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Polticas localesde Juventud

Experiencias en el Cono Sur

PROSU

R

Sergio Balardini

Oscar Dvila Len

Alvaro Paciello

Raquel Souza

Maria Virgnia de Freitas

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Poltica Comercial:

sus lmites ante los desafos sociales

y ecolgicos globales

Michel Dauderstdt

Flexibilizacin y regulacin

del mercado del trabajo:

Experiencias internacionales y opciones

Ulrich Walwei

Latinoamrica

hacia la economa mundial:

Condiciones para el desarrollo

de la "competitividad sistmica"

Dirk Messner

El Municipio

y la Democracia Moderna:

10 Tesis

Ricardo Solari y Santiago Escobar

Coordinacin Macroeconmica

en el Mercosur:

Ventajas, desventajas y la prctica

Marcelo Garriga y Pablo Sanguinetti

Los desafos despus de Beijing

en los pases del Mercosur

Margarita Percovich y Rosario Aguirre

Liberdade Sindical

nos pases do Mercosul e Chile

Jos Francisco Siqueira Neto

La Modernizacin del Estado

y la Gerencia PblicaCarolina Toh y Ricardo Solari

La cuestin laboral en el Mercosur:

Procesos, opciones y posibilidades

Guillermo Campero

Reformas a los sistemas

de Pensiones en los pases

del Mercosur y Chile

Jaime Ruiz-Tagle

Evolucin y Reforma

de los Sistemas de Proteccin

de la Salud en los pases

del Mercosur y Chile

Cecilia Acua

Los pases del Mercosur

buscan su lugar en el mundo.

El ALCA y la nueva agenda

de negociaciones internacionales

Guillermo Rozenwurcel

El impacto de la globalizacin

en los mercados laborales.

Polticas de empleo en los pases

del Mercosur y ChileCecilia Montero y Pablo Morris

Desempleo Juvenil en el Cono Sur

Causas, consecuencias y polticas

Vctor E. Tokman

La Seguridad ciudadana

como poltica de Estado

S. Escobar - J. Muiz - R. Sanseviero

M. Sain - J. M. Zacchi

Los artculos que publicamos son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no repre-

sentan necesariamente el pensamiento de la Fundacin Friedrich Ebert.

Se admite la reproduccin parcial o total de los trabajos, como asimismo de sus ilustracio-

nes, a condicin de que se mencione la fuente y se haga llegar copia a la redaccin.

Todas estas publicaciones estn disponibles en internet

www.fes.org.ar

Publicacionesde la Serie PROSUR

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1. Polticas locales de juventud en municipios argentinosEn el caso argentino, la evolucin y desarrollo de las reas municipales de juventud, comienza conel retorno de la democracia en diciembre de 1983. Recibe un fuerte impulso en los aos 90, al

calor de las "reformas" y de la relevancia que adquiere la cuestin de desarrollo local. Recono-ciendo la diversidad implcita en el universo de estas instituciones, parece haber llegado el tiem-po en que la voluntad poltica de los gobiernos locales alienta su desarrollo, retomando iniciativase impulsando nuevas acciones. Estas instituciones, en el futuro prximo, debern esforzarse en suarticulacin con otros mbitos de gestin que llevan adelante numerosas iniciativas destinadas alos jvenes. El presente, es de extensin de estas polticas; el futuro, deber ser de su profundiza-cin.Por Sergio Alejandro Balardini, pgina 7

2. Centro de Referncia da Juventude de Santo AndrInaugurado em 1998, o Centro de Referencia da Juventude - CRJ de Santo Andr uma experin-cia pioneira, no Brasil, no campo das polticas pblicas ancoradas no reconhecimento dos jovensenquanto sujeitos de direitos. Fruto da reivindicao de grupos e organizaes juvenis, foi consti-tudo como um equipamento pblico voltado ao exerccio e ao enriquecimento da cidadania dos

jovens, cumprindo funes de informao, formao, expresso, convivncia e participao/inter-locuo. As autoras, integrantes da equipe da Ao Educativa, ONG parceira da Prefeitura Muni-cipal de Santo Andr, puderam acompanhar sua criao e desenvolvimento no perodo de 1997 a2004 e, a partir desse ponto de vista, recuperam a histria do equipamento e analisam seus avan-os, dificuldades e desafios.Por Maria Virgnia de Freitas e Raquel Souza, pgina 17

3. La gestin local de juventud en ChileLa evolucin y desarrollo de las reas municipales de juventud, en lo que podemos sealar como"la dcada larga" en Chile (1990-2005), ha sido de marchas y contramarchas, de avances y retro-cesos, no habiendo un comn denominador en el concierto general de estas reas en el pas, enten-didas como las instancias volcadas a la gestin local de juventud. De ese modo surgen algunos ele-mentos de inters en cuanto a los roles que cumplen y pueden potenciarse desde las reas de juven-tud municipal, como a su vez, el campo posible de despliegue de sus intervenciones a nivel de pol-ticas, relacionamientos con actores diversos y de ofertas programticas dirigidas a los jvenes delespacio local. A su vez, en el texto se releva la importancia del espacio local en el plano de las pol-ticas de juventud, pues precisamente el diseo y puesta en prctica de polticas locales de juventuddebiera ser uno de los mayores desafos y objetivos a lograr por parte de la institucionalidad pbli-ca que se enfoca hacia el mundo juvenil. Por Oscar Dvila Len, pgina 33

4. La experiencia de la Unidad Temtica de Juventud - MercociudadesEl presente trabajo est centrado en la labor de las reas locales de juventud de los municipios delMERCOSUR y en su coordinacin entablada en forma de red, a partir de la Unidad Temtica deJuventud en Mercociudades. Se plantean las principales caractersticas de sus programas y accio-nes, basadas en la promocin de los derechos y la ciudadana juvenil y en un modelo con partici-

pacin de amplios sectores de las comunidades locales. Su labor puede ser una gua para el diseoy ejecucin de polticas pblicas de juventud integrales y con proyeccin a las estructuras delMERCOSUR, a partir del reconocimiento de polticas especficas y dirigidas a los sectores msvulnerables de los pases del Cono Sur.Por Alvaro Paciello, pgina 45

SINTES

IS

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INTRODUCCIN

Llamamos poltica de juventud a todaaccin articulada que se oriente tanto allogro y realizacin de valores y objetivossociales referidos al perodo vital juvenil,como as tambin, a aquellas accionesorientadas a influir en los procesos desocializacin involucrados.

A partir de la realizacin del Ao Interna-

cional de la Juventud (AIJ), en 1985, cuan-do los Estados nacionales se comprometie-ron en la realizacin de una serie de activi-dades e iniciativas destinadas a la juven-tud, se han venido diseando diversasestrategias y creando instituciones pbli-cas que dieran cuenta de la implementa-cin de polticas y acciones orientadas aimpactar positivamente en el presente yfuturo de los jvenes. En este marco, pocoa poco, fueron, tambin, crendose estruc-turas en el nivel municipal, acumulandoexperiencias y generando conocimientoacerca de la instalacin de polticas pbli-cas de juventud en el nivel local.

Por tratarse el municipio de una instancia

clave, debido a su proximidad con los ciu-dadanos en general, y con los jvenes en

particular, estas polticas adquieren unaimportancia relevante en la construccin deuna sociedad participativa y de derechos.

La FES viene realizando en el Cono Sur(Argentina, Brasil, Chile y Uruguay), unimportante trabajo en el campo de las Pol-

ticas Pblicas de Juventud, cooperandocon diversas instituciones y organismos,entre ellos, la Unidad Temtica Juventudde las Mercociudades, constituida porreas de juventud de municipios que inte-gran la principal red de municipios delMercosur.

Esta publicacin, que se inscribe en elapoyo a dichas iniciativas, incluye cuatrodocumentos centrados en organismos de

juventud locales, recorriendo experiencias,actividades y modelos de gestin, constitu-yendo, cada uno de ellos, una herramientade trabajo para quienes estan comprometi-dos en el desarrollo de las Polticas Pbli-cas de Juventud.

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"Siendo una parte principal de la educacin

que le est encargada la instruccin de la juventud

en oficios tiles, la facilitar promoviendo

la industria y el comercio segn la circunstanciade la Ciudad y su Territorio".

"Proyecto de Nuevas Ordenanzas

para el Cabildo de Buenos Aires" (1812)1.

Si realizramos un breve recorrido a travsdel tiempo, la historia nos mostrara quetodas las sociedades han expresado, en sumomento, su preocupacin por el futuro, yque esta preocupacin se ha orientado,especialmente, hacia las nuevas generacio-nes. Si miramos, en cambio, ms cerca enel tiempo, podremos ver que desde el naci-miento de la organizacin nacional, se hanrealizado acciones e incluso, propuesto

polticas destinadas a impactar en los jve-nes, en el supuesto de que las mismas sonrequisito fundamental para asegurar lareproduccin del conjunto social.

Sin embargo, es recin con las transforma-ciones propias de la "modernizacin" que"la juventud" se constituye en un actorsocial, cultural y poltico relevante, a la parque uno de los centros de preocupacin dela sociedad, de su presente y de su futuro.

En consecuencia, la sociedad, ya no a tra-vs de "sociedades de beneficencia", sinoa travs de su organizacin poltica, esdecir, del Estado, comienza a desarrollaruna serie extensa y gradualmente articula-da de iniciativas que darn cuenta de dicha

preocupacin y de las nuevas demandasque la complejidad social plantea.

En esta perspectiva, los compromisos de laconstruccin del "Estado de Bienestar" enlos aos de posguerra, es decir, en la segun-da mitad del siglo XX, devendrn en ungradual reconocimiento de la cuestinsocial. Pero ser en los aos setenta, cuandola participacin juvenil, ascendente e influ-yente, expresada en acciones de moviliza-cin social y poltica, obligar a su recono-cimiento explcito, que se traducir en lacreacin del primer mbito institucionalespecfico que remitir a la juventud entanto tal. Lamentablemente, el infaustogolpe militar del ao 76, al interrumpir elcauce constitucional, ech por tierra estaincipiente experiencia junto con la institu-cionalidad democrtica. Peor an, durantelos aos de plomo, las polticas destinadas alos jvenes estuvieron asociadas a la censu-

ra, a la represin y a la muerte, por unaparte; y, por otra, al entretenimiento sincompromiso y la bsqueda de apoyo al pro-ceso militar. En este marco, podemos obser-var que, hasta avanzados los aos 80 es pal-

pable la ausencia de tematizacin concientey progresista de la condicin juvenil y,

1 DE LAS ACCIONESPARA JOVENES

A LAS POLITICASDE JUVENTUD

1 Citado en: FRAGA, Diego; (1999).

Polticas locales de juventud en municipios argentinosPor Sergio Alejandro Balardini

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correlato de ello, la ausencia de programasy polticas explcitas, dirigidas a la juven-tud. De hecho, dos sern las circunstancias

fundantes que revertirn esta situacin ydarn lugar al surgimiento de las polticaspblicas de juventud modernas:

1) La recuperacin de la democracia(diciembre de 1983). En la medida enque estas polticas incluyen un compo-nente de participacin juvenil y debatede ideas que no puede tener lugar en unmarco poltico autoritario o dictatorial,razn por la cual, no fue sino hasta larecuperacin de la democracia cuandose crearon los primeros organismos de

juventud modernos (Subsecretaras,reas, Institutos, etc.).

2) El Ao Internacional de la Juventud(1985). Un factor institucional importan-te, que oper en el desarrollo de las pol-

ticas pblicas de juventud, fue la procla-macin, por parte de las Naciones Uni-das, del ao 1985 como Ao Internacio-nal de la Juventud (AIJ), que estimul laconstitucin de instancias estatales quedieran cuenta de las actividades propues-tas para su celebracin. En este sentido,el AIJ "actu de acicate, motiv la reali-zacin de estudios de juventud, y empu-

j la creacin de instancias organizativasestatales que surgen, en principio, comorespuesta al llamado de la ONU, talcomo sucediera con el Comit Nacionalde Coordinacin para el AIJ en julio de1984. El referido Comit fue integrado

por un amplio espectro de organizacio-nes juveniles y comprenda la participa-cin de distintas reas del Estado Nacio-

nal. Estos esfuerzos confluyeron poco apoco, en la creacin de OrganismosGubernamentales de Juventud (OGJ) anivel local, provincial y nacional. Desdeentonces se han ido diseando con disparsuerte y eficiencia distintos organismos,

programas, proyectos y acciones orienta-das a los jvenes."2

Por otra parte, una importante legitimacinnormativa, se produjo en los aos noventaen ocasin del proceso de reformas de lasconstituciones provinciales, en algunoscasos, por exigencias de modernizacin, y,en otros, para ponerse en lnea con lareforma constitucional (nacional) del ao1994. La oportunidad de realizar modifica-ciones a los textos constitucionales seconstituy en un marco propicio para inte-

grar una visin respecto a los jvenes, quehasta el momento estaba ausente de todoarticulado. Una revisin somera nos per-mite advertir un claro avance en su reco-nocimiento. Los siguientes ejemplos dancuenta de esta circunstancia3.

A.Articulados de proteccin

de los derechos de los jvenes:

La Rioja: Art. 36; "Todo nio o ado-lescente tiene derecho a...".

San Juan: Art. 55; "Los jvenesgozan de garantas especiales...".

Catamarca: IV De la Juventud, inci-so 3; "la juventud tiene derecho...".

2 BALARDINI, Sergio; (2003).3 FRAGA, Diego; (1995).

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B.Articulados de promocin

de polticas dirigidas a los jvenes:

Crdoba: Art. 26; "Los jvenes...

tienen derecho a que el Estado pro-mueva...". Jujuy: Captulo tercero, artculo 47;

"Garantas para la juventud, Inciso2: El Estado deber desarrollar pol-ticas para la juventud ...".

Ro Negro: Art. 34; "El Estado pro-cura la formacin integral y demo-crtica de la juventud...".

Salta: Art. 33; "De la juventud. Elestado promueve el desarrollo...".

San Luis: Art. 50; "El estado pro-mueve la participacin de la juven-tud en la construccin de una socie-dad ms justa...".

Santiago del Estero: Art. 81; "ElEstado impulsara la participacin dela juventud en la construccin deuna sociedad ms justa...".

Tucumn: Art. 35; "Los nios yjvenes sern objeto de una protec-cin especial del Estado...".

C.Articulados que combinan proteccin

y promocin:

Tierra del Fuego: Art. 19; "Los jve-nes tienen derecho a que el Estado

provincial promueva su desarrollo

integral... en la construccin de unasociedad mas justa, solidaria ymoderna".

Una mencin particular merece el caso de

la Ciudad Autnoma de Buenos Aires, porel explcito garantismo de su articulado y su

perspectiva manifiestamente participativa.

Art. 40; "La Ciudad garantiza a la juven-

tud la igualdad real de oportunidades y el

goce de sus derechos a travs de acciones

positivas que faciliten su integral inser-

cin poltica y social y aseguren, median-

te procedimientos directos y eficaces, su

participacin en las decisiones que afec-

ten al conjunto social o a su sector.

Promueve su acceso al empleo, vivienda,

crditos y sistema de cobertura social.

Crea en el mbito del Poder Ejecutivo y en

las Comunas, reas de gestin de polticas

juveniles y asegura la integracin de los

jvenes.

Promueve la creacin y facilita el funcio-

namiento del Consejo de la Juventud, de

carcter consultivo, honorario, plural e

independiente de los poderes pblicos."4

Consecuencia de este proceso, hoy habla-mos tanto de "poltica de juventud" en tr-minos genricos, como de "polticas de

juventudes" cuando queremos enfatizardos hechos: 1) que hablamos de una diver-sidad de trayectorias biogrficas juveniles(y marcos estructurales) no reductibles aun conjunto homogneo; y, 2) que se trata

de la puesta en marcha de una variedad deinstancias estatales que promueven unaserie de iniciativas autnomas en diferen-tes niveles de gestin y diverso (en general

bajo) grado de articulacin.

4 El Consejo de la Juventud, acaba de ser sancionado por ley de la legislatura local (diciembre 2005). Elao 2006 deber ser el de su constitucin, que inevitablemente impactar en el campo de gestin de las pol-ticas de juventud.

Serie PROSUR -Polticas Locales de Juventud. Experiencias en el Cono Sur

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Finalmente, en relacin a los objetivos deuna poltica pblica de juventud, una enu-meracin completa, incluira una extensa

gama de tpicos que atravesaran, segura-mente, a todos aquellos temas de interspara la sociedad. Empero, bsicamente,agruparemos los objetivos generales endos tipos:

La promocin del desarrollo juvenily de la participacin de los jvenesen el diseo de la sociedad en queviven, en la medida que les atae, yofrecindoles posibilidades ciertasde plantear y resolver sus proble-mticas.

Como alternativa compensatoria deldficit social. Asistencia, bienestar,"ayudas socializadoras", (educacin,empleo, tiempo libre, recreacin,

proteccin, etc.) Se incluye en esta

perspectiva, el amplio arco que vadesde aquellas polticas netamente

paternalistas y asistencialistas hastael apoyo y estmulo de emprendi-mientos locales y autogestivos.

Como ya fuera sealado en muchos textos,las polticas de carcter local, adquieren

una importancia clave como herramientaspara la construccin de una sociedad parti-cipativa, democrtica y de derechos. Entre

otras razones, por ser las instituciones msprximas a sus destinatarios, en la medidaen que desarrollan sus actividades enmbitos territoriales especficos que per-miten una mayor y directa interrelacincon los ciudadanos (y, para el caso, con los

jvenes). Justamente por ello, son quienesestn en mejores condiciones para identifi-car la problemtica e intereses juveniles

propia de su distrito, departamento oregin, y trabajar por su inclusin e inte-gracin.

En el marco del desarrollo de las polticaspblicas de juventud, ya en el ao 1993, elInstituto Nacional de la Juventud5, reco-noca el potencial de estas instituciones y

propona, con acciones de rectora yapoyo, su creacin, como se concluye de la

propuesta que realizara a los municipios:

"Por qu es importante que su municipioposea un rea de juventud?Es importante que su municipio posea unrea de juventud: Porque le facilitara el acceso a los

servicios y programas financiadosdesde el INJ, con los cuales podra

atender ms eficazmente las necesi-dades de los jvenes de su municipio.

Porque as podra acceder con enti-dad propia a los espacios de defini-cin de las polticas sociales de

juventud, al Consejo Federal de

2 POLTICAS LOCALESDE JUVENTUDEN ARGENTINA

5 Antecedente jurdico de la actual DINAJU.


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Juventud, y a travs del INJ a lasfacilidades que pueden brindar lasorganizaciones internacionales que

trabajan en este campo. Porque seguramente existe un

potencial humano de jvenes, den-tro de su actual estructura munici-

pal, dispuestos a trabajar al serviciode su propia generacin."6

Como hemos podido ver, en el plano de laspolticas locales, si bien hallamos algunosantecedentes en la que llamamos etapamoderna de las polticas de juventud a par-tir del retorno a la vida e institucionesdemocrticas el 10 de diciembre de 1983,las iniciativas ms relevantes en trminosde proyeccin, dinmica y sustentabilidad,se desarrollaron a partir de los aos noven-ta, cuando con las reformas de estado y elnfasis puesto en el desarrollo localadquieren una entidad de la que, hasta ese

entonces, carecan.

En definitiva, el desarrollo de las polticaspblicas de juventud locales y la creacinde organismos especficos para atender lasnecesidades de los jvenes se incrementagradualmente, si bien ms en extensinque en profundidad y articulacin.

Por supuesto, hay que reconocer la diver-sidad de instituciones locales (municipios)que existen en el pas, que obliga a no rea-lizar comparaciones o matrices apresura-das. Teniendo en cuenta esta realidad,segn el nico relevamiento del que dispo-

nemos, realizado desde la DireccinNacional de Juventud, en el ao 2000,podemos observar, que:

a) En las ciudades con ms de 10.000 habi-tantes del total del pas, encontramos quehay creadas reas de juventud en el 31,5%de los casos. No las hay en el 54%. En elrestante 14,5% de los casos, no logramosobtener la informacin, por lo que creemosque estamos ms cerca de su inexistencia.

b) En tanto, en las ciudades con ms de100.000 habitantes, el porcentaje de reasde juventud existentes, se eleva al 44,5%.

c) Y en aquellas que tienen entre 100.000y 50.000, la cifra es muy prxima a laanterior (42,5%).

Por lo que podemos concluir que el "corte"en cuanto a la creacin y existencia de las

reas de juventud parece estar en el lmitede los 50.000 habitantes, en la medida enque esta presencia disminuye a algo msde la mitad en las localidades entre 10.000y 50.000 (27%).

Desde luego, estas cifras slo nos hablande la creacin de reas de trabajo y no delos recursos asignados, que suelen ser

limitados en la mayora de los casos, ni delas acciones impulsadas, ni de su eventualimpacto. Sin embargo, representan unaclara seal de voluntad poltica.

Haciendo una breve relacin de las instan-

6 INJ; 1993. Material de difusin.


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cias de juventud que adquirieron mayorrelieve y desarrollo a la fecha, no podemosdejar de nombrar, a modo de muestra no

exhaustiva, al Centro de la Juventud deRosario, que ya realiz su "13er. Encuen-tro de Jvenes" (evento sociocultural conuna amplia gama de actividades), su pro-grama de informacin juvenil, el programade Inclusin Socioeducativa, y, especial-mente, en lnea con los ejes estratgicosdel conjunto de la gestin, el "PresupuestoParticipativo Joven"7 (herramienta con lacual los jvenes deciden cmo se va a gas-tar parte del presupuesto municipal); laCoordinacin General de la Juventud de laciudad de Mendoza, con sus acciones entemas de derechos de los jvenes y elacompaamiento a las redes juveniles, ascomo el innovador Centro de Experimen-tacin y Desarrollo Creativo (CEDEC) delque participan jvenes realizadores, artis-tas y creativos; la Oficina de Juventud, del

municipio de Morn8, relativamentenueva, con la realizacin de los festivales"La Minga", y su trabajo en temas deorientacin socioeducativa a los jvenes yen cuestiones de empleo; el rea de Juven-tud de la ciudad de San Fernando, con sus

parlamentos estudiantiles9, iniciativas depromocin y derechos, y sus numerosasacciones socioculturales; la Direccin

General de la Juventud de la Ciudad deBuenos Aires, con el programa de apoyo aemprendimientos juveniles, de derechos

de los jvenes, de Orientacin Vocacionaly Ocupacional, las Casas de la Juventuddescentralizadas, la distribucin gratuita

de preservativos, y los Centros de Preven-cin, Asesoramiento y Diagnostico deVIH-SIDA10, en el marco de un esfuerzode articulacin mayor11. Pero no seramos

justos si no dijramos que stas no son lasnicas iniciativas que deben resaltarse, porlo que es necesario mencionar el esfuerzode muchos otros municipios, entre ellos,los que forman parte del Grupo de Trabajode la FES.

Finalizando este punto, es importantesealar, que a partir del desarrollo del pro-grama INCLUIR por la Direccin Nacio-nal de Juventud (DINAJU), en el ao 2005se han creado nuevas reas de juventud yrelanzado otras, por lo cual el proceso seencuentra en plena dinmica.

Desde el ao 2004, la FES ha definidocomo una de sus lneas de trabajo el forta-

lecimiento de las reas locales de juven-tud. Con tal propsito, ha constituido, unGrupo de Trabajo de reas de Juventud, al

7 Presupuesto Participativo Joven:http://www.rosario.gov.ar/sitio/desarrollo_social/juventud/presupuesto_joven.jsp

8 Oficina de Juventud: http://www.moron.gov.ar/juventud/index.php9 Parlamentos Juveniles: http://www.sanfernando.gov.ar/ciudad_isla/educacion/parlamentos.html10 DGJ: http://www.buenosaires.gov.ar/areas/des_social/juventud/?menu_id=15411 Programas para jvenes GCBA: http://www.i.gov.ar/

3 EL APOYO DE LA FESA POLTICAS LOCALESDE JUVENTUD


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que se han sumado diversos municipiosque trabajan la temtica en la perspectiva

participativa y de derechos. A su vez,

participa de la gestin de este mbito el"Proyecto Juventud" de la FLACSO, queamerita una larga trayectoria de trabajo enel tema.

Este espacio busca generar un mbito dedilogo, intercambio de experiencias y for-macin, que apunta a la consolidacin delas reas de juventud locales, buscandoesclarecer aprendizajes y abordar nuevasestrategias. Del Grupo de Trabajo, partici-

pan activamente, a la fecha, la CiudadAutnoma de Buenos Aires, Crdoba, Mardel Plata, Mendoza, Morn, Necochea,Pun, Punta Indio, Rosario, Salto, San Fer-nando, San Isidro, Tandil, Villa Gesell, yVicente Lpez.

Las actividades que desarrolla el GT tie-

nen como ncleo central, un Ciclo deIntercambio y Formacin, que se realizaen tres jornadas anuales, con dos das deintenso trabajo cada una. Siendo uno delos ejes centrales del grupo la capacitacintcnica, en todas las jornadas se convoca aespecialistas en temas diversos propuestoscolectivamente (empleo, comunicacin,derechos, metodologas participativas,

nuevas tecnologas, culturas juveniles,fragmentacin social urbana, han sidoalgunos de los temas abordados).

Por otra parte, en paralelo a las actividadesdel grupo como tal, se han venido desarro-llando actividades de apoyo a las reas

municipales en temas puntuales y especfi-cos, entre ellos, instancias de capacitacin,apoyo a la formacin de agentes pblicos,

y la realizacin de encuestas locales dejuventud.

Adems, en apoyo al trabajo del Grupo, seha puesto en lnea un website sobre "Pol-ticas Locales de Juventud"12, pensado ydiseado como un "sitio-herramienta" que

procura responder a la necesidad de selec-cionar y validar contenidos, y no a consti-tuirse en almacn de documentos, de losque ya existen suficientes. Esta concebidocomo una co-construccin, siendo una

parte del mismo, procesada por el equipode FLACSO-FES, y, otra parte, en formadescentralizada y autnoma, por cada unade las reas de los municipios que se inte-gran a este espacio de intercambio de expe-riencias. Se propone, asimismo, exponerlas experiencias relevantes de los munici-

pios involucrados en lo que a las polticasde juventud se refiere. Y aportar ideas yherramientas concretas que ayuden y faci-liten sus actividades. Incluye: legislacin,directorios, datos estadsticos, linkoteca,

biblioteca, herramientas, temas de actuali-dad. El concepto informacional que respal-da el sitio es el de copyleft, segn el cual,cualquiera puede hacer uso de sus docu-

mentos, siempre y cuando lo comunique asus autores y no lucre con los mismos.

Otra de las iniciativas que merecen desta-carse, es el apoyo de la FES a las reas de

juventud de los municipios que participande la Red de las Mercociudades, integra-

12 Polticas Locales de Juventud: http://www.poljuvlocal.com.ar


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dos a su Unidad Temtica de Juventud. Eneste caso, apoyando actividades conjuntasde grupos de municipios que participan en

la red, a travs de su colaboracin en ins-tancias de capacitacin, desarrollo de pro-cesos e insumos de soporte.

Por ltimo, es bueno sealar que, en para-lelo al trabajo con las reas de juventud, laFES realiz en 2004, un estudio para rele-var redes de organizaciones juveniles (oque trabajan con jvenes) y, como conse-cuencia del mismo, constituy en 2005, unGrupo de Redes de Organizaciones Juve-niles, con el cual trabaja en una modalidadafn al Grupo de reas Locales de Juven-tud. Como parte de esta iniciativa, se capa-cita a las redes en modelos de gestin aso-ciada y se alienta, cuando ello es posible y

pertinente, la colaboracin entre las reasy las redes.

Dado el contexto presente, y el recorrido

realizado, una de las claves del futurodesarrollo de las polticas locales de juven-tud se encuentra en su dinamizacin, elreconocimiento pblico, y la legitimacininstitucional de estas instancias.

En esta perspectiva, es importante sealarla necesidad actual de avanzar en la pro-

fundizacin y articulacin local de dife-rentes iniciativas.

En este sentido, en lo que respecta a losOrganismos Locales de Juventud en gene-ral, podemos afirmar que todos ellos hanrealizado o realizan, adems de accionesde promocin diversas, actividades vincu-ladas al espacio de la cultura. Y aqu esimportante poner el foco en el modelo degestin desarrollado. Con frecuencia, noson pocos los espectculos pblicos gra-tuitos ofrecidos a los jvenes, que por suscaractersticas, se agotan en el acto de la

presentacin, sin permitir el desarrolloactivo de un proceso creativo en tres tiem-

pos -antes, durante y despus-, en el cuallos jvenes puedan expresarse y comuni-carse en el ms amplio sentido, facilitandola expansin de sus aspiraciones y proyec-tos. Pero las reas de juventud, se hancaracterizado por el compromiso con ini-

ciativas participativas y descentralizadasque permiten a los jvenes intervenir acti-vamente en el proceso creativo, a diferen-cia de aquellas en las que slo se los invo-lucra como espectadores pasivos o consu-midores de espectculos. Al respecto, lasreas de juventud, tiene mucho que aportara la gestin de modelos participativos.

Una circunstancia que se repite, es quetodos los aos se llevan a cabo eventosdirigidos a los jvenes, desde las reas deCultura, Educacin y Deportes en primerlugar, pero tambin en los campos deEmpleo y de Salud, y en los cuales nosiempre tienen incidencia y participacinlos organismos de juventud de las mismas

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4 PRESENTE Y FUTURODE LAS POLTICASLOCALES DE JUVENTUD


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jurisdicciones que los organizan13. Esta es,precisamente una de las claves a resolver,que, desde luego, esta condicionada por un

lado, por el apoyo poltico que tenga elrea, y, por otro, como en la concepcin delos modelos de gestin que se pongan en

juego.

Asimismo, los organismos de juventud,estan en condiciones de realizar una iden-tificacin y estudio participativo de la pro-

blemtica juvenil, mediante el intercambio

de opiniones con organizaciones de jve-nes del lugar y la realizacin de seminarioso talleres. Estas acciones, resultan unimportante plus, tanto a la hora del diseo,como del monitoreo y evaluacin de los

programas; una prctica que, por lo dems,hay que esforzarse por instalar.

Para finalizar, bien vale poner en propiaspalabras de los responsables involucrados,algunas de las tareas pendientes y nortes aseguir. En el "1er. Seminario de PolticasLocales de Juventud en Mercociudades"(1999)14, las ciudades participantes expre-saron en una Declaracin Final una seriede puntualizaciones que resultan plena-mente vigentes en el presente. Son lassiguientes:

La necesidad de asegurar un proce-so de consolidacin de polticaslocales de juventud ms all de lascoyunturas polticas, que sean capa-ces de desarrollarse dentro de un

marco de permanencia en el tiemposin perjuicio de las justas orientacio-nes que los gobernantes en ejercicio

impriman a sus acciones. Para ello, entendemos prioritaria la

participacin de las asociaciones,grupos y colectivos de jvenes orga-nizados como garantes del fortaleci-miento y eficacia de estas polticas.

Sabedores de las distintas realidadesjuveniles, destacamos a los gobier-nos locales como referentes inme-diatos y actores privilegiados para eldiseo y ejecucin de polticas loca-les de juventud. Para eso es impres-cindible fortalecer las oficinas,departamentos y comisiones de

juventud dentro de las estructuras delos municipios de la regin.

Que la temtica juvenil tenga efecti-vamente un rol y un espacio en sin-tona con las transformaciones que

en materia social se imponen. [El compromiso de] Incentivar el

desarrollo de polticas integralespara las y los adolescentes y jvenesen general, intentando coordinaracciones que abarquen a las distin-tas realidades juveniles an cuandosiguen siendo una prioridad aque-llos sectores ms vulnerables que

an no logran su plena integracin.

Como corolario, enfatizar que el desarrolloactivo de polticas pblicas de juventud enel mbito local, articulando acciones a par-

13 BALARDINI, Sergio; y, HERMO, Javier; 1995.14 Realizado en la ciudad de Rosario, el 8 de julio de 1999


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tir del estmulo y compromiso de las reasespecficas, representa un invalorablerecurso en la construccin de una sociedad

democrtica, participativa y de derechos,

al promover, mediante acciones de inclu-sin y promocin, la integracin de lasnuevas generaciones en su presente y para

el futuro de las mismas.

BALARDINI, Sergio y HERMO, Javier; 1995.Polticas de Juventud en Amrica Latina:Informe Argentina. FLACSO- OIJ. Argentina.1995.BALARDINI, Sergio; 2003. Polticas de

Juventud: conceptos y la experiencia argentina.En: Polticas Pblicas de Juventud en AmricaLatina: Polticas Nacionales Oscar DvilaLen (editor). CIDPA. Chile. 2003.BANGO, Julio y RODRGUEZ, Ernesto;1996. "Polticas de Juventud en Amrica Lati-na en la antesala del ao 2000: Logros, Desaf-os y Oportunidades". Resumen Preliminar delInforme Final del Proyecto de Investigacin yDesarrollo "Polticas de Juventud en AmricaLatina: Evaluacin y Reformulacin". Ver-

sin preparada exclusivamente para el Segun-do Encuentro Latinoamericano de Expertos enJuventud (Santa Cruz de la Sierra, marzo de1996). Organizacin Iberoamericana de Juven-tud / Centro Internacional de Investigaciones

para el Desarrollo.FRAGA, Diego Martn; 1995. Polticas de

Juventud en Amrica Latina: Informe Argenti-na. OIJ-FLACSO. Argentina. 1995. Legisla-cin sobre Juventud en Argentina. FLACSO -OIJ. Argentina. 1995.FRAGA, Diego Martn; 1999. Polticas de

Juventud en Argentina. Paper indito. NACIO-NES UNIDAS; 1979. Resolucin de la Asam-blea General 34/151 del 17 de diciembre de1979.

NACIONES UNIDAS; 1996. "Programa deAccin Mundial para los Jvenes hasta el 2000y aos subsiguientes". Resolucin 50/81, apro-

bada por la Asamblea General, el 13 de marzode 1996.ORGANIZACIN IBEROAMERICANADE LA JUVENTUD (OIJ); 1994. Marco de

Referencia. Plan Regional de Acciones para elDesarrollo de la Juventud (PRADJAL 1995-2000). Madrid, 1994.SAEZ MARIN, Juan; 1988. El Frente deJuventudes. Poltica de Juventud en la Espaade la Posguerra. (1937-1960). Siglo XXI Edi-tores. Madrid, 1988.

BIBLIOGRAFA

Consultor de la FES (Fundacin FriedrichEbert) en Polticas Pblicas de Juventud.Miembro del "Proyecto Juventud" de laFLACSO (Facultad Latinoamericana de Cien-cias Sociales), sede Argentina. Miembro de laMesa de Concertacin Juvenil de la Ciudad deBuenos Aires.

Ha sido coordinador del "Grupo de Trabajosobre Juventud" del CLACSO (Consejo Lati-

noamericano de Ciencias Sociales); 1997-2003. Consultor de la OIJ (Organizacin Ibe-roamericana de la Juventud); 2000-2004. Parti-cip en el diseo, la ejecucin y el asesora-miento de programas dirigidos a jvenes desdediferentes sectores y organismos (Educacin,Desarrollo Social, Juventud ) y diferentes nive-les de gestin (local, provincial y nacional).

Correo electrnico: [email protected]

Sergio Balardini - RESEA CURRICULAR


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No Brasil, na dcada de 90, a juventude aindano era destinatria de polticas especficas.

Ainda que os jovens ocupassem grande espaona mdia - seja como mercado consumidorintensamente disputado, seja como

personagens centrais de notcias das pginaspoliciais -, no constituam um pblicosingular do ponto de vista da agenda pblica.A nica poltica de carter universal maisclaramente identificada com a juventude, aeducacional, no se orientava por nenhumareflexo acerca de uma especificidade daao educativa dirigida a jovens.

Ao mesmo tempo, a intensa luta travada aolongo dos anos 80 em torno dos direitos dainfncia e da adolescncia, resultou na forte

presena desse tema tanto na mdia quantona agenda das polticas sociais. A conquistado Estatuto da Criana e do Adolescente -ECA, em 1992, um marco no

reconhecimento das crianas e adolescentescomo sujeitos de direitos, mas tem comolimite a idade de 18 anos. Os jovens commais de 18 anos continuaram no sendo alvode ateno pblica e social. Alm disso,embora o ECA tenha um carter universal,a maior parte das polticas dirigidas a crianase jovens continuou sendo focalizada na

ateno s crianas e adolescentes emsituao de risco.

Assim, embora muitas vezes o termojuventude estivesse presente na formulaode polticas, ele se referia quase sempre acrianas e adolescentes e, maisespecificamente ainda, a aqueles em situaode grande vulnerabilidade.

em meados dos anos 90 que o tema dajuventude comea a crescer, tanto porque oagravamento das situaes de exclusoacirrou problemas vividos pelos jovens, como

pela ao de diferentes atores juvenis. nesseperodo que ganham visibilidade questesvividas por jovens dos setores populares,trazidas luz por diversos grupos juvenisformados nas periferias das grandes cidadesque, com suas msicas, danas, pichaes,grafites e outras formas expressivasdenunciavam suas condies de vida ecobravam respostas. E nesse mesmo perodoque jovens ligados ao tradicional movimentoestudantil e/ou atuantes nas juventudes

partidrias comeam a demandar a criaode uma institucionalidade pblica queassumisse a tarefa de formular e implementar

polticas especficas para a juventude.

Santo Andr, municpio da RegioMetropolitana de So Paulo com uma

populao aproximada de 700 mil habitantese uma diversidade de grupos e organizaes

juvenis, uma das cidades que primeirovivenciou esse processo.

1 A ENTRADADA JUVENTUDE COMOTEMA DA AGENDAPBLICA NO BRASIL

Centro de Referncia da Juventude de Santo AndrPor Maria Virgnia de Freitas e Raquel Souza

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Na cidade de Santo Andr, a juventudeapresentou-se como um tema especfico da

poltica local, no governo do Prefeito CelsoDaniel, eleito pelo Partido dos Trabalhadores

para a gesto 1997-2000 e reeleito em 2000. do incio de seu governo a criao daAssessoria de Juventude, vinculada Secretaria de Cidadania e Ao Social.

No Plano de Governo apresentado em 1996,Celso Daniel assumia o compromisso defazer uma gesto voltada ampliao dosdireitos sociais por meio da expanso emelhoria das polticas pblicas setoriais -

educao, sade, cultura, desenvolvimentoeconmico, lazer etc - mas tambm atravsda criao e elaborao de propostas quetivessem impacto em questes como gnero,raa/etnia e tambm nas diferenasgeracionais da cidade, notadamente naquesto da juventude e posteriormente das

pessoas idosas.

Mas a criao da Assessoria de Juventudetambm era fruto da demanda de jovens,notadamente daqueles vinculados aos gruposde jovens militantes partidrios. Foram esses

jovens, ao lado de lideranas de entidadesestudantis, que reivindicaram a existncia

de um equipamento para a juventude, distintodaqueles destinados ao acolhimento de

jovens em conflito com a lei ou com

envolvimento com drogas. Esses grupos,aps o pleito, passaram a articular-se emtorno da criao de um espao que pudesseser referncia para a formao, a expressoe a participao da juventude, pautando osgestores da Prefeitura e participando dereunies e foros com foco no debate das

polticas de juventude.

nesse contexto que a Secretaria daCidadania e Ao Social, apresenta como

proposta, desde o incio de sua gesto, em1997, a formao de Centros de Referncia

para setores especficos: mulheres, crianase adolescentes, idosos, deficientes e jovens.

Paralelamente, a organizao nogovernamental Ao Educativa haviaelaborado um projeto de Centro deJuventude1 que deveria se constituir num

centro de convivncia em que sedesenvolvessem atividades de informaoe formao para jovens, visando a

potencializao de sua capacidade deexpresso e articulao de propostas deenfrentamento de seus problemas. Em

2 A ENTRADADA JUVENTUDE COMO

TEMA DA POLTICALOCAL EM SANTO ANDR

3 A CRIAODO CENTRODE REFERNCIADA JUVENTUDE

1 A sociloga Helena Abramo, ento coordenadora da rea de Juventude da Ao Educativa, foi aresponsvel pela elaborao desse projeto.

Centro de Referncia da Juventude de Santo Andr. Por Maria Virgnia de Freitas e Raquel Souza

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princpio esse centro deveria ser alocadodentro da estrutura da prpria instituio,mas uma vez elaborado o projeto, no final

de 1996, a ONG decidiu buscar parceria comum governo municipal, preferencialmentede perfil democrtico popular, que seinteressasse em implantar o projeto comouma poltica pblica e, assim, lhe garantisseuma maior sustentabilidade.

Em dezembro desse mesmo ano, a AoEducativa foi procurada pelo referido grupode jovens de Santo Andr para um debateem torno do desenho de uma poltica para

juventude para a gesto que se iniciaria dalia um ms. E nos primeiros dias de governo,a Secretria de Cidadania e Ao Social -SCAS fez contato com assessores da AoEducativa para discutir possibilidades decontribuio com a recm-criada Assessoriade Juventude, vinculada quela Secretaria.Definiu-se, ento, a realizao de uma

parceria entre a Prefeitura Municipal deSanto Andr e a Ao Educativa paradesenvolvimento e implantao de umCentro de Referncia para a Juventude -CRJ, com base no projeto j delineado porAo Educativa, com apoio dos estudantessecundaristas noruegueses quedesenvolvem anualmente uma campanha -a Operao Um Dia de Trabalho - para

apoiar projetos de juventude nos pases doSul. Com esses recursos, coube AoEducativa o papel de assessorar a equiperesponsvel pelo CRJ na gesto doequipamento.

Durante o ano de 1997, assessores da AoEducativa e tcnicos da Assessoria deJuventude de Santo Andr trabalharam

conjuntamente na elaborao do projeto doCRJ. A base dessa elaborao foi o projetoinicialmente escrito pela Ao Educativa,que foi adaptado para a realidade da cidadede Santo Andr e s diretrizes estabelecidasno plano de governo da gesto Celso Daniel.

Mas, embora a concepo do projetoavanasse, no havia recursos oramentriosque permitissem sua implementao. Assim,em fins de 1997, os grupos juvenis quehaviam demandado a constituio de umCentro de Referncia da Juventude levarama proposta para a Plenria da AssistnciaSocial do Oramento Participativo2 onde,aps uma acirrada disputa com outras

propostas, conseguiram que ela fosseaprovada como uma das trs prioridades parao ano seguinte. O fato foi celebrado como

"importante conquista" pelos grupos juvenisda cidade.

No entanto, durante todo o ano de 1998 aproposta encontrou uma srie de dificuldadespara sua concretizao, sendo que a maiordelas foi conseguir uma sede para a instalaodo Centro de Referncia para a Juventudecompatvel com os recursos disponveis.

Assim, somente em dezembro de 1998, jna metade daquela gesto, o CRJ foifinalmente inaugurado.

Se, por um lado, a abertura do CRJ eramotivo de comemorao, de outro foi

2 O oramento participativo um processo atravs do qual a prefeitura estabelece limites e critrios paracompartilhar o poder de deciso sobre o oramento municipal com os moradores das diversas regies da cidade.

Serie PROSUR - Polticas Locales de Juventud. Experiencias en el Cono Sur

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marcada por uma grande frustrao pois,por questes oramentrias, a mesma casaabrigava tambm dois outros projetos,

ligados mesma Secretaria mas comobjetivos diversos: o Andrezinho Cidado,de atendimento a crianas e adolescentes emsituao de rua, e o Conselho Tutelar,responsvel por zelar pelo cumprimento dosdireitos da criana e do adolescente. Essa

partilha de uma mesma casa com programasde natureza to distinta trazia dois problemas.Alm de reduzir sobremaneira o espao paraas atividades do CRJ, tanto o AndrezinhoCidado como o Conselho Tutelarintegravam o conjunto das polticas deateno infncia e adolescncia em situaode risco, cuja concepo j estava fortementearraigada tanto no mbito da administrao

pblica como no da sociedade civil, o quedificultava ainda mais a incipienteconstituio de um campo diferenciado paraas polticas pblicas de juventude, dificultava

a consolidao do carter e natureza do CRJcomo um equipamento pblico voltado parao segmento juvenil com a perspectiva de

promover a convivncia, a expresso, ainformao e a participao dos jovens dacidade de Santo Andr.

Outra dificuldade manifestada j naquelemomento referia-se ao tamanho reduzido da

equipe alocada pela Prefeitura para ofuncionamento do CRJ, muito aqumdaquela que o projeto propunha. Alm disso,havia diferentes compreenses entre osmembros da equipe acerca de seu papel, bemcomo do papel do CRJ.

Assim, o ano de 1999 foi marcado pela

experimentao. Com o objetivo de divulgar,junto aos jovens, a existncia de umequipamento pblico a eles destinado e, ao

mesmo tempo, constituir um desenho deservios e aes para o mesmo, foramrealizados debates, saraus e oficinas. Mas,como os recursos eram bastante reduzidos,a organizao dessas atividades era fruto,quase sempre, da iniciativa de indivduosou grupos que se dispunham a colaborarcom o CRJ, e no de uma concepo maisestratgica. Com isso, embora tais atividadestenham trazido muitos jovens para o CRJ emovimentado o espao, elas nocontriburam para que os jovensfreqentadores construssem vnculos maisfortes com o espao, e no tomassem o centrocomo um local "para fazer cursos".

Ao mesmo tempo, esse primeiro ano defuncionamento foi marcado por uma disputae conflito entre grupos organizados.

Movimentos estudantis, jovens pertencentesa partidos polticos e a movimentos sociais,que em sua maioria haviam participado do

processo de conquista e implantao doequipamento reivindicavam, cada um paraseu grupo, o papel de coordenar o CRJ.Somava-se a isso uma falta de clareza deregras de uso e convivncia naqueleequipamento, o que acabou resultando em

uma certa "apropriao privada", por partedos grupos mais articulados, deste espaoque se pretendia pblico e plural.

Assim, ao final do primeiro ano de seufuncionamento, as equipes da Assessoria deJuventude de Santo Andr e da ONG AoEducativa se reuniram num processo de

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discusses que teve como objetivos:reorganizar o CRJ, clareando a natureza doseu projeto e o seu papel na poltica de

juventude do municpio de Santo Andr;redesenhar seus eixos bsicos de atuao;reestruturar a parceria entre SCAS e AoEducativa, e reorganizar as atribuies daequipe condutora do projeto, a fim dereestruturar a dinmica de trabalho do CRJ.Foi nesse processo que se consolidou umaconcepo mais articulada acerca do papele lugar desse equipamento na polticamunicipal de juventude, da definio de seu

pblico alvo, de seus objetivos, de suas linhasde ao, que apresentamos a seguir.

4.1)O CRJ na poltica municipal de juventudede Santo Andr

Compreendia-se que as polticas para ajuventude deveriam ser desenvolvidas eimplementadas pelo conjunto do governomunicipal, atravs de suas diferentes sees

(secretarias de Educao, de Sade, deCultura, de esporte e lazer, etc.) e, de formaespecial, pela Secretaria de Cidadania e AoSocial, na medida em que nesta secretariaestavam localizadas sees especiais parasegmentos especficos da populao(mulheres, idosos, crianas etc.), incluindoa Assessoria de Juventude.

A Assessoria de Juventude deveria garantiro desenvolvimento dessas polticas,colocando as questes e a tica da juventude

em cada uma dessas sees (ajudando a pautaras polticas em cada organismo do governomunicipal), alm de desenvolver aes

prprias e tambm conjuntas com essas sees.

O CRJ se apresentava como uma dessasaes prprias. Embora estivesse claro queele no era o espao onde se desenvolveriamtodas as aes da Assessoria, ele foi definidocomo um dos espaos prioritrios para odesenvolvimento dessas aes, na medidaem que se propunha como espao central,catalisador e difusor de referncias para a

juventude.

O CRJ deveria se constituir como umequipamento pblico voltado ao exerccioe ao enriquecimento da cidadania dos jovensde Santo Andr, cumprindo funes de

informao, de interlocuo e abertura depossibilidades de insero e participao dosjovens na vida do municpio.

4.2) Pblico alvo do CRJ

O pblico alvo do CRJ foi definido comosendo a populao juvenil do municpio de

SantoAndr (tomando como referncia etriaa definio da ONU, a faixa dos 14 a 24anos - embora este parmetro no fossetomado rigidamente).

Adefinio da juventude como pblico alvodesta poltica representada pelo CRJ estavafundada na considerao da especificidade

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4 A PROPOSTA


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dada pela singularidade da condio juvenil,constituda pelo processo de entrada na vidaadulta. Processo este constitudo por

momentos de escolhas, de definio deprojetos e trajetrias, de equacionamentoentre potencialidades e recursos para definirtais projetos e trajetrias.

Como j foi dito acima, tal definiodiferenciava-se sobremaneira das concepesque fundamentavam, e ainda fundamentam,grande parte dos projetos dirigidos juventudeno Brasil, onde os jovens so apresentadosna tica dos "problemas" e no dos direitos.E diferenciava-se tambm pelo fato de proporuma poltica para a juventude, e no apenas

para os setores mais vulnerveis ou excludos.

Mas, ao mesmo tempo, a definio dopblico-alvo considerava a diversidade dapopulao juvenil, que se traduz no s emdiferentes condies econmicas e sociais,

mas tambm em diferentes definiesculturais, sociais e polticas. Assim, props-se que a nfase (no o foco exclusivo) fossedada, por um lado, nos jovens com fortesdificuldades de recursos e, por outro lado,nos jovens com potencialidade dedesenvolver aes de interveno nas maisdiferentes esferas. Nesse sentido, o CRJdeveria atuar tanto junto a jovens

individualmente como a grupos juvenis domunicpio.

4.3) Objetivos do CRJ

Foram definidos trs objetivos para o CRJ,que deveria constituir-se como:

a) um espao pblico de referncia para osjovens poderem montar seus trajetos deinsero na vida adulta e seus projetos de

interveno na vida social, cultural e polticada cidade;

b) um equipamento de oferta de serviospara o desenvolvimento de iniciativas deexpresso e atuao dos jovens e dos grupos

juvenis, contribuindo para sua constituioe consolidao como sujeitos de participaoativa, e para a formulao, visibilidade edifuso de suas questes, demandas, opiniese propostas;

c) um espao de interlocuo entre osdiferentes setores e grupos juvenis, entre os

jovens e o poder pblico e outros atoressociais, contribuindo para a instaurao deuma prtica de participao democrticaentre estes atores, e para a consolidao danoo de espao pblico entre os jovens.

4.4) Dimenses do CRJ

Tais objetivos desdobravam-se, ento, emtrs dimenses: referncia, prestao deservios e canal de interlocuo.

Referncia

Para constituir-se como espao de referncia,o CRJ deveria reunir e fornecer informaesqualificadas, promover debates e aescriativas, para favorecer aos jovens odesenvolvimento de sua participao,individual e coletiva, na vida da cidade. OCRJ deveria, dessa maneira, oferecerinformaes sobre os recursos necessrios

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e disponveis para suas opes de vida, paraas escolhas implicadas nos seus processosde insero social, para a montagem de seus

projetos individuais e coletivos, de suaparticipao na cidade, para a estruturaode sua relao com os outros jovens, com o

poder pblico e outros atores. Isso implicavaem ter informaes disponveis sobre o quea cidade oferece aos jovens, quais os canaisde participao existentes em todos os

processos em ocorrncia; informaes sobreo universo juvenil da cidade, com suasdiferenas, os grupos existentes etc.

Prestao de serviosAdimenso de prestao de servios buscavaoferecer instrumentos para os jovens setornarem sujeitos com capacidade de usar,demandar, avaliar e negociar a estruturaode servios pblicos que respondam s suasnecessidades e direitos como cidados.Assim, isso no poderia ser feito de forma

sobreposta a aquilo que j era deresponsabilidade de outras sees domunicpio, isto , educao, sade, formao

profissional etc; nem mesmo de servioscomplementares a esses. Havia umaorientao explcita de que no era papel doCRJ a cobertura de servios precrios ouinexistentes na estrutura do municpio e deque, uma vez constatada tal precariedade ou

inexistncia, caberia Assessoria daJuventude o papel de, junto aos outros rgose sees da prefeitura, cobrar, propor ouestimular a abertura desses servios.

A prestao de servios por parte do CRJdeveria destinar-se a:

a) Fornecer informaes qualificadas sobreos servios prestados pela prefeitura e outrosrgos pblicos e privados para jovens e

ajudar no encaminhamento dos jovens aesses servios (atravs principalmente dobalco de informaes e balco deatendimento);

b) Fornecer recursos de informao,formao e expresso para os jovensmontarem seus projetos coletivos deexpresso e participao. Isso implicava emestruturar debates com temas de interessedos grupos, oferecer oficinas de formaonos temas e nas linguagens e formas deexpresso de atuao dos grupos, oferecerespao de reunio e desenvolvimento dos

projetos, assim como alguns equipamentosde uso coletivo do CRJ.

Canal de InterlocuoAterceira dimenso do CRJ era a de constituir-

se como um canal de interlocuo entre osjovens e os diferentes grupos juvenis, entreestes e a prefeitura, e com os demais atores

pblicos envolvidos nas questes queinteressam aos jovens. O objetivo era que oCRJ possibilitasse tanto a formulao comoa maior visibilidade das expresses culturaisou polticas dos jovens e, assim, setransformasse num espao permanente de

expresso das suas demandas, opinies,reivindicaes e propostas, fomentando ofortalecimento do dilogo dos jovens tantoentre si como com os outros atores pblicos,

particularmente a prpria prefeitura. O CRJpoderia, dessa forma, constituir-se como umouvidor, catalisador e difusor das demandas

juvenis, podendo enriquecer o papel da

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Assessoria de Juventude na sua funo decolocar frente aos outros rgos da prefeituraas necessidades e especificidades deste

segmento.

4.5) Eixos de ao

Para realizar todos esses objetivos foramento definidos cinco eixos de atuao parao CRJ: informao, formao, expresso,convivncia e participao/interlocuo.

Ainformao se constitua num eixo de aouma vez que o CRJ tinha como objetivos aampliao e o enriquecimento do campo dereferncias que orientam as escolhas natrajetria de insero dos jovens, bem comoo enriquecimento das alternativas de projetosde interveno coletiva.

Para tanto foi proposta a organizao de um

balco de atendimento e de uma midiateca.O primeiro seria o responsvel pela ofertade informaes qualificadas e atualizadas,teis aos jovens sobre os servios da cidade,as polticas para os jovens - tanto de iniciativado poder pblico como de outros agentes,as atividades culturais e outras de interessedos jovens. Asegunda reuniria documentos,livros, revistas, vdeos e outras mdias,

facilitando aos jovens o acesso a informaese conhecimentos sobre temas gerais e deinteresse dos grupos. Reuniria tambm

produes de jovens - fanzines, fitas demo,fotografias de grafites etc.

O eixo da formao, que seria desenvolvidopor meio de oficinas, cursos, debates,

seminrios, grupos de estudos, ciclos devdeo etc, visava oferecer instrumentos paraampliar e fortalecer a capacidade dos jovens

e dos grupos de desenvolvimento depropostas de ao e interveno na cidade,criando oportunidades de reflexo e crtica,assim como de sua atuao como cidados.Dessa forma, a formao proporcionada noseria de carter profissional, nem de reforoescolar, nem de doutrinao poltica.

As atividades deveriam ser pautadas combase em elementos existentes nos projetosde ao dos jovens e grupos juvenis, ou a

partir de necessidades sentidas pelos grupos,devendo permitir o desenvolvimento tantode temas como de instrumentos de ao eexpresso dos grupos.

Alm de oferecer informao e formao,o CRJ deveria estimular e abrir espao paramanifestao das falas juvenis: apresentao

de suas formas de expresso e das suasquestes, demandas e opinies. Issoenvolveria atividades como: exposies,shows, boletins, grafitagem, teatro e sarau.O CRJ deveria estimular e facilitar que os

jovens e grupos juvenis se mostrassem aosoutros jovens e a outros atores, contribuindocom meios para a sua realizao - no prprioCRJ e fora dele. E, enquanto espao pblico,

o CRJ deveria buscar abranger a diversidadedo universo juvenil, estando aberto a todosos estilos de expresso, sem privilegiamentode um ou outro.

O quarto eixo, da participao/interlocuo,deveria organizar atividades - reunies,encontros, preparao de projetos etc. - que

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auxiliassem os jovens a se estruturarem comosujeitos de interveno no espao social,atravs de aes coletivas de carter social,

cultural ou poltico. Deveria fazer isso deforma no dogmtica e no partidria; oestmulo participao no poderia serentendido nem como oferecimento de cursosde formao poltica, nem como espao demobilizao dos jovens para as aes da

prefeitura.

Alm das atividades acima descritas, o CRJdeveria potencializar as aes coletivas dosgrupos permitindo e estimulando que osgrupos desenvolvessem seus projetos

partilhando dos recursos disponveis no CRJ.Nesse sentido, seria papel do CRJ apoiar odesenvolvimento de projetos de organizao,expresso, de atividade comunitria,cultural, poltica, social etc., mas no aquelesde carter comercial ou de promoo pessoal.

Deveria, tambm, estimular que os jovense os grupos participassem dos espaos emomentos de decises coletivas da cidade,contribuindo para que formatassem suasdemandas e suas formas de expresso.

O partilhamento do prprio CRJ como umequipamento pblico deveria sercompreendido tambm como exerccio de

participao democrtica e compreensode cidadania: envolvendo formas deconvencer e negociar na diversidade, deestabelecer dilogo entre os diferentesgrupos e de negociar com o poder pblico.Tal partilhamento tambm implicava quetodos os grupos tivessem direitos iguais deuso do CRJ, mediante combinao

previamente acertada com a coordenaodo CRJ, e sem, em nenhum caso, transformaro espao do CRJ como sede do grupo ou

movimento. O CRJ no deveria jamais seridentificado com nenhum grupo emparticular, mas, justamente, como um localde convvio e interlocuo entre diferentesgrupos, com qualquer definio poltica,religiosa, cultural, tnica, desde que fossemgrupos com propostas de atuao (social,cultural, comunitria, poltica etc.) e desdeque no fossem intolerantes e respeitassemas diferenas.Por fim, o CRJ precisaria se constituir comoespao tambm de convivncia: como umelemento de atrao e criao de um clima

propcio circulao das informaes, aoencontro entre diferentes, aodesenvolvimento de idias e de interlocuo.A criao de um espao agradvel, no qualos jovens se sentissem bem seria, assim, umelemento propiciador dos outros eixos.

4.6) Recursos necessrios

Para cumprir seus objetivos, a sede do CRJdeveria contar com um espao adequado

para a recepo e balco de informaes,um espao para convivncia, pelo menosuma sala para reunies e uma para oficinas,

um espao para apresentaes, exibies edebates, e uma sala para coordenao eadministrao. E precisaria estar equipadocom telefone, vdeo, aparelho de som, acervo

para a midiateca, computadores com acesso Internet.

Uma equipe mnima seria formada por um

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coordenador - responsvel pela gesto doequipamento e articulao com a Assessoriade Juventude, um assistente - responsvel

pelo funcionamento e programao do CRJem dilogo com os jovens, um responsvelpela recepo e alimentao do balco deinformaes, um secretrio, um responsvel

pela limpeza. Alm disso, o CRJ precisariacontar com recursos suficientes paradesenvolver sua programao, incluindo acontratao de educadores e oficineirosespecficos. E todas as pessoas envolvidasnesse trabalho precisariam estar devidamentequalificadas para o trabalho com jovens ecompromissadas com os objetivos do CRJ.

Essa proposta assim estruturada ofereceuum marco de referncia para a atuao daequipe responsvel e o CRJ continuafuncionando at hoje, tendo sobrevivido adiversas mudanas no organograma daPrefeitura. O CRJ passou a ocupar toda a

casa, ampliando o espao para uso dos jovens,e, alm de tv, vdeo, retroprojetor, aparelhosde som, nele foram instalados, 10computadores conectados Internet, como

parte do projeto www.jovem, realizado emparceria com a ONG Comunitas e o Ministriode Cincias e Tecnologia. Inmeros debates,saraus, apresentaes artsticas, exibies

de filmes, oficinas e cursos - teatro, grafite,DJ, sexualidade, elaborao de projetos -foram realizados. Suas salas foram utilizadas

para convivncia, reunies de grupos,elaborao de projetos, organizao deeventos.

Mas, e como costuma acontecer com a maiorparte das polticas, os recursos alocados nopermitiram que a proposta fosseimplementada de forma integral. No finalde 2003, a equipe do CRJ era composta pordois serventes gerais - que alm de cuidaremda limpeza do espao, se revezavam noatendimento da recepo, uma auxiliaradministrativa e dois monitores deinformtica. No havia mais umacoordenao especfica para o CRJ - tarefaque naquele momento era acumulada pela

prpria Assessora de Juventude - e o seuoramento estava em grande partecomprometido com o aluguel do espao.

A proposta de um balco de informaes ede uma midiateca no chegou a serimplementada da forma prevista: asinformaes inicialmente coletadas nuncaforam informatizadas, nem atualizadas, eno foi possvel constituir um acervo querespondesse aos objetivos propostos.Com a limitao de recursos, boa parte das

aes desenvolvidas no CRJ dependeu daboa vontade de seus poucos funcionrios eda ao direta de jovens, ocorrendo muitasvezes de forma pontual e intermitente.Dependendo de parcerias ou trabalhovoluntrio, nem sempre se conseguiu alinharas atividades disponibilizadas pelas parceriascom as vontades e necessidades dos jovens,

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5 AVANOS E DESAFIOSNA IMPLEMENTAODA PROPOSTA


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assegurando os conceitos bsicos queorientavam a proposta do centro.

Afalta de uma estrutura mais adequada, noobstante os esforos empreendidos, limitoua ampliao de prticas de fortalecimentodas aes juvenis. Como as iniciativas juvenisno institucionalizadas so, em geral, frgeis,muitos grupos nem chegam a apresentar

propostas ou demandas, tornando o CRJ umespao de fortalecimento daqueles grupos

j mais organizados.

Mesmo assim, apesar dessas limitaes, oCRJ constituiu-se como um espao de grandecirculao de pessoas (em 2003, a dependerda programao, circulavam de 250 a 750

jovens por semana) e informaes,contribuindo para o desenvolvimento dediversos tipos de ao por parte dos jovens.De um lado, ali sempre se buscou divulgaras iniciativas da prpria Prefeitura e de

outros rgos que fossem de interesse dosjovens e, de outro, os prprios jovens, vindosdos mais diversos bairros da periferia,sempre trouxeram seus cartazes, filipetas,fanzines, agendas e outros materiais dedivulgao de eventos.

" o bacana de estar ali, meio pra toda acidade usar. que vira uma central de

informao. Tipo, se o meu grupo vai fazeralguma atividade, a gente j deixainformaes, j faz um material dedivulgao pra envolver os outros gruposque freqentam, para divulgar pro pessoal.

um lugar em que voc consegue encontrargente. D para criar redes". (Deivison,integrante do grupo Rotao)

O CRJ conseguiu tornar-se um espaopblico, de encontro de diferentes e exercciode construo da tolerncia e convvio

democrtico. Grupos de atuao poltica -partidria ou no, grupos ligados s maisdiversas manifestaes artstico-culturais,grupos organizados em torno de temasespecficos passaram a se encontrar naqueleespao. Nas avaliaes, os jovensfreqentadores do centro semprevalorizaram a possibilidade de seencontrarem, identificando suas diferenas,suas semelhanas e seus pontos de conflito.

O fato de o CRJ ser um espao de reuniode jovens organizados ou no, de diferentesmovimentos, ideologias e, sobretudo,diferentes pontos da cidade de Santo Andracabou tornando o espao, por vezes, umverdadeiro caldeiro cultural, social, tnico.Este encontro, promovido pelos saraus edebates, ou pelo simples uso comum do

telefone, facilitou a constituio de novosgrupos, a realizao de projetos de jovens enovas articulaes.

As diversidades juvenis tambm acarretaramuma pluralidade de discusses em torno dequestes como raa, gnero, pluralidadesexual, preconceito, entre outros. Um grupode meninas envolvidas com o movimento

Hip Hop, por exemplo, passou a organizara cada trs meses debates em torno da questode gnero no mbito do movimento.

Alm de propiciar o encontro com osdiferentes, um segundo aspecto apontadocomo positivo na avaliao dos jovens sobreo CRJ refere-se ao fato de que ele sempre

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buscou partir das questes apresentadas pelosprprios jovens para estruturar suaprogramao.

"O que tem de especial no CRJ que l um espao aberto. A gente pode proporcoisas (...) Nos centros comunitrios aquelacoisa: ou voc t fazendo curso, ou vocnem pode entrar no espao. Aqui diferente.

No tem essa histria. Voc pode no fazernada ou propor uma coisa completamentenova, que tem apoio". (Indianara, do grupo

juvenil ArteFato)

Os freqentadores rapidamente perceberamque ali no eram meros usurios doequipamento. Tambm se deram conta deque a proposta do CRJ baseava-se nacompreenso de que os jovens so pessoasque podem falar por si, emitir opinies,formular propostas e ganhar no debate como mundo adulto.

A prtica de construo das atividades emdilogo com os diferentes interesses juveniscriou um cotidiano marcado pela negociao,

pelo debate e pela disputa de idias. Hregistros de discusses calorosas einflamadas nos encontros de grupos, umavez que as iniciativas propiciam o contatocom diferentes bandeiras, projetos de vida

e formas de se organizar (punks, rappers,jovens de partidos polticos, entre outros).O conflito e as tenses - entre os prprios

jovens e/ou entre esses e a equipe defuncionrios - so, assim, ingredientes daexperincia que assinalam seu carterdemocrtico.

Ao longo desses anos, o CRJ cumpriu umpapel educativo e de potencializar a ao devrios grupos juvenis.

"O CRJ, em alguns aspectos, ele aparececomo um espao que se encaixa nessa esferaeducacional mas, pelo menos para o

Rotao, eu acho que a esfera poltica muito mais latente. Para ns, um espaoonde muitas atividades (...) tm esse aspecto

fundamental de discusso poltica e deperceber o jovem como protagonistapoltico. E at mesmo as atividades que agente realiza ou que a gente participa, dentreoutras que acontecem, para o Rotao, asatividades que mais chamam a ateno soessas que se inserem no campo poltico.

Desde o plebiscito sobre a ALCA, que nos o Rotao como tambm outros gruposfizeram e participaram de debates ecampanhas que tiveram o CRJ como basede encontro, como tambm outras questes

polticas mais globais ou regionais em queo jovem se insere. E foi sempre nessa

perspectiva de perceber o jovem como umprotagonista poltico, no s daquele quevai receber essas questes polticas e quetem que responder de alguma forma, mascomo quem vai protagonizar mesmo".(Deivison, grupo Rotao)

Assim, o Centro de Referncia da Juventudede Santo Andr constitui-se numa iniciativa

pioneira no Brasil no campo das polticaspblicas ancoradas no reconhecimento dosjovens enquanto sujeitos de direitos. Em quepesem todas as limitaes acima assinaladas,alm do fato desse reconhecimento no serfacilmente conquistado junto aos diversos

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setores governamentais, ao funcionar comoum canal de interlocuo entre jovens e entreestes e o governo, com todos os conflitos e

tenses inerentes, ele se constitui num espaode participao juvenil na esfera pblica,reconhecendo que so mltiplas suas formasde expresso e manifestao. Constitui-setambm num espao de fortalecimento da

participao juvenil em esferas mais amplas.

Os conceitos que orientaram a proposta doCRJ precisam ser continuamente retomados,rediscutidos e atualizados, ao mesmo tempoem que se apresentam como um forte quadrode referncia a inspirar outras iniciativas de

polticas pblicas. A criao em 2004 doCentro de Referncia de Juventude deDiadema um exemplo disso. No entanto,

a experincia de Santo Andr demonstra quea realizao do conjunto dos objetivospropostos exige um maior compromisso porparte dos gestores de governo, traduzido naforma de oramento compatvel, equipetcnica adequada em termos de tamanho equalificao e o estabelecimento de metasclaras para seu funcionamento. Com novosendereo e coordenao, o pioneiro CRJ deSanto Andr chega a 2005 diante destedesafio.

ALMEIDA, ELMIR DE; 2001. Polticas pblicaspara a juventude: proposta para uma "modernacondio juvenil" de Santo Andr. Tese de

doutorado, Faculdade de Educao da USP. SoPaulo; Brasil.Centro de Referncia para Juventude de SantoAndr; 1999. Sumrio do Seminrio realizadoentre a Assessoria de Juventude de Santo Andr(SCAS) e Ao Educativa, nos dias 26/10/99,08/11/99 e 19/11/99. Mimeo. So Paulo; Brasil.FREITAS, Maria Virgnia de (org.); 2005.Juventude e adolescncia no Brasil: referncias

conceituais. Sao Paulo.FREITAS, Maria Virgnia de, PAPA, Fernandade Carvalho (org.); 2005. Polticas Pblicas:

Juventude em pauta. Sao Paulo, Cortez: AcaoEducativa: Friedrich Ebert Stiftung.Instituto Cidadania; 2004. Projeto Juventude:documento de concluso. So Paulo; Brasil.SPOSITO, MARILIAPONTES; 2003. Os jovensno Brasil: desigualdades multiplicadas e novasdemandas polticas. Ao Educativa. So Paulo;Brasil.

BIBLIOGRAFA

ANEXO

Sobre a contribuiao da FES Brasil s polticas locais de juventude

Fernanda Papa (FES Brasil)

Desde o ano 2000 a Fundaao Friedrich Ebertno Brasil tem promovido espaos de dilogoem que jovens e nao jovens discutiam e tmdebatido o que sao, para que servem e como

podem ser desenvolvidas e monitoradas aspolticas pblicas de juventude. Com ONGs,universidades, jovens organizados e naoorganizados, parceiros governamentais e


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consultores especialistas, tm sido construdosprocessos e atividades, que incluem: seminrioslocais, nacionais e internacionais, oficinas sobretemas especficos - como inserao no mundo do

trabalho, demandas das mulheres jovens e dasjuventudes negras etc.- e assessorias a algumasprefeituras do campo democrtico popular, paraa organizacao de processos participativos econstruao da perspectiva de aao transversalnas diferentes reas do governo. central nacooperaao promovida pela fundaao avalorizaao da visao dos jovens sobre as polticasque lhe dizem respeito e o fortalecimento dosdiferentes atores que compreendem que as

polticas de juventude devem ser baseadas emnooes de cidadania, enfocando os e as jovenscomo sujeitos de direito.

Destacamos entre nossos parceiros, ao longodestes anos: a ONG Aao Educativa, com quema cooperaao iniciou-se em 2002, com a realizaaodo Seminrio Internacional "Polticas Pblicas- Juventude em Pauta", evento considerado ummarco para o debate sobre as polticas de juventudeno pas; o Projeto Redes e Juventudes, com quem

foram realizadas oficinas de "escuta qualificada"para conhecer e aprofundar questoes trazidas porjovens do Nordeste sobre o mundo do trabalho;as Prefeituras de Santo Andr e Porto Alegre,responsveis por experincias importantes de

participaao juvenil e articulaao de municpiosbrasileiros em torno de temas como a integraaoregional e as polticas locais de juventude; almde outras importantes ONGs (como Ibase,Instituto Plis, Instituto Cidadania etc.),universidades (em especial o Observatrio Jovemda UFF e o Grupo Divercidade da UFMG), aCUT e grupos juvenis como o Grupo Interagir,Jinha Filmes, Articulaao de Jovens Negros,Jovens Feministas de SP, entre outros.Publicaoes, vdeos, boletins eletrnicos efanzines sao algumas das formas que a FES usacom seus parceiros para registrar sua contribuiao histria das polticas de juventude no Brasil,que ainda tem muitos captulos por escrever.

Polticas locais de juventude no Brasil -

o desafio de espaos em construao

Fernanda Papa (FES Brasil)

Sao de meados da dcada de 90 as primeirasexperincias com polticas locais de juventudeno Brasil. O tema passou a aparecer na agenda

pblica, pautado por ONGs e alguns segmentosjuvenis (como grupos culturais, juventudespartidrias e de pastorais, alm do movimentoestudantil), tendo como antecendentes amobilizaao da sociedade em torno dos direitosda infncia e da adolescencia, consagrada coma criaao do Estatuto da Crianca e do Adolescente

(ECA) em 1992 (Spsito, 2003).

Nesta poca, os municpios que dispunham deprojetos para a populacao jovem estavamexecutando, em geral e a partir de parcerias comONGs, programas e projetos desenhados efinanciados pelo governo federal. Estes projetoseram em sua maioria voltados para a reduao e

prevenao de violncia, doenas sexualmentetransmissveis, gravidez precoce e desempregoentre os e as jovens. Sao exemplos destas

iniciativas, marcadas pelo nao envolvimento dejovens em sua formulaao, como aponta Spsito,os projetos da Comunidade Solidria e os projetosrealizados com recursos do FAT (Fundo deAssistencia ao Trabalhador).

no final dos anos 90 que alguns governoslocais, notadamente aqueles considerados docampo democrtico popular, passaram adesenvolver aoes para jovens, considerandonovas dimensoes, como a importancia da

participaao juvenil no espao pblico e naconstruao de programas que lhe dissessemrespeito. Como resultado da busca de dilogo eapresentaao de demandas por parte de segmentos

juvenis (Abramo, 2005) e tambm decompromissos assumidos em programas degoverno (Sposito, 2003), nascem entao os

primeiros organismos no executivo, com a tarefade articular polticas de juventude e construir a


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sua transversalidade com outras areas daadminstracao, alm de fazer a interlocuao comos jovens.

As assessorias e coordenadorias, em sua maiorialigadas s Secretarias de Governo, ou de AaoSocial ou ainda de Participaao e Cidadania -ou algo do estilo -, passaram a organizar atividadescom jovens, discutir e desenhar projetos, buscar

parcerias com ONGs e organizaoes dacooperaao internacional para sua realizaao.Alm disso, tiveram desde o incio a tarefa defazer conhecer, negociar e debater internamentenos governos a importncia de se promover

polticas de juventude, em uma tica de promoaode direitos dos e das jovens. O fomento participacao, por exemplo, nos processos deOramento Participativo, as primeirasConferencias Municipais de Juventude e a criaaode espaos para expressao da cidadania, a exemplode alguns Centros de Referencia da Juventudesao exemplo de aoes que marcaram desde estapoca as iniciativas de coordenadorias eassessorias de juventude. Segundo levantamentoda ONG Acao Educativa, havia 24 municipios

com organismos voltados para as polticas locaisde juventude at o ano 2000.

Apartir de 2001, com novos governos municipaiseleitos, mais organismos foram criados para aarticulaao de polticas de juventude,especialmente nas prefeituras conquistadas por

partidos de esquerda ou centro-esquerda (Spsito,2003). Entre as demandas dos jovens eorganizaoes ligadas a esta temtica ficavaexplcita a necessidade de as prefeiturastrabalharem uma pauta multisetorial, dando contada diversidade em que vivem as juventudes, paraalm das preocupaoes "tradicionais" comeducaao e segurana (Abramo, 2005).

As experincias destes organismos, seja comalguns bons resultados e consideradas tambmtodas as dificuldades - que variavam da ordemoramentria, a de recursos humanos e at de

legitimidade poltica no interior dos governos -foram importantes para que, a partir de 2003,no contexto do entao novo Governo Lula,diferentes atores sociais se dedicassem a propor

uma poltica nacional de juventude para o Brasil,pela primeira vez.

Alm da criaao de uma Frente Parlamentar(2003) na Camara Federal, que passou a se dedicar construcao de um Plano Nacional e um Estatuto

para a Juventude no Brasil , o Governo Federal,por meio da Secretaria Geral da Presidncia,criou um Grupo Interministerial, que mapeouaoes de todas as reas do governo para os jovens

e reuniu dados importantes para a definicao deprioridades em uma poltica nacional naoconhecidos at entao.

Ao mesmo tempo, pela sociedade civil, entrediferentes contribuioes, destacou-se o processo

promovido pelo Instituto Cidadania, chamadoProjeto Juventude. A partir da reuniao dediferentes atores envolvidos com as questoes da

juventude , em seminarios e oficinas temticos,o projeto produziu publicaoes, uma pesquisa

nacional e um documento final com propostaspara polticas publicas de juventude, vlidas paraos ambitos nacional, estadual ou municipal. Estedocumento foi entregue ao Presidente Lula, em

julho de 2004, simultaneamente realizaao da1. Conferencia Nacional de Juventude,organizada pela Comissao de Juventude daCmara dos Deputados, em Braslia.

Estas e outras contribuioes, como pesquisas daUNESCO, por exemplo, prepararam o caminho

para a criaao da Secretaria Nacional de Juventude,ligada Secretaria Geral da Presidncia, emfevereiro de 2005. Alguns meses mais tarde, veioa nomeaao do Conselho Nacional de Juventude,ambos inditos at entao no Brasil.

Entre as prefeituras que j desenvolviam polticasde juventude at as eleioes de 2004, vriasmantiveram as assessorias e secretarias a partir


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de 2005, algumas nao existem mais. Outras foramcriadas, como na cidade de Curitiba, por exemplo,em decorrncia da necessidade de haver umorganismo especfico para coordenar a execuao

do Pr-Jovem, principal programa da SecretariaNacional de Juventude, direcionado a jovens de18 a 25 anos e realizado por meio de convnioscom os municpios.

Espera-se que com a institucionalidade trazidapela nova estrutura no Governo Federal, as polticaslocais de juventude no Brasil possam ser assumidas

por mais municpios. Os desafios, no entanto,permanecem bastante semelhantes aos que Marlia

Spsito apontava no incio de 2003:

"Como tornar efetiva a capacidade de articularaoes, parcerias e evitar que aos organismos reste

apenas uma funao decorativa e de certa formaapaziguadora de pressoes propostas por jovensorganizados e demais setores da sociedade civil,quando essa incipiente institucionalidade de

forma geral marcada pela ausncia de podernas relaoes de governabilidade no interior do

poder executivo. (...) O carter ainda precrioda inserao administrativa no organismo, noaparelho pblico, faz com que os gestores jovensdevam despender um esforo adicional. Almda busca de reconhecimento da necessidade de

polticas de juventude e do organismo do qualparticipa - muitas vezes um setor estranho emestruturas pesadas - preciso percorrer um

caminho de legitimidade que decorre de suacondiao juvenil."

Fernanda Papa (FES Brasil) - [email protected]

Raquel Souza - Bacharel em Pedagogia, integraa equipe do Programa Juventude da AoEducativa, ONG sediada na cidade de So Paulo. co-autora de Dilogos com o Mundo Juvenil:subsdios para educadores (Ao Educativa,2005)Maria Virgnia de Freitas - Sociloga e Mestreem Educao, coordenadora do ProgramaJuventude da Ao Educativa, em So Paulo, emembro do Conselho Nacional de Juventude. co-autora de Juventude em Debate (Ao

Educativa / Cortez, 2000), O Encontro dasCulturas Juvenis com a Escola (Ao Educativa,2001) e Polticas Pblicas: Juventude em Pauta(Ao Educativa / Cortez / Fundao FriedrichEbert, 2003).

Desde 2002, Maria Virginia e Raquel, entre outrastcnicas da rea juventude da Ao Educativa,tm sido interlocutoras da Fundao FriedrichEbert na construo de parcerias entre as duasentidades, para realizar debates sobre polticas

pblicas de juventude no Brasil. Entre eles,destacamos o Seminrio Internacional PolticasPblicas: Juventude em Pauta (2002), o processoda I Conferncia Municipal de Juventude deSanto Andr (2003), seminrios sobre Inserode Jovens no Mundo do Trabalho (2004) e sobre

a instalao do at ento indito ConselhoNacional de Juventude (2005).

Mail: [email protected];[email protected]

SOBRE AS AUTORAS

PROSUR


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La gnesis de las expresiones localesmunicipales dedicadas a los temas de

juventud y relacionamiento desde el muni-cipio con los jvenes, individual o colecti-vamente, es de reciente data, que se inau-gura con el cambio poltico en los prime-ros aos de la dcada de los noventa. Es asque con el inicio de la dcada de losnoventa, y en el contexto del proceso deredemocratizacin del pas, y su expresinen el espacio comunal con la eleccin delos representantes comunales, surgidurante 1993 por parte del Instituto Nacio-nal de la Juventud (INJUV), el ProgramaDemocratizacin Local, a partir del cual secomienzan a crear las casas de la juventudy las Oficinas Municipales de Juventud(OMJ) -siendo que en la actualidad se uti-liza tambin la nomenclatura de UnidadesMunicipales de Juventud-, teniendo comomisin y objetivo el diseo, implementa-

cin y coordinacin de lo que podra deno-minarse ciertas polticas locales de juven-tud en el espacio comunal, y como ubica-cin institucional el municipio de la comu-na (cf. Valls, 1999:4-7).

Ese proceso puede concebirse como lagnesis de las OMJ, impulsadas e incenti-

vadas por el INJUV, pero debiendo asumirlos municipios como contrapartes de ste y

junto con el compromiso del apoyo yfomento para la instalacin y consolida-cin de estas expresiones orgnicas institu-cionales de nivel comunal.

La evolucin y desarrollo de las OMJ, enlo que podemos sealar como "la dcada

larga" en Chile (1990-2005), ha sido demarchas y contramarchas, de avances yretrocesos, no habiendo un comn deno-minador en el concierto general de lasOMJ del pas. Pero s es un hecho elaumento cuantitativo y cualitativo en algu-nas, teniendo en cuenta que a principio delos noventa slo se constataba la existen-cia de quince oficinas, a las ms de ciencomunas que se pueden contabilizar en laactualidad que poseen una instancia muni-cipal dedicada al tema de juventud.

Efectivamente una parte fundamental deldespliegue y consolidacin dentro de lasdenominadas polticas de juventud, pasan

por la existencia de instancias locales quepuedan desarrollar, profundizar e imple-mentar dichas propuestas, develando sus

alcances, contradicciones y efectos, tantoen el plano de la institucionalidad, comoespecialmente en los beneficios y utilidadque puedan significar en la vida de los

jvenes de cada localidad donde se imple-mentan.

Pues resulta difcil que pueda consolidarse

1 EL ESPACIO LOCAL COMOPUERTA DE ENTRADA

A LA CIUDADANAJUVENIL

La gestin local de juventud en ChilePor Oscar Dvila Len

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algn diseo y modelo, acompaado desus respectivas estrategias de implementa-cin en relacin a polticas pblicas de

juventud, sin considerar como instanciasfundamentales de este esquema a las OMJ,pues es a travs de ellas por donde puede"concretizarse y visibilizarse" de maneracotidiana y cercana algn tipo de polticade juventud de carcter integral (no secto-rial), siendo que el espacio local/municipalsigue siendo el ms cercano entre sujetos

juveniles e instancias pblicas. Y ademsque, desde el punto de vista del sujeto

juvenil, es el espacio donde puede concre-tizar su calidad de ciudadano, pudiendoentenderse como la expresin de la "ciuda-dana a escala humana". Es decir, la prin-cipal medida sobre su utilidad debe cen-trarse en los efectos benficos que ellas

pueden acarrear a los jvenes.

Existe un cierto diagnstico y evaluacin,

ms o menos compartido, sobre las poten-cias y debilidades que presentan las OMJdel pas, siendo estas ltimas aquellas quese han presentado a lo largo de casi todo su

proceso de instalacin. Entre ellas, pode-mos enunciar como una de las principales,la falta de reconocimiento por parte delmunicipio a la labor que stas desarrollan,como por extensin hacia el tema juvenil,

es decir, las dos caras del mismo fenme-no: no hay reconocimiento, porque la din-mica juvenil es poco relevante, a ojos delos decididores comunales. Otras debilida-des se relacionan con los reducidos presu-

puestos y escaso personal; poca continui-dad de sus acciones en el tiempo; inestabi-lidades de sus procesos y de los gestores

de ellos, especialmente en aquellas comu-nas con mayor rotacin en la gestin alcal-dicia; deficiencias en la calificacin profe-

sional de sus integrantes; ausencia de pla-nes de juventud; baja interlocucin e inser-cin con actores juveniles locales; imple-mentaciones de acciones enmarcadas en

buena medida en el uso del tiempo libre; yen el ltimo tiempo, una fuerte tendencia atrabajar desde la ptica del control social.

En cuanto al despliegue de las potenciali-dades de las Oficinas Municipales deJuventud, est el que algunas de ellas hanlogrado consolidar un trabajo en el tiempo,destacndose especialmente aquellas quelograron ciertos niveles de instalacin alinterior del municipio y que no correspon-den necesariamente a las comunas msgrandes e importantes del pas.

Es as que sigue plenamente vigente el

relevar la importancia que deben adquirirlas unidades locales de juventud y propen-der a su fortalecimiento institucional desdelos propios gobiernos locales, lo que faci-litara el potenciar el relacionamiento ytrabajo en las temticas de juventud en elespacio local y la vinculacin entre gobier-no local y jvenes de la comuna.

Sin duda que aqull

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