al lector o intérprete llegar a prescindir del lenguaje hablado
por quienes la escribieron para obtener alguna información relevante. El Códice Vaticano A (3738) contiene
entre muchas otras, las láminas a colores de cuatro soles o épocas que ha vivido la población mesoameri-
cana http://www.famsi.org/spanish/research/graz/vaticanus3738/thumbs_0.html en las cuales pueden ob-
servarse los manuscritos en italiano relativos a los comentarios de los cronistas indígenas, que en particular
señalaron la utilización de los tzontlis o numerales de 400 años. Aquí se presentan sin dichos manuscritos
que a primera vista resultan ilegibles, y se acompañan de los dibujos de la edición a cargo de Don Vicente
Riva Palacio en 1880, de la colección de historia “México a través de los Siglos”, por resultar más legibles.
Para manejar las interpretaciones que aquí se presentan, se considera que la información del códice
original, pintado en los tiempos de mayor esplendor de la ciudad de México Tenochtitlan, a su vez fue copia
de códices más antiguos. Nada nuevo han podido aportar los especialistas sobre las cuatro láminas de la
Historia de los Soles de este códice desde lo escrito por Don Alfredo Chavero en el siglo XIX.
La página del Sol de Agua muestra símbolos de agua que indican una gran inundación: un hombre
saliendo de su casa en actitud de nadar, una pareja flotando en el tronco hueco de un ahuehuete,
refiriéndose a los sobrevivientes de la catástrofe, peces que denotan una inundación marina, aparece
Chalchiutlicue, diosa del Agua, y un hombre muerto cuyo tamaño sugiere una gran mortandad humana. A
la izquierda aparecen diez numerales, referidos por interpretes como Alexander von Humboldt, José
Fernando Ramírez y Manuel Orozco y Berra (Chavero, 1880), como tzontlis, que significan 400, y ocho
cuentas más de veinte (ya que su sistema de numeración era vigesimal), dando un total de 4160 años para
la duración de esta época o Sol de Agua. En la derecha hay símbolos que se refieren al solsticio de
invierno, el mes Atemoztli y la fecha calendárica 10 agua (Chavero, 1880), en que probablemente se
conmemoraba dicho sol.
Figura 4. Primer Sol, Atonátiuh o Sol de Agua.
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Las grandes inundaciones que marcaron el final del Primer Sol pudieron haber sido provocadas
precisamente por el calentamiento global que terminó con la glaciación en el hemisferio norte y provocó el
descongelamiento de la Antártida hace 14 mil años, igual a la suma de la duración de los tres soles
restantes (como aquí se verá), por lo que podemos suponer que nos encontramos al final del Cuarto Sol.
El calentamiento global de hace 14 mil años elevó el nivel del mar en un promedio de 20 metros (Clark et
al, 2002), lo cual modificó el empuje de Arquímedes sobre las placas tectónicas continentales, que además
perdieron peso por el derretimiento de los glaciares, pudiendo provocar terremotos en la dorsal de unión
entre las placas en el fondo del océano Atlántico, y originando maremotos o tsunamis que habrían inundado
momentáneamente el continente americano por su costa oriental.
Pongamos a prueba la anterior suposición con lo que dicen las láminas relativas al resto de los Soles: Al
Sol de Agua le siguió el Sol de Viento, cuyo final fue determinado por el último enfriamiento de la era glacial
en Norteamérica. El códice muestra líneas de puntos que significan nevadas, rectángulos que simbolizan
ventiscas, monos que buscan refugio y podrían referirse a personas extrañas, como pudieron ser los
hombres asiáticos que llegaron a México hace aproximadamente 10 mil años (Ember, 2004), después de
haber atravesado Norteamérica desde el Estrecho de Bering, ya que mono en náhuatl es ozomatli, que
tiene la misma raíz de oztotl, que significa cueva, en la que se ve refugiada una pareja humana. Aparece
Ehécatl Quetzalcóatl, dios del Viento, con su cauda de serpiente emplumada, los numerales indican que
este sol duró 4200 años, y se relaciona con la fecha calendárica 1 ocelote, el equinoccio de primavera y el
mes Pachtli (Chavero, 1880).
Figura 5. Segundo Sol, Ehecatonátiuh o Sol de Viento.
En la siguiente gráfica se esquematiza mediante la línea curva de muchas crestas, el avance y retroceso
de los hielos del glaciar en Norteamérica conocido como Wisconciniano durante los últimos 25 mil años
(Clayton et al, 2000). Se puede observar un cambio de patrón en las crestas de la línea después de hace
14000 años, al término del Sol de Agua, con la momentánea inundación del continente, y el último avance
de los hielos al final del Sol de Viento, con la cresta aislada de hace aproximadamente 10000 años, como la
última réplica del Younger Dryas o joven enfriamiento en el Glaciar Wisconciniano.
13
Figura 6. Cronología del Wisconsiniano en Norteamérica durante los últimos 25000 años.
El Tercer Sol, o Sol de Fuego, correspondió a la actividad eruptiva de la Cordillera Neovolcánica durante
la primera mitad del actual periodo geológico conocido como Holoceno
http://ramsar.conanp.gob.mx/documentos/fichas/52.pdf. En el códice se observa la escena dentro de una
olla hirviendo, refiriéndose a las erupciones de lava volcánica, que se ve invadiendo a dos casas, y las
subidas y bajadas de material incandescente parecen expresarse por medio de los pájaros. Se ve a una
pareja refugiada en una caverna, como siempre en animada discusión. Aparece Xiutehcutli, dios del Fuego,
los numerales indican una duración de 4480 años y se observa la fecha calendárica 9 movimiento, el
solsticio de verano y el mes Xilomanilistli (Chavero, 1880).
Figura 7. Tercer Sol, Tletonátiuh o Sol de Fuego.
14
Aunque Don Alfredo Chavero informa en su Historia Antigua y de la Conquista, que según los cronistas
del códice y posteriores intérpretes, los numerales son tzontlis que representan 400, puesto que el tiempo
total excedía con mucho a la cronología bíblica, a la que ya se habían hecho coincidir las cronologías hindú,
china y egipcia; consideró que debía de existir un error, y que dichos numerales sólo significaban 80,
quedando así mutiladas todas las cronologías de las civilizaciones antiguas para igualarse con la de la
civilización Occidental.
Actualmente nos cuestionaríamos con razón, ¿cómo pudo haberse conservado por tanto tiempo dicha
información? La explicación es la presencia de muchas generaciones de descendientes directos de la
civilización mundial pleistocénica, que se transmitieron la información por medio de códices ya
desaparecidos, y se han venido extinguiendo voluntariamente mediante sus religiones de ofrendas
humanas para finalmente ser conquistadas por la humanidad histórica y mestizarse con ella.
En la interpretación del Cuarto Sol, o Sol de Tierra, entran en juego los principales conceptos de la
cultura religiosa mexicana, ya que aparecen personas portando flores y banderas, como lo hacían los
xochimiqui o mártires floridos antes de ser ofrendados en los sacrificios rituales (Garibay, 1999). La diosa
Xochiquetzal sostiene dos ramas floridas simbolizando los frutos de un gran sacrificio de sangre,
representado por el fondo rojo, que podemos identificar con el realizado por las religiones apocalípticas y
mesiánicas de sacrificios humanos, y puesto que para la obtención de estos mártires solían realizarse las
llamadas Guerras Floridas, puede extrapolarse al sacrificio realizado durante todas las guerras a lo largo de
la Historia Universal.
Figura 8. Cuarto Sol, Tlaltonátiuh o Sol de Tierra.
Ya que la actitud festiva de los abanderados parece referirse a la resurrección de todos los mártires, la
rama izquierda simboliza a la humanidad prehistórica, que se sacrificó para el surgimiento de la actual
humanidad, representándose sólo por el hombre porque en general la mujer se unió a la nueva humanidad
para constituir el mestizaje, mientras que la rama derecha simboliza a la humanidad histórica, representada
por la pareja humana.
Significando que el Cuarto Sol culminará con la comprensión de la fusión de ambas humanidades
mediante la resurrección de la antigua en la actual a nivel espiritual (reencarnación del espíritu) y biológico
(resurrección de la carne), que Jesús de Nazaret habría llevado mediante el ideal nacionalista del pueblo
hebreo de la esperanza de un Mesías, a la proyección mundial que le dio el antiguo Imperio Romano.
15
Se puede interpretar el dogma de la resurrección de la carne como la repetición a nivel mundial del
mestizaje cósmico o de todas las razas (Vasconcelos,1983), que se dio por primera vez en el Medio
Oriente, al ser un vértice geográfico de unión entre tres continentes: Asia, África y Europa; y a donde
también pudieron llegar en sus embarcaciones sobrevivientes de la prehistórica inundación americana,
probables antepasados de los actuales semitas o árabes. Confirmando nuevamente la influencia de la
pasada civilización mundial pleistocénica sobre el desarrollo de la actual para su superación final del actual
estado de emergencia ambiental.
De modo que la suposición inicial de que el fin del Sol de Agua fue causado por el calentamiento global
de hace 14 mil años = 4200 + 4480 + 5320, igual a la suma de la duración de los tres soles restantes, nos
permite hacer una lectura en la Historia de los Soles del Códice Vaticano, no sólo de parte de la historia
geológica y paleoclimática reciente, sino inclusive a grandes rasgos, de la historia de la humanidad y su
cultura religiosa, es decir, ambas cronologías son coherentes: la perteneciente al códice contiene a la
oficialmente aceptada.
5. Destino sincrético entre el amor y la guerra
La experiencia es la primer fuente del conocimiento, pero para poder seguir desarrollando el
conocimiento llega a ser necesario a veces incluso omitir la experiencia, pues ésta llega a provocar
reacciones emocionales en el sujeto que lo llevan a prejuiciar muy subjetiva y parcialmente.
La experiencia depende de la sugestión y psicología del observador, así podemos ver a través de la
historia de la ciencia que en importantes momentos de su desarrollo primero han cambiado las ideas y
después la "experiencia", que ya sólo vino a confirmar aquellas.
Así por ejemplo, cuando Galileo demostró que era erróneo el postulado de Aristóteles de que los cuerpos
más pesados caen con mayor rapidez, antes de soltar varios cuerpos desde lo alto de la torre de Pisa, ya
no aceptaba el aserto aristotélico, se cuenta que pensó, suponiéndolo cierto, que si dos cuerpos de distinto
tamaño los unía en uno sólo, su tiempo de caída debería ser el promedio de los tiempos de caída de cada
cuerpo por separado, pues el mayor ejercería un efecto de aceleración sobre el menor, y éste a su vez un
efecto de desaceleración sobre el mayor, pero por el principio aristotélico el nuevo cuerpo debería caer más
rápido que los dos cuerpos iniciales, esta contradicción fue lo que lo llevó a pensar que todos los cuerpos
caen con la misma rapidez independientemente de sus pesos (Gamow, 1960).
La base de la economía comunitaria es el trabajo comunitario, pero para ser posible su generalización,
deberá entenderse como parte de una economía de guerra, pues de esa gravedad es la problemática
ambiental y social que hay que superar, lo que a su vez motiva la generalización del concepto de guerra a la
lucha diaria que cada persona tiene que emprender para la satisfacción de sus necesidades y de su familia,
y que si la guerra en general ha llegado al genocidio, una organización estructural comunitaria a nivel
mundial nos permitirá superar esta etapa fratricida y evolucionar hasta convertirnos en guerreros de la
creación, construyendo un nuevo paradigma de éxito personal que no requiera del enriquecimiento material,
sino de una participación social efectiva.
El amor y la guerra son entes isomorfos, tienen la misma estructura, en ambos hay atracción y conquista,
dependencia y poder, liberación y encausamiento, son las fuerzas que impulsan la evolución de los seres
humanos y el destino evolutivo de la humanidad es llegar a sincretizarlos. Una paz mundial duradera no
significaría el fin de la guerra, sino su dirección a cargo del amor del género humano, como un ejército unido
por un mismo espíritu.
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Con este nuevo nivel de comprensión, la lectura de la lámina del Cuarto Sol del Códice Vaticano, que
habla de la resurrección de los mártires de los sacrificios humanos religiosos, se extiende a la resurrección
de todos los actores de la Historia Universal, que participaron en las diferentes guerras, genocidas o no, que
les tocó vivir. Al quedar representadas por las Guerras Floridas del ritual mesoamericano.
Aunque nuestra primer reacción ante la guerra es evitarla, podemos observar a lo largo de la historia que
ésta sigue, aunque tome diferentes formas, así hemos hablado de guerras frías, convencionales,
psicológicas, comerciales, etc.
¿Pero que tan bien conocemos este fenómeno social denominado guerra, de tan importante participación
en la vida humana? Primeramente debemos reconocer que la constante pretensión de evitarla o provocarla
nos dificulta su comprensión. Tal vez un estudio más imparcial lleve al sujeto a la convicción de que es él
mismo el objeto que está tratando de conocer, tanto como individuo, como sociedad.
Es menester saber que la guerra es estado continuo, que la justicia es discordia, que todo se
hace y se deshace por la discordia. La guerra es el padre de todas las cosas y de todas es rey; de
unas ha hecho dioses, de otras hombres; de unas esclavos, de otras hombres libres.
Heráclito de Éfeso.
La idea de la guerra aplicada antropomórficamente a las fuerzas cósmicas, es precisamente la
forma encontrada por el pensamiento náhuatl para explicarse el acaecer del universo.
Miguel León Portilla.
Cuando la tolerancia religiosa logró poner fin en Europa a las guerras entre católicos y protestantes,
durante la segunda mitad del siglo XVII, se siguió el desmoronamiento de los Estados Unidos de Occidente
y empezaron a surgir las guerras nacionalistas, las de revolución social y las imperialistas (Toynbee, 1987).
Cuando termina una guerra da lugar a que surjan otras, como si fuera una forma de energía que puede
transformarse pero no desaparecer. Luego cada vez que termine una guerra hay que prever y planificar su
conversión en una guerra no fratricida para evitar lo contrario.
Adoptemos el siguiente principio de optimismo: La sucesión de imperios y guerras que se han venido
desarrollando a lo largo de la historia tiende a una nueva etapa de emporios, es decir, a imperios que no
serán impuestos por la fuerza militar, sino por la capacidad de negociación, autosuficiencia y auxilio mutuo
entre las partes.
Lo que existe es lo que impera, de ahí que hay que postular que después de sus atroces experiencias en
intentos pasados, el ser humano será por fin capaz de construir el imperio correcto que reclama su espíritu.
Controlando a la guerra como la mayor manifestación de la energía de los pueblos y dirigiéndola a
campos de batalla no fratricidas, gracias a las mismas conquistas que en el marco de la justicia y los
derechos humanos ha alcanzado nuestra actual civilización mundial, aún a pesar de los ahora ya
catalogados como crímenes de guerra que desaparecerán ante la consolidación de que la violencia deje de
ser el arma más poderosa.
Comprendiendo el papel de la guerra en la evolución de la humanidad, debemos buscar la paz sin negar
a la guerra, es decir, sólo cambiar su histórico campo de batalla, que abandone definitivamente el campo
sangriento para ocupar solamente ámbitos como el económico, político, jurídico, ideológico, laboral,
deportivo y demás actividades que involucren la competencia entre los seres humanos como medio para la
colaboración mundial y mutua superación.
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Efectivamente podemos generalizar el concepto de guerra como una energía cósmica que interactúa
entre seres humanos y el universo, liberando nuestro natural espíritu de lucha y vocación a enfrentar el
peligro, reconciliándonos con nuestro pasado y desantropomorfizando el concepto de enemigo e
identificándolo con las circunstancias a vencer para la mejor evolución colectiva e individual.
Tal generalización de la guerra es indispensable para poder erradicar las prácticas genocidas de nuestra
civilización, comprendiendo que su construcción histórica ha consistido precisamente en ir convirtiendo a la
guerra sangrienta en guerra civilizada en su multitud de formas, y que naturalmente nuestro desarrollo
futuro seguirá teniendo como propulsora y directriz a la guerra.
La guerra es la eterna dialéctica cuya dirección está destinada a ser tomada por el ser humano, y
corresponde a nuestra actual cultura mundial sincretizar a la guerra con el amor como un ejercicio de
creación que origine una simbiosis cósmica entre humanidad y naturaleza, y la consecuente conquista de la
dimensión espiritual.
En el actual mundo globalizado de una u otra forma todos participamos en cada una de sus guerras,
aunque prefiramos pensar que no es así, igualmente el amor existe independientemente de que creamos
sentirlo o no, amor y guerra son lo mismo sólo que están separados en nuestra conciencia, volver a
unificarlos es indispensable para terminar con nuestra cultura genocida y tomar el control del género
humano como creador.
El ser humano siempre ha buscado un sentido a su vida y siempre debe encontrarlo, llegar a decidirlo,
así mismo ha buscado un sentido a su muerte. De la vida hay que hacer un verdadero arte y el arte de vivir
contiene como parte esencial al arte de morir, pues buscando un alto sentido a nuestra forma de morir es
como nuestra vida adquiere un sentido amplio, es como puede evolucionar artísticamente ante el constante
peligro de morir como un guerrero en el campo de batalla.
6. América fue la Atlántida
El hombre de Neanderthal ya manejaba el conocimiento de la trascendencia del espíritu humano a sus
siguientes generaciones, lo que ha quedado patente en los vestigios de su cultura funeraria de hace
sesenta mil años (Ember, 2004), en tanto que el homo sapiens aprendió a sacrificarse para planificar y
optimizar su evolución, y recoger los frutos de su sacrificio en la trascendencia de su espíritu, como lo ha
expresado, por ejemplo, en su cultura Cristiana.
Los sacerdotes egipcios dijeron a Solón, uno de los siete sabios de la antigua Grecia, hace unos 2600
años: que “la Atlántida se había hundido más de 9 mil años antes”, que era una “isla más grande que la
Libia (Africa) y la Asia reunidas, más allá de las Columnas de Hércules” (Estrecho de Gibraltar), es decir, en
el océano Atlántico. “… Poseidón y Cleito repartieron el reino de la Atlántida entre sus cinco parejas de hijos
. . . su capital estaba en un islote dentro de una laguna, protegida por varias construcciones circulares
concéntricas y cruzada por dos corrientes de agua, una fría y la otra caliente” (Larroyo, 1979).
Paralelamente, la pintura de la fundación de México Tenochtitlan del Códice Mendocino, reproduce varios
elementos culturales: Un islote dentro de una laguna, dos corrientes de agua que lo cruzan (una clara y la
otra sangrienta) y cinco parejas de sacerdotes gobernantes.
Un primer gobierno teocrático duró desde la fundación de Tenochtitlan, en 1325, hasta que se eligió al
primer emperador o tlahtoani, Acamapichtli, un ciclo de 52 años después, en 1376 (Chavero, 1880). Cuatro
de las parejas de sacerdotes representan a los puntos cardinales, y la quinta pareja, en la que se
encontraba Ténoch, junto al nopal y el águila, representa a la vertical, como en una pirámide.
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Figura 9. Representación de la Teocracia de Ténoch en el Códice Mendocino.
La Interpretación aquí propuesta del paralelismo cultural entre la Atlántida y Tenochtitlan es la siguiente:
Al regreso de su milenaria peregrinación, (que tuvo que haber partido de Teotihuacan [primer Aztlan],
rodeada por el entonces más extenso Lago de Anáhuac, y llegado hasta los Grandes Lagos del actual
estado norteamericano de Utah) los antiguos mexicanos identificaron el lugar donde fue una de las
principales metrópolis de la Atlántida, y allí fundaron México Tenochtitlan. El simbolismo del águila y la
serpiente representa la consigna cultural de que el espíritu (el águila) dominará al cuerpo (la serpiente)
(Nietszche, 1965), en su propio lenguaje sacrificial en que el águila devora a la serpiente.
Por lo tanto América pudo haber sido la legendaria Atlántida, que no permaneció sumergida bajo el mar,
sólo se inundó momentánea y parcialmente a causa de los cataclismos provocados por el calentamiento
global de hace 14 mil años, pero los sobrevivientes de sus contemporáneas civilizaciones del otro lado del
Atlántico, se quedaron con la idea de que el continente había quedado permanentemente sumergido.
Puesto que el manto oceánico transmite su presión por las dorsales o fronteras entre las placas
tectónicas, el aumento promedio de 20 metros en el nivel del mar (Clark et al, 2002), debió aumentar el
empuje de Arquímedes en las placas continentales, que estarían menos pesadas por el deshielo de los
glaciares, provocando cambios en las resultantes de las fuerzas del desplazamiento tectónico que habrían
originado terremotos en algunas dorsales, causando que la superficie del océano Atlántico se derramara
sobre el continente americano en una cadena de gigantescos tsunamis, quedando América casi totalmente
despoblada, excepto en las regiones de mayor altitud y más alejadas de la costa atlántica, como en la
Cordillera de Los Andes.
Según la teoría pre-Clovis o del poblamiento temprano del continente americano (Wikipedia, Internet) el
homo sapiens ha poblado América desde hace por lo menos 40 mil años. Por lo tanto es coherente
proponer que cuando llegó el hombre asiático a través del Estrecho de Bering, durante el Younger Dryas o
último enfriamiento, hace 10 mil años, América ya estaba poblada, aunque con una densidad muy baja por
causa de la pasada inundación.
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Un argumento que se ha utilizado para "desmentir" a Platón de la pasada existencia de la Atlántida,
parte de la teoría de la Pangea, según la cual, todos los continentes que hoy conocemos estaban unidos
hace más de 100 millones de años en una sola masa continental, que se fragmentó con la caída de un
meteorito en lo que hoy es la Península de Yucatán, provocando el nacimiento del océano Atlántico y la
posterior extinción de los dinosaurios. De tal manera que los actuales continentes embonan en un
rompecabezas según su orografía y plataformas costeras, por lo que no ha habido lugar en el Atlántico
donde antes haya podido existir otro continente, pero queda la posibilidad lógica de que la Atlántida haya
sido la propia América, y entonces no hay ninguna incoherencia con la teoría de la Pangea.
La legendaria civilización atlante habría estado asentada a lo largo de lo que hoy es Latinoamérica, ya
que la mayor parte de Norteamérica estaba cubierta por la Glaciación de Wisconsin. Según los diálogos de
Platón la Atlántida estaba a punto de ser vencida por los antepasados de los griegos cuando ocurrió la
inundación marina, lo que significa que la civilización era mundial, y que aún no se identifiquen vestigios en
ninguna parte del mundo es porque en su generalidad los investigadores han buscado vestigios de culturas
mucho más recientes. Pero pueden rescatase los rasgos más importantes de la prehistoria a partir de sus
consecuencias que pueden identificarse en la historia, en la cultura y en el medio ambiente terrestre.
Y entonces queda claro porqué como promotoras de la guerra fratricida, hay que ver a las prehistóricas
religiones apocalípticas y mesiánicas de sacrificios humanos, como el génesis y pecado original de la
Historia Universal. Porque efectivamente se ha tratado de un problema racial: de integrar biológica y
espiritualmente a todas las razas humanas; lo cual podemos considerar que en el actual mundo globalizado
ya ha quedado consumado, y podemos pasar a la siguiente etapa evolutiva de la guerra identificándola con
el amor.
7. Aplicaciones al presente
a) Antecedentes
Ante el actual mundo globalizado, con una sobrepoblación entrampada en sus problemas económicos,
ambientales y climáticos, el planeta ha dejado de ser una fuente inagotable de recursos, pero podemos
considerar que su población ha llegado a su mayoría de edad y ya no debe seguir desarrollándose bajo el
paternalismo del Socialismo o Capitalismo de Estado, identificado también como la Dictadura del Estado.
Para permitir que la sociedad civil se desarrolle más libremente mediante un mayor ejercicio democrático.
Sin embargo el Neoliberalismo, contradiciendo el propio significado del término, se ha restringido a un
liberalismo monetario regulado por organismos internacionales que ha derivado en un simple y llano
Capitalismo de Estado a nivel mundial, es decir, no ha podido escapar a una Dictadura de Estado Mundial
en que sin embargo al interior de los países la población ha quedado desprotegida, dando lugar a que una
parte importante de ella quiera volver al Socialismo, mientras que otra busque su subsistencia en la
ilegalidad, el narcotráfico y la delincuencia organizada.
Puede observarse históricamente que el sistema económico capitalista se ha desarrollado eficazmente
mientras se ha mantenido inmerso en el ambiente comunitario heredado de la Edad Media, pero al crecer el
capitalismo se reduce la economía comunitaria, y cuando este ambiente comunitario se ha reducido a
niveles mínimos, es cuando el capitalismo ha entrado en procesos de crisis recurrentes.
A últimos tiempos se viene considerando al Descubrimiento de América como el inicio del Renacimiento,
pero éste debería definirse a partir del inicio del capitalismo, por lo que hay que ir más atrás que la
invención de la imprenta y la toma de Constantinopla por los turcos: al mismo inicio del antiguo Imperio
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Otomano; ya que han sido los árabes quienes impulsaron en Occidente el arte del comercio a grandes
distancias y la industria de la construcción de las carabelas y la navegación, que se desarrollaron
rápidamente en la tradición comunitaria de la Edad Media.
Implicando la necesidad de reactivar el ambiente económico comunitario en el que desde la Edad Media
el capitalismo pudo desarrollarse vertiginosamente, para que la tecnología del capital pueda ser auxiliada
por la tecnología más antigua de la organización comunitaria en el objetivo de estabilizar el desarrollo y
producción social para superar la problemática ambiental y climática.
De manera que para que la sociedad civil mundial sea capaz de adaptarse al cambio climático y
reconstruir el medio ambiente terrestre, es necesario que se organice estratégicamente a partir de su
composición estructural en comunidades de diversos niveles y géneros, con la necesaria transparencia para
que pueda articularse satisfactoria y oportunamente la acción de cada comunidad e individuo.
Siguiendo los patrones cambiantes del clima, la comunidad mundial podrá adaptarse a los nuevos
territorios a que tenga que desplazarse para esquivar o superar los impactos climáticos y planificar
oportunamente la producción capitalista y comunitaria de los satisfactores básicos para toda la población
mundial, como los alimentos, los servicios de salud, habitación, educación, esparcimiento y socialización
mediante eventos deportivos, culturales y de trabajo comunitario, etc., para evitar ingobernabilidad y caos.
La humanidad se encuentra ahora en una etapa de adaptación a un medio ambiente limitado, que ya le
resulta insuficiente bajo su actual organización, la cual tendrá que actualizar a las nuevas condiciones para
poder reconstruir continuamente este medio ambiente evitando el agotamiento de sus recursos naturales.
Para lo cual hay una imperiosa necesidad de una mayor productividad social, no solamente de la clase
trabajadora, sino de todos los actores de la sociedad, particularmente de la clase gobernante. Y una mayor
productividad gubernamental requiere de un vigoroso y motivante Estado de Derecho, el cual a su vez
requiere de una mayor democracia y ésta de una mayor transparencia.
b) Nueva Legislación sobre Transparencia
Haciendo ahora necesario que el ciudadano no tenga que esperar a que alguna acción gubernamental le
parezca irregular para pedir informes que la puedan transparentar, sino que además pueda participar para
evitar que suceda algún ilícito. Es decir, ante el actual descrédito de la democracia representativa, es
necesario recuperar su legitimidad moral mediante la consolidación de la democracia participativa, dando
oportunidad a la sociedad civil de participar desde el nivel local, municipal, estatal y hasta el nacional.
Mediante la actualización de la legislación sobre transparencia anexándole párrafos como los siguientes:
- Gobernantes y funcionarios públicos estarán obligados a consensuar sus decisiones y manejo de recursos
públicos ante la sociedad civil mediante la libre participación de ciudadanos voluntarios, independientes,
autónomos y honorarios. De manera que las acciones y manejo de fondos públicos de los gobernantes y
funcionarios sean sujetos a proceso legal (destitución y enjuiciamiento penal) en caso de que fallen en
acatar algún acuerdo o en consultar a la sociedad civil.
- Cada funcionario o gobernante podrá convocar a reuniones de debate y toma de acuerdos relativos a cada
proyecto, o simplemente dejar un Acta de Consenso en su oficina o sitio web, en que cada persona que
quiera participar emitirá su voto a favor o en contra del plan y presupuesto gubernamental, suscribiéndolo
con su nombre y algún dato de identificación. De manera que todos puedan quedar convencidos de que
cada acción y gasto que ejecute el gobierno tuvo al menos el apoyo del 50% + 1 de las personas afectadas.
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- Para el caso de los planes gubernamentales que rechace la sociedad civil, ésta tendrá que organizar
sesiones para analizar y debatir, presencialmente o vía tecnológica, y formular propuestas alternativas
mediante actas consensuadas enviadas a los funcionarios y gobernantes, para que éstos las consideren en
el rediseño que tendrán que hacer de sus planes. Para promover estas sesiones la sociedad civil podrá
apoyarse en organizaciones no gubernamentales (Ongs) y movimientos sociales.
Este tipo de reglamentaciones liberaría el desarrollo político del país. Empezando por que los
movimientos sociales dejarían de ser de protesta para convertirse en propositivos, dejando atrás las
marchas y plantones como principales recursos, para emplear las redes sociales, virtuales y físicas, en el
debate y toma de acuerdos que permitirán a la sociedad civil, a partir de su monitoreo, crítica y limitación de
la acción de los gobernantes, convertirse en su más valioso colaborador y finalmente legitimador y defensor
de su gestión previamente consensuada. Implicando un desarrollo social, económico y cultural a partir de
la generalización del trabajo comunitario.
c) Los Procesos Electorales
Se requerirá de la participación permanente y honoraria de la sociedad civil para demandar y lograr que
esta ley de transparencia se reglamente a nivel constitucional. Esto cambiaría radicalmente el sentido de
nuestra civilización, ya que terminaría con las mafias electorales institucionalizadas, que son parte esencial
del consumismo que lleva a la debacle a nuestra civilización.
La sociedad civil recaerá en que los procesos electorales son oportunidades para ejercitar la democracia
en su más amplio significado, sin reducirla a la sola emisión de un voto secreto, sino publicando sus
demandas a través de las Ongs y movimientos sociales, condicionando a los candidatos a que den pruebas
tangibles de su compromiso a satisfacerlas para votar por ellos, en el entendido de que la esencia de un
proceso electoral ya no será la elección de los gobernantes, sino el acuerdo de colaborar con ellos en la
satisfacción de las demandas sociales.
Particularmente la sociedad civil puede demandar a los candidatos que sus partidos políticos promulguen
en el Congreso saliente antes del día de la elección la inserción a la legislación Constitucional de la ley de
“Gobernantes y funcionarios honestos” (obligados a consensuar sus decisiones y manejo de recursos
públicos, so pena de ser destituidos y enjuiciados).
A los partidos políticos cuyos candidatos vayan en desventaja según las encuestas, les convendría que
sus legisladores formularan ante el Congreso la correspondiente iniciativa de ley, para de esta manera
ganar mucho más votos, entonces el partido político que lleva la ventaja, tendría que apoyar la iniciativa
para que entrara en vigor oportunamente, de lo contrario podría perder sus votos de ventaja y la elección.
El partido político que haya formulado la iniciativa (aunque ésta no alcanzara a promulgarse) ganaría un
buen porcentaje de votos, a menos que algún otro partido lograra una más notoria participación para que la
ley se promulgue y entre en vigencia a tiempo.
Para el caso de que a todos los partidos políticos se unifiquen para no promulgar esta ley, la sociedad
civil tendrá que elegir previamente una planilla de ciudadanos socialmente reconocidos, e independientes,
para contender como candidatos no registrados a los distintos puestos de elección, dispuestos a promulgar
la ley “Gobernantes electos y funcionarios públicos honestos” como una de sus primeras acciones de
gobierno, y vía redes sociales la sociedad civil se pondría de acuerdo para votar por ellos, anotando sus
nombres en las boletas electorales.
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Quedando claro que la supuesta oposición entre partidos políticos funciona más como una alianza para
legitimar mutuamente sus gobiernos, haciendo cada vez que éstos estén más lejos de satisfacer las
verdaderas demandas sociales. Por lo que los votos por candidatos no registrados podrán llegar a superar
por mucho a los votos por candidatos oficiales, permitiendo llegar a sustituir a la clase política por otra que
sí pueda ir a la vanguardia del desarrollo social.
Esto significaría la evolución de los votos nulos en votos por candidatos no registrados, pasando de la
protesta a la propuesta, que alcanzando los niveles requeridos de votación, se convertiría en mandato
popular, ejerciendo su derecho expresado en el Artículo 39 constitucional: La soberanía nacional reside
esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio
de este. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.
Naturalmente la seguridad económica es uno de los principales deseos humanos, pero ¿a qué nivel?
¿De seguridad alimentaria o para poder despilfarrar el dinero? Eso lo determina el prototipo que nos da el
ejercicio de los gastos de gobierno. ¿Y qué mejor oportunidad para racionalizar el gasto público que cuando
nuestros gobernantes están a punto de ser electos?
d) Nueva economía mixta
La libertad política que originaría la actualización de la legislación sobre transparencia gubernamental
mediante la ley de “gobernantes y funcionarios honestos”, haría muy exitosa la gestión gubernamental,
llegando a las siguientes elecciones con una obvia demanda social: reducción substancial de los salarios y
prestaciones de los gobernantes electos y altos funcionarios públicos; ya que la participación ciudadana
llegaría a hacerse cargo de varias tareas de manera honoraria, en muchos de los acuerdos que el gobierno
llegue a concertar con la sociedad civil, lo que permitiría a los gobernantes y funcionarios llegar a reducir su
horario de trabajo.
Ahora bien, los requisitos mínimos para conformar un ambiente cultural comunitario en el que pueda
desenvolverse un capitalismo sano ya sin la actual carrera consumista y depredadora del medio ambiente,
requieren de un gobierno comunitario, es decir, voluntario, en base a su capacidad para resolver los
problemas reales de la sociedad, en que los candidatos a gobernar sólo pretendan llevar a buen término tan
delicada misión sin buscar ganancias materiales personales. Lo que significa que los gobernantes electos
popularmente debieran ser honorarios, es decir, no percibir ningún salario.
Los apologistas del Capitalismo de Estado (que presuponen el manejo discrecional de los recursos
públicos) aseveran que los gobernantes deben tener un salario digno y regulado, mientras que los
apologistas del Capitalismo de Libre Mercado (Neoliberalismo), piensan que para que gobiernen las
personas más capacitadas, sus ingresos deben competir con los de la iniciativa privada (mediante el
manejo discrecional de los recursos públicos, en que radica el principal interés en gobernar y el primer
recurso para los delitos electorales).
La solución es que los gobernantes sean honorarios y honestos (consensuen sus decisiones y manejo de
recursos públicos), ya que dar las órdenes y ejercer el poder tiene en sí mucho más valor (naturalmente los
gobernantes siempre mantendrán un nivel mínimo de libertad de poder antes de cualquier consenso, y este
nivel mínimo llega a ser tan grande como la falta de participación social lo permite), sobre todo si se practica
en bien de la nación y la humanidad, y necesitamos gobernantes ejemplares, que como principales líderes
de la nación vayan a la vanguardia del desarrollo sustentable que la humanidad necesita, que con su
ejemplo pongan freno a la actual carrera consumista y depredadora de nuestra civilización.
23
Los gobernantes que no posean empresas u otros ingresos dependerían de la colaboración voluntaria de
la comunidad, extendiéndose esta práctica a la población desempleada a cambio de que realice actividades
de servicio a sus comunidades, en general derivadas del consenso que realicen las autoridades con la
sociedad civil.
Supuestamente los gobernantes y funcionarios no deben recibir regalos ni dinero de los ciudadanos, pero
suelen hacerlo de manera privada, y mediante el consenso de sus decisiones y manejo de recursos
públicos, la sociedad civil verificaría que no realizaran ningún beneficio a favor de alguna persona o
empresa en lugar de a otros sin un motivo válido y justo.
Para superar las modernas y globales problemáticas se requiere de la generalización de la generosidad y
la nobleza humana, las cuales sólo pueden ser lideradas por nuestros gobernantes, convirtiéndose como
honorarios y honestos en los líderes morales que la humanidad necesita para superar el actual paradigma
materialista que tiene desahuciada a nuestra civilización.
Se podrá así continuar con el adelgazamiento del Estado, pero ya no solamente con la participación de
capital privado, sino también mediante la constitución de empresas cooperativas con presidentes honorarios
y honestos, dispuestos a seguir el ejemplo de los gobernantes, consensuando con sus socios la toma de
decisiones y manejo de recursos de la sociedad cooperativa.
Consecuentemente se tendrán que hacer diferentes reglamentaciones, como que los líderes sindicales
también sean honorarios y honestos, desapareciendo las cuotas sindicales obligatorias de los pagos
salariales a los trabajadores, quienes podrán hacer las cuotas que gusten a titulo voluntario. De esta
manera podrán desaparecer las oligarquías que se han formado en diferentes sindicatos.
Gobernantes honorarios y sociedad civil podremos superar las crisis económicas, de inseguridad,
ambiental y climática mediante una economía solidaria en coexistencia con el libre mercado. Ya que ha
quedado claro que por sí sólo el actual sistema económico mundial es inestable y no podría salir de su
proceso de crisis recurrentes.
La Comunidad Económica Europea se creó con la finalidad de organizarse para el bien común de sus
naciones, asumiendo compromisos a cumplir por el bienestar de todas. Sin embargo algunos países
miembros siguen cayendo en crisis económicas que ponen en peligro a toda la zona y al mundo. ¿Porqué
esperar llegar a esto para tomar nuevas medidas comunitarias, cuando previamente podrían aplicarse al
interior de cada país mediante gobernantes honorarios y honestos?
El capital ya no debe utilizarse para la especulación y el derroche. En el caso de los legisladores que
llegan a utilizar parte de su salario en la satisfacción de algunas demandas de sus representados, se las
ingeniarán para que mediante la vía comunitaria puedan satisfacer incluso a un número mucho mayor de
ciudadanos.
Entre las raíces culturales más arraigadas del mundo moderno se encuentra el mesianismo, pero Mesías
no significa más que rey, y corresponde a nuestros gobernantes, a quienes supuestamente elegimos
democráticamente, convertirse en los auténticos líderes morales y espirituales que la sociedad civil
requiere.
e) Cooperativas de empresas
El Estado podría entonces promover la economía mixta monetaria y comunitaria, mediante la publicación
transparente y accesible de la información de los mercados y facilitando a la sociedad civil la optimización
de sus intercambios económicos hasta permitir que varios de ellos puedan llegar a prescindir de la
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utilización de papel moneda al completar círculos de producción y consumo entre las empresas
participantes.
Impulsando la constitución de cooperativas de intercambio entre todo tipo de empresas, que mediante el
diseño de diversas formas de crédito comunitario, realicen las operaciones económicas necesarias
cubriendo periódicamente los adeudos mediante trabajos de reconstrucción ambiental, reciclaje de
materiales, producción de composta, acondicionamiento ecológico de las empresas, reforestación de
bosques y baldíos, producción agropecuaria de bienes escasos, etc.; que la corporación cooperativa tenga
previamente proyectado.
Para empezar el gobierno puede exentar de impuestos a las operaciones económicas comunitarias,
como principal promotor de su utilización, por su potencial para el saneamiento y fortalecimiento de la
economía y productividad local y nacional, haciéndolas menos vulnerables a las crisis de la economía
exterior. Después podrá cobrar los impuestos a toda la cooperativa mediante los bienes y servicios de
algunas de sus empresas, a favor de alguna institución gubernamental o de una obra pública, etc.
Internamente las empresas de cada cooperativa igualarían su participación mediante sus bienes y servicios
y la reconstrucción ecológica y producción agropecuaria.
El medio para la regulación de la economía comunitaria, sería el trabajo de reconstrucción ambiental y de
producción agropecuaria necesaria, administrado con la debida plusvalía por las cooperativas de empresas
para saldar los adeudos que queden entre sus miembros derivados de los continuos créditos comunitarios
necesarios para implementar las diversas operaciones económicas. Todo esto podría desarrollarse sólo con
una necesaria transparencia mediante la supervisión tanto del Estado como de la sociedad civil por medio
de sus asociaciones civiles y organizaciones no gubernamentales.
f) Solución comunitaria a la problemática actual
Se requeriría de una constante disciplina de participación social, de austeridad y racionalidad en el
manejo y conservación de los recursos. Que podría implementarse a partir del sistema educativo,
involucrando a los padres de familia a participar más activamente para una educación comunitaria de sus
hijos, de manera que no tengan que colaborar necesariamente con cuotas fijas en papel moneda, sino que
tendrían la opción de colaborar con servicios de su profesión, empresa u oficio, tanto para el mantenimiento
de los muebles e inmuebles de la escuela, como para la implementación de nuevos objetivos de
enseñanza, dependiendo de las iniciativas de la sociedad de padres de familia de cada escuela, que
tendrían que ser apoyadas y reconocidas documentalmente por maestros y autoridades educativas.
Puesto que las cuotas de los padres de familia en las escuelas públicas se manejan como voluntarias, en
realidad la educación pública no es gratuita, sino comunitaria, ya que la colaboración comunitaria se basa
en la participación voluntaria de cada individuo. Resultando necesario actualizar esta realidad en la
legislación para que los padres de familia puedan tener mayor voz y voto en la dirección de las escuelas de
sus hijos y la educación pública pueda competir con la privada mediante la mayor participación de los
padres de familia, que en cada escuela financiarían comunitariamente con el Estado los aumentos en
clases de lenguas extranjeras, manejo de tecnologías y actividades deportivas, artísticas y comunitarias
(extendiendo a lo más en una hora y media diaria el horario normal), lo cual permitiría que sea reconocido y
mucho mejor ejercido el importante papel de los padres de familia.
Esto motivaría a los padres de familia a empezar a generar pequeños mercados comunitarios de trueque
de bienes y servicios, que luego podrán conectarse a mercados más amplios conforme vayan apareciendo
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nuevas empresas híbridas: financiadas tanto con capital monetario como con capital comunitario, es decir,
por la disposición de varias comunidades e individuos a colaborar para el buen funcionamiento de cada
empresa necesaria para el bien común. Las microempresas podrían afiliarse a diversas cooperativas de
empresas para el intercambio comunitario de sus bienes y servicios, desde el ámbito regional hasta el nivel
de las grandes corporaciones internacionales.
La organización comunitaria tendrá que mantenerse bien estructurada, con los necesarios representantes
vecinales, sindicales, escolares, empresariales, etc., de manera que puedan ser cubiertas las necesidades
básicas de cada familia e individuo. Siendo necesario retomar los valores espirituales de las religiones, que
consignan una vida de austeridad y ascetismo, para de este modo poder alcanzar un equilibrio ecológico
entre la naturaleza terrestre y el ser humano como especie dominante.
Para que la humanidad pueda salir adelante es necesario que conquiste un “nuevo continente”, y no hay
otro a la vista más que la dimensión espiritual, que le permitirá evolucionar cambiando el valor de la
propiedad y riquezas materiales por el de la responsabilidad de la existencia física, sólo así podrá escapar
de su autodestrucción.
La organización comunitaria permitirá que la población económicamente activa que se encuentre
desempleada pueda satisfacer las necesidades básicas de su familia participando en las labores
comunitarias de las distintas comunidades en que se desenvuelva. Lo que a la vez permitiría hacer una
propuesta de amnistía a quienes han incurrido en actividades delictivas, sin ser perseguidos ni investigados
si abandonan tales actividades para integrarse a la sociedad mediante la colaboración comunitaria.
Una satisfactoria fortaleza mundial tendría que basarse en la autosuficiencia de cada nación para
satisfacer sus necesidades básicas y en su capacidad de auxiliar a cualquier otra ante cualquier
contingencia. Tal autosuficiencia requerirá de cierto grado de independencia económica, la cual sólo podrá
estabilizarse mediante la adecuada participación de una economía comunitaria.
Con los gobernantes electos honorarios y honestos, bajarán substancialmente los salarios más altos de
los funcionarios públicos, lo que permitirá, entre otros rubros, utilizar ese presupuesto para la contratación
de maestros y profesionistas que cubrirán los nuevos grupos escolares de todos los niveles que se abran
por motivo de limitar su número de alumnos a 20 por cada grupo, para eficientar la educación permitiendo a
cada maestro conocer a cada uno de sus alumnos y participar eficazmente en su mejor desarrollo personal.
Por cada cuatro maestros, que atenderán cada uno a lo más a cuatro grupos diariamente, tendrá que
haber un pedagogo que supervise su actualización y el progreso de sus grupos, a quienes también dará al
menos una clase por quincena, y por cada 20 pedagogos tendrá que haber un supervisor docente que lleve
las estadísticas de los avances y formule las nuevas estrategias necesarias en coordinación con otros
supervisores docentes de su área y zona.
La organización comunitaria de la sociedad civil podrá colaborar eficazmente en todos los niveles de la
Administración Pública, particularmente en la Administración de Justicia, ayudando a superar el estado
estancado en que se encuentran la generalidad de los procesos, apoyando en la realización de proyectos
como los Juicios Orales.
8. Origen de la Investigación
Las propuestas aquí vertidas, resultados de una investigación interdisciplinaria, corresponden a una
ideología liberal, en la convicción de que el socialismo ha dejado de ser revolucionario y podrían renovar y
enriquecer a la política neoliberal para superar la dictadura del capital a que se ha reducido a causa de una
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limitada visión económica restringida al monetarismo.
Las distintas especialidades o disciplinas científicas han surgido como resultado del proceso analítico del
método científico y gracias a ellas se han alcanzado grandes resultados, pero el conocimiento humano
también requiere de síntesis simplificadoras, lo cual es la labor del enfoque interdisciplinario, auxiliado de
herramientas como la teoría general de sistemas.
Sin embargo en general se requiere de un equipo de especialistas en diversas áreas para abordar una
investigación interdisciplinaria, y aunque no se trata más que de seguir aplicando el mismo método
científico, se requiere de un objetivo bien concreto y definido, financiable por un corporativo empresarial o
un instituto de investigación lo suficientemente interesado.
Por lo que ese objetivo difícilmente podría ser el expresado por la siguiente pregunta de investigación:
¿Cómo debería rediseñarse la actual organización social para planificar la superación de los embates del
cambio climático?
Y ha resultado más factible ser abordado por un sólo investigador independiente con una formación en
matemáticas, o arte de plantear y resolver problemas utilizando los mayores niveles posibles de abstracción
y generalidad, rebasando los límites actuales de cualquier centro de investigación relacionado.
En 1992 fundó la asociación civil Universidad Comunitaria, como resultado de un ciclo de conferencias
sobre Cosmovisión Mestiza que presentó en el Museo de la Ciudad de México en el marco del Quinto
Centenario del Encuentro de dos Mundos, título que mediaba entre las visiones opuestas del
Descubrimiento de América y Quinientos años de Resistencia Indígena.
En compañía de miembros y simpatizantes de la asociación visitaban los fines de semana a la
comunidad de Amatlán de Quetzalcóatl en el Estado de Morelos, en la práctica de un turismo activo que les
llevaba a convivir con algunas familias de la comunidad apoyando sus labores campesinas. En el mismo
plan visitaron los Altos de Chiapas durante dos semanas en las vacaciones de fin de año de 1992 y de
Semana Santa de 1993. En agosto ya no fue posible realizar el plan de visitar a las comunidades
tarahumaras, perdiéndose el contacto entre los integrantes de la asociación.
Entonces el autor decidió restringir temporalmente la actividad de la Universidad Comunitaria a un trabajo
de investigación personal para redefinir sus objetivos. Terminó sus estudios de licenciatura y maestría en
Físico Matemáticas en el Instituto Politécnico Nacional, se casó y cambió su lugar de residencia al Estado
de Colima, en donde ha continuado con su investigación independiente para promover la organización
comunitaria de la sociedad civil en busca de una solución general a la problemática ambiental y social.
En esta búsqueda encontró diversos indicios que lo llevaron a conjeturar que ya existió una civilización
mundial a finales del Pleistoceno, que desapareció junto con muchas especies animales a partir del
calentamiento global de hace 14 mil años y la serie de cambios y cataclismos climáticos que determinaron
el fin de dicho período geológico hace 10 mil años; cuyos sobrevivientes fueron los iniciadores de
prehistóricas religiones apocalípticas y mesiánicas de sacrificios humanos que todavía existían hace cinco
siglos en el México antiguo a la espera de la Civilización Occidental.
Ante las crisis económicas y consecuentes escaladas de violencia, así como de las recurrentes
inundaciones y temperaturas extremas provocadas por el cambio climático, la sociedad civil se ve en la
necesidad de construir por sí misma una estrategia de solución, y la presente propuesta ciudadana va
encaminada a participar en ella.
Somos una humanidad esencialmente mestiza, pues el mestizaje no es solamente carnal, sino también
cultural o espiritual, lo cual jugará un papel determinante para poder superar la amenaza de otro apocalipsis
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ambiental, mediante la reactivación de la organización comunitaria (estructurada por comunidades) de la
sociedad civil, que nos permitirá mediante la búsqueda del bien común, coordinarnos con el actuar de las
distintas comunidades e individuos, independientemente de sus creencias religiosas, para que podamos
llegar a sumar y multiplicar los esfuerzos necesarios para lograr revertir el actual proceso de polución y
agotamiento de los recursos naturales.
El primer párrafo del Resumen de esta narrativa es una mínima presentación de su temática, mientras
que los capítulos anteriores constituyen una completa argumentación para establecer la tesis de la
existencia de una prehistórica civilización mundial colapsada por los cataclismos climáticos que marcaron el
final del Pleistoceno y su trascendencia a la Historia Universal y futuro de la actual humanidad, que como
resurrección de aquella logrará superar la actual amenaza ambiental y climática mediante una evolución
social.
Cómo un proyecto suplementario, para ilustrar mejor esta tesis mediante otros datos encontrados por el
autor, entre los muchos que existen y manejan diversos investigadores interesados en el tema, pretende
construir una siguiente argumentación más documentada de creación colectiva.
Aunque también este nuevo proyecto de investigación interdisciplinaria quedaría enmarcado en el área de la antropología social, es la emergencia ambiental y climática, y por lo tanto las ciencias ambientales, las que motivan el rediseño de los paradigmas que han regido las interpretaciones de la arqueología y la antropología sobre el desarrollo del homo sapiens durante sus 200 mil años de existencia, así como de las políticas públicas necesarias para garantizar el desarrollo sustentable.
http://ecocidio.sitiosprodigy.mx
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