“Servicios Sanitarios Públicos en la

Ciudad de México”

Sobre Derechos Humanos y Control de Enfermedades

Proyecto de Investigación Solicitada por la UNADM

Para curso propedéutico PROPE_2018_2_CS

Aspirante: Víctor Hugo Vargas De la Torre

Número de Registro: AS1801061597

División de Ciencias Sociales. (DCS).

Políticas y Proyectos Sociales.

Monitor: Licenciada Raquel Santiago Cruz.

Publicación: www.lawebsocial.com

08 junio 2018

INDICE

1. INTRODUCCIÓN

1.1. Problemas Sociales

1.2. Problema de Salud Pública

1.3. Problema de Derechos Humanos

1.4. Metodología

2. HISTORIA DE LOS SANITARIOS Y BAÑOS PÚBLICOS

2.1. Breve Historia de los sanitarios públicos en “Viejo Mundo”

2.2. Breve Historia de los sanitarios públicos en la Ciudad de México

3. PROBLEMAS SOCIALES, DE SALUD Y DERECHOS HUMANOS

3.1. Profundización sobre los problemas por la carencia de servicios sanitarios en la ciudad.

3.2. Investigación de campo y entrevistas.

3.3. Grupos vulnerables en la Ciudad de México.

3.4. Encuestas.

3.5. Buscando posibles soluciones.

4. CONCLUSIONES

4.1 Conclusiones

4.2 Mensaje Final

5. Bibliografía

Introducción

Una actividad humana, muy frecuente e impredecible, es la necesidad de

deshacernos de fluidos corporales. Normalmente, la mayoría contamos con

sanitarios en nuestras casas o trabajos para esta función biológica tan elemental.

Algo que parece tan normal y habitual, no representando mayor problema,

más que acudir a un baño, puede ser un evento terrible, angustiante o hasta

traumático si no contamos con el espacio para hacerlo.

Después de meditar sobre qué tema abordar para el curso propedéutico para

la UNADM (Universidad Abierta y a Distancia de México), me decidí sobre los

servicios sanitarios en la Ciudad de México, debido al escaso material literario

encontrado en este tema y enfocado sobre todo en temas de salud

Cuando platicamos con familiares, amigos o conocidos, eventualmente

surgen pláticas sobre el “horror” que hemos llegado a pasar por no contar con

servicios sanitarios a la mano, y entonces, tendremos que ir a algún restaurante,

centro comercial, y realizar alguna compra o pagar para poder disponer de un

retrete en forma rápida, siempre y cuando no haya las grandes filas en el sanitario

para las mujeres o la tremenda suciedad en el de los hombres.

Pero, ha pensado ¿qué pasaría si no tuviéramos dinero para entrar al

establecimiento o no hubiera el servicio disponible? ¿qué pasaría si tuviéramos

una discapacidad física que nos impidiera valernos por nosotros mismos? ¿Qué

haríamos si no encontráramos un lugar rápidamente para esta actividad?

No todas las personas tienen la suerte de contar con un servicio sanitario

relativamente cerca y de acceso inmediato, limpio, con servicios elementales para

el aseo; de hecho, los servicios sanitarios dentro del hogar, son un lujo que

gozamos de no más de 100 años de antigüedad.

Por su naturaleza y las fechas de entrega de información, el tema que se

tratará en este trabajo está supeditado a tiempos breves para su preparación. Es

nuestro deseo ampliar más el conocimiento y la información sobre este tópico, ya

que lo imaginamos de un gran valor antropológico, sociológico, biológico y jurídico

por el tema a tratar. Esperamos que usted lo pueda encontrar interesante.

Problemas sociales. Es ya innegable el gran problema que las ciudades

tienen sobre la contaminación del aire. En la Ciudad de México se tiran miles

de toneladas de desperdicios al año, y esta basura contamina el aire, el agua y

el subsuelo.

El mismo problema hay con los desperdicios corporales, que suman cientos de

toneladas al mes. Muchas poblaciones tienen que encontrar mecanismos para

deshacerse en forma ecológica de este problema.

El problema se intensifica cuando estos desechos son arrojados directamente

sobre el pavimento de las ciudades, ya que, no pueden ser absorbidos por la

tierra, ni servir de composta o de nutrientes para la tierra, generando

contaminación.

Problema de Salud Pública. Como se reporta a continuación, los

padecimientos por enfermedades relacionadas por la defecación al aire libre

han aumentado. En México el Erario gasta millones de pesos en médicos,

medicamentos y hospitales para solucionar este problema.

Los habitantes de las ciudades, cuando no tienen seguros médicos, habrán de

gastar parte del ingreso familiar para recuperar la salud, y posiblemente,

ausentarse de sus actividades laborales, estudiantiles o en el hogar por la

convalecencia.

Dice la UNICEF, que el problema a nivel mundial es más grande de lo que se

imagina, debido a que los avances en materia de salud y de disminución de la

mortalidad infantil se ven gravemente perjudicados.

También mencionan qué “los retretes salvan vidas” ya que evitan que a través

de las heces humanas se propaguen enfermedades mortales, y agregan,

sobre la necesidad de que los excrementos sean “depositados, transportados,

tratados y eliminados de manera segura y sostenible”.

En términos económicos, a los países en desarrollo, el agua y saneamiento

deficientes les cuesta unos 260,000 millones de dólares al año, lo que significa

el 1.5 por ciento de su producto interno bruto (PIB), y que por el contrario,

cada dólar invertido en esta área genera cinco más, gracias a la mejora de la

salud y de la productividad de las personas. (información obtenida del sitio web

de la UNICEF / http://www.un.org/es/events/toiletday/).

“Los siguientes datos publicados en informes de la Organización Mundial de

la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia

(UNICEF), muestran la actual crisis mundial del saneamiento:

Aproximadamente un 60% de la población mundial, unos 4500

millones de personas, no disponen de retretes en sus viviendas o

tienen sistemas de saneamiento deficientes.

Unos 892 millones de personas defecan al aire libre y no tienen

acceso a ningún retrete.

En torno a 1800 millones de habitantes del planeta beben agua

no potable que podría estar contaminada por heces.

El 80% de las aguas residuales generadas por la población

mundial regresan al medio ambiente sin ser tratadas o

reutilizadas.

Tan solo e, 39 de la población mundial, unos 2900 millones de

almas, disponen de servicios de saneamiento que gestionan de

manera segura y eficiente las heces, sea in situ o en otras

instalaciones.

La mejora de los sistemas de saneamiento, junto con el agua

potable y la buena higiene podría prevenir unas 842000 muertes

al año.”

Fuente: http://www.un.org/es/events/toiletday/

Problemas de Derechos Humanos. Es preocupante, que en esta primera

mitad del siglo veintiuno, los habitantes de una ciudad civilizada, no tengan

acceso a sanitarios públicos gratuitos. Tal como en el pasado, son muchos los

habitantes de la ciudad que han padecido la poca previsión que las

autoridades han tenido sobre este tema. Todavía, no se da solución total a un

derecho humano básico.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) establece lo siguiente: “La

Resolución exhorta a los Estados y organizaciones internacionales a

proporcionar recursos financieros, a propiciar la capacitación y la transferencia

de tecnología para ayudar a los países, en particular a los países en vías de

desarrollo, a proporcionar un suministro de agua potable y saneamiento

saludable, limpio, accesible y asequible para todos”.

http://www.un.org/spanish/waterforlifedecade/human_right_to_water.shtml

Metodología

Objetivo General: Buscaremos proveer información sobre los servicios

sanitarios públicos en la Ciudad de México, además conoceremos aspectos

sociales y de salud inherentes para proponer mejoras en los servicios, así

como regulaciones jurídicas atingentes.

Objetivos Específicos: ● Conocer un poco de Historia de los servicios

sanitarios en la Ciudad de México. ● Abordar problemáticas de ayer y hoy con

los servicios sanitarios. ● Enfoque sobre los problemas de salud derivados. ●

Enfoque sobre los Derechos Humanos y los servicios sanitarios en la Ciudad

de México. ● Impulsar leyes y regulaciones en la ciudad para mejorar la

calidad de vida de todas y todos los habitantes de la ciudad. ● Propuestas de

soluciones.

Delimitación del Tema: 09 al 13 de mayo 2018 Inicio de captura de

información: 14 al 20 de mayo 2018 Investigación y actividades relacionadas:

20 al 30 de mayo 2018 Análisis y Resultados: 09 al 12 de junio 2018

Conclusiones y Propuestas: 12 al 15 de junio 2018

La investigación realizada es de diferentes tipos:

Aplicada: ya que buscamos solucionar el problema tratado en un corto,

mediano y largo plazo, para esto, se tendrá que trabajar dando información a la

población a través de las herramientas que tenemos disponibles: peticiones,

correo electrónico, uso de redes sociales, etc..

Después, a mediano plazo, se enviarán el proyecto y solicitudes de acción a

diferentes estructuras del gobierno de la Ciudad de México, para que

consideren su ejecución. Hemos de confesar dos cosas: No esperamos

muchas acciones de parte de las instituciones gubernamentales, (ya verá el

lector el porqué más adelante), necesitamos más información sobre cómo

abordar este tema a nivel legislativo.

Documental y de Campo: Buscamos información con entrevistas y encuestas,

con la finalidad de tener una impresión básica del problema existente y

subyacente. Elaboramos una bitácora de trabajo para ayudarnos en nuestras

indagaciones.

2 HISTORIA DE LOS SANITARIOS Y BAÑOS PÚBLICOS 2.1 Breve historia de los sanitarios públicos en el viejo mundo. Al igual que

nuestros ancestros, los primeros representantes de la raza humana, realizaban

sus actividades fisiológicas como sus compañeros mamíferos; al aire libre y sin el

menor pudor; los conceptos de vergüenza o “recato” no estaban en el haber

intelectual de una especie en ciernes.

Básicamente, por el hecho de ser nómadas, los primeros pobladores de la tierra

caminaban grandes extensiones de terreno y esparcían sus desechos en cualquier

lugar, no importando si era un río, una cañada, un bosque, al aire libre o en el mar.

El planeta necesitaba estos residuos biológicos para asegurar la vida, la

dispersión de semillas y químicos para ayudar a otras especies conectadas a la

tierra. La posibilidad de enfermedades era baja, ya que, las grandes extensiones

por recorrer no permitían a los primeros pobladores quedarse mucho tiempo en un

solo lugar; tampoco había problema con las leyes, o con la Moralidad, en esos

tiempos La Humanidad estaba naciendo en un maravilloso “edén infinito”.

Primero, se contaron con los ríos, donde los desechos se mezclaban con el agua,

pero pronto se dieron cuenta de que no era muy…”higiénico” hacerlo de esta

forma; después, el tirar los desechos agua abajo garantizaba su eliminación más

eficientemente, excepto, claro, para los que vivían río abajo.

Hasta la aparición de algunas civilizaciones antiguas, (cuando la humanidad dejo

de ser nómada y se estableció en puntos fijos), fue que los primeros ciudadanos

requirieron de servicios para retirar sus propios despojos e idearon sistemas

rudimentarios pero eficientes para poder alejarse lo más posible de ellos.

Sistemas mecánicos e hidráulicos fueron creados con este fin. Ya en el antiguo

Egipto hacía el año 2,700 A.C. se tenían los primeros retretes dentro de las

pirámides, en Creta, hacia el 1,500 A.C. se encontraron evidencias de los primeros

retretes en piedra caliza, pero la evolución de ellos como su uso social siguió en

marcha, en la antigua Roma, la gente del pueblo podía socializar mientras

evacuaba, teniendo pláticas y discusiones en espacios comunitarios hechos para

este fin.

Se sabe que hacía la Edad Media, en Europa, la Salud Pública fue deteriorándose,

debido a las creencias religiosas imperantes. Se consideraba un “pecado” el

lavado corporal, así que las personas podían pasar semanas o meses enteros sin

bañarse. En la cuestión de desechos corporales la situación no era mejor, ya que,

el hacinamiento, las supersticiones, creencias y órdenes religiosas prohibían

acciones de limpieza permanente. En varias ciudades europeas, la gente lanzaba

por la ventana sus desechos corporales al grito de, -“¡agua va!”, los excrementos y

orines cubrían las calles, ocasionando problemas de salud pública como las

pestes, tifoidea, entre otras, que azotaron al continente en esos tiempos.

Con la aparición de los primeros retretes y sobre todo con el sistema de drenaje -

que habían olvidado desde los romanos -, Europa pudo acabar con el flagelo de

las enfermedades en forma gradual, pero ya habiendo pagado un alto costo.

2.2 Breve Historia de los sanitarios públicos en la Ciudad de México En

América, las civilizaciones mesoamericanas y particularmente en Tenochtitlán, -

hoy Ciudad de México -, antes de la llegada de los invasores europeos, las

civilización mexica tenía formas diferentes de resolver el manejo de los desechos

corporales, éstos se recogían en barcas, se almacenaban, (ya existían las letrinas

públicas), o se redirigían a un sistema de drenaje.

Debido a las costumbres, los nativos en América eran comunidades más

ecológicas, cuidando más el ambiente, además, estaban más en contacto con el

agua y el aire libre, dando como resultado un menor nivel de enfermedades,

(griegos, romanos y otras civilizaciones europeas también tenían estas

costumbres de limpieza antes de la llegada del cristianismo institucional).

Un poco más adelante, durante el tiempo de La Colonia, en la Ciudad de México

se establecieron muchos programas para aliviar la situación sanitaria, se crearon

los primeros “meaderos” (nombre vulgar para designar a los sanitarios públicos) y

estaban en puntos estratégicos. Según Leopoldo Rodríguez Morales, en su trabajo

intitulado <<Los “Meaderos Públicos” en la Ciudad de México>>; (Rodríguez

2004).

En la obra de Leopoldo Rodríguez Morales se describen las vicisitudes de la

antigua Ciudad de México para intentar resolver el problema de la defecación al

aire libre, ya que, hasta antes del siglo dieciocho, era natural, o normal, ver a las

personas defecando en la vía pública o en la parte trasera de las grandes

fachadas, como las oficinas públicas, o grandes construcciones.

En el transcurso del siglo diecinueve la Ciudad de México procuraba resolver el

problema apoyándose con la iniciativa privada para la construcción de los

llamados “meaderos públicos”; lamentablemente, la más de las veces, estos

deseos se malograban debido a las malas planificaciones de presupuestos, a la

incapacidad del gobierno de trabajar en conjunto, o a las moralidad imperante de

la época.

Sin embargo, desde la segunda mitad del siglo diecinueve, se hablaba de trabajar

en conjunto: el gobierno, los empresarios y los usuarios, es decir, dar los

sanitarios en concesión a empresas privadas, quienes pondrían publicidad en los

kioscos designados como “meaderos” y cobrarían la entrada con diferentes

precios: de “primera” de “segunda” y gratuito; de esta forma el Estado daría el

agua, el drenaje, la iluminación y la seguridad; y el ciudadano, - dependiendo de la

zona donde viviera -, pagaría o no el servicio. (Rodríguez, 2004).

En todos estos casos conviene señalar que no hubo sanitarios públicos para las

mujeres, sino hasta el siglo veinte, lo cual nos demuestra el nulo interés de la

sociedad en esta gran parte de la población.

Adicionalmente, la falta de una buena irrigación hidráulica, y de un sistema de

drenaje eficiente, coadyuvaba a echar por tierra las intenciones de construcciones

sólidas y duraderas.

Durante el transcurso del siglo veinte, ya con la fuerza de los nuevos materiales y

la modernidad, se han hecho algunos intentos para poner sanitarios públicos,

aunque, la mayor de las veces, es una fachada para poder cometer latrocinios por

parte de los gobierno y de quienes prestan los servicios, dejando, cuando los hay,

los sanitarios en mal estado, inoperantes, sucios, y al poco tiempo se quitan por

falta de mantenimiento, exactamente como en el pasado.

3.- PROBLEMAS SOCIALES, DE SALUD Y DERECHOS HUMANOS 3.1 Profundización sobre los problemas por la carencia de servicios

sanitarios en la ciudad.

A diferencia del pasado y más allá de dilemas morales, se deben resolver los

problemas de Salud Pública y de los Derechos Humanos. En este siglo veintiuno,

es de una gran carga simbólica, que el Estado y concretamente la Ciudad de

México (la cual se ha distinguido por sus ideas progresistas y liberales desde

1997), no haya podido controlar esta situación.

Todavía es posible ver a personas indigentes, que por falta de salud mental o

carencia de espacios para hacerlo, orinan y defecan en la vía pública.

También, a diferencia del pasado, el problema no debe ser observado desde una

“moralidad” imperante o de “buenas costumbres”; es, sin duda, un problema salud

para toda la sociedad y para toda la ciudad.

Así como en el pasado se tuvieron epidemias que diezmaron países completos

por la nula asepsia de los desechos humanos, es posible que en el futuro las

pudiéramos tener nuevamente si recordamos que los virus y bacterias son

organismos mutantes y que se van adaptando al entorno.

¿Sería entonces descabellado pensar que una nueva peste podría posarse sobre

esta ciudad? ¿No hemos aprendido del pasado? Sin un ánimo hipocondriaco,

debemos señalar que los peligros por la falta de higiene y control de la salud,

siguen latentes hasta el día de hoy.

Agreguemos los problemas de Derechos Humanos. Como vimos en nuestra

investigación, muchas personas indigentes, son orilladas, por la necesidad

económica y el rechazo social, a eliminar sus desechos orgánicos en la calle; v.g.:

estábamos en el Zócalo de la ciudad, era casi la media noche, y en una de

nuestras entrevistas a un chico indigente, le preguntamos si sabía dónde

podríamos ir al baño, ya que estaba todo cerrado. Nos dijo con aire desparpajado:

-“No tengas bronca mi buen, ¡ahí mira!, ahí donde están los arcos y échale,

nadie te dice nada…”

Se refería al “Viejo Portal de Mercaderes”; entonces, le dije que era algo más

que agua…

-“No te apures pa’, para eso somos los valedores, tú me apoyaste, ¡toma!, - y

sacó unos papeles de periódico de su pantalón para entregármelos…

-“Ahí, en donde están los dos arcos, ahí tírale, a esta hora nadie te dice nada,

yo te cubro…”

Y pensar que en esos viejos arcos, durante el siglo diecinueve, se habían

construido unas letrinas, y se desmantelaron por estorbar el paso de los

transeúntes… (Rodríguez 2004).

La triste realidad es que, con el pasar de los años, y las centurias, todavía las

personas sin casa, tienen que evacuar en los espacios públicos en la Ciudad de

México.

3.2 Investigación de campo y entrevistas.

Por cuestiones de espacio, tenemos las referencias de las entrevistas en el sitio:

http://lawebsocial.com/bitacora-de-investigacion/ (En ella se pueden consultar

entrevistas, videos y audios del trabajo hecho).

La siguiente información quedó registrada en la bitácora de investigación que

elaboramos y está en el sitio web www.lawebsocial.com

Hicimos solicitudes para entrevistas que creímos pertinentes para conocer un

poco más sobre el tema de los sanitarios públicos en la Ciudad de México.

La primera, fue con los encargados de un centro de asistencia social, ya que, los

vecinos se quejan frecuentemente de que las personas que reciben ayuda ahí

(básicamente indigentes, con algún problema de adicción), ensucian las calles de

la colonia Viaducto Piedad, y es frecuente verlos defecando al aire libre, siendo

este un espectáculo triste y lesivo para los Derechos Humanos de las personas

enfermas, además de una vía de infección, de contaminación, de enfermedades,

y una molestia para los vecinos de la zona.

La segunda fue reunirnos con el Sociólogo Rodrigo Pérez Martínez, quien conoce

el problema más a fondo, ya que él ha vivido en la zona y tiene una opinión más

cercana a lo científico y social sobre este tema.

Nos reunimos desde muy temprano con el Sociólogo, para que nos acompañara.

Desde el principio, él se mostró muy participativo y emocionado de estar en el

proyecto. Gracias a su ayuda y a su guía pudimos tener una perspectiva más

amplia sobre el problema, así como su etiología.

La tercera opinión que deseábamos tener es la de los vecinos, quienes

frecuentemente se quejan debido a que la calle “se está convirtiendo en una cueva

de maleantes, cerdos, drogadictos y vagos que hacen sus cochinadas en la calle”,

(referido por la Sra. Lourdes M. Vecina del albergue).

La cuarta,- y quizá de las más importantes -, deseábamos saber la opinión de las

personas que están dentro de los albergues. Si bien, el centro tiene sanitarios y

regaderas, durante el día no se les permite la entrada a los inquilinos, teniendo

que hacer sus necesidades fisiológicas en algún otro lugar. Al no contar con un

aspecto “limpio” o “sano”, la mayoría de los negocios o casas les niegan sus

sanitarios, constituyendo una penosa carga para sus vidas. ¿Qué va a hacer una

persona así? Y si agregamos algún trastorno de salud (silla de ruedas, muletas,

demencia senil, etc.), entonces el problema toma dimensiones realmente

demoledoras.

Después, se solicitó una entrevista con el Sr. Aldo Manuel Ramos Flores, quien es

el encargado del Centro de Asistencia Social “Coruña”, ubicado en la delegación

Iztacalco, Ciudad de México.

(“Sur 65-A Núm. 3246, Colonia Viaducto Piedad, Delegación Iztacalco, entre

Coruña y Santa Anita, CDMX”)

Nos interesaba saber su opinión, ya que - eso dice la información oficial -, el

centro alberga personas de sexo masculino y femenino, menores y mayores de

edad con problemas de adicción.

El centro parece tener condiciones de hacinamiento, debido a que han juntado

otro centro que está en remodelación, ubicado en la “Plaza del Estudiante”.

Aunque dice la información oficial que este centro (“Plaza del Estudiante”) es para

jóvenes, pudimos ver personas de todas las edades, (muy jóvenes y ancianos), y

efectivamente, con problemas de adicción y algunos con patologías psicológicas

visibles:

“Centro filtro que proporciona Servicios Sociales de Asistencia Pública a niñas y

niños mayores de 12 años 7 meses y jóvenes de hasta 21 años y con problemas

de adicción, sin patologías psiquiátricas”

http://www.sds.cdmx.gob.mx/storage/app/uploads/public/592/480/8bb/5924808bba

c06145264364.pdf

Comunicación vía telefónica para solicitar la entrevista:

Día 22 de mayo 2018 | 14:00

Solicitamos información para tener una entrevista a la Secretaría de Desarrollo

Social. Esperaremos respuesta.

Día 22 de mayo 2018 | 15:00

Se nos informó que el encargado no estaba disponible en ese momento para la

entrevista. La persona que tomó la llamada fue la Sra. Montserrat Cortés, quien

nos pidió llamarle más tarde.

Se le dieron referencias a la Sra. Montserrat sobre el objetivo del proyecto y le

explicamos que nos gustaría tener una entrevista con el Sr. Aldo Manuel Ramos,

para saber su opinión sobre el problema de falta de sanitarios en la zona donde

está el albergue, los problemas derivados de defecación al aire libre, los de salud

y los sociales inherentes.

Día 23 de mayo 2018 | 10:00

La Sra. Montserrat Cortés nos pidió llamar un poco más tarde para poder hablar

con el Sr. Aldo Manuel Ramos Flores.

11:21 am

Volvimos a llamar a la Sra. Montserrat Cortés, pidiendo comunicarnos con el Lic.

Aldo Manuel Ramos.

Montserrat fue amable y nos dijo que el Lic. Aldo estaba muy ocupado pero nos

dejo su número para que lo contactáramos a través del la aplicación Whatsapp,

diciéndonos que así era más fácil comunicarnos. Pedimos hablar con el Técnico

Jorge Antonio Ramírez de la Luz, quien es el segundo encargado del centro, pero

se nos informó que también estaba ocupado. Buscamos al Lic. Aldo a través del

Whatsapp.

11:48 am

Llamamos al Lic. Aldo Manuel Ramos Flores, a su teléfono, nos dijo en el acto que

él nos llamaría más tarde. (Hay grabación de audio). Intentamos buscarlo más

tarde nuevamente.

14:05

Después de llamar un par de veces al Lic. Aldo Manuel Ramos, nos atendió en su

“whatsapp” privado, y le hicimos la petición para la entrevista. Nos dijo que no se

puede ingresar con cámaras o tomar fotografías, y nos recomendó ir a la Dirección

General para solicitar el permiso para tener la opinión de él.

Le comentamos que no íbamos a grabar las instalaciones, que sólo era su opinión

lo que necesitábamos, pero le agradecimos. Consideramos que ya no era viable

hacer una entrevista con un funcionario que con apatía o cansancio se quería

desembarazar de la petición. Después de dos días dejando mensajes a la señora

que nos contestó el teléfono, difícilmente saldría una opinión objetiva y

constructiva de parte del Sr. Aldo Ramos; más bien, saldría una opinión

institucional y desapegada al aspecto del entorno, que finalmente era lo que

buscábamos.

Anexamos impresiones de pantalla de la conversación.

15:00

Solicitamos a la Secretaría de Desarrollo Social que nos informaran qué persona

nos podría dar una entrevista para tener datos y opiniones sobre el tema que

planteamos. Les dijimos que grabaríamos y que se trataba de un proyecto escolar.

Dejo la muestras de lo que se escribió:

Intentamos platicar con varias personas que usan el albergue para vivir por las

noches. No pudimos hacerlo en el interior, debido a que las autoridades se

negaron a colaborar y no mandaron respuesta.

Algunas de las personas entrevistadas no autorizaron sacar su imagen, lo cual

hemos respetado en este trabajo.

13:30

Entrevistamos a los colonos sobre el problema que tienen debido a que algunos

indigentes defecan y orinan en la vía pública.

1er. entrevistado: estudiante, 24 años, nos dio su punto de vista a través de una

grabación en audio.

2do Entrevistado: Músico que toca en los camiones y nos contó los problemas

que ha padecido sobre este tema. (No autorizó foto, sólo el audio).

3er. Entrevistado: Sanitario público en el Mercado de “Las Torres”. La persona

encargada de los baños nos da su opinión y qué hace si alguien no puede pagar.

4ta. entrevistada (propietaria del negocio): Ella tiene su negocio a la vuelta del

albergue; según nos dice, es común que las personas defequen y orinen al aire

libre. Su opinión se puede escuchar en el audio en el sitio www.lawebsocial.com

5ta. Entrevistamos a personas que acuden al albergue para dormir (indigentes),

ellos son personas mayores de sesenta años y nos dan su opinión muy valiosa

sobre este tema. Ambos han padecido el acoso y la discriminación de los colonos,

al mismo tiempo, la falta de voluntad de las autoridades para resolver este

problema.

También nos comentaron que el actual director del Centro Coruña, (el Lic. Aldo

Manuel Ramos) “poco le interesan las condiciones de los habitantes del albergue,

y que, a diferencia de los directores anteriores, no está al pendiente de sus

necesidades debido a que es un hombre joven… “

Como ya hemos referido, el Lic. Aldo Manuel Ramos no quiso ser entrevistado ni

dar su opinión. Tampoco lo hicieron (hasta el momento de escribir esto) la

Secretaria correspondiente; lo cual nos indica, que no hay una disposición seria de

hablar del tema por parte de las autoridades de la ciudad.

6ta. Acudimos al <<Centro de Asistencia e Integración Social “Coruña Jóvenes”>>,

el cual está ubicado en la colonia Viaducto Piedad. El director nos había

mencionado que no quería que se tomaran fotos en el interior, por tanto, las

tomamos en el exterior y procuramos tener la información de los policías de la

entrada, quienes nos dijeron que todas las personas del centro son sacadas a la

calle a las 08:00 de la mañana y recibidas nuevamente a partir de las 16:00.

También nos dijeron que los indigentes pueden ocupar los sanitarios en todo

momento. Al entrevistar a varios indigentes de la zona nos dijeron que esto no era

cierto, y que no los dejaban ingresar antes de las 16:00. (pueden escucharse o ver

los videos en el sitio www.lawebsocial.com).

7.- Entrevista con el Lic. En Sociología Rodrigo Pérez Martínez para conversar

sobre el tema. Esta es una grabación en video, de un poco más de nueve minutos,

pero, debido a la complejidad del tema, estuvimos conversando durante más de

tres horas un punto del Centro Histórico de la Ciudad de México. También

aprovechamos para hablar con indigentes en la zona, saber sus opiniones e

incrementar la información atingente. Se puede ver la entrevista en el sitio

www.lawebsocial.com

Al terminar la entrevista grabada, nos quedamos un rato más para charlar sobre

este tema. Fueron varias horas, y en ese tiempo, muchos indigentes se acercaron

para pedir una moneda o comida en el lugar donde platicábamos El Salón Corona,

quienes les permitieron la entrada a los sanitarios. Ese gesto, aparentemente

intrascendente, habla de la calidad social y humana de los encargados del

negocio.

Después, decidimos caminar por las calles del centro. Tuvimos la oportunidad de

platicar con unos chicos sin hogar, que estaban sobre la calle de Madero, y nos

comentaron que en el Centro Histórico “-ya sabemos cómo y dónde movernos

para ir al baño”, “-siempre hay chance si te das tu maña”, al preguntarles sobre los

compañeros con alguna deficiencia física o mental dijeron: “-Ahí si está cabrón…”.

Caminando por Madero, llegamos hasta el Zócalo de la ciudad y encontramos a

otro chico; él venía de Oaxaca, pero ya se sentía “integrado a la ciudad”.

Platicamos con él un momento y le preguntamos cómo solucionaba su problema

“del baño”; no entendió muy bien la pregunta, porque estaba alcoholizado, sin

embargo al decirle que yo quería ir al baño, me respondió como ya lo he

comentado en un capítulo anterior.

3.3 Grupos vulnerables en la Ciudad de México.

Cierto es que todos podemos sufrir la carencia de un baño público, sin embargo,

hay grupos poblacionales que tienen más desventaja. En el pasado, las

autoridades de la ciudad, no consideraban necesario que las mujeres pudieran

tener sanitarios públicos, ¿para qué?, “¿ellas podían hacer en sus casas?” y en

último caso, “no tienen porqué enseñar nada a los demás”. Esto todavía no

cambia mucho. Siguen siendo las mujeres uno de los grupos más afectados por la

decisión de no tener baños públicos de buena calidad en la ciudad.

Generalmente, las mujeres no cuentan con sanitarios suficientes. No es raro

encontrar largas filas en los restaurantes o tiendas departamentales, donde las

mujeres sufren la tardanza de sus compañeras. Por motivos de mecanismos

biológicos y de costumbres, moralidad, el cuidado de las hijas e hijos,

(generalmente al cuidado de ellas), las mujeres tienen la necesidad de tomar más

tiempo en un sanitario.

Otro grupo vulnerable son las personas transgénero, quienes ya de por sí, sufren

discriminación; ¿qué hacen? ¿entran al de hombres o al de mujeres? Y en esas

decisiones, - para nuestro gusto arcaicas -, pierden valiosos minutos con su

desesperación, aunado al rechazo, no importando lo que seleccionen.

Pudimos constatar que algunas personas con edad avanzada les costaba más

trabajo encontrar un sanitario debido a su longevidad; el ubicarlo, pedir

información, era perse un problema, - o por la pérdida auditiva y de movilidad-,

aunado a encontrar personas amables. Imaginemos cómo será entrar a un baño

con estas características.

Y a las personas con capacidades diferentes, ¿quién les puede asistir en baños

públicos? Generalmente las personas con capacidades diferentes pueden resolver

esto solas, pero no es lo mismo estar en silla de ruedas para una persona joven, -

y socialmente aceptada - , que para un anciano o un indigente… o las tres

opciones.

En nuestras entrevistas conocimos a una persona así. Lo que nos contó, nos

estrujó el corazón.

Las personas indigentes, sufren diariamente del rechazo y menosprecio de los

demás ciudadanos, y, debido a su apariencia, se les niega, en la mayoría de los

casos, el acceso a sanitarios privados.

3.4 Encuestas.

Por la naturaleza del trabajo de investigación y el tiempo limitado del que

disponemos, hicimos una encuesta somera en la cual, pedimos la opinión sobre el

tema de baños públicos. Aunque la información es muy elemental, como muestra,

es importante resaltar que hay coincidencias mayoritarias en varios puntos.

(Tómese como ejemplo que todas las personas ‘100%’, han tenido

problemas por no tener un sanitario a la mano, o que la mayoría, sí pedirían al

gobierno local sanitarios públicos gratuitos).

A continuación proporcionamos los datos de la encuesta para que el lector las

evalúe.

Esta información también la podrá ver en el sitio www.lawebsocial.com

Sobre la encuesta que realizamos, pudimos ver personas de diferentes latitudes

opinando. Incluso fuera de la Ciudad de México. Por tener el tiempo limitado,

aceptamos las respuestas, con la finalidad de enriquecer la información.

Algunos resultados nos sorprenden, como el hecho de que todas las personas

encuestadas han tenido problemas por no contar con un baño a la mano.

También nos llamó la atención la percepción mayoritaria de “quién tiene más

ventaja en los sanitarios públicos, los hombres o las mujeres”; aunque es una

pregunta abierta y con múltiples interpretaciones, la mayoría señaló que los

hombres tienen más ventajas. Esto, pudiera parecer un asunto mecánico o

fisiológico debido a las constituciones corporales, pero creemos que podría haber

un problema subyacente, como el hecho de que no se construyen más cubículos

de baños para las mujeres, (quienes tendrán que hacer más movimientos para

poder orinar o evacuar), y al hecho socialmente pernicioso de que son ellas las

que generalmente llevan a las niñas y a los niños al baño.

Ya nos extenderemos más en el informe final con la información atingente.

¿Por qué? (Opiniones textuales).

Rapidez

En el de hombres aparte de las tazas de baño, ellos cuentan con urinarios.

NO IMPORTA LO SUCIO QUE PUEDAN ESTAR NO SIEMPRE HAY CONTACTO DIRECTO

Los tiempos de espera son más cortos.

En Bruselas es más fácil encontrar mingitorios para hombres. También, dentro de los baños, por

cada WC hay además un mingitorio individual, o largos mingitorios comunes, lo cual no es el caso

en los baños para mujeres.

Son Mas sencillos

Por orinar parados

Pueden hacer donde sea.

POR QUE PARA ELLOS ES RAPIDO

Es mas facil, hacer del 1 para un hombre

Pueden entrar a donde sea bares cantina o en la calle no

Porque es mas facil para ellos orinar

por falta de higiene a veces estan sucios y eso se me complica a la hora de ir asi que trato de no

hacerlo pero hay veces que no hay de otra.

No habia opcion "ninguno"

¿Qué opinión tiene de las personas que defecan en la calle y por qué?14

respuestas (Opiniones textuales)

Es triste ver que no hay voluntad para ayudarles.

Es lamentable que una persona tenga que hacer sus necesidades en la vía pública, el problema no es

de ellos, lamentablemente se cuenta con pocos baños públicos, el gobierno con sus instituciones han

dejado de lado esté tema que a todos nos afecta.

ES UNA FALTA DE RESPETO

Defecar es una necesidad fisiológica, no siempre hay lugares para hacerlo.

Reprochó total. Considero que la gente lo hace por suciedad, para personas en situación de calle

existen albergues y la única condición es que se bañen... No lo hacen.. . Horror total.

Esta debe ser la realidad de gente que no tiene un hogar, de gente extremadamente aislada y pobre

que hace de la calle su hogar. Gente que vive, duerme, come y por su puesto, defeca en la calle.

Faltas a la moral, aunque en otros países es algo cotidiano

Muy mal hecho. Pero no tienen otra opción

Generan focos de infección.

SON UN FOCO DE INFECCION, POR SUCIAS

No es higiénico porque se seca y se hace polvo y vuela hacia los alimentos q venden en la calle

Falta de cultura

pues nunca lo he visto pero se que la popo se dispersa con el aire

Es antihigienico

¿Por qué?15 respuestas (opiniones textuales).

Porque yo podría estar igual

Para ayudar a la persona que tenga esa urgencia.

INSEGURIDAD

Porque no la conozco y podría ser un riesgo para mí seguridad o la de mí familia.

Dependiendo, si es conocido con gusto pero si es desconocido no lo haría, la inseguridad está a la

orden del dia y no hay necesidad de arriesgarse.

Por seguridad y por higiene.

A menos que le conociera, por cuestiones de seguridad

Desconfianza

Por seguridad.

ES UNA NECESIDAD FISIOLOGICA

Por la inseguridad que existe

En estos tiempos ya no sabe uno en quien confiar qué tal si nadamás es una trampa para robar así

le paso a una vecina de nosotros

Porque a mi me gustaria tener la misma oportunidad cuando tenga esa necesidad

falto la respuesta tal vez y esa la usaria yo ya que por la delincuencia no le permitiria pasar a

desconocidos

En algun momento todos hemos necesitado un sanitario

Díganos por qué lo cree.14 respuestas (opiniones textuales)

Porque todavía hay personas compasivas que ayudan a los demás

Cuándo hemos pasado por desastres naturales veo a personas ayudando a otras.

LOS CAMBIOS SOCIALES

Una comunidad racional moderna no puede existir sin solidaridad.

Por que se ve día a día con pequeñas acciones.

En algunas ciudades la solidaridad es mas patente que en otras. La manera de manifestarla quizá

depende de la cultura de cada país. Pero creo que en general hay solidaridad en incluso en las

grandes ciudades. En Bruselas quizá nadie prestaría su baño a un desconocido, pero hay

ciudadanos que han alojado a inmigrantes durante la crisis de refugiados.

Aún hay personas humanitarias

Perdida de valores

Podemos ver que alguien necesita algo y no nos acercamos por seguridad.

YA LA GENTE HA CAMBIADO

Actualmente nadie se preocupa por otro ser humano, solo piensa en el mismo

Cada quien ve por sus propios intereses y los problemas de los demás no les interesa

Hay gente muy humanitaria

a veces

¿Hay algo que no preguntamos o que nos faltó? por favor díganos

su opinión.9 respuestas (opiniones textuales).

Personal para ayudar en los sanitarios públicos a los discapacitados.

No, creo que las preguntas son adecuadas para la investigación que están haciendo.

Me parece mejor idea que los baños públicos tengan un coste, aunque sea simbólico. La gente de

muy bajos recursos o de calle podrían usarlos de manera gratuita y los demas pagando. Tambien

que hubiera baños públicos (para bañarse) para atender las necesidades de la gente que vive en

situación de calle o de familias numerosas.

Además de más baños públicos y gratuitos, vigilar por su entera higiene

Muy buena iniciativa ojalá se lleve a cabo

Todo está bien, saludos!!!

No, esta completo

Porque cobran tanto en los lugares publicos

las preguntas tal vez o a veces

Muchas gracias por su participación para este proyecto. www.lawebsocial.com

3.5 Buscando posibles soluciones

Como hemos investigado sobre el tema, ya han sido exploradas varias soluciones

desde hace siglos, y, si bien hemos avanzado y se han eliminado varios problema

en este tema, como el alcantarillado, el agua corriente, la higienización de los

espacios, el descubrimiento de nuevos materiales y construcciones, el avance en

los Derechos Humanos y en Estudios de Género, todavía subyace,- en forma real

- el problema en nuestras sociedades.

Ya hemos visto que en diferentes etapas de la vida de la ciudad, se han hecho

propuestas por parte de la iniciativa privada y del gobierno que no tienen un final

feliz, sea por cuestiones económicas, sociales, arquitectónicas o morales.

(Rodríguez 2004).

Una vez más, ahora, se hace una propuesta, en una forma superficial, ya que,

necesitamos contar con más información para poder concretarlas y quizá hacerlas

un proyecto de ley en forma ulterior.

Se tiene que echar mano de lo que ya se ha hecho, pero con modificaciones. No

todo lo hecho anteriormente está mal. Al haber cambiado las sociedades, las

arquitecturas, el desarrollo humano y la tecnología, podemos volver a implantar

algunos esquemas. No es posible pensar que en Europa sí se puedan tener

sanitarios públicos de buena calidad y aquí, en nuestra ciudad, no, pretextando

capacidades intelectuales, conductas, o modelos heredados de comportamiento.

Reiteramos que por el espacio y por el tiempo, no es posible extendernos más que

a generalidades, esperando tener en un futuro próximo la posibilidad de ampliar

más la información y detallándola con el fundamento científico, sociológico y

jurídico que requiere, así como los estudios de impacto ecológico y económico

necesarios.

Proponemos lo siguiente:

Crear el marco legal para que todos los negocios dedicados al consumo de

alimentos en el nivel de restaurantes o bares, tiendas departamentales y

centros comerciales, estén obligados para poder operar en la ciudad, a

abrir los servicios sanitarios a todo el público, sin que haya de por medio,

cobro, compra, o coacción económica de ninguna especie. Siendo

obligatorio, además, mantener los espacios sanitarios limpios y con los

elementos necesarios para su uso. Tales negocios recibirán incentivos

fiscales como premio a su solidaridad social, además del reconocimiento

como “Empresa Socialmente Responsable”, mejorando su imagen pública.

En caso de que estas empresas se nieguen a dar el servicio a todas las

personas, no importando, cuestiones de raza, sexo, género, edad, posición

económica o social, discapacidad física o mental, se harán acreedoras a

sanciones económicas y a la clausura temporal o permanente.

La instalación de sanitarios públicos en toda la Ciudad de México, por

etapas y en zonas estratégicas, empezado por todas las estaciones del

“metro” y del “metrobús” de la ciudad, para aprovechar su infraestructura en

instalaciones y en personal, posteriormente en las principales avenidas de

la capital.

Se crearán dos tipos de sanitarios, dependiendo de la ubicación y las

necesidades. Habrá individuales, para el ingreso de una persona, no

importando su género, y habrá sanitarios comunes, en donde el espacio lo

permita.

Los sanitarios deberán contar con limpieza e higiene permanente, así como

vigilancia externa y patrullaje periódico para evitar ser vandalizadas.

Será la publicidad de los particulares quienes sustenten en gran parte estos

sanitarios, para evitar ser una carga onerosa para la ciudadanía.

Los sanitarios contarán con los máximos desarrollos tecnológicos

disponibles para que su uso sea eficaz y ahorrador.

Se crearán sanitarios pensados también para que los grupos más

vulnerables (visto anteriormente) puedan desenvolverse con más facilidad;

por ejemplo: habrá tablas para cambiar pañales de bebé en los baños de

hombres.

Todas estas implementaciones se harán en forma gradual y con evaluación

permanente, para poder corregir a tiempo las fallas que aparezcan.

Todos estos servicios deben llegar a la ciudadanía gratuitamente, y se

usará la tecnología disponible, “apps” para conocer su ubicación, e incluso,

si está disponible el servicio.

La ciudadanía que desee contar con este servicio gratuito, deberá de tener

una tarjeta inteligente, actualizada y disponible para poder acceder. Esto

se pedirá como medida de seguridad.

4 Conclusiones 4.1 Conclusiones Ya que no es nuevo este problema, ni en la sociedad, ni en la

Ciudad de México, debemos de acometer su desarrollo y buen resultado con

energía, y no importando que haya habido errores en el pasado; finalmente

debemos de aprender de ellos.

El sistema de sanitarios públicos gratuitos es un proyecto siempre perfectible, y

tendrá que ser evaluado para verificar su eficacia y calidad.

No podemos seguir pensando que hay ciudadanos de primera y de segunda, que

pueden tener acceso a un sanitario dependiendo de su “calidad social” o alguna

otra clasificación.

Uno de los signos de civilización que tiene la humanidad es cómo las ciudades

tratan a sus habitantes, y además, cómo tratan la salud pública.

En este trabajo fue muy triste y doloroso constatar la poca atención que tienen los

gobiernos sobre este tema, lo desamparados que están algunos grupos

vulnerables, la poca solidaridad que existe entre los vecinos y el pobre sentido de

cohesión social que tenemos en las ciudades.

Empero, es nuestro deseo promover algunas reformas con lo que tengamos a la

mano. Intentaremos hacer pública esta información y solicitaremos a la Ciudad de

México, a través de peticiones en línea como “Change.Org” o “Avaaz.com”

peticiones para dar los primeros pasos hacia la implementación de los sanitarios

públicos gratuitos en la Ciudad de México.

En las postrimerías del siglo diecinueve, la gran mayoría de la población de la

ciudad no contaba ni siquiera con un inodoro, hace apenas ochenta años, se

construyeron los primeros sanitarios individuales en los interiores de los domicilios.

El que tengamos un sanitario privado en casa, en el trabajo, o en espacios

públicos, es algo reciente, y más aun si tiene privacidad y limpieza. Esperamos

que todas las personas puedan tener acceso a lo que para otros nos parece

normal y común.

Bibliografía:

Rodríguez L. (2004). Los “Meaderos Públicos” en la Ciudad de México. Pequeñas

construcciones urbanas del siglo XIX. junio 07 2018, de INAH Sitio web:

http://www.boletin-cnmh.inah.gob.mx/boletin/boletines/3EV2P59.pdf

Jiménez L.. (2015). "Albergue Coruña continúa generando polémica". Mayo 22,

2018, de "La Crónica" Sitio web:

http://www.cronica.com.mx/notas/2015/886214.html

Farrill B.. (2011). "Historia del retrete o el cuartito de la negación". mayo 22, 2018,

de "NEXOS" Sitio web: https://cultura.nexos.com.mx/?p=1511

Resolución A/RES/64/292. Asamblea General de las Naciones Unidas. Julio de

2010 Observación General No. 15. El derecho al agua. Comité de Naciones

Unidas de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Noviembre de 2002

http://www.un.org/spanish/waterforlifedecade/human_right_to_water.shtml

Anexos:

Por cuestiones de espacio, tenemos las referencias de las entrevistas en el sitio:

http://lawebsocial.com/bitacora-de-investigacion/ (En ella se pueden consultar

entrevistas, videos y audios del trabajo hecho).