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UNIVERSIDAD NACIONAL PEDRO RUIZ GALLO
FACULTAD DE ENFERMERIA
CENTRO DE INVESTIGACIÓN
LAMBAYEQUE
Código del Proyecto: ____________________________ Palabras Clave: Competencia informacional,
evaluación de competencias, estudiantes enfermería
I. ASPECTOS GENERALES
1.1. Título de la Investigación: Competencia informacional en estudiantes de Enfermería - Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo - Lambayeque, 2012.
1.2. Autores:
María Rosa Vásquez Pérez Docente Facultad de Enfermería UNPRG
María Margarita Fanning Balarezo Docente Facultad de Enfermería UNPRG
María Esther Vásquez Pérez Docente Escuela de Enfermería USAT
1.3. Resolución de aprobación:
1.4. Tipo de Investigación:
Descriptiva Transeccional
1.5. Área y Línea de Investigación: Diseño Curricular - Investigación diagnóstica
1.6. Lugar de ejecución:
Facultad de Enfermería de la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo - Lambayeque
1.7. Duración: 12 meses 1.8. Fecha de inicio: Septiembre de 2012 1.9. Fecha de Término: Agosto de 2013
II. CONTENIDO: IV Informe Parcial (Septiembre 2013)
UNIVERSIDAD NACIONAL PEDRO RUIZ GALLO
FACULTAD DE ENFERMERIA CENTRO DE INVESTIGACIÓN
LAMBAYEQUE
COMPETENCIA INFORMACIONAL EN ESTUDIANTES DE ENFERMERÍA - UNIVERSIDAD NACIONAL PEDRO RUIZ GALLO.
LAMBAYEQUE, 2012.
INFORME FINAL
Autoras:
Vásquez Pérez María Rosa
Fanning Balarezo María margarita
Vásquez Pérez María Esther
Lambayeque, septiembre del 2013.
RESUMEN La competencia informacional, constituye la base del aprendizaje continuo y para la enfermería basada en evidencias; por ello, esta investigación descriptiva, planteó como objetivo determinar el nivel de desarrollo de la competencia informacional en estudiantes de la Facultad de Enfermería de la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo en el 2012. La muestra conformada por 115 estudiantes, extraída por muestreo estratificado de una población de 289 estudiantes del primero al octavo ciclo, fue encuestada, aplicándose un cuestionario confiable (0.96 Alfa de Crombach) para auto-valorar cinco habilidades, elaborado en base a las “Normas sobre aptitudes para el acceso y uso de la información en la Educación Superior” de la Association of College and Research Libraries /American Library Association. El procesamiento de datos se realizó con SPSS.17, el método analítico-sintético y sistémico. Los resultados, revelan que la mayoría de estudiantes alcanza niveles de desarrollo intermedio en la competencia informacional, rechazándose la hipótesis que planteaba existencia de niveles incipientes. Sólo obtienen un nivel alto: 55% de estudiantes del octavo y 22.7% del séptimo ciclo en la habilidad para determinar la naturaleza y nivel de información; 22.2%, del cuarto ciclo, en la habilidad para acceder a la información; 29,6% del sexto y 27,2% del séptimo en la habilidad para evaluar la información. Alcanzan un nivel incipiente: el 39,1% de estudiantes del tercero y 21,2% del séptimo ciclo en la habilidad de utilizar eficazmente la información; y, 43,4% del tercero, en la habilidad para utilizar la información de forma ética y legal. Esta situación amerita introducir estrategias curriculares para la alfabetización informacional universitaria que permitan asegurar un cuidado enfermero de calidad, basado en evidencias científicas. Palabras Clave: Competencia informacional, evaluación de competencias, habilidades informacionales para enfermería.
INFORMATIONAL COMPETENCE IN STUDENTS OF NURSERY - PEDRO RUIZ GALLO NATIONAL UNIVERSITY. LAMBAYEQUE, 2012. ABSTRACT The informational competence establishes the basics for continuous learning and nursery based on evidence. Therefore this descriptive research, propounded as its objective: determine the level of development of informational competence in students of the Faculty of Nursery at Pedro Ruiz Gallo National University in 2012. The sample comprised of 115 students, extracted by stratified sampling from a population of 289 students from the first to the eighth cycle, was surveyed, applying a reliable questionnaire (0.96 alpha of Cronbach) for self-appraising five skills, based on the "Rules on skills for access and use of information in higher education" of the Association of College and Research Libraries / Library Association. Statistical processing was performed with SPSS.17; and the analytic–synthetic and systemic method. Results reveal that the majority of students, reaches levels of intermediate development in the informational competence. The hypothesis that proposed incipient levels, was rejected. The only ones who get a high level: 55% are the 8th graders and 22.7% of the seventh cycle in the ability to determine the nature and level of information; 22.2%, from the fourth cycle, the ability to access the information; and 29.6% of the sixth and 27.2% of the seventh in the ability to evaluate information. The ones who reach a level of development: 39.1% of students from the third and 21.2% of the seventh cycle in the ability to effectively use the information; and 43.4% of the third, in the ability to use the information in a legal and ethical way. This situation deserves to introduce university information literacy curriculum strategies that ensure a care nurse's quality, based on scientific evidence. Keywords: Informational competence, assessment of skills, information skills for nursery.
I. INTRODUCCIÓN
La historia da innumerables ejemplos que evidencian la importancia
de la trasmisión de la información de una generación a otra, que muchas
veces ha posibilitado el progreso científico; por ello, actualmente se está
enfatizando la importancia del poder de la información en el desarrollo y la
supervivencia de la humanidad.
Este énfasis se debe a que la sociedad se encuentra en la llamada
era de la información, caracterizada por el informacionalismo, concepto
que se utiliza para designar, según Castells, citado por Illa, al paradigma
tecnológico actual que por sus características permite diferenciar la
situación de este siglo respecto de otros momentos de la historia:
aumento de la capacidad de procesamiento de información gracias a las
Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), incremento de la
velocidad de las comunicaciones y la flexibilización de la distribución y las
posibilidades de recombinación derivadas de la digitalización1.
Lo señalado, sitúa a las personas en una realidad en la que el
volumen de información al que tiene acceso con un dispositivo conectado
a Internet es tan grande que, ahora más que nunca, necesita de
estrategias de búsqueda y de organización para satisfacer sus
necesidades informativas2. Es decir, se necesita de competencias
informacionales en este escenario caracterizado por rápidos cambios
tecnológicos y de proliferación de los recursos de información.
A causa de la complejidad de este entorno, las personas se
enfrentan a diversas alternativas a la hora de elegir entre una información
muy dispar y abundante, encontrada en las bibliotecas, los centros de
recursos comunitarios, las organizaciones profesionales o de intereses
especializados, los medios de comunicación e Internet. Otro problema, es
que con frecuencia la información llega en formatos sin filtrar, lo que
suscita interrogantes sobre su autenticidad, validez y fiabilidad. Además,
la información está disponible a través de múltiples medios, incluyendo los
gráficos, audiovisuales y textuales, que plantean nuevos retos a los
individuos a la hora de evaluarla y comprenderla.
Tanto la calidad insegura como la cantidad en expansión de la
información, significan desafíos enormes a la sociedad; pero la ingente
abundancia de información no creará por sí misma una ciudadanía más
informada si es que las personas no poseen un grupo de aptitudes
necesarias para acceder a la información y usarla eficazmente.
Se entiende por aptitudes para el acceso y uso de la información a
un conjunto de habilidades que exigen a los individuos reconocer cuándo
se necesita información y poseer la capacidad de localizar, evaluar y
utilizar eficazmente la información requerida3
Estas habilidades son importantes para desenvolverse con mayor
autonomía en esta sociedad de la información pues son las que permiten
llevar a cabo procesos relacionados con el tratamiento de la información:
determinar la información que se necesita, localizar las fuentes de esa
información, saber qué hacer con la información que se localizó, respetar
la creación de otros y la posibilidad de crear y autoevaluar el proceso que
se realizó. Sin duda, las personas, en menor o mayor medida posee estas
habilidades pero se necesita un desarrollo adecuado de cada una de
ellas, de tal manera que permita progresivamente generar competencias
transversales tales como: autonomía, aprender a aprender, poseer un
pensamiento más crítico y participar activamente en esta llamada
sociedad de la información4.
Sin embargo, el análisis de la realidad en muchos contextos, ha
develado que existe analfabetismo informacional en los estudiantes de
todos los niveles; así, por ejemplo, en una actividad de capacitación
académica, realizada en Chile en el 2010, al preguntársele a los
docentes acerca de los principales problemas que encuentran en los
estudiantes cuando se les piden hacer un trabajo para alguna asignatura,
señalaron principalmente los siguientes: excesivo “cortar y pegar”; no
citación de fuentes; falta de análisis sobre la información; no saber donde
encontrar la información; acceso superficial a la misma; falta de rigor en
las búsquedas; poca capacidad para investigar; extracción de la
información sin contextualizar; búsquedas sólo en Google y no uso de
bases de datos ni otras fuentes5.
La problemática señalada no es ajena a la realidad nacional y local,
en la cual también se hace evidente la desigual relación entre el
desarrollo de Internet y la información electrónica y el de las habilidades
para hacer uso de esa información en forma pertinente y adecuada. Esta
insuficiencia es mucho más visible en el ámbito universitario, donde se
requiere que la información utilizada sea confiable y actualizada.
Específicamente en la Facultad de Enfermería de la Universidad
Nacional Pedro Ruiz Gallo (UNPRG) de Lambayeque, los docentes a
menudo también refieren que sus estudiantes tienen dificultad para la
búsqueda de información, para discriminar la información valiosa de la
que no lo es, para usar motores de búsqueda adecuados y utilizar bases
de datos reconocidas y confiables, Asimismo manifiestan que con
frecuencia “copian y pegan” información sin procesarla, no citan las
fuentes que han consultado y no intensifican su búsqueda, características
que son clara evidencia de problemas de acceso, de evaluación y uso de
la información, que son justamente componentes de la competencia
informacional tan necesarias para incrementar su capacidad de resolver
problemas, fortalecer el pensamiento crítico y creativo, tomar decisiones
y aprender cooperativamente.
La situación descrita orientan a la formulación del problema de
investigación ¿Cuál es el nivel de desarrollo de la competencia
informacional en las estudiantes de la Facultad de Enfermería de la
Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo de Lambayeque en el 2012?, cuyo
objeto de estudio queda definido como el desarrollo de la competencia
informacional en estudiantes de enfermería.
El objetivo general que guía la investigación es determinar el nivel de
desarrollo de la competencia informacional en las estudiantes de la
Facultad de Enfermería de la UNPRG en el año 2012; para lo cual se
plantearon los siguientes objetivos específicos: 1) Identificar su nivel de
desarrollo de la habilidad para determinar la naturaleza y nivel de la
información que se necesita; 2) Identificar su nivel de desarrollo de la
habilidad para acceder a la información requerida de manera eficaz y
eficiente; 3) Identificar su nivel de desarrollo de la habilidad para evaluar
la información y sus fuentes de forma crítica e incorporar la información
seleccionada a su propia base de conocimientos y a su sistema de
valores; 4) Identificar su nivel de desarrollo de la habilidad para utilizar la
información eficazmente y cumplir un propósito específico; y, 5) Identificar
su nivel de desarrollo de la habilidad para comprender los problemas y
cuestiones económicas, legales y sociales que rodean al uso de la
Información, accediendo y utilizándola de forma ética y legal.
En coherencia con el problema y el objetivo se planteó la hipótesis
que existe un nivel de desarrollo incipiente de la competencia
informacional en los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la
UNPRG en el año 2012. Pues consideramos al igual que Iller, que las
teorías como la de los nativos digitales de Prensky, han quedado
desdibujadas por estudios rigurosos como el realizado por Hargittai que
demuestran que las habilidades informacionales de muchos jóvenes que
llegan a la universidad no van más allá de hacer un uso parcial de los
buscadores1.
Este estudio se justifica por la actualidad de la demanda que plantea
la sociedad: el desarrollo en las personas de la competencia
informacional, porque constituyen la base para el aprendizaje continuo a
lo largo de toda la vida, capacitando a quien aprende a dominar el
contenido y ampliar sus investigaciones, a hacerse más auto-dirigido y
asumir un mayor control sobre su propio proceso de aprendizaje;
competencia esencial en estudiantes universitarios, ya que la información
constituye una condición fundamental y un instrumento mediador en los
procesos educativos6,7. Así mismo esta competencia está siendo
considerada por diversas agencias de acreditación, universitaria y
certificación profesional como una competencia clave para estudiantes y
profesionales8. Para las estudiantes de enfermería, es particularmente
importante poseer esta competencia, en esta etapa de la Enfermería
Basada en Evidencia (EBE) ya que es el insumo fundamental para apoyar
su cuidado en evidencias científicas.
La importancia del estudio radica en que los resultados muestran el
nivel la competencia informacional que poseen los sujetos del estudio, a
partir de la cual será posible diseñar una serie de estrategias que deberán
ser contempladas en el diseño curricular que permitan la consolidación de
esta competencia en las estudiantes de enfermería, ya que se espera que
las instituciones universitarias fomenten el desarrollo de esta
competencia a fin de prepararlos para una sociedad que reclama
personas capacitadas en este ámbito. Esta responsabilidad como
docentes universitarias motivó a las autoras a desarrollar esta
investigación.
Siendo tarea de las instituciones educativas, específicamente las
universitarias, generar mecanismos para conocer las prácticas de uso de
las fuentes de información de los estudiantes y favorecer el desarrollo de
habilidades en su uso y apropiación, teniendo en cuenta las
características de los sujetos y los contextos de aprendizaje; resulta
trascendente entonces, realizar estudios que permitan hacer un
diagnóstico de la situación en la que se encuentran los estudiantes con
respecto a la competencia informacional, en este sentido, el instrumento
elaborado por las investigadoras se constituye en el aporte práctico del
estudio.
II. METODOLOGIA
El tipo de investigación realizada se adscribe en el paradigma
cuantitativo por cuanto se trata de una investigación orientada a medir
para describir, el nivel de desarrollo de la competencia informacional en
estudiantes de enfermería de la Facultad de Enfermería de la UNPRG de
Lambayeque.
El diseño que se siguió para su desarrollo fue el descriptivo simple,
puesto que el estudio estuvo dirigido a la caracterización de las
habilidades informacionales para precisar el nivel de desarrollo de la
competencia, objeto de estudio9.
La población estuvo conformada por las estudiantes regulares del
primero al octavo ciclo de la Facultad de Enfermería de la UNPRG de
Lambayeque, matriculadas en el ciclo académico 2012-I (289). La
elección de la muestra se hizo de manera probabilística asegurándose su
adecuación y representatividad. Su tamaño (115) se determinó
utilizándose la fórmula para poblaciones conocidas y para la selección de
las unidades muestrales se ha empleado la técnica del muestreo
estratificado, seleccionándose estudiantes de cada ciclo académico.
La técnica utilizada para la recolección de los datos fue la encuesta.
Como instrumento fue aplicado un cuestionario de frecuencias con cuatro
opciones: nunca, a veces, muchas veces y siempre. Este cuestionario fue
elaborado por las autoras en base a las “Normas sobre aptitudes para el
acceso y uso de la información en la Educación Superior” aprobadas por la
ACRL/ALA en el 2000. Contiene 75 ítems, que miden las cinco habilidades
informacionales que integran la competencia informacional, habiendo sido
validado en su contenido por juicio de expertos y obtenido un alto nivel de
confiabilidad (0.96) según la prueba estadística alfa de Crombach.
Las cinco habilidades señaladas toman la denominación de
dimensiones en esta investigación y en el instrumento de medición tienen
la siguiente distribución: Dimensión 1: 16 ítems (1 al 16); Dimensión 2: 16
ítems (17 al 32); Dimensión 3: 21 ítems (33 al 53); Dimensión 4: 10 ítems
(54 al 63); y, Dimensión 5: 12 ítems (64 al 75). Las respuestas se
calificaron de la siguiente manera: Nunca: 0 puntos; A veces: 1 punto;
Muchas veces: 2 puntos; y, Siempre: 3 puntos. Según los puntajes
obtenidos se consideró que las estudiantes tuvieron los siguientes niveles
de desarrollo de la competencia: Alto, si la sumatoria total de los puntajes
otorgados a los ítems osciló entre 155 y 225 puntos; Intermedio, entre 80
y 150 puntos; Incipiente, entre 0 y 75 puntos.
De igual manera por cada dimensión de la variable se otorgó las
siguientes categorías según los puntajes alcanzados: Dimensión 1: Nivel
de desarrollo alto (33-48 puntos), intermedio (17-32 puntos) e incipiente
(0-16 puntos); Dimensión 2: Nivel de desarrollo alto (33-48 puntos),
intermedio (17-32 puntos) e incipiente (0-16 puntos); Dimensión 3: Nivel
de desarrollo alto (43-63 puntos), intermedio (22-42 puntos) e incipiente
(0-21 puntos); Dimensión 4: Nivel de desarrollo alto (21-30 puntos),
intermedio (11-20 puntos) e incipiente (0-10 puntos); y, Dimensión 5: Nivel
de desarrollo alto (25-36 puntos), intermedio (13-24 puntos) e incipiente
(0-12 puntos).
Los métodos teóricos utilizados en nuestra investigación fueron el
análisis y síntesis y el sistémico que estuvieron dirigidos a modelar el
objeto (competencia informacional) mediante la determinación de sus
componentes (habilidades informacionales), así como las relaciones entre
ellos, que conformaron una nueva cualidad como totalidad. Esas
relaciones determinaron por un lado la estructura y la jerarquía de cada
componente en el objeto y por otra parte su dinámica y su
funcionamiento10.
Los métodos empíricos, empleados fueron la observación científica,
que consistió en la percepción directa del objeto de investigación en su
manifestación más externa, durante la acumulación de evidencias del
problema; y el de la medición, con el objetivo de obtener información
numérica acerca de una propiedad o cualidad del objeto en estudio,
comparando magnitudes medibles y conocidas, utilizándose
procedimientos estadísticos, que en nuestro caso fueron descriptivos9. Los
datos se presentaron en cuadros y gráficos, según se consideró
conveniente. Se empleó la herramienta informática SPSS versión 17.
Los principios bioéticos considerados en esta investigación fueron
los de Autonomía, Beneficencia – No Maleficencia y Justicia. Con
respecto al Principio de Autonomía, las normas señalan que todas las
investigaciones en sujetos humanos, con riesgo mínimo o mayor que el
mínimo, requieren de un consentimiento informado; en nuestro caso, a
pesar de considerarse que no existía riesgo, se solicitó el consentimiento
informado de las estudiantes que conformaron la muestra,
garantizándoseles el resguardo de su identidad con la utilización de
códigos y el compromiso de que el uso de la información sólo era para
fines del estudio señalado; el respeto a los Principios de Beneficencia y
No Maleficencia, estuvo asegurado tanto porque la investigación no
representa ningún riesgo para las estudiantes en estudio, como por el
resguardo de la confidencialidad de la información, el secreto y la
privacidad. En cuanto a los beneficios que se obtuvieron de la
investigación (significación práctica), estos recayeron tanto en el grupo
investigado como en la institución universitaria y están a su disposición
para su conocimiento y la adopción de estrategias que permitan mejorar
la situación problemática. En lo que corresponde al Principio de Justicia,
todas las estudiantes tuvieron la oportunidad de integrar la muestra, al
emplearse el muestreo probabilísticos.
Otros resguardos éticos que se consideraron están asociados al
respeto de derechos de autor en las publicaciones que se consultaron, así
como también por el resguardo de la validez científica y valor social de la
investigación por la competencia científica de las investigadoras12.
III. RESULTADOS
Los resultados se presentan en correspondencia con los objetivos
planteados, mostrándose a continuación tablas y gráficos que revelan la
competencia informacional de las estudiantes de enfermería en el ciclo
académico 2012 – I.
0
5
10
15
20
25
30
ALTO INTERMEDIO INCIPIENTE
PRIMERO
SEGUNDO
TERCERO
CUARTO
QUINTO
SEXTO
SEPTIMO
OCTAVO
Gráfico 1: Nivel de desarrollo de la competencia informacional, por ciclo de estudios, de los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la UNPRG. Lambayeque – 2012.
Fuente: Encuesta “Autovaloración de competencias informacionales” aplicada a estudiantes de
enfermería de la UNPRG. Septiembre a Diciembre 2012
El gráfico muestra que la mayoría de estudiantes tienen un nivel de
desarrollo intermedio de la competencia informacional, siendo mayor el
porcentaje en las estudiantes del quinto ciclo (95,2%) y en el primer ciclo
(88,8%). Sólo el 30% de las estudiantes del octavo ciclo alcanzaron un
nivel de desarrollo de alto.
Tabla 1: Nivel de desarrollo de la habilidad para determinar la naturaleza y nivel de la información que se necesita, por ciclo de estudios, de los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la UNPRG. Lambayeque – 2012.
Ciclo
Nivel
I II III IV V VI VII VIII
ALTO 22.2
15,6 4.3 14,8
19,5 22.2
27.2
55,0
INTERMEDIO 74.0
71,8 82.6 85.1
80,9 77.7
69.7
45,0
INCIPIENTE 3.7
12,5 13.0 0.0
0,0 0.00
3.0
0,0
TOTAL 100%
100% 100% 100%
100% 100%
100%
100%
Fuente: Encuesta “Autovaloración de competencias informacionales” aplicada a estudiantes de enfermería de la UNPRG. Septiembre a Diciembre 2012
El nivel de desarrollo de la habilidad para determinar la naturaleza y
nivel de información que se necesita, alcanza un nivel de intermedio en la
mayoría de estudiantes, sobresaliendo las del cuarto ciclo (85.1%). Se
destaca que el 55% de estudiantes del octavo y el 27.2% del séptimo ciclo
alcanzaron un alto nivel de desarrollo.
Tabla 2: Nivel de desarrollo de la habilidad para acceder a la información requerida por ciclo de estudios, de los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la UNPRG. Lambayeque – 2012.
Ciclo
Nivel
I II III IV V VI VII VIII
ALTO 0.00%
12,5 4.35% 22.22%
14,2 14.81%
12.1 5,0
INTERMEDIO 85.19%
71,8 82.61% 70.37%
85,7 77.78%
81.8 95,0
INCIPIENTE 14.81%
15,6 13.04% 7.41%
0,0 7.41%
6.0 100
TOTAL 100%
100% 100% 100%
100% 100%
100% 100%
Fuente: Encuesta “Autovaloración de competencias informacionales” aplicada a estudiantes de enfermería de la UNPRG. Septiembre a Diciembre 2012
La habilidad para acceder a la información requerida por la mayoría
de estudiantes alcanza el nivel de intermedio, sobresaliendo las
estudiantes del octavo ciclo (95%). Sólo el 22.2% de las estudiantes del
cuarto ciclo alcanzan un nivel alto.
Tabla 3: Nivel de desarrollo de la habilidad para evaluar la información; por ciclo de estudios, de los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la UNPRG. Lambayeque – 2012.
Ciclo
Nivel
I II III IV V VI VII VIII
ALTO 11.11%
18,7 0.0 22.2
14,2 29.6
27.2 5,0
INTERMEDIO 81.48%
68,7 78.2 74.0
85,7 70.3
63.6 95,0
INCIPIENTE 7.41%
12,5 21.7 3.7
0,0 0.0
9.0 0,0
TOTAL 100%
100% 100% 100%
100% 100%
100% 100%
Fuente: Encuesta “Autovaloración de competencias informacionales” aplicada a estudiantes de enfermería de la UNPRG. Septiembre a Diciembre 2012
La mayoría de estudiantes alcanza un nivel de desarrollo
intermedio de la habilidad para evaluar la información, destacándose los
estudiantes del octavo (95%), primero (81.4%) y tercer ciclo (78.2%).
Son los estudiantes del sexto (29,6%) y séptimo (27,2%) los que
alcanzan un alto nivel.
Tabla 4: Nivel de desarrollo de la habilidad para utilizar la información eficazmente; por ciclo de estudios, de los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la UNPRG. Lambayeque – 2012.
Ciclo
Nivel
I II III IV V VI VII VIII
ALTO 11.1
25,0 4.3 11.1
4,7 22.2
15.1
0,0
INTERMEDIO 77.7
56,2 56.5 74.0
90,4 74.0
63.6
100,0
INCIPIENTE 11.1
18,7 39.1 14.8
4,7 3.7
21.2
0,0
TOTAL 100%
100% 100% 100%
100% 100%
100% 100%
Fuente: Encuesta “Autovaloración de competencias informacionales” aplicada a estudiantes de enfermería de la UNPRG. Septiembre a Diciembre 2012
Un porcentaje considerable de estudiantes alcanzan un nivel de
desarrollo incipiente en la habilidad de utilizar eficazmente la información,
desatacándose las estudiantes del tercer ciclo (39.1%) y las de séptimo
ciclo (21,2%).
Tabla 5: Nivel de desarrollo de la habilidad para utilizar la información de forma ética y legal, por ciclo de estudios, de los estudiantes de la Facultad de
Enfermería de la UNPRG. Lambayeque – 2012.
Ciclo
Nivel
I II III IV V VI VII VIII
ALTO 3.7
25,0 0.0 14.8
0,0 22.2
24.2
35,0
INTERMEDIO 77.7
56,2 56.5 70.3
100, 66.6
57.5
60,0
INCIPIENTE 18.5
18,7 43.4 14.8
0,0 11.1
18.1
5,0
TOTAL 100%
100% 100% 100%
100% 100%
100% 100%
Fuente: Encuesta “Autovaloración de competencias informacionales” aplicada a estudiantes de enfermería de la UNPRG. Septiembre a Diciembre 2012
La habilidad para utilizar la información de forma ética y legal
alcanza un nivel de desarrollo incipiente en un porcentaje considerable
de estudiante, destacándose los estudiantes del tercer (43.4%), segundo
(18,7%), primero (18.5%) y séptimo (18.1%) ciclo.
V. DISCUSIÓN
La competencia informacional constituye la base para el aprendizaje
continuo a lo largo de toda la vida, capacitando a quien aprende a
dominar el contenido y ampliar sus investigaciones, a hacerse más auto-
dirigido y asumir un mayor control sobre su propio proceso de
aprendizaje. Esta competencia es clave para aumentar la eficacia del
aprendizaje13, por ello, en el ámbito de la educación superior, poseerla
para la creación de conocimiento es el reto más importante para las
universidades, porque la competencia en información está vinculada al
proceso de creación de conocimiento.
La competencia informacional en estudiantes universitarios no es
innata, pero a menudo los jóvenes sobrevaloran sus habilidades y
experiencias en la escuela secundaria, percibiendo que ya tiene la
competencia infromacional.14
En esta investigación, conceptualizamos a la competencia
informacional, como una macro habilidad de carácter socio cultural que
permite reconocer cuándo se necesita información y tener la habilidad
para localizarla, evaluarla y usarla efectivamente, constituyéndose en una
necesidad para la formación de una persona capaz de asumir con
conciencia, tanto crítica como ética, la diversidad y complejidad de
factores culturales que median el acceso a la información.
Esta competencia permite desenvolverse con mayor autonomía en
esta sociedad de la información ya que lleva a cabo procesos
relacionados con el tratamiento de la información: determinar la
información que se necesita, localizar las fuentes de esa información,
saber qué hacer con la información que se localizó, respetar la creación
de otros y la posibilidad de crear y autoevaluar el proceso que se realizó.
Dada su importancia se determinó el nivel de desarrollo de la
competencia informacional, observándose que la mayoría de estudiantes
tienen un nivel de desarrollo intermedio (Gráfico 1). Esta situación puede
deberse a que en el Perú, se está enfatizando en la necesidad de usar las
NTIC desde el nivel primario, recién desde la década de los noventa, pero
se cuenta con escaso potencial humano capacitado y con recursos
económicos limitados para desarrollar procesos de Alfabetización
Informacional (ALFIN)15, por ello, es posible, que muchas de las
estudiantes no han tenido acceso a las NTIC.
Llama la atención que sólo el 15.1% de las estudiantes del octavo
ciclo alcanzaron un nivel de desarrollo de alto, lo que quiere decir, que
durante su formación no se están empleando estrategias que fortalezcan
esta competencia, colocándolas en un situación desfavorable con
respecto a otros profesionales que sí la poseen, limitando su autonomía,
haciendo difícil su capacitación constante en esta nueva era de la
información. Las repercusiones del escaso desarrollo de la competencia
informacional se evidencia en la calidad de las investigaciones y en la
calidad del cuidado ya que éste se fundamenta en las evidencias
científicas.
El desarrollo de la competencia informacional requiere de
habilidades, que la hemos planteado en cinco dimensiones: habilidad para
determinar la naturaleza y nivel de la información que se necesita,
habilidad para acceder a la información requerida de manera eficaz y
eficiente, habilidad para evaluar la información y sus fuentes de forma
crítica e incorporar la información seleccionada a su propia base de
conocimientos y a su sistema de valores, habilidad para utilizar la
información eficazmente y cumplir un propósito específico y la habilidad
para comprender los problemas y cuestiones económicas, legales y
sociales que rodean al uso de la Información, accediendo y utilizándola de
forma ética y legal.
En la tabla 1, se observa que la habilidad para determinar la
naturaleza y nivel de información que se necesita, alcanza un nivel de
intermedio en la mayoría de estudiantes, sobresaliendo las del cuarto
ciclo (85.1%). Se destaca que sólo el 27.2% de estudiantes del séptimo
ciclo alcanzó un alto nivel de desarrollo, situación que es preocupante ya
que si la estudiante tiene limitaciones para discriminar la información no
tendrá la capacidad de argumentar sus intervenciones con evidencias
científicas garantizadas.
Asimismo la habilidad para acceder a la información requerida por la
mayoría de estudiantes alcanza el nivel de intermedio, sobresaliendo las
estudiantes del octavo ciclo (95%) y primer ciclo (85,19%). Sólo el 22.2%
de las estudiantes del cuarto ciclo alcanzan un nivel alto. (Tabla 2). Las
limitaciones para el acceso a la información puede deberse a las pocas
oportunidades que ha tenido el estudiante durante su formación de usar
NTIC, ya que la mayoría de ellas son de clase media, provenientes de
instituciones escolares de carácter público que no cuentan con las NTIC,
también puede contribuir a esta situación el hecho de que las docentes
universitarias no exigen las fuentes de información cuando la estudiante
fundamenta sus intervenciones, lo que le resta consistencia científica a
sus intervenciones.
Estos resultados son similares a los planteados por García en su
investigación en estudiantes de enfermería dela universidad de
Terragona, en el que encontró que los estudiantes usan estrategias de
búsquedas en Internet muy simples y poco depuradas, siendo Google el
buscador más utilizado; muchos de ellos no efectúan ninguna
planificación para la búsqueda de información; la mitad, no utilizan las
reglas más básicas para reducir el ruido documental y ajustar la
pertinencia y relevancia de los documentos y reducen su búsqueda de
información a la publicada en sus idiomas maternos16.
Son los estudiantes del sexto y séptimo ciclo (29.6% y 27.2%
respectivamente) los que alcanzan un nivel alto en la habilidad para
evaluar la información (Tabla 3), este resultado puede estar relacionado
con el ejercicio que desarrolla la estudiante desde que inicia su formación
de pregrado para desarrollar su capacidad crítica y reflexiva, a través de
las diversas estrategias metodológicas que se aplican en los diversos
escenarios donde desarrollan experiencias de aprendizaje ya sea a nivel
de aula, laboratorio, comunidad, viviendas o instituciones hospitalarias.
Los resultados son similares a los encontrados por Salvador en el 2011,
en una universidad de Zaragoza en la que encontró que la competencia
más utilizada fue analizar y seleccionar la información17. Por su parte
García encontró que los estudiantes no aplican criterios de evaluación
imprescindibles para determinar si un documento es adecuado en calidad
y rigor a la búsqueda que se está realizando16.
Un porcentaje considerable de estudiantes alcanzan un nivel de
desarrollo incipiente en la habilidad de utilizar eficazmente la información,
desatacándose las estudiantes del tercer ciclo (39.1%) (Tabla 4), esto
puede explicarse porque en los primeros ciclos, recién se están
adaptando a la vida universitaria en la que nivel de exigencia con
respecto a usar eficientemente la información, es mayor en comparación
con el nivel de educación secundaria, a esto puede agregarse que
muchas de las estudiantes provienen de la zona nororiental del Perú y de
instituciones educativas que no exigen el uso eficaz de la información.
Estos resultados son similares a los planteados por Castañeda-Peña
et al en Colombia, en dos universidades consultadas, en la que el 55% y
78% son considerados como recolectores y verificadores de
informaciones, es decir, los primeros se caracterizan porque utilizan
Google y Wikipedia como herramientas principales de la búsqueda,
teniendo en cuenta sólo la palabras clave en la tarea asignada, para
iniciar la búsqueda. Asimismo se aprecia una ausencia de planificación
de la búsqueda, y la información localizada, tendiendo a copiarse
textualmente de las fuentes seleccionadas. El verificador se caracteriza
por buscar fuentes de información en páginas con datos confiables, eligen
fuentes de información con puntos de vista diferentes sobre el mismo
tema, las cuales se verifican en el análisis de la relación entre los textos
encontrados en Internet y los textos disponibles en la biblioteca, en
cualquier formato. El uso de Google obedece fundamentalmente a
limitaciones de tiempo18.
La habilidad para utilizar la información de forma ética y legal
alcanza un nivel de desarrollo incipiente en un porcentaje considerable de
estudiante, destacándose los estudiantes del tercer ciclo (43.4%), del
primero (18.5%) y del séptimo (18.1%) (Tabla 5). Esta situación puede
deberse a que generalmente no se está acostumbrado a respetar la
propiedad intelectual de los autores, omitiendo muchas veces las fuentes
de dónde sacaron la información, ya sea porque desconocen que es una
falta ética de acuerdo a Emanuel o porque pretenden hacer creer al lector
que lo escriben es su producción intelectual.
En los ocho ciclos académicos, se observa que la habilidad para
utilizar la información de forma ética y legal alcanza el más alto porcentaje
en el nivel incipiente: 19% de estudiantes de primer y segundo ciclo,
43,4% del tercero, 14,8% del cuarto y quinto, 11,1% sexto y 5% del
octavo. Sólo en el séptimo ciclo el 21,1 % de estudiantes alcanzó el
mayor porcentaje en el nivel incipiente en la habilidad de utilizar
eficazmente la información.
Estos resultados nos exigen desarrollar una gran capacidad de
respuesta y de adaptación frente a los cambios e innovaciones que se
están produciendo en la sociedad como consecuencia del desarrollo de
las NTIC; por ello, urge que la universidad adopte estrategias curriculares
para fortalecer la competencia informacional de la estudiante de
enfermería que le permitan formarse permanentemente a lo largo de su
vida y basar su cuidado en evidencias científica fortaleciendo su
autonomía, la ciencia enfermera y la calidad del cuidado.
Es importante destacar la limitación que hemos encontrado en el
estudio, porque al usarse un instrumento autoevaluativo, las investigadas
pueden percibir erróneamente que tienen las habilidades planteadas, por
lo que se recomienda asociar a este instrumento, la observación para
tener certeza de la competencia informacional desarrollada.
VI. CONCLUSIONES
1. El nivel de desarrollo de la habilidad para determinar la naturaleza y
nivel de información que se necesita, alcanza un nivel de intermedio
en la mayoría de estudiantes, sobresaliendo las del cuarto ciclo
(85.1%). Se destaca que el 55% de estudiantes del octavo y el
27.2% del séptimo ciclo alcanzaron un alto nivel de desarrollo.
2. La habilidad para acceder a la información requerida por la mayoría
de estudiantes alcanza el nivel de intermedio, sobresaliendo las
estudiantes del octavo ciclo (95%). Sólo el 22.2% de las estudiantes
del cuarto ciclo alcanzan un nivel alto.
3. Son los estudiantes del sexto (29,6%) y séptimo (27,2%) los que
alcanzan un alto nivel en la habilidad para evaluar la información.
4. Un porcentaje considerable de estudiantes alcanzan un nivel de
desarrollo incipiente en la habilidad de utilizar eficazmente la
información, desatacándose las estudiantes del tercer ciclo (39.1%)
y las de séptimo ciclo (21,2%).
5. La habilidad para utilizar la información de forma ética y legal
alcanza un nivel de desarrollo incipiente en un porcentaje
considerable de estudiante, destacándose las estudiantes del tercer
ciclo (43.4%), segundo (18,7%), primero (18.5%) y séptimo (18.1%)
ciclo.
6. En siete ciclos, se observa que la habilidad para utilizar la
información de forma ética y legal alcanza el más alto porcentaje en
el nivel incipiente: 19% en el primer y segundo ciclo, 43,4% en el
tercero, 14,8% en el cuarto y quinto, 11,1% en el sexto y 5% en el
octavo. Sólo en el séptimo ciclo el 21,1 % de estudiantes alcanzó el
mayor porcentaje en el nivel incipiente en la habilidad para utilizar
eficazmente la información.
7. La información recolectada, de las cinco dimensiones permite
rechazar la hipótesis planteada ya que la mayoría de estudiantes
alcanza un nivel de desarrollo intermedio de la competencia
informacional.
VII. RECOMENDACIONES
1. A la Dirección de Escuela de la Facultad de Enfermería de la
UNPRG, para que considere en su estructura curricular, cursos de
alfabetización informacional que permitan fortalecer el desarrollo de
la competencia informacional de las estudiantes de enfermería.
2. A las docentes para que en cada actividad académica asignada,
verifiquen que las estudiantes pongan en práctica las cinco
habilidades requeridas para desarrollar la competencia
informacional.
3. A las estudiantes para que se esfuercen y se comprometan a
desarrollar su competencia informacional, cuando desarrollan sus
tareas académicas.
4. Se sugiere realizar una investigación acción participación con los
resultados de este estudio para que se establezcan planes de
intervención para fortalecer las competencias informacionales de
estudiantes y docentes de la Facultad de Enfermería de la UNPRG.
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