Coaching Deportivo Capitulo2 2013

CAPACITACION NACIONAL DEPORTIVA

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UNIDAD 3

3 TRANSFORMANDO MIS MARCOS MENTALES

No es feliz quien no piensa que lo es. Slo hay un bien causa y fundamento de la vida feliz: creer en uno mismo

Sneca

Hace algunos aos atrs, en la primavera de 1976, John Grinder y Richard Bandler luego de una extenuante jornada de trabajo denominaron Programacin Neurolingustica (PNL) a un conjunto de saberes, intuiciones y conocimientos recolectados por ambos especialistas durante la primavera Californiana.

La PNL como modelo explicativo trata de la estructura de la experiencia humana subjetiva; es decir cmo organizamos lo que sentimos, vemos y omos y especialmente cmo revisamos y filtramos el mundo exterior mediante nuestros sentidos (OConnor y Seymour, 2001). Tambin aborda cmo el lenguaje permite explorar dicho mundo y cmo las personas, intencionadas o no, reaccionamos con el fin de provocar algn resultado.

Independiente del mundo exterior, usamos los sentidos para su delimitacin y por supuesto, su exploracin.

El mundo es una infinitud de posibles impresiones sensibles y slo somos capaces de percibir una pequea parte de l

OConnor y Seymour, 2001

La pequea parte que percibimos ser posteriormente filtrada por nuestra experiencia personal y nica, compuesta por elementos culturales, valores adquiridos, creencias asimiladas, lenguaje propio, intereses personales, suposiciones aprendidas, etc. Cada persona vive su propia realidad y actuamos en ella de acuerdo a cmo la percibimos, el resultado de esto lo podramos definir como el modelo de mundo personal.

En este punto es fundamental detenerse y preguntarse lo siguiente;

Cul es mi modelo de mundo personal? Cules son los valores que le dan sentido a ste?

Qu creencias son las ms importantes y que determinan mi actuar en concreto?

Soy realmente conscientes de ellas?

La realidad es tan amplia y vasta sensorialmente hablando, que para darle un sentido personal a ella debemos simplificarla. Elaborando nuestros propios mapas


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vamos significando al mundo. No obstante, es importante indicar que los mapas son selectivos, por tanto, no consideran toda la informacin cuando estamos en ellos. Esto es crucial cuando expresamos que mediante los mapas exploramos la realidad.

Por ejemplo, cuando un deportista expresa; sin los recursos necesarios, no lograr lo que quiero, da cuenta de un mapa empobrecido donde toda la responsabilidad de su quehacer deportivo est fuera y por tanto, no es plenamente consciente de su propio actuar en los resultados logrados.

Distinto es cuando alguien se expresa que a pesar de todo, lo voy a lograr, pues aqu hay claramente un mapa consciente de sus propios recursos y que, junto con valorarlos en la justa medida, asume plena responsabilidad en su proceso de desarrollo deportivo. El tipo de mapa donde el lector est ubicado influir en lo que observa, en lo que hace y principalmente, hacia donde quiere ir.

El mundo es indudablemente mucho ms rico que las ideas o representaciones que tenemos respecto de l y son los filtros los que actan en nuestras percepciones para delimitar qu clase de mundo habitamos. Esta delimitacin dar como resultado un Marco Mental individual posibilitador u obstaculizador de las opciones que las personas tienen en su vida y en el contexto deportivo. Esto es importante pues el Marco Mental moldear tanto las decisiones que se tomen como el desempeo que se vaya logrando.

Reflexiona y clasifiqua las siguientes afirmaciones, especialmente orientadas al mbito del deporte, en trminos de adaptativas o desarrollistas o bien desadaptativas u obstaculizadoras;

A pesar de todo, voy a conseguirlo Es un lindo sueo, pero slo es eso

Porque no tenemos nada, lo haremos todo Los segundos lugares son buenos

Ahora responde las siguientes preguntas;

Cules son las afirmaciones desadaptativas que ms me digo a m mismo? Cules son las afirmaciones adaptativas que provocan un cambio positivo

en m?

De ah entonces, es esencial reconocer en nosotros mismos cules son los elementos esenciales o filtros de nuestro mapa mental que dan cuenta de la persona que soy y de los comportamientos aparejados a dicha definicin.

Son muchos los filtros que actan consciente e inconscientemente en la conformacin de los mapas mentales. Nuestro objetivo en el presente libro, y debido a la extensin del mismo, es la identificacin de algunos de ellos, analizar brevemente cmo influyen en las personas y fundamentalmente, en los ejercicios prcticos desarrollados provocar un cambio. Cuando un cambio ocurre en este nivel trae aparejado una modificacin de los supuestos fundamentales que dan sentido a la experiencia de vida de las personas, es decir, ocurre una transformacin de los marcos mentales en el individuo


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y con ello, aparecen nuevas formas de actuar o posibilidades antes no vistas para lograr sus propios objetivos.

Por ejemplo, la creencia (filtro muy poderoso) respecto a que los segundos lugares son buenos, provocar que el deportista no d su mejor esfuerzo, pues en su mente est instaurada la idea (marco mental) de que independiente de lo que haga no lograr mejores resultados o bien que no vale la pena el esfuerzo final. Hipotecando con ello toda opcin de desarrollo y por ende, de logros deportivos.

El lenguaje es un filtro muy poderoso, pues constituye una suerte de Mapa de nuestros pensamientos y experiencias. Si pensamos por un momento lo que la palabra familia significa para cada uno de nosotros, no cabe la menor duda que surgen de manera inmediata imgenes, sonidos, sentimientos, recuerdos y experiencias particulares que le otorgan sentido a dicha palabra. Por tanto, cada palabra gatillar un pensamiento diferente en las personas. Eso s, ninguno mejor que otros.

La palabra no es la experiencia que se describe, slo un estado general provocado por uno mismo de manera consciente e inconsciente

Rodrigo Lpez, 2012

Cuando un deportista, por ejemplo, se habla a s mismo de fracaso luego de una serie de malos resultados y si ms encima ha vivenciado experiencias de fracaso con anterioridad desarrollar un marco mental limitante que le impedir hacer la necesaria reflexin y posterior toma de decisiones para salir de donde est.

Adems del lenguaje, las convicciones y las creencias son otros filtros. No obstante y debido a la extensin del captulo slo ahondaremos en las creencias pues su importancia e influencia en el comportamiento de las personas ameritan dicho abordamiento.

Sistema de creencias y desarrollo deportivo

Las creencias son una fuerza muy poderosa dentro de los comportamientos de las personas. Toda nuestra vida nos hemos movido por las ideas, conceptos, principios, ideales, etc. que pueden ser encasillados conceptualmente en lo que llamamos creencias. stas son responsables de grandes gestas humanas como las campaas de ayuda por alimentos y prevencin del sida en frica y tambin de grandes genocidios en el mismo continente como en otros.

Es bien conocida la frase respecto de que si alguien quiere realmente hacer algo, lo har. Sin embargo, tambin encontramos otro tipo de afirmaciones como por ejemplo; esto es imposible y, ningn esfuerzo por grande que sea, har que lo logre. Dicha frase evidencia una autolimitacin mental y a la vez, un desaprovechamiento integral de los recursos que las personas disponen de manera natural y que forman parte de sus competencias inconscientes.

En el mbito de la salud encontramos un ejemplo significativo respecto a las creencias y su influencia en las personas. Nos referimos a la llamada expectativas de


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respuesta, es decir, un tipo de respuesta que la persona espera que le suceda ya sea positiva o negativa, a consecuencia de las acciones que emprende en una situacin determinada.

El efecto placebo es un buen ejemplo de la expectativa de respuesta. El efecto placebo se presenta cuando una persona responde positivamente a una droga que carece de actividad fisiolgica (por ejemplo, una pastilla de azcar o algn otro ingrediente inerte). Los placebos presentan con frecuencia un porcentaje de xitos muy elevado; en promedio, actan tan bien como las drogas autnticas en aproximadamente una tercera parte de los casos (Dilts, 2002).

Las creencias en general, y en particular las creencias respecto de nosotros mismos y de lo que es posible en el contexto que nos rodea, tienen una gran influencia sobre nuestra eficacia cotidiana. Las creencias sirven como recursos y tambin como importantes limitaciones.

A partir del punto anterior, vamos a decir, que existen dos tipos de creencias en funcin de la actitud que provocan y que segn Serrat (2005) son:

las creencias potenciadoras que nos ayudan a crear entornos adecuados, por ejemplo un deportista que se expresa de la siguiente manera; Soy capaz de aprender cualquier tcnica que se me ensee!.

las creencias limitadoras que nos coartan y nos conducen hacia direcciones poco gratificantes. Por ejemplo, cuando alguien expresa la siguiente frase; No soy capaz de actuar en pblico!. Se imaginan a un deportista que al sentirse observado por un grupo de personas se sienta incmodo y no pueda rendir de la mejor manera. Creencia y desempeo estn muy ligados.

A continuacin presentamos dos esquemas que dan cuenta de cmo las creencias se constituyen en una secuencia de eventos de forma circular, que se autoalimenta permanentemente:


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Creencias Potenciadoras

Creencias Limitadoras


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Las creencias, como bien lo vemos en los esquemas anteriores, actan como predicciones y se cumplirn simplemente porque las personas actan de un modo especfico que sirve para probar su validez. Por ello, y si adems son creencias limitadoras, condicionarn el actuar y demostrarn peligrosamente que tienes razn. Por ejemplo, si un deportista expresa Haga lo que haga no podr salir de donde estoy o simplemente No puedo hacerlo se auto limita, y si adems vive una experiencia negativa, se dir a s mismo y a los dems Viste lo que pas, te dije que no iba a resultar, soy un desastre!.

El desafo es evitar que nuestras creencias nos atrincheren cada vez ms y no podamos darnos la posibilidad de desplegar sin miedo nuestro mundo interior (el Yo verdadero) lleno de recursos para ser el deportista que deseo y por supuesto, una feliz y mejor persona.

Antes de seguir con el relato y considerando las mltiples definiciones, vamos a entender creencia desde la mirada de un sujeto, como puntos de vista acerca de tu persona, los dems o el mundo que te rodea y que determinan las decisiones que tomas y cmo te comportas en cada situacin (Knight, 2002), y son de suma importancia en la calidad de las experiencias que se viven, pues se constituyen como filtros predispuestos de nuestra concepcin del mundo que hacen posible la accin y el comportamiento.


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Entregamos ahora unos ejemplos de muchas otras de creencias muy comunes y que, sin duda, han formado parte de las experiencias vividas por todos:

Eres la luz de mis ojos! No sirves para las matemticas!

Ves no se puede confiar en nadie! Soy mucho para ti!

No valgo nada! Es la nia de la casa!

Mi pas es el ms lindo del mundo! Es el mejor alumno de su clase!

Hay que seguir la tradicin familiar! Esto es pan comido!

La letra con sangre entra! Lo importante es competir, no ganar!

El mundo es una porquera! No s, no puedo!

Los amigos duran para toda la vida! Lo ms sagrado es la familia!

El pez ms grande se come al ms chico! El que pega doble, pega dos veces!

No hay nada ms que hacer! Quin te quiere te aporrea! Este mundo es de los vivos!

El que sabe, sabe y el que no es jefe! Qu se le va a hacer, as no ms son las cosas! Los Argentinos, Peruanos o Chilenos son!

El que la sigue la consigue! Estudia, estudia, para que no seas lo que yo he sido!

Responde la siguiente pregunta:

Con cul de las creencias te sientes ms identificado/a? Sinceramente, Qu tan beneficioso es (o fue) para ti dicha identificacin?

La historia de cada persona est conformada de grandes y pequeas experiencias vividas que dan piso a la estructuracin de las creencias. La primera fuente es el ambiente que nos rodea al nacer y los posteriores contextos que viviremos, especialmente el de la infancia como el de la adolescencia, pues sern vitales en el establecimiento de nuestro particular sistema de creencias. De ah entonces que los padres, educadoras de prvulos, profesores, guardadores, etc. son agentes fundamentales en este proceso de aprendizaje.

A continuacin te invitamos a responder las siguientes preguntas:

Cules son las creencias ms importantes en mi vida hoy? De qu modo soy consciente de su importancia en mi vida?


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El ordenamiento de las creencias genera un sistema que preserva su mantenimiento a travs de la interpretacin que hace de las nuevas experiencias, es decir, si un deportista cree que el mundo es injusto actuar en consecuencia y no percibir otra realidad diferente a sta. La injusticia lleva aparejada adems, la desconfianza y si sta est presente en nuestra vida, no sabremos aprovechar las oportunidades que el entorno pueda brindarnos.

Una vez que organizamos el sistema de creencias, condicionamos la percepcin de la realidad, por eso son tan poderosas. Condicionan en primer lugar, la

comunicacin con nosotros mismos y, como consecuencia, la comunicacin con los dems

Gustavo Bertolotto, 2003

En este punto es importante recordar que el Mapa no es el Territorio, sino solamente la particular percepcin que tenemos de l (realidad), en donde las creencias constituyen los filtros ms importantes en dicho proceso. Debido a que el Mapa constituye tu propia interpretacin del mundo en que vives, tienes la tendencia a pensar, sentir y actuar en concordancia con l. De ah entonces, es que nuestras creencias las obedecemos casi imperativamente y muchas veces somos poco conscientes de ello.

La reflexin que queremos proponer en este punto es que las personas, y en particular los deportistas, necesitan transformarse en observadores de s mismos y desde ese punto, desarrollar la necesaria flexibilidad para alcanzar una mejor adaptacin a los entornos y circunstancias que habitualmente se presentan.

Como ya indicamos con anterioridad, muchas de nuestras creencias fueron implantadas durante la infancia por nuestros padres, por los maestros, por el entorno social y por los medios de comunicacin, mucho antes de que nos diramos cuenta de sus efectos o de que furamos capaces de elegir entre ellas (Dilts, 2004). No obstante, es vlido preguntarse lo siguiente Ser posible desaprender, cambiar o reestructurar las viejas creencias limitantes e instaurar en su lugar otras potenciadoras que permitan ampliar el potencial hasta niveles insospechados?.

El punto de partida para salir de esta suerte de determinacin comportamental dada por las creencias es el reconocer que stas no son perennes y que realmente pueden cambiarse, por ejemplo, mediante la experimentacin de una situacin o vivencia que provoca su refutacin, que ms de alguna vez las personas han realizado en su vida.

A continuacin, le invitamos a realizar una serie de ejercicios prcticos que ayudarn al cambio de creencias limitantes y por tanto, favorecedores de comportamientos nuevos y adecuados para el logro de los propios objetivos.

Ejercicio Prctico N1: Cmo las Creencias Provocan Conductas Especficas

Objetivo: Reflexionar respecto a las diferentes conductas que se derivan de las creencias.


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Paso N1: Escribe tres conductas que se pueden derivar de las creencias que se indican a continuacin.

Creencia Conductas derivadas

Creencia N1: Las competencias estn todas arregladas.

Conducta n1: __________________________________________

Conducta n2: __________________________________________

Conducta n3: __________________________________________

Creencia N2: Slo con un entrenador prestigioso lograr resultados.

Conducta n1: __________________________________________

Conducta n2: __________________________________________

Conducta n3: __________________________________________

Creencia N3: El aporte de los privados desarrollar an ms mi carrera deportiva.

Conducta n1: __________________________________________

Conducta n2: __________________________________________

Conducta n3: __________________________________________

Paso N2: A modo de retroalimentacin responde las siguientes preguntas; Qu me pas con el ejercicio? De qu aprendizaje soy consciente ahora?.


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Ejercicio Prctico N2: Mis Creencias Potenciadoras

Objetivo: Generar creencias potenciadoras en mi vida.

Paso N1: Completa el siguiente cuadro indicando tres creencias potenciadoras relacionadas con los mbitos indicados.

Conmigo Mismo a) b) c)

Compaero (s) de Equipo a) b) c)

Entrenadores

a) b) c)

Paso N2: A continuacin y, considerando como absolutamente verdaderas las creencias que indicaste en el paso anterior, responde las siguientes preguntas:

Qu ocurri en m? Qu cambios conductuales provocaron en mi persona? Cmo me relaciono ahora con los dems? Qu beneficios estoy obteniendo?


Ejercicio Prctico N3: Mis Creencias Limitadoras

Objetivo: Hacer consciente algunas creencias limitadoras en mi vida.

Paso N1: Escribe dos creencias limitadoras en dos diferentes mbitos que se presentan a continuacin y las implicancias conductuales concretas en tu vida.

mbitos Creencias Implicancias en mi vida

Como Persona a) b)

Como miembro de tu a) b)


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familia

Como deportista a) b)


Ejercicio Prctico N4: Cmo Formar Valores y Creencias Positivas

Objetivo: Aprender a formar creencias y valores en m y en otros.

Instrucciones: El ejercicio est planificado para ser realizado por tres personas (A = gua, B = guiado y C = Observador que toma notas del ejercicio).

Paso N1: A le pide a B que comente cules son los personajes de las historias, ancdotas o fbulas que ms recuerda de su infancia Cules eran sus caractersticas? Qu creencias tenan? Cul fue la enseanza aprendida en una sola frase?.

Paso N2: A le pide a B que recuerde la(s) persona(s) ms influyente(s) en su(s) vida y que se refiera a los valores y creencias que tiene(n) o tena(n) dicha(s) persona(s).

Paso N3: A le pide a B que recuerde el libro o los libros que ms le hayan impactado en el perodo de su adolescencia y posteriormente preguntar Cul era el personaje con el que ms te identificas? Cmo era el personaje? Cul era la filosofa de vida del personaje?.

Paso N4: A le pide a B que recuerde dos o tres experiencias fundamentales de su vida y a continuacin responder Qu aprendi? y Qu conclusiones es posible de realizar a partir de lo vivido?.

Paso N5: A le solicita a B que recuerde especialmente una persona o personaje que profundamente admir en algn momento o instante en su vida, para luego responder a la siguiente pregunta Cmo era su comportamiento? y Cules eran sus valores y creencias ms caractersticos?.

Paso N6: Una vez finalizado el ejercicio todos los participantes realizan comentarios respecto a lo vivido, tratando de reconocer si el relato tiene alguna conexin con sus propios valores, creencias, o bien con alguna decisin importante tomada en base a lo ya escuchado. Finalmente se intercambian los roles.


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Ejercicio N5: Cambiando Mis Creencias Limitadoras

Objetivo: Identificacin y cambio de creencias limitadoras.

Paso N1: Recuerda una situacin problemtica, un fracaso, una actividad que no result como lo esperabas. Piensa en las circunstancias, en cmo te sentas en el momento. Visualzate reviviendo esta situacin con todos los sentidos.

Lo Visual: imgenes, colores, matices, todo del ambiente visual del evento.

Lo Auditivo: los sonidos, ruidos, efectos sonoros que esta situacin complicada genera en tu mente.

Lo kinestsico: todas las sensaciones, impresiones, olores, texturas, lugares del cuerpo que esta experiencia revivida involucra.

Paso N2: Qu valores intervinieron en la situacin? Identifica los valores que se pusieron en tu mente que hicieron que la situacin se transformara en un problema. Enumera los valores principales y ms relevantes.

Paso N3: A qu creencias se asocian estos valores? Conecta cada valor con su correspondiente creencia.

Paso N4: Qu nuevas creencias podran ser ms tiles para la situacin? Reflexiona sobre la utilidad de la creencia que caus el problema y encuentra otras creencias ms adecuadas para resolver la situacin o que habra sido mucho ms funcional en dicho evento.

Paso N5: Revive ahora el evento o situacin complicada con las nuevas creencias encontradas en el punto anterior.

Lo Visual: imgenes, colores, matices, todo del ambiente visual del evento vivido con la nuevas creencias.

Lo Auditivo: los sonidos, ruidos, efectos sonoros que esta nueva situacin mejorada genera en tu mente.

Lo kinestsico: todas las sensaciones, impresiones, olores, texturas, lugares del cuerpo que esta nueva experiencia revivida genera en ti.

Paso N6: Busca objeciones al hecho de usar estas nuevas creencias ms adecuadas en vez de las antiguas que generaron la situacin problemtica.

Paso N7: A modo de retroalimentacin Cmo te sientes con las nuevas creencias a futuro con casos similares?. Pensar en grande


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No cabe duda que el pensamiento constituye otro elemento relevante que determina el marco mental desde donde me observo a m mismo y por tanto, me permite generar el modo cmo me relaciono con los dems y la calidad (en trminos de resultados) de dicha interaccin. Un modo particular de pensarme gatillar a su vez, una emocin y una conducta referida a dicho pensamiento.

De ah entonces, nos parece pertinente ahondar en este importante proceso, pues las decisiones que tomamos por muy triviales que sean, se hacen desde un marco mental especfico. Acordaremos, por ejemplo, que un deportista desde un pensamiento del tipo no me la puedo genera conductas y tomar decisiones muy distintas a otro que se piensa a s mismo como soy capaz.

Lamentablemente, en nuestra prctica profesional como Coaches, hemos observado una tendencia en las personas a pensar en pequeo, lo cual de un modo u otro hace que de manera consciente e inconsciente se resten habilidades y destrezas en su propio desempeo. El tamao de nuestro logros lo determina la magnitud de nuestro pensamiento (Schwartz, 1994) por ello, es crucial ampliar el alcance de nuestros pensamientos.

Si nos preguntamos a nosotros mismos, u otros se hicieran la pregunta Cul es mi principal debilidad? estamos seguros que, en base a la mayora de las respuestas recibidas, encontraramos un patrn comn expresado en una autodevaluacin que, en el caso del mbito deportivo, influir directamente en el desempeo. El no creerse el cuento habla de un tipo de pensamiento que refleja un marco mental estrecho y limitante.

Le invitamos a realizar el siguiente ejercicio, que busca determinar cmo nos pensamos a nosotros mismos:

Paso N1: En el siguiente cuadro identifica tres de tus fortalezas ms importantes indicando adems, el contexto donde esta fortaleza se hace presente con todo su potencial.

Fortalezas Contexto donde se hace presente dicha fortaleza 1.- 2.- 3.-

Paso N2: A continuacin, anota en el cuadro dado las fortalezas ya identificadas y debajo de cada una de ellas, escribe los nombre de tres personas o deportistas que t sabes que han logrado el xito, pero que no poseen esa fortaleza en un grado tan alto como t.

Fortaleza N1: N2: N3: Personas o deportistas destacados(as)


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Paso N3: A modo de retroalimentacin, reflexiona respecto a la ventaja que tienes respecto a mucha gente exitosa. Las personas son ms grandes de lo que piensan.

Muchos especialistas en el rea del desarrollo personal, plantean que las personas no piensan en palabras y frases. Slo lo hacen en imgenes y/o figuras. Esto es fundamental si queremos mejorar nuestro desempeo y alcanzar los objetivos que deseamos en el mbito deportivo.

Las palabras constituyen la materia prima del pensamiento. Cuando hablamos, cuando alguien nos habla o simplemente cuando leemos, algo en la mente convierte las frases y palabras utilizadas en imgenes mentales, por tanto, cada palabra que transmitimos o nos decimos a nosotros mismos crean imgenes distintas. Por ejemplo, cuando alguien dice; me compre una casa vemos una imagen, en cambio si nos dicen me compre una casa de ensueo visualizaremos otra imagen muy distinta.

Como ya lo indicamos, las palabras generan imgenes mentales, por tanto, cuando hablamos con otra persona, de algn modo, proyectamos una pelcula en la mente del otro y lo que es ms importante, dichas imgenes que creamos determinarn la manera en que los dems van a reaccionar con nosotros.

Imagnense a un entrenador dicindole a un deportista, luego de una mala actuacin, lo siguiente No sirves para esto, eres un fracasado. Qu es lo que el deportista ver?. No cabe la menor duda que el tipo de imagen ser tan limitante que la pesadumbre y la desilusin acompaarn al deportista por un buen tiempo hasta que, finalmente, pueda ver algo distinto. La magia del Coaching es que permite provocar imgenes positivas en la persona y a la vez, aprender a gestionar sus propias imgenes fortalecedoras.

Actuamos segn la imagen personal en la que estamos Rodrigo Lpez, 2012

Los Coaches son especialistas en crear imgines, en su propia mente y en la de los dems, esperanzadoras y alentadoras. Por ello, para pensar en grande, segn Schwartz (1994), debemos usar palabras y frases que produzcan imgenes mentales grandiosas y positivas.

A continuacin vamos a entregar en la columna de la derecha, un listado de frases que provocan pensamientos gatilladores y poderosos de ptimos desempeos, en cambio en la columna de la izquierda, pensamientos pobres.

Frases que provocan imgenes negativas Frases que provocan imgenes positivas 1.- No tiene sentido seguir intentando 1.- An no estamos vencidos, que tal si 2.- Nunca ms. 2.- Voy a intentarlo de nuevo. 3.- No resultar. 3.- Djenme probarlo, resultar. 4.- La competencia tiene las de ganar. 4.- La competencia es fuerte, pero le falta

algo. 5.- Soy demasiado joven e inexperto. 5.- El hecho de ser joven (o viejo) es una

ventaja.


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Ahora te invitamos a realizar tu propio listado de frases negativas y positivas que hoy son significativas y tienen un alto impacto en tu actuar personal, como en el mbito profesional. Lo importante es que cuando conozco, y por tanto soy consciente, de mis limitaciones las puedo manejar de mejor manera y con perseverancia superarlas totalmente.

Frases Negativas Impacto concreto en tu desempeo 1.-

2.-

3.-

Frases Positivas Impacto concreto en tu desempeo 1.-

2.-

3.-


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UNIDAD 4

4 LA GESTIN DE LOS ESTADOS INTERNOS

Las personas tienen todos los recursos que necesitan para lograr lo que desean

Presuposicin PNL y Coaching

Cuntas veces nos ha ocurrido que por diversos motivos no logramos lo que ansiamos o queramos alcanzar, y no estamos hablando necesariamente de grandes cosas sino ms bien de los pequeos pero significativos objetivos o metas cotidianas que a diario regulan nuestra vida. Lamentablemente el no conseguir un objetivo es algo muy habitual y es, a la vez una experiencia compartida por muchas personas.

No obstante, creemos que lo significativo de esto y lo realmente importante no es detenerse a analizar el por qu ocurre aquello, sino ms bien, el cuestionarse el por qu no lograr lo que deseo se ha vuelto algo tan cotidiano en mi vida que no slo me acostumbr a ello, sino que adems, no soy consciente de mi capacidad de cuestionarlo en lo ms mnimo.

La capacidad de cuestionase a s mismo es el primer paso para el cambio y la propia transformacin positiva

Rodrigo Lpez, 2012

Desde el Coaching creemos que todos los recursos que una persona necesita estn disponibles en ella. Lo que ocurre es que algunas son ms conscientes de ellos que otras y por tanto, estn ms disponibles para ser usadas. Sin embargo, en nuestro inconsciente, entendido simplemente como todo aquello que nos es propio y con lo cual no se tiene un contacto habitual, encontramos un conjunto de experiencias, habilidades, aprendizajes y estrategias que en definitiva constituyen valiosos recursos que estn a nuestra entera disposicin.

Confiar en el inconsciente, segn McDermott y Jago (2005) significa confiar en s mismo. Trabajar con su inconsciente significa trabajar consigo mismo. Es la manera ms natural de estar integrado en mente, cuerpo y espritu. Por ello, le invitamos a descubrir en su interior una fuente de informacin de sano juicio y por qu no decirlo, de sabidura. Cuando ello ocurre vivenciamos una pequea muestra de nuestro potencial.


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Al construir este tipo de relacin consigo mismo y aprender a convertirla en una parte habitual, automtica y disciplinada de la vida, podr acceder de manera

fiable a recursos insospechados y, a la vez, se sentir una persona ms completa y ms a gusto consigo misma

McDermott y Jago, 2005 Con lo anterior, no cabe la menor duda que cada uno de nosotros puede ser su

propio Coach y desde ah gestar su propio camino de desarrollo y cambio.

Para el mbito deportivo el no conseguir objetivos es algo muy frustrante y condiciona de algn modo que el deportista prosiga su carrera a futuro.

Reflexiona las siguientes preguntas;

Consigues habitualmente el objetivo que te propones? Si la respuesta es positiva, Qu recursos gatillan tu logro?

Si la respuesta es negativa, Qu lo impide?

Las respuestas a las preguntas anteriores no son triviales sino, por el contrario, constituyen la clave para que un deportista pueda optimizar su desempeo.

Imagina lo relevante que sera para una persona descubrir que lo nico que le falta para lograr su objetivo es confiar ms en s misma, o bien que su gran obstculo sea que no se encuentra realmente motivada en lo que hace. La confianza y la motivacin constituyen valiosos ejemplos de los tantos recursos que poseen las personas y que de haberlos tenido en aquella oportunidad otro gallo cantara.

Quisiramos brevemente referirnos a la confianza como importantsimo recurso. Una persona que confa en s mismo inspira realmente a los otros. Inspirar confianza en los dems es dejar una impronta perdurable (McDermott, 2011) y a la vez, constituye un gran legado (que perfectamente puede ser tu gran legado). El eslogan Yes, we can (S, podemos) utilizado en la campaa electoral de Barack Obama en 2008 da cuenta de cmo gatillar la confianza en las propias capacidades del electorado favoreci su eleccin. Disponer realmente del recurso marca la diferencia entre lograr o no lograr el objetivo que deseas.

El tener la capacidad de controlar los estados internos es algo que las personas en parte ya conocen y saben hacer, de manera ms o menos consciente. Es importante partir del principio de la sinceridad de la vivencia de los estados internos, es decir, cuando vivimos un estado interno por ejemplo, la confianza, esta vivencia es legtima, inevitable y espontnea. A partir de lo dicho, estimamos indispensable expresar que cada uno de nosotros entonces provoca los sentimientos que experimenta, por tanto, soy adems responsable de sus consecuencias.

Lo anterior es clave como primer paso para transformarte en tu propio Coach pues permite una primera toma de consciencia de lo que falta y de la necesidad de otro paso ms. Un paso orientado a cmo provocar que ese recurso est presente y activo cuando se le necesite, es decir, que la confianza en s mismo o la motivacin personal se desplieguen favoreciendo una mayor efectividad en nuestro actuar.


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Al darnos cuenta del poder que significa el autoprovocarse el recurso necesario en el instante o situacin donde ms se requiera de l, no cabe la menor duda que la vida de las personas cambiara radicalmente.

Antes de continuar vamos a definir el concepto recurso, tal cual lo vamos a entender en el presente libro. Es un estado generado por experiencias positivas del pasado y que podemos recuperar y traer al presente para la obtencin de un objetivo determinado (Bertolotto, 2003). Es importante este punto pues el estado interno mide, en definitiva, la adaptacin de la persona al mundo, es decir, cmo se siente aqu y ahora, fsica y emocionalmente.

Para Bidot y Morat (1995), se distinguen dos grandes categoras de estados internos: los estados recursos y los estados limitativos.

Los estados recursos son los estados internos ptimos; son los ms apropiados para vivir una situacin. Por ejemplo, la confianza en s mismo para un deportista constituye en s un estado recurso que le permitir tener xito en su intervencin.

Los estados limitativos son los estados internos inapropiados para vivir una situacin. Por ejemplo, un deportista con miedo frenar toda posibilidad de xito en su actuar.

A partir de lo anterior, no se puede afirmar de manera absoluta que existan estados internos buenos o malos. Un estado puede ser realmente limitativo para una persona en cambio para otra es un estado recurso. Imagnese la siguiente situacin: una final del Master Series del ATP Tour, donde el jugador X toma la presin que siente como un recurso que le permite mejorar o mantener su buen juego, en cambio, el jugador Z frente a la misma presin empieza a perder concentracin y finalmente, su propio juego comienza a derrumbarse. Es fcil adivinar quin gana finalmente.

Los estados internos no son por tanto negativos o positivos, son simplemente posibilidades disponibles a cualquier sujeto, slo hay que elegir adecuadamente

Rodrigo Lpez, 2012

Dentro de cada estado, y en particular del estado recursos, encontramos una fuente inagotable de recursos a disposicin del sujeto, de los cuales somos conscientes en una mnima parte. El Coaching hace consciente esta situacin al sujeto y pone a su disposicin el desarrollo de tales potencialidades.

Segn, Lpez y otros (2011), los recursos internos pueden ser de cualquier tipo, fisiolgico, pensamientos, estrategias, experiencias de fuente externa como interna. A continuacin le presentamos un listado de recursos internos relevantes para conseguir sus propias metas.

Asertividad Espontaneidad Perseverancia Alegra Estabilidad Responsabilidad


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Amor Flexibilidad Sagacidad Capacidad Habilidad Seguridad Claridad Humor Sensualidad Concentracin Integridad Serenidad Confianza Inteligencia Simpata Creatividad Manualidad Solidez Curiosidad Motivacin Sutileza Dedicacin Optimismo Tolerancia Diplomacia Paciencia Tranquilidad

El sentido de totalidad cuando se experimenta por ejemplo, el recurso de la seguridad, est conformado por millones de simultneos procesos neurolgicos y que dan sentido a todas las reacciones fsicas, procesos intelectuales y emocionales. Lo importante de todo esto es que nuestra propia vida constituye en s una caja de recursos. La experiencia del vivir ha permitido al ser humano acumular todo lo que necesitamos para tomar decisiones, seguir avanzando y hacer mejor nuestra propia vida.

Por ello, uno de los desafos que debe enfrentar toda persona es cmo gestionar dicha caja de recursos y utilizar la herramienta necesaria (o recurso especfico) en el contexto y momento propicio. El adecuado manejo de los estados internos consiste, para Birot y Morat (1995) en:

Construir o encontrar sus estados recursos. No se puede hacer mucho si no disponemos conscientemente de los recursos personales disponibles en el inconsciente.

Aprender a disponer de ellos a voluntad. De muy poco sirve tener confianza (como recurso) si no puedo disponer de ella cuando realmente la necesite.

Descubrir sus estados limitativos y aprender a neutralizarlos. Todas las personas tienen algunos estados limitativos, el desafo es descubrirlos y trabajar en ellos. Superar la vergenza, como ejemplo de estado limitante, gatillar un nueva sensacin respecto al cmo miramos el mundo y sin duda, lograremos lo que estamos buscando.

Desarrollar recursos personales mediante la tcnica del anclaje

La Programacin Neurolingustica o PNL descubri la manera de acceder a los recursos positivos que estn en el inconsciente a nuestra entera disposicin, con el fin de ser utilizados en el momento en que se los necesite. A esta tcnica se le conoce como anclaje.

Estamos en un mundo lleno de experiencias del tipo estmulo respuesta y una gran parte del comportamiento humano responde a respuestas programadas inconscientemente. Quin no ha experimentado una sensacin especial y automtica frente a la sirena de un carro de bomberos? Quin no se ha llenado de recuerdos ante


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un olor o lugar geogrfico especfico?. Las vivencias gatilladas por el estmulo o ancla (internas o externas) es lo que definimos como anclaje y tiene el poder de provocar en las personas un estado especfico sin necesidad de pensarlo previamente.

Es importante tener presente que podemos elegir las asociaciones que queremos realizar (OConnor y Seymour, 2001) es decir, puede escoger cualquier experiencia de la vida que encuentre difcil, y decidir con anterioridad en qu estado psicolgico quisiera estar para enfrentarse con ella. Toda situacin que provoque desagrado e inclusive infelicidad, es posible enfrentarla mediante nuevas asociaciones de estmulos logrando, por tanto, una nueva respuesta mucho ms adaptativa. Esto es el importantsimo rol que tienen las anclas.

Si la vivencia recuperada es positiva la denominaremos recurso. Por lo mismo, el anclaje ofrece la posibilidad de hacerlos aparecer y que el recurso se encuentre plenamente disponible para la situacin o contexto que se vive. Se imagina lo potente que sera para un deportista que tiene el permanente desafo de mejorar su propio desempeo disponer de esta herramienta tan poderosa?.

Las anclas nos permiten obtener recursos para superar situaciones que nos bloquean. Disponer de un ancla especfica nos aporta una porcin extra de

recursos a nuestra disposicin en un momento dado Albert Serrat, 2005

En especfico un ancla, segn Serrat (2005), es un estmulo que nos provoca un estado de nimo concreto y, como consecuencia de ello, nos induce unas conductas determinadas. Las anclas tienen una relacin directa con los sistemas sensoriales o VAK (visual, auditivo y kinestsico) y con los recuerdos y creencias personales.

Es muy importante tener presente que las anclas deben realizarse en el momento preciso. Tal como lo muestra la siguiente figura (lvarez, 2000), a medida que el tiempo transcurre la experiencia emocional vara en intensidad incrementndose hasta llegar a una fase de meseta para decaer posteriormente. La efectividad del anclaje se relaciona con que el ancla se establezca un poco antes de que la experiencia emocional alcance su punto mximo (punto A), ya que si se implanta en un momento posterior (punto B), la intensidad de la experiencia asociada al ancla ser menor y por tanto, de menor eficacia.


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A continuacin te invitamos a realizar el siguiente ejercicio.

Ejercicio Prctico N1: Reconociendo mis propias anclas

Objetivo: Reconocer en mi propia vida las anclas que provocan una sensacin especfica.

Paso N1: Completa el siguiente cuadro identificando en l con una X el tipo de ancla, y en la columna sensaciones indica las consecuencias que tuvieron para t dichas anclas.

Experiencia Ancla visual ( )

Ancla auditiva

( )

Ancla kinestsica

( )

Sensaciones

1.- Voy en un auto y observo un radio patrullas en la prxima esquina.

2.- Entro en un hospital y siento olor a alcohol.

3.- Mi madre me sirve mi plato


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favorito y est exquisito.

4.- Mi contendor es mucho ms alto y fuerte que yo.

5.- Estoy en la tarima de los vencedores y escucho la cancin nacional.

Paso N2: Selecciona tres experiencias personales como deportista identificando en ellas el tipo de ancla (VAK) y reconoce las sensaciones y/o consecuencias que ellas tuvieron en la experiencia vivida.

Experiencia Ancla visual ( )

Ancla auditiva ( )

Ancla kinestsica

( )

Sensaciones / Consecuencias

1.-

2.-

3.-

Tal como ya lo indicamos existen anclas positivas (potenciadoras) y negativas (limitadoras). De nosotros depende el cundo, dnde y el para qu gatillamos las anclas que se necesitan para usar los recursos a plena voluntad.

Condiciones para lograr un anclaje eficaz

Para crear un anclaje potenciador es necesario considerar las siguientes condiciones:

La persona debe hallarse en estado totalmente asociado y congruente, con intervencin consciente y sentida de todo su organismo en el momento en que se le aplica el estmulo.


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El estmulo se debe entregar en el momento culminante de la experiencia. Si se anticipa o se atrasa la intervencin, el anclaje perder la intensidad que requiere.

El estmulo escogido debe presentarse de manera exclusiva, es decir, el cerebro debe reconocerlo como una seal inconfundible.

Finalmente, para su pleno funcionamiento hay que imitarlo exactamente.

A continuacin te invitamos a realizar los siguientes ejercicios que buscan aprender a crear anclajes potenciadores en t mismo y en los dems.

Trabajo Prctico N2: Aprendiendo a crear mis propios anclajes positivos

Objetivo: Aprender a generar anclas positivas en mi propia vida.

Instrucciones: Para la adecuada realizacin del presente ejercicio necesitas disponer de un lugar y tiempo completo para ti. Es fundamental la comodidad y el evitar las interrupciones propias de un lugar concurrido.

Paso N1: El ejercicio requiere de un da tranquilo (preferentemente un sbado, domingo o bien, un feriado). Se sugiere llenar la tina de bao a una temperatura adecuada, agregar sales minerales y ambientar el ejercicio con msica relajante. Tambin es posible su realizacin estando cmodamente acostado en la cama.

Paso N2: Al sumergirse en el agua se adopta una postura cmoda. Mientras se est escuchando la msica olemos el agradable aroma a las sales. Al estar gratamente relajado y con los ojos cerrados, se visualiza una situacin o paisaje agradable y relajante.

Paso N3: Se procura respirar a un ritmo ms pausado para aumentar la sensacin de relajamiento. Cuando esta sensacin est a punto de alcanzar su nivel ms alto, tomamos el dedo ndice de la mano izquierda con los dedos ndice y pulgar de la mano derecha y se hace una presin leve.

Paso N4: El ancla ya se estableci en el dedo ndice de la mano izquierda que debe ser reforzada en dos ocasiones ms, repitiendo el mismo ejercicio. A modo de comprobar la eficacia del anclaje presione (del mismo modo e intensidad) en diversas situaciones.

Nota del ejercicio anterior: El ancla del ejercicio es de tipo kinestsica, sin embargo, tiene el refuerzo de los otros cuatro sentidos. Del mismo modo como se instal un ancla de relajamiento en el ejercicio anterior, es posible instalar anclas que evoquen por ejemplo motivacin, perseverancia, disposicin, etc. Le instamos a generar en si mismo las anclas que necesite.

Trabajo Prctico N3: Aprendiendo a crear anclajes en otros

Objetivo: Aprender a generar anclas positivas en otros.


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Paso N1: El Coach determina en la mano del coachee el lugar donde se har el anclaje, la presin que resulte adecuada y una seal que har el coachee cuando est reviviendo las sensaciones y sentimientos. El coachee debe seleccionar, en su pasado, una experiencia agradable donde haya experimentado de una manera intensa xito, alegra, amor, etc.

Paso N2: El Coach le pide al coachee que reviva esa experiencia positiva detalladamente, como si lo estuviera sintiendo nuevamente. Es recomendable que el coachee lo haga con los ojos cerrados. El Coach gua al coachee diciendo Observa lo que observas, siente lo que sientes y escucha lo que escuchas en ese lugar. Qudate ah un momento y vvelo plenamente. Cuando ests experimentando plenamente la grata sensacin hazme la seal convenida (hacer guio con la cabeza, levantar la mano, etc.). En este punto el Coach debe observar las respuestas fisiolgicas del coachee mientras se conecta con la experiencia solicitada.

Paso N3: Cuando al coachee realiza la seal acordada, el Coach efecta el anclaje en la parte y con la presin convenida durante aproximadamente diez segundos.

Paso N4: El coachee abre los ojos y se le distrae unos instantes con preguntas como Qu almorzaste hoy? Qu esquipo de futbol te gusta? etc. Despus se le pide que cierre nuevamente los ojos y sin que piense en nada nuevo, debe realizar nuevamente el anclaje (apretarse en el mismo lugar y con la misma presin) verificando sensorialmente si reaparecen los sentimientos positivos provocados en la experiencia original. Si lo anterior no ocurre, se debe volver al paso N2.

Paso N5: De logar exitosamente el paso anterior se realiza una retroalimentacin sobre lo experimentado por el coachee. Si se estima pueden intercambiar roles.

El reencuadre y la resignificacin de conductas y sntomas

Desde el origen mismo de la humanidad el hombre ha buscado siempre el significado de las cosas. Sin embargo, muchas cosas pasan, pero mientras no le otorguemos un significado, las relaciones y la evaluacin de las posibles consecuencias no sern importantes para nosotros.

No hay nada bueno o malo, es el pensamiento el que lo hace as William Shakespeare

En el primer captulo dejamos claro que nuestros mapas no son ms que el resultado de nuestras interpretaciones de todo lo que ocurre en el mundo, interpretacin que sin duda depende de nuestro contexto cultural y educacin individual. No hay mapas parecidos, mejores o peores, sino simplemente ms adecuados y fortalecedores para una situacin y contexto especfico.

Dentro de esta lgica encontramos la tcnica del reencuadre, que junto con cambiar la vivencia emocional de la experiencia permite dar un nuevo marco a un hecho, lo que vara la experiencia (Thomas y Narea, 2001) vivida, es decir, trabaja con


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partes internas del individuo para buscar alternativas de accin que satisfagan la intencin positiva de la conducta que se quiere modificar.

En el reencuadre se presupone, segn Bertolotto (2003) que existe:

a) una parte que le hace hacer algo que usted no quiere hacer o b) una parte que le impide hacer algo que desea hacer.

Si encuentra dificultades en los casos b, trate de transformarlos en casos a.

Trabajar con la metodologa del Coaching implica muchas veces conectarse con el inconsciente de las personas, y en particular la tcnica del reencuadre solicita una mayor conexin. Es primordial confiar en el inconsciente, pues ah est la fuente de una gran cantidad de recursos poderosos para provocar los cambios deseados.

En la tcnica del reencuadre es posible encontrar dos tipos: de contexto y de contenido. El reencuadre de contexto se basa en la explicacin de que todas las conductas son tiles (y potencialmente beneficiosas) en algn contexto especfico que le da sentido. Por ejemplo, cuando un deportista plantea que es demasiado lento para hacer lo suyo refleja claramente un marco conductual general limitante que sin duda afectar su propio desempeo.

A partir del caso anterior, es posible indicar que este tipo de reencuadre comienza con frases caractersticas como por ejemplo: Estoy muy, me gustara dejar de. Por lo mismo, el modo de quebrar dicho reencuadre es autopreguntarse lo siguiente: Cundo esta conducta o forma de ser podra ser til? Con quin podra serme de utilidad? y Dnde este comportamiento podra serme de utilidad?.

El reencuadre de contenido trata de tomar la situacin que se est interpretando como negativa y provocar en ella un cambio de significacin que permitir una interpretacin positiva. Lo que se hace es llevar la situacin a un marco interpretativo ms general e interpretarla desde esa posibilidad o perspectiva. Por ejemplo, cuando un deportista se enfada ante la presin de la gente da cuenta de un significado de su experiencia poco potenciadora que afectar directamente sus propios resultados.

Ante un ejemplo como el anterior, es vital preguntarse a s mismo a modo de contrarrestar la influencia de este tipo de reencuandre lo siguiente: Qu otra cosa quiere decir esto? Cul es el valor positivo de este comportamiento en especfico? Cmo se podra describir de otro modo esta conducta?.

A continuacin te invitamos a realizar el siguiente ejercicio.

Ejercicio Prctico N4: Reencuadre en Seis Pasos

Objetivo: Identificar nuevas y poderosas alternativas conductuales.

Paso N1: Identificar el comportamiento o la respuesta que se desea cambiar: Quiero hacer X, pero no lo consigo. Quiero dejar de hacer X, pero no lo consigo. Por


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ejemplo, Quiero dejar de enfadarme cuando un ejercicio X me sale mal en los entrenamientos. Es importante que la persona especifique claramente el comportamiento o problema en cuestin.

Paso N2: Todo comportamiento tiene o ha tenido una intencin positiva, por ello es importante establecer una comunicacin con la parte que es responsable de esta conducta en particular. Anda a tu interior y pregntale a la parte tuya que genera esta conducta cul ser la seal con la que se comunicar contigo. Esta seal puede ser algo que sientas, oigas o veas. Una vez que la parte te haya respondido, pregntate Cul es la intencin positiva de dicho comportamiento?.

Paso N3: Establecer contacto con la parte creativa de la persona para buscar un mnimo de tres comportamientos que puedan cumplir dicha intencin positiva. Es importante tener presente que en las personas existen varias partes creativas. Si una de ellas no consigue todas las opciones es posible recurrir a otras. Al finalizar este paso es fundamental agradecer a esta/s parte/s por las opciones generadas.

Paso N4: Preguntar si se est de acuerdo con asumir la responsabilidad de utilizar estos tres nuevos comportamientos. Anda hacia tu interior y dile a la parte que cre el comportamiento no deseado si desea aceptar y utilizar las nuevas opciones de forma completa. Si cualquiera de las posibilidades no es aceptada vuelve al paso anterior. Finalmente, es vital agradecer a dicha parte la aceptacin y lo positivo que hace dicha parte en usted.

Paso N5: Comprobacin ecolgica mediante la siguiente pregunta: Hay algunas otras partes que pongan alguna traba u objecin a la utilizacin de los nuevos comportamientos?. Si existe alguna objecin regresa al paso N2 y repite el proceso con aquella parte.

Paso N6: La Proyeccin al Futuro permite imaginarse una posibilidad futura donde se lleva a la prctica los nuevos comportamientos visualizando adems, el logro de los objetivos. Dile a esa parte que generaba el antiguo comportamiento no deseado que utilice las tres nuevas opciones, o algunas de ellas, en una situacin ya conocida y que se d cuenta de cmo se siente al implementar esos nuevos comportamientos.

Situarse en el futuro deseado

Situarse en el futuro que deseamos es una forma muy fcil y didctica de entrenar la mente y generar a su vez, el o los recursos necesarios para completar con xito la experiencia que se enfrenta. La preparacin, y en particular las prcticas mentales, constituyen un modo o patrn conductual permanente entre los mejores de todas las especialidades, y el deporte no es la excepcin a la regla.

La preparacin mental se hace praxis en la imaginacin y, como el cuerpo y la mente forman parte de un nico sistema, prepara e instruye al cuerpo para la situacin real (OConnor y Seymour, 2001) que enfrentamos y queremos, sin duda, hacerlo lo


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ms exitosamente posible. Dar al cerebro imgenes de xito lo programa a pensar de ese modo y favorece el logro de objetivos.

Esta prctica de situarse en el futuro mediante ensayos mentales permite aprender de las experiencias diarias generando a la vez, nuevos comportamientos.

Nuestro cerebro funciona muy parecido a un computador, por tanto, si lo programas con imgenes positivas pensars de esa manera, permitindote al mismo tiempo, acceder con mayor facilidad al logro del objetivo que deseas. Aqu viene muy bien hacer un smil entre las expectativas que las personas tienen y las profecas auto cumplidas.

Reflexiona la siguiente pregunta;

Qu profecas auto cumplidas positivas o negativas han resultados ciertas (para ti) en t vida?

A continuacin te invitamos a desarrollar un breve ejercicio que pretende provocar en t y, de una manera fcil, nuevas posibilidades conductuales.

Ejercicio Prctico N5: Optimizando mis comportamientos

Objetivo: Generar nuevos y poderosos comportamientos.

Paso N1: En una situacin de plena tranquilidad, y especialmente antes de irse a dormir, identifica algo que hiciste muy bien durante el da y algo de lo que no ests muy agradado. Conctate plenamente con ambas situaciones respecto a lo que escuchas, observas y sientes en dichos momentos.

Paso N2: Una vez lograda la conexin con ambas, sal de ellas y pregntate: Qu es lo que podras haber hecho distinto (mejor)? Cules eran tus opciones reales en ambas situaciones? y Cmo se puede mejorar u optimizar la buena situacin vivida?.

Paso N3: Ahora mentalmente repite las experiencias en su totalidad, pero comportndote de manera diferente Qu cambi en general? Cmo te comportas? Qu piensas? Cmo se sientes?.

Armonizando m Juego Interior

A pesar que actualmente el Coaching ha evolucionado para ser aplicado a todos los mbitos del quehacer de las personas, an conserva el sello de sus orgenes deportivos, principalmente su nfasis en la accin, en el hacer de excelencia, en buscar ser el mejor teniendo como base un desarrollo personal y profesional y especialmente, en la importancia de los resultados concretos y medibles.


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Uno de los libros claves para entender el origen y desarrollo del Coaching es El Juego Interior del Tenis (The Inner Game of Tennis) de Tim Gallway. En dicho libro Gallway, como entrenador de tenis, aplic las ideas del Coaching Deportivo de forma tan atractiva que fueron influyentes en otros campos disciplinarios del desarrollo del Coaching.

En especfico, Gallwey se centra en el juego interno, en esa batalla que todo deportista tiene que librar con sus propias limitaciones individuales (OConnor y Lages, 2005) y cuyo resultado tiene directa relacin con el propio desempeo y el logro de los objetivos deseados. En concreto esto quiere decir que, en una competicin, el deportista enfrenta dos rivales. Uno de ellos es el oponente externo en el contexto donde se desarrolla la competencia. El otro y, sin duda muy importante, es el oponente interno, referido principalmente al manejo de sus propias limitaciones.

El deportista de lite vence en primer lugar en el juego interior para luego enfrentar y ganar al adversario externo. De esta experiencia existen muchos relatos de grandes campeones como los tenistas profesionales Ivan Lend, Pete Sampras o bien Roger Fereder como el ltimo gran campen que ha ocupado durante mucho tiempo el nmero uno de la lista de los mejores en su especialidad. Los tres se han caracterizado por mantener el vital recurso de la concentracin y equilibrio mental en las acciones que estn ejecutando.

Gallwey expresa que la mayora de los jugadores estn permanentemente hablando con ellos mismos, siendo las frases ms comunes en este particular dilogo las siguientes: Ahora corre y pgale con fuerza!, no puede ser, que imbcil soy!, siempre mantn los ojos en la pelota!, etc. Los ejemplos suman y siguen.

Te invitamos a realizar un breve ejercicio. Recuerda una experiencia deportiva donde entraste en un dilogo interno y responde sinceramente las siguientes preguntas:

Qu fue lo que te dijiste a t mismo? De qu modo influy en el resultado ese dilogo interior?

Si le preguntamos a los deportistas, la gran mayora respondera que habla consigo mismo mientras realiza la actividad deportiva y es en este punto donde encontramos dos entidades distintas. As que, segn Gallwey (2006), podramos decir que dentro de cada jugador existen dos Yoes. Un yo (Yo N1) para dar rdenes; el otro, el m mismo (Yo N2), parece ejecutar esta orden y posteriormente el Yo N1 evala esa ejecucin. Es por ello que el tipo de dilogo que se establezca entre ambas entidades afectar directamente el desempeo deportivo del sujeto.

Dentro de cada jugador, el tipo de relacin que existe entre el Yo N1 y el Yo N2 es el factor principal para determinar nuestra capacidad para convertir nuestro

conocimiento de la tcnica en accin efectiva Timothy Gallwey, 2006


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Entonces, la clave para optimizar el propio desempeo reside principalmente en mejorar la relacin de los Yoes, es decir, entre el Yo que habla o N1 y el Yo que acta o N2 que da cuenta adems, de las capacidades o talentos naturales.

No cabe la menor duda que el dilogo interno inapropiado puede ser el principal obstculo al xito, y como no podemos vivir sin nuestro yo interior y nuestras voces internas, lo mejor es modificar los discursos nocivos por otros positivos. En virtud de lo cual te invitamos a desarrollar el siguiente ejercicio prctico.

Ejercicio Prctico N6: Creando un discurso interno positivo

Objetivo: Crear un discurso potenciador que provoque conductas adecuadas al contexto.

Paso N1: Recuerda una conversacin donde surgieron a lo menos tres dilogos internos poco favorecedores y que afectaron negativamente tu desempeo. Es importante ser plenamente consciente de este proceso y darse cuenta de cmo cambi tu corporalidad, tus pensamientos y emociones en dicha experiencia.

Dilogos internos negativos Cambio concretos

Emociones:

Pensamientos:

Conductas:

Paso N2: A continuacin repite los dilogos internos negativos y cmbialos por un dilogo ms favorecedor y date cuenta del cambio conductual positivo que ocurrira en ti, si esos dilogos hubiesen estado presentes en la experiencia que recordaste en el paso N1.

Dilogo interno negativo Dilogo interno positivo Cambios en mi conducta Por ejemplo, Mi entrenador est siendo injusto, yo estoy dando el 100%.

Yo me prepar lo mejor posible y entregu un 100%.

Mantengo la calma, pues asumo que mi competidor lleg mejor preparado. Hoy aprend algo.

1.-

2.-


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3.-

Paso N3: Se sugiere que la prxima vez que vuelvan a surgir ideas internas "negras", cambiarlas mentalmente por otras adecuadas a la situacin y darnos cuenta de los cambios que ocurren en nosotros. Este punto queda de tarea y sirve como primer paso para ser capaces de gestionar nuestros propios dilogos internos positivos, pues sabemos que es imposible eliminarlos, pero efectivamente podemos limitar el impacto negativos de ellos. Mucha suerte.

UNIDAD 5

5 INTELIGENCIA EMOCIONAL Y

DESEMPEO DEPORTIVO

La habilidad de hacer una pausa y no actuar por el primer impulso se ha vuelto un aprendizaje crucial en la vida diaria

Daniel Goleman

El tema de las emociones ha sido difcil de tratar en nuestra concepcin tradicional de mirarlas. A partir del supuesto de que estamos conformados por substancias diferentes y separadas entre s, a saber, la mente y el cuerpo, nuestra concepcin tradicional de los seres humanos no ha sido capaz de decidir dnde se sitan las emociones. Son ellas un fenmeno corporal? Son mentales? Dnde las podemos localizar? La mayora de las respuestas a estas preguntas han sido insatisfactorias. Los fenmenos emocionales han estado escurrindose durante un largo tiempo.

No obstante lo anterior, quisiramos plantear que la manera enunciada de ver las emociones se encuentra totalmente agotada por tanto, se hace imprescindible otorgar el espacio que se merece al mundo de las emociones.

Una de las formas en que nuestro sentido comn ha tratado este dilema ha sido hablando de las emociones como asuntos del corazn. Al utilizar esta metfora se encontr una especie de terreno intermedio pues se admiti que las emociones no surgen de la cabeza, donde se supona que reside la mente. No obstante, nuestra concepcin


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tradicional nos vea como seres racionales siguiendo la ya conocida interpretacin propuesta por Descartes hace ms de 350 aos. Tal como ya lo examinramos, esta posicin considera al comportamiento humano como racional y las razones de la mente son la clave para darle sentido a la accin humana.

Desde el comienzo, sin embargo, hubo reacciones contrarias a esta concepcin del ser humano, especialmente en cuanto al papel asignado a nuestras emociones (los as llamados asuntos del corazn). Blaise Pascal, filsofo francs contemporneo de Descartes, nos advirti que el corazn tiene sus razones que la razn desconoce. Pero a pesar de la advertencia, el cartesianismo se convirti en nuestra forma predominante de comprender el fenmeno humano de las emociones.

Hoy sabemos que las emociones estn instaladas en nuestro ser, constituyendo una capacidad biolgica del organismo para dar respuesta a los cambios experimentados en el ambiente. Constituyen un mecanismo sofisticado para identificar y otorgar significado a las experiencias que se viven.

Es importante dejar claro que siempre se viven los hechos desde una emocin o mejor dicho desde un espacio emocional se opera el devenir de la existencia social (Flores, 2010). Cuando nos emocionamos construimos una realidad coherente a dicha emocin, sin embargo, lo ms importante es que bajo una emocionalidad se elaboran las estrategias y recursos para actuar u operar en ella. De ah la importancia entonces, de manejarse emocionalmente hablando, es decir, elegir inteligentemente nuestros estados y emociones.

Maneja conscientemente tus emociones, para que ellas no te manejen a ti. Salvador Carrin, 2001

Sostenemos que para comprender la accin humana debemos prestar cuidadosa atencin a nuestra vida emocional. Postulamos que nuestras emociones son determinantes bsicas de lo que podamos o no lograr en los dominios del trabajo, aprendizaje, sociabilidad, espiritualidad, y por qu no, en el mundo deportivo. Nuestra vida emocional es un factor crucial en cada esfera de la accin humana.

El aprendizaje que nos permitir ser capaces de escoger objetivamente y, por tanto ms consciente e inteligentemente nuestra respuestas emocionales, as como su calidad e intensidad, es la adquisicin y manejo de cinco habilidades emocionales esenciales. Estas capacidades, adaptadas de Carrin (2001), y agrupadas bajo la sigla AMCEP, son las siguientes:

(A)lternativa: Capacidad de responder a las situaciones de la vida, con la emocin apropiada.

(M)anifestacin: Habilidad de elegir la mejor forma de expresar las emociones.

(C)onduccin: Competencia para utilizar las emociones desagradables y, a partir de ellas, generar comportamientos tiles y emociones positivas.

(E)squivacin: Talento para protegernos de experimentar emociones que bloquean o limitan.


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(P)resencia: Disposicin para la atencin al aqu y ahora, siendo consciente de uno mismo.

El manejar adecuadamente las emociones no es una frase clich sino una necesidad real de quien desea asumir un rol ms activo de su propia vida con el fin, en el caso de un deportista, de optimizar resultados y lograr un mejor desempeo.

A continuacin te invitamos a realizar el siguiente ejercicio que se relaciona directamente con la aplicacin prctica del modelo AMCEP.

Ejercicio Prctico N1: Aprendiendo a escoger la emocin adecuada

Objetivo: Seleccionar la emocin ms adecuada al contexto donde participo.

Paso N1: Selecciona una experiencia por ti vivida en la que emocionalmente respondiste o actuaste de una manera errnea y por tanto, no lograste el objetivo que deseabas.

Paso N2: Responde lo mas sinceramente posible a las siguientes preguntas: Qu ocurri? Qu fue lo que especficamente hiciste? y Cul fue el resultado final?.

Paso N3: Aplica el modelo AMCEP en la experiencia por ti seleccionada utilizando la siguiente pauta.

Alternativa (A)

Manifestacin (M)

Conduccin (C)

Esquivacin (E)

Presencia (P)

Cul es la emocin ms

adecuada para la situacin ocurrida?, Porqu?

Analiza tu respuesta emocional en relacin con los siguientes factores: el lugar donde ocurri, el tiempo y el tipo de personas involucradas.

Cmo debiese haber sido mi

expresin emocional?,

Qu cambios hubiesen

ocurrido en m, en el otro y en la relacin establecida?

Analiza la congruencia

entre lo que a ti te pas y la finalidad deseada.

Qu pensamientos y/o conductas

adecuadas surgieron de la

experiencia vivida?

Analiza si la experiencia emocional

vivida gatilla en ti pensamientos

o bien conductas positivas.

Qu emocin agradable

surgi en ti en la experiencia

vivida? Pudiste

sortear con xito la

experiencia?

Qu tan consciente fui

de mi expresin

emocional y del impacto

que sta tuvo en los dems?,

si no lo fue, Qu tan

consciente soy ahora de mis emociones y del modo en

cmo las expreso?


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Paso N 4: A modo de retroalimentacin responde lo siguiente: Qu aprend del ejercicio? y Qu cambios debo realizar?.

La distincin entre estados de nimo y emociones

Cuando hablamos acerca de nuestra vida emocional a lo que coloquialmente llamamos emocionalidad podemos hacer una distincin entre dos clases de fenmenos: los estados de nimo y las emociones. Esto parece ser, a veces, una distincin muy sutil puesto que en algunos casos es difcil separar los unos de las otras.

Cada vez que experimentamos una interrupcin en el fluir de la vida se producen emociones. A stas, por lo tanto, las asociamos con los quiebres o interrupciones en nuestra transparencia. Al actuar, siempre lo hacemos dentro de un determinado espacio de posibilidades. Cuando un suceso nos conduce a modificar significativamente las fronteras de ese espacio de posibilidades o bien cuando nos vemos conducidos a variar nuestro juicio de lo que podemos esperar en el futuro, hablamos de un quiebre.

Un quiebre siempre implica un cambio en nuestro espacio de posibilidades. Lo que antes creamos posible puede no serlo ahora, y lo que antes suponamos improbable o incluso imposible puede tornarse probable o posible repentinamente. Cada vez que juzgamos que nuestro espacio de posibilidades ha cambiado, sea positiva o negativamente, estamos enfrentando un quiebre.

Tomemos un ejemplo. Cuando estamos conduciendo un auto, suponemos que hay ciertas acciones que estn dentro del margen normal de posibilidades, es decir, no hay cambios. Las luces del semforo pueden cambiar de verde a rojo; el auto se detiene si apretamos el freno; hacemos andar el auto al efectuar un cambio de marcha y acelerar, etctera. Esto es lo que llamamos el flujo normal de conducir, y a menudo lo hacemos de manera transparente, sin prestarle casi atencin. Todas estas acciones estn plenamente contempladas cuando manejamos un auto, y no existen cambios emocionales asociados a ellas.

Imaginmonos ahora que, al observar que la luz del semforo cambia a rojo, apretamos el freno y el auto no se detiene. Si esto sucede diramos que se interrumpi el flujo normal del conducir. Lo que era posible en el curso normal de los acontecimientos se ha quebrado y ha surgido un nuevo espacio de posibilidades. Si el auto no se detiene cuando apretamos el freno, aparece la posibilidad de un accidente. Por tanto, cada vez que hay un cambio dentro de nuestro espacio de posibilidades, se generan emociones.


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Tomemos otro ejemplo. Un directivo llama a un deportista para informarle que han aceptado su proyecto de desarrollo deportivo y que firmar un contrato considerado muy importante para su futuro. Este hecho hace que nuestro horizonte de posibilidades cambie. El futuro que tenemos por delante es ahora diferente. Nuevas emociones nos embargan como felicidad, optimismo, excitacin, etctera.

La emocin, por lo tanto, es una distincin que hacemos en el lenguaje para referirnos al cambio en nuestro espacio de posibilidades a raz de determinados acontecimientos (sucesos, eventos o acciones). Cuando hablamos de emociones, por lo tanto, podemos sealar las circunstancias particulares que las generan. Podemos identificar los acontecimientos que gatillan las emociones. Si esos acontecimientos desaparecen, normalmente las emociones que los acompaaban tambin desaparecern. Las emociones son especficas y reactivas. Los acontecimientos las preceden. Al referirnos a las emociones, a menudo estamos observando la forma en que la accin (o determinados eventos) modifican nuestro horizonte de posibilidades.

La relacin entre un acontecimiento y la emocin no deja de tener importancia. En este punto es relevante relatar el ejemplo que nos entrega el filsofo Michael Graves quien para ilustrar esta relacin entre la singularidad de un acontecimiento y la emocin, se imaginaba a alguien que sale un determinado da a caminar por la montaa. Mientras camina, observa la naturaleza, se detiene a mirar los rboles, a escuchar el cantar de los pjaros. A lo lejos, escucha tambin el ruido de un ro que corre entre unas rocas. A no mucho andar, en la transparencia del fluir de su recorrido, se pone a pensar en un posible proyecto susceptible de ser emprendido en los prximos das. Se siente contento, optimista; el proyecto lo excita; piensa que al concluirlo, podr abrir puertas que hasta ahora ha tenido cerradas. Sonre. En eso percibe una culebra que se desliza en direccin a l, en la mitad del sendero, a pocos metros de donde se encuentra. Sbitamente esa percepcin lo lleva a una experiencia diferente. Est asustado, el corazn le palpita ms aceleradamente; se pregunta si tendr suficiente espacio para esquivar la culebra o si le convendr retornar. El espacio de posibilidades en el que se encuentra ahora es otro. La emocin del miedo se ha apoderado de l.

En el ejemplo anterior, la emocin del miedo fue desencadenada por la percepcin de la culebra. Un evento gatill esa emocin. El especialista Renato Orellana (2010) haciendo una reflexin de esta idea expresa que si queremos entender una determinada emocin, es importante remitirla al acontecimiento desencadenante. Es preciso, parafraseando a Graves que cada uno vaya a buscar la culebra o bien sus culebras. Al identificarla, sabremos que si queremos evitar la repeticin de esa emocin, tendremos que sacar culebras del camino y si queremos que esa experiencia emotiva se repita, habr que asegurarse de colocarlas en l.

El reconocimiento, al hablar de emociones, entre la emocin y el acontecimiento nos permite no slo una determinada interpretacin de los fenmenos emotivos, sino tambin posibilidades concretas de accin. Esto es crucial para quien busca nuevas opciones comportamentales que gatillen o posibiliten nuevos espacios relacionales.

En efecto. Si nos preocupa, por ejemplo, el hecho de que alguien se suele poner frecuentemente de mal humor, cabe preguntarse por el acontecimiento o tipo de acontecimientos que producen este cambio emocional. Al identificarlo, abrimos con ello


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un espacio de diseo. Ahora podemos intervenir no slo en los factores que nos permiten intervenir en el mal humor desencadenado, sino tambin en la ocurrencia del tipo de evento que lo desencadena.

Los estados de nimo son una distincin muy diferentes de la distincin de emociones. Cuando hablamos de estados de nimo, nos referimos a una emocionalidad que no remite necesariamente a condiciones especficas y que, por lo tanto, normalmente no los podemos relacionar con acontecimientos determinados. Los estados de nimo viven en el trasfondo desde el cual actuamos. Ellos se refieren a esos estados emocionales desde los cuales se realizan las acciones que nos permiten interactuar con otros y con el mundo.

Como toda emocionalidad y, por lo tanto, al igual que con las emociones, los estados de nimo tambin estn asociados a un horizonte de posibilidades, a un espacio de acciones posibles. Sin embargo, en los estados de nimo la relacin entre posibilidades y accin se revierte. Hemos dicho que las emociones tienen que ver con la forma en que la accin modifica nuestro horizonte de posibilidades. Con los estados de nimo, por el contrario, nos ocupamos de la forma en que el horizonte de posibilidades en el que nos encontramos, correspondiente al estado de nimo en cuestin, condiciona nuestras acciones.

Independientemente del lugar donde nos encontremos y de lo que hagamos, los seres humanos siempre estamos en algn estado de nimo que, comnmente, no elegimos ni controlamos, simplemente nos encontramos en l. Una vez que estamos en un determinado estado de nimo, nos comportamos dentro de los parmetros que tal estado de nimo especifica en nosotros.

Por ejemplo si nos encontramos frente a una situacin de haber ganado una final deportiva, nuestro estado de nimo ser el de la disposicin positiva hacia el entorno, traducindose en dar entrevistas, regalar autgrafos, saludar al pblico, etc. En cambio si pierdo la final mi estado de nimo ser de negacin, ensimismamiento, por tanto, la conducta ser, salir lo ms rpido posible del entorno que rodea al evento deportivo.

En la medida en que la emocionalidad condiciona el actuar, condiciona igualmente la manera como somos mientras estamos en l. En este sentido, no podemos decir solamente que tenemos estados de nimo, tambin es verdad que nuestros estados de nimo nos tienen a nosotros es decir, estamos posedos por nuestros estados de nimo. Nos convertimos en nuestros estados de nimo. Los estados de nimo normalmente se adelantan a nosotros. Cuando los observamos, y por lo tanto somos conscientes de stos, ya estamos sumergidos en ellos.

Nuestro lenguaje, la forma en que hablamos sobre nuestros estados de nimo, a menudo esconde el hecho de que estamos posedos por ellos. Normalmente decimos, Me siento feliz o Estoy confundido. Al hablar de esta forma implicamos que el estado de felicidad o confusin es producido por el Yo. Que el Yo es quien siente la felicidad. El Yo toma precedencia. No nos damos cuenta de que lo cierto es precisamente lo contrario.


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Es el estado de nimo el que siente, es el estado de nimo el que est constituyendo el Yo en su forma presente de ser. Significa esto que no hay nada que podamos hacer respecto a nuestros estados de nimo? Debemos resignarnos a los estados de nimo que nos poseen? De ningn modo.

Postulamos que al cambiar el observador de estados de nimo que somos, abrimos posibilidades de accin que normalmente permanecen escondidas al observador que se limita por el sentido comn. El ser capaces de observar los estados de nimo en cuanto tales, nos permite intervenir en su diseo. Uno de los objetivos de este captulo es generar en el lector un nuevo observador de estados de nimo y desarrollar su capacidad para intervenir en los estados de nimo en los que nos encontramos inmersos y disear las acciones capaces de cambiarlos.

Existe una estrecha relacin entre emociones y estados de nimo. Por un lado, lo que empez como una emocin ligada a un determinado acontecimiento, puede a menudo convertirse en un estado de nimo si permanece con la persona el tiempo suficiente y se traslada al trasfondo desde el cual ella acta. Esto pasa normalmente con los acontecimientos importantes. Por ejemplo, cuando iniciamos un romance o cuando fallece alguien cercano a nosotros. Estas experiencias nos colocan en una emocionalidad o espacio de posibilidades que se manifestar en el conjunto de nuestro actuar: en la casa, en la oficina, con los amigos, etctera.

La inteligencia emocional en el terreno deportivo


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Despus de ms de 10 aos trabajando en terapia, formando nios y jvenes o bien capacitando adultos, creemos haber encontrado un conjunto de habilidades que pueden ser las que marcan la diferencia entre una persona competente de una que no lo es o mejor dicho, entre un deportista destacado y otro ms bien discreto.

Evidentemente que no nos estamos refiriendo a los aprendizajes que otorgan un diploma Universitario, ni el conjunto de aos de experiencia laboral, nos referimos a la capacidad individual de manejar adecuadamente los propios estados internos y su implicancia directa en la propia vida. Es este punto el que definitivamente marca el xito de las personas en trminos de alcanzar un grado ptimo de competencia, especialmente los aprendizajes referidos al mbito emocional.

Es por lo anterior que surge la necesidad de aprender y desarrollar en el propio sujeto su inteligencia emocional con el fin de disfrutar con mayor plenitud y riqueza de las posibilidades que la vida entrega.

Las emociones son reacciones que llenan nuestro cuerpo de energa y por lo tanto, nos predisponen a la accin. Qu accin? Depender de la emocin que se haga presente en nosotros. S bien no existen emociones positivas o negativas (lo positivo o negativo es la accin que decidimos llevar a cabo), en repetidas ocasiones esta energa s nos mete en problemas, por ejemplo, reaccionamos de manera equivocada; nos hacemos expulsar, discutimos con el entrenador, abandonamos mental/emocionalmente el partido, nos enfocamos solo en lo errores que cometemos, etc.

Las emociones pueden ser factores que nublan la visin clara de los hechos y no cabe la menor duda que esto puede ser contraproducente para los deportistas o entrenadores.

El Dr. Paul Ekman cree que reconocer los obstculos que se presentan en la bsqueda de un equilibrio emocional es una de las formas ms eficientes de sobrepasarlos. Uno de estos obstculos y al que Ekman se refiere en su libro Emotional Awareness, es el guion emocional (emotional script).

En el mismo orden de ideas, muchos de los deportistas con los que hemos trabajado llevaban este guin al terreno deportivo; en diferentes competencias, torneos o entrenamientos y ante situaciones similares (una falta, que les roben una bola, el


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reclamo de un compaero, un error garrafal, etc.) siguen el mismo guin o patrn de comportamiento una y otra vez.

Por ejemplo, si a un tenista le roban (al menos desde su punto de vista) un punto importante en un partido de semifinal de un torneo ATP, le provoca ira (contra el rbitro o el rival), que se convierte en frustracin, llega a la desesperacin y finalmente termina botando el partido. En un prximo torneo y ante una situacin parecida, el tenista reacciona exactamente de la misma manera. En otras palabras ha generado un disparador emocional que le lleva a repetir el guion.

Lo anterior nos pasa una y otra vez (a veces en un mismo da) y no slo dentro del terreno deportivo. A pesar de que muchos (no todos) nos percatamos de que estamos reaccionando de forma inadecuada, no sabemos cmo desarrollar un antdoto ante esta situacin.

Reflexiona las siguientes preguntas:

Como deportista Cul es mi guin emocional que me impide lograr lo que quiero?

Qu tan consciente soy de su influencia en mi comportamiento deportivo?

De qu modo me hago cargo de l?

En base a la frmula para mejorar nuestra inteligencia emocional (motivacin + prctica + retroalimentacin + un honesto deseo por hacerlo + un enorme compromiso) les proponemos el siguiente ejercicio, el mismo que aplicamos con los deportistas con los que trabajamos.

Ejercicio Prctico N2: Entrenando mi Inteligencia Emocional (IE)

Objetivo: Aprender a responder de una manera emocionalmente ms adecuada ante situaciones personales y/o profesionales.

La prxima vez que te encuentres afectado/a emocionalmente por una situacin (en una competencia o en un entrenamiento) o una persona (un compaero, un rival, entrenador o alguno de mis padres) que continuamente te genera las mismas emociones


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(molestia, desesperacin, disgusto, enojo, ira, tristeza, decepcin, desprecio, etc.), espera a tener la cabeza fra y sigue los siguientes pasos:

Paso N1: Primero pregntate Qu fue lo que provoc esa emocin que no fue agradable para ti? y Por qu no lo fue?.

Paso N2: Analiza el guion emocional que seguiste. Todas las acciones que llevaste a cabo a raz de la emocin (gritar, azotar la raqueta, reclamarle al rbitro, engancharte con un rival, cometer una falta con exceso de fuerza, etc.).

Paso N3: Ahora escribe en el espacio dado a continuacin tu propio guin, no el que te dict la emocin, sino cmo piensas que deberas haber reaccionado o cmo te gustara reaccionar en una futura situacin similar.

Paso N4: La prxima vez que ests ante una situacin similar (ya tendrs un respaldo) busca seguir este guion.

Nota aclarativa: Si bien las emociones pueden aparecer en tan solo una fraccin de segundo y nuestro cerebro suele hacer una evaluacin automtica que, segn Goleman (2000), discurre a tal velocidad que no somos consientes de ella y slo podemos advertir sus efectos cuando ya estamos asustados, enfadados o tristes, es decir, despus pero no antes de la emergencia de la emocin. El tener una gua nos invita a recapacitar o pisar el freno sobre la accin que estamos llevando o por llevar a cabo.

Existe la posibilidad de cobrar conciencia de lo que est sucediendo en un momento posterior, cuando empezamos a hablar, o experimentamos la tensin de

nuestro cuerpo conciencia de la accinnos proporciona una tercera posibilidad de intervencin para controlar nuestras emociones e interrumpir, o

modificar, nuestros hbitos emocionales Daniel Goleman, 2000


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Somos conscientes de que muy probablemente las primeras veces no seremos capaces de seguir nuestro guin emocional adecuado. No obstante, te invitamos a volver a hacer este ejercicio. El simple hecho de hacerlo (y repetirlo) ya nos est ayudando a desarrollar nuestra inteligencia emocional. La constante prctica nos acercar a lograr no ser vctima de la emocin y a encontrar el equilibrio necesario.

El estado emocional de la rabia y el enojo en el deporte Qu hay que observar?

Fisiolgicamente, la ira llena de hormonas nuestro sistema, principalmente de adrenalina, el ritmo cardaco se eleva y la sangre fluye rpidamente a las manos, lo que facilita una accin como golpear a alguien o tomar un arma. Cuando grandes cantidades de adrenalina se hacen presentes nos dejamos llevar por los instintos y no por la razn (perdemos la cabeza). Sin embargo, en un contexto donde nuestra vida est en peligro constituye una respuesta adecuada (adaptativamente hablando).

Es importante mencionar que las emociones pueden ser factores que nublan una visin clara de los hechos, algo que sin duda es contraproducente en el terreno deportivo, donde el equilibrio entre la razn y la emocin es fundamental para alcanzar los objetivos.

Cmo podemos llegar a intervenir para que esta emocin no afecte negativamente nuestro rendimiento?

La mala noticia, es que lo anterior no es nada sencillo. Las emociones pueden aparecer en tan solo una fraccin de segundo y nuestro cerebro suele hacer una evaluacin automtica. El momento en que cobramos conciencia se produce entre medio segundo despus de que la emocin haya aparecido por ello hablamos de una evaluacin automtica. Dicho en otras palabras, nos hallamos a merced de una emocin aun antes de haber advertido su presencia (Goleman, 2000).

La buena noticia, es que con arduo trabajo y esmero, es posible. El estudio de la emocin de la ira ha arrojado una importante cantidad de temas a considerar. Desde un punto de vista muy general, una de las funciones de la ira es la de eliminar o quitar un objeto o persona que se interpone en nuestro camino.


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Un ejemplo de lo anterior puede ser nuestro propio rival el cual se transforma en un obstculo (el rival, su desempeo, su actitud, etc.) se interpone entre nosotros y nuestro objeto de deseo (por lo general, la victoria) y entonces poco a poco (o no tanto) empieza a llegar la ira a nuestro sistema y entonces dejamos de percibir la realidad de las cosas; perdemos la cabeza, nuestra visin se nubla, se pierde la claridad mental y quedamos a merced de la emocin.

Lo que sigue puede ser lo que sea; azotar la raqueta, hacer una falta innecesaria o bien golpear o insultar al adversario, etc. por consiguiente fuimos capaces de arruinar toda la competencia; en este punto la emocin se torna en un estado de nimo.

El gran problema en ese momento es que enfocamos nuestra atencin en el enojo y olvidamos nuestro rendimiento, nuestros objetivos, y la estrategia a seguir.

Es ah cuando debemos ser capaces de pisar el freno y entonces preguntarnos:

Por qu estoy enojado?,

Esta emocin me ayud

Coaching Deportivo Capitulo2 2013

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