Eduardo Anguita - Anguitología

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01998, EDUARDO ANGUITA CUELLAR

Inscripci6n N" 108.290, Santiago de Chile. Derechos reservados para la presente edici6n @EditorialUniversitaria, S.A. Maria Luisa Santander 0447. Fax: 56-2-2099455 Santiago de Chile e mail:[email protected] Ninguna parte de este libro, incluido el disefio de la portada, puede ser reproducida, transmitida o almacenada, sea por procedimientos meciinicos, bpticos, quimicos o electrbnicos, incluidas las fotocopias, sin permiso escrito del editor. ISBN 956-11-1469-0 Texto compuesto en tipografia Palatino 10/12 Se terminb de imprimir esta PRIMERA EDICION en la coleccibn "Premios Nacionales de Literatura", de 1.500 ejemplares, en 10s talleres de Impresos Universitaria, S.A. Las Parcelas 5588, Santiago de Chile, en mayo de 1999.CUBIERTA

Oleo sobre madera de Carlos Sotomayor, 1948. Regalo del artista a1 poeta, y perteneciente a su colecci6n particular, gentileza de la familia.

CONSEJO NACIONIIL

DEL LlBRO Y LA L E C T U R I

Esta obra cuenta con el aporte del DEL Y CONSEJO NACIONAL LIBROLA LECTURA

IMPRESO EN CHILE / PRINTED IN CHILE

Eduardo AnguitaSeleccih de poesia y prosaPrblogo, selecci6n y notas de

Andres Morales

EDITORIAL UNIVERSITARIA

Anguita, Eduardo, 1914 - 1992 Anguitologia : Seleccion de poesia y prosa / Eduardo Anguita ; pr6log0, selecci6n y notas de And& Mora1es.--la d-- Santiago : Editorial Universitaria, 1999. 310 p. -- (Colecci6n Premios Nacionales de Literatura). Incluye bibliografia I.S.B.N.: 956-11-1469-0 I.- P O E S h CHILENA. 11.- PROSA CHILENA 1.- t. 2.- ser. Ch 861

D e Siempre y la e s f a f u a : Realidad Sensaci6n de lo que podria llamarse origen del conocimiento Unidad D e E 1 f iempo es Ver6nica: Negocios ardientes Definici6n y pQdida de la persona El verdadero momento Cuadro lieder D e Palabra perpefua: La visita El poliedro y el mar Venus en el pudridero D e Lifurgia: Unica raz6n de la Pasi6n de N.S.J.C. Purgatorio Pintura de Maria Valencia Oficio de tinieblas

59 60 61 67 75 85 87 91 95 103 123 126 129 130

PROSAD e diversos arficulos publicados e n la prensa Voluntad y prefiguraci6ndel paraiso (Revis David o una mnral nnbtica (RevistaPomire, IWUU ut:1 7 ~ J1 Palabras a1 c Rimbaud pe Sala de espe Carlos de Rc La belleza LI

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De La belleza ciQu15se ama

La obsesi6n ucl Sobre Juan Emar Significacibn de Huidobro Los privilegios del libro Naturaleza de lo c6mico Anhelo de identidad M6sica y tiempoUVulL

1 3 -26 230 1 2 1 6IO

242 244

Miguel Serrano en la generaci6n del 38 Participacicinen lo bello Del Silabario Matte a Altazor Metafisica de Neruda Estado de met6fora El movimiento David El movimiento David I1 Materias de Gabriela Mistral Poesia de Diaz-Casanueva Belleza y poesia La fria malla (I y 11) Poesia y revelacion Casi el mismo tema Juicios sobre el tiempo Huidobro y Neruda: final Boca de gin Las m6s bellas palabras de la lengua castellana Nunca es el mismo rio Inocencia poetica y paraiso perdido

247 251 254 257 259 261 263 265 267 270 272 277 279 281 283 286 289 290 292

Bibliografia selectiva de y sobre Eduardo A n g u i t a

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hacia escritores como Volodia Teitelboim, Miguel Serrano y Braulio Arenas. En 1935 publica junto a Volodia Teitelboim la extraordinaria Antologia de la poesia chilena numa, selecci6n que ocasionara mtiltiples polbmicas en torno a la representatividad de algunas figuras incluidas como a la cantidad de textos antologados de cada uno de 10s autores. El tiempo se encargar5 de valorizar el trabajo de Anguita y Teitelboim: hoy en dia nadie discute lo acertado de la muestra y la gran visi6n que sus autores tuvieron a1 incluir figuras que, en la actualidad, se consideran como claves en la literatura chilena. En este mismo plano, Anguita es autor de otras antologias notables, como la que realiz6 (con un breve pr6logo) en 1945, sobre la obra de Vicente Huidobrol o la completisima Nueva antologia de la poesia casfellana (1981)2,en la que compendia un exhaustivo recorrido por la poesia espafiola, hispanoamericana y chilena desde el Poema del M o Cid hasta las voces de Miguel Hernhndez, Octavio Paz, Ernest0 i Cardenal, Oscar Hahn y Rad Zurita. De carhcter retraido, lejano del bullicio de la vida social de la literatura, Anguita fue u n orfebre de la poesia a quien no importabanni la velocidad de la fama ni la inmortalidad de la gloria. Su obra pobtica y ensayistica fue fraguando lentamente, entregando en cada texto una s6lida prueba de su peregrinaje humano y pobtico. Su primer libro Inseguridad del Hombre sera publicado en 19503,siguikndole Cinco poemas en 19514.Su voz sera reconocida de inmediato como una de las mas originales en la poesia chilena de la bpoca tal como queda de manifiesto en este hermoso fragment0 escrito por Hernan Diaz Arrieta, Alone:

'Se trata de la primera antologia de este gran poeta chileno. Aiios m6s tarde, Braulio Arenas y Hugo Montes continuarian esta labor conObras Escogidas y Obras Completas, respectivamente. 'Publicada por Editorial Universitaria. Santiago de Chile, 1981. 3Anguita, Eduardo. lnseguridad del Hombre. Ediciones David. Santiago de Chile, 1950. 4Anguita, Eduardo. Cinco poemas. Ediciones David. Santiago de Chile, 1951. Es importante sefialar que el poeta es tempranamente reconocido en 10s Estados Unidos como uno de 10s autores mds interesantes de Hispanoamerica como lo comprueban las traducciones de T r h s i t o a l f i n (Passage to the end), publicado en A n Anthology of Contemporary Latin American Poetry. New Directions, Norfolk, 1942 y Definicibn y pe'rdida de la persona (Definition and Destruction of the Personage)en la Antologia Anual No 8 de la prestigiosa casa editora New Directions (Norfolk, 1944)y donde s610 fueron seleccionados de Chile Pablo Neruda y Eduardo Anguita.

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"Entre 10s raros ejemplares de poetas surgidos cuando alguien levant6 'la losa de 10s suefios' J ' estos echaron a vagar, pocos han ido por regiones taln singulares como Eduardo Anguita, con esa mirada lucida . . _ . (l e sonambulo, con ese paso aistraido y cauteioso, rantasmai. $upresencia deshace 10s muros, crea poblaciones p e no existen, fija fechas imaginarias y convence, ;in dejarse coger ni definir. Por lo dem&, ;para que?5, I 1

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Nu eve afios mas tarde editara en Puerto Rico su libro Palabras a2 oido de Fflixico6,testimonio de su residencia en esa naci6n como Agrega- _ . . - _ .. do Cultural en la Embajada de Chile en Mexico entre 10s aiios 1955 y 1956. En 1963 aparecera en Chile la primera edici6n de uno de sus textos capitales, El poliedro y el mar7, donde su voz se consolida a h mas entre las principales de su generacion1. A la par de sus textos poeticos Eduard, Anguita desarrcAla una o *. fructifera labor como ensayista, critic0 y arricuiisra en diversos peri6dicos y revistas de Chile, destacando su ensayo Rimbaud pecudor (1962)sy sus permanentes colaboraciones en el diario "El Mercurio" (que continuaran hasta poco antes de su muerte, siendo . reunidas, junto a articulos y cr6nicas anteriores, en 1988, bajo el titulo de La belleza de pensur9). Conjuntamente, el poeta trabaja en diversos medios de comunicaci6n y editoriales, destacando su aporte como redactor publicitario en Radios Mineria y Agricultura, en las Agencias Walter Thompson y McCann Erickson asi como en la empresa editora Zig-Zag. Per0 quiza donde realiza una labor extraordinaria es en la Editorial Universitaria. En esta casa editorial se desempefia como asesor literario, disefiando colecciones, impulsando generosamente la publicacidn de autores tanto consagrados como noveles, ampliando~ ~ ~ ~

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5Alone. Lus cien mejores poesius ckilenas. Editorial del Pacifico. Santiago de Chile, 1973 (6ta. edici6n) p. 207. La primera edici6n data de 1940. 6Anguita, Eduardo. Palabras ul oido de Mixico. Ediciones Jon&. San Juan de Puerto Rico, 1960. 7Anguita, Eduardo. El poliedro y el mur. Ediciones del Taller 99. Escuela de Arquitectura de la Universidad Cat6lica. Santiago de Chile, 1963. 'Anguita, Eduardo. Rimbutld pecudor. En Revista "Atenea" No 398 (Separata). Universidad de Concepci6n. Concepci6n (octubre-diciembre), 1962. 'Anguita, Eduardo. La belleza de pensar. Editorial Universitaria. Santiago de Chile, 1988.

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siempre 10s horizontes de la cultura nacional. Como homenaje a su incansable labor, Editorial Universitaria instituyd el Premio de Poesia "Eduardo Anguita" para galardonar a 10s poetas chilenos que no hayan sido reconocidos con el Premio Nacional de Literatura; igualmente, cre6 la colecci6n de poesia "El poliedro y el mar", donde edita a figuras de reconocida trayectoria en la poesia chilena contempordnea. El aAo 1970 est6 marcado por la publicacidn de su obra po6tica (casi) completa, Poesia enteral0, seleccidn que compila su produccidn en el g6nero lirico desde 1933hasta ese aiio. Recibida como una obra mayor, la critica se mostrb un6nime en reconocer su vasta trayectoria. Poesia enteru recoge 10s grandes poemas que Anguita habia ido publicando aiio tras aiio: Definici6n y pe'rdida de la persona (1940),Lan' i cIiM .n f " YL

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quiz&, m6s famoso, Venus en el pudridero (1960)l'. Este texto ser: modificado posteriormente por su autor, entregando la versidr definitiva en 198012.P..-

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Eduardo Anguita no persigui6 nunca 10s reconocimientos a su obra. Aun asi, Chile pudo distinguirlo con dos importantes galardones. En 1981 recibid el ya desaparecido, per0 destacado, Premio Maria Luisa Bombal (que se entregaba a la labor creativa de toda una vida dedicada a la literatura) y en 1988 se le confiere el Premio Nacional de Literatura que, en palabras del jurado, venia a reconoce- "1- -I+? calidad poetic; e inteiectual de su obra, con especial cons L de la profundidad, bel leza y exactitud m6gica del lengu I r n.. --I--.A .; p t: - t: .~ :b U U l d t:a~d subravar aue Docas veces. comb C L L C > L ~ u t xasibn, se ha hecho verdadera justicia con un escritor chileno. A consecuencia de graves quemaduras tras un tr6gico accident6 1domkstico, Eduardo Anguita muere el 12 de agosto de 1992.

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A.M.

'OAnguita, Eduardo. Puesiu enteru. Editorial Universitaria. Santiago de Chile, 1970. Existe una Segunda Edici6n ampliada (con poemas ineditos no recopilados anteriormente) con Prhlogo de Pedro Lastra y Post Scriptum de Cristiin Warnken publicada por Editorial Universitaria en 1994. "Las fechas consignadas entre parhtesis son las que el propio autor entrega precisando el ario de escritura, no de publicaci6n. "Anguita, Eduardo. Venus en el pudridero. Editorial Universitaria. Santiago de Chile, 1980.

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de lo absoluto. Tiempo, lenguaje, amor, muerte, suefio, vigilia, critica y silencio -melodiosamente detenido- pueden ser algunas de las palabras que prefiguran (y jam6s contienen) la poderosa voz de uno de 10s poetas m6s extraordinarios de la literatura chilena. Un autor casi desconocido para la inmensa mayoria, per0 siempre revisitado por sus leales lectores. Un poeta que huy6 de lo vulgar, de lo intrascendente, de las modas y etiquetas; un escritor de una pureza hoy casi inconcebible por su pasibn y su entrega: jamas cercano a1 poder, nunca en el van0 comercio de las ambiguas prebendas. Eduardo Anguita es, como muy pocos, un poeta con una 6tica incuestionable,per0 una 6tica que no s610 habla del humano personaje detr6s de las miscaras del poema, sin0 del autor que reflexiona, se conmueve y se deslumbra en la agraz perfeccih del lenguaje; que cuestiona a1 mundo y a su voluntad de permanencia; que investiga en el tiempo, en la historia y en el amor, 10s secretos humanos y divinos de la existencia que puede, en la belleza, redimir sus sombras y su oprobiosa fragilidad. La lectura de su obra, tanto en verso como en prosa, no puede dejar de estremecer. Su incalculable valor reside en abrir las puertas del misterio para saber que otros secretos m6s enigm6ticos o lejanos esperan por aquel que ha traspasado el umbral. Y no se trata de un poeta hermktico (esa palabra que tanto resume y que tan poco dice), por el contrario, se trata de un poeta que interroga, que nunca pontifica, que relativiza su mirada y las miradas de todos 10s que lo acompafian para saber que poco se sabe, que mucho se intuye, que algo se Cree, per0 que todo o casi todo es una interrogacion presidiEl autor hace constar su agradecimiento a Ximena Anguita, hija del poeta, quien generosamente facilit6 buena parte de 10stextos en prosa y datos fundamentales que permiten la existencia de esta Anguitologia; de igiialforrna a Mateo Goycolea, qiiien realiz6 una destacada labor en la recoleccidn del material.

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da por la muerte y ese extrafio trdnsito que se suele llamar existencia.

Huidobro, la vanguardia y la tradicibnEn estos dias nadie puede dudar de la originalidad de Eduardo Anguita. Su poesia se desdobla desde una multiplicidad de vertices de origenes muy dispares, per0 a1 mismo tiempo fragua como un canto original que mds que celebrar, cuestiona. Mucho se sefiala su deuda con Vicente Huidobro (y sin duda, existe), per0 creo que se ha sobredimensionado la dependencia con este autor. Es sabido que, salvo 10s espafioles Gerard0 Diego o Juan Larrea, nadie continub 10s pasos del creacionismo; aun asi se insiste en sefialar a Anguita como un seguidor de la figura de Huidobro2. Es necesario resituar este influjo y entender que 10s vinculos deben delimitarse a hechos concretos. La verdadera revolucibn literaria producida en Chile por Huidobro a su regreso definitivo a la patria, no s610 toc6 a Anguita, sin0 a un buen numero de jbvenes autores que se iniciaban en la literatura. Incluso La Mandrdgora, de filiaci6n surrealista, es tributaria de Huidobro en lo que significa salir del encierro provinciano a1 que estaba sometido un gran porcentaje de 10s escritores chilenos. Fue a instancias del poeta de Altazor que muchos empezaron a ver mas a116 de las fronteras nacionales y a integrar a sus escrituras 10s originales procedimientos que las vanguardias habian implementado en la nueva poesia. Anguita, a1 igual que Te6filo Cid, Braulio Arenas, Enrique Gbmez Correa y hasta Gonzalo Rojas, entre otros, fueron impactados por las ensefianzasde Huidobro quien, ya no tan fulgurante como en el pasado, estimulb el desarrollo de metodos alternativos a la poesia tradicional. Si bien Anguita no pertenece a1 grupo de surrealistas chilenos, comparte con ellos la voluntad de cambio que aparecia como indispensable en la lirica de esos dias. Su rechazo a la escritura automdtica y a la sobreabundancia metaforica 10 distancia de 10s mandragoristas, aunque no puede descartarse del todo cierta cercania en el us0 de la imagen, del sentido del humor y de un espiritu ludico presente en algunos de sus poemas.

2Salvo el cas0 de algunos autores como Cristiin Warnken en su Post Scriptum,

Ediiardo Angiiita en la generucih del 38, incluido en Poesia entera de Eduardo Anguita(Editorial Universitaria. Santiago de Chile, 1994). Publicado originalmente en Estudios Ptiblicos N 52. Santiago de Chile, primavera de 1993.

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Per0 lo interesante es la integracibn de universos que Eduardo h g u i t a realiza en la composici6n de algunos de sus textos. Su poesia no se deja llevar s610 por el impulso de la vanguardia. Por el contrario, el poeta intenta conciliar instancias aparentemente irreconciliables para otros escritores mas intransigentes. De esta manera su poesia integra con inteligencia y concordancia las fuentes de la tradicih mas clasica. En lo que respecta a su inscripci6n como poeta hispanohablante, Anguita no olvida ni por un momento el peso de la literatura castellana3 y en muchos de sus poemas es posible rastrear el influjo de la literatura medieval, renacentista y barroca espafiola. La danza de la muerte, Las Coplas a la muerte de su Padre, El libro del buen amor, Los Milagros de Nuestra Seffora, las Eglogas de Garcilaso o 10s Sonetos Metafisicos de Quevedo son intertextos vitales para entender hacia d6nde se proyecta el poeta. En sus indagaciones sobre el tiempo, por ejemplo, su visi6n alterna el pasado, el presente y el futuro (10s saltos en las formas verbales son evidentes), per0 tambien el trabajo con el lenguaje y con la propia literatura indican un desplazamiento hacia diferentes contextos pokticos. De esta forma, Anguita juega con el lenguaje para detener a1 tiempo en esa admirable inmovilidad de muchos de sus poemas (las metaforas son del hoy, 10s contextos multiples) parafraseando incluso a 10s clasicos m6s conocidos. En esta linea es posible encontrar el bello poema dedicado a Huidobro Mester de Clerecia en memoria de Vicente Huidobro (Por encargo de Gonzalo de Berceo) donde el poeta utiliza el arcaismo lingiiistico y el estilo de la epoca para celebrar a uno de 10s poetas mas innovadores de toda la lengua:

...A muerto de 10s aires un fino emperador Escuridad est tanta que non a alrededor Los sones han callado ca muri6 el ruisefior Que era entre todas aves el pBjaro meior.

...Hi vienen su Cagliostro e su Cid Campeador, La golonfina a611a con tristura e pavor, E ploran muchos ommes por pena e por error. A todos 10s consuela el Angel Altazor.

...3L0 que queda en evidencia a1 revisar suNueva Antologia de la poesia castellanu. Op. Cit. 4Anguita, Eduardo. Poesia entera. Op. Cit., pp. 36-38.

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Si estos procedimientos pueden llamar la atenci6n del lector, la btisqueda del poeta por una precisi6n mayor de su lenguaje y de sus im6genes lo llevan incluso a incorporar sefiales culturales de otras tradiciones, ya no occidentales (0 a1menos europeas). Es asi que, por ejemplo, en "Venus en el pudridero" veremos alusiones e intertextos con 10s Upanishad Chandogya y el Kama Sutra de la India o con 10s dioses mexicanos precolombinos. Todas estas "marcas" intentan otorgar un sentido totalizador y una pertenencia que apelan no a la sapiencia del lector, sin0 a su mejor entendimiento de la direcci6n del sentido del poema. Anguita persigue la exactitud en el decir, per0 esa precisi6n conlleva, a1 mismo tiempo, una historia y un pensamiento que se vincula con lo elemental, lo vern6culo y lo m6gico del ser humano y de sus distintas culturas. Esta oscilaci6n entre vanguardia y distintas tradiciones constituyen un esfuerzo casi sin precedentes en la poesia chilena. Autores posteriores (y algin otro exponente de la generaci6n del 38 como Miguel Serrano) seguirh caminos paralelos. Lo prodigioso de Anguita es su capacidad por entender que en su vastedad y diferencia el mundo posee identidades comunes y una simultaneidad extraor dinaria.

El movimiento David. . . . IU- - ~ Aunque el mov1r-ontn - rvn.r l_ ~ .n .~ .n ~ ~.r l n ~ Z X-- m yn r l n. .n n r c n I h l como un intento dle Eduardo Anguita por crear una nueva vanguar dia, no es posibl e hablar con propiedad de una escuela o une1 corriente estktico-literaria que hayaprosperado. Si bien se trata de ._. 3 _ _ 1 1 .. . < _ __ 1 un intento por integrar uesue _ - . _ ____ __ _ _ _ _ ____ murdi __ 1_ _ _ _ _ id puesid w i d pusrurd y miwr de la escritura una pr6ctica que apunta a establecer primer0 una ruptura con lo anterior y luego una propuesta que se acerca claramente m6s a lo filos6fico y a lo religioso que a lo puramente estktico, David ha de considerarse como una busqueda m6s que como un hallazgo5.L I C l LL"Y L IIU - I ILILLLIU"

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5Esto lo sefialo desde la de Anguita m6s que como un autentico movimiento que agrupa a otros escritores y artistas. Aunque el poeta llamb a algunos de sus amigos (a1 arquitecto Jose Edwards, entre otros) a integrar su propuesta, salvo un escaso n6mei-o de manifiestos y articulos, poco es lo que se puede hablar o encontrar m6s a116 de esas publicaciones. Tampoco la proyectada exposicih sobre "Arquitectura tr6gica" como el propio Anguita la nominb, jamis llegb a realizarse.

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Anguita propone varios pasos para transitar desde el estado poetico hacia el estado heroic0 (objetivo de ese peregrinaje)6.Primero, vaciar la realidad (...) y luego, mediante la progresiva proyeccion voluntariosa de la visi6n sobre el vacio, crear el estilo de objetos y de actos que funcionen org6nicamente, a semejanza del hombre ( ...)7. En segunda instancia, propone ( ...) trabajo convulsivo. Todo poeta, todo artista, en el instante primer0 de la inspiracibn pasa por un estado en blanco, en el que las convenciones logicas y de toda especie caen estrepitosamente derrumbadas (...). Sin esta destruccion previa, jc6mo podriamos erigir el nuestro? (...) Vaciar categorias mentales. Por ejemplo: utensilios de us0 diario: vasos, tazas, sillas, etc. (...) Trastomarlo todo. Usar las copas de champagne para lavarse 10s dientes, etc. Levantarse a las 2 de la mafiana; acostarse a mediodia. El rojo como luto. Vestuarios, costumbres, cortesia. Despues: proyecci6n de nuestra vida en 10s objetos, hasta darle el us0 que realmente creemos y queremos. La verdad poetica como inspi- radora8. En una tercera etapa, que el poeta llama de Realism0I Cruel, ( ...) romper la c6scara de convencionalismo que recubre toda soi-disar zt moralidad (...) Pero eso no bastaba. Nosotros queria..-I __-_ L--___I U ~ 1 . Id p _ b l! . mos una moldl. nK l l o , i a v UIU. IU I

Pero clasificar a este autor es inutil y ocioso. Sus grandes poemas no pueden s610 delimitarse a la evocaci6n del amor, de la muerte c de la belleza. Su visi6n de mundo es tan completa que la pluralidad de enfoques y de temas convierten a estos textos en piezas tinicas, . ,. , 1 . , . :___ --: _ _ _ _____ en un crisoi aonae aisrinros rayos iummicws arrdviesdn su dryUlLt!Ltura. Si V e n u s en el pudridero apunta a ser un canto amoroso, tambikn es una lectura de la sociedad contemporanea y de la caducidad de lo perfecto. El tiempo, el poder, la juventud y la propia poesia son examinados desde su valor intrinseco hasta su alucinante vacio. Los sentidos, el cuerpo y el deseo que aparecen en Definicidn y pirdida de la uersona como formas de conocimiento del tiempo v la eternidad (temas paradigmhticos de Anguita) son escindidos y desaparecidos, para rehacerse en la oraci6n del poeta que reza para cuestionarsc .* c .,.1 1 , 1 . ._,. -..-.-, por su propio origen y aestino. La rragiiiaaa ae la exisrencia y el poder de la naturaleza aparecen en E2 poliedro y el mar como una de las multiples preguntas que el autor realiza en la reflexi6n permanente que plasma en su poesia. El tiempo ciclico y el tiempo mitico, el que transcurre y el que se detiene, el real y el poetic0 ser5 otro de 10s grandes t6picos que abordarBn estos poemas. Recorrer la geografia abstracta de las ideas, de las emoc:iones, dc las grandes preguntas --conjuntamente con la geografia autkntica del cuerpo, las distancias, la belleza- es una de las propuestas finales de estos poemas y de buena parte de la obra del poeta: acariciar la inquietud, el deseo, la fe, la conciencia del ser y la terrible y mhgica realidad de la existencia.1 1 1 1._ L

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La lectura de sus poemas y de su prosa -siempre penetrante, siempre l~cida, siempre en el limite del asombro y el deslumbramiento- es la inacabable experiencia de lo que permanece en una suerte de eterno retorno, de necesidad y obsesion, de perfeccion que anuncia el estremecimiento, la devocion y la grandeza.

Sobre esta AnguitologiaLa presente selecci6n de textos de Eduardo Anguita busca integrar dos de las vetas esenciales del autor: su escritura poktica y su pensamiento estktico. En lo que atafie a la obra en verso, se han respetado 10s textos en su totalidad sin fragmentarlos. Se ha intentado entregar una vision objetiva de sus poemas m5s interesantes y representativos de las distintas etapas de su produccibn. El antologador no duda que muchas otras opiniones muy criteriosas y de distinto sesgo podrian proponer una selecci6n distinta a la muestra presentada. Con respecto a su obra en prosa, se han reunido algunos textos que han permanecido misteriosamente sin reeditar desde su primera publicacih: es el cas0 de Palabras a1 oido de Mkxico y Rimbaud pecador, esenciales para entender y valorar su pensamiento estktico y poetico. Igualmente se reproducen algunos articulos publicados en la prensa de muy antigua data y una seleccion de las cr6nicas m6s relacionadas con la escritura literaria que fueran recogidas en su libro La belleza de pensar. Sobre el titulo escogido para esta seleccion, Anguitologia, es importante sefialar que el propio autor se referia a su obra Poesia enfera con ese nombre. La contraportada de la Primera edicion y la cita exacta de Pedro Lastra en la Segunda edicibn dan testimonio de este hechoI7. Intentando rendir un homenaje a1 poeta, se ha pensado, como un gesto de justicia, titular de esta manera la presente obra.

ANDRBS MORALESUniversidad de Chile

I7En ese texto se lee: La presente Anguitologia (como la llama su autor) comprende obras en su mayoria ineditas y sblo algunas publicadas, aunque en escaso tiraje y ya agotadas. (...). Vid. Lastra, Pedro. Prblogo. Eduaudo Angiiita en la Poesia Chilena, en Poesia entera, Op. Cit., p. 15.

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ANTOLOG~A

POES~A

3GOS DE AGUA Y POEMAS MEMORIALES

Soneto 1942

Am6 vivir en cielo inmaculado, labrado en soled ad y muerte pura: igual que el cielc), ileso mi costado creci6 sin sangre fuerza ni premura.8,

Inquieto, como tiempo amortajadc a1 sentirme sin vida ni amargura, torn6 a tu fuego de Bngel derrama olvidBndome yo en la quemadura Asi, furioso, inci locamente veloz iluminado en go Contigo quemo I21 cielo y el reposo, inauguro a1 Terrible y 1 1 U o v m n c n Amor, Feroz ArrLOT, iC

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Mester de Clerecia en Memoria de Vicente Huidobro(Por encargo de Gonzalo de Berceo)

A muerto de 10s aires un fino emperador. Escuridad est tanta que non a alrededor. Los sones han callado ca mur' -'----=-Que era entre todas aves el pi Alvar YAfiez e Hubner e Varg Arenas e Rodriguez, e io, que Ioan Gris, Gerard0 Diego e Li Ioan Larrea, que dobla euscar Hi vienen su Cagliostro e su Cid Campeador, La golonfina aulla con tristura e pavor, E ploran muchos ommes por A todos 10s consuela el Angel Disp6nense a enterralle en fos Mas su cuerpo non hallan en nengun reaeaor; Ansi facen un hueco con su forma e grossor E fincan en'sepulcro esse hueco de amor. Vicente de Huidobro, mi hermano e mi sefior, Non fagas la faz mustia por plazer mi dolor, Nin compartas lazerio con el nuestro clamor, Si en grant gozo de musica te meti6 el Salvador. La alondra, la calandria e el chico rosefior En concierto de voces entonan su loor. Unos a otros trasp6sanse commo fructa e olor E nenguno se rompe nin fiere su pudor. Non luce en todo el prado faisdn de m6s color, Ni Angel de mAs frequenzia, ni aire de mAs rigor. 32

Cada silbo arnoroso vuela de alcor a alcor Llevado por la brisa del estio cantor.

8 le dize cas1tigas a la Virgo de amor, 1 Sentada en una rosa como dixo Altazor; . La nieve florc Se amamanta1

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f o despert6 una noche enflaquecido 7 mhs desnudo a h de lo que estaba. iQu6 vigilia feroz me despojaba De todo mi pasado y mi vivido!1

Mir6 a la madre de donde he venido Y era un recuerdo que se me olvidaba, Rostro desierto, polvo, nube, lava: Olvido del recuerdo del olvido.

No supe si era en suefios que veia 0 si estaba cegado en pleno dia, Si era vestido o bien desolladura.S610 s6 que qued6 sin nacimiento, Arrojado a1 domini0 del momento, Sin edad, sin pafial, sin sepultura.

I1Que nos quiten la madre -madre mia!Y nos den otra madre, forastera, y en vez de pena que nos d6 alegria Y que nos guste mhs que la primera. Que no sepamos cuhl es nuestro dia. Ni cui51 el sitio de la calavera. Ni cudl la infancia que nos envolvia. Ni cudl la muerte que nos persevera. iQui6n te desnuda asi, manos amantes, Mano materna, o mano violadora, Pasi6n mortal de madre por tenerte 34

Sumergido en su vientre desde antes? iAy, con dolor antiguo lo s6 ahora! No lo pregunto m6s: iM6Xic0, Muerte!

I11Mexico, Muerte, Amante: nuevamente Nazco con un dolor ya soportado, De repente me nace otro pasado Y me nace otra madre de repente. Es un amor mortal y un miedo ardiente, Nacer mds solo per0 m6s cuidado, Brotar maduro, per0 no gustado, Vivir remoto, per0 m6s presente. Por ha Ilarte, de madre en madre he ido Naciertdo y desnaciendomey matando Cumtia madre pequefia me ha querido. Dime, Muerte, jme queda otra carrera? iEs a t:i a quien de antafio voy buscando, 0 hay otra, m6s antigua y verdadera?

IV

Yo me ire por 10s cielos, desatado En el aire de nieve que pregona iocatepetl, siervo y corona A1 POF De la rnadre en que yace sepultado.Es otraL madre la que me he buscado, A h m15sinmemorial, per0 persona, Domus Auvea que alberga y no aprisiona, Memo ria fie1 y olvido delicado. Por su actitud de 9 replegado En Guiadalupe ore como ninguno: Je, iNue1 da a luz a1 Tres que te ha creado!

35

iOh Jaula numeral, oh transparencia Rosa, deja volar de ti la esencia y permite que el Tres regrese a1 Uno!.(Mixico)

36

De T d N S I T O AL FIN

Prohibici bn de respirar

Vivo en las )aredes donde la muerte tiene colgadi1 su sombra. Las ventanarj cambian de hueco en mano. De vez en cuiando m cielo visita el cielo de mi cerebro, os debido a 61 11 animales se hacen m8s pesados y caen. Porque 10sSIonidos fermentan la tempesi yo estudio IC s gestos de 10s otros, 1 su mal hiibito de irse acabando por 10s p e insectos cubren mi estrella de la frente.

39

Trhnsito a1 fin

Lapuertapi puede entra sin que nece

-

.

Mientras no cuando tenemos 10s ojos viajando entre 10s muebles de la diversidad de 10s miedos de cada muerto, podemos reir entre la espuma de lo oscuro. La seguridad del que abre su vestido privado dejando mostrar las huellas blancas de 10s delirios, con un poco de fuerza se logra concentrar la ceniza invisible, la sombra, mi muerte particular. Piedras en la mirada, ya s6lido su silencio, pasos de las manos solas en el cuerpo. Es asi como amamos el aire de la estatua, el aire que nos empuja a la vejez. El hombre camina a una habitaci6n semejante

y se coloca el traje que le conduce para siempre.

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Obligacion tiltima

Asi es mejoir marcharse Ambit0 ciego 10s hielos las palomas terribles derritikndose sobre el ojo de DaAo de la muerte.

nueva

uelve iestros pies. dan por 10s tejados itro

Celebrad las muertes brotadas de cualquier deseo cultivad el bosque en que nos perderemos.

42

H I r e ne 10s difuntos -- -El parpi3do que nos cierra a la vida Y nos a1x-e a la muerte como una m: El viento naciendo de su piedra El t6 de 10s vivos para tecrnos de ci Tanto 1;imento cuando todo esta perdido Ese honibre viene y se va Los pie2j de 10s muertos son hojas de t6yl

Y por fi LEn qud Sembra Asi sua Llenos ( Y una v

: ~ i r v u aiiiitcitw:

Pero no creiamos en est0 Abra la boca y respire No tratc2 de evitarlo De ahor-aen adelante no estar6 en casa Ocupad10 ocupado bebiendo un t&especial Dejhndc)me crecer la lengua Oyendc el ruido del sol a voluntad del viento La voluntad del viento mi estructura Las mar10s y 10s millones de pasos Evapor:adnc a1 rnhn dp1 din El t4 de 10s difuntos se bebe lejos Los arrcIzales vacios con su candor rigido Y mi calbeza sola

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Elegia y Delirum tremens a Edgar Allan Poe

Tan victima con el pulmbn expuesto a y a1 aire de las vidrieras a golpes de fuego subiendo por 10slados fri donde te busca la luz en ti , -~ No huyes victima a la instalacih de las desgracias. Tan indeciso mfirtir servidor de todo lo que miras del rostro en la plaza sentado y certero 10s muebles que descender no te desmayes la obligacih a1 mundo va hacia tu cabeza a lo largo del cuerpo evaporado.las - .-.. _ -. habitaciones involuntarias Expuesto ,.-a ~..- ~ . ~ _ . _. _ ~-~ ahi cay6 un hombre con piernas de crema cercado por la mirada del gusano en columnas inocentes elevas el zumbido de tu cadfiver d6cil como una sfibana.

Muy luz y algo valentia pese a 10s abismos qi ni jaula ni espejo o lo contrario trozo de canario para alumbrar el crirAkLAs

_.

44

Arte Poktica y Pr5ctica(A Volodia Teitetlboim)

Siento a 10s primeros ancianos subir de sus pozos a dumbrarnos a hojarascas. de! LSentis su quemaz6n viva como la pie1 de fuego que envuelve nu'estra edad? LSentis morir 10s amigos, separados y unidos de nosotros por un co1.del insubsanable? Veo, giisto la alegria que se contrae y llena a algunos sus sacos de alnna Y explcxar las regiones cerradas del coraz6n A man1os Ilenas, intrusas, como quien ama por dentro de or0 a las serpientes, De vel10, de escalofrio, de voluptuoso orden. Siento Icaer las 16grimas y alli El Coraz6n buscar la situaci6n de su proa, Mover:;e, moverse, o es el hombre que todavia desea .se a su cuerpo querido, ay, d6nde guardar el pensamiento. Amo VIer pur0 a1 hombre, suelto entre sus columnas, sus follajes b ri llantes, Comc31m animal que hubiera logrado su ultima forma de desnudez, Radizinte de sus huesos, feliz de sus pasos de m6rmo1, Un CEtball0 cuyo pelaje cay6 por dignidad y exceso de amor. A1 fin1, 1mis buenos antecesores, mis queridas amigas futuras, Transparentes como las paginas de las profecias, Sedieni:as como 10s astros que cruzan 10s cuerpos de la humanidad Iobscura de la costumbre, tprendo la felicidad a costa del sacrificio, o el mar a costa de sus olas, a costa de su historia, iento a costa de sus escamas.

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Os amo, os amo atravesando toda cfiscara, Porque yo soy el animal que desciende a1 fondo del alma Transformado en rocio de videntes pupilas, Dispuesto a obedecer vuestras riendas o arterias, De perfil por la ventana de la sangre, De perfil por el pulso, De perfil.

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Ncxhe feroz asciende a mi lengua para que te tome y te convierta Ncxhe que el sol espeso arrojando tierra sofoca y quiere amarAnirriai ciegu y:aesmricu que e 1L IUIIIld 1111~1 d

dS

demonio plateado Sube a las aguas del espiritu sin perder tu fuerza y sin mezclarte a falsas claridades Desde ese fondo cerrado donde hierve la autkntica reflexibn de si mismo La paz no te impurifique ni sea contigo ni conmigo ni con vosotros hermanos mios. - ~ ~ P ~_ O __.._P artificial . . ~.~~ El rostro de la sabiduria el neglimnte __._-. _ _ _ _ Yacen afuera marchit5ndose p(3r su propio peso gris Y nn encuentro tortura mejor en el fondo del ocean0 y ya sin

Gueimca el mar el mar. xlguien corre con 10ssenos riagrantes 2ntre 10sfbsforos ilusorios Gueimica que alguien vi0 morir y vivir en la Pasibn s e g h San Juan Chainpagne teolbgico iqu6 llanto ni quk conclusibn acadbmica 1xetenden desde fuera iluminarte y saberte? El inocente tor0 palpitante en medio como inmortal verdura Des1)uks de la venida Des1)u& de la bajada o la ascensi6n El toro es y su verbo gime Dios mio isentis atronar la ternura del animal que en medio de tantas I2ordas s610 existe? Oid el sagrado p h d u l o que excluye Oid vivid el m5rmol que renace con mirada y tremor Oid a1 Principe Muichkin llorando sobre las aguas

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Querer rotornar a la fogata Y entre Brboles vivos y entre la soledad de 10snumeros movibles Espantar como el estruendo que una virgen produce en 10s desiertos cuando es virgen Huid huid animales de diversos miedos Alma eterna ila lengua anuncia un monstruo pr6ximo? Devolvedme arenas eternas mi gota de sangre LQuerkis saber quk aves ahora vuelan a la proximidad del mar? LSois ciegos? Caerkis desollados Aferraos a vuestros huesos aunque no Sean sin0 frios engendros de una vanidad mental Asi os desnudarkis a1 menos Y estarkis mas faciles a1 holocausto Morirkis a1 torbellino de la vida, de Dios, de la justicia Tocad, desamparados cuernos roedores La penetracion de la ternura a la insolencia La brasa de a z k a r esencial Inm6vil franca desolada instantanea Transparente en su ultima raz6n de ser La bestia resplandece recordando sus raices Mientras la muerte solicita sus h a s con la lev de la

nracia

48

CL

-LLIIV

ULI OULL.3V 2 - . 3 L U " U

L U L ILIIL"

n corno u hueso dentro de una aureolaambos ahora eran hermanos era el azar su madre brillante el ri i i k nada sahia del ntrn ________ ---per0 el suceso lo acechaba en el suefio sombrer, irremisible y pronto o a hacersf respetar o lo seguia 3 a cierta clistancia del joven amado el sucesc esperaba su hora de iluminar

y calzars'e el hombre necesario a todo actola esclavitud del ser a su destino . . la memoria inramie ae IO que va a verur a1 despertar la madre a la hora verdaderar1.11

1

1

49

x-r

1

1

. .

I 10sbufalos y las campanadas las tonsuras del aire cuando duermen su majestad 10smdrmoles en las iglesias en el oscuro perfume de las flores olvidadas en el viaje el sombrero sobre una canci6n es decir me ahogo porque es un sol sofocando todo deseo de purezaesta puerta se abre como una flor en medio de la sangre 1 con una herida muy larga como ae ias 4 a ias I I la sangre ha dado el pitazo corren 10s gallos su ignorancia su atrevida pata de epitafio la plaza sobre una mesa devoremos 10splatos su cielo brillante y descarriado es imposible el a silba una casa lk11

l - . l 4

la Virgen hace demasiadc en su retrato la aureola V c l t u l a ai L l c ; I l L p iitiaiiic alrededor de su lobo la infancia se hace c6mplice el frio le ha echado llave no golpee la ventana no saque su alma por 10s ojos que es muy feo es conmovedor para /la muchacha que amo la finura no me deja dormir.

I1

braulio arenasBraulio con las costumbres mds depravadas que abejas de vida alegre Braulio con una aureola de arcdngeles transmitidos por la radio Braulio con la mirada de hoja seca que suena como el f6sforo

50

Braulio con el cabel110 de mina de mercurio Braulio con la man1D que abre y cierra puertas en el aire Braulio con un metro ochenta de muerte en la profundidad de la piscina Braulio con una tarira ae emociones en ei pecno y urrus ueiius ciicnes Brauho con la mano a1 pecho y el caballero a1 costado Braulio con la nariz de grito en el desierito frente a las pir5mides Braulio con la espada desenvainada a1 fcmdo del ocean0 Braulio con 10s proverbios rellenos de ni eve y cubiertos de espinas a Braulio con las orejas de cicl6n en Jamaic: Braulio con sus pasos de numero nonatc) Braulio con su cuerpo disperso y su arena en desorden Braulio con un alambre desde el ojo a la r6tula (0,6 x 0,6 mm) Braulio con la sonrisa fhcil y su tio vivo Braulio con sus parientes de doble via como manzanas de discordia Braulio con sus pitazos de tren lleno de vida Braulio con sus deseos de cardenal noruego Braulio con su modio de hablar con hebillas a1 sol Braulio como un dc:monio desterrado del muro Braulio como una tlerca torcaza turca Braulio como sangr'e en un mapa de Americo Vespucio Braulio como una I: nancha que se extiende a sollozos m6ann _-_ __ I n s Yariir. Braulio como un oc_--.- nrpsn nnr __- __ -

I11

esca'ndalo en la escalera de ma'rmolLlevad el coraz6n hacia una cuna terrible a1 castillo del medico donde la luna esta perdida donde las pelusas corren detr5s de 10sgallos anemia anemia la calefacci6n central se ha detenido en cada cuerno blanquea la desesperanza sin olas la circulaci6n de 10s deseos de la familia perturbada por detalles e x t r ~ o como panes de azucar s

y las Idoncellas que se escapan vestidas de novias en el semenmord iendo sus vestidos el estupro color naranja la 1 1 ipara mi luz mi cocaina 61 mi oicdo intoxicado de latidos que son hojas hojas de un dios que no coagula su religi6n la religi6n Ysul)ontifice como gota de sangre

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tened 10s senos extraviados pequefias;virgenes 10s ojos 10s muslos de grito en la nieve pupilas de reloj de bicarbonato que ya se desmoronan y no caen 10s polvos del desierto de la pupila __ - -- 2la llave d el __ -1 -1 reiampagu perrruuuu el rey cor1 su aureola a1 aire y comprometido y comprc)metido de ciertas esmeraldas en el aer6stato su virtud gaseosa sube sobre 10s animales maritimos sobre las princesas anegadas de una leche brillante a1 medio hay un pistilo no lo niegues pequefio incestuoso la libertac1 te gobierna bajo el polen de la doncella2L :

'

ella hace llamear las lentitudes de un juego inacabable una lentitud como un coraz6n o un cojin de peligro insistente en la noche de intermitencias zebras de motivos breves entre un licor llameante te quiero para la doncella que espera un semen de doncellas agujas adi6s adi6s nieve cuya ascua debo tocar adi6s gota de sangre en el pasaje frio del estupro adi6s un rey de fuego suelta sus rebafios de hielo adi6s una doncella en su alma como columna adi6s espera que yo descubra su piedra donde aprenda a escribir descubra su crista1 intimo su azcicar alucinante sus ojos ateridos de plumas internas su nataci6n insegura de alumna del "Jeanne d'Arc".

52

La milerte es la suma de muchas vidas

En un rtxinto muy blanco hay s610 una mujer como indice fenic,ioverde con lucecita en el rifi6n s Pedimo: cerveza -mira el espejo dice Mario GdngoraContam.os hasta 17 luces repetidas en veinte espejos mas all61 no hay nada y sin erribargo esta nada est6 formada por la adiciCin proporcionalmente geometrica de la vicla acumulada como el color blanco sumado 'da un vt2rde mas verde que el fondo intensrLLII-------L-

Est0 no es un poema es m ejemplo que pa5 en una f Mario G,

. .

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Lo que ( la mueri y la vid:t es la suma infinita de la nada. ,1 - * En cuanto a la m ujer es solo un 1m e n puenre ' coma es el amor el fenicic3 est6 de mas per0 existia ademas de la naxre central de la que he hablado.

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Poema de odio

Abrtizame y despreciate, pervertida, Ah, per0 ahi estan 10spoetas, cenan, Rezan, se sacan la sangre y dibujan figuras y simbolos que /despiertan a las piedras en que escriben. Entonces todo comienza a moverse, la luna cae sola llorando un /agua turbia, toman ellos un extrafio colorido Y la musica obscura, ide d6nde viene? Es atronadora y hace de /nuestros oidaIS Flores desvc2ncijadas por el estrepito. ?rra,umbral espantoso que recorrerk tantas veces, Tikndete, p< Jam& he de! pasarlo rio humano; -:-l:--.:A-+-.;. n-xn-+fill.-.m-n*,-.A Echo una cel1lLd iiyuiud p i 1111 v a i a :iitLciiui, aya6aLc iiaiiia, yciu Ue /todos modos he de dejarte atrtis. Conversare con ellos, Los hermosos que hacen magia con las estrellas y se embriagan con /el espiritu de la noche y la muerte. Esttin sangrando. Me quedare con ellos a la mesa dle arena mojada Sembrada de labios o demonios. Una fruta para mi coraz6n apenzis si alumbra. Apenas te he de pasar y crece de tal modo la tabla, En el umbral de la mujer me entrego hasta las rod;.llas. Besame con humillaci6n. Est& en el monte maldito, jmaldita!-.. .e ,.

56

De SIEMPRE Y LA ESTATUA

dad

Con qui6n andas qui& es tu adorado P r e g h tale el nombre para que no se huya 81no S Eibe decir su nombre porque es astuto Y se pelrmite habiles escapadas de escepticismo Dice qu e no cuando le pides algo Que no se puede hacer nada que es in6til Que toci o es uh nombre Que 6 (ldia 10s nombres y el numero en general 1 Con qu ien andas no existe, yo te he visto Ir del birazo de un aire que nadie reconoce. Te has I>erdido,brillante onanista Crees aimar a1 mundo Pero sb:lo sacas lustre a tu pensamiento Tu pen:Samiento tiene la forma de un hombre Tu hornibre tiene la forma de tu deseo Tu aire y tu brazo eres t misma f i Pero alli estiin tus disconformidades Como nnanos para desconocerte Como 1i3 mesa a1 suelo que la sustenta Como e1amor desconoce a la hermosa onanista Y el espeio a1 amor v a todos juntos.

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Sensacih de lo que podria llamarse origen del conocimiento

El pie de 10s mortales pisa 1i3 doble pagina Donde sucede el mundo enitre dos llamas Resbala en tendencias pie a lucinante 1 Te amo tendencia Clara y tu incendio me gana El os0 amable tiende su olfato frio Brilla la lampara del miedo mas verde que animales.

60

Uniid

Nadi.e sabe 10s ejes de una pasion cualquiera. s Ni lo1 del pensamiento como hilos en 6xtasis. El an.gel vuela oculto de su propio designio, la pa loma torcaz ama el desierto externo. Sobri3:;illas de sangre la instalacibn fimebre, dicerI Cp e se resuelve y sblo se plantea ante s nins dp1 nrimpr xwnidn que 1 La m6dula no alc, comc) el habitante comc) el eslab6n i, ignor'a sus parien _ _

_ _ _ __ _ _

__.__....___

Es (que estamos ocultos, .A rturo, por costumbres: no Isabes qui& soy yo ni Yo qui& eres h . i - I - --11-SalillLUb d 1d-b C d l l e b IIldIW2J2 ._ _ Dot- alpuien: idos _ _ .-~ ..___., senti] o no sentirlo es ser dkbil o fuerte.Y ^ I

-

Oh h uevo prir ipuec$en sus F Cadenas que ( jsois mi yo mi

"'

Se f uma, ambos fumamos. iPara qu6? Eterna voz ~ la del que se pregunta a si mismo. Gesti, culamos, creemos vivir. El tiempo nos obliga a llenarlo de sangre. Est0 es verdad. Me piarece que te llamas Arturo y yo Eduardo. Algujien de varios nombres nos conversa.61

Saludamos, vivimos en relaci6n constante, con la relaci6n que puede haber entre 1y 2. Pasadizos de amor o rio o movimiento, ya ten6is preparado un liquid0 que una, como la sangre busca, oc6ano teol6gico. Los animales se aman en 10s torbellinos.

ciegos, nadie se disitingue: el amor es perdida. Familias de jabaliei5 que batis vuestras colas, asesinos divinos, formaa el solo ~ 1 0 s .1 1h.

T te llamas Arturo desde que transitas; U las familias humanas aman el individuo; hacen llorar a1 NUmero porque lo dividen.

Pero la vida es una ocasi6: para unir huecos que se qi el amor, el odio, la pasi6n existen para juntar 10s hoj Grande vacio que yo veo fxurrirse de las renuncias del yo inciividual, amo 10sojos, las corrienteij de aire, 10s besos, 10s balazos, la aiusencia c6smica. Entonces se conciertan reuniones para aplacar nuestro interior corn1LiI-l. S610 se logra separarnos con polit esse, y como una ola a otra nos despre'ciamos.*

Entonces, Arturo T y Arturo LU, U nosotros conversamos por d esesperacibn, o nos separamos destacando 1!a "personalidad": Esta es mi definici6n de demo?zio.Per0 yo ya no guardo mi coraz6n en la c6moda envuelto en un fieltro especial para el caso. 62

No ser4' nunca de 10s que han de ocultarlocomo u na cebolla esconde su lagrima absolu

Yunosaca vestidos y cutis falsos a 10s ha bitantes que se cubren por voluptuos sin sabc!r quienes son, sus apariencias muevc un peqiiefio intento de desnudarse cuandoSin emkjargo existen be:;tias que simplemente son, su pura brillantez no ticn e cuerpo. Nosotrc)s queremos estar tristes o alegres: las concpistas del dia son rayas en la luz. Automijvil de amor, choca a 10s seres, ensefiarne el golpe que nos hara unanimes. Transpetrente correr, mi sien de olvido pr6ximo. Soy hurnilde hasta el crimen, la dignidad no existe. SeAores: bajo la pie1 quema la vida; yo fumc), quiero ser bueno, me disuelvo, me olvido, me borr'0, me cristalizo, me huyo, me reflejo, me duelrmo, me desprecio, me brinco, pierdo, y amo. Desde hlace siglos todos comen a la misma hora, se arrasitran bajo 10s signos, suefian en la mafiana, vemos Ilos mismos arboles romper el pensamiento, y las mi; smas palomas y 10s mismos mitos perforarI las sienes lentamente. Llorad I)orque hay que despertar a 10s vecinos, que os a partaran prestandoos ayuda o desdQ Se sienten otros, n. creen q Lle vosotros y ellos existen. Partienclo de esta base se escriben, se saludan, se interc:eptan con prudencia o locura. Yo asegiuro que todo es un solo pajaro que miri2 sus imageries en diversos momentos.

TU te llamas Arturo y Hugo y Juan y mucho m&, y altern:is por la piedra del espejo instantaneo.63

A1 fondo de un llamado obscuro o luminoso precipitate: como serie de p untos, como huecos, como granos, como pulso de (:hispas, como rocas bajaindo por la nariz humana, como pasos que acosan su pie fundamental. ite * Precipita- a1 ronao como un cor0 que aumenta ' alcanzan[doe hirviendo su fie1 raz6n de ser.

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Negocios ardientes

I Cbmo veneer a1 tiempo. Se habla del agua y sus ventajas sobre 10s dema's elementos, asi como se trata la velocidad del tiempo y la del hombre y las diferentes direcciones que pueden tomar.La noche es la materia. No la vibracibn, no el nombre De las cosas, la forma, la forma de las manos Flotando en el agua primera, la forma ojo, Las formas, que sin el hombre no hubieran existido, Pues &e las sac6 de su suefio y les dio movimientopecador. La noche es la materia que nos cierra y pervierte. MAS all$ en la altura insblita, en el pur0 movimiento del tiempo y /del pecado, El mundo abre sus Arboles, como pies ardiendo arriba, El bello dia Irradia 10s obstkulos d Y la luz nos reemplaza Es el trabajo del agua, suo Esa fuerza que imita a1 fuego, a1 movimiento Pero que aun arrastra materia, igual que el musculo, Y su fuerza es su lastre, y su pureza es consumacibn.uIIIAIIcLI.-.u

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uu-II.I

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Tocad todos 10s limites, hombres que sois agua, En esa forma quieta y ponderada del que todo retrata; El mundo se refleja, yo miro, yo observo, Me dejo penetrar por 10s detalles que fraccionan el Tiempo. iAlcanzar6 la esbelta consumacibn del fuego? iAlcanzar6 ese movimientohacia otro movimiento? iEse destruirse para llegar a una meta que pueda concederme el /destruirme aun m6s?67

De pronto tengo miedo, tengo memoria, Alcanzo mis ultimos talones irradiantes, Y quedo torpe frente a1 infinito, un poco lejos, Y frente a mi antigua realidad humana: Pero el espejo ya no existe. Entonces la ausencia, esa nada a1 alcance del corazbn, Esa nada creada por 10s limites de lo que ha desaparecido, Se rie. Como la espera, que es toda risa Ante lo agudo de las pequefias c6leras de ser del cuerpo humano. Pero vosotros no conocbis el agua, su amplia presencia, De modo que no podeis vivir como yo vivo. Creeis en la libertad y os at6is a la experiencia doble de un falso /movimiento temporal. Yo no claudico, no renuncio, no vuelvo la cabeza para mirar a una /hermosa mujer; Todo es igual: yo devoro a1 mundo, Hasta que mi propio lastre de fuerza me sea innecesario. Adi6s espejos habituales de la memoria o del olvido, de la crueldad / o la entrega: Pierdo mis manos que entran a recuperar la MANO. Pierdo mi cuerpo y reconquisto el pre Paso a1 mundo de la forma y del fueg Mientras el aire espiritual casi es pura Este elemento que nosotros vemos de modo tan misterioso /irreductible, Esta agua que es la vida quieta colocada en medio de un espacio /much0 m6s lento que el cuerpo, Esta agua no puede ser trocada. Impuros: habeis pretendido lograr la sublimacih del hombre /quemando sus instantes Igual que cuando hervis el agua en forma intelectual. Nada lograreis, sin0 romper una quietud cuya fuerza es su quietud /y sobriedad, Nada lograrbis si no comprendeis que el tiempo es /voluminosamente lento; Superadlo Con esa pasividad cinica del agua,

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@e en una sola dimension todas sus dimensiones toma y toma el sitio del mundo y lo convierte. Esta velocidad hacia adentro es mi trabajo, Porque yo soy el agua, soy el agv No me comparo, vivo, No acepto naufragos ni orillas, Con mi ojo de piedra olvido la risa, la muerte, La falsa velocidad del pensamiento o de la action, Y soy el agua, soy el templo adaptable e inmutable Adonde baje el aire del Espiritu Santo. Ahora si, elevadme, Tiempo, hacia adentro, Tiempo del fuego, de la forma, mBs infinito Que un punto en la obscuridad vivida por el dolor Del ser Y su legitima memoria vertical. El Brbol horizontal escucha a la tierra para dejarse traspasar 0 se deja traspasar para unirse a la tierra; Todo su esfuerzo por desvestir a1 pensamiento de su sonido falso Hace ruido, Y el sonido nuevamente lo burla.

Oh ser de alas paradas en el aire extenso, Cortando quieres anular la fatalidad del mundo continuo, Y a traves de tu propia posicion de pecado y caida Las venas recuerdan su aire superior Y nuevamente matan el ray0 pretendido.

I I De la unidad que consigo mismo puede lograr el hombre en la comprensidn del rayo, por ejemplo, o en la entrada en forma stibita a1 tiempo de la mujer o del abismo. Visidn del Muro que desciende y llanto recreador.Los cuerpos vecinos a1 alma dicen cosas y estas son barcas Para perderse, viajar, amar a1 fin y a1 projimo, El ray0 en su consecuente lapso de destello-estampido-temor Ha cosido intensamente a1 hombre consigo mismo Y las barcas ven intitil su modesto destino De perderse o llenar el espacio ilusorio.69

Mujer de medio eclipse ahora dentro de mi mano que cierra El aire encadenado, suceso enriquecido cada noche Bajo las vivas estrellas corriendo por el pecho como pAjaros /calmantes del punto devorador que creas, Labios como dos grandes remos ensangrentados en el amor, la ira /sexual Y el hambre impenetrable por la comida de hAbito, OJOS nada fosforescente, de azucar resucitada bajo el Angel, de Esmeralda caida en este viento desolador que soy desde hace un /aAo, Desde hace una estepa o una profecia: Abre 10s duros golfos del valor y la forma, Rompe 10s alrededores donde tanto despojo o preparacion yacen /luchando, Las hondas compuertas abre del amor y del llanto, Para que el Muro viva en nosotros bajando Tortuosamente como baja el cielo por tu pecho y tus hojas, Y pase el Muro con todas mis inscripciones doliendo. Como una nAusea obscura invado tu pecho de aureola que tiembla, /oh resiste Mi tallo escrito en las costas, mi soplo De torbellino loco, oh abismo apufialado, Donde demonios mueven sus pies de brasa lucida, Para que yo alli baje a tu fondo intranquilo Y altas peleas cante y tempestades mueva, Hasta que tu rosa desvelada y brillante Bajo sus tibios piirpados ampare mis cenizas Y las letras de fuego que en ti aviva mi amor.

I I I Terrible imposibilidad de lograr la comprensibn vital del abismo por culpa del pensamiento dual y, sobre tudo, por el tiempo que sintetiza nuestru terror a1 Tercer Ser.Pero, iQui6n castigarii a1 abismo, cuya sola fuerza de persuasion y lejania /ha dado origen a nuestra c6moda definition de 61? iAcaso 10s piijaros separados, cuya sombra por su fondo pasa y alli /se incluye si a l g h observador De mirada eterna y memoria inmutable por sobre ambos /espectAculos retrata?70

aquei que nace ae el como un inriernu ue reyuuiaua 6n o como la lengua de ese abismo que sabe que nunca serB /amado, ni comprendido, ni azotado desde fuera? A si mi smo se basta, Tiene sus propios tripulantes, sus propios peligros, Y, como el hombre, su propio pensamiento lo mata, Pues yi3 indica una pretensi6n de desdoblarse Entre e1 cuerpo y el vQtigo, el espejo y el hombre. Conoci a una mujer que alli gritaba una tarde de fuego (Habia cafias, hitos: medidas para el dkbil). Eran las redes temporales que lo eterno tendia a1 transetinte incapaz /de caer. Una humareda semejante a un bandido cubria el gesto eterno. Transparentes marinos reventaban en el aire como pompas de /tiempo El Bien y el Mal crecian en el fbsforo torturador del viento. Los parientes subian y bajaban. Pequefios fuertes soles restafiaban su duraci6n derramada. El pecado en funciones de vehiculo o sangre limpiaba 10s cauces del /tiempo y la materia.1

"He de vivir -me dije-. Oh cruel destino para esta estrella de /hhbito que soy y este latido de miseria moral y baja esencia", Y cegado retrocedi y venci a1 Obscuro tentador, centelleante v de /tierra Oh Extrafio, o temblorosa yema tactandc) a estas victimas /imnnsibles .~ mmos , .~ _ _ - _ _ aue - . ~ -_ Nadie podri decir qu4 hubiera sucedido Si a1 fondo del llamado no hubiese resistido: Tiem-- rrnlnn-nrln z 1 fnnrln , 4 0 1 IUL6V c v o s A n r 0I fiinmn pJ Muerte usando la entrafia sensible de la forma iQu6 sonido, que temblor, quk mentira, que nueva proposici6n /ontol6gica habria alli brotado? iQu6 apagarse de lenguas, que mutua humillaci6n de dos seres /potentes y mojados no habria alli ocurrido?^^^~

t j V I y z L L I L u V

l V l l U V ULI

L.ILUU"I,

Como si contra ese mudo enorme que cierra con su espacio la vida /comprensible Prorrumpiera una ola de equivoca aproximaci6n, 0 una rodilla y una paloma se mezclaran por dentro. iy c6mo amar a1 abismo desde esta altura de dureza insoluble?

71

Ay de mi, vencedor En una tentaci6n en qi Me impide ser captadc Por el fuego infinito qi LQuien puede descent,,, UCaI-'UCa, De'cir m a s cuantas palabras, unas agonias, unos segundos? iTii puedes despojarte y rendirte? Holmbre infeliz: Hacia el abismo s610 una escala eres, Qu e amas tus peldafios y liquidar no logras r Po1 m i d n a1 narirnbntn r-3 a~0 l a v i v a . m" . " El agua viva de pavorosa novedad.I I L l r U "

u.

IIu..I...IcIIcv

-

.----I

IV Abismos y hombre: resigntmonos. Canci6n.Desconsolada epidemia que l eres i i E inmune flauta que yo soy, Tocar6 melodias Para poder flotar. Distantes, inflexibles, Tu contagio de eterno no me toca Ni me puedes amar. Como el 6ngel que nada sus raices Perdidamente extrafias, Tu vana agitaci6n veo en mi extremo Igual que lepra suplicante Sin destruccih y sin enfermo.

V Encaremos a1 Rostro presto aferoces transformaczones morales y veamos si, tal vez, despuds de todo, no saldrh de nuestro costado un ser absolutamente opuesto a1 hombre, pero en medio de un espacio ciego en donde no podrhn resonar sino 10sfalsos valores de 10s contactos leves de una lujuria o un temor inapropiados.Tengo miedo, miedo a1 Rostro que se ilumina, se descompone y /vuela, A1 rostro eterno, y leproso, y moviente, Y seductor, y centelleante, y colerico y cambiante y silencioso, A1 rostro vivo tengo miedo en este dia exthtico hecho de sombra, /olvido y resplandor,

72

Tengo pavor a1 rostro que me llama mas misteriosamente que mi / madre debajo de las tablas 0 en la almohada que entra en un tune1 de sangre inexplicable Donde palabras espantosas y no oidas Como llaves nos abren las puertas de nuestros miembros magicos, Por 10s que salen dolores, y personas, y fuego. "Eli, Eli, lama sabajtani?". Tiempo mio, muerte mia, ipor quP me /habeis desamparado? Te tengo miedo, oh Rostro, oh aguas vivas, llamas vivas, Carnes vivas, oh manantial de llagas, tus silabas terribles y ocultas /no me Sean Dichas en vida, en dia, en cuerpo sensible, Porque mis muertos saltan y mis columnas se demudan, Mis fundamentos muestran 10s dientes con horror. Y mi piscina que /trasciende por lucida vision La sienes de mi alma trastorna con locura y me arrastra la vista en /un licor mortal. Ay, soy ola sin nombre en este mar de tacto imprevisible, Y naufrago de mi propia nueva resurreccion. iQu6 soy, que puedo ser, que objeto eterno De mi puede brotar como cuerpo glorioso De rostro en llagas vivas condenado A la lujuria, a1 engafio y a1 temor?

73

"Pero en chozas habita el hombre, como se oculta en un pudoroso vestido, pues mientras m6s interior es (61),m5s precauciones toma y conserva el espiritu, tal como la sacerdotisa la llama santa, &a es su razbn Y es por qu6 tiene Albedrio y todo Poder (y) Arte, de cumplir o no cumplir el m6s terrible de 10sbienes, la Palabra, dada a1 hombre a fin que, semejante a 10s Dioses, creando, destruyendo y desapareciendo, y regresando a la eternamente viviente, la Maestra y Madre, pruebe lo que ha heredado, lo que aprendib de ella, su cosa muy divina, el todo-consewador Amor".

HOLDERLIN

Por cualquier circunstancia, ya interior, ya exterior, el hombre sufre el ixtasis. Nuestro cuerpo mismo se transfigura; mirado desde arriba, tal vez aparezca como una piedra iluminada cayendo desde el pasado 0, mejor dicho, desde el tiempo, ferozmente transparente y como bajo el domini0 de la mirada de la climara lenta. M i h t a s i s consta de dos movimientos, aparentemente opuestos, per0 que en realidad integran un solo estado: se desconocen, primero, 10s objetos, lasformas del mundo; se duda, no intelectualmente, sin0 con todo el ser, del ritmo del lirbol, por ejemplo; se encuentra todo arbitrario: el mundo es una forma vacia y casi inexistente. Es la nada misma adulando a1 espacio pero sin ninguna realidad trascendente. Luego, uno, iluminado por esa luz esencial que debe de ser m u y semejante a la de Dios en vispera de la creacidn, empieza a definir, a coincidir con 10s objetos: lo grandioso de este sentimiento es la coincidencia que uno lleva a cabo, parado, por decirlo asi, desde el otro mundo. Este poema (en prosa, a pesar que he adoptado la linea o el verso para destacar algunas ideas y darles cierta autonomia dentro del conjunto; y en verso propiamente tal, cuando el ritmo nos arrastra en algunos pasajes)75

comienza como definicih, con el reconocimiento que un dios hace del mundo que ha creado, o que podria haber creado hace mucho tiempo, i Qui son la nariz, 10s ojos, la voluptuosidad, el acto sexual, para ese dios que ignora el tiempo y el espacio? iC6mo traducirle a su lenguaje de eternidad estas formas temporales y con palabras temporales? Ingrato trabajo, dficil tarea: porque de ningun modo alguien que no sea, como y o (el poeta), dios y hombre a la vez, podrh reconocer la verdad y la justeza de estos hilos que he tendido entre dos mundos tan cerrados. Lo intenti en un momento de fuerte ixtasis. Un ixtasis que hizo esfumarse la realidad, en un comienzo, y, luego, que m e hizo comprenderla, sentirla, vivirla, con una patencia irresistible. Es el gozo de vivir, porfin, la realidad despuis de haber morado 1 en el vacio. A final el poema se plantea como pkrdida. Es la Iibertad de morir y de vagar, por fin, despuis de haber verdaderamente vivido. Ambos movimientos podrian ser perpetuos, y nada sin0 la fragilidad humana habria de impedir que se sucedieran a travis de nuestro ser hasta el infinito: Eternidad, tiempo, eternidad, tiempo. Rayado por estos dos tuneles alternos, una hermosa zebra es el hombre. El que se atreva, lea mi poema toda la vida, y encarne, con vigor y profundidad creciente, el simbolo de mi animal.

76

En la gran casa vacia hay luz, una luz vacia, dura, de una irritante serenidad. En la casa no hay ruidos. Usted puede mirar por 10s pasillos, por las escaleras. Por las ventanas que se ven tan lejos del cielo blanco de la tarde. Pero el viento pasa y no pasa. Entonces, uno se da cuenta que, mas que luz, mas que aire, mas que muemes, IO que nay es1 1

La vida se ha retirado

1

La palabra HAY Hasta uno entra en la palabra hay, con una claridad que daria miedo si uno existiera. Miramos el sill6n gastado sobre el cual una rafaga de sol descansa. Las piezas son abiertas, el temor es imposible. Todo brilla tanto, es tan exterior, pero, Tan misteriosamente exterior. Es como el mundo de un espejo, muy cerrado es. De pronto, se sabe que existe algo diferente sobre una silla, per0 algo con la verdad y el terror que debe de inspirar lo caliente a un mundo de reflejo e imagen. Fijkmonos bien: Hay un ser que olvida su cuerpo, una parte de su cuerpo terrestre cedikndoselo a la silla: esta parte no duerme, se ha entregado a un cuerpo exterior inerte y much0 mas dormido en comparacih. El resto del cuerpo de que hablamos est6 vigilante, presto, incluso vivamente delicado, Guardando, no obstante, su rencor y el orgullo propio de si mismo y de sus limites.77

Sentado

Ese cuerpo est6 sentado. Es blanco tambikn, aunque esto no importa mucho. No sabemos nada de 6 sin0 1 que est6 sentado; y algo sabemos ya de esto.

Cabeza

Sobre ese cuerpo sentado, imaginaos una letra amenazante, hirviente, dirigida y suspensa por un misterioso vastago interior cuyoEvtrnmn infnrinr t n r a rnn l n e a l i m a n t n e17 r T i T T n

Extremo superior seria algo muy claro y con cierta melodia fatal. Hay una hierba negra sobre esta letra que relampaguea y cuya virtud es poder ATERRORIZAR A LOS SERESINANIMADOS,

Siendo, sin embargo, esta letra muy parecida a algo sin respuesta en un vacio azul hermoso, cuya pregunta -la de dicha 1 Picotea, Enfria Y hace oscilar a1 ~ U c w l u d UIld U d I d l U d LUI I la sangre, el peso y la obscuridad.OjosClecimos-

LUIdUd

pur

\lolumen sentado, con dos "ojos", o dos hoyos -nc

de Dronto en esta

Casa dura Cuya continuidad Por nada pareceria ser perturbada, pues hasta El vacio existe como obieto indenendiente. resniracidn I I -= - suelta y en su magnifico verdor.~

I

En esta casa hay, en alguna pieza, sobre alguna sillaP n r a nnrn n r i t a n A n e11 M ~ T P U D ~

Una columna que gira, aunque su inmovilidad es casi evidente a 10s sentidos, Una columna sentada y con dos hoyos dirigidos hacia algo. Es el vacio que quiere imitar a1 ser. Es la nada que fosforece y, hasta cierto punto, ES:78

Influida Rozat Manc Por las orillas de ser que la circundan. Esa letra que es la cabeza, esos vacios influidos por el ser que son 10s ojos, se perderian, Darnian vueltas de tal modo en el vacio que no podriamo!3 percibirlos sin0 como Aquello tan vago que es el concept0 "desaparicion",

__

I,

.

.

.

I

, ,

Serian un vQtigo que, como tantos otros que deben de existir, no es conocido hasta que no es perdido, per0

Nariz

No sabriamos -y de hecho no lo sabemos- cu6ndo ni dbnde ni cbmo para nosotros ya se ha extinguido.Ello seria asi si no fuera por algo que se llama nariz. iQu6 dulce es su presibn sobre el futuro! Un kilo viviente, una paloma, un kilo de sangre quiebra con calor de sen0 las yerbas y rastrojos: el peso puro, vivo, el peso que palpita. Yo os digo qu La nariz es el futuro. Objeto extrafio a1 hombre en el espacio, muy propio suyo en el tiempo: luz de lo siniestro desperdiciadoDESF

La letra IO iieva internamente a pesar ae somesaiir, Ella separa el tiempo, y lo hace, La nariz es el dolor de ser en medio del dia, La r puesto de pie para poner orden a las mtisicas que ruedan tan dislocadamente, Amante v destructora del suefio infectado de tiemuo , Y filp r a s vivas,

Tus ojos de hueso hielan la apertura a1 mfis alla, tu horizonte desconocido, tu fuente de tierra y espiritu, de dos tallos negativos,79

Nariz humana, idescifrark? Por ella en las liturgias me ori astros,

,

Mientras las praderas se transparentan y caen por ms flancos perdidamente imanta Hasta alcanzar el olvi-,-I

"."-.

Su cifra perfecta da sentido y resta sentido, cuando las significaciones de esta noche misteriosa en que vivimos Varian de condescendencia y de fatalidad.

Muno

Ydedo

Indice

Y nada es mas aqui que eso a lo que te aproximas.

Hueso cordial, Ray0 primero: Ni yo mismo estoy m5s pr6ximo con mi pensamiento doblado sobre este crista1 que alza mi pecho; Ni yo ni mi palabra Est5n m8s cerca que lo que hi, indice mio, dices. Acercas y alejas la proximidad: Aquiiii... y en n punto mientes, aunque desplaces n ie el uqui con imperativo capricho. Como una fugaz corriente a hitos riberefios Tu movilidad fija a1 mundo y lo hace real y extrafio. T6 dices Aqui, Alli, y agrandas libremente el contacto; Yo digo Ahoru, Entonces, y nada puedo sin0 consentir. Mientras hi mudas radios y centros en infinitos circulos amantes, Yo, condenado a1 pur0 mirar, Deberia juzgarlo todo sin distancia ni tiempo. Mano llameante, desde cinco caminos me traes todos 10storrentes de piedra:

80

Y s610 ahora puedo salir a volcarme bajo el cielo, Hacia adelante y hacia atras como el tiempo del mar.Detkn, Fxecipita el movimiento. iD6nde est5 tu raiz, indice mio?

Yo s6 que brotas entre mis ojos Como btra nariz. Como otra-estrella, Deslinada y dgil, dibujas Los colntornos de todo:v

ento brotar de noche como un sol vertical, Y te si1 Ray0 inivisible, arbol verbal, Para quiD esto, eso, aquello, ello, yo, Circuler1 en mi con libertad.

- -".a,,^..- ... eres? LDe d6nde mana tu poder, que siendo mi0 A mi,,":rlt1311tu y UCUC> ,,",1---- lala111 LC3 >Cl :iPor qur5 mis ojos estdn mds en ti que en mi mirada?

No me c:ensures, hueso cordial, ray0 primero. name. Para ello Ven y 61 Te acercar6 a mi boca y con tu verticalodo Sellar6 t8 hablar: la paz est6 conmigo.

Voluptuosidad sexual

yo entro, joven mia, calor mio. en ti. como un llanto en 0 tro llanto, 1 A stros corren por dab_.-, Anima.Horror jenada

u-IL.lv

-_

.UI

chos son las cabezas del dolor debajo de le yo amaria

iuevas llagas me recorren como una madre a1t.

Un paso infinito y que nunca llega a reanzarse, es la mirada de la mujer uc d b e a1 hombre,-. 1-

.

r .

..

11

,.

.A. ,

Sobre su nariz una raya horizontal tatuada a plata es la barc: 1 atravesada ,-, -I, 1, ~ U U e ~d ola y sobre el tiempo I Para ,que el hombre, yo, mida mi voluptuosidad, mi alcanc:e, mi agonia.

Termina la definicidn

Y

comienza la pirdida

Todo quedara reducido, pronto, a una sola dimens i h , a un papel radiante, supremo enemigo de la miseria, per0 inasible en cualquier tiempo. como esas vetas del fuego que corren a filo de vacio Entre el objeto y la simple sensacih visual. Entonces Que el sex0 de la mujer se ahonde hasta el secret0 absoluto

Y el sex0 del hombre se levante hasta el or0 de la quinta dimensih,83

Phdida

Hasta tocar esos bordes de ser o de nada aue rodean. con toda fuerza, nuestra vida, nuestra respiracicin e inseguridad. Ya es tarde, la vida es lo tarde, alma mia; ahora Como un dios cubierto de pesado poivo solo cuyo polvo subsiste en el espacio, contemplo la distancia a la distancia.1 ' 1

El Verde inclinado a la dulzura, El color sufre la alternativa de caer de si mismo a otra, La dulzura de lo que no va a ser mis, Desde tantos nunca el cuando conserva, Ese tiemDo aue tantas melodias dibuia -on tranauilidad El sol S casas Mi voz cruzaria -AHOMel espacio, con tranquilidad, En medio de ese viento inexplicable que pretendia arrastrarme como a las semillas A las planicies del reposo con cara -con tranquilidad, Sin ninguna tierra que haga florecer mi llave Eduardo Anguita, Con tranquilidad, Otra parte se insintia en otra clase de seres, La que se insinuaba antes sobre mi ya no se insincia, Porque la parte y yo y nuestra relacicin Con tranquilidad, con tranquilidad se extinguieron, Una mhica recorre algo, el algo forma parte de ella, Es -con tranquilidad- el ultimo amor que se apaga, Y yo en el olvido constat0 y grito y hago desesperaci6n y tranquilidad: "Dios mio, idcinde es el dcinde? iQu6 pregunta soy?" Con tranquilidad, con tranquilidad; con furia y tranquilidad. "Habiamos permanecido demasiado tiempo en la vida y creimos que eso era natural". Ahora va a ser tarde: es tarde, brumas mias.84

El poets se pone de pie y reza

El verdadero momento

El pas En el Y azui como si una pieara nuuiera siav arrvjaua Para turbar las ondas que dormian Se dibuja la fronda de un encuentro.7

Alli pasee con ella. Y con nosotros Un aire de primavera nos seguia Las hojas cantaban en la tarde Jamas caeria el sol y si se iba Aiin nos alumbraba. Me cantaba Chansons Grecques de Ravel Creo que a traves de su rostro como a traves de una hoja Podia yo mirar el ocas0 transparente Y por su voz el tiempo se adelgazaba hasta la luz.

El fuego de la dulzura y el agua de 10s ojos Eran notas en lo alto de 10s lejos Por ellas podia yo descubrir el cielo Hundir en 61 mi cabeza como en una madre.Parece que el ultimo instante fue frente a1 castafio Cuando surgieron otro tiempo y otras personas Per0 lo que habia ocurrido antes qued6 para siempre LGcido y tranquil0 como un estanque. Hoy pas4 por alli y por aquel instante El momento y el lugar estaban muy lejos Como en un grabado todo era mas pequefio Y ya no coincidian 10s objetos con sus imagenes.

85

Comprendi que ella y yo ahora puestos a1 margen De esa ella y de ese yo seriamos pesados Con un peso de inexistencia de materia acumulada Y que lo transparente de aquel pasado era lo h i c o existente. Ni el castaiio ni yo ni ella ni la tarde semejantes Ni la canci6n repetida frente a1 mismo jardin Podriamos jam& coincidir con el verdadero MOMENTO: Sblo superponernos condenados a fantasear Como 10s conc6ntricos circulos de un estanque en que un torpe Arroja piedr,

86

I

El aire fino vuelve a la montaba. De tu rostro todo recuerdo se evapora. Imagen pura, Zas ueces que te veo no te ocultan. Como ondas se apartan y te muestran m6s Clara: Y no te veo sin0 una sola vez.Eres primera vez. Cielo infinito y lavado hasta la piedra, Para qu6 mirarte hasta el exceso. No seras m6s pr6ximo ni m6s bello; Mis ojos no podrian sembrar nada en tu frescura. Eres nrimprn ~ 1 rnmn plln ripln infinitn 11 snln ~ 7

I1Quic Quiero verre aormir, mancnaaa por el sueno. Quiero ver que te afanas, sedienta por la busca. Quiero verte morir, impura por la inercia. Per0 lloras y duermes y te afanas y mueres, Y no puedo acercarte manchada, incierta, impura. Si lloras eres como 10s rios, toda llanto, toda limpia. Si duermes eres toda soledad, m6s pura que el silencio. Si te afanas eres toda la sed, 10s otros quedan sedientos. Todo muere en paz, dulce y grandioso como lo fatal. Todo muere en paz. iTti existes!

87

I11Vengo preguntfindome algo largo tiempo olvidado. Me inclino a 10s arroyos con ojos de la tarde. Todo me deja ir. Todo susurra para si. iQue pregunta soy? Responde, pfijaro del bosque. Ah, t~?que vives entre brefias de ecos Inalcanzable y sola como el eco. LMe asomo a ti, espejo amado? Amando, se que pregunta soy. T me reflejas integro, graride, vivo y mfigico. G TG, arroyo surgente, alta v 2ntana: f Resphdeme integro y no t:e apagues en la noche; Siempre me hallarfis despit?rto para el silencio del amor.

IVRfipidos torrentes imfigenes turbias arri Soledad, estrepito, donde nada se encul Desaparece el reflejo. Los destellos del Se ensucian con el lodo. Los animales n. _______..~

El que la mGsica inventa, mete una espada en la corriente; Planta una mirada de or0 en el trueno y un jacinto en la tiniebla. iDios mio, el hombre es realmente divino! La mGsica fluye por la mirada de la frente AI encuentro de las flores, per0 ellas ya se apagan.

Oh, capullos azotad os por el crepGsculo, capullos.iOh, Noche, no vengas hasta que no sea la noche!

88

De PALABRA PERPETUA

EAur e t u b ebe ebidi q u e , e CUI I di bile1 I C I U ~ U l l que id 1 ebdCd ue ebwelidb

y el dorado creptisculo solar lavan dia tras dia. Las hierbas altas acallan a medias las lapidas marchitas; Mensajes antiguos que debemos leer muy lentamente; Palabras, tal vez: no para ser pronunciadas, Sin0 palpadas apenas con la tibieza del sol. Asi pasan el lagarto moroso, la arafia, el saltamontes, Y hasta el viento del paramo marino sobre ellas se encalma Como un gran espejo tendido sobre la soledad. Abrenos ese jardin que s610 se visita Cuando alguien viene a vivir de verdad, La colina que nace y muere a1 pie de esta capilla, ola petrificada junto a la roca enemiga, ahora ambas perdonadas, Ni odiandose ni amandose: ipasadas! Los huesos ya llegaron a1 hueso, la sangre toc6 el pur0 fluir, Y el tiempo a1 tiempo vuelve. Colina de muertos que una invisible corriente Gasta, acrecienta y purifica. Fin de estio. iQu6 sentido tiene decirlo en el Cementerio de Totoral! Jar( donde 10s aAos maduran mejor que 10s mismos lin veranos en cualquier huerto terrestre. Fin de estio en este rinc6n rural adonde han vuelto quienes siempre debieron vivir juntos. n? mismo estaba la eternidad, aqui tan cerca de ellos, tras la 1 1 J tapia y el cerco rtistico de Cristian, zagal del pueblo; Allj: tras de la casa, debian ir 10s amigos a contarse las nuevas , familiares. Est:iba reservado el lugar para cada uno -10s la casa, 10s forasteros en el atrio, 91 forasteros frente a

Parloteando, chanceando, despidihdose estridentes-; per0 at&, at&, en el huertecillo oloroso que 10s duefios de casa siempre desearon marchito porque lo marchito es sign0 de vieja amistad leal, AtrBs, detrBs de la casa, tras la verja, la conversaci6n intima de 10s amigos eternos. Fin de estio en este cementerio costero, tierra adentro. Primera tarde de otofio, sol dorado tan lejano de luz, Tan pr6ximo por su delicadeza, Deslizate sobre esta ladera cercada como un huerto. Tumbas deteni.das (10s remos dejados a 10svivos, loISj6venes y 10si forasteros) :midad Entre lo luguefia, Lee tG en el aliento del sol otofial:MUERTA EL 11DE MAY0 DE 1857. PRONTO SE REUNIRA A ELLA SU INCONSOLABLE ESPOSO

Oh, juventud ii promesa de rei Pronto: Y el PRONTO t a r w L a i i L u c i t iicgai. uclliulu, uullu, Jc olvid6, germin6, reapareci6, Madur6, intermi

ULLtIw,

Lam

Pero, a su lado, 1 juntos, vetas tranquilas del marmol que nadir? imagina rueron tempestad, A su lado, por fin!:AQUf VINO A REUNIRSE A SU QUERIDA ESPOSA EL 6 DE ENERO DE 1902.

(1857-1902).jCuBnto tiempo -45 afios- separBndolos! jY cuBnto tiempo -48 afios- desde que aquel tiempo92

desdichado ces6: cuanto tiempo entre su reencuentro feliz y ahora nosotros! uhnto -93 afios- entre la muerte de ella, cuando ESO comenz6 a transcurrir, y nosotros ahora! into tiempo amargo sucediendo y por fin cesado para hacerse feliz: el tiempo dichoso transcurrido y poco a poco olvidado hasta hacerse irreal! uevamente sumando desde fuera del set0 como si todo est0 hubiera sido siempre un pasado, hecho para nosotros, decir: Est& bien. Todo eso es real. iY CIuhnto tiempo mhs para quien lea estas phginas tanto tiempo despuks! LQuikn, qui& ha esperado? Y el mismo sol besando la colina, las tumbas detenidas. Y... Fin Ide estio.I

Estamos en 1950 en un huerto marchito de Totoral, la colina donde resbalan 10s muertos y las enredaderas, La colina de 10s amigos. j1950! Tanto tiempo perdido estaba aqui, tierra adentro, adonde hemos llegado sin pensar, agolpados como una rafaga de niiios a una charla grave. laltta vena febril, tanta impetuosa lhgrima, jmhs que existieron! jexisterI! SON: huellas en el mhrmol, inmbviles, como se ve el mar desde la altura: un epitafio. Todo ello r escatado para nosotros, que nada hemos sufrido, c a quienies se nos da la lejania del viento iAqukl lejaiIO, largo PRONTO, Para nosotros,importunos, es PRONTO otra vez! Ambas vid, ambas muertes, las dos aqui prbximas, sin mediar as, ni una hierba. Esposa y esiposo cara a cara, El tiempo E(endido, la llaga que debia cerrarse (Las aguas que una mano fugaz -4.5 aiios- separ6 un breve instantce>, La palabra est5 ahora reunida, Y el tiempcI placido, lucido, admirable. Esposa y esiposo, dos extremos vacios Para dar vi1da a la separaci6n. 93

iJuntc) aqui dos labios de tiempo formando un solo beso Viejo y nupcial!

94

I

un cuerpo muy d i d o per0 invisible, una compacta reuni6n de lejanias, con todo su silencio endurecido, toda su ausencia prbxima, y cuanto mds palpable, despojado. Era dulce deiarse ir uor sus aristas mhs veloz que la mGada vuelve a1 sol, ciego volar sobre la linea pura hacia un encuentro: cuando quise pensar en d6nde estaba, tuve un vdrtigo: ila arista, la linea, no era nada!Deslicd por la nada que forman dos caras del poliedro beshndose: del beso lineal quise subir a1 labio, tenderme en las superficies, reposar por fin en la extensibn dorada Asi, mientras lo hacia, desdeiid a1 azul profundo del ocdano desde mi valle de cuarzo fantasmal. Mas, iqu6 era eso? La extensi6n tambidn era s610 limite puro: idonde un volumen iba a nacer, otro cesaba! En ese silencio cortante, en ese filo mAs exiguo que entre beso y boca, ihabia yo creido tocar la substancia? %lo era volumen contra volumen despojdndose: iy eso que era la nada, inasible y fugaz, con cuhnto amor ausente me atraia!

95

Frente a1 ockano exclamk: iTodo no es mas que lejania! -jQu6 sabes tu? Cien n ~ ojuntos, cada uno de diez afios, s jsuman mil afios?

No s4. Arrojk a1 mar el poliedro porque tuve conciencia que me habia mentido. I1Cuando el besar del vino hace saber a1 labio, jsabes tu lo que sabes? Alli en el vino se retinen, de tant,- n--+oc h-n sabor, color, olor y cuantas cosas la suave pesantez, la penumbra 1 se juntan alli como en un simp:- -'---'A~7o,+1fi

Pero eso no es el vino.

0 bien: Tras la flexible carj cuando quieres COI est& no lo htimedo, lo fresco, lo que inunda y aniega. Hay otra cosa. iEl agua tambih es un ejemplo!Contemplais un grabado en blanco y negrn lo dais vuelta por ver si la calle continua a1 dorso o el rostro muestra a1 otro lado la desconocida nuca de la infr-'Habeis llorado, tal vez, buscando. No comprendistei! que es s610 una ilusi6n para e Vemos el mundo, las avenidas, ~d U U C v IV ~d

r n m n nifin

e L p UI uLUIUdU, Llulrza, l /blandura y consistencia; vemos el mar, con(:entrado y extenso, moviente y fijo. jQui6n nos lo hubitera dicho en un grabado!iii nn n n A n m n c El rostro del sol -qULn S610 es el sitio donde estara el sol.ucuL

D i i n D h n r D

u l l v l u I1u yuuLALtuo

m i r D r - n nIILIIuI

I1u

oe

ol

c r A .

96

El olor del verano es sombra de olor. El sabor del durazno, jsombra de sabor! Tal como 10s ntimeros respecto a lo sabroso de aquellas cosas que

,

/oniimovrxn LlLurrrL.lurL,

?as no crf tti que es la relaci6n de nota a nota lo que vale. iEs el timbre capitoso del fagot o el oboe, y es 1,1 negra brillantez de la tuba! . _ -..-_.__ :-1-- 1 _ _ 1 ___ 1_ iViOla, Cub -.: _ _ _ bUbCdnCldleb d L U g e I 1 dl bU1 e11 C U _______:_ _ _ _ _ _ VlI1Ub TdIIldJe IlUIIldIIU, Angel caliente en el oido de la miel, venas frutales, la sangre del estio y la abeja de or0 que corona la cuerda de la vida dichosa que he de oir! Eso es lo que te espera. No es la linea del agila. jEs el aguaj iPero 10 que todavia bebes es la linea y el ntimero del agua!L.L

L__

La columna rota yace como un juego inm6vil de distancias: las abarca y colma en la medida en que ellas, respetuosas, se contienen. iAmaras la distancia, el volumen, la forma? jAh! la columna tambien es un ejemplo. No est6 aqui. Sblo es un sitio y un momento adonde han vuelto volumen, tiempo, pesantez, forma y distancia. Ahi se toca, se taponan, se resisten. Ninguna puede desplegarse hasta lo pleno. Per0 ella, la columna, iqu6 otra cosa es sin0 una abstencibn, una pausa, una esquina, un compromiso, un silencio?

Dime iqu6 tiene lo fresco que no tiene el agua? i que tiene lo liquido que no posea el agua? Y En cambio, el agua es mucho, mucho m6s que ellos dos; y es mucho mBs que lo dtictil, que lo curvo y lo liquido. i no es verdad que a ti te importa el agua mucho mas que lo fluido, Y /que lo curvo y lo liquido? Pero yo s6 que hay algo que te importa mucho m6s que el agua. No lo conozco. S610 s6 que 6sta es una sombra de aquella otra. En un charco de agua lo que ves es el reflejo del agua. iY esta agua que yo bebo no es sino un hueco reservado a1 agua!

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I11 Sacerdote: -iHermanos! No tomen esta vida mBs que como un tr6nsito. Esta vida solo es un Dacto. Lo que crean encontrar en ella es ilusi6n. r\Jo se engafien. No se apeguen. No apetezcan las cosas d el mundo mBs que en la justa medida en que sirvan de instiruI1iento, . ., un sign0 para la otra viaa.I

Mira: Las fllores no tienen color, El ma r es blanco, La miisica es blanca, El airc3 est6 vacio, La aurora no ha comenzado, Los friitns nn tiPnPn n p s n r --I. Yyoi:odavia no estoy. i En to( a voz hay un gran hueco.--vL- 1 .

-^-^.--_

iQu6 las reviste? iQu6 las dora? Una womesa mantiene la situaci6n: El esp)aciono es m6s que una reserva. 1 2 iOh! el .-....- - e s u - - 1-1-:-- uisraiws. rnunuu _ _ J o s iauios iOh!, hermanos :-l:-L--L--

iCuBl es la causa?, 1 es imperfecta y falu, dor?

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Hemos hecho una gran herida. El mundo es una llaga. No hay substancia. La Misericordia ha permitido reservar la 6rbita. Vengo de existir. Ahora vengo de no existir. As6mbrate con lo que hay y con lo que no hay. iCu6n bellas hendiduras las de esa porcelana! i las estrias de la fresadora! 0 Si el espacio fuera abierto, fuera nada m6s que vacio, Ellas no serian posibles. Y si fuera cerrado como compacta substancii iD6nde se abriria la rosa? iD6nde nosotros?98

Los in\lLv lllLuLuv menguado, materia porosa como las esponjas, carne roida por 10s dias. Y 10s invito, tambikn, a comparar la inconsistencia de la materia y la eternidad del espiritu.IIIL.uILuIcALDLcLLLlu L1L I I I l Lu LII

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mirada. El nin PS iliisnrin. T.a __-_ vprdadpra -,- _-____- -_ _-_ . -' El beso es s6lido. Los ' ' ' Las lfigrimas son blar La mano es una nube Lo real no es la voz. E El objeto desaparece. T~ todavia no estfis. Yo todavia no estoy. iAy! iCuthdo estare-- - - I 'IIlUb! Pero la promesa ha sido hecha: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida'. Si, hermanos: por E1 Alguna vez llegaremos, Alguna vez seremos, Alguna vez viviremos.I

I

Asi sea. IVArroje a1 mar el polie soberbio, lo arrastr6. Mas, iquk eres tfi? Tus olas de miseria, tu: tus salones desiertos d c iquk son?... Tan irreale como queriendo expul: Tus conos transparent en donde un ciego mismo se adelgazaria; y las llanuras que derramas con sal y con E s610 son un espejo de alternados vacios: y el tiempo desmenuzado en gotas jam& se j r L - . cada instante maldito a1 mar incomunica.99

Mas solos, mas despojados son tus abismos que las planicies duras del poliedro embustero que quieres despreciar. La campana instanthnea bate en la soledad, y cuando sobre la arista efimera de las olas ruedan tus multitudes de agua ausente, ya nada existe sin0 estremecimiento vasto, de vapor azulado por la inasible infinitud. iVanidad de vanidades, eres el mar! Suspensibn de hilos huecos, rapidamente urdidos. Sal que cose y cose nada, rebanadas de brbitas, ambitos sin substancia ni cuenco: pur0 perfil: ihi no me engafias! Tus coronas, tus lenguas, tus destellos convulsos, llagas son de infinita, tormentosa distancia. Tus freneticos filos, tus delirantes actos de inmodestia iqu6 son? iMenguadas lineas! Y lo que nos ahoga no es el agua, es el vacio que en ti acecha gota a gota entre ola y ola (la linea nada y nada, conjugando incesi verbo incansable sin persona que lo hab iPor qu6 extremas tu convulsibn, tu cblera? iAcaso no comprendes? El beso es firme. Los labios, de vapor. La mano es una nube. Muere en cada caricia. Las lagrimas son blandas. El llanto es duro. iDelgado el aire y sblidos 10s dias! Hay noches en que creo oirte 111 hay dias en que creo oirte reir . iIlusibn! La risa y el llanto vagan sobre ti como una idea brumosa sin poder posarse en el rostro de un demente. Tus lagrimas no se juntan con el llanto; tus dientes no alcanzan la risa: iOh, mar inacabado! Contigo quiero cruzar el it^, mar, llevado

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sobre otras aguas!) iRostro sin rostro, vamos! Tambi6n el hueco ardiente del sol espera a1 sol. No temas: la culpa es nuestra. El mundo es dos labios distantes. iNunca nadie ha besado! Imagen del hombre, imagen desierta, mar, tG como yo, atin no tienes nada. LEn d6nde estas, Nada rugiente? iMar: haces falta! Soy como tu: lugar inhabitado Soy como t u lesi6n horrible. Tu, como yo, qu6 loca lejania. _. - 'l'u comc yo, con la mitad a1 otro lado, yentu! )auta vacia, la musica posible.

TU comc yo, tal vez, por fin, seremos. LRecobriaremos el Verdadero Rostro? LRescataremos la Realidad perdida?Te lo prc)meto, mar. iPero no volveremos!

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Venus en el Dudrideroe"

a la venida del sol, mientras un principe danza en \rispera de su coronacih? yo I$enso en el gusano. iOis podrirse 10s duraznos en el granero, a1 atardecer, mientras las fechas del reino caen de 10s tronos y el viento las amontona, las dispersa y olvida?yo I

A1 vu1 uc uci puLu, 5 uaai tu y aii iai L L c , 10s dos punteros del reloj. El agua est5 vacia y la amada es un torrente de mil rostros despefiados. Ambos sedientos, un sol varonil frente a1 otro sol, tambi6n varonil,

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Chile, 1960. 'Pudridero: CBmara en que se depositan 10s cadiveres de 10s reyes, en el Escorial, antes de ser trasladados a su sepultura tiltima.

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Llegan carretas rebosantes de frutas maduras, se despiden 10s ancianos, las rakes quedan en acecho a1 sol de la espera, se acumulan 10s hechos. NiAo, niAo mio, nombrame sin pestahear, en un segundo, las dinastias reinantes -siglos, siglos-, 10s monarcas desgajados. Abuelo, abuelo, n6mbrame siglos sin pestafiear, en un instante, antes que el ruisefior concluya la nota de su silbo. jQui6n osa alzar el Tarot vertiginoso? Todas las fechas est6n prontas, o marchitas, como nunca nacidas. NiAo y anciano, en este instante ten6is la misma edad: solo un instante: jno hab6is empezado?, jhab6is terminado? iA qu6 pensar en el gusano! El rey que tom6 la cii y con ella hizo una ai dej6 el horror, dej6 el las virgenes violadas estan vivas, las viudas maldicen. El rey muri6. Un muerto es el culpable. El diab6lico motorista que en carruaje veloz cruz6 la calle sin raz6n aparente, a un chico dejt) inv6lidl0,a una novia le quebr6 la columna. El motorista ha muertcb. A 6 se debe este mundo. 1 Maravill