EL DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO EN LA … · de normatividad social. En palabras de Foucault: “la...

41
DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO JULIÁN FELIPE ARANGUREN 5(=,67$ 6<0$ ',*,7$/ '( 36,&2/2*Í$ =2/ $57 REVISTA DIGITAL DE PSICOLOGÍA VOL.3 / ART.6 / PAG. 128 – 166 / 2008 EL DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO EN LA PSICOLOGÍA CONTEMPORÁNEA Julián Felipe Aranguren Ψ Fundación Universitaria Konrad Lorenz, Bogotá-Colombia RESUMEN En las últimas décadas se ha observado un notable crecimiento de las disciplinas que abordan la problemática de la salud mental. Teorías y técnicas creadas por los diferentes enfoques han tratado de explicar, predecir y controlar la condición humana con el fin de socializar a aquellos desesperados que han salido de los parámetros de normatividad que la sociedad de consumo ha creado. Los cambios económicos, políticos y sociales, conllevan a que el conocimiento científico sea utilizado como mecanismo de control dentro del sistema capitalista, categorizando y rotulando a los enfermos “mentales” que son producto de dicha estructura económico- política, aplicando un bagaje de técnicas que en algunos casos deshumaniza la condición del hombre. Este trabajo pretende revisar teóricamente la propuesta Antipsiquiátrica y sus implicaciones en los diferentes campos de la salud mental como lo son la psiquiatría, la psicología en particular y la sociedad en general. El artículo está estructurado de la siguiente manera: locos y pobres, Antipsiquiatría y Antipsicología. Palabras Claves: Psiquiatría, Antipsiquiatría, Psicología, Locura, Psicología clínica, Psicología organizacional y del consumidor, Capitalismo. 3$* Ψ Email: [email protected] 128

Transcript of EL DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO EN LA … · de normatividad social. En palabras de Foucault: “la...

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í

 

REVISTA DIGITAL DE PSICOLOGÍA VOL.3 / ART.6 / PAG. 128 – 166 / 2008

EL DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO

EN LA PSICOLOGÍA CONTEMPORÁNEA

Julián Felipe Aranguren Ψ Fundación Universitaria Konrad Lorenz, Bogotá-Colombia

RESUMEN En las últimas décadas se ha observado un notable crecimiento de las disciplinas que abordan la problemática de la salud mental. Teorías y técnicas creadas por los diferentes enfoques han tratado de explicar, predecir y controlar la condición humana con el fin de socializar a aquellos desesperados que han salido de los parámetros de normatividad que la sociedad de consumo ha creado. Los cambios económicos, políticos y sociales, conllevan a que el conocimiento científico sea utilizado como mecanismo de control dentro del sistema capitalista, categorizando y rotulando a los enfermos “mentales” que son producto de dicha estructura económico- política, aplicando un bagaje de técnicas que en algunos casos deshumaniza la condición del hombre. Este trabajo pretende revisar teóricamente la propuesta Antipsiquiátrica y sus implicaciones en los diferentes campos de la salud mental como lo son la psiquiatría, la psicología en particular y la sociedad en general. El artículo está estructurado de la siguiente manera: locos y pobres, Antipsiquiatría y Antipsicología. Palabras Claves: Psiquiatría, Antipsiquiatría, Psicología, Locura, Psicología clínica, Psicología organizacional y del consumidor, Capitalismo.

 

 

 

                                                            Ψ Email: [email protected]

 128 

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  129 

ABSTRACT In the latest decades it has been observed a remarkable increase of disciplines tackling mental health. Theories and techniques created by different approaches, have tried to explain, predict and to control human condition, in regards to introduce those desperate ones who have crossed the limits of the ruling consumer society, back to it. The scientific knowledge, under the economical, political and social changes, is used as a controlling mechanism inside the capitalist system, categorizing and stigmatizing the “Mental” patients, who are a product of such economical and political structure applying several techniques that in some cases dehumanizes human condition. This paper expects to review the Anti-psychiatric proposal, and its implications in different fields of mental health as the psychiatry, the psychology in particular, and society in general, from a theoretical perspective. The article is presented this way: insane and poor ones, Anti-psychiatry and Anti-psychology.

Keywords: Psychiatry, Anti-psychiatry, Psychology, Insanity, Clinical Psychology, Organizational Psychology, Consumers Psychology, Capitalism.

Más que un trabajo científico o teórico, éste artículo presenta un abordaje

político e histórico de un tema que durante el transcurso de la existencia humana

ha cautivado el pensamiento y la admiración de diferentes intelectuales: “la

locura”. Las concepciones tradicionales en psiquiatría y psicología clínica, han

localizado la cordura del hombre en la división razón/ sin razón y en las premisas

de normatividad social.

En palabras de Foucault: “la psiquiatría moderna es una disciplina montada

en la división razón / locura, es un discurso que trata de hacer razonable la

locura...acudir a ella implica ver cómo las personas han sido torturadas por medio

de mejores técnicas y a través del conocimiento científico”.

Lejos de asumir las connotaciones técnico-científicas tradicionales de la

locura enmarcadas en las conceptualizaciones de los trastornos mentales, se

presenta una reflexión crítica y propositiva acerca de las diferentes disciplinas que

actúan dentro del contexto histórico latinoamericano como mecanismos de control

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  130 

encargados de obstaculizar la emancipación individual y el comportamiento

irracional de aquellos que no siguen el juego político e ideológico de una sociedad

que inculca obediencia y sumisión en las estructuras del sistema. Por ejemplo, la

sociedad Colombiana contemporánea ha fundamentado sus estructuras en una

serie de presupuestos y principios que implican factores económicos y políticos de

corte neoliberal que alteran toda actividad dentro del sistema como lo son la

educación, las relaciones de producción-consumo, el trabajo individual, la salud, el

desarrollo social y comunitario, las relaciones interpersonales, el bienestar, entre

otros.

En 1990 se da en nuestro país la apertura económica, desde aquel entonces- y

como consecuencia de otros factores históricos- la funcionalidad del hombre y

asimismo su libertad, han concurrido en el régimen de mercado, donde se

considera funcional y equilibrado aquel que produce, consume y sigue las normas

instituidas dentro del establecimiento, y de ésta manera, también se ha

confundido la libertad humana con la vida alienante existente en la sociedad de

consumo. Se halla en la ciencia psicológica y psiquiátrica una serie de teorías y

técnicas tendientes a persuadir las actitudes de los sujetos y a ajustar su

comportamiento a la funcionalidad social-económica. Las terapias y las diversas

formas de tratamiento se implementan con el objeto de proporcionar unas

condiciones “estables” en las cuales los individuos puedan gozar de una vida

“tranquila y armónica”. Cuando estas ciencias hablan de adaptación y normalidad

¿parten de aspectos biológicos o aspectos sociales como dos entidades

excluyentes?

Pareciera que los criterios de adaptación estuvieran más ligados a las

necesidades económico-políticas donde los individuos funcionan de acuerdo al

sistema social de producción, y que el término “adaptación” se traslado

ocultamente-con el apoyo del conocimiento científico- de lo biológico-ecológico a

lo político- social. Si se mide con criterios ecológicos y biológicos, el sistema actual

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  131 

no es adaptativo, más bien se rige por la ideología de la utilidad y el sacrificio del

hombre por la estabilidad económica.

Cuando la psicología y la psiquiatría tratan de adaptar por medio de sus

terapias al hombre a un medio que en gran medida es causante de enfermedades

mentales:¿Con qué criterio lo hace?¿Es el sistema económico-político

Colombiano y la forma de vida contemporánea adaptativa?¿Por qué adaptar a los

individuos a un sistema de producción que elimina toda forma de pensar

independiente y, por lo tanto, obliga a la conformidad colectiva de un mundo

desigual en el que las condiciones de vida son cada vez más degradantes e

infrahumanas?

La postura Antipsiquiátrica es en este sentido un movimiento político e

ideológico que pretende modificar todas las concepciones de la enfermedad

mental instauradas en un modelo económico específico- además de cuestionar la

psiquiatría tradicional- reflexionando sobre estructuras generales como la

educación y la familia las cuales en algunas circunstancias son el eje central de

problemáticas que se presentan en el contexto social.

En contradicción a la psiquiatría tradicional, la Antipsiquiatría debate los

principios de la razón e instala la sospecha de la cordura; sus postulados se

centran en objetar toda forma de adaptación en una sociedad que por sí misma es

desadaptativa: ¿Quién está más “enfermo” la sociedad o el loco? ¿Las

“enfermedades mentales” tienen curas reales; realmente existe la enfermedad

mental o solo hace parte de la terminología científica? ¿Los psiquiatras y

psicólogos “curan o enferman” más al loco? ¿A quién hay que “sanar”: al loco o a

la sociedad? ¿Quién es más sensato, el que rompe las cadenas y retorna a la

cordura delirante, o aquel que se engaña a sí mismo y cree estar cuerdo dentro de

un discurso desadaptativo?

Por otro lado, la Antipsicología que propone éste artículo, es una crítica

propositiva, que aspira fomentar la locura creativa que el filósofo y Antipsiquiatra

David Cooper expone en su libro el “Lenguaje de la Locura”. No se trata de

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  132 

asumir la posición teórica y filosófica de éste autor, en algunas circunstancias

tomaré algunos de sus términos para denotar diferentes aspectos relevantes que

permiten la liberación del loco -y de los demás sectores sociales excluidos-, de los

rótulos y estigmas científicos que se han ido reforzando mediante las

conceptualizaciones en psicología clínica y en medicina.

La locura creativa-subversiva es pues una alternativa revolucionaria donde el

hombre se desconecta de las organizaciones condicionantes de la sociedad

tradicional para retornar a la autenticidad; es un espacio totalmente subjetivo en el

cual las ilusiones, pasiones, sentimientos, comportamientos impredecibles,

emociones, sueños y aspiraciones humanas individuales se revelan de forma

opuesta a la racionalidad cuadriculada de la objetivación de los hechos reales; la

espontaneidad y el lenguaje absurdo se recupera cuando cada ser humano

escucha la voz de su irracionalidad expresada muchas veces por el silencio y por

medio de la experiencia cotidiana con el mundo (Cooper, 1979).

En concordancia a lo anterior, la Antipsicología replantea la labor del psicólogo

en el área aplicada- principalmente en el campo clínico, organizacional y del

consumidor- cuestionando el trabajo de aquellos que se hacen llamar hombres de

ciencia, indagándose sobre los aspectos éticos que guían su labor y proponiendo

que toda disciplina dentro de las ciencias humanas se vinculen directamente a

factores históricos y socioculturales que determinan el proceder del hombre dentro

de la sociedad.

Del mismo modo y partiendo del inconformismo hacia los enfoques que

reducen la experiencia humana a la predicción y el control del comportamiento, se

describe la “Antiterapia” alrededor de las “Líneas de Fuga”, en donde las personas

reconocen la subjetividad y la particularidad, destruida en algunos casos por las

nociones homogeneizantes y normativizantes de la sociedad actual, y

entorpecidas por diagnósticos e intervenciones que en algunas circunstancias

dificultan la comprensión de sí mismo en una realidad social e histórica. Es claro

que la psicología está inmersa dentro de las ciencias humanas, y que dicha

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  133 

disciplina se ha ramificado en diferentes campos aplicados ¿cómo es posible que

una práctica tan alienante como lo es el consumidor - enmarcada dentro del

sistema actual de consumo - tenga cabida dentro de la psicología y por ende

dentro de las humanidades?

Para la “psicología del consumidor y organizacional” se exponen una serie

de conceptos acerca de cómo el Antipsicólogo puede dirigir su labor en pro de

desmistificar el consumo y el trabajo productivo- económico- alienante, utilizando

los medios masivos de información, la investigación y el conocimiento socio-

político. Las nociones parten de campañas anticonsumo donde no existen

necesidades naturales sino deseos aprendidos por otros, en palabras de Voltaire:

“existen más deseos que necesidades verdaderas y más necesidades que

satisfacciones”. En cuanto al campo organizacional, se hace una comparación del

código ético del psicólogo vs. La labor del profesional dentro de la organización:

¿se trabaja por el hombre o por la organización? ¿La psicología organizacional, es

psicología?

Tal vez para complementar la propuesta, conviene describir un programa

educativo para los psicólogos en formación. Debido a que la educación

Colombiana actual ha asumido dentro de sus programas un orden específico

sustentado en el modelo económico neoliberal, se hace urgente que ésta sea

humanista, crítico-reflexiva, sociocultural, y tal como lo dice el maestro Estanislao

Zuleta en sus trabajos, apelar a una formación personal democrática, política y

filosófica, que implique eliminar toda tendencia tecnocrática y profesionalizante

como último fin del sistema educativo.

La relación entre democracia, educación y política es fundamental para

fomentar la pluralidad y el libre pensamiento dentro de la sociedad y las

instituciones educativas. La democratización, o mejor dicho, la democracia

descrita en la sociedad burguesa, ha entorpecido el desarrollo personal y colectivo

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  134 

de la sociedad, inculcando ideas erróneas acerca del hombre y de su acción en el

mundo. En efecto, la democracia no se inserta solamente en los procesos

políticos, donde la gente apela el derecho a elegir determinados candidatos que se

postulan para ejercer cargos públicos y en el cual dichos aspirantes son elegidos

por las mayorías. En casi todas las circunstancias los individuos no reflexionan

acerca de su elección, la votación está decretada por tradicionalismos políticos o

familiares, por influencia de la masa social o en el peor de los casos, mistificada

por los medios de comunicación, los cuales trasladan sus preferencias políticas a

la sociedad por medio del mensaje tergiversado.

Estanislao Zuleta en el texto “La participación democrática y su relación con

la educación”, propone unas exigencias para eliminar las concepciones

tradicionales de la democracia. En primer lugar la “democracia implica un grado de

Angustia” (Zuleta, 1990), significa que el pensar y reflexionar por sí mismo “es más

angustioso que creer ciegamente en alguien” (Zuleta, 1990). Es importante que las

personas empiecen hacer juicios desde sus propias perspectivas y no a partir de

dogmas absolutos inculcados por terceros en los cuales no hay opción de duda,

en este sentido el dogma o la idea se convierte en una creencia infundada más

que un planteamiento propio, derivado de otras abstracciones. La libertad es un

principio fundamental en la democracia. La carencia de dirección y de sentido en

la existencia nos lleva a la angustia, de esta manera el hombre debe “buscar en

qué creer, una guía para su acción o decidir su vida” (Zuleta, 1990). Con la libertad

el ser humano es capaz de gobernar su modo de actuar y asimismo es el único

que escoge los valores que direccionan su pensamiento. Con éstas dos

condiciones –angustia y libertad- la democracia se convierte en: “la aceptación de

la angustia de decidir por sí mismo” (Zuleta, 1990).

Otro aspecto a subrayar es la pluralidad de pensamientos, opiniones y visiones

científicas del mundo. En algunas perspectivas científicas se ha caído en el

desacierto, en que la verdad sólo se proporciona mediante un método o una forma

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  135 

David Cooper (1979) afirma que actuar políticamente significa sencillamente

recuperar todo los que nos ha sido robado dentro del sistema de producción

neoliberal, es llanamente tomar consciencia de nuestra opresión dentro del

sistema capitalista. El sistema Colombiano ha generado una forma de vida donde

los hombres han dejado de ser ellos mismos para convertirse en instrumentos de

ganancia económica.

de demostración particular. La propia visión del mundo es supremamente

importante, pero no se debe caer en el absurdo en que existe una sola. En

definitiva no existe la verdad, pero se puede llegar a aproximaciones del

conocimiento, mediante el debate y la dialéctica del discurso. En palabras de

Zuleta: “ el pluralismo no hay que aceptarlo como un eclecticismo....la existencia

de diferentes puntos de vista , partidos o convicciones, debe llevar a la aceptación

plural con alegría, con la esperanza de que la confrontación de opiniones mejorará

nuestros puntos de vista”.

Finalmente se deben eliminar todas las tendencias arcaicas de la

democracia. En este sentido la democracia es la superación de todas las ideas

mistificadas por los medios y por los avances tecnológicos de la sociedad

capitalista. Esta visión permite que el hombre cuestione sus valores y sus

creencias, para así lograr un replanteamiento de sí mismo. En efecto cuando todo

ser alcanza la democracia y el libre pensamiento, lejos de los dogmas científicos y

políticos, es indispensable llevar a cabo una revolución dentro de sí. La locura

creativa y subversiva que se propone, fuera del control científico, encuentra su

manifestación revolucionaria en el delirio político.

La locura debe ser el arma para recuperarnos a nosotros mismos, la locura

creativa es la revolución permanente en la vida de una persona...”este proceso

revolucionario se hace visible en la vida, cuando una persona da un giro en la

dirección de su existencia hacia la autonomía” (Cooper, 1979).

En este orden de ideas, el contenido del presente artículo se exhibe por

medio de los siguientes temas: Pobres y locos, Antipsiquiatría -familia y

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  136 

educación- y finalmente la “Antipsicología”. No pretendo en lo más mínimo ser

objetivo, las reflexiones son ciertamente subjetivas y subversivas, no me ciño ni a

los hechos ni a los datos, me acojo a la forma de ver y percibir el mundo como un

sujeto único y diferente, por lo tanto aunque el documento tenga la forma de las

normas APA y en ocasiones se recurra a dar citas para describir hechos

históricos, el contenido no asume tales directrices.

Pobres y Locos

Durante la Edad Media -periodo comprendido entre los siglos V y XV- la

lepra y la locura fueron las enfermedades más asechadas por la civilización

cristiana. La iglesia católica interpretaba tales males como un castigo dado a los

hombres a través del cual, el Todopoderoso muestra su divinidad, la cólera

frente a la humanidad y su gran bondad y piedad al hombre: “Aunque se retire

al leproso del mundo y de la comunidad de la iglesia visible su existencia, sin

embargo, siempre manifiesta a Dios, puesto que es marca a la vez de la cólera

y de la bondad divina...” (Foucault, 1972).

“Amigo mío -dice el ritual de la iglesia de Viene-, me place que hayas sido

infectado con ésta enfermedad y te hace nuestro señor una gracia al quererte

castigar por todos los males que has cometido en éste mundo...y aunque seas

separado por la iglesia católica y de los santos, sin embargo no estás separado

de la gracia de Dios... el “buen cristiano” que abandona en su puerta al leproso,

le abre las puertas de la salvación” (Foucault, 1972).

Es curioso que el enfermo logre su salvación mediante el sufrimiento y el

padecimiento de sí mismo. La misericordia de un Dios opresor, se manifiesta en

la marginación y la exclusión de la iglesia, ya que un individuo “enfermo o

trastornado” “es salvado por la mano que no le es tendida” (Foucault, 1972).

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  137 

Entretanto los locos fueron concedidos como seres poseídos, impíos,

herejes y sujetos carentes de razón. Miles de personas que presentaban

alucinaciones, delirios, habla desarticulada, depresión o melancolía recorrieron

el destino trágico de la inquisición.

La incomprensión eclesiástica conlleva al asesinato de más de 500

personas trastornadas mentalmente (Hothersall, 2004), dichos hombres

marcharon a la horca, la hoguera, el ahogamiento y a los castigos arbitrarios

que la iglesia y los sacerdotes proporcionaron en nombre de la liberación

espiritual y cristiana. Antes del Renacimiento, cuando los trastornados no eran

procesados de herejes, se les daba un trato de malhechores, inválidos o

desamparados, encerrándolos en prisiones para locos, hospicios, refugios,

hospitales y asilos de lunáticos (Hothersall, 2004).

Las instituciones más sobresalientes durante el Medioevo fueron: Las

instituciones religiosas, que albergan inválidos, locos, ancianos, huérfanos e

indigentes; Los Santuarios, caracterizados por sanar al enfermo mediante la

liturgia y la oración; el Hospedaje, el cual fue un centro de reclusión para

personas que presentaban conductas raras, custodiados por guardias

represores (Winifred & Brendan, 1995); y finalmente Los Hospitales y

Pabellones, que centran su objetivo en recoger a personas indigentes o

individuos peligrosos en la comunidad, un ejemplo de éste es el Hospital de St.

Mary of Bethelehem y conocido más adelante como Bledlam creado en Londres

en 1247 (Hothersall, 2004).

La Inquisición no fue el único símbolo característico de la Edad Media. La

marginación, el abandono, la repulsión y la excomunión del “trastornado

mentalmente y del enfermo” en general, constituyó una forma de castigo que

recrimina profundamente la existencia humana, degradando no sólo al hombre

en su interior, sino que lo elimina de la vida cristiana social imperante, dejándolo

en el vacío y en la inexistencia histórica.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  138 

El Renacimiento es el momento histórico que inicia en Italia a mediados de

1400 y se extiende por todo Europa para culminar aproximadamente en el año

1600 (Calderón, 1996). Constituye el resurgir de la vida humana asintiendo las

bases artísticas y científicas de la expresión intelectual de un periodo que aspira

al desarrollo del pensamiento, reflejado en la actividad de los individuos y en las

nuevas tendencias culturales que se dan como consecuencia del cambio

histórico.

Desgraciadamente en el campo de la salud mental no se distingue por

ningún lado un progreso significativo con respecto a los locos que sufren; lejos

de evolucionar, las concepciones místico-cristianas se fortalecen. La brujería, lo

sobrenatural, las supersticiones, los pactos satánicos, la magia negra y los ritos

sexuales, se vincularán directamente con el fenómeno de la locura. La brujería

toma fuerza en el Renacimiento y aparece como una forma de repulsión y

antipatía hacia la sociedad cristiana. Dicha rebelión se manifestó a través de

fiestas, ritos y ceremonias celebrados en altas horas de la noche y en lugares

apartados y solitarios, donde las mujeres y asistentes presentaban una especie

de liturgia o culto (Freedman, Kaplan & Sadog, 1982).

Las reuniones más comunes fueron las de Aquelarres, consistía en una

organización de mujeres congregadas para examinar diferentes tipos de plantas y

reconocer sus efectos alucinógenos. Las muchachas extraían la sabia de los

árboles, frotándolo en sus cuerpos para estimar diferentes sensaciones y

percepciones que la planta facilitaba. Los efectos del alucinógeno creaban en las

mujeres ciertas conductas interpretadas como posesiones, produciendo en ellas

discursos ilógicos, incoherentes e incomprensibles para las demás personas.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  139 

En consecuencia, algunos delirantes y locos fueron condenados por

brujería, rebelión y participación satánica, confundiendo los cuadros “psicóticos”,

“maníacos” o “depresivos” con manifestaciones sobrenaturales. Si bien, la locura

se relaciona durante mucho tiempo con las fuerzas ocultas, por otro lado,

existieron diferentes formas de interpretación y difusión atractivas e irónicas de

dicho fenómeno. La pintura y la palabra son el medio de expresión humano que

exaltaron la experiencia del loco durante los siglos XV y XVI. Con el renacer del

arte y la literatura, el delirio individual reaparece como un espectáculo divino entre

los hombres, una comedia que ironiza la moral cristiana y las conductas de las

personas en la sociedad (Foucault, 1972).

“El Elogio de la Locura de Erasmo de Rótterdam, las obras artísticas del

“Bosco” y “La Nave de Los Locos” -Das Narrenschiff- de Sebastián Brant, son la

muestra del dominio literario, artístico y filosófico, que exaltan la locura durante

éste periodo, y que se presenta como un aire de sátira frente a la moral de la

época (Foucault, 1972). El control de los locos y los pobres llegará hasta el siglo

XVII con el nacimiento de la psiquiatría, pero tuvo sus inicios en el Renacimiento

con extrañas revelaciones donde el loco es expulsado de una ciudad a otra,

siendo abandonado, desterrado y arrojado a la “Nave de los Locos” (Foucault,

1972).

Locos y pobres vivían durante el Renacimiento errantes por los campos y

calles de las ciudades. En ocasiones se recluían en lugares para lunáticos, en

donde se les daba un “trato” según su condición. Aquellos que escapaban a la

reclusión, eran detenidos por las autoridades y confiados a barqueros, quienes

recibían alguna contribución por parte del estado, para arrojar a los misterios del

mar a los dementes.

La navegación de los perturbados tiene varias implicaciones e

interpretaciones. Por un lado los vagabundos son una molestia para la sociedad,

su expulsión constituye una medida en la cual las ciudades se deshacen de los

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  140 

“insensatos” que no son útiles para los municipios, enviarlos al agua es eficaz e

indiscutible (Foucault, 1972).

Otra interpretación lleva a pensar que el agua transporta al loco a la

incertidumbre de su suerte, queda encerrado en el infinito del mar, no se sabe a

dónde llegará, tampoco cuándo, ni de qué lugar proviene, sólo existe una creencia

en la sociedad occidental y se refiere a que la “irrealidad en la infinitud del agua se

convierte en realidad”, en consecuencia puede ocurrir, que aquellos que están

cuerdos se enloquezcan en el mar porque no soportan el misticismo del agua, o

que los locos recuperen la razón, ya que el abandono y el sufrimiento de la

navegación purifica al “insensato” (Foucault, 1972).

En la Era Moderna –siglos XVII, XVIII y XIX- la barrera epistemológica

mantenida por las creencias místico-cristianas se destruye. Aparecen nuevas

concepciones sobre el hombre y el mundo, afloran por Europa las revistas

científicas, artículos sobre temas específicos de interés y se dan avances

significativos en el conocimiento científico y filosófico.

Ejemplo claro para el desarrollo del pensamiento, es el interés de Newton

por la ciencia y la filosofía que conlleva a perfeccionar disciplinas como la

matemática, el cálculo y la física; los estudios de Benjamín Franklin en el campo

de la electricidad; Antonio Lavoiser quien es el primero en analizar el agua y a la

vez es considerado como uno de los padres de la química moderna, entre otros

(Calderón 1996).

Tales progresos teóricos, benefician el adelanto técnico, llevando a la

civilización a adoptar nuevos sistemas en el comercio, la navegación, la

producción y en el manejo social en general. El perfeccionamiento de las técnicas

en la producción y en la ciencia, advierten el nacimiento del capitalismo, con un

notorio incremento de la sociedad burguesa. Aparecen las fábricas y se cambia la

mano de obra por la máquina, se expande por toda Europa la etapa de la

Industrialización (Santa, 1989).

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  141 

La clase dominante, representada por la burguesía Europea toma

consciencia de su poder social, su contribución económica interviene en el poder

político y su racionalidad burguesa instaura como ideología el Liberalismo Clásico.

Su fundamento sostiene los derechos inalienables los cuales son: “el derecho a la

vida, el derecho a la libertad económica, el derecho a la igualdad ante la ley y el

derecho a la integridad personal” (Santa, 1989).

Después de la Revolución Industrial se dan una serie de cambios políticos y

económicos los cuales intervienen directamente en el nacimiento de la psiquiatría

que tendrá como objetivo castigar, reprimir e institucionalizar a los individuos

considerados vagos, delincuentes, pobres, locos, borrachos o lunáticos, por una

sociedad burguesa que impone ocultamente su propia racionalidad.

Infortunadamente los avances tecnológicos, científicos y económicos

traerán consecuencias negativas, como la utilización del conocimiento científico

para excluir y marginar al ser humano que se considera excéntrico. Debido a la

distribución social por clases sociales, los más ricos alcanzan una aceptación

dentro del sistema naciente, la racionalidad burguesa se impone castigando a los

sujetos que no producen en el estado.

Las medidas reaccionarias y educativas encuentran sus motivos más

fuertes, cuando lo irracional, es decir los sectores excluidos –rebeldes,

alcohólicos, vagos, adúlteros, libertinos, prostitutas, entre otros- entran a presionar

la sociedad de los favorecidos, viéndose éstos amenazados por los pobres.

El capitalismo instaura de esta manera, mecanismos de control que

protegen la propiedad privada y mantienen las políticas de producción

establecidas. La policía y la psiquiatría serán los organismos encargados de

ejercer sobre los sublevados una serie de medidas que tendrán como fin reeducar

a los desaliñados (Dörner, 1974).

La edificación en el siglo XVII de la psiquiatría, se da mediante el

internamiento de los no obedientes a los hospitales mentales, los estudios sobre la

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  142 

“enfermedad mental” y las investigaciones sobre el carácter fisiológico de los

“trastornos mentales” (Dörner, 1974).

Se creería que algunos médicos trataron de hacerle frente al problema de la

salud, preocupándose por la curación de los individuos institucionalizados. La

verdad es que la psiquiatría aparece como una disciplina científica encargada de

diferenciar y mistificar la irracionalidad, es decir, que trata de establecer una

institución racional que se ocupe de la locura considerada una “enfermedad”

(Dörner, 1974).

La evolución psiquiátrica permitió despojar de la peligrosidad social a los

ricos de los locos y pobres, integrándolos mediante técnicas científicas a la

racionalidad económica (Dörner, 1974). La ciencia psiquiátrica se evolucionará

gracias a Bayle, quien publica una tesis sobre las causas cerebrales de la

“enfermedad mental” (Garnica, 1991) y se constituirá en ciencia positiva en el siglo

XIX, por la fundación de la anatomía patológica establecida por Virchow (Vallejo,

1991).

En el siglo XX estará delimitada por la naciente psicología experimental, la

psicoterapia, el psicoanálisis, la psicofarmacología, la lobotomía, la

institucionalización y el electrochoque. Durante este siglo también aparecerán

diferentes posturas conceptuales o paradigmas como el enfoque orgánico-

mecanicista el cual considera que la “enfermedad mental” y sus síntomas son

consecuencia de los trastornos somáticos concretos, comúnmente cerebrales

(Vallejo, 1991).

Dicha concepción se ha fortalecido por las investigaciones en

psicofisiología, neurología, genética y bioquímica. Sus postulados básicos son: la

psiquiatría es una rama de la medicina y utiliza las metodologías modernas y el

conocimiento científico, trabaja con personas, existen fronteras entre lo normal y lo

patológico, el “trastorno mental” tiene un sustento biológico, finalmente, debe

haber un acuerdo diagnóstico y clasificación de la “enfermedad” entre los

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  143 

profesionales de la salud. Este enfoque va a marcar la tendencia tradicional de la

psiquiatría moderna (Vallejo, 1991).

Otros enfoques son los socioculturales quienes afirman que la sociedad y la

cultura juegan un papel fundamental en el tema de la “enfermedad mental”, la

psiquiatría fenomenológica existencial que incorpora los conceptos filosóficos de

Jaspers, Heidegger, Kierkegaard y Sartre, los éticos sociológicos donde se podría

enmarcar quizás la Antipsiquiatría, y finalmente los modelos integradores del

“trastorno mental” grave entre psicoterapia y psicofármacos.

Aún cuando se crea que la psicología y la psiquiatría progresaron en el siglo

XX en cuanto al tratamiento del loco, desde el siglo XVII hasta nuestros días

parten de la misma ideología: Mecanismos de control social; lejos de asumir

posturas crítico-sociales, estas disciplinas se han encargado de algo menos

importante: predecir y controlar al hombre.

La Antipsiquiatría

Independiente del sistema económico-político, toda sociedad ha creado

mecanismos de control y exclusión de aquellos individuos que rompen las normas

convencionales. Los mecanismos se modifican al cambiar las estructuras

económicas y políticas, por ejemplo en el Medioevo la religión es el mecanismo de

control por excelencia; en el capitalismo éste control pasa a las profesiones

liberales, entre ellas la psiquiatría y la psicología.

Los “locos” como han sido denominados dentro de la razón burguesa, se

pueden considerar dentro de la propuesta “Antipsiquiátrica” como los marginados

que ponen de manifiesto su rencor e inconformidad hacia la sociedad

postmoderna, encargada de destruir toda expresión autónoma, espontánea,

subjetiva y natural.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  144 

La acción de éstos locos ha sido, en algunas circunstancias, llevada a cabo

mediante la actitud revolucionaria, “dirigida a desestructurar el poder estatal”

(Laing, 1973), “sustentado en élites organizadoras” (Lemert, 1973), que pretende

bloquear e interrumpir la tendencia resistente a un mundo tecnocrático y

deshumanizante donde los revolucionarios promueven la participación activa del

ocio, “la contraviolencia” (Cooper, 1979) y la irracionalidad como medio e

instrumento de lucha para eliminar las contradicciones del sistema industrial.

Los conceptos de normatividad y desviación (Basaglia, 1973), racionalizan

los procedimientos y técnicas utilizadas por la psicología y la medicina, con el fin

de etiquetar, diagnosticar y clasificar a los sujetos que se hallan por fuera de las

normas (Lemert, 1973), neutralizando los comportamientos mediante las

constituciones nacionales, las técnicas de modificación comportamental y a través

de la justificación democrática.

Por consiguiente, la ideología médico-psiquiátrica y la psicología, en

algunas ocasiones, contiene y bloquea la expresión creadora de la locura

mediante la definición de “anormalidad” y a través de tratamientos que buscan

devolver el carácter racional de la realidad: “No se trata de técnicas

especializadas, dirigidas al cuidado de las personas que sufren, es simplemente

una respuesta defensiva, destinada a mantener lo instaurado por la sociedad”

(Basaglia, 1973).

La sociedad de mercados y consumo, instaura las ideas de utilidad, poder

y ganancia con el deseo oculto de engañar a la sociedad y con el fin de dominar a

los locos subversivos que se oponen a la racionalidad. Por lo tanto, en dicha

sociedad es necesario que se establezcan mecanismos de control que actúen bajo

lo que los pensadores de la escuela de Frankfurt han denominado “Razón

Instrumental”, encargados principalmente en predecir y controlar las conductas,

tendientes a adaptar desde lo político, a los desadaptados que salen de la realidad

como mecanismo de defensa.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  145 

En las ciencias sociales y humanas, tanto el psiquiatra como el psicólogo,

¿son conscientes de su labor económico-política dentro del sistema?¿Al

profesional de éstas disciplinas se le educa actualmente de manera que él

reflexione acerca de su quehacer, y sobre todo, de lo que implementa en la

sociedad y al servicio de quién lo hace?

En la actualidad es difícil una enseñanza profesional que cuestione todas

las técnicas, paradigmas y campos aplicados del conocimiento, pues las diferentes

facultades se han preocupado más por trasmitir datos que por generar una

consciencia reflexiva de las disciplinas.

La reflexión crítico-social es un compromiso de todo profesional de la salud,

incumbe su ética y moral frente a la humanidad. Por ende, al momento de impartir

técnicas o procedimientos terapéuticos, es necesario preguntarse al servicio de

quién se ejecutan y por qué se efectúan dichos tratamientos. Por ejemplo, la

psicofarmacología, en algunas circunstancias, no proporciona condiciones de

bienestar y salud para los consultantes. Por el contrario, el poder médico ha

abusado de su utilización para controlar a los pacientes dentro de las instituciones

hospitalarias, aislando del campo de la consciencia a los individuos que sufren.

En cierto sentido la medicación no garantiza una solución útil de una

problemática particular, casi siempre bloquea síntomas en ciertos periodos de

tiempo, nada más. En cambio sí, puede traer efectos secundarios como

fluctuaciones emocionales, daños en el sistema nervioso central a largo plazo,

tolerancia, adicciones, etc.

La psiquiatría contemporánea utiliza la psicofarmacología como la forma de

tratamiento más eficaz que pretende controlar la problemática de la “enfermedad

mental”. Su auge se debe también al rápido desarrollo del DSM IV y el CIE 10, los

cuales facilitan el rótulo de las problemáticas individuales, alentando la

intervención a través de la medicación y la institucionalización. Al respecto, Franco

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  146 

Basaglia (1972) afirma que “al igual que la cárcel no sirve para rehabilitar al

delincuente, el hospital psiquiátrico no sirve para curar al enfermo”, yo agregaría

que el uso arbitrario de fármacos, no constituye una intervención adecuada dentro

del fenómeno de “la salud mental”.

De todas maneras, no se trata de negar que en algunas situaciones los

factores biológicos sean parte influyente en un “desorden mental” y que para

dichos estados el uso del medicamento puede ser útil para disminuir el sufrimiento

de la persona.

Sin embargo lo que se ve en la práctica tradicional es la rotulación y el

abuso de poder. Cabe señalar que en la sociedad de consumo los fármacos han

tenido una gran acogida, ya que son distribuidos por las multinacionales y porque

el engaño de masas conlleva a que la gente crea que los problemas de la vida

cotidiana y los conflictos emocionales se cicatrizan al consumir medicamentos.

Tal vez, después de ésta pequeña crítica es momento de presentar el

pensamiento Antipsiquiátrico como un conjunto de ideas y puntos de vista que

buscan modificar las estructuras tradicionales del diagnóstico y el tratamiento de la

“enfermedad” que han mantenido los conflictos a nivel social e individual. La

propuesta Antipsiquiátrica se enmarca dentro de una corriente revolucionaria que

procura contradecir toda forma de abuso dentro de la institución psiquiátrica y

psicológica tradicional. Se opone a la represión del electrochoque, la psicocirugía

–que fue utilizada por muchos años- la institucionalización forzada en los

sanatorios y hospitales mentales, y a cualquier sistema psicológico que intenta

controlar y predecir el comportamiento humano, desde posturas psicopoliciales.

En los años 60 se dan distintos acontecimientos históricos y políticos que

permiten que la Antipsiquiatría se desarrolle como una postura rebelde que tiene

como único fin emancipar la consciencia de las personas conmovidas por el

maltrato de los médicos y psicólogos. La revolución Cubana, el Che en

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  147 

Latinoamérica, el Mayo de 1968 en Francia, los Movimientos estudiantiles en todo

el mundo, los cambios políticos y sociales –movilización de los obreros en el

mundo-, los movimiento antinucleares y los Hippies en Estados Unidos, orientan

la tendencia filosófica de ésta nueva posición.

Su labor social y científica es crítico-constructiva inclinado a trasformar las

instituciones públicas, que procuran reeducar y recuperar a las personas perdidas

socialmente, por medio de las intervenciones terapéuticas y psiquiátricas

(Basaglia, 1973).

El término “Antipsiquiatría” lo acuña el filosofo y Antipsiquiatra David Cooper

en 1960 en Inglaterra y remite a una ideología que pone en cuestionamiento y

duda a la psiquiatría fundamentalmente, pero también a la psicología, la

educación, la familia y las profesiones liberales. Tuvo su mayor acogimiento en el

área de la salud mental, ya que los que impulsaron este enfoque fueron

psiquiatras, que cansados de ver la situación de los hospitales mentales deciden

generar cambios en la forma como se trata a las personas perturbadas. Hombres

de nombre como Ronald Laing, Thomas Szasz, Franco Basaglia y entre otros,

desarrollan el planteamiento en pleno furor revolucionario.

La argumentación revolucionaria se contrapone al concepto de “enfermedad

mental” y a las teorías basadas en el funcionamiento humano, que asumen la

racionalidad como principal característica de normatividad y responsabilidad de los

socialmente sanos. Para la sociedad tradicional, el loco o el “trastornado

mentalmente” está exento de cualquier tipo de lógica, es por tal razón que su

conducta y experiencia cotidiana queda determinada por un proceso “patológico”

que actúa en él, quedando por lo tanto fuera de control (Heather, 1976).

La lucha Antipsiquiátrica se puede evidenciar en los siguientes puntos

ideológicos descritos por David Cooper (1979):

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  148 

1. Revocar las leyes del juego psiquiátrico; Se debe abolir el poder médico

personificado en el diagnóstico, donde la entrevista tiene un papel de

interrogatorio, en la cual el paciente es humillado. Omitir toda técnica irracional,

donde entre en juego el poder médico, como batas blancas, infusiones de

intravenosas, uso indiscriminado de fármacos y cualquier tipo de terapia

motivada por poderes políticos.

2. Abolición de la estructura autoritaria jerárquica; reconocer que la persona

puede expresar a través de la locura la autoridad central, el médico debe

darse cuenta que su lenguaje es de la misma clase que el de los pacientes, por

lo tanto la función médica debe estar centrada en servir de protección, callar,

escuchar y aprender de los pacientes,… “más de lo que les enseñó la facultad

de medicina” (Cooper, 1979).

3. Una no-interferencia atenta dirigida a abrir el camino a las experiencias, en

lugar de cerrárselo; prescindir de todas las formas de tratamiento como

choques eléctricos, psicocirugías, terapias electro convulsivas y con las dosis

de psicotrópicos que alteran el funcionamiento del cerebro. Además se debe

abrir el “respeto del derecho, bajo cualquier circunstancia, a decir no a

cualquier tratamiento, y más allá de esto, el respeto en todo momento a decir

no de forma efectiva a cualquier cosa que viole el derecho más fundamental de

la persona de no verse involucrada en los juegos de poder de otros” ( Cooper,

1979).

4. Final de todas las formas de represión sexual.

Uno de los avances más significativos que ha realizado la Antipsiquiatría es la

liberación de las instituciones de control como el desmantelamiento del Manicomio

de Trieste en el norte de Italia donde Franco Basaglia emancipó a todos los

reclusos que habían sido forzados a permanecer institucionalizados (Basaglia,

1979).

Ronald Laing en el Hospital de Glasgow, libera once pacientes de la sala de

“enfermos crónicos” -en la mayoría “esquizofrénicos”-, y los traslada a un lugar

donde no se les proporciona ningún tratamiento psiquiátrico, el único

procedimiento es la eliminación de las camisas de fuerza, el juego y el

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  149 

esparcimiento individual. Al cabo de unas semanas dichos pacientes mostraban

un comportamiento más sano que cuando estaban internos en el pabellón de

“enfermos crónicos” (Laing, 1987).

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  150 

La Antipsiquiatría ha logrado dentro de la “salud mental”, disminuir los

electrochoques, el abuso de fármacos, el poder médico, la restricción física y

psicológica, y finalmente ha eliminado por completo de occidente, la lobotomía

frontal. Otro de sus propósitos lo ha encaminado a desmantelar distintos

mecanismos de control que intimidan la expresión individual como lo son la familia

y la educación. Desde el momento en que un individuo nace en la sociedad ocurre

un fenómeno muy particular que consiste en condicionar a las personas a un

conjunto de instituciones y a unos valores, virtudes y convenciones ligadas a la

colectividad, fortalecidas por creencias y tradiciones fundadas desde lo

micropolítico hasta lo macropolítico.

La crianza familiar y la educación son los sistemas encargados de formar

dentro de la sociedad ciudadanos correctos, en donde las personas son educadas

con gustos y deseos ajenos, trasferidos muchas veces de los padres a los hijos, o

introducidos en otros momentos por la sociedad que moldea a los individuos con

antivalores impuestos por terceros.

La homogeneidad es común en la sociedad neoliberal, las normas y pautas

conductuales han destruido la espontaneidad y la particularidad de cada uno.

¿Alguna vez nos hemos preguntado si somos realmente auténticos con nuestra

forma de pensar y actuar, o por el contrario somos un producto fabricado de los

dogmas y la ideología? ¿Cómo hemos llegado a ser lo que ahora somos, quién a

intervenido para dicho fenómeno: la religión, la familia, la educación, la

política...nosotros mismos?

Hoy en día, en el contexto Colombiano predominan ideas como el poder, el

dinero, la competencia, la obediencia laboral, el pragmatismo, la educación

tecnológica, el patriotismo y la dogmatización a diferentes perspectivas científicas.

Tales fenómenos conducen a la “conformidad y al estancamiento personal”

(Ramadan, 2000), formando hombres que en la mayoría de los casos actúan en

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  151 

contra de su voluntad (Laing, 1987). Las ideas y nociones sobre el mundo casi

siempre son impuestas u obligadas; dificultan la voluntad y el libre albedrío: un

individuo que no toma decisiones en cuanto a sí mismo, no es sensato con su

libertad, por lo tanto se convierte en rebaño que actúa como una máquina de

acuerdo a lo que los demás le imponen.

Cuestionar la familia puede llevar a varias interpretaciones. Para evitar

conceptos erróneos es importante aclarar que no se pretende hacer una

reprobación general y total de la familia. Como afirma Laing (1979): en muchas

ocasiones la familia es fuente de apoyo, consuelo, alivio y alegría; “grandes

familias se encuentran lejos de estar en la discordia, la miseria o la vergüenza...”

La detracción de la familia y la educación se formalizan cuando dichas

instituciones funcionan como entes ideológicos que sirven de engranaje para el

sostenimiento del sistema económico-político. La institución familiar como la

concebimos en el mundo occidental, se reduce a las relaciones afectivas

incondicionales pero ambivalentes, que se hallan entre el padre, la madre, los

hijos y los hermanos, ideados precedentemente por los abuelos y parientes

lejanos, o por la familia también entendida, como lasos de unión que resultan de

las relaciones interpersonales.

La familia se atribuye a la hegemonía de diferentes fuerzas que actúan entre sí

que constantemente integran diferentes representaciones en los individuos sobre

el grupo de referencia, el cual a través del tiempo formaliza los pensamientos, los

ideales, las creencias, el carácter, y las conductas, fortalecidas por la sociedad y

por la proyección de arquetipos que los padres introducen en los hijos (Laing,

1979).

Los afectos y los componentes emocionales que cada individuo cree tener

hacia su estructura familiar, son el resultado de la experiencia, la ideología, la

cotidianidad y el establecimiento perceptual y fenomenológico.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  152 

Los sentimientos son positivos cuando las personas encuentran en sus

parientes comprensión y empatía donde se proporciona un espacio sano para el

perfeccionamiento y crecimiento individual. Sin embargo, la familia se puede

convertir en una cárcel cuando los individuos pierden su autonomía e

independencia, implantando en sí mismos conductas dependientes, fanáticas o

emociones exageradas, caracterizadas por las relaciones autoritarias o

dogmáticas.

La ideología familiar que debe ser replanteada y cuestionada, es aquella que

funda desde muy temprana edad categorías sobre lo que es bueno y malo, lo justo

e injusto, lo que se debe hacer en la sociedad para obtener reconocimiento como

trabajar, estudiar y producir, así como también, toda creencia arbitraria que tiene

la familia nuclear acerca del matrimonio, la sexualidad -como el dominio del

cuerpo en la castidad y en la masturbación-, la religión, la disciplina y la crianza

que sirve de mediadora entre la sociedad y un modo de producción determinado.

La crítica se dirige a éste tipo de estructuras, aquellas organizaciones que

remueven de sus miembros las voluntades y las más altas aspiraciones subjetivas,

insertándolos en un contexto económico-social. En efecto la ideología familiar

tradicional es utilizada para fabricar hombres disciplinados y manejables dentro de

la sociedad, que nutran las organizaciones, las fábricas y demás entidades, con el

objeto de conservar la economía, la producción del país y la estabilidad social.

La crisis social nace desde el seno familiar y desde la educación; ambas

instituciones intervienen preparando y convirtiendo al ser humano como un objeto

que posee un precio dentro del mercado laboral. La familia y la educación se

encargan de producir futura mano de obra al servicio del estado, delegando

tareas, funciones y oficios dentro de un aparato productivo y burocrático (Zuleta,

1985). “En tiempos de globalización y tecnocracia, la educación se convierte en

objeto de crítica y en algunos casos de repudio y de rechazo” (Niño, 2005). Ante

los rápidos avances económicos, políticos y culturales en curso, nuestras

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  153 

instituciones escolares se muestran cerradas, rígidas y parecen

descontextualizarse de la pedagogía (Niño, 2005).

La intervención de los ministerios económicos y de los organizamos

institucionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial

(BM) o la CEPAL( Comité económico para América Latina y el Caribe), determinan

la dirección de los contenidos académicos, mediante la supuesta financiación

económica internacional (Niño, 2005).

Por tal razón se ha establecido dentro de la educación actual programas

educativos que se adapten a las necesidades económicas más que a la formación

humana. Una línea del pensamiento en la pedagogía moderna es la educación

como “empresa de calificación de fuerza de trabajo, para un mercado de trabajo

capacitado, con un costo determinado” (Zuleta, 1985).

La lógica neoliberal requiere que la educación se efectúe con el menor tiempo

posible, con un costo bajo y que deje finalmente en la sociedad una utilidad

máxima. En éste sentido, hay que acelerar el entrenamiento y adiestramiento en

diferentes actividades, porque el sistema necesita mano de obra calificada que

compita en el mercado laboral a un costo mínimo. La transmisión de información,

datos, instrucciones y los conocimientos en áreas específicas, son el eje central de

la pedagogía moderna, ordenados y gobernados por un mercado de consumo y

producción, en el cual la división del trabajo es más especializada y más restrictiva

para el desenvolvimiento laboral de los individuos (Zuleta, 1985).

En la división del trabajo, los sujetos no necesitan tener un vasto conjunto de

conocimientos, solo basta con que sepan operar en un sector restringido, en tal

dirección, necesita un cierto grado de información y un mínimo de iniciativa y

creatividad porque “mientras más se especializa el trabajo, menos son las

iniciativas particulares” (Zuleta, 1985).

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  154 

En realidad al sistema no le incumbe formar personas reflexivas y críticas,

tampoco se preocupa porque los profesionales integren una sociedad más

comprometida con su intervención en el campo social y humano. El pragmatismo

en el sentido funcional, ha invadido los programas educativos y por tal motivo las

instituciones universitarias y escolares reducen lo formativo como las

humanidades –que abastecen de espacios pedagógicos para la creatividad y la

crítica-reflexiva- para introducir programas técnico-profesionalizantes.

Para ejecutar diferentes reformas dentro del sistema educativo y las

estructuras en general, se debe partir de transformaciones micropolíticas para

llegar a lo macropolítico. Significa que el Ser humano debe ser entendido como

una persona llena de inquietudes que reflexiona y cuestiona su existir. El desea

saber porqué hace lo que hace, para quién lo hace y que implicaciones tiene su

proceder dentro del contexto social.

En éste sentido la educación y las demás estructuras cuestionadas, se ven

obligadas a reconciliarse con las necesidades del hombre y no a las exigencias de

las instituciones; la educación y la familia transformadas deben ser más flexibles

dentro del entorno sociocultural, asienten espacios para pensar y dudar de sí

mismo, puntos de vista que refutan lo que no convence y conocimientos

innovadores derivados de la pluralidad y las diferentes perspectivas que existen en

el mundo.

La psicología y la psiquiatría moderna se encuentran en sospecha de aliviar las

problemáticas de la sociedad actual. De nosotros los “profesionales” depende la

metamorfosis que emancipe a los individuos de una cotidianidad aburrida y rígida,

y de los mecanismos que impiden un desarrollo “sano” dentro del contexto

histórico-cultural. Los instrumentos están en cada uno de nosotros, la toma de

cosnciencia es individual y subjetiva, el compromiso y la responsabilidad nace del

discurso absurdo que cada cual posee en la desconexión delirante... “la muerte del

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  155 

sistema llega mediante la locura política, la construcción de un mundo vivible se

establece cuando cada persona encuentra el loco que hay en él”(Cooper, 1979).

La Antipsicología ¿Qué significa Antipsicología? La Antipsicología representa un conjunto de

ideas y planteamientos derivados de los conceptos Antipsiquiátricos. En el

transcurso conceptual del artículo se han hecho una serie de críticas acerca de la

psiquiatría, las terapias, la familia y la educación. Consecuentemente, es un

compromiso esbozar una serie de supuestos que complementan la reflexión y la

argumentación. Este apartado no sugiere un enfoque terapéutico particular, ni un

modelo teórico específico, simplemente expone una serie de nociones acerca de

cómo el psicólogo podría dirigir su labor éticamente dentro de la sociedad, como

por ejemplo en los campos aplicados y en la Antiterapia.

La Antipsicología se compone de tres aspectos importantes:

1. Antipsicología en el ámbito clínico.

2. “Psicología organizacional – consumidor”.

3. Antipsicología en los programas de formación para el psicólogo.

¿Qué terapia dentro de la psicología tradicional ha promovido el delirio, la

fantasía, la subjetividad, los sueños y la irracionalidad como forma de expresión

autónoma? ¿Qué enfoque propone cierta forma de no-adaptación social como

modo de liberación individual? ¿Por qué seguir conectado a la realidad, y no

alcanzar la desconexión?

Los métodos han obstaculizado la capacidad de construir una sociedad

mediante los sueños, las fantasías y las alucinaciones creativas individuales que

los hombres experimentan en su día a día. Lejos de difundir la libertad subjetiva, la

psicovigilancia ha desarrollado el concepto de experiencias homogéneas, en el

cual todos los individuos deben vivir una realidad acorde a lo que se piensa como

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  156 

existente, partiendo de que la realidad es todo aquello que la colectividad percata

en momentos específicos.

Los sentidos y las percepciones dentro de la sociedad que se considera

“normal” ya están establecidos, formados y configurados, no hay cabida para lo

raro o para las sensaciones e imágenes que se enmarcan dentro de lo no-

perceptivo. Tales ideas, discernimientos, clarividencias o instantes de lucidez

poseen para la gente “racional” un contenido absurdo que debe ser eliminado.

“El soñar se desborda en un riachuelo de experiencias individuales y

desemboca en el inmenso lago de la experiencia social colectiva “(Cooper, 1979).

Nuestros delirios artísticos y creativos son aniquilados por las convicciones

científicas, en el que cualquier detalle de inspiración es explicado e interpretado

como una abstracción derivada de una estimulación precedente del medio.

Se cree que la única manera de interpretar la naturaleza es mediante la

“razón y la percepción empírica” de las objetivaciones que componen el mundo.

Quizás la incomprensión de la naturaleza y de la humanidad se deba a esto, ya

que el hombre “racional” no ha sido capaz de explorar todo lo que está por fuera

de su alcance.

Se ha construido un lenguaje que parece ser lógico debido a su complejidad

y estructura, y que pretende llenarnos de significados y funciones para lograr

acuerdos entre las personas “cuerdas”. La explicación de los hechos por medio del

lenguaje ha obstruido la comunicación de los seres humanos en una civilización

que pretende tener un lenguaje “objetivo” (Cooper, 1979).

Lo cierto es que no existen explicaciones verdaderas por medio del

lenguaje estructurado, ni siquiera puntos de vista que describan realmente lo que

pasa en el universo, sólo predominan interpretaciones humanas acerca de las

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  157 

diferentes concepciones que se tienen de la vida y la naturaleza, en la mayoría de

los casos son guiadas más por la sensibilidad que por el pensamiento racional.

Se cree que el lenguaje tiene como función la comunicación; Cooper (1977)

asegura que la naturaleza perceptiva de las comunicaciones entre las personas,

normalmente elimina la sensibilidad profunda; muchas sensaciones y sentimientos

son arrancados de las personas por la incomprensión que existe en el lenguaje.

Si las personas no alcanzan un espacio perceptivo libre de barreras

objetivas, será difícil la comprensión del lenguaje y la comunicación interpersonal,

además se seguirá clasificando el comportamiento en categorías erróneas y

discriminativas. Los silencios, el lenguaje absurdo, las manifestaciones

subversivas y la naturaleza de nuestra sensibilidad, deben dirigir el camino de las

interpretaciones y la senda de las relaciones intersubjetivas de los individuos.

Para modificar las concepciones objetivas de la realidad y del lenguaje, es

indispensable asimilar una comprensión del mundo en el que el hombre se

desconecte del medio –familiar, educativo, económico, etc.- permitiendo un

espacio en sí mismo para la sensación y la percepción profunda de lo no-uniforme.

Cuando el hombre comprende que el universo y su naturaleza no es como

lo ve, ni se compone de los elementos que otros han descrito (Ramadan, 2000)

aparece la primera desconexión: la desestructuración de un ser moldeado por

valores y virtudes ajenos a sí-mismo. Es el punto inicial de la locura creativa, una

invitación a la comunión de ser totalmente diferente, de descubrir y sentir

experiencias nuevas que en el mundo de la realidad no han podido efectuarse, es

la transformación del pensamiento hacia el compromiso político, social e histórico.

El hombre ha andado en la militancia de lo moral y dogmático, la

consciencia histórica retorna en la desconexión que desestructura lo arraigado

(Cooper, 1979), alejando lo rutinario, cotidiano y alienante que asesina lentamente

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  158 

la humanidad. La locura-delirante ya no mantiene la etiqueta de “esquizofrenia”, es

la máxima expresión de subjetividad que coexiste en el sí-mismo que busca la

conexión de un hombre con su propia existencia excluyendo el concepto del “yo”

que tiende a objetivar la vida.

Todo conocimiento debe ser autorreferencial, lo que las personas conocen

se relaciona con el significado que ellos le asignan a la existencia, la realidad no

se nos revela directamente a la experiencia, sino que es construida

individualmente, por consiguiente, desconectarse nada tiene que ver con la

psicosis ni con la “Locura”, más bien constituye un espacio para crear

posibilidades de crecimiento individual. La desestructuración significa el inicio de la

consciencia individual.

Con un pensamiento independiente y autónomo es imprescindible una

esencia, determinación o un nuevo sentido de vida. El libre albedrío o consciencia

de elegir –en términos existencialistas-, es una facultad inherente de todo loco

creativo. Cada sujeto tiene el poder de interpretar a su manera la vida que lleva.

El único conflicto con la libertad radica en que uno no puede no elegir

porque aun la no-elección es una elección que en la mayoría de los casos se

delega a terceros, por tal motivo es mucho más fácil dejarse llevar por otros que

asumir el conflicto de la libertad, asumiendo el propio destino y la responsabilidad

que esto conlleva (Ramadan, 2000).

El poeta, el artista y el científico versátil encuentran en lo irracional una

forma para acceder al conocimiento propio mediante un lenguaje crudo y cruel que

invita a tomar consciencia de las injusticias del sistema económico y social.

Suprime todas las fuentes de aburrimiento que dejan el trabajo no-gratificante y la

vida alienante; en este sentido se presenta uno de los principales actos

revolucionarios: “La invitación al ocio y a no hacer nada obligado”.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  159 

La Antipsicología permite que el hombre encuentre “Líneas de Fuga” en las

cuales se pueda potencializar la subjetividad y la desconexión sana de la realidad.

Dichas “Líneas de Fuga” ayudan a que la locura creativa halle actividades como el

arte, la ciencia, la música, el deporte, el misticismo, la sexualidad, etc, que

permitan la expresión humana de angustia, sufrimiento, agresión, pasión, alegría,

autonomía y la aceptación congruente de sí mismo.

Están enfocadas principalmente al desarrollo de las personas como sujetos

únicos, auténticos e independientes en el mundo. Por consiguiente el trabajo

terapéutico es sencillamente Antiterapia ya que el “terapeuta” es simplemente un

mediador o un individuo más, que permite y ayuda al otro a desconectarse y a

encontrase en un mundo transformado.

No es una técnica o un tratamiento al estilo directivo donde se tiende a

modificar el comportamiento. La Antiterapia busca que aquel ser humano que

sufre, comprenda y acepte su vida, encontrando él mismo, soluciones y

estrategias que permitan confrontar las problemáticas. En dicho proceso no se

cura, no se rotula, no se diagnostica, no se formula clínicamente, ni se interviene,

se buscan aspectos relevantes de la vida los cuales pueden estar afectando la

desconexión sana de las estructuras.

De esta manera no existe tampoco una relación Terapeuta-Paciente, el

direccionamiento se omite y da paso a la relación empática de doble vía,

estableciendo la conexión Persona-Persona. La Antiterapia explora la unicidad de

un individuo que busca “Líneas de Fuga”, no hay evaluación ni modificación del

comportamiento; las estrategias utilizadas son la biodanza, la incitación a la

práctica sexual, el juego, el ocio y la estimulación creativa en alguna actividad

humana.

Las “Líneas de Fuga” han sido mal interpretadas en muchas ocasiones por

algunos sectores postmodernos. Se tiende a creer en estos grupos, que el

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  160 

consumo de drogas permite una forma de rebeldía y desconexión de la realidad.

Aunque el consumir drogas produzca estados satisfactorios y se aprecien diversas

sensaciones que no se producen en un estado de consciencia normal, en la

mayoría de los casos dicho consumo termina siendo más un problema que una

cura, ya que un consumo deliberado y exagerado puede traer daños orgánicos y

personales.

El postulado de la Locura debe advertir que no asume posiciones políticas

radicales, ideas dogmatizadas, modos de vida homogéneos absorbidos por la

sociedad de consumo –como lo visto en algunas subculturas urbanas: punks,

skinheads, hippies, alternativos, etc-, así como tampoco acepta la imposición ideal

de sectas, religiones, grupos políticos ortodoxos o grupos fundamentalistas.

Este “enfoque” –si así se puede llamar- brinda herramientas para que los

individuos confronten su realidad y la patología del sistema social, vinculándose

directamente de forma histórico-social. Por lo tanto, cuando un ser humano se

expresa singularmente debe haber una posible congruencia entre sus emociones,

su comportamiento y las “Líneas de Fuga”.

La Antipsicología rechaza la sociedad competitiva y ansiosa por el éxito y el

poder (Amorós, 1996), el autoritarismo político, la sociedad de consumo y el

sistema neoliberal. Muchos psicólogos formados en la técnica y en el método

científico, se les olvidó diferenciar lo comercial-económico de lo psicológico. Tal es

el ejemplo de la “psicología organizacional y del consumidor”. En un sistema que

“educa” sin cuestionamientos se tiende a afirmar que aquello que aliena es bueno

para el hombre, como es el caso de la producción y el consumo mistificado.

Es necesario señalar que la “psicología del consumidor y organizacional” no

existen para la Antipsicología, ya que dichas disciplinas no se pueden encajar

dentro de las humanidades. Ahora bien, es cierto que la economía se mueve a

través de la producción y el consumo, no se trata de negar esas dos actividades.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  161 

La discusión y el debate se dirigen en torno al sacrificio del hombre por la

producción y el consumo. “La psicología organizacional” busca que los individuos

se adapten de forma disciplinada y obediente a las organizaciones para tener

ejecuciones comportamentales eficaces que garanticen una utilidad económica

para la organización.

De ésta manera la ciencia psicológica ayuda a que las personas trabajen

sumisamente y produzcan lo suficiente para que estos mismos individuos

alienados inconscientemente al trabajo, compren todo lo que se ha producido en el

mercado. “La psicología del consumidor” se encarga mediante métodos

psicológicos de estimular y motivar a la sociedad a una cultura de consumo

inoficioso.

¿Se trabaja por el bien del hombre, o se utiliza el conocimiento científico en

provecho del sistema neoliberal? ¿Realmente estas disciplinas son humanidades?

En la organización se domina al empleado tratándolo con métodos

compresivos y persuasivos –por ejemplo los programas de salud ocupacional o las

prestaciones de servicios-, logrando en él un sentido de pertenencia que lo aleja

de sí mismo (Merani, 1980).

El esfuerzo en la organización siempre va dirigido a la modificación del

comportamiento, el cual lleva a la adaptación de los individuos a los planes

corporativos de la empresa. La selección de personal por competencias y la

evaluación de desempeño son ejemplos de la discriminación y la deshumanización

dentro de la psicología.

¿Es fiel el psicólogo a su ética cuando dentro del perfil que ha sugerido la

empresa, no se admiten personas de diferentes etnias, raza, origen, color de piel,

homosexuales, enfermos, etc? En este sentido, aunque el “psicólogo” se

encuentre bajo las normas de la empresa ¿No irrespetan a las otras personas?

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  162 

¿Se convierte de esta manera en un sujeto lleno de prejuicios y discriminación que

falta a su ética humana?

¿Acaso no dice el código Ético Colombiano de Psicología que el psicólogo

debe evitar el mal uso de su profesión prescindiendo de juicios y valores de otras

instituciones ajenas a él? ¿Hasta qué punto el “psicólogo organizacional” se ha

preguntado si su labor es ética?

El “psicólogo” dentro de la organización sólo interactúa con los trabajadores

por intereses corporativos no humanísticos. Otro aspecto ético a señalar es del

secreto profesional. Cuando el “profesional” hace evaluación de desempeño

¿respeta la dignidad del hombre? El secreto profesional ¿qué tanto se cumple

cuando se aplican evaluaciones y pruebas?:

1. ¿Se cumple la confidencialidad o se divulga la información?

2. ¿Hasta que punto al trabajador que es evaluado, se le solicita su permiso?

3. ¿Quién saca provecho de quién?

Lo mismo ocurre dentro de las posiciones ideológicas de la “psicología del

consumidor”. Se nos ha inculcado que consumir todo lo que no se necesita es

fuente de gran satisfacción. La sociedad de consumo es un fraude bien montado;

muchas de las cosas que se consumen son inoficiosas, lo que ocurre en el

neoliberalismo, es que la tecnología avanza a un ritmo acelerado y la

hiperproducción se acrecienta cada vez más.

Los medios informativos e investigativos como la publicidad, los audiovisuales,

el diseño gráfico e industrial, el marketing y la “psicología”, contribuyen a que la

sociedad postmoderna instaure valores de consumo como eje central en sus

vidas.

En cierta medida se prostituye el conocimiento al servicio del mercado.

Consumir no es negativo, todos consumimos constantemente, el problema

aparece cuando las personas asumen que el sentido de vida y la satisfacción

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  163 

personal está en la actividad del gasto exagerado. No cabe duda que la

modernidad conlleva a que la sociedad de consumo haga que mujeres, niños,

jóvenes y adultos, sean parte de la influencia psicológica en la creación e

insatisfacción de necesidades (Merani, 1980).

Merani (1980) afirma: “¿Cómo considerarnos libres si estamos desde la cuna

condicionados a aceptar...Cómo podemos cambiar, producir el cambio si por el

contexto de nuestra propia vida estamos condenados a aceptar y obedecer?”

El dios del régimen industrial, “la producción”, nos tiene sometidos a la

necesidad de los productos que cada vez más abundan el mercado de lo

inservible. Como consecuencia de la sociedad de consumo la publicidad y las

carreras liberales manipulan el comportamiento de la gente guiando el modo de

vida; por esta razón la propaganda y el mensaje tergiversado moldea cómo los

individuos deben trabajar, amar y opinar... y por supuesto consumir en el mismo

mercado en el que ellos producen (Merani, 1980).

La mayoría de las cosas que consume el hombre no tienen utilidad ni valores

humanísticos. La Antipsicología tiene un papel revolucionario: desmistificar al

hombre. Su fin es la liberación humana y la toma de consciencia social frente a la

sociedad de consumo. Hoy el dominio de los medios de comunicación es fuerte,

por consiguiente la Antipublicidad es un arma que tiene como meta difundir la

información revolucionaria y la locura subversiva en contra de la sociedad de

consumo.

La Antipsicología permite el escape de una sociedad enferma y llena de

necesidades condicionadas, libera las vendas de la ceguera y permite que los

hombres vuelvan a ser personas, dentro de una sociedad que ha instaurado

concepciones falsas del mundo. Antes de satisfacer e inculcar necesidades, la

sociedad y los gobiernos están obligados a gestionar condiciones de vida

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  164 

saludables y estables, civilizaciones libres de miseria y espacios ambientales

libres de contaminación. Por tal motivo es importante replantearse si en verdad

todo lo que consumimos diariamente lo necesitamos para nuestra subsistencia, o

si por el contrario todo lo que consumimos es el producto de un engaño al que

hemos sido sometidos. Para fortalecer la lucha en contra el consumo y el sistema

neoliberal en general, se hace urgente un programa educativo que se sustente

bajo aspectos políticos e históricos que rigen la humanidad (Angarita, 2000).

De ésta manera el profesional tiene la obligación de hacer una reflexión

profunda acerca de su formación y de su papel dentro del entrono sociocultural;

esta reflexión orienta las acciones prácticas que comprometen su rol dentro de la

sociedad, permitiendo que desde los campos aplicados se trate de mejorar la

sociedad partiendo de un conocimiento crítico y filosófico (Angarita, 2000).

Teniendo en cuenta lo anterior la formación psicológica parte de la propuesta

educativa efectuada por Angarita (2000):

• Una educación Integral y Humanista: Más humanidades menos

tecnologías.

• Una Educación Reflexiva: la educación debe estimular los espacios de

reflexión y debate.

• Una Educación Ética y un Compromiso Social: Bien Individual, Social y

Universal.

Los puntos para crear un programa educativo en psicología deben ser los

siguientes:

• Formación en aspectos y áreas relacionados con la historia y la

cultura.

• Análisis políticos de la realidad sociocultural.

• Formación en ciencias sociales como la Antropología y la sociología,

mostrando su relación con la psicología.

• Programas filosóficos.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  165 

• Educación Humanista.

• Formación en perspectivas psicológicas.

• Formación en campos aplicados de la psicología y su relación con

aspectos socioculturales e históricos.

• Formación científica pluralista.

• Educación técnica y tecnológica mínima.

Durante el desarrollo de éste artículo se han consumado una serie de

críticas y propuestas para diversos temas que se enmarcan dentro de la sociedad

histórico-cultural. En cierta medida los pensamientos expuestos no son ni

verdaderos ni falsos, simplemente son interpretaciones y puntos de vista sobre el

contexto social, la psicología y psiquiatría contemporánea.

Lejos de asumir posturas dogmáticas, la Antipsicología no es una filosofía

como lo pretenden ser algunos enfoques, es definitivamente un conjunto de

conocimientos que promueven la duda, la sospecha, el compromiso sociopolítico

del profesional de la “salud” y la emancipación individual.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  166 

REFERENCIAS

Amorós, V (1996). Psicología y Psicoterapia Humanista. Revista de Psicología de

la PUCP. Vol. 14 (1).

Angarita, J (2000). Responsabilidad de la universidad frente a la realidad

sociocultural: tres propuestas generales para orientar el tipo de

educación universitaria. Bogotá.

Basaglia, F & Basaglia, F (1973). La Mayoría Marginada. México: editorial

Einaudi.

Basaglia, F (1979). Razón, locura y sociedad: La institucionalización

psiquiátrica de la violencia. México: editorial Siglo XXI.

Basaglia, F (1979). Razón, locura y sociedad: Psiquiatría o Ideología de la

locura. México: editorial Siglo XXI.

Calderón, G (1996). Locura: historia de la psiquiatría. México: editorial

Edomex.

Cooper, D (1979). El lenguaje de la locura. México: editorial Ariel.

Dörner, K (1974). Ciudadanos y locos: Historia social de la psiquiatría.

Madrid editorial Taurus.

Freedman, A; Kaplan, H & Sadock, B (1982). Tratado de psiquiatría.

Barcelona: editorial Salvat.

Foucault, M (1972). Historia de la locura en la época clásica Tomo I y II.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  167 

México: editorial Fondo de Cultura Económica.

Garnica, R (1991). Nacimiento y evolución de la psiquiatría. Buenos Aires:

editorial Trillas.

Heather, N (1976). Perspectivas Radicales en Psicología. Barcelona:

editorial: Continental.

Hothersall, D (2004). Historia de la psicología. México: editorial Mc Graw

Hill.

Laing, R (1979). Los locos y los cuerdos. Barcelona: editorial Grijalbo.

Laing, R; Lemert, E & Ruesch, J (1973). La Mayoría Marginada: El traje

Estrecho. México: editorial Einaudi.

Laing, R (1987). Razón, Locura y Demencia: Formación de un Psiquiatra.

Barcelona: editorial Crítica.

Lemert (1973). La Mayoría Marginada. México: editorial Einaudi.

Merani, A (1980). Carta abierta a los consumidores de psicología.

Barcelona: editorial Grijalbo.

Niño, F (2005). Filosofía de la educación latinoamericana una clave

intercultural. Bogotá: Cuadernos de filosofía latinoamericana: VOL

26 Nº 96.

Ramdan (2000). La muerte del alma: Poesía del asco y pensamientos de

luz. Medellín.

DISCURSO ANTIPSIQUIATRICO  JULIÁN FELIPE ARANGUREN          

 

Í  

  168 

Santa, E (1989). La crisis del humanismo. Bogotá: editorial Tercer Mundo.

Vallejo, R (1991). Introducción a la psicopatología y psiquiatría. Barcelona:

editorial Salvat.

Winifred, B & Brendan, A (1995). Manual de psicopatología y trastornos

psiquiátricos (tomo I); Fundamentos conceptuales ; Trastornos de

Ansiedad, afectivos y psicóticos: Una breve historia de la

psicopatología. Madrid: editorial Siglo XXI.

Zuleta, E (1985). Educación y democracia: Un campo de combate.

Bogotá: editorial Fundación Estanislao Zuleta.

Zuleta, E (1990). La participación democrática y su relación con la

educación. Tunja: Universidad tecnológica y pedagógica.