Ábrego1 

  

Plaza “Guillermo Quintero Calderón” y templo de Santa Bárbara de la Cruz. 

199° Años de la fundación de Ábrego (Norte de Santander) 

 

Ateniéndonos a la información registrada en la página web del municipio de Ábrego2, y según la fecha de fundación que allí se registra, este municipio ayer cumplió 199 años de fundación y se aproxima al bicentenario de su creación.

Este municipio nortesantandereano recibió los nombres de Llano de los Orejones, Llanos de la Cruz, Llanos del Oroque y La Cruz.

Fue fundado el 12 de marzo de 1810 tras la donación de terrenos para levantar la población: las donantes fueron las hermanas Ana María y Josefa de la Encarnación Maldonado Quintero.

                                                            1 El ábrego es un viento procedente del  suroeste,  templado,  relativamente húmedo y portador de  lluvias. Es un viento  típicamente 

español, sobre todo en la Meseta y Andalucía. Es el viento de los temporales de otoño y primavera que son la base de la agricultura de 

secano, pues  son  su principal  recurso hídrico. Procede del Atlántico, de  la  zona entre  las  Islas Canarias y  las Azores. El origen de  la 

palabra ábrego está en la palabra latina africus, que era el nombre con el que antiguamente identificaban al citado viento, procedente 

del  sur, de África;  si bien pudiera  guardar  relación  también  con  la  voz  latina  apricus  (abrigo);  y es que durante  los  temporales del 

suroeste,  las  lluvias  impiden  las  labores del  campo, por  lo que  a  los  campesinos no  les  queda más  remedio que  “estar  al  abrigo”, 

ponerse a  resguardo o a cubierto. El ábrego  tiene mala  fama en    toda  la Región Cantábrica, ya que suele estar asociado a catarros, 

cefaleas  y  estados  depresivos. Además  suele  traer  consigo  la  propagación de  incendios por  su baja humedad  relativa del  aire  y  la 

ausencia de precipitaciones. En  la costa cántabra, el ábrego recibe nombres como Viento Sur, Castellano (procedente de Castilla, por 

tanto del sur), Campurriano (procedente de la comarca cántabra de Campoo) o “Aire de arriba” (de La Montaña; la parte más alta de la 

provincia). Si sopla demasiado caliente se refieren a él como “abriguna”, mientras que una “abrilada” sería el período de varios días 

bajo ese régimen de vientos. En el occidente asturiano al ábrego le llaman también aire de castañas, ya que cuando sopla con violencia 

durante el otoño provoca la caída de estos frutos. 

2 http://www.abrego‐nortedesantander.gov.co/nuestromunicipio.shtml?apc=m1I1‐‐&m=f&s=m 

El primer nombre que tuvo esta villa fue el de Llano de los Orejones. Denominación dada por las tropas de Ambrosio Alfinger en 1.530. Fue habitado por los grupos naturales: Unaramas o Turmeros, Orokes, Bucuramas Orotomas, Carasicas y Seborucos.

El 26 de julio de 1.580 con motivo de celebrarse la primera Eucaristía, los encomenderos levantaron un gran madero en el centro del valle, este símbolo cristiano determinó el nombre de la región y desde ese día se empezó a conocerse este territorio como los Llanos de la Cruz.

Esta población surgió en la antigua encomienda de don Juan Quintero Príncipe, en la renombrada hacienda de los Guayabitos, propiedad de las hermanas Ana María y Josefa de la Encarnación Maldonado Quintero, quienes donaron la vieja Capellanía que comprendía toda la sabana para levantar el vecindario, consolidándose el poblamiento con el trazado de calles y plazas y la entrega de los primeros 25 solares para construir casas de habitación, cocinas y huertas.

Acatando la ley 5ª de 1.920 que ordenaba el cambio de título para los municipios homónimos de la República, mediante Ordenanza número 32 del 14 de abril de 1.930 se le dio el nombre de Ábrego, en honor a la heroína nortesantandereana Mercedes Reyes Ábrego3.

Los primeros colonos de Ábrego fueron: Antonio José del Rincón, propietario de la hacienda El Algodonal en 1753; Lope Bernardo de Maris, propietario de la hacienda Aratoque en 1774; María Quiroz del Barco, propietaria de la hacienda la Labranza a finales del siglo XVII; e Isabel Bonilla propietaria de Los Hatos de Oropoma (hacienda que también recibió el nombre de Caracica).

Edwin Leonardo Avendaño Guevara, Pbro.  

                                                            3 El historiador Silvano Pabón afirma que: “El caserío de Urimaco (cercano a Cúcuta) tuvo su origen en una propiedad 

rural desarrollada en el  siglo XVIII,  conocida  como  la hacienda de Urimaco, que  fuera propiedad de Doña Mercedes 

Ábrego de Reyes, quien abrazara  la causa de la Independencia y en 1813 hospedara allí al coronel Simón Bolívar en su 

campaña de  regreso a Venezuela. Su apoyo al Libertador y a  la causa emancipadora  le mereció el  ser encarcelada y 

ejecutada sin ser juzgada por tropas españolas, acusada de espionaje y apoyo a las guerrillas patriotas”.