El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El...

6
'* SECCIÓN DOLOR " Rev. Col Anest. 26: 377, 1998 El arte ritual de la muerte niña Dr. Tiberio Álvarez* En la escatología cristiana los niños que mueren bauti- zados antes del uso de razón son considerados angeli- tos. En ellos los rituales convierten la tristeza en ale- gría, festejan la entrada al cielo y perpetúan la memo- ria del fallecido entre los sobrevivientes. INTRODUCCIÓN El ser humano no sobrevive el mundo conocido. Cree que después de la muerte tendrá otra vida glo- riosa o tormentosa según los parámetros cultura- les. Esta creencia ha marcado su manera de vivir. El cielo se alcanza, según la prédica, por la fe, la santidad, el ritual, el poder, el martirio, la virgini- dad, la valentía en batalla o la muerte en la niñez. Puede vislumbrarse en visiones, trances y éxtasis. El presente artículo se refiere a la escatología de las postrimerías, los rítuales fúnebres de los niños y la sublimación artística del trance mortal. En la esca- tología cristiana los niños que mueren bautizados antes del uso de razón son considerados angelitos, en ellos los rituales convierten la tristeza en ale- gría, festejan la entrada al cielo y perpetúan la me- moria del fallecido entre los sobrevivientes. El títu- lo está basado en un fragmento de un poema "Muer- te sin fm", de José Gorostiza: .Para durar el tiempo I de una muerte gratuita y prematura, pero bella (...) / cumple una edad amarga de silencios / y un reposo gentil de muerte niña, / sonriente, que desflora / una más allá de pájaros en desbandada». LA OTRA VIDA La creencia en otra vida después de la muerte se deduce de estudiar las costumbres funerarias. Des- cubrimientos arqueológicos recientes en Shanidar, Profesor del Servicio de Anestesiologíay Reanimación, Uni- versidad de Antioquia- Medellín, Colombia, S.A. Ilustraciones de Libia Pisada Restrepo, Tomado de la Revis- ta Universidad de Antioquía, 24 p. Irak, muestran que los muertos eran enterrados ceremoniosamente desde hace sesenta mil años. En las tumbas se han encontrado herramientas, ar- mas, vestidos, juguetes y evidencia de flores. Los egipcios, los chinos y otros pueblos colocaron en las tumbas alimentos, joyas, monedas, máscaras, oraciones, guías, instrucciones, himnos y plegarias pues creían que la persona continuaba su existen- cia después de la muerte y tendría las mismas ne- cesidades que en vida. Además de la momificación como práctica religíosa y mágica, los egipcios escri- bían peticiones y declaraciones de inocencia que el muerto debía recitar antes de ser juzgado: .No he causado dolor a los hombres y a las bestias, inju- riado a los dioses, adivinado el futuro, asesinado, engañado, interferido los diques del agua, cometi- do abusos sexuales...». Creían que la preservación del cuerpo era indispensable para gozar las delicias placenteras de la otra vida. Fueron los primeros en establecer el juicio en el momento de la muerte. Los cristianos han sostenido que Dios envió a su Hijo al mundo para salvar a los hombres del demo- nio y la muerte y dar eterna felicidad a sus fieles. Esperan la segunda venida de Cristo quien estable- cería el Reino de Dios y se preguntaron por el des- tino de los creyentes que muríeran antes de su re- torno glorioso. Al principio se dijo que su muerte no era eterna. Luego se predicó que la estadía en este mundo era preparación para la otra vida. Se ense- ñó que los mártires y los santos iban directamente al cielo y los no creyentes malos al infierno. Para ni buenos ni malos se ideó el purgatorío, un lugar de expiación. Los niños que murieran antes de ser bautizados y no hubieran cometido pecado salvo el .pecado original» iban al limbo, un lugar sin las tor- turas del infierno y sin las delicias del cielo, donde iban también los paganos virtuosos que murieron antes de Cristo. Se habló de un juicio individual al momento de morir y de un juicio universal al final de los tiempos, cuando al sonar de la trompeta, se- gún el Apocalipsis, aparecería Crísto en Majestad, 377

Transcript of El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El...

Page 1: El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587 pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición del ... El

'*

SECCIÓN DOLOR"

Rev. Col Anest. 26: 377, 1998

El arte ritual de la muerte niña

Dr. Tiberio Álvarez*

En la escatología cristiana los niños que mueren bauti-zados antes del uso de razón son considerados angeli-tos. En ellos los rituales convierten la tristeza en ale-gría, festejan la entrada al cielo y perpetúan la memo-ria del fallecido entre los sobrevivientes.

INTRODUCCIÓN

El ser humano no sobrevive el mundo conocido.

Cree que después de la muerte tendrá otra vida glo-riosa o tormentosa según los parámetros cultura-les. Esta creencia ha marcado su manera de vivir.El cielo se alcanza, según la prédica, por la fe, lasantidad, el ritual, el poder, el martirio, la virgini-dad, la valentía en batalla o la muerte en la niñez.Puede vislumbrarse en visiones, trances y éxtasis.El presente artículo se refiere a la escatología de laspostrimerías, los rítuales fúnebres de los niños y lasublimación artística del trance mortal. En la esca-tología cristiana los niños que mueren bautizadosantes del uso de razón son considerados angelitos,en ellos los rituales convierten la tristeza en ale-

gría, festejan la entrada al cielo y perpetúan la me-moria del fallecido entre los sobrevivientes. El títu-lo está basado en un fragmento de un poema "Muer-te sin fm", de José Gorostiza: .Para durar el tiempoI de una muerte gratuita y prematura, pero bella(...) / cumple una edad amarga de silencios / y unreposo gentil de muerte niña, / sonriente, quedesflora / una más allá de pájaros en desbandada».

LA OTRA VIDA

La creencia en otra vida después de la muerte sededuce de estudiar las costumbres funerarias. Des-cubrimientos arqueológicos recientes en Shanidar,

Profesor del Servicio de Anestesiologíay Reanimación, Uni-versidad de Antioquia- Medellín, Colombia, S.A.Ilustraciones de Libia Pisada Restrepo, Tomado de la Revis-ta Universidad de Antioquía, 24 p.

Irak, muestran que los muertos eran enterradosceremoniosamente desde hace sesenta mil años. Enlas tumbas se han encontrado herramientas, ar-mas, vestidos, juguetes y evidencia de flores. Losegipcios, los chinos y otros pueblos colocaron enlas tumbas alimentos, joyas, monedas, máscaras,oraciones, guías, instrucciones, himnos y plegariaspues creían que la persona continuaba su existen-cia después de la muerte y tendría las mismas ne-cesidades que en vida. Además de la momificacióncomo práctica religíosa y mágica, los egipcios escri-bían peticiones y declaraciones de inocencia que elmuerto debía recitar antes de ser juzgado: .No hecausado dolor a los hombres y a las bestias, inju-riado a los dioses, adivinado el futuro, asesinado,engañado, interferido los diques del agua, cometi-do abusos sexuales...». Creían que la preservacióndel cuerpo era indispensable para gozar las deliciasplacenteras de la otra vida. Fueron los primeros enestablecer el juicio en el momento de la muerte.

Los cristianos han sostenido que Dios envió a suHijo al mundo para salvar a los hombres del demo-nio y la muerte y dar eterna felicidad a sus fieles.Esperan la segunda venida de Cristo quien estable-cería el Reino de Dios y se preguntaron por el des-tino de los creyentes que muríeran antes de su re-torno glorioso. Al principio se dijo que su muerte noera eterna. Luego se predicó que la estadía en estemundo era preparación para la otra vida. Se ense-ñó que los mártires y los santos iban directamenteal cielo y los no creyentes malos al infierno. Para nibuenos ni malos se ideó el purgatorío, un lugar deexpiación. Los niños que murieran antes de serbautizados y no hubieran cometido pecado salvo el.pecado original» iban al limbo, un lugar sin las tor-turas del infierno y sin las delicias del cielo, dondeiban también los paganos virtuosos que murieronantes de Cristo. Se habló de un juicio individual almomento de morir y de un juicio universal al finalde los tiempos, cuando al sonar de la trompeta, se-gún el Apocalipsis, aparecería Crísto en Majestad,

377

Page 2: El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587 pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición del ... El

Alvorez1:

entre las nubes, al tiempo que todos los fallecidosretornarían sus cuerpos para ser juzgados.

La representación de la muerte, la condenacióneterna y el infierno obsesionaron de tal manera alo'fhombres de los siglos XIV al XVI que considera-ron la vida vanidosa, horrorosa, espantosa yfrenéticamente destructiva1. Una forma de repre-sentar estos temores fue la danza macabra, temapopular en la poesía, el teatro, la pintura, las artesgráficas y en las miniaturas de los llamados -librosde las horas». La danza macabra hizo pensar en lamuerte a los despreocupados de la salvación. Tam-bién se publicaron tratados sobre el arte del bienmorir llamados Arts Bene Moriendi o Ars Moriendi,con grabados sobre la agonía y la muerte donde semostraba cómo las cortes celestiales e infernales sedisputaban el alma del recién fallecido. En los mo-saicos de las iglesias se mostró, en la parte supe-rior, a Cristo triunfante en su gloria, con ángeles,patriarcas, profetas, apóstoles y la Virgen Maríacompartiendo las delicias de la presencia de Dios.Abajo, los condenados son mostrados cuando reci-ben las torturas del infiern02.

LA MUERTE Y LOS NIÑOS

El niño muerto fue objeto de culto en las dife-rentes culturas. Se les enterraba con sonajeros debarro, columpios, balancines, pelotas de trapo yarmas de madera3. En Egipto se colocaba a lasmomias una máscara con el retrato. En Grecia yRoma se colocaban envolturas con motivos infanti-les. Desde la Edad Media, además de monumentosfunerarios se colocan epitafios con notas biográfi-cas y frases que expresan la pesadumbre y el deseode perpetuar la memoria del niño muerto. -Ve, tomatu lugar en el coro celestial. Dios te llama. Necesitaotro ángel».

En la tradición cristiana los rituales de mayortrascendencia son el bautismo y la extremaunción.En el caso de los niños, los rituales son diferentes.Por su inocencia y gracia tienen derecho a entrardirectamente al reino de los cielos. Por eso su muerteno debe ser motivo de tristeza sino de alegria. «...en los oficios de párvulos, es decir, en los que hanmuerto después de recibido el bautismo y antes deluso de la razón, o no se toquen campanas o se hagade modo festivo y no lúgubre. Además, vestido elcadáver conforme a la edad y sexo, se ponen sobreél las coronas de flores o de hierbas odoriferas4. -Elcolor litúrgico debe ser festivo y pascual»5. Las ora-ciones, cortas y escasas, varian si murió bautizado,-Te encomendamos, Señor... para que 10 lleves alparaiso donde no hay llanto, ni lágrimas ni dolorsino paz y alegria...» o no bautizado, -Te pedimos,378

.Señor, por la intercesión de la Bienaventurada Vir-gen María, que así como acompañó a su Hijo almorir, asista también a los afligidos padres por lamuerte de..., los consuele en la fe y les dé la espe-ranza del premio».

Si el niño muere después del bautismo y antesde tener uso de razón se llama párvulo o -angelito»pues es puro, está libre de pecado original y tieneentrada al Paraíso. Esta creencia se basa, posible-mente, en las palabras del Evangelio: -En verdados digo, quien no reciba el reino de Dios como unniño, no entrará en él» (Marcos, 10, 13-16). Si elniño muere antes de ser bautizado su destino finales el limbo, -el sitio de los suspiros y no de los la-mentos» como 10 describió Dante. Para los adultosestaban reservados los novísimos o postrimerías:muerte, juicio, infierno y gloria que deberían serrecordados continuamente para evitar caer en elpecado. De esta manera el hombre reflexionabasobre la muerte, se preparaba para enfrentarla yverla con otro sentido. Los novísimos le enseñabanal creyente 10 que sucedería después de la muertecuando su alma fuera juzgada. Recordar losnovísimos le evitaba pecar y ser condenado. Tam-bién se enseñaba 10 relacionado con la extremaun-ción, un mecanismo capaz de proporcionar al mori-bundo la suficiente confianza para el paso que da-ría, alejarle la aflicción por la muerte, liberarlo desus pecados y brindarle los recursos para su salva-ción6. Los -angelitos» por su condición de pureza norequerían la extremaunción y no estaban someti-dos a los vaivenes de las postrimerías. Ellos entra-ban directamente al cielo. Para ellos no se escribie-ron las Ars Moriendi, donde estaban las guías paravencer las acechanzas del demonio en el trance dela agonía, morir de buena muerte y alcanzar la glo-ria celestial. Las acechanzas del demonio eran cin-co: las dudas de la fe, la mala conciencia, ese «abo-minable animal», según Lutero, el apego a las ri-quezas, la desesperación por los sufrimientos y lasoberbia al enorgullecerse de la virtud2.

EL RETRATO DE LOS NIÑOS

Las imágenes de niños ejercen gran atracción.Su fragilidad, delicadeza, dulzura, fineza de líneas,expresión inocente y tímida impresionan sobre todocuando están realzadas por el arte. Hacen parte denuestra intimidad. El retrato de los niños en el arteempieza en Italia en los siglos XV y XVI con las Sa-gradas familias y otros cuadros religiosos donde elNiño Jesús aparece sólo o rodeado de ángeles, loscuales a pesar del colorido y pureza de formas man-tienen una actitud grave y mística que los aleja delverdadero espíritu infantil. En Inglaterra y Francia

Page 3: El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587 pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición del ... El

se retrataron niños de la nobleza. En España losartistas se dedicaron a temas religiosos pues con-sideraban el retrato tema menor aunque en la es-cultura la silueta de la infancia se representó como~wo Jesús o elemento decorativo en monumen-tos, altares o retablos. Quizá la primera imagen dela figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición delentierro del Conde de Orgaz. Alfonso SánchezCoello pintó retratos infantiles con cierta rigidez,tristeza y actitud hierática como se observa en el«Príncipe Don Carlos» pintado a la edad de doceaños con figura alargada, palidez de cera,exoftalmia izquierda y expresión melancólica queindica un ser enfermo. Pantoja de la Cruz yBartolomé González con figuras rígidas y místicasornamentaron sus niños con animales para preve-nir enfermedades y embrujamientos. En el cuadrode la Infanta Ana de Austria, Pantoja de la Cruzpinta alfileres, sonajeros y amuleto s en la cintura.El retrato de Ferdinando de Austria, de BartoloméGonzález, tiene un pájaro en la mano, amuleto s yuna campanilla. Se creyó en la acción profilácticade los amuletos. Por ejemplo, la mano cerrada conel pulgar pasando entre el índice y el dedo mayorevita el mal de ojo, la uña de la gran bestia previe-ne la erisipela, los dientes facilitan la dentición,las medias lunas evitan los aires deletéreos, lascastañas marinas preservan de envidia y tumores,los cristales alejan las enfermedades de la vista ylas campanillas, los malos espíritus 7.

EL RETRATO DE NIÑOS MUERTOS YEL CULTO MARIANO

No fue común el retrato de niños muertos en

España. Sin embargo, muchas de las pinturas dela nobleza mostraban niños enfermos que moriríanpronto. Tampoco fueron comunes en América Lati-na, salvo en México. El arte funerario infantil estáíntimamente relacionado con la iconografia estable-cida para la Virgen durante su muerte o dormicióny la Asunción. Esto 10 sintetizó Jacobo de Vorágine,obispo y escritor exponente del influjo protoe-vangélico en el occidente medioeval. Su texto, laLeyenda Aurea (siglo XIII) suministró abundantematerial de inspiración para decoradores de igle-sias y escritores místicos y fomentó el cultomarianos. Si bien es cierto que la devoción a la Vir-gen María había empezado en el siglo VII cuandoSan Idelfonso, Obispo de Toledo, estableció el cultode la Inmaculada Concepción y se había tenido untradición cultural en este sentido, por 10 menos enEspaña, fue tomada más tarde como bandera dereligiosidad nacional en la Contrarreforma. En 1654

Arie ritual de la muerie niña.

el papa Alejandro VII, a pedido de Felipe V, concedeel patronato de la Inmaculada Concepción sobretodos los reinos españoles. Este movimiento inspi-ró muchos pintores en el tema de la Inmaculada.En América Latina muchos pintores fueron influi-dos por esta temática. Desde la Colonia se empeza-ron a utilizar jaculatorias que mostraban la influen-cia del culto mariano: «¡Ah Ave María Purísima sinpecado concebida!». El movimiento eucarístico y elmaríológico se formaron en la corriente misma dela Contrarreforma para reparar las injurias de laReforma hacia el Santísimo Sacramento y la VirgenMaria9. La arquitectura gótica con sus vitrales ex-presó el sentimiento religioso e impulsó esta devo-ción. Ya la Virgen no tendrá la Majestad Impasiblesino que es una madre sonriente, dulce, que con-templa con amor a su hijo. Es común que su figuraaparezca rodeada de ángeles que cantan o tocaninstrumentos como el laúd, el arpa, el salterio, elórgano portátil, la flauta traversa, la doble trompa,la cornamusa, la viola 10.

LA LEYENDA AUREA

Jacobo Vorágine basó su Leyenda en un evange-lio apócrifo atribuido a San Juan Evangelista. Des-cribe que cuando la Virgen sintió viva añoranza porsu Hijo y deseó reunirse con él, se le apareció unángel, envuelto en luminosas claridades, que leanunció la muerte: «Dios te salve, María... te traigodesde el Paraiso este ramo de palma para que seacolocado sobre tu féretro». La palma era una espe-cie de ramo formado por una vara verde cuyas ho-jas fulgurante s y esplendentes brillaban como ellucero de la mañana. La palma, atributo de los ele-gidos por Dios, entre ellos la Virgen y San José,tiene su fundamento en la creencia del Paraiso comoun oasis poblado de palmeras. Antes de morir, enpresencia de los apóstoles que fueron transporta-dos en nubes desde sus lugares de trabajo, la Vir-gen le pidió a Juan que la palma entregada por elángel fuera llevada por alguien delante del féretro.Juan les advirtió que ante la muerte de María mos-traran fortaleza, dominaran los sentimientos y nolloraran porque si los viesen entregados al naturaldolor, se extrañarían y dudarían de la resurrecciónprometida a los creyentes.

Agrega Vorágine que hacia la tercera hora de lanoche llegó Jesús acompañado de las diferentesórdenes de ángeles, los grupos de los profetas, losejércitos de los mártires, las legiones de los confe-sores, los coros de las vírgenes y se situaron orde-nadamente ante el trono de la Santa Madre y em-pezaron a cantar dulcísimos himnos. Una vez Je-sús llamó a su madre y ésta le contestó que estaba

Page 4: El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587 pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición del ... El

Alvarez1:

preparada, el cortejo entonó: -He aquí una mujerque jamás mancilló su tálamo con deleites sensua-les; por eso recibirá como recompensa el premioreservado a las almas santas». Luego el coro cantala ~tifona -Ven desde el Líbano, esposa mía; vendesde el Líbano, que vas a ser coronada». En aquelmomento el alma de la Virgen salió de su cuerpo yvoló a la eternidad en brazos de su Hijo. Su muertese produjo sin dolor, sin gloria y sin nada de cuantohace penoso y triste morir. Cristo emprendió con elalma de su madre, el viaje hacia la Gloria, rodeadode infinidad de rosas rojas, es decir, de una multi-tud de mártires, y de una innumerable cantidad deazucenas, porque azucenas parecían los ejércitosde los ángeles, de los confesores y de las vírgenesque le daban escolta. A los tres días de sepultada,la Virgen fue resucitada por Cristo, quien le infun-dió nuevamente el alma para evitar la corrupción yentrar al ciel08.

LA PINTURA DE LOS ANGELITOS

Como recuerda Gutiérrez Aceves, una serie deafinidades, semejanzas y simetrias hacen patentela asimilación del discurso de la muerte infantil alde la Virgen. Las muertes son tránsito directo a lagloria sin las penalidades de las postrimerias. LaVirgen Madre es consuelo de las que pierden unhijo pues como perdió el suyo en aras de la Reden-ción así las madres cuando pierden sus hijos danángeles al cielo. Además, como Maria es interceso-ra a la hora de la muerte, los angelitos también seconvierten en mediadores. Los recursos simbólicosson los mismos: la corona tiene el significado dealma justa, la palma alude al triunfo sobre la muer-te y la virginidad de sus portadores. La prohibiciónde llorar expresa en ambos casos la creencia en laresurrección. También la música tiene significadoespecial porque cuando vino el cortejo celestial porla Virgen -empezaron a cantar dulcísimos himnos».Hay todo un simbolismo espiritual y edificante. Así,la Virgen y los angelitos se vuelven modelos espiri-tuales e infunden sentimientos piadosos a los cre-yentes cristianos que buscan la salvación eterna.

El temor a la muerte se aprovechó para preconi-zar el culto a María y a los ángelitos como interce-sores celestiales. A las niñas se les amortajaba comola lnmaculada ya los niños como San José. Todoesto fue obra de la Contrarreforma, que exaltó elculto a la Virgen para defenderla de las ideasreformistas que no aceptaban su virginidad eInmaculada Concepción. Los pasajes de la Virgenaunque no figuran en los textos apostólicos, eranapropiados para reflexionar sobre la muerte, laresurección y la forma de alcanzar la vida eterna.Durante los siglos XVI y XVIII la iglesia católica his-

380

.panoamericana articuló el discurso teológico sobrela muerte con características de amonestación yexhortación, como lo constatan las obras pictóricasy literarias. En este sentido fueron muy importan-tes las siguientes obras: La Cátedra de Morir, Pun-tos para la lección del último instante, de Diego deTorres (España 1724), La portentosa vida de laMuerte, emperatriz de los sepulcros, Vengadora delos agravios del Altisimo, y muy Señora de la hu-mana naturaleza, de fray Joaquín de Bolaños (Méxi-co 1792). En Colombia el pensamiento católico par-tió de las decisiones del Concilio de Trento, y de loslibros Partida a la eternidad y preparación para lamuerte, de Iván Eusebio Nieremberg (Madrid 1645).Dulzuras en el morir, motivadas del amor de Dios yde las culpas, sacadas de los evangelios, profetas yde muchos santos, de Miguel de Meca Bobadilla(Madrid 1671). Luz a los vivos y escarmiento a losmuertos, de Juan de Palafox y Mendoza (Madrid1672), así como el Catecismo de los pueblos Ripalday Astete (Madrid 1800). También se publicó y reco-mendó el novenario titulado El Ejercicio cristianopara conseguir una buena muerte, por consiguien-te la salvación eterna, el cual deberá hacerse todoslos viernes a la hora en que expiró el redentor delmundo (Bogotá, 1883).

Los artistas pintaron el tema de la Virgen y losangelitos. Pero es en México donde se popularizóesta temática. Se mencionan artistas como JuanCorrea, José de Ibarra, Miguel Cabrera y MiguelGerónimo Zendejas. La constante en sus pinturases la tranquilidad con que la virgen recibe su muer-te 10 que constituye La Dormición. Los símbolosestán presentes como la palma y la corona. Cuandopintan a los niños muertos 10 hacen como si fueranadultos empequeñecidos, con dignidad, reflejandosu condición arístocrática. En ocasiones los pintanvivos, de pie, con los ojos abiertos. Se sabe que es-tán muertos por la leyenda de su deceso, la rosa enla mano y la mirada sin brillo. A veces no hay cohe-rencia entre la edad real y aquella con la que 10representan. En ocasiones la imagen se reduce a 10esencial, al rostro. Modernamente se ha seguido estatradición cultural con artistas como Frida Kahlo,Siqueiros, Ledesma, OIga Costa y Reyes Ferreira.En Colombia, artistas como Fernando Botero, quienplasmó en la pintura y en la escultura a su hijomuerto, y Alfonso Quijano, Carlos Granada y Au-gusto Rendón, entre otros, cuyo arte es testimoniode la muerte violenta de los niños colombianos.

LOS RITUALES

Los rituales, que atestiguan la muerte, alivian laaflicción y permiten seguir la lucha en la vida, tie-nen una secuencia. Cuando el niño va a morir se

Page 5: El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587 pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición del ... El

llama a los padrinos de bautismo para que lo amor-tajen, coronen y corran con los gastos. El pequeñodifunto es vestido de Inmaculada Concepción, si esniña; de San José o Sagrado Corazón, si es hom-Qre. En la mano se les coloca una palmita de aza-har o una vara de nardos y azucenas. Con esto serefleja su pureza e inocencia. Se recuerda el Paraí-so, o mejor, el Edén, un lugar cerrado donde reinanla paz y el amor y que es refugio para el alma des-pués de la muerte. El .Jardín encerrado» es uno delos titulos de la Virgen Maria, llamada también .LaRosa sin espinas», .La Rosa del amor», la .segundaEva». Su jardín, el segundo edén, es un paraíso derosas. Las blancas reflejan la pureza y las rojas laperfección2. Las lilas también simbolizan lainmaculada concepción.

El niño muerto se coloca sobre una mesa cu-bierta con sábana o mantel blancos. Además conmantas y flores. Luego se coloca la corona de aza-hares sobre la cabeza del niño. Durante el veloriolas únicas oraciones que se cantan son las alaban-zas o plegarias a Maria. .Belleza: Buenos días, pa-loma blanca / hoy te vengo a saludar/admirandotu belleza/ en tu reino celestial...»ll.

Se ofrece a los visitantes café, bebidas aromáti-cas y comestibles. Al día siguiente, en pequeño yblanco ataúd, adomado con cintas y festones, elniño es llevado al cementerio. No requiere serviciosfunerales en la iglesia. En algunos sitios el desfilees silencioso. En otros, en medio del jolgorio, concantos y música. En México, los mariachis cantancanciones como el Sueño de un ángel, Viva mi des-gracia, morir soñando... En Colombia, André des-cribe .con el corazón oprimido» el entierro de unniño de Pasto: .el cual descansaba con el féretroabierto, guarnecido de oropel, con escarapelas decolor, flores artificiales y llevado por cuatro de suscompañeros al son de una música alegre, que pare-cía insultar la calma y serenidad de la muerte, conun cometín de pistón, un oficleide, una flauta, unbombo y unos timbales que componían la deplora-ble orquesta que marchaba a la cabeza del cortejo,seguida de una cruz, luego dos muchachos dispa-rando cohetes en señal de alegria; tres curas reves-tidos de casullas y bonete, y por último los padresde los deudos del difunto con vistosos trajes. Tal esla costumbre, no lloran la pérdida del hijo, cele-bran la entrada de un ángel al cielO»12.Durante elentierro se cantan canciones de despedida y rezanoraciones especiales o .despedimento» de angelitos..Dichoso de ti, Angel Bello,/ que a la gloria vas aentrar / con tu palma y una corona/ y vestido decristal... / ».

Cada año se celebran los rituales recordatorios.El día primero de noviembre es el día de los angeli-tos. El dos es de los difuntos.

. Arle ritual de la muerle niña

LA FOTOGRAFÍA DE LOS ANGELITOS

Antes de la invención de la fotografia era frecuen-te, entre las clases pudientes, hacer el retrato delniño muerto. Después de 1839, con la llegada de lafotografia, el retrato fue común y dio oportunidad alas clases pobres de tener el recuerdo tangible delniño desaparecido, que quedará en la memoria hastael reencuentro final en la otra vida. En Colombia, lafotografia de difuntos, especialmente de niños, estradicional desde 1848. Se recuerdan los fotógrafosDemetrio Paredes, en Bogotá, Melitón Rodriguez yBenjamín de la Calle, en Medellin, éste último .unexponente inspirado y capaz de sacarle partido poé-tico»13. Los fotógrafos pueblerino s eran quienes mástrabajo funerario tenían con los niños muertos.Recuerdo a mi padre, maestro de escuela en unapequeña población del norte de Antioquia, Colom-bia, quien a la vez con su pequeña cámara de fue-lle, comprada a un alemán que se aventuró por esosparajes durante la segunda guerra mundial, se con-virtió en el fotógrafo del pueblo y retrató a muchosniños muertos. Aún hubo médicos, como el Dr.Justiniano Turizo, quien después de luchar paraque el niño no muriera lo fotografiaba una vez seconvertía en ángel. Fue médico y fotógrafo rural enlos pueblos del oriente de Antioquia. En México sonconocidas las de Juan de Dios Machain a finalesdel siglo XIX y comienzos del XX.

La fotografía, como parte del ritual, expresa laaspiración a la vida trascendente. El .angelito» seconvierte en modelo para los vivos y mediador enel cielo. .Tengo un angelito en el cielo» se oye de-cir con frecuencia. De mis recuerdos de amane-cer en casas de pueblos son los insomnios causa-dos por contemplar desde la cama las fotografíasen tamaño gigante de niños muertos colgados enla pared. Esa imagen conservada con piedad yrespeto es la constancia de la entrada de un nue-vo ángel al cielo. La fotografía es catarsis ante lapérdida del hijo. Fija la memoria en el recuerdo,constate el ascenso al cielo y proporciona el con-suelo necesario para seguir en la vida. El niñomuere pero la vida continúa. Las fotografias mues-tran al niño con los atributos que lo distinguían,solos o acompañados por los padres o los padri-nos con la familia. No son fotografías artísticas,solo excepciones. No tienen alardes técnicos. Sóloel aplomo y solemnidad con que los acompañan-tes ven el objetivo de la cámara, la ternura conque miran al pequeño y el lazo afectivo que losune. .Se establece un juego de miradas que dela-ta el pathos de estos hombres... esos retratos seconstituyen en verdaderas imágenes escatológicaspues su motivación principal no es individualizar

381

Page 6: El arte ritual de la muerte niña - artecolonialarte+ritual+de+la...la figura infantil la inicia El Greca cuando en 1587 pintó a su hijo Jorge Manuel en la composición del ... El

Alvarez1:

a los retratados sino captarlos en un gesto queretiene la tesitura ante la muerte como un acto querenueva la vida~.ll

,ff.. COLOFÓN

Los rituales fúnebres infantiles simbolizan lapureza libre de pecado, el tránsito a una vida in-

BIBLIOGRAFIA

.mortal, la advocación a la Virgen Inmaculada, laconversión de persona en ángel, la alegria por tenera alguien en el cielo, la ausencia de sufrimiento fi-sico y el no afrontamiento de las postrimerías y lasacechanzas del demonio. «El funeral tiene qu<::en-tenderse en términos de este desenlace dramático:Los muertos se han apartado para siempre de lacomunidad de los viVOS~14.

1. Westhein P. La Calavera. México, Fondo de Cultura Econó-mica, 1992, 90 p.

Cavendish Richard. Visions of Heaven and Hell. New York,Harmony Books, 1977, 128 p.

Genta MG. -Historia de la pediatria y la puericultura., enCorrea J.A. Gómez FF y Posada 1. Fundamentos de Pedia-tría. Medellín, Corporación para Investigaciones Biológicas,Medellín, 1994, 22-28.

Solá Sé Daniel. Curso práctico de liturgia. Valladolid, Talle-res tipográficos Cuesta, 1919.

Ritual de exequias según el Concilio Vaticano II y aprobadopor el Episcopado colombiano. Bogotá, 1971.

Vargas PO ME, Cogollos S. -La teologia de la muerte». Unavisión española durante los siglos XVI al XVII en: Borja J.H. Inquisición, muerte y sexualidad en la Nueva Granada.Bogotá, Ariel- Ceja 1905,117-148.

2.

3.

4.

5.

6.

382

González Alvarez. Les Enfants du musée de Prado. Paris,Medicine de France, 1952,31: 17-32.

Otero Aurelio de Santos. Los evangelios apócrifos. Madrid,Biblioteca de autores cristianos, 1973.

René Laurentin. La cuestión Mariana. Madrid, Taurus, 1964,216 p.

10. Deschamps Paul. Les musees des monuments Fran¡;ais auPalais de Chaillot. Medicine de France. París, 1958, 93: 17-32.

7.

8.

9.

11. André E. -Imágenes de la inocencia etema». Artes de Méxi-co, 1992, 15: 27-49.

12. André E. -Viaje a la América equinoccial». Barcelona, 1984.

13. Serrano Eduardo. Historia de lafotografia en Colombia. Bo-gotá, Museo de Arte Modemo, 1983, 333 p.

14. Fulton R. El funeral en Fulton R. Markusen E. Owen G Sheiberé La Muerte y El Morir. Puerto Rico, 1981. 252-256.