Casco caimán y otras formas de redescuento

1. EL DISFRAZ NO ES

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ARMISTICIO EN SANGRE No toquen a rebato más calamidades no todavía atender esa llamada no nieguen no se hidrate la hidra y no se la combata no suene más ninguna nota por favor por favor por favor que tengo esto acá y todavía me duele y siento el corazón latir tan fuerte

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IGNICIONES De cualquier manera espalda contra espalda y tan fuertemente de atávicas flechas traspasados De cualquier forma fuerza de empuje/ émbolo/ canto posibilidad casi esperanza vacante el futuro la postrimería la sola ansiedad empujando sin otro porqué empujando

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NO PARA DAR TESTIMONIO No para dar testimonio ni acomodar el perfil al golpe no para darte crucigramas y la taxativa oralidad. No para decir para desdecir no para desvariar para variar para variacionar. No para mirarte para mirarme. No para andar en cueros. Que con así de arroz se hacen tantas cosas tantos estómagos se forran y también para sonar dentro de una calabaza maraca de arroz y también para los novios a media escalinata. Que con así esta vez esta voz esta única vez esta vena no para sonar para ser comida no para sonar la verdad/ comida de la toga no para tomar altura ni posición no sino para decir las mismas cosas que ocupan este lugar y lo habitan en soledad. Ahí voy. No para gritar para callar no para sí para no no y sin embargo sí.

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ESPERA QUE PASES POR AQUÍ Refugio de lo inrefugiable de lo que nunca se pondrá bajo techo de lo que no hace más que mirar el horizonte subido al palo mayor Reflejo de la oscuridad brillo negro última pasión de la noche agua de la negación madre donde remojan los pies los huérfanos que viven a la intemperie Así así así así los besos intermitencia que tiembla que se conmociona cuando estás presente que se muere si no o se arracima o se aletarga y con el último miedo y con mucha paciencia espera la esperanza espera que vengas que pases por aquí

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PUERTA DE CALLE No lo olvides Los dos paseábamos del brazo por el medio de una calle remendada luna raquítica que nos empujaba en la noche panza hinchada que nos miraba leche que se desangró en miedos Acaso fue no agitar el jarabe para la tos acaso esa luna de deudas o acaso eso que estuviste a mi lado El caso es que otras veredas otras puertas de calle fueron caminos verticales imposibles de aprender tu voz llevaba un anzuelo en la garganta y así se fue la última vez serpeando bajo el agua La página cambió de manos el sueño tocó otros folios en un descuido un portazo una sirena un espejo en el estaño entre los dientes una hostia oscura Luna desnutrida luna deudora ¿cuántas botellas vacías se pueden cargar bajo los brazos? ¿Cuántos cartones y restos de una vida rota

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a la espera del camión municipal? Todo antes que ser un filo cayendo al precipicio Todo antes que olvidar la propia sombra Luna desfondada acaso cada uno se fue por una pierna del pantalón a distintos zapatos acaso eso No lo olvides detrás de tus manos que hacen trucos está el olor de tu piel detrás de estos ojos que te miran hacer estoy yo no hay lugar para perpendiculares desesperadas Luna destrozada Nada cambió en sus extremos aunque rodemos en medio de un barullo de acasos por tanto no olvides que nos conocemos que nos miramos como dos perros que se cruzan de vereda a vereda No hay lugar para perpendiculares desesperadas Detrás de esa luna en ascuas vamos todos

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TRABAJOS DE ASFALTO SOBRE AVENIDA LA PLATA Todo tuvo que ser nada debió nada está como era entonces Salíamos a pieles de amores a campos de pulpa las casas venían una tras otra con su maldición de polen y hojas secas el viento no hacía peso si teníamos un alma la cuidábamos de las inyecciones y la sífilis Lo que debía ser se quemaba en la calle y las dudas encarnadas molestaban en las tardes bocarriba en las esperas a solas con el reloj Todo tuvo su procesión en la ventana o tal vez no se vendió ningún horóscopo todo fue Medalla milagrosa huida o abandonada a su suerte tal vez Lo que se debe no vino con nosotros ni se quedó en la semipenumbra del bar resistiendo dictaduras peleas de novios accidentes de tránsito

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Lo que se debe es tanto y sólo contamos con esta historia que ahora están asfaltando que no será nada Pero no fueron tardes de noria los días de la cuenta Y también los diarios pasearon su techo a dos aguas su flema de fantasmas y de criminales sobre nuestro lomo quemado con azufre Comediantes reídos bajo la lluvia cariacontecidos archisaltimbanquis cuasisubversivos Armados frente a todo lo que tuvo que ser frente a todo lo que fue

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2. ESQUINA SIN OCHAVA

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INCIENSARIO Ese pañuelo tuyo. Te rodea el cuello con ambas manos mientras tu cuerpo de blanco se deja cerca del café y de ahí tu mirada color de los higos cruzando en diagonal esta calle de hoteles de ahí tus palabras cruzadas claringrillas orales voces soplando de ahí el calor de tu cintura de ahí el mordiscón seguro de tu sexo de ahí de dónde todo esto buscado buscando tréboles de cuatro hojas encontrado en un encuentro amasado amando embrutecido de color recomenzado hasta no dar más al día cada nuevo encontronazo cada nuevo choque cada nuevo reflujo cada nueva voracidad devastadora encontrarte en la esquina para enlazar las manos enlazar esta historia y así sigue esta historia hoy hasta que se desenlaza con tantos miedos tantos silencios tantas preguntas tantos porvenires a nuestras espaldas. Y cuando suelto tu mano ¿dónde sigue esta historia? Vamos a encontrarnos a un bar a un callejón a una plaza a la Costanera a los baldíos de las vías

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dónde sigue esta historia cómo sigue sigue nada más hasta mañana nada más sin documentos tan hallada tan encontrada casi no hay manera de dejarla ser hay que hacerse a un lado y abandonarse a su arrullo. Hoy quizá después tu mano enlazame otra vez enlazame tus manos cerca del café tu mirada color tu cintura tu sexo el viento de tus palabras en nuevos y roncos crucigramas esa humedad de los ojos ese gato que duerme al calor. Ese pañuelo tuyo que se desenvuelve en el aire y flota.

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PASAPORTE De aquella corbata obligatoria ciñéndome como brazos que hoy extraño y aquellos anzuelos de pescar rectas ideas –Las líneas rectas no existen decía la profesora son doncellas geométricas imposibles. Y nosotros pescábamos en los recreos sentados al sol las ideas rectas no existen los anzuelos en cambio terminan por enderezarse. Así vine hoy hasta mí y aquí te estoy esperando haciendo eses agarrado a un farol dibujando eses aprendiendo a escribir cada día todo día toda vez de mi esperanza. Ves terminamos siendo uno de la calle uno más ese horror tan negado tan deseado. Amando lo que nunca amamos lo que nunca quisimos lo que siempre soñamos. Atravesada la garganta por una lucha única de pánicos y errores superpuestos con extrema ternura. Hoy la vida hoy olores de pis y de pañales disputa de pertenencias escritura en papel carta de cartas escribiendo cartas en papel y arrojándose uno con la carta y la botella al mar. Ves terminamos siendo uno de la calle gracias a dios

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un dios que no nos corresponde pero nos pertenece es de nuestra familia nuestro vocabulario y nuestro ateísmo. Uno más de la calle escorado varado saqueado. Levantándose otra vez después de cada caída cada violación cada detención más y más caídos más violados más presos y aún así con nuestra voz nuestra sonrisa nuestra taza caliente de la mañana las piernas empiezan a moverse regresa el pantalón se cuentan las monedas se cepillan los dientes se sale por una puerta igual a diez puertas en un piso igual a cien pisos en un edificio igual a mil edificios en la cuadra se sale se sigue nadie nos ve se sigue igual buscando nuevas iniciales talladas en qué madera qué carne escrita uno más en ese ruido sin caras barullo de una multitud de vida cualquiera de muerte cualquiera de viaje eterno a cualquier lado en cualquier momento por obra y gracia de cualquier dios sentado sobre una pila de diarios viejos.

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VARIETÉ Ese chico bailaba con su música yo te abrazaba y juntos mirábamos su número sus monerías su comedia sus dos ojos brillantes nosótros éramos la comedia él el único público de ese bólido cálido hacía calor nos asomábamos al balcón las terrazas se arremolinaban se las llevaba el viento y mientras nos trasvasábamos entre bambalinas como una suelta de globos los besos globos nosotros soplados desde el otro aire desde la alarma en la tramoya: ¿éramos actores o estábamos robando? ¿éramos ladrones o estábamos actuando? Ahora hace frío hay que pensar en el puchero es la época de los choclos no ya esa cabeza llena de calores ese descalzar el vientre y dormir en el pasto o en los adoquines amigos de los borrachos. Voy. La calle va. Un ojo estrábico yendo a ningún lado mirando propaganda comiendo ningún lado. La época de los choclos voy desarmándome y recogiéndome todo el tiempo me acuerdo de aquel baile nuestro bólido cálido álgido

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gélida bien helada la alegría aquel chico de ojos brillantes bailaba su música nuestra comedia en veremos veremos una suelta de globos payasos domadores trapecistas la mujer barbuda el bólido cálido álgido sin choclos sin un solo choclo ni frazadas ni vistas al futuro cómo es ese plan de ahorro cómo hiciste para cómo te va como los choclos como ningún lado coman ningún lado también ustedes si quieren yo no lo aconsejo prefiero un buen resfrío y una mujer barbuda y los borrachos pero no tengo más remedio ya no puedo vivir desarmándome y juntándome por la calle sin sentir vergüenza ni subir al colectivo señores pasajeros tengo un cuento si a nadie le importa no se puede perder el tiempo ni gastar energías es la época de los choclos a quién le importa una suelta de globos un bólido álgido o gélido mientras no explote un chico bailando con su música haciendo monerías casi un mono el mono del organillero nosotros el organillero ángel caído de aquel balcón actor acabado amando todavía el escenario condenado al puchero las solapas altas del gabán arrastrando su cojera su cogito ergo puntos suspensivos.

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Aquel bólido cálido gélido qué lástima no haberlo explotado en los colectivos en los supermercados en las oficinas en las mansiones en las iglesias en la casa de gobierno pero es que los bólidos son armónicos con el universo tal es su perfección jamás se les ocurriría y ahora que pasó y vinieron los choclos estoy entre propagandas entre pasajeros señores colectivos entre barcitos hoy buseca o puchero que es lo mismo en una palabra en la calle.

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HABRÁ QUE CAMINAR Es tarde para todo demasiado tarde hasta para mi luz colgada de la ventana de un edificio oscuro hasta para los quioscos hasta para encontrar tu sonrisa hundida como una medialuna en la taza de café. Es tarde tan tarde que queda más allá de la noche de los excesos de la desesperación. No hay nada abierto no se puede encontrar más que volantes sucios hojas de árboles faroles dormidos y ausencias. Sólo queda pensar cosas locas naufragios de la voz completamente inútiles revisar palmo a palmo las venas verificar el mecanismo en la parada de un colectivo que no va a venir porque es tan tarde tan tarde para todo que habrá que caminar ir a pie pensando en nada o sea en esas cosas que todavía dan calor palenques sueltos

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tercas ciudades de espuma compromisos con la memoria que llenan los intersticios de sal de nuestros gestos. De cualquier manera es tan tarde bares cines teatros comités cerrados gentes y no tangentes durmiendo y hace tanto tiempo de no tener tiempo de estar haciéndose tarde siempre ya clavé nuestra cita hace dos horas hasta ese barcito cerrado y lo único abierto es uno mismo todas las puertas abiertas al viento más allá de la noche más allá de todo exceso que no sea estrictamente necesario de toda muerte propia o ajena que no sea la muerte aclamada en las calles voceada entre risas cantada entre serpentinas celestes o rosas. Es tan tarde quedamos de a pie la calle quieta sin viento muda sólo se escuchan los propios pasos. Y suenan lindo repercuten se amplifican cálidos como una pulsación. Es tan tarde tan tarde casi es temprano.

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ESPONSALES Señora ¿no quiere usted vivir conmigo? Se lo digo sin querer que sea más que otra caricia se lo digo sin querer tan sin querer como a mí me viene como una frase dicha en la semipenumbra de su cama como una canción de borracho que si a usted no le gusta mañana se pasa y sólo duele un poco la cabeza. Fíjese todos los días limpio el cuarto y plancho mi ropa además sé cocinar en las tardes de lluvia y contar historias y si algo de esto no fuese enteramente cierto délo por hecho todo eso puede arreglarse. También puedo ser ordenado si usted lo desea o al menos intentarlo y le prometo no dar largas conferencias de sobremesa ni rezongar con la barba crecida. Sé muy bien que no tengo mucho para darle y que forcejeo con mi vida tanto como con mi salario pero todos los días salgo sin más que la propia ropa sin otra cara que mi cara sin dinero para gastos extra así de transparente armado no más con mi trabajo y como puedo peleo centímetro a centímetro.

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Mi casa está adornada de la calle que entra y no se inquiete con los cartelones y con los mensajes. Todo todo eso tiene arreglo lo que no tiene arreglo es este tiempo que se nos va yendo sin caernos el uno sobre el otro rumbo al día siguiente los besos que estamos dejando escapar como agua entre las manos y que no vuelven ya que los besos no pueden dejarse de un día para el otro son fruta fresca y su color es el color de cada luna. Y no tenga miedo porque el sueldo es poco y la vida aprieta y no entramos en el reparto porque esa pelea es desde siempre y para eso también es mejor que estemos juntos. Para perfumar la casa y hacerla una trinchera y un reposo yo me ofrezco y si de cualquier modo hay algo que la atemoriza yo no puedo darle garantías pero no crea mire estoy temblando de tan grande amor lleno de pánico por tanta intensidad pero aquí estoy todo entero y para qué me quiero así si no es su boca sus hombros en manada su lengua tibia sus manos apretándome para qué al fin y al cabo a qué tanto miedo a qué desconfiar de mi prosa de mi bolsa de trigo de mis zapatos a qué el análisis la caracterización el pronóstico el diagnóstico

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el acróstico de la propia vida si enloquezco por usted si hace tiempo almuerzo y ceno su mirada confundo los nombres de las calles con los de los parientes se me olvidan los anteojos el reloj los compromisos si ya ni compro los diarios no me enojo no destruyo el sistema un perfecto imbécil estúpido enamorado parado en las diagonales de mi miseria y de mi amor y así perdido del mundo. Señora se lo digo seriamente ¿no quiere usted vivir conmigo? Porque siento que la cama se me pone hosca y muero un poco cada noche de su ausencia y sólo el deseo de sus brazos me hace renacer cada mañana.

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ESQUINAZO Ayude a un discapacitado decían las tarjetas El colectivo se fue ya no hubo ruidos ayude decían entre los dedos les daba vueltas puro soldado de guardia para nada salían rayitos de sol y sonrisas. Naranjita paraguaya contra todo blanco ayude la boca contra el caño de ese fusil ayude ayude tanta pared de cal tibia tanta esquina extraña de insultos resecos de cuitas de tiza y la bomba entre las manos ayude ayude compre un solcito que mientras tanto la negritud corta puentes quema naves incendio en el naufragio últimas burbujas desvanecidas. Algunos compraban otros decían no soles y sonrisas camino de oro sufilado entre crímenes y depredaciones. Los colectivos llegaban y se iban compre ayude y enseguida ceros en desbandada una máquina turbia triturando brasas una máquina cumpliendo sus funciones en desesperada progresión. Ayude

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y la gente desaparecía era manos o manos tachadas o un pasillo largo y al final una escalera de descenso. Los colectivos esperaban subir y bajar y en esta esquina de nunca haber visto miraba las sonrisas miraba la pared de cal miraba el sol que calentaba amigo de lo ajeno. Y todas las palabras todas las consignas todos los rayitos de sol sonreían de lejos las tarjetas la pared el mundo compraban o no compraban seguían yo quedaba de hielo en el incendio en esta esquina que sigue diciendo ahora lo mismo a los cuatro vientos sin mirar a los ojos. Ya no tengo tarjetas ya soy sal que viaja que compra o dice no pero otras esquinas cuecen desastres y hay rayitos de cartón pidiendo tregua colectivos que llevan y que traen legiones de sentados que se asustan de los cráteres abiertos ayude a un discapacitado de las bombas que bomban y bomban y bomban en puntas de pie mientras el mundo vaga en paseos públicos en cementerios en principios constitucionales sin tener en cuenta el aire que las bombas bomban y bomban y bomban y bomban mientras pueden.

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PATRULLA NOCTURNA Volvimos todos a casa Todo fue polvareda estrangulada en intersecciones volvimos todos a casa rodando por las calles encanecidos en dudas Y el buen jornal y el sacrosanto umbral blanco se fueron oscureciendo Las lentas y espesas gotas de sangre van rumiando su canción sin orillas ¿y aquella vez que prometiste ¿no fue que juraste ¿no fuimos junto al fuego todos de la mano ¿no gritamos ¿o fue un sueño que olvidamos y que relampaguea su látigo sobre la carne floja después del sol de la tarde? Fuimos prometimos tomamos nuestras manos gritamos todos juntos sobre el sudor la sangre el polvo en cada poro de nuestra piel se tatuó aquella manada en la sien de otro apoyamos la mano ardida y juramos Los blancos umbrales alineados cayeron en manos de la noche los ángeles cayeron en manos de sus propias pesadillas ¿o fue un sueño que olvidamos y que hiela la taza del desayuno y que da su campanada en la angustia inexplicable de los trenes que se van

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en la resignación de las tardes mudas en los hijos como recuerdos de pie? Una culebra que cambió su piel de sueño por vigilia O bien un bombeo irregular del corazón una espera frustrada un espejo visto en duermevela O bien un grito que no nos cabe dentro patrulla nocturna con su luz roja girando y girando recuerden recuerden recuerden que juramos que junto al fuego unimos nuestras manos que nos tomamos de los hombros bebimos nos amamos y esperamos todos espalda contra espalda el nuevo día

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NOCTÁMBULOS Tras la marcha continua de candidatos de voces de campanas tras la marcha dura de banderas que marchan de horarios de titulares de herramientas que marchan de señales luces luminosas chimeneas tras el paso del batallón los surcos en el mar los túneles que marchan hacia el cielo tras el ritmo sostenido tras o por debajo ellos hilan perdidos en el aire de la noche presos de una correntada heridos por una esquina por un perfume un olor ocultos tras las banderas sonoras las alamedas de vidrio y acero/ ellos dan vueltas duermen con las ventanas de par en par caminan al borde de la vereda acechan vuelos pierden el rumbo caen hacia atrás en brazos de cerrar los ojos Van latiendo como corazones vivos palpitando sobre el pavimento olvidados por el mundo excluidos vomitados por las familias de los barrios claros buscando la brecha entre palabras entre costillas entre rejas corriendo tras los gestos lo que no tiene sentido lo que no sirve La ciudad se impermeabiliza ya casi no hay olor a lluvia cuando llueve/ ellos van expuestos por las calles casi vagabundos casi sucios de olores de gestos de tripas de sangre de desolación

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papeles sueltos manchados y su mensaje a los borrones se destiñe en los charcos Las calles se cruzan y siguen hacia algún lugar pero ellas mismas no van a ningún lado/ noctámbulos bajo el gas neón en noches húmedas de niebla avenidas desiertas habitadas por presagios bares baratos cálidos clandestinos noctámbulos marchando contra la marcha extradición de luceros y otros cuerpos celestes remando sobre la arena alimentando otras dimensiones de la realidad empapelada noctámbulos de la luz hechos de rayos de sol difusos/ calor de asfalto caliente Ay cofradía noctámbulos del amanecer hechos de sueños fusibles de la ternura fusibles disparados transitando otro aire/ el mismo/ otro y los espejos que los hacen de sal Ay prófugos corazones liberados noctámbulos de toda luz rodando en arenas brotes tiernos cantos calientes noctámbulos de las diagonales donde se cruzan con incandescencia Ay noticias de la vida cuerdas tensas cristal y barro meteoros de amor/ ángeles caídos satisfechos sin juicio sin memoria sin triunfos ni derrotas que están ahí ahí y nadie sabe del lenguaje de sus manos ni de su desnudez encerrada en un disfraz demasiado grande demasiado holgado demasiado estéril el disfraz es lo otro/ el mundo/ el disfraz no es

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3. LA LUNA DEUDORA

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SOLES II Preñando la sencillez • y hay tanto barco suelto por el mundo • pegando a las mañanas esponjas de sudor • ¿no voy a contar acaso con tu suerte? • Cerrando con cuidado las puertas • partiendo hacia el trabajo y arremangado • tengo que decirte también en este folio de labor • tarea rutinaria y cansina • que cuento los días de mi cuenta • cada día • y doy por sentada tu sonrisa • siempre que a saber • tenemos que cuidar más y más nuestras rodillas • y caminar con los hombros a la altura de los hombros • No faltará vez de jugar una partida • ¿y no será posible pasarle la lengua siquiera • a los pálidos amaneceres de La Mancha • a la madera milagrosa de la leyenda • a la luna deudora • a los hijos madurando al sol • a este suelo de sangre • a su pálida desdicha • Tal vez • no sean nuestras manos que arañan • ninfas ningunas • ya no hay trópicos ni ecuadores • sólo una extensión de afectos • temblando en la hilera • No • arremangado cuento con tu sonrisa • no espero plumas en el cabaret • no vine al templo a rezar • sino a tomar sus medidas • y lápiz en mano • juntar provisiones en cómodas cuotas • y sobre todo y como digo • volver a las preñeces pequeñas • al despojo • a la pobre pobreza de nuestra ventana • Allí • en ese vacío de flores • en ese descarnado fulgor del cristal • está el suave murmullo • el vago concurso de tu suerte • de tu astucia • y de tu sentimiento • Serás fuelle de tango • serás espesa cucharada de sopa electrón en cadena historia arremangada • o no serás nada • y en ese caso • también cuento contigo • para mi gobierno

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MESA Y UNO Es inevitable que llegues a tu mesa • a tu sola silla Pasear por las calles • con sus primaveras de jacarandá y sus esquinas de mirar la vida • descontar cada vaso de cerveza a los días por venir • cada uno con su aliento de maza • o cohabitar el tráfico de ratas drogas gatos besos pronunciamientos • no darán cuenta de todo tu camino • no serán más que perfiles dubitativos de un huevo neutro/ La casita de los viejos • o las luces del centro • o las lentas agonías que viajan de un farol a otro • y a otro • y a otro • las manos cálidas de un bar viajero que te aprietan • nunca tendrán al fin tus hígados/ El hombro sudado que te sostiene • que te da la próxima clave • el claro tiempo del color que vas teniendo • el tacto chamuscado de los proyectos más crecidos • el ambiente de una pollera contenta • no darán la medida de tus brazos Ni el final de un pensamiento • ni el camino de la lucha • ni las posesiones sin propiedad de tus manos que trabajan • que se suenan la nariz • que hacen los cuernos • que buscan entre las arenas de una mujer • podrán ser herramienta antes de que encuentres una mesa El amor te atravesará geométricamente • tu ropero será el día de mañana • las cuentas podrán hacerse con los dedos • camino del trabajo Esperarás que el tiempo te lave • te peine • te dé un beso en la frente y el texto de los sueños • que dormirás andando Pero es inevitable que llegues a una mesa • cal en lo invisible • sobre la que alzar en vilo las cucharaditas • sobre la que poner las cartas • sobre la que recibir el alimento Tarde o temprano necesitarás una mesa • para apoyar los codos • o cruzarte de brazos • o aferrarte a sus bordes y parirte • para sentirte madera con la mesa • para aprender las palabras que vas a decirte • y empezar a hablar

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CARNÍVORA SERVIDUMBRE EN LOS ROSALES No se puede coger la maleta toda vez • no se puede por siempre andar papando moscas • y hurgándose la nariz en busca de pensamientos Las medias tintas • los matices de color • los puntos y las comas ruedan a la velocidad de las velitas de cumpleaños • que ni a costa de rabietas sulfuradas o cabeceos dubitativos se pueden dejar de apagar • así que • mal que te pese • ves un cielo de jumbos poblado de bombachitas de puntilla • y sus costados presurosos • urgiéndote Obsesión omnipresente del centímetro cuadrado • de la gota • de la punta de la lengua • devoción erecta por las cuestas • los escalones • las cervicales • clara intención de vuelco • de pelo lacio • acción y efecto de levar desestimando acciones legales • denuestos apergaminados • cocodrilos en el momento de empezar a arrepentirse No se puede ovillar la memoria eternamente • devanar las plegarias de cara a la luna • sin acabar asesinado por la rueca/ Yo sabía • degustar el vino de la piel • emborracharme • besar la reverberación temblorosa • y un cuerpo color de los atardeceres relampagueaba despacito en la oscuridad • mar de sal • barro tibio • ya no ojos como lágrimas Y sus pechos • cambiando de color con la estación • su vientre cubierto de gotas perezosas • sus muslos hinchados • su cuello como los tiros de un barrilete • como las sogas que sujetan las velas de un barco • encabritado/ En la calle • huella lacustre de otro témpano • espiroqueta pálida en el final • sube el tiempo sobre la piel desnuda • rotula frentes • cumple No se puede • apoyar la cabeza en otro hombro/ Ya no ojos como lágrimas • ojos como aviones me volaron a un cielo de jumbos • un cielo de bombillas plásticas • un encerado vinílico caliente Carnívora servidumbre en los rosales que me hace pelo en la sopa • fideo fuera del plato • plato estrellado contra la pared • pared sin rumbo fijo • y de yapa • encendedor y chispa y cigarrillo

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PIEL PENDULAR DE LAS HAMACAS Bebé • estás durmiéndote en la hamaca • qué aire te lleva de los pelos hacia dónde • estás durmiéndote yendo y viniendo • bebé • mientras el universo está intacto entre la cuchara y la servilleta • mientras todo lo que decola sube • mientras en algún lugar alguien calla La gente anda • bebé • cuentas de un collar roto • un remolino de horarios • un ovillo de dolores y alegrías • empujado hacia delante Estás durmiéndote • alguien muere ahora • alguien deja sus papeles en orden • sus cuentas pagas • sus deudos • deja el óxido de su memoria • el alcohol de sus palabras • deja un impulso de polvo • un reguero de pólvora hacia el futuro La calle respira • vos dormís • la calle se rasca • se despereza • se contrae • nada está quieto • el empedrado es un corazón bombeando su sangre • a los cuatro vientos Todos somos deudos • todos remamos en el llanto • en el recuerdo • en el velorio inevitable y permanente de un ataúd vacío • en la vigilia de flechas incendiarias que llegan de otro allá • y la memoria que viene empujándonos • y el porvenir que pasa en limpio ayeres Deudos de nuestra primera calle • de los secretos al oído • de los silencios de los patios • de las traiciones como tajos • deudos de las preguntas • deudos de las respuestas • de los límites • de cada uno de nuestros gestos/ deudos a su vez Y este momento • desprendido del aire • tus párpados hinchados cerrándose contra las cadenas de la hamaca • página blanca anotando sus primeros sueños • en leve movimiento de vaivén • piel pendular de las hamacas • dioses sanguinarios esfumados Velando tu sueño • velando ese dejar atrás • deudos • con cuentas a pagar • obligados a andar • de cara al viento • con nuestros muertos que llaman • llenos de luces y fantasmas

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Un talismán de números impresos yace frío junto a tu corazón a sémola • bebé • la lluvia de los días pares y el viento de los días impares intentarán minar tu sensibilidad Sin palabras te digo • el sueño es un compromiso más • el principal y el primero • sin palabras te digo • nadie tiene derecho a detenerse

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EL AMOR EN TUS POSICIONES Me hablabas de tu amor y yo pensaba ojos sin suela bajo la carne de la noche en zapatos empapados de escarcha sobre el campo en los gritos de un vendedor ambulante en noches de tanto frío y desesperación y dormidas y lloradas sobre los bordes/ Me hablabas de tu amor sin detenerte en tus manos haciéndome trenza entre tus piernas con todas las historias que no caben que se escapan a lo lejos en la oscuridad Así en la oscuridad pozo cavado con tus manos en mi aliento que se cansa que trota hacia pasados molidos arrastrando los pies/ Tu pelo que me hablaba de todo tu amor que no sabía de mis costados disueltos en la niebla en las migas de pan de las estaciones terminales o en aquellas baldosas que todavía hoy preguntan qué fue de mis zapatos Ninguna de las posibles va a ser nunca la manera correcta de crecer no es el tiempo nuestro tiempo ni tampoco había un porqué para la noche/ De cualquier forma estabas ahí tragándome hacia tu amor subiendo con la boca sin saber mis luces que no se mostraron a tus ojos dos escurridas por las rendijas de una persiana ineludible hacia algún lugar desde donde proyectan sus tormentas de verano sus desvelos vigilias desmemorias sus jaulas de dedos perfumados Y hay jaula silencios desvestidos surcos en la piel fantasmas que el cuerpo va atesorando con primor jaulas como cajas chinas a la última de las cuales estabas seduciendo tacto ciego en la carne de una fruta que madura y acaso sueñe alguna vez su sueño de hormigas Sí hay jaula rejas hechas de dedos vómitos de sangre colores de estación que se enterraron en nosotros sin cruz que los recuerde cris-tales que se destejen mientras me hablás de tu amor mientras lo más suave de tu piel arde sobre la mía y la yema de tu otro corazón bombea cielo adentro Nada que suene una nota puede tocarte crece el sacudón firme de tus pechos contándome tu amor que quiere que está dando vueltas sobre mí que jadea su sello de cera sobre un revuelo de jaulas escapadas

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Ninguna sombra por fresca podrá darte voces estás amando esta huella y me hablabas de tu amor estoy atrás de tus brazos y en conjunto paseo a deshoras mi gruñido sobre un paisaje duro clareando y con los dientes pido también tu cuerpo tus palabras de hiedra tu vientre tus palabras mordidas me hablabas de tu amor con mi banda de pueblo sonando abro mi boca a tu boca con jaulas y dientes hasta pido tu vestido de calle

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CORAZÓN ABIERTO Enteramente tumbos denostado y lejos el sendero lejos del rezo así como va tu amor por Buenos Aires lejísimas las flechas infantiles dirigidas al corazón del séptimo de caballería/ Enteramente el anclaje en Boedo esquina Banco Nación el pensamiento y el frío se cruzaban esquina al fin con cuatro direcciones cuatro campos minados cuatro hombres de la bolsa Así como tu amor empolla en Flores en noches húmedas de tanto gato bocado de semen luz de hospital/ Lejoslejoslejos de toda vocación de justicia ningún deseo de pintura ninguna canción decente de a poco esta multitud cortejada hasta la usura por la tragedia de mente empujada de poco sol que dobla esquinas descascaradas que pisa mierda de perro mientras va de camino Lejoslejoslejos ninguna vocación en la frente papiro faquir más bien tus pies con frío en la punta más bien un ronroneo en las tri- pas más cerca el sexo pidiendo una mudanza más anchas las veredas nocturnas pobladas de basura calles de adoquines sin asfalto gases suspendidos Ninguna vocación vocación ninguna un día ya los ojos no fueron de uno quedaron las vendas tapando los agujeros los ojos cayeron la caída mintieron pidieron traicionaron algo comerciaron se defen-dieron así como tu amor en cueros que mira el pasto entre los adoquines o escucha el paso del tren pensando en la lluvia así como esta gente que dobla en la esquina porque lo dice el tango que progresa y tropieza y se enreda en campos minados en charcos helados en el fondo quemado de la olla Así como tu amor anda suelto por Buenos Aires así como tu amor anda libre recibiendo golpes y golpeando pulsación errante tripas sedientas revolviéndose en la cama humanidad cariada corazón abierto sobre el mostrador

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Enhiesta porra policial indicando un camino en la esquina de los cuatro vientos/ Todos los santos días hay caras contra los barrotes definitivamente lejos de los rezos de las biblias de las porras definitivamente más acá así como tu amor en el sobaco con noventa y ocho por ciento de humedad y andando

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MAMÁ CON SOL EN LA CABEZA Por debajo de nuestra puerta se arrastró insomne y cardada una factura de tosecita discreta y aunque no viene al caso desanda tu mirada que está pintando y pinta cargada de colores Paso por tu dibujo entre medio de dos días cuajos que vie- nen motores alejándose apretones de manos fechas de vencimiento marcha de un reloj sin agujas que extravió el norte/ Paso por tu dibujo vieja fotografía a la acuarela que vuelve a crecer en tus dedos que vuelve a escribirse sobre la puerta de calle sobre esa factura que late en el suelo con el pecho frío Y esta lluvia de pasos de baile nuevas fórmulas de avanzada a treinta sesenta noventa días nueva cámara pocket reciclajes en pa- pel de seda algoritmos como golpes de dados reconversiones del amor para los ratos de ocio como este en que tus dedos caen como gotas sobre el papel y dibujan los mismos rasgos conocidos tu senti- miento claro Ahora siguen lloviendo pasos numerados tap tap tap en medio de los cuales todo se cuenta con los dedos en medio de los cuales tu dibujo va creciendo y crece y el barrio duerme confiado con su ta- ller de chapa y pintura sus vías rumiantes su portón marcado de pelotazos Todo es poquito oferta de las manos fechas de nacimien- to marcha de un corazón sin agujas que busca el norte/ Todo es poquito el polvo que se recoge del suelo la cama que dejamos pronto la mesa atravesada el viaje continuo/ Todo es poqui- to resistencia a los señores botones con sus esposas ojales y ese dibujo tuyo que crece al descampado que empieza a pararse sobre sus pies y cuenta una historia vieja sin tener en cuenta facturas ni rui- dos arrastrados o llovidos mecánicos o muertos

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HUELLAS EN LAS TRANSPARENCIAS Es la voz en celo la lluvia contra los vidrios el sudor de la fren- te las caricias temblorosas es la voz en celo las emociones pánicas las confesiones los pactos de sangre es la voz en ce- lo la respiración agitada los tatuajes felices y las vendas es la voz en celo Si creés que tus piernas sobre tacos altos doradas y erectas si porque te paraste a ver la manifestación o incendiaste la urna fune- raria si encerraste certezas y maldiciones y serás excomulgado es la voz en celo tumbas en el aire espirales falsos en su capullo de seda Dos balas se cruzan sobre el campo de batalla se saludan con su lágrima de plomo siguen y otros mil proyectiles se saludan se be- san se traicionan trazan mil rutas rumbo a tumbas en la car- ne cada una con su pedazo podrido de trinchera con una gota de alcohol con una plegaria muda a enterrarse sin dios en carne del otro lado amante de otros cultivos en el pecho con insultos alucinados con sus absurdos sístole y diástole con su beso a la novia allá en la patria Ni transpirar la fiebre ni despertar en medio de la noche ni haberse ocultado de los asesinos va a aflojar los dedos es la voz en celo tris-tes tristezas tiernas dolencias adolescentes y quebradizas Ni el fuego de las antorchas ni los pasos lentos en una galería ni el parloteo incesante del silencio huelen a óxido al óxido de los dedos que te aprietan esa tuerca que gira en la garganta sobre el chirrido de la multitud

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SALDO A LA FECHA

Usted no saludó al salir usted lee sin mayor interés entonces yo me confundo tropiezo con el tiempo sostengo el receptor en silencio Yo subo el cierre de mi campera me muevo para no enfriarme mientras miro los precios escucho la radio entonces usted piensa en mañana degusta su monólogo decide un orden de prioridades Todos calzamos primero un pie y después el otro todos defendemos lo puesto y lo llevamos atravesando espacios todos tenemos colgada en la cintura una llave que abre y cierra nuestras espaldas pero el naufragio ah el naufragio ha hecho estragos en la marinería Por desgracia no escarmentamos nos volvemos a quedar de a pie y haciendo dedo entonces usted llega con su gorra de capitán da su discurso estrecha manos ni se fija siquiera si subimos No subimos no había cómo usted se va usted apaga la luz y nos cierra con llave usted tiene sus atendibles razones y un considerable atraso entonces yo me callo empiezo otra vez a contar ovejas lucho con mi resfrío que no me deja en paz Yo subo los escalones de a uno entonces usted me tiende la mano entonces yo le pido disculpas Usted está saliendo de viaje ya ha palpado el bolsillo interior de su saco usted hace un gesto de apro-bación entonces yo me retiro me mantengo en silencio cuento mis monedas y hago planes pongo a remojar una ración de porotos para mañana y sin pensarlo ordeno mi ropa al pie de la cama

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EL AMOR NO ES UNA COSA SERIA Las mujeres llegan por regla diez minutos tarde es bueno conocer- lo y no andar a los saltos sobre el embaldosado negro y blanco del café comiendo peones neblinosos y risueños para hacer tablas al fin junto a la barra sumergido hasta el cuello en el estaño/ Siempre un desencuentro fortuito un cruce de vías un rayón en la madera cosieron malas noches y la herida del costado todavía humeaba cuando ya el agua corría por las zanjas a los gritos pelados Transito esta ciudad dejando huellas/ estelas/ cifras y soy yo solo con cielos/ horizontes/ pozos ciegos apenas develados jamás correctamente dichos replanteando una y mil veces lo que ya se jugó en la partida de ayer reordenando las piezas considerando los movimientos Mediocre gestión de fregado y sin embargo ya no hay lágrimas más bien sólo el espacio de los chicos ya no hay lágrimas en cambio las caries los besos y los débitos entraron a formar parte de un calendario que nunca se engaña de mañana que conoce un único paisaje blanco y negro Así contento con esta música de tamboril a mis espaldas con mis atrasos dignos y el amor no es una cosa seria no hubo caso de armar un gran estadio sin certezas el ojo que come realidad está tirando para afuera donde los chicos corren está buscando huesos para el puchero y hay un gran cartel que dice bienvenidos Ah sí tango tango pero entro a un café –el diario bajo el brazo– y asisto impunemente a una taza humeante a los titulares a la sonrisa que pide una moneda insert coin a la cucaracha que atraviesa muy despacio una baldosa blanca una negra una blanca otra vez/ Ah sí pero no quedó nada ni tango de ayer secándose al sol no se puede empeñar ni una media con agujeros Nada de grandes estadios sin certezas que el ojo no pueda ver nada de dudas monumentales nada sino mirar por el propio ojo destejerse a gestos cenizas en el viento pan de ayer poner en sí los ojos y

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tirarse afuera ya no hay lágrimas desdibujando el tablero ya no hay más que risas de chicos desparramando piezas ¿Y por qué las cosas nos iban a partir? En cambio todo fue distinto el amor no es una cosa seria y no debe a nadie ni siquiera la amar- gura no tiene deudas con el mundo ni llega nunca diez minutos tarde

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CASCO CAIMÁN Che eu vos la peor bala no se disparó che la cabeza sigue disparando excéntrica eu la sangre disparada no será vos dul-ce ni amarga negra ni roja piedra ni arena che los rasguños en el tiempo cicatrizan eu y se pierden en su piel de caimán vos El tiempo nos ha hablado a los ojos de nuestros pasos con toda ternu- ra como un padre/ Tu voz me dice amor que el tiempo es nuestra única pertenencia nuestra única vestidura la lenta digestión industrial de marchas miedos hilvanes malos modos el doloroso encuentro del refrán y la miseria donde los huesitos van creciendo donde el sudor se va clavando hecho grandes silencios lentos espacios mudos ecos de imágenes que hablan sin cesar en un idioma enterrado en el desierto Y el desierto dice oasis dice Alí Babá dice arañitas beduinas dice caravanas entre deberes de matemática y paños con vinagre ah el médico de cabecera fiebre y lluvia estampillas de la Caja de Ahorro almidón ah el estudio el empleo estable los obeliscos del desierto ah el médico de cabecera los deberes de matemática En el conjunto A –A igual corchete– no omitas el beso perpendicular de la mañana el tamiz del espejo equivalente la suma solidaria y entonces dos tres cuatro cinco cierra corchete/ Sin embargo ahí los pies no hacen ninguna cosa o bien ninguna cosa hace pie o ninguna cosa ninguna cosa = verbo elidido Y en el principio fue el verbo después fue el médico de cabecera y después el tiempo se tragó al verbo y al médico de cabecera y a Alí Babá pero los cuarenta ladrones quedaron sueltos y uno aprendió a dormir en Plaza Lavalle o fue a parar a la guardia de un hospital o al cero de las terminales de trenes Plaza Lavalle plazas del Centro de árboles viejísimos y oscu- ros con hojas sucias de hollín con olor a hipotecas divorcios planes

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de pago almuerzos helados tarjetas reloj cuentas y cuentas ah los deberes de matemática nunca los derechos Durante años exportamos cabezas de ganado miles y miles de vacas viajando por el mundo detrás se quedaba la soledad agraria los fueguitos temblando en el campo las latas oxidadas a los costados de la ruta carne a la máquina miles y miles de cabezas para Inglaterra o Francia o EE.UU. mugidos sobre el mar No sé si puede exportarse una vaca esa unidad psicofísica si se quiere los puristas dirán si puede exportarse una vaca con su mirada de vaca en todo caso se exporta carne sin sensacionalismos se exporta carne también puede exportarse jubilaciones o vacaciones o placas de reconocimiento tardío o sueños pero lo clásico es la carne se exporta carne indiferentemente somos una buena plaza de vacunos Una plaza de carneros che eu movete vos ya sale el sol che despertá eu ya vienen los jubilados a la plaza vos el día está plantado plaza de bueyes de boyas ya no de sueños anarquistas primeros de mayo irreductibles ni tampoco domingos dueños de los globos ni siquiera abanicos de carey espantando moscas/ En Boedo a la noche puertas altas de madera dulce con su ramito de fierros las ventanas flacas besando el suelo la luz bruja y el perfume de los paraísos ¿quién se resiste a un amor bandido? Su boquita temblaba sus ojos contra todo gobierno su bolso de que la robe a desenterrar las armas de la noche a lapislázuli sin consuelo engarce de plata pichones encaramados a la cornisa ah los domingos dueños de los globos ah Alí Babá y los cuarenta exportadores de ganado En el conjunto A la corbata equidistante de ambas puntas del cuello es inversamente proporcional a la asimetría de esa alineación postural el lápiz en la boca la luz del cuarto es testigo el joven se rebela y entonces dos tres cuatro cinco sigue la cuenta/ Sin embargo si pudiera poner entre corchetes las baldosas que huyen en todas direcciones el sufrimiento que desciende oblicuamente perfecta hipotenusa sobre el vaso de vino como la vainilla que se hundía en el café con leche exactamente igual levantando un poco la borra del fondo explosión interna leeme otra vez el cuento mientras las mesas vuelan contra las ventanas ah treinta y ocho grados y lluvia y los botones saltan de los uniformes ah las estampillas de la Caja de Ahorro y ese ojo rojo que no se puede poner entre corchetes que aborda degollando una familia el aparato de tevé el mediodía

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Che eu vos los obeliscos siguen parados en el desierto che la mejor bala no se disparó eu sus ojos contra todo gobierno se quedaron vos enredados en la soledad agraria che las latas oxidadas a los costados de la ruta eu las calles ya son ba- rro vos las aulas ya son charco che los nenes ya son barco eu Ya no se puede vivir en los barcos en la preñez y en la ubre de la lluvia y su eterno canto de sirena hacia los arrecifes mugidos sobre el mar si hay ojitos a media lengua pañales de por medio comidas por hacer no se puede si después del agua se secan los patios las plazas se secan y se hacen ladrillo si a cada paso hacen falta un corazón un motor a explosión una bomba de agua para trabajar en el ladrillo en el gatillo de esta salud que tose y rueda apenas de comida en comida Qué comimos otra vez fiebre y lluvia qué comimos qué mala carne fue qué mala matemática enseñaron los cuentos los espejismos del desierto la desesperación la angustia que está imantando el ambiente ese ojo rojo explosión interna qué comimos en nuestra buena fe plaza de boyas ya no se puede Las ventajas comparativas permitieron incrementar el superávit del intercambio siguieron rodando cabezas de ganados y también de perdidos carne a la máquina para instrumentar distintos modelos distributivos del ingreso reconversiones prácticas especulativas Pero otras leyes de la física están malditas las desgracias por ejemplo se mueven a la velocidad del temor arrastran su elefantismo hacia las vías de escape al mojar una vainilla en las estaciones terminales se hace un pozo negro qué comimos seis siete ocho nueve al infinito En el conjunto A cabe un paquetito con la vianda que no cabe y de tanto atarnos los cordones en el conjunto A hemos pasado a este baldío/ Argg hace el león guau guau guau hace el perro y en el medio de mi pecho uno dos tres marche cuatro cinco seis izquierda derecha adelante atrás arriba abajo mala carne la camiseta sin mangas no fue sabia el calor de las noches de puerta con la silla también tuvo miedo de las altas horas de las hipotenusas no enseñadas del refugio de un puente de ese ojo rojo con miedo se despi- dieron adiós hijo buena suerte fin zona urbanizada puede acelerar adiós hijo sesenta setenta ochenta noventa cien

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Y así empieza el desierto che eu você yo tú vos a-rrasado o no florido perfil poco y nada rendimiento promedio de carne limpia por animal faenado che el tiempo sigue disparando excéntrico nos sigue vistiendo amor nuestra única perte- nencia bombo legüero casco caimán Con su cuero duro lleno de cicatrices con su viejo cuero de caimán el tiempo nos ha hablado a los ojos de nuestros pasos lo que de cualquier modo ha de ser nos tuvo paciencia y esperó que comprendiéramos Así empieza el desierto che el tiempo dicta una multitud de imágenes mudas va manifestando y rebasa las plazas del Centro eu los mostradores de las terminales los corchetes llenos de latas oxidadas o cuellos duros o cuentas vos todo es ropa de entrecasa che no se puede ya de inundación eu ni andar a puro mugido o a facón limpio apurar el sufrimiento vos ya no se puede vivir en los barcos che si hay ojitos a media lengua o sus ojos contra todo gobierno incendiando las armas de la noche eu bajo la piel del caimán no se puede ya soñar vos de ninguna manera se puede ya soñar sin primero hacer la cama