el brazo! - Dr. Badia

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Redacción: Manuel Coronado “¡Ay!”, fue el grito que calló a toda las personas en la piscina. El golpe de una brazada en el borde de cemento fue el detonante del dolor más inso- portable que Jaime Delso, triatlonista, ha sufrido. El impacto fue tal que el hombro se desprendió y Delso tuvo que ser trasladado de emergencia al hospital. Como cada vez que se dislocaba el hombro, a Jaime le aplicaron el método de “la silla”, el cual consiste en sentar al paciente en una silla y jalar el brazo para volverlo a montar. Pero esta vez no fue su- ficiente para que la extremidad de Jaime volviera a su lugar habitual. Tras varios exámenes, la única solución fue operar. Como las operaciones de hombro son inusuales, existen pocos espe- cialistas en está área. Uno de los ellos es el médico Alejandro Badia, especialista en cirugías de mano y extremidades superiores, fundador y di- rector médico del “Badia Hand to Shoulder Center”, Doral, Florida, Estados Unidos. Para quien el desarrollo de diferentes técnicas hace que cada vez sea más fácil el reconstruir u operar por medio de la artroscopia. “En el 2005, participé en el Ironman de Florida. Quedé en un lugar importante de entre mis compañeros centroamericanos. Pero desde un tiempo para acá, sentía un cosquilleo en el hombro al agarrar la manivela de la bicicleta, y que cada vez se hacía más molesto. El hielo era la mejor cura, pero con el tiempo ya ni el hielo hacía efecto”, contó Delso. Después le ocurrió el accidente y, según el médico, fue lo que dejó ver una lesión dormida. Según Badia, el cosquilleo es el principal síntoma de que hay algo mal, ya que el cuerpo avisa que está a punto de colapsar. La cirugía evoluciona y logra mejorar la recuperación en las lesiones de las extremidades superiores. ¡Cuidado con el brazo! 66 ejercicio y salud • www.revistaes.com salud

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Redacción: Manuel Coronado

“¡Ay!”, fue el grito que calló a toda las personas en la piscina. El golpe de una brazada en el borde de cemento fue el detonante del dolor más inso-

portable que Jaime Delso, triatlonista, ha sufrido. El impacto fue tal que el hombro se desprendió y Delso

tuvo que ser trasladado de emergencia al hospital.

Como cada vez que se dislocaba el hombro, a Jaime le aplicaron el método de “la silla”, el cual consiste en sentar al paciente en una

silla y jalar el brazo para volverlo a montar. Pero esta vez no fue su-ficiente para que la extremidad de Jaime volviera a su lugar habitual. Tras varios exámenes, la única solución fue operar.

Como las operaciones de hombro son inusuales, existen pocos espe-cialistas en está área. Uno de los ellos es el médico Alejandro Badia,

especialista en cirugías de mano y extremidades superiores, fundador y di-rector médico del “Badia Hand to Shoulder Center”, Doral, Florida, Estados

Unidos. Para quien el desarrollo de diferentes técnicas hace que cada vez sea más fácil el reconstruir u operar por medio de la artroscopia.

“En el 2005, participé en el Ironman de Florida. Quedé en un lugar importante de entre mis compañeros centroamericanos. Pero desde un tiempo para acá, sentía un cosquilleo

en el hombro al agarrar la manivela de la bicicleta, y que cada vez se hacía más molesto. El hielo era la mejor cura, pero con el tiempo ya ni el hielo hacía efecto”, contó Delso. Después

le ocurrió el accidente y, según el médico, fue lo que dejó ver una lesión dormida.

Según Badia, el cosquilleo es el principal síntoma de que hay algo mal, ya que el cuerpo avisa que está a punto de colapsar.

La cirugía evoluciona y logra mejorar la recuperación en las lesiones de las

extremidades superiores.

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Males que afectan las extremidades superioresPor mucho tiempo se ha dicho que el Síndro-me del Túnel Carpiano se genera por el uso de la computadora o del uso excesivo de la mano, pero no es más que un mito. Según Badia, las personas propensas son mujeres entre los 30 y los 50 años, las cuales sufren de cambios hormonales que afectan los ten-dones. Debido a que muchas trabajaban con máquinas de escribir y luego computadoras, esto fue lo que dio pie al mito.

Entre los síntomas de este mal está el ador-mecimiento de la mano, se caen las cosas y se pierde la fuerza. Además en múltiples oca-siones, este se ve asociado con la tendonitis. Una de las señales es que cuando se presiona la mano, el dolor es insoportable. En muchas ocasiones, los dedos pueden quedarse traba-dos –síntoma llamado “dedo gatillo” –debido a que el tendón se encuentra muy dañado.

“El tratamiento consiste en realizar una prueba de conductividad con electrodos, esto para ver que tan obstruido está el nervio. La cirugía va a abrir el techo del túnel con un bisturí para ampliar el volumen”, aseguró el experto.

Otro de los males que atacan a estas extremi-dades es el daño del manguito rotador, el cual cosiste en la atrofia de los tendones internos del hombro que se desgarran y es necesario la reconstrucción de ellos. Las actividades depor-tivas que se asocian con frecuencia a esta con-dición son los deportes de raqueta, la natación, los deportes de lanzamiento y el levantamiento de pesas. Los síntomas de este mal son: dolor, sensibilidad local e incapacidad para realizar movimientos con el hombro afectado.

Según el deporte, así la lesión Las lesiones ya mencionadas ocurren por la mala práctica o sobre entrenamiento de un deporte.

En el tenis, la lesión más usual se da por un mal movimiento o por falta de entrenamiento. El cartílago de la muñeca llamado fibrocartí-lago triangular se desprende. Como este da estabilidad entre el radio y el cúbico, huesos cuya función es la rotación en la muñeca, pue-de causar que el tenista pierda su carrera.

Con la práctica del golf, hay que tener cuidado con el swing –golpe del palo con la bola– ya que como el deportista efectúa una fuerte presión y coloca toda la fuerza en el hombro, puede lesionarse el manguito rotador.

A Delso se le colocaron cuatro pines de titanio al frente y otro atrás, que buscan crear una red para que el músculo se vuelva a unir al hue-so. Aunque perdió un 10% de movilidad del brazo, según el triatlonista valió la pena. De lo contrario, cualquier movimiento le estaría des-montando el hombro hasta llegar al punto de que el hueso se gastaría tanto que no habría manera de unirlo. l

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Nuevas técnicas

• Artroscopia: en lugar de abrir con un bisturí el cuerpo para buscar el daño y operarlo, está técnica introduce una pequeña cámara. La operación se realiza a través de un monitor en don-de se observa la imagen ampliada para determinar cada uno de los detalles de la lesión.

• Reconstrucción: en todo tipo de articulación, por más pequeña que sea, se pueden introducir prótesis. En el caso de la artritis se puede rempla-zar el hueso afectado. Un ejemplo claro que menciona Badia fue el de una pa-ciente de 23 años con gota, a la que se le sacó un poco de hueso del radio y otro poco de la muñeca para colo-car metal de titanio. Esto con el fin de crear una superficie nueva para mover la muñeca sin dolor.

• Microcirugía: cuando se ha per-dido alguna extremidad, se reconstru-yen las arterias pequeñas.

“El cosquilleo es el principal sintoma de que hay algo mal”, comentó Alejandro Badía, especialista en cirugía reconstructiva de extremidades superiores.