El origen y el manejo maya de las geoformas.pdf

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Bautista, F., G. Palacio- Aponte, M. Ortiz-Perez, E. Batllori-Sainpedro y M. Castillo-González, 2005. El origen y el manejo niaya de las geoformas. suelos y aguas en la Penirisula de Yucatari, p. 21- 32. Di: F. Rau- lista y G. Palacio (Eds.) Caracterizacion y Manejo de los Suelos de la Península de Yvcatan. Iniplicacic~nes Agropecuarias, Forestales y Ambientales. Universidad Autononia de Campeche, Universidad A~iloiioina de Yucatán. Instituto Naciona! de Ecologia. 282 p. EL ORIGEN Y EL MANEJO MAYA DE LAS GEOFORMAS, SUELOS Y AGUAS EN Francisco Bautista', Gerardo Pala~io'.~, Mario Ortiz-Perez3, Eduardo Batllori-§a mpedro" Miguel Castillo-Goriza lez'," 'Departamento de Biología, FMVZ, Uniuersidad Autóris>iiia de Y~icatán, Tentro EPOMEX, Universidad Autónoma de Cainpeche, 31nstituto de Geografía, Universidad Nacional Autónoma de México, 4Centro de Investigaciones y de Estudios Avnrizados, 5FES-Z,Universidad Nacional Autononia de México Se discute la diversidad geomorfológica de la Península de Yucatán (PY), identificando siete niveles de evolución cárstica: reciente, reciente - juventud, juventud, ju-ventud-madurez, madurez, madurez - tardia de relictos y tardía de relictos, mostrando un patrón morfológico de geoformas exocársticas, con formas de absorción circulares, cavidades de desarrollo vertical, circulación vertical y horizontal y surgencias periféricas. A mayor evolución kárstica. se incrementan las geoformas y depósitos residuales producto de la disolución de las calizas, hasta unirse gradualmente durante la madurez, y formar uvalas y poljés, particularmente sobre los controles estructurales pre$entes en Quintana Roo. Los acuíferos de mayor volumen se desarrollan en las rocas carbonatadas recientes, propiciando la existencia de dos acuíferos regionales, cuyo proceso geohidrológico es la mezcla de agua de reciente infiltración con agua salada más antigua más las sales presentes en los depósitos evaporíticos, donde la precipitación pluvial mis alta detiene la intrusión salina. La alta permeabilidad y un somero nivel freático, otorgan un índice de vulnerabilidad de alto a extremo, a consecuencia de la intensa disolución. El agua pluvial infiltrada produce una compleja trama de cavidades subterráneas, sin corrientes superficiales, en el norte; hacia el sur, se tienen los Ríos Hondo y Sorpresas. En la porción costera, la descarga del agua se realiza a través de manantiales y hacia el mar, alimentando ciénagas y lagunas costeras. El origen de los suelos se encuentra bajo discusión, con la interpretación de la génesis sobre depósitos de sedimentos calizos, polvo meteórico o cenizas volcánicas depositadas y su combinación potencial. Estcidios recientes muestran la disolución de la caliza y formación de un subhorizonte petrocálcico, de los calcisoles. Las clasificaciones campesinas de tierras tienen un alcance restringido, relación estrecha entre el nombre de la clase de tierra y el concepto, donde los intentos por encontrar relaciones con la nomenclatura Maya. detectan la dificultad al relacionar una clase de tierra con la unidad de suelo y donde la vegetación influye en su fertilidad. Los mayas se dedicaron al cultivo intensivo en tres tipos de hábitat (montañoso, pantanoso y costero), como lo indica la existencia de albarradas y terrazas en Campeche y Quintana Roo; combatieron las inundaciones mediante la elevación de campos y construyeron canales de riego y drenaje, reconociendo la importancia del uso diversificado de los recursos. Respecto a la pesca, los

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  • Bautista, F., G. Palacio-Aponte, M. Ortiz-Perez, E. Batllori-Sainpedro y M. Castillo-Gonzlez, 2005. El origen y el manejo niaya de las geoformas. suelos y aguas en la Penirisula de Yucatari, p. 21- 32. D i : F. Rau- lista y G. Palacio (Eds.) Caracterizacion y Manejo de los Suelos de la Pennsula de Yvcatan. Iniplicacic~nes Agropecuarias, Forestales y Ambientales. Universidad Autononia de Campeche, Universidad A~i loi io ina de Yucatn. Instituto Naciona! de Ecologia. 282 p.

    EL ORIGEN Y EL MANEJO MAYA DE LAS GEOFORMAS, SUELOS Y AGUAS EN

    F r a n c i s c o B a u t i s t a ' , G e r a r d o P a l a ~ i o ' . ~ , M a r i o O r t i z - P e r e z 3 , E d u a r d o B a t l l o r i - a mpedro" M i g u e l C a s t i l l o - G o r i z a l e z ' , "

    'Departamento d e Biologa, FMVZ, Uniuersidad Autris>iiia d e Y ~ i c a t n , T e n t r o EPOMEX, Universidad Autnoma d e Cainpeche,

    31nstituto d e Geografa, Universidad Nacional Autnoma de Mxico, 4Centro d e Investigaciones y d e Estudios Avnrizados, 5FES-Z, Universidad Nacional Autononia d e Mxico

    Se discute la d iversidad geomorfolgica de la Pennsula de Yucatn (PY) , identif icando siete niveles de evolucin crstica: reciente, reciente-juventud, juventud, ju-ventud-madurez, madurez, madurez-tardia de relictos y tarda de rel ictos, mostrando un patrn morfolgico de geoformas exocrsticas, con formas de absorcin circulares, cavidades de desarrol lo vert ical, circulacin vert ical y horizontal y surgencias perifricas. A mayor evolucin krstica. se incrementan las geoformas y depsi tos residuales producto de la disolucin de las cal izas, hasta unirse gradualmente durante la madurez, y formar uvalas y pol js, particularmente sobre los controles estructurales pre$entes en Quintana Roo. Los acuferos de mayor volumen se desarrol lan en las rocas carbonatadas recientes, propic iando la existencia de dos acuferos regionales, cuyo proceso geohidrolgico es la mezcla de agua de reciente inf i l tracin con agua sa lada ms antigua ms las sales presentes en los depsitos evaport icos, donde la precipitacin pluvia l m i s alta detiene la intrusin salina. La alta permeabil idad y un somero nivel fretico, otorgan un ndice de vulnerabilidad de alto a extremo, a consecuencia de la intensa disolucin. El agua pluvial inf i l trada produce una compleja t rama de cavidades subterrneas, sin corr ientes superf iciales, en el norte; hacia el sur, se tienen los Ros Hondo y Sorpresas. En la porcin costera, la descarga del agua se realiza a t ravs de manantiales y hac ia e l mar, al imentando cinagas y lagunas costeras. El or igen de los suelos se encuentra bajo discusin, con la interpretacin de la gnesis sobre depsitos de sedimentos calizos, polvo meterico o cenizas volcnicas depositadas y su combinacin potencial . Estcidios recientes muestran la disolucin de l a cal iza y formacin de un subhor izonte petroclcico, de los calcisoles. Las clasificaciones campesinas de t ierras t ienen un alcance restr ingido, relacin estrecha entre el nombre de la clase de t ierra y el concepto, donde los intentos por encontrar re laciones con la nomenclatura Maya. detectan la dif icultad al relacionar una c lase de t ierra con la unidad de suelo y donde la vegetacin inf luye en su fertil idad. Los mayas se dedicaron al cult ivo intensivo en tres t ipos de hbitat (montaoso, pantanoso y costero), como lo indica l a existencia de albarradas y terrazas en Campeche y Quintana Roo; combatieron las inundaciones mediante la elevacin de campos y construyeron canales de r iego y drenaje, reconociendo la importancia del uso diversif icado de los recursos. Respecto a la pesca, los

  • .:S Caracterizacin y Manejo de los Suelos de la Pennsula de Yucatn

    mayas obtenan alrededor de 300 especies, comerciaron con sal, conocieron los beneficios del manejo de abonos, aguas residuales, mantillas y vegetacin y clasificaron las tierras, segn la heterogeneidad espacial.

    Discuss the geomorphologic diversity of Yucatan Peninsula, identify seven levels of karstic evolution: recent, recent-youth, youth, youth-maturity, maturity, maturity- relict late and relict late, show a morphologic pattern of exokarstic geoforms, with circular absorption shape, hole of vertical development, vertical and horizontal circulation and outlying surgeons. The major karstic evolution; increase the geoforms and residuals deposit, product of the limestone dissolution, gradually join during her maturity, until fashion uvalas and poljs, where the current structural control at Quintana Roo, yield the uvalas formation. The volume major aquifers, was development on the recent limestone rock, give existence two regional aquifers, whose geohydrologic process be the mixture of water de recent infiltration with water salty over ancient and increase of salts content, join l o evaporate deposit, where the over tiigh rainfall. stop the salty intrusion. The high permeability and freatic level shallow confer a hiyh-extreme vulnerahility index, strong dissolution consequence. The infiltrate rainfall produce a complex weaves of i indergrouiid cavity, at the North without superficial stroams; at the south, hold the Hondo and Sorpresas Rivers. At the coastal portion, the water was discharge across springs and towaid the sea, feed swarnp and coasta! lagoons. The soil origin was under discussion, by the genesis interpretation above limestone silt depr~s i t . meteoric dust or volcanic ash placed and their potential combination. Fiecent studies exhibit the limestone dissolution and petrocalcic subhorizon formation, about the Calcisols, The land peasant clascificatio;: possess a restrict scope, narrow relation between the nominate of her land class and the concept, wtier? the attempt for find relationship with the FAayan nomenclature, detect the difficulty to relate a larid class with the soil unit, where the vegetation influence their fertility. The Mayas was dedicate to intensive cultivation by three kind of habitat (mountainous, marshy and coastal environment), designate the great existence of "albarradas" and terrace at Campeche and Quintana Roo; perform against the flood through the high fields and build irrigate and drainage channels, recognize the importance of the diverse use o f !he resource. Concern to the fish, the Mayas obtain around of 300 kind and the salt trade, kriow the beneficia1 from manage of excrement, wastewater, mulching, and vegetation and classify the land, reflect fronr the space with high heterogeneity.

    Como parte del conocimiento necesario para enten- der la complejidad de los sistemas naturales, se hace necesario caracterizar individualmente los componentes que la constituyen. A continuacin se caracterizan los atributos geomorfolgicos, geol- gicos, hidrolgicos, edficos, y de manejo de los re- cursos del suelo, agua, mar, monte, as como el conocimiento ancestral indgena de los atributos in- herentes a cada uno de los componentes y proce- sos ambientales.

    Destaca como punto de partida, el hecho que la Pennsula de Yucatn, (PY), no es una planicie ho- mognea sobre la cual las interrelaciones de los procesos geomorfolgicos, climticos, edficos y de sucesin vegetal, han encontrado un sitio inmu- table. Por el contrario, a escalas grandes y niveles locales, existe una amplia diversidad de relieve y ecosistemas, encontrndose variaciones horizon- tales en espacios muy cortos. Esta aparente con- tradiccin propicia inconsistencias al momento de tomar decisiones sobre el aprovechamiento de los recursos naturales.

    Dentro de este contexto. es importante afirmzr que prcticamente se desarrollan todas las activi- dades primarias en la PY: la agricultura de riego y temporal, el aprovechamiento forestal, e l aprove- chamiento de recursos marinos, pesca y sal, el ma- nejo de recursos silvestres tanto vegetales como animales y la conservacin dentro de diversas y ni l - merosas Areas Naturales Protegidas. Todas estas actividades se mantienen vinculadas en mayor o menor grado a la cosmovisin cultural y el legado social del mundo maya.

    Bajo esta perspectiva, es necesario desglosar los componentes ambientales, plantear interrogari- tes acerca de su origen y evolucin, y pasar al plano o nivel de la integracin sistmica, donde se pue- dan establecer las correlaciones entre lo natural, considerando los factores biticos y abiticos, y lo social, lo que demanda conocimiento formal y deta- llado que asegure la satisfaccin presente y futura de las necesidades humanas bsicas.

  • F. Bautista y G. Palacio (Eds.) 9:.

    ORIGEN D E LAS GEOFORMAS

    Durante e l Cretcico la PY estuvo cubierta por ma- res someros sobre los que se acumularon importan- tes espesores de carbonatos y evaporitas, que a su vez dieron origen a calizas, dolomitas y yesos. Pos- teriormente a partir del Eoceno, se originaron una serie de eventos geolgicos que determinaron la geomorfologa actual y por lo tanto el ambiente fsi- co-geogrfico de la PY.

    En el Eoceno (ca. 52 a 36 millones de aos) un proceso orognico en e l sur de la PY pleg los re- cin formados estratos de calizas y produjo un re- lieve ondulado. A finales del Oligoceno, este relieve fue sometido a una fuerte erosin en los ma- teriales dolomticos del cretcico.

    Durante e l Mioceno y e l Plioceno se originan dos sistemas de fracturas: uno con orientacin NE-SW, cuyas expresiones se observan a lo largo del cauce del Ro Hondo; y otro con orientacin NVV-SE, a lo largo de la "Sierrita de Ticul". Durante e l Mioceno Medio, la PY experiment un hundimiento que favo- reci la posterior precipitacin de carbonato de cal- cio durante e l Plioceno, conformando su porcin septentrional.

    La zona Costera de la PY present los mayores cambios durante e l Pleistoceno, debido a la inesta- bilidad climtica ocasionada por las glaciaciones y los periodos interglaciares. Se han encontrado tres eventos geolgicos que determinaron la configura- cin actual:

    La estabilizacin de la Inea de costa del Pleisto- ceno durante e l perodo interglaciar Sangamon en 5 y 8 m sobre e l nivel actual del mar, hace aproxima- damente 80,000 aos. El norte de la Ciudad de M- rida estuvo inundada por un mar somero; se formaron las ondulaciones de playa a lo largo de la Inea de costa que se asocian con los actuales hu- medales costeros.

    Descenso de 130 m el nivel del mar durante la glaciacin del Wisconsin, hace 18,000 aos aproxi- madamente, cuando la plataforma marina fue ex- puesta a procesos terrestres y atmosfricos y sujeta a la erosin de valles y cuencas, as como la sedimentacin en planicies y deltas; estableciendo el estado geolgico para e l desarrollo de modernas lagunas costeras, durante la trasgresion del Holo- ceno.

    Durante la trasgresin del Holoceno, alrededor de 8000 aos atrs, e l nivel de l mar disminuye Ilegan- do a un nivel de 3 a 4 m por debajo del nivel actual; comenzando e l depsito de sedimentos carbonata- dos del Cuaternario en las reas costeras actuales.

    Tales eventos generaron procesos endgenos y exgenos sobre la superficie terrestre. La actividad end6gena es la creadora de las deformaciones de la superficie terrestre, y su estudio es fundamental para conocer la disposicin estructural del relieve y distribucin litolgica; y los procesos exgenos ni-

    velan e l relieve mediante la erosin de las elevacio- nes y acumulacin o relleno de sedimentos en las depresiones. Los procesos y sus modalidades de degradacin, denudacin, remocin, corrosin y sedimentacin de la superficie terrestre se llevan a cabo bajo condiciones ambientales determinadas primordialmente por el cl ima.

    El relieve y e l clima conducen a determinados sistemas de denudacin-erosin-acumulacin-co rrosin, con el dominio de alguno de ellos, quedan- do como procesos secundarios los restantes. Dichos mecanismos modelan conjuntos estructura. dos espacialmente, adems de estar vinculados con familias de formas afines por su origen.

    El resultado de la intensidad de los procesos for- madores del relieve actual se discute ms adelante.

    El modelo de evolucin crstica propuesto por Grund (1 91 4) y Cvijic (1 91 8) se ha mantenido prc- ticamente sin modificaciones desde sus primeras versiones hasta la fecha. Plantean cuatro etapas de evolucin l ineal para ambientes hmedos ( tem- plados y tropicales), con espesores importantes de rocas carbonatadas y bajo un solo periodo continuo de levantamiento tectnico. Aunque en sentido es- tricto las etapas son lineales y no tienen uri nombre, para este trabajo se les ha denominado: reciente, juventud, madurez y tarda de relictos. Posterior- mente Lehmann (1954) y Pannekoek (1948) reali- zaron estudios especficos sobre e l karst tropical caracterizndolo como tpico de colinas cnicas, pero igual dentro de un patrn de cuatro etapas evolutivas (Fig.1) que guardan algunas similitudes con e l karst de la Pennsula de Yucatn.

    gura 1. Evolucin del Karst tropical.

  • S:. Caracterizacin y Manejo de los Suelos de la Pennsula de Yucatn

    Para la PY la evolucin crst ica presenta var ian- tes derivadas de las condic iones propias de s u evo- lucin geolgica, tectnica y ambiental . Los factores fsico-geogrficos ms importantes a con- siderar, de carcter endgeno y exgeno, son: la morfoestructura, pulsos y est i los tectnicos anti- guos y recientes, t iempos geolgicos de disolucin (condiciones c l imt icas) y solubi l idad de la roca, densidad y distr ibucin de estructuras superf iciales susceptibles a la d isolucin (f isuras, fracturas, fa- l las y diaclasas) y rugosidad como indicador morfo- lgico de los grados de evolucin.

    Debido a que la mayor par te de la PY se encuen- t ra cubierta por selvas t ropicales pr imar ias y secun- darias, y no se dispone de evidencias v is ib les de karst desnudo, el indicador ms signif icativo para diferenciar los estadios evolut ivos del karst , es el patrn morfolgico de geoformas exocrst icas, que sintetiza las condic iones que favorecen o inhiben el desarrol lo del karst.

    El karst en la PY se desarrol la sobre estructuras tectnicas tabulares o mesi formes, de estratos mo- noclinales dispuestos en forma hor izontal o subho- r izontal. Se caracter iza po r formas de absorcin circulares, cavidades de desarrol lo vert ical, c i rcu- lacin vert ical y hor izontal y surgencias perifricas. La circulacin es esencialmente vert ical, descen- dente y de al imentacin autctona. La morfoestruc- tura tabular o estructura congni ta de la Pennsula h a s ido modi f icada por basculamientos di ferencia- les en dos grandes bloques estrechamente l igados

    a la estructura geolgica profunda (Lpez-Ramos, 1975), uno de el los al sur que inici su levantamisn- to en el Mioceno y otro al norte in ic iando su levanta- miento en el Pl ioceno y cont inuando hasta el Cuaternario. L a inf luencia de la act iv idad neotect- nica que h a provocado e l levantamiento en fo ima basculada de mayor intensidad en el sur, origina sistemas de f racturas or ientados al norte y noreste (Lugo et a l , 1992). De es ta manera en el b loque sui- se origina el karst paleognico (Gerstenhaiuer, 1969), donde se encuentran las etapas ms avan- zadas de la evolucin crst ica y en el norte el ms reciente o neognico de planic ies denudat ivas con densidades var iables de depresiones y dol inas i ce - notes), correspondiendo a l a e tapa reciente y de jci- ventud. Esta pr imera di ferencia estructural marca lneas evolutivas dismi les c o n respecto al desarro - l lo que mostrar an estructuras complejas plegada: y10 fal ladas, donde las secuencias evolut ivas se - r an ms dif,ciles de descubr i r .

    P, partir de las di ferencias en bloques se originar! expresiones morfolgicas exocSrsticas t ipif icadas segn las secuencias evolut ivas p!rdeterininadai; e interfases de t ransic in der ivadas, se ident i f ica- ron s iete grados o niveles de e v i ~ l u c i @ n c5.rstic-n: reciente, reciente-juventud, juventud, juven- tud-madurez, inadurez, madurez -tard a de relicto,; y tarda de rel ic ios (Fig. 2).

    A medida que el p rcceso ci-stico avanza. se i r - crementa la cant idad de geoformss y depsi tos re- s iduales producto de la disolucin de las cal izas.

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    a Expresioii Ftnpas

  • - F. Bautsta y G. Palacio (Eds.) f.

    Las planicies denudativas se transforman gradual- Por otra parte la rugosidad del terreno es un au- mente en planicies acumulativas confinadas hasta xiliar tanto cualitativo como morfomtrico que per- convertirse en planicies residuales extendidas mite discriminar estilos de paisaje crstico. Day (Fig. 2). Al mismo tiempo las geoformas positivas (1 977) propone un ndice para diferenciar entre pai- con respecto a los niveles de base locales, apare- saje rugoso o suave. Si el terreno es suave el ndice cen entre la juventud y la madurez como altillos y lo- tiende a infinito y entre ms rugoso es, ms se acer- rneros bajos con cimas de pendiente plana y ca a uno. En este sentido el paisaje en su etapa ini - horizontal, resultado de la erosin diferencial sobre cial (reciente) es suave y a medida que evoluciona planicies estructurales de exposicin reciente a la se incrernenta la rugosidad alcanzando su mximc carstificacin. Al aumentar los tiempos de disolu- o clmax en la madurez y disminuyendo posterior- cin, y por tanto los materiales residuales de terra men!e hacia la etapa tarda de relictos. La rugosi- rossa, los bordes de las cimas planas tienden a re- dad se explica a travs de la fuerza o energa dondearse hasta formar colinas cnicas en altas vectorial y su dispersin. Los vectores se obtienen densidades (etapa de madurez) que posteriormen- de la perpendicular sobie las superficies o facetas te, en la etapa tarda de relictos, tienden a reducir planares delimitadas a partir de lneas divisorias su altura, convirtindose en colinas residuales y epicrsticas y rupturas de pendiente (Fig. 3). La montculos. Las dolinas con acumulacin incipiente dispersin se establece en funcin del nmero de de residuales que inician su formacin durante la vectores y su orientacin preferente sobre un rango etapa reciente en el Cuaternario, se unen gradual- de 180". Entre mayor sea la cobertura angular ma- mente en algunas zonas durante la madurez, hasta yor ser la dispersin. La energa estar deterinina- formar uvalas y posteriormente poljs (depresiones da por su distancia angular a la perpendicular o la alargadas) en la etapa tarda de relictos. Los con- dispersin dominante. troles estructurales asociados a a margen activa del centro de Quintana Roo, son especialmente fa- vorables para la formacin de uvalas.

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    En el diagrama de evolucin crstica se sealan las condiciones ambientales tropicales subhme- das y hmedas (lluvias en verano) relacionadas con los grados de evolucin, sin embargo, es n e c e s a r i ~ acotar que su vinculacin gentica a los tipos de paisaje crstico no es muy clara y que se indica para caracterizar el entorno natural ms que para explicar su correlacin intrnseca con el estadio evolutivo. Corbel ( 1 959) encontr, como promedios de denudacin crstica en la PY entre 10 y 40 m

    3/ao/km2 (1 2 para Mrida y 1 O para Cha-mpotn) y como ejemplo extremo contrario para zonas fras con lluvias todo el ao, valores entre 240 y 275 rn3/ao/km2 en Francia y Noruega. Estos nmeros muestran que la disolucin est asociada a la tem- peratura ambiente, la disponibilidad de agua y a la agresividad de la misma en trminos qumicos para disolver los carbonatos. Sin embargo, se puede en- contrar tambin correlacin directa entre el arreglo disyuntivo y el conjunto de factores ambientales, no solo con el clima. Lo que si es evidente es que en los pases tropicales los procesos de disolucin se caracterizan por ejercerse ms violentamente en superficie, que en profundidad, predominando por tanto la disolucin superficial sobre la subterrnea (Corbel, 1957). Esto se debe a que en los pases tropicales la saturacin de las aguas en CaCO,, se ejerce en unas pocas horas, sobre todo en lo que concierne a la ltima fase del proceso de disolu- cin, mientras que en los pases templados, la satu- racin se adquiere en ms de 50 horas (Mateo, 1981). Igualmente las lluvias torrenciales y sus efectos erosivos tienen que ver con la intensifica- cin localizada de la disolucin. Jennings (1971) seala que una de las peculiaridades del karst tro- pical es la verticalidad y horizontalidad del relieve, con la minimizacin de pendientes intermedias. Es conocido el predominio de formas convexas, a me- nudo con paredes verticales y cimas cnicas y re- dondas y de superficies con fondo ms o menos Ilano(mogotes).

    Oispersih vectorial baja Energa vectoial baja ,

    Bispersitin vectorial alta Energa vectorial alta

    Figura 3. Rugosidad de los terrenos crsticos

    Los factores que favorecen el desarrollo del karst en la PY actan en conjunto, pero con arre- glos especficos en intensidades e importancia de- pendiendo del paisaje geomorfolgico. de hecho los arreglos especficos definen la identidad geo- morfolgica de cada paisaje.

    ORIGEN DE LOS A C U ~ F E R O S

    Los acuferos de mayor volumen se desarrollan en las rocas carbonatadas del Eoceno y Mioceno-Plio- ceno (Formacin Carrillo Puerto). Los sedimentos del Eoceno se componen principalmente de granos calcreos recristalizados de finos a medios. La par- te ms antigua del Cenozoico contiene arcillas y margas, las cuales se insertar1 lateralmente entre

  • + Caracterizacin y lilanejo de los Suelos de la Pennsula de Yucatn --

    rocas dolomticas, margas, yeso y anhidritas. Mu- chas litofacies tienen gran permeabilidad, que se presenta preferentemente en los carbonatos del Mioceno.

    La estructura, topografa y presencia o ausencia de las formaciones geolgicas juegan un papel im- portante en el desarrollo de las condiciones geohi- drolgicas en esta regin crstica. Estos elementos, en conjunto con los factores climticos y tipos de vegetacin, controlan la permeabil idad y formacin de suelo, que influye en la ocurrencia y flujo hidrulico (Back y Hanshaw, 1982). La presen- cia de un suelo muy poroso y delgado en la PY se debe a la disolucin de las calizas y carencia de una formacin geolgica que produzca arena o arcilla, que sature y cierre los poros, disminuyendo la per- meabilidad desarrollada. La ausencia de sedimen- tos superficiales determina la ausencia de ros o drenajes superficiales.

    La propuesta de la existencia de dos acuferos regionales, est en funcin de la edad de las rocas que constituyen las dos unidades hidrogeolgicas ms importantes: Miocnico en las planicies car- so-tectnicas y Eocnico en los lomeros carso-tec- tnicos; caracterizadas con base a la evo luc i i~ geoqumica del tipo de agua contenida, con base del principio propuesto por Back et al.(1979), a tra- vs del modelo esquemtico que muestra las tra- yectorias de reaccin del agua en un acufero carbonatado costero.

    Existe una diferenciacin hidrogeolgica e hidro- geoquimica de los acuferos regionales: en el acu- fero miocnico, prevalece el proceso geoqumico caracterizado por la mezcla de agua de reciente in- filtracin con agua salada ms antigua, producien- do una amplia dispersin; en el acufero eocnico, el proceso dominante es el incremento de sales por disolucin a lo largo de la trayectoria de flujo. Exis- te un incremento repentino producido por la presen- cia de depsitos evaport icos altamente solubles, asociado a un incremento de la relacin CI-/HCO2. hacia el noroccidente del acufero eocnico.

    El acufero miocnico presenta un incremento de salinidad hacia las costas en las porciones norte y noroccidental, indicando el efecto incipiente de la intrusin salina. Hacia las porciones de la PY, defi- nidas como reas de recarga miocnica y eocnica, se presentan valores mnimos o bajo saturados, coincidiendo con los valores de precipitacin plu- vial ms alta. La alta permeabil idad de las rocas que constituyen el subsuelo de estas zonas y lo poco profundo del manto de agua, le asignan a la PY un ndice de vulnerabil idad que va de alto a ex- tremo, dado que las rocas dominadas por carbona- tos y depsitos de yeso cuando se disuelven prcticamente no dejan residuos, pero impregnan sus caractersticas qumicas al agua.

    No hay cursos de agua superficiales, las lluvias saturan el terreno, colmatan el bajo relieve y se in - filtran en el subsuelo dando origen a corrientes sub- terrneas en cavernosidades complejas. La diso- lucin de las rocas puede desarrollarse en la super-

    ficie del terreno y afectar a los materiales calc. ' areos en contacto con la atmsfera, o bien, actuar sobre los mantos calizos subsuperficiales. En el estrato rocoso superficial o coraza calcrea, el fenmerio crstico se expresa en forma de depresiones y sa- lientes de superficies rugosas, cavidades y conduc- tos tubulares que en ocasiones traspasa11 los fragmentos rocosos. El agua pluvial infiltrada, aLi nado al escaso relieve y el alto grado de fractcira- cin de la roca superficial, act

    a de manera

    constante sobre las rocas carbonatadas subsuper- ficiales, relativamente ms blandas que las erter io- res, formando una compleja trama de cavidad-s subterrneas como grutas, cavernas, sumideros, cenotes con o sin comunicacin con el exterior (Duch, 1988).

    La PY carece de corrientes superficiales, par!- ,> O se cularmente en la porcin norte; hacia PI sur, s1I

    manifiesta un drenaje incipiente que desaparece .?n resumideros o en cuerpos de agua superficial ci aguadas, destacando el Rio Hondo y el Ro Sorpi-e. sas, de carcter intermitente. As , Gran parte de la precipitacin pluvial se evapora y transpira, e! resto se infiltra al manto subterrneo a travs de tractu- ras, oquedades y conductos crsticos de las cali- zas. Una vez que se integra al acufero: el agua sigue diferentes trayectorias de flujo, ccntroladas por el desarrollo o evolucin del karst profuncio Evidentemente las regiones de mayor carsticidacl

    C~ erlcucn- se presentan en el sur de la PY. donde d , tran los sedimentos ms antiguos del Paleoce- no-Eoceno (Batl lori, 1995). Para delinear el sistema de flujo de los acuferos identif icados es necesario establecer las reas de recarga y descar- ga. En la porcin costera, la descarga del agua se realiza a travs de manantiales y en forma difusa hacia el mar, alimentando cinagas y lagunas cos- teras. La recarga I-iidrolgica subterrnea ocurre de manera uniforme generalizada en toda el rea, acorde al patrn de distribucin de la precipiTacin pluvial.

    ORIGEN DE LOS SUELOS

    El origen de muchos suelos de la PY est en discu- sin: Wright (1970) sugiere que el verdadero mate- rial que dio origen a muchos suelos no es la coraza calcrea, sino un depsito superticial presente so- bre la roca en el momento del levantamiento. Consi- dera la probabilidad de que los suelos profundos que reposan sobre la roca calcrea corresponden a un antiguo ciclo de formacin de suelos, mientras que los formados a partir de la coraza resquebraja- da y erosionada corresponden a uno nuevo. Meri- ciona que la ~atc i ra leza del depsito podra ser un sedimento impuro, rico en carbonatos (fango cal- creo submarino); o polvo meterico, o cenizas vol- cnicas depositadas sobre la superficie ya emergi- da; o bien, una mezcla de sedimentos abisales y otros materiales finos derivados de erupciones vol- cnicas submarinas, depositados sbitamente so- bre e! bloque peninsular ya emergido, a consecuencia de enormes marejadas producidas

  • - F. Bautista y G. Palacio (Eds.) 5.

    por algn movimiento tectnico de primer orden en la regin Caribe-Antillana (Duch 1988).

    Otros autores plantean que los suelos rojos y profundos derivan de un fango marino con impure- zas de cenizas volcnicas y que su textura domi- nantemente arcillosa, sugiere un origen palustre, posiblemente de reas costeras someras, en las cuales los sedimentos marinos saturados con ceni- zas volcnicas o polvo meterico fueron atrapados cuando la plataforma marina de la PY qued descu- bierta, debido al descenso de 130 m, en relacin al nivel del mar, hace 18,000 aos.

    Estudios recientes realizados en el centro y sur de Yucatn, donde se ha cavado una gran cantidad de calicatas, han revelado evidencias de un desa- rrollo de los suelos a partir de la disolucin de la roca caliza y, consecuentemente, la formacin de un horizonte petroclcico en la parte baja del perfil.

    La morfologa de los perfiles sugiere la existen- cia de un proceso de disolucin, donde la intensi- dad de disolucin y el transporte de los carbonatos dependen del tipo de roca y su pureza.

    Por ejemplo, la formacin de los Luvisoles co- mienza con una disolucin intensa de la roca y la acumulacin del carbonato de calcio en la parte

    baja del perfil. En este estadio, el perfi l muestra ui ia gran cantidad de fragmentos de roca en una matriz de tierra fina de color caf a rojo. A medida que avanza el desarrollo del perfi l , los fragmentos apa- recen desde la parte inedia y hasta el fondo; es un Cambisol cuando el perfi l muestra una profundidad mayor de un metro y es posible que an no se obser- ve la acumulacin de arcilla en el horizonte Bt. En los estadios ms avanzados solo hay fragmentos de roca caliza en la parte baja del perfil. La evolu- cin de Luvisoles. es evidente cuando se han di- suelto los fragmentos de roca y se ha dado origen al horizonte Bt.

    En suelos de menor profundidad los procesos arriba mencionados no se presentan con la misnia intensidad debido a que la roca tiene menor so lu t~ i - lidad. Primero se forman suelos poco profundos o Leptosoles con escasa cantidad de tierra fina de co- loraciones rojizas; despus Cambisoles debido a a disolucin gradual de la roca identificada por los ca- nales de disolucin. Posteriormente y debido a la mayc>r intensidad del proceso de disolucin de a roca, se t iene una matriz de tierra fina con aiguricjs fragmentos de roca, una profundidad no niayor a 60 cm y un horizonte petroclcico en 12 parte baja del perfil, lo cual da origen a los Calcisoles que seran epiptricos o endoptricos dependiendo de la pro- fundidad del horizonte petroclcico.

    EL MANEJO MAYA DE LAS GEOFORMAS, LOS SUELOS Y EL AGUA

    MANEJO MAYA D E LAS GEOFORMAS

    Los mayas prehispnicos se dedicaron al cultivo intensivo en tres tipos de hbitat: montaoso, pan- tanoso y costero, as lo prueban la presencia de ri- tos agrcolas y formas de manejo, cuyas consecuencias han llamado la atencin de manera reiterada en los lt imos tiempos.

    Los mayas conocieron procedimientos para el cultivo de las tierras altas, como lo indica la gran su- perficie de albarradas y terrazas existentes en el sur de Campeche y Quintana Roo, en las inmedia- ciones de los montes mayas. Los muros de piedra son grandes, cruzan gran parte de los terrenos pla- nos y delimitan las pequeas parcelas de alrededor de una hectrea.

    Las llanuras y depresiones inundables plantea- ron a los antiguos mayas un conjunto de problemas de cultivo del todo diferentes a los que se presen- taron en las tierras altas. Combatieron las inunda- ciones mediante la elevacin de campos y construyeron canales de riego y drenaje, como en Belice, Quintana Roo y la zona de depresin fluvial oriental a lo largo del Ro Candelaria.

    La agricultura de micro hbitat y multitecnologia que establecieron los antiguos mayas en las zonas

    forestales sigue siendo una soluciii viable para el desarrollo agrcola actual. Los mayas reconocieron la importancia del uso diversificado de los recursos agrcolas y de flora y fauna silvestre, a los que tam- bin se incluyen los recursos marinos y litorales, aprovechndose de estos para su desarrollo so- cioeconmico. Se ha registrado el uso de mas de 500 especies diferentes que constituan la base ge- neral de recursos naturales, en los cuales se basa- ba la produccin y reproduccin social del pueblo maya (Quezada, 2002).

    MANEJO MAYA D E LOS AMBIENTES ACUTICOS Y MAR INOS

    Entre los instrumentos mas utilizados para la captu- ra de las especies marinas estaban los arpones, bo- yas, sogas y flechas, para lo cual usaban barcas bien delineadas que podan transportar hasta 50 hombres. Se menciona tambin el uso de redes y chinchorros. A travs de la etnografa actual, se compara y observa que en la navegacin yucateca aun se siguen utilizando implementos de pesca como los que mencionan los cronistas del siglo XVI, no solo para el rea maya sino para toda mesoam- rica (Quezada, 2002).)

  • f. Caracferizacin y Manejo de los Suelos de la Pennsula de Yucatn -- -m

    Los mayas tenan conocimiento del espacio don- de se encontraban los peces, tanto en el mar como en ros, cenotes y pantanos, y de l a uti l izacin de los recursos obtenidos del mismo entorno. Tambin se registra el uso de t rampas, tanto para la cacera como para la pesca. Ot ra tcnica era la de observar los cardmenes cercanos a la costa (como de jure- les), se formaba una especie de cercos alrededor de el los y ah se atrapaban. Tcn icas que se s iguen uti l izando actualmente.

    Los mayas llevaron a cabo la actividad pesquera en tres formas diferentes: la pesca mart ima-l i toral, la pes- c a de profundidad y la pesca f luvial o de cenotes. En esto tres ecosistemas obtenan no menos de 300 especies. El comercio del producto de la pesca era bien conocido por los mayas, apl icando la tcni- c a de conservacin del pescado, ya sea seco sala- do o asado al sol.

    La importancia cada vez mayor del comercio de la sal durante los periodos prehispnicos y colonial para los importadores, exportadores y todos aquel los que transportaban los bienes impuls el surgimiento de comunidades especial izadas en esta actividad.

    M A N E J O MAYA DEL S U E L O

    Los mayas de la PY, conocieron los benef ic ios del manejo de los abonos animales, aguas negras, cul- t ivos de cobertera y mant i l los y el manejo de la sel - va. Muchas de las prct icas agrcolas de los mayas han sido reportadas por Hernndez (1 985), Hernn- dez e t a l (1995) y Teran y Rasmussen (1994). De la misma manera, los campesinos mayas desarrol la- ron una nomenclatura de las t ierras, como reflejo de l a heterogeneidad espacial a niveles locales.

    En el medio rural, los productores realizan ob- servaciones y comparaciones del funcionamiento de la t ierra en procesos de cor to y mediano plazo, en relacin con el ambiente y los organismos, y a sean plantas y10 animales.

    Las clasif icaciones campesinas, como la maya, son de gran ut i l idad en la ident i f icacin de los man- chones de suelos y el funcionamiento agronmico (las propiedades del suelo de alta tasa de cambio y respuesta de los cul t ivos a determinadas c lases de t ierras) y ecolgico del suelo (d istr ibucin y abun- dancia de organismos de acuerdo con las clases de t ierra), as como en la elaboracin de mapas parce- larios de bajo costo para la administracin de activi- dades agropecuarias. Estas propiedades del suelo no son medidas ni est imadas durante l a descr ipcin del perf i l n i en los levantamientos tcnicos de sue- lo.

    Por el contrar io, las c lasi f icaciones campesinas de t ierras t ienen un alcance restr ingido al interior de sus mismas localidades, es decir, para los cam- pesinos existe una relacin estrecha entre el nom- bre de l a c lase de t ierra y el concepto, que puede variar en ambos sent idos en otras localidades, es

    decir, mismo nombre di ferente concepto t.) igcial concepto pero con di ferente nombre. L a corifusin se presenta cuando L I ~ m ismo nombre de la c lase de t ierra se ut i l iza en otra zona.

    Los intentos por encontrar re laciones ei i tre la nomenclatura F A 0 y Maya han detectado la di f icul - tad de relacionar di rectamente una c lase de t ierra con la unidad de suelo, por e jemplo, Dc!ch (1988) encontr que la denominacin K a n ltab puede apli - carse a los grl.ipos Cambisol . Ni tosol , Luvisol , Vert i - sol y L ix isol . Ta l vez debido a que se desea generalizar, s in embargo, debe tenerse en cuenta el alcance local d e esta c lasi f icacin de t ierras y las diferentes concepciones de tiei.ra v suelo.

    Los reportes escr i tos sobre l a nomen::latcira maya de t ierras, apoyados con ilescripcione:; tecri i- cas de suelos, son escasos (Prez, '1984; D i ich 1988; Dunning, 1392; Racit ista-Ziga ei al.. 2000) lo cual diiiculkiii e1 entendimiento y rnanejcr fcr ' ico de la nomenclatura maya. L a i i ! i l izacin de los ii-lis- rnos trminos para di ferentes c lases de t ierr? e!? di ferentes regiones y su aparentemenie ccmp!s ia estructura de l a nomenc la t i~ ra y10 c lasi f icacin. ha- cen que tenga escasa repercusin en Iss pol t icas de uso de suelo, as como en la incorporacii i exi to- sa de tecnologa ( fer t i l izantes, herbic idas. r iego. uso de mant i l los, cul t ivos de cobertera, apl icacin de aborios, e ic.) .

    Para el norte de l a PY se h a generado la mayo! informacin. A cont inuacin se descr iben las cta. ses de t ierra ms comunes y sus l in i i taciones agr . colas.

    C L A S E S D E TIERRA CAMPESIINA E N LA ZONA EXHENEQIJENERA

    La clase de t ierra denominada C h a l t ~ i n pres:?nta ro- cosidad t ipo laja, puede ser da color rojo, i iegro o caf roj izo, el rasgo ciistii it ivo es l a la ja y tambiri se caracter iza por ser l a c lase de t ierra con menos suelo o t ierra f ina, con un dimetro menor de 2 inm. El contenido de xidos y minerales secundar ios va - ra mucho y se encuentran relacionados con el co - lor de la t ierra f ina, s iendo orgnico s i el suelo es negro y mineral si es de color ro jo. En la zona hene- quenera se le nombra Tzekel; de acuerdo a l a Taxo- noma F A 0 (1999) equivale a un Leptosol I t ico (LPl i ) , an cuando es negro y presenta al tos conte- nidos de mater ia orgnica. Por su escasa cant idad de t ierra f ina y por l a ausencia -le carbonatos no ca - lif ica para ser c lasi f icado como Leptosol rendzinico (LPrz).

    Entre la zona Puuc (occidente del Estado de Yu- catn) e l Tzeke les una c lase de t ierra con predomi- nancia de roca de las partes a l ias del microrrel ieve, pero con la part icular idad de que la roca no es t ipo laja, s ino como promontor io, es ta c lase de t ierra presenta muy poco suelo, pero ms que el C h a l t ~ i n . La t ierra f ina es de color negro pr incipalmente.

  • . F. Bautista y G. Pa/aco (Eds.) a:.

    Estas caigcterst icas permiten clasif icarlo como LPli.

    En el occidente del Estado de Yucatn, el Chac lu'um se caracteriza por ser un suelo rocoso (t ipo laja) de color rojo, con mayor cant idad de suelo que el Chaltn, localizado en el p iedemonte o en las partes bajas de las pequeas elevaciones microto- pogrficas. El poco suelo l lega a compactarse en las partes bajas (5 a 15 c m de profundidad), es po- bre en la mayora de nutr imentos y retiene menor humedad que el Box lu 'um. En la zona henequene- ra, esta clase de t ierra se denomina Hay lu'urn, que significa poco suelo o t ierra delgada. Segn la Ta- xonoma de la base referencia1 mundial del recurso suelo (WRB) (FAO. 2001), puede corresponder a las unidades LPli o CM, dependiendo de la profundi - dad.

    El Chac lu'urn es una c lase de t ierra de las que presentan mayores cant idades relativas de minera- les secundarios, pero menos de 2 % de carbonato de calcio, as como con contenidos de mater ia org- nica menores en conlparacin con los otros suelos de la zona ya que todos los suelos de la regin pre- sentan cantidades de mater ia orgnica mayores a 3%. Esta clase de t ierra presenta los menores con- tenidos de fsforo total (0.32%). Puede ser corres- ponder a un LPIi, pero tambin a un Leptosol crrnico (LPcr) y10 dstr ico, segun la WRB. Se pue- de confundir con un Kan kab debido a su color rojo y por su localizacin en las partes ba jas del microrre- lieve, pero en reas muy reducidas y, sin embargo, no deja de ser suelo somero.

    El Puslu'urn tambin es un suelo rocoso de color negro, l imitado en profundidad, hasta 30 cm por la presencia de laja, pero con una cant idad considera- ble de materia orgnica y carbonatos de calcio en la tierra fina. Posiblemente sea equivalente a un LPrz.

    La di ferencia con el Chaltn consiste en la cantidzid de suelo, ya que el Pus lu 'um contienen mayores cant idades de t ierra f ina.

    El Box l u ' u n ~ se caracter iza por encontrarse en las partes al tas del microrrel ieve, presentando pie- dras de un dimetro entre 5 y 10 cm de dimetro. 1 0 cual hace que es ta c lase de t ierra presente una n w - yor retencin de humedad, en cornparacin c o n el Chac lu'um. Es de color negro y presenta cantidi+ des de carbonatos super iores al 30/.

    El Box lu 'um, pi iede corresponder a dos subcir~i- dades, dependiendo de la cant idad de piedra:;. Cuando presenta abundantes piedras a lo largo del perf i l ser un Leptosol hiperesqueltico (LPhsk), pero si la cant idad de suelo fuera mayor y solo las piedras estn en la superf ic ie. entonces se c lasi f i - car como LPrz por e l contei i ido de materia ergni- ca (< 10%) y de carbonatos de calc io.

    El Box lu 'um y el Pus lu 'um son suelos que pre - sentan l a mejor cal idad qumica a nivel de t ierra f ina de todos los Leptosoles, reflejada en !os altos co i i - tenidos de matteria orgnica, fsforo asi,milaDle de 20 a 5 0 m g k g , n i t ratos de 40 a 60 m g kg , as como las mayores cant idades de inicroriutr imentos en comparacin coi1 el Gl!ac Iu'uni. Segn Pooi (1995) en estas c lases de t ierra (Box lu'iirn y Pus 1 u ' ~ ; n i ) la fert i l izacin qumica del suelo no es tan f ~ n c i o r i a l , a l ser comparados con el Kan kab, aunado a la d i f i - cul tad para la apl icacin de abonos.

    El contenido total del P,O, alcanza niveles muy altos (2.27%); tambin presentan el mayor conten i - do de fsforo asimi lable, por el lo. se deduce que en estos suelos el P no const i tuye una reslr icc ion ini- portante del crecimiento vegetal.

    Tabla 1. Contenido total de xidos en suelos determinados por fluorecencia de rayos X en muestras de suelo superficial (o a 5 cm) (Bautista et al, 2003).

    Chac lu'urn Chac lu'urn Elementos Box lu'urn Chaltn Rojo Caf-rojizo

    MnO (%)

    Na,O (%) 0.52 0.53 0.55 0.55 . . . .

    K_O (%) 1.61 4 1.874 1.254 1.184

    P;O, (%) 0.32 0.64 2.27 2.55 . .~ ~ ~-

    PXC (%) 20.3 26.5 23.1 -~ - .. --- . . -

    30.3

  • * f. Caracterizacin y Manejo de los Suelos de la Pennsula de Yucatn -

    El Box lu 'umes una c lase de t ierra con al tos con- tenidos de calc io y fsforo totales, as como con cant idades menores de Al y Si, que se reflejan e n las tambin escasas cant idades relat ivas d e mine- rales secundar ios (Tabla 1 y 2).

    Tabla 2. Cantidades relativas de los mtneraies secundarios presentes en

    E n la zona henequenera se encuentran suelos pedregosos, denominados Cho chol, presentan abundantes piedras d e 5 c m d e dimetro a lo largo del perf i l y en la superf ic ie y con menos t ierra f ina que e l Box lu'um. No se cuenta con datos sobre las propiedades qumicas que permi tan realizar una caracterizacin m s completa.

    El Chich lu 'um se caracter iza por ser u n suelo con grava, puede ser d e var ios colores caf-ro j izo a negro. Se encuentra predominantemente en las partes altas del microrrel ieve y piedemonte. Retie- n e mucha agua, s iendo po r el lo d e buena calidad; puede ser c lasi f icado como LPrz cuando es negro y carbonatado, pero puede no cumpl i r con los niveles de carbonatos d e calc io est ipulados para el carc- ter rendznico. Esta c lase d e t ierra puede l legar a

    los suelos someros de la zona Henequenera

    confundirse c c n suelos profu idos con grava de l grupo CM, de los "pies d e monte" localizaclos entce e l B o x lu 'um y e l K a n kab.

    halloysita [Al,(Si,0,,)(OH),4H20], bohemita [AIOOH], cuarzo [SiOJ, hematita [Fe20,], illita, calcita [CaCOJ

    Mineral (Posicin an- gular de la familia de

    planos) Halloysita (4.43) Bohemita (6.1 0) Cuarzo (3 33) Hematita (2.67) Calcita (3.03) lllita (10.27)

    (Bautista et al, 2003).

    E l Kar i kab es l a c lase d e t ierra que se l c c a i i i a en las planic ies del meso y microrrel ieve, en s i t ios conocidos como los val les c iegos d e karst . Es ta d a - se d e t ierra puede pertenecer a t res g r i ~ p o s d e sue- lo, LV, C M y CL, dependiendo de l desarrol lo de l perfil, es decir dependiente d e l a presenc ia del hor i - zonte Bt, Bw y C k m u hor izonte petroclc ico, res- pect ivamente. E l K a n kab es l a c lase de t ierra que presenta mayor cant idad d e t ierra f ina, coloraci in de caf-roj izo a l amari l lo, po r l o cua l puede clasi f i - carse de crmico o rdico, segn sea e l caso. N o se han encontrado evidencias l ingst icas d e q u e los campesinos mayas ident i f iquen las di ferencias en- tre los t res grupos d e suelo, pero es posible que e n cuest iones prct icas a l momento d e cul t ivar s i no - ten estas diferencias.

    Box lu'urn Negro-calcita

    315

    38

    72

    25

    182

    no detectado

    La arci l la dominante en l os suelos de l a zona he - nequenera, es la hal loysi ta que pertenece al grupo

    Chac lu'um Rojo

    562

    75

    117

    64

    no detectado

    presencia

    Chaltn Negro-sin calcita

    420

    38

    84

    preseixia

    Tabla 3. Restricciones al crecimiento de las plantas en las clases de tierra campesinas

    Chac lu'um Caf-rojizo

    382

    36

    128

    24

    102

    presencia

    1) Clase de tierra / Principal factor limitativo del crecimiento de cultivos 1 Limitaciones 1 11 ~hal tun 1 oca, muy poco suelo 1 Profundidad efectiva // 11 ~zekel

    oca, muy poco suelo pero un poco ms que el Chaltn 1 Profundidad efectiva // Chaclu'um

    Pus lu'um

    Box lu'um

    Roca, poco suelo pero mayor que los anteriores. Puede ser qurnica- mente frtil aunque no siempre lo es, depende de su posicin en el microrrelieve

    Roca, un poco ms cantidad de suelo que los anteriores, qumica- mente frtil, reas pequeas. Posible fijacinicoprecipitacin inineral de fsforo por la cantidad de calcio y carbonatos que presenta.

    Piedras, menor o igual cantidad de suelo que el Pus lu'um, qumica- mente frtil. Posible fijacin y10 coprecipitacin mineral de fsforo por la cantidad de calcio y carbonatos que presenta.

    Profundidad efectiva

    Profundidad efectiva y bajo vol del espacio radicular

    Profundidad efectiva I 11 ~ h i c h lu'um I~ariable calidad qumica, reas pequefias 1 Profundidad efectiva 11

    Muchas piedras y poco suelo, menor que Box lu'um, Pus lu'um y Profundidad efectiva y bajo volumen Chich lu'um. radicular

  • F. Bautista y G. Palacio (Eds.) 3

    de las arcillas con una relacin 1 :1 entre las capas La escasa cantidad de suelo y tipo de arcilla do- detetraedros de silicio y las de octaedros de alumi- minante, ocasionan que la influencia de la vegeta- nio. Estas mismas arcillas son las encontradas por cin en estos ecosistemas ocupe un nivsl Dunning (1992) en los suelos de la zona Norte de primordial en su funcionamiento y fertilidad, al ser Yucatn. Estas arcillas se caracterizan por presen- la fuente de nutrimentos y materia orgnica funda- tar una capacidad de intercambio de cationes baja, mental para la formacin de estructura. adems de ser de baja plasticidad y bajo poder ce- mentante.

    La integracin de las caractersticas ambientales de la PY requiere entrelazar las bases fundamenta- les del conocimiento de las geoformas, distribuidas dentro de este espacio geogrfico. Cabe destacar la predominancia de los procesos krsticos, delimi- tados por los procesos litorales que ocurren en la costa. La PY presenta rasgos krsticos totalmente distintivos a los conocidos actualmente, dado que ni coinciden con el modelo propuesto por Grund (1914) y Cvijic (1918) ni con el modelo del karst tro- pical propuesto por Pannekoek (1948) y Lehmann (1954). Existen coincidencias parciales en su mo- delacin estructural, pero no en los estadios tempo- rales, es decir, en su grado de evolucin. Bajo esta visin, resalta la necesidad de disear el modelo de evolucin del karst de la Pennsula de Yucatn, dado sus atributos especialmente diferentes, don- de se conjuguan la expresin de los paisajes krsti- cos y su nivel de desarrollo especfico.

    Particular mencin, debe hacerse al sistema de hidrologa subterrnea que gobierna prcticamente en toda la pennsula, donde la red entramada y compleja de corrientes subterrneas, se descono- cen, requiriendo una atencin especial, dada las posibles condiciones crt icas derivadas de las acti- vidades humanas en centros de poblacin de alta densidad, como es la Ciudad de Mrida y zona peri- frica, Chetumal, Cancn y Campeche, donde la demanda de agua potable y la disposicin final de aguas residuales urbanas y agropecuarias, son dos focos de atencin palpables de la existencia de una problemtica en aumento, escasamente atendida, y poco comprendida.

    paisaje peninsular. ha originado uria alta cliversidsd edfica, a tal grado que los cambios de unidades r'e suelo, pueden ser encontradas a distaiicias corins de unos cuantos i i ietros. Predominan los s ~ i e l c s delgados y pedregosos, que sin embargo, permiten el desarrollo de una producc i jn agrcola en corriii- nin con el profundo conocimiento imaya. Esta es- trategia permite alimentar a ms de un rnillOn de campesinos, aunado a la disponibilidad de otros re- cursos, como, el forraje, madera, pla.ntas medicina- les, frutos y fauna silvestre, la pescri y la sal.

    El conocimiento maya sirve de base para desc i~ - brir la intrnseca relacin cultura-hombre-su el*^, donde la clasificacin tradicional inaya expresa. entre otros atributos, la pedregosidad, profuncii- dad, retencin de humedad y color, establecierido un camino ms allanado para el conocimiento de las clasificaciones actuales, como la WRBRS, re- cientemente diseada por la F A 0 e ISIS.

    A manera de conclusin, se puede establecer que el conocimiento de la geomorfologa. hidrolo- ga, edafologa y manejo tradicional de los recur- sos, se encuentra en una etapa incipierite, qLie obliga a recapitular el enorme bagaje de conoci- miento generado hasta ahora y colocarlo en la mesa de la revisin y del anlisis, para de esa mn- nera, junto con el conocimiento tcnico actual. acercarse al diseo y desarrollo de agroecosisto- mas adecuados a las condiciones del medio fsico y del estado de los recursos naturales de la Pen ns~ l - la de Yucatn.

    Ahora bien la edafognesis, sintetizada por los factores formadores y la alta heterogeneidad del

    Este trabajo fue financiado parcialmente por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologa (R31624-B). Se agradece a la Fundacin Rockefeller el apoyo otorgado al primer autor para su instalacin en la UADY. El segundo y tercer autores agradecen la beca de doctorado que les otorg el CONACYT.

  • .*

    -. 2. Caracterizacin y Manejo de los Suelos de la Pennsula de Yucatn .

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