¿Año del Buen Servicio al Ciudadano o

Año del Turismo Sostenible para el desarrollo del Turismo?

Nuestro gobierno ha decidido que el 2017 sea el Año del Buen Servicio al Ciudadano. La Organización de las Naciones Unidas, de otro lado, ha decidido que el 2017 sea el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo.

¿Es posible la confluencia de ambas decisiones?

Veamos las implicaciones:

El Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo se denomina así porque la Asamblea de las Naciones Unidas reconoce la importancia del turismo internacional y, porque quiere promover una mejor comprensión entre los pueblos en todas partes, conducir a que se tome una mayor conciencia de la riqueza del patrimonio de las diversas civilizaciones y llevar a una mejor apreciación de los valores inherentes de las diversas culturas, contribuyendo así al fortalecimiento de la paz en el mundo.

El Año del Buen Servicio al Ciudadano se denomina así como una muestra de que el Estado Peruano viene trabajando un país para todos los peruanos y porque existe una Política Nacional de Modernización de la Gestión Pública que incluye principios y lineamientos para una actuación coherente y eficaz del sector público al servicio de los ciudadanos y el desarrollo del país; y porque dicha Política tiene como visión un Estado moderno al servicio de las personas, lo que implica la transformación de enfoques y prácticas de gestión que conciban los servicios o intervenciones como expresiones de derechos de los ciudadanos.

Un rápido análisis nos permite verificar que la acción coherente y eficaz del sector público al servicio de los ciudadanos y el desarrollo del país, con servicios o intervenciones que sean expresiones de los derechos de los ciudadanos, puede llevar a una mejor expectativa del ciudadano respecto de mejor calidad de vida, lo que puede significar una mejor percepción del ciudadano de mayor bienestar. Sin embargo eso no es ni será suficiente para alcanzar un mayor grado de desarrollo, ya que lograr esto último, requiere no sólo de acciones, sino de mejores políticas de desarrollo, y que los resultados de dichas políticas puedan verse. Debemos rescatar, en tanto, el hecho de que cuando la sensación de bienestar está presente, la toma de conciencia tiende de activarse, y en tal sentido, se aprecia mejor el valor de la propia cultura y la riqueza con que ella cuenta.

Creemos por tanto que es posible el amalgamiento de ambas decisiones, teniendo un país que aprecia de mejor manera los recursos turísticos que tiene, dándoles el valor que deben tener, y entendiendo que somos un país privilegiado. Al mismo tiempo, debemos asegurarnos de tener un Estado fuerte y sólido, que entienda perfectamente que su razón de ser son los ciudadanos.

Con esta perspectiva, nos toca a todos los que trabajamos en turismo, valorar ambas menciones, y seguir contribuyendo con nuestro granito de arena a desarrollar acciones que sean sostenibles y de calidad, buscando el bienestar de todos los ciudadanos y entendiendo que nuestra nación es y debe ser motivo de orgullo para todos los peruanos.