Camus Contra Camus

download Camus Contra Camus

of 3

description

Albert Camus Una tragedia de la felicidad https://www.youtube.com/watch?v=V4B9zEWTxX0El 7 de noviembre de 2013 Albert Camus, uno de los más grandes y sinceros escritores franceses del siglo XX, hubiera cumplido 100 años.Fue “el escritor francés” del siglo XX, el más leído y el más traducido del mundo.Toda su vida fue un combate contra la injusticia y por la dignidad, la independencia y la libertad.El hombre rebelde,- probablemente el más polémico de todos y el que provocó la ruptura con la “intelligentsia oficial” de las izquierdas francesas, encabezada entonces por la pareja Jean-Paul Sastre-Simone de Beauvoir (el gurú le acusó de “incompetencia filosófica” además de despreciarle porque a Camus le gustaba el fútbol)-, en el que traspasaba las líneas del pensamiento políticamente correcto al comparar el gulag con los campos de concentración. Ayudó a los españoles antifascistas exiliados, se puso junto a las víctimas del estalinismo, apoyó a los objetores de conciencia,En 1999, El extranjero encabezaba una lista de 50 obras fundamentales establecida por 6.000 lectores de una revista literaria: esta breve primera novela publicada en 1942 se impone, con 6,7 millones de ejemplares en la edición de bolsillo, como el libro más vendido en Francia. Le sigue La peste, con cuatro millones.” “Camus ha ganado por K.O. en el caos. El pensamiento ‘modesto’ que reivindicaba sigue siendo una vacuna contra todos los dogmas”. (Jeanyves Guerin)

Transcript of Camus Contra Camus

  • Camus contra Camus "Me hago la guerra a m mismo y me destruir o renacer, eso es todo Quise vivir durante aos segn la moral de todos. Me esforc por vivir como todo el mundo, por parecerme a todo el mundo. Dije lo preciso para unir, aun cuando yo me senta separado. Y al cabo de todo esto, lleg la catstrofe. Ahora me paseo por entre las ruinas, estoy sin ley, cruelmente dividido, solo y aceptando estarlo, resignado a mi singularidad y a mis discapacidades. Y debo reconstruir una verdad, tras haber vivido toda mi vida en una suerte de mentira.

    Cada vez que me dicen que admiran en m al hombre, tengo la impresin de haber mentido durante toda mi vida

    Buena parte de la admiracin y del respeto que todava suscita la figura de Albert Camus van dirigidos a un personaje que l mismo haba comenzado a detestar y del que slo una muerte prematura impidi que se desembarazara plenamente.

    Pocas veces se tiene la ocasin, como leyendo en secuencia las obras de Camus, de reconocer el argumento dramtico de una vida, la tensin que en cierto modo organiza y da un sentido a toda una trayectoria. Una tensin que, por lo que a Camus toca, tiene su origen en la resistencia que su naturaleza de hombre y su vocacin de escritor oponen a la ejemplaridad a que le empujan las circunstancias de su situacin y de su poca. Cabe sugerir que, ms que ningn otro de sus contemporneos, Camus encarna la tragedia de los ltimos intelectuales, impelidos a asumir una representatividad de la que han sido desposedos, lo cual pone en falso sus aspiraciones de objetividad e imprime una dimensin retrica a su gestualidad y a su discurso.

  • Ya en una anotacin de 1949 escribe: Desde mis primeros libros hasta La soga y El hombre rebelde, todo mi esfuerzo en realidad ha consistido en despersonalizarme. Un esfuerzo que, poco ms adelante, califica de desmesurado y estima que no ha servido para nada.

    Es sobre todo en la dcada de los 50 cuando este sentimiento de agotamiento y de rebelin hacia su propio personaje pblico alcanza en Camus una mayor acuidad, como se deja ver en los Carnets correspondientes a esos aos. Refirindose a la poca de la inmediata posguerra, Camus se reprocha amargamente todos esos aos de repugnante seriedad, y denuncia la ingenuidad del intelectual de 1950, que cree que hay que envararse para engrandecerse.Escucha sus propias declaraciones por radio y se encuentra a s mismo exasperante, abochornndose por su tono helado.Cada vez le parece ms aterradora la vecindad de quienes han querido repudiar la belleza y la naturaleza en beneficio nicamente de la inteligencia y de sus poderes conquistadores, de todos cuantos prefieren sus principios a su felicidad. He abandonado el punto de vista moral. La moral lleva a la abstraccin y a la injusticia. Es madre del fanatismo y de la ceguera. As se expresa, pocos meses antes de su muerte, quien sigue siendo considerado hoy da como uno de los referentes morales de este siglo.

    Un hombre que, el mismo ao de 1959, anota: Quise vivir durante aos segn la moral de todos. Me esforc por vivir como todo el mundo, por parecerme a todo el mundo. Dije lo preciso para unir, aun cuando yo me senta separado. Y al cabo de todo esto, lleg la catstrofe. Ahora me paseo por entre las ruinas, estoy sin ley, cruelmente dividido, solo y aceptando estarlo, resignado a mi singularidad y a mis discapacidades. Y debo reconstruir una verdad, tras haber vivido toda mi vida en una suerte de mentira.

    Este sentimiento de mentira, el reconocimiento de un imperdonable desajuste entre su proyeccin pblica y sus aspiraciones personales, define, paradjicamente, la ms ejemplar faceta de Camus, aquella en la que se pone de manifiesto el formidable malentendido que rodea su fama.Cada vez que me dicen que admiran en m al hombre, tengo la impresin de haber mentido durante toda mi vida, asegura quien poco antes ha manifestado no estar muy orgulloso de s.

    La fatalidad quiso que la muerte sorprendiera a Camus cuando se hallaba a las puertas de lo que l mismo califica como una segunda revelacin, un segundo nacimiento. Cuando tena entre manos El primer hombre, la novela que refundaba su vocacin literaria.

    Su vida y su obra, as, constituyen ejemplos problemticos de una pasin y de un compromiso que slo adquieren su valor autntico en la medida en que son negados. Soy yo mismo quien, desde casi hace cinco aos, me critico, critico lo que veo y aquello de lo cual he vivido. Por eso, los que compartieron mis mismas ideas se creen aludidos y me guardan rencor por ello. Pero no; me hago la guerra a m mismo y me destruir o renacer, eso es todo.

    No puedo ser ni lo uno ni lo otro. Y la figura de Camus, permanece para devotos y contrarios en la equvoca penumbra de una destruccin incumplida, de un abortado renacimiento. Enseando, a su manera, el camino. La dignidad del rechazo a la servidumbre y a la posesin.

    http://www.elcultural.es/version_papel/OPINION/33517/Camus_contra_Camus Por Ignacio Echevarra

    Calgula (teatro, 1944)

    Pero quien se atrever a condenarme en este mundo sin juez donde nadie es inocente!

  • El hombre es la nica criatura que se niega a ser lo que es. (Albert Camus, El hombre rebelde).