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LA fAuNA sALvAje de LA peNíNsuLA de vALdés está eNmArCAdA eN uN pAisAje y uNA tierrA LLeNAs de vidA. CoLoNos e iNmigrANtes, pesCAdo-res y CoCiNeros, historiAs y misterios de uN muNdo eNtero pArA des-CuBrir, detrás deL hipNótiCo CANto de LAs BALLeNAs.

viAjero BACANAL

PuerTO MAdryn

BALLeNAs y MuchO MáS

TexTOmArtíN AuzmeNdifOTOSgeNtiLezA áNgeL véLez, ALBerto pAtriáN, meLiNA pérez, iggy

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A l asomarse a Puerto Madryn, el vehículo que nos lleva rodea la enorme planta de la empresa Aluar y desciende por el camino hacia el Norte. Allí, a pocos kilómetros

del centro de la ciudad más importante de la Península de Valdés se abre un paisaje de una naturaleza salvaje y desoladora, la playa del Doradillo. La tierra baja desde el camino en una loma suave y luego de caminar apenas unos metros sobre arena, canto rodado, restos de cangrejos, mejillones y estrellas de mar llegamos hasta la orilla, donde el sonido suave y arrachado del viento se mezcla con el de la respiración de las ballenas. Así es: a pocos metros de nuestros pies asoman el lomo negro, las aletas y la cola de un grupo de ballenas francas, que juegan, nadan, se desplazan a lo largo de la costa respi-rando el mismo aire que nosotros: puro, frío, reparador. Podríamos decir que la tierra parece sacarse de encima a la ciudad para dejarnos frente a la naturaleza en estado puro.

conocer el marHugo, el guía, explica que las ballenas tienen respiración pulmonar, sangre caliente y que amamantan a sus crías. “Se acercan a los hombres sin temor. Justamente, este com-portamiento manso y el hecho de que -por la grasa que tienen- flotan al ser matadas, las transformó en una de las especies más cazadas” cuenta este guía de Southern Spirit, una de las seis empresas que realizan viajes de acercamiento a las ballenas embarcán-dose desde Puerto Pirámides, entre julio y diciembre. Tras un pico de 200.000 ejem-plares, por la caza indiscriminada la población de ballenas francas descendió a 3.000. Las mayores matanzas se daban a la altura de Florianópolis para extraer la grasa (que se usaba como combustible) y las barbas, para realizar los armazones de los vestidos antiguos, broches para pelo, peinetas y otros objetos para la sociedad del siglo XIX y principios del XX. Hoy, gracias a una política de protección que viene de los años 60, hay unos 8.000 ejemplares, número que crece a un promedio del 7% anual. Las ballenas llegan a las costas de Madryn para aparearse; al siguiente año vuelven a parir y amamantar a las crías. El tercer año no regresan, ya que están alimentándose en aguas antárticas. Ver a las ballenas es un espectáculo único: animales extraños que se asoman para respirar, mientras que mantienen los ojos bajo el mar, observando las profun-didades de su otro mundo. Esta relación compleja está representada en el Ecocentro (www.ecocentro.org.ar), que se dedica a estudios científicos, educación sobre el mar y producciones artísticas. “Podemos describir el mar, pero nunca conocerlo” dice allí un pequeño cartel. Una verdad que muchas veces se aplica a toda la vida.

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c uAT r O PA r A d A S o B L i g At o r i A s

• Centro Istmo Ameghinoel territorio que une el continente con la Península de Valdés es el Istmo Ameghino, y en su parte más delgada funciona el centro de Interpretación, que ofrece una exposición sobre la vida natural y la historia de toda la península. Podrá parecer demasiado serio, pero es un buen lugar para detenerse e informarse antes de entrar en las tierras de la península.

• Nadando con lobosLas principales escuelas de buceo realizan expediciones de interacción con la naturaleza, con viajes en lanchas atravesando zonas con ballenas hasta las reservas de lobos marinos. en esos parajes, una de las mejores cosas para hacer es ponerse un traje de neoprene, y hacer snorkel entre los mamíferos. una experiencia única e inolvidable. consultas en Aquatours (www.aquatours.com.ar).

• Faro Punta Delgadael faro de Punta delgada marca un hito para los navegantes y una de las zonas preferidas por las comunidades de elefantes marinos. en sus pla-yas retozan los animales y se puede ver desde cerca las luchas de los machos, el apareamiento y el cuidado de las crías a cargo de las hembras. Para quedarse en esa tierra, el hotel de campo Tierra de elefantes (www.puntadelgada.com) ofrece un espacio cálido y confortable.

• Hotel Touring ClubPrimer y centenario hotel de Trelew, donde la leyenda dice que se escondió Butch cassidy en su raid delictivo por la Patagonia. Su bar es uno de los más bellos en toda la provincia y posee una colección de botellas única, con perlas per-didas en el tiempo que aún se pueden probar. el mejor lugar para tomar un trago antes o después de ir a la Península de Valdés. www.touringpa-tagonia.com.ar

más allá de las ballenasPero Madryn y su zona tienen más que ballenas. Por allí, es donde en 1864 desem-barcaron los galeses, huyendo de persecucio-nes religiosas y en busca de un lugar donde refundar su estilo de vida. El guía nos cuenta la historia de la armonía que lograron con los tehuelches, de su viaje al interior de la tierra en pos de un valle amable para instalarse. Allí está como recuerdo vivo la pintoresca ciudad de Gaiman, con sus famosas casas de té que ofrecen las mismas tortas de hace más de un siglo. Para llegar a esta zona, los colonos debieron atravesar el gran Océano Atlántico, el mismo donde los enormes barcos pesqueros y los pescadores artesana-les arrancan hoy pulpos, meros, abadejos, salmones, cholgas, calamares, langostinos, lenguado y merluza, especies que llegan a las costas y que en su gran mayoría se exportan directamente a otros países. Por suerte, de a poco surgen algunos pescadores y cocineros locales que reivindican su uso a nivel local. Allí está Mumo, el cocinero de Posada Puerto Pirámides, quien cuenta que los propios pescadores, al volver de sus viajes, le pagaban con mercadería para que él les sirviera algo de carne. Y con esa mercadería fresca aprendió Mumo los secretos del mar, fascinando luego a tantos turistas que se acercaban atraídos por el espectáculo de las ballenas. Así es Puerto Madryn: donde hace apenas cincuenta años se cazaba a las focas y elefantes marinos lite-ralmente a palos para extraer los cueros, hoy la actividad se redirigió al turismo, para seña-larse desde los barcos que navegan el Golfo Nuevo el lugar exacto donde se aparean tres ballenas francas, en un ritual todavía sin explicación definida. El mismo mundo que veía en estos animales una presa fácil para el comercio indiscriminado, hoy en cambio busca desnudar, interpretar y entender las claves de su vida. Y junto a esa naturaleza brutal y desnuda, la ciudad crece y la vida se transforma. *

madryn gastronómicoDurante julio se realizó el Festival Madryn al Plato, buena oportunidad para los restau-rantes de la ciudad. Aquí, nuestros recomen-dados.

el almendroLisandro Aristarain y Oscar Bertona guían este restaurante familiar. Cambian la carta todos los meses, con platos como gazpacho de langostinos o brochette de mar y tierra que suma langostinos, cholgas y cordero local. Alvear y 9 de Julio. Tel.: 470525

cantina el naúticoCantina clásica y popular de Madryn; en las paredes están encuadradas las fotos de los visi-tantes famosos y la carta muestra las formas históricas de preparar los pescados: grillé a la vasca, maitre D'hotel o al roquefort. Para paladares bien tradicionales. Av. Roca 790. Tel.: 471404

posada puerto pirámidesCuando está Mumo (Fernando P. Grosso) hay que comer lo que él quiere: vieyras gratinadas, cholgas al Tabasco o aleta de raya con crema de estragón. Producto siempre fresco de pes-cadores locales. Av. Las Ballenas s/n. Tel.: 495040.

territorioHotel boutique que rescata la piedra y la chapa, materiales que son parte de la historia local. Tiene 32 habitaciones con vista al mar, servicios de un hotel 5 estrellas y uno de los restaurantes más exclusivos. Blvd. Almirante G. Brown 3251. Tel.: 470050.

Cómo llegarAndes Líneas Aéreas realiza vuelos directos a Puerto Madryn todos los días excepto los sábados, ida y vuelta a partir de $689. Aerolíneas Argentinas ofrece vuelos todos los días a la ciudad de Trelew para argentinos desde $958 hasta $1.269. Desde ahí, hay 70 km hasta Puerto Madryn.

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