7. FUNARI, P. La Arqueología Histórica Mundial y Latinoamericana en Las Últimas Dos Décadas....

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Revista de Arqueología Histórica Argentina y Latinoamericana Número 2 11 LA ARQUEOLOGÍA HISTÓRICA MUNDIAL Y LATINOAMERICANA EN LAS ÚLTIMAS DOS DÉCADAS Pedro Paulo A Funari* ¿Cuáles fueron los rumbos de la disciplina en las últimas décadas? Este es el reto que me propusieron los editores de la Revista de Arqueología Histórica Argentina y Latinoamericana. Me ocupo de estos temas desde la década del 1980 y, por lo tanto, me parece una oportunidad adecuada para discutir, aunque de manera breve, la trayectoria de la disciplina, tanto en el mundo como, en particular, en nuestra Latinoamérica. Son comentarios à chaud, sin referencias exhaustivas, sólo algunas indicaciones. De todas maneras, remito al lector al artículo “A report on historical archaeology publications in Latin America”, donde se encuentran referencias (Funari 2007). En el World Archaeological Congress (WAC) 6, en Dublín (Irlanda), en julio de 2008, hemos organizado una sesión exitosa sobre cuestiones actuales de la disciplina. En 1989, en Venezuela, durante el WAC2, empezamos a organizar la sesión para el congreso de India, WAC3, en 1994, que resultaría en la publicación de Historical Archaeology, Back from the edge. En este artículo busco presentar, de forma muy breve, una interpretación panorámica sobre la trayectoria de la disciplina en el mundo y menciono apenas los cambios en la disciplina en el ámbito latinoamericano. Chris Gosden en su reciente Archaeology and Colonialism, Cultural Contact from 5000 BC to the Present parte del presupuesto que temas como el colonialismo tienen sentido sólo en el contexto histórico amplio y recusa, explícitamente, las definiciones estrechas de la Arqueología Histórica como disciplina del mundo moderno o capitalista. Resalta que tipos ideales como el orden georgiano (Georgian order) y la explicación de la modernidad sólo a partir del capitalismo desconocen el carácter ambiguo, híbrido mismo de la potencia capitalista más paradigmática, los Estados Unidos de América. Tanto más esto se aplica a la modernidad, en sentido amplio, llena de pasados y de diversidad. Africanos e indígenas vivían con los anglos del Georgian order y eso inválida, eo ipso, la idealización del individualismo burgués como modelo analítico. * Profesor catedrático, Universidade Estadual de Campinas, Coordenador do Núcleo de Estudos Estratégicos (NEE/Unicamp). Funari, Pedro Paulo A. 2008. La arqueología histórica mundial y latinoamericana en las últimas dos décadas. Revista de Arqueología Histórica Argentina y Latinoamericana. 2:11-15.Buenos Aires.

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Revista de Arqueologa Histrica Argentina y LatinoamericanaNmero 211LA ARQUEOLOGA HISTRICA MUNDIAL Y LATINOAMERICANA EN LAS LTIMAS DOS DCADASPedro Paulo A Funari*Cules fueron los rumbos de la disciplina en las ltimas dcadas? Este es el reto que me propusieron los editores de la Revista de Arqueologa Histrica Argentina y Latinoamericana. Me ocupo de estos temas desde la dcada del 1980 y,porlotanto,mepareceunaoportunidadadecuadaparadiscutir,aunque de manera breve, la trayectoria de la disciplina, tanto en el mundo como, en particular, en nuestra Latinoamrica. Son comentarios chaud,sin referencias exhaustivas, slo algunas indicaciones. De todas maneras, remito al lector al artculo A report on historical archaeology publications in Latin America, donde se encuentran referencias (Funari 2007).En el World Archaeological Congress (WAC) 6, en Dubln (Irlanda), en julio de 2008, hemos organizado una sesin exitosa sobre cuestiones actuales de la disciplina. En 1989, en Venezuela, durante el WAC2, empezamos a organizar la sesin para el congreso de India, WAC3, en 1994, que resultara en la publicacin de Historical Archaeology, Back from the edge. En este artculo busco presentar, de forma muy breve, una interpretacin panormica sobre la trayectoria de la disciplina en el mundo y menciono apenas los cambios en la disciplina en el mbito latinoamericano.ChrisGosdenensurecienteArchaeologyandColonialism,Cultural Contactfrom5000BCtothePresentpartedelpresupuestoquetemascomo elcolonialismotienensentidosloenelcontextohistricoamplioyrecusa, explcitamente,lasdefnicionesestrechasdelaArqueologaHistricacomo disciplina del mundo moderno o capitalista. Resalta que tipos ideales como el orden georgiano (Georgian order) y la explicacin de la modernidad slo a partir del capitalismo desconocen el carcter ambiguo, hbrido mismo de la potencia capitalista ms paradigmtica, los Estados Unidos de Amrica. Tanto ms esto se aplica a la modernidad, en sentido amplio, llena de pasados y de diversidad. Africanos e indgenas vivan con los anglos del Georgian order y eso invlida, eo ipso, la idealizacin del individualismo burgus como modelo analtico.* Profesor catedrtico, Universidade Estadual de Campinas, Coordenador do Ncleo de Estudos Estratgicos (NEE/Unicamp).Funari,PedroPauloA.2008.Laarqueologahistricamundialylatinoamericanaen las ltimas dos dcadas. Revista de Arqueologa Histrica Argentina y Latinoamericana. 2:11-15.Buenos Aires.Funari 200812EstasconsideracionesdeChrisGosden,alfnaldelproceso,sirven para retomar la trayectoria de la disciplina. Creada en Estados Unidos como disciplina para estudiar los WASPs (White Anglo-Saxon Protestants), desde el principio se ha defnido como el estudio del nuevo mundo moderno y burgus. La introduccin de los esclavos, ya en los aos 1980, en los estudios arqueolgicos histricos, ha sealado unos cambios y unas insatisfacciones con los rumbos de la disciplina. El contexto mundial cuestionara, adicionalmente, el concepto mismo de Arqueologa de la modernidad o del capitalismo. En Estados Unidos, contodo,lasgrandessntesisdeltemahancontinuadoacentrarseenla defnicindeladisciplinacomoelestudiodelaculturamaterialcapitalista. Charles Orser fue quien lo ha expresado de manera mejor articulada y amplia, con su clsico A Historical Archaeology of the Modern World, pero tambin otros han tomado el capitalismo como defnidor, entre ellos Randall McGuire y Mark Leone. En direccin diversa, en los mismos Estados Unidos, estudiosos como Barbara Little y David Small han propugnado, tambin en la dcada de 1990, que la disciplina trate de las sociedades con escritura, no un perodo histrico o un sistema econmico. EstasdiferenciaspermanecenenelsigloXXI.Losmotivossonvarios, aempezarporelcontextosociopolticoyacadmicodelosestudiosos.La mayoradelostericosdeunadisciplinavueltaalestudiodelcapitalismo viven bajo un sistema capitalista desarrollado y, en general, son crticos de las caractersticas opresivas del capital. Viven esta realidad y la universalizan para elpasadorecientedelosltimossiglos.Estoeselcasodenorteamericanos comoOrser,McGuireyLeone,intelectualesquevivenenlamsgrande potenciacapitalistayque,pordiversosmotivos,soncrticosdeestemismo capitalismo. En un contexto americano tan hostil al marxismo, estos crticos delcapitalpartendeMarxparadefnirlamodernidadysuscontradicciones yconfictos.Porotraparte,laformacinintelectualdeestosinvestigadores esantropolgica,enelsentidoamericanodeltrmino(noeuropeo);esdecir, nohistrica.LaAntropologaamericanahasurgidoparaelestudiodelotro cultural,delosindgenas,preocupadaconmodelosinterpretativos.Poreste motivo,losarquelogosnorteamericanosqueestudianlosltimossiglosno son historiadores, acostumbrados con anlisis de contexto histrico, como es el caso en Europa: su atencin est en los modelos interpretativos. El capitalismo como modelo interpretativo usado por los arquelogos histricos americanos se explica tambin por esta formacin antropolgica. Por otra parte, los investigadores que propugnan una disciplina interesada por los ltimos 7.000 aos viven en situaciones menos exclusivamente capitalistas y han seguido una formacin acadmica histrica y flolgica. Los arquelogos que estudian la cultura material de la Edad Media tarda, del perodo moderno o contemporneo son, antes de todo, estudiosos del contexto histrico de cada poca y parten de un Revista de Arqueologa Histrica Argentina y LatinoamericanaNmero 213conocimiento sobre la base de los documentos escritos. Su formacin es histrica y sus sociedades europeas son caracterizadas por su sentido de historia. Batallas medievales o de los ltimos siglos son sentidas por las personas comunes y por tanto por los arquelogos como parte del presente. La Batalla del Boyne, en Irlanda (1690),entrecatlicosyprotestantes,essentidacomounacontecimientovivo. Adems, estudiosos como Matthew Johnson o Cris Gosden viven en una sociedad de estamentos jurdicos, con nobles y comunes, viajan por carreteras romanas y pasan por ciudades medievales. Cmo excluir todo esto de la modernidad? De todas maneras, esta divisin entre americanos y europeos es real pero slo parte del cuadro, pues hay, en los dos lados, investigadores que preferen adoptar la defnicin ms comn del otro lado del Atlntico y esto se explica, enparticular,porlaformacindelosinvestigadores.Esteeselcasodelos norteamericanos que han seguido una formacin flolgica e histrica, o que han estudiado sociedades no angloamericanas y, por lo tanto, han tenido un contacto ms profundo con la diversidad histrica. Un americano como David Small ha estudiado las civilizaciones mediterrneas, Barbara Little o Barbara Voss tratan con asentamientos y realidades especfcas, histricas, no explicables por la asimilacin sencilla al capitalismo como categora explicativa. El estudio de las especifcidades de los hispanoamericanos (e.g. Barbara Voss), as como de los griegos antiguos (e.g. David Small), ha inducido a estos arquelogos a miradas ahistricas, especfcas, menos centradas en el capitalismo como factor explicativo. En este sentido, la diversidad de gnero no se limita al capitalismo y,alrevs,permiteunacomparacinentrediferentessituacioneshistricas. Lassesionesacadmicas,publicacionesylacooperacininternacionaldela mirada histrica buscan unir investigaciones sobre diferentes pocas y lugares, como en el WAC 6 el tema Intimate encounters, organizado por Barbara Voss y Eleanor Casella. Todo esto se refeja en la historia de la disciplina en Latinoamrica. Desde el fn de las dictaduras latinoamericanas, en especial a partir de la dcada de 1990, se han multiplicado los trabajos de Arqueologa Histrica. Esto se explica por las posibilidades surgidas de la democracia, como la legislacin de proteccin ambientalypatrimonial,ascomoporlalibertadparainvestigartemasde relevancia poltica. El caso ms claro de esta funcin poltica la tenemos con los trabajos sobre la Arqueologa de la represin y la resistencia en Amrica Latina, ttulo de un libro publicado con el apoyo de la Secretaria de Derechos Humanos de Argentina (2006) y que va a salir en portugus en 2008 y en ingls en 2009 (compilado por Pedro Paulo Funari y Andrs Zarankin). Los trabajos de campo se han multiplicado considerablemente en estos aos, y algunas caractersticas son destacadas. En primer lugar, los temas de investigacin se han movido de las elites para los segmentos populares, en amplio sentido. La Arqueologa de los esclavos se ha expandido, con gran visibilidad en varios pases, como Brasil, Funari 200814Cuba, Colombia y Argentina.Esta inclusin de los esclavos en el horizonte de la disciplina en nuestro continente fue signifcativa, de manera que permite un necesario aggiornamento de sus compromisos sociales. En la misma direccin, sehandesarrolladolosestudiosdelainteraccinentreindgenas,europeos yafricanos,enlacreacindenuevassociedadescolonialesopostcoloniales. Conceptos de la teora social latinoamericana fueron, en este sentido, vitales, enparticulartrminoscomotransculturacin,hibridizacinocreolizacin. Talesconceptos,aunquesurgidosenLatinoamrica,refejanasimismolas discusionesdelpostmodernismosobreelcarcterfuido,mutanteonmada de las identidades sociales. Temas como las relaciones de gnero, feminismo o queer theory han sido incluidos en la agenda de la disciplina.Otrasdostendenciassehanproducidoconresultadosnotables.La introduccindelaArqueologaPblica,oparticipativa,enelcontinenteha afectadoalaArqueologaHistricademaneradirecta.Surgidaenelmundo comoprcticapreocupadaconlainteraccinconlospueblosindgenas,la ArqueologaPblicaenLatinoamricahaalcanzadootrasdimensiones,en particularconlainterlocucindelosinvestigadoresconlosgrupossociales, como pueden ser las comunidades cimarronas o los parientes de desaparecidos. Lainclusinenelprocesodeinterpretacinygestinarqueolgicadetales grupos sociales constituye una contribucin nica de la Arqueologa Histrica latinoamericana.Arazdeello,lainsercininternacionaldelainvestigacin local fue extraordinaria. Latinoamrica contina ocupando un lugar perifrico en el escenario internacional. Adems, la ciencia producida en nuestro continente contina afectada por problemas estructurales: escasos recursos econmicos, publicaciones mal difundidas, uso de lenguas locales, castellano y portugus, en detrimento de la lingua franca de la ciencia, el ingls. Todo esto permanece y cambia a pasos lentos. Aunque en este contexto adverso, las publicaciones internacionales en ingls se han multiplicado en estos aos y arquelogos locales participan de las principales revistas, como el International Journal of Historical Archaeology, y editan libros o enciclopedias universales, como la Encyclopaedia of Historical Archaeology (Routledge) o la Oxford Encyclopaedia of Archaeology. Tantoentrminosepistemolgicos,comopolticos,eldesarrollodela Arqueologa Histrica del Viejo Mundo ha continuado y merece ser destacado. Ab initio, la disciplina ha contado con estudios, trabajos de campo y publicaciones sobretemasdominadosporlospasesricosycentrales,encamposcomo Egiptologa o Arqueologa Clsica. La inclusin de estas investigaciones en el mbito delaArqueologaHistricalatinoamericanaconstituyeunatomadeposicin epistemolgica de independencia intelectual frente a la mirada dominante en los Estados Unidos, con su nfasis en el capitalismo. Por otra parte, polticamente, constituye un desafo particular, pues son reacios a tratar algunos temas y a publicar sobre los dominantes. Esto es una reversin de la posicin tradicional, en la cual los Revista de Arqueologa Histrica Argentina y LatinoamericanaNmero 215cientfcos de pases ricos vienen al continente, trabajan y publican sobre nuestras realidades, muchas veces sin citar a la literatura local en castellano o portugus. Los trabajos que dan cuenta de la presencia de Arqueologa latinoamericana sobre temas centrales se han multiplicado,por ejemplo, los frecuentes artculos de Airton Pollini en la revista popular francesa Histoire Antique, su captulo sobre los sitios griegos en el sur de Italia en la Oxford Encyclopaedia of Archaeology o el libro New PerspectivesontheAncientWorld,Modernperceptions,ancientrepresentations, compilado por Pedro Funari, Renata S. Garraffoni y Bethany Letalien. LosrumbosdelaArqueologaHistricamundialson,pues,claros:en direccinaunaepistemologacrtica,alcorrientedelasdiscusionesdela teora social, abierta a la interaccin con la sociedad. La Arqueologa Histrica Latinoamericana, a su vez, se ha desarrollado de mltiplas formas, cada vez ms integrada a la ciencia internacional, sin descuidar su autonoma epistemolgica y poltica.BIBLIOGRAFAFunari, P. P., M. Hall y S. Jones (comp.)1999 HistoricalArchaeology,Backfromtheedge.Routledge.Londres.Reino Unido. Funari, P. P.2007.A report on historical archaeology publications in Latin America.Internacional Journal of Historical Archaeology 11:97-106.Gosden, C.2004.Archaeology and Colonialism, Cultural Contact from 5000 BC to the Present. Cambridge University Press. Cambridge. Reino Unido.Orser, C.1996.Ahistoricalarchaeologyofthemodernworld.PlenumPress.NuevaYork. Estados Unidos.