Depreciación, Capital de Trabajo y Beneficios de un Proyecto
El impacto del Capital Social: beneficios individuales y ...
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Universidad de los Andes Facultad de Ciencias Sociales
Departamento de Ciencia Política
El impacto del Capital Social: beneficios individuales y colectivos, confianza interpersonal y confianza en las instituciones políticas.
Estudio de caso de la Fundación Cultural Chiminigagua
Tesis para optar por el título de Politóloga
PAULA MONTES
Director: Gabriel Murillo Lector: Lariza Pizano
Mayo de 2004
INTRODUCCIÓN..................................................................................................................3 CAPITULO I..............................................................................................................................9 MARCO TEÓRICO Y ESTADO DEL ARTE..................................................................................9
1.1Fuentes de Capital Social ................................................................................................12 1.2 Los efectos del Capital Social..........................................................................................16 1.3 Lo estudiado en Colombia...............................................................................................18 1.4 Capital Social y Democracia ............................................................................................19 1. 5 Sociedad Civ il: receptora de Capital Social ......................................................................22 1.6 Fomentando la participación ciudadana: el espació público y la cultura en Bogotá ...............24 1.7 Espacio público en un esquema participativo....................................................................26 1.8 De la teoría a la práctica: el caso de Chiminigagua............................................................29
CAPITULO II ...........................................................................................................................29 LA FUNDACIÓN CULTURAL CHIMINIGAGUA: UN CASO DE INICIATIVA CIUDADANA EN BOGOTÁ ................................................................................................................................29
2.1 Emprendimiento ciudadano: La his toria detrás de Chiminigagua ........................................31 2.2 Los retos de hoy .............................................................................................................36 2.3 De la acción cív ico-cultural a la incursión en la política ......................................................37 2.4 Beneficios derivados de las activ idades colectivas ............................................................40
CAPÍTULO III ..........................................................................................................................42 ANÁLISIS DE RESULTADOS DE LAS ENCUESTAS .................................................................42
3.1 Caracterís ticas de la muestra encuestada ........................................................................43 3.2 Beneficios del Capital Social a nivel personal y comunitario ...............................................47 3.3 Niveles de confianza.......................................................................................................51 3.4 Actitudes hacia la política ...............................................................................................53 3.5 Niveles de confianza hacia los representantes políticos .....................................................56 3.6 Apoyo a la democracia ...................................................................................................58
CAPÍTULO IV..........................................................................................................................61 CONCLUSIONES....................................................................................................................61
4.1 Hacia una ciudadanía más activa.....................................................................................65 4.2 El debate Colombiano: el carácter positivo del Capital Social ............................................66 4.3 El futuro de Chiminigagua: desv irtuando al Capital Social Perverso ....................................67
BIBLIOGRAFÍA........................................................................................................................71 Anexo 1 ..................................................................................................................................74 Tablas Y Gráficas ....................................................................................................................74 Anexo 3 ..................................................................................................................................92 Transcripción de entrev istas a miembros de la Fundación Cultural Chiminigagua..........................92 Anexo 2 ................................................................................................................................112 Muestra del cuestionario hecho a los miembros de Chiminigagua ..............................................112
INTRODUCCIÓN
¿Por qué unos países se desarrollan con mayor facilidad que otros? aunque no contamos aún con
una respuesta clara para esta pregunta, cada día más investigadores están convencidos de que
para lograr el desarrollo de una nación no se deben tener en cuenta sólo los factores económicos,
sino que son los factores sociales (culturales, políticos entre otros) los que más cuentan. Entre estos
nuevos enfoques está la teoría instituc ionalis ta liderada por el economista ganador del premio Nóbel
Douglass North. Para North, las instituciones formales o informales, entendidas como las reglas de
juego que rigen una sociedad1, juegan un papel imprescindible en el cómo se desarrollan las
sociedades y por ende en la riqueza económica de las naciones.
Ahora bien, si se afirma que los factores que están detrás de las instituciones tanto formales como
informales son la clave para resolver el mis terio del desarrollo económico, ¿Qué condiciones hacen
que en ciertos países se desarrollen ciertos tipos de instituciones? ¿Qué hace a las instituc iones
benéficas o perjudic iales para el desarrollo? Para Douglass North, la respuesta está en cómo las
instituciones resultan beneficiosas para facili tar las transacciones en la soc iedad. Una sociedad que
pueda minimizar los costos de transacción2 se convierte en terreno férti l para el surgimiento del
desarrollo económico. “En esencia los costos de transacción resultan del grado de incertidumbre env uelto
en las negociaciones. Cuando se torna costoso obtener información sobre el bien que se tranza y no ex isten
garantías de que se cumplirán los contratos y se respetarán las libertades civ iles y políticas, se dificulta la
div isión y especialización del trabajo, disminuy e la rentabilidad de las inv ersiones y se produce en la sociedad
como un todo, un enorme desperdicio de recursos” (Cuéllar 2000:53).
1 “ Por instituciones se entienden las reglas de juego con que cuentan los individuos en una sociedad. Su objetivo es facilitar el intercambio y reducir la incertidumbre” . (Cuéllar 2000:57). 2 “ Los llamados costos de transacción resultan de los pagos que realizan los individuos para obtener información y garantizar el cumplimiento de acuerdos y negocios” (Cuéllar 2000: 48).
El hecho de que ex ista confianza entre los ciudadanos y también hacia las instituciones que rigen la
sociedad, contribuye a disminuir los costos de transacción. Es aquí donde los valores juegan un
papel fundamental; aspectos como el respeto, la tolerancia, la educación, la sociabil idad u otros,
pueden infundir la confianza necesaria para fomentar una reducción en los costos de transacción
dentro de una comunidad. La confianza surge por muchos motivos, entre ellos, las redes de Capital
Social pueden hacer que surjan v ínculos y valores, tanto indiv iduales como colectivos, que terminan
favoreciendo la confianza y de este modo disminuyendo los costos de transacción. Este interesante
fenómeno es el tema principal de este trabajo.
El concepto de Capital Social está ya bastante estudiado alrededor del mundo. Se ha establecido
que el Capital Social se manifiesta en la presencia de asociac iones voluntarias entre ciudadanos que
pueden ser de muchos tipos, desde asociaciones religiosas o deportivas hasta de tipo político. Se
podría decir que el Capital Social se ha convertido en una variable imprescindible en los estudios de
desarrollo. Teniendo en cuenta lo anterior, actualmente se hace v ital profundizar en el estado del
conocimiento del Capital Social de cualquier país; es por esto que este trabajo tiene como fin
investigar el estado del Capital Social en Colombia a partir de un estudio de caso, y sacar
conclus iones sobre los benefic ios que este brinda tanto a los indiv iduos como a la comunidad y a la
nación.
En su libro Trust, Francis Fukuyama, util izó la correlación entre Capital Social y el intercambio en los
mercados planteando la tes is de que la ex istencia de redes de Capital S ocial contribuye
positivamente al desarrollo; y esto se debe en pocas palabras a que en la medida en que los
ciudadanos aumentan las interacciones con extraños, se crean más vínculos entre ellos. Esto hace
que aumente el grado de confianza, y gracias a ello se disminuyen los costos de transacción de una
sociedad. Así mismo, el politólogo Robert Putnam, en su estudio realizado en las dis tintas regiones
de I talia, pudo establecer que aquellas regiones donde la ciudadanía estaba más relacionada entre
sí y era más activa en la democracia, presentaban gobiernos más eficientes. La relac ión entre
Capital Social y confianza es ya un hecho; qué consecuencias y a qué grado puede llegar tal
confianza es aún un universo por explorar.
En Colombia son varios los estudios que se han hecho sobre Capital Social, los avances más
recientes prov ienen de autores como Maria Mercedes Cuellar, Mauricio Rubio, y John Sudarsky.
Estos autores, siguiendo la línea de investigación que hoy se desarrolla en el resto del mundo, han
llevado a cabo no sólo mediciones sobre el Capital Social en Colombia sino que se han adentrado a
correlacionar estos datos con otras variables relac ionadas con el desarrollo económico, político o
humano de la sociedad.
Maria Mercedes Cuéllar, en su libro Colombia: un Proyecto Inconcluso habla de una relación inversa
entre la pertenencia a asociaciones colectivas y la confianza hacia las instituciones del Estado. Sus
encuestas, realizadas en 1997 a nivel nacional, demostraron que las personas que se asocian dicen
tener un menor grado de confianza hacia instituciones como las Fuerzas Mili tares, la fiscalía, los
partidos políticos, el Congreso, y otras. Estos y otros hallazgos hechos por Cuéllar, la llevan a
concluir de manera un poco radical, que el Capital Social en Colombia se trata en muchos casos de
un Capital Social Perverso que poco aporta al desarrollo del país, “De estos comportamientos no
puede concluirse que el Capital Social prevaleciente en Colombia corresponda a un Capital Social
de tipo productivo. Estas caracterís ticas se asemejan más a aquellas que hacen que se pueda
identificar de perverso” (Cuéllar 2000: 857). Esta es una conclusión que resulta bastante
controversial, Cuéllar misma se refiere a sus hallazgos como graves. Es precisamente debido la
gravedad de estos planteamientos que resulta interesante indagar más acerca de estos hallazgos y
a través de un estudio de caso en una asociación particular característica del Capital Social,
preguntarse sobre el nivel de confianza de sus miembros hacia las instituciones políticas del Estado
y sobre los beneficios que el Capital Social fomenta sobre una comunidad específica.
Por otro lado, autores como John Sudarsky en su libro El Capital Social de Colombia, se muestra
reacio a las afirmaciones sobre un Capital Social “Malo”, dice el autor: “Una controv ersia que se ha
gestado en el estudio sobre Colombia.... es la noción de Capital Social Malo. Con ella se establece que las
lealtades y solidaridades en este país se establecen en bandas, mafias o redes de corrupción y que por ello
v an en contra de la sociedad en general. Dos elementos v an en contra del Capital Social Malo: 1) No toda
relación social de solidaridad es Capital Social y 2) Para que este sea Capital Social es necesario recoger el
concepto de fuertes ex ternalidades de la concepción inicial de los economistas” (Sudarsky 2001: 26).
Es así como llegamos al objetivo concreto de este estudio, el cual pretende responder al siguiente
problema de investigación: Si el Capital Social en Colombia es de carácter beneficioso para la
sociedad, es necesario demostrarlo. En este caso, se hará por medio de un estudio de caso a una
asociac ión colectiva que ev idencie los efectos positivos en la actitudes cív icas y valores de sus
miembros. En concreto, el estudio da una mirada a los beneficios tanto personales como colectivos
que traen las organizaciones voluntarias, la confianza interpersonal que se da entre sus miembros, y
la inc idencia de estas organizaciones en la confianza o desconfianza que sus miembros manifiestan
en las instituciones políticas. En otras palabras, se pregunta ¿Qué relac ión ex iste entre la
participación en asociaciones colectivas- características de formás de Capital Social- y la confianza
en los representantes políticos colombianos?
Durante el transcurso de este trabajo, se busca debatir la tesis de Cuéllar de que el Capital Social
colombiano es perverso. Además se busca probar la hipótesis de que en la medida en que aumenta
la confianza entre extraños en las organizaciones de Capital Social, sus miembros generan mayor
interés y confianza en las instituciones políticas. Para cumplir este objetivo global, además de
responder de manera integral a los interrogantes ya mencionados, se pretende cumplir los siguientes
objetivos específicos:
- Indagar los beneficios generales que suponen para un indiv iduo, su familia y su sociedad, la
pertenencia a una organización que genera Capital Social.
- Indagar acerca de los niveles de confianza que demuestran los miembros de una
organización colectiva promotora de Capital Social, hac ia las instituciones políticas locales y
sus representantes.
- Comparar los niveles de confianza e interés de los miembros de la organización en cuestión
con los niveles de confianza que ev idencia la población colombiana en general (que
aparecen en los estudios de John Sudarsky y Maria Mercedes Cuéllar)
- Contrastar los resultados obtenidos con la tesis de Maria Mercedes Cuéllar sobre la
ex istencia de un Capital Social mayoritariamente perverso en Colombia.
Para llevar a cabo este estudio se eligió a la Fundación Chiminigagua, con sede en Bosa. Esta
organización es el resultado de una iniciativa de acción colectiva en Bogotá que gracias a su éx ito
fue impulsora de la Asociac ión Cultural Chiminagagua. En 1986, un grupo de jóvenes provenientes
de dos barrios en Bosa, funda la asociación Cultural Chiminigagua, que hoy se encarga de fomentar
activ idades culturales como el teatro, la danza y la pintura entre los habitantes del sector;
paralelamente la fundación ha trascendido ya el ámbito de la cultura l legando a ser impulsora de un
partido político con sede en el barrio Los Laureles.
La estructurac ión de este trabajo está div idida en 4 capítulos. Inmediatamente después de esta
introducción, el capítulo 1 brinda una preámbulo a lo que es el Marco Teórico y el Estado del Arte
detrás del concepto de Capital Social, sus princ ipales autores y ramás. Del mismo modo, se aclara
qué vertientes del concepto serán las adoptadas en este trabajo. Seguidamente, el capítulo 2
presenta al lector la descripción de la Fundación Chiminigagua justificando porque fue elegida para
llevar a cabo esta investigación. Más adelante, el capítulo 3 presenta las variables que se tendrán en
cuenta y las enfrenta con los datos encontrados en encuestas y entrev istas hechas a los miembros
de Chiminigagua. Para terminar, el capítulo 4 ofrece las conclusiones encontradas luego del análisis
de los resultados. Complementariamente, se presentan anexas las muestras de la encuesta y la
entrev ista así como tablas y gráficas que resumen los resultados.
Así pues, de ser ex itoso, este estudio proveerá hallazgos sobre redes de Capital Social en Bogotá,
fruto de inic iativas de acción colectiva ex itosas; los beneficios que brinda la participación en
asociac iones voluntarias, datos sobre el nivel de confianza interpersonal de sus miembros, y la
relac ión de sus miembros hacia las instituc iones políticas más representativas del país. Los
hallazgos podrían contradecir o ev idenciar lo planteado por Maria Mercedes Cuéllar; en todo caso, la
tesis principal de este trabajo le apuesta a reelegitimar el valor de las redes de Capital Social en
Colombia como impulsoras de desarrollo positivo a nivel ciudadano.
Encontrar que las asociaciones colectivas son una fuente de Capital Social positivo para el país y no
de Capital Social Perversoi3 resulta más que suficiente justificación para la realización de este
estudio; ya que es preciso luchar contra la mala percepción que los ciudadanos se pueden estar
forjando sobre el concepto de Capital Social, debido a estudios que lo caractericen como Perverso o
a planteamientos como el de Ramón Daubón que dice que los grupos de Capital Social nos llevan a
confiar en los nuestros y desconfiar de los otros (Daubon 2002: 42).
3 Según Maria Mercedes Cuéllar, el Capital Social Perverso es uno que “no contribuye al logro del bienestar colectivo” (Cuéllar, 2000: 862). El tema se amplía en el Marco Teórico.
CAPITULO I
MARCO TEÓRICO Y ESTADO DEL ARTE
Los estadounidenses de todas las edades, condiciones y de cualquier carácter están siempre formando
asociaciones. No se trata únicamente de asociaciones comerciales e industriales, en las que todos participan,
sino de otras mil: religiosas, morales, serias, triviales, muy generales y muy restringidas, enormemente
grandes y muy diminutas (...) Nada según creo merece más atención que las asociaciones intelectuales y
morales de Norteamérica. (Toqueville, 1835: 473)
Una de las cosas que más le llamó la atención a Alex is de Toqueville en su v isita a Norteamérica a
princ ipios del siglo XIX, fue la presencia de asociaciones de todo tipo entre los ciudadanos. Alex is de
Toqueville fue el primer intelectual europeo en hacer explícito su reconocimiento del valor pos itivo
que las asociac iones civ iles traen a las democracias, aunque en esa época todavía no se acuñaba
un término para referirse a este valor. Más adelante en 1916, fue el soc iólogo L.J. Hanifan quien se
refirió con un término preciso al valor de aquellas asociaciones entre padres de famil ia en las
escuelas públicas de EEUU que estudiaba; lo llamó Capital Social. Hanifan escribió, “abandonado a
si mismo, el indiv iduo es socialmente un ser indefenso... pero si entra en contacto con sus vecinos,
y estos con nuevos vecinos, se producirá una acumulac ión de Capital Social que podrá satis facer de
inmediato sus necesidades sociales y generar unas condiciones sufic ientes para mejorar de forma
sustancial las condiciones de v ida en toda la comunidad.” (Hanifan 1916: 130).
El concepto descubierto por Hanifan pasó relativamente inadvertido hasta años después. A partir de
los años 50’s un grupo de Sociólogos empezaron a interesarse por el tema; los más famosos de
ellos son el francés Pierre Bourdieu, y James S. Coleman, quienes en la década de los 80’s
empezaron a usar el concepto de manera repetida para referirse al valor de las asociac iones
colectivas en ciertos contexto. Es así como las primeras definiciones sobre el Capital Social surgen
de un punto de v ista sociológico. Más adelante, a medida que el concepto fue tomando fuerza, otros
cientis tas sociales se fueron interesando por su estudio y muchos lograron demostrar su validez de
forma empírica. Entre ellos, los politólogos (Robert Putnam, Francis Fukuyama, Carles Boix i, Daniel
Posner, entre otros) se han interesado por darle al concepto nuevas aplicaciones, saliéndose del
aspecto indiv idual para mirar el aspecto comunitario y nacional del Capital Social. Los politólogos le
dieron un giro interesante al concepto al relac ionarlo con aspectos como el comportamiento c ív ico de
los ciudadanos y el buen desempeño de los gobiernos. También los economistas se han interesado
por el tema, Kenneth J. Arrow, Partha Dasgupta y Joseph Stiglitz, entre otros, han escrito sobre la
importancia del Capital Social. Así, se han logrado aprox imaciones multifacéticas al tema, se
introdujeron variables económicas, y se lograron descubrimientos tan significativos como el de una
relac ión directa entre la densidad de las redes de Capital Social y el desarrollo económico de los
países4.
Los sociólogos estudiosos del tema han profundizado en el estudio de tres aspectos principales que
resultan úti les para organizar el seguimiento del concepto de Capital Social5 y por eso serán usados
como los tres ejes principales de este marco teórico. Para comenzar, es apropiado mirar dis tintas
definiciones del concepto de Capital Social, luego mirar las fuentes del concepto respondiendo a la
pregunta ¿De dónde surge el Capital Social?, y para terminar, mirar los efectos del Capital Social
sobre los indiv iduos, las comunidades y la naciones.
Dado lo anterior, se comenzará por darle una mirada analítica a las principales definiciones del
concepto. A medida que se observan dis tintas definiciones del mismo, se pueden ir descartando
o aceptando ciertos puntos claves para ir construyendo una propia versión de lo que se entenderá
por Capital Social en este trabajo de investigación. 4 Un ejemplo de esto es el estudio hecho por Francis Fukuyama, en su libro Confianza. 5 Mencionados en el artículo Social Capital: origins and applications escrito por Alejandro Portes.
Para empezar están las aprox imaciones sociológicas al concepto. Mientras Bourdieu diferencia entre
los recursos que se obtienen del Capital Social y la forma de obtenerlos, Coleman en cambio
equipara el Capital Social a los recursos que se pueden obtener de él, definiendo el concepto a partir
de su func ión. Bourdieu define el Capital Social como “el agregado de los actuales o potenciales
recursos que están ligados a la posesión de una red durable de relac iones de mutuo conocimiento
más o menos institucionalizadas6” (Bourdieu 1985: 284). Coleman en cambio lo describe como “una
variedad de entidades con dos elementos en común: todas consisten en c ierto aspecto de
estructuras sociales, y todas facil itan ciertas acciones de los actores, ya sean individuales o
colectivos, dentro de la estructura7” (Coleman 1988: 98). Otra definición interesante dentro de las
sociológicas del concepto es la usada por Burt, que lo ve como “los amigos, colegas y contactos más
generales por medio de los cuales uno recibe oportunidades para usar su capital humano y
financiero” ( Burt 1992: 9 ).
Las definic iones sociológicas no dejan de ser abstractas. El horizonte politológico en cambio, amplia
más el contenido conceptual. Una forma más fácil para entender el concepto es hacerlo a partir de
las nociones de capital humano y capital físico, las cuales se sabe, mejoran la productiv idad de una
persona, empresa o nación. Así, el Capital Social se refiere al valor productivo que tienen las redes
de interacción social. “Mientras el capital físico se refiere a objetos físicos, el humano a propiedades
de las personas, el Capital Social guarda relación con los v ínculos entre indiv iduos– las redes
sociales y las normás de reciprocidad derivadas de ellas. En este sentido el Capital Social está
estrechamente relacionado con la Virtud Cívica8” (Putnam 1996: 14). Para entender por qué las
6 Traducción propia. 7 Traducción propia. 8 Esta relación se hizo evidente cuando en la década de los 80’s Putnam adelantó una investigación obre el comportamiento gubernamental en las distintas regiones de Italia, y demostró que en aquellas regiones donde ex istían redes más densas de asociaciones ciudadanos, los ciudadanos participaban más en la democracia y sus gobiernos eran más productivos. Los resultados fueron publicados en el libro Making Democracy Work, citado en la bibliografía.
redes de Capital Social pueden contribuir a fortalecer en los indiv iduos v irtudes c ív icas, es necesario
mirar los efectos del Capital Social que se exponen más adelante.
A nivel local, en Colombia son ya varios los estudios que se han hecho sobre Capital Social9. Entre
estos estudios una gran controversia se ha gestado sobre la definición del Capital Social, e incluso
se ha acuñado el concepto de Capital Social Negativo- por la influencia de tantas lealtades que se
constituyen como mafias, pandillas y redes corruptas. Sin embargo, este trabajo en particular, se
inclinará a perfilar el Capital Social en Colombia bajo nociones positivas como las de los autores
Putnam, Coleman, Bourdieu y Burt, además le dará un lugar especial a la noción expresada por
John S udarsky, quien afirma que “...toda noción de Capital Social l leva implícita la noción de fuertes
externalidades positivas” y nos inv ita a reflex ionar sobre lo siguiente: 1- No toda relación soc ial de
solidaridad es Capital Social, y 2- Para que se de Capital S ocial, es necesario recoger el concepto
de fuertes externalidades de la concepción inicial de los economistas (Sudarsky 2001: 26).
1.1Fuentes de Capital Social
Las fuentes de las que surge el Capital Social son tan intangibles como el propio concepto. Mientras
que el Capital Humano es cuantificable en la educación de las personas y el Capital Económico en
cifras financieras, el Capital Social es bastante difícil de cuantificar. Se sabe que el Capital Social
reside en las relaciones sociales entre indiv iduos, por lo tanto el primer paso para que se genere es
que los indiv iduos socialicen entre s í. Una vez se da tal socialización se constituyen asociac iones
informales o formales que son fuentes de Capital Social.
9 Entre ellos los más conocidos son los de los autores Mosser y Mc Iwaine 1999, Rubio 1997, Cuéllar 200, Sudarsky 2001.
Ahora bien, ¿Sobre qué tipos de asociaciones se constituyen las fuentes de Capital Social? las
respuestas son varias. Coleman señalaba que la primera fuente de Capital Social estaba en las
relac iones comunitarias y la segunda fuente en las relaciones familiares. Toqueville incluía en su
lista las asociaciones “morales, religiosas, graves, fútiles, muy generales y muy particulares”
(Toqueville 1835: 473). Putnam, por su parte, para describir las fuentes de Capital Social, señala las
diferencias que se pueden dar en las redes sociales:
“ ...algunas suponen redes repetidas, intensiv as y muy ramificadas- como el grupo de metalúrgicos que se
reúnen cada viernes para tomar un trago..., otras son episódicas, de una sola rama y anónimás, como el caso
del rostro familiar que v emos en el supermercado. Algunos tipos de Capital Social... poseen una organización
formal con papeles de afiliación, reuniones regulares, estatutos escritos y v ínculos con una federación
nacional, mientras que otros, como un partido de basketball ocasional, son más informales. Ciertas formás de
Capital Social...persiguen objetiv os ex plícitamente dirigidos a la atención pública, otros, como un club de
Bridge, ex isten para el disfrute priv ado de sus miembros, y otros más, como el club de rotarios, sirven a fines
tanto públicos como privados” (Putnam 1996: 20).
La descripción de Putnam puede complementarse con la forma de ver el concepto que tiene
Fukuyama, quien señala que las fuentes del Capital Social estarían en las que el llama asociac iones
intermedias, que son asociaciones que están en el medio entre la famil ia y el Estado. Así pues, para
este trabajo se entenderán por asociaciones de Capital Social aquellas que v ienen en su forma
primordial a los ojos de Coleman, o en otras palabras, las asociac iones intermedias entre el Estado
y la familia.
La forma y nombre que puede tomar una asociación de este tipo es múltiple, en todo caso, hay una
distinción imprescindible que se tomará en cuenta en esta investigación. Se trata de la distinción
entre el Capital Social Inc lusivo/ que tiende puentes (en inglés se le llama bridging) y el Exclusivo /
vinculante (Bonding), hecha inicialmente por Gittel l y Vidall10 (1998: 8) y acogida por la mayoría de
los autores interesados en el tema. El Capital Social de tipo v inculante es aquel que dado que
refuerza intensamente los lazos entre sus miembros, termina generando exclusión hacia los
miembros que no pertenecen a tales asociac iones; Sudarsky lo llama Capital Social que cementa.
En cambio, las organizaciones de tipo incluyente, tienden puentes hacia cualquier c iudadano
interesado en participar, “Entre los casos de Capital Social Vinculante están las organizac iones
fraternales étnicas,... entre las que tienden puentes están el movimiento por los derechos civ iles...”
(Putnam 1996: 20).
Una segunda precisión ya acuñada entre los estudiosos del Capital Social, es la de diferenciar entre
organizaciones: Primarias- de estructura familiar, Secundarias- donde se expresa el compromiso
cív ico, y Terciarias- donde se pagan cuotas de pertenencia y no necesariamente se está en contacto
con el resto de los miembros. De esta manera, para este trabajo se acordarán como fuentes de
Capital Social las organizaciones secundarias sobre el resto de organizaciones.
Una vez establec idas tales asociaciones, dentro de ellas se empiezan a dar ciertas pautas de
cooperación entre indiv iduos, el beneficio princ ipal que hace que a este concepto se le pueda ver
como una forma de capital. Los indiv iduos se unen en forma de asociación formal o informal, y
deciden cooperar juntos para buscar ciertos fines que solos no pueden alcanzar; la cooperación
entre indiv iduos es pues, la fuente más puntual que podemos señalar de Capital Social. Toqueville
afirmaba que a medida que una sociedad se hace más igualitaria, sus miembros más poderosos
pierden poder, mientras los más débiles lo ganan. Esto hace que en una sociedad democrática en
donde algunos indiv iduos deciden unirse con el fin de lograr metas específicas, se necesite mayor
número de indiv iduos cooperando para lograr un grupo con un poder suficientemente significativo
(Toqueville 1835: tomo 2 capitulo 4). En términos más exactos, se necesita la cooperación de un 10 Citados por Putnam, 2002.
número relativamente significativo de indiv iduos para que se constituya una fuente de Capital Social,
el número exacto dependerá de los fines en particular que se pretenda alcanzar. (Para lograr
diversión por ejemplo, una mesa de 6 jugadores de cartas puede ser suficiente, pero para lograr la
protección de una selva tropical se necesitan bastantes más voluntarios).
Ahora bien, ¿Por qué se da tal cooperac ión entre indiv iduos? Algunas teorías explican que la
cooperación surge cuando los actores esperan algo a cambio, interactuar con otros indiv iduos ofrece
ventajas que pueden o no ser observadas a simple v ista; “Investigac iones experimentales han
mostrado como la cooperación estable puede surgir espontáneamente entre actores que de otra
forma no cooperarían, cuando estos valoran futuras recompensas y esperan interactuar nuevamente
un número indefinido de veces11” (Boix i, Posner 1998: 2). Al ver los efectos positivos del Capital
Social más adelante, se entienden las causas que pueden llevar a los indiv iduos a decidir actuar
colectivamente.
Una vez se han identificado sus fuentes, se hace posible cuantificar el Capital Social de un país o
comunidad local mediante indicadores. En su estudio sobre descentralización en I tal ia, Putnam
uti lizó indicadores como el número de asociaciones civ iles por habitante, la lectura de periódicos, la
participación en referendos, el uso del voto preferente (recordemos que la v isión de Putnam sobre el
Capital Social para aquel estudio estaba estrechamente ligada a la participación cív ica en la
democracia). En un trabajo posterior, ti tulado Solo en la Bolera – Colapso y Resurgimiento de la
Comunidad Norteamericana, Putnam incluyó además indicadores de participación en asuntos
públicos, de sociabil idad informal, de voluntariado en la comunidad, de confianza social, y de v ida
comunitaria organizativa, entre otros. En los estudios locales colombianos, Maria Mercedes Cuéllar y
John Sudarsky -quienes también tienen siempre en mente el concepto de civ ismo- han incluido los
indicadores de Putnam, además de otros indicadores como el Republicanismo Cív ico, la
11 Traducción propia.
información, la transparencia, los medios en el caso de S udarsky, y los de estructura de la familia e
incertidumbre frente al futuro, en el caso de Cuéllar (sólo por nombrar los más notables).
1.2 Los efectos del Capital Social
Los estudios recientes han contribuido a esclarecer los buenos y malos efectos que pueden traer las
redes de Capital Social. Dentro de la bibliografía estudiada se han identificado 5 benefic ios
princ ipales que surgen de formar redes de Capital Social, los cuales premian tanto a los ciudadanos
indiv iduales como a las comunidades, y en consecuencia a las naciones que los poseen. Para
comenzar, el primer beneficio trata de que las redes de Capital S ocial les permitan a los ciudadanos
actuar conjuntamente y solucionar problemás colectivos que indiv idualmente no podrían
solucionar12, lo cual es bastante relevante para este trabajo.
El segundo beneficio está directamente relacionado con el desarrollo económico, porque es el hecho
de que al generar confianza entre los ciudadanos se reducen los costos de las transacciones
sociales13 y “no hay necesidad de gastar tiempo y dinero para asegurarse de que los demás
cumplirán su parte del acuerdo” (Putnam1996: 388). A este beneficio se refiere Alejandro Portes
como el efecto de control social.
En las sociedades modernas son muchas las leyes que los estados deben imponer sobre los
ciudadanos para que no se v iolen ciertas pautas de comportamiento establecidas. Para el
cumplimiento de estas reglas se hace necesario instaurar el control de varios organismos judiciales,
porque ni el Estado ni los indiv iduos confían en que otros indiv iduos cumplirán las normás s i no
están v igilados por las autoridades. Cuando el Capital Social actúa, termina formando otros tipos
12 Muchos académicos han estudiado lo que denominan “ dilemás de acción colectiva” y han demostrado por modelos matemáticos, co mo el dilema del prisionero, porque actuar colectivamente y cooperar puede o no traer beneficios individuales. 13 Los costos de transacción son aquellos a los que se han referido economistas como Arrow o North, los cuales están implícitos en todo intercambio entre individuos y son un costo extra al que se incurre por el simple hecho de adquirir algo, son los costos subyacentes a la transacción en si, como el esfuerzo de viajar hasta el almacén por ejemplo, o el riesgo que se corre de que el comprador no pague la mercancía.
informales de control para el cumplimiento de reglas. Por ejemplo, para un miembro de una
comunidad en donde los miembros son bastante cercanos entre s í, constituye una vergüenza v iolar
una norma de propiedad. De hacerlo, todos los vecinos se enterarían ya que estos, por ser tan
cercanos a él, de cierta forma lo están v igilando constantemente. El que haya este tipo de control
termina generando mayor confianza entre la gente, y por consecuencia, se genera una atmósfera
donde los costos de transacción son más bajos14.
En Colombia por ejemplo, el marco normativo es más ancho que en el promedio de los países, los
requisitos de tramitación para cualquier formalidad son muy extensos, lo que en suma significa que
los costos de transacción se hacen más altos. Esta necesidad de legislar sobre casi todo, se debe
probablemente a la desconfianza que hay entre ciudadanos; influenciada a su vez por factores como
el narcotráfico, la guerra, y la corrupción. “En Colombia, la principal fuente de ineficiencia en los
procesos de intercambio la constituye un ambiente institucional en dónde reina la inseguridad, la
desconfianza, el irrespeto por los derechos, el incumplimiento, las deficiencias de la justicia.” (Rubio
1996: 43). En todo caso, el efecto de control social que en teoría tiene el Capital Social, debería
resultar bastante úti l en un país con antecedentes como los de Colombia.
El tercer beneficio del Capital Social que vale la pena resaltar, es el surgimiento en los miembros de
estas asociac iones, de cualidades soc iales que son beneficiosas para todo el c írculo social que los
rodea. Entre estas cualidades está la tolerancia, la solidaridad hacia las desgracias de los demás, la
confianza en otros, la disminución de la indiferencia social. Si lo anterior es cierto, en la medida en
que los miembros de las asociac iones voluntarias empiezan a confiar más en los demás, su
confianza puede extenderse también hacia personas más lejanas a su c írculo social, como por
ejemplo los representantes políticos que eligen. Esto implicaría una relación directa entre Capital
14 Para Fukuyama, esto es lo que explica el desarrollo mayor en países como EEUU y Japón donde la densa red de asociaciones permite que los ciudadanos se conozcan más, confíen más en unos y otros y por ello estén dispuestos a tomar mayores riesgos en materia económica como fundar una nueva empresa o dar un préstamo.
Social y confianza en las instituciones democráticas, tema que este estudio pretende ahondar para
el ámbito local bogotano.
Otra función del Capital Social, es la que Portes denomina fuentes de beneficios para redes
extrafamiliares (Portes 1998: 12). Esta función se refiere al trabajo que cumplen las organizac iones
como redes de información, que facili tan la consecución de beneficios para sus miembros. Por
ejemplo, a la hora de buscar un trabajo, las redes dentro de una asociación facil itan información a
sus miembros para que se presenten a las entrev istas disponibles y a la vez los priv ilegian, ya que
los encargados tienden a preferir a miembros de sus mismás asociaciones o a sus allegados para
los trabajos disponibles.
Un quinto beneficio es de tipo ps icológico para el indiv iduo. “Cada vez aumentan más los datos que
demuestran que la gente cuya v ida es rica en Capital Social afronta mejor sus traumás.” (Putnam
2002: 390). Esto gracias a las cualidades que el indiv iduo adquiere en su diario conviv ir con otros.
1.3 Lo estudiado en Colombia
Los beneficios de las redes de Capital Social han sido estudiados sólo recientemente a nivel local en
Colombia, y se podría decir que aún es muy poco lo resuelto sobre el tema. Incluso autores como
Maria Mercedes Cuéllar se atreven a plantear que el Capital Social en Colombia más que
beneficioso es un Capital Social Perverso, que “no contribuye al logro del bienestar colectivo”
(Cuéllar 2000: 862). Cuéllar expone fuertes cuestionamientos acerca del Capital Social colombiano;
cuestiona por ejemplo que quienes más se asocian son quienes menos tienden a acatar las leyes, y
quienes más recurren a la amenaza. Dice Cuéllar:
“Sorprende que a estos segmentos de la población si les responde la justicia... como si ello fuera poco hay
una serie de resultados que llevan a cuestionar aún más el carácter del Capital Social colombiano. En efecto
donde ex isten mayores niveles de Capital Social es mayor el respeto por activ idades delictiv as, tales como el
narcotráfico. Además, este el único segmento de la población al que le merecen respeto los políticos....pues
percibe que, junto con los narcotraficantes, son los agentes más exitosos” (Cuéllar 2000: 872).
Los planteamientos de Cuéllar llaman la atención pues se basa en fallas de la sociedad colombiana,
como el hecho de que la justicia en general no sea eficiente y el hecho de que los políticos tengan
una imagen corrupta, para de allí afirmar que si los miembros de asociaciones voluntarias se
comportan dis tinto, algo de malo debe haber en ellos.
Pero por medio de este estudio, se pretende dar una mirada más amplia a los beneficios particulares
que se logran en materia de participación cív ica, control social y confianza entre los miembros de
asociac iones secundarias, así como la incidencia de las redes de Capital Social en la confianza
hacia los representantes políticos. Por esto, es conveniente dar ahora una aprox imación al tema de
la relación entre Capital Social y democracia.
1.4 Capital Social y Democracia
Un primer aspecto es ver como la democracia afecta el surgimiento de redes de Capital Social. Por
un lado, Toqueville señalaba que la igualdad en los hombres que logra la democracia ideal, es una
fuente que obstaculiza la formación de asociaciones entre ellos, ya que al ponerlos uno al lado del
otro sin nada en común se da paso a la indiferencia (Toquev ille 1835). Fukuyama también habla de
ciertas democracias católicas latinas donde, aunque no se dio el socialismo, las instituc iones
intermedias no se desarrollaron a fondo; “Muchos países católicos latinos, como Francia, España, Italia, y
una cantidad de naciones latinoamericanas presentan una distribución tipo “silla de montar” en cuanto a sus
organizaciones, con familias fuertemente unidas por un lado, un Estado muy fuerte por el otro, y casi nada en
el medio” (Fukuyama 1996: 76).
Pero hay quienes afirman que gracias a que la democracia defiende principios como la libre
asociac ión y la libre competencia, entonces será en los países democráticos en donde mejor se den
las condiciones para que surjan tales instituciones. Fukuyama por ejemplo, menciona que “una de las
consecuencias más dev astadoras del socialismo....fue la eficaz destrucción de la sociedad civ il que tuv o lugar
en esos países (...) Cuando Stalin consolidó su poder a fines de la década de los 30, la Unión Sov iética
carecía por completo de un sector intermedio, es decir, asociaciones intermedias fuertes, duraderas y unidas.”
(Fukuy ama 1996: 77)
¿Es Colombia un caso que ev idencia lo propuesto por Fukuyama? ¿O también ev idencia lo
planteado por Toqueville? Los estudios hechos por John Sudarsky y Maria Mercedes Cuéllar no son
muy alentadores, y mucho menos a la hora de mostrar la relación del Capital Social con los índices
de confianza en las instituciones políticas15. Sin embargo, esto podría estar relacionado con la
definición inicial que se le da al Capital Social, que en el caso de Cuéllar, es lo suficientemente
amplia como para que en ella quepan mafias y pandillas. Cuéllar se distancia de las principales
corrientes que estudian el Capital S ocial al no partir del hecho de que se habla de este como redes
conformadas por miembros de la sociedad civ il, y una de las caracterís ticas eje de la sociedad c iv il
es precisamente que se trata de un grupo de ciudadanos que se acogen voluntariamente a las
reglas de juego que dic ta el Estado. El tema de la Sociedad Civ il como eje motivador del Capital
Social, será tratado más adelante.
En cuanto a sus hallazgos sobre los bajos niveles de confianza de los colombianos hacia las
instituciones más representativas (Fuerza Pública, Ejército, Iglesia, Partidos Políticos, Congreso,
Empresa Privada y otros), Cuéllar los ve como muy mal indicio, “Una baja confianza en las
instituciones se constituye en el indicio de que la impresión intuitiva de crisis que enfrenta el país 15 El estudio de Cuéllar por ejemplo, mostró que entre aquellas personas que participan en asociaciones, la confianza en el Congreso y el Presidente es aún menor en comparación al resto de la sociedad.
tiene asidero en la reducida confianza del representado en su representante, siendo la confianza la
esencia del v ínculo que debería unirlos” (Cuéllar 2000: 57). No se puede negar el hecho de que los
bajos niveles de confianza en las instituciones traen nefastas consecuencias para toda la nación. Sin
embargo, el eje de este estudio se centra en una de las posibles fuentes que afecta tal confianza (el
Capital Social) y no en sus consecuencias.
En todo caso, las causas de los resultados negativos que Cuéllar encuentra sobre el Capital Social,
y su discordancia con los hallazgos de investigadores como Putnam, aún no está claro, por lo cual
es un tema que valdría la pena investigar más a fondo, teniendo en cuenta también la última
publicación de John Sudarsky titulada “El capital Social de Colombia” (Departamento de Planeación
Nacional, 2001). La publicación de Sudarsky busca instaurar una sis tema adecuado para medir el
Capital Social en Colombia. Para este autor el problema de las mediciones creadas en contextos
distintos al colombiano es que “dejan por fuera muchas de las formaciones sociales en las cuales es
necesario medir el Capital Social, especialmente por respecto a las caracterís ticas pluriétnicas y
multiculturales recogidas en la Constitución colombiana de 1991”. Por esto, Sudarsky construye un
elemento llamado la medición Barcas: el barómetro del Capital Social, que inc luye todas las
variables que considera relevantes en el caso colombiano, para así medir el Capital Social en el país
de manera más asertiva. A pesar de concluir que comparados con otros niveles mundiales, los
niveles de Capital Social colombianos dejan mucho que desear. El estudio de Sudarsky presenta
conclus iones más positivas respecto al carácter del Capital Social en Colombia que las presentadas
por Cuéllar, ya que para él, el Capital Social siempre será positivo. “El Capital Social l leva implícita la
noción de externalidades positivas. Un mundo de drogas, v iolencia y muerte, poco saldo puede
tener. Precisamente no se considera Capital Social porque no se concibe la esfera de lo público, no
es Capital Social.” (Sudarsky 2001: 26)
Lo que si está claro es que el concepto de Capital Social es un concepto que cada vez tiene más
fuerza dentro de las investigaciones sobre el desarrollo porque proporciona herramientas para
diseñar políticas públicas adecuadas para lograr fines de progreso. Algunos autores critican la poca
claridad que hay todavía en el uso del concepto y señalan fallas como las pocas herramientas que
tenemos para cuantificarlo y relacionarlo con la calidad gubernamental. En palabras del los teóricos
Boix i y Posner:
“ ... aunque sabemos que la acumulación de Capital Social v aría entre los países y comunidades, actualmente
tenemos un pobre entendimiento de como ex plicar tal v ariación. Además tenemos el tema de ev idenciar los
mecanismos que conectan el Capital Social con una buena actuación del gobierno. Aunque la ev idencia
acumulada sugiere fuertemente que los dos factores están correlacionados, nos hace falta un entendimiento
de los micropuentes que las conectan16” (Boix i, Posner 1998: 2).
Por lo cual, se hace imprescindible ahondar en el estudio de este concepto en el contexto particular
de Colombia así como en la relación de otros conceptos que están íntimamente relacionados con su
desarrollo, tales como la Sociedad Civ il .
1. 5 Sociedad Civil: receptora de Capital Social
Participar es ejercer el deber que tenemos de velar por nuestro patrimonio público para que este sea
dirigido hacia cumplir el bien colectivo. Preguntar por lo público es un derecho legítimo inherente a
nuestra condición de ciudadanos, un derecho que debería ser interiorizado al punto que lo
incorporemos a nuestra cultura, para que sea ejerc ido con la espontaneidad y desprevención de
aquel que pregunta por lo que es suyo, el patrimonio público. El objeto de la participación es
promover la eficiencia en la gestión pública, la orientación de la gestión a la obtención de resultados
16 Traducción propia.
conforme a las necesidades sociales, y por medio de la participación establecemos esquemás de
responsabil idad, rendición de cuentas, y se ejerce una pres ión v igilante sobre los gobiernos.
En la medida en que los ciudadanos se atreven a participar, pasan de ser habitantes pasivos de un
territorio a convertirse en parte de la Sociedad Civ il. Según la definición más generalizada de este
concepto expuesta por Gramsci, la sociedad civ il está compuesta por ciudadanos activos
preocupados por los asuntos públicos de la nación y dispuestos a guiar al resto de la sociedad. Es
un espacio de relación entre indiv iduos que se integran de manera voluntaria; para lo cual se
necesita que estén inmersos dentro de una cultura política, conscientizados e informados de una
dinámica de lo político (MURILLO, MEJIA 1996: 11). La Sociedad Civ il está conformada por una
pluralidad de organizaciones de origen ciudadano a través de las cuales el indiv iduo se expresa ante
el Estado. Las organizaciones de este tipo cumplen la función de actuar paralelamente al Estado sin
necesidad de competir por acceder al poder político. Gracias a su acción permanente, una Sociedad
Civ il ex itosa es aquella que logra rescatar para sí los espacios de participación que merece y
acceder a los procesos de toma de decisiones que afectan a la comunidad. En palabras de Mgobori
y Chibudu, “La sociedad Civ il se convierte en una espina constante para el Estado, que intenta
monopolizar la política” (Mgobori, Chibudu 1999: 18).
La importancia de la Sociedad Civ il es fundamental para esta investigac ión ya que en los estudios
hechos sobre Capital Social se ha establecido la importanc ia innegable de la Sociedad Civ il como
recipiente para acumular este tipo de capital. John Sudarsky lo plantea así: “...la sociedad civ il es el
ámbito de mayor impacto en la generación de Capital S ocial y la posibilidad de su desarrollo secular
a través de organizac iones voluntarias no religiosas es un camino claro para hacerlo” (Sudarsky
2001: 308). El autor aclara que no se trata de que los colombianos acaben con la religión, s ino de
crear otro tipo de organizaciones paralelas, de carácter secular, a las que también se les dedique
tiempo en todos los sectores de la soc iedad.
Son varias las funciones que debe asumir la Sociedad Civ il, entre ellas están la mediación política
entre sociedad y Estado, el contrabalance de poder respecto a este último (sin pretender remplazarlo
sino más bien ser su órgano de control), el fortalecimiento del sentido de comunidad y la
socialización de normás y valores (Bejarano 1999: 286). Las tres funciones le conciernen a esta
investigación, dado que facili tan las formación de lazos de Capital Social dentro de la Sociedad Civ il.
Gracias al trabajo de organizaciones ciudadanas de la Sociedad Civ il se hace posible cohesionar
comunidades, infundir valores democráticos, y fomentar la participación de los ciudadanos; todo esto
mientras se busca el bienestar general de la sociedad. De allí la importanc ia de este concepto, de
acuerdo con las pautas ya expuestas para esta investigación, se podría concluir que toda
organización de la Sociedad Civ il fomentará el esparcimiento de Capital Social y así mismo, entre
más Capital Social posea una sociedad será más factible que surja una activa Sociedad Civ il.
Hay muchos factores que pueden influir en la creación de la Sociedad Civ il participativa dentro de
un colectivo. Entre ellas está la integración de las comunidades, para la cual es necesario el fomento
de políticas publicas enfocadas al desarrollo de una mejor calidad de v ida en las ciudades, tema que
se verá a continuación.
1.6 Fomentando la participación ciudadana: el espació público y la cultura en Bogotá
Fomentar la unidad de las comunidades, específicamente a nivel local, es uno de los retos que
afrontan las ciudades modernas. En el caso de Bogotá, esta es una ciudad que ha venido
atravesando un proceso de transformación durante sus últimás alcaldías, buscando convertirse en
una ciudad más amena, que pueda ofrecer igualdad de oportunidades a sus habitantes. El tipo de
desarrollo necesario en Bogotá no depende sólo de factores económicos, sino en gran parte de la
calidad de v ida urbana que pueda darse a las comunidades que conforman nuestra ciudad. En
palabras del ex alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa “... la manera de organizar la v ida urbana
puede ser un instrumento poderoso en la construcción de una sociedad más igualitaria e integrada y
en lograr que prevalezca el interés general... para nuestro modelo, más que la distribución del
ingreso, lo que importa es la calidad de v ida” (Peñalosa 2003: 15).
Dentro del enfoque que considera a las ciudades como unidades estratégicas de éx ito económico,
se ha establecido que son varios los elementos que debería proveer una ciudad para poder competir
con otras de talla mundial, y atraer riqueza cultural y económica. Una ciudad competitiva debería ser
lo suficientemente agradable como para atraer a su área a famil ias, parejas, solteros, jóvenes,
v iejos, académicos, ejecutivos, artis tas, políticos y gente del común, así como empresas ex itosas,
universidades, centros artís ticos, e instituciones políticas. Según la Cámara de Comercio de Bogotá,
la ciudad debería proveer buenos salarios, transporte público, cobertura y calidad de serv icios
básicos, y las que más conciernen a este trabajo: calidad de infraestructura, calidad de medio
ambiente, calidad de entretenimiento y ofertas culturales (Cámara de Comercio de Bogotá 1998 :17).
Así mismo, los activos producidos por la ciudad, o en otras palabras, el enriquecimiento y desarrollo
de una metrópolis como Bogotá depende de siete formás de capital entre las que están: el capital
natural, el financiero, el de infraestructura, el de conocimiento, el humano y el cultural (Cámara de
Comercio de Bogotá 1998:26). El Capital Cultural por su parte “...se manifiesta a través de la oferta
cultural (atracciones físicas) y la oferta ética (el orgullo regional, la confianza presente entre los
ciudadanos y ciudadanas)” (Cámara de Comercio de Bogotá 1998: 26). Se podría plantear que el
Capital Social se encuentra incluido dentro del Capital Cultural, ya que concierne a aquella confianza
entre ciudadanos de la que habla su definición. Significativamente entre las formás de medir los
factores intangibles del Capital Cultural (confianza, orgullo y diversidad) se encuentra uno de los
indicadores que usaba Robert Putnam para estudiar el Capital Social en I talia, la participac ión de los
ciudadanos en las elecciones de alcalde, usado para mirar los niveles de compromiso cív ico de la
ciudad.
Así pues, está v isto que hay toda una serie de factores que pueden mejorar la calidad de v ida de los
ciudadanos mejorando sus oportunidades, acercándolos más a una v ida digna que a su vez les
proporc ione otra serie de beneficios a largo plazo, entre los que están el poder hacer parte de una
comunidad unida. Dentro de estos beneficios también está el Capital Cultural, que junto con el
Capital Social encierra un universo de valores relevantes para este estudio. Aunque se han v isto
esfuerzos para ofrecer mejoras en el Capital Cultural, Bogotá tiene aún que priorizar el modelo de
ciudad que le quiere brindar a los adultos y niños de un futuro, de modo que encamine sus políticas
hacia maneras efectivas de pos icionar a la cultura en el lugar que merece.
1.7 Espacio público en un esquema participativo
En cuanto al Capital de Infraestructura y la calidad de medio ambiente, está v isto que estos también
son factores indispensables para mejorar la calidad de v ida en una ciudad, de modo que sea posible
que surjan comunidades unidas con redes de Capital Social. Estos factores están incluidos dentro
del espació público de una ciudad, concepto que Hannah Arendt y John Rawls describen de forma
acorde con la concepción de este trabajo. Arendt describe al espacio público como el “ámbito
priv ilegiado para el encuentro ciudadano cimentado en discursos y acciones articuladas
sistemáticamente” (Murillo 2005: 4). Por su parte, Rawls lo describe como “un contorno para la
reciprocidad ligado a la noción de razón pública resultante de la articulación de las racionalidades
indiv iduales integradas en el ámbito deliberativo y enmarcada en los mínimos habermásianos- como
lo son la inclusión, el bien común, la igualdad, el marco normativo, la justicia básica, la ausencia de
coerción, el respeto por las opiniones de los demás y la búsqueda de una conclusión colectiva”
(Murillo 2005: 6)
El valor del espacio público es a menudo subestimado. En ciudades como Bogotá, el proceso de
renovación y apropiación de este espacio es una tendencia reciente, y aún hoy después de los
esfuerzos de alcaldes como Peñalosa y Mockus, el espacio público afronta un gran dilema: ser
usado como medio de subsistencia para los desempleados de la c iudad, o ser aprovechado para el
disfrute de los peatones, la estética armónica de la metrópolis, la recreación de la sociedad y la
integración de las comunidades. Urbanis tas de Bogotá han identificado este problema, y hoy buscan
maneras de revalorar el espacio público y posicionarlo mejor en el imaginario del ciudadano urbano.
“Mientras ex iste un ev idente respeto por el espacio privado de habitación, con una calidad y
seguridad constructivas,... el desconocimiento de la importancia del espacio público como lugar de
comunicación y encuentro es casi total. Las normás ex istentes respaldan su subvaloración” (Casas y
Pombo 1996: 87).
En algunos casos, el espacio público es v isto por las alcaldías como una oportunidad de hacer
grandes obras de embellecimiento de la ciudad, dejando de lado el verdadero valor utili tario que
estas puedan tener y llevando a cabo sus procesos de construcción sin ninguna participación de la
ciudadanía. Este tipo de casos terminan privando a la ciudadanía de la oportunidad de apropiarse de
su espacio a través de sus aportes en su construcción y planeación. Cuando los ciudadanos están
inmersos en un entorno que no les corresponde, los procesos sociales que se supone deberían
ocurrir sobre el espacio público se ven obstaculizados, lo que se refleja en comunidades menos
unidas que no cuentan con los espacios adecuados para encontrarse como iguales. Como lo
plantean los Urbanis tas Oscar Becerra y Maria Fernanda Quintana, la participación del usuario en el
diseño y construcción de sus hábitat debería permitir que este se exprese por medio de sus valores
culturales y termine identificando formás organizativas autónomás que le sirvan para materializar un
entorno físico que satis faga sus necesidades sociales, comunales, familiares e indiv iduales (Becerra
y Quintana 1996: 117) Es preocupante que estos casos de imposición de espacios públicos sean
frecuentes sobretodo en los barrios más populares de la ciudad, “... día a día se multipl ican en cada
uno de estos barrios la imagen monótona y tris te a los cuales los pobladores terminan acomodando
su cotidianidad o transformándolos con elevados costos sociales o económicos. Pues en definitiva,
estos no se acomodan a lo que los pobladores desearían, sino a la forma como se ven forzados en
su entorno, por las condiciones económicas y la segregación socio-espacial de la que son objeto.”
(Jiménez 1996: 91). Además, hay que notar que entre más se involucren los habitantes de un sector
en la planeación y construcción de un espacio cercano a ellos, más se sentirán dueños y
responsables de éste y por lo tanto se interesaran por mantenerlo en buen estado a largo plazo.
Una de las grandes ventajas que trae el que una comunidad comparta el espacio público, se plantea
en términos de seguridad y tranquilidad para el barrio. Compartiendo un parque o una plaza, la
gente empieza a conocerse y aumenta la confianza entre ellos. “Cuando la gente ve a sus amigos,
se encuentra y saluda a sus vecinos, y se siente cómoda interactuando con extraños, tienden a
tener un sentimiento más fuerte de pertenencia y unidad a su comunidad- y al lugar que acoge este
tipo de activ idades sociales. Esto hace de la sociabilidad una cualidad difícil pero inconfundible para
ser alcanzada por un s itio” (Project for Public Spaces 2000: 19). En otras palabras, a través del
ejerc icio cotidiano de compartir el mismo espacio público, las personas tienen la oportunidad de
interactuar, y por lo tanto de darse cuenta de que tienen pocas razones para tener miedo entre sí. Lo
que implica que gracias a la calidad del espacio público se fomenta la interacción ciudadana y así se
crean vínculos de confianza interpersonal y redes de Capital Social.
1.8 De la teoría a la práctica: el caso de Chiminigagua
El caso de la Fundación Cultural Chiminigagua, que será analizado a profundidad en este estudio,
presenta un ejemplo de Sociedad Civ il mayoritariamente juvenil, que se une en una organización
ciudadana para ofrecer activ idades culturales a sus miembros, engrandeciendo así el Capital
Cultural de la ciudad. Además, Chiminigagua presenta un caso de acción ciudadana enfocada a
mejorar el Capital de Infraestructura de la localidad de Bosa por medio de la adecuación del espacio
público necesario para el desarrollo de la v ida comunitaria en el barrio. Pero no sólo nos
enfrentamos con una caso ex itoso de Sociedad Civ il sino que además se sospecha que las
activ idades cotidianas realizadas por esta organización son potenciales fuentes de beneficios para la
sociedad circundante, entre los que vale la pena preguntarse si se incluye la formación de redes de
Capital Social. A continuación una introducción al caso de La Fundación Cultural Chiminigagua.
CAPITULO II
LA FUNDACIÓN CULTURAL CHIMINIGAGUA: UN CASO DE INICIATIVA CIUDADANA EN
BOGOTÁ
“ La arborización o la pintura de una de las casas mediante esquemás participativos construyen identidad.
Son especialmente valiosos los programás mediante los cuales las organizaciones comunitarias conciben y
proponen pequeñas obras, que luego de revisión por arquitectos e ingenieros son contratados con las mismás
comunidades. Más que obras, lo que estos proyectos construyen es comunidad, autoestima, sentido de
pertenencia, dignidad. Algo similar, pero ya no con obras físicas sino con actividades culturales y deportivas
también puede financiarse con las comunidades organizadas.” (Peñalosa 2003: 20)
La Fundación Cultural Chiminigagua situada en el barrio Los Laureles de Bosa, es reconocida en lo
localidad bogotana por la labor cultural que v iene l levando a cabo desde 1986. En sus instalaciones,
la Fundación realiza talleres de danza, teatro y canto, para niños, jóvenes y adultos de manera
gratuita. Además, la Fundación realiza eventos másivos en la Concha Acústica del barrio, en los que
participan grupos de teatro, danza y música, tanto nacionales como internacionales, brindando la
oportunidad a los ciudadanos de as istir a verlos gratuitamente.
Se calcula que unos 300 jóvenes de la localidad asis ten actualmente a los talleres de la Fundación,
sin contar los adultos y los cientos de personas que acuden a ver los eventos en la concha acústica.
Todo esto es posible gracias, entre muchas personas, a los 25 empleados con los que cuenta la
Fundación, de los cuales únicamente la mitad reciben un salario por su trabajo y el resto colabora sin
recibir ningún tipo de remuneración a cambio.
Dentro de los eventos másivos que organiza este equipo de personas sobresalen dos en particular,
por los que Chiminigagua es conocida en toda Bosa: la Dinamización Cultural y la Invasión Cultural a
Bosa. En palabras de Cesar Grande, miembro de la Fundación:
“ ...dinamización es hacer unas jornadas cada fin de semana, presentando grupos artísticos, grupos de
música, de danza, ...son grupos locales, grupos de nosotros, grupos nacionales y grupos internacionales. Y
durante 30 fines de semana más o menos, se presentan en la Concha. También tenemos una jornada los
martes que es de cine, y lo presentan ahí en la concha también, y la gente sale a v er las películas. Ese es
básicamente el proyecto del parque, igual tiene unos ev entos másiv os que son: uno que es el festiv al de
música cultural, se traen grupos de música folclórica....y uno que es como el evento más másiv o que es Bosa
la Escena del Rock. La invasión Cultural es un espacio dónde nos conocen muchísimo. Tratamos de trabajar
no sólo con grupos de teatro de la localidad sino con toda la div ersidad y grupos de teatro, música y danza
que hay en Bogotá. Y hace y a unos tres o cuatro años a niv el internacional, pues estamos tratando de armar
como un circuito de teatro con v arios festiv ales que están por esa época en Colombia para que nos resulte
tanto más fav orable a nosotros económicamente, como para los grupos de teatro” 17
2.1 Emprendimiento ciudadano: La historia detrás de Chiminigagua
Detrás de lo que hoy es Chiminigagua se esconde una larga his toria de lucha, ya que para los
miembros de la Fundación l legar hasta dónde están no ha sido nada fácil, hace 19 años empezaron
de cero.
En 1986, un grupo de jóvenes provenientes de dos barrios en Bosa, Los Naranjos y Los Laureles,
crearon un grupo artístico que se inic ió como un grupo de teatro callejero y a través del tiempo se
convirtió en una Fundación Cultural, irradiando su trabajo a la comunidad. Manuel Neira, el primer
director de ésta, lideró un proceso con los estudiantes para buscar apoyo con la comunidad de la
localidad, recaudar fondos y tratar de involucrar a la mayor cantidad de jóvenes posible. En sus
inicios, la Fundación buscó apoyo financiero de entidades privadas que promovieran el arte, y fue así
como consiguieron ayuda inicialmente por parte de un grupo teatral francés que v ino de v isita a
Colombia. Esto dio partida para que este pequeño grupo de jóvenes se diera a conocer entre el
público y así empezaron a financiarse con sus presentaciones. Desafortunadamente, la comunidad
de Bosa no tenía mucha fe en ellos, pues creían que eran una cuadri lla de hippies que estaban
perdiendo su tiempo, y además a la gente no le interesaba mucho el teatro y el arte. Venus Albeiro
Silva lo recuerda con humor: “Muchos de los que al principio nos miraban como ‘¿Estos locos que
hacen?’ Hoy son los mismos que mandan a sus hijos, o muchos de los que al comienzo tocaba
17 Entrevista con Cesar Grande, profesor de la Fundación. 31 de marzo del 2005, sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa.
darles dulces para que participaran, hoy mandan sus hijos a los talleres y se han dado cuenta que
somos un proyecto de v ida que se desarrolló. Entonces ya hoy en día nos respeta todo el mundo” 18
Poco a poco, estos jóvenes emprendedores siguieron luchando y fueron creciendo, hasta que
lograron conformar lo que es hoy la Fundación Cultural Chiminigagua. Se empezaron a generar
proyectos y programás que hic ieran realidad un objetivo muy claro: por medio del teatro y el arte en
general, difundir, rescatar, organizar y recrear la cultura popular, para lograr que el arte y la cultura
llegaran a las comunidades que tanto lo necesitan.
“...Nosotros iniciamos como un grupo juvenil, éramos todos de 17 o 18 años más o menos. La expectativ a era
formar un grupo de teatro, cosa que se logró y el mismo proceso nos llev ó a la necesidad de que había que
crear una Fundación Cultural. Eso ha sido un proceso y es un trabajo que se ha v enido haciendo desde ese
entonces hasta la fecha, un trabajo de talleres de teatro, talleres de danza, con jóv enes de la localidad.”19
Dentro de los grandes logros de la Fundación Chiminigagua, está el haber promovido la
construcción del Parque de Las Artes, situado en el barrio Los Laureles y la Concha Acústica que se
encuentra en él, gracias a los cuales los vecinos de Bosa pueden dis frutar tanto de activ idades
deportivas como de artís ticas y comunitarias.
Visitar el parque de las Artes Chiminigagua es encontrar en un mismo lugar teatro, poesía, danza,
música y todo tipo de recreación. El terreno luminoso está rodeado de Pinos, Sabaneros, Eucaliptos,
Alcaparros, Saúcos y Acacias que fueron sembrados por la comunidad. En medio del parque,
encontramos la Concha Acústica, una construcción en forma de hongo y techo en acrílico,
construida especialmente para serv ir de escenario a las diferentes activ idades artís ticas que se
realizan en el campo de recreación. “Cuando las personas describen un sitio que dis frutan, palabras
18 Entrevista realizada a Venus Albeiro Silva, Representante a la Cámara por Bogotá. Abril 20 del 2005, Nuevo Edifico del Congreso, Bogotá. 19 Entrevista con Martín Carreño, uno de los fundadores de la Fundación. Abril 9 del 2005, sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa
como ‘seguridad’, ‘diversión’, ‘encanto’ y ‘hospitalidad’, tienden a surgir en repetidas ocasiones. Este
tipo de adjetivos describen las cualidades intangibles –los aspectos cualitativos- de un espacio en
particular” (Project for Public Spaces 2000 :16). Es esto lo que sucede cuando los habitantes del
sector describen al Parque de las Artes. El parque, a simple v ista humilde para un habitante del
norte de Bogotá, está lleno de beneficios para la comunidad, tiene todo lo que los expertos
urbanis tas llaman cualidades intangibles, por esto, el aporte de este espacio al barrio es mucho
mayor de lo que cualquiera hubiera pensado.
En primera instancia fue la construcción de este terreno para la recreación, lo que verdaderamente
consolidó a la Fundación Chiminigagua, lo que le dio credibilidad, respeto y protagonismo frente a su
comunidad, fue una gran oportunidad: un proyecto que englobaba muchas de sus metas. Se trataba
de un terreno que ex istía entre los dos barrios ya mencionados, Los Laureles y Los Naranjos.
Terreno marchito con aspecto de potrero, utilizado a veces como cancha de microfútbol, pero
epicentro de vandalismo, de v icios, de robo y de peligro; este lugar tenía una connotación negativa
para el barrio, era un precipic io que div idía a la comunidad. Era ev idente que tanto los habitantes de
esta colectiv idad como el grupo de jóvenes de teatro estaban necesitando un lugar en donde llevar a
cabo sus activ idades. El terreno era demásiado grande, y dado que los barrios apenas se estaban
conformando como tal y adquiriendo apenas algún sentido de comunidad, surgió la idea de
adecuarlo como escenario deportivo y zona verde, y así, entre los habitantes de la zona, la Junta de
Acción Comunal (JAC) y el Comité de Deportes, se construyó la primera cancha de microfútbol.
Aunque éste ya era un logro, la cancha de microfútbol no era sufic iente para congregar a todos los
sectores de la comunidad, se necesitaba algo que uniera tanto a hombres como jóvenes, mujeres y
niños. La Fundación Chiminigagua creía esencial que la gente se apropiara del espacio y lo
mantuv iera en buen estado, y como la gente del barrio ya empezaba a creer más en estos jóvenes y
lo demostraba asistiendo másivamente a sus presentac iones, ellos tomaron la iniciativa de crear un
verdadero espacio comunal, del cual todos hicieran parte y que todos respetaran. Es así como en
1990, bajo el apoyo de la comunidad y el liderazgo de la Fundación Cultural Chiminigagua, se inició
el proyecto de construcción del Parque de las Artes Chiminigagua, con el objetivo de transformar el
potrero en un parque artís tico con poder de convocatoria, que fuera epicentro cultural de la localidad.
El verdadero reto fue conseguir los fondos para l levar a cabo este proyecto, que incluía la
construcción y transformación física del parque y una gran Concha Acústica en acrílico, con
camerinos, baños y graderías. Los miembros de la Fundación tuv ieron que tocar puerta a puerta,
exponiendo su proyecto ante el sector público y privado. Finalmente, el proyecto contó con el apoyo
de varias instituciones estatales como la Red de S olidaridad Social de la Presidencia de la
República, la Secretaría de Obras Públicas de la Alcaldía Mayor de Bogotá, el Departamento
Adminis trativo de Acción Comunal Dis trital, y el SENA. La Red de Solidaridad Social aportó el 70 por
ciento de los recursos totales del proyecto, equivalentes a $111.292.00020 pesos, que se inv irtieron
en el pago de jornales, en la construcción de la infraestructura general del parque y en la asesoría
de delegados de la RSS. La Secretaría de Obras Públicas aportó $38.500.00 pesos, e igualmente
asesoró y participó en el desarrollo de las activ idades de construcción del parque. La Fundación
Cultural Chiminigagua aportó alrededor de 7 millones de pesos y siendo ésta la precursora del
proyecto, ayudó en su progreso en el área administrativa, de capacitac ión, dinamización cultural,
asesoría y control de las etapas del proyecto. El Departamento Administrativo de Acción Comunal
inicialmente asesoró el diseño arquitectónico y participó en la capacitación de los jóvenes y en la
gestión de este proceso comunitario.
Pero hay que tener en cuenta que el proyecto no fue sólo la creación de un parque sino que además
sirv ió como un promotor y generador de trabajo. Chiminigagua dio trabajo a 120 jóvenes de estratos
20 Entrevista realizada a Ángel Castañeda, miembro de la fundación Chiminigagua y exdirector de los talleres de teatro. 9 de abril del 2005, sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa.
uno y dos, entre los 13 y 25 años de edad, la mayoría con problemás de droga y conflic tos
familiares. El SENA instruyó a los jóvenes en técnicas básicas de construcción, salud ocupacional y
economía solidaria. Además, para ser consecuente con su promoción de la cultura y el arte, los
miembros de la Fundación hicieron un pacto con los trabajadores; para poder seguir trabajando
debían comprometerse medio tiempo en éste y el otro medio tiempo en educación teatral. Así
lograron desv iar a los v iciosos de su v icio y adherirlos a otra forma de v ida, ganándose además el
apoyo de los padres de familia.
Otros benefic iarios de la obra fueron los niños de la comunidad. La Fundación se dio a la labor de
conseguir fondos para instaurar en el parque juegos infantiles (columpios, pasamanos, rueda, etc.) y
se empezaron a realizar proyectos culturales en conjunto con el Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar para que los menores fueran igualmente protagonis tas en la comunidad.
En complemento a todo esto, la comunidad participó en la reconstrucción de un Centro de Atención
Inmediata (CAI) que queda al lado del parque, lo cual ha permitido que haya constante v igilancia, y
se conformó un comité de vecinos que conjuntamente cuidan al parque. Los habitantes del sector
constatan que desde la culminación de la construcción del parque, el nivel de vandalismo ha bajado
considerablemente y la zona es ahora mucho más segura de lo que era antes. Además, ya no se
encuentran casi jóvenes consumiendo drogas, sino involucrados en los diferentes talleres que la
Fundación ofrece. Como lo expresa un habitante del barrio: “Es un sector donde todo el mundo se
conoce y todo el mundo está a la expectativa de ver qué pasa. La fundación ha ayudado mucho a
que la gente se conozca, la Fundación genera justamente ese espacio donde los mismos padres
ayudan a velar por la seguridad del barrio...”21
Y lo constata otro miembro de la Fundación diciendo: “Aquí hemos podido ayudar a unir la
comunidad y a guiar a muchos jóvenes por un camino dis tinto al de la drogadicción.”22
21 Op. Cit. Entrevista con Martín Carreño. 22Op. Cit. Entrevista con Cesar Grande.
Cinco años después de iniciada la renovación del espacio público, la Fundación construyó su sede al
frente del Parque de la Artes gracias al dinero que les prestó una organización de teatro Holandesa.
La sede consta de un edificio de cuatro pisos en el que se encuentran tres salones para dic tar
tal leres, un teatro con capacidad para cien personas en la audiencia, dos ofic inas y un depósito para
guardar dis fraces y escenografía.
En 1998, la labor de la Fundación y de los habitantes del barrio fue reconocida por la Fundación
Corona, quien les entregó el segundo puesto del concurso ‘Por una Bogota Mejor’ de 1998. El caso
de la Fundación apareció publicado en el libro “Bogotá, un esfuerzo de todos”23 bajo el título “Un
parque hecho con arte”.
2.2 Los retos de hoy
Gracias a que los Fundadores de Chiminigagua se fueron ganando la confianza de la gente hoy se
mantiene un v ínculo muy cercano con la comunidad, sin embargo, aún se les dificulta su labor en
varios frentes, en parte debido al tipo de cultura arraigada dentro de una sociedad con bajos niveles
de educación. En palabras de Martín Carreño, miembro de la Fundación:
“En este espacio todav ía se mantiene esa cultura machista, si un muchacho tiene el cabello largo entonces y a
se fue por otro camino, o es drogadicto... o es homosexual... todav ía se mantiene esa cultura, aunque ha sido
una pelea de 20 años para que los padres cambien su mentalidad, para que los padres les permitan a sus
hijos ex plotar ese talento que tienen. El d ía de mañana dirán “Oiga apareció por ahí en la telev isión” , o
“apareció músico”, ¿De dónde salió? de Bosa, aquí se le dio su formación.”24
Otro de los retos que enfrenta hoy Chiminigagua es la consecución de recursos para poder financiar
sus talleres y eventos másivos. Sus fundadores se quejan de la falta de apoyo del Estado para todo
lo que tiene que ver con la cultura. Según Venus Albeiro Silva:
23 Bogotá: un esfuerzo de todos. Bogotá, Casa Editorial El Tiempo – Fundación Corona, Octubre 2001. 24 Op. Cit. Entrevista con Martín Carreño.
“La cultura nuestra y los procesos artísticos del país están porque mucha gente, priv adamente, logra
consolidar sus proy ectos, caso del teatro la Candelaria, las orquestas, los grupos de danza, están porque se
dedican a hacerlo y porque con las uñas lo hacen, no porque tengan un apoy o del Estado como se debería.
Tienen unos apoy os mínimos. Si usted v a a hacer una gira no consigue recursos, son cincuenta mil
problemás para hacer una función, los impuestos son carísimos, es casi imposible hacerlo.”25
Hoy en día, para financiar sus eventos másivos y talleres, la Fundación realiza trabajos con la
Alcaldía Menor y utiliza también los recursos que le dejan los dis tintos festivales de teatro donde
actúan (el Iberoamericano, el de Manizales, el de Boyacá y otros) para poder realizar sus eventos
másivos y presentarlos de forma gratuita a todo el público que desee asis tir. A las personas que
participan en los talleres, se les piden 15 mil pesos anuales de colaborac ión, pero si no están en
condiciones de darlos igual se les deja asistir gratuitamente.
2.3 De la acción cívico-cultural a la incursión en la política
Gracias a la integración que se logró con un grupo poblacional de mayor tamaño en el barrio, la
Fundación Chiminigagua sufrió una transformación trascendental: entre los líderes de la comunidad
surgió la idea de v incularse a la política y así se creó el Partido Comunitario Acción Siete. Los
miembros de la Fundación tuv ieron dis tintos motivos para dar este paso, las palabras de Martín
Carreño, miembro de la Fundación, explican qué los impulsó a hacerlo:
“Creemos que y a que se ha hecho un trabajo cultural pues hay que sacarlo adelante, y uno de los medios
para fomentarlo es a trav és de la política, que es una forma también de poder inv olucrar a los jóv enes. Es
mostrarle a los jóvenes quienes creen que la política es mala, que es lo contrario, es como mostrarles que ese
25 Op. Cit. Entrevista con Venus Albeiro Silva.
fue el error de nuestras generaciones, de no educarnos políticamente y por eso es que los jóv enes le tienen
fobia a la política y no participan, estas generaciones son muy apáticas a la política26”
En palabras de Venus Albeiro Silva, hoy representante a la Cámara por Bogotá:
“ ... Nos damos cuenta que queremos pasar a otro niv el de trabajo con la comunidad, y ese proceso lo lleva a
uno a la necesidad de hacer política. Porque ahí v iene un contrasentido: usted muev e a la gente, hace todo el
proceso y luego cuando quiere hacer una obra se presenta una objeción, que si un Edil o un Alcalde Menor no
daba el permiso para una actuación en un parque, no se podía hacer, y ellos tenían todo el poder porque se
habían presentado a una elección, pero nosotros éramos los que mov íamos a la gente, entonces depender de
ellos era un contrasentido, esa fue como la primera motiv ación digamos. Era más como un rechazo a lo que
ellos hacían que era oponerse a cosas culturales o a trabajar con los niños, cosas que no tenían ningún
sentido más que retribuirle a la comunidad. Entonces casi que por inercia nos metemos a una primera
elección en una JAL en 1997, y ganamos, sin siquiera estar con ningún grupo político sino simplemente
v iendo la política como un medio para el desarrollo que queríamos. Y a partir de ahí pues no damos cuenta
que lo que tenemos en la mano es una herramienta política fuertísima que es el arte y la cultura, pues claro el
arte ay uda a sensibilizar a la gente. Y empezamos a darnos cuenta que todo lo que nosotros hacíamos era
político, las obras que presentábamos donde denunciábamos la muerte de los jóv enes, la pobreza, la
intolerancia, y comenzamos a darnos cuenta que en realidad el teatro es un elemento político27” .
Venus Albeiro Silva, uno de los cofundadores de las Fundación Chiminigagua se postuló en nombre
del partido Opción Siete, inicialmente para la Junta de Acción Local y más adelante para la Cámara
de Representantes, posición que ocupa actualmente. Venus Albeiro se lanza a la Cámara
identificándose como “el representante de la Cultura y la Comunidad”, los lemás de su partido son:
“la forma diferente de hacer política”, “vamos por el poder para poder” y “cuando la comunidad se
une lo inalcanzable se hace realidad y el futuro es prometedor”. Recientemente, Venus Albeiro se
26 Op. cit. Entrevista con Martín Carreño. 27 Op. Cit. Entrevista con Venus Albeiro Silva
presentó como autor ante la comisión sexta de la Cámara de un proyecto para expedir una Ley de
Teatro Nacional. El triunfo de Venus Albeiro Silva es el resultado de un trabajo cercano con la
comunidad, según palabras de un habitante del barrio:
“ ... le dimos nuestro apoy o a Venus para que se lanzara de Edil de Bosa, y quedó con 9 mil v otos. Luego, se
lanzó al consejo y al consejo se quemó, porque a pesar de ser conocido acá en el sector no era conocido en
otras localidades, la gente no creía que un tipo salido de acá de esta casa se fuera a lanzar y fuera a quedar,
eso no tenía ninguna presentación. Entonces el siguió con la conv icción de llegar a la Cámara y
efectiv amente lo logró con 24 mil votos, gracias al trabajo mano a mano con la comunidad logramos casi
triplicar la v otación.28”
Luego del éx ito de Venus Albeiro, en el 2003 Luis Hernando Parra, también miembro de la
Fundación, es elegido como Edil de Bosa. Es él mismo quien explica su motivación para incursionar
en la política:
“....yo di este paso porque empecé a v er que este trabajo comunitario que se hace acá se debía representar
en un proceso político, y así lancé mi nombre como Edil. Pero normalmente nosotros no hacemos un trabajo
político, es el resultado de todo un trabajo comunitario que se hizo acá..... ese movimiento político, al igual
que la Fundación, ha mostrado una diferencia en pautas porque ha demostrado que los líderes de barrio que
se han formado en estos espacios comunitarios, pueden llegar a los espacios de decisión que a v eces uno no
cree. Uno se v e muy lejano de las Juntas Administradoras Locales, del Congreso... y no cree en la posibilidad
de que hay a un representante cercano a ellos mismos. La gente del barrio ha sentido que la política no es
lejana sino que también está al alcance de ellos mismos y que ellos también son importantes, esa es la pauta
que se ha marcado.29”
28 Op cit. Entrevista con Cesar Grande. 29 Entrevista con Luis Hernando Parra, Edil de Bosa. 9 de abril del 2005, sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa.
La incursión en la Política de los miembros de Chiminigagua, ha traído beneficios a la comunidad de
Bosa a los que antes no podían acceder. Recientemente, la Fundación fue condecorada con la
Orden De Democracia Simón Bolívar de manos del entonces presidente de la Cámara, doctor
William Vélez, como reconocimiento a 18 años de trabajo cultural en beneficio de la comunidad. De
no ser por la incursión en el Congreso, es posible que la esfera pública bogotana jamás hubiera
tornado sus ojos para reconocer la labor de esta organización ciudadana. Como lo expresa un
miembro de la Fundación: “La gente ha v enido aquí al barrio, hemos tenido distintas campañas, la
campaña de Horacio Serpa que vino a la Media Torta, en las últimás elecciones vinieron todos los candidatos
a alcaldes con sus propuestas, oyeron quejas. Esto para la gente significó poder conviv ir con ellos en otro
niv el, conversaron con la gente, dejaron que hicieran preguntas, que la gente v iera la problemática palpable
de lo que está sucediendo30”
Pero a pesar de los avances en la esfera política, la Fundación por su parte continúa siendo un ente
activo de la Sociedad Civ il, situada entre las denominadas Esfera Pública y la Esfera Privada de la
sociedad colombiana, y luchando por darle a la cultura en Bogotá el lugar que merece.
2.4 Beneficios derivados de las actividades colectivas
Es ev idente que en su esfuerzo por fomentar la Cultura a lo largo de los años, el trabajo de la
Fundación ha traído importantes beneficios tanto personales como colectivos para la comunidad de
Bosa. Los beneficios se ven en dis tintos niveles, en palabras de Luis Hernando Parra, miembro de la
Fundación y Edil de Bosa:
30 Op. cit. Entrevista con Cesar Grande.
“Yo lo divido en dos tipos de beneficios. Primero tenemos unos beneficios arquitectónicos estructurales, como
por ejemplo el parque, la Concha Acústica, el estadio que también apoy amos, son obras que se han gestado
desde la Fundación Cultural. Estas obras hacen un cambio de entorno, por eso este parque que era antes un
potrero con una criminalidad muy grande, con una obra de colaboración ciudadana que se hizo
conjuntamente con los jóv enes se ha conv ertido en un espacio cultural. Otro aporte que hace la Fundación es
el cambio social. El cambio de ev entos, el cambio de estrategias, el cambio de cotidianidad, los continuos
ev entos artísticos. La Fundación brinda un continuo núcleo de ex pectativ as por estas labores que integran a
la comunidad. Tanto en lo artístico como en lo deportiv o, y en lo pedagógico. Entonces son un poconón de
posibilidades que hacen que la gente v enga y empiece a mirar distinto la v ida, y muchos de ellos encuentren
una posibilidad de v ida aquí en la Fundación, y se integren, y encuentren orden, encuentren v alores,
encuentren una manera distinta a como un jov en en un barrio popular v e la vida. La Fundación es como ese
otro espejo por el cual se puede ver y por el cual se puede viv ir en esta sociedad.”31
También podemos sospechar de beneficios en términos de mayor disponibilidad hacia la
participación ciudadana y mayor interés en la democracia, que le ha dejado a la comunidad la
incursión en la política
de algunos miembros de la Fundación. En palabras del Representante Venus Albeiro Silva:
“ ...Hay que darse cuenta que todo lo que uno hace es político, ahí hay una relación directa porque la política
es todo lo que uno hace cuando se relaciona con los demás... sea para encontrar alternativ as o simplemente
para discutir una idea, eso es política... hemos creado un movimiento de concientización ciudadana, desde la
cultura. Nosotros nos creímos el cuento de que lo que había que hacer en la política colombiana era una
transformación cultural, para que la gente no se siguiera dejando comprar con una lechona, con un tamal,
sino que comenzara a tener información política, se concientizara y participara. Porque es curiosísimo pero la
gente con más necesidad es la que menos participa y es la más abstencionista....”
31 Op cit. Entrevista con Luis Hernando Parra.
Y más adelante el representante Silva recalca sobre la labor política de su partido:
“...Eso también deja un saldo pedagógico muy importante, la gente del sur se v a dando cuenta que uno
puede pelear sus oportunidades, con lo que piensa, con lo que hace y con lo que dice puede llegar a estos
espacios de decisión. Y que estos espacios no es que estén totalmente v etados, que parecerá imposible...
pero si la gente se lo propone puede llegar. Hemos logrado que mucha gente se lance a ser candidato de la
JAC, o de los Consejos de Juventudes, los colegios desde las personerías, que comiencen a participar en los
procesos de forma diferente, hasta llegar a donde v amos. Y logramos que la gente no le tenga fobia a la
política, como asco, no, sino que v ean que uno si puede hacerse elegir, y ser totalmente diferente de lo que
es la política en muchos casos.”32
Investigar hasta donde los beneficios derivados de las acciones colectivas que realizan
organizaciones como Chiminigagua, y si se derivan en las cualidades caracterís ticas de las redes de
Capital Social, es el propósito siguiente de esta investigación. A través de encuestas y entrev istas
realizadas a personas relacionadas de distintas maneras con la Fundación, se buscará puntualizar
sobre los logros obtenidos tanto a nivel de cualidades colectivas para la comunidad, como
personales para sus miembros.
CAPÍTULO III
ANÁLISIS DE RESULTADOS DE LAS ENCUESTAS
Con el fin de recoger una muestra amplia de testimonios sobre el potencial del Capital Social que se
encuentra en Chiminigagua y poder delimitar de manera más apropiada como se da este fenómeno
para el caso particular de la Fundación, se realizó una parte cuantitativa para esta investigación. Por
32 Op cit. Entrevista con Venus Albeiro Silva.
medio del trabajo de campo en cercanías a la sede de Chiminigagua en Bosa, se realizó una
encuesta con una muestra de 60 casos, entre miembros de la Fundación mayores de 18 años 33. Los
resultados obtenidos no tienen una pretensión de representativ idad, ya que como se planteó de
antemano los miembros de Chiminigagua que asis ten a las presentaciones alcanzan los cientos (por
lo menos los miembros esporádicos), por lo que una muestra de 60 personas no es suficientemente
representativa para poder ser generalizable ni predecir los resultados del resto de la población del
sector. Desafortunadamente, no se cuenta con los recursos ni con el tiempo para realizar en esta
monografía de pregrado un estudio cuantitativo los suficientemente abarcante para ser cabalmente
representativo de los barrios Laureles y Naranjos.
De todas formás, el análisis de las encuestas realizadas pretende cumplir una función deductiva al
encontrar una correspondencia entre los hechos reales con la teoría presentada en el Marco
Teórico. Se pretende también hacer una comparación entre las tendencias encontradas con las que
se presentaron en los estudios de Maria Mercedes Cuéllar y el Latinóbarómentro 2004. No es
posible comparar los datos directamente con los hallazgos de Sudarsky, dado que estos últimos se
presentan en forma de coefic ientes derivados de formulas muy especializadas que el mismo
Sudarsky creó (la ya mencionada medición Barcas); en la medida de lo posible se harán conexiones
entre los datos provenientes de las encuestas y sus argumentos. La presentación de los resultados
se hace de acuerdo con el orden del cuestionario diligenciado por los encuestados.
3.1 Características de la muestra encuestada
33 Unidad de análisis: miembros de la Fundación Chiminigagua Temporalidad: transversal, mes de abril del 2005 Finalidad cognitiva: deductiva Muestra: 60 adultos relacionados con la Fundación Chiminigagua
El objetivo de esta sección es establecer el perfil de los miembros de Chiminigagua y de qué manera
se relacionan con la Fundación. Según las cifras encontradas por Cuéllar en su estudio, los
colombianos muestran un promedio de participación en 4.7 reuniones de organizaciones voluntarias
al semestre, cifra que es mayor en el Distrito Capital, donde el promedio equivale a 5.8 reuniones.
Entre las asociaciones de tipo voluntario de estos estudios se incluyen las JAC, las juntas de padres
de familia, de recreación y deporte, de ex-alumnos, de cultura, ambientalis tas y caritativas. En el
caso particular de asociaciones culturales el promedio nacional es más bajo que el ya mencionado.
Los colombianos participan en promedio en 3 reuniones de asociaciones de este tipo, pero es
positivo encontrar que el promedio para la ciudad capital alcanza la cifra de 6 reuniones en
asociac iones culturales (Cuéllar 2000: 778). Tanto el estudio de Cuéllar como el de Sudarsky
demostraron que las clases altas tienden a asociarse más que las bajas y los sectores rurales
tienden a hacerlo más que los urbanos. Otro de los hallazgos de Cuéllar es el hecho de que los
jóvenes conforman el sector de la población que menos tendencia tiene a asociarse.
PREGUNTA 1: ¿Cuál es su relación con la Fundación Chiminigagua?34
Para efectos del análisis de la muestra encuestada, el cuestionario comienza preguntándoles a los
encuestados sobre su conexión con la Fundación Chiminigagua. De los 60 encuestados, 3 se
identificaron como fundadores de Chiminigagua, 11 como trabajadores, 26 como participantes
activos y 19 como participantes esporádicos. Varios encuestados declararon que su conexión con la
Fundación se debía a la participación de sus hijos en los dis tintos talleres (más que a su propia
participación). Estos encuestados fueron clasificados como partic ipantes esporádicos ya que se
mantienen en algún tipo de contacto con la Fundación, conocen a sus miembros y acuden no sólo a
llevar y recoger a sus hijos, sino también a ver sus distintas presentaciones públicas y eventos
másivos. La respuesta más común que se incluyó en la categoría de “otro” fue la de aquellos
indiv iduos que señalaron que “colaboraban” con activ idades de la Fundación o con las activ idades 34 Ver tablas y gráfi cas anexadas para cada pregunta.
políticas de sus miembros. Es interesante encontrar que varios de los encuestados afirmaron
mantenerse en contacto con Chiminigagua, no sólo porque acuden a sus eventos másivos, sino
además porque v isitan al Representante Venus Albeiro Silva para conversar con él sobre los
problemás de la comunidad o para solicitarle algo, tema que se discutirá más adelante.
PREGUNTA 2: ¿A qué distancia vive de Chiminigagua?
Los resultados revelaron que la gran mayoría de los encuestados v ive en la zona cercana a la
Fundación, que abarca un perímetro de 12 cuadras alrededor de ésta, (un 56.7% de la muestra v ive
a menos de 6 cuadras de ésta y un 16.7 a más de 12 cuadras). De este modo, se observa que la
Fundación congrega más que todo a habitantes de los barrios Laureles y Naranjos, lo que explica
que se hable de Chiminigagua como un medio para unir a la comunidad circundante. Esto no quiere
decir que no haya varias personas que v ienen desde otros barrios para participar en las activ idades
de la Fundación (15% de la muestra). La participación de estas personas provenientes de zonas
aledañas, muestra que gracias al éx ito de su trabajo, Chiminigagua se ha dado a conocer más allá
de los barrios Laureles y Naranjos.
Al contrastarlo con la teoría, estos datos dan los primeros indic ios de que Chiminigagua genera un
Capital Social de tipo incluyente que tiende puentes. Según la distinción presentada por Gitell y Vidal
mencionada en el capítulo 1, ex isten dos tipos de Capital Social: uno que cementa (B onding) y uno
que tiende puentes (Bridging). El primero crea v ínculos tan cerrados entre los miembros de una
asociac ión, que termina por alejarlos del resto de la soc iedad, el segundo en cambio crea v ínculos
suficientemente amplios que a la vez se abren hacia otros sectores de la sociedad. En el caso de
Chiminigagua, aunque se crean vínculos muy cercanos entre los miembros, esto no implica que se
cierren a personas externas que no v iven en su mismo sector, por lo que se aleja de la definición de
una organizac ión de tipo v inculante/ excluyente y se puede describir como un Capital Social que
tiende puentes.
PREGUNTA 3: ¿Cuánto tiempo a la semana le dedica usted o sus hijos a las actividades de la
Fundación?
Los datos prueban que los trabajadores y fundadores de la Fundación son quienes más horas a la
semana se dedican a ésta, en general más de 4 horas. En cuanto a los participantes activos, ellos
dedican entre 4 y 2 horas por semana a las activ idades de la Fundación, mientras los participantes
esporádicos le dedican menos de 2 horas semanales. El promedio de horas que los encuestados le
dedican semanalmente a activ idades de la Fundación equivale a 2,7 horas.
El hecho de que ex ista un contacto físico permanente entre los miembros de Chiminigagua descarta
el hecho de que ésta se trate de una organizac ión de tipo terciario, tema que se ahonda en la
siguiente pregunta.
PREGUNTA 4: ¿Por qué participa en las actividades de la Fundación?
Dentro de los motivos por los que los dis tintos encuestados deciden participar en las activ idades de
Chiminigagua, un 73.3% declaró hacerlo por gusto, un 8.3% por influencia de su famil ia, un 3,3% por
influencia de sus amigos o vecinos, y un 13.3% dijo hacerlo por otro motivo. Se mencionaron a la
vez otros motivos dis tintos a los inc luidos en el cuestionario, los encuestados respondieron que
también participaban en activ idades de la Fundación por ‘ev itar que los muchachos caigan en los
v icios’(6% ), ‘informarse’(6% ) , ‘integrarse’ ( 5% ) y ‘colaborar’ (5% ) .
De las anteriores preguntas, se puede concluir que la Fundación es un ejemplo de una organización
voluntaria de tipo secundario, según la clasificación presentada en el capítulo 1. Dentro de la
tipificación acuñada por los teóricos del Capital Social, las organizaciones de tipo secundario
sobrepasan los v ínculos de la Familia situándose entre ésta y el Estado, y sus miembros están en
contacto permanentemente. En contraste, las organizaciones primarias tienen como núcleo a la
familia y en las terciarias los miembros no necesariamente tienen contacto fís ico entre s í, pero en
cambio pagan cuotas de pertenencia.
PREGUNTA 5: ¿Considera que los miembros de la Fundación tienen algo en común?
Para esta pregunta a los encuestados se les pidió señalar todas las posibles respuestas que
consideraran válidas, en otras palabras se les permitía marcar más de una caracterís tica en común
que creían tenían los miembros de Chiminigagua s i lo consideraban apropiado, razón por la cual a
la hora de sumar los porcentajes de respuesta, estos suman más de 100%.
Al preguntarles a los encuestados sobre lo que creían eran cualidades en común dentro de los
miembros de la Fundación, la respuesta más frecuente, con un 45% , fue la de ‘gustos o intereses en
común’, seguida por ‘mismos valores’ y ‘formás de pensar parecidas’. Gracias a su integración, los
miembros de Chiuminigagua hoy encuentran mucho en común, dejando de ser simples
desconocidos. Es una organización voluntaria a la cual la gente acude por gusto y no por presión
jerárquica o por obligación de ningún tipo. El hecho de que sólo un 25% de la muestra perciba que
hay una coinc idencia en afinidades políticas entre los miembros de la Fundación es un buen
indicador de que a pesar de la incurs ión en la política de algunos de sus miembros, el trabajo de la
Fundación se sigue manteniendo al margen de la política y se perfila más bien como un trabajo
cultural. Dentro de las respuestas marcadas bajo la categoría de "otro" aparecieron respuestas
significativas en este sentido, como ‘voluntad de ayudar a los demás’ o ‘interés por la cultura’.
3.2 Beneficios del Capital Social a nivel personal y comunitario
En este aparte se busca establecer los beneficios que traen las activ idades de la Fundación
Chiminigagua tanto a nivel indiv idual como colectivo. Se formularon preguntas para establecer la
percepción de los miembros de la Fundación acerca de los dis tintos beneficios que ésta les brinda
tanto a nivel personal como comunitario. De nuevo, esta sección le permitió a cada encuestado
señalar más de una respuesta válida si lo consideraba apropiado, por lo que los porcentajes suman
más de 100% .
PREGUNTA 6: ¿Qué beneficios considera que le ha traído a usted o a su familia el pertenecer
o participar en las actividades que organiza la Fundación Chiminigagua?
Dentro de los benefic ios personales, la respuesta más común fue: ‘saber más sobre cultura’. Está
claro que al tratarse de una Fundación Cultural, lo que sus miembros primero perciben y
probablemente más valoran es que están aprendiendo sobre cultura, porque al contrastarlo con las
otras instancias de su v ida cotidiana éste es probablemente el único medio que tienen para hacerlo.
A continuación, es interesante ver como las respuestas más comunes fueron aquellas que se
pueden señalar como precursoras de Capital Social: ‘participar en activ idades colectivas’ (50% ),
‘conocer más gente/ ser más sociable’ (45% ), y en menor escala, ‘confiar más en los demás’
(26.7% ). Estos beneficios recuerdan la definición de Coleman sobre las redes de Capital Social.
Para el autor, estas tienen la caracterís tica de facili tar el surgimiento de ciertas cualidades en los
actores, ya sea indiv iduos o colectivos. De este modo, podría decirse que gracias a la ex istencia de
redes de Capital Social que surgen en las activ idades diarias de la Fundación Chiminigagua, se
facilita que broten entre sus miembros comportamientos como la sociabil idad, la disposición a
participar en activ idades colectivas y la confianza hacia los demás.
La respuesta ‘tener más información de lo que pasa a su alrededor’ fue señalada por un 41,7% de
los encuestados. Este beneficio entra en lo que Portes denomina “fuentes de beneficios para redes
extra-familiares” y se refiere al trabajo que cumplen las organizac iones como redes de información.
Según lo v isto en el capítulo 1, es entendible que los miembros de Chiminigagua se sientan más
informados, porque en la medida en que interactúan más con sus vecinos se enteran de lo que está
pasando en su comunidad. Por ejemplo: según Portes, los miembros de una organización voluntaria
tienen más contactos para enterarse de las ofertas de trabajo que hay disponibles en el barrio; así
las redes de información cumplen la función de facil itar la consecución de beneficios para los
miembros de la Fundación.
A los datos anteriores les sigue el número de encuestados que perciben que gracias a las
activ idades de la Fundación se sienten mejor en su v ida diaria y afrontan mejor sus problemás
(31,7% ). Este tipo de beneficio es el mencionado en el capítulo 1 como “beneficios de tipo
psicológico para el indiv iduo”. Según Putnam existen ev idencias de que las personas rodeadas de
Capital Social en sus v idas, tienden a afrontar mejor sus traumás. Pues bien, es ev idente que varios
miembros de la Fundación han sentido este tipo de beneficios. Por ejemplo, dentro de la categoría
“otro” fueron comunes respuestas s imilares a ‘ser líder’, un ejemplo que explica porque a través de
su v inculación a la Fundación, una persona potencia cualidades de su personalidad que lo hacen
sentirse mejor consigo mismo.
Otras respuestas comunes dentro de la categoría "otro" fueron: ‘mejorar la convivencia en familia’
(5% ), ‘serv ir a los demás’ ( 3,3% ) , ‘practicar deporte’( 1,7% ) y ‘salir de los malos hábitos’ ( 3,3% ).
7. ¿Qué beneficios considera que le ha traído a la comunidad (al barrio) el hecho de que la
gente par ticipe en las actividades que organiza la Fundación Chiminigagua?
Dentro de los beneficios que traen las activ idades de la Fundación a la comunidad, hay tres
respuestas que fueron señaladas por un 45% de la muestra. Se trata de los beneficios de
integración, información y seguridad, seguidos de cerca por el aumento de la colaboración. Según la
teoría sobre el Capital Social que se v io en el capítulo 1, la cooperación entre indiv iduos es la fuente
más puntual de Capital Social y surge en algunos casos cuando los actores esperan algo a cambio.
En cuanto a los beneficios en términos de aumento de seguridad, según la teoría este benefic io se
deriva del hecho de que el Capital Social termina creando formás informales de control para el
cumplimiento de las reglas. Se sospecha que para el caso de los barrios Laureles y Naranjos en
donde opera la Fundación, el hecho de que los vecinos se conozcan ha llevado a que estén velando
permanentemente por la seguridad, ya sea inconsciente o conscientemente y que es esto lo que ha
mejorado la seguridad del barrio. Por ejemplo, cuando los hijos de un vecino salen al parque, hay
muchos ojos que los están v igilando, así mismo, es menos probable que un vecino se atreva a
cometer un crimen si siente la vergüenza de ser reconocido por el resto de su comunidad.
Recordando las palabras de martín Carreño expuestas en el capítulo anterior: “Es un sector dónde
todo el mundo se reconoce y todo el mundo está a la expectativa de ver qué pasa. La Fundación ha
ayudado mucho a que la gente se conozca, la Fundación genera justamente como ese espacio
dónde los mismos padres ayudan a velar por la seguridad del barrio, entre todos nos cuidamos.”35
Otros de los beneficios que se perciben, aunque en menor escala, son los de mayor tolerancia,
respeto, colaboración, y confianza entre la gente; es lo que en el Marco Teórico se denomina el
tercer beneficio del Capital Social, el surgimiento de cualidades sociales beneficiosas para todo el
círculo social. En la medida en que Chiminigagua fomenta entre sus miembros el surgimiento de
estas caracterís ticas, se crea un c írculo v irtuoso que a la vez beneficia a todos los miembros de la
comunidad circundante.
En cuanto al campo económico, encontramos que el beneficio menos percibido por la muestra es el
que se hagan más negocios entre la gente. Hay que tener en cuenta que se trata de personas de
estratos 1 y 2 que cuentan con poco dinero para “hacer negocios" entre s í. Sin embargo, el hecho de
que las personas establezcan que su nivel de confianza es mayor entre los miembros de la
Fundación, (lo que se verá en gráficas más adelante) es ya una señal de que en caso de realizarse
negocios entre ellos, los costos de transacción podrían ser menores, porque cuando las personas
confían en que el otro cumplirá lo acordado, se pueden reducir los requisitos necesarios al hacer una
transacción.
Dentro de los benefic ios comunitarios señalados como “otro” se encontraron respuestas de dis tintos
tipos; las relacionadas con beneficios recreativos y educativos: ‘diversión’, ‘salir de la rutina’, ‘arte’,
35 Entrevista con Martín Carreño, miembro de Chiminigagua. Abril 9 del 2005, sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa
‘una identidad cultural’, ‘descubrir talentos en el barrio’; las relacionadas con beneficios de
infraestructura para el barrio: ‘el parque’, ‘calles pav imentadas’, ‘la Concha Acústica’; y las que más
llaman la atención, relacionadas con beneficios de desarrollo y salud pública: ‘sacar a los jóvenes de
los v icios’, ‘traer progreso al barrio’, ‘encontrar respaldo’.
3.3 Niveles de confianza
El objetivo de esta sección es establecer los niveles de confianza que muestran los miembros
Chiminigagua hacia otras personas, y ahondar sobre la práctica de negocios entre desconocidos.
PREGUNTA 8: En su diario vivir, ¿qué le generan las personas que usted no conoce?, las
personas que se encuentra por la calle o en su trabajo, por ejemplo.
El estudio del Latinobarómetro 200436 señala un preocupante hecho sobre la confianza interpersonal
al compararlo con los demás barómetros mundiales: América Latina aparece con los índices
promedio más bajos de todas las regiones medidas en la confianza interpersonal. (Resumen
Latinobarómetro 2004: 31). En cuanto al estudio de Cuéllar, la confianza interpersonal se establece
como un elemento relacionado con la aceptación de la democracia. En su estudio, Cuéllar encontró
que tan solo un 9% de los colombianos planteaban que se podía confiar en la mayoría de personas.
En el Latinobarómetro 2004 se planteó que un 22% de colombianos afirmaba que ‘se puede confiar
en la mayoría de las personas’.
Cuando se les preguntó sobre la confianza frente a personas extrañas, un 28,3% de los miembros
de Chiminigagua afirmó que los extraños les daban confianza, un 53% afirmó que les producían una
actitud neutral, un 15% que le producían desconfianza y un 3,3% afirmó sentir miedo frente a los
desconocidos. Estos resultados son aún más alentadores si se parte del hecho de que según los
36 Informe resumen, encuesta Latinobarómetro 2004: “ Una década de mediciones – Una década de evolución” .
estudios hechos en Colombia, el Capital Social tiende a ser más débil en los estratos más bajos.
Según el estudio de John Sudarsky, factores como la solidaridad, mutualidad, control social y
participación política son especialmente escasos en las clases bajas urbanas. Dice Sudarsky: “Como
se ha v isto, frente a los dos factores la variable más crítica de solidaridad y mutualidad es la
atomizac ión. En el tránsito del campo a la ciudad, las clases bajas carecen de Capital Social por su
atomizac ión” (Sudarsky 2001: 308). Aunque estos datos dan buenas señales del nivel de confianza
interpersonal entre los miembros de Chiminigagua, es desalentador encontrar que esta confianza no
se traslada a la hora de hacer negocios con extraños, resultados que se ven a continuación.
PREGUNTA 9: ¿Usted hace negocios con gente que no conoce de tiempo atrás?
Un 68.3% de la muestra afirmó que no hacía negocios con desconocidos, mientras que solo un
31.7% respondió positivamente a esta pregunta. Una de las consecuencias negativas de la baja
confianza interpersonal es que “generan estructuras poco aptas para el desarrollo, al consolidar la
activ idad en núcleos cerrados” (Cuéllar 2000: 106). Es desconcertante que en su mayoría, la gente
de Chiminigagua no sienta desconfianza por los desconocidos, pero a la hora de hacer negocias si
la sienten. Aún queda la esperanza de que gracias a la integrac ión que les brinda las activ idades de
Chiminigagua, estas personas creen vínculos sufic ientes como para estar dispuestos a hacer
negocios entre ellos, tema que se ahonda más adelante.
Pregunta 10: ¿Qué le generan los otros miembros de la Fundación Chiminigagua?
La gran mayoría de la muestra, un 85% , respondió sentir más confianza por los miembros de la
Fundación Chiminigagua que por el resto de la gente en general, mientras el 13,3% dijo que ellos le
generaban la misma confianza que la gente del común. Ningún encuestado dijo que le inspiraran
menos confianza que el resto de la gente. Esto demuestra que a medida que van compartiendo, las
personas de organizaciones voluntarias crean vínculos de confianza entre s í. Gracias a todo lo que
encuentran en común, se dan cuenta que no hay necesidad de sentir miedo entre ellos. Si estos
resultados de confianza se trasladan a la hora de hacer negocios y fundar empresas, entonces se
está frente a una fuente potencial de desarrollo, conclusión que es el núcleo de la investigación
hecha por Francis Fukuyama, en su libro Trust.
3.4 Actitudes hacia la política
En esta sección se pretende establecer si ex iste mayor interés por la política entre los miembros de
la
Fundación Chiminigagua.
PREGUNTA 11. ¿Usted votó en pasadas elecciones?
El 68.3% de la muestra afirmó haber votado en las últimás elecciones, mientras que un 30% dijo no
haberlo hecho. Estos datos resultan alentadores al compararlos con el promedio de la participación
electoral en Colombia. Según el informe PNUD del 2002 que muestra un promedio desde el año 98
al 2002, el 78,2% de la poblac ión colombiana en capacidad de votar está regis trada para hacerlo,
pero sólo un 33,3% de la población fue votante en estos años (PNUD 2002: 37). Si bien el acto de
votar es sólo una de las muchas acciones cív icas que puede realizar un ciudadano, el informe del
PNUD 2004, afirmó que:
“Casi cuatro de cada diez personas entrev istadas (37,6%) interv ienen en la v ida pública de su país más allá
de la participación electoral. Además de v otar, contactan autoridades públicas cuando hay problemás que
afectan a sus comunidades, participan en manifestaciones públicas y colaboran con tiempo, trabajo o dinero
en la resolución de los problemás comunales. Estos son ciudadanos que ejercitan activ amente sus derechos”
(PNUD 2002: 57).
Es así como los miembros de la Fundación Chiminigagua se constituyen en lo que el PNUD llama
ciudadanos activos, ya que no sólo ejercen el voto en porcentajes superiores al común de la
sociedad, sino que dan un paso más hacia ejercer dis tintas formás de participación. Esto se
comprobó con la acción ciudadana de construcción de su propio parque y además se v islumbra en la
v ida cotidiana de la Fundación Chiminigagua. Cada jueves en las tardes, el teatro de la Fundación
Chiminigagua se llena de personas que van decididas a reunirse con el representante a la Cámara
Venus Albeiro Silva o con el Edil Luis Eduardo Parra, para conversar sobre los problemás de Bosa y
de la comunidad. Los representantes reciben a todos los interesados, sin necesidad de cita prev ia y
sin importar si los conocen o no prev iamente. Ya en horas de la noche, se realiza una reunión de
rendición de cuentas por parte de los miembros del partido político Opción Siete, donde asis ten
todos los ciudadanos interesados, así como dis tintas organizaciones y pequeños gremios de la
localidad, para discutir los asuntos de mayor urgencia para el bienestar del barrio y lo que se ha
venido logrando a través del trabajo político.
PREGUNTA 12: ¿Recuerda por quién votó, ya sea para Presidente, Alcalde, Congresista,
Concejal?
Dentro de los encuestados que respondieron si haber votado en pasadas elecciones, un 61.7% dijo
recordar por quien votó para Concejal de Bogotá, un 60% dijo recordar por quien votó para
congresis ta (probablemente esto se debe a la cercanía con el congres ista Venus Albeiro Silva), un
55% dijo recordar por quién votó para presidente y así mismo un 55% dijo recordar por quien votó
para Alcalde de Bogotá. El estudio de Cuéllar encontró que entre los colombianos: “...quienes
manifiestan tener interés por la política, como una actitud general, no son quienes más partic ipan en
activ idades asociativas y tampoco quienes votan para Presidente y Alcalde“ (Cuéllar 2000: 802). En
cuanto al interés por la política que demuestran los miembros de Chiminigagua, se ev idencia que
aunque el interés no es lo suficientemente alto en la totalidad de la muestra como para recordar por
quién votaron en el pasado, tampoco son bajas las estadísticas y hacen sospechar que la intención
de voto fue más allá del juego del clientelismo donde los votantes eligen un candidato s in tener
ninguna afinidad ni conocimientos sobre él, razón suficiente para olv idarlo rápidamente. A
continuación se investigan las motivaciones para apoyar a un candidato específico.
PREGUNTA 13: Recordando uno de sus candidatos, ¿recuerda por qué votó por esta
persona?
Esta sección demuestra lo importante que es el sentimiento de confianza no sólo en el círculo de la
comunidad sino también cuando ésta se transmite a personas lejanas, como son en muchos casos
los representantes políticos por los que la gente vota. Un 55% de la muestra señaló la confianza
dentro de las razones que lo motivaron a apoyar a cierto candidato. Así mismo, se notó como un
factor importante el que el candidato hiciera campaña en su barrio. Como lo dice uno de los
miembros de la Fundación, luego de que Venus Albeiro llegara a la Cámara esto sirv ió para que
otros candidatos fueran a Bosa a hacer sus campañas, “Hemos tenido dis tintas campañas, la
campaña de Horacio Serpa que v ino a la Media Torta, en las últimás elecciones v inieron todos los
candidatos a alcaldes con sus propuestas, oyeron quejas. Esto para la gente significó poder conviv ir
con ellos en otro nivel, conversaron con la gente, dejaron que hicieran preguntas, que la gente v iera
la problemática palpable de lo que está sucediendo” 37.
Es de esperarse que muchos de los habitantes del sector apoyaran a Venus Albeiro Silva y a Luís
Hernando Parra, quienes realizaron la mayor parte de sus campañas dentro de la localidad de Bosa,
esto se demuestra en las respuestas bajo la categoría “otro”, en las que fueron comunes frases
como: ‘porque trae benefic ios al barrio’, ‘porque conoce la zona’, ‘por su inteligencia, su
personalidad, su carisma’ o ‘porque lo conocía personalmente’.
PREGUNTA 14: ¿Recuerda quién ganó esas elecciones?
37 Entrevista con Cesar Grande, profesor de la Fundación. Jueves 31 de marzo del 2005, sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa.
Un 80% de los encuestados entre votantes y no votantes dijo recordar quién ganó las elecciones
pasadas, mientras un 8,3% dijo no hacerlo. Dentro de las 41 personas que dijeron haber votado en
las pasadas elecciones, la mayoría (38 personas) dijeron si saber quién gano en las urnas, mientras
3 de ellos afirmaron no recordarlo. Esto muestra una disminución en su nivel de interés por la
política, ya que se interesaron por votar más no por saber quien ganó. En el caso del estudio de
Cuéllar, el interés por la política fue medido mediante el indicador de interés por distintos temás de
conversación, en el cual la política ocupó el último nivel entre los temás preferidos por los
colombianos. Así mismo, se encontró una correlación con el nivel de ingreso: a medida que éste
baja, es menor el interés de los indiv iduos por los temás de política. En el informe del
Latinobarómetro 2004, el interés por la política se mide por medio de la pregunta ¿S e pelearía con
un amigo por temás de política?, pregunta a la que sólo un 18% de los colombianos respondió
afirmativamente.
3.5 Niveles de confianza hacia los representantes políticos
En este aparte se busca indagar si los miembros de Chiminigagua trasladan su confianza hacia los
representantes políticos.
PREGUNTA 15: ¿Qué piensa usted de los siguientes representantes políticos?
Según los hallazgos de Maria Mercedes Cuéllar en su estudio, se demostró una baja confianza por
parte de los colombianos hacia las instituciones y los representantes políticos. Dice Cuéllar: “una
baja confianza en las instituciones se constituye en indicio de que la impres ión intuitiva de crisis que
enfrenta el país tiene asidero en la reducida confianza del representado en su representante, siendo
la confianza la esencia del v ínculo que debería unirlos” (Cuéllar 2000: 57).
Dentro de la muestra, es positivo ver que por lo general las opiniones sobre los representantes
políticos son más positivas que negativas y también más neutrales que negativas. Esto nos indica
que entre los miembros de Chiminigagua se tiene una v isión generalmente optimista de la política, o
por lo menos no negativa. Sin embargo, vale la pena contrastar que la opinión positiva sobre el
Presidente Uribe (36,7% ) muestra resultados muy inferiores a los que según las últimás encuestas
expresa la población colombiana en general. Según el Latinobarómetro 2004 un 75% de los
colombianos dijeron ‘aprobar la gestión del gobierno que encabeza el presidente’. Las más recientes
cifras (abril del 2005) mostraron que la popularidad se encontraba en 69% mientras que la imagen
desfavorable rodeaba el 19% 38. Este fenómeno quizás esté influido por el hecho de que Venus
Albeiro Silva es de una corriente política contraria al Uribismo.
A pesar de la diferencia de cifras en el apoyo al Presidente Uribe, las cifras de opinión positiva y
neutral sobre los representantes políticos muestra como los ciudadanos cív icos tienden a ser más
tolerantes hacia el resto de la soc iedad y los políticos, lo que también se corroboró prev iamente
cuando cerca del 40% de la muestra afirmó ser más tolerante gracias las activ idades de la
Fundación. Esto termina contribuyendo de manera positiva a la gobernabilidad. En palabras de
Maria Mercedes Cuéllar los representantes de las asociaciones voluntarias: “... pueden tener fuertes
puntos de v ista, pero se es más tolerante con el adversario...de ahí que esas comunidades se
consideren más sofis ticadas y activas políticamente... el trabajo de asociaciones entre indiv iduos
que tienen un pensamiento semejante, contribuye de manera efectiva a la colaboración social y a la
gobernabilidad democrática” (Cuéllar 2000: 830)
PREGUNTA16: ¿Tiene confianza en los siguientes representantes políticos?
A la hora de traspasar la confianza hacia los representantes políticos, encontramos que la figura del
Alcalde es a la que los encuestados más le tienen confianza (68,3% ), seguida por congresis tas
38 Revista Cambio. 16 al 23 de mayo del 2005. Ficha técnica: 1000 entrevistas telefónicas entre el 22 de abril y 3 de mayo. Margen de error 3% y 95% de confiabilidad.
(60% ), Concejales (58,3) y el Presidente de la República (40% ). Para los casos de Congresis tas y
Concejales también ex istía la opción, de responder ‘depende´, y así se v io que aunque muchos
confían en un representante en particular, no confían en toda la institución como tal. Encuestas
como la del Latinobarómetro 2004 y el estudio de Cuéllar, no miden niveles de confianza hacia los
representantes políticos en particular sino hacia las instituciones políticas, la cifra de confianza en el
Congreso (única institución que coincide con alguno de los representantes estudiados en esta
encuesta) equivale a sólo 18% de apoyo hacia la institución, la cual es bastante menor a la que
presenta este estudio. Por lo tanto, podría hablarse de que gracias a las activ idades de
Chiminigagua, entre las cuales está la participación en política de algunos de sus miembros, los
miembros de la Fundación reflejan mayores niveles de confianza hacia los representantes políticos
de las que muestran los colombianos en general.
3.6 Apoyo a la democracia
Esta sección busca establecer la posición de los miembros de Chiminigagua hacia la democracia.
PREGUNTA 17: ¿Qué imagen tiene usted de la democracia ?
Respecto a la imagen que los miembros de Chiminigagua tienen sobre la democracia, el 55% de
ellos dijo tener una imagen positiva, el 31./ % dijo tener una imagen neutral (ni buena ni mala) y el
11,7% dijo tener una mala imagen de ella. Varios de los encuestados, sin que se les pidiera,
colocaron notas al pie, o en caso de ser una encuesta oral afirmaron que sus pos iciones sobre la
democracia eran relativas ya que aunque creían que en teoría era un buen sistema de gobierno,
éste no se aplicaba en Colombia, o algo similar. En total, fue el 18% de la muestra que hizo
comentarios como ‘la democracia no se aplica en Colombia’, ‘la democracia en Colombia se queda
en palabras’ o ‘la democracia en Colombia no ex iste’. Esta es una de las causas que puede explicar
por qué se muestra entre los miembros de Chiminigagua, una peor imagen de la democracia de la
que muestra el estudio de Cuéllar, dónde un 80% de los colombianos afirmó tener una opinión
favorable de la democracia (Cuéllar 2000: 59). En cuanto al Latinobarómetro 2004, un 46% de los
colombianos afirmó que ‘ la democracia es preferible a otra forma de gobierno’.
Se encontró que hay una diferencia entre lo que la gente percibe como “democracia” y lo que se
percibe como la democracia colombiana. En el informe del Latinobarómetro 2004 un 29% de los
encuestados colombianos afirmó que la democracia tenía grandes problemás, o que en Colombia no
había democracia. En general es innegable que la imagen que tienen los colombianos de su propia
democracia podría mejorar, pero encontramos que los resultados entre los miembros de
Chiminigagua son más alentadores que los que muestra el Latinobarómetro más reciente sobre
Colombia.
Vale la pena recordar un argumento de Cuéllar que ayuda a entender por qué la gente en Colombia
no tiene una opinión tan desfavorable de otros regimenes de gobierno, como el régimen mil itar:
“…Colombia no ha tenido experiencias prolongadas, ni traumáticas, de dic taduras o regímenes
autoritarios… por tanto, es posible que no se tenga conciencia, en sus verdaderas proporciones, de
lo que significa una pérdida de las libertades” (Cuéllar 2000: 59).
Otra de las posibles causas por las que el apoyo a la democracia es limitado entre los encuestados,
es que según los hallazgos de Cuéllar, el apoyo a la democracia disminuye a medida que disminuye
el ingreso (Los miembros de Chiminigagua son en su mayoría personas de estrato 1)
Complementariamente, vale la pena señalar que algunos de los miembros de la muestra
(aprox imadamente el 5% ), tenían un nivel de educación tan bajo en términos de cultura política que
no identificaban claramente a qué se refería el cuestionario en esta pregunta, no dis tinguían el
concepto “democracia” y se refirieron al entrev istador para que les ac larara este punto. En el
Latinobarómetro 2004 se estipulaba que un 4% de los encuestados decían no saber qué era
democracia.
PREGUNTA 18: ¿Qué ventajas cree que tiene la democracia?
Una vez enunciada su opinión sobre la democrac ia, los encuestados expresaron qué tipo de
beneficios creían que se obtenían de ella. Es positivo ver que la gran mayoría encuentran en la
democracia ventajas como que ‘busca el bienestar de todos’ ‘deja que la gente sea l ibre’ o ‘busca la
justicia’, mientras que solo un 1,7% respondió que la democracia no tenía ninguna de las ventajas
listadas. Esto, a pesar del número de encuestados que afirmó tener una mala imagen de la
democracia y los encuestados que se quejaron de la democracia colombiana en particular. Dentro
de la categoría “otro” las personas señalaron ventajas como que la democracia deja que la gente se
exprese libremente y participe. De esta manera, aunque los resultados sobre la imagen de la
democracia no fueron muy alentadores, encontramos que los miembros de Chiminigagua son
conscientes de que a pesar de no ser perfecta o no ser lo que ellos creen que debería ser, a este
tipo de régimen político se le pueden atribuir cualidades.
Recapitulando los resultados de las encuestas, encontramos que son varias las ventajas que derivan
de las activ idades de organizaciones ciudadanas como Chiminigagua, lo cual lleva a afirmar
positivamente que nos encontramos frente a un caso de fuentes de Capital Social. La ev idencia
contundente de los beneficios que dejan las organizaciones voluntarias, y las diferencias v isibles
entre los resultados de Chiminigagua y los datos de Cuéllar, llevan a la necesidad de analizar más
profundamente la discusión sobre que tan cierto es que el Capital Social colombiano posea un
carácter perverso. Los resultados ev idenciados sobre confianza interpersonal, índices de
participación ciudadana, y cualidades personales y colectivas de los encuestados, conllevan a
indagar si es adecuado meter en la misma categoría (Capital Social) a Fundaciones como
Chiminigagua por un lado, y a mafias y pandillas por el otro, como lo hizo Cuéllar en su estudio.
CAPÍTULO IV
CONCLUSIONES
Es la Fundación Cultural Chiminigagua, un ejemplo para la sociedad bogotana de que una
comunidad se puede organizar y lograr espacios para llevar a cabo sus propios intereses, sin
necesidad de tener muchos recursos económicos. Aún más, la Fundación es un ejemplo de cómo
una sociedad pasiva se despierta y se convierte en parte de la Sociedad Civ il que va creando un
potencial de Capital Social para la localidad. Estos beneficios se pueden constatar de manera
tangible a través de las entrev istas y encuestas hechas a los ciudadanos que circundan el contexto
de la Fundación Chiminigagua.
Según el análisis presentado se puede constatar que Chiminigagua es una organización que
efectivamente forma redes de Capital Social en su entorno. Se puede afirmar que se trata de una
organización de tipo voluntario de carácter secundario (entre la familia y el estado y donde los
miembros están en contacto entre sí) y que es v inculante, que tiende puentes entre sus miembros
sin excluir a nadie que quiera hacer parte de ella. Chiminigagua es una organización de tipo
horizontal que genera, según lo estipulado en la teoría, los c inco principales beneficios que generan
las redes de Capital Social.
1. Acción Colectiva
En primer lugar, la teoría habla de que las redes de Capital Social permiten a los ciudadanos actuar
conjuntamente para soluc ionar problemás colectivos. En este sentido, la construcción del Parque de
las Artes es un ejemplo de como la comunidad unida solucionó un problema que aquejaba al barrio.
Se v iv ió un proceso de diseño y de construcc ión participativas para la realización del parque, que no
únicamente es un buen ejemplo de la apropiac ión del espacio público y de la iniciativa ciudadana
sino que sobretodo resulta ex itoso por las ventajas que le brinda todavía a la unidad de la
comunidad. Se trata de un ciclo de beneficios: a medida que los habitantes se involucran en la
construcción del parque, se conocen y se unen más como comunidad, y a la vez, el espacio público
de alta calidad que se logró construir, es un entorno ideal para la soc ialización de los habitantes. En
palabras de Casas y Pombo “El trabajo colectivo sobre el espacio público es al mismo tiempo un
resultado de la organización comunitaria y un valioso medio para la consolidación de grupos
comunitarios” (Casas y Pombo 1996: 88). Además, es tanta la identificación de la comunidad con su
parque que aún hoy, 15 años después de construido, el terreno se mantiene en perfectas
condiciones.
Chiminigagua es un ejemplo de que los espacios públicos, cuando son bien aprovechados, son el
hilo que une a todos los otros espacios dentro de un barrio. Es una realidad que el ordenamiento del
hábitat local hizo más propicio el ambiente para la integración ciudadana, ofreciendo también
espacios para la participación democrática. Se refleja la validez de los planteamientos de los
grandes urbanis tas que acuden a la importancia del espacio público como medio indispensable para
crear verdaderas comunidades. Para Edmundo Morel, urbanista que trabaja con casos de
participación comunitaria, el significado de este tipo de proyectos es que “sus propósitos más
amplios apuntan en la dirección de ir conformando espacios de participación democrática a nivel
local, que pueden serv ir de antesala para el logro de cambios significativos en el orden de la
estructura social... se entiende entonces el proceso de mejoramiento (del entorno), como un canal
para la potenc iación de cambios sociales en una dimensión más amplia” (Morel 1996: 83).
2. Reducción de costos de transacción
En segundo lugar, gracias a la construcción de v ínculos entre los ciudadanos, los niveles de
confianza interpersonal entre los miembros de Chiminigagua son más altos que los que se dan en el
promedio de la sociedad colombiana. Esto conlleva a un escenario propicio para reducir los costos
de transacción, de modo que se crea un potencial de desarrollo. Al trasladar los datos sobre
confianza en extraños hacia el hecho de hacer negocios con desconocidos, los resultados no fueron
tan positivos como se esperaba. Sin embargo, se supo que la muestra tiende a confiar en los otros
miembros de la Fundación más que en el promedio de la gente, por lo que valdría la pena ahondar
en un estudio que muestre si de hecho hay una mayor activ idad económica entre los miembros de
Chiminigagua.
De todas formás, vale la pena resaltar que tanto Cuéllar como Sudarsky hacen alusión a la relación
entre confianza interpersonal y estrato económico, mostrando que hay una relación directamente
proporc ional entre ellos. A medida que disminuye el estrato económico también disminuye la
confianza interpersonal. Por ejemplo: el estudio de Cuéllar, reveló que las personas que ganan entre
1 y 3 salarios mínimos ev idencian niveles de confianza hacia los otros excepcionalmente bajos
(Cuéllar 2000: 812). Dados estos antecedentes, los resultados de la muestra de Chiminigagua
resultan bastante positivos, teniendo en cuenta que las personas encuestadas prov ienen de los
estratos 1 y 2 y por lo tanto, si siguieran la tendencia, se esperaría de ellas que mostraran niveles de
confianza bastante bajos .
3. Surgimiento de cualidades sociales.
En tercer lugar, este trabajo ha podido comprobar que gracias a las activ idades colectivas
impulsadas por Chiminigagua, tienden a brotar entre la comunidad cualidades de tipo social, tanto
personales como colectivas. Entre ellas están: la sociabilidad y el mayor deseo por participar en
activ idades colectivas (que en términos colectivos lleva a la integración de la comunidad), una mayor
confianza interpersonal, mayor respeto, mayor tolerancia, y mayor colaboración entre la gente del
sector. Chiminigagua confirma la esencia de la definición de Putnam, según la cual, la clave de
Capital Social es que motiva la cooperación y colaboración para el beneficio mutuo de los miembros
que lo componen.
4. Redes de información
En cuarto lugar, dentro de los beneficios que obtienen los miembros de Chiminigagua grac ias a su
integración con sus vecinos y otras personas, se encuentra el estar más informados de lo que pasa
a su alrededor. Como se mencionó en el capitulo 4 y en el marco teórico, este hecho no sólo les trae
ventajas en términos de educación y les brinda un mayor nivel de cultura general, sino que además
les trae beneficios a la hora de enterarse de dis tintas oportunidades a su alrededor, oportunidades
de trabajo, oportunidades de participar en activ idades colectivas, oportunidades de colaborar con
necesidades del barrio y otras.
En la teoría también se habla de que los miembros de asociaciones voluntarias tienden a
favorecerse entre s í. Por ejemplo, si se abre una vacante de trabajo, no sólo es más factible que los
miembros de una organización se pongan al tanto entre sí, sino que es más factible que a la hora de
contratar a alguien, quien está a cargo busque favorecer a alguien de su organización. 39
5. Beneficios psicológicos
En quinto lugar, gracias a los beneficios que el indiv iduo adquiere de su diario conviv ir con otros,
empieza a sentirse mejor consigo mismo y por lo tanto a enfrentar mejor sus problemás en la v ida
diaria. El cuestionario hecho en Chiminigagua comprobó como a través de sus activ idades, sus
miembros pueden aprovechar y explotar cualidades que de otra manera no usan. En las dis tintas
preguntas salieron a la luz comentarios que demostraban el placer que significaba para muchos ‘ser
líder’, ‘encontrar talentos’ ‘ayudar a los demás’ , ‘socializar’ o ‘salir de la rutina’, lo que demuestra por
qué para muchos unirse a Chiminigagua es una fuente de beneficios ps icológicos.
39 Ver teoría de Alejandro Portes mencionada en el Marco Teórico.
4.1 Hacia una ciudadanía más activa
Respecto a la relación del Capital Social con las actitudes c ív icas, este estudio pudo v islumbrar que
entre los miembros de Chiminigagua hay una mayor disponibilidad por involucrarse en activ idades
tales como ejercer el voto y reunirse con los representantes políticos para discutir problemás
colectivos. Estos hallazgos resultan valiosos como indicios de que las organizaciones ciudadanas
voluntarias son motores para motivar a las comunidades a ejercer sus derechos y comportarse como
ciudadanos activos.
En el estudio de Maria Mercedes Cuéllar se demostró una correlación positiva entre quienes pueden
ser calificados como ciudadanos c ív icos que participan en asociaciones comunitarias, y su
preferencia por los regímenes democráticos, que en promedio es más alta que la de los ciudadanos
no cív icos. Este informe también muestra que los ciudadanos que partic ipan en activ idades
asociativas son los sectores más organizados de la sociedad y tienden a ser los más inconformes
(Cuéllar 2000: 624). Su grado de inconformidad justificaría por qué los miembros de organizac iones
como Chiminigagua, son más activos a la hora de unirse para discutir y buscar soluciones a
problemás colectivos.
Uno de los logros políticos más significativos alcanzados por miembros de Chiminigagua que se
lanzaron a la política, es el reunir cada jueves en la noche a decenas de personas en su sede,
donde los representantes de Opción Siete discuten los problemás que aquejan a la comunidad. Sin
embargo, es muy importante dis tinguir entre las reuniones para discutir problemás de la comunidad
(indicador que aparece en el estudio de Cuéllar para medir el Capital Social), y las v isitas que los
ciudadanos hacen a los representantes políticos buscando favores personales- caso que no se
incluye como Indicador de acción cív ica sino que más bien señala redes clientelis tas. Valdría la pena
comprobar si en Chiminigagua se establece lo planteado en el estudio de Cuéllar, el cual encontró
que a la hora de hacer v isitas sus representantes políticos, entre quienes participan en activ idades
asociativas sobresale la tendencia a interesarse en temás comunitarios y no en favorecer los temás
personales (Cuéllar 2000: capítulo 9).
Así pues, no únicamente por medio de su trabajo con la comunidad sino también gracias a la
decisión de v incularse en la política de algunos de sus miembros, Chiminigagua es hoy un formador
de c iudadanos activos. La importancia de este tipo de activ idades también la recalca el informe del
PNUD sobre la democracia en América Latina que dice: “Es necesario utilizar los derechos políticos
como palancas para promover el desarrollo de la ciudadanía integral. La expansión de la ciudadanía
es un impulso universal de toda democracia; como expandirla es una tarea de cada país en
particular” (PNUD 2002: 21). El problema es entonces lograr reestructurar la política para que pueda
agregar las demandas de todos los ámbitos urbanos y los motive a participar más.
4.2 El debate Colombiano: el carácter positivo del Capital Social
La ev idencia demuestra que Chiminigagua es un ejemplo de Capital Social positivo, lejano a lo que
Cuéllar plantea como Capital Social Perverso, que según ella es el usual en Colombia. Chiminigagua
demostró no poseer ninguna de las cualidades negativas del Capital Social Perverso. Demostró que
no es un caso de redes informales usadas para aislarse de la ineficiencia de las instituc iones
formales (como lo planteó Richard Rose al estudiar las organizaciones ciudadanas en Russia40), sino
que se trata de una organización informal que puede conviv ir paralelamente con las instituc iones
formales colombianas sin renunciar a la intención de luchar para hacer que estas cumplan con las
demandas ciudadanas. A la vez, se niega la teoría mencionada en el libro de Cuéllar que dice que la
40 Rose, Richard. Getting things done in an antimodern society: Social Capital networks in Russia. (mencionado en el estudio de Cuéllar 2000)
participación en asociac iones voluntarias no siempre puede tenerse como indicador de Capital
Social porque no es cierto que sus líderes representen a todos sus miembros (Cuéllar 2000: 773).
Pues bien, por medio de la comparación entre las encuestas hechas a los miembros y las entrev istas
hechas a los líderes de Chiminigagua, se comprueba que tanto unos como otros encuentran
beneficios similares tanto personales como colectivos y expresan la misma sensación de júbilo ante
los logros alcanzados por esta organizac ión ciudadana.
Los resultados de este estudio concuerdan mejor con los hallazgos de John Sudarsky, quien
relac iona al Capital Social colombiano con un concepto positivo, de ninguna manera perverso, y
quien además resalta el valor de las organizac iones voluntarias que establecen puentes, como lo es
Chiminigagua. Tras realizar mediciones del Capital Social en Colombia con el barómetro Barcas
Sudarsky concluyó:
“Frente a las afirmaciones sobre Capital social “malo” o “ vicioso” , se confirmó la suposición hecha en la
Introducción por la cual el Capital Social tiene que producir fuertes ex ternalidades positiv as. Si estas no se
dan, no se puede hablar de Capital Social sino de otras relaciones sociales que emergen cuando éste se
encuentra ausente (por ejemplo, el Familismo Amoral) y que no tienen tales ex ternalidades. No es un simple
problema semántico sino intrínseco en la naturaleza del Capital Social.... son las relaciones sociales con
fuertes ex ternalidades positiv as las que se deben buscar, no simplemente cualquier relación social. Implícito
también en la concepción de ampliar el radio de confianza está la noción de Capital Social que establece
“puentes” y no el que simplemente “cementa” . (Sudarsky 2001: 304)
4.3 El futuro de Chiminigagua: desvirtuando al Capital Social Perverso
De continuar su trabajo, Chiminigagua podría expandirse hacia otros sectores de la sociedad,
permitiendo que otros ciudadanos se empapen de los beneficios del Capital Social y de la cultura.
Luis Hernando Parra, edil de Bosa, habló de los planes a largo plazo que tiene la Fundación:
“Nosotros estamos pensando en descentralizarnos, en ex pandirnos a otros barrios. Ya tenemos un proy ecto
de ex pandirnos a una parte muy importante de Bosa como lo es Metrov iv ienda, aunque lógicamente esto
tiene unos costos económicos muy altos. Es un proceso macro que tenemos, ya tenemos unos 3,500 metros
que tenemos comprados a Metrov iv ienda y nos falta la construcción, pero estamos en un proceso de
coofinanciación, mirando con diferentes entidades para construir una escuela cultural y dar una alternativ a
clara que abarque el desarrollo sociocultural de toda una nueva comunidad.”41
Por otro lado, también desde la política los fundadores de Chiminigagua trabajan para fomentar
políticas públicas en pro de la cultura y el arte. Venus Albeiro Silva se encuentra liderando un
proyecto de ley que espera beneficie al teatro en el futuro.
“De 91 billones de pesos que hay al año en presupuesto nacional, solo se dejan para cultura 91 mil o 87 mil
millones, ni el 1 por ciento!!! Y de eso, el funcionamiento del Ministerio se lleva el 63%, o sea que queda solo
el 27% para inversión, entonces ese es el problema de la cultura en el país. Que la ley de teatro reglamente la
activ idad cultural en el país y también que cree el Instituto Nacional de Teatro que sea la entidad responsable
de toda la difusión, la promoción, la inv estigación al teatro colombiano y las artes escénicas. Y a su v ez, que
se financien los festiv ales, que se reconozca el 27 de marzo como día mundial del teatro, que se financien
más montajes... aquí hay grupos que duran 5 y 6 años sin hacer un nuevo montaje porque no tienen recursos,
que se socialice de forma másiv a todo lo que tiene que v er con el teatro. La ley esta lis ta para primer
debate en la comisión sexta, ya tiene ponencia, tiene todo pero no podemos garantizar nada.”42
41 Entrevista con el Edil Luis Hernando Parra, 9 de abril, sede de la Fundación Chiminigagua, Bosa. 42 Entrevista con Venus Albeiro Silva, Representante a la Cámara. 20 de abril, Nuevo Edificio del Congreso, Bogotá.
Es así como se hace fundamental que el Estado fije entre sus prioridades el apoyo al arte y la
cultura, así como la creación de políticas públicas orientadas a la integración de las comunidades.
Para que organizaciones ciudadanas como Chiminigagua, y muchas otras que afloran en los
sectores más pobres de la c iudad, sigan impartiendo beneficios a los ciudadanos más necesitados.
Es un hecho que dada la creciente tendencia al ais lamiento que v iven los ciudadanos de nuestra
época, el resquebrajamiento de las comunidades es una realidad que preocupa a urbanis tas y
trabajadores sociales a nivel mundial.
En palabras de expertos:
“Así como es difícil imaginarse el concepto de familia independiente al del hogar, es casi imposible imaginarse
el concepto de comunidad independientemente al de la cuadra de la ciudad o el bar local. Christopher Lash
ha observ ado que “ la v ida civ il requiere escenarios en los que la gente se pueda encontrar como iguales”
Gracias al decaimiento de las instituciones públicas que v an desde partidos políticos hasta parques públicos y
sitios de encuentro in formales, la conv ersación se ha conv ertido en algo casi tan especializado como la
producción del conocimiento” . (Duany , 2000: 60)
Allí recae el inmenso valor de esa primera construcc ión que hizo la comunidad, y de toda activ idad
que hasta hoy a sido impulsada por la Fundación Chiminigagua, porque es ese diario conviv ir el que
hace a la comunidad de los barrios Los Laureles y Los Naranjos dis tinta de tantas comunidades
bogotanas donde el aislamiento de los indiv iduos es cada vez mayor.
Pero además, la Fundación Cultural Chiminigagua no sólo brinda beneficios en términos de
cualidades sociales a la comunidad de Bosa, sino que es uno de los entes que gracias a su esfuerzo
engrandece la denominada “oferta cultural tangible” que Bogotá tanto necesita mejorar para
convertirse en una ciudad competitiva 43.
La Fundación Cultural Chiminigagua refleja en un solo contexto Sociedad Civ il, Capital Cultural y
calidad de espacio público. Gracias a la creación intangible de Capital Social, la Fundación
contribuye permanentemente a la unidad de la comunidad que convive dentro de los límites de Bosa,
luchando contra el aislamiento de los indiv iduos y la falta de interés por participar en el entorno que
los rodea. El surgimiento de una Sociedad Civ il activa en los habitantes de los barrios Los Laureles,
Los Naranjos, y muchos otros casos de indiv iduos particulares dentro de Bosa, es una realidad. El
potencial que ha surgido grac ias a las redes de Capital S ocial, es desde todo punto de v ista pos itivo
para el barrio, de ahí que sean discutibles los planteamientos de Maria Mercedes Cuéllar sobre el
Capital Social en Colombia.
Sin embargo, el caso de la Fundación Cultural Chiminigagua es mucho más escaso de lo deseable.
Despertar a la sociedad de su sueño pasivo para hacerla reaccionar frente al mundo donde cada
minuto otros toman decis iones que los afectan, y hacerlos tomar las riendas, no es fácil. Tanto para
los jóvenes como para los adultos colombianos, el involucrarse en la política como ciudadanos
activos implica varios retos; factores como la falta de credibilidad en las instituciones políticas y en
los gobernantes desmotivan su iniciativa. Por esta razón, entre otras, en nuestro país es escasa la
participación ciudadana en los temás que nos deberían competer a todos y se hace necesario que el
Estado cree mecanismos para fomentar la que idealmente debería ser una participac ión espontánea
y natural.
43: “ Bogotá ha hecho esfuerzos para mejorar la oferta cultural tangible en los últimos años pero infortunadamente se ha quedado atrás respecto a otras ciudades” Cámara de Comercio de Bogotá 2000: 35). Mientras que en ciudades como Seattle hay 5 bibliotecas y 2,5 museos por 100,000 habitantes, y sin ir muy lejos en Buenos Aires las cifras se traducen a 3,5 bibliotecas y alrededor de 3 museos, en Bogotá hay menos de 0,5 bibliotecas y menos de 0,5 museos por cada 100,000 habitantes. (Cámara de Comercio de Bogotá 2000: gráfico 31 p 36)
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Anexo 1
Tablas Y Gráficas
A continuación se exponen los resultados de las encuestas hechas a una muestra de 60 miembros de Chiminigagua. Las tablas y gráficas se encuentran en orden acorde con las preguntas que presentaba el cuestionario original. Para el análisis de datos se usó el Programa de Estadística para Ciencias Sociales SPSS. TABLA 1
GRAFICA 1
¿Cuál es su conexión con la Fundación Chiminigagua?
3 5.0 5.0 5.01 1.7 1.7 6.7
26 43.3 43.3 50.019 31.7 31.7 81.711 18.3 18.3 100.060 100.0 100.0
fundadorotroparticipante activoparticipante esporádicotrabajadorTotal
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajevál ido
Porcentajeacumulado
conexión con la fundación
conexión
trabajadorparti ci pante esporád
participante act ivootro
fundador
Por
cent
aje
50
40
30
20
10
0
TABLA 2
GRAFICA 2
¿A qué distancia vive de la Fundación?
10 16.7 16.7 16.79 15.0 15.0 31.7
16 26.7 26.7 58.325 41.7 41.7 100.060 100.0 100.0
lejos, m ás de 12 cuadrasm ás de 6 cuadrasotro barriopocas cuadrasTotal
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajevál ido
Porcentajeacumulado
¿A qué distancia vive de la fundación?
Distancia
pocas cuadrasotro barrio
más de 6 cuadraslejos, más de 12 cua
Por
cent
aje
50
40
30
20
10
0
TABLA 3
GRAFICA 3
¿Cuánto t iempo le dedica semalmante alas act ividades de Chiminigagua?
22 36.7 36.7 36.79 15.0 15.0 51.7
16 26.7 26.7 78.313 21.7 21.7 100.060 100.0 100.0
Tiempo semanalm ás de 4 horas3 horas2 horas1 horaTotal
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajevál ido
Porcentajeacumulado
Ti empo semanal que parti cipa (horas)
más de 4 horas
3 horas
2 horas
1 hora
TABLA 4
GRAFICA 4
¿Por qué participa en las actividades de la Fundación?
8 13.3 13.3 13.35 8.3 8.3 21.7
2 3.3 3.3 25.0
44 73.3 73.3 98.31 1.7 1.7 100.0
60 100.0 100.0
m otivo por e l que participaotroinfluencia fam iliainfluencia amigoso vecinospor gusto Total
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajevál ido
Porcentajeacumulado
Motivo por el que participa
en actividades de Chiminigagua
otro (13.3%)
nfl. famil ia (8 .3%)
am igos (3.3%)
por gusto (73.3%)
NS/NR
TABLA 5
¿Qué tienen en común los miembros de la Fundación Chiminigagua? Cualidades en común Frecuencia Porcentaje gustos o intereses 27 45.0% mismos valores 24 40.0% formas de pensar 24 40.0% afinidades politicas 15 25.0% viven en el mismo barrio 15 25.0% nada en común 3 50.0% otro 5 8.3% GRAFICA 5
TABLA 6
¿Qué beneficios personales considera que le trae a usted o a sus hijos participar en las activ idades de la Fundación Chiminigagua?
Beneficios personales Frecuencia Porcentaje Conocer más gente/ser más sociable 27 45.0% más respeto por los demás 18 30.0% confiar más en los demás 16 26.7% tener más información 25 41.7% saber más de cultura 35 58.3% sentirse mejor/ afrontar problemas 19 31.7%
participar en actividades barrio/colectivas 30 50.0%
ninguno de los anteriores 0 0.0% otro 9 15.0% GRAFICA 6
TABLA 7
¿Qué beneficios considera que le ha traído a la comunidad (al barrio) el hecho de que la gente participe en las actividades que organiza la Fundación Chiminigagua?
Beneficios para la comunidad Frecuencia Porcentaje la comunidad esta más integrada 27 45.0% la gente confía más en los demás 18 30.0% hay más respeto/tolerancia 22 36.7% la comunidad esta más informada 27 45.0% hay más colaboración entre la gente 23 38.3% hay más seguridad en el barrio 27 45.0%
la gente hace más negocios con otra gente 13 21.7%
otro 9 15.0% GRAFICA 7
TABLA 8
GRAFICA 8
¿Qué le generan las per sonas que usted no conoce, las personas que seencuestra en la calle , por ejemplo?
32 53.3 53.3 53.32 3.3 3.3 56.79 15.0 15.0 71.7
17 28.3 28.3 100.060 100.0 100.0
opin ión que le generandesconocidos
neutra lmiedodes confianzaconfianzaTota l
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajevál ido
Porcentajeacumulado
Opinión que le generan desconocidos
53.3%
3.3%
15.0%
28.3%
neutral
miedo
desconf ianza
conf ianza
TABLA 9
GRAFICA 9
¿ Usted hace negocios con desconocidos?
19 31.7 31.7 31.741 68.3 68.3 100.060 100.0 100.0
hace negocioss inoTotal
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajeválido
Porcentajeacumulado
Hace negocios con desconocidos
SI (31.7%)
NO(68,3%)
TABLA 10
GRAFICA 10
¿Qué le generan otros miembros de Chiminigagua?
52 86.7 86.7 86.7
8 13.3 13.3 100.060 100.0 100.0
Qué le generan otrosm iem bros
m ás confianza queel res to de gentem ism a confianzaTotal
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajeválido
Porcentajeacumulado
¿Qué le generan otros miembros de Chiminigagua?
misma conf . (13.3%)
más conf ianza (86.7%
TABLA 11
GRAFICA 11
¿Usted votó en las pasadas elecciones?
41 68.3 68.3 68.318 30.0 30.0 98.3
1 1.7 1.7 100.060 100.0 100.0
s ino Total
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajeválido
Porcentajeacumulado
¿Votó en pasadas elecciones?
Votó
sino
Por
cent
aje
80
60
40
20
0
TABLA 12 * ¿Recuerda por quien votó? Recuerda por quien votó SI NO NS/NR Para Presidente de la República 55.0% 15.0% 5.0% Para Alcalde de Bogotá 55.0% 18.3% 1.7%
Para Congresista (senado o cámara) 60.0% 13.3% 0.0%
Para Consejal de Bogotá 61.7% 11.7% 1.7% GRAFICA 12
TABLA 13* Recordando uno de sus candidatos, ¿Recuerda porqué v otó por esta persona? Motiv o por el que apoyó al candidato Frecuencia Porcentaje le daba confianza 33 55% se lo recomendaron 5 8.3% hizo campaña en su barrio 13 21.7% prometía algo que le interesaba 11 18.3% otro 11 18.3% GRAFICA 13 *Para esta pregunta a los encuestados se les pidió señalar todas las posibles respuestas que consideraran válidas, en otras palabras se les permitía marcar mas de una razón por la que apoyaron al candidato por el que votaron, si lo consideraban apropiado, razón por la cual a la hora de sumar los porcentajes de respuesta, estos suman mas de 100%.
TABLA 14
GRAFICA 14
¿Recuerda quién ganó las elecciones?
48 80.0 90.6 90.65 8.3 9.4 100.0
53 88.3 100.07 11.7
60 100.0
sinoTota l
Válidos
0PerdidosTota l
Frecuencia PorcentajePorcentaje
vál idoPorcentajeacumulado
Recuerda quién ganó las elecciones
NS/NR (11,7 %)
SI (80%)
NO ( 8,3%)
TABLA 15
¿Qué piensa usted de los siguientes representantes políticos?
Qué imagen tiene de... Positiva
Neutral/ depende Negativ a NS/NR
Presidente de la República 36.7% 35.0% 25.0% 0.0% Alcalde de Bogotá 51.7% 36.7% 10.0% 1.7% Los Congresistas en general 46.7% 41.7% 10.0% 1.7% Los Concejales en general 36.7% 51.7% 11.6% 0.0% GRAFICA 15
TABLA 16 ¿Tiene confianza en los siguientes representantes políticos? Tiene confianza en... SI NO Depende NS/NR
El Presidente de la República 40% 55% NA 5%
El Alcalde de Bogotá 68.3% 30% NA 1.7% Los Congresistas en general 60% 21.7% 16.7% 1.7% Los Consejales en general 58.3% 28.3% 11.6% 1.7% GRAFICA 16
TABLA 17
GRAFICA 17
¿ Qué imagen que tiene de la democracia?
1 1.7 1.7 1.77 11.7 11.7 13.3
19 31.7 31.7 45.033 55.0 55.0 100.060 100.0 100.0
negativa neutra l/ n i buena ni mala posi tivaTotal
VálidosFrecuencia Porcentaje
Porcentajevál ido
Porcentajeacumulado
Imagen que tiene de la democracia
posi ti va (55%)neutral (31.7%
negati va (11.7%)
TABLA 18* ¿Qué ventajas cree que tiene la democracia? Ventajas Frecuencia Porcentaje deja que la gente sea libre 32 53.30% impulsa el bienestar de todos 31 51.7% impulsa la justicia 18 30.0% ninguna de las anteriores 1 1.7% otro 6 10.0% GRAFICA 18
*Para esta pregunta a los encuestados se les pidió señalar todas las posibles respuestas que consideraran válidas, en otras palabras se les permitía marcar mas de una ventaja que creían tenía la democracia si lo consideraban apropiado, razón por la cual a la hora de sumar los porcentajes de respuesta, estos suman mas de 100%.
Anexo 3
Transcripción de entrevistas a miembros de la Fundación Cultural Chiminigagua
Miércoles 20 de Abril. Entrevista con: Venus Albeiro Silva, representante a la Cámara por Bogotá. Uno de los fundadores de la Fundación Cultural Chiminigagua Nuevo Edificio del Congreso.
Pregunta: Representante Silva, este trabajo trata el tema del Capital Social en Bogota, y como organizaciones de ciudadanos como la que usted ayudó a fundar logran impulsar la formación de este tipo de capital en Bogotá. ¿Qué opina usted de este tema? Respuesta: Es que esa es la pelea de nosotros, que hay que inv ertir en el Capital Social, y que el Capital social como tal tiene un v alor, que no es un valor agregado sino un v alor real, que no solo lo que ex iste es lo que usted puede contar, que hay un capital social que ex iste y que soluciona miles de problemás, que si el Estado tuv iera que inv ertir para solucionarlos jamás le alcanzaría la plata.... es que este tema es demásiado importante. P/ Si representante, ¿Por qué no empezamos hablando de cómo la Fundación se empieza a involucrar, a través de a algunos de sus miembros, en la participación política activa y cómo usted luego decide dar ese paso y lanzarse a un cargo público...? R/ Pues nosotros sentimos que después de muchos años de estar haciendo cultura, y trabajo comunitario y procesos artísticos, es el momento casi que de darle dirección al proceso, y eso tiene v arias etapas, primero nos consolidamos como un grupo teatral, viajar, tener un reconocimiento, pero después nos damos cuenta que queremos pasar a otro niv el de trabajo con la comunidad, y ese proceso lo llev a a uno a la necesidad de hacer política. Porque ahí v iene un contrasentido: usted mueve a la gente, hace todo el proceso y luego cuando quiere hacer una obra se presenta una objeción, que si un Edil o un Alcalde Menor no daba el
permiso para una actuación en un parque, no se podía hacer, y ellos tenían todo el poder porque se habían presentado a una elección, pero nosotros éramos los que mov íamos a la gente, entonces depender de ellos era un contrasentido… esa fue como la primera motiv ación, digamos. Era más como un rechazo a lo que ellos hacían que era oponerse a cosas culturales o a trabajar con los niños.... cosas que no tenían ningún sentido más que retribuirle a la comunidad. Entonces casi que por inercia nos metemos a una primera elección en una JAL en 1997, y ganamos, sin siquiera estar con ningún grupo político sino simplemente v iendo la política como un medio para el desarrollo que queríamos. Y a partir de ahí pues no damos cuenta que lo que tenemos en la mano es una herramienta política fuer tísima que es el arte y la cultura, pues claro el arte ay uda a sensibilizar a la gente. Y empezamos a darnos cuenta que todo lo que nosotros hacíamos era político, las obras que presentábamos donde denunciábamos la muerte de los jóv enes, la pobreza, la intolerancia, y comenzamos a darnos cuenta que en realidad el teatro es un elemento pol ítico… William Shakespeare (por ejemplo), todas su obras son una contestación al poder, a la monarquía que tenia el poder en ese momento. Y entonces y a decidimos hacer política en forma, creamos el Mov imiento Político Acción Siete, pero con la idea de no ser iguales a los otros políticos sino mantenernos totalmente diferentes y sin dejar de hacer cultura ni teatro. Al comienzo era bien difícil porque la gente tenia la concepción de que los artistas no se podían meter en política, porque la política era mala, entonces se manchaban y se v olv ían corruptos… a la v ez los políticos tiene la idea de que no pueden a entrar a la cultura “ por que eso es como de santos, como de gente que v iv e soñando que viv e fuera de la realidad”.... entonces al comienzo le cierran todas las puertas a Chiminigagua. Pero hay que darse cuenta que todo lo que uno hace es político, ahí hay una relación directa porque la política es todo lo que uno hace cuando se relaciona con los demás, sea para encontrar alternativ as o simplemente para discutir una idea, eso es política. Pero claro, siempre lo confunden con los procesos electorales, con el proselitismo, con la politiquería, que es donde usted ay uda para v er cuánto gana. En cambio nosotros comenzamos pensando hacer un proceso político sin pensar en cosas de elecciones ni nada de eso, y luego nos lanzamos y pues nos ha ido bien, en 8 años hemos llegado hasta el congreso totalmente solo, y hemos creado un mov imiento de concientización ciudadana, desde la cultura. Nosotros nos creímos el cuento de que lo que había que hacer en la política colombiana era una transformación cultural, para que la gente no se siguiera dejando comprar con una lechona, con un tamal, sino que comenzara a tener información política, se concientizara y participara. Porque es curiosísimo pero la gente con más necesidad es la que menos participa y es la más abstencionista, y nosotros también como todo artista éramos abstencionistas, hasta que después de 1991 empezamos a ver las posibilidades de participar y vimos que nadie lo iba a dejar participar a uno si uno mismo no hacia su progreso. Ese es el trabajo político y la fortaleza de la Fundación. Y cuando uno v iaja a Europa uno se da cuenta que muchos de los partidos políticos lo que hacen para socializarse es coger la cultura y el arte para ganar adeptos. Como la cultura brinda v erdaderamente otra posibilidad de v ida, da la posibilidad de imaginación, de soñar, de poder organizarse
uno, de v er la realidad, de no ser ignorante políticamente, entonces tiene un marginamiento total. Y con unos gobiernos como los nuestros donde todo se lo quieren inv ertir a la seguridad y a la guerra y a la muerte, pues el teatro y la cultura es todo lo contrario, es la vida, la diversión, la integración, es la paz, se va dejando a la cultura de lado cuando es fundamental, cuando cualquier país desarrollado lo primero que hace es inv ertir en cultura. P/ ¿Cómo ve usted a la comunidad de los barrios Los Laureles y Los Naranjos y cómo ve que ella se ha visto afectada por el proceso de incursión en la política? R/ Bueno hay un primer gran beneficio para la comunidad que es la transformación del entorno que se ha logrado a trav és de la cultura, la gente empieza a v er la v ida con muchas posibilidades. Muchos de los que al principio nos miraban como: “¿Estos locos que hacen?” Hoy son los mismos que mandan a sus hijos, o muchos de los que al comienzo tocaba darles dulces para que participaran, hoy mandan sus hijos a los talleres y se han dado cuenta que somos un proy ecto de v ida que se desarrolló. Entonces y a hoy en día nos respeta todo el mundo. Y la política, claro, la política nos afectó porque, en mi caso por ejemplo, tuv e que dejar de hacer lo que me gustaba para meterme en otro cuento bien distinto. Pero eso también deja un saldo pedagógico muy importante, la gente del sur se v a dando cuenta que uno puede pelear sus oportunidades, con lo que piensa, con lo que hace y con lo que dice puede llegar a estos espacios de decisión. Por ejemplo y o doy muchas charlas en los colegios de Bosa, y les digo que así uno sea estrato 1 o 2 o 3, el que tenga sueños puede lograrlos y que de pronto y que las oportunidades hay que pelearlas porque definitiv amente uno no las encuentra por ahí. Y que estos espacios no es que estén totalmente v etados, que parecerá imposible... pero si la gente se lo propone puede llegar. La gente primero comenzó a conversar de política y comenzamos a recoger v otos por ahí. De pronto a la campaña llegaban jóvenes, porque yo entre los jóv enes soy bastante conocido, y entonces se interesaran por la política. Y hemos logrado que mucha gente se lance a ser candidato de la JAC, o de los Consejos de Juv entudes, los colegios desde las Personerías, que comiencen a participar en los procesos de forma diferente, hasta llegar a donde v amos. Y logramos que la gente no le tenga fobia a la pol ítica, como asco, sino que v ean que uno si puede hacerse elegir, y ser totalmente diferente de lo que es la política en muchos casos. P/ ¿Cómo ve usted el apoyo del Estado hacia la cultura? Cuéntenos sobre la ley de teatro de la cual usted es autor, y que está actualmente postulada en el Congreso...
R/ Bueno en cuento del apoy o del Estado... y o pienso que todo lo que tenga que v er con v ida, con paz con tolerancia, en este tipo de gobiernos, sobretodo en gobiernos muy autoritarios, y en un gobierno neoliberal, pues no se tiene en cuenta. ¿Por qué no se tiene en cuenta? Porque no a ellos lo que les interesa es v ender la mercancía, el capital, y no la inv ersión social, o la ganancia social. Si usted inv ierte en cultura tiene una base social, no v a a tener tanta v iolencia, tanto drogadicto, tantos embarazos precoces, sino v a a tener gente con una regulación cultural muy importante. Estos gobiernos se preocupan es por la guerra y no por hacer desarrollo social que beneficie la reactiv ación del país. Mire, de 91 billones de pesos que hay al año en presupuesto nacional, solo se dejan para cultura 91 mil, o 87 mil millones, ni el 1 por ciento!!! Y de eso el funcionamiento del ministerio se lleva el 63%, o sea que queda solo el 27% para inv ersión, entonces ese es el problema de la cultura en el país. La cultura nuestra y los procesos artísticos del país están porque mucha gente priv adamente logra consolidar sus proy ectos, el caso del teatro La Candelaria, las orquestas , los grupos de danza, están porque se dedican a hacerlo y porque con las uñas lo hacen, no porque tengan un apoy o del Estado como se debería. Tienen unos apoy os mínimos. Si usted v a a hacer una gira no consigue recursos, son cincuenta mil problemás para hacer una función, los impuestos son carísimos, es casi imposible hacerlo. En cuanto al proy ecto de ley de teatro, es una ley que nosotros presentamos tratando de que las áreas de la cultura tengan su propio presupuesto, y a partir de él su propio desarrollo, un poco lo que ha pasado con la ley del cine. Aquí se hizo una ley general de cultura que no logró propiamente desarrollarse, entonces quedo en el papel, y en la práctica no tuv o los beneficios, fuera de la creación del ministerio de cultura que es un ministerio muy bueno, porque tener un Ministerio que esté metido dentro de la política tradicional pues es importantísimo. Pero va a haber que pelear que hay an recursos de la cultura y que se pueda legislar para eso, porque si no hay recursos no se puede hacer nada. Entonces y a se legisló para el cine, es la ley 814 que ha dado muy buenos resultados, ha impulsado y democratizado, entonces y a no son los mismos de siempre sino que puede ganar otra gente y hay recursos. Si antes se financiaban diez cortometrajes ahora se financian trein ta y llegan v einte directores nuev os, y hay otras posibilidades, entonces eso es lo mismo que queremos con la ley de teatro. Que la ley de teatro reglamente la activ idad cultural en el país y también que cree el Instituto Nacional de Teatro, que sea la entidad responsable de toda la di fusión, la promoción, la inv estigación del teatro colombiano y las artes escénicas. Y a su vez, que se financien los festiv ales, que se reconozca el 27 de marzo como día mundial del teatro, que se financien más montajes... aquí hay grupos que duran 5 y 6 años sin hacer un nuev o montaje porque no tienen recursos. Que se socialice de forma másiv a todo lo que tiene que ver con el teatro.
La ley está lista para primer debate en la comisión sex ta, ya tiene ponencia, tiene todo pero no podemos garantizar nada. La ley de cine se demoró 8 años para salir. Ésta se radicó en nov iembre y ya está publicada. Esperamos que pronto salga. P/ ¿Qué medidas cree usted que podría fomentar el Estado para unir más a las comunidades, y para que estos ciudadanos se motiven a participar? R/ Pura inv ersión social. Realizar programás sociales que desarrollen a las poblaciones vulnerables. Aquí hay un problema que es el de las poblaciones vulnerables que han v enido aumentado la problemática del país y se han v enido incrementando. ¿Cuáles son las poblaciones v ulnerables en las que tendría el Estado que inv ertir? niños, jóvenes, tercera edad, discapacitados, v endedores informales, desplazados, desempleados, mujeres, las mujeres son unas de las más marginadas, madres comunitarias, artistas y deportistas. Esas son las poblaciones vulnerables, que cada día sufren más de la falta de oportunidades. El gobierno tiene que declarar una emergencia social, una emergencia que nos permita invertir en las poblaciones vulnerables y reactiv ar la economía, para así fomentar la confianza de la gente. La gente una v ez tenga trabajo y tenga tranquilidad, empieza a confiar de nuevo en los líderes, y así empieza a participar y empieza a unirse más. P/ Ya para terminar, ¿Usted qué le diría a los jóvenes que están empezando a interesarse por participar más en política.? No, que hay que meterse, que los jóv enes deben meterse en la política y deben intentar llegar a muchos espacios de decisión y muchos espacios de poder. Es que son los jóv enes los que pueden hacer el cambio. Eso se lo dicen a uno y eso no es carreta, fueron los jóv enes del 68 los que cambiaron, ni siquiera cambiaron el país, cambiaron el mundo. Fueron también los jóv enes los que impulsaron la constitución del 91 por medio de la Séptima Papeleta. Los jóvenes tendrían que estarse manifestando sobre muchos hechos en el país, los jóv enes no se v an a poder pensionar y v an a sufrir todas las consecuencias del tratado de libre comercio y se v an a quedar desempleados. Los jóv enes son decisiv os para lograr los procesos de democratización, para llegar a los procesos culturales y de educación. La educación debe ir más dirigida para que los jóvenes piensen cuál es la realidad, y a partir de eso desarrollen todas esa ideas que tienen ahí y saquen a adelante este país. P.M.J: Venus Albeiro, gracias por todo y suerte con el proyecto de teatro tan importante que están promoviendo. V.A.S: Listo quedamos QAP!!!
Jueves 31 de marzo del 2005 Entrevista con: Cesar Grande, profesor y uno de los fundadores de la Fundación Cultural Chiminigagua. Sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa. Pregunta: Cesar, ¿Podría contarnos un poco más sobre cómo fue el proceso para crear la Fundación Chiminigagua? Respuesta: Inicialmente como le comentaba se hace la obra de construcción del parque y ahí empieza a marchar el camino, se establecieron diferentes puntos, se estuv o haciendo un recorrido por diferentes partes de la localidad , empezamos haciendo el taller de nosotros en colegios, en espacios que prestaban , para después llegar a la consecución de este espacio. Este espacio llega a raíz de un proy ecto internacional con una organización Holandesa... no recuerdo ahora el nombre... P/ ¿Y ella les ayudó? R/ Si , con ella conseguimos la plata para la compra del terreno y se hizo la construcción del edificio P/ ¿ Y eso hace cuanto fue? ¿Hace veinte años? R/ No, la consecución del terreno para la sede si fue hace unos 15... pues fue después de unos tres o cuatro años y antes lo que se hacía era conseguir sitios donde se podía ensay ar para conformar ya el grupo como tal, pues porque la gente no apoy aba el grupo. Del grupo inicial se han salido algunos, quedan otros, queda Venus por ejemplo quien hoy está liderando el grupo, y Martín, y otros de los fundadores originales. P/ ¿Hoy en día qué actividades tiene la Fundación? R/ Pues la Fundación básicamente trabaja la parte artística, pero... igual, se trabaja lo artístico: teatro, música y bueno un poco la cuestión oral, la narración oral... bueno esa es como la base de la Fundación, pero la Fundación busca por medio de financiamiento hace lo social , por ejemplo eso es lo que se está desarrollando ahora que es una campaña que estamos haciendo con la secretaría de tránsito, que es una campaña educativ a en la cual quieren hacer que la gente tome conciencia acerca del respeto de las normás de tránsito.
P/ Entonces, si entiendo bien, ¿Con los recursos que ustedes sacan de este tipo de actividades después dan clases gratis a los niños del barrio y hacen el resto de presentaciones? R/ Si exacto, nosotros generalmente, los proy ectos que se hacen acá, todo lo que se hace acá es gratis, acá se dictan talleres de música, danza, teatro, percusión, nuestra música, guitarra, piano... y de ahí es como irradia todo hacia el sector. P/ ¿Y después, por ejemplo, un grupo de niños va y presenta su obra en el parque? R/ Hacia eso iba, nosotros tenemos dos proy ectos que son básicos de la Fundación, en que la Fundación llev a trabajando v arios años, por ejemplo el del parque es y a como el quinto año que se está haciendo y hay otro que es la inv asión Cultural, estos dos proy ectos son los proyectos macro de la Fundación , porque se v ienen trabajando.. desde los encuentros ciudadanos, desde la consecución de los encuentros ciudadanos donde se encuentran ahí y luchan para que la gente tenga un lugar de encuentros, para poder meter a la gente en el Banco de Proy ectos y ya que tengan la posibilidad de ser contratados con la licitación. Entonces nosotros siempre camellazos los proy ectos desde esa parte, desde la parte social para que los podamos contratar igual nosotros. P/ ¿Cuáles son ahora los proyectos principales de Chiminigagua? R/ Empecemos por el parque, el parque básicamente es la dinamización ¿Qué es dinamización? es hacer unas jornadas cada fin de semana, presentando grupos artísticos ahí, grupos de música , de danza, en ese parque. Entonces ahí están los grupos que son grupos locales, grupos de nosotros, grupos nacionales y grupos internacionales. Y durante 30 fines de semana más o menos se presentan en la concha. También tiene una jornada los martes que es de cine, y lo presentan ahí en la concha también, y la gente sale a v er las películas. Y pues aparte de eso tenemos otro proy ecto que es que podemos dictar un taller de música y otro de danza con recursos del parque. Ese es básicamente el proy ecto del parque, igual el tiene cuatro ev entos másiv os que son: uno que es danza, es todo un día de danza donde se presentan grupos folclóricos. Otro que es el festiv al de música cultural, que se trata como de hacerlo en fechas especiales como es el día de la madre y también se traen grupos de música folclórica. Bueno y a v iene uno que es como el ev ento más másiv o que es: Bosa la Escena del Rock. Este ev ento y a tiene sus propios recursos que viene del parque, es un ev ento que y a tiene cierto reconocimiento a niv el distrital y nacional por lo que se ha hecho con el público y a que es muy libre, pues no se paga boletería. Y lo otro pues es ya un evento clausura donde se traen puros grupos de teatro, se hace teatro de calle, todo como una mezcla.
Ya el otro gran proy ecto de la Fundación es La Invasión Cultural, el festiv al se llama Festival Nacional e
Internacional de teatro Invasión Cultural a Bosa. Ese proy ecto pues prácticamente se desarrolla durante todo el año, porque ese proy ecto cada mes trae un grupo de teatro a actuar en la Concha Acústica. Es un espacio que irradia mucho hacia la comunidad. P/ Cuéntenos un poco más sobre la Invasión Cultural a Bosa R/ Bueno, la inv asión Cultural es un espacio donde nos conocen artísimo. Tratamos de trabajar no sólo con grupos de teatro de la localidad sino con toda la div ersidad y grupos de taro música y danza que hay en Bogotá. Y hace y a unos tres o cuatro años a niv el internacional, pues estamos tratando de armar como un circuito de teatro con v arios festiv ales que están por esa época en Colombia para que nos resulte tanto más fav orable a nosotros económicamente como para los grupos de teatro. P/ Bueno, ya pasando a otro tema, ¿Cuántos miembros calcula más o menos que tiene ahora la Fundación? R/ Pues haber, el equipo base somos 25 personas de las que 12 trabajamos y ganamos un sueldo de la Fundación y el resto hacen parte del grupo de teatro. Y aparte de eso tenemos la escuela de formación que donde son casi 300 muchachos que vienen a los talleres y participan también con sus padres. Tienen entre 5 y 20 años. P/ ¿Cualquier miembro de la comunidad se puede involucrar? R/ La mecánica de nosotros es que la misma gente del sector haga parte de la Fundación, entonces por eso no pedimos sino lo básico. Pedimos 15 mil pesos al semestre pero esos 15 mil pesos por ahí uno de cada 10 muchachos no lo pagan. Igual acá todas las activ idades son gratis, acá no se les cobra a la gente por v enir a v er los espectáculos. P/ ¿Cómo ha sido el proceso de aceptación y de participación por parte de la comunidad, es verdad que la comunidad cada vez los acepta más? R/ Si claro hace 20 años la gente no creía en nosotros, creían que éramos un grupo de mariguaneros,
tomatragos, de todo, por lo que nos gustaba hacer teatro. Pero entonces, la dinámica se empezó a expandir a la comunidad y surgió como un proy ecto de v ida y se empezó a dar un v ínculo con la comunidad. P/ ¿Cómo ve usted a la comunidad de los barrios Laureles y Naranjos? ¿Crees que la gente está integrada, que hay seguridad...?
R/ Bueno pues eso hay que mirarlo desde v arios puntos de v ista. Primero, aunque y a la comunidad es muy receptiv a, yo creo que hay quienes todav ía no se han dado cuenta del potencial que tienen y de todas las oportunidades de las cuales ellas pueden hacer parte, esa es una debilidad que veo en la comunidad del barrio. De igual manera, pues ellos tienen que empezar a sentir un mayor sentido de pertenencia y desarrollar su potencial. Aquí hay muchas cosas por hacer, y pues eso nos hace más orgullosos de que este proceso hay a llegado hasta acá. Porque de una u otra manera pues si nosotros estuv iéramos en el norte talv ez sería más fácil, pero allá y a todo está hecho. Aquí hemos podido ay udar a unir la comunidad y a guiar a muchos jóv enes por un camino distinto al de la drogadicción. P/ Bueno, y todo este cuento de la política, ¿Cómo es que ustedes terminan después de mucho tiempo de trabajar en esto, involucrándose de alguna forma en la política? ¿Usted cree que todo esto ha servido también para que la gente del barrio se interese más por los temás políticos? R/ Si, y o creo que esto le ha servido a la gente para despertarlos de alguna manera del adormecimiento que tiene la gente, pues porque no solamente es interesarse por votar sino que también hemos podido facilitar muchos de nuestros proy ectos. Además la gente ha v enido aquí al barrio, hemos tenido distintas campañas, la campaña de Horacio Serpa que vino a la Media Torta, en las últimás elecciones vinieron todos los candidatos a alcaldes con sus propuestas, oy eron quejas. Esto para la gente significó poder conv ivir con ellos en otro niv el, conversaron con la gente, dejaron que hicieran preguntas, que la gente v iera la problemática palpable de lo que está sucediendo. Y pues lógicamente con el proceso que hemos v enido v iv iendo desde el 96, es muy interesante porque le dimos nuestro apoy o a Venus (Venus Albeiro Silva) para que se lanzara de Edil de Bosa, y quedó con 9 mil votos. Luego, se lanzó al Concejo y al Concejo se quemó, porque a pesar de ser conocido acá en el sector no era conocido en otras localidades, la gente no creía que un tipo salido de acá de esta casa se fuera alanzar y fuera a quedar, eso no tenía ninguna presentación. Entonces el siguió con la conv icción de llegar a la Cámara y efectiv amente lo logró con 24 mil v otos, gracias al trabajo mano a mano con la comunidad logramos casi triplicar la v otación. P/ Ya para terminar: ¿Usted cree que el apoyo del Estado a este tipo de organizaciones que forman Capital Social, es suficiente acá en la Fundación? R/ A ver, pues digamos que nosotros no podemos ser desagradecidos, porque el Estado ha financiado varias de nuestra iniciativ as. Pero si es triste v er que el Estado no haya v isto la posibilidad que hay de que a la cultura se le brinden may ores recursos, porque en Bosa no sólo está Chiminigagua, hay un sinnúmero de organizaciones que también aportan a al comunidad fomentando otras dinámicas y donde los recursos sencillamente no alcanzan. Cada uno mira por su óptica, si bien es cierto que Bosa es una de las localidades que más apoy o ha tenido. Porque no sólo Venus, sino que tenemos otros representantes de la localidad trabajando, por ejemplo el Edil
Luis Hernando Parra que también había trabajado muchos años en la Fundación. Y gracias a la defensa que ellos hacen de la cultura, se ha mantenido, digamos, un estándar regular para los proy ectos culturales que hay en Bosa. Mientras que en otras localidades la cultura pues sencillamente no aparece..., pues también porque no hay una dinámica ¿no?, porque si al Estado tampoco se le presenta nada, el Estado tampoco tiene que apoy ar. Sábado, 9 de abril del 2005 Entrevista con: Martín Carreño, profesor de gimnasia y uno de los fundadores de la Fundación Cultural Chiminigagua Sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa.
Pregunta: ¿Cuál es la historia que recuerdas sobre el inicio de la Fundación Cultural Chiminigagua en
el barrio?
Respuesta: Nosotros iniciamos como un grupo juv enil, éramos todos de 17 o 18 años más o menos. La
ex pectativ a era formar un grupo de teatro, cosa que se logró y el mismo proceso nos llev ó a la necesidad de
que había que crear una Fundación cultural. Eso fue en el 85 ex actamente cuando se fundó la Fundación.
Eso ha sido un proceso y es un trabajo que se ha v enido haciendo desde ese entonces hasta la fecha, un
trabajo de talleres de teatro, talleres de danza, con jóvenes de la localidad. La Fundación también tiene como
trabajo para sustentarse a partir de proy ectos que se gestionan con la Alcaldía Menor, la Alcaldía Mayor,
algún aporte que se puede lograr con el Instituto Distrital de Cultura, a v eces algún proy ecto que se da con el
Institu to Nacional de Recreación y Deporte..., es un trabajo a punta de proyectos.
P/ ¿Cuántos miembros calculan ustedes que tiene la Fundación Cultural ahora?
R/ Yo calculo que además del grupo base de apoy o en el que somos 25 personas, tenemos unos 350 niños
que v ienen a los talleres, y unos 500 adultos que están v iniendo a v er las presentaciones regularmente, más
muchos más vecinos que participan cuando hacemos la Inv asión Cultural a Bosa.
P/ Bueno, ¿Y por qué deciden ustedes involucrarse luego en la política?
R/ Creemos que y a que se ha hecho un trabajo cultural pues hay que sacarlo adelante, y uno de los medios
para fomentarlo es a trav és de la política, que es una forma también de poder inv olucrar a los jóv enes. Es
mostrarle a los jóvenes que creen que la política es mala, que es lo contrario, es como mostrarles que ese fue
el error de nuestras generaciones, de no educarnos políticamente y por eso es que los jóvenes le tienen fobia
a la política y no participan, estas generaciones son muy apáticas a la política.
P/ ¿Cómo describiría usted en este momento a las comunidades de los barios Laureles y Naranjos?
R/ En este momento la comunidad es muy participativ a y tienen un muy buen corazón para las activ idades, en
este momento en cualquier lugar ubican el trabajo que hacemos aquí. La gente cada v ez asiste más a los
talleres, los mismos colegios que hay alrededor de la Fundación participan mucho de los talleres. En el taller
de danza más av anzado tenemos ya como 45 personas y en teatro unas 12, también tenemos muchos niños
haciendo el programa de Refuerzo Escolar Cultural, donde los ay udamos a hacer sus tareas. A v eces incluso
nos toca poner un tope porque no damos abasto con tanta demanda. Igual hay padres que el refuerzo escolar
lo asumen como v enir y dejar el niño porque no tienen nada más que ponerlo a hacer en la casa, pero igual
aquí se les hace un trabajo.. inclusiv e que más que refuerzo, más que hacerles la tarea es asesorarlos en
cémo se hace la tarea porque el compromiso es de los papás de acompañar a los niños con esas tareas. Se
hace también reunión con los padres para inv olucrarlos, para que estén más con sus niños para que tengan
más acompañamiento.
P/ Usted cree que hay seguridad en el barrio?
R/ Es un barrio más o menos como todos los barrios, podemos tener estación de policía pero aún así hay
alguna inseguridad.
P/ ¿Usted cree que hay confianza entre la gente?
R/ Si claro. Es un sector donde todo el mundo se conoce y todo el mundo está a la ex pectativ a de v er qué
pasa. La Fundación ha ay udado mucho a que la gente se conozca, la Fundación genera justamente como ese
espacio donde los mismos padres ayudan a velar por la seguridad del barrio.
P/ A eso justamente viene la siguiente pregunta: ¿Usted qué ventajas cree que ha traído a la
comunidad las actividades de la Fundación Cultural?
R/ Pues por ejemplo yo ayer hablaba con una profesora de un colegio de aquí de Bosa y me decía que ella
quería hacer un tesis sobre por qué tanto jov en aquí en Bosa tiene tanto talento pero se perdía. En este
momento la Fundación se encarga como de eso, de sacar a los jóv enes adelante. Yo soy de los partidarios
que dicen: ojalá cada barrio tuv iera su casa de la cultura para todos esos jóv enes que tienen tanto talento.
Porque Bosa tiene mucho talento pero entonces.... se empieza a reprimir desde las casas, les dicen: “que v a
a ir allá a perder el tiempo, aquí hay muchas cosas por hacer” y a las niñas las dejan para planchar lav ar y
cocinar. En este espacio todav ía se mantiene esa cultura machista, si un muchacho tiene el cabello largo
entonces y a se fue por otro camino, o es drogadicto... o es homosexual.. todav ía se mantiene esa cultura
aunque ha sido una pelea digamos de 20 años para que los padres cambien su mentalidad, para que los
padres les permitan a sus hijos explotar ese talento que tienen. Que el día de mañana digan: “ Oiga apareció
por ahí en la telev isión, o apareció músico, ¿De dónde salio? de Bosa, aquí se le dio su formación.” Y los
adultos y jóvenes puedan surgir así más lejos de la localidad.
P/ ¿Cómo ve usted el apoyo del Estado, le parece suficiente..., le falta?
R/ No, eso falta mucho, es un trabajo que nosotros iniciamos prácticamente con las uñas y que todav ía lo
hacemos con las uñas. Si aquí sale un proy ecto de recursos para una Fundación Cultural de Bosa, pues
mañana v an a aparecer 20 organizaciones culturales cuando en realidad no hay sino 2 conocidas. Y eso si,
esas organizaciones aparecen con personería jurídica, con Cámara de Comercio, con todo. Saben que es un
proy ecto de plata y ahí v ienen a pelarse ese proyecto. Esa ha sido la pelea acá en Bosa con entidades
culturales que no ex isten. Pero el Estado como tal, debería tener y a esa claridad de cuáles son las
v erdaderas entidades.
El trabajo con el Estado es muy duro, es más a v eces a veces es más fácil lograr el apoy o de una
organización ex tranjera que de la propia Alcaldía.
P/ Bueno, ¿Cómo ve usted el cambio de actitud de la comunidad hacia la política, cree que este
cambio se ha dado?
R/ Yo creo que a pesar de que se ha mejorado, la comunidad es muy apática todav ía. Cuando se trabajó
apoy ando a Venus para la Cámara había gente que llegaba y le decía “ Oiga doctor, yo le tengo tantos votos,
usted cuánto me v a a dar” . Entonces es gente que no... que no v alora... es gente que igual toda la v ida ha
hecho la política así y la idea es cambiarles la visión, cambiarles la idea de que la política no se hace así. Que
el representante está para legislar, que el Edil está para superv isar, y que las cosas se hagan como deben
ser. Porque si uno le da a una persona un millón de pesos y “ listo, no me moleste más” , seguimos haciendo
la política cochinamente.
Sábado 9 de abril del 2005 Entrevista con: Luis Hernando Parra, Edil de Bosa, miembro activo de la Fundación Chiminigagua. Sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa.
Pregunta: ¿Cuál es su conexión con la Fundación Chiminigagua?
Respuesta: Yo pertenezco ala Fundación desde hace 12 años, empecé inicialmente dictando cursos de
zancos y de guitarra, poco a poco fui inv olucrándome más y fui ascendiendo hasta conv ertirme en una de las
directiv as de la Fundación y luego me aleje un poco para conv ertirme en un miembro de la junta
administradora local de Bosa.
P/ ¿Qué lo hizo dar este paso a la política?
R/ Bueno, yo di este paso porque empecé a v er que este trabajo comunitario que se hace acá se debía
representar en un proceso político, y así lancé mi nombre como Edil. Pero normalmente nosotros no hacemos
un trabajo político, es el resultado de todo un trabajo comunitario que se hizo acá.
P/ ¿Qúe beneficios cree que le ha traído a la comunidad las actividades de Chiminigagua?
Yo lo div ido en dos tipos de beneficios. Primero tenemos unos beneficios arquitectónicos estructurales, como
por ejemplo el parque, la Concha Acústica, el estadio que también apoy amos, son obras que se han gestado
desde la Fundación cultural. Estas obras hacen un cambio de entorno, por eso este parque que era antes un
potrero con una criminalidad muy grande, con una obra de colaboración ciudadana que se hizo
conjuntamente con los jóvenes, se ha conv ertido en un espacio cultural.
Otro aporte que hace la Fundación muy grande es el cambio social. El cambio de eventos, el cambio de
estrategias, el cambio de cotidianidad, los continuos ev entos artísticos. La Fundación brinda un continuo
núcleo de ex pectativ as por estas labores que integran a la comunidad. Tanto en lo ar tístico como en lo
deportiv o, en lo pedagógico. Entonces son un poconón de posibilidades que hace que la gente v enga y
empiece a mirar distinto la v ida, y muchos de ellos encuentren una posibilidad de v ida aquí en la Fundación y
se integren, y encuentren orden, encuentren v alores, encuentren una manera distinta a como un jov en en un
barrio popular v e la vida. La Fundación es como ese otro espejo por el cual se puede ver y por el cual se
puede v iv ir en esta sociedad.
P/ ¿Cómo ve usted a las comunidades de Los Laureles y Los Naranjos?
R/ Yo la v eo como una comunidad muy priv ilegiada, realmente tiene una Fundación con una infraestructura,
con todas las posibilidades que les brinda. Ojalá en todos los barrios hubieran fundaciones como estas,
hubieran alternativ as y oportunidades, hubieran sitios donde encontrarse con la familia, donde encontrarse
con los niños, donde encontrarse con todo tipo de ex pectativ as distintas de v ida. Los Naranjos y Laureles
directamente son los barrios donde la Fundación se creó y por eso se benefician directamente.
Nosotros estamos pensando en descentralizarnos, en ex pandirnos a otros barrios. Ya tenemos un proy ecto
de ex pandirnos a una parte muy importante de Bosa como es Metrov iv ienda, aunque lógicamente esto tiene
unos costos económicos muy altos. Es un proceso macro que tenemos, y a tenemos unos 3,500 metros que
tenemos comprados a Metrov iv ienda y nos falta la construcción, pero estamos en un proceso de
coofinanciación, mirando con diferentes entidades para construir una escuela socio-cultural y dar una
alternativ a clara que abarque el desarrollo socio-cultural de toda la comunidad.
P/ ¿Cómo ve usted la posición de la comunidad respecto a la política? ¿Cree que son muy apáticos?,
O depronto, ¿gracias al trabajo de ustedes han venido mejorando?
R/ Si claro, la situación ha v enido cambiando en torno al trabajo social que se hizo, se fundó un mov imiento
político que se llama Opción Siete, ese movimiento político al igual que la Fundación ha mostrado una
diferencia en pautas porque ha demostrado que los líderes de barrio que se han formado en estos espacios
comunitarios, pueden llegar a los espacios de decisión que a veces uno no cree, y uno se v e muy lejano de
las Juntas Administradoras Locales, del Congreso... y no cree en la posibilidad de que halla un representante
cercano a ellos mismos. La gente del barrio ha sentido que la pol ítica no es lejana sino que también está al
alcance de ellos mismos y que ellos también son importantes, esa es la pauta que se ha marcado.
P/ Ya para terminar ¿Usted cree que el apoyo del Estado a las organizaciones que general Capital
Social, como lo es la Fundación Chiminigagua, es suficiente?
R/ Pues si el Estado tuv iera más en cuenta todas las iniciativ as privadas sería mejor, porque no es lo mismo
que el Estado trate de impulsar esto por sí solo a que el Estado trabaje con gente que ha v enido haciendo un
trabajo como el nuestro. Al igual que Chiminigagua hay muchas entidades, muchas organizaciones en Bosa y
en Bogotá que trabajan con las uñas, que trabajan tenazmente para lograr el apoy o de esas políticas. Si el
Estado les brindara la posibilidad de potenciar aquellos esfuerzos seguramente los resultados se verían
muchísimo más. El Estado lo único que hace es apoyar eventos, obras pequeñas, pero no apoy a los procesos
que han impulsado las organizaciones sociales tan importantes que tiene Bogotá.
Sábado 9 de abril del 2005 Entrevista con: Luz Mary Dareyes , Trabajadora Social que labora en apoyo a la comunidad y en sus ratos libres participa en actividades de la Fundación Cultural Chiminigagua. Sede de la Fundación Cultural Chiminigagua, Bosa
Pregunta: Luz Mary, ¿Qué beneficios cree que le ha traído a usted y a la comunidad la Fundación
Chiminigagua?
Respuesta: Lo que más me gusta, trabajar con la gente y participar con la comunidad. Porque uno v a donde
un representante, uno v a donde una Fundación, no hay puertas abiertas, a nadie lo atienden, tiene que
pagar... en cambio aquí a todo el mundo, sea una persona de la tercera edad, niñas –aquí en la localidad se
ha hecho un record y aquí en la localidad por lo menos Bosa, hay el 65% de niñas de 14 a 17 años
embarazadas- lo atienden, entonces y o participo en otras organizaciones que también trabajan con la
comunidad y siento la voluntad de participar y ay udar en lo que puedo a la comunidad. Aquí a las niñas no se
les cobra, los sábados y domingos se les inv ita a participar en los talleres y me parece bien porque las mamás
tiene que trabajar. Esta es una localidad de estrato 1 y 2 supuestamente, pero no hay tal hecho, aquí hay
mucho desempleo, hay 30,000 niños que no tienen cupo en las escuelas, y nos cobran muy caros los
serv icios, entonces me gusta hacer el trabajo puerta a puerta.
P/¿ Y qué hay sobre los beneficios para la comunidad?
R/Lo máx imo, lo máx imo porque aquí en el parque de las Artes de la Fundación Chiminigagua, se le hace a la
gente celebraciones, nos hacen fiestas, que del día del niño, que el día de... de todo lo que se pueda se hace
celebraciones y no se cobra.
Aquí trajimos a la Filarmónica, la Filarmónica estuv o acá en Laureles ahora en enero. Hubo también una
ex posición de pintura de artistas de Bosa. Acá nunca se pierde nada .
P/ ¿Cómo ve el trabajo que se ha hecho por parte de algunos participantes de la Fundación en la
política?
R/ Yo v eo que aquí la gente v iene algunas veces a pedir mercados o a pedir cosas que no se les pueden dar,
pero de todas formás se han acercado más a creer en la política más limpia. A nuestro candidato hay muchos
que lo quieren sacar del Congreso porque es estrato 2, porque es el único allá que es estrato 2, entonces a él
le toca más duro que al resto.... Aquí los juev es hay reunión cada quince días donde se dan informes de todo
lo que se ha hecho, lo que se v a a hacer y todo.
Y a niv el local, por lo menos los ediles que han salido de la Fundación han trabajado siempre para la
comunidad. Se limpiaron la calles, no se dejó que en el centro de Bosa que había un espacio para la
prostitución, no se dejó que se hiciera una zona de tolerancia, se busca que las señoras trabajen. Ya la
may oría de gente sabe que él v iv e acá, incluso nos da miedo que le hagan algo ( A Venus ) porque la gente
sabe que él es sencillo que no tiene guardaespaldas...
Se han hecho seminarios también, allá en la cámara se hicieron unos congresos, para que la gente, el pueblo,
conozca como es allá, se llevó a la gente a donde trabaja el congreso, al Capitolio, para que todos conozcan
qué es, porque él dice (Venus Albeiro Silva) que todos merecen conocerlo, porque somos nosotros los que le
damos los votos.
P/ ¿Qué le generan a usted las personas que usted no conoce?
R/ Pues confianza, porque para mi no hay ladrones, no hay matones, no hay rateros, no hay nada, por eso
confianza, todo el mundo para mi es confianza. Ustedes v ienen a arriesgarse porque casi nadie del norte
v iene acá, porque dicen que Bosa es lo peor, que Bosa es peligro, que Bosa es guerrilla.... no, aquí no hay
nada. Para mi Bosa es el mejor barrio de Bogotá, por eso yo no me he ido de aquí de la localidad.
P/ ¿Usted hace negocios con gente que no conoce de tiempo atrás?
R/ Si , para mi todo el mundo es igual.
P/ ¿Qué le generan los miembros de la Fundación Chiminigagua? ¿La misma confianza que el resto de
la gente?
R/ No... más, ellos son personas que son.... o sea con el nivel que tienen de educación, ellos son muy dados
a todo el mundo, generan mucho cariño , mucha confianza.
P/ ¿Usted votó en las últimás elecciones?
R/ Si, siempre he v otado, aunque también he colaborado con el partido Liberal, pero ellos no vienen sino
cuando necesitan v otaciones.. entonces yo le dije a Venus, “y o lo v oy a apoyar pero si usted es como los
otros políticos y o le v oy a decir la v erdad en su cara”. Cuando uno trabaja a nivel comunitario uno puede decir
la v erdad así, porque uno no está cobrando fav ores de nada.
P/ ¿Qué imagen tiene usted de los siguientes representantes políticos?
Primero, ¿Del Presidente de la República?
R/ Para mi.... el Presidente de la República es Hitler.
P/ Quiere decir, ¿Una imagen muy negativa?
R/ Si, el hace los Consejos Comunales para atraer a los v otos que él necesita. Los Paisas siempre miran es
hacia ellos y para ellos , ellos son muy v ivos....
P/ ¿Qué piensa usted de los Congresistas en general?
R/ Pues la gente llega a decirme que es que todos son unos ladrones, yo les digo: “si, la mayoría”. Pero no
todos son así... entonces yo lo califico como una imagen neutral porque cada persona tiene su enfoque...
P/ ¿ De los Concejales de Bogotá?
R/ Los Concejales son personas que luchan mucho para llegar allá, porque necesitan 25 mil votos, y si tengo
buena imagen.
P/ Bueno, ¿Qué imagen tiene usted de la Democracia?
R/ Pues la democracia acá en Colombia... este es un país de guerra, todos hemos nacido en guerra, por eso
necesitamos gente como los jueces de paz, mediadores, trabajadores comunitarios, porque en la sangre
tenemos todos algo de guerra, y nos aguantamos tanto, somos tan nobles... la democracia acá no funciona....
P/ Pero entonces, ¿A usted le parece que la democracia es mala? ¿Preferiría tener una dictadura?
R/ No. Dictadura no, no, no. La democracia es buena pero tenemos que capacitarnos mucho, tiene sus fallas
pero la democracia es mejor.
P/ ¿Y qué ventajas cree que tiene la democracia?
R/ Que uno puede par ticipar, puede hablar y ex presarse, pues uno tiene que saber como fundamentar sus
argumentos porque cuando la gente no sabe como decir algo, ahí es cuando pueden haber atentados contra
ellas.
Anexo 2
Muestra del cuestionario hecho a los miembros de Chiminigagua
Lea las preguntas y coloque una X en las respuestas que mejor describen su situación, si encuentra varias respuestas correctas puede poner más de una X en una sola pregunta. 1. ¿Cuál es su conexión con la Fundación Chiminigagua? Usted es uno de los fundadores Trabaja en la fundación Participa a menudo en activ idades de la fundación Participa de vez en cuando en activ idades de la fundación Otra, ¿Cuál? 2. ¿Qué tan lejos vive de la Fundación?
A pocas cuadras A varias cuadras ( más de 6 ) Lejos ( más de 12 cuadras) En otro barrio
3. ¿Cuánto tiempo a la semana le dedica usted o sus hijos a participar en actividades de la Fundación?
1 hora 2 horas 3 horas Más de 4 horas
4. ¿Por qué participa en las actividades de la Fundación?
Porque le gusta Por influencia de su familia Por influencia de sus amigos del barrio Otro, ¿Cuál?
5. ¿Considera usted que los miembros de la organización Chiminigagua tienen algo en común?
Gustos en común / Intereses en común Valores parecidos Formas de pensar parecidas Afinidades Políticas Viven en el mismo barrio Nada en común
6. ¿Qué beneficios considera que le ha traído a usted o a su familia el pertenecer o participar en las actividades que organiza la Fundación Chiminigagua?
Conocer gente / ser más sociable Respetar más a los demás Confiar más en los demás Tener más información sobre lo que pasa a su alrededor Tener más conocimientos culturales Sentirse mejor en su v ida diaria/ Afrontar los problemas más fácilmente Participar en activ idades del barrio /colectivas Otro beneficio, (escriba cuál)
7. ¿Qué beneficios considera que le ha traído a la comunidad (al barrio) el hecho de que la gente par ticipe en las actividades que organiza la Fundación Chiminigagua?
La comunidad está más integrada La gente es más confiada de los demás La gente es más respetuosa/ La gente es más tolerable La gente está más informada La gente colabora más con los demás Hay más seguridad en el barrio La gente hace más negocios con otra gente Otro ( escriba cuál)
8. En su diario vivir, ¿Qué le generan las personas que usted no conoce? (las personas que se encuentra por la calle o en su trabajo por ejemplo)
Confianza Imagen neutral, ni buena ni mala Desconfianza Miedo
9. ¿Usted hace negocios con gente que no conoce de tiempo atrás? SI_____ NO_____ 10. ¿Qué le generan los otros miembros de la Fundación Chiminigagua?
Más confianza que el resto de la gente La misma confianza o desconfianza que el resto de la gente Menos confianza que el resto de la gente
11. ¿Usted votó en pasadas elecciones? 12. ¿Recuerda por quien votó ya sea para Presidente, Alcalde, Congresista, Concejal?
SI NO
Presidente de la República Alcalde de Bogotá Congresis ta Concejal de Bogotá
13. Recordando uno de sus candidatos, ¿ Recuerda por qué votó por esta persona? 14. ¿Recuerda quién ganó esas elecciones? SI______ NO______ 15. Qué piensa usted de los siguientes representantes políticos: Imagen POSITIVA Imagen NEUTRAL Imagen NEGATIVA
SI NO
Le daba confianza Se lo recomendó alguien El candidato hizo campaña en su barrio El candidato prometía algo que le interesaba Otro ( escriba cuál)
ni buena ni mala Presidente de la República: Alcalde de Bogotá Los Congresis tas Los Concejales de Bogotá: 16. ¿Usted tiene confianza en los políticos? 17. ¿Qué imagen tiene usted de la democracia?
Imagen positiva ( le gusta) Imagen neutral, ni buena ni mala ( le da igual) Imagen negativa-desconfianza ( no le gusta)
18. ¿ Qué ventajas cree que tiene la democracia?
Deja que la gente sea libre Impulsa el bienestar de todos Impulsa la justicia Ninguna de las anteriores Otra, ¿Cuál?
SI NO Depende Presidente de la República Alcalde de Bogotá Congresis tas Concejales de Bogotá