Nos fuimos de allí muy preocupados porque pre-cisamente la fama de este astrónomo era predecir catástrofes con fechas exactas. Pronosticó el gran terremoto de Chile del 24 de enero de 1939; y no tan solo acertó el día exacto, sino que, por solo 4 horas de diferencia, casi acierta la hora. Sabemos que no existe un método científico para pronosticar terre-motos con tanta exactitud. Además, este astrónomo acertó otros terremotos en el 1960, 1965 y 1985.

De Chile, Joseph viajó a Colombia a entrevistar al “maestro gnóstico” para el documental. En la entre-vista Joseph le preguntó si el Hercólubus vendría en julio de 1999, tal como éste le confirmara por escrito anteriormente, o si se vería el 11 de agosto, como ase-guraba el astrónomo. Él le confirmó que estaba de acuerdo con el astrónomo, y que se vería durante el eclipse. Todo esto, mas el hecho de que la fecha coincidía con otras profecías, como la cuarteta de Nostradamus que decía: “En el año 1999 y siete meses, vendrá del cielo un gran rey del terror…”, hacía toda esta historia muy creíble.

Al llegar a Puerto Rico Joseph reunió a su equipo de producción con el propósito de determinar si decíamos la fecha en el programa o no. Le comenté que si decía la fecha, y no pasaba, pondría en juego su credibilidad. Luego de una corta reflexión nos dijo: “Prefiero decirlo y que no pase, a que pase y no decirlo por temor a las consecuencias. Primero está lala gente, y si esto va a pasar, hay que advertirles”. Entonces, entendí su noble propósito.

Fue a finales de junio de 1999, luego de trabajar hasta el cansancio, cuando se estrenó el segundo especial titulado "Hercólubus 2, El Éxodo", causando nuevamente un gran impacto en la tele-audiencia. En éste, se detallaba la pre-paración espiritual que las personas requerían para poder sobrellevar los efectos de los tiempos deldel fin. Podía extraerse que los tiempos venide-ros serían muy difíciles, y sólo amparándonos en nuestro Espíritu y haciéndole madurar podríamos sobrepasarlos con lucidez. Además, se comunicó la fecha confirmada sobre cuándo se esperaba que ocurriera el evento cósmico (según los estudios del astrónomo chileno y acorde a lo que afirmó el “maestro gnóstico”).

Luego de este programa, Joseph pasó por muchos pesares, entre los cuales comprendi-eron el descubrir cosas terribles del “maestro gnóstico”, haciéndose cierto que no era el maestro que proyectaba ser, y estar perseguido por los seguidores de éste para matarle; ser con-denado por las propias personas a que les brindaba la enseñanza gratuitamente luego de revelarles la farsa del “maestro gnóstico”; ser crucificado públicamente sin piedad por los principales rotativos del país y programas tele-visivos, que no paraban de censurarlo y vitupe-rarlo, junto con muchos de sus compatriotas, por no haberse cumplido la tan amarga fecha, de agosto de 1999, entre tantos otros. Joseph sabía que nada de lo que dijera podría cambiar la opinión del público, luego de que los medios de comunicación lo sacrificaron públicamente. Por lo tanto, para proteger a aquellos que estaban a su alrededor, tampoco accedió a que ninguno se enfrentara a esas controversias para defenderldefenderlo.

Escena del Hercólubus 2...el Exodo.´

Escena del Hércolubus:el Fin de los Tiempos