Culturas actuales de mexico

103
Aguacatecos, (Chiapas). Chiapas y Guatemala tienen una historia común y son el hábitat de diversos pueblos mayenses que ocupan un virtual territorio continuo que comprende el sur de México, Guatemala y Honduras Británica. La zona maya ha sido uno de los grandes centros de población y cultura indígena de Mesoamérica, ocupada por pueblos agricultores de maíz, organizados en torno a sus comunidades. Los chujes, mames, ixiles, kanjobales y jacaltecos provienen de la región guatemalteca conocida como los Altos Cuchumatanes en el departamento de Huehuetenango. En esta región también se encuentra el municipio de Aguacatán, de donde son originarios los hablantes de aguacateco. Los quichés y cakchiqueles son originarios del medio oeste guatemalteco, un área que comprende los departamentos de Totonicapan, Sololá y Chimaltenango, casi todo el de Sacatepequez y sectores de El Quiché, Quetzaltenango, Suchitepequez y Baja Verapaz. Por su parte, los kekchíes ocupan el departamento de Alta Verapaz. El teco es una lengua que se habla en el sureste de Chiapas, en los alrededores de Motozintla y Mazapa de Madero y en Textitlán y Cuilco, en Guatemala. En estas regiones la población indígena, organizada en municipios, mantiene su propia organización política y religiosa, su santo patrón y costumbres distintivas. La economía indígena, con base en la agricultura de subsistencia, se inserta en una red de comercio regional. Desde el siglo XV, Chiapas era una provincia de la capitanía general de Guatemala, pasando a ser una intendencia autónoma a partir de 1790, con las reformas borbónicas. En 1842 la provincia de Chiapas se incorpora a la República Mexicana, pero los límites entre Guatemala y México se fijan hasta 1882. La historia de los pueblos que habitan la zona fronteriza entre estas dos naciones empieza a diferenciarse significativamente a partir de la integración a sus respectivos estados nacionales, hacia finales del siglo XIX. 1

Transcript of Culturas actuales de mexico

Page 1: Culturas actuales de mexico

Aguacatecos, (Chiapas).

Chiapas y Guatemala tienen una historia común y son el hábitat de diversos pueblos mayenses que ocupan un virtual territorio continuo que comprende el sur de México, Guatemala y Honduras Británica. La zona maya ha sido uno de los grandes centros de población y cultura indígena de Mesoamérica, ocupada por pueblos agricultores de maíz, organizados en torno a sus comunidades.

Los chujes, mames, ixiles, kanjobales y jacaltecos provienen de la región guatemalteca conocida como los Altos Cuchumatanes en el departamento de Huehuetenango. En esta región también se encuentra el municipio de Aguacatán, de donde son originarios los hablantes de aguacateco. Los quichés y cakchiqueles son originarios del medio oeste guatemalteco, un área que comprende los departamentos de Totonicapan, Sololá y Chimaltenango, casi todo el de Sacatepequez y sectores de El Quiché, Quetzaltenango, Suchitepequez y Baja Verapaz.

Por su parte, los kekchíes ocupan el departamento de Alta Verapaz. El teco es una lengua que se habla en el sureste de Chiapas, en los alrededores de Motozintla y Mazapa de Madero y en Textitlán y Cuilco, en Guatemala.

En estas regiones la población indígena, organizada en municipios, mantiene su propia organización política y religiosa, su santo patrón y costumbres distintivas. La economía indígena, con base en la agricultura de subsistencia, se inserta en una red de comercio regional.

Desde el siglo XV, Chiapas era una provincia de la capitanía general de Guatemala, pasando a ser una intendencia autónoma a partir de 1790, con las reformas borbónicas. En 1842 la provincia de Chiapas se incorpora a la República Mexicana, pero los límites entre Guatemala y México se fijan hasta 1882.

La historia de los pueblos que habitan la zona fronteriza entre estas dos naciones empieza a diferenciarse significativamente a partir de la integración a sus respectivos estados nacionales, hacia finales del siglo XIX.

Sin embargo, esto no es obstáculo para las migraciones transfronterizas que se siguen presentando desde fines del siglo XIX y a lo largo del XX y que involucra movimientos de los pueblos chuj, kanjobal, jacalteca, mam y cakchiquel, fundamentalmente.

La migración transfronteriza más reciente se produce a partir de 1981 cuando miles de habitantes del noroccidente guatemalteco llegan a México huyendo de la violencia de los regímenes militares de su país.

Esta población es considerada por el gobierno mexicano y organismos internacionales como refugiada. Entre 1984 y 1985 numerosas comunidades son reubicadas en Campeche y Quintana Roo por las autoridades mexicanas.

1

Page 2: Culturas actuales de mexico

Debido a estos movimientos de población, a partir del XI Censo de Población y Vivienda del INEGI de 1990 aparecen nuevos grupos mayas. Es el caso de los cakchiqueles, ixiles, kekchíes y quichés. La lengua cakchiquel o cachiquero, perteneciente a la familia quiché, en el XII Censo General de Población y Vivienda 2000, contó con 210 hablantes; los ixiles tuvieron 90, mientras que los kekchíes hablantes de la lengua kekchí, conocida también como k’ekchí, queckchí o quetzchí, estuvieron representados con 677 individuos. Los hablantes de quiché fueron 246, los aguacatecos tuvieron 23 y los tecos o tectitecos no aparecen registrados, aunque en el XI Censo contaron con 107 hablantes.

Amuzgos. (Oaxaca - Guerrero)

Al parecer cada localidad amuzga tiene su manera de autonombrarse. Los Amuzgos de la localidad de San Pedro Amuzgos se llaman a sí mismos Tzjon Noan que en su lengua significa «pueblo de hilados, hilo suave o mecha».

Las lenguas amuzgas derivan del tronco otomangue y también se les conoce con los nombres de tzhonoa, tzoñ’an, tsañcue o nañcue.

Su territorio abarca una superficie aproximada de 3 000 km, en municipios de la región limítrofe, entre los estados de Guerrero y Oaxaca.

La población amuzga se concentra en los municipios de San Pedro Amuzgos y Santa María Ipalapa en Oaxaca y, Xochistlahuaca y Ometepec en Guerrero. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 41 455 hablantes de amuzgo a nivel nacional, la mayoría de ellos (34 601 hablantes) habitaba en el estado de Guerrero.

Su hábitat se caracteriza por ser una región cálida de vegetación exuberante y de topografía accidentada, cuya elevación fluctúa entre los 200 y 900 msnm. Es una región surcada por diversos ríos y corrientes de agua. El clima es cálido subhúmedo con lluvias de junio a noviembre y una temperatura media anual de 25° C.

La flora es de tipo tropical subcaducifolio en donde se encuentran pochote, guarumbo, cornezuelo, guamúchil y diversas especies de palmas. Practican una agricultura basada en el cultivo de maíz, frijol y chile; en menor escala siembran ajonjolí, cacahuate, calabaza, café y caña, así como, frutas tropicales como el plátano, aguacate, melón, mango y algunos cítricos.

Comparten un territorio en donde conviven con triquis, mixtecos, chatinos, nahuas, tlapanecos y mestizos, configurando una región interétnica. Los mestizos residen en las comunidades amuzgas, donde son mayoría.

Los amuzgos han conservado su indumentaria tradicional, elaborada en el telar de cintura. Las mujeres visten un enredo blanco o azul con bordados en la orilla. Se acompaña de un huipil tejido con figuras antropomorfas, zoomorfas o geométricas en vistosos colores cuyo detalle varía de un pueblo a otro. Las mujeres producen además de su vestimenta, rebozos y manteles para el mercado.

2

Page 3: Culturas actuales de mexico

Las principales actividades económicas de los Amuzgos son la agricultura de subsistencia y el trabajo artesanal. Elaboran objetos de barro como ollas, comales, jarras y cazuelas; de ixtle, morrales y hamacas y cestería de bambú y palma.

En el trabajo mantienen relaciones de solidaridad como la «mano vuelta» que son agrupaciones espontáneas de ayuda solidaria entre parientes y amistades para tratar de resolver problemas inmediatos como mayordomías, casamiento, bautizo, cultivos y construcción de sus viviendas.

Las comunidades tienen un cuerpo de autoridades tradicionales entre las que destacan el consejo de ancianos.

También organizan un ciclo ritual de fiestas en torno a los santos patronos de los pueblos a cargo de mayordomos.

Sobresalen las fiestas dedicadas a San Pedro, en San Pedro Amuzgos; San Miguel en Xochistlahuaca; Santa María en Ipalapa y San Sebastián en Cosoyoapan, a estas fiestas se suma la celebración del carnaval, semana santa, todos santos y navidad.

Chatinos. (Oaxaca).

Los chatinos se llaman a sí mismos kitse cha’tnio. Los términos cha’tnio, cha’tña y tasa’jnya son variantes usadas en distintas comunidades para designar a su propia lengua que significa "palabra trabajosa", "palabra difícil" o "trabajo de las palabras".

El territorio chatino se encuentra enclavado en la sierra madre del sur, en el estado de Oaxaca. Se extiende de suroeste a noroeste en el distrito de Juquila pasando de la costa a las zonas montañosas de la sierra. La población chatina se concentra sobre todo en los municipios de Santos Reyes Nopala, San Juan Quiahije, San Miguel Panixtlahuaca, Santiago Yaitepec, Santa Cruz Zenzontepec, San Juan Lachao, Santa María Temaxcaltepec, Santa Catarina Juquila y Tataltepec de Valdés.

En el XII Censo General de Población y Vivienda del año 2000, se registraron 40,004 hablantes de chatino en el estado de Oaxaca y 40,722 a nivel nacional, aunque estas cifras no incluyen a la población menor de 5 años. La lengua chatina pertenece a la familia chatino-zapoteca del tronco lingüístico otomangue y los estudiosos señalan que se separó del zapoteco hace alrededor de 24 siglos. También se le conoce con los nombres de cha’ cña, ne’ cha’ cña, cha’tñan o tsa’ jñan.

El territorio chatino comprende tres zonas ecológicas: las tierras bajas tropicales con una vegetación de selva y manglares, en donde predomina la ganadería y la agricultura comercial; las tierras medias que van de los 800 a los 1,600 msnm, pobladas por bosques caducifolios, en donde se asientan la mayoría de las poblaciones chatinas y se cultiva el café y las tierras altas donde prevalecen los bosques de pino-encino. Por las características del territorio, la región chatina es

3

Page 4: Culturas actuales de mexico

una zona rica en recursos forestales, agrícolas y ganaderos, aunque su explotación está en manos de población mestiza.

La agricultura indígena es de temporal y además de la milpa dedican una pequeña porción del territorio a la producción de café. Para complementar sus ingresos, los varones migran temporalmente a las fincas del distrito de Juquila para el corte de café o a la costa donde se emplean como jornaleros en las plantaciones agrícolas.

Sus autoridades tradicionales están organizadas en un sistema de cargos con funciones civiles y religiosas. La máxima autoridad es el consejo de ancianos que cuenta con la mayor autoridad moral en el pueblo.

Entre sus deidades destacan la Santa abuela, el Santo padre dios, la Santa madre tierra, la Santa madre luna, los dioses del agua, del viento, de la lluvia, de la montaña, las Santas ciénegas y el Santo fuego. Hay alrededor de 40 fiestas patronales en la región, aunque la celebración regional más importante es en honor a la Virgen de Juquila el 8 de diciembre.

Chichimeca Jonaz. (San Luis Potosí - Guanajuato).

Los chichimecas jonaz utilizan la palabra úza, "indio", y su plural ézar, "indios" para referirse a sí mismos y, en general, a cualquier persona indígena. Solamente cuando hablan español emplean para autonombrarse las palabras chichimecas, chichimecas, chimecas o meco.

Habitan en una comunidad del municipio de San Luis de la Paz, en el estado de Guanajuato, en un poblado que está a 2,070 msnm. Ellos nombran a este lugar rancho uza (rancho indígena) o misión de chichimecas. La carretera del municipio divide el asentamiento en dos partes, al poniente la misión de abajo y al oriente la misión de arriba.

Para el año 2000, en el XII Censo General de Población y Vivienda, se reportaron 1,641 chichimeca jonaz a nivel nacional, de los cuales 1,433 hablantes residían en el estado de Guanajuato, mientras que 115 habitaban en San Luis Potosí. Su lengua pertenece a la familia otopame del tronco otomangue y está estrechamente emparentada con las lenguas pames.

La comunidad ézar se encuentra en una zona semidesértica con un clima semiseco. La temperatura media anual oscila entre los 14 y 20° C. Las especies de la flora corresponden al matorral desértico de hojas pequeñas. Es notorio el deterioro ecológico de la zona ya que han desaparecido muchos cactus, mezquites y nopales para dar paso a las tierras de cultivo. Por otra parte, la cacería extinguió algunas especies como el pavo silvestre, que se cazaba todavía a principios de siglo.

Los ézar realizan trabajos como jornaleros, molineros, regadores o apicultores en las comunidades y ranchos vecinos. Practican una agricultura de autoconsumo, cultivando maíz, frijol, chile, calabaza, jitomate, camote y papa. El maguey es cultivado comercialmente para la extracción de aguamiel y quiote.

4

Page 5: Culturas actuales de mexico

Sus casas habitación son de adobón y teja o de ladrillo con colado de cemento. El piso es de tierra. La antigua vivienda tradicional estaba hecha de piedras apiladas, sin ventanas, con techo de dos aguas cubierto de palma o pencas de maguey, prácticamente ha desaparecido.

Las prendas tradicionales como los quexquémitl, una especie de abrigos de palma y ciertos aditamentos de cuero, se dejaron de usar desde principios de siglo. Actualmente visten a la manera del campesino mestizo. Las fiestas más importantes para la comunidad son las de San Luis Rey de Francia y de la Virgen de Guadalupe. El compromiso de la organización de las fiestas lo heredan las familias. Un elemento importante en éstas, es la danza chichimeca, que se representa en tres capillas. Los componentes sonoros son el violín, la tambora y los machetes que entrechocan; los combatientes suman entre 15 y 45 personas.

Chinantecos. (Oaxaca).

Los chinantecos se llaman a sí mismos tsa ju jmí, que significa "gente de palabra antigua", aunque cada pueblo posee un apelativo propio que va precedido de la palabra tsa, dsa o alla que significa gente.

Los especialistas señalan que no existe una sola, sino varias lenguas chinantecas: de Ojitlán, de Usila, de Quiotepec, de Yolox, de Sochiapan o Jaujami, de Palantla, de Valle Nacional, de Lalana, Chinanteco de Latani y de Petlapa. Son idiomas tonales que forman una familia derivada del tronco otomangue.

El XII censo general de población y vivienda del año 2000, registró 133,374 hablantes de lenguas chinantecas a nivel nacional, de los cuales 107,002 personas se localizaban en el estado de Oaxaca; 19,602, en Veracruz; y 2,461, en el Distrito Federal.

La Chinantla se encuentra en la parte noreste del estado de Oaxaca y la población chinanteca se concentra en 14 municipios: San Juan Bautista Tlacoatzintepec, San Pedro Sochiapan, Ayotzintepec, San Felipe Usila, San José Chiltepec, San Lucas Ojitlán, Santa María Jacatepec, San Juan Bautista Valle Nacional, San Juan Lalana, San Juan Petlapa, Santiago Jocotepec, San Pedro Quiotepec, San Pedro Yolox y Santiago Comaltepec.

La Chinantla es una región separada de las áreas vecinas por cadenas montañosas, ubicada dentro de la cuenca del Río Papaloapan, sobre las laderas de la Sierra Madre Oriental, y nutrida por un gran número de vías fluviales. Según sus características ecológicas, se divide en dos subregiones: la alta y la baja. La primera forma parte de la Sierra de Juárez, tiene clima templado y una vegetación de bosques de pino-encino; la segunda se encuentra en la cuenca y su vegetación corresponde casi por completo a la de una selva alta perennifolia.

Las características naturales del territorio han determinado el desarrollo de una riquísima variedad de flora y fauna, aunque las tierras son de baja calidad pues sólo el 5% puede considerarse dentro de las de humedad de primera, 15% son incultivables y 80% son de temporal de segunda. Además de la agricultura de subsistencia, se producen cultivos comerciales como arroz, caña de azúcar, café, tabaco, y se practica la pesca y la cacería. Actualmente en la región existen problemas de

5

Page 6: Culturas actuales de mexico

contaminación de las aguas, de tala inmoderada por parte de la Papelera Tuxtepec y otras, derivadas de la construcción de la Presa Cerro de Oro, que implicó la inundación de sus mejores tierras agrícolas y la reubicación de la población en un medio desconocido, con terrenos de la peor calidad.

Las mujeres chinantecas conservan su indumentaria tradicional en Usila y Ojitlán. Ellas tejen sus huipiles en donde plasman la historia de sus antepasados y los cubren de símbolos y signos que reflejan sus costumbres, su cosmovisión y su relación con la naturaleza. Debajo del huipil se lleva un cotín o medio fondo.

Las principales fiestas que se celebran en la chinantla son la Semana Santa, Todos Santos y las fiestas del santo patrono de cada uno de los pueblos.

Chochos / Popolocas Chochos. (Oaxaca).

Los chochos, chocholtecas o chochones se llaman a sí mismos runixa ngiigua, que significa «los que hablan el idioma». Habitan en el estado de Oaxaca, en una microrregión formada por trece municipios del Distrito de Coixtlahuaca y cuatro de Teposcolula.

Si bien el chocho es una lengua de la familia popoloca del tronco otomangue, también es conocida como chocholteca o chuchón, en algunos casos se le ha agrupado con el popoloca tomándolas como una sola lengua, el chocho-popoloca, aunque algunos lingüistas consideran que en realidad se trata de dos idiomas que corresponden a dos grupos étnicos distintos que habitan en un territorio continuo.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000), sólo registró 524 hablantes de chocho en Oaxaca, concentrándose principalmente en los municipios de Santa María Nativitas, San Juan Bautista Coixtlahuaca, San Martín Toxpalan y San Miguel Tulancingo; mientras que a nivel nacional el número era de 992 hablantes.

Su territorio está enclavado en el norte de la Mixteca Alta y está formado en su mayoría por cadenas montañosas con pendientes escarpadas, cuya altura alcanza los 3 000 msnm. También encontramos extensos lomeríos con desniveles fuertes y suaves y pequeñas llanuras. Casi toda la superficie tiene altitudes que varían de los 2 000 hasta los 3 000 msnm. El clima es templado subhúmedo, con temperaturas medias anuales de 10 a 20° C.

La flora es característica de las tierras áridas, donde encontramos mezquite, huizache, agaves, cactos, moreras, enebros, palmas, laureles y madroños.

Aunque el chocho es un pueblo tradicionalmente agricultor, la pobreza y erosión de las tierras, aunado a la escasez de las lluvias, ha hecho que la agricultura sea una actividad económica secundaria.

Las actividades económicas más importantes, por involucrar a un mayor número de artesanos, eran la elaboración de cobijas (lanillas), gabanes (cotones) de lana y los sombreros de palma.

6

Page 7: Culturas actuales de mexico

La actividad textil ha disminuido considerablemente, y aunque subsiste el tejido de sombreros de palma y de fibra sintética, tiende a desaparecer debido a que otros pueblos se han convertido también en tejedores de sombreros, saturándose con ello la oferta en el mercado.

Debido a esto, hay un fuerte proceso migratorio sobre todo de los jóvenes. El destino principal de estos migrantes son las ciudades de Huajuapan de León, Oaxaca, Tehuacán, Puebla, el norte del país y los Estados Unidos. Otro factor que contribuyó a la migración de los chocholtecas fue la apertura de la carretera internacional que pasa a menos de 10 km de la región y que atraviesa la Mixteca Alta de Oaxaca.

La organización del trabajo comunitario es el tequio. Entre los chocholtecas se da un alto nivel de cooperación para estas labores, así como también para las actividades propuestas por las autoridades en beneficio de las comunidades.

Actualmente ya no existen autoridades tradicionales, sin embargo se conserva un gran respeto por los ancianos. El compadrazgo juega un papel relevante dentro de las relaciones de este grupo.

Entre los pueblos chocholtecas se han presentado conflictos por sus colindancias territoriales desde 1720. Actualmente, el pueblo de San Miguel Tequixtepec tiene problemas por indefinición de límites con Santa María Ixcatlán (habitado por ixcatecos); San Juan Bautista Coixtlahuaca con San Agustín Montelobos y con su agencia municipal de San Jerónimo Otla; Teotongo tiene problemas de la misma índole con Tamazulapa del Progreso y Tlacotepec Plumas con San Francisco Teopan.

Anteriormente la mayoría de las viviendas eran de «cercos» en lugar de muros; éstos se construían a base de quiotes, es decir, del tallo del maguey, de varas y de carrizo. En la actualidad se ha incrementado la construcción con tabiques o adobe. Los techos que antiguamente eran de pasto, palma o popote (tallo de trigo) ahora son de losas de concreto. Los pisos, antes apisonados y a veces de ladrillo, ahora también son de concreto.

Hasta mediados del presente siglo aún predominaba entre la población el uso de prendas de vestir elaboradas a base de manta de algodón: camisas y calzones, complementado con huaraches. En el caso de las mujeres y niñas, la mayoría andaban descalzas. En la actualidad, la mayor parte de los habitantes usa prendas de diferentes tipos de telas y colores.

Choles. (Chiapas).

Los choles se reconocen a sí mismo como los winik, del vocablo maya que significa hombre, varón, son los “milperos», los hombres creados del maíz que viven y explican su existencia en torno al maíz, alimento sagrado otorgado por los dioses, principio y fin de la vida, y eje central de su concepción del mundo.

La Región Chol se ubica en la parte noroeste del Estado de Chiapas. La población se concentra principalmente en los municipios de Tila, Tumbalá, Sabanilla, Salto de Agua, Palenque, Ocosingo,

7

Page 8: Culturas actuales de mexico

Yajalón y Huitiupan. En Tabasco los choles se concentran en los municipios de Macuspana y Tacotalpa.

En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 161 766 hablantes de chol a nivel nacional. Las mayores concentraciones se localizaron en Chiapas con 140 806 hablantes, Tabasco con 10 021 y Campeche con 8 844.

La lengua chol, también conocida como ch’ol o manche, pertenece al tronco maya, familia macro-tzeltal. Las variantes más importantes son las de Tumbalá y Tila, también varían las formas del chol hablado en sabanilla y en salto de agua.

En la región chol predomina la selva alta perennifolia, y un clima cálido húmedo, aunque en las partes altas se encuentran bosques de pino-encino con un clima templado. La temporada de lluvias se prolonga durante nueve meses y los escurrimientos forman numerosos arroyos y ríos que desembocan en el Usumacinta.

La casa chol es una choza rectangular sostenida con seis horcones de ch’ute o de cintok, que van enterrados en el suelo.

Amarran a éstos barras horizontales, y recubren la estructura con bajareque, una mezcla hecha de barro, estiércol y paja. El techo es de palma y zacate y, el piso de tierra apisonada.

Las casas se encuentran dispersas, escondidas entre la vegetación y cerca de los ríos. En las cabeceras municipales hay una alta densidad de población indígena, cuyas casas son de concreto, con techo de lámina y, puertas y ventanas de hierro.

Los ancianos siempre usan la indumentaria tradicional, el resto de la población lo hace, invariablemente en días de fiesta, como el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe. El traje femenino se compone de una falda azul marino o negra que llega a los tobillos, adornada con listones rojos a la altura de la cadera y una blusa blanca con bordados de diversos colores. El traje tradicional de los hombres se compone de una camisa y calzón de manta, bolsas y morrales de piel o bejuco que ellos mismos confeccionan.

Generalmente hombres y mujeres caminan descalzos, sólo algunos usan huaraches de piel o plástico. En las localidades de la región predomina la indumentaria tradicional, mientras que en las cabeceras municipales la mayoría de la población indígena usa ropa occidental.

Los choles mantienen una profunda estima hacia la naturaleza que los rodea. La base de su economía es la agricultura. El 90% de las parcelas son ejidos, en las parcelas más grandes cultivan café, y a veces contratan a indígenas carentes de tierras como peones asalariados. En las parcelas más pequeñas emplean herramientas tradicionales como coa, espeque, azadón, machete y arado de madera.

8

Page 9: Culturas actuales de mexico

Se dedican sobre todo a los cultivos de milpa (maíz, frijol, calabaza), de café y de árboles frutales como cítricos y plátanos; cerca de la casa, las mujeres cultivan una pequeña huerta de legumbres y plantas medicinales.

Chontales de Oaxaca.

Desde tiempos prehispánicos, a este grupo se le conoce con el nombre de chontales. El término chontal proviene del náhuatl chontalli, que significa extranjero o extraño. En la literatura antropológica se ha usado la denominación tequistlatecos para diferenciarlos de los Chontales de Tabasco, quienes son un grupo mayense culturalmente distinto a éste. Ellos se llaman a sí mismos slijuala xanuc’, que al parecer significa «habitante de las montañas».

De acuerdo con la información proporcionada por el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), existían 5 049 hablantes de chontal de Oaxaca en el país.

Las lenguas chontales de Oaxaca, llamadas también f’ane, huamelulteco(a), tequistlateco(a), lalhtaiqui o lalhtaiqui’ pertenecen a la familia tequistlateca del tronco hokano, al que pertenecen muchos grupos de norteamérica.

El territorio chontal se encuentra en el sureste del estado de Oaxaca, donde abarca dos regiones: una en la Sierra Madre del Sur y otra en la Planicie Costera. En los altos habitan en los distritos de Yautepec y Tehuantepec concentrándose en los municipios de Santa María Ecatepec y San Carlos Yautepec, mientras que los chontales de la costa habitan fundamentalmente en los municipios de Santiago Astata y San Pedro Huamelula.

En la sierra, el relieve es accidentado, en una altura que va de los 2 440 hasta los 175 msnm. Se distinguen tres zonas fisiográficas: las cordilleras con pendientes de 15 a 40° en las laderas cortas; los valles intermontanos de pronunciada elevación, y el área de transición del pie de montaña. El clima comprende desde el subtropical húmedo al seco cálido, en la sierra predominan los climas fríos y templados. Los suelos son generalmente de poca profundidad, bajos en nutrientes y propensos a la erosión.

Practican una agricultura de temporal y para autoconsumo, con base en el cultivo de maíz, frijol, calabaza, chícharo, chayote, papa y cebolla. En algunos casos también siembran hortalizas y árboles frutales, así como maguey mezcalero, caña de azúcar, chile y café. El mezcal elaborado a partir del maguey representa el principal producto comercial.

La explotación forestal comercial ha sido muy intensa y la agricultura se ha intensificado en perjuicio del suelo. Los bosques han disminuido por plagas e incendios y no han sido reforestados. La ganadería extensiva ha afectado a la fauna y la flora de la región. El uso de métodos muy destructivos tanto en caza como en pesca y la ausencia de vedas, aunado a todo lo anterior ponen en peligro los recursos naturales de los chontales.

Los hombres jóvenes salen de enero a marzo a la pizca de café a Tehuantepec, Coatzacoalcos, Orizaba y Oaxaca, para completar los ingresos de la economía familiar.

9

Page 10: Culturas actuales de mexico

Los chontales manufacturan sus propios utensilios para la cocina, principalmente de alfarería; tejen palma, hacen escobas y mangos para instrumentos agrícolas; la madera es utilizada para hacer diversos utensilios, casas y muebles para su propio uso. Elaboran textiles en algodón y los tiñen con técnicas tradicionales y materias primas naturales.

La casa chontal es rectangular, mide entre 2 y 4 m de ancho por 4 a 6 de largo, con muros de adobe o de carrizo de 2 m de altura, en algunos casos enjarrados con lodo. Los postes están hechos con horcones de ocote, coatle o coachipilín; los techos de dos aguas son de zacate, pino, tejamanil o teja, aunque en la actualidad es común encontrar techos de láminas de asbesto, sobre un armazón de carrizo o vara, amarrado con tiras de corteza de yaco o majagua; sólo algunos son de cemento.

Los varones usan camisa y calzón de manta blanca, sombrero de palma y huaraches. Las mujeres usan generalmente blusa de percal y camisa blanca; las camisas y los huipiles están bordados con figuras de animales o flores, en colores rojo y negro. Las enaguas son de varios colores a rayas verticales blancas, de color o floreadas. El rebozo forma un tocado en la cabeza y las cintas de colores distinguen a las solteras.

También se ponen collares, aretes y anillos de oro, de plata o de fantasía.

Chontales de Tabasco.

Los maya chontales son un pueblo mayense que habita en el estado de Tabasco. El término chontal es un vocablo náhuatl que significa «extranjero». Se llaman a sí mismos yokot’an o yokot’anob. Este es un grupo totalmente distinto al de los chontales de Oaxaca.

De acuerdo a los datos proporcionados por el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), había 39 428 chontales de Tabasco en el país, de los cuales 38 342 se localizaban en Tabasco, principalmente en los municipios de Centla, Centro, Jonuta, Macuspana y Nacajuca. Su lengua deriva del tronco maya, familia macro-tzeltal.

Existen tres variantes dialectales que son la de Macuspana, Centro y la de Nacajuca. Su territorio se encuentra casi en el centro del estado de Tabasco. Es una región de extrema configuración acuática donde desembocan los ríos Grijalva y Usumacinta, así como otros sistemas menores. En la zona se encuentran canales, lagunas, lagunetas y corrientes, así como pantanos. El manglar es el tipo de vegetación dominante en este sistema. La vegetación original estaba conformada por una flora de selva lluviosa con vegetación perennifolia de tres niveles, sin embargo gran parte de la flora y fauna original han desaparecido debido a la explotación maderera, al florecimiento de una ganadería extensiva y a la explotación petrolera.

Las actividades tradicionales de los maya chontales son la agricultura, la recolección, la caza y la pesca, que son complementadas con los ingresos de los jóvenes chontales que se emplean en los trabajos derivados de la explotación petrolera.

10

Page 11: Culturas actuales de mexico

Actualmente está en desuso el sistema de cargos, y en relación a las autoridades, los pueblos son delegaciones municipales con una estructura similar a la del resto del país, sin embargo existe un consejo supremo chontal que ha sido formado por los dirigentes informales de las comunidades, retomando la vieja lucha de su pueblo por recuperar sus tierras.

En su concepción del mundo destacan una serie de entidades divinas relacionadas con su entorno. Ix bolom, antigua diosa de la fertilidad es identificada con la Virgen María y su fiesta se celebra el 16 de julio. También hay otros seres sobrenaturales como los «dueños» de las lagunas, del manglar, de la tierra, etcétera.

La misión de estos seres es la de impedir la destrucción y sobreexplotación del entorno, cuya transgresión extravía al infractor, le puede hacer perder la razón, enfermarlo o matarlo.

Cochimí (Baja California Norte)

En la parte norte del territorio de Baja California, específicamente en los municipios de Ensenada, Tecate y Mexicali, se asientan cinco grupos indígenas que tienen un origen común. De acuerdo con el sitio ocupado en el territorio, las etnias bajacalifornianas reciben distintos nombres; así los cochimí y kumiai son llamados habitantes de la meseta; los cucapá son conocidos como rieños y los paipai y kiliwa reciben el apelativo de serreños.

El clima de la región es seco y extremoso. En la costa, la altitud oscila de los cero a los 500 msnm, en tanto que en la serranía llega a alcanzar hasta 2 000 m. el suelo es árido y semiárido con una vegetación en donde predominan los matorrales dispersos. Entre la flora encontramos gobernadora, palo verde, torote, jojoba, palo fierro, biznaga y otros cactos. En la sierra se encuentran bosques de pino enano.

Los cochimí, conocidos también como diegueños o laymon, se autonombran en su lengua m’ti-pa. Ocupan las mesetas costeras de los municipios de Tecate, Tijuana y Ensenada; sus principales núcleos de población están en las localidades de la Huerta, Ojos Negros, Peña Blanca y español de Manteca. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registró un total de 82 hablantes de cochimí, 80 de los cuales se encontraban en Baja California.

Coras. (Nayarit).

Los coras se llaman a sí mismos nayeri, aunque existen gentilicios para los habitantes de cada comunidad, de tal manera que a los de Santa Teresa se nombran "quamaruchi", los de Jesús María "ahusete" y los de Mesa del Nayar "yohke".

Habitan en la porción noreste del estado el Nayarit sobre todo en los municipios de Acaponeta, El Nayar, Rosamorada, Ruiz y Tepic. Comparten un territorio con otros grupos indígenas: huicholes, mexicaneros (hablantes de náhuatl), tepehuanos y mestizos.

De acuerdo al XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 15 389 hablantes de cora en el estado de Nayarit y 16 410 a nivel nacional. Su lengua, también conocida como

11

Page 12: Culturas actuales de mexico

nayari, niuucari o naayeri, se deriva del tronco lingüístico yuto-nahua y junto con el huichol constituye la familia cora-chol.

La indumentaria femenina se compone de una amplia falda floreada, cuyo largo varía de acuerdo a la comunidad, combinada con una blusa de color brillante. El atuendo se complementa con collares, aretes, huaraches de plástico y rebozo negro. Los hombres visten pantalón de manta, camisa de color claro, sombrero y en la mayoría de los casos, huaraches de piel. Tanto hombres como mujeres utilizan morrales de lana o algodón tejidos por las mujeres en telares de cintura, adornados con flores, animales u otros motivos. El territorio cora abarca alrededor de 220 000 has. En la sierra del Nayar, a una altura que varía entre los 700 y los 2 000 msnm.

La región está surcada por cerros áridos de cuya base parten estrechas quebradas, formando barrancas en toda el área. En tiempo de lluvias, en esta orografía se forman torrentes que corren entre acantilados y desfiladeros.

Uno de éstos, la cañada del río de Jesús María, divide al altiplano en dos, sirviendo de límite entre el territorio de coras y huicholes.

Debido a la diversidad topográfica, existen diferentes tipos de clima que van desde el tropical hasta el templado y árido. La flora incluye árboles como el cedro, amapa, chicozapote, caoba, zacate, higuera, guásima, guanacastle, ceiba, gascalate y mezquite.

La mayoría de los pueblos coras se asientan en la tierra caliente, donde practican una agricultura de subsistencia y una ganadería doméstica con la cría de bovinos, ovinos, caprinos, porcinos, ganado caballar y mular, así como la cría de abejas, gallinas y guajolotes. Para completar el ingreso familiar, los varones suelen migrar temporalmente a la costa para trabajar en el corte del tabaco o en la pizca de maíz. Durante el ciclo agrícola, las familias abandonan su residencia para establecerse cerca de los campos de cultivo.

Su gobierno está compuesto de un cuerpo de autoridades tradicionales que se rotan entre cargos civiles (gobernador, alguaciles, justicias y centuriones) y religiosos (mayordomos y tenanches). En este sistema de cargos participan todos los varones adultos de la comunidad prestando servicio durante un año y ascendiendo poco a poco en la jerarquía.

Dentro de sus celebraciones religiosas destacan los mitotes, dedicadas al cultivo del maíz que puede tener un carácter familiar o comunal y en donde participan cantadores, músicos, danzantes narradores de sus mitos. También destacan las celebraciones de Semana Santa, del día de muertos (1 y 2 de noviembre), la de la Epifanía (6 de enero), la del Apóstol Santiago (25 de julio), la del Arcángel Miguel (29 de septiembre) y la Virgen de Guadalupe (12 de diciembre).

Sus historias antiguas se transmiten oralmente de generación en generación y en ellas se narra cómo se construyó el mundo, se obtuvo la lluvia, el fuego, el tabaco o el maíz. Sus deidades están relacionadas con la naturaleza: el sol, la lluvia, el agua, el fuego, el mar, etcétera.

12

Page 13: Culturas actuales de mexico

Cucapá. (Baja California Norte).

En la parte norte del territorio de Baja California, específicamente en los municipios de Ensenada, Tecate y Mexicali, se asientan cinco grupos indígenas que tienen un origen común. De acuerdo con el sitio ocupado en el territorio, las etnias bajacalifornianas reciben distintos nombres; así los cochimí y kumiai son llamados habitantes de la meseta; los cucapá son conocidos como rieños y los paipai y kiliwa reciben el apelativo de serreños.

El clima de la región es seco y extremoso. En la costa, la altitud oscila de los cero a los 500 msnm, en tanto que en la serranía llega a alcanzar hasta 2 000 m. el suelo es árido y semiárido con una vegetación en donde predominan los matorrales dispersos. Entre la flora encontramos gobernadora, palo verde, torote, jojoba, palo fierro, biznaga y otros cactos. En la sierra se encuentran bosques de pino enano.

Los cucapá se autonombran es-pei, viven en las vegas del río Colorado o Hardy, al sur del valle de Mexicali, en las localidades el mayor indígena, Pedro Cervantes, colonia Carranza y los ejidos de Zacatecas, Durango y Nuevo León. Existen otras dos áreas territoriales de menor importancia poblacional: una en la Poza de Arvizu, municipio de San Luis Colorado, en Sonora y otra en las reservas de Somerton, Estados Unidos. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registró un total de 178 hablantes de esta lengua, de los cuales 82 habitaban en Baja California y 94 en Sonora.

Cuicatecos. (Oaxaca).

La palabra cuicateco es de origen nahua, proviene del verbo sustantivo cuicatl que significa canto. Según algunas fuentes históricas, fueron los Mexicas quienes denominaron Cuicatlán («lugar del canto») a la región que ocupaba este grupo, debido a la afición de sus moradores por practicar esta actividad.

La lengua cuicateca, llamada también dvacu, ndudu, nduudu yu o davaacu yeñ’e yu, deriva de la familia mixteca, tronco otomangue. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 12 128 cuicatecos en Oaxaca y 13 425 a nivel nacional.

La región cuicateca se sitúa al noreste del Estado de Oaxaca, ocupa un territorio aproximado de 8 400 km, el cual es atravesado por la Sierra Madre Occidental, a la altura de las sierras de Pápalo y Teutitla. Incluye una gran parte del distrito de Cuicatlán y una porción del de Nochixtlán, con un total de diez municipios entre los que destacan Concepción Pápalo, San Andrés Teotilalpan, San Juan Tepeuxila, San Juan Bautista Cuicatlán y Santos Reyes Pápalo.

Los cultivos de subsistencia son el maíz, frijol, chile, calabaza, papa y, en algunos lugares, trigo. El café es el producto de mayor importancia comercial en la parte serrana, mientras que en las tierras bajas lo son la caña de azúcar, el tabaco y el algodón, además de frutales como el aguacate, el mango, el chicozapote, la naranja, el mamey, el durazno y la nuez. Otra actividad que complementa el ingreso familiar es la renta de los bosques para la explotación forestal, además de la venta de artesanía textil y alfarería, así como, de diversos objetos tejidos con carrizo e ixtle.

13

Page 14: Culturas actuales de mexico

Una gran parte de la población, particularmente masculina, migra en busca de trabajo asalariado a las plantaciones vecinas de su estado natal y del vecino estado de Puebla.

Guarijíos. (Sonora y Chihuahua).

Los guarijíos se autodenominan macurawe o macoragüi, término que significa «los que agarran la tierra» o «los que andan por la tierra». Su territorio se ubica al sureste del estado de Sonora en las faldas de la Sierra Madre Oriental, donde colindan los estados de Sonora y Chihuahua. En este último estado se encuentran dispersos en los municipios de Chínipas, Guazapares, Moris y Uruachi.

En Sonora, el terreno es escabroso y son escasas las planicies; por él cruzan varios arroyos y ríos, afluentes del río mayo que baja al valle del mismo nombre y que anteriormente desembocaba en el mar; entre éstos están el arroyo Guajaray y el Mochibampo.

La población está dispersa entre varias comunidades principales y rancherías menores para el mayor aprovechamiento de las condiciones del terreno de algunas pequeñas zonas de riego en los márgenes de los arroyos; o se encuentran básicamente en los municipios de Álamos y el Quiriego, Sonora.

La lengua de los guarijío pertenece a la familia taracahita, del tronco yuto-nahua, y se le conoce como guarojío, guarijío, varogío o varohío. De esta lengua se reconocen dos variantes; una de Sonora y otra de Chihuahua. En general la población es bilingüe, a excepción de algunos ancianos que desconocen el español.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000), reporta que a nivel nacional había un total de 1 671 hablantes de guarijío, 917 de ellos en Chihuahua y 732 en Sonora.

El territorio guarijío tiene una topografía accidentada, con alturas de hasta 1 800 msnm. El clima varía de semiseco a semihúmedo y de cálido a semicálido, con temperaturas que van de los 44°C hasta los 12°c bajo cero. Los suelos son de baja calidad para las labores agrícolas, a excepción de las tierras ubicadas en los márgenes de los ríos.

La vegetación de las partes bajas, laderas y lomeríos corresponde a selva baja caducifolia, donde encontramos palo dulce, guamúchil, palo chino, palo colorado, amapa, tempisque, tepehual, cazahuate, colorín, mezquite, palo fierro, palo verde y papaches. En las zonas de mayor altitud, la vegetación está compuesta de bosques de pino y encino.

Practican una agricultura de temporal y para el autoconsumo, con base en la siembra del maíz y el frijol; eventualmente comercializan el ajonjolí y el chile chiltepín. La economía familiar es complementada con la venta de artesanías que elaboran con palma, madera, barro y textiles. Los varones buscan trabajo asalariado en la pizca del algodón y tomate, en los distritos de riego de navojoa y ciudad obregón.

14

Page 15: Culturas actuales de mexico

Las casas están hechas de adobe, con postes de madera y techos de tierra o de palma; constan de una o dos habitaciones y tienen una enramada anexa de varas, ramas y palma; ahí pasan la mayor parte de su tiempo ya que el clima es cálido.

Su asentamiento es disperso; las viviendas se encuentran en grupos de dos o tres casas en lo alto de los cerros, cerca de los arroyos o pozos de agua.

La construcción de las casas es una tarea del sexo masculino, los hombres cortan y acarrean los troncos y la palma, y hacen el adobe. Bajo la enramada, fuera de la casa, se encuentra un fogón para la preparación de alimentos y una vasija de agua.

Las sillas, mesas y catres son de fabricación casera, hechas con madera y cuero de chivo o de vaca. La mayoría de las viviendas carece de servicios básicos de drenaje, agua entubada y electricidad.

Entre los guarijíos ha desaparecido el vestido tradicional. Las mujeres usan pantalón y falda encima de él, blusas hechas por ellas mismas o compradas.

Desde niñas usan pañoletas en la cabeza y sandalias de plástico. Los hombres visten pantalón y camisas comunes, huaraches de tres puntadas y sombrero vaquero, comprado fuera de la región. En los días de fiesta los maynates (cantores) se ponen una pañoleta en la cabeza; los danzantes no tienen un traje especial, sólo danzan descalzos.

Sus principales fiestas son las Tuburadas o Tuguradas. Se espera que un hombre guarijío realice en su vida tres de estas fiestas en donde participa un cantor, danzantes, músicos y se ingiere comida ritual.

Huastecos. (San Luis Potosí).

Los huastecos se llaman a sí mismos teenek, que deriva de la contracción te’inik de te’, “aquí”, e inik “hombre”, significa literalmente “los hombres de aquí"; su lengua, conocida también como tenek o teenek, deriva del tronco maya y es el único idioma de esta familia, separado geográficamente del territorio ocupado por los hablantes de otras lenguas mayenses.

Su territorio abarca una porción del noreste de San Luis Potosí y otra área del noreste del estado de Veracruz, ambas en la región conocida como La Huasteca.

Los municipios potosinos que concentran a la población teenek son: Aquismón, Tanlajás, Ciudad Valles, Huehuetlán, Tancanhuitz de Santos, San Antonio, Tampamolón Corona y San Vicente Tancuayalab. En Veracruz destacan Tantoyuca, Chontla, Chinampa de Gorostiza, Tempoal y Tantima.

El clima es cálido húmedo con una temperatura media anual de 23.5°C. El área está cubierta por una red fluvial compuesta por una gran cantidad de arroyos estacionales que alimentan a diversos ríos, en donde predominan los bosques tropicales.

15

Page 16: Culturas actuales de mexico

En el XII Censo General de Población y Vivienda 2000, se registraron 150 257 hablantes de huasteco a nivel nacional, de los cuales 87 327 se concentraban en 17 municipios de San Luis Potosí y 51 625 en 15 municipios de Veracruz, aunque otros núcleos importantes se encontraron en Tamaulipas con 4 083 hablantes y Nuevo León con 2 457.

Su hábitat, otrora exuberante, hoy está sujeto a un proceso de degradación irreversible, con una deforestación creciente de las partes serranas y la contaminación de las aguas de algunos de los ríos.

Son un pueblo agricultor, que además del maíz y frijol produce algunos cultivos comerciales como la caña de azúcar, el café en pequeña escala, el ajonjolí, el arroz y el cacahuate y frutales como la naranja, el plátano, la piña y el mango.

Su economía se complementa con el trabajo asalariado de los jóvenes que migran temporalmente a los centros urbanos y a las regiones productoras de caña u hortalizas de La Huasteca.

Las comunidades huastecas cuentan con una jerarquía de cargos que constituyen el gobierno comunal y a cuya cabeza se encuentra un consejo de ancianos conocido como los "principales", quienes son consultados en los asuntos más importantes de orden colectivo.

Las mujeres huastecas mantienen su indumentaria tradicional que consiste en un enredo de tela negra de percal o sintética, amarrado a la cintura con una faja y una blusa de corte cerrado. Encima llevan el dhayem (o quexchémitl en náhuatl) con bordados de cruces simbolizando los puntos cardinales, árboles de la vida, animales y flores. El tocado o petob es un arreglo del cabello trenzado en círculo alrededor de la cabeza con estambres de colores. Aunque muchas jóvenes actualmente visten a la manera de las campesinas mestizas, usan su vestido tradicional en los días de fiesta.

A mediados de la década de los 70 la fuerte presión sobre la tierra en la región huasteca generó un gran movimiento social de solicitantes de tierra en donde ocuparon un lugar destacado las comunidades teenek. El movimiento logró la expropiación de grandes latifundios de la región.

Huaves. (Oaxaca).

Los huaves son también conocidos como mareños o huazantecos. El término huave fue acuñado por los zapotecos para referirse a «la gente que se pudre en la humedad», aunque los propios huaves muestran resistencia a identificarse con ese nombre, y en cambio se autonombran mero ‘ikooc.

En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 13 678 hablantes de huave en el estado de Oaxaca y 14 224 a nivel nacional.

La lengua huave, conocida también como mareño, mero ikood u ombeayeran, no tiene parentesco lingüístico con algún otro idioma de mesoamérica. El grado de analfabetismo es alto, presentándose en alrededor de un 40% de la población mayor de 15 años.

16

Page 17: Culturas actuales de mexico

La mayoría de la población huave habita en un litoral del Golfo de Tehuantepec, en el estado de Oaxaca, el cual ocupa las dos terceras partes de una barra de 40 kms. que separa el Océano Pacífico de dos grandes lagunas, conocidas como mar superior y mar inferior. Sus poblaciones principales son San Mateo del Mar, San Francisco del Mar y San Dionisio del Mar.

La región comprende tres zonas bien diferenciadas: una de monte bajo, con algo de madera aprovechable y posibilidades de caza; otra de sabana que permite el pastoreo y la agricultura; y otra más, pantanosa, con abundantes salinas y manglares. El territorio es árido y poco apto para la agricultura debido a lo arenoso del suelo, que se inunda extensamente en épocas de lluvia. El clima es caluroso y seco, con una temperatura media anual de 27.4° C.

La actividad económica básica es la pesca, que se realiza en las lagunas que son ricas en especies como la lisa, mojarra, robalo, bobo y trucha, además de moluscos como camarón y ostión.

La agricultura y ganadería son actividades secundarias. La naturaleza del terreno dificulta el cultivo del maíz y su abastecimiento está a cargo de los comerciantes zapotecos.

Se ha intensificado el cultivo de sandía y melón, los cuales se siembran con las primeras lluvias en terrenos de arado.

El mismo curso han tomado los cultivos de diversos tipos de calabaza y ajonjolí, que gracias a su resistencia a la sequía, se perfilan como productos comerciales importantes.

Antiguamente las mujeres solían andar con el torso desnudo, mientras realizaban los quehaceres dentro de la casa. En la actualidad usan amplias faldas de algodón que cubren los pies generalmente descalzos. Sobre la falda, teñida casi siempre en azul o rojo, se lleva un huipil corto y sin mangas, con diseños geométricos sobre el pecho y cuello rectangular.

Los hombres, que solían usar taparrabos y camisa de manta, se acoplan a las prendas occidentales (camisa y pantalón), al sombrero de palma y los huaraches.

Huicholes. (Durango - Jalisco - Nayarit)

Los huicholes se llaman a sí mismos wirrárika, o su plural, wirraritari. Habitan al norte del estado de Jalisco en los municipios de Mezquitic y Bolaños; en el estado de Nayarit en La Yesca y El Nayar y hay grupos minoritarios en los estados de Zacatecas y Durango.

La lengua huichol pertenece al tronco yuto-nahua, familia corachol. También se le conoce como huixarica, o tejí niukiyari.

Según el XII Censo General De Población y Vivienda (2000), en el estado de Nayarit existían 16 932 hablantes de huichol; 10 976 en Jalisco; 1 435 en Durango y 330 en el estado de Zacatecas, ascendiendo a 30 686 el número de hablantes a nivel nacional.

17

Page 18: Culturas actuales de mexico

Son cinco los centros ceremoniales en donde se instalan los gobiernos tradicionales: San Andrés Cohamiata, Santa Catarina Cuexcomatitlán, San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan de Bolaños en el estado de Jalisco y Guadalupe Ocotán en Nayarit.

La región que habitan, llamada por ellos Huicot, es atravesada por la Sierra Madre Occidental, cuenta con elevaciones que van de los 1 000 a los 3 000 msnm, encontrándose profundas barrancas, que hacen del territorio una zona de difícil acceso.

Debido a estas condiciones orográficas, las vías de comunicación terrestre son escasas; no existen carreteras pavimentadas, por lo que la comercialización es difícil.

El patrón de asentamiento es disperso. Se calcula que existen alrededor de 400 rancherías en un área de 4 107 km.

Gran parte de las casas están construidas con adobe, otras con piedras recubiertas de lodo y con techos de paja. Hay casas con una sola habitación que tienen doble función: sirven como dormitorio y a la vez como cocina. En algunos lugares hay casas con varias habitaciones. En tiempo de calor, los huicholes tienden a dormir al aire libre o en las construcciones donde almacenan el grano. Junto a la vivienda construyen pequeñas casas llamadas ririki, «casas de dios», que son pequeños templos de adobe dedicados a las deidades y ancestros.

La vestimenta varía de una región a otra y se caracteriza por su llamativa y elaborada confección, sobre todo del traje masculino. Los bordados de los trajes de San Andrés Cohamiata y Santa Catarina Cuexcomatitlán son más vistosos que los de San Sebastián y Tuxpan

La indumentaria de las mujeres consiste en una blusa corta de un sólo color, enaguas interiores y exteriores, un manto floreado para cubrir la cabeza y collares de chaquira. Los hombres usan pantalones de manta blanca (shavaresh) y camisas del mismo material que tienen abierta la parte inferior de las mangas (rahuarero); dichas prendas están bordadas con diseños simétricos de colores.

Los huicholes usan sombrero de palma con adornos de chaquira o bolas de estambre, una capa cuadrangular doblada a la mitad que se coloca sobre los hombros y, eventualmente, aretes y pulseras de chaquira. Para amarrar los faldones de la camisa a la cintura se usan cintas de lana.

Cada hombre lleva consigo varios morrales pequeños; calzan huaraches o zapatos deportivos.

En su territorio las superficies aptas para el cultivo son escasas debido a que predominan los terrenos inclinados.

Datos proporcionados por la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos, informan que existen 140 mil has. De área boscosa en la región, las cuales en su mayoría son explotadas por compañías del estado de jalisco. La explotación forestal ha dado beneficios mínimos a la población local y ha incrementado la erosión de los suelos.

18

Page 19: Culturas actuales de mexico

Las actividades productivas que se realizan son principalmente para el autoconsumo: agricultura, pesca y caza. Los cultivos básicos son el maíz, calabaza, amaranto, frijol, chile y algunos frutos.

Existe una importante migración temporal. Conservan aún rasgos de un pueblo seminómada; su vida religiosa, política y económica está organizada de tal modo que constantemente cambian de lugar de residencia.

Entre las autoridades tradicionales se encuentran los kawiteros (ancianos virtuosos), quienes han cumplido con las obligaciones civiles y religiosas de la localidad, además de ser conocedores de la tradición del grupo, por lo que son las personas más respetadas de la comunidad.

Una de las características principales de su religión es la asociación que se da entre el maíz, el venado y el peyote. Su mitología en general hace referencia a estos elementos, por lo que los rituales, las fiestas, la organización material y temporal de la vida gira muchas veces alrededor de ellos.

El maíz y el venado representan el sustento vital, en tanto que el peyote es el medio más importante para trascender el mundo profano y la manifestación material más obvia de lo sagrado, es el intermediario entre el hombre y las deidades.

Una de las fiestas más importantes es la del maíz tostado que se lleva a cabo durante el desmonte y quema de los terrenos, en este ritual se manifiesta la unión de los tres elementos centrales de su religión: el maíz, el venado y el peyote.

Durante la temporada de sequía se realiza la peregrinación a Wirikuta, la tierra del peyote, que es considerado un lugar sagrado donde moran los dioses. El objetivo de la peregrinación es doble: recolectar peyote para las ceremonias y hallar a los dioses para «encontrar la vida».

Existen relaciones cercanas con los Coras, debido a que con ellos tienen interacciones rituales importantes. Los huicholes abastecen a este grupo de peyote.

En cambio las relaciones con los tepehuanes son delicadas, pues se han suscitado conflictos en ciertas regiones por invasión de terrenos.

Ixcatecos. (Oaxaca).

El término ixcateco es el gentilicio que aplicaron los antiguos nahuas al grupo indígena que habitaba en una región que llamaron Ixcatlán, nombre que proviene de dos voces: ixcatl, «algodón» y tlan, «lugar de»: lugar de algodón. La lengua ixcateca pertenece al tronco otomangue, familia popoloca.

Según el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), la población ixcateca era de 351 hablantes a nivel nacional, de los cuales 207 se ubicaron en el estado de Oaxaca. Aunque hasta hace poco los especialistas consideraban que este grupo se reducía al municipio de Santa María Ixcatlán, los datos censales reportan presencia de población hablante de esta lengua en los municipios de Tuxtepec y Nuevo Soyaltepec, Oaxaca. El municipio de Santa María Ixcatlán está

19

Page 20: Culturas actuales de mexico

situado al norte del Estado de Oaxaca, en el Valle de Ixcatlán, el cual se encuentra enclavado en la zona montañosa de la mixteca alta, entre los 400 y los 500 msnm.

El clima de la zona es seco, con un promedio de temperatura de 15 a 16° C. La vegetación es escasa y la alcalinidad de los suelos favorece la reproducción de un tipo de palma que los nativos utilizan para la elaboración de sombreros y canastos, actividad que representa su más importante fuente de ingresos.

La práctica de la agricultura ha pasado a un plano secundario por la baja productividad de sus tierras, pues los suelos están conformados por una capa de tepetate y una delgada capa de tierra fértil, y son muy propensos a la erosión. Los ixcatecos cultivan maíz, trigo, cebada, frijol, calabaza y, ocasionalmente, haba.

Complementan sus ingresos con la venta de puercos y aves de corral que crían en sus solares; es preciso señalar que la migración temporal y definitiva en busca de fuentes de trabajo, es cada vez más frecuente, particularmente hacia el estado de Veracruz y los Estados Unidos.

La vivienda tradicional es de forma rectangular, tiene paredes de tepetate o de quiote sostenidas con troncos de palma, y techo de hojas de la misma planta. Hoy en día hay una marcada tendencia a edificar las casas con ladrillo y techarlas con lámina de asbesto o de zinc. Es muy común que existan dos anexos a la habitación principal: un baño de temazcal construido con tepetate o varas de quiote y una cueva, que es un lugar húmedo donde se almacena y se teje la palma.

Jacaltecos. (Campeche - Chiapas - Quintana Roo).

El término jacalteco parece derivar de las voces nahuas xahcalli (casa o choza) y teco (amo o dueño). El jacalteco o abxubal, forma parte del tronco lingüístico maya, familia macro-kanjobal.

El grupo jacalteco es originario del actual territorio guatemalteco, siendo en este país donde se ubica la mayor parte de sus miembros. En México existen algunos asentamientos de emigrados que, desde finales del siglo pasado se establecieron ahí debido al despojo de sus parcelas por parte del gobierno vecino.

El Censo General de Población y Vivienda (2000), registró 529 hablantes de jacalteco, 453 residían en Chiapas, 14 en Quintana Roo, 53 en Campeche y el resto, en otros seis estados de la República.

Las localidades jacaltecas se localizan en los municipios chiapanecos de Frontera Comalapa, Amatenango de la Frontera y Bella Vista. El asentamiento de mayor población se encuentra en el ejido Guadalupe Victoria, además de los ejidos Paso Hondo, Potrerillo y Descagal.

La actividad económica de mayor importancia es la agricultura; destaca el cultivo comercial del café, que se intercala en las milpas de las laderas, o bien se practica en el solar de la unidad familiar. Con fines de autoconsumo se cultivan maíz, frijol y calabaza, además de chile, hierbas de olor, henequén, jitomate, caña de azúcar y algunos frutales como plátano, guayaba y lima. Su dieta se complementa con algunas especies de peces que se extraen de los lagos y ríos cercanos.

20

Page 21: Culturas actuales de mexico

La cría de aves de corral y puercos son actividades que coadyuvan a la economía familiar.

Entre los jacaltecos de México, el hombre usa, como indumentaria tradicional, pantalón, camisa blanca, un capisayo (especie de capa de lana negra con mangas). La mujer usa huipil bordado con hilaza de vivos colores, entre los que predominan el verde, rojo y amarillo, con figuras de estrellas y abstractas. En fechas recientes se ha perdido casi por completo el uso de estas prendas, en gran parte debido a disposiciones gubernamentales del vecino país guatemalteco.

Es común que los hombres migren temporalmente a las fincas cafetaleras cercanas, así como a las plantaciones de plátano, para emplearse como peones y así complementar su ingreso.

Kanjobales. (Chiapas - Campeche - Quintana Roo).

El pueblo kanjobal originalmente se asentaba en el departamento de Huehuetenango, en territorio guatemalteco, pero debido al despojo de tierras de que fueron objeto a fines del siglo pasado empezaron a migrar y establecerse en territorio mexicano, en los fronterizos municipios de Las Margaritas y La Trinitaria, Chiapas. A partir de la década de los 80 una nueva oleada de migrantes llegó a México como refugiados huyendo de la represión militar del régimen guatemalteco. Por esta razón a partir del censo de 1990 del INEGI aparece un numeroso contingente de población kanjobal en Campeche, Quintana Roo y en los fronterizos municipios chiapanecos.

La lengua kanjobal o k’anjobal, pertenece a la familia macro-kanjobal del tronco maya. El XII Censo General de Población y Vivienda (2000), registró un total de 9 015 hablantes de kanjobal en México, de los cuales 5 769 vivían en Chiapas, 1 896 en Campeche, y 1 286 en Quintana Roo. El territorio que ocupan en Chiapas es muy accidentado, con alturas de hasta 3 000 msnm. La mayoría de la población indígena se ubica entre las elevaciones de 1 500 y 2 000 msnm, en clima frío y templado.

Los kanjobales, en su calidad de refugiados, viven en campamentos en los que en teoría no pueden trabajar ni comprar tierras para sus actividades productivas. Sin embargo, practican el comercio (sobresale el mercado dominical del ejido Poza Rica, que es el más grande de la zona, donde se reúnen refugiados y mexicanos de la región selvática de Las Margaritas), se contratan como mano de obra o bien cultivan la tierra como una forma de pago por el campamento donde viven.

Los cultivos básicos en la región son maíz, que siembran en pequeñas parcelas para autoconsumo, el café y el cacao para la venta.

Estos últimos se desarrollan en propiedades privadas donde la población indígena se contrata por un salario inferior al mínimo.

Sus principales conflictos son precisamente la falta de tierra donde sembrar y obtener su alimento diario.

21

Page 22: Culturas actuales de mexico

Kikapúes. (Coahuila).

Los kikapúes se llaman a sí mismos kikaapoa, que significa «los que andan por la tierra». Algunos autores lo derivan de ki wika pa wa: «el que está alrededor» o «el que se mueve, aquí o allá». A fines del siglo XVII, los kikapúes se encontraban al sur de Wisconsin, al oeste del lago Michigan, Estados Unidos, aunque debido a su tradición nómada, no se puede asegurar que sean originarios de ese lugar. Actualmente son un grupo binacional, pues la mayor parte de la población kikapú vive en reservaciones norteamericanas, entre las que destaca la de Oklahoma.

En México, viven en el lugar conocido como el nacimiento de los kikapúes, ubicado en el municipio de Melchor Múzquiz, Coahuila. Este municipio colinda al norte con el municipio de Acuña; al sur con San Buenaventura y Progreso; al oriente con Zaragoza, San Juan de Sabinas y Sabinas, al occidente con Ocampo. Se encuentra entre la unión de las sierras Santa Ana y Santa Anita, en donde nacen los manantiales del Río Sabinas.

Los kikapúes sólo cuentan con una zona urbana de tipo compacto, aunque su distribución no es homogénea. El uso del suelo es comunal, a excepción del de las viviendas que son propiedad privada. La población mestiza, llamada «mexicana», habita en todo el municipio de Melchor Múzquiz, sus propiedades colindan con las de los kikapúes.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000), registró 125 hablantes de kikapú en Coahuila y 138 a nivel nacional.

La lengua kikapú o metusenene, pertenece al tronco algonquino, familia algonkiniana, originaria de las tribus que habitan en el actual territorio de Estados Unidos y la hablan todos los miembros de esta comunidad. La mayoría de ellos habla también español e inglés.

En 1856 un grupo de kikapúes, mascogos y seminoles solicitaron al gobierno mexicano un territorio para vivir. El gobierno aceptó a cambio de que los indígenas defendieran a los pobladores mexicanos de los ataques de los comanches.

Entre 1873 y 1878 tropas norteamericanas invadieron territorio mexicano, presionando a los kikapúes para que regresaran a las reservaciones norteamericanas.

Posteriormente el gobierno mexicano les concedió terrenos nacionales y bajo el mandato del Presidente Lázaro Cárdenas se les dotó de un ejido. Este territorio kikapú, considerado por ellos como campamento de invierno, se convirtió en un lugar sagrado, donde se celebran cacerías rituales de venado y misas que ofrendan a sus dioses.

La vivienda tradicional se renueva dos veces al año, una es la de invierno (apakvenikane) de forma elíptica, con una estructura de troncos delgados y cubiertos de tule a lo largo, formando grandes tapetes; en el centro se coloca el fuego sagrado. La casa para el verano (utenikane) es de forma rectangular, con paredes de carrizo, techo elíptico de tule, con un anexo al frente. En el interior se encuentran camas de varas delgadas sostenidas por troncos, algunas tienen colchones o petates, al centro está el fuego sagrado.

22

Page 23: Culturas actuales de mexico

Elaboran esta casa quienes se quedan a cuidar el campamento, y los que no emigran temporalmente a Estados Unidos.

El atuendo tradicional kikapú ya casi no se usa; hombres y mujeres utilizan ropa comercial común y corriente y prefieren la mezclilla.

La ropa tradicional sólo se usa en ceremonias rituales. El vestido de las mujeres consiste en blusas y faldas floreadas con pliegues y holanes; se adornan con aretes y collares, calzan tehuas. Para los hombres consta de camisas con alforzas y puños largos de campana, con plisados y encajes, abiertas por los costados. Sobre la camisa usan un chaleco de piel de venado bordado con chaquira. Algunas veces se complementa con un saco o chamarra. Los pantalones de piel, conocidos como mitazas, tienen holanes y borlas de estambre.

Calzan tehuas bordadas con chaquira.

La caza es la principal actividad de los hombres kikapúes, de ella se abastecen de carne y pieles. La cacería tiene un carácter ritual, se realiza de manera grupal durante todo el año, sobre todo de enero a abril, meses de celebraciones religiosas de año nuevo, bautizos y misas de agradecimiento a Kitzihaiata, su dios.

La agricultura es una actividad secundaria, pues ellos han sido cazadores por excelencia desde hace mucho tiempo. En el nacimiento existen pequeñas parcelas individuales cultivadas principalmente por personas mayores que no emigran; siembran trigo, avena, maíz, cebada, frijol y calabaza.

La recolección de nueces y de chile kipin o piquín tiene cierta importancia comercial; los árboles silvestres son propiedad de los kikapúes, y cualquier miembro de la tribu puede recolectar sus frutos; los intermediarios llegan al poblado a comprarlos.

Su mayor fuente de ingresos es el trabajo a jornal que realizan en

Estados Unidos, en la cosecha de frutas y hortalizas.

Kiliwa (Baja California Norte).

En la parte norte del territorio de Baja California, específicamente en los municipios de Ensenada, Tecate y Mexicali, se asientan cinco grupos indígenas que tienen un origen común. De acuerdo con el sitio ocupado en el territorio, las etnias bajacalifornianas reciben distintos nombres; así los cochimí y kumiai son llamados habitantes de la meseta; los cucapá son conocidos como rieños y los paipai y kiliwa reciben el apelativo de serreños.

El clima de la región es seco y extremoso. En la costa, la altitud oscila de los cero a los 500 msnm, en tanto que en la serranía llega a alcanzar hasta 2 000 m. el suelo es árido y semiárido con una vegetación en donde predominan los matorrales dispersos. Entre la flora encontramos

23

Page 24: Culturas actuales de mexico

gobernadora, palo verde, torote, jojoba, palo fierro, biznaga y otros cactos. En la sierra se encuentran bosques de pino enano.

Los kiliwa se denominan a sí mismos ko’lew, que significa «hombre cazador». Su lengua es conocida también con los nombres de quinicua, quiniwa, kolew, kj’wash, koj wash o ko’ jwaksh. Sus principales asentamientos están en las rancherías localizadas en el área conocida como Arroyo de León y en algunas comunidades como Santa Catarina, conviven con miembros del grupo Paipai. Esta región se ubica en el municipio de Ensenada, delegación del Álamo, dentro del valle de La Trinidad, al norte de la sierra de San Pedro Mártir y al sur de la sierra de Juárez, específicamente en las estribaciones de una pequeña serranía llamada localmente sierra de los tecolotes. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000) se reportaron 52 hablantes de este idioma, la mayoría de los cuales se encontraban en Baja California.

Las actividades productivas de la población indígena originaria de la entidad dependen, por un lado, de las condiciones del terreno ocupado y los recursos naturales que les proporciona su entorno y, por otro, del desarrollo de las actividades agropecuarias e industriales en tierras o poblados vecinos. En general, todos se dedican a las labores agrícolas y ganaderas dentro de sus propios terrenos o contratándose como jornaleros en los pueblos cercanos.

Otra fuente de ingresos proviene del trabajo eventual que desempeñan en la rama industrial de la región y de la elaboración de artesanías tradicionales que venden ocasionalmente en los mercados de sus localidades. El cultivo de maíz, frijol, cebada y trigo, así como la recolección de frutos silvestres, cumplen funciones generalmente de autoconsumo en todos los grupos.

La vivienda tradicional se construye aprovechando los materiales del lugar, tales como mezquite, álamo, sauce, chamizo, carrizo y cachanilla. Los servicios de electricidad, drenaje y agua entubada son deficientes.

Todos los asentamientos indígenas se encuentran comunicados a través de caminos de terracería, brechas y caminos rurales que conectan a la red carretera federal.

Kumiai. (Baja California Norte).

En la parte norte del territorio de Baja California, específicamente en los municipios de Ensenada, Tecate y Mexicali, se asientan cinco grupos indígenas que tienen un origen común. De acuerdo con el sitio ocupado en el territorio, las etnias bajacalifornianas reciben distintos nombres; así los cochimí y kumiai son llamados habitantes de la meseta; los cucapá son conocidos como rieños y los paipai y kiliwa reciben el apelativo de serreños.

El clima de la región es seco y extremoso. En la costa, la altitud oscila de los cero a los 500 msnm, en tanto que en la serranía llega a alcanzar hasta 2 000 m. el suelo es árido y semiárido con una vegetación en donde predominan los matorrales dispersos. Entre la flora encontramos gobernadora, palo verde, torote, jojoba, palo fierro, biznaga y otros cactos. En la sierra se encuentran bosques de pino enano.

24

Page 25: Culturas actuales de mexico

Los kumiai o kimiai, se llaman a sí mismos ti’pai. Sus comunidades se ubican en las mesetas costeras y están distribuidas en tres áreas territoriales: los de San José de la Zorra, municipio de Ensenada, y los de Neji y el Álamo, municipio de Tecate. Su lengua también es conocida como kamia, kmuyai o kemiaia.

En el censo del año 2000 se reportaron 161 hablantes de esta lengua, la mayoría en Baja California.

Lacandones. (Chiapas).

La palabra lacandón deriva del chortí lacam-tum, que significa «gran peñón» o «piedra erecta». Este vocablo fue aplicado durante la época colonial por los españoles para designar a los grupos indígenas que se refugiaron en el área selvática que hoy conocemos como Selva Lacandona.

Los lacandones se llaman a sí mismos hach winik, que significa «verdaderos hombres». La lengua lacandona, también llamada hach tan o hach t’an, pertenece al tronco maya, familia yucateca. Se consideran originarios de la Península de Yucatán y del Petén guatemalteco, que posteriormente migraron durante diversos periodos hacia la selva chiapaneca.

De acuerdo con los datos proporcionados por el XII Censo General de Población y Vivienda 2000, existen 635 hablantes de lacandón a nivel nacional, de los cuales se registraron 599 en Chiapas. Se dividen en dos grupos, los del norte, que habitan en las localidades de Nahá y Metzaboc, y los del sur, que viven en Lacan ha Chan Sayab, ambos en el municipio de Ocosingo, Chiapas.

El territorio ocupado por los lacandones tiene una extensión aproximada de 662 000 has., en un medio selvático que representa para ellos un vasto cúmulo de recursos naturales.

El patrón tradicional de subsistencia se basa en el uso múltiple de la tierra de la que aprovechan varias zonas ecológicas: la milpa, la selva, el acahual (zona de transición entre la selva y el campo agrícola) y las zonas acuáticas y semiacuáticas. El uso combinado de estas diversas áreas proporciona a los lacandones la posibilidad de aprovechamiento de una extensa variedad de productos animales, vegetales y minerales. La explotación agrícola se fundamenta en el sistema de roza-tumba y quema.

Otra de las actividades económicas que realizan es la ganadería de tipo extensivo en los terrenos agrícolas que se encuentran en periodo de descanso o barbecho. En éstos también se practica la caza y la recolección de leña y plantas que se utilizan para la construcción de sus casas, instrumentos agrícolas y utensilios de cocina, o bien para la alimentación.

La producción artesanal representa una fuente de ingreso económico, aunque su producción es mínima. Elaboran collares de semillas, objetos de barro y madera que generalmente son representaciones antropomorfas o de personajes de la tradición oral, así como arcos y flechas de bejuco. Las artesanías son vendidas en ciudades como Palenque y San Cristóbal de las Casas, e incluso viajan a Mérida, Chichén Itzá, Cancún o la Ciudad de México.

25

Page 26: Culturas actuales de mexico

Dentro del espacio sagrado o ritual, los dioses se materializan a través de incensarios de barro. Todos los actos rituales se fundamentan en el mismo patrón: ofrecer copal, comida y bebida ceremonial. Entre los ritos colectivos propiciatorios se encuentra el ofrecimiento de las primicias agrícolas que se llevan a cabo entre agosto y septiembre y el de renovación de incensarios que se efectúa aproximadamente cada seis años.

Los lacandones interactúan con choles y tzeltales, quienes llegaron a asentarse en la selva desde los años 50. La relación entre ellos ha sido conflictiva debido a que originalmente la dotación de 662 000 has. Entre 1971 y 1975 sólo fue para los lacandones, dejando de lado a los colonizadores de la selva que reclamaron el derecho sobre estas mismas tierras.

Mam. (Campeche - Chiapas - Quintana Roo).

El mam o mame es un grupo mayense que habita en México y en Guatemala. El vocablo mame se deriva del vocablo quiché mam que significa padre, abuelo o ancestro. Tanto en Guatemala como en Belice mam es sinónimo de las deidades de la montaña que riegan los cultivos.

La lengua mam, conocida también como mame o qyool, pertenece al tronco maya, y junto con el teco forma una familia.

El antiguo territorio mam en tiempos prehispánicos comprendía desde Quetzaltenango y Totonicapán, en Guatemala hasta el Soconusco en México. Más tarde, con la firma de los tratados de límites entre México y Guatemala en 1882 y 1894, el pueblo mam fue dividido por la línea fronteriza.

En 1883, población kanjobal, chuj, jacalteca y mam, originaria de guatemala, aprovecharon la promoción de la ocupación de terrenos nacionales impulsada por el gobierno de Porfirio Díaz para asentarse en la frontera chiapaneca y naturalizarse como mexicanos. Hacia la década de los 60 y 70 del siglo XX, debido a la escasez de tierra cultivable, la población mam fundó nuevos asentamientos en el municipio de Las Margaritas, en plena Selva Lacandona.

En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 5 450 hablantes de mam en Chiapas, y 7 580 a nivel nacional. Este censo también registró población mam en Quintana Roo y Campeche, probablemente como efecto de la reubicación de refugiados guatemaltecos que, huyendo de la guerra en su país, llegaron a territorio mexicano.

En Chiapas, el territorio mam abarca tres zonas fisiográficas, una es el macizo montañoso de la Sierra Madre de Chiapas, donde se ubican los municipios de El Porvenir, La Grandeza y Bellavista. Aquí, el clima es frío con lluvias abundantes y con un paisaje dominado por los bosques de coníferas.

Otra corresponde a los valles contiguos al Río Motozintla en los municipios de Amatenango de la Frontera, Mazapa de Madero y Motozintla. En esta región, el clima es templado húmedo con lluvias en verano y cubierto de pastizales. Por último, tenemos la zona de las faldas del volcán de Tacaná, en el municipio de Motozintla, con clima semicálido, lluvioso y áreas boscosas.

26

Page 27: Culturas actuales de mexico

Los mames practican una agricultura de subsistencia basada en maíz, frijol, papa, repollo y trigo, además de una pequeña producción de artículos para el comercio: ajonjolí, cacahuate, tomate, haba, cebolla, café y algunos frutales como naranja, guayaba, limón y plátano.

Las escasas artesanías que producen tienen un carácter utilitario y poca importancia comercial. En la sierra se elaboran cobijas y cotones de lana, en El Porvenir se hacen mantillones para las bestias de carga; en la localidad de Chisquibil, municipio de Bejucal de Ocampo practican la alfarería; en el Barrio de la Campana en Motozintla tejen esteras y petates, y en Mazapa de Madero hay algunos tejedores de palma. Las mujeres elaboran recipientes de barro como cazuelas, ollas y cántaros.

El Soconusco constituye la zona económica más importante de Chiapas por su producción agrícola de café, cacao, algodón y plátano. Sus fincas absorben la fuerza de trabajo de jornaleros provenientes de los Altos, de la Sierra Madre de Chiapas y de Guatemala; dentro de este contingente encontramos trabajadores mames.

Los mames tienen como vecinos a pequeños grupos de chujes, quichés, cakchiqueles, mochós y jacaltecos; los mames que viven en las faldas del Volcán Tacaná mantienen un estrecho contacto con los de Guatemala, interactuando con ellos comercial, social y culturalmente.

Matlatzincas. (Estado y Ciudad de México).

Matlatzinca es el término con que los mexicas designaron a este grupo. En náhuatl significa “los señores de la red” o “los que hacen redes”, y deriva de matlatl: red; zintil: reverencial y catl: gentilicio. Por otra parte, debido a que hubo grupos matlatzincas que ocuparon algunas zonas al interior de la región purépecha poco antes de la llegada de los españoles, sus pobladores los denominaron pirindas, es decir, “los de en medio”. Actualmente, el grupo se nombra a sí mismo matlatzinca.

El matlatzinca es uno de los pueblos indígenas del país que mayor desintegración ha sufrido. De haber sido un grupo que ocupaba un amplio territorio en la época prehispánica, el correspondiente a los actuales estados de Michoacán, Guerrero y México, se ha reducido a una sola comunidad: San Francisco Oxtotilpan, ubicada en el municipio de Temascaltepec, Estado de México. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000) se registraron 1 302 hablantes de matlatzinca, de los cuales 1 055 se encontraban en el Estado de México, y 220 en el Distrito Federal.

El pueblo de San Francisco Oxtotilpan se encuentra a 36 kms.

De la ciudad de Toluca y se ubica dentro del sistema orográfico del Nevado de Toluca, al pie de la Sierra de Temascaltepec.

Los montes cercanos como el Zinacantepec y la Sierra de Temascaltepec y Valle de Bravo, están cubiertos por bosques de coníferas (pinos, encinos, oyameles y ocotes).

27

Page 28: Culturas actuales de mexico

La lengua matlatzinca está considerada dentro de la rama otomangue, otomí-pame. En ésta hay cuatro familias: pame, jonaz, matlatzinca y otomazahua. A su vez, la familia matlatzinca se subdivide en dos lenguas: la matlatzinca y la ocuilteca.

En la actualidad, la lengua matlatzinca está desapareciendo debido a que cada vez son menos los hablantes. La mayoría de la población de San Francisco es bilingüe, y cada vez domina más el uso del castellano. El uso de la lengua materna se da entre la gente mayor y sólo en algunos niños pequeños.

Uno de los factores que ha provocado mayores cambios en la utilización de la lengua materna ha sido la migración. La necesidad de conocer y manejar el castellano fuera de la comunidad, así como la adquisición de nuevos patrones culturales, contribuyen a la reducción del número de hablantes.

La vivienda matlatzinca es por lo general de un solo cuarto, el cual se utiliza como dormitorio y cocina. Todas las casas cuentan con huertos donde se cultivan árboles frutales, verduras y flores; también cuentan con corrales donde se crían algunos animales domésticos. Es frecuente también encontrar temazcales.

La gran mayoría de los pobladores del municipio de Temascaltepec se dedica al trabajo agrícola; en la cabecera municipal se ocupan en actividades comerciales, educativas, de transporte, minería, de la construcción y servicios públicos.

La población de San Francisco es esencialmente agrícola.

Los productos principales, el maíz y el frijol, que se obtienen de la actividad agrícola, son para el consumo interno, y para la venta se produce la papa, el chícharo, la avena, el trigo, la caña de azúcar y diversas frutas.

La recolección de plantas, los huertos familiares y la cría de animales domésticos son también soportes de la economía matlatzinca. El ganado pequeño se alimenta con avena y cebada. Existe un pequeño comercio interno, donde a veces se hace el cambio de algún animal por un terreno, por costales de semilla o por lo que se considere equivalente.

El ganado es de considerable importancia por la manera como se vincula con la agricultura. Es una reserva alimenticia, muy útil en los trabajos de siembra, de limpia de terrenos, para acarreo, como transporte y como productores de abono. Los animales que se utilizan para estas actividades son caballos y bueyes. La poca leche que se obtiene de las reses es para consumo familiar. Algunas familias crían ovejas para vender la lana. En menor grado, existe la cría de cerdos para el consumo y la venta.

La explotación forestal es otra fuente de ingresos. Algunas comunidades comercian con ella, mientras que en otras, los productos forestales se cambian por otros de consumo familiar.

28

Page 29: Culturas actuales de mexico

Los matlatzincas complementan su economía con el trabajo asalariado migrando a las ciudades de México, Toluca o Cuernavaca.

La base de la organización social es la familia. Ésta se constituye mediante el matrimonio civil y/o religioso, o bien por “unión libre”. La residencia, por lo común, es patrilocal.

Una de las formas tradicionales que los matlatzincas conservan para la organización del trabajo es la denominada faena, es decir, la cooperación obligatoria que tienen que prestar los habitantes (principalmente los adultos de sexo masculino) para las obras en beneficio de la comunidad (construcción y reparación de caminos, construcción de la escuela, mantenimiento de las obras de riego, etcétera).

En San Francisco oxtotilpan prevalece el sistema de cargos.

Este sistema implica que los habitantes que han llegado a ser ciudadanos se emplean en algún puesto civil o religioso para el servicio de la comunidad. De hecho, la trayectoria de un individuo en el sistema se va alternando entre los cargos de la delegación municipal y de la iglesia. La religión predominante es la católica, pero alrededor de la cuarta parte de la población matlatzinca es protestante o adventista.

Las fiestas más importantes de la comunidad son la del santo patrono, y la del día de muertos. En ambas participan todos los habitantes del pueblo; los que residen fuera de él envían su cooperación para los gastos que sean necesarios.

Mayas. (Campeche - Yucatán - Quintana Roo)

El pueblo maya se concentra en los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, y se caracteriza por mantenerse como un grupo numeroso, culturalmente homogéneo que representa la mayor concentración de indígenas en una sola región.

El maya peninsular, conocido también como mayatan, mayat’an o yucateco, es la segunda lengua indígena del país; de acuerdo con el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), a nivel nacional había un total de 799 696 hablantes de lengua maya, de los cuales se registran 547 098 hablantes en Yucatán; en Campeche existen 75 874 hablantes y en Quintana Roo la población total de hablantes es de 163 477.

El idioma maya es utilizado por los nativos peninsulares y por una gran parte de la población mestiza como un elemento de interacción en sus relaciones sociales.

Las zonas agrícolas maiceras presentan los porcentajes más altos de población monolingüe de maya. Las mujeres emplean más la lengua maya que los hombres, y las nuevas generaciones hablan más el español que el maya.

La Península de Yucatán abarca 140 303 km en el extremo sureste de México; 50 952 km corresponden a Campeche, 38 508 a Yucatán y 50 843 a Quintana Roo. El territorio es una extensa planicie calcárea, cubierta por una delgada capa de suelo; salvo en el sur de Campeche y Quintana

29

Page 30: Culturas actuales de mexico

Roo, se carece de escurrimientos superficiales, por lo que la población se abastece de pozos naturales y artificiales, aguadas y cenotes.

El clima es cálido húmedo con una temperatura media anual de 26° C y una precipitación anual que fluctúa entre 750 mm en el noroeste y 1 500 en el sureste. En Campeche y Quintana Roo se encuentran las selvas de mayor talla donde se halla la caoba, el cedro, el guanacastle y diversas especies de palma, así como ecosistemas inundados donde abunda el mangle. En Yucatán la altura de la vegetación es menor. La fauna es abundante y variada, comprendiendo desde venado, jabalí, monos, ocelotes, entre los mamíferos, hasta varias especies de aves y reptiles.

La principal actividad de subsistencia de los campesinos mayas es la agricultura que se practica con la técnica de roza, tumba y quema, en un suelo muy delgado y pedregoso.

Cultivan hortalizas, árboles frutales y crían aves y cerdos. La apicultura es una fuente importante de ingresos, al igual que la explotación de maderas preciosas, la extracción del látex del chicozapote para elaborar el chicle, el corte de la hoja de guano para el techado de casas y la pesca de langosta en Quintana Roo.

Las casas de los mayas peninsulares son de planta absidal, redondeada en los extremos, con paredes de varas entretejidas, techo de dos aguas de hojas de guano, palma o zacate, sobre una base de tierra apisonada. En estas construcciones se emplean bejucos para las ligaduras en lugar de clavos. En Yucatán y Campeche tienen paredes recubiertas con barro y pintadas con cal. La casa tiene dos puertas, una enfrente de la otra; el solar de la casa tiene una superficie de alrededor de 800 mts, allí cultivan árboles frutales y hortalizas; además se encuentra una pequeña cocina, la despensa, la enramada para lavar la ropa, el gallinero, el chiquero, el apiario y la troje.

El traje típico de las mujeres mayas, también llamadas mestizas, se compone de un hipil o blusa larga, que es holgada y sin mangas, adornada en las orillas con tiras bordadas de coloridas flores, justán, rebozo ( booch’) y zapatillas o chinelas.

La indumentaria masculina ha cambiado, ya no usan ropa blanca sino de colores oscuros; el sombrero de ala ancha fue sustituido por la cachucha de tela y plástico; la guayabera o guayabana de cuadros o a rayas de nailon o poliéster ha remplazado a la de algodón; usan zapatos de piel, tenis o sandalias de plástico.

Sólo los mayas más conservadores visten camisa y calzón corto llamado cul-ex de color blanco, sombrero de palma o fieltro y alpargatas o sandalias taabilxaanab los mayas de la península elaboran múltiples artesanías, empleadas para la decoración, el uso doméstico, el ritual y el santuario. La cerámica artesanal se compone de escudillas, tazas, cántaros o tinajas, comales, ollas y juguetes de barro.

Respecto a los textiles aun se utiliza en el oriente de Yucatán un pequeño telar en el que se elaboran flecos para orillar las servilletas. Los bordados, ya sean a mano o en máquina de coser se producen en toda la península. Además se tejen hamacas con fibra de henequén.

30

Page 31: Culturas actuales de mexico

La talabartería se practica en Mérida, Umán, Espita, Valladolid, Ticul, Tekax, Motul, Sotuta, Maxcanú; en la ciudad de Campeche fabrican alpargatas, bolsas, carteras, cigarreras, valijas y portafolios que se comercializan en toda la península y en el sureste mexicano.

Durante las dos últimas décadas, el desarrollo de las zonas urbanas, de la ganadería y el incremento de la citricultura, han modificado significativamente la superficie boscosa que se ha reducido de 19 millones de hectáreas a sólo 9 millones. Esta área era la reserva de especies vegetales comestibles, maderables y medicinales.

El fenómeno migratorio es creciente. Los recién emigrados se enfrentan con problemas como son asentamientos irregulares, empleos subcalificados y mal pagados y viviendas de mala calidad. La migración se da a los centros turísticos de la península y también hacia el extranjero, Belice, Guatemala, Estados Unidos y Canadá.

Cada municipio tiene un presidente, así como consejales o ediles, jueces de paz y policías. Estas autoridades están subordinadas a los gobiernos de cada estado.

En los pueblos indígenas de la parte central de Quintana Roo, hay cargos militares de general, comandante, capitán y sargento; junto con el nojoch tata, los escribientes (sagrados) y los rezadores, conforman un selecto grupo que está integrado a la administración municipal.

Los mayas fincan su visión del mundo en torno del cultivo del maíz. En algunos lugares aún se rinde culto a deidades mayas prehispánicas como los cháak-es o dioses de la lluvia, a quienes se les ofrecen ceremonias anuales denominadas ch’a cháak con objeto de atraer las lluvias y obtener buenas cosechas en las milpas. También se venera a los «dueños» de todas las cosas y animales, a los yumtsilo’ob.

Mayos. (Sinaloa - Sonora).

Según la tradición oral del grupo, la palabra mayo significa «la gente de la ribera». Los mayos se reconocen a sí mismos como yoremes, «el pueblo que respeta la tradición»; en contraposición, al hombre blanco le llaman yori, «el que no respeta».

La región mayo se localiza entre la parte norte del Estado de Sinaloa y sur de Sonora. Las altitudes de su territorio varían desde el nivel del mar hasta los 100 m en la zona costera y los valles; hacia las faldas de la Sierra Madre Occidental llegan a los 2 000 m.

Según datos del XII Censo General de Población y Vivienda (2000), a nivel nacional se reportan 31 513 hablantes de mayo, de los cuales la mayoría residía en 11 municipios de Sonora, entre los que destacan Etchojoa, Huatabampo y Navojoa; y en menor medida en seis municipios de Sinaloa: Ahome, Fuerte, Guasave, Culiacán, Choix y Sinaloa de Leyva, en el primero de estos estados, la cifra total de hablantes de mayo ascendía a 24 114 personas, mientras que en segundo se identificaba una cifra importante de 6 865 hablantes.

31

Page 32: Culturas actuales de mexico

La lengua hablada por los mayos, al igual que los yaquis, es el cahita, también conocida como mayo o yoreme. Esta lengua pertenece a la familia taracahita del tronco yuto-nahua y está emparentada con el tarahumara y guarijío. Algunos lingüistas piensan que el mayo en realidad es una lengua distinta a la yaqui y no sólo se trata de variantes de una misma lengua.

La lengua dominante en la región es el español. Los índices de monolingüismo en este grupo son reducidos, registrándose generalmente entre los ancianos y los niños pequeños.

El territorio mayo abarca tres distintas subregiones: la falda de la sierra o sierra baja, el valle y la franja costera, con un clima que varía entre desértico y subtropical.

En la zona predomina la agricultura intensiva y altamente tecnificada donde es común el uso de fertilizantes, pesticidas y sistemas de riego, aunque también existe una franja de temporal. La producción se organiza ejidalmente; entre los mayos es frecuente que renten su tierra y se empleen ellos mismos como jornaleros agrícolas.

La vivienda se construye con diversos materiales que proporciona el medio ambiente, las hay a base de carrizo, corazón de pitahaya o sahuaro enjarrado de adobe.

En algunas casas se utiliza techo con estructura de madera y carrizo con emplastes de tierra, de adobe enjarrado y encalado para evitar el salitre. Normalmente cada hogar cuenta con una enramada hecha de postes de mezquite y techada con carrizo, tule o palma de acuerdo con la región.

Los rasgos de vestimenta tradicional mayo son prácticamente inexistentes. Sólo las antiguas referencias los describen con algunas pieles y telas rudimentarias y posteriormente, en el periodo revolucionario, con vestimenta de manta en hombres y mujeres. Actualmente, es común entre hombres y mujeres el uso de telas como la mezclilla y zapatos de corte moderno. En la vida ceremonial se conservan algunos elementos, sobre todo en el vestuario de los danzantes de pascola y venado y en algunos objetos de carácter emblemático utilizados en las ceremonias rituales.

Dentro de su vida social juegan un papel muy importante los centros ceremoniales, en donde se congregan los integrantes de diversas comunidades aledañas para la organización de sus fiestas tradicionales.

Mazahuas. (Estado de México - Michoacán)

Los mazahuas se llaman a sí mismos jñatjo. Se localizan en la parte noroeste del Estado de México y en una pequeña área del oriente del Estado de Michoacán.

La topografía de este territorio topografía se caracteriza por contar con un sistema montañoso de mediana altura. Los municipios que concentran la población mazahua son once, de los cuales diez se localizan en el Estado de México: Almoloya de Juárez, Atlacomulco, Donato Guerra, El Oro de

32

Page 33: Culturas actuales de mexico

Hidalgo, Ixtlahuaca, Jocotitlán, San Felipe del Progreso, Temascalcingo, Villa de Allende y Villa Victoria; y uno, Zitácuaro, en el Estado de Michoacán.

La región presenta un sistema montañoso constituido por pequeñas cordilleras de mediana altura que forman parte de la Sierra Madre Occidental y ramificaciones de la cordillera neovolcánica. Existen notorios contrastes: áreas boscosas y otras semidesérticas o con un alto grado de erosión. Algunas montañas están cubiertas por bosques de árboles maderables.

La caza furtiva y la deforestación en la región, han originado que las especies de flora y fauna se encuentren en peligro de extinción.

De acuerdo con los datos del censo del INEGI del año (2000), en el país había 133 430 personas de 5 años y más hablantes de lengua mazahua. De éstas, el 90% se localizan en el Estado de México constituyendo el grupo indígena mayoritario en esa entidad.

La lengua mazahua se ubica en la familia otopame del tronco lingüístico otomangue. Esta lengua, conocida también como hnatso, hnatzo, ji naa o jñatjo, se encuentra emparentada con las lenguas otomí, pame, matlatzinca, ocuilteca y chichimeca.

En la región mazahua se produce principalmente maíz y en menor cantidad frijol, trigo, cebada, avena y papa; en algunos municipios cultivan chícharo, hortalizas y flores. La producción es básicamente para autoconsumo. La actividad pecuaria es de baja escala, no obstante constituye un apoyo importante para la economía familiar, principalmente la cría de ganado ovino y bovino. En algunos municipios se produce madera en rollo, raja para leña y carbón de encino.

Las actividades productivas las realizan en forma familiar y recurren a sus parientes más cercanos en la época de mayor trabajo en los cultivos. Utilizan herramientas tradicionales como mulas y bueyes en las labores agrícolas; en las mesetas y valles recurren al tractor para la roturación, barbecho, rastra y apertura de surcos, en algunos casos utilizan también la sembradora.

Debido a la insuficiente producción de alimentos, la mala calidad del suelo y el extremo minifundismo, los mazahuas han tenido que emigrar en busca de trabajo.

Los lugares más importantes de atracción migratoria son las ciudades de México y Toluca. La población migrante está formada tanto por hombres como por mujeres; ellos, empleándose como peones en lugares cercanos o como albañiles y obreros en los centros urbanos, las mujeres como sirvientas o como vendedoras ambulantes; en la Ciudad de México, a estas últimas se les identifica como «Marías».

La indumentaria de este grupo se ha transformado.

Actualmente la ropa tradicional está más arraigada en las mujeres; consta de falda y blusa de tela de satín de colores fuertes y brillantes (azul rojo, rosa mexicano y verde limón).

La falda es plisada con adornos de encaje en su alrededor.

33

Page 34: Culturas actuales de mexico

La blusa, del mismo material, tiene adornos de encaje o de la misma tela en el cuello, pecho y espalda. Usan una falda interior blanca de manta o popelina plisada y adornada con una tira bordada que sobresale a la falda de color. Para protegerse del frío se cubren con un quexquémitl que consta de dos tiras anchas unidas en forma de triángulo, de tal manera que queda un hueco por el que introducen la cabeza.

Esta prenda es de lana de color azul, negro o café con delgadas líneas blancas, con bordado de flores o grecas alrededor del cuello.

En distintas localidades de la región se confeccionan cobijas, fajas, tapetes, cojines, manteles, morrales y quexquémitl de lana. En San Felipe del Progreso hay personas que se dedican a la elaboración de piezas de plata como arracadas, anillos, collares y pulseras; en distintas ocasiones han recibido premios por la técnica y por la belleza de sus obras.

El grupo mazahua mantiene el trabajo colectivo llamado «faena» que consiste en la cooperación de los miembros de la comunidad para la realización de obras o trabajos de beneficio colectivo como son escuelas, mercados y caminos.

En la actualidad los cargos religiosos tradicionales como el de la mayordomía se practica cada vez menos, principalmente entre los jóvenes; son los ancianos quienes tratan de mantenerlos. Las principales fiestas religiosas que se celebran son las del santo patrono de cada comunidad, la de la Virgen de Guadalupe, semana santa, y la de Nuestro Padre Jesús en San Felipe del Progreso, durante la segunda semana de enero.

Mazatecos. (Oaxaca).

Los mazatecos se autodenominan, ha shuta enima, que en su lengua quiere decir «los que trabajamos el monte, humildes, gente de costumbre».

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000), reportó 214 477 hablantes de mazateco a nivel nacional, que en su mayor parte, es decir 174 352 se concentraban en el Estado de Oaxaca, registrándose importantes núcleos de hablante de esta lengua en los estados de Puebla con 11 892; México, 8 796; Veracruz, 8 784; y, Distrito Federal, 8 591.

El mazateco, o chota te ho, deriva de la familia popoloca del tronco otomangue. La lengua mazateca es tonal y se caracteriza por sus numerosas variaciones locales en la forma de hablarlo, a tal grado que prácticamente cada municipio tiene una variante dialectal.

En los rituales religiosos se utiliza el idioma mazateco, intercalado con algunas frases en español; las misas católicas y los cultos protestantes se hacen en español. Para los asuntos políticos y las transacciones comerciales se utilizan los dos idiomas.

El territorio mazateco se ubica en el Estado de Oaxaca, en las regiones de la cañada y el Valle del Papaloapan-Tuxtepec que abarcan tres regiones ecológicas: la tierra caliente, la tierra templada y

34

Page 35: Culturas actuales de mexico

la tierra fría. El territorio comprende una parte alta enclavada en los contrafuertes de la sierra madre oriental, y una parte baja ubicada en la cuenca del Papaloapan.

Los asentamientos pueden ser compactos, semidispersos o dispersos, dependiendo de su localización en pendientes o en las planicies. Destacan por su concentración de población mazateca los municipios de Huautla de Jiménez, nuevo Soyaltepec, Santa María Chilchotla, San José Tenango y San Felipe Jalapa de Díaz en Oaxaca, y Playa Vicente en Veracruz.

La vivienda tradicional se construye con otates, madera, bambú y adobe en las paredes, con techos de palma o de paja; sin embargo estos materiales hoy en día tienden a ser sustituidos por ladrillo, cemento y láminas de asbesto o metálicas.

Uno de los acontecimientos que más ha afectado al pueblo mazateco fue la construcción de la presa Miguel Alemán (1953-1957) en su territorio. Esto provocó el desplazamiento de alrededor de 22 000 indígenas que fueron reacomodados en nuevos centros de población. Este reacomodo tuvo una serie de repercusiones en la vida social del grupo, pues la pesca ganó en importancia a la agricultura; se generaron en el curso cambios en relación a la autoridad política, y la vida ceremonial también se vio afectada pues muchas de las rutas al Santuario de Otatitlán fueron cubiertas por las aguas.

La pesca y la agricultura son las actividades económicas más importantes. La agricultura de autoconsumo cada día es más desplazada por la tecnificada de cultivos de caña de azúcar y de café y por las actividades pecuarias para la producción de carne. La actividad forestal, controlada por compañías papeleras desde hace mucho tiempo, no aporta beneficios a la región. En las actividades productivas se utilizan técnicas tradicionales, mezcladas con técnicas modernas en el caso del cultivo del café y la pesca.

Sólo los ancianos utilizan el vestido tradicional. Las mujeres utilizan un huipil con listones y franjas multicolores entrelazadas, motivos bordados y encajes blancos y que llega hasta las rodillas. Se complementa con una enagua o enredo llamado coti y con coloridos collares y aretes.

Hombres y mujeres usan huaraches de cuero o andan descalzos. Muy pocos hombres usan el calzón y la camisa de manta, que identifican al atuendo tradicional.

Mexicaneros. (Durango - Nayarit).

El pueblo que vive en la región del gran nayar y habla la lengua náhuatl, se llama a sí mismo mexicanero. Las principales comunidades mexicaneras son Santa Cruz de Güejolota, en el municipio de Acaponeta, Estado de Nayarit (en donde son vecinos del pueblo cora o náayariite), San Pedro Jícora y San Buenaventura, en el municipio de Mezquital, Estado de Durango (en donde son vecinos del pueblo tepehuán del sur u o’dam). Los mexicaneros también comparten el territorio Nayar con el pueblo huichol. La mayoría de los mexicaneros son bilingües (mexicanero-español), aunque también hay trilingües y hasta algunos casos excepcionales de cuatrilingüismo (tepehuán-huichol).

35

Page 36: Culturas actuales de mexico

De acuerdo a la tradición oral, una peregrinación del norte iba siguiendo la trayectoria de una águila que finalmente detendría su vuelo en Tenochtitlan; algunos hijos de estos peregrinos se dispersaron llegando a su actual asentamiento. Según otra versión, en el trayecto de la misma peregrinación, algunos se quedaron en Guadalajara y de ahí llegaron a su actual asentamiento.

Los mexicaneros acostumbran la residencia patrilocal, de manera que cuando una pareja contrae matrimonio construye una casa cercana a la casa del padre del esposo. El mismo sentido patrilineal tiene la herencia de la tierra.

Los asentamientos son dispesos: unas cuantas familias ocupan el centro político-religioso y otras las rancherías de la comunidad, localalidades que se encuentran a cierta distancia del centro.

Existen dos tipos de vivienda: una, de temporada seca, cercana a las milpas; otra, de tiempo de lluvia, que generalmente está en un cerro alejado de los servicios del centro político-religioso de la comunidad. Las viviendas están integradas generalmente por tres construcciones: dormitorio, cocina y “carretón”, bodega elevada, descubierta al frente, donde se almacenan granos y herramientas. Debido al clima, en temporada de calor se duerme a la intemperie.

Durante la temporada seca, muchos mexicaneros migran temporalmente a la costa nayarita, a los municipios de Acaponeta y Ruiz, en donde, se contratan como jornaleros agrícolas para el ensarte de tabaco y el corte de caña.

Tras esta temporada de trabajo, regresan a sus comunidades para iniciar las labores agrícolas y las ceremonias ligadas a ellas: los Xuravet, ceremonias de petición de lluvia y salud.

Anualmente se realizan cinco Xuravet en la comunidad: el de los tamales (febrero), el del agua (mayo) y el de la bendición del elote (septiembre); en cada una de estas fechas, se realizan una o dos ceremonias hasta completar cinco; en el ámbito familiar también se realizan los Xuravet como respecto a la residencia y la herencia, con una tendencia patrilineal.

En todos los casos, los Xuravet se hacen en los patios, sean comunales o familiares, se enciende una fogata, se danza, se reza, se acuerda quiénes irán a “venadear” y, de ser exitosa la caza, se consume una comida ritual preparada a base de venado. Estas ceremonias son conducidas por el mayor y la mayora del patio, quienes mantienen su cargo hasta la muerte.

Además de las fiestas agrícolas de Xuravet, los mexicaneros celebran las fiestas patronales, el carnaval, la semana santa y todos santos. Para estas celebraciones, la máxima autoridad religiosa es el mayordomo, quien se ayuda del prioste, el pasionero y el tinantzil o copalero.

Durante estas fiestas, los mayordomos se encargan de proveer al animal sacrificial que servirá de alimento: la res.

Las autoridades civiles de la comunidad: gobernador, suplente, alguacil, capitán de campo y ayudantes, participan y cooperan en la realización de las diversas ceremonias religiosas.

36

Page 37: Culturas actuales de mexico

Los médicos tradicionales descubren su vocación y aprenden su oficio en sueños. Lo mismo que los mayores de patio, para poder ejercer su conocimiento, los médicos tradicionales deben ayunar y retirarse al monte un mes al año durante cinco años.

Además de tratar diversas enfermedades (para cada una de las cuales tienen una flecha, considerada medicina junto con el tabaco macuche que sirve de correo para comunicarse con dios), los médicos tradicionales mexicaneros llevan a cabo diversos ritos de paso: a las niñas, al cumplir el primer y el segundo año de vida, cuando mudan, cuando les comienzan a crecer los senos y al llegar la menarquía les hacen el cochiste; a los muertos, al cumplir un año de fallecido se les realiza la “corrida del alma”.

Mixes. (Oaxaca).

Los mixes se llaman a sí mismos ayuuk jä’äy. La lengua que hablan es ayuuk, o ayook que es el nombre con que históricamente se conoce al grupo. La palabra ayuuk está compuesta de los siguientes vocablos: a = idioma, palabra; yuuk = montaña, florido; y jä’äy = gente, muchedumbre. Por lo tanto su significado es «gente de idioma florido».

El mixe pertenece a la familia mixe-zoque. Entre los ayuuk jä’äy existen variantes dialectales intelegibles entre sí, sin embargo, cada pueblo considera que el mixe que habla es el correcto.

De acuerdo con el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), había 118 924 hablantes de mixe en el país, de los cuales 105 443 habitaban en el estado de Oaxaca.

La región mixe se encuentra enclavada en la serranía del Zempoaltépetl, al noreste del Estado de Oaxaca. Colinda al noroeste con los exdistritos de Villa Alta; al norte con Choapam y con el estado de Veracruz; al sur con Yautepec y al sureste con Juchitán y Tehuantepec. Su topografía es accidentada, por lo que se pueden encontrar varios microclimas en un espacio geográfico reducido. Abarca 19 municipios en tres zonas climáticas: alta o fría con altitudes superiores a los 1 800 msnm; la media o templada con alturas de 1 300 a 1 800 m y la baja o caliente que comprende de los 35 a los 1000 m. El territorio mixe es rico en recursos forestales, en donde abunda el ocote y pino, y en menor escala el cedro, caoba, fresno y ciprés.

En la región se practica una agricultura de subsistencia. En las zonas altas y frías se siembra papa, maíz, frijol y calabaza; en las zonas templadas y cálidas, maíz, frijol, camote, caña de azúcar y chile; en la zona central y baja, se cosechan cítricos y café. Este último producto es el de mayor comercialización.

Los pueblos de la zona norte, que colindan con los zapotecos de Villa Alta y con algunos chinantecos, practican relaciones a nivel comercial, mientras que otras comunidades, también de la parte alta y que colindan al sur y suroeste con zapotecos del valle, interactúan con sus vecinos en un nivel religioso y económico; los municipios ubicados en la zona media o centro tienen fuerte interacción en el orden religioso y de parentesco ritual con los zapotecos de Yautepec y Del Valle.

37

Page 38: Culturas actuales de mexico

Los hombres visten a la usanza campesina: camisa de algodón o popelina, pantalón de dril y sombrero de palma, calzan huaraches o botas de hule. En las zonas altas se protegen del frío con gabanes de lana.

El atuendo de la mujer es variable, de tal manera que puede indicarnos el lugar de su procedencia. Cuatro trajes típicos son los correspondientes a Tamazulapam, Mixistlán, Cotzocón y Guichicovi; cada uno con sus variantes, pero todos constan de un huipil y enredo, que las propias mujeres confeccionan en telar de cintura.

Mixtecos. (Guerrero - Oaxaca - Puebla).

Los mixtecos se autonombran ñuu savi, que significa en castellano «pueblo de la lluvia». Desde el siglo XVI, con la llegada de los españoles a la región donde habitan, se le conoce como la mixteca. La región ocupada por los mixtecos abarca parte de los Estados de Oaxaca, Guerrero y Puebla.

En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron en el país 444 498 hablantes de mixteco, de los cuales 244 029 residían en 203 municipios de Oaxaca, ubicados mayoritariamente en los exdistritos de Silacayoapan, Huajuapan, Juxtlahuaca, Coixtlahuaca, Nochixtlán, Teposcolula, Putla y Jamiltepec; otros lugares de concentración importantes se registraron en los estados de Guerrero, con 103 152 hablantes; México, 27 311; Baja California, 14 184; Sinaloa, 13 888; y, en el Distrito Federal 27 311.

La lengua mixteca se deriva del tronco otomangue; junto con el cuicateco y el triqui forma la familia mixteca. De acuerdo con los datos proporcionados por los lingüistas, existen por lo menos cinco lenguas mixtecas: mixteco de la costa, o tu’un sa’an va’a, tu’un ca’an va’a, tye’enli, o tsa ca’an va’a; mixteco de la mixteca alta llamado también hñuu dabi, sain sau, hñuu davi, ñayuu sau, sañi sau, nchivi savi, tunu’u o tu’u ca’a caji; mixteco de la mixteca baja o ñuu sabi, ñuu savi, tacuate, tu’un davi, ñayiu dau, to’o nda’i o ca’a nda’i; mixteco de la zona mazateca o ña ma ñuu y mixteco de Puebla.

En Oaxaca existen aún casas de planta circular, sobre todo en la costa, aunque es más común encontrar casas rectangulares de 4 x 6 m, usadas como dormitorios, con una pieza más pequeña usada como cocina. La casa tradicional cuenta con una sola puerta que abre hacia el solar, rara vez a la calle.

Los materiales utilizados para su construcción pueden ser desde los troncos, tejamanil, zacate, hojas de ocote y maguey, hasta los de reciente introducción como láminas de asbesto o aluminio y en ocasiones, loza de concreto.

La agricultura es la actividad económica básica; se cultivan superficies menores a las dos hectàreas, generalmente de temporal, bastante erosionadas y poco propias para cultivo.

Los principales productos que se obtienen son maíz, frijol, trigo, ajo, tomate y cebolla. Los recursos forestales se explotan a nivel individual y de manera limitada pues la tala inmoderada ha llevado a deforestar grandes extensiones de tierra en la región.

38

Page 39: Culturas actuales de mexico

La ganadería es extensiva de especies menores (cabras y ovejas) e igualmente pobre. La minería prácticamente está en receso, pues actualmente no se explotan los recursos minerales que hay en la región. La explotación pesquera enfrenta problemas legales; sin embargo se consumen especies a nivel local, cuya pesca se realiza de forma rudimentaria.

La región mixteca se caracteriza por una diversificada producción artesanal. Se manufacturan pozahuancos, textiles de algodón y lana como servilletas, cobijas, huipiles, morrales, ceñidores, camisas, cotones, rebozos y enredos de lana; cestería de carrizo y de palma, muebles, velas, cerámicas de diversos barros para distintos usos, talabartería y herrería.

Con la caída del comercio de la grana, a fines del siglo pasado, la población mixteca empezó a emigrar estacionalmente. Este fenómeno se ha venido incrementando debido sobre todo al dramático proceso de erosión del suelo de la región, de tal manera que hoy la mixteca es la principal región expulsora de mano de obra existente en el país. La mayoría de los migrantes va a trabajar a la zafra en Veracruz y Morelos, al corte de algodón en Sonora, a la pizca de jitomate en Sinaloa, a la construcción y otras actividades en el Distrito Federal o a los campos hortícolas de Estados Unidos.

En el exterior, los mixtecos no pierden los lazos que los vinculan con su lugar de origen, sino por el contrario, la tradición y la identidad se mantienen a través de las organizaciones de migrantes. En Estados Unidos, los mixtecos se han organizado para reivindicar sus derechos laborales, civiles y humanos.

Motozintlecos o Mochós. (Chiapas).

Los miembros de este grupo se llaman a sí mismos mochós.

Este vocablo significa «no hay» y se dice que al llegar los españoles, preguntaban a los antiguos habitantes por el nombre del lugar y lo único que éstos respondían era mochó, mochó. También se les conoce por el nombre de motozintlecos, aunque este término se confunde con el gentilicio de la población originaria de motozintla.

Los mochós se asientan actualmente en los barrios aledaños a la cabecera municipal de Motozintla de Mendoza, población enclavada en la sierra de Chiapas. El municipio de Motozintla se ubica al suroeste del estado, a una altitud de 1 300 msnm; limita al este con Guatemala y su extensión territorial es de 782 km.

La lengua mochó, motozintleco o qatok se clasifica dentro del tronco lingüístico maya, familia macro kanjobal. Esta lengua se consideraba desaparecida, pero en 1967 el Museo Nacional de Antropología señaló la existencia de hablantes de mochó y de tuzanteco, una variante dialectal del mochó según los lingüistas.

Para el año 2000 se registraron en el país 174 hablantes de mochó, de los cuales 162 se localizaban en el Estado de Chiapas.

39

Page 40: Culturas actuales de mexico

Antiguamente los mochós construían sus viviendas con paredes de tejamanil y techo de este mismo material o con hojas de palma. En la actualidad, la vivienda se construye con paredes de adobe, techos de lámina de zinc y piso de cemento.

Las mujeres tenían como indumentaria tradicional una blusa de holanes con cuello ribeteado de encaje; utilizaban una enagua amplia como falda y, como complemento, cubrían su cabeza con un rebozo. Entre los hombres era el calzón de manta, sujeto con un ceñidor de color rojo, así como la camisa de manta y los huaraches. En la actualidad, los mochós ya no usan estas prendas tradicionales.

Desde el punto de vista económico, los mochós dependen fundamentalmente de la agricultura, sin embargo, el trabajo en las fincas cafetaleras del soconusco y la venta de copal son los medios fundamentales de su ingreso económico.

Mantienen contacto con la población mestiza de motozintla y con otros pueblos indígenas, como son los mames y los cakchiqueles.

La venta de los productos agrícolas de las comunidades campesinas en los mercados regionales es un espacio importante de interacción de estos pueblos.

Nahuas. (Puebla - Veracruz - Hidalgo - San Luis Potosí - Guerrero - Estado de México - Distrito Federal - Tlaxcala - Morelos - Oaxaca - Tabasco - Tamaulipas - Michoacán - Jalisco - Durango - Nayarit).

El término nahua hace referencia a una comunidad lingüística compuesta por una serie de grupos que hablan la lengua mexicana y que, herederos de las grandes culturas del altiplano central, llegaron a dominar la cuenca de México y la región mesoamericana en la época prehispánica.

El vocablo nahua significa hablar con claridad, con autoridad o conocimiento, aunque en algunas regiones los nahuas se refieren a sí mismos como macehuale, campesinos, tal vez haciendo referencia a la antigua división clasista de la sociedad nahua que dividía a la población en pillis y macehuales. Estos últimos eran la gente del común, los tributarios, casi siempre campesinos.

Actualmente los pueblos nahuas están distribuidos en el territorio nacional desde Durango hasta el sur de Tabasco. Se encuentran en mayor número en Puebla, Veracruz, Hidalgo, San Luis Potosí y Guerrero, y en menor proporción en el Estado de México, Distrito Federal, Tlaxcala, Morelos, Oaxaca, Tabasco, Tamaulipas, Michoacán, Jalisco, Durango y Nayarit.

Desde el punto de vista lingüístico, las lenguas nahuas, también conocidas como azteca, macehuali, mexicanero, mexicano, náhual o nahuat, pertenecen al tronco yuto-nahua, y junto con el pipil, lengua indígena centroamericana, forman la familia náhuatl, cuya antigüedad es de aproximadamente 45 a 47 siglos. Los especialistas consideran que el náhuatl tiene cuatro variantes: a) náhuatl del oeste (Toluca, Michoacán, Guerrero y Morelos), b) náhuatl central (valle de México, Puebla y Tlaxcala), c) náhuatl septentrional (la huasteca) y d) náhuatl del este (Puebla, Veracruz, Oaxaca y el pipil de centroamérica).

40

Page 41: Culturas actuales de mexico

En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), se registraron 1 448 936 hablantes de náhuatl a nivel nacional, lo que coloca a esta lengua como la primera lengua indígena del país, considerando que su número constituyó el 24% de la población hablante de lengua indígena registrada.

Los nahuas son pueblos agricultores que tienen un profundo respeto por la naturaleza, expresado en su trabajo, ceremonias rituales y fiestas. Sus productos artesanales están destinados a cubrir necesidades cotidianas. Así, encontramos pueblos alfareros, herreros o dedicados a producir objetos rituales como las ceras, el papel picado, las máscaras o la pirotecnia.

Los actuales pueblos nahuas han heredado una tradicional cosmovisión mesoamericana basada en una oposición dual de contrarios que divide el cosmos en fuerzas complementarias y opuestas. El ser humano debe procurar la armonía con sus semejantes y con la naturaleza pues los excesos, imprudencia y transgresiones ponen en peligro su salud y su vida.

Los grupos nahuas no forman una unidad política, sino están diseminados en el territorio nacional, configurando sociedades regionales específicas en donde interactúan con mestizos y otros grupos étnicos.

Otomíes. (Puebla - Hidalgo - Michoacán).

Los otomíes del Valle del Mezquital, Hidalgo, se llaman a sí mismos hñä hñü, de hñä, hablar y hñü, nariz, es decir, los que hablan la lengua nasal, aunque los otomíes de la sierra oriental se refieren a sí mismos como n’hyühü.

Son un pueblo montañés que habita en las zonas de tierra fría y templada del centro de la República mexicana y sus altiplanos: la sierra de las cruces, la meseta de Ixtlahuaca-Toluca, la escarpa occidental de la mesa central, los valles de Querétaro e Hidalgo, la Sierra Gorda, el Valle del Río Laja, los valles de Guanajuato, la sierra de Puebla y algunos lugares en el estado de Michoacán y Tlaxcala.

Las lenguas otomíes, también conocidas como hia hiu, hña’no, ñah ñu, ñuhu, ñ’ah ñu, jia jiu o ra yuhu, se derivan del tronco otomangue, familia otopame. En el censo general de población y vivienda (2000) se registraron 291 722 hablantes de otomí a nivel nacional, concentrados principalmente en los estados de Hidalgo, México, Quéretaro, Distrito Federal, Michoacán, Veracruz y Puebla.

Son un pueblo agrícola cuya base nutricional es el maíz y el pulque, bebida fermentada que obtienen de la planta de maguey. En algunos lugares además de la milpa, producen ciertos cultivos comerciales como el trigo, la cebada, el cacahuate, el café, el jitomate y el garbanzo.

En las zonas frías es común la cría de borregos, especialmente para la obtención de lana que utilizan para el tejido de algunas prendas. Practican la alfarería, el tejido de cestería y en algunos lugares se conserva la técnica prehispánica del tejido de telar. Para complementar su economía,

41

Page 42: Culturas actuales de mexico

los hombres se ven obligados a migrar temporalmente para emplearse como jornaleros o peones en las ciudades o incluso viajan a Estados Unidos.

La indumentaria masculina se asemeja a la de los campesinos de la región. En el caso de las mujeres, son las ancianas quienes suelen usar la blusa tradicional de manta con bordados de colores en cuello y mangas. Encima de ésta llevan un quexquémitl o en su defecto, un rebozo.

Paipai. (Baja California Norte).

En la parte norte del territorio de Baja California, específicamente en los municipios de Ensenada, Tecate y Mexicali, se asientan cinco grupos indígenas que tienen un origen común. De acuerdo con el sitio ocupado en el territorio, las etnias bajacalifornianas reciben distintos nombres; así los cochimí y kumiai son llamados habitantes de la meseta; los cucapá son conocidos como rieños y los paipai y kiliwa reciben el apelativo de serreños.

El clima de la región es seco y extremoso. En la costa, la altitud oscila de los cero a los 500 msnm, en tanto que en la serranía llega a alcanzar hasta 2 000 m. el suelo es árido y semiárido con una vegetación en donde predominan los matorrales dispersos. Entre la flora encontramos gobernadora, palo verde, torote, jojoba, palo fierro, biznaga y otros cactos. En la sierra se encuentran bosques de pino enano.

Los paipai quienes se autonombran akwa’al a o akwa ala se asientan en las sierras de Juárez y San Pedro Mártir, en el municipio de Ensenada, con tres localidades importantes: Santa Catarina, Jamao y San Isidro. En el censo del año 2000 se reportaron 201 hablantes de paipai, viviendo mayoritariamente en Baja California.

Pames. (Querétaro - San Luis Potosí).

Los pames se llaman a sí mismos xi’ui que significa «indígena», este término se utiliza para referirse a toda persona descendiente de no mestiza.

La región pame, también conocida como pamería, se encuentra en la región montañosa y desértica de la sierra madre oriental del estado de San Luis Potosí y una pequeña fracción del norte de Querétaro. Dentro del primero, la zona xi’ui comprende cinco municipios: Ciudad del Maíz, Alaquines, Tamasopo, Rayón y Santa Catarina. En el estado de Querétaro se ubican principalmente en los municipios de Jalpa de Serra y Arroyo Seco.

El territorio presenta variaciones altitudinales que van de los 350 a los 1 640 msnm, con tres tipos contrastantes de vegetación. Una boscosa de encino y pino en las zonas más elevadas; otra tropical de hojas perennes, con abundancia de palo mulato, cedro rojo, encino y roble en el municipio de tamasopo y el este del de ciudad maíz, y finalmente una vegetación de tipo matorral submontano con huizache, mezquite, cactus y agaves en los municipios de Ciudad Maíz y Alaquines.

42

Page 43: Culturas actuales de mexico

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) registró 8 312 hablantes de pame a nivel nacional. En el estado de San Luis Potosí se encontraron 7 975 hablantes de pame concentrados en los municipios de Santa Catarina, Tamasopo y Rayón. En el estado de Querétaro se registraron 104, aunque otras fuentes reportan la existencia de un número mayor.

Algunos especialistas consideran que existen por lo menos dos lenguas pames: el pame del norte y el del sur. Estas forman parte del tronco lingüístico otomangue, familia otopame. El pame del norte también es conocido como xi yui, xi’ yui, xi’oi, xigue o xiuch, en tanto que, en Hidalgo, el pame del sur es llamado meco.

Cada individuo que forma una nueva familia construye su vivienda ayudado por sus familiares y amigos; la construcción de la vivienda es un asunto exclusivamente masculino. La casa habitación tradicional es un jacal de planta cuadrada o rectangular, a veces con uno o dos lados redondeados, las paredes son de una hilera de varilla de madera o dos hileras que contienen piedras, en ocasiones las paredes se enjarran con lodo. También son comunes las paredes de tablones o de adobes. Los techos por lo general son de «dos aguas» cubiertos de palma, aunque cada vez son más comunes los techos de lámina galvanizada.

En el aspecto de indumentaria, los xi’ui no se distinguen de la población mestiza, dado que siguen el patrón común de la población rural regional.

Con las fibras de la palma las mujeres hacen chiquihuites, petates y venteadores; también elaboran piezas de alfarería como son comales, cántaros y otros enseres de cocina.

Los hombres xi’ui elaboran canastos y colotes de carrizo, además de fabricar en madera una serie de implementos necesarios para las labores agrícolas y el menaje doméstico, de este mismo material también fabrican máscaras. La producción artesanal se dedica tanto al autoconsumo como al mercado.

Pápagos. (Sonora).

Durante la época colonial se les llamó «pimas altos», pero a partir del siglo XIX se les denominó pápagos, término que significa «comedores de frijol» o «pimas frijoleros»; se les aplicó este nombre porque su siembra principal era el frijol.

Ellos se reconocen a sí mismos con el término tohono o’otham, que quiere decir «gente del desierto».

El pápago es un grupo binacional desde que el establecimiento de la línea fronteriza entre México y Estados Unidos dividió su territorio, por lo que sus miembros tuvieron que elegir alguna de las dos nacionalidades. En la porción norteamericana, los pápagos fueron confinados a una pequeña reservación, mientras que del lado mexicano fueron despojados de la mayor parte de su territorio.

Se localizan en Arizona, Estados Unidos y en Sonora, México.

43

Page 44: Culturas actuales de mexico

Desde 1937, en Estados Unidos los acuerdos de la Indian Reorganization Act (1934) dividieron el territorio de las reservaciones pápago en once distritos; cada uno de ellos tiene su propio consejo y cuenta con dos representantes en el Papago Tribal Council.

En 1983 se creó en Sells, la cabecera de la reservación, la oficina Tohono O’otham In Mexico Office, que se encarga de las relaciones entre los o’otham de ambos países.

Se estima que hay una población de 335 hablantes de o’otham en sonora, que habitan principalmente en los municipios de Altar, Caborca, Plutarco Elías Calles y Saric, aunque el Censo General de Población y Vivienda (2000) registró sólo 125 hablantes de pápago en Sonora y 141 a nivel nacional.

En Estados Unidos se calcula su número en alrededor de 20 000 personas, muchas de las cuales se concentran en la reservación de Sells.

Según varios estudios lingüísticos, la lengua pápago, también conocida como pima alto, himeri o tono-ooh’tam se clasifica dentro de la familia pimana (también llamada tepimana) del tronco yuto-nahua. Tiene relación cercana con la lengua pima y la tepehuana.

En México son los adultos, generalmente los ancianos, quienes utilizan más el pápago en sus conversaciones. Entre los tohono o’otham de Estados Unidos hay un número elevado de bilingües que hablan inglés y el idioma vernáculo. Algunos o’otham de ambos países que viven cerca de la frontera hablan pápago, español e inglés.

El desierto de altar-yuma, o desierto de Sonora-Arizona es uno de los lugares con los más bajos índices de humedad en todo el mundo. Tiene una fauna pobre y vegetación baja, diseminada en manchones de matorral espinoso. Se considera llanura desértica, su clima es seco desértico muy cálido, extremoso, con fuertes variaciones en cuanto a la temperatura y la humedad; hay zonas con clima tipo estepario semicálido.

El desierto se ha ido transformando con la introducción del ganado, la excavación de pozos profundos y el trazado de caminos; además han florecido importantes centros de población.

Actualmente la ganadería es parte fundamental de la economía de los pápagos del lado norteamericano; un pequeño y selecto grupo de familias controla grandes manadas que se destinan a la venta; otras que son la mayoría, apenas cuentan con unas pocas cabezas que sólo venden en casos de extrema necesidad. Debido a la adversidad del clima, la escasez de agua, lo inhóspito del suelo y la invasión del ganado, muchos pápagos se han visto obligados a emigrar para emplearse en las zonas de agricultura tecnificada en el Estado de Sonora, o bien a Estados Unidos como jornaleros.

Cada vez es mayor el número de pápagos que decide instalarse en las reservaciones de Estados Unidos, donde se les proporciona facilidades para establecerse y beneficios en cuanto a atención de la salud, escuelas y mayores ingresos.

44

Page 45: Culturas actuales de mexico

En México los pápagos viven en pequeñas rancherías. La vivienda tradicional es de planta cuadrangular, tiene muros de adobe, bajareque o piedras amalgamadas con barro; techos de paja o de carrizo y argamaza, que son planos con cierto declive; los pisos son de tierra apisonada. Algunas habitaciones tienen ventanas, en ellas hay cajones y roperos de madera, camas de madera o de metal o tapexcos (catres).

Más que por la ropa, los antiguos pápagos se distinguían por las elaboradas decoraciones de pintura facial que usaban como protección ante el inclemente sol del desierto y como un medio de simbolizar el estatus y las condiciones del individuo.

Actualmente en su mayoría los o’otham usan ropa elaborada industrialmente.

En las reservaciones, los jóvenes simpatizantes de los movimientos revivalistas de los indios norteamericanos, recuperan algunos antiguos rasgos como el pelo largo, trenzado o con un pañuelo atado a la cabeza.

Las artesanías de los pápagos son figuras de madera tallada, piezas de alfarería y cestas. Su alfarería es rústica; la hechura de los recipientes incluye la recolección de la materia prima en los bancos de barro, el cual filtran y mezclan con arena muy fina y estiércol seco de vaca; cuecen las piezas en un horno con palos de choya y estiércol. Sus mejores y más finas piezas artesanales son las de cestería. Las «coritas», cestas y bandejas, de palmillo y torote (plantas del desierto que las mujeres colectan, preparan y tejen) alcanzan elevados precios en Estados Unidos. En los diseños y decorados de las coritas plasman símbolos de una estética relacionada con su pensamiento mítico. La cestería es un quehacer femenino que involucra a mujeres de las reservaciones de Arizona y es una importante fuente de ingresos. En cambio, en México la fabricación de coritas ha desaparecido prácticamente entre ellos.

En las reservaciones de Arizona, la tribu ha recuperado la propiedad de 1 250 817 has., en cambio, en México ocupan menos del 10% de lo que fue su antiguo territorio.

Su religión gira en torno al culto del «hermano mayor», deidad que controla la naturaleza, aunque han aceptado algunos aspectos de la religión católica, con un santo patrono en cada pueblo y celebran algunas fiestas cristianas.

Pimas. (Sonora - Chihuahua).

Los pimas se nombran a sí mismos o’ob, que significa «la gente», «el pueblo». Con el término pima se designa a un conjunto muy variado de sociedades indígenas, como los pimas del desierto, pimas de la sierra o los pimas gileños. A los mestizos o «blancos» se les designa con el término yori.

En la época colonial los pimas se dividían en tres subgrupos principales, dos de los cuales han desaparecido. Los pimas yécoras aún conservan rasgos culturales propios y se concentran en la región de Maycoba, Sonora; y en Yepáchic, Mesa Blanca, Pinos Verdes, en los alrededores de Canoachi y el Mineral de Dolores, municipio de Madera, Chihuahua.

45

Page 46: Culturas actuales de mexico

La población pima se encuentra diseminada en una multitud de pequeños asentamientos y en la periferia de algunos pueblos y ciudades con población mestiza.

Algunos investigadores calculan que existen alrededor de 860 hablantes de pima, aunque el XII Censo General de Población y Vivienda (2000) reportó sólo a 741 hablantes de esta lengua a nivel nacional.

La lengua pima deriva del tronco yuto-nahua y se le clasifica en la familia pimana, junto con el pápago y el tepehuano. También se le conoce con el nombre de pima bajo, nevome, otam o yécora.

La agricultura de subsistencia se basa en el cultivo de unos cuantos productos. El cultivo del maíz parte fundamental de la economía desde tiempos prehispánicos, al igual que el trigo y la papa se rotan año con año para hacer más productivos los campos; las hortalizas más comunes son el tomate, el chícharo, los chiles, la cebolla y el ajo; hay árboles frutales como el manzano, la pera y el durazno. Cultivan con azadón y palo sembrador, generalmente compran o rentan animales a los yoris para arar. Complementan su producción con la cría de animales domésticos: gallinas, guajolotes, cerdos y burros; pocos tienen cabezas de ganado caballar o caprino.

La apertura de las minas y el despojo de las tierras indígenas dieron lugar desde hace unos cien años a un proceso de proletarizacion de los indígenas que continúa hasta la actualidad. En la década de los años 60 el trabajo en las empresas forestales remplazó el trabajo en las minas como una fuente importante de ingresos. Los pimas del ejido de Maycoba operan en la actualidad una empresa comunal para la explotación de la madera.

Las casas pimas tienen un solar en el que hay un huki, construcción semisubterránea provista de un techo de tierra o de tierra y paja, con una pequeña entrada, la cual protege del calor del sol al tejedor de palma y a sus productos; un tapanco o una pequeña bodega para granos, un corral y un huerto de hortalizas. Las casas de la periferia son de adobe con techo de palma o lámina. Los hogares más prósperos cuentan con estufa. Generalmente cocinan en un comal de barro o de metal; tienen sillas y mesas de madera, trastos de cerámica o peltre, molino de mano, además de rústicas camas de madera o petates.

La vestimenta tradicional de los pimas era de manta (pantalón y camisa para los hombres), este traje se ha cambiado por el de “tipo vaquero” que consiste en pantalón de mezclilla y camisa de manta larga a cuadros, de algodón o fibras sintéticas, huaraches o teguas (especie de mocasines de piel), hechos por ellos mismos, y sombrero, tejido con palma real por las propias mujeres pimas.

Las mujeres usan vestidos, blusas y faldas de algodón y nylon estampados y de vistosos colores, suéteres, zapatos de piel o plástico, fabricados industrialmente. La mayoría usa pañoleta o mascada sobre la cabeza o alrededor del cuello.

46

Page 47: Culturas actuales de mexico

Popolocas. (Puebla).

El gentilicio popoloca era utilizado por los aztecas para referirse a los pueblos que hablan lenguas ajenas al tronco nahua. Este término se aplicaba a los extraños y extranjeros, y se utilizaba en un sentido peyorativo de bárbaro, tartamudo y poco inteligente.

El popoloca es una lengua tonal que forma parte del tronco otomangue, familia popoloca. Una misma palabra puede tener diversos significados, según el tono con el cual se pronuncia.

Algunos lingüistas mencionan la existencia de cuatro tonos, y otros, la de tres. Por todo lo anterior su escritura y su aprendizaje resultan sumamente difíciles. Existen tres variantes de esta lengua, muy diferentes entre sí, lo que dificulta el entendimiento entre los popolocas de las tres zonas en las que éstos se ubican.

En el XII censo general de población y vivienda (2000), se registraron 14 499 hablantes de popoloca en Puebla, mientras que a nivel nacional la cifra era de 16 468 hablantes.

Los popolocas se ubican en el Estado de Puebla, en tres fracciones del territorio sin continuidad geográfica, que ocupan los siguientes municipios: Tlacotepec de Juárez, al noroeste de Tehuacán; San Gabriel Chilac, al sur del mismo lugar; Tepexi de Rodríguez y Santa Inés Ahuatempan, al norte de Acatlán y al oeste de Tehuacán.

El sistema predominante de tenencia de la tierra es la propiedad privada, aunque también existe la comunal y la ejidal. La actividad económica fundamental es la agricultura. El maíz es el principal cultivo, sin embargo, debido a lo reducido de la parcela y a la mala calidad de los suelos, la producción es insuficiente, lo que obliga a la población indígena a comprar una parte del que consume a los comerciantes de los pueblos vecinos.

En pequeña escala se cultivan el frijol y el trigo, este último con fines comerciales. El guaje es abundante y sus semillas crudas o cocidas sirven como alimento complementario, al igual que la tuna y diversos vegetales. La cría de animales se reduce a algunas cabras, unos cuantos cerdos, guajolotes y gallinas, que eventualmente llegan a venderse. Un ingreso económico importante se obtiene a partir de la venta de tejidos de la palma, principalmente en la zona de Tepexi. Con este material las mujeres fabrican petates que truecan por maíz u otros artículos, o bien, que venden a los acaparadores locales a un precio inferior al comercial. Es común que los hombres se contraten como peones en sus propias localidades, o busquen trabajo temporal en las plantaciones cercanas o en la Ciudad de México. Pocas veces emigran a lugares muy distantes o se alejan definitivamente de sus comunidades.

Purépechas. (Michoacán).

El purépecha es un pueblo de la región lacustre y montañosa del centro de Michoacán. Aunque también se les ha denominado tarascos, ellos se refieren a sí mismos como p’urhépechas, que en su lengua significa «gente, persona». El idioma p’urhé, también conocido como porhe, tarasco,

47

Page 48: Culturas actuales de mexico

purhépecha o purépecha, no tiene parentesco lingüístico cercano con ninguna de las familias lingüísticas que se hablan en la República mexicana.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) reportó la existencia de 121 409 hablantes de purépecha a nivel nacional, de los cuales 109 361 se encontraron en el Estado de Michoacán.

El territorio purépecha se extiende sobre alrededor de 6 000 km a una altura que oscila entre los 1 600 y 2 600 msnm sobre el eje neovolcánico. Es una área de relieve accidentado donde abundan los conos truncos y planos rellenos de arena, en cuya mesa es costumbre sembrar maíz. Generalmente se le ha subdividido en cuatro regiones: el lago, la cañada de los once pueblos, la meseta y la ciénega.

La economía de los purépechas es diversificada, ha estado sustentada tradicionalmente en actividades primarias tales como la agricultura, la pesca, la recolección y la cacería. En el sector secundario, históricamente han sido importantes la producción de artesanías y el comercio. A estas actividades habría que agregar la explotación forestal, además de una incipiente ganadería e industria textil, sin embargo, después de la década de los 40 empieza a observarse una fuerte migración de la población purhé sobretodo a los Estados Unidos en busca de ingresos que completen su economía. A las contribuciones enviadas por esta población que trabaja en el extranjero se deben muchas de las obras públicas que actualmente se realizan en los pueblos.

En este siglo, los purépechas tomaron parte activa en los movimientos campesinos del periodo revolucionario y la cristiada. Generaron un poderoso movimiento agrarista que logró recuperar algunas de las tierras comunales que habían perdido hacia finales del siglo XIX.

Durante la década de los 80, crearon un poderoso movimiento comunitario que ha conducido en una defensa de su patrimonio, sus mecanismos de gobierno y el impulso al uso de su lengua.

Seris. (Sonora).

Los seris se llaman a sí mismos konkaak, que significa en su lengua «la gente», también son conocidos como konkauk, comcaac o salineros. El término seri, en cambio, proviene de la lengua yaqui que significa «hombres de la arena».

Para el año 2000 existían, de acuerdo con el XII Censo General de Población y Vivienda, 425 hablantes de seri en Sonora y 458 a nivel nacional. Su lengua pertenece al tronco hokano y tiene parentesco con las lenguas de la familia tequistlateca.

Hoy la mayoría de la población es bilingüe y en algunos casos trilingüe (seri, español e inglés). La población seri mantiene su lengua con gran vitalidad, no adoptan términos en español para designar los nuevos elementos culturales que se han agregado a su vida, sino que crean nuevos términos en seri.

El territorio konkaak comprende un área aproximada de 211 000 ha al nivel del mar; está integrado por una parte continental y por la isla de tiburón. La población se concentra en dos

48

Page 49: Culturas actuales de mexico

localidades de la costa desértica del Estado de Sonora: Desemboque, municipio de Pitiquito y Punta Chueca, municipio de Hermosillo. Sin embargo, durante la temporada de pesca migran hacia campos pesqueros como El Sargento, El Dólar, La Ona, Los Paredones, Las Víboras y El Egipto, que se encuentran entre las localidades antes mencionadas.

En esta región el clima es caluroso, con temperaturas superiores a los 40°c y precipitaciones pluviales de 75 a 200 mm por año; el clima es muy seco o desértico.

Con tales características el desarrollo de la agricultura ha sido hasta ahora imposible y aun la ganadería se ha topado con dificultades. Así, la principal fuente de aprovechamiento siguen siendo los casi 100 kms. De litoral que poseen para su uso exclusivo, de donde obtienen almeja, mejillón, ostión, caracol, camarón, langosta, cazón, tiburón, atún, sierra, curvina, anchoveta, arenque de rabo, baqueta, lenguado, lisa, mero y caguama.

El trabajo artesanal consiste actualmente en el tallado en madera de palo fierro, con el que se producen figuras zoomorfas, el tejido de coritas (canastos) de diferentes tamaños y la elaboración de collares de caracoles, conchas, vértebras de víbora de cascabel y de pescado, semillas y últimamente también chaquira.

Su cosmovisión, sus ritos y otras manifestaciones culturales están fuertemente impregnadas de su antigua condición nómada, y se encuentran vinculadas con la naturaleza. Sus principales fiestas siguen siendo las de la pubertad, la llegada de la caguama de los siete filos, los ritos de muerte y los asociados con el inicio del año nuevo y el término de la elaboración de las coritas.

Para sus ceremonias emplean zumbadores de madera, sonajas de hojalata, percutores hechos con jícaras invertidas y sostenidas sobre agua y el omichihuatli que es un raspador o palo estriado que se raspa con otro para que suene sobre la vasija invertida. Los konkaak se han caracterizado por su resistencia a perder su identidad, su territorio y su autonomía.

Una de sus luchas más importantes es por la conservación de su territorio y lugares sagrados.

Tacuates. (Oaxaca).

El pueblo tacuate habita en el suroeste del Estado de Oaxaca en la región mixteca de la costa, dentro del municipio de Santa María Zacatepec que colinda al norte y al este con el distrito de Putla, al sur con el distrito de San Pedro Amuzgos y al oeste con el Estado de Guerrero.

Hay diferentes versiones sobre el origen y significado del término “tacuate”: para unos deriva de la voz náhuatl «tlacoatl» que significa tierra de serpientes, pero como los españoles no podían pronunciar bien lo transformaron a tacuate. También se dice que en lengua mixteca ta- significa señor y coo- serpiente; se dice que es un vocablo despectivo mediante el cual se referían a ellos los pueblos vecinos.

De acuerdo con los datos del XII Censo General de Población y Vivienda (2000), el número de hablantes de tacuate ascendía a 1 738 personas.

49

Page 50: Culturas actuales de mexico

Este grupo pertenece a la familia mixteca. Se identifican dos comunidades tacuates: Santiago Ixtayutla y Santa María Zacatepec, la primera de clima cálido donde proliferan árboles frutales, ceibas, y plantaciones de café y algodón; en Santa María Zacatepec predominan lomas cubiertas de variados árboles. En el territorio habitado por los tacuates abundan los suelos arenosos que en su mayor parte sólo permiten la agricultura de temporal, siendo sus cultivos más importantes los destinados al autoconsumo como el maíz, el chile y algunas verduras. La subsistencia es complementada mediante la cría de cabras y aves de corral. Aunque a través del tiempo la venta de terrenos a familias mestizas y mixtecas provenientes de áreas colindantes ha influido en el abandono de la practica de los sistemas económicos tradicionales como la rotación de siembra y el libre pastoreo.

La familia nuclear es la base de la sociedad tacuate, la pertenencia a la familia y al grupo, son elementos indispensables en la vida cotidiana. Su vivienda original está construida en forma redonda con troncos delgados y techos cónicos a base de zacate.

Los tacuates, como otros pueblos de mesoamérica han configurado una cultura compleja que se nutre tanto de conocimientos de la antigua civilización, como de apropiaciones e imposiciones culturales hispanas, por ejemplo mantienen el concepto de hombre sabio «raja a tatan» o nagual, que más que un curandero, es un guía espiritual, al mismo tiempo que mantienen sus autoridades religiosas, calendario festivo y diversas formas de culto en torno a la iglesia católica.

Los tacuates usan un atuendo vistoso, el de los hombres se caracteriza por dos largos lienzos que conforman el cuerpo de la camisola y que se pliegan hacia la cintura sujetados con una faja, formando una bolsa que recuerda a la del tlacuache; las mujeres usan huipil; ambos trajes son bordados en algodón con representaciones de pájaros, flores, jaguares, conejos, perros, alacranes y figuras geométricas. Normalmente andan descalzos.

Tarahumaras. (Chihuahua - Durango - Sonora).

Los tarahumaras se llaman a sí mismos rarámuri que significa «corredores a pie»; proviene de las raíces: rara (pie) y muri (correr). Para ellos es sinónimo de las personas o los humanos.

Habitan la parte de la Sierra Madre Occidental que atraviesa el Estado de Chihuahua y el suroeste de Durango y Sonora. Comparten esta región con los tepehuanes, pimas, guarojíos y mestizos. De los grupos originarios de la región es el más numeroso y habita un espacio más amplio que los demás por lo que a su territorio también se le denomina Sierra Tarahumara.

Los rarámuri se concentran en 17 municipios entre los que destacan por su alta densidad de población indígena: Guachochi, Urique, Batopilas, Balleza, Carichí y Guazapares. También es significativa su presencia en Bocoyna, Guadalupe y Calvo, Guerrero, Maguarichi, Morelos, Nonoava, Cuauhtémoc e Hidalgo del Parral.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) registró 70 842 hablantes de tarahumara en el Estado de Chihuahua y 75 545 a nivel nacional, aunque estimaciones del antes Instituto Nacional Indigenista calculaban una cifra de 98 847 tarahumaras.

50

Page 51: Culturas actuales de mexico

La lengua tarahumara o rarámuri forma parte del tronco yuto-nahua, familia taracahita. Algunos estudiosos afirman la existencia de varias lenguas tarahumaras, en tanto que otros señalan que sólo se tratan de variantes dialectales, que sin llegar a ser muy profundas, provocan una cierta inteligibilidad entre todos los hablantes de tarahumara.

Los tarahumaras habitan en ranchos; su vivienda consiste en una casa habitación, un granero y un corral de madera. Las casas se construyen rústicamente con madera, adobe, cantera o piedra, dependiendo del material que haya en la región.

Lo más común es encontrar viviendas hechas de troncos de pino dispuestos de manera horizontal, uno sobre otro, con techo de canoa o de vigas de dos aguas; los troncos son ensamblados en las esquinas y las rendijas son tapadas con una mezcla de lodo. La vivienda se utiliza para guarecerse del frío o la lluvia, pero es muy común que la gente duerma y cocine a la intemperie. En el invierno, los tarahumaras bajan de las montañas para vivir en las barrancas de la región, en lo que se conoce como la baja tarahumara.

Actualmente, la indumentaria se ha perdido en algunas partes de la sierra, en tanto que en otras se mantiene; es la mujer quien sigue conservando la vestimenta tradicional. Esta consiste en una falda o siputza hecha con tela estampada de colores fuertes a la que se le da volumen con otras faldas que se usan debajo; una blusa o napatza confeccionada con amplias mangas; un pequeño cuello circular y pliegues; una manta a manera de chal o chíniqui, bordada en sus extremos con hermosos motivos de flores y guías que se utiliza para cargar a los hijos; una pañoleta alrededor de la cabeza o koyera y huaraches o aká.

El indumento tradicional masculino consta de un amplio blusón o napatza, hecho de manta blanca o estampada que cae hasta la cintura o incluso hasta la pierna; una tágora o cotensa que consiste en un lienzo de manta blanca dispuesto a manera de calzón y amarrado a la cintura con una faja de lana; una banda o koyera y huaraches.

Las mujeres hacen ollas de barro, cajetes, platos, vasos, tazas y jarros; en algunos lugares también usan la palma y palmilla para tejer canastas de diversos tamaños. Los hombres fabrican violines, bolas, arcos y tambores, bateas, cucharas y tallan figuras con madera. Unos y otros tejen cobijas y fajas de lana con figuras geométricas. La artesanía producida se vende en Creel, Carichí, Batopilas, Guachochi y Bocoyna. Algunos forasteros se acercan a los pueblos para comprar artesanía y exportarla.

La explotación forestal de la sierra ha provocado la tala inmoderada de los bosques con la consecuente desaparición de algunas especies de la flora y la fauna de la región y ha desequilibrado notablemente la ecología de ciertas áreas.

Las tierras susceptibles de cultivo se localizan en pequeñas laderas y mesetas donde las labores agrícolas se desarrollan en los meses de clima benigno pues las bajas temperaturas, en algunos casos menores a los 10ºc, se presentan de octubre a marzo.

51

Page 52: Culturas actuales de mexico

Para los tarahumaras la principal actividad para su subsistencia es el cultivo del maíz. Alrededor de él se organiza la mayor parte de su vida cotidiana y ceremonial. Las tierras de cultivo se encuentran dispersas en pequeñas mesetas y laderas lo que influye en la dispersión de los asentamientos que se organizan en rancherías. La fragilidad del suelo sólo permite el trabajo agrícola con instrumentos manuales y de tracción animal. Se utiliza el estiércol de ganado caprino y vacuno para la fertilizaciòn de los campos, aunque en algunos lugares depende de los fertilizantes químicos.

La cría y el cuidado del ganado es también una actividad importante sobre todo en los municipios de Balleza, Carichí y Nonoava. La posesión de animales es un símbolo de riqueza. Complementan su economía con la venta de artesanías, el empleo asalariado en los aserraderos o centros de población más cercanos, así como la migración en busca de empleo a los Estados de Sonora, Sinaloa y Durango.

Tepehuanos. (Chihuahua - Durango - Nayarit).

Los tepehuanos de Chihuahua se nombran a sí mismos ódami, mientras que los de Durango se reconocen como o’dam, que significa «gente». El término tepehuano, de origen colonial, proviene de la raíz náhuatl, tepetl, cerro y el sufijo hua, que indica posesión. Tepehuano quiere decir entonces «gente de las montañas».

Utilizan el término obhai para referirse a los mestizos o extranjeros.

Los tepehuanos, debido al proceso de colonización se dividen en dos grupos, conocidos como tepehuanos del norte que viven en Chihuahua, y los del sur que habitan en los Estados de Durango y Nayarit.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) registró 25 544 personas de más de 5 años hablantes de tepehuano; en el Estado de Chihuahua había 6 178, y de éstos el 83% vivía en el municipio de Guadalupe y Calvo. Los principales asentamientos son Nabogame, Llano Grande, Barbechitos, El Venadito y Baborigame. En Durango se encontraron 17 051 hablantes de tepehuano, distribuidos en San Bernardino de Milpillas Chico Y San Francisco de Lajas en el municipio de Pueblo Nuevo; María Magdalena Taxicaringa, Santiago Teneraca, San Francisco de Ocotán y Santa María de Ocotán y Xoconoxtle en el municipio de Mezquital; y en San Andrés Milpillas Grande, municipio de Huajicori, Nayarit, donde a nivel estatal había 1 422 hablantes de esta lengua.

El idioma de los ódami u o’dam, también llamado ódame o tepecano, pertenece al tronco lingüístico yuto-nahua o yuto-náhuatl, familia pimana. En Chihuahua y Durango esta lengua presenta variantes dialectales, aunque algunos lingüistas señalan que se trata de lenguas distintas. En la actualidad el idioma ódami, al igual que el resto de las lenguas indígenas, ha estado sometido a la presión y competencia del español. Casi el 89% de los integrantes de este grupo es bilingüe y sólo el 11% es monolingüe.

52

Page 53: Culturas actuales de mexico

En Chihuahua, las áreas de tierra cultivable son manchones diseminados a lo largo y ancho de la región. Es posible que este hecho tenga relación con la propia dispersión en la que viven las familias dentro de su territorio. Cultivan maíz, frijol, calabaza y papa. Muchas familias poseen huertos donde cultivan hortalizas, las cuales son atendidas por las mujeres.

Su producción es únicamente para el autoconsumo.

Los ódami no conservan casi ningún rasgo de su indumentaria tradicional, particularmente los hombres se visten a la usanza mestiza. Algunas mujeres siguen usando su vestido típico, cuyo origen se piensa es del siglo XIX. Es una blusa de cuello cerrado y botones en la pechera, con pinzas al frente y por detrás. La falda es ancha y larga, de dos holanes con adornos de listón en el bies de cada holán, son de colores fuertes y telas floreadas. En la cabeza usan un pañuelo que cubre el cabello y se peinan con una trenza que portan por delante. Su calzado consiste en huaraches de cuatro orificios con suela de llanta y correa larga de piel que se enreda en los tobillos.

Elaboran productos con materiales que obtienen de su ambiente. En Chihuahua, por ejemplo los bules y jícaras, que son frutos de una planta, son utilizados como recipientes para transportar líquidos. Con madera de madroño se hacen cucharas y bateas. Con barro se elabora una gran variedad de ollas y platos; generalmente la mujer es la que trabaja la cerámica. Sus instrumentos musicales también los hacen ellos mismos, como los violines y sonajas de madera y las flautas de carrizo. Entre los tepehuanos del sur se fabrican morrales de estambre (de telar o punto de cruz) y redes de ixtle o de cordón plástico, sombreros de soyate, equipales, bancos, pipas de carrizo y barro y alfarería sin decoración.

Las viviendas constan de una sola habitación, que sirve de cocina y dormitorio. En las cumbres, las casas se construyen con troncos de madera rolliza entrecruzada en las esquinas.

Los techos son un tejabán de tableta de pinos que permanece impermeable de diez a quince años. En los barrancos, las paredes se construyen con una mezcla de piedra y lodo, sostenidas por dos horcones y una viga transversal, el techo es de dos aguas, a veces de palma o bien, de tableta, un lado del techo no llega a juntarse con la pared para permitir una adecuada ventilación en el interior. Algunas viviendas carecen de una pared, lo cual es muy funcional debido al calor intenso en el verano barranqueño y porque el humo de la lumbre, empleada para la elaboración de alimentos, escapa con mayor facilidad. La innovación más importante en la construcción de casas en los últimos años es quizá la sustitución de los grandes troncos por tablas más endebles, desperdicio de los aserraderos.

Entre los tepehuanos de Durango la ganadería es la actividad económica más importante. Participan en ella todos los comuneros; manejan de preferencia el ganado vacuno, caprino y en menor escala el ovino y porcino. No existen buenos pastizales, por lo que se practica la ganadería extensiva. No se produce maíz suficiente, ni siquiera para el autoconsumo. Se cultiva en las laderas, con muy bajo rendimiento, con el palo sembrador o coa. Otro recurso que explotan es el bosque.

53

Page 54: Culturas actuales de mexico

En el grupo del sur, el mitote o xiotal es una ceremonia ritual en donde se danza alrededor del fuego durante la noche al son de un arco musical. Hay dos clases de mitote: el familiar, al que asisten los parientes con descendencia patrilineal y, el comunal al que van, hipotéticamente, todos los miembros de la comunidad. Por lo regular celebran dos de cada uno de ellos para pedir lluvias en mayo y para bendecir los elotes en octubre; también se organizan mitotes de curación.

Tepehuas. (Veracruz - Hidalgo - Puebla).

La lengua tepehua, junto con el totonaco forman la familia totonaca-tepehua. La palabra tepehua es de origen náhuatl, su significado literal es «cerro-dueño».

No obstante, el grupo se llama a sí mismo kitndnkanma-kalkaman «nosotros somos de idioma tepehua» o bien hamaispini, «dueños del cerro». El primer gentilicio es de uso común en Pisaflores, municipio de Ixhuatlán de Madero, Veracruz, mientras que el segundo se menciona con más frecuencia en Chintipan, comunidad del municipio de Tlachichilco.

En el año 2000, el Censo General de Población y Vivienda reportó la existencia de 9 435 hablantes de tepehua a nivel nacional, la mayoría de ellos, concentrados en el Estado de Veracruz y en menor medida en Hidalgo y Puebla. A su lengua también se le conoce con los nombres de chahuindi, hamasipini o lhimak’alhk’ama’.

El territorio donde vive este pueblo forma parte de la Sierra Madre Oriental y comprende el norte del Estado de Puebla y regiones colindantes de Veracruz e Hidalgo. El clima es tropical y subtropical, influido por la proximidad de la costa del golfo, lo cual favorece lluvias, neblina y humedad constantes.

Por la zona cruzan los ríos Pantepec y Vinazco, alimentados por un conjunto de afluentes, entre los cuales figuran el Pilpuerta, el Beltrán, el Limón y Arroyo grande. En éstos se pesca mojarra, charal, bagre, un pequeño camarón conocido como acocil y la acamaya, especie de langostino de agua dulce.

Los terrenos aprovechados para el cultivo circundan los poblados, y más allá de ellos se encuentran los pastizales y bosques de los cuales las familias extraen bienes, sobre todo madera para la construcción de casas, leña, etcétera.

Todavía quedan restos del bosque tropical perennifolio, y las variedades de árboles maderables que allí se encuentran son: cedro, capomo, chicozapote, tempisque, ceiba, palo de rosa y algunos ejemplares de caoba. La tala es inmoderada y por ende es factible que las especies de potencial económico tiendan a desaparecer.

Los tepehuas practican la agricultura de roza, tumba y quema; debido a la falta de tierras, casi ya no practican la rotación de suelos. Los cultivos más importantes para el sustento son maíz, frijol, haba y quelites; la caña de azúcar y el café se cultivan para la venta.

54

Page 55: Culturas actuales de mexico

Las casas son amplias y con techos de cuatro aguas. Lo habitual es construir varios recintos con distinta función cada uno. Por ejemplo, una familia puede disponer de cuatro inmuebles: en uno se encuentra la cocina y el lugar que sirve para comer y dormir, otro está destinado a hacer el pan, el tercero a guardar el maíz y otro más para guardar la ropa.

Alrededor de las casas se encuentra el chiquero y el corral.

Allí están las gallinas, guajolotes, pollos u otros animales, ya que es tradición de toda la familia contar con, por lo menos, tres parejas de animales. Las casas se fabrican con los siguientes materiales: para las paredes, carrizos, varas y lodo; para los techos, dependiendo de las posibilidades económicas, palma, lámina de cartón o de metal.

Los tepehuas presentan una notable afinidad cultural con los nahuas, totonacos y otomíes que habitan en la región, pues se desenvuelven en el mismo ambiente y las evidencias parecen indicar que tal ha sido la situación desde tiempos prehispánicos. A pesar de que cada pueblo conserva su propio idioma, se mantiene con mucha pureza una tradición común, sobre todo en lo que se refiere a la indumentaria, las danzas y la fabricación y uso de papel amate. Incluso, en los mercados locales es común que se reúnan indígenas pertenecientes a diferentes grupos, como en el caso del mercado de Xicotepec de Juárez, Puebla, donde comercian totonacos, tepehuas y nahuas.

Tlahuicas. (Estado de México).

Los hablantes de ocuilteco se reconocen a sí mismos como tlahuicas y se resisten a ser reconocidos como ocuiltecos pues desde hace tiempo tienen rivalidad con sus vecinos originarios de Ocuilan, cabecera municipal de Ocuilan de Arteaga, México. Sin embargo, los lingüistas los reconocen como ocuiltecos.

Habitan en la comunidad de San Juan Atzingo, Estado de México. El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) registró 466 hablantes de ocuilteco. Esta lengua, conocida también como atzinca, runujinara o tlahuica, forma parte del tronco otomangue, familia otopame y tiene afinidad con la lengua matlatzinca.

San Juan Atzingo se localiza en el municipio de Ocuilan, limítrofe con el Estado de Morelos, muy cerca de las ruinas prehispánicas de Malinalco y del Santuario de Chalma. La altura promedio de la zona es de 2 500 msnm, el clima es frío con temperaturas que en el invierno llegan a varios grados bajo cero. Su flora es variada, con abundancia de pináceas, encino, madroño, aguacatillo y fresno. También cuenta con árboles frutales como pera, manzana, durazno, capulín y tejocote.

Los ocuiltecos mantienen la forma de tenencia comunal, incluyendo los pequeños terrenos boscosos. La principal actividad económica es la agricultura de temporal, en ella sobresalen los cultivos de maíz, frijol, chile, cebada, avena y trigo. El chícharo se cultiva con fines comerciales.

La ganadería mayor es inexistente. Entre las especies menores predominan el borrego y la cabra, que sirven tanto para la venta como para el autoconsumo. Los reducidos bosques proporcionan la

55

Page 56: Culturas actuales de mexico

madera que sirve para la construcción de casas y como combustible. También se explota el maguey, de donde se extrae pulque.

Las viviendas de San Juan Atzingo son de madera, por ser éste un material de fácil obtención; son amplias, constan normalmente de dos cuartos rectangulares que sirven de dormitorios y una cocina anexa. En el solar se localizan los macheros en donde se encierran los caballos y mulas; también hay chiquero y gallinero y, en ocasiones, un temazcal.

Tlapanecos. (Guerrero).

Tlapaneco es el nombre con el que los nahuas denominaron a este pueblo y deriva del principal lugar de su asentamiento: Tlapa. Los tlapanecos se llaman a sí mismos mbo me’phaa, que significa «el que es habitante de Tlapa». Hablan la lengua tlapaneca, también conocida como mi’phoa o me’phaa, que es tonal y pertenece a la familia subtiaba-tlapaneca del tronco otomangue.

El territorio tlapaneco se localiza entre la vertiente de la Sierra Madre del Sur y la costa de Guerrero, con altitudes que varían de 800 a 3 050 msnm.

El clima predominante en la zona es templado subhúmedo, con una temperatura media anual de 18°c.

Tojolabales. (Chiapas).

Se llaman a sí mismos tojolwinik’otik u hombres legítimos o verdaderos; sin embargo son conocidos por el nombre de su idioma: tojolabal, que viene de las raíces tojol: legítimo y ab’al: palabra. Su lengua es también reconocida como chanabal o chaneabal.

Habitan en el Estado de Chiapas, se encuentran principalmente en el municipio de las Margaritas, aunque existen importantes núcleos poblacionales en los colindantes municipios de Altamirano, Comitán, Independencia y La Trinitaria. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000) se reportaron 37 667 hablantes de tojolabal en chiapas y 37 986 a nivel nacional.

El tojolabal forma parte de los idiomas mayenses, de la familia macro-kanjobal. La población tojolabal monolingüe es reducida porque casi todos han recibido algún tipo de instrucción en español o bien por la interacción con los mestizos.

La región en la que habitan los tojolabales posee una diversidad orográfica y climática. Incluye tanto zonas boscosas como pequeños valles intermontanos, cañadas y áreas selváticas. En consonancia con tal diversidad es posible encontrar desde selva alta perennifolia, selva baja perennifolia hasta bosques deciduos de liquidámbar, bosque de hojas planas y duras y de coníferas. La tala inmoderada alentada por compañías madereras, privadas y estatales ha provocado la pérdida de enormes extensiones de vegetación primaria, sobre todo en la selva y en las zonas de coníferas.

En las tierras altas, los tojolabales practican una agricultura de autoconsumo con maíz, frijol y calabaza; en los valles y cañadas se siembran además, legumbres, caña, café, cítricos y otros

56

Page 57: Culturas actuales de mexico

frutales; en la selva el cultivo comercial del café, la ganadería y la explotación forestal son la actividad principal.

Las viviendas son de planta rectangular, aunque los materiales de construcción varían dependiendo de la región en que se encuentra la comunidad. Los pisos generalmente son de tierra.

El menaje se compone de una o dos sillas para los visitantes, una mesa pequeña y baja para servir los alimentos, una mesa-altar, algún cofre para guardar ropa y pequeños bancos. La vivienda se construye con base en la ayuda mutua, recurriendo a parientes, compadres o vecinos.

Terminada la construcción se hace una ceremonia llamada k’a och nich mal naj («que entren las flores a la casa»).

El traje tradicional femenino se compone de una blusa de manta, profusa y delicadamente bordada a mano, una falda de vistosos colores de satín brocado o popelina, un pañuelo del mismo género que la falda, el cual se ata a la cabeza, cubriendo el cabello trenzado con gruesas y largas cintas de colores llamativos.

Acompañan el atuendo unos huaraches o en su defecto sandalias de plástico y adornos como aretes y collares.

El traje masculino, más comúnmente usado entre los ancianos, incluye un pantalón corto de manta blanca, una faja roja, magenta o negra, una camisa de manta de mangas anchas, bordada en el cuello, la pechera y los puños, un paliacate y los huaraches.

La vida comunitaria se refleja en actividades económicas y rituales. Así, además de la faena comunal obligatoria, existe el jelanel, que es el préstamo de granos en tiempo de carestía y el k’otak’in: sacrificio de un vacuno accidentado y sin remedio que se destaza, y cuya carne se vende en la comunidad para ayudar al dueño a reponerse de la pérdida.

Totonacas. (Veracruz - Puebla).

El vocablo totonaca se compone de los términos tu’tu o a’ktu’tu, que se refiere al número tres y nacu’ que significa «corazón».

Los totonacas emplean este término en el sentido de que Cempoala, Tajín y Castillo de Teayo son los tres centros representativos del grupo, los tres centros o tres corazones de su cultura.

El idioma totonaca y el tepehua pertenecen a la familia totonaca-tepehua. La lengua totonaca también es conocida como Tachihuiin, Tachuhuiin, Totonaco, Tutunakuj o Tutunacu.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) registró un total de 240 034 hablantes de esta lengua, la mayoría de los cuales habitaban una porción de la planicie costera norte del Estado de Veracruz y en la Sierra Norte de Puebla. En esta última región tienen una presencia significativa en 27 municipios y en 14 del Estado de Veracruz.

57

Page 58: Culturas actuales de mexico

La región totonaca abarca desde el Río Cazones al norte, hasta Jalacingo al sur; y desde Xicotepec de Juárez y Zacatlán en el Estado de Puebla, hasta las costas del Golfo de México.

Comprende dos áreas ecológicas: la sierra, en las pendientes orientales de la Sierra Madre Oriental, en el Estado de Puebla, y la planicie costera.

Los totonacas son agricultores. Producen maíz, frijol y calabaza para el autoconsumo, y café para la venta. En la planicie también siembran vainilla, caña de azúcar, tabaco, algodón y cacao, cultivos comerciales que les proporcionan ingresos monetarios.

Los totonacas fabrican productos artesanales para uso familiar o ceremonial como cestos, vasijas, juguetes, incensarios de barro, máscaras de madera y ornamentos de palma. Las mujeres utilizan el telar de cintura para confeccionar prendas de su vestimenta tradicional y algunos otros productos comerciales como servilletas, manteles y toallas.

Actualmente los totonacas conservan estrategias ancestrales de aprovechamiento de los microagroecosistemas; poseen parcelas de tierra en diferentes altitudes y sobre laderas con distintas pendientes, así diversifican su calendario agrícola, siembran diversos productos y aprovechan mejor la fuerza de trabajo familiar.

En la zona costera la industria petrolera ha contaminado el agua y el suelo. Los bosques templados en la sierra norte de Puebla y la selva tropical húmeda de las llanuras veracruzanas sufren una tala inmoderada; esto ocasiona la desaparición de fauna que era para los totonacos una importante fuente alimenticia. Se han extinguido el venado cola blanca, el venado temazate y el jabalí o pecarí de collar.

La indumentaria femenina se compone de camisa bordada en punto de cruz y punto pasado, enredo, faja y quexquémitl.

La vestimenta masculina se compone de camisa con cuello cuadrado y bata ancha, calzón, faja, pañuelo y morral. En los pueblos de la sierra se usan los huaraches; los papantecos usan botines y un pañuelo de algodón enrollado al cuello o en la bolsa de la camisa.

Con la apertura de carreteras en la zona en la década de los 50, los totonacos se desplazaron a las ciudades cercanas en busca de trabajo asalariado.

Triquis. (Oaxaca).

La denominación triqui o trique es una deformación del vocablo driqui, de la lengua triqui, compuesto por dri, derivado de dre: padre, y qui: grande o superior, es decir «señor supremo», término con el que los indígenas designaban a sus superiores y que los españoles generalizaron para denominar al grupo. Los triquis de Copala se llaman a sí mismos tinujei que significa «hermano mío».

58

Page 59: Culturas actuales de mexico

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000) registra un total de 20 712 hablantes de triqui de 5 años y más, de los cuales 15 203 vivían en Oaxaca.

El idioma triqui llamado también trique, drique, driqui, nanj n’n, tinujei, sii man, chuman’a, o nanjni’i, pertenece a la familia mixteca del tronco otomangue y consta de cinco tonos: agudo, alto, medio, que expresa la tesitura natural del hablante, bajo y el tono grave.

Los triquis se encuentran en el oeste de Oaxaca, en las localidades de San Andrés Chicahuaxtla y Santo Domingo del estado, municipio de Putla Villa de Guerrero; San Martín Itunyoso y San José Xochistlán, municipio de Tlaxiaco; San Juan y San Miguel Copala, del distrito de Juxtlahuaca. Este territorio se encuentra asentado en la región mixteca.

El área triqui se encuentra en una zona muy accidentada, comprendida en la provincia fisiográfica de la sierra madre del sur, con alturas que varían de 800 a 3 000 msnm. El clima está determinado por las diferentes altitudes: la zona caliente se presenta de los 800 a los 1 500 msnm, la templada se encuentra alrededor de los 2 000 m, y la fría en alturas mayores a los 2 000.

Los triquis cultivan maíz, frijol de enredadera, calabaza y otros productos. En la región de Copala se introdujo a fines del siglo pasado el cultivo de café, que junto con la caña de azúcar y el plátano se destinaron al comercio. En el trabajo agrícola se utilizan herramientas como el arado de reja de madera o metal para labrar la tierra, la coa con punta de hierro, el machete, el hacha y el cuchillo.

Nua’ nugua’ aj, «milpa de compañía», es una tradicional forma de solidaridad comunitaria de cultivo de maíz, frijol de enredadera y calabaza. Consiste en que veinte o treinta jefes de familia siembran mancomunadamente en sus parcelas, y la ganancia de la venta de las cosechas se reparte equitativamente entre el grupo. Esta organización para el trabajo aporta beneficios sociales, ya que mantiene y fortalece la cohesión del grupo.

Los materiales más usados para la vivienda son troncos o tejamanil para los muros; paja, tejamanil o tallo de plátano (penca) para los techos. La única ventilación que tiene es la puerta, hecha también de madera; el techo es de dos aguas y las hendiduras de la paredes son recubiertas con barro, cal y estiércol. En la zona triqui son muy pocas las viviendas que están hechas de ladrillo o de mampostería.

El traje tradicional de la mujer sólo es usado en los días festivos y cotidianamente por las ancianas, consta de un huipil de algodón holgado y largo de franjas horizontales y adornado con dos franjas anchas y verticales con motivos de zigzag, amarillo o morado. Debajo llevan un enredo de manta color azul marino.

La indumentaria peculiar de los hombres consta de calzón, camisa, ceñidor y sombrero de palma. El calzón es de manta y se enrolla a la altura de la rodilla. La camisa es de colores brillantes y bordada, con adornos en el cuello y en los puños.

En la cintura llevan el ceñidor de colores, con los extremos colgando por delante.

59

Page 60: Culturas actuales de mexico

Las mujeres triquis son buenas artesanas en la confección de ropa en general. Tejen en telar de cintura y en telar horizontal de cuatro estacas, también llamado malacate.

Confeccionan camisas, huipiles y fajas, tejen sombreros de palma y cestos, que destinan al uso personal. No utilizan hilo elaborado en casa, como antaño, pues ahora usan estambres y fibras sintéticas. Los huipiles son destinados a la venta en las ciudades cercanas y en las de Oaxaca, Puebla y México.

La migración de triquis hacia otros lugares en busca de empleo es importante, por ejemplo, los encontramos en el cultivo de caña en Morelos y Veracruz; en la pizca de algodón en Sinaloa; en el cultivo del jitomate en San Quintín, Baja California y en la Ciudad de México donde trabajan como empleados o como comerciantes; también emigran como braceros a Los Ángeles y a San Diego, Estados Unidos.

Tzeltales. (Chiapas).

Los tzeltales se llaman a sí mismos winik atel, que significa «hombres trabajadores». La lengua tzeltal pertenece al tronco lingüístico maya, familia macro-tzeltal.

También se le conoce con los términos c’op o tzendal. Se caracteriza por ser una de las lenguas indígenas más ricas en su vocabulario; no posee variantes dialectales de importancia, por lo que resulta fácil la comunicación entre los miembros de las diferentes comunidades tzeltales.

El XII Censo General de Población y Vivienda (2000), registró un total de 278 577 hablantes de tzeltal en el estado de Chiapas y 284 826 a nivel nacional.

Se localizan en una extensa franja del Estado de Chiapas, al este del territorio tzotzil, en la parte central del estado, en donde se pueden diferenciar tres zonas naturales: suaves inclinaciones y llanuras en el sur, cimas altas y terreno irregular en la parte central y relieves más bajos hacia el norte.

Desde la década de los 50, población tzeltal empezó a emigrar a la selva lacandona fundando nuevos asentamientos.

Los municipios con mayor superficie son los de Ocosingo, Chilón y Altamirano y los que presentan una mayor concentración de población tzeltal son Chilón, Ocosingo, Oxchuc, Tenejapa y San Juan Cancuc.

La vegetación varía de acuerdo al clima y a la altitud. En las tierras altas y frías abunda los bosques de diversas especies de coníferas, mientras que en las partes bajas predomina la selva siempre verde, alternada con sabanas y reductos de bosque.

La principal actividad económica es la agricultura. La producción en los altos es raquítica e insuficiente para satisfacer las necesidades familiares, debido a que las tierras se encuentran sumamente fraccionadas y su explotación ha aumentado por el crecimiento poblacional; a lo anterior se suma la mala calidad de las tierras cuyos terrenos son escarpados, deslavados y

60

Page 61: Culturas actuales de mexico

erosionados. El maíz es el principal cultivo y absorbe el trabajo de casi todo el año. La labranza se realiza mediante las técnicas de roza, tumba y quema, con el auxilio del azadón, arado de palo, machete y hacha. Para complementar los ingresos económicos, los tzeltales se ven obligados a buscar trabajo como asalariados en el soconusco, o a emigrar en forma definitiva, principalmente a la selva lacandona. En la parte baja, de mejores condiciones productivas, se cultiva fundamentalmente café y cacahuate.

La casa tradicional tiene paredes de bajareque, piso de tierra apisonada y techo alto de cuatro aguas de palma, zacate o teja, que termina en un remate abierto que permite la salida del humo del fogón. Generalmente son rectangulares, de un solo cuarto con una puerta al frente y ventanas pequeñas. En las cabeceras municipales y comunidades de fácil acceso, se ha extendido la utilización de ladrillos y tejas para la construcción de paredes y techos, y de cemento para los pisos. El mobiliario consiste en bancos de madera, vasijas de barro, metate, trastos de peltre, camas de tablas o petates. Algunas casas cuentan con corrales para los animales y baño de temazcal o push.

La comunidad es el espacio donde se reproduce la identidad.

Los tzeltales se identifican por su comunidad de origen, de tal manera que se reconoce como tenejapanecos a los originarios de Tenejapa, amatenangueros a los de Amatenango del valle, oxchuqueros a los nativos de Oxchuc, etcétera.

Cada comunidad posee un centro ceremonial en donde se encuentra el templo y la presidencia municipal. Este es lugar de residencia de las autoridades comunales, en tanto que el resto de la población vive dispersa en parajes a lo largo de todo el municipio.

Los miembros de cada comunidad tienen una vestimenta propia y distintiva, sin embargo pueden establecerse algunas semejanzas: la mujer viste enagua de manta gruesa o de lana, blusa o huipil de manta holgado y largo, tejido en telar con bellos bordados multicolores, faja de lana, toca de manta que se lleva doblada en la cabeza, aretes y collares; se peinan con dos trenzas rematadas con listones de colores y andan descalzas.

El hombre lleva camisa y calzón de manta, ahora ya sustituido por el pantalón, chamarro o cotón de lana; sombrero de palma adornado con cintas de colores y sandalias de cuero que los jóvenes sustituyen por tenis.

Las religiones evangélicas han tenido gran aceptación entre los tzeltales, la conversión religiosa ha generado un nuevo liderazgo indígena opuesto a los intereses de los caciques tradicionales. También ha creado esquemas paralelos de autoridad, tanto a nivel civil como religioso.

61

Page 62: Culturas actuales de mexico

Tzotziles. (Chiapas).

Se denominan a sí mismos con el término bats’il winik, «hombres verdaderos» y a su idioma bats’il kop, o batz’il c’op, chamula, huixteco (estos dos últimos gentilicios de dos comunidades tzotziles), quelen, totik o jchi’iltic.

La lengua tzotzil pertenece al tronco maya, familia macro-tzeltal. En el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), registró un total de 291 550 hablantes de tzotzil en el Estado de Chiapas y 297 561 en el país.

El territorio habitado por los tzotziles se ubica en una vasta superficie del centro de Chiapas, en la región llamada los Altos de Chiapas, así como en una porción noreste de la entidad, una fracción de los Valles de Cuexteques y, a últimas fechas, en algunos municipios de los Valles Centrales, como Cintalapa, Ocozocuatla y Tecpatan, y de la Selva Lacandona como Las Margaritas. Son numerosos los municipios que concentran población tzotzil, destacan en las tierras altas: Chamula, Zinacantán, Mitontic, Larráinzar y Chalchihuitán y, en tierras bajas: Simojovel, Amatán, El Bosque y Huitiupán, entre otros.

Debido a que las áreas tzeltal y tzotzil son contiguas, en algunas comunidades se hablan indistintamente las dos lenguas, tal es el caso de algunas localidades de los municipios de Oxchuc y Huixtán.

Los principales cultivos en esta zona son: maíz, frijol, trigo, papa y hortalizas; sólo en algunos lugares se cultiva café y caña de azúcar. Los frutales más comunes son: perón, durazno, manzana y pera, y en donde impera el clima semitropical: naranja, piña, aguacate y mango. La baja productividad de las tierras y la alta densidad poblacional en algunos municipios como Chamula y Zinacantán han obligado a algunos integrantes del grupo a rentar o comprar tierras en las partes bajas, o bien, a emigrar temporal o definitivamente en busca de trabajo. Un considerable número de campesinos de la región salen periódicamente a las fincas cafetaleras del soconusco para complementar sus ingresos, o bien las vecinas ciudades de Tuxtla Gutiérrez en Chiapas y Villahermosa en Tabasco.

La vivienda tradicional es semejante a las de los tzeltales.

Está construida con paredes de madera o bajareque, techo de tejas, zacate o palma y piso de tierra apisonada; posee una forma rectangular con una puerta y pequeñas ventanas, aunque a veces carece de ellas. Alrededor de la habitación principal están el gallinero, el chiquero y algunas veces el push o baño de temazcal.

Las concepciones y valores del hombre tzotzil giran en torno al maíz. La vida humana se concibe gracias a él, que es considerado como fuente de prestigio social: am tel, trabajar, se refiere a las actividades vinculadas al cultivo del maíz.

62

Page 63: Culturas actuales de mexico

Al igual que sus vecinos tzeltales, cada comunidad es el espacio donde se reproduce la colectividad. Un hombre tzotzil se reconoce como chamula, si es originario de san juan chamula, andreseño si es de san andrés larráinzar, sanpedreño si proviene de San Pedro Chenalhó, etc.

Cada comunidad tiene su indumentaria particular que la diferencia del resto. Las mujeres tejen en telar de cintura sus huipiles y camisas tradicionales. La indumentaria chamula se distingue por el uso de un chamarro de lana en los varones y una falda de ese material en las mujeres.

La comunidad es gobernada por un cuerpo de autoridades que forman parte de un sistema de cargos con funciones políticas y religiosas. Los miembros de la jerarquía residen durante el año en que prestan su servicio en un cargo en el centro ceremonial, para luego reintegrarse a sus actividades en los parajes, como el resto de sus pobladores. Sin embargo, desde la década de los 70 de este siglo, las comunidades tzotziles han sido influidas por las religiones evangélicas que han tenido una gran expansión en la zona; por lo que se han debilitado las estructuras de su gobierno tradicional y se han generado violentos conflictos al interior de ellas.

Yaquis. (Sonora).

Los yaquis se nombran a sí mismos yoremes, palabra que significa hombre o persona. El término yori es utilizado para designar al hombre blanco. Los yaquis hablan la lengua cahita, yaqui, o yoreme, la cual pertenece a la familia taracahita, del tronco yuto-nahua.

El actual territorio yaqui abarca una extensión de 485 235 has.

Sobre las que se extiende el distrito de riego número 18, en la región conocida como Valle del Yaqui, al oriente del Estado de Sonora. Los municipios en donde se ubica son: Guaymas, Bácum, Cajeme y Empalme. Los pueblos tradicionales yaquis son ocho: Cócorit, Loma de Bácum, Tórim, Vícam, Pótam, Belem, Rahúm y Huirivis.

De acuerdo con el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), había 12 467 hablantes de yaqui en sonora y 13 317 a nivel nacional.

La actividad fundamental de la economía yaqui es la agricultura de trigo y algodón con fines comerciales. Con la modernización de la explotación agrícola en la región, los yaquis se emplearon en un primer momento como jornaleros de propietarios privados o de instituciones crediticias oficiales. Desde 1935, año en que se formó la comisión de irrigación de el yaqui, que limpió el canal, han luchado porque sus tierras puedan recibir el agua de riego.

La ganadería ha pasado a ser una de las mejores posibilidades de la economía yaqui. Actualmente el ganado dispone de un área de pastizal de por lo menos 15 mil has., y existen una docena de sociedades ganaderas en la sierra.

Otras actividades remuneradas y complementarias son el corte de madera de mezquite y carrizo que son permitidas con el permiso de las autoridades tradicionales. Hay una mina de carbón, pero su explotación es mínima. En las costas yaquis se trabajan las grandes salinas.

63

Page 64: Culturas actuales de mexico

Predomina el tipo de vivienda tradicional, que se compone de una o dos piezas que varían su función de acuerdo con la temporada del año. En verano los cuartos permanecen como bodegas y se duerme en catres bajo la enramada (cobertizo hecho de ramas); ahí se ubica la cocina que cuenta con un fogón, la mesa y estufa de gas; durante el invierno los cuartos se convierten en dormitorios.

El material predominante para su construcción es el carrizo y el mezquite enjarrado con barro tanto en muros como en techos, dejando uno de los muros sin enjarrar con el fin de lograr una ventilación adecuada. La estructura es de horcones de mezquite plantados en el suelo, y ramas verticales y horizontales de éste árbol sujetas con lazos. La mayoría de las casas yaquis tienen un patio adyacente para diferentes actividades como la cría de animales, preparación de carne seca, cultivo de frutales y hortalizas y el entretenimiento de los niños.

Para el varón, la indumentaria se compone de pantalón de corte vaquero y camisa a cuadros de colores vivos con paliacate al cuello. El sombrero es imprescindible.

El calzado común es el huarache de tres puntas con plantilla de cuero y correa trenzada, y entre los jóvenes o los de mayor capacidad económica, las botas vaqueras. Las mujeres y niñas llevan una falda plisada de algodón o satín de colores vivos con encaje blanco en el borde, blusa combinada y rebozo sobre los hombros o sobre el cabello trenzado.

Calzan sandalias o huaraches y usan aretes, collares y pulseras de oro, chaquira o fantasía.

Los danzantes elaboran las máscaras que utilizan en sus danzas, collares de conchas y piedras marinas y cinturones con pezuñas de venado. Los músicos fabrican sus tambores y flautas. Algunas familias manufacturan petates, canastas y coronas de carrizo; también se elaboran platos y tazas de barro que utilizan para las fiestas y después destruyen.

También confeccionan faldillas, blusas, manteles, servilletas y mantos.

Zapotecos. (Oaxaca).

Los zapotecos se llaman a sí mismos binnizá (binni, gente; zá, nube: gente que proviene de las nubes), bene xon, o ben’zaa, dependiendo de la región en que habiten.

Fueron los mexicas quienes los denominaron zapotecatl, término que se deformó con la presencia española en su territorio y derivó en zapotecos.

Se concentran principalmente en el Estado de Oaxaca, distribuidos en cuatro áreas geográfico-culturales: el Istmo de Tehuantepec, los Valles Centrales, la Sierra Norte de Oaxaca y la Sierra Madre del Sur. Son asimismo el grupo étnico más profuso de la entidad, y el tercer grupo indígena más numeroso del país.

De acuerdo con el XII Censo General de Población y Vivienda del año 2000, había 452 887 zapotecos en el país, mientras que en el Estado de Oaxaca habitaban 377 936 hablantes de esta lengua.

64

Page 65: Culturas actuales de mexico

Existen varias lenguas zapotecas que pertenecen a la familia chatina-zapoteca del tronco otomangue: zapoteco de la sierra norte o serrano norteño, también conocido como zapoteco de Ixtlán, de la Sierra de Juárez, de Villalta, Nexitzu, zapoteco Vijano o Vijano; zapoteco del Rincón, yalalteco o Be’n gulall; zapoteco de los Valles, zapoteco Vallista o diidzaj; zapoteco del Istmo, llamado también zapoteco Istmeño, zapoteco Tehuano, Tehuano, Juchiteco, didxaza o tichazaa; zapoteco sureño o diatu, dialu o diatse’e, Solteco y zapoteco de Cuixtla.

La región zapoteca vista en su conjunto, asemeja un corredor con orientación noreste-sureste, flanqueado por la Sierra de Juárez al norte, y la sierra del sur, al sur, que desemboca en el Istmo de Tehuantepec. Los tipos de vegetación cambian de bosque de coníferas, en las partes altas, al matorral xerófito en los valles centrales, y bosque tropical deciduo y matorral halófito en el istmo.

Los pueblos están en su mayoría divididos en barrios. El patrón de asentamiento en la zona serrana es disperso, generalmente es en la parte media o alta de los cerros donde se asientan los pueblos, con excepción de los poblados grandes, cuya calle principal está relativamente pavimentada, la mayor parte de los pueblos presenta calles en las que prevalecen la piedra y la tierra apisonada.

La casa más tradicional se construía de palma y adobe con piso de tierra. En las rancherías y viviendas propiamente rurales, se sigue construyendo con palma. En los pueblos y cabeceras municipales, las casas se construyen actualmente con paredes de tabique, pisos de cemento y techos de concreto.

En algunas áreas se observa un fuerte deterioro ecológico de las zonas boscosas ocasionada por la tala inmoderada de los árboles. Esta actividad es realizada casi siempre por los propios comuneros, quienes a cambio de un pequeño ingreso económico venden sus bosques a las compañías madereras, entre ellas la Papelera Tuxtepec.

La tenencia de la tierra es generalmente comunal. Cada unidad familiar posee pequeñas parcelas de temporal, algunas de ellas muy erosionadas. El hombre siembra maíz intercalado con frijol, calabaza, chile y café. Para complementar sus ingresos los campesinos zapotecas crían aves de corral o realizan otras actividades como la artesanal.

En el istmo, si bien se siembra maíz para el autoconsumo, últimamente ha sido desplazado por cultivos comerciales como el mango, melón, sandía y caña de azúcar.

En los valles centrales, aparte de la milpa, dan gran importancia al cultivo de hortalizas y frutales, destinados al mercado local que junto con forrajes, son los principales productos que les permiten ingresos monetarios.

Complemento de las labores agrícolas son la cría y venta de animales domésticos. El pastoreo de caprinos y bovinos se realiza bajo el régimen de libre pastoreo.

La especialización artesanal de las comunidades se remonta al periodo prehispánico y constituye el motor fundamental de la compleja red de mercados regionales.

65

Page 66: Culturas actuales de mexico

En mayor o menor medida las actividades están ya determinadas por los requerimientos de un mercado externo no zapoteca, que controla y establece los precios de venta, impone cuotas de producción e influye poderosamente en la paulatina transformación de los sistemas de trabajo tradicionales. Ahora, la producción de textiles, de objetos de barro y otros se hace, en muchos casos, a destajo, por encargo de compradores a través de los talleres o de la unidad familiar, lo que implica también la pérdida de técnicas tradicionales y el manejo irracional de los recursos naturales.

En la sierra norte las prendas tradicionales que aún se siguen usando son, para la mujer, rebozos de algodón y en menor medida de seda, así como blusas de algodón bordadas; entre los hombres, algunos calzan huaraches de cuero y usan sombreros de palma, que son desplazados cada vez más por los tenis y cachuchas. La presencia del pantalón de manta es ya muy rara, predominando las telas industriales. Destacan algunas comunidades por la belleza del vestido femenino: en yalalag, distrito de villa alta, está compuesto por una blusa larga y un enredo, un vistoso tocado, cintas colgadas en el pecho, rebozo y huaraches.

En otras comunidades se usa un huipil o rache xagá y una falda de manta o rache zudé, de color blanco sostenido con un ceñidor morado o rojo. En la cabeza llevan un rebozo blanco o bé cuxó. En el rincón las prendas son un enredo oscuro y un huipil floreado. En el istmo, las mujeres llevan blusas bellamente bordadas con colores vivos y faldas largas circulares.

Dos instituciones sociales han sobrevivido en las comunidades zapotecas como elementos de identidad: el trabajo comunitario y la ayuda mutua. En el shin raueo, trabajo comunitario, todos los miembros tienen obligatoriamente que intervenir para obtener un beneficio común. Mediante el shin raue y la aportación económica de los migrantes se ha podido construir la mayor parte de la infraestructura con que cuentan los pueblos: escuelas, mercados, caminos, centros de salud, canchas. Por el contrario, la ayuda mutua o gzo.on (gozona zapoteca) es la colaboración particular que se dan los amigos, los parientes y los compadres, tanto en trabajo como en producto durante las actividades agrícolas, las fiestas religiosas y las defunciones. Dar y recibir es un derecho y una obligación.

En la mayoría de los poblados zapotecas cumplir con un nombramiento religioso o político es parte de las obligaciones de los miembros de la comunidad. Desde temprana edad los varones inician el desempeño de cargos religiosos o políticos: en la iglesia como topilillos, en el municipio como topiles. La vinculación entre las estructuras políticas y religiosas, permite a los individuos ejercer toda una serie de cargos que los pueden conducir ya sea a la presidencia de la iglesia o a la alcaldía municipal. Esto involucra a los ciudadanos en la organización de variadas actividades, de las cuales la más importante es la mayordomía del santo patrón.

En la actualidad algunos zapotecas se han convertido a las sectas evangélicas provenientes de misioneros norteamericanos, así existen testigos de Jehová, congregacionales, adventistas del séptimo día, sabatistas, mormones y presbiterianos, entre otros.

66

Page 67: Culturas actuales de mexico

Zoques. (Chiapas - Oaxaca).

Los zoques, tzoque, soque o zoc se llaman a sí mismos o’de püt que significa «gente de idioma», «palabra de hombre» o, en otros términos, «verdadero, auténtico».

De acuerdo con los datos proporcionados por el XII Censo General de Población y Vivienda (2000), el número de hablantes de lengua zoque de 5 años y más a nivel nacional fue de 51 464, mientras que para el Estado de Chiapas fue de 41 609, y de 5 282 en Oaxaca. La lengua zoque deriva de la familia mixe-zoque, y también se le conoce con los nombres de tzuni ote, tahtza’uay ‘yode y tzunipi’n otowe.

En el estado de Chiapas, se asientan en tres zonas bien diferenciadas: la zona serrana, la vertiente del golfo y la depresión central. En la vertiente del golfo, los indígenas zoques se concentran en los municipios de Amatán, Chapultenango, Francisco León, Ixhuatán, Ixtacomitán, Ostuacán, Solosuchiapa y Tapilula; en la depresión central se encuentran sobretodo en copainalá y tecpatán y, finalmente, en la sierra madre de Chiapas en los municipios de Coapilla, Ocotepec, Pantepec, Rayón y Tapalapa. Este territorio, ubicado en la región centro occidente del estado, se caracteriza por tener una variada vegetación que incluye desde sabanas tropicales hasta bosques de hojas perennes con clima templado. También encontramos población zoque en la Selva Lacandona, como consecuencia de la reubicación de los damnificados de la explosión del volcán Chichonal. En el Estado de Oaxaca la población zoque se concentra en los municipios de Santa María Chimalapa y San Miguel Chimalapa.

Los zoques son campesinos minifundistas, productores de granos básicos, café, ganado y algunos productos artesanales como alfarería y cestería. Constituyen también la principal fuerza de trabajo para ganaderos y finqueros mestizos, así como para algunas actividades del mercado laboral en ciudades regionales como Villahermosa, Cancún, Coatzacoalcos y Tuxtla Gutiérrez.

En municipios de alta concentración indígena como Amatán, Chapultenango, Francisco León, Ocotepec, Pantepec y Tapalapa la superficie municipal resulta insuficiente para satisfacer la demanda de tierras para la población. En ellas, la Secretaría de la Reforma Agraria ha repartido varias veces la misma tierra, lo que ha ocasionado problemas de indefinición de límites. La escasez de terrenos ha provocado una conflictiva situación en el agro que se expresa en litigios por límites de tierra, invasiones y violencia.

La vivienda tradicional con techo de zacate, paredes de bajareque y piso de tierra, actualmente sólo se encuentra en las rancherías más alejadas, ya que ha sido sustituida por construcciones de lámina, cemento, tabique y piedra. Las casas cuentan con un patio o solar donde se cultiva gran variedad de frutales: mangos, limones, naranjas, anonas, plátanos, flores y plantas de uso medicinal y culinario.

Generalmente la vivienda es de forma rectangular con una sola habitación, con un anexo más pequeño que se usa como cocina.

67

Page 68: Culturas actuales de mexico

En la actualidad se ha perdido el uso del traje tradicional entre los hombres y mujeres zoques. Sólo es posible encontrarlo en algunas mujeres ancianas; consiste en un huipil blanco confeccionado a mano con tela de algodón y adornado con brocados, cuyos motivos representan flores, pájaros y otros animales.

La población viste normalmente prendas de fibras artificiales y guardan la indumentaria tradicional para los días de fiesta.

En las localidades de Tapalapa y Ocuilapa se elabora alfarería; en Ocotepec se hacen las wacas (canastas de bejuco para lavar los granos de café y cacao), que tienen larga tradición y se comercializan a través de la casa de las artesanías de chiapas.

En las comunidades chiapanecas existen tres grupos religiosos: los católicos, los adventistas o protestantes y los que se reconocen como «costumbreros».

Existe un rechazo y una falta de reconocimiento de unos a otros, lo que propicia conflictos por la lucha de poder.

La presencia de los adventistas o protestantes es reciente (a partir de los años 30), aunque el número de seguidores aumenta considerablemente con el paso de los años.

Entre los costumbreros, a pesar de no reconocer al sacerdote católico como máxima autoridad, admiten y celebran a los santos católicos, llevan a cabo fiestas tradicionales, danzas y sacrificios rituales. Para estas celebraciones, existe un complejo sistema de organización, cuya jerarquía se basa en la edad de los participantes: los más ancianos ocupan los cargos más importantes y los jóvenes los de auxiliares.

Zoques de Chimalapas. (Oaxaca).

Les llamamos zoques, se les reconoce regionalmente como chimas y se autodenominan ’angpøn en su propia lengua, término que a principios del siglo XIX fue traducido como “gente industriosa” por un sacerdote católico y que ahora los propios ’angpøn traducen como “los que hablan la lengua”.

Probablemente, el término “zoque” proviene del náhuatl zoquitl = “lodo”, de manera que zoque sería el “hombre de lodo”, nombre con que los bautizaron los aztecas en sus incursiones en la zona, aunque también es probable que el término provenga de una forma de saludo utilizada en alguna de las lenguas zoques de Chiapas.

Su lengua es una más de las lenguas zoques que se hablan en Chiapas, Tabasco y, bajo el nombre de popoluca, en Veracruz.

Su lengua está emparentada con el mixe hablado en Oaxaca y en Veracruz, también en este último caso por los llamados popolucas, formando las dos lenguas y sus variantes dialectales lo que los lingüistas han bautizado como la familia mixezoque.

68

Page 69: Culturas actuales de mexico

Los zoques de Oaxaca habitan fundamentalmente en dos municipios del corazón del Istmo de Tehuantepec: San Miguel Chimalapa y Santa María Chimalapa, en medio precisamente de la Selva Zoque Chimalapa, con un territorio estos dos municipios de aproximadamente 594,000 hectáreas, con una gran riqueza forestal, hidrológica, biótica, energética, turística y arqueológica, donde coexisten selva alta, bosque de pino, selva baja y bosque de montaña. Reconocen a Santa María Chimalapa como el más antiguo de los asentamientos “chimas”, el dueño legítimo del territorio, que regaló tierras a los sanmigueleños.

Aunque hasta hace poco tiempo el conocimiento del idioma ’angpøn era el marcador fundamental de la pertenencia étnica, en nuestros días, frente al abandono del zoque en favor del español, son las relaciones de parentesco, el compadrazgo, la vecindad y la participación en los espacios rituales de la comunidad los que contribuyen a la definición del grupo. A pesar de todo, el ’angpøn es el idioma privilegiado para comunicarse con las divinidades. En cambio, el ser chima, aunque abarca con mayor exactitud a los ’angpøn, puede incluir también a otros que, habitando en la selva, reconocen la legitimidad de la autoridad zoque chimalapa.

Otro componente de la identidad es el definirse como istmeño, resultado de la conformación de una región más amplia en donde los usos y costumbres zapotecos han proporcionado buena parte de las formas de vida cultural. Dentro de todos estos niveles de autoadscripción, es tal vez el referido a la identidad residencial, la pertenencia a una comunidad, uno de los fundamentales, referente en donde la defensa del territorio y de los recursos propios ha sido el fundamento del ser zoque chimalapa.

De manera semejante a como ocurre, en el mismo estado, entre chontales, mazatecos, mixes, mixtecos, triquis y zapotecos, entre los zoques oaxaqueños encontramos la presencia de sistemas duales de organización social, expresados en el territorio y en la cosmovisión. Aunque no de forma tan patente como hasta hace todavía algunas décadas, encontramos que las localidades zoques chimalapas, lo mismo que el territorio chima en su conjunto, se dividen en dos mitades o secciones (a veces nombradas “arriba” y “abajo”); estando la pertenencia a una u otra mitad definida por la ascendencia y la residencia (que se diluye en nuestros días por la presión demográfica, teniendo que buscar las familias un lugar donde construir una casa, lugar que no siempre se encuentra en la mitad o sección en que se nació); tendiendo las mitades a ser endogámicas (los matrimonios se dan preferentemente entre miembros de la misma mitad); distribuyéndose equitativamente los cargos, hasta donde la convocatoria de las costumbres lo permite, entre una sección y otra, ya sea alternando el cargo o distribuyéndolo entre igual número de personas de una y otra sección.

En Santa María funciona el sistema de usos y costumbres. Las elecciones se llevan a cabo en asamblea y ahí mismo se propone a los candidatos a presidente municipal, síndico y regidor de hacienda, los cuales son votados de manera independiente. En San Miguel no se usan boletas electorales, sino que la votación se hace levantando la mano, aunque para la elección se conforman planillas identificadas y apoyadas por los partidos políticos.

69