Ediciones Diálogo democrático: herramienta fundamental...

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Introducción Los países de América Latina han venido afrontando, en los últimos años, profundos cambios de índole cultural, social, político y económico en el marco de los procesos de con- solidación democrática. Estos cam- bios han planteado constantes desa- fíos a los gobiernos, como a otros actores de la sociedad, creando un ambiente propicio para la búsqueda de espacios de participación de diá- logo. En algunos países latinoameri- canos, estos espacios de diálogo in- cluyente han hecho posible que los cambios necesarios se realicen me- diante la búsqueda de consensos en temas de interés nacional. Sin em- bargo, en otros países en los cuales no se han dado estos espacios, se han generado cambios abruptos en los sistemas políticos, que se han visto reflejados en las Cartas Mag- nas respectivas. Resulta indiscutible que cada vez se vuelve necesaria la consolidación institucional de los mecanismos de diálogo, de forma que el diálogo pueda producirse de manera perma- nente, incluyente, y democrática, más allá de determinadas voluntades políticas, que por favorables que sean, no dejan de ser, por su propia esencia, coyunturales. Los mecanismos de diálogo institu- cional cada vez son más comunes en el mundo, y Latinoamérica no es la excepción, cada uno con distin- tos matices y características, ya que Diálogo democrático: herramienta fundamental para el fortalecimiento institucional Ediciones En enero de 2001, el Depar- tamento de Estudios Legales, DEL, con el fin de compartir de manera periódica y permanente los estudios que se elaboraban bajo una perspectiva académica, técnica y jurídica, publicó el Boletín No. 1, titulado: “Comen- tarios al Proyecto del Código Tributario”. Con este boletín se dio inicio a las publicaciones que hace el DEL mensualmente, en las cuales se han analizado temas de relevancia nacional, tales como: reformas consti- tucionales, transparencia y acceso a la información pública, tratados de libre comercio, el proceso de integración centro- americana, importancia del forta- lecimiento institucional, reformas electorales, leyes penales, leyes comerciales, sentencias de la Corte Suprema de Justicia, flexibilidad laboral, respeto a la Constitución y al Estado de Derecho, entre otros. En estos años nos enorgullece que nuestros boletines han servido de referente a muchos, tanto en la comunidad jurídica, así como a los tomadores de decisión y a la misma sociedad civil. Hoy nos llena de mucha complacencia publicar nuestra edición No. 100, en la cual se aborda un tema de vital impor- tancia en nuestra sociedad como lo es el “Diálogo democrático: herramienta fundamental para el fortalecimiento institucional”.

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Introducción

Los países de América Latina hanvenido afrontando, en los últimosaños, profundos cambios de índolecultural, social, político y económicoen el marco de los procesos de con-solidación democrática. Estos cam-bios han planteado constantes desa-fíos a los gobiernos, como a otrosactores de la sociedad, creando unambiente propicio para la búsquedade espacios de participación de diá-logo. En algunos países latinoameri-canos, estos espacios de diálogo in-cluyente han hecho posible que loscambios necesarios se realicen me-diante la búsqueda de consensos entemas de interés nacional. Sin em-bargo, en otros países en los cualesno se han dado estos espacios, se

han generado cambios abruptos enlos sistemas políticos, que se hanvisto reflejados en las Cartas Mag-nas respectivas.

Resulta indiscutible que cada vezse vuelve necesaria la consolidacióninstitucional de los mecanismos dediálogo, de forma que el diálogopueda producirse de manera perma-nente, incluyente, y democrática,más allá de determinadas voluntadespolíticas, que por favorables quesean, no dejan de ser, por su propiaesencia, coyunturales.

Los mecanismos de diálogo institu-cional cada vez son más comunesen el mundo, y Latinoamérica noes la excepción, cada uno con distin-tos matices y características, ya que

Diálogo democrático:herramienta fundamental parael fortalecimiento institucional

Ediciones

En enero de 2001, el Depar-tamento de Estudios Legales,DEL, con el fin de compartir demanera periódica y permanentelos estudios que se elaborabanbajo una perspectiva académica,técnica y jurídica, publicó elBoletín No. 1, titulado: “Comen-tarios al Proyecto del CódigoTributario”. Con este boletín sedio inicio a las publicaciones quehace el DEL mensualmente, enlas cuales se han analizadotemas de relevancia nacional,tales como: reformas consti-tucionales, transparencia yacceso a la información pública,tratados de libre comercio, elproceso de integración centro-americana, importancia del forta-lecimiento institucional, reformaselectorales, leyes penales, leyescomerciales, sentencias de laCorte Suprema de Justicia,flexibilidad laboral, respeto a laConstitución y al Estado deDerecho, entre otros.

En estos años nos enorgulleceque nuestros boletines hanservido de referente a muchos,tanto en la comunidad jurídica,así como a los tomadores dedecisión y a la misma sociedadcivil.

Hoy nos l lena de muchacomplacencia publicar nuestraedición No. 100, en la cual seaborda un tema de vital impor-tancia en nuestra sociedad comolo es el “Diálogo democrático:herramienta fundamental parael fortalecimiento institucional”.

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éstos han respondido a las distintasrealidades y necesidades de los paí-ses respectivos.

Dos de los casos más exitosos deinstitucionalización del diálogo sonprecisamente el Consejo Económicoy Social de España y el AcuerdoNacional del Perú, los cuales hansido ejemplos de un ejercicio dediálogo incluyente, por lo que consi-deramos valioso compartir ambasexperiencias en el presente boletín.

El Salvador enfrenta actualmenteimportantes retos y desafíos, comolo son la crisis económica y lograrperfeccionar el sistema electoral,para lo que se requiere de consensosa nivel de actores claves en la socie-dad, lo cual sólo será posible alcan-zar a través del diálogo en el país.

El diálogo y la democracia1

Es importante destacar que el régi-men político que tiene mayor voca-ción por el diálogo es la democracia,ya que en un Estado de Derecho de-mocrático los ciudadanos tienen ga-rantías que se vinculan directamentecon el diálogo. Las libertades deconciencia, de expresión, de reu-nión, de asociación o el derecho depetición, por ejemplo, son conquis-tas que están en la base o suponenel ejercicio del diálogo. Asimismo,

la democracia cuenta con institucio-nes y espacios como el parlamentoy las campañas electorales en losque el diálogo, en sus diversas mani-festaciones, es la forma de relaciónpor excelencia entre los actores polí-ticos. El diálogo es, pues, un mediopara canalizar racionalmente la plu-ralidad política y también una formade producir decisiones políticamentesignificativas y consensuadas.

Perseverar en el diálogo es impor-tante en una época como la actual,signada por profundos cambios entodos los ámbitos. En efecto, antelas tensiones generadas por la emer-gencia de la diversidad política, eco-nómica, social y cultural es necesa-rio potenciar el diálogo para articulardemocráticamente las múltiplesidentidades existentes. El objetivodebe ser la obtención de fórmulasinclusivas de todos aquellos actoresque se reconozcan en los propósitosdel Estado de Derecho democráticocomo espacio en el que pueden con-frontarse legal y pacíficamente losdiversos proyectos políticos. El diá-logo es un recurso de gran valía pa-ra evitar que las tensiones que gene-ra la diversidad tengan como resulta-do la exclusión, la fragmentación yla violencia.

Como valor ético de la política ycomo método para lograr consensos,el diálogo es consustancial a la de-mocracia; permite la comunicación,el conocimiento, la comprensión,la empatía y los acuerdos entre acto-res políticos. Es también una forma

...ante lastensionesgeneradas por laemergencia de ladiversidad política,económica, socialy cultural esnecesariopotenciar eldiálogo paraarticulardemocráticamentelas múltiplesidentidadesexistentes.

1. Laura Baca Olamendi,“Diálogo y Democra-cia”.

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de articulación dinámica entre lamayoría y las minorías, ya que enel proceso de toma de decisionestodos los actores políticos tienen elderecho de expresar sus puntos devista para ser tomados en cuenta.De ese modo, el diálogo norma lasrelaciones entre los actores políticos,y entre éstos y la ciudadanía.

La cultura política de una sociedades democrática cuando las relacionesentre gobernantes y gobernados,ciudadanos, organizaciones y Estadose sustentan en valores como laigualdad jurídica, igualdad política,la libertad, la tolerancia, el respeto,el pluralismo, la legalidad, la partici-pación, y, por supuesto, el diálogo.Fortalecer la cultura política demo-crática en un país, implica, entreotras tareas, consolidar el ejerciciodel diálogo como forma de hacerpolítica.

Institucionalidad, diálogodemocrático y políticas públicas

En la actualidad, es común escucharque toda democracia necesita deldiálogo para incrementar la partici-pación ciudadana. Es mucho máscomún oír que el proceso de demo-cratización o de democracias entransición no progresa sin diálogo.

En el caso particular de El Salvador,este principio cobra plena vigenciaal reconocer que es necesario mejo-rar los vínculos entre representantesy representados, ya que la ciudada-

nía es determinante para la mejoradel sistema democrático, puesto queen este régimen el poder reside enlos ciudadanos. Por tanto los víncu-los entre ambos deben ser fuertes ylos canales de comunicación, perma-nentes2.

Muchos consideran que el diálogodemocrático es un saldo pendienteen el campo de las políticas públicasdel país y por lo tanto, debieran ha-cerse esfuerzos por institucionali-zarlo.

En este sentido, FUSADES, en elestudio presentado en el año 2005,titulado: “Las instituciones demo-cráticas en El Salvador: valoraciónde rendimientos y plan de fortaleci-miento”3, elaborado junto a la Uni-versidad de Salamanca, señaló enel capítulo relativo al capital social,que deben haber mecanismos dediálogo que posibiliten el entendi-miento y la búsqueda de consensos,similar al Consejo Económico y So-cial de España. Asimismo, en la“Estrategia económica, social e ins-titucional 2009-2014, democraciay crecimiento: fundamentos del de-

La cultura políticade una sociedades democráticacuando lasrelaciones entregobernantes ygobernados,ciudadanos,organizaciones yEstado sesustentan envalores como laigualdad jurídica,igualdad política, lalibertad, latolerancia, elrespeto, elpluralismo, lalegalidad, laparticipación, y, porsupuesto, eldiálogo.

2. FUSADES, “Las Instituciones democráticasen El Salvador, valoración de rendimientosy plan de fortalecimiento” primera edición,San Salvador, El Salvador, junio de 2005,http://www.intituciones-fusades.org.

3. FUSADES, “Las Instituciones democráticasen El Salvador, valoración de rendimientosy plan de fortalecimiento” primera edición,San Salvador, El Salvador, junio de 2005,http://www.intituciones-fusades.org

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sarrollo4”, se propone fomentar mo-delos de cooperación institucionalque redunden en la creación de me-canismos de institucionalización deldiálogo. Es de destacar, que en am-bos documentos, FUSADES señalaenfáticamente que una prioridad pa-ra el país debe ser encontrar espaciosde diálogo que permitan lograr con-sensos entre los tomadores de deci-sión.

Bajo la necesidad que faltaba muchopor hacerse en el tema de fomentare institucionalizar el diálogo en elpaís, en el 2007, FUSADES tomala decisión de darle seguimiento alo que ya se había dicho en el estu-dio antes mencionado, y se decidióaplicar a recursos del Fondo para laDemocracia de las Naciones Unidas(UNDEF). Fue así como se obtuvie-ron fondos para realizar el proyecto“Fortaleciendo el Diálogo y las Ins-tituciones Democráticas en El Salva-dor” del año 2007 a 2009.

El objetivo primordial que se busca-ba con el proyecto, era el de estable-cer espacios para generar diálogoentre tomadores de decisión, socie-dad civil, academia, medios de co-municación y grupos vulnerablesque permitieran el fortalecimientode las instituciones democráticas através de propuestas de políticaspúblicas concretas y consensuadas.

Fue así como se echó andar el pro-yecto y durante dos años se contócon la participación de más de 600personas en más de 21 eventos, enlos cuales se trabajó en torno a cua-tro grandes áreas prioritarias parael país: i) Elecciones y sistema elec-toral; ii) Descentralización munici-pal; iii) Transparencia, rendición decuentas y acceso a información pú-blica; y iv) Estado de Derecho5.

Se adoptó la metodología de gruposfocales y talleres de discusión paradebatir los temas de las cuatro áreasdel proyecto. Y cabe destacar quede las grandes enseñanzas que nosdejó este ejercicio, fue que es posi-ble dialogar constructivamente enEl Salvador y llegar a consensos apesar de la polarización política.

Con el fin de conocer experienciasde cómo otros países han logradocanalizar racionalmente la plurali-dad política y producir decisionespolíticamente significativas y con-sensuadas, dentro del proyecto, seconsideró valioso conocer uno delos casos más exitosos de institucio-nalización del diálogo, como lo es,el Acuerdo Nacional del Perú. Asi-mismo, consideramos valioso cono-cer la experiencia española, ya que,como se mencionó anteriormente,FUSADES en recientes estudios hamanifestado la importancia de bus-

4. FUSADES, “Estrategia económica sociale institucional 2009-2014. Democracia ycrecimiento: fundamentos del desarrollo.,San Salvador, El Salvador, 2009,http://www.fusades.org

FUSADESseñalaenfáticamenteque una prioridadpara el país debeser encontrarespacios dediálogo quepermitan lograrconsensos entrelos tomadores dedecisión.

5. FUSADES, PNUD, “Institucionalidad, Diá-logo Democrático y Políticas Públicas, FU-SADES-UNDEF-PNUD, San Salvador, ElSalvador, abril del 2009.

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car mecanismos de diálogo que po-sibiliten el entendimiento y la bús-queda de consensos, similar al Con-sejo Económico y Social de España.

Ambos son conocidos como ejem-plos de un ejercicio de diálogo inclu-yente y democrático, en el cual seha logrado institucionalizar el diálo-go como medio para llegar a acuer-dos en temas de interés nacional,que ha permitido el fortalecimientode sus democracias. Más adelante,en el presente boletín se entrará aanalizar ambas experiencias más adetalle con el fin de ver cómo otrospaíses han hecho las cosas e identi-ficar recomendaciones que puedanaplicarse a nuestro país.

De manera general, podemos decirque de las grandes enseñanzas quedejó el proyecto en su totalidad, esque el diálogo es una parte funda-mental en la democracia salvadore-ña, y que es importante que las pre-ferencias de todos los ciudadanossean consideradas y valoradas. Asi-mismo, quedó demostrado que sí esposible que la clase política lleguea consensos sobre temas de interésnacional, lo cual quedó de manifies-to a través de 10 grupos focales quese llevaron a cabo para impulsar laestrategia de diálogo en el país.

En este sentido, se reiteró la impor-tancia que en el país exista un verda-dero diálogo incluyente y que se déen un ambiente de respeto y cordiali-dad, en el cual los distintos sectoresparticipen en dicho proceso y que

sus necesidades sean consideradasen el resultado del mismo.

Como parte final del proyecto, sepropuso un plan de políticas públi-cas que considera las recomendacio-nes emanadas de todas las activida-des y estudios que se realizaron, yse trasladaron a líneas de actuaciónprácticas y priorizadas, las cualesrespondieron a los criterios de altosniveles de consenso y de mayor via-bilidad en el contexto actual delpaís.

Con el fin que este esfuerzo quedaraplasmado en un documento al cualse le pudiera dar seguimiento porser una valiosa experiencia en elpaís, se elaboró el documento quese denominó “Institucionalidad,Diálogo Democrático y PolíticasPúblicas, en el cual se encuentranreflejadas 15 políticas públicas, divi-didas en cinco líneas de actuación:i) Elecciones y sistema electoral; ii)Relaciones entre los poderes Ejecu-tivos y Legislativo; iii) Descentra-lización municipal; iv) Transparen-cia, rendición de cuentas y accesoa información pública; y v) El poderJudicial y el respeto al Estado deDerecho. Es de destacar, que la rele-vancia de estas propuestas es queson producto de amplios consensosentre los participantes de la sociedadcivil, las universidades, los genera-dores de opinión, los actores políti-cos y los funcionarios públicos.

Este proyecto indiscutiblemente per-mitió sentar un precedente en el

De manerageneral,podemos decirque de lasgrandesenseñanzas quedejó el proyectoen su totalidad, esque el diálogo esuna partefundamental en lademocraciasalvadoreña, yque es importanteque laspreferencias detodos losciudadanos seanconsideradas yvaloradas.

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país, ya que a través del mismo, sepuso de manifiesto en la sociedadcivil, la importancia de convertir eldiálogo en una prioridad en el país,si realmente se quiere lograr unamejora en la calidad de nuestra jo-ven democracia.

Los Acuerdos de Paz suscritos en1992 arrojaron resultados muy im-portantes para El Salvador. Surgie-ron de un diálogo nacional en elcual las principales fuerzas políticasse pusieron de acuerdo en las condi-ciones que debían imperar en el paíspara darle sustento a la paz, la demo-cracia y la gobernabilidad, y enrum-barlo hacia la consolidación del pro-ceso democrático. No obstante, lue-go de 17 años, el diálogo nacionales un tema pendiente aún, ya queno se ha logrado institucionalizarde manera tal que hayan espaciosde diálogo constructivo adonde losactores políticos puedan debatir so-bre los temas más relevantes parala vida nacional y lograr consensoscomo los que se lograron en aquelmomento histórico para el país.

Es por ello, que cabe destacar quetodavía falta mucho trabajo por rea-lizar para convertir al diálogo en unmecanismo formal en la toma dedecisiones a nivel nacional, no obs-tante, es gratificante que el país hayadado los primeros pasos hacia laapertura de espacios que han permi-tido que distintos actores hayan dia-logado de manera pacífica, demo-crática e incluyente.

En las próximas páginas hablaremosde cómo otros países ya se han en-rumbado en este esfuerzo, llegandoinclusive hasta la institucionaliza-ción del diálogo y cuáles han sidolos beneficios que dicha institucio-nalización les ha traído a sus proce-sos de consolidación democrática.

Experienciasinternacionalesde diálogo institucionalizado

I. Acuerdo Nacional del Perú

Uno de los casos más ejemplificati-vos de la institucionalización deldiálogo, es el caso peruano a travésdel Acuerdo Nacional del Perú, elcual surge de una situación de debili-tamiento institucional, en momentosen el que el país estaba inmerso enuna crisis política, económica y so-cial.

Habiendo un nuevo Presidente elec-to en el Perú, Alejandro Toledo, enjulio de 2001, éste propone entablarun proceso de diálogo el cual busca-ba lograr un amplio proceso socialy contribuir así, a la consolidaciónde la democracia peruana.

El compromiso de diálogo para lo-grar el Acuerdo Nacional del Perú,fue convocado y liderado por el Pre-sidente Constitucional de la Repú-blica y su conducción fue encargadaal Presidente del Consejo de Minis-tros, apoyado por una Comisión Mi-nisterial conformado por represen-

Los Acuerdos dePaz suscritos en1992 arrojaronresultados muyimportantes para ElSalvador... ...luegode 17 años, eldiálogo nacional esun tema pendienteaún, ya que no seha logradoinstitucionalizar demanera tal quehayan espacios dediálogo constructivoadonde los actorespolíticos puedandebatir sobre lostemas másrelevantes para lavida nacional ylograr consensocomo los que selograron en aquelmomento históricopara el país.

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tantes del Ministerio de RelacionesExteriores, Ministerio de Defensa,Ministerio de Educación, Ministeriode Salud, Ministerio de Trabajo yPromoción del Empleo y Ministeriode Mujer y Desarrollo Social. Asi-mismo, se convocó a un ComitéConsultivo el cual estuvo conforma-do por personalidades nacionales6

e internacionales7.

El Acuerdo Nacional del Perú naciócon el objetivo de crear una visiónnacional compartida sobre el futurodel Perú para los próximos 20 añosy formular las políticas públicas ne-cesarias para alcanzarlo, así comoconsolidar la transición democráticay la legitimidad del sistema políticopor medio de la construcción de unacultura de transparencia, diálogo yconsenso.

El Acuerdo Nacional permitió quePerú institucionalizara el diálogoinclusivo y permitiera llegar a con-sensos sin precedente entre las sietefuerzas políticas en el Parlamentoy las siete organizaciones más repre-sentativas de la sociedad civil sobrelos principales retos que afrontabael país8. Les permitió cristalizar un

compromiso político de mucha am-plitud, gracias a que fue el resultadodel consenso de muchos actores cla-ves en la sociedad, lo que permitióimpregnarlo de mayor legitimidad.

El Acuerdo Nacional del Perú tuvocomo resultado un documento quecontenía 31 políticas de Estado delargo plazo en las áreas de: a) Demo-cracia y Estado de Derecho, b) Equi-dad y justicia, c) Competitividaddel país y d) Estado eficiente, trans-parente y descentralizado9.

Con el fin que estas políticas públi-cas no quedaran sólo en papel, se-guidamente, se institucionalizó el“Foro del Acuerdo Nacional”, comoinstancia de promoción del cumpli-miento y seguimiento del Acuerdo10,el cual a la fecha cuenta con una es-tructura tripartita en la cual se tienela representación del Poder Ejecu-tivo, del Congreso de la República11

y de las Organizaciones de la Socie-

El AcuerdoNacional permitióque Perúinstitucionalizara eldiálogo inclusivo ypermitiera llegar aconsensos sinprecedente entrelas siete fuerzaspolíticas en elParlamento y lassieteorganizacionesmásrepresentativas dela sociedad civilsobre losprincipales retosque afrontaba elpaís.

6. Dr. Fernando Cabieses, Dr. Max Hernándezy R. P. Juan Julio Wicht.

7. Ex Ministro Diego Achard (Uruguay), ExPresidente Rodrigo Carazo (Costa Rica),Ex Embajador Luis Lauredo (Estados Uni-dos), Ex Canciller Augusto Ramírez Ocam-po (Colombia) y Ex Canciller Eduardo Stein(Guatemala).

8. Gobierno: Presidente Constitucional de laRepública. Partidos Políticos: Acción Popu-lar, Frente Independiente Moralizador, Parti-

do Aprista Peruano, Perú Posible, SomosPerú, Unidad Nacional, y Unión por el Perú.Sociedad Civil: Concilio Nacional Evangéli-co del Perú, Confederación General de Tra-bajadores del Perú, Confederación Nacionalde Instituciones Empresariales Privadas,Conferencia Episcopal Peruana, Coordina-dora Nacional de Frentes Regionales, Mesade Concertación para la Lucha Contra laPobreza y Sociedad Nacional de Industrias.

9. Acuerdo Nacional de Perú, Políticas de Es-tado, agosto 2008. http://www.acuerdonacional.gob.pe/DocumentosAN/2008/castellano.pdf

10. Decreto Supremo N° 105-2002-PCM.

11. Todos los partidos políticos representadosen el Congreso de la República, puedenasistir de manera individual o como alianzaselectorales.

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dad Civil12, y está adscrito al Conse-jo de Ministros del Órgano Ejecuti-vo.

El Foro del Acuerdo está conforma-do por el Presidente del Consejo deMinistros, por un Comité Coordinary cuatro Comisiones, la cuales co-rresponden a los cuatro grandes ob-jetivos del Acuerdo Nacional: De-mocracia y Estado de Derecho;Equidad y Justicia Social; Compe-titividad del País; y Estado Eficiente,Transparente y Descentralizado.

El Comité Coordinador está com-puesto por cuatro miembros repre-sentantes de cada ámbito presenteen el foro: un representante de lospartidos políticos, uno de las organi-zaciones de la sociedad civil, unodel Gobierno y un miembro delConsejo Consultivo. El cargo delComité Coordinador es rotativo, ytiene una periodicidad de tres meses.El Comité Coordinador es la instan-cia permanente del Foro del Acuer-do Nacional que se encarga de coor-dinar con la Presidencia del Foro,con la Secretaría Técnica y con lascuatro comisiones.

Es importante destacar que la crea-ción del Foro del Acuerdo Nacionalpermitió que se le diera seguimientoefectivo al cumplimiento de metas

con respecto a las 31 políticas deEstado contempladas en el AcuerdoNacional. En este sentido cabe seña-lar que a la fecha, el Foro sostienereuniones periódicas en las cualesse abordan los temas de interés y selevantan actas donde dejan constan-cia de los avances y acuerdos quese toman al margen de estas reunio-nes. Asimismo, anualmente se pre-senta un informe en el cual se deta-llan los avances que se han tenidoen los grupos de trabajo, se detallanlos avances con respecto a las dife-rentes propuestas de las políticaspúblicas, así como las actividadesque se llevan a cabo para la promo-ción del acuerdo, y se finaliza conun reporte sobre el manejo de losfondos que reciben13.

Como parte de las actividades quese han realizado como estrategiapara darle mayor divulgación y pro-moción al Acuerdo Nacional, Perúha incorporado como parte de la cu-rrícula de los niveles y modalidadesdel sistema educativo y de los co-rrespondientes proyectos educativosinstitucionales, el Acuerdo Nacional,con el fin de que los esfuerzos reali-zados no se diluyan y que el Acuer-do constituya un paso importanteen la historia del país.

Con respecto a la parte presupuesta-ria, el Acuerdo Nacional se fondeacon aportes que recibe tanto de laPresidencia del Consejo de Minis-

Como parte de lasactividades que sehan realizado comoestrategia paradarle mayordivulgación ypromoción alAcuerdo Nacional,Perú ha incorporadocomo parte de lacurrícula de losniveles ymodalidades delsistema educativo yde loscorrespondientesproyectoseducativosinstitucionales, elAcuerdo Nacional,con el fin de que losesfuerzosrealizados no sediluyan y que elAcuerdo constituyaun paso importanteen la historia delpaís.

12. Entre las sociedades civiles que asisten seencuentran la Asamblea Nacional de Recto-res, Consejo Nacional de Decanos de losColegios Profesionales, y la PlataformaAgraria de Consenso para el Relanzamientodel Agro Peruano.

13. http://www.acuerdonacional.gob.pe/Foros/ForoAN/actas.htm

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El ConsejoEconómico y Social(CES) nace delamplio consensoque existió entretodas las fuerzaspolíticas,económicas ysociales en Españaal promulgarse laConstitución de1978 y cabedestacar que hasido efectivo por elalto niveldemocrático queprevalece enEspaña.

tros, así como de fondos que recibede cooperantes internacionales, entrelos cuales está el Programa de lasNaciones Unidas para el Desarrollo(PNUD), de la Agencia Españolade Cooperación Internacional (AE-CI), de la Agencia Canadiense parael Desarrollo Internacional (ACDI),y el Programa de Cooperación Suiza(COSUDE).

Dentro de los beneficios tangiblesque ha traído la consolidación demo-crática en Perú a través del Acuerdo,ha sido que durante los últimos 5años, Perú ha superado la media decrecimiento económico de los paíseslatinoamericanos, convirtiéndoseen un país atractivo para la inversiónextranjera. Asimismo, se han reali-zado elecciones presidenciales ytransiciones de gobierno entre par-tidos distintos, respetando la institu-cionalidad democrática.

Es de señalar, que el Acuerdo Nacio-nal del Perú es una experiencia dig-na de ser tomada como referente decómo se pueden alcanzar acuerdosde gobernabilidad democrática, conamplia participación de la sociedadcivil en un país.

II. Consejo Económicoy Social (CES)

Otro caso interesante de analizar enmateria de institucionalización deldiálogo es el caso español, el cualdata de 1991, fecha en la que se

crea el Consejo Económico y Social(CES)14 por mandato del Art. 131.2de la Constitución española que es-tablece que el gobierno elaborarálos proyectos de planificación eco-nómica, de acuerdo a las previsionesque le sean suministradas por lasComunidades Autónomas y el ase-soramiento y colaboración de lossindicatos y otras organizacionesprofesionales, empresariales y eco-nómicas, para lo que se constituiráun consejo.

El CES nace del amplio consensoque existió entre todas las fuerzaspolíticas, económicas y sociales enEspaña al promulgarse la Constitu-ción de 1978 y cabe destacar queha sido efectivo por el alto nivel de-mocrático que prevalece en España.

El CES nace con el objeto de: a)Establecer un cauce formalizado departicipación de los agentes econó-micos y sociales en el proceso deelaboración de leyes referidas a ma-terias socioeconómicas y laborales,b) Promover la participación de talesagentes en el proceso de toma dedecisiones en dichas materias, y c)Ofrecer una plataforma institucionalpermanente de diálogo y delibera-ción entre los interlocutores sociales,formulando propuestas a los poderespúblicos.

14. Ley 21/1991, http://noticias.juridicas.com/base_datos/Admin/l21-1991.html

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El CES se configura como un entede Derecho Público, con personali-dad jurídica propia, con autonomíaorgánica y funcional, estando adscri-to al Ministerio de Trabajo y Seguri-dad Social. Teniendo dentro de susfunciones: a) Emitir dictamen concarácter preceptivo y no vinculantesobre los anteproyectos de leyesque regulen materias socioeconómi-cas y laborales (con excepción delPresupuesto General del Estado),b) Emitir dictamen en los asuntosque con carácter facultativo seansometidos a consulta por el Gobier-no, c) Elaborar a solicitud del Go-bierno o a iniciativa propia, estudioso informes sobre cuestiones econó-micas y sociales y d) Elaborar unamemoria en la que se expongan susconsideraciones sobre la situaciónsocioeconómica y laboral del país.

El CES está integrado por 61 miem-bros, y está dividido en tres grandesgrupos, sector sindical, sector em-presarial y sector agrario15. Los inte-grantes del CES son nombrados porel Gobierno a propuesta de las orga-nizaciones representativas del sector

correspondiente y el Presidente esnombrado por el Gobierno de igualforma que los seis expertos y debecontar con el apoyo de al menosdos tercios de los miembros delCES. Los miembros gozan de plenaautonomía e independencia y ejer-cen sus funciones por un períodode cuatro años.

El CES está compuesto por el pleno,una Comisión permanente que ladirige el Presidente y es asistida porel Secretario General y por diecio-cho consejeros (seis de cada grupo),y por las Comisiones de Trabajoque pueden ser concretas o específi-cas.

Con respecto a cómo se financia,éste formula su propuesta de ante-proyecto de presupuesto, y a travésdel Ministerio de Trabajo, se trasladaal Ministerio de Economía y Ha-cienda. A pesar de que sus recursosprovienen del Presupuesto General,nadie duda de la independencia desus dictámenes, ya que su composi-ción permite que sea un ente inde-pendiente. Es un órgano consultivodel Gobierno Español que goza deuna alta credibilidad y rigor técnico,fomenta el diálogo para lograr acer-camientos entre los distintos sectoresy asimismo, es un mecanismo quepermite una cualificada participa-ción de los agentes económicos ysociales en las tomas de decisiones.

El CES es otro ejemplo de un forode diálogo y concertación institucio-nalizado, al igual que el Acuerdo

15. Grupo 1°: Veinte representantes designadospor organizaciones sindicales, Grupo 2°:Veinte representantes por las organizacionesempresariales, y Grupo 3°: Tres del sectoragrario, tres del sector marítimo pesquero,4 de consumidores y usuarios, cuatro delsector de la economía social y seis expertosen la competencia del CES. Los expertosson nombrados por el Gobierno a propuestaconjunta del Ministro de Trabajo, de Econo-mía y Hacienda, previa consulta de las orga-nizaciones representadas y deben ser perso-nas con reconocida experiencia en el ámbitosocioeconómico y laboral.

El CES es unórgano consultivodel GobiernoEspañol que gozade una altacredibilidad y rigortécnico, fomenta eldiálogo para lograracercamientosentre los distintossectores yasimismo, es unmecanismo quepermite unacualificadaparticipación de losagenteseconómicos ysociales en lastomas dedecisiones.

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Nacional del Perú. Cada uno consus distintos matices ya que han sur-gido ante necesidades nacionalesdistintas, pero convergen en queambos son ejemplos claros de meca-nismos en los cuales se fomenta undiálogo incluyente sustentado en fi-nes que no son otros que el beneficiodel país.

Conclusiones

Es indiscutible que en El Salvadorse debe fomentar la creación de es-pacios de diálogo, así como la difu-sión de opiniones en los distintosniveles de la sociedad. El país debeencaminarse hacia la creación demecanismos de institucionalizaciónde diálogo, a fin de facilitar la parti-cipación de la sociedad civil. Demanera tal que los ciudadanos pue-dan proponer y exigir a sus represen-tantes los acercamientos que permi-tan puntos de encuentro de dondese generen políticas públicas quepromuevan el fortalecimiento insti-tucional.

Es importante reiterar que el diálogoes consustancial a la democracia; yque sólo a través del mismo se pue-de encontrar un equilibrio entre con-sensos y disensos, lo que resulta vi-tal para el perfeccionamiento de lademocracia misma en un país.

De las experiencias que se han anali-zado en este boletín, tanto la españo-la como la peruana, es de señalar,que el ejercicio del diálogo les hapermitido alcanzar mayores niveles

de consenso, lo que ha influido deci-sivamente en el proceso de consoli-dación democrática de ambos paí-ses. Asimismo, es de señalar que delos mayores aciertos que ha tenidoel Acuerdo Nacional del Perú ha si-do el haber implementado un foroque diera seguimiento a los consen-sos logrados de manera tal que éstosno quedaran como letra muerta, yse lograran traducir en políticas pú-blicas de corto, mediano y largoplazo con indicadores de mediciónefectivos.

Asimismo, para que haya un creci-miento económico y social sosteni-ble deben existir instituciones demo-cráticas fuertes que respondan a lasnecesidades de la población, lascuales solo son posible de fortalecer,a través de un diálogo incluyente.Al existir un mayor acercamiento alos problemas “del otro” se requierede un espacio adecuado para el diá-logo, que debe ser sosegado, técni-camente riguroso y afianzado políti-camente. Un diálogo constructivoe incluyente de los distintos sectoresclaves de una sociedad, es en defini-tiva un instrumento clave para lagobernabilidad democrática.

El proyecto “Fortaleciendo el Diálo-go y las Instituciones Democráticasen El Salvador” que se llevó a caboFUSADES junto con el PNUD, in-discutiblemente dejó una gran ense-ñanza a todos, ya que a través delmismo, se puso de manifiesto, quees posible dialogar constructivamen-te en El Salvador y llegar a consen-

...para que hayaun crecimientoeconómico ysocial sostenibledeben existirinstitucionesdemocráticasfuertes querespondan a lasnecesidades dela población, lascuales solo sonposible defortalecer, através de undiálogoincluyente.

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sos a pesar de la polarización políti-ca. Ahora el reto está en que el paíscuente con mecanismos de institu-cionalización del diálogo de carácterpermanente para facilitar el mismoy que permita llegar a consensosque se traduzcan en políticas públi-cas con visión de largo plazo y deinterés nacional.

Finalmente, es importante reiterarla necesidad que tiene el país de en-

tablar un clima de diálogo respetuo-so y de concertación responsable,con el fin de que exista un mayorconocimiento de los actores entresí, que les permita ir superando lasbarreras que a la fecha han limitadola apertura al diálogo y al reconoci-miento de coincidencias mayoresde las que se piensan y lograr así laconstrucción de una visión compar-tida de un futuro mejor para todoslos salvadoreños.

Ahora el reto estáen que el paíscuente conmecanismos deinstitucionalizacióndel diálogo decarácterpermanente parafacilitar el mismo yque permita llegara consensos que setraduzcan enpolíticas públicascon visión de largoplazo y de interésnacional.