EL DESEO DE PAPÁ

PAPÁ: ¿Qué están haciendo hijitas?

HIJAS: jugando papi

PAPÁ: puedo jugar con ustedes.

HIJAS: si papá como siempre.

PAPÁ: Bueno hijas ya es tarde, vayan a ponerse su pijama y a dormir.

HIJAS: Nooo un ratito más, mira que nos estamos divirtiendo.

PAPÁ: No, tiene que irse a dormir hay que levantarse temprano para ir al colegio.

PAPÁ: ¡Qué bonita noche! Voy abrir la ventana.

PAPÁ: ¡Oh! Una estrella fugaz será cierto que cumpla deseo. Voy aprobar. Deseo que

mis hijas permanezcan siempre pequeñas. Como ahora.

ESTRELLA: Te lo cumplo.

LETRERO: Tiempo después

LETRERO: Una mañana

NIÑOS: jugando en el colegio.

LESLIE Y NAYELI: ¡pequeñitas, pequeñitas ustedes no han crecido, nosotros pasamos a

primaria y ustedes se quedaron en inicial.

HIJAS: ¡PAPÁ! ¡PAPÁ!

PAPÁ: Que les paso, que tiene.

HIJAS: estamos tristes porque en el colegio nos fastidia, porque todos nuestros

compañeros están en primaria y nosotras seguimos en inicial.

PAPÁ: (Se pone a pensar) les dice no se preocupen mañana visitaremos al médico.

ASISTENTA: doctor ha llegado las hijas del señor Pedro.

DOCTOR: háganlas pasar, tomen asientos vamos a revisarla, bueno señor yo las

encuentro en perfecto estado de salud……. Lo mira al papá y le dice lo raro es que en

ellas no pasa el tiempo.

PAPÁ: (se queda pensando en lo que le dijo el doctor) ¡uh! Por mi egoísmo mis niñas

están sufriendo, voy a la estrella (se asoma a la ventana).

ESTRELLA: Me buscabas

PAPÁ: estrellita como mis hijas están sufriendo quiero que todo se detenga en el tiempo.

LETRERO: Tiempo después.

LETRERO: En la misma escuela.

NIÑOS: salen llorando ¡que aburrido! Todo igual nada cambia, la misma clase, el mismo

juego, la misma lonchera todo es igual ¡que aburrido!

HIJAS: ¡Papá! Ya no quiero ir al colegio una de ellas dice: todo es igual y la otra dice:

¿Qué has cocinado? No me digas, no me digas las dos dijeron ¡tallarines!

PAPÁ: (se siente muy triste) que hecho en a mis hijas y a todo el mundo. Buscare a la

estrellita.

ESTRELLA: Y ahora que me vas a pedir.

PAPÁ: Quiero que todo vuelva a la normalidad.

ESTRELLA: Estas seguro.

PAPÁ: retrocede y cae sentado en una silla. (Grita la hija).

HIJAS: Papaaa quiero un vaso de agua.

PAPÁ: (se despierta), finalmente todo fue un sueño.

REFLEXIÓN:

Que no siempre lo que uno cree que es lo mejor para

nuestros hijos termina siéndolo. Y que hay que dejar

que la vida misma nos enseña a cambiar de idea

cuando sea necesario. Por último, es bueno saber que

hasta los papás de cuento, con el tiempo se vuelven

aun mejores…. ¿No es esto una gran noticia?