Carora Corazón Adentro

8/19/2019 Carora Corazón Adentro

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CARORA corazon adentro

HISTORIAS LOCALES

ZONA CENTRO, P ARTE B AJA

B ARRIO NUEVO

TORRELLAS, EL Y ABAL Y C ARORITA TORRELLAS, EL Y ABAL Y L A R OMANA

EL R OSARIO

ZONA CENTRO, P ARTE ALTA

TRASANDINO

L A GUZMANA

SECTOR LOYOLA

B ARRIO OBRERO LIBERTADOR

B ARRIO OBRERO LIBERTADOR (LOS HIJOS DE CHÍO)

SECTOR BRASIL FRANCISCO TORRES

DON PÍO ALVARADO

C ANTACLARO

SECTOR BRASIL: PLAYA L AS MONJAS

ALTOS DE L ARA

M ANZANARE

COLINAS DE C ALICANTO

EL

TERMINAL

B ARRIO SIMÓN BOLÍVAR


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CARORA corazon adentro

FONDO EDITORIAL Alí Lameda

Escrito por los activadores de la Misión Cultura

de cada sector

Serie Personajes

y caroreñosAutores

2TOMO I


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© A LCALDÍA BOLIVARIANA G/D PEDRO LEÓN TORRESC ARORA , ESTADO L ARA

FONDO EDITORIAL ALÍ LAMEDA EDGAR M ANUEL C ARRASCO

A LCALDE

C ARORA : CORAZÓN A DENTROSERIE PERSONAJES Y A UTORES C AROREÑOS

V OLUMEN II TOMO I

COORDINACIÓN EDITORIAL:ISABEL HERNÁNDEZ L AMEDA

CORRECCIÓN DE TEXTOS:ISABEL HERNÁNDEZ L AMEDAA / [email protected] LUIS CORTÉS R IERA / [email protected]

EDICIÓN

DEL

TEXTO

:ISABEL HERNÁNDEZ L AMEDA LUIS CORTÉS R IERA

R ECOPILACIÓN DE TEXTOS: A NA GIMÉNEZ

DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN: V ÍCTOR JESÚS C ARRASCO / [email protected]

COLABORADORES: A NA TERESA A RANGUREN, M YRIAM GIMÉNEZ Y HÉCTOR LUCENA .(F ACILITADORES DE LA MISIÓN CULTURA EN EL MUNICIPIO BOLIVARIANO

G/D PEDRO LEÓN TORRES).

ILUSTRACIÓN: JOSÉ GREGORIO Á LVAREZ

IMPRESIÓN: INSTITUTO MUNICIPAL DE PUBLICACIONESC ARACAS-DISTRITO C APITAL

DEPÓSITO LEGAL: 70820119002528IMPRESO EN LA R EPÚBLICA BOLIVARIANA DE V ENEZUELA


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oa Eterna Carora,Corazón palpitante de Venezuela

Dama centenaria de dulces arreboles

Cuentos poetas y cantores

Transpiraron embeleso, tras tus noches coloridas Cuantas niñas amaron fantasmas

Vestidos de ensoñación

Embrumados por las notas hechiceras

De sus guitarras embrujadoras

¡OH CARORA!

Reina del Morere acariciador

Amante intempestivo y fiel

Que eternamente acaricia tu espalda todaY te canta entre murmullos sutiles

Canciones de siempre,

Río de caudal celoso melancólico y libre

Tus riberas bañaron de paz a tus hijos ilustres

Y por tus caminos polvorientos cabalgó el Libertador

Elucubrando acciones de libertad

Y añorando las caricias amadas de Manuela

En ti mi Carora aún redunda pisadas de corceles

Portando sobre sus lomos estandartes de Patria libre

En Carora

Hay que vivir, para crear y hay que crear para vivir.

JOSÉ GREGORIO ÁLVAREZ SIERRALTA(EL CABOLIPE)

ACTIVADOR CULTURAL


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CONTENIDO vii

C

Prólogo ix

C APÍTULO 1Zona Centro Parte Baja 1

C APÍTULO 2Barrio Nuevo 89

C APÍTULO 3El Torrellas, El Yabal y Carorita 105

C APÍTULO 4

Torrellas, El Yabal y La Romana 123

C APÍTULO 5El Rosario 157

C APÍTULO 6Zona Centro Parte Alta 179

C APÍTULO 7El Trasandino 201

C APÍTULO 8La Guzmana 223

C APÍTULO 9Sector Loyola 239

C APÍTULO 10Barrio Obrero Libertador 251

C APÍTULO 11Barrio Obrero Libertador 257


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viii CONTENIDO

C APÍTULO 12Sector Brasil 283

C APÍTULO 13

Urbanización Francisco Torres 297C APÍTULO 14Urbanización Don Pío Alvarado 315

C APÍTULO 15Barrio Cantaclaro 325

C APÍTULO 16Sector Brasil Playa de Las Monjas 337

C APÍTULO 17Sector Altos de Lara 379

C APÍTULO 18Barrio Manzanare 391

C APÍTULO 19Colinas de San Vicente 397

C APÍTULO 20Sector El Terminal 409

C APÍTULO 21Barrio Simón Bolívar 423


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P


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xii PRÓLOGO

en su mayoría con una trayectoria cultural reconocida, como es elcaso de: Vidal Rodríguez y Mireya Rodríguez del Corpahuaico Teatro, José Luis Infante, Toni Pereira, Floranny Mendoza, Exar Camacaro,

Arelys y Maribel Rodríguez del Movimiento Cultural Carora, los her-manos Crespo, y Wilson Álvarez y José Gregorio Álvarez, con ampliorecorrido en el arte del teatro y la poesía con un estilo muy propio.Los muchachos del Movimiento Cultural La Guzmana, integrantesde los Devotos de San Antonio como: Homero Ocanto y su esposaCarmen Chirinos, los hermanos López, Edgar Túa y por supuestode la zona rural Wiliam Villanueva de Aregue, Miguel Medina eIsiquio Valero del Movimiento Cultural Los Arangues, Adela Guerra

de la población de Jabón, los hermanos Carrasco de Burere, LuisSuárez de San Francisco, entre otros. También, se incorporan a esteejército, luchadores populares para quienes el arte y la creatividadhan sido herramientas del trabajo comunitario, como GumersindoMeléndez, Moisés Ramos, Jesús Antonio David, la Nena Meléndez, Javier Chirinos, Benita Mosquera, Ramón Crespo, Ramón Barrios, Yanira Barrios, Luis Sisirucá, César Tovar, Rufa López, y formadosen este proceso como Gladys González, Rodney Crespo, Juan Se-

rrano, Gloria Ruiz, Rosario Riera y Lilian Ballesteros. Aunque notodos terminaron, y segura de que alguien me faltó, podemos decirque en las casi 17 parroquias del Municipio hay un soldado de esteejército que con su experiencia, voluntad, esfuerzo, creatividad yganas de construir un Estado democrático y social de derecho y dejusticia, para la transformación socialista de la Patria buena, contri-buyó a la elaboración del 1er. Censo de Patrimonio del Municipio,a la documentación de la Historia Local de su Comunidad y por

tanto, también a crear un nuevo concepto de cultura, más allá delas Bellas Artes, porque “Hablar de cultura significa hablar de los valores y de los principios de los pueblos, entre los que destaca laidentidad” (Convenio Marco de Cooperación UNESR-CONAC, …p.8). Asimismo, hacemos mención a: Mili Sánchez, Karelys López y Karol López, quienes como líderes del Comité de Cultura de suConsejo Comunal se dieron la bella tarea de reconstruir la historialocal de su barrio —el sector Manzanare— la que incorporamostambién en este texto.

Realizar la tarea de documentar la Historia de la Comunidad, don-


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CARORA CORAZÓN ADENTRO xiii

de los activadores hacen vida, fue uno de los primeros quehaceresencomendados para el proceso de formación de los participantesen la Misión. Destaca el convenio mencionado, “…la formación está

concebida como un proceso dialógico, horizontal y cooperativo,basado en los principios de la educación popular, los postulados dela andragogía, el aprendizaje permanente y el aprendizaje por pro-

yectos. El participante construye ese aprendizaje como educador(a) yactivador(a) cultural, mediante la implementación de proyectos sociocomunitarios, los cuales tienen un doble impacto: la transformaciónde los espacios sociales y el desarrollo de competencias necesariaspara egresar como Licenciado(a) en Educación, Mención: Desarrollo

Cultural. (… p.24). Por tanto, la historia de la comunidad se convierte en este proceso, en una estrategia de formación básica parael reconocimiento de los espacios comunitarios donde el activadorenmarcó sus proyectos de aprendizaje para la transformación social.

Este libro que hoy presentamos viene a recoger, tal cual comose construyeron 21 historias de diversos sectores de la ciudad deCarora, desde la Zona Centro, antigua y colonial, hasta comunida-des de fundación más recientes como: Simón Bolívar y El Terminal.

Escritas en un lenguaje muy coloquial algunas, desde la visión y elreconocimiento de sus habitantes con su entorno, casi todas, desdela cotidianidad, desde la existencia y el diario caminar con sus expre-siones reales, donde el terruño se convierte en el pequeño mundo,donde el tiempo de ayer pasa a formar parte de las necesidadesdel hoy, lo que le da sentido a los sueños del mañana. “Lo localrepresenta el espacio de lo cotidiano, de lo que nos forma comoseres humanos, que va a contribuir directamente a la formación

de nuestra personalidad… somos hijos de un tiempo y un espaciodeterminado, o, hay un tiempo y un espacio que nos pertenece, entodo caso ésta es una relación llena de experiencias y de contradic-ciones cotidianas” (Almeida Rodríguez, 2010).

Y qué vamos a encontrar en estas historias, pues el alma, el co-razón, los sentimientos, los amores, las motivaciones, los sinsabores,las luchas, los cambios, es decir, la vida desde adentro. Porque estosescritos son producto de caminar el barrio, de la conversa con el vecino, el amigo, el compadre y la comadre, de compartir un gua- yoyo o una “sentaíta” en la tarde en el frente de la casa, de lo que


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xiv PRÓLOGO

contaron los abuelos, o las anécdotas de “Maíta” y las historias de“Paíto”: “No podemos olvidar que estaba el río muy cerca y las aguascorrían limpias, nos servían para tomar y también para bañarnos,

aunque algunas veces nos bañábamos en la quebrada, que tambiénquedaba cerca y de ahí traíamos agua para el uso doméstico, y lasaclarábamos y asentábamos con cardón”.

Por supuesto, que también encontraremos recopilación docu-mental de libros o trabajos realizados anteriormente y que vienen acompletar la necesidad de los activadores en su interés por conocerde manera integral las comunidades que serían los espacios para laconstrucción de sus proyectos de aprendizajes. Es la historia matria

con un contenido afectivo de gran valor. Claramente lo expresan Wilson y José Gregorio Álvarez al inicio de su historia: “Las anéc-dotas, los personajes, en toda su amalgama de historias entrelaza-das y entrecruzadas que forman la urdimbre del tejido mágico deesa historia viva, sabrosa, placentera, doméstica y original que nosda una identidad única e irrepetible en ninguna parte del mundo,que hace que sus habitantes pasados y presentes, escriban la his-toria, nuestra historia, que nos pertenece e identifica, y que le da

a nuestro barrio un lugar preponderante en las pequeñas historiasdiseminadas a lo largo del país, y que llegan a formar todas esashistorias, la historia necesaria y no contada de la Patria, pero quees tan nuestra que se queda con nosotros, y se sigue desarrollando y haciéndose en el día a día”.

Es la palabra sabia del Prof. Ramón A. Ocanto, ya fallecido, delCatire Félix, de Monchita Martínez, de Chus Mogollón, de Cheliano“el Barbero”, de Ambrosio Verde Torbello, de Lucila Rodríguez que

no se llama así sino María, de Pedro Figueroa, de María Betancourtde Vásquez, y de tantos otros que con su testimonio sirvieron defuente para el diagnóstico de sus realidades y de sucesos muy espe-ciales: ”… que se traducen en un cúmulo de conocimiento afectivocapaz de fortalecer la identidad de la comunidad, la integración desus miembros y las acciones tendientes al desarrollo de su entor-no inmediato”. (Misión Cultura, Manual de Historia Local… p.13).Pero además con una dimensión totalizadora, puesto que recogeclima, flora, fauna, gastronomía, primeros pobladores, personajespopulares amén de los importantes, fechas significativas, manifes-


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ACTIVADORES CULTURALES

CRUZ ANDUEZA

JORGE PIÑA

YELITZA RODRÍGUEZ

F ACILITADORA : Myriam Giménez de García

Ambiente de Sistematización: Los Siete Torres

Julio 2007

1

Z CP B


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Z C P B

DEDICATORIA

A LA MEMORIA DEL PROFESOR R AMÓN A. OCANTO, quien nos recibió ensu casa el día 11 de mayo de 2006 a las 4 y 35 p.m., a pesar de su

delicada salud. Fue un maestro al que siempre recordaremos porsus trajes de vestir e impecable presentación. Profesor Ocanto dondequiera que usted esté en estos momentos, gracias por ese relato quenos transportó a épocas atrás. ¡Gracias!, con él se fueron muchascosas que quedaron sin publicar y decir, sólo esta pequeña parteque aquí dedicamos.

Por otra parte, dedicamos también en esta historia a otro, elhombre que se gustó en consideramos una entrevista, como lo

es el Sr. José Félix Riera, conocido cariñosamente por este pueblocaroreño como “El Catire”, a él, pues, gracias por sus palabras deagradecimiento, y sabios consejos expresados hacia nuestra persona.“Gracias”.

De manera muy especial a la Señorita Ramona Fabiana Martí-nez (Monchita), que muy amablemente nos concedió una amena yagradable entrevista.

A Ignacio González Campos, un profesional, conocedor del arte,

y fiel amante del rescate y conservación de objetos valiosos y detrascendental historia.

Al Señor Roseliano. Cheliano el barbero, quien muy gentilmentenos concedió una entrevista.

Al Señor Oscar Verde, que nos facilitó biografías que nos permi-tieron el desarrollo de la historia local.


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4 ZONA CENTRO PARTE BAJA

APUNTACIONES HISTÓRICAS SOBRE LA FUNDACIÓNDE LA CIUDAD DE CARORA

Según la copia del acta original de la fundación de esta ciudad deCarora, que se conserva inscrita en el libro primero de asientos dehermandad de la Cofradía del Santísimo Sacramento, establecidaen esta ciudad casi desde su fundación. Carora fue refundada el 17de junio de 1572, por el muy Magnífico Don Juan de Salamanca,“Capitán de Justicia Mayor” y tomó posesión, pacíficamente, de estaregión que los aborígenes llamaban “Bariquigua”, en nombre de laCatólica Majestad del Rey de España Don Felipe II, llamándola la

ciudad de San Juan Bautista del Portillo de Carora. Ya para 1569, eran conocida con el nombre de Nuestra Señora de

la Madre de Dios de Carora. El Dr. Perera asesora su afirmación condocumentos copiados en el Archivo de la Academia Nacional de laHistoria y en él la Curia Episcopal de la Arquidiócesis de Caracas.

Los primitivos aborígenes del sitio de Bariquigua, Axjaguas,cruzados con jirajaras belicosos, fueron una raza amable y hospitala-ria, pero también valiente y belicosa, como lo comprueban diversos

hechos de armas que se desarrollaron en su solar durante los díasde la conquista. En los primeros años del siglo XVII, los “cuicas”,

vecinos de este sitio de Bariquigua irrumpieron en Carora en actitudprovocadora, y los “Caroras”, “jirajaras” al fin, capitaneados por elentonces su Alcalde Ordinario de primera elección Capitán BaltazarRodríguez Machado, les salen al encuentro infringiéndoles derrotadecisiva y obligándolos a no intentar más sus incursiones belicosas, y a buscar la paz y la armonía con el valiente vecino.

En los promedios del siglo XVIII fue teatro Carora de una pavorosatragedia, que puso en consternación a sus pacíficos habitantes, y fuela siguiente: los señores Hernández Pavón, personas distinguidas ypudientes, vecinas de esta ciudad, se daban al lucrativo oficio delcontrabando, trayendo de las costas de Coro mercancías y víveres demuy buena calidad y vendiéndolas a precios relativamente baratos.Esto llegó a saberse en las altas esferas de la Capitanía General, dedonde vinieron órdenes terminantes de hacer a toda costa presos alos sindicados de contrabandistas, y, al efecto, los Alcaldes ordinariosde Carora, que eran para esa época don Adrián Tuñón de Miranda


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y don Tiburcio Riera, se ponen en actividad, y los Hernández Pavónfueron reducidos a prisión y encarcelados. Pero en la madrugadadel siguiente día. Los Hernández, valientes como eran, desarman a

los tres o cuatro guardianes que los custodiaban, matan a los queles resisten y logran escaparse. Pero los Alcaldes, también valientes,creyéndose burlados, se arman y salen en busca de los fugitivos,que la voz pública dice estaban refugiados en el Convento de losPadres Franciscanos de esta ciudad. Allí llegan los Alcaldes, peroel Superior del Convento, en virtud de la regla de hospitalidad y derefugiar al peregrino, que priva en los reglamentos de la Comunidad,se niega a entregar a los refugiados.

Los Alcaldes, en vista de la resistencia que opone el fraile, or-denan derrumbar las puertas del Convento, y a viva fuerza sacana los prófugos, formándoles en el acto proceso sumarísimo y sen-tenciándolos a ser arcabuceados en el acto en la Plaza Real de laciudad, hoy Plaza Bolívar.

Este hecho insólito causó honda sensación en estos incipientespueblos, y puede que sea el origen tan generalizado en toda Vene-zuela, del dicho de que el Diablo está suelto en Carora. Los deudos

de los ajusticiados, personas pudientes, llevaron la denuncia a laCapitanía General, y vino orden de enjuíciar a los Alcaldes, culpa-bles como eran de hecho tan delictuoso. Tuñón de Miranda preso y juzgado y sentenciado a muerte, fue ejecutado en la Plaza de LaGuaira, en una de cuyas mazmorras se hallaba detenido. Años mástarde un nieto de Don Tiburcio, Don José María Riera y Riera, hom-bre honesto y singular, que ejerció por largos años el magisterio dela enseñanza en esta ciudad, cuando sus amigos lo embromaban,

echándole a cobardía alguna deficiencia, el Pigüire, (así lo llamaban)indignado, arrogantemente les decía: “¿Cobarde yo? Saben Uds. quesoy nieto de Tiburcio Riera, que cuando subía las gradas del patíbulotemblaba, no de miedo, sino de coraje”.

Desde los albores de su fundación Carora ha sido una ciudadintelectual, ya en la Colonia dio abogados de la talla del LicenciadoPedro Alejandrino de Urrieta y Pros, tan ampliamente humanitario y progresista como lo fue el Prº. Br, Ignacio Antº. De Hoces, a quiense le debe la edificación del Templo de San Dionisio Areopagitade esta ciudad, construido a sus propias expensas. Para la última


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década del siglo XVIII figuró al lado de la más altas intelectualida-des patrias, el sabio, erudito y elocuente orador caroreño Dr. Juan Agustín de la Torre, quien por sus merecimientos fue el primer ve-

nezolano de estado seglar, que ocupó el Rectorado de la Universidadde Caracas, y quien de no haber muerto allá por el año de 1808,indiscutiblemente, hubiera estampado su firma en el Acta Magnade la declaración de nuestra Independencia, porque así era de es-perarse de un espíritu tan ampliamente preparado que ya en otrasocasiones había dado pruebas de poseer ideas, que para aquellaépoca eran por demás avanzadas.

También, fue prócer benemérito de la cultura caroreña, en la

época revolucionaria, el licenciado Pedro Regalado de Arrieche,Diputado por Carora al Congreso de 1811, no pudiendo como tal,firmar el Acta de la Declaración de la Independencia, porque agudaenfermedad lo retenía en cama, pero rotas las hostilidades y nom-brado el General Márques del Toro, Jefe de las fuerzas patriotas queexpedicionaron para Coro, el licenciado Arrieche figura en el Ejércitocomo auditores decir, como Jefe de Estado Mayor.

También, en las filas del Rey figuró con altos relieves de alta

personalidad, y como hombre de firmes convicciones, el tan renom-brado caroreño Dr. José Manuel Oropeza, de quien dijo Juan VicenteGonzález, admirado de que se opusiera a firmar una sentencia demuerte: “¿Cómo pudo tener ese acto de humanidad el sanguinarioDr. José Manuel Oropeza?”, sin pensar el ardiente polemista que lapiedad no es propiedad de seres escogidos, y que ella ha tenidocabida hasta en corazones completamente emprendidos.

El 4 de junio de 1778 fue bautizado en la Iglesia Parroquial de la

ciudad del Portillo de Carora un niño que fue más tarde benemé-rito defensor de la Patria en los campos de la guerra y ciudadanoeminente en los días de la República: el General de División deColombia y del Perú, héroe de Corpahuaico, Divisionario en Ayacu-cho y Epónimo del Estado de la Unión venezolana, que con orgullolleva su preclaro nombre: el General Juan Jacinto Lara, nacido enesta ciudad, de familia patricia y honorable.

Diez años después, otras efemérides gloriosas marcaron la fechade la aparición de otro astro en el cielo de la patricia Carora. El 25de junio de 1788 vino al mundo, para ser uno de los héroes más


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valientes y aguerridos, más luchador y esforzado de marcial conti-nente, de clara y despejada inteligencia, y dotado de un valor queal decir del héroe de Las Queseras del Medio, ese valor daba miedo.

Ese general que ganó sus presillas en pleno campo de batalla, y aquien el Libertador creía una esperanza para el día de la paz, fue elmás grande de los hijos de Carora, héroe en ‘San Félix y mártir deBomboná, a quien un poeta admirador de sus glorias le dedicaraesta estrofa: “De Torres las hazañas, virtudes y proezas del templode la gloria abriéndole las puertas”.

Carora, como es sabido, tuvo en la época heroica, y después enlos días de la República hijos ilustres, que ya en los campos san-

grientos de la guerra o en las Academias donde oficia Minerva, lehan dado renombre y fama, y es por eso que el veredicto inapelablede la conciencia nacional la distingue entre sus hermanas, con elhonroso nombre de la “ciudad patricia”.

Las contiendas fratricidas en que, por desgracia, se ha visto en- vuelta la patria, hizo a Carora teatro de uno de los hechos de armasmás reñidos que han ensangrentado el santo suelo de la patria.

En 1870 se libró en Carora uno de los combates más reñidos que

registran nuestros anales. Se batieron como leones, defendiendo susbanderas, dos generales de bravura legendaria, ambos: que habíanantes sido generosos amigos: el bravo León Colina, el héroe de SantaCatalina, que llevaba en sus manos el pabellón gualda, emblema desu liberalismo, y el denodado Fréitez, valiente como Bayardo y taninmaculado como Sucre, hacía flamear el prestigioso pabellón conel color del Cielo; y el combate fue rudo, y el Bayardo, envuelto enlos pliegues de su bandera, cayó como Girardot en Bárbula, como

Plaza en Carabobo, como Torres en Bomboná.Carora dio a la cultura nacional hijos eminentes que son honra y

prez del pueblo que los vio nacer; Juan Agustín de la Torre, Pedro Alejandrino de Urrieta, en los tiempos coloniales; los Álvarez, losPerera, los Cabrales, los Riera Aguinagalde, entre los cuales Idelfon-so, deslumbra como un astro; Ezequiel Contreras, el civilizador yfilántropo; Andrés Riera Silva, orador de avanzadas ideas, filántropotambién, cuya bondad era tan blanca como un copo de nieve; y,por último, el Doctor Juan José Bracho, filántropo también y poetasencillo y armonioso que, al par que curaba las dolencias del cuerpo,


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fortalecía con sus endecha los males del espíritu; y para cerrar conbroche; diamantino, Carora cuenta entre sus hijos a ese forjador dealmas, doctor de inteligencias juveniles que alumbró como un astro

en el cielo siempre azul de esta ciudad; me refiero al Dr. RamónPompilio Oropeza.Más, mucho más podríamos decir de la historia y de las tradi-

ciones de Carora, pues, éstas y sus leyendas dan margen para unespacioso estudio; pero con lo escrito basta para darse una idea delo mucho bueno que guarda en su regazo de matrona, la proceraciudad que duerme su sueño de Sultana a las orillas del Morere, ese“hilo de miel de perezoso curso”, según el bello decir de nuestro

gran Ildefonso.Según los estudios en la documentación resulta que Carora fue

fundado por el capitán Juan del Thejo en Octubre de 1569; trasladadael 1º de Junio de 1571 por el capitán Pedro Maldonado al sitio dondehay permanece. En consecuencia Juan de Salamanca fue solo un re-poblador y un teniente de gobernador a partir de 1572, tal estudio sedio a conocer en Historias de Venezuela, tercera Edición, Británica,Caracas, 1984, Tomo III. Libro V. Capitulo V.2.N Págs. 300-300 .

LAS TIERRAS DE CARORA

“Los terrenos del Cantón Carora son de los más variados que seconocen en Venezuela.

Los del centro generalmente hablado son tan estériles, como los delas tres Arabias: Pétrea, Desierta y feliz, donde se da con abundancia,las olivas, las cochinillas y hasta la misma goma, reportándose una

utilidad inmensa del aguardiente del cocuy y como 25 especies defrutas silvestres.

Los terrenos del Norte son muy propios y menores, corno lashay en abundancia.

Los del Sur para haciendas de caña, para todo género de verduras,de tierra fría y para ganado vacuno y bestias y parte de ellos tanfríos y montañosos que son inhabitables por enfermizos.

Los del Oeste, hacia el lago de Maracaibo, se cultivan con frutosmenores, cuyas cosechas son extraordinarias y hay fundaciones deganado y bestias.”


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A PRINCIPIOS DEL SIGLO XVII

Ya habitaban a Carora 50 familias blancas que comprendían unas

250, descendientes de Europeos y 800 familias Indias.

CENSOS POBLACIONALES DE CARORA

Para 1572 era un asiento.Para 1873 era un departamento.Para 1881 era un distrito.Para 1910, Carora era una ciudad pequeña, para esos tiempos la

sociedad de Carora, puede decirse que establecía en dos formas:Sociedad de la gente rica y los pobres, la sociedad rica, estaba

formada por las personas de color blanco y con suficiente dinero

los cuales tenían en su poder la propiedad de las tierras.Esta sociedad es muy curioso en el ámbito social pues se casa-

ban entre familias con el fin de no ligar su sangre con las personaspobres que se les consideraba de bajo estatus social.

La clase social de bajos recursos estaba formada de la siguientefórmula: los agricultores o conuqueros, zapateros, alpargateros, som-brerías de pajilla, sombreros criollos de cogollo, barberías, dulcerías,sastrería, costureras, zapatos de cuero raspado de vale Paúl (vale:

amigo de corazón), adobes de barro, para hacer las casas, ladrillosen Alemán, tejas en Alemán.

En alemán se hacían los adobes, ladrillos, tejas, ollas, tinajas, vasos de cama, platillos de tierra para comer, pocillos para tornarcafé, las ollas para hacer las comidas, budares para tender las arepas y esto era hecho por los alfareros de Alemán.

Las costureras se dividían en dos formas: costureras de los pobres ycosturera de los ricos., las costureras de los ricos hacían sotanas paralos curas y trajes de casimir, hechos a mano, las mejores modistas deesta clase de ropa aquí en Carora fueron las Montes de Oca, vivían

AÑO POBLACIÓN AÑO POBLACIÓN

1768 6.000 Habitantes 1950 12.450 Habitantes



1881 7.953 Habitantes


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en la calle Lara entre San Juan y Comercio, frente a la Plaza Bolívar.En esos tiempos las familias pobres entre ellas las mujeres, se presta-

ban el vestido o la ropa interior para ir a la iglesia o hacer una diligencia;

en esos tiempos era muy difícil que una mujer pobre o un hombretuvieran dos piezas de vestir, de ahí salió el traje dominguero, en esostiempos se lavaban las alpargatas y se guardaban en el baúl o la maletapara ponérselas en los tiempos de Semana Santa o en los tiempos de lasFiestas de San Juan Bautista. Los ricos solo tenían escaparates, los pobrestenían que clavar en la pared un clavo o estaca para colagar su ropa.

LAS PRINCIPALES CALLES CAROREÑAS

En la zona de valor histórico y colonial eran: Calle Falcón, CalleComercio, Calle El Calvario y más tarde la Calle Ramón PompilioOropeza, ahora las calles verticales: Calle Carabobo, Lara, Torres,Bolívar, puesto que Carora se extendía hasta el otro lado del PuenteBolívar. Toda esa zona de Carora que estaba del otro lado del RíoMorere la llamaban la Otra Banda, estas mismas calles pasaban parala Otra Banda del Río Morere.

En 1916 hubo una gran inundación del Río Morere, que acabócon toda esa parte de la Otra Banda, entonces esa gente se pasarontodos para acá, para Carora. Ya Barrio Nuevo existía, que tambiéndesaparece con esa misma inundación quedando sólo las ruinas dela Iglesia de La Pastora, luego se reparte esa población en la siguienteforma, una gran parte pasan a formar lo que hoy se llama el BarrioTorrellas, y la otra se quedan en la parte alta de lo que es hoy BarrioNuevo, y los que no vinieron para Carora subieron e hicieron sus

viviendas en el cerro llamado El Cardonalito. Se le dice así debidoa que en ese cerro hay demasiados cardones.

Para esta banda que hoy se llama Barrio Torrellas se pasaron losapellidos: Bracho, Álvarez, Oropeza, Ramos, Barrios, Crespo, etc. Yen Barrio Nuevo quedaron todos los Carrasco, Riera, Bracho, Piña,Suárez, Juárez, Rodríguez, Pérez, Chirinos, Meléndez. El hombre másmentiroso de Barrio Nuevo era Mateo Suárez, y en Barrio Nuevoquedó para siempre la tradicional Salve a La Cruz de Mayo.

Entre los grandes músicos de Barrio Nuevo se destacan: Maestro Juan Teodocio Querales “Juancho” (Guitarrista), El Maestro Ignacio


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Ramos Silva (Guitarrista Universal Clásico), el Maestro Rodrigo Riera(Guitarrista Universal), recorrió toda Europa y América del Norte ySur, en todos esos países ejecutó como compositor extraordinario

y hablaba varios idiomas.La Escuela Juancho Querales fue inaugurada por los Maestros:Rodrigo Riera y Ramón Antonio Ocanto, quien nos está narrandoesta historia y la que escribo tal como la dice, continua hablando y dice llevando la palabra del Maestro Rodrigo Riera y el MaestroRamón Ocanto eso fue en el año… no se acordó porque cuandohicimos la entrevista ya el Profesor Ramón Ocanto estaba enfermo y se le hacia un poco difícil preguntarle la fecha, porque perdía el

hilo de lo que venía contando, por lo cual se transcribió su narra-ción tal cual la contó.

Por primera vez esta Escuela de Música funcionó en la CalleLara, y estaba anexa a la Escuela Contreras que la dirigía la SeñoritaOlga Domínguez Castañeda. El primer profesor que tuvo la Escuela

Juancho Querales se llamaba: Pedro Dorimedonte Ávila Burgos,quien estudió Guitarra Clásica en Venecia (Italia). El maestro Ávilafue profesor de latín del Padre Juan Bautista Pérez Altuna, y realizó

estudios de composición. El maestro Rodrigo Riera hizo sus estudioscon el maestro anteriormente citado.

La calle Carabobo después de 1920 empieza a extenderse desdela calle Sucre hacia arriba, o sea, desde La Cañada (calle Sucre) y laCalle Lara, parte también desde la calle Ramón Pompilio Oropezahasta lo que es hoy el Hospicio San Antonio, en la calle Bolívardesde El Puente Bolívar.

La Plaza Torres fue inaugurada el 30 de junio de 1930, el busto

del General Pedro León Torres en un principio fue puesto en todala esquina de la misma plaza, y más tarde la cambiaron de sitio y lopusieron en el centro, porque la gente empezó a decir que el Gene-ral Pedro León Torres estaba dirigiendo el tráfico. La Calle Bolívarllegaba hasta la carretera Trasandina hoy Avenida 14 de Febrero,porque La Cruz Verde fue instalada en 1890, para rendirle homenajea las Salve de la Cruz de Mayo y la calle Torres salía desde la calleRamón Pompilio Oropeza, hasta la carretera Trasandina.

Lo que se llama hoy la Avenida Francisco de Miranda, paraesa época se llamaba carretera Trasandina, la cual era de tierra y


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todas las calles de Carora eran de tierra, no se conocía el asfalto.La primera calle que se le puso una parte de cemento fue la calleBolívar, quienes hicieron esa calle de cemento trajeron los maestros

de obras y trabajadores de Barquisimeto, y el cemento también lotrajeron de Barquisimeto, y lo llamaban “cemento romano”. Cuandoestaban trabajando todos los maestros de albañilería de aquí de Ca-rora, se quedaban mirando y pasmados de admiración porque erala primera vez que ellos veían y conocían el cemento, y al mismotiempo a los maestros de obra. Esa calle la llamaron al principio laSerpentina Partía, desde la tienda de telas o almacén llamado LaBella Durmiente, hasta la esquina de Bernardita Silva de Álvarez,

quien también vendía telas.El nombre de Barrio Nuevo fue puesto en homenaje al Sr. Barrio

Nuevo, y el El Torrellas en honor al General Torrellas Urquiola.La calle El Calvario antiguamente se llamó calle Corrientes por-

que antes de hacer el dique todas las aguas de Carora salían porahí hasta el Río Morere, y después en 1945 y 1947 hicieron el diquebajo la presidencia del estado del General León Jurado.

La Quebrada Carora venía por otras cañadas de la parte de arriba

de la ciudad, que pasaban por la Avenida 14 de Febrero, la Estaciónde Servicios 5 de Julio, por debajo de la Policlínica Carora, y así vadesde abajo hasta desembocar en el Río Morere.

PERSONAJES IMPORTANTES DEL SIGLO XX EN CARORA

• Dr. Ramón Pompilio Oropeza.• Dr. Pastor Oropeza.

• Dr. Ambrosio Perera.

El Dr. Ambrosio Perera: Fue quien escribió los mensajes o dis-cursos del traslado de los restos del Libertador al Panteón Nacionalen Caracas. Don Cecilio Zubillaga Perera “Chío”: Historiador yescritor. La significativa frase que “Carora sin Barrio Nuevo es comouna guitarra sin cuerdas” es del Dr. Pablo Álvarez Yépez “Paucho”.


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MUNICIPIO TORRES EN LA ACTUALIDAD

Ubicado justo en el centro del Centro Occidente venezolano, tiene

una superficie de 6.954 km2

, lo que representa el 42% del territoriodel Estado Lara, este municipio cuenta con 17 parroquias, siendo lacapital de Trinidad Samuel la ciudad de Carora, cuyo nombre es delengua indígena y viene del Caraive “Kurura”, que significa “se aca-bara la comida” felizmente no es así, en esta rica zona ganadera.

En una de las ciudades más antiguas del país, llamada la Atenasde Venezuela, y posee una magnifica zona colonial que muestracon orgullo un acervo patrimonial e histórico de importancia na-

cional. Su nombre es en honor al General Pedro León Torres, héroeepónimo de esta tierra

LIMITES DEL MUNICIPIO TORRES

NORTE: Limita con el Municipio Urdaneta y el Estado Falcón. SUR : Li-mita con el Municipio Moran y el estado Trujillo. ESTE: Limita con losMunicipios Jiménez e Iribarren. OESTE: Limita con el estado Zulia.

Situación Astronómica: Posee 10º 34’ 9” de Latitud Norte y 70º 15’42” de Longitud Norte.

Hidrografía: Este extenso territorio semiárido está atravesado por7 ríos: Tocuyo, Morere, Curariguita, Diquiva, Quediches, Bucares y Sicare.

Población: Según proyecciones para el año 2005 en el MunicipioTorres, se estima una población de 192.595 habitantes.

El Relieve: Está conformado por pequeños cerros y lomas redon-deadas, rocas calizas y arenas blanqueadas que presentan unpaisaje accidentado. Su zona semidesértica está cubierta por una vegetación xerófila macro térmica (de alta temperatura).

Clima: La época de lluvia se da en los meses de: Septiembre, oc-tubre y noviembre, y en el año caen esporádicos chubascos, suclima es cálido y seco.

Recursos Minerales: Hay un yacimiento mineral de mercurio en LaMesa a 34 Km de Carora, en la Parroquia Chiquinquirá, ésta fueexplotada desde 1940 hasta 1945. En Curazaíto y Sogoré existen


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yacimientos de arcilla blanca, y al sur de la ciudad de Carora seubica una gran variedad de piedra caliza, materia prima paraproducción de cal.

Flora: Cují, Yabo, Cardón, Lefaria de dato y guanajo, Tuna guasá-bara, y Úbeda, Buche, Vera, Dividive, Olivo, Mamita, Maguey,Sisal, Cocuy, Trompillo, Curarí, y el Semeruco que es símbolo dela Identidad Larense, sangregado.

Fauna: Zamuro, Cardenal, Catalejo, Titiriji, Lechuza, Garza, Pigua,Patilingo, Turpial, Paloma barrerita, Cardenalito, Chuchuba, San

Antonio, Congo, Cotorra, Loro, Cristofué, Cascabel, Iguana, Conejo,Sapo, Rana, Bagre, Guabina, Corroncho.

PARROQUIA TRINIDAD SAMUEL

La Parroquia Trinidad Samuel es una entidad político territorial,perteneciente a la subdivisión del Municipio Torres, del estado Lara,cuya capital es Carora, y la cual debe su nombre al prócer de laIndependencia, Capitán José de la Trinidad Samuel Pernalete.

La parroquia posee una excelente ubicación geográfica, situada en

el noreste del Municipio Torres, limitando al norte con la Parroquia Altagracia, al sur con la Parroquia Antonio Díaz, con la ParroquiaCecilio Zubillaga Perera y la Parroquia Lara, al este con las Parro-quias Chiquinquirá y Espinoza de los Monteros, y al oeste con lasParroquias Las Mercedes y Montes de Oca.

Posee una población estimada para el 2001 de 95.836 habitantes,con una superficie de 751 km2, y una temperatura promedio de 28º C(según Fudeco).

La formación geológica que conforma la Parroquia TrinidadSamuel, data de principios del cuaternario, y la constitución de sussuelos que son en su mayoría de origen calcáreo, donde predominanlas arcillas y algunos conglomerados, con un PH entre 6,5 y 8.

La vegetación existente en toda la zona lo constituyen espinales,con especie como: El cardón, la tuna y otras que por condicionespluviométricas se han adaptado a las limitaciones hídricas.

Existen otras variedades vegetales como: Yabo, Cuji, Dividive,Semeruco, Úbeda, entre otras empresas autóctonas.

La hidrografía de la parroquia está constituida principalmente


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por el Río Morere, cuyo cauce circula en dirección Oeste-Noreste,pasando frente a la ciudad de Carora, la cual divide a ésta y a lazona de la Otra Banda. Asimismo, existen dentro de la parroquia

gran cantidad de cauces secos (Guadis), que sirven de drenajes entemporada de lluvias, los cuales no son muy abundantes, pudiendoalcanzar entre los 550 a 720 mm anuales.

La Zona Centro está ubicada en el Noreste de la ciudad de Carora, y sus límites son: Avenida 14 de Febrero, calle Sol de Oriente, calleEl Calvario, la Quebrada Carora y el camino o vía de Tierra de loscañeros. En ella hay 7 carreras, 10 calles, 1 avenida, 7 callejones.

La Zona Centro es muy extensa y de mucha importancia, aquí

se fundó la ciudad de Carora, hace cuatro siglos y medio, y luegose expandió, en ella hay muchas cosas interesantes y gran riquezacultural, que muchos no conocen, de repente por nuestra igno-rancia o total desconocimiento de que eso que era ser viejo se lellamaba sabiduría, o porque pensamos que no tenían carros, tituloso dinero, que sin eso son unos “don nadie”, pero con el tiempogracias a Dios, ahora sabemos que no es así, por eso digo queahora es que nos falta saber muchas cosas dentro de esta carrera

llamada cultura. A esta zona la comprende la Zona Colonial, histórica, y la parte

contemporánea. Ella carece de dolientes, el mal que más nos aquejaes la inseguridad, pero también las calles en mal estado, y los mu-chos espacios que están abandonados por el estado, el municipio olos dueños, o quién sabe qué, no le importa; muchos inmuebles seestán cayendo y otros se están destruyendo, los cuales son lugaresdonde estuvieron grandes cantantes como: Pedro Infante. Hoy sólo

son lugares desolados.Creemos que en el Cine Bolívar podría funcionar como un centro

de películas del cine latino, y de lo que el Presidente de la RepúblicaBolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, quiere lograr con laayuda de nosotros, los cines comunitarios.

En nuestra zona hay centros educativos privados y públicos, des-de preescolar hasta universitarios, bibliotecas, infocentros, iglesias(católicas, protestantes, evangélicas, etc.), ambulatorios, laboratorios,centros comerciales, policlínicas, bar-restaurantes, plazas, edificios,zona comercial, estaciones de servicios, Mercal, farmacias, ancia-


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natos, centros sociales, clubes, Plaza Bolívar, periódicos, radios,lugares históricos, etc.

El recurso humano de esta zona es muy grande. Creemos que

hay profesionales en todas las ramas, estudiantes de varias ca-rreras, músicos, teatreros, bailarines y cultores, que lo que ellossaben no necesitan de tener el título universitario para saberlo,muchos trabajadores que estudian en las Misiones Robinsón,Ribas y Sucre.

Por supuesto, esta información se la daremos más detalladacuando describamos con lujo de detalles la cantidad de gente, casas,locales y otras cosas que en nuestra zona hay.

Eso será con la historia de la comunidad, en el diagnóstico haydatos detallados de la comunidad, y el censo de patrimonio cultural,entre otros. Se dice que hay mucha tela que cortar en la historia denuestra Zona Centro.

ENTREVISTAS

ENTREVISTA A EL CATIRE TIMAURE

Hola Catire, mi nombre es Marcos Marchán, y quien me acompaña es William Montilla. Somos activadores de la Misión Cultura y queremoshacerte una entrevista, la cual posteriormente te la vamos a pasarpara que tú la leas y nos digas después si lo que está escrito en elcontenido está bien, o si hay que agregarle algo para corregirlo.

— ¡Jaah¡ Mucho gusto, José Félix para servirles.— Catire en qué fecha naciste y en qué lugar.— Nací el 11 de febrero de 1926, en La Majada, eso perteneció

en esa época al Municipio Montes de Oca.— Quiénes fueron tus padres.— Mi madre fue Vicenta Antonia Timaure. Ella provenía de

Churuguara, del estado Falcón. Mi papá se llamaba Bernabé RieraMontes de Oca.

— Yo, fui lo que llaman un hijo ilegítimo, y mi papá fue un co-merciante de acá de Carora. No de allá de La Majada, allá éramoscomo seis hermanos varones y dos hermanas hembras.

— ¿Dónde estudiaste tú?— Yo, en una escuelita en Camay. Sí, mi mamá le cocinaba a un


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compadre llamado Roberto Gatica, y resulta que se va a cocinarle aél, porque era mi padrino, también porque quedaba más cerca de Altagracia, que ir a trabajar a Camay. Eso es algo que creo que es

interesante, bueno. Después hubo una gran sequía, un gran verano y nos venimos para Carora.— De qué año estamos hablando.— Estamos hablando del año 1926 ó 29, algo así. No recuerdo

bien.— Usted me dice que nació en la fecha que nació Fidel Castro.— Bueno, sí.— Cuál es la fecha exacta.

— Él, Fidel, nació en agosto de 1926 y usted, en febrero de1926.

— Nació primero usted.— Si nací primero yo. ¡Pregunte¡ Pregunte¡ Bueno entre otras

cosas, quiero decirles que había una zona que era muy bonita,había gente muy buena, era atractiva por lo bonito. Eso quedabacercar del pueblo de Altagracia. Le llamaban La Central, porqueallí estuvo la Central Telefónica, que era de Don Ramón Herrera,

hombre progresista. Había un tendido alámbrico. Bueno, todas esascosas ocurrieron. Entonces, mi mamá le gustaba mucho cocinar,cocinaba bien y entonces me llevó pa’ La Central que quedabacerca de Camay.

— ¿Eso era algún caserío?— No, no, La Central no. Eso era cerca de Altagracia y era una

sola casa. Era de un General. Un detalle que se me perdió un poco.Uno cuándo es un niño estudioso, eh, los pilares estaban sobre una

laja, sobre una piedra sin que se haya caído la casa todavía, cómoles parece.

— Ahí todavía existe esa ruina.— ¡Sí, como no! Existe la casa. En estos días fui con un primo

mío, pero corre demasiado! ¿Cuál es lo grande de montarse en uncarro, chico? Fuimos a Altagracia y en el camino le dije, párate aquí,en La Central, donde yo me crié, y esa casa fue después de DoñaObdulia Alvarado, algo así.

— ¿Esa casa fue habitada posteriormente por familias?— ¡Sí, como no! Un General, ese que digo yo, un General Oro-


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peza, y es una de las pocas casas que están los pilares sobre unalaja. ¡Todavía existe! ¡Un día vamos a ir allá! ¡Algún día de estos!

— Hábleme de sus estudios, lo poco que usted me estuvo con-

tando. Sus estudios no fueron tan avanzados.— No, no fueron tan avanzados.— ¿Quién fue su maestra de sus primeras letras?— Don Ramón Perera.— Eso fue aquí en Carora.— No, eso fue en La Central. Me quedaba más cerca de Altagracia,

que de La Majada a Camay.— Hábleme de sus primeras letras, quien fue su maestro, su

guía.— ¡Ah, bueno! Ese fue Don Ramón Perera, cuándo muere éste

(él no procreó), sí crió a un joven que se llama Elías Perera, viveen Caracas, no sé si ha muerto. Entonces yo iba desde La Centrala Altagracia, a aprender las letras, pues, pero muere Don RamónPerera. Muy inteligente era Poncianita Silva, sobrina del padre PedroFelipe Montes de Oca, bueno hasta ahí llega esa parte.

— ¿Quién fue también su maestra?

— Ajá.— ¿En qué año emigra usted a Carora? ¿Cuándo tiene su familia

establecida?— No, no cuando mi mamá se viene para Carora, es porque había

un gran verano inmenso, y llegamos a una casa que se cayó, quese llamó el Balcón de los Pérez.

— ¿En qué calle quedaba el balcón?— En la calle Torres —cerca de El Páramo— entonces mi

mamá insistía en que yo tenía que estudiar porque el estudiarera lo más avanzado que había, y me pone de noche a estudiar y a trabajar de día. Todas estas cuestiones parecen que son muyinteresantes. Entonces, eh, llego yo a que los Pérez Alvarado, enla calle Torres (la casa que se cayó), ellos tenían una gran amis-tad con Don “Chío” Zubillaga Perera, y decía —cuando llegabael correo de burro—, ellos fabricaban queso de “taparita”. ¿ Nolos conoció usted?

— No, no conocí ese queso de “taparita”, de gran calidad.— Son unos quesitos así como unas “taparitas”…


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— Las que actualmente se venden en las carreteras.— ¡Aja! ¡Aja! Muy delgado ellos en eso…, y le mandaban a Don

“Chío” Zubillaga una taparita de suero y un pedazo de queso, y yo

era el encargado de llevarle eso a Don “Chío” (…) , y conocí a Don“Chío” ahí lo conocí!— ¿Qué aprendió usted de Don Chío?— Bueno él me decía una vez: “Todo el que cree que sabe dos

letras y no va a Francia, es un analfabeta”. Porque Francia hizouna revolución y mató a Luis XV en la guillotina (…) y admiraba aFrancia, Don “Chío” era de origen Vasco. ¿Sabías eso?

— Tampoco lo sabía.

— Tenía una hermana que también era demente.— ¿Qué anécdota cuenta de la hermana de Don Chío que era

demente?— Tuvo hijos muy importantes… como Andrés Zubillaga. No

recuerdo los demás. Otro llamado Alí, yo no sé si vivía en Falcón…había un hombre que era General también… porque esos Zubillagasson Vascos.

— ¿De descendencia Vasca?

— Sí, sí. Usted me contaba hace rato, Catire de que Carlos Zubilla-ga aparentemente se suicidó, y eso no se ha publicado, ¿es verdad?,¿qué tiene de cierto eso?

— Bueno… yo no estuve donde él, eso fue en un campana-rio…, eso fue en Duaca que se mató. Pero de eso no hubo tantatrascendencia… porque aquí había ciertas diferencias y esas cosaspues… yo quisiera explicarte un poco más, respecto a ese señor…aquí estamos conversando a espaldas de él (se refiere a la estatua

ubicada en la Plaza Aguinagalde). Yo siempre paso por el frente…porque era muy importante. Basta con que fuera el hermano mayorde Don “Chío”.

— Para brindarle ese respeto… Porque precisamente estamos enla Plaza que tiene su estatua.

— Sí, bueno usted, pregunte más…— Bueno Catire, ahora diga usted…, ¿qué se recuerda de las

calles de Carora, por ejemplo, la calle Falcón, la calle El Calvario?— La calle Falcón es la que estaba… (eso lo derrumbó la inun-

dación), la primera inundación.


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— No, en la primera inundación yo no estaba aquí.— ¡Ah! No estaba aquí para la primera inundación… estuve en

la segunda.

— Yo, estaba en La Majada. pero lo que yo no me explico…, lostrabajadores no compactan el dique… que debían hacerlo, pues…no reciben una ayuda del Gobierno pues, eso se rompió y acabócon la Zona Colonial. .esa era la vida económica de Carora.

— La calle Falcón.— La calle, Falcón, había la calle Comercio… esa va a dar a la

iglesia El Calvario. .todo eso era una zona comercial hasta llegar aLa Bella Durmiente, que era de un hermano de Don “Chío”… Félix

Mariano Zubillaga.— Cuénteme un poco… ésa. ¿La planta eléctrica no sabe de

quién era?— Eso se hizo por acciones… y como no!, eso fue… yo no sé

exactamente cuando se fundó y por quién… pero había que alum-brar a Carora.

— Sabe de alguno de los accionistas.— Yo sé que era de un señor comerciante que se llamó Germán

Herrera, a quien yo le debo respeto.— ¿Era uno de los socios?— Sí, era uno de los socios…algo así, no me equivoco, bueno.— Ahí donde está el Teatro Alirio Díaz, ¿qué había antes? o sea,

al lado de la Iglesia El Calvario.— Esa era una casa de Juan José Herrera, sobrino de Don Herrera

Zubillaga… y hay un señor… que trajo a Carora una vaca preñá.— ¿Por qué usted dice que era una vaca preñá?

— No, porque es el comienzo de la Raza Carora por un hombremuy progresista que se llama Ramón Herrera… (no se acuerda delnombres de los demás).

— ¿Pero Ramón Herrera fue el iniciador?— El iniciador de la Raza Carora. Sin ello Carora tuviera sin un

renombre digo yo, pues… entonces sus hijos, fomentaron la cría dela Raza Carora, hasta llegar un momento en que Don Carlos Herrera,que era el hombre que seguía con esa Raza Carora… que obtuvograndes premios y le encantaba fomentar el ganado… era el primerproductor de leche de la Raza Carora… digo yo.


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— ¿Quién de las personalidades de Carora trajo el primer carro?¿Recuerda usted algo de eso?

— Eso lo trajo un italiano… se llamó… es que no me acuerdo…

la casa todavía existe.— ¿En qué parte?— En la calle Lara, anexa al Colegio de las Monjas (se trata de la

Casa Hogar) ahorita la remodelaron y quedó muy bella.— Ok, Catire, pasando a otro aspecto, a lo social, a las luchas

sociales, se recuerda usted, de una luchadora social de esa época, deuna mujer que fue luchadora social, en el sentido de ser humanista,dadivosa, de ayudar al prójimo. ¿Qué recuerda usted?

— Yo no recuerdo mucho eso… primero porque yo no soy deaquí…y segundo porque en ese momento, la mujer no tenía la li-bertad que tiene hoy…

— Tiene que haber alguien.— ¡Como no! Hubo una mujer que fue la creadora de la mater-

nidad de Carora.— Juana Francisca Arriechi.— No, no! Hubo otra anterior a ella que fue una de las que no

se les ha hecho ningún homenaje hasta ahora.— Usted no se acuerda ni del apellido de ella.— No, yo no me acuerdo.— Entonces, eso fue una táctica de supervivencia al instalarse

la maternidad, ¿verdad? Porque para ese tiempo no existía un dis-pensario.

— No, no había eso. Por eso las mujeres no procreaban porquepodían morirse los hijos, algo así.

— Muy interesante, entre los orígenes de una comunidad, un sec-tor especial, recordemos por ejemplo la zona de El Calvario, ¿Cómofueron sus inicios, cómo se formó este populoso sector de Carora?

— Ese sector se formó… yo recuerdo mucho que desde SanDionisio o algo así…, perdón si me equivoco eh… había elcrucifijo Jesucristo… después de haber aparecido. Como diría yo caramba! Allí era el encuentro entre la Virgen María y Jesúsresucitado, y era en la Plaza Bolívar frente a hoy una casa, quetiene Teodorito Herrera.

— ¿Era propiedad de Teodorito Herrera?


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— No, no, fue propiedad de “Chico” Juan Oropeza. Eso estádentro de las manifestaciones religiosas que usted recuerda, paraesa época. Sí, sí para esa época.

— Y para acá, más contemporáneamente, por ejemplo, la CalleRamón Pompilio Oropeza.— Ahí vivía, ni más ni menos que el Dr. Ramón Pompilio Oro-

peza.— Por ese sector, donde actualmente se llama Calle Ramón Pom-

pilio Oropeza, en honor a él. Y en la otra calle siguiente, la calleSucre, no, no esa es por el General Sucre.

— Cuándo usted, llegó a Carora, ¿hasta dónde llegaba la ciudad?

— Cuando yo llegué, llegaba hasta allí —señala el Centro Lara—.— No, no llegaba hasta aquí, hasta el Centro Lara y ese hospital,

(se refiere al Hospital San Antonio) ese tiene su historia, lo que pasaes que no recuerdo. Recuerdo poco.

— Qué nos cuenta usted acerca de la fundación de este hospital?El Hospital San Antonio al lado tenía la Maternidad (anteriormente),el asilo de ancianos y al frente está el Comedor Popular.

— Eso es nuevo, ese asilo de ancianos.

— La iglesia ya existía.— La iglesia San Antonio.— Dentro de la gama cultural, cantantes, poetas, artesanos. -Yo

fui gran amigo de Segundo Ignacio Ramos.— ¿Qué hacia él?— Era herrero.— ¿A qué se dedicaba en la herrería?— Era herrero. Hacia ventanales, portones, ¡todo, todo! Había

también un personaje que indudablemente, todo redundaba en tornoa Don “Chío”. “Chío” fue genial. Para mí fue genial.

— Por supuesto, porque por él pasaron alumnos que después se hicie-ron grandes como Alí Lameda, este Juan Páez Ávila…mucha gente queél ayudó a que cultivaran… digo yo pues, si la memoria no me es infiel.

— Abarcando un poquito más allá, ¿usted recuerda cuál fue elcine que construyeron por primera vez aquí en Carora?

— Como no! el cine primero… se construyó al frente de la casade una hija de Don Ramón Pompilio Oropeza que se llama Beatriz.

— Eso queda dónde.


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— Eso queda en la calle Ramón Pompilio Oropeza, ese cine seincendió.

— Calle Ramón Pompilio con qué.

— Con calle Carabobo.— ¿Por qué se incendió el cine?, eso se incendió por esas cosasque ocurren en la vida, pues… problemas eléctricos.

— Si, problemas eléctricos. Carora estaba muy atrasada, no hablanbomberos ni esas cosas, y después se fundó el Cine Salamanca. Yofui trabajador del Cine Salamanca.

— ¿En qué fecha se fundó? No me acuerdo la fecha.— ¿Quién fue su dueño? El dueño fue el señor Gonzalo González

no me acuerdo el otro apellido… como que era Herrera… algo así.— ¿Después de ese primer cine?— Se hizo el Cine Estelar que está en la calle Bolívar— ¿Otro cine?— Ese era de un hombre muy progresista.— Recuerdo que estaba el Cine Bolívar.— El Cine Bolívar. El Cine Estelar, también el Cine Trasandino…

todo esto los fue haciendo Gonzalo… Sí, yo trabajé mucho con él,

Él era propietario de todos los cines? Sí, de todos los cines. ¿Quéhacia usted en el cine?

— Era taquillero.— Y a quién recuerda usted como proletista, es decir como ope-

rador del proyector en la casita.— Recuerdo a Marcos Barrios. Después había otro que le decían

“Tongolele”, yo no sé el porqué le decían así.— Muy bien, hablando de esos nombres populares, ¿qué otros

nombres recuerda de esos personajes que hicieron vida en Carora,que fueron populares por llevar un sobrenombre?

— Yo conocía a un tipógrafo… se llama Raymundo Carrascoque decía cuando se echaban palos “ay mi máquina quien estarácociendo en ella”

—¿Y por qué decía eso?— Porque estaba ebrio, era un gran tipo.— ¿A qué otro recuerda usted?— Otro que recuerdo es a Isaías Ávila y a Víctor Julio Ávila. Habían

muchos, tenían un periódico que se llamaba Cantaclaro.


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— ¿De los locos que habían cual era su loco preferido?—No me da la mente.— ¿Recuerda a Yoyo?

— Jah, sí, a Yoyo… pero habían otros que eran más conocidos.Había una mujer que la llamaban Juana “La Tatura”.— ¿Por qué le decían así?—Porque siempre cargaba un taturo en la cabeza, un pote de lata.— ¿Te acuerdas de Salomón?—¡Como no!— Esos son muy inteligentes… esos son de los Bracho Pérez,

todo el que es Bracho aquí es inteligente.

— ¿Qué recuerda de la inundación de Carora?— Yo no estaba aquí en Carora, pero si había estado meses antes aquí.— Catire, con respecto a la cultura, puesto que usted citó a “Vijú”,

Juan Páez Ávila y Segundo Ignacio Ramos, que también fueron culto-res, poetas, periodistas, entre otros y me habló usted., anteriormentede la fundación de un periódico que se llamó “Cantaclaro”, ¿seríauno de los primeros periódicos que se fundó en Carora?

— Cantaclaro se vendía semanal.

— Era un semanario. Se vendía a 12 céntimos y medio… así, auna locha.

— Ajá, ¡algo así! Eso lo dirigía Isaías Ávila de bendita recordación, por-que era un vocero que tenía algo, bueno y un escritor que había aquí…Segundo Ignacio Ramos. Por esas cosas de la vida…y eso fue…no sé,no sé. Parece que murió en Falcón, pero hubieron aquí muchos poetas.

— Qué otro periódico recuerda usted, que se haya fundado paraesa época a parte de Cantaclaro.

— El Diario de Carora.— La Sociedad de Artesanos, San José. Estaba frente a la Capilla

Evangélica, en la calle Lara.— La Sociedad de Artesanos, ¿qué función tenía para su época?— Bueno eso era para los que eran Artesanos.— ¿Qué artesanos?— Bueno, carpinteros, herreros, zapateros… yo sé quién la fundó

un señor que era zapatero.—¿El nombre de ese señor, lo sabe?— No recuerdo el nombre.


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— ¿Qué acto cultural organizaban ellos?— Ellos hicieron actividades deportivas en el Centro Lara. Don

“Chío” fue el creador de las Tenidas Culturales del Centro Lara.

— ¿En la sede de la Sociedad de Artesanos se realizaban bailes?— Sí, sí. Tenían sus semanas deportivas. El Pentagrama era elmejor grupo que había en Carora.

— ¿Eso se hacía en la Semana del Artesano?— ¡Ajá! ¡Sí! había gente que discurría, que recitaba. Carora siempre

ha sido muy importante.— Sobre todo en aquellos momentos de los años 20, por ahí,

había una buena participación de las comunidades. El sector ar-

tesanal era importantísimo en el Distrito Torres en general, perolamentablemente fueron cosas que se fueron acabando. Qué otracosa recuerda usted, en la parte política partidista, por ejemplopersonalidades que actuaron en la política.

— Una dama que se llama Doña Olga de Gallardo, que incursionóen la política, esa fue la creadora de URD a nivel local. Cónchale!Lo bueno sería un poco de memoria, ya yo tengo ochenta años.

— ¡No, no! Pero a pesar de ello, de ese vago conocimiento y de

la memoria que usted, tiene en algo contribuye en este trabajo queestamos realizando. Que más agregaría usted, como mensaje a lasnuevas generaciones.

— ¡Comportamiento como debe ser! Que estudien, porque estu-diar es todo, lamentablemente yo no pude hacerlo.

— Y el trabajo tesonero, aquel hombre que todos los días brega,a la mujer que sale a buscar el pan de cada día, al pobre muchachoque deambula por la calle, ¿cuál es el sentimiento de usted, para

con ellos?— ¿Cómo se solidariza el Catire?— Yo, me solidarizo, porque como para mí yo no pude estudiar,

lamentablemente, para mí el estudio es todo… lo demás me importaun pito. Hay que estudiar pero con mucho juício.

— Si hubo muchas personas de aquí de Carora que batallaronpor este pueblo en lo cultural, religioso y deportivo, y que ha de-jado memoria en este pueblo. ¿Qué más recordaría, qué agregaríacomo última cita?

— Bueno. Don “Chío” indudablemente! Don “Chío” fue un “tigre


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de cola”. Pa’ mí! Gracias a él yo aprendí un poquito a leer.— Cuando vino Pedro Infante a Carora. ¿Ya usted trabajaba en

el Cine Salamanca?

— Sí, sí. Y hay una cosa muy importante, porque había un urinariocasi al frente de la puerta donde yo trabajaba, y llegó él y me dice:¿Cómo marcha esto? Antes usaban engrudo para pegar los carteles… y yo le dije: ¡Marcha muy bien! Yo recuerdo que la última canciónque yo le oí se llama “Mama Pancha”, y él me dejó una moneda…un peso de cobre, todavía la tengo, ojalá nunca se me pierda.

— Además de esa, ¿qué otra reliquia u obsequio tiene usted,guardado de ese tiempo? ¿Qué cajoncito tiene usted, guardado por

allá como suyo, como una reliquia? ¡Porque nos gustaría tener fotosde eso de lo que tiene usted de recuerdo!

— Yo quisiera complacerlos en todo eso. ¡Cuidado y se caen!, nose suban, yo hacía lo mismo.

— Dijo cuando vio a los hijos de Marcos, subirse en un árbol deCeiba —bueno, este… yo recuerdo mucho a Cantaclaro, es un granrecuerdo, saben y también indudablemente que El Diario, que locreo Don José Herrera Oropeza. Todo eso yo lo recuerdo con gran

cariño. Yo leía El Diario todos los días. Aquí habían varias bibliotecas:En Barrio Nuevo, en la calle Bolívar Don “Chío” me decía ponte aleer… no hay nada mejor que leer y a mí eso me estimuló muchoporque yo recuerdo… todavía tengo un poco de memoria. Él decíaque el que no va a Francia, es analfabeta.

— ¿Cuáles fábricas recuerda usted que funcionaban aquí en Carora?— Fabrica de patos, de chinelas. También había una fábrica de

sombreros.

— ¿Regentada por quién?— Por Juan Pérez Alvarado y estaba ubicada en la calle Torres.

Esa fábrica duró mucho tiempo… producía unos sombreros decalidad. Antes se usaba mucha pajilla. La fábrica de chinelas, unas“chinelitas” como un zapatico que costaban como dos bolívares.

— ¿Y alpargatas?— Aquí se traía ese material de Trujillo y también suelas para

los zapatos.— ¿Aquí había fábrica de zapatos?— Sí, ¡como no! Yo fui zapatero.


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— Dentro de sus profesiones, ¿cuál ejerció?— Zapatero, taquillero en el cine. Aaaah, iba de noche a la escuela.— Recuerda el nombre de la escuela.

— No, no lo recuerdo.— ¿De quién fue consorte El Catire?— ¿Yo, yo? No, de nadie. Siempre me mantuve soltero. ¡Ja,ja,ja!— Pero, ¿ha dejado descendientes?— No, no! Mire, este…otra cosa, que es muy importante, que es

que yo me fumaba tres cajas de cigarrillos… y no fume más nunca.Tengo veintiún años que no fumo.

— ¿Y eso a raíz de qué?

— A raíz de que me hacía daño… mi mamá me decía, tú sí gastasen cigallos… es mejor comérselos! Mi mamá era fuerte.

— Bueno Catire, gracias por habermos dado un poco de tu tiempopara hacerte esta entrevista.

— No, no, gracias a ustedes, tal vez esto sirva de algo y se puedaescribir, que la gente lo sepa! ¡Yo, yo espero leerlo!

ENTREVISTA A RAMONA FABIANA MARTÍNEZ

Llegamos justo a la puerta de la casa de “Ramoncita”, tocamos lapuerta, Buenas, Ramona, y preguntó: ¿Quién es?, y nosotros le contes-tamos, ¡buenas tardes¡, Ramona, se dirigió a la puerta y muy amable-mente dijo: buenas tardes, a la orden, ¿Van a pasar?, le preguntamos¿Usted es “Monchita”, la panadera?, sí, sí, como no, pasen, pasen, ynosotros respondimos ¡ah, ya va!, nosotros somos activadores de la

Misión Cultura y deseamos conversar con usted. ¿Nos hace el favor deatender? Ramona, abriendo la reja nos respondió: sí, sí, con muchosagrado para mí es muy bueno, pasen, muy bueno, siéntense. ¿Quéquieren preguntar, ¿Qué quieren que yo les diga? Mucho gusto —ledecimos— mi nombre es Cruz y mi nombre es Yelitza, una por unale fuimos explicando de qué se trataba la visita y con qué motivose la hacíamos.

Bueno, venimos por acá como alumnas de la Misión Cultura yestamos reconstruyendo la historia local de la Zona Centro (partebaja), y como usted ha sido una mujer muy trabajadora y popular


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por sus panes, es muy importante para nosotros que nos cuente susanécdotas. Además, lo que usted nos cuente, va a ser presentado enun trabajo y posteriormente publicado para que muchas personas

sepan su historia. ¿Está de acuerdo, nos quiere contar? Ella respondecon sonrisas, ah sí, sí, ¡que bueno!, ¡Dios mío, muy bueno!.¿Cuál es su nombre completo?, ella respondió con voz muy recia:

Ramona Fabiana Martínez, pero me dicen “Monchita”. ¿Cuál es suedad? Tengo mucha edad y me considero muy joven —respondesonriendo—, nací el 20 de enero de 1912. ¿Dónde nació? Nací aquíen Carora, pero viví mucho tiempo en El Empedrado. ¿Sus padres dedónde eran? De aquí —dice— de aquí, mismo de Carora, caroreños,

yo nací en la calle Bolívar, en el Sector Trasandino, y vivía en esacasa con mi mamá, mi papá y con mi abuela, porque Carora llegabahasta la Cruz Verde nada más, y es que Carora nació abajo, abajo enla Zona Colonial, después de ahí eran puros terrenos vacíos, playo-nes, no habían más casas. ¿Cómo fue creciendo Carora de ahí paraadelante? Ah, después, al tiempo vino un señor de Caracas, él hizomuchas casas y se fue repoblando, y repobló la parte esa de arribade Carora, ah ya me acordé, se llamaba Onésimo, Onésimo Viloria,

así se llamó el señor, ese que vino, él se casó con una de aquí, eraun industrial y no era de Carora. ¿Qué calles habían en esta zonapara su época? Siempre existieron las calles: Torres, Bolívar, Lara,las otras calles vinieron después. Después —pensativa— responde:es que no me acuerdo más, porque lo único, lo único que tengoahorita es que estoy vieja, es el olvido, pero había mercado en elmatadero viejo, los hombres compraban la carne en la calle Contre-ras, y había un señor llamado Castro que mataba, mataba animales

y los vendía por cinco reales. ¿Cuándo usted era niña la mandarona alguna parte a estudiar? Respondió: sí, sí, yo estudié en la escuela,en la esquina de la calle Torres, eran dos señoritas que daban clases,se preguntó: ¿y cómo se llamaba esa escuela?, respondió: no, no eraescuela, eran dos señoritas que daban clases, y les pagaban parainstruirme, ellas eran las hermanas Pérez, “Ramoncita” y María, esoera educación particular, ellas eran muy educadas y sabían mucho. Aprendí a leer y sacar cuentas. Se preguntó: ¿Cómo eran las casas,las calles, la gente, de aquella época? Responde: de allá las casasiguales a las de ahorita, eran muy frescas, lo único que ahorita las


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han cambiado, les han hecho arreglos, pero las mismas. Las calles,las calles eran empedradas, sí, de piedra, todo lo que era la calleBolívar, la calle Lara (…) después, después fue que vino ese asfalto.

Le preguntamos: ¿Cuándo usted era señorita salía a divertirse? Cuandoera joven, cuando era joven —se sonríe— todavía soy señorita, salíaa pasear pero, a bailes casi no, yo iba a todo lo de la iglesia. ¿Quélabores hacía usted en la casa en esa época? Responde: yo teníaque pilar antes de irme para la escuela, tempranito, tempranito, Lepreguntamos: ¿En qué pilaba?, y responde: en un pilón de madera,iba echando el grano y le echaba un poquito de agua, y así hastaque se molía y se echaba en unas latas, y en la tarde cuando venía,

después que jugaba lo soplaba, lo limpiaba y lavaba para remojarlopa’ l otro día lo mismo, ¿y el agua como se surtía de agua en aquellaépoca? Responde: bueno, era en tinajas para beber. En la calle Lara,en la calle Lara había una pluma y las personas que no tenían aguale pagaban a la señora Chayo Oviedo, y al señor Elido Franco, ycuando ahí no había, íbamos al tanque o estanque, y la gente notoda iba pa’ esa pila, la gente pobre que no tenía como pagar noiban a la pila de la calle Lara.

También, Le preguntamos: ¿Y la luz eléctrica, desde cuándo ha-bía luz?, pensativa contesto: no recuerdo, no recuerdo casi, es queese es mi problema, mi único problema, el olvido, es que, es que yo me fui de Carora un tiempo para El Empedrado, si como de, yo tenía quince años, allá vivía con unas primas, y allá no habíaluz, y cuando yo estaba allá, un señor que llevó algo para crearluz eléctrica. Le preguntamos: ¿Y qué hacia usted allá?, y responde: Allá, bueno, yo enseñaba a leer, si yo enseñé a leer a mucha gente,

y a las muchachas para que no se fueran. Le preguntamos: ¿Cómopara que no se fueran?, y contesta: Para que no se fueran con loshombres (sonríe), para que no se fueran sin casarse, porque esodaba lástima, se las llevaban y se iban. Le preguntamos: ¿Y cómo velas de ahorita, que ahora se quedan pero embarazadas? Responde: Y eso, lo creo porque las muchachas ahorita son muy tontas, nose dan respeto, saben que eso a ellas las embroman. ¡ay que calor,calor!, ¿Siempre Carora ha sido así de caliente o ahorita usted losiente más fuerte?, y responde: En Carora todo el tiempo había calor,es que es agosto, este mes es muy fuerte. Le preguntamos: ¿Qué


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más recuerda de los tiempos de su infancia? Responde: pensativa,no jugaba con muñecas de trapo, Eloisa Riera, fue a Caracas y metrajo una muñeca de porcelana que todas las muchachas venían a

verla, jugaba la candelita (…) y no me acuerdo casi, ¿Cómo eranlas fiestas religiosas?, responde con añoranza: Ah, las fiestas reli-giosas eran muy buenas, muy buenas, no habían tantas iglesias,sólo la Iglesia San Juan Bautista, y venía gente de Barquisimeto yde muchas partes, porque aquí hay muchos santos, la Virgen, San Juan. Le preguntamos: ¿Cómo eran las procesiones?, y responde:Sí, sí procesiones —pensativa— El Encuentro, sí, se encuentra la Virgen con su hijo, el santo que lleva la cosa arriba, ¿cómo es que

se llama? (La Cruz), ¡ah, sí, ajá! ¡La Cruz! (El Nazareno), ¡sí, sí, ElNazareno! (comenta muy animada) ¡aquí en Carora es la única partedonde se hace eso, no hay más en otra parte, y todavía y todavía, yo voy todos los días a la Iglesia San Juan, y allá todos me dicen“Monchita”, vamos pa’ llevarla, vamos pa’ traerla, yo nada más meparo en esa esquina de ahí (señalando con el brazo), y se paranlos carros solitos y cuando llego a la iglesia enseguida alguien meabre la puerta y me ayuda a bajarme.

Le preguntamos: ¿Cómo era la gente en su época? Responde:Bueno lo más así pues, las mujeres eran muy pretensiosas, los bancoseran propiedad privada, y si otro se sentaba los paraban, cada banco(está hablando de los bancos de la Iglesia San Juan) tenía los nom-bres, ¡a mí nunca me llegaron a parar de los bancos¡, ellas llevabanabanicos, su velo, pero eso fue pasando, después de los cursillosde cristiandad eso se acabó, yo fui una de las primeras que hizoesos cursillos. Ah, y los hombres, los hombres se quitaban el som-

brero. Le preguntamos: ¿Qué más recuerda usted de aquella época,Ramoncita? ¿Qué es lo que usted le llamaba más la atención, cómoera la ciudad? Responde: Bueno habían poquitos carros, no habíaesa “carrazón” que hay ahorita, la gente (hombres) tenían tiendas,pulperías, vendían sal, papelón, caraotas, en los cajones ponían (…)

Bueno, Don Jacobo Curiel, él era un hombre que mandaba re-medios, y a la gente pobre se las daba, era un hombre bueno, era,era (piensa) farmacéutico. Le preguntamos: ¿Y qué otros personajesrecuerda así como de cultura, música, entre otros? Responde: EnCarora había mucha gente que valía, emprendedoras, aquí hubo un


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grupo que se llamaba Los Trovadores Caroreños, que para la épocatenía mucha fama, los enamorados les llevaban muchas serenatas asus enamoradas (se sonríe). Le preguntamos: ¿Y a usted le llevaron

serenatas? Responde: —muy sonriente— ¡ah, sí, aquí en El Empe-drado —piensa—. Le preguntamos: ¿Qué otras personas conocióusted que hayan sido importantes? Responde: Bueno, yo conocí a“Chío” Zubillaga, esa casa donde él vivía todavía tiene su nombre, élcasi no salía, era muy inteligente, yo solamente lo saludaba, porquecuando yo iba a misa ahí estaba sentadito, yo traté mucho y conocía sus hermanas a esas sí (piensa). Había un señor que le decían“Maestro Serbulo”, era del Torrellas, tenía un taller de carpintería,

él enseñaba y le encargaban cosas (piensa), bueno había más gentepero poco a poco recuerdo. Aunque Carora ha tenido fama siempre,porque habían personajes de mucha cultura, bueno Agustín IgnacioZubillaga, un doctor que iba a las casas.

La casa que está pegada con la Iglesia San Juan, en esa enormecasa vivía Doña Carmen y el Padre “Beto”, la casa está sola ahorita.Le preguntamos: ¿Y qué otro Padre recuerda que haya sido muynombrado? Responde: El Padre Felipe Montes de Oca, y otros que

enseñaban que en los pueblos debía haber piedad, no sólo “brin-coleo”, ni “fiesteo”. Ah, en la maternidad daban a luz el que podíapagar y el que no, no pagaba. Otra cosa, la Iglesia de San Dionisiola hizo el Padre Zubillaga, y no celebraron más misas, sólo el PadreBriceño cuando estaba aquí hacia misas ahí todos los jueves.

Le preguntamos: ¿Qué personajes de la política era nombradoen aquella época, quién se destacaba? Cuando esos gobiernos —dice—nadie hablaba de política, nada, nada más religión, porque

mis tías eran muy religiosas, a nadie le importaba la política antes,esos eran correctos la mayoría, no se sabía más nada. Le pregun-tamos: Cuando se inundó Carora, ¿dónde estaba usted? Responde:(se sonríe) ¡Mira! Cuando se inundó Carora, el agua llegaba arribahasta la Iglesia San Juan, las calles estaban llenas de agua. Le pre-guntamos: ¿Y usted que decía? Responde: Bueno como yo vivía yaen esta casa, estaba más tranquila. Le preguntamos: ¿Y qué cosas legustaba hacer a usted para distraerse? Responde: A mí me gustabamucho leer, leer desde siempre, y leía todos los periódicos: El Dia-rio, El Impulso, porque ese empezó aquí después se lo llevaron pa’


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Barquisimeto, y había otro periódico más pequeño, más pequeño,ahí publicaban de todo, aquí en Carora siempre ha gustado muchola lectura. “Decime” tú que yo estaba chiquita y la gente le gustaba

leer, todavía leo, leo el periódico (señalando el periódico), tengolentes y no me los pongo, no sé, se me perdieron, pero yo leo así, yo veo. En la calle Carabobo estaba la niña Julia, que daba clase yla gente le pagaba.

Le preguntamos: ¿Y con qué otras cosas se divertía, cuando erajoven? Yo oía música en una victrola, era un aparatito que algunostenían, y otros no, nosotros teníamos un primo que vivía en Caracas,que nos trajo un aparato para ver películas, y aquí se nos llenaba

el zaguán de gente para ver ahí, pero hasta las nueve, eran dos,los dos únicos aparatos eran aquí, y a que la señora Edecia Riera,(pensativa). Le preguntamos: ¿A qué iglesia iba usted más? Responde:El Calvario es más viejo que la Iglesia San Juan, y después hicieronSan Dionisio, las misas eran a las seis de la mañana, las misas noeran de tarde, ni en El Empedrado. Le preguntamos: ¿Cuándo ustedse fue a El Empedrado, qué oficio sabía hacer usted? Responde: Yo ya sabía trabajar, tenía alpargatas, bueno lo que va dando el tiempo,

la gente va aprendiendo, y en Carora hay mucha gente buena. LaEscuela Torres era muy buena. Le preguntamos: ¿Cuánto tiempo duróusted en El Empedrado? Responde: Me fui de quince años, llegué de veinticinco, diez años, diez años, llegué muy joven, llegué a la casade la calle Contreras, porque la de la calle Bolívar no era propia, yconstruyeron esta aquí, porque allá vivíamos con los abuelos, aquíhabían dos casas nada más, ésta y la otra más allá, después fueque fueron haciendo y haciendo. Le preguntamos: ¿A qué se dedicó

usted cuando regresó de El Empedrado? Responde: Ah, me empleé, vino la señora Ana Luisa de Álvarez —de allá del pueblo de Cura-rigua— y Beatriz Herrera, y me propusieron que trabajara en unatienda, se llamaba “Silueta Modas”, frente a la casa de la esquinadel poeta (calle Ramón Pompilio Oropeza) Le preguntamos: ¿Y quédijo usted? Responde: Enseguida me fui pa’llá, y me pagaban cienbolívares, y era muy bueno ahí, era una tienda, ahí duré diez años.Le preguntamos: ¿Por qué no siguió? Responde: Se fueron pa’ Bar-quisimeto. Le preguntamos: ¿Qué cosas buenas recuerda del tiempoque duró en la tienda? Responde: Conocí mucha gente y era pa’


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puros regalos, vendían un vestido por cada color, y por cada modelo, y cada cosa era muy especial. Le preguntamos: ¿Quiénes iban másallí? Responde: Doñas, porque eran cosas traídas de Caracas, no

era nada repetido, y una vez le dije yo: Doña, ¿qué tiene ahí en eseescaparate?, ella me dijo hay unos zapatos que había traído, se losmandó su mamá de Caracas, ahí no compraban pobres y yo le dijebájelo, bájelo, que eso se los vendo. Los bajó y le vendió, seis pares.Le preguntamos: ¿A qué se dedicó usted cuando la señora cerró elnegocio? Responde: No lo cerró, sólo que se fue a Barquisimeto, yo me vine para mi casa y comencé a viajar, viajaba y hasta fui aRoma (sonríe). Le preguntamos: ¿Con quién fue? Responde: Me fui

en una peregrinación, en ese viaje, vino muchísima gente, y aquí seanotó un poco de gente, y yo fui una que me anoté con un señor.Le preguntamos: ¿Qué anotaba? y ¿Vio usted al Papa? Responde: Sí, yo lo vi, fui al Vaticano, allí había una parte que había una cosa quedecía Venezuela, ¡y allí estaba yo¡ Le preguntamos: ¿Cuántos díasduro? Responde: Duré tres días, eso era grandísimo, era muy bonito,bueno lo que me puedo acordar. Le preguntamos: ¿Y qué trajo deallá? Responde: “Poray” tengo algunas bromitas, fotos, banderitas,

mire, yo fui pobre, pero hice muchas cosas y gocé, no me quejo.Le preguntamos: ¿Cuándo se identificó usted con el oficio del pan?

Responde: Después de que salí de que Ana Luisa, y viajé mucho.Cuando comencé a hacer el pan, esto se llenó de gente y estabanpendientes, porque yo puse un lema, yo ponía normas, porquehabían otras ventas “poray” por El Torrellas, en la calle Torres, yohacía panes ahí en la calle Carabobo, esa fue la que me enseñó ycuando comencé me ayudaban. Esas otras ventas del centro tenían

sus repartidores, y fiaban, por eso yo de una vez puse las normas, yeran: “no reparto, no aparto, no fío, y que los vengan a buscar aquí”.Le preguntamos: ¿Cuántas veces hacia pan? Responde: Dos vecesa la semana, los martes y los viernes, la gente sabía por el olor. Lepreguntamos: ¿Todavía hace pan para vender? Responde: No, allítengo mi horno, ahorita pasan pa’ que lo vean, pero no, eso es muyfuerte, cuando hago así para la casa, pero lo hago en el horno de lacocina. Le preguntamos: ¿A cómo los vendía? Responde: Lo más querecuerdo, cien, quinientos, mil, yo hacía puro pan dulce, no haciapan salado, pero a la gente le gustaba mucho. Yo tenía mi horno


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que me lo hizo un señor de Barrio Nuevo, no me acuerdo como sellamaba, y venía una señora y lo barría, era de leña.

Le preguntamos: ¿Cómo lo elaboraba? Responde: Mojaba la masa,

lo aliñaba, y lo amasábamos por el molino, salía la masa finita, des-pués lo recogíamos y lo cortábamos en bandejas de aluminio, ahícabían seis panes. Le preguntamos: ¿No le encargaban pan? Res-ponde: (sonriente) Sí… pero lo venían a buscar ahí mismo, por elolor, bueno. Yo puse mis normas y se cumplían, no se fiaba porquequebraba y no se puede, no se puede, este pan era muy bueno, noera como el de la panadería, no, este era muy bueno. Le pregunta-mos: ¿Hace cuánto que dejó de hacer el pan? Responde: (pensando)

No me acuerdo, todos esos se murieron todos, la que me enseñó,las que me ayudaban, yo soy la única que quedé. Soy muy fuertede todo de salud, muy bien, lo único el olvido, no recuerdo todo.

Le preguntamos: ¿Su ideal era viajar? Responde: ¡Ya lo creo!,cuando quede sola vivía con una sobrina, después, ahorita vivo conuna hermana que es viuda, aquí he vivido siempre con mi mamá,después con la sobrina, y como estudia en Barquisimeto, ahoritaestoy con mi hermana. Ah buen calor, esos calores de agosto siempre

han sido muy fuertes, iguales.Le preguntamos: ¿Cómo ve usted hoy en día a Venezuela? Res-

ponde: No me gusta la política, ¡Dios y más nadie! Le preguntamos:¿Cómo siente que está el país en estos momentos, qué sabe usted?(carcajadas) Responde: Que son puros locos, la cuestión es que unono depende de nada del gobierno, no tengo pensión, ni ayuda, ninada. Le preguntamos: ¿De qué vive usted entonces, quién la ayuda?Responde: Yo tengo un primo que mi mamá lo crió y nos ayuda,

él me manda el almuerzo.Le preguntamos: ¿Cómo ve usted hoy a Carora, en sentido de la

gente, la cultura? Responde —con voz recia—: Le voy a decir fran-camente, nunca he sido atenida y siempre pobre. Soy alegre, no soyde las que me acuesto con una “cara de perro” a quejarme, siemprepositiva. Le preguntamos: ¿Nos puede hacer el favor de mostrarnossu taller de pan? Responde: Sí, sí, vengan es para mí una dicha, jaja ja voy a buscar las “chancleticas”.

¡Muchas gracias “Monchita”¡ por recibirnos y atendernos tan bien!Responde: (sonriente) No, el placer es mío, vengan cuando quieran


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y se comen unas “catalinitas”, no ofrezco para no quedar mal, estoha sido bueno para mí, compartir, las conocí y me hicieron sentirmuy bien, ¡ah! ¿qué escribieron ahí muchachas?, y le respondimos:

No se preocupe, que todo el mundo la va a conocer, que Dios lepague “Monchita” Responde: Dios las bendiga (abrazos).

ENTREVISTA A ROSELIANO HERRERA “CHELIANO EL BARBERO”

El señor Roseliano nos concedió esta entrevista en la ciudad de Ca-rora, el jueves dos de agosto del 2007, a las 5:00 PM, en su barberíaubicada en la calle Bolívar (al lado de la Plaza Corpahuaico).

Buenas tardes, señor queremos saber si se encuentra el popular“Cheliano El Barbero”, ¡buenas tardes¡ sí soy yo, ¡ah mucho gusto!,mi nombre es Yelitza Rodríguez (dándonos la mano) y yo soy Cruz

Andueza, nosotros somos activadoras de la Misión Cultura, y estamosreconstruyendo la historia local de la Zona Centro (parte baja), élresponde: ¡Ah muy bien! Queremos saber si usted nos puede hacer elfavor de atendernos, porque es usted una persona muy popular porla zona, y para nosotros sería un honor, que usted nos concediera

una entrevista para ser publicada en la historia local.¡Bueno, como no, pero hablemos en la barbería!Siéntense (ofreció una silla). Le preguntamos: ¿Cuál es su nombre

completo? Responde: Roseliano Antonio Herrera, pero la gente medice por cariño “Cheliano”, Le preguntamos: ¿Dónde nació usted?Responde: Nací en Carora, el 19 de junio de 1944, en la casa esa,donde paren las mujeres, ahí, y me crié en Sicarigua hasta los 19años, y bueno yo me vine pa’ca pa’ Carora.

Le preguntamos: ¿Qué oficio aprendió a hacer allá en Sicarigua?Responde: No, yo era muchacho, yo estudiaba allá, estudié hastacuarto grado, y cuando me vine pa’ca pa’ Carora, saque el sextogrado en el Grupo Ramón Pompilio Oropeza. Le preguntamos: ¿Ydespués que más hizo? Responde: Bueno, de ahí me fui pa’l serviciomilitar. Por ahí me acabé de educar. Le preguntamos: ¿Lo reclutarono fue voluntario? Responde: No me fui voluntario, estuve ahí en PaloNegro, en Maracay, en la Base Aérea, yo estuve en la Escuela deParacaidistas. Le preguntamos: ¿Y cuándo aprende usted el oficiode barbero? Responde: Ahí mismo, con un italiano que afeitaba a


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los soldados, bueno, yo era tropa también, y a oficiales también. Lepreguntamos: ¿Y después cómo transcurre su vida? Responde: (piensa)Bueno me vine pa’ca otra vez, y me fui para El Fuerte y

Carora Corazón Adentro

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