En Otro Lugar · 2015-07-04 · Liz vuelve a echarse en la cama. Aunque se siente como si estuviera...
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Estarmuertonoesfácilparanadie.Ymenossi,comoLiz,tienestodavíaquinceaños,ynohas tenido tiempodesacarteelpermisodeconducirnideenamorarte.Pero,desde luego,esmejorestar enalgún lugarantesqueenningunaparte.AunqueesteOtroLugarno separezcaennadaalcieloque todoshemos imaginado.Esteotromundosignificaencontrarunanuevaprofesión,nuevosamigos,nuevosamores…perosobre todosignifica«vivir»alrevés, rejuvenecercadadíaenvezdeenvejecer.LoquemenosdeseaLizenelmundoesvolver a ser una niña y, además, este Otro Lugar tiene sus especiales leyes: intentarcontactarconlaTierraestáabsolutamenteprohibido,pero¿quétepuedepasarcuandoyaestásmuerta?
GabrielleZevin
EnOtroLugarePubr1.0
T it ivillus21.06.15
Títulooriginal:ElsewhereGabrielleZevin,2005Traducción:NúriaMartíPérez
Editordigital:TitivillusePubbaser1.2
AHCC
Prólogo:Enelfinal
«Muriórápidamenteynosintióningúndolor»,lesusurraalgunasveceselpadrealamadrey,otras,lamadrealpadre.DesdeloaltodelasescalerasLucylooyetodoynodicenada.
Lucy desea creer, por el bien de Lizzie, quemurió rápidamente y sin sentir ningún dolor: unrápidofinalesunbuenfinal.Peronopuedeevitarpreguntarse:¿cómolosaben?Lacolisióndebióderesultarledolorosa,razonaLucy.¿Ysinomuriótanrápidamentecomocreen?
Sedirige a la habitacióndeLizzie y la inspecciona abatida.Lavida de una adolescente es unacoleccióndecosassueltas:unsujetadorturquesaarrojadosobreelmonitordelordenador,unacamasinhacer,unacuariollenodelombrices,unglobodeMylardeshinchadoqueleregalaroneldíadeSanValentín,uncartelde«Prohibidoentrar»en lamanillade lapuerta,unpardeentradasparaelconcierto de Machine bajo la cama. En el fondo, ¿qué es lo que todo esto significa? ¿Y acasoimporta?¿Esunapersonaunmontóndechismes?
CuandoLucysesienteasí,loúnicoquepuedehaceresescarbar.Escarbarhastaolvidarsedetodoydetodos.Escarbarenlaalfombrarosa.Escarbarhastaquelleguealtechodelahabitacióndelpisodeabajo.Escarbarhastaquesecaigaporél.Escarbar,escarbar,escarbaryescarbar.
Cuandoporfinconsigueolvidarunpocosuprofundodolorescarbandoenlaalfombra,Alvy(elhermanodesieteañosdeLizzie)lacogeenbrazosylaponeensuregazo.
—Notepreocupes—ledicecondulzura—,aunquefuerasdeLizziesiemprehabráalguienquetealimentará, te lavaráy te sacaráapasear alparque.Ahora siquieres inclusopuedesdormir enmihabitación.
Lucy,sentadaremilgadamenteenelregazodemasiadopequeñodeAlvy,imaginaqueLizziesóloseencuentraenlauniversidad.Estabaapuntodecumplirdieciséisañosyhabríaidodetodosmodosalauniversidadalcabodedos.Yahabíaempezadoaamontonarunapiladefolletosdepapelsatinadodedistintasuniversidadesenelsuelodesuhabitación.DevezencuandoLucy semeabaenunodeellosomordisqueabalaesquinitadeotro,perosabíaquepormásquehiciera,nopodríaevitarlo.UndíaLizzieacabaríayendoalauniversidadyenlosdormitoriosdelasuniversidadesnodejabantenerperros.
—¿Dóndecreesqueestáella?—lepreguntaAlvy.
Lucyladealacabeza.—¿Creesqueestá…—haceunapausa—ahíarriba?PorloqueLucysabe,loúnicoquehayahíarribaeseldesván.—Puesyocreo—diceAlvylevantandolabarbillahaciaelcieloconunaactituddesafiante—que
estáahíarriba.Yqueeneselugarhayángeles,yarpas,ymontonesdenubesalgodonosas,desedosospijamasblancosydetodoloquetepuedasimaginar.
Bonitahistoria,piensaLucy.Peroellanocreeenunparaísollenodepiezasparacazarnienelpuentedelarcoiris,sinoquecuandoundoguillosemuere,semuereypunto,esoestodo.LegustaríavolveraveraLizziealgúndía,peronocreequesusueñosecumpla.Yaunquehubieraunmundoenelmásallá, ¡quiénsabesihabríaenélcomida,o siestecitas,oagua frescaparabeber,ocómodosregazosenlosquesentarse,oinclusoperros!Ylopeordetodoesqueellanoestáallí.
Lucy se pone a gemir, sobre todo de pena, pero en parte (todo hay que decirlo) también dehambre.Cuandounospadrespierdenasuúnicahija,yanoseacuerdandealimentaralperrodelafamiliacontantaregularidadcomoantes.Lucymaldicesutraidorestómago:¿quéclasedebestiaesquesigueteniendohambreinclusocuandosumejoramigaacabademorir?
—Ojalá pudieras hablar —le dice Alvy—. Estoy seguro de que debes estar pensando algointeresante.
—Ojalápudierasescucharme—respondeLucyladrando,peroAlvynopuedeentenderla.Al día siguiente lamadre saca aLucy a pasear al parque canino. Es la primera vez que se ha
acordadodehacerlodesdequeLizziemurió.PorelcaminoLucypuedeoler la tristezadelamadreasualrededor.Intentaaveriguaraquéle
recuerdaeseolor.¿Alalluvia?¿Alperejil?¿Albourbon?¿Aloslibrosviejos?¿Aloscalcetinesdelana?Hueleaplátano,decideLucy.
Al llegar al parque, se echa sobre un banco sintiéndose sin amigos, deprimida y un pocohambrienta (¿es que esta sensación no desaparecerá nunca?). Un caniche enano llamado CocopreguntaaLucyquélepasayellaselocuentalanzandounsuspiro.Comoelcanicheesunbocazas,lanoticiavuelarápidamenteporelparquecanino.
Bandido, un perro tuerto de lo más vulgar al que en los círculos menos refinados llamaríanchucho,ledaelpésame.
—¿Tehanabandonadoenlacalle?—preguntaaLucy.—No—lerespondeella—,sigoviviendoconlamismafamilia.—Entonces,¿cuáleselproblema?—insisteBandido.—Quesóloteníaquinceaños.—¡Yqué!Nosotrossólovivimosdiezoquinceañoscomomáximoytantonosda.—Peroellanoeraunperro—ladraLucy—,sinounserhumano,elmío,yuncochelaatropelló.—¡Y qué! A nosotros nos están atropellando todo el tiempo. Anímate, doguilla. Te preocupas
demasiado.Poresotienestantasarrugas.Lucy,queyahabíaoídoestabromaenmuchasotrasocasiones,piensa,aunqueBandidonoselo
hayadichoconmalaintención,quenuncahaconocidounchuchoconbuensentidodelhumor.—Teaconsejoque tebusquesaotrobípedo.Sihubieras llevado la clasedevidaqueyo llevo,
sabríasqueenelfondotodossoniguales.Cuandolacomidaseacaba,yomevoyaotraparte—traspronunciarestaspalabas,BandidoseuneaotrosperrosqueestánjugandoconunFrisbee.
Lucy lanza un suspiro y se compadece de símisma.Observa a los otros perros jugando en el
parque canino. Al ver cómo se olfatean el trasero unos a otros, persiguen pelotas y corren encírculos,piensa:¡Quéinocentesparecen!
—Normalmente losperrossemuerenantesquesusamos—aúllaLucy—.Comonohanvividoesta experiencia, no comprenden el dolor que siento. ¡Ni tampoco parece importarles!—exclamasacudiendosuredondacabecita—.¡Quédeprimente!Nisiquierameapetecelevantarlacola.
Enelfondo,lamuertedeunapersonasóloleimportaalosamigos,alafamiliayaquieneslaconocían—sequeja laperrita tristemente—,porquepara todos losdemásnoesmásqueel findeotravida.
ElNilo
Enelmar
ElizabethHallsedespiertaenlaextrañacamadeunaextrañahabitaciónconlaextrañasensacióndequelassábanaslaestánintentandoenvolver.
Liz(Elizabethparasusmaestros;Lizzieencasa,salvocuandosemeteenproblemas,yLizparaelrestodelmundo)alenderezarseenlacamasegolpealacabezaconunalitera.Desdeloaltounavozexclamaprotestando:«¡Ah,jolín!»
Alinspeccionarlaliteradearriba,vequehayunachicadurmiendoenella,oalmenosintentandodormir.La chica, de casi sumismaedad, llevaun camisónblancoy tieneuna largamelenanegrapeinadaenunmontóndeelaboradastrencitasadornadasconcuentas.
—Perdona—lediceLiz—,pero¿tienesalgunaideadedóndeestamos?Lachicabostezaysefrotalosojosparalograrabrirlos.PrimeromiraaLizydespuésaltecho,al
suelo,alaventanayaLizdenuevo.Pasándoselamanoporlastrenzas,lanzaunsuspiro.—Enunbarco—lerespondevolviendoabostezar.—¿Aquéterefieresaldecirqueestamos«enunbarco»?—preguntaLiz.—Aqueaquíhaymuchaagua,montonesymontonesdeagua.Simirasporlaventana,laverás—
respondeantesdevolveraarroparseconlassábanas—.¡Silohubierashecho,nohabríasnecesitadodespertarme!
—Losiento—susurraLiz.Almirarporlaportillaquehayalaalturadesucama,descubrelaoscuridadqueantecedealalba
extendiéndoseacientosdemillasdedistanciayelocéanoenvueltoenunabuenacapadeniebla.Alentrecerrarlosojos,divisaenlalejaníaunpaseomarítimo.EnélvelassiluetasdesuspadresyladeAlvy,suhermanito.Tienenunaspectofantasmalysevanempequeñeciendopormomentos:supadreestállorandodesconsoladamenteysumadrelosujetaparaquenosedesplome.Pesealadistancia,Alvypareceestarmirándolaydiciéndoleadiósconlamano.Diezsegundosmástarde,lanieblasetragaasufamilia.
Liz vuelve a echarse en la cama. Aunque se siente como si estuviera despierta, sabe que estásoñandoporvariasrazones:enprimerlugar,porquenopuedeestarviajandoenunbarco,yaquesesuponequeestáacabandoeldécimocursodelinstituto;ensegundolugar,porquesisehubieraidodevacaciones, sus padres yAlvy, por desgracia, estarían con ella; y en tercer lugar, porque sólo ensueñospuedesver cosas queno tienenni pies ni cabeza: comoa tu familia enunpaseomarítimo
desdecientosdemillasdedistancia.CuandoLizllegaalacuartarazón,decidelevantarsedelacama,porquepiensaqueesundesperdicioseguirdurmiendocuandoestássoñando.
Sedirigea la cómodacruzandodepuntillas lahabitaciónparanodespertar a laotra chica.Alfijarseenelmueble,descubrequeesverdadqueseencuentraenunbarco,porqueestáatornilladoalsuelo. Aunque la habitación no le resulta desagradable, piensa que tiene un aire solitario y triste,comosimuchaspersonaslahubieranvisitadoperoningunahubieradecididoquedarseenella.
Al abrir los cajones de la cómoda ve que están vacíos. No hay nada en ellos: ni siquiera unaBiblia.Aunqueintentanohacerruido,elúltimocajónseleescapadelasmanoscerrándosedegolpecontanmalasuertequeaquellachicasevuelveadespertar.
—¡Eh,quehaygentedurmiendo!—legritalajoven.—Lo siento. Estaba revisando los cajones. Por si no lo sabías, están vacíos—se disculpa Liz
sentándoseenlaliteradeabajo—.Megustatupelo.—Gracias—lecontestalaotrachicaacariciándoselastrenzas.—¿Cómotellamas?—preguntaLiz.—ThandiweWashington,peromellamanThandi.—YosoyLiz.Thandibosteza.—¿Tienesdieciséisaños?—Loscumploenagosto.—Yoloscumplíenenero.Liz—dicemirandohaciasuliterayalargandola«i»desunombrecon
unligeroacentosureño—,¿teimportasitehagounapreguntapersonal?—No.—Puesqueríasaber…—Thandihaceunapausaantesdeproseguir—sieresunacabezarapadao
algoparecido.—¿Unacabezarapada?¡No,claroqueno!—respondeellaarqueandounaceja.¿Porquémelo
preguntas?—Porqueapenastienespelo—contestaThandiseñalandosupeladacabeza,cubiertasóloporun
incipientepelorubioclaroqueleestáempezandoacrecer.Lizseacaricialacabezaconlamanodisfrutandodesuextrañasuavidad.Eltactodelpeloquele
estácreciendolerecuerdaeldelplumóndeunpolluelo.Selevantadelacamaycontemplasureflejoenelespejo.Veaunachicadelgadadecasidieciséisañosconunapielmuypálidayunosojosdecolorazulverdoso.Lachicatienelacabezarapada.
—¡Qué extraño!—exclamaLiz. En la vida real tiene una larga y laciamelena rubia que se leenredafácilmente.
—¿Nolosabías?—inquiereThandi.Ellaanalizalapregunta.Enelfondodesumenterecuerdaestartendidaenunacamaenmediode
una habitación iluminada con una cegadora luz mientras su padre le afeita la cabeza. No. Liz seacuerda ahora de que no era su padre. Le había parecido que era él porque tenía sumisma edad.Recuerdaestarllorandoyoírasumadredecir:«Notepreocupes,Lizzie,tevolveráacrecer».No,esotampocofueasí.Noeraellasinosumadrelaquelloraba.Duranteunmomentointentarecordarsiesteepisodioocurriódeverdad.Decidequenoquiereseguirpensandoenello.
—¿Quieresverquémáshayenelbarco?—lepreguntaaThandi.—¿Porquéno?Detodosmodosyaestoydespierta—respondeellabajandodelalitera.
—Mepreguntosipuedoencontrarunagorraenalgunaparte—diceLiz.Aunquenoseamásqueunsueño,noquiereirporahídandolaimpresióndeserunacabezarapada.Abreelarmarioymirabajolacama:nohaynada,comoenlacómoda.
—Notesientasmalportupelo,Liz—diceThandidulcemente.—Nomesientomal.Sóloquemepareceextraño—lerespondeella.—¡Eh,amítambiénmehapasadoalgomuyraro!—admiteThandi levantándoselacubiertade
trencitascomosifuerael telóndeunteatro—.¡Tachán!—exclamamostrandounapequeñaaunqueprofundayrecienteheridaenlabasedelcráneo.
Laheridatienepocomásdeuncentímetrodediámetro,peroLizsedacuentadequeesunalesiónsumamentegrave.
—¡Caramba,Thandi!,esperoquenoteduela.—Alprincipiomedolíaunmontón,peroahorayano.Enrealidadcreoqueestácurándose—dice
Thandicubriéndoladenuevoconlastrencitas.—¿Cómotelahiciste?—Nomeacuerdo—respondeellafrotándoselacabezacomosiquisieraestimularselamemoria
conlasmanos—.Puedequemelahicierahacemuchotiempo,perotambiénpodríahabérmelahechoayer.¿Entiendesloquetequierodecir?
Lizasienteconlacabeza.Aunqueenrealidadnolohaentendido,peronocreequevalgalapenadiscutirconlaclasedeabsurdaspersonasconlasqueunoseencuentraenunsueño.
—Tenemosqueirnos—diceLiz.AlsalirdelahabitaciónThandisemiraporuninstanteenelespejo.—¿Creesqueimportaquelasdosvayamosenpijama?—pregunta.LizcontemplaelcamisónblancodeThandi.Ellatambiénllevaunpijamablancodehombre.—¿Porquétendríaqueimportarnos?—responde,pensandoqueesmuchopeorirconlacabeza
rapadaqueconpijama—.Además,Thandi,¿acasonollevasestaclasederopamientrasduermes?—Lizestáapuntodegirarelpomodelapuerta.Alguienenalgunaparteledijoquenuncadebía,bajoningunacircunstancia,abrirunapuertaensueños.Comonoseacuerdadequiéneraodeporquénodebíaabrirlas,decideignorarelconsejo.
CurtisJest
LizyThandisedescubrenenunpasilloconcientosdepuertascomolaqueacabandecerrarasusespaldas.
—¿Cómocreesquevamosaencontrarladenuevo?—lepreguntaThandi.—Dudo que tengamos que hacerlo—responde Liz—. Probablementeme despertaré antes, ¿no
crees?—Puesporsinoesasí,elnúmerodenuestrahabitaciónesel130002—lerecuerdaThandi.Lizleseñalaunletreropintadoamanoalfinaldelpasillo.
ATENCIÓNATODOSLOSPASAJEROSDELBUQUEAVAPORNILO
ELCOMEDORSEENCUENTRATRESPISOSMÁSARRIBAENLACUBIERTALIDO
—¿Teapeteceiradesayunar?—preguntaThandi.—¡Memuerodehambre!—Lizsesorprendedesupropia respuesta.No recuerdahaberestado
hambrientaantesensueños.Lomásasombrosodelcomedordelbarcoson lospasajerosquehayenél: todossonpersonas
mayores.Algunospocostienenlaedaddesuspadres,perolamayoríasoninclusomayoresqueellos.Loqueabundasonlascanasolacalvicie,lasmanchaspropiasdelavejezyloscolgajos.EslamayorcantidaddepersonasmayoresqueLizhavisto reunidasen todasuvida, incluyendo lasvisitasquehizoasuabuelaenBoca.Lajovenechaunvistazoalcomedor.
—¿Noshabremosequivocadodelugar?—pregunta.Thandiseencogedehombros.—¡Qué raro!, se están acercando a nosotras —exclama Thandi al ver a tres mujeres yendo
directashaciaellas.ALizlerecuerdanlasbrujasdeMacbeth,unaobradeteatroqueacabadeleeralserunadelaslecturasobligatoriasdelaclasedeinglés.
—Hola,queridas—lessaludaunamujertanbajitacomounpigmeoconacentoneoyorquino—.YosoyDorisyéstaesMyrna,yella,Florence.—Doris,poniéndosedepuntillas, ledaaLizunas
palmaditasensupeladacabeza—.¡SantoDios!,¡venidaverlojovenquees!Lizlesonríeamablemente,aunquedaunpasoatrásparaquenoledémáspalmaditas.—¿Cuántos años tienes? —pregunta Doris la pigmea entrecerrando los ojos y levantando la
cabezaparaverlamejor—.¿Doce?—Quince—corrigeLiz—.Peroprontocumplirédieciséis.Concabelloparezcomayor.—¿Quéoshaocurrido,chicas?—inquieredesúbitolaquesellamaFlorence.Suásperavozesla
deunafumadoraempedernida.—¿Aquéserefiere?—preguntaLiz.—Amímepegaronuntiroenlacabeza—confiesaThandi.—Hablamásalto—observaMyrna,quetieneunbigotitoquepareceunaorugablancapeluda.No
oigobien.—¡QUEMEPEGARONUNTIROENLACABEZA!—Creíaquemehabíasdichoquenoteacordabasdecómotehicisteeseagujero—exclamaLiz
volviéndosehaciaella.—Acaboderecordarlo—sedisculpaThandi.—¡Untiroenlacabeza!—repiteFlorenceconsuásperavoz—.¡Esincreíble!—No,esdelomásnormal.Dondeyovivopasamuyamenudo—observaThandi.—¿QUÉHASDICHO?—preguntaMyrna, la del bigotito—.Dímelo cerca del oído bueno, el
izquierdo.—HEDICHOQUEESDELOMÁSNORMAL—gritaThandi.—Quizátendríasqueiralaenfermería—sugiereFlorence—.HayunaenlacubiertaPortofino.
Myrnayahaestadoenelladosveces.—Nohacefalta.Creoquelaheridaseestácurando—lerespondeThandisacudiendolacabeza.Liznoentiendeestaextrañaconversación.Depronto,legruñeelestómago.—¡Losiento!—sedisculpa.—Id a comer algo —dice Doris señalándoles a la gente haciendo cola para el bufé libre—.
Recordadquesiqueréiscomerlosmejoresplatostenéisquevenirtemprano.ParadesayunarLizeligecrepesypudíndetapioca.Thandisesirvesushi,trufasyjudíasensalsa
detomate.—¡Qué combinación tan interesante! —observa Liz mirando con curiosidad el menú que ha
elegidoThandi.—En casa nunca comemos ni lamitad de los platos que hay en este bufé—dice Thandi—, y
piensoprobarlostodosantesdequelleguemosaeselugar.—Thandi—lepreguntaLizconunaireindiferente—,¿dóndecreesqueestá«eselugar»?Ellaponderaunmomentolapregunta.—Estamosenunbarco—responde—ylosbarcoshandeiraalgunaparte.Laschicasseinstalanenunamesajuntoaunaventanasalediza,alejadadelosdemáscomensales.
Lizsezampaloscrepesenuntiemporécord.Sesientecomosisehubierapasadosemanassincomer.—Eslaprimeravezqueconozcoaalguienaquienlehanpegadountiroenlacabeza—observa
mirandoaThandimientrasrascaconlacucharaelfondodelboldelpudín.—¿Podemoshablardeellocuandohayaacabadodedesayunar?—diceThandi.—Losiento—respondeLiz—.Sóloestabaintentandosacaruntemadeconversación.Sequedamirandoporlaventana.Lanieblasehadisipadoyelaguaesmásclaraquecualquier
otraqueellahayavisto.Quéextraño,piensa,elcieloseparecealmar.Enrealidad,elmarescomouncieloempapadoyelcieloescomounmarescurrido.Sepreguntaadóndesedirigeelbarcoysielladespertaráantesdellegarasudestinoyquéledirásumadresobreloqueestesueñoprobablementesignifica. Sumadre es psicóloga infantil y sabe de esas cosas.Una voz de hombre interrumpe suensoñación.
—¿Os importa si compartovuestramesa?—lespregunta con acento inglés—.Parecéis ser lasúnicaspersonasdemenosdeochentaañosquehayenestelugar.
—¡Claroqueno!Yahemosterminado…—lavozdeLizseapagaalfijarseenélporprimeravez.Tieneunostreintaañosyunoschispeantesojosazulesquehacenjuegoconsucabelloazulenpunta.Liz,comolamayoríadechicasdesuedad,reconoceríaesosojosencualquierparte.
—¡EresCurtisJest!,¿verdad?—Supongoquesolíaserlo—respondesonriendoelhombredepeloazul.Curtisletiendelamano
—.¿Ytúcómotellamas?—LizyellaThandi,nopuedocreerqueestéhablandocontigo.De todos losgruposmusicales
quehayenelmundo,¡Machineesmifavorito!—exclamaefusivamenteLiz.Curtisechaunpocodesalasuspatatasfritas.—¡Caramba,mehalagaoírlo!—observaCurtissonriendo—,porqueelmundoesunlugarmuy
grande.YoencambiosiemprehepreferidolosClash.—¡Es el mejor sueño que he tenido en toda mi vida! —añade Liz complacida porque su
subconscientelehahechosoñarconCurtisJest.—¿Hasdichosueño?—inquiereelhombreladeandolacabeza.—Ellaaúnnolosabe.Yolohecomprendidopormímisma—lesusurraThandiaCurtis.—¡Qué interesante!—observa él—. ¿Dónde creesque estás,Lizzie?—lepreguntavolviéndose
haciaella.Lizseaclaralagarganta.SuspadrestambiénlallamanLizzie.Depronto,sinsaberporqué,los
echadesesperadamentedemenos.—¿Teencuentrasbien?—diceCurtisconunaexpresiónpreocupada.—No,yo…—Lizdirigelaconversaciónhaciauntemamástranquilizador—.¿Cuándosaldrátu
nuevoálbum?—Nunca—respondecomiéndoseunapatatafrita.—¿Se ha separado el grupo?—Liz había oído rumores de que los componentes deMachine
quizásibanasepararse,peronuncasehabíanmaterializado.—Esunaformadeverlo—respondeCurtis.—¿Quéhaocurrido?—preguntaLiz.—Lohedejado.—Pero ¿por qué? Si lo hacías fenomenal —ella tenía unas entradas para ir el día de su
cumpleañosalconciertoquedabanenBoston—.Noloentiendo.Curtissesubelamangaizquierdadelachaquetadelpijamablanco,revelandolaparteinteriordel
antebrazo.Desdeelcodohastalamuñecatieneunasprofundascicatricesqueseextiendencomounsendero, varios morados y unas heridas con costra. Cerca de la línea que separa el bíceps delantebrazohayunorificiodesesentamilímetros.Estotalmentenegro.Lizalverlopiensaqueelbrazoparecemuerto.
—Porqueeraunidiota,Lizzie—lerespondeCurtis.
—¿Liz?—inquiereThandi.EllasiguemirandoenmudecidaelbrazodeCurtis.—Liz,¿teencuentrasbien?—lepreguntaThandi.—Estoy…—empiezaadecirella.Odiacontemplarelhorribleaspectodelbrazo,peronopuede
apartarlavistadeél.—¡Por Dios!, ¿puedes cubrirte el brazo? —le ordena Thandi a Curtis—. La estás poniendo
enferma.Sinceramente,Liz,suheridanoespeorqueelagujerodemicabeza.—¿Tienesunagujeroenlacabeza?—preguntaCurtis—.¿Puedoverlo?—¡Claro!—Thandi,sintiéndosehalagada,seolvidadelestadodesunuevaamigayselevantalas
trencitas.Liznosoportalaideadeverelagujeroyelbrazoalmismotiempo.—Perdonadme—dicedisculpándose.Salecorriendoa lacubiertaprincipaldelbarco.Descubre
queestárodeadadeancianos,todosellosvestidoscondistintostiposdepijamasblancos,jugandoaltejo.Seapoyasobrelabarandilladelbarcoycontemplaelmar.Elaguaestádemasiadolejoscomopara verse reflejada en ella, pero al inclinarse lo suficientemente sobre el mar, le parece ver susombra:unapequeñayvagamanchaoscuraenmediodeunaextensiónazul.
Estoysoñando,piensa,yencualquiermomentosonarálaalarmadeldespertadorymedespertaré.Despierta,despierta,despierta,seordenaasímisma.Sepellizcaelbrazocontodassusfuerzas.—¡Ay!—exclama.Sepropinaunbofetónparadespertarse.Nada.Vuelveadarseotro.Aúnnada.
Cierralosojoscontodassusfuerzasyvuelveaabrirlos,esperandodescubrirsedenuevoensucamadeCarrollDriveenMedford,Massachusetts.
Lizempiezaaserpresadelpánico.Losojosseleempañan,selossecafuriosamenteconlamano.Tengo quince años, soy una personamadura con un permiso de principiante, y de aquí a tres
mesesmedaránelcarnédeconducir,piensa.Yasoydemasiadomayorcomoparatenerpesadillas.—¡MAMÁ! ¡MAMÁ! ¡ESTOY TENIENDO UNA PESADILLA!—grita cerrando los ojos con
fuerza.Lizesperaquesumadrevengaadespertarla.Encualquiermomento.En cualquiermomento sumadre estará al lado de su cama ofreciéndole un vaso de agua para
tranquilizarla.Encualquiermomento.Liz abre un ojo. Sigue estando en la cubierta principal del barco, y los pasajeros empiezan a
mirarlafijamente.—Señorita—lediceunancianoconunasgafasconmonturadeconchayelairedeunprofesor
suplente—,estámolestandoalospasajeros.Ellasesientajuntoalabarandillaysecubrelacaraconlasmanos.Respirahondoysediceque
debecalmarse.Decidequelamejorestrategiaesintentarrecordarlosmáximosdetallesposiblesdelsueñoparacontárselosasumadreporlamañana.
Pero ¿cómo empezó el sueño?Liz se devana los sesos. Es extraño intentar recordar un sueñomientrasestássoñando.¡Ah,sí!Ahoraseacuerda.
ElsueñoempezóensucasadeCarrollDrive.Sedirigíaenbicicletaa laCambridgesideGalleria.Allí ibaaencontrarseconZooey,sumejor
amiga,porqueéstanecesitabacomprarseunvestidoparaelbailedegaladelinstituto.(ALizaúnnola habían invitado.)Recordabahaber llegado al cruce quehabía junto al centro comercial, al otro
ladoseencontrabanlasbarrasparaaparcarlasbicicletas.Depronto,viountaxidirigiéndosehaciaellaatodavelocidad.
Tambiénrecordabalasensacióndehaberestadovolandoporelaireduranteloqueaellalehabíaparecidounaeternidad.Recordabahabersesentidoimprudente,felizysentenciadaalmismotiempo,yhaberpensado«lafuerzadegravedadyanomeafecta».
Lizsuspira.Alobservarlascosasconobjetividadsuponequehamuertoenelsueño.Sepreguntaqué significa soñarque temueresydecidepreguntárseloa sumadrepor lamañana.Depronto seplantea si la solución está en volver a dormirse. Quizá si logra conciliar el sueño a la mañanasiguiente, al despertarse, todo volverá a ser como antes. Se siente agradecida hacia Thandi porhaberlehechomemorizarelnúmerodesucamarote.
MientrasLizcruzadenuevo rápidamente lacubierta,advierteunsalvavidasdelNilo. Sonríe alverelnombredelbarco.LasemanaanteriorhabíaestadoestudiandoelantiguoEgiptoenlaclasedehistoria de la señorita Early.Aunque las lecciones eran bastante entretenidas (guerras, pestilencia,plagas, asesinatos), piensa que eso de las pirámides no es más que una pérdida de tiempo y derecursos. En su opinión, una pirámide es como una caja de madera de pino o una lata de avenaQuaker;detodosmodos,cuandoelfaraónconseguíadisfrutardesupirámide,yaestabamuerto.Lizpensabaquelosegipciosdeberíanhabervividoenlaspirámidesyserenterradosensuscabañas(odondequieraqueloshabitantesdelantiguoEgiptohubieranvivido).
En la última clase sobre este tema, la señorita Early leyó al final un poema sobre Egipto queempezaba diciendo: «Me he encontrado con un viajero de la antigua tierra». Por alguna razón laestrofa le producía un agradable escalofrío y no dejó de repetírsela durante todo el día: «Me heencontradoconunviajerodelaantiguatierra».LizsuponequelaleccióndelaseñoritaEarlyesloquelehahechosoñarconunbarcoavaporllamadoNilo.
EnmemoriadeElizabethMarieHall
Noche tras noche Liz se va a dormir, pero nunca se despierta en Medford; el tiempo vatranscurriendo,peroellanosabecuántohapasado.Apesardehaberregistradoafondoelbarco,niellaniThandihandescubiertounsolocalendario,televisor,teléfono,ordenadoronisiquieraradio.LoúnicoqueLizsabeconseguridadesqueyanoestácalva:sucabezaestácubiertaporunospelitosdesesentamilímetros.¿Cuántotiempotardaelpeloencrecer?,sepregunta.¿Cuántotiemponecesitaunsueñoparaconvertirseenlavidadeuno?
Mientras está tendida en la cama,mirando fijamente la litera de arriba, oye de pronto que suamigaestásollozando.
—Thandi—lepreguntaestirandoelcuelloparaoírlamejor—,¿teencuentrasbien?Lachicaseechaallorarconmásfuerza.—E-e-echodemenosaminovio—lograalfinbalbucear.Liz tiende a Thandi un pañuelo de papel. Aunque en el Nilo no hay aparatos electrónicos
modernos,estállenodepañuelosdepapel.—¿Cómosellama?—preguntaLiz.—Reginald Christopher DoralMonmount Harris el Tercero—responde ella—, pero le llamo
Flacoaunquenoloseaparanada.¿Salesconalgúnchico?Lizsetomaunmomentoparameditarlarespuesta.Suvidarománticapordesgracianohallegado
a tanto.Cuando iba al segundo cursoRaphaelAnnuncio le regaló una caja de dulces en formadecorazonesparlanteselDíadeSanValentín.Aunqueparecíaungestoprometedor,Raphaellepidióalamañanasiguientequeledevolvieralasgolosinas.Erademasiadotarde:ellasehabíacomidotodosloscorazonesmenoselqueponía(ERSDMSDODLCE).
Yeneloctavocursoseinventóunnovioparaquelaschicasmáspopularesdelinstitutocreyeranqueeraunajovenmoderna.LizafirmabahaberconocidoaSteveDetroit(¡asíeracómollamabaasusupuestonovio!)cuandofueaverasuprimaenAndover.SteveDetroitquizáfueraunnovioficticio,peroLizloconvirtióenunverdaderogilipollas.Laengañó,lallamógorda,laobligóahacerlelosdebereseinclusolepidiódiezdólaresquenuncaledevolvió.
Enelveranoqueprecedióalnovenocurso,conocióaunchicoenelcampamentodeverano.Eraunmonitor llamado Josh,queenunaocasión le sostuvoel codoenungestoqueaLiz leparecióinexplicablementeencantadoryasombroso.Alvolveracasaleescribióunaapasionadacarta,pero
pordesgraciaélnoselacontestó.MástardeLizsepreguntósiJoshsehabríadadocuentasiquieradequeleestabasujetandoelcodo.¿Quizáhabíacreídoqueelcodoformabapartedelbrazodelasilla?
EnrealidadsurelaciónmásseriafueconEdward,uncorredordecampoatravés.Ibanalamismaclasedemates.Lizhabíacortadoconélenenero,antesdequeempezaralatemporadadeprimavera.No soportaba ir a una pruebamás. Según su opinión, era el deportemás aburrido delmundo. SepreguntabasiaEdwardleimportaríaqueellaestuvieramuerta.
—¿Quémedices?¿Tienesnovioono?—insisteThandi.—Puesno—admiteLiz.—¡Quésuertetienes!NocreoqueFlacomeecheenfalta.Liznoleresponde.Nosabesipuedeconsiderarseafortunada.Selevantadelacamaysemiraenelespejoquehaysobrelacómoda.Salvoporsuactualcortede
pelo,noesfeay,sinembargo,loschicosdesuclasenuncapareceninteresarseporella.Lanzandounsuspiroexaminaelnuevopeloque lecreceen lacabeza.Estiraelcuelloparaverelaspectodesunuca.Yentoncesescuandolodescubre:unalargahileradepuntosenformadearcosobrelaorejaizquierda.Laheridaestáempezandoacurarseyelcabelloestáempezandoacrecersobrelospuntos.Pero siguenahí.Liz se los tocaconcuidado.Dan la impresióndeque tan sóloal rozarloshandedoler,peronoesasí.
—Thandi,¿meloshabíasvistoantes?—Sí,cuandoteconocíyalostenías.Lizsemaravilladenohaberlosadvertido.—¿Notepareceextrañoquetútengasunagujerodetrásdelacabezayyoestospuntosporencima
delaoreja,yquelasdosnosencontremosbien?—lepregunta—.Merefieroaquelospuntosnomeduelen.
—¿Teacuerdasdecómotehicistelaherida?Lizsequedapensandoenlapreguntaunosmomentos.—En el sueño…—empieza a decir y luego se detiene—.Creo queme la hice al tener… una
especiedeaccidentecuandoibaenbicicleta.DeprontoLiznecesitasentarse.Estáheladaysinaliento.—Quierosabercómotehicisteelagujeroenlacabeza—añade.—Yatelohedicho.Mepegaronuntiro.—Sí,pero¿cómopasó?Cuéntamecómopasótodo.—LoúnicoquerecuerdoesqueibaporlacalleconFlaco.Apropósito,vivimosenWashington
D.C.Depronto,unaestúpidabalasaledenosédónde.«¡Agáchate!»,megritaFlacoyluegoseponeachillar:«¡ESTÁSANGRANDO!¡OH,DIOS,ESTÁSANGRANDO!»Ylosiguientequerecuerdoesquemedespierto en estebarcocuando túmepreguntasdóndeestás—dice enroscandounade sustrencitasalrededordesudedo—.¿Sabes?,alprincipioyotampocomeacordabadetodo,peroluegoempecéarecordarcadavezmáscosas.
Lizasienteconlacabeza.—¿Estásseguradequenoloestássoñando?—lepregunta.—Ya sé lo que tú piensas sobre ello, pero yo sé que no estoy soñando.Los sueños tienen una
atmósferaespecialyestoqueestoyviviendonomeproducelasensacióndeserunsueño.—Pero ¿cómo es posible entonces? A ti te pegan un tiro en la cabeza y yo tengo un grave
accidentedebicicletaylasdosnosvamospaseandoporahímásfrescasqueunarosa,comosinada
hubieraocurrido.Thandiseloniegaconlacabeza,peroprefierenodecirnada.—Además,¿cómosinopodríaCurtisJestestaraquí?¿Nocreesquesólopodemosencontrarnos
conunafamosaestrelladelrockensueños?—preguntaella.—Pero,Liz,¿sabesdequésonlasmarcasquetieneenelbrazo?—Sí.—EnBaltimorevivíamiprimaShelly.Ellatambiénteníaunasmarcasparecidas.Sonlaclasede
marcasquesalencuandoteinyectas…—¡Noquierosaberlo!—leinterrumpeLiz—.CurtisJestnosepareceennadaatuprimaShelly
deBaltimore.¡Ennada!—Estábien,peronotecabreesconmigo.Hassidotúlaquehasacadoeltema.—¡Losiento,Thandi!—sedisculpaLiz—.Sóloestoyintentandoesclarecertodoestemisterio.Thandilanzaunlargoylastimerosuspiro.—Tía,noquieresaceptarlarealidad—observa.AntesdequeLiz tenga tiempodepreguntarleaquéserefiere,alguiendeslizapordebajode la
puertadelcamaroteungransobrebeis.Aliviadaporladistracción,Lizlorecoge.Elsobre,escritoconletrasazulmarino,vadirigidoa:
PasajeraElizabethM.HallEnelpasado,deMedford,Massachusetts,en
EstadosUnidosEnelpresente,enelNilo,camarote130002,
literainferior
Lizabrelapuerta.Recorreelpasillodearribaabajoconlamirada,peronohaynadieenél.Vuelve a su litera y abre el sobre. En el interior hay una tarjeta de papel vitela y una extraña
monedahexagonalconunorificioredondoenelcentro.Lamonedalerecuerdalasfichasdelmetrode su país. En una de sus caras hay grabadas las palabrasUNETERNIM, y en la otra,MONEDAOFICIAL DE EN OTRO LUGAR. La tarjeta parece ser una invitación, pero no especifica elacontecimientoencuestión:
QueridapasajeraHall,Sesolicitasupresencia:CubiertadeObservaciónPrismáticosno219
Hoy¡AHORAMISMO!
—¡Aquiénse leocurreenviaruna invitacióndeunacontecimientoqueestásucediendo«ahoramismo»!Esimposiblellegaratiempo—diceLizmostrandolainvitaciónasuamiga.
—En realidad, Liz, es imposible llegar tarde. «Ahoramismo» es un términomuy relativo—respondeThandi.
—¿Quieresvenirconmigo?—preguntaLiz.—Probablementeserámejorquevayassola.—¡Comoquieras!—lecontestaLiz,queaúnestáenfadadaconThandiyenelfondosealegrade
quenolaacompañe.—Además,yoyaheido—admitelachica.—¿Cuándofuistesinmí?—inquiereLiz.—Enunaocasión—respondeThandiconvaguedad—.¡Noimporta!Lizsacudelacabeza.Talcomopuedever,yavaallegartardeynotienetiempoparahacerlemás
preguntas.—Esporlaheroína—diceLizgirandoelrostrohaciaThandimientrassaledelcamarote—.Esas
marcasenelbrazodeCurtissedebenalaheroína,¿verdad?Thandiasienteconlacabeza.—Creíaquenolosabías—observaella.—EnlasrevistassiempresalíanrumoresdequeCurtisJesteraunyonqui—señalaLiz—,perono
todoloquesepublicaesverdad.La Cubierta de Observación se encuentra en el último piso del barco. Aunque Liz y Thandi
exploraronelNiloafondo,nuncallegaronhastaarribadetodo.(Almenosjuntas,piensaLiz.)Ahorasepreguntaporquénuncafueronhastaelúltimopiso.Desúbitosienteelimperiosodeseodeirallí.IntuyequecuandolleguealaCubiertadeObservaciónocurriráalgodecisivo.
SubecorriendolosnumerosostramosquehayentresucamaroteylaCubiertadeObservación.SedescubrerecitandolaestrofadelpoemaquelaseñoritaEarlylesleyóenclase:«Meheencontradocon un viajero de la antigua tierra; me he encontrado con un viajero de la antigua tierra; me heencontradoconunviajerodelaantiguatierra».Cuandoporfinllegaalúltimopiso,estáempapadaensudorysinaliento.
LaCubiertadeObservaciónconsisteenunalargahileradeprismáticos,comolosqueseparecenaladelgadafiguradeunapersonasinbrazosoaunparquímetro.Losprismáticosestánunidosauntaburetedemetaldeincómodoaspecto.Enlacubiertahayunmontóndepasajerosmirandoporellostotalmente absortos, aunque las reacciones de cada uno son muy diferentes. Algunos ríen, otroslloran,otrosríenylloranalmismotiempootienenlamiradaperdida,conunaexpresiónvacía.
Losprismáticosestánnumerados.Liz, llenademiedoycuriosidad, localiza losprismáticosno219y se sientaenel taburetedemetal.Se saca laextrañamonedadelbolsilloy la introduceen laranura.Alpegarlosojosalosprismáticos,elobjetivoseabreemitiendounchasquido.Lizveporellosloquecasipodríadescribirsecomounasimágenestridimensionales.
Lapelículatienelugarenunaiglesia.Lizlareconocecomolaiglesiaalaqueibasiemprequesumadresentíadeprontolanecesidadde«mejorarlavidaespiritualdesuhija».Enlosbancosdeatrásveavarioschicosdesuinstitutovestidosdenegro.Almoverselacámarahaciadelanteenfocandoelrestode la iglesia,Lizveaotraspersonas,demásedad,que sóloconocedehaberlasvistoen lascomidasquesuspadresorganizabanenlosdíasfestivos,delasquenisiquieraseacordaba,ydelascenasquehabíacontempladodesdeloaltodelaescaleracuandosesuponíaqueyadebíaestarenlacama.Sí,esaspersonaseranfamiliaressuyosy losamigosdesuspadres.Finalmente lacámarasedetiene en la parte delantera de la iglesia. Sumadre, su padre y su hermano están sentados en laprimerafila.Sumadrevasinmaquillaryseaferraalamanodesupadre.Suhermanollevauntrajeazulmarinoqueyalequedademasiadopequeño.
EldoctorFrederick,eldirectordesuinstituto,conelqueLiznuncahahabladopersonalmente,seencuentraenelpúlpito.
—Eraunaestudiantequesacabasobresalienteentodo—diceeldoctorFrederickenuntonoqueLiz reconocecomoelqueempleapara las reuniones—.ElizabethMarieHall fueunorgullo tantoparasuspadrescomoparaelinstituto.
Liz se echa a reír. Aunque sus notas oscilaban de aceptables a muy buenas, nunca sacósobresalienteentodo.Normalmentesacabanotables,salvoenmatemáticasyenciencias.
—Pero¿quépodemosaprenderdelamuertedeunapersonatanjovencontantopotencial?—diceel doctor Frederick golpeando el atril con el puño para darmás énfasis a sus palabras—.Lo quepodemosaprenderdeellaesloimportantequeeslaseguridadvial.
EnestepuntoelpadredeLizprorrumpeenunosentrecortadosehistéricossollozos.EntodasuvidaLiznuncalohabíavistollorarasí.
—EnmemoriadeElizabethMarieHall—prosigueeldoctorFrederick—tenéislaobligacióndemirarhaciaunladoyhaciaelotroantesdecruzarlacalle,deponeroselcascoalirenbicicleta,deabrocharos el cinturón, de adquirir sólo automóviles que incluyan airbags en los asientos de lospasajeros…
EldoctorFrederickparecetenercuerdapararato.¡Quécotorra!,piensaLiz.Enfoca los prismáticos hacia la izquierda. Junto al atrio, advierte una caja blanca rectangular
lacadaconunascutresrosasdecolorrosatalladasenloslados.AestasalturasLizyaseimaginaqué,omásbienquién,seencuentraenlacaja.Sinembargo,sabequehadeverloconsuspropiosojos.Echa un vistazo por encima de la tapa: una chica exánime con una peluca rubia y un vestido deterciopelo marrón yace en un lecho de satén blanco. Siempre odié ese vestido, piensa Liz. Seacomodaenelincómodotaburetedemetalylanzaunsuspiro.Ahorasabeconcertezaloquehastaentoncessólohabíasospechado:estámuerta.Estámuertay,detodosmodos,nosientenada,almenosdemomento.
Lizechaunúltimovistazocon losprismáticosparacomprobar si están todas laspersonasquedebíanhaberasistidoasufuneral.Edward,elcorredordecampoatravésseencuentraallí,sonándosevalientemente la nariz con la manga. Su profesora de inglés también, así como su entrenadorapersonal.Recibeunaagradablesorpresaalverqueladehistoriauniversaltambiénhaasistido.Pero¿qué ha ocurrido con el de segundo de álgebra y el de biología?, se pregunta Liz. (Eran susasignaturaspreferidas.)Ytampocolograverasumejoramigaporningunaparte.¿AcasonofueporculpadeZooeyquesedirigióalcentrocomercial?¿Dóndediantresestá?Indignada,dejademirarporlosprismáticosantesdequehayafinalizadoeltiempoquelecorresponde.Yahavistobastante.
Estoymuerta,piensa.Yluegolorepiteenvozaltaparaescucharcómosuena:—Estoymuerta.¡Muerta!¡Quéextraño!,noledalasensacióndequesucuerpoestémuerto.Losientecomosiempre.Mientraspasapordelantedelalargahileradeprismáticosdevueltaalcamarote,veaCurtisJest.
Estámirandoconpocoentusiasmoporsusprismáticosutilizandosólounojo.ConelotroreconoceenseguidaaLiz.
—Hola,Lizzie.¿Cómoteestátratandolavidaenelmásallá?—lepregunta.Ella intentaencogersedehombroscon indiferencia.Aunquenosabeexactamentequées loque
«lavidaenelmásallá»comporta,estáabsolutamenteseguradeunacosa:nuncavolveráavermásasuspadres,asuhermanoniasusamigas.Enciertomodo,sesientemásbiencomosisiguieracon
vidayfueralaúnicainvitadaenelfuneralcolectivodetodalagentequehaconocido.—¡Esaburrida!—decideresponderle,aunqueestacontestaciónnoreflejeparanada loqueestá
sintiendo.—¿Yquétehaparecidoelfuneral?—lepreguntaCurtis.—Fuesobretodounaocasiónparaqueeldirectordemiinstitutohablaradelaseguridadvial.—¿De la seguridad vial? Suena divino —responde él ladeando la cabeza ligeramente
desconcertado.—Yademásdijoqueeraunaestudiantequesiempre«sacabasobresalientes»—añadeLiz—.Lo
cualnoescierto.—¿Que no miras las noticias? Todos los jóvenes se convierten en unos perfectos estudiantes
cuandoestiranlapata.Esdelomáscomún.Lizsepreguntasisumuertehasalidoenlasnoticiaslocales.¿Acasoaalguienleimportaqueuna
chicadequinceañosmueraatropelladaporuncoche?—ElgranJimiHendrixdijo:«Todoelmundoteadoracuandoestásmuerto:encuantotemueres,
tehaceninmortal»,oalgoporelestilo.PeroprobablementenosabesquiénesJimiHendrix.—Síquelosé—contestaLiz—.Eselguitarrista.—¡Lepidomildisculpas,señorita!—diceCurtishaciendoelgestodesacarseelsombrero—.En
esecaso,¿tegustaríaecharunamiraditaamifuneral?Liznoestáseguradesi leapeteceverotro funeral,peronoquiereserdescortés.Mirapor los
prismáticos de Curtis. Su funeral es mucho más elaborado que el suyo: los otros miembros deMachineestánahí;unfamosocantanteinterpretasucanciónmásfamosaconunanuevaletraescritaparalaocasión;unafamosamodelodelenceríasollozaenlaprimerafilay,porextrañoqueparezca,sobreelataúddeCurtishayunosohaciendomalabarismos.
—¿Porquéhayunosoentufuneral?—preguntasorprendidaLiz.—Sesuponequeibaasalirennuestronuevovídeo.SellamaBartolomeoymedijeronqueesel
mejorosomalabaristaquehayenelmercado.Unodeloschicosdelabandaprobablementepensóquemegustaríalaidea.
Lizseapartaunpocodelosprismáticos.—¿Cómotemoriste,Curtis?—Alparecer,desobredosis,supongo.—¿Alparecer?—inquiereLiz.—Sí,almenosesoesloquedijeronenlasnoticias:«CurtisJest,elcantantedeMachine,murióal
parecer de una sobredosis en lamadrugada del domingo en su residencia de Los Ángeles. Teníatreinta años». Por lo visto es una gran tragedia—comenta riéndose—. ¿Y tú, Lizzie? ¿Lo sabesahora?
—Mearrollóuncochemientrasibaenbicicleta.—¡Ah!,ahoraentiendoporquésehablódelaseguridadvialentufuneral.—Supongoquefueporeso.Mamásiempreestaba intentandohacerquemepusieraelcasco—
observaLiz.—Lasmamássiempresabenquéesloquemásnosconviene.Lizsonríe.Alcabodeunmomentosesorprendealdescubrirvarias lágrimas rodandoporsus
mejillas.Selassecarápidamenteconlamano,peroprontosonreemplazadasporotras.—Toma—diceCurtisofreciéndolelamangadesupijamaparaqueselasseque.
Lizlaacepta.AdviertequeelbrazocubiertodecicatricesdeCurtisseestácurando.—¡Gracias!—exclamaellaagradecida—.Apropósito,tubrazotienemejoraspecto.Élsebajalamangadelpijama.—Mihermanapequeñatienetumismaedad—observaél—.Yademássepareceunpocoati.—Estamosmuertos, ¿sabes?Todos estamosmuertos.Yno volveremos a ver a nuestra familia
nuncamás—exlamaLizechándoseallorar.—¡Quiénsabe!,Lizzie.Quizávolvamosaverla.—¡Claro,atiteresultafácildecirlo!¡Comoenelfondotequeríasmorir!—encuantoacabade
decirestaspalabras,searrepientedehaberlaspronunciado.Curtisreflexionaunosmomentosantesderesponder.—Eraundrogadicto,peronoqueríamorir.—Losiento.ÉlasienteconlacabezasinmirarrealmenteaLiz.—Lo sientomucho—vuelve adisculparse ella—.Hedichouna estupidez.Sólo lo creí porque
muchasdetuscancionessonmásbienmelancólicas.Peronodebísuponerlo.—Aceptotusdisculpas.EsbuenosaberdisculparsecomoDiosmanda.Haymuypocaspersonas
quesepanhacerlo—observaCurtissonriendo.Lizledevuelvelasonrisa—.Enrealidad,laverdadesquealgunosdíasdeseabamorirme,quizáunpoco.Peronolamayoríadeellos.
Ellaestáapuntodepreguntarlesiahoraqueestámuertosienteaúnlanecesidaddedrogarse,perodecidequenoesunapreguntaadecuada.
—Lagentedebedeestarmuytristeportupartida—observaLiz.—¿Túcrees?—Almenosyoloestoy.—Peroahorameencuentroenelmismolugarquetú.Oseaqueatinotehedejado,¿verdad?—No,supongoqueno—admiteellariendo—.¡Quéextrañoquemeestériendo!¿Cómopuede
ahorahacermegraciaalgo?¿Creesqueestaremosenestebarcoparasiempre?Quierodecirquesipiensasqueestoestodoloquehay.
—Sospechoqueno,Lizzie.—Pero¿cómolosabes?—Quizámimenteme esté haciendo una jugarreta, pero creo que veo la costa, cariño—dice
Curtis.Lizseponeenpieparaintentardivisarlaporencimadelosprismáticos.Enlalejaníaleparece
verunacosta.Laimagenlatranquilizaporelmomento.Sinopuedesevitarestarmuerta,esmejorestarenalgúnlugar,seacualsea,queenninguno,piensa.
Ellibrodelosmuertos
BienvenidaaEnOtroLugar
—¡Yahemos llegado!—exclamaThandimirandopor la portilla superior al ver queLiz acabadeentrarenelcamarote.Despuéssaltadelaliteraparaabrazarlaconsusfuertesbrazosyhacerlagirarporelcamarotehastaquelasdossequedansinaliento.
Lizsesientaparacogeraire.—¿Cómopuedesestartanfelizcuandoestamos…?—suvozseapaga.—¿Muertas?—responde Thandi esbozando una ligera sonrisa—.Demodo que por fin lo has
descubierto.—Acabodevermifuneral,perocreoqueantesyameloimaginaba.Thandiasientesolemnementeconlacabeza.—Cada uno necesita su tiempo—observa—.Mi funeral fue horrible; a propósito, gracias por
preguntármelo.Mevistieroncomounpayaso.Pornohablardelpeinadoquemehicieron—añadelevantándoselastrencitasparaexaminarenelespejoelagujerodedetrásdelacabeza—.Sindudaseestávolviendomáspequeño—deduceantesdedejarlascaer.
—¿Noestástriste?—lepreguntaLiz.—¿Dequémeserviría?Nopuedocambiarlascosas.Ylosiento,peroestoyhartadeestareneste
pequeñocamarote.Porelsistemademegafoníadelbarcoseescuchaunanuncio:«Leshablaelcapitán.Esperoque
hayan tenido un buen viaje. La tripulación del Nilo les da la bienvenida a En Otro Lugar. Latemperatura local es de veinte grados y hace un tiempo soleado con algunas nubes y una brisaprocedentedeloeste.Ahorasonlastresycuarentayochodelatarde,horalocal.Rogamosatodoslospasajerosquedesembarquen.Éstaeslaúltimayúnicaparada.»
—¿Notepreguntascómoserá?—inquiereLiz.—Elcapitánacabadedecirlo.Haceuntiempocálidoconunaligerabrisa.—Nomerefieroaltiempo,sinoatodolodemás.—Pues no. Eso es lo que hay, y pormás preguntas queme haga, la situación no cambiará—
observaThanditendiéndolelamanoparaayudarlaalevantarsedelacama—.¿Vienes?Lizledicequenoconlacabeza.—El barco probablemente está abarrotado de gente. Prefiero esperar un poco, hasta que los
pasillosesténdespejados.
—Notengoprisa—dicesuamigasentándosejuntoaellaenlacama.—Nohacefaltaquemeesperes—respondeLiz—.Quieroestarsolaunrato.Thandiselaquedamirandoalosojos.—Vale,peronotequedesaquíparasiempre.—No,teloprometo.Thandiasienteconlacabeza.Cuandoestáapuntodesalir,Lizlallamayledice:—¿Porquécreesquenoshanpuestojuntas?—¡Notengoniidea!—exclamaThandiencogiéndosedehombros—.Probablementeéramoslas
únicaschicasdedieciséisañosquemurieronesedíadetraumatismocraneal.—Yotengoquince—lerecuerdaLiz.—Supongoquees lomejorquese lesocurrió—añadeThandidándoleunfuerteabrazo—.Me
alegrodehaberteconocido,Liz.Quizávolvamosavernosalgúndía.Lizdeseaconfirmarlelaprofundaexperienciaquelasdoshancompartidoenelbarco,perono
encuentralaspalabrasadecuadas.—Sí,hastapronto—acabadiciendo.AlcerrarThandilapuerta,sienteelimpulsodellamarlaypedirlequesequedeconella.Ahoraes
suúnicaamiga,apartedeCurtisJest.(Ynoestáseguradepodercontarconélcomoamigo.)AlirseThandi,sesientemássolaeinfelizquenunca.
Seechaenlaliteradeabajo.Asualrededorpuedeoírelsonidodelospasajerosabandonandoloscamarotes y saliendo por los pasillos.Decide esperar hasta que no oiga a nadie, sólo entonces seaventurará a salir. En el intervalo entre el abrir y cerrar de puertas, oye fragmentos deconversaciones.
—Esunpocoembarazosoirenpijamaalnotenernadamásqueponernos…—diceunhombre.—Esperoquehayaalgúnhoteldecente…—observaunamujer.—¿CreesquemeencontraréconHubie?¡Noteimaginascuántoloheechadodemenos!—dice
otramujer.LizsepreguntaquiénesHubie.Suponequeprobablementeestémuerto,comolosotrospasajeros
delNilo,comoloestáella.Quizásestarmuertonoseatanmalodespuésdetodosieresmuyviejo,piensa,porqueporloquehavisto,lamayoríadelaspersonasmuertassonmuyancianas.Poresolomásposibleesqueconozcanaotraspersonasdesuedad.Inclusopuedequeenestenuevositio,EnOtroLugar,oseacomoseacomosellame,tambiénesténlaspersonasqueconocíanyquemurieronantesqueellas.Yquizásiereslobastanteviejoconocerásamásgentemuertaqueviva,demodoquepara esas personas morirse ha se ser algo bueno, o al menos no debe tratarse de un episodiodemasiadomalo.YaquetalcomoLizlove,paralosancianoslamuertesepareceavivirjubiladoenFlorida.
Pero ella tiene quince años (casi dieciséis) y no conoce personalmente a ninguna persona quehaya muerto. Salvo ella misma y los pasajeros del barco. La idea de estar muerta le parece unaperspectivaenlaquesesentiráterriblementesola.
Mientras se dirige con el coche al paseomarítimodeEnOtroLugar,BettyBloom, unmujer quesuelehablarenvozaltaconsigomisma,observa:
—¡OjaláhubieraestadoconElizabethaunquesólofueraunavez!Entoncespodríadecirle:«¿Te
acuerdas de cuando nos conocimos?» Ahora en cambio sólo puedo decir: «Soy tu abuela. Nuncallegamosaconocernos,porqueyofallecíprematuramentedeuncáncerdemama».Yfrancamente,elcáncernoesunaformadeempezarunaconversación.Enrealidad,esmejorquenomencionelodelcáncer.Bastacondecirlequememorí.Almenos lasdos tenemosestoencomún.—Betty lanzaunsuspiro.Uncoche lepegaunbocinazo.En lugardeacelerar, sonríeal conductor, le saludacon lamanoyledejapasar—.Sí,megustaconduciraestavelocidad.Siquieresirmásdeprisa,adelante—añadeella.
»MehubieragustadotenermástiempoparaprepararlallegadadeElizabeth.Laideadeserabueladealguienmeresultaextrañayademásnomesientocomounaabuela.Nomegustahacerpasteles,dehechonomegustacocinar,nihacertapetesnibatas.Yaunquemegustanmucholosniños,metemoquenosoydemasiadohábilconellos.
»PorelbiendeOliviaprometonoserestrictanicrítica.NotrataréaElizabethcomoaunaniñasinocomoaunapersonaadulta.Ytambiénprometoapoyarla.Ynoleharédemasiadaspreguntas.Acambio,esperoqueyolegusteunpoco,apesardetodoloqueOliviapuedahaberledichodemí.—BettysequedacalladaysepreguntacómoestaráOlivia,suúnicahija.
Alllegaralpaseomarítimosemiraenelretrovisorysesorprendedeloqueveenél:unamujernidemasiadovieja,nidemasiadojoven.Locualesmásbienextraño.
Pasaunahora.Yluegootra.Lospasillossequedanvacíosysilenciosos.Lizempiezaaconcebirunplan. ¿Quizá podría viajar como polizón? En algúnmomento dado el barco tendrá que volver allugardelquehavenido,¿verdad?Ysiellasequedaabordo,quizápodrávolveralavidadeantes.Tal vez sea así de sencillo, piensa. Quizá cuando oyó historias de personas que habían tenidoexperienciascercanasalamuerte,quehabíanmuertoclínicamenteydespuéshabíanvueltoalavida,esas personas «afortunadas» en el fondo no lo eran tanto, sino que sólo habían sido lo bastanteinteligentescomoparaquedarseenelbarco.
Lizseimaginavolviendoacasa.Todoelmundoexclamaría:«¡Esunmilagro!»Ylosperiódicoshablaríandeella:UNAJOVENDELLUGARHAVUELTOALAVIDA;AFIRMAQUELAMUERTEESUNVIAJE EN BARCO EN LUGARDEUNA LUZ BLANCAAL FINALDEUN TÚNEL. Lepropondríanescribirunlibro(Lajovenmuerta,deLizHall)yhacerunapelículabasadaensuvidaqueseemitiríaporlatele(Decidióvivir:lahistoriadeElizabethM.Hall),yademásapareceríaenelprogramadeOprahWinfreyparapromocionarambosproyectos.
Lizvequeelpomosemuevey lapuertaempiezaaabrirse.Sinpensarlodosvecesseescondedebajodelacama.Desdeellugarenqueseencuentrapuedeveraunniñodelaedaddesuhermano,vestidoconununiformeblancodecapitánconunascharreterasdoradasyunagorrahaciendojuego.ElniñosesientaenlaliteradeabajosinqueparezcahabersepercatadodelapresenciadeLiz.
Permaneceenellacasitotalmenteinmóvil,salvoporellevebalanceodesuspiernas.Ellaadvierteque lospiesapenas le lleganal suelo.Desdedondeestá,puedeverperfectamente lassuelasdesuszapatos.AlguienhaescritoconunrotuladornegrounaIenlasuelaizquierdayunaDenladerecha.
—Estabaesperandoquetepresentaras—dicealcabodevariosminutosconunavozinusualmentemaduraparaunniñodesuedad—,peronotengotodoeldía.
Liznoresponde.—Soyelcapitán—precisaelniño—ysesuponequenodebíasseguirenelcamarote.
Ellasiguesinresponder.Aguantalarespiracióneintentanohacerelmenorruido.—Sí,eselcapitánelqueestáhablandocontigo,conlajovenescondidadebajodelacama.—¿Elcapitándequé?—lesusurraLiz.—¡ElcapitándelNilo,porsupuesto!—Parecesunpocojovenparasercapitán.—Teaseguroquemiexperienciaymicurrículumsonejemplares.Soyelcapitándesdehaceunos
cienaños.¡Quécomediante!,piensaLiz.—¿Cuántosañostienes?—Siete—respondeelcapitáncondignidad.—¿Ynocreesqueeresunpocopequeñoparasercapitán?Élasienteconlacabeza.—Sí—admite—.Ahoratengoquehacersiestasporlatarde.Probablementemeretireelañoque
viene.—Quierohacerelviajedevuelta—diceLiz.—Estosbarcossólohaceneltrayectodeida,nodevuelta.—¡Estonotieneningúnsentido!—exclamaellasacandolacabezadedebajodelacama—.Hande
volveralaTierradealgúnmodo.—Yonosoyelquedictalasreglas—observaelcapitán.—¿Quéreglas?¡Siestoymuerta!—Sicreesqueestarmuertatepermiteactuarcomoteplazca,estásmuyequivocada—respondeel
capitán—.Nopodríasestarlomás,nimuerta—añadeunsegundodespuésyluegoseríedelchistetanmaloqueacabadehacer.Perodesúbitovuelveaponerseserio—.SupongamosporunmomentoquefueraposibleyqueconsiguierasvolveralaTierraenestebarco.¿Quécreesqueocurriríaentonces?
—Supongoquevolveríaamiantiguavida,¿verdad?—diceLizsaliendodesuescondite.—No—respondeelcapitánsacudiendolacabeza—.Notendríasuncuerpoconelqueregresar.
Seríasunfantasma.—¡Yqué!Quizáconvertirseenunfantasmanoseatanmalo.—Créeme. Sé de algunos que lo han sido y no es una buena vida. Acabas enloqueciendo y
haciendoenloqueceratodostusseresqueridos.Hazmecaso:desciendedelbarco.ALizselevuelvenaempañarlosojos.Lamuerteteconvierteenunallorona,piensamientrasse
secalaslágrimasconeldorsodelamano.Elcapitánsesacaunpañuelodelbolsilloyseloofrece.Estáhechodelalgodónmássuaveyfino,
parecemásdepapelquedetela,yestábordadoconlaspalabrasElcapitán.Lizsesuenalanarizconél.Supadretambiénllevapañuelosencima.Alacordarsedeestedetallehadesonarsedenuevo.
—Nollores.Estelugarnoestámaldespuésdetodo—señalaelcapitán.Lizsacudelacabeza.—Esporelpolvoquehaybajolacama.Mehaentradoenlosojos—respondedevolviéndoleel
pañuelo.—Quédatelo.Probablementevolverás anecesitarlo—diceélponiéndoseenpiey adoptando la
perfectaposturadeunmilitarveterano,perolacabezadelcapitánaellasólolellegahastaelpecho—.Confíoenquedentrodeunospocosminutosyahabrásdesembarcado—añade—.Nocreoquequierasquedarteenelbarco—ydespuésdepronunciarestaspalabras,cierralapuertatrasdesí.
Lizreflexionaenloqueesteextrañoniñolehadicho.Aunquesemueradeganasdeestarconsufamiliayconsusamigas,noquiereserunfantasma.Ysindudanodeseacausarmásdolorasusseresqueridos.Sabequesólopuedehacerunacosa.
Miraporlaportillaporúltimavez.Elsolcasisehapuestoysepreguntaporunmomentosieselmismosolquesevedesdesucasa.
LaúnicapersonaquehayenelmuelleesBettyBloom.AunqueLiznuncalahayavistoantes,hayalgoenaquellamujerquelerecuerdaasumadre.BettysaludaaLizagitandolamanoysedirigehaciaellaconresolución,dandograndeszancadas.
—¡Bienvenida, Elizabeth!He estado esperando estemomento desde hacemucho—exclama suabueladándoleunfuerteabrazo,Lizintentaliberarsedeél—.¡EresigualqueOlivia!
—¿Cómoesqueconocesamimadre?—preguntaLiz.—Soysumadre,Betty,tuabuela,peronuncallegasteaconocermeporquememoríantesdeque
nacieras—dice abrazándoladenuevo—.Tepusieronminombre, yo tambiénme llamoElizabeth,perosiemprehesidoBetty.
—Pero¿cómoesposible?¿Cómopuedessermiabuelasiparecestenerlaedaddemimadre?—preguntaLizdesconcertada.
—¡Bienvenida a En Otro Lugar! —exclama riendo la abuela Betty al tiempo que señala connaturalidadlagranbanderaqueondeaenelpaseomarítimo.
—Noloentiendo.—Aquí nadie envejece, todo el mundo se vuelve más joven cada día que pasa. Pero no te
preocupes,teexplicarántodoestoenlacitadeaclimatación.—¿Meestoyvolviendomásjoven?¡Perositardémuchotiempoenpodertenerquinceaños!—Notepreocupes,querida,alfinaltodosaldrábien.Estelugartevaaencantar.Comoeslógico,Liznoestátanseguradeello.
Ellargoviajealnuevohogar
En el descapotable rojo de su abuela, Liz contempla el paisaje por la ventanilla y deja que Bettymonopolicelaconversación.
—¿Tegustalaarquitectura?—lepreguntasuabuela.Lizseencogedehombros.Sihadesersincera,nuncahapensadodemasiadoenello.—Desde una de las ventanas demi casa se puede ver la biblioteca que construyóFrankLloyd
Wright.LosquesabendearquitecturaafirmanqueesmejorquecualquieredificiodelaTierra.Ynosólo ocurre con los edificios, Elizabeth. Aquí también descubrirás nuevas obras de tus artistasfavoritos.Libros,cuadros,música,¡cualquiertemaqueteguste!PrecisamenteacabodeiraverunaexposicióndenuevoscuadrosdePicasso,¿aquepareceincreíble?
Lizpiensaqueelentusiasmodesuabuelapareceforzado,comosiestuvieraintentandoconvenceraunaniñaparaquesecomieraelbrécoldelplato.
—HeconocidoaCurtisJestenelbarco—diceenvozbaja.—¿Quiénes?—ElcantantedeMachine.—Nocreoquehayaoídohablarnuncadeesegrupo.Perocomomemoríhacevariosaños,es
lógico.QuizáCurtisJestediteunnuevoálbumaquí.Lizvuelveaencogersedehombros.—Aunquealgunosartistasnosiguenaquísucarrera—añadesuabuela—.Supongoqueconuna
vida artística ya tienen bastante. Los artistas no son las personasmás felices delmundo, ¿verdad?¿ConocesaMarilynMonroe, lagranestrelladecine?Puesahoraesunapsiquiatra.Omásbien loera, porque ya es demasiado joven como para ejercer. Mi vecina Phyllis solía ir a verla. ¡Ah,Elizabeth!¿Veseseedificiotanaltoalolejosdelacarretera?¿Elquetieneunaextrañaforma?EselRegistro.Allíesdondetendrásqueirmañanaparalacitadeaclimatación.
Lizcontemplaelpaisajeporlaventanilla.DemodoqueestoesEnOtroLugar,piensa.LepareceunsitiocomocualquierotrodelaTierra.Inclusoledueleverqueseatannormal,lomuchoqueseparecealavidareal.Enélhayedificios,casas,tiendas,calles,coches,puentes,gente,árboles,flores,hierba, lagos,ríos,playas,aire,estrellasycielo.¡Quépocooriginal!,piensa.EnOtroLugarpodíahabersidounaciudadcomocualquierotraaunahoradecaminoapie,aunahoradeviajeencoche,oaunanochedeviaje enavión.Mientras suabuela sigueconduciendo,Liz advierteque todas las
carreterassoncurvasyqueinclusocuandoparecenserrectas,enrealidadseextiendendescribiendounaespeciedecírculo.
AlcabodeunratolaabuelaBettysedacuentadequeLiznolaestáescuchando.—¿Estoyhablandodemasiado?Séquesuelo…—¿Aquétereferíasaldecirmequemeestabavolviendomásjoven?—lainterrumpeLiz.—¿Deverdadquieressaberloahora?—inquieresuabuelamirándola.Lizasienteconlacabeza.—Aquítodoelmundosevavolviendomásjovendesdeeldíaquemuere.Cuandoyolleguétenía
cincuentaaños.Ahorahaceyaunosdieciséisqueestoyenélytengotreintaycuatro.Paralamayoríadeancianosestoesunabuenanoticia,Lizzie.Perosupongoqueaunachicadetuedadlaideanoleresultademasiadoatractiva.
Liztardaunpocoenasimilarlaspalabrasdesuabuela.Nuncatendrédieciséisaños,piensa.—¿Quéocurrecuandollegasalosceroaños?—diceLiz.—Vuelves a convertirte en un bebé.Y cuando tienes sólo siete días, te envían, junto con otros
bebés, al barco que navega por elRío rumbo a laTierra para volver a nacer en ella. Se llama la«liberación».
—¿AsíquesóloestaréaquíquinceañosydespuésmeenviaránalaTierraparaempezardenuevodesdecero?
—Estarásaquícasidieciséis—puntualizasuabuela—,perobásicamenteasíes.Liz no puede creer lo injusto que es todo eso.No sólo se hamuerto antes de haber tenido la
oportunidaddepasárselobienenlaTierra,sinoqueademásahorahadevolverarepetirsuvidaalrevéshastaconvertirsedenuevoenunestúpidoyllorónbebé.
—¿Oseaquenuncaseréunapersonaadulta?—diceLiz.—Yonoloveríadeesemodo,Liz.Tumentesigueadquiriendoexperienciayrecuerdos,aunque
tucuerpo…—¿O SEA QUE NO PODRÉ IR A LA UNIVERSIDAD, NI CASARME, NI TENER UNAS
GRANDES TETAS, NI VIVIR SOLA, NI ENAMORARME, NI OBTENER EL CARNÉ DECONDUCIR,NIHACERCUALQUIEROTRACOSA?¡ESINCREÌBLE!—estallaLiz.
LaabuelaBettydetieneelcocheenelarcén.—Yaveráscómonolopasarástanmalcomocrees—ledicedándoleunaspalmaditasenlamano
paraconsolarla.—¿Quenolopasarétanmal?Lasituaciónnopodríaserpeor.Tengoquinceañosyestoymuerta.
¡Muerta!—duranteunminutolasdossequedanensilencio.—¡Elizabeth, se me acaba de ocurrir una maravillosa idea! —exclama su abuela dando una
palmada—.Tieneselpermisoparahacerprácticasconelcoche,¿noesasí?Lizasienteconlacabeza.—¿Porquénoconducestúentonceshastaquelleguemosacasa?Lizvuelveaasentircon lacabeza.Aunque tenga todoelderechoaestardisgustadaporelgiro
quehadadosuvida,noquiereperderseestaoportunidad.Despuésdetodo,lomásprobableesquenuncaobtengaelcarnédeconducirenesteestúpidolugar,yquiénsabecuántosmeseslequedanhastaque también le quiten el carné de principiante.Liz abre la puerta y sale del cochepara ponerse alvolante,altiempoquesuabuelasaltaalasientodelpasajero.
—¿Sabescómofuncionaestecambiodemarchas?Metemoquemicocheestanviejocomoun
dinosaurio—observasuabuela.—Loquenoséhaceresaparcarenparaleloyhacerlaele—diceLizconcalma—.Meloibana
enseñarenlassiguientesclasesdeconducir,peropordesgraciaestirélapata.Elcaminohacialacasadesuabuelanoescomplicadoylasdospermanecenensilenciodurante
elviaje,salvopor lasocasionales indicacionesqueBetty ledaenlacarretera.Suabuelanoquieredistraerlamientrasconduce,yLiznotieneganasdehablarydejavagarsumente.Perodejarvagarlamente no siempre es lomejor si acabas demorirte y nunca es una buena idea para un conductornovato.
Liz piensa por qué tardó tanto en descubrir que estabamuerta.Otras personas, comoCurtis yThandi,parecierondarsecuentadeello enseguidaoal cabodepoco.Se siente comounaperfectainútil. En el instituto siempre había estado orgullosa de su habilidad para captar y aprenderrápidamente lo que le enseñaban. Pero este nuevo episodio demostraba que no era tan lista comocreía.
—Elizabeth,cariño,¿nocreesquedeberíasreducirunpocolavelocidad?—observasuabuela.—Vale—respondeLiz echando un vistazo al velocímetro, quemarca ciento veinte kilómetros
porhora.Nosehabíadadocuentadequeestabaconduciendotandeprisaylevantaunpocoelpiedelacelerador.
¿Cómoesposiblequeestémuerta?Sepregunta.¿Nosoydemasiadojovenparaestarlo?Cuandoalguiendesuedadsemuere,sueleserporquesehapasadolainfancialuchandocontrauncánceroalguna otra clase de horrible y rara enfermedad. Y a esta clase de niños les regalan viajes y lesorganizan encuentros con las estrellas del popmundialmente famosas. Se pregunta si su viaje enbarcoysuencuentroconCurtisJesttambiéncuentan.
ElprimerañoqueLiz fueal instituto,dosestudiantesdelúltimocurso semataronal conducirbajolosefectosdelalcoholmientrassedirigíanalbailedegala.Elinstitutoleshabíarendidotributopublicandoenelanuariodelcolegiounartículodeunapáginaenteraacompañadoconfotografíasatodo color. Liz se preguntaba si habrán tenido elmismo gesto con ella. A no ser que sus padrespagasenporél,lodudaba,porqueesosdoschicospertenecíanalequipodefútboldelinstitutoyaquelañohabíanganadoelcampeonatoestataldeMassachusetts.Encambioellanojugabaalfútbol,sinoquesóloeraunaestudiantedesegundoaño,yhabíasidolaúnicavíctimadelaccidente.(Alagentesiempreleparecenmástrágicaslasmuertesengrupo.)Lizpisaunpocomáselacelerador.
—Elizabeth, para ir a casa has de tomar la siguiente salida. Te sugeriría que disminuyeras lavelocidadytecolocarasenelcarrilderecho—dicesuabuela.
Liz lo hace sinmirar por el retrovisor.Al ponerse en el carril derecho, le corta el paso a undeportivonegroyhadeacelerarparaqueelcochenoledépordetrás.
—¡Elizabeth!,¿habíasvistoesecoche?—dicesuabuela.—¡Notepreocupes,estátodobajocontrol!—respondeellacontirantez.¿Yquémásdasisoyuna
malaconductora?Sediceasímisma.¿Acasocambiarálasituación?Yanopuedomorirme.Cuandoestásmuerta,yanopuedesestarlomás,¿verdad?
—Éstaeslasalida.¿Estásseguradequeteencuentrasbienparaconducir?—Me encuentro perfectamente—respondeLiz. Sin reducir la velocidad, se dirige con torpeza
hacialasalida.—Teaconsejaríaquefuerasmásdespacio,estasalidaesunpocotraicionera…—¡Meencuentrobien!—gritaLiz.
—¡CUIDADO!EnesemomentoLizchocacontralavallaprotectoradecementoquehabíaenlasalida.Elcoche,
alserunpesadoanimalprehistórico,emiteunfuerteruidoalcolisionar.—¿Tehashechodaño?—lepreguntasuabuela.Liznoresponde.Cuandovelapartefrontaldelvehículo,nopuedeevitarecharseareír.Elcoche
apenas ha sufrido daños, sólo se ha abollado un poco, eso es todo. Un milagro, piensa Lizamargamente.¿Porquélaspersonasnoserántanresistentescomoloscoches?
—Elizabeth,¿teencuentrasbien?—lepreguntasuabuela.—No—lerespondeella—.Estoymuerta,¿onotehabíasenterado?—Quierodecirsitehashechodaño.Lizsetocalosrestosdelospuntosquetieneporencimadelaoreja.Sepreguntaaquiénhadeira
ver para que se los quiten. Ya le habían dado puntos en otra ocasión (cuando se cayó mientraspatinabaalosnueveaños,lalesiónmásgravequehabíatenidoapartedeésta)ysabíaquelasheridassóloestán totalmente curadasdespuésdeque tequitan lospuntos.Depronto,noquiereque se lossaquen.Por extrañoque parezca, esos pequeños restos de hilo la tranquilizan.Es lo últimoque lequedadelaTierraylaúnicapruebadequeestuvoalgunavezenella.
—¿Tehashechodaño?—lepreguntadenuevosuabuelamirándolaconexpresiónpreocupada.—¿Acasolasituaciónseríadiferente?—Sí,porquesitelohubierashechotellevaríaalhospital—respondeBetty.—¿Aquílagentetambiénsehacedaño?—Sí,aunquecualquierlesiónsecuraamedidaquevasvolviéndotemásjoven.—Oseaque aquínada importa, ¿verdad?Quierodecir quenada cuenta.Tododesaparece.Nos
volvemosmásjóvenesyestúpidos,esoestodo.—Liztieneganasdellorar,peronoquierehacerlodelantedeBetty,aquiennisiquieraconoce.
—Supongoquepuedesverlodeesemodo.Peroenmiopinióncreoqueseríaunpuntodevistamuyaburridoylimitado.Megustaríaquenovieraslascosasdeunaformatanpesimista,almenosantesdehaberpasadoundía en este lugar. ¿Estabas intentandoquenosmatásemos?—lepreguntarodeándolelabarbillaconlamanoyhaciéndolegirar lacabezaparapodermirarladirectamentealosojos.
—¿Podríaconseguirlo?—No,querida—respondesuabuelanegándoseloconlacabeza—,peronohassidolaprimeraen
intentarlo.—¡Noquieroviviraquí!—gritaella—. ¡Noquieroestaraquí!—peseaque intentacontenerse,
vuelveaecharseallorar.—Yalosé,yalosé,cielo—leconsuelasuabuelaabrazándolayacariciándoleelpelo.—Mimadretambiénmeloacariciabaasí—diceLizapartándose.Sabequesuabuelalohacepara
tranquilizarla, pero no puede evitar sentir una horrible sensación, como si su madre le estuvieratocandoelpeloenelmásallá.
LaabuelaBettylanzaunsuspiroyabrelapuertadelasientodelpasajero.—Yoconduciréduranteeltrayectoquenosqueda—dice.Suvozsuenacansadaytensa.—Vale—respondeLizconfrialdad—.¿Sabes?Normalmentenoconduzco tanmalnisueloser
tanhipersensible—añadealcabodeunmomentoconunavozmásdulce.—Loentiendoperfectamente—respondesuabuela—.Yalosuponía.
Mientrasseacomodaenelasientodelpasajero,Lizsospechaquepasaráunciertotiempoantesdequesuabuelaledejeconducirdenuevo.Peronolaconoceyseequivoca.
—Siquieres,teenseñaréahacerlaeleyaaparcarenparalelo—diceenesemomentosuabuelavolviéndosehaciaella—.Noestoysegura,perocreoqueaquípuedessacarteelcarnédeconducir.
—¿Aquí?—preguntaLizconincredulidad.—Sí,aquí,EnOtroLugar—lerespondedándoleunaspalmaditasenlamanoantesdeponeren
marchaelcoche—.Cuandoquierasqueteenseñe,dímelo.Lizapreciaelgranesfuerzoquesuabueladebehaberhechoparaofrecerseaenseñarlaaaparcar
y a hacer la ele, pero lo que ella de verdad quiere no es aprender a hacer la ele ni a aparcar enparalelo,sinoterminarlasclasesdeconducir.SacarseelcarnéexpedidoenMassachusetts.Conducirsin rumbo fijo con sus amigas los fines de semana y descubrir las misteriosas y desconocidascarreterasdeNashuayWatertown.Poderiracualquierpartesinsuabuelaosinningunaotrapersona.Pero sabe que nunca podrá hacerlo. Porque se encuentra aquí, EnOtroLugar, ¿y de qué sirve uncarnédeconducirsielúnicolugardondepuedesutilizarloeséste?
Eldespertar
UntaxiaparecedeprontoatodapastillayLizvuelaporlosaires.Seguroquevoyamorir,piensaella.
Se despierta en la habitación del hospital, su visión es borrosa y lleva la cabeza vendada. Suspadresestándepiejuntoasucamaconunasoscurasojeras.
—¡Oh,Lizzie!Creíamosquetehabíamosperdido—exclamasumadre.Dossemanasmástarde,elmédicoleretiraelvendaje.Apartedelospuntosenformadearcoque
lleva sobre la oreja izquierda, se siente como nueva. Elmédico cree que es la recuperaciónmásincreíblequehavistoentodasuvida.
Lizvuelvealinstituto.Todoelmundoquiereoírlecontarsuexperienciacercanaalamuerte.—Nomeresultafácilhablardeella—diceLiz.Suscompañeraspiensanquesehavueltomás«profunda»desdequehatenidoelaccidente,pero
laverdadesquenisiquieraseacuerdadeél.Eldíaquecumpledieciséis añosapruebael examendeconducir sin cometerningún fallo.Sus
padreslecompranuncochenuevo.(Noquierenquevayamásenbicicleta.)Lizrellenalasolicituddeingreso a la universidad. Escribe el ensayo que piden para ser admitido en ella, trata sobre elaccidentequehatenidoconeltaxiyelgiroquesuvidahadadoaraízdeél.LaaceptanenelInstitutode Tecnología deMassachusetts, el lugar donde ella prefería estudiar. Liz se gradúa en él comobiólogay luego se inscribe en laFacultaddeVeterinariadeFlorida.Undía conoce aunchico, laclasedechicoconelqueseimaginapasandoelrestodesuvidaeincluso…
—¡Despierta, Elizabeth, ya es hora de levantarte!—le dice su abuela a las siete de lamañanasiguiente,interrumpiendolabonitahistoriaconlaqueestabasoñado.
—Déjame dormir—susurra Liz en voz baja para que su abuela no pueda oírla tapándose lacabezaconlasmantas.
—Hoyvaahacerundíaprecioso—observaBettyabriendolascortinas.Lizbostezabajolasmantas.—Siestoymuerta,¿porquédiantreshedelevantarme?—exclama.—¡Quéformamásnegativadever lascosas,Liz!EnOtroLugarhayunmontóndecosaspara
hacer—dicesuabuelaabriendolasotrascortinas.LahabitaciónenlaqueLizseencuentra(siesquepuede considerar como «suya», ya que su habitación está en la Tierra) tiene cinco ventanas. Le
recuerda a un invernadero.En realidad lo que ella quiere es una habitaciónpequeñay oscura conpocasventanas (mejorsino tieneninguna)yparedesnegras,algomásadecuadoparasusituaciónactual.Bostezamientrasobservaasuabueladirigiéndosehacialaterceraventana.
—Nohacefaltaqueabrastodaslascortinas—observaLiz.—¡Megustaqueentreunmontóndeluz!¿Atino?—respondesuabuela.Lizponelosojosenblanco.Nopuedecreerquehayadepasarelrestodesuvidaviviendoconsu
abuela, que es, sin duda, una persona mayor. Aunque por fuera parezca joven, piensa queprobablementeescondetodaclasederarascostumbrestípicasdelaspersonasmayores.
LizsepreguntaaquésereferíasuabuelaaldecirqueEnOtroLugarhabía«unmontóndecosasparahacer».EnlaTierraellaestabaconstantementeocupadaestudiando,buscandounauniversidad,eligiendo una carrera y haciendo todas esas otras cosas que los adultos que había en su vidaconsiderabantanimportantes.Peroahora,desdequehabíamuerto,todoloquehabíaestadohaciendoenlaTierraleparecíaabsurdo.Desdesupuntodevista,ahorayasabíalarespuestaalapreguntadecómo sería su vida. La historia de su vida es breve y absurda: había una vez una chica que fuearrolladaporuncocheyquemurió.Ycoloríncoloradoestecuentosehaacabado.
—Tieneslacitadeaclimataciónalasochoymedia—lerecuerdasuabuela.—¿Dequéva?—lepreguntaLizsacandolacabezadedebajodelasmantas.—Esunaespeciedeorientaciónparalosqueacabandemorir—dicesuabuela.—¿Puedo ir con él?—preguntaLiz señalando su pijama blanco.Ha estado llevándolo durante
tantotiempoquemásbienhabríaquellamarlogris—.Comosupondrásnotuvetiempodehacerlasmaletas.
—Puedes ponertemi ropa. Creo que usamos lamisma talla, aunque tú probablemente seas unpocomáspequeñaqueyo—observasuabuela.
Liz echa un breve vistazo a su abuela: tiene unos pechosmás grandes que los de ella, pero esdelgadaydesumismaaltura.¡Quéextrañoesutilizarlamismatallaquemiabuela!,piensa.
—Eligeloquequierasdelarmario,ysinecesitasqueteloacorteotelociñaunpoco,dímelo.Nosésitehedichoqueaquísoymodista—lecomenta.
Lizniegaconlacabeza.—Puesasíes,meayudaadistraerme.Comoaquí lagentesueleempequeñeceramedidaquese
vuelvemásjoven,siemprenecesitaquelearreglenlaropa.—¿Esquenopuedencomprarseropanueva?—inquiereLizconelceñofruncido.—¡Claroquesí,cielo!,noqueríadecireso.Sinembargo,heobservadoqueaquíseaprovechan
más las cosas, en todas partes. Y también confecciono nuevas prendas de vestir. De hecho, estaactividadmegustamásquearreglarlaropa.Esmáscreativa.
Liz,aliviada,asienteconlacabeza.Laideadellevarlamismaropaelrestodetuvidaesunadelascosasmásdeprimentesenlasquehapensadoúltimamente.
Después de darse una ducha (que a ella le parece tanmaravillosamente agradable como las de laTierra),seenvuelveenunatoallaysedirigealarmariodesuabuela.
Elarmarioesgrandeyestábienordenado.Lasropasdesuabuelaparecencarasybienhechas,pero sonunpoco teatralespara sugusto: casquetesde fieltro,vestidospasadosdemoda, capasdeterciopeloybroches,bailarinas,plumasdeavestruz,zapatosdecharoldetacónalto,mediasdemalla
y prendas de piel. Liz se pregunta adónde va su abuela con esas prendas.Y luego si tendrá algúntejanoporahí,yaqueloúnicoqueleapeteceponersesonunostejanosyunacamiseta.Albuscarporelarmario,lomásparecidoqueencuentraaunostejanossonunospantalonestipomarinerodecolorazulmarino.
Totalmente frustrada, se sientabajoel estantede los jerseys.Recuerdaeldesordenadoarmarioque tenía en casa con sus doce tejanos. Se pasó mucho tiempo recorriendo las tiendas paraencontrarlos.Antesdedarconellos,setuvoqueprobarmuchosotros.Alpensarqueyanolostiene,leentranganasdellorar.Sepreguntaquélesocurriráahoraaesostejanos.Secubreelrostroconlasmanosysetocalospuntosquellevaencimadelaoreja.Enestelugarinclusoresultadifícilvestirse,piensa.
—¿Hasencontradoalgoqueteguste?—lepreguntasuabuelaacercándosealarmarioalcabodevariosminutos.EntodoestetiempoLiznosehamovidodellugarenelqueestásentada.
Levantalacabezamirandoasuabuela,peronoleresponde.—Sécómotesientes—señalasuabuela.¡Sí,claro!,piensaLiz.—Estáspensandoquenoesasí,perodealgúnmodosíquelosé.Moriraloscincuentanoestan
distintodemoriralosquincecomocrees.Aloscincuentaaúntepuedegustarhacermuchascosasytenerunmontóndeactividadesdelasqueocuparte.
—¿Dequéfalleciste?—inquiereLiz.—Decáncerdemama.Enaquellaépocatumadretellevabaensuseno.—Yalosé.Suabuelaesbozaunatristesonrisa.—Por eso me alegro de poder conocerte ahora.Me entristeció mucho no llegar a conocerte.
Ojalánoshubiéramosconocidoenunascircunstanciasalgodistintas—añadesacudiendolacabeza—.Creoquequedarásmuyguapaconestevestido—dicemostrándoleunoestampadodefloresquenoesparanadadelestiloderopadeLiz.
Éstaledicequenoconlacabeza.—¿Yéste?—preguntasuabuelaseñalandounjerseydecachemir.—Sitedalomismo,prefieroponermemipijama.—Locomprendoysindudanoseráslaprimeraquehaidoalacitadeaclimataciónvestidacon
unpijama—leasegurasuabuela.—Turopa,sinembargo,esmuybonita.—Podemos ir a comprar ropa nueva—añade su abuela—. Te la iba a comprar yo, pero no
conocíatusgustos.Laropaesalgomuypersonal,almenosparamí.Lizseencogedehombros.—Cuando te apetezca ir a comprarla, te daré el dinero. Sólo tienes que pedírmelo—dice su
abuela.PeroahoraaLizlaropayanolehaceilusiónydecidecambiardetema.—Apropósito,meheestadopreguntandocómodebíallamarte.Meparecerarollamarteabuela.—¿QuétepareceBetty?—Vale—respondeellaasintiendoconlacabeza.—¿Ycómoquieresquetellameyo?—lepreguntasuabuela.—Mamá y papá me llaman Lizzie… Bueno, me llamaban—puntualiza ella—, pero creo que
prefieroqueahoramellamesLiz.—Deacuerdo—dicesuabuelasonriendo.—Nome encuentro bien. ¿Puedo quedarme en la cama y cambiar la cita de aclimatación para
mañana?—preguntaLiz.Ledueleunpocolaclavículadebidoaltirónqueleprodujoelcinturónalchocarcontralavalla,perosobretodoselodiceporquenotieneganasdehacernada.
—Losiento,cielo,perotodoelmundohadeiralacitadeaclimataciónaldíasiguientedellegaraestelugar—señalasuabuelasacudiendolacabeza—.Nadieselibradeello.
Liz se aleja del armario y mira por la ventana del dormitorio de su abuela, que da a unasilvestrado jardín. En él reconoce rosas, lirios, espliego, girasoles, crisantemos, begonias,gardenias,unmanzano,unnaranjo,unolivoyuncerezo.Liz sepreguntacómopuedehaber tantavariedaddefloresyfrutasentanpocoespacio.
—¿Estujardín?—preguntaLiz.—Sí—respondesuabuela.—Amamátambiénlegustalajardinería.Bettyasienteconlacabeza.—Olivia y yo solíamos ocuparnos del jardín, pero una de las cosas en las que nunca nos
poníamos de acuerdo era en lo que queríamos plantar en él. Ella prefiere plantas útiles como lascoles,laszanahoriasylosguistantes.Yamíencambiomeencantanlosaromasdulcesyloscoloresvivos.
—Esmuybonito—diceLizcontemplandounamariposamonarcaposándoseenunhibiscorojo—.Esasilvestrado,peroesbonito—lamariposabatelasalasysealeja.
—Yaséqueprobablementetendríaquepodartodaslasplantaseinstaurarunpocodeordenenél,peronuncaconsigopodarunrosalocortaruncapullo,medapenahacerlo,¡lavidadeunaflorestancorta!Metemoquemibonitojardínesundesastre—añadeBettyriendo.
—¿Estásseguradequenoquieresllevartúelcoche?—lepreguntasuabuelamientrassedirigenalRegistroparaasisitiralacita.
Lizledicequenoconlacabeza.—Nodejesqueelpequeñoaccidentequetuvisteayerconelcochetequitelasganasdeconducir.—Prefiero que lo lleves tú—dice Liz con terquedad—, de todosmodos voy a volvermemás
jovencadadía.Esmejorquemeacostumbreaviajarenelasientodelpasajero.Betty laobservaporel retrovisor.Lizestásentadaenelasiento traserovestidaconelpijamay
conlosbrazoscruzadossobreelpecho.—Sientolavisitaguiadadeayerporlanoche—dicesuabuela.—¿Aquéterefieres?—lepreguntaLiz.—Aquemeexcedí.Queríaque tegustaraeste lugar.Perocreoquehablédemasiadoyqueme
comportécomounaidiota.Lizloniegaconlacabeza.—Lohicistemuybien.Sóloque…—suvozseapaga—,noteconozco,esoestodo.—Yalosé—respondesuabuela—,peroyosíteconozcounpoco.Heestadoviendogranparte
detuvidadesdelasCO.—¿QuésonlasCO?
—LasCubiertasdeObservación.LoslugaresdesdelosquepuedescontemplarlaTierra.Duranteunosespaciosdetiempolimitados,claro.¿Teacuerdasdecuandovistetufuneraldesdeelbarco?
—Sí, a través de los prismáticos—contesta Liz. Mientras ella esté viva (¿muerta?), nunca loolvidará.
—Pues En Otro Lugar hay Cubiertas de Observación en distintos puntos. En la cita deaclimatacióndehoyteloexplicarán.
Lizasienteconlacabeza.—Porcuriosidad,¿hayalgunapersonaenespecialalaquedeseesver?—preguntasuabuela.Claro,Lizechademenosasufamilia.PeroenciertomodoaquienmásechaenfaltaesaZooey,
sumejor amiga. Se pregunta cómo será el vestido que se ha comprado para el baile de gala delinstituto.¿Iráaunqueellahayamuerto?Zooeynisiquierasehabíapreocupadodeacudirasufuneral.Ahoraque lopiensa, lepareceunagroseríaque sumejoramiganohayaasistidoaél, sobre tododadaslascircunstancias.Despuésdetodo,siZooeynolehubierapedidoquelaacompañaraalcentrocomercialparairaverlosestúpidosvestidos,eltaxinuncalahabríaatropellado.Ysieltaxinolahubiera atropellado, no habríamuerto, y… Si sigues con los síes vas a volverte loca, piensa Lizlanzandounsuspiro.
—Aquí es donde tienes la cita—dice de pronto Betty sacando el brazo por la ventanilla paraindicarleellugaryprovocandoqueelcochesedesvíeunpoco—.SellamaelRegistro.Ayeryateloseñalé,peronosésimeestabasescuchando.
AlmirarporlaventanillaLizveunaconstruccióngigantescamásbienfeúcha.Eseledificiomásalto que ha visto en toda su vida, parece elevarse hasta el infinito. Pese a su tamaño, el Registroparece haber sido construido por un niño: las paredes, las escaleras y las otras incorporacionessobresalen en unos inverosímiles ángulos, el edificio da la impresión de haberse construido sinplanearse,escasicomolosfuertesimprovisadosqueellasolíaconstruirconsuhermano.
—Esbastantefeo—observaLiz.—Antes eramás bonito—afirmaBetty—, pero en el edificio hay tanta actividad que ha de ir
ampliándosesincesar.Losarquitectos tienenqueestar ideandoconstantementecómohacerloy losquetrabajanenlasampliacionesdebenllevaracabosincesaresoscambios.Hayquiendicequeeledificiopareceestarcreciendoantenuestrospropiosojos.
Bettygirahacia la izquierdaparadirigirsea lazonadelparkingdelRegistro.Aparcaelcochedelantedeunadelasmuchasentradasdeledificio.
—¿Quieres que te acompañe? Esmuy fácil perderse en unamole como ésta—le pregunta suabuela.
—No,prefieroirsola,sinoteimporta—respondeLiz.Bettyasienteconlacabeza.—Vendréarecogertehacialascinco.Intentapasártelobien,cariño.
Uncírculoyunalínea
Aunque Liz ha llegado al Registro con quince minutos de antelación, tarda casi venticinco enencontrar la oficina de aclimatación. Los planos que hay junto al ascensor hace mucho que hanquedado obsoletos y ninguno de los empleados del edificio parece ser capaz de indicarle bien elcamino.Cada vez queLiz intenta volver sobre sus pasos, descubre nuevas puertas a pesar de quejuraríaquenoestabanahíhacecincominutos.
Eligealazar(yaqueahoracreeenelpoderdelazar,comotodoslosquemuerendeformasúbita)una de las nuevas puertas. Al abrirla se encuentra con un pasillo que da a otra puerta. Al leer elinformal letreroquecuelgadeella, vequedetrásde lapuerta sehalla concarácterprovisional laoficinadeaclimatación.
Lizabrelapuerta.Enelinteriordescubreunazonaderecepcióndelomáscomúnllenadegente.(TalcomoBettylehabíadicho,muchaspersonashanidoenpijama.)Sinofueraporeldescoloridoymásbienmacabropósterquehayenlapared,habríacreídoencontrarseenlaconsultadeunmédico.Enelpósterapareceunasonrientemujerconelpelocanosoincorporadaenunataúddecaoba.Enélpone:
SÍ,ESTÁMUERTO,¿YAHORAQUÉ?Laoficinadeaclimataciónestáaquíparaayudarle.
Lamujerdeaspectodesagradabledelmostradordeenfrentelerecuerdaaladelpóster:tambiéntieneun aspectodescolorido, anticuadoydeprimente.Vapeinada conunmoño alto al estilo de ladécada de 1960 y su piel tiene un tono verdoso.En elmostrador hay una placa que poneYETTABROWN.
—Perdone,tengounacitaa…—diceLiz.Yetta Brown se aclara la garganta y le indica con la cabeza una campana que hay sobre el
escritorio.Juntoalacampanahayunletreroquedice:¡Sideseaqueloatiendan,toquelacampana!Lizobedece.YettaBrownseaclaradenuevolagargantaymuestraunasonrisadelomásforzada.—Sí,¿enquépuedoayudarla?—Tengounacitaalasocho…
LafalsasonrisadeYettasetransformaenunceñofruncido.—¿Por qué no me lo ha dicho antes? ¡Llega cinco minutos tarde para el vídeo! ¡Apresúrese,
apresúrese,apresúrese!—Losiento—sedisculpaLiz—,nopudeencontrar…—¡Notengotiempoparasusdisculpas!—lainterrumpeYetta.ALiznolegustaquelainterrumpan.—Noteníaporquéinter…—¡Notengotiempoparasandeces!—exclamaYetta.La mujer acompaña a Liz a una polvorienta y oscura habitación en la que se distingue un
maltrechovídeoyun televisor.En lahabitación,quemásbienpareceunarmarioparamaterialdeoficina,apenashayespacioparaunasilla.
—Vendré a buscarla cuando se haya terminado el vídeo —dice Yetta—. ¡Ah! ¡Y espero quedisfrutedeél!—añadedemaneramecánicaalsalir.
Lizsesientaenlaúnicasilla.Elvídeoescomounodeesosáridosvídeosinformativosquedevezencuandolespasabanenelnovenocursooenlasclasesdeconducirdeldécimo,sobretemascomola«educaciónsexual»yla«seguridadvial».
Lacintaseiniciaconunloroparlantededibujosanimados.«SoyPolly—exclamaelloro—.Siestás viendo este vídeo significa que estás ¡muerto,muerto,muerto! ¡Bienvenido, difunto! ¿Cómoestás?»LizpiensaquelaanimaciónesdebajacalidadyPolly,unpelmazo.
Elvídeo,coneldetestablePollycomoguía,cubrepartedeloqueLizyBettyyahanhablado:decómotodosloshabitantesdeEnOtroLugarvanvolviéndosecadavezmásjóveneshastaconvertirseenunosbebés,ycómolosbebés,cuandotienensietedías,viajanenelbarcoquedesciendeporelRíopararegresaralaTierra.«EnlaTierra—graznaPolly—,lagentevaenvejeciendodesdeeldíaquenace hasta que, en unmomento indeterminado del futuro, muere, muere, muere.» En ese instanteapareceenelvídeounbebédedibujosanimadosque,trasconvertirseenunniño,enunadultoyenunanciano,acabaalfinalmuriendo.«Encambio,EnOtroLugar—prosiguePolly—,lavidaesmáslimitada:alllegaraquídespuésdemorir,vashaciéndotemásjovencadavezhastaconvertirteenunbebé.»Elancianodelosdibujosanimadosseconvierteahoraenunadulto,enunniñoydespuésenun bebé. «Cuando el adulto se vuelve un bebé de nuevo, está listo para ser enviado de vuelta a laTierra,dondeelprocesoempiezadenuevo»,graznaPolly.Elbebédedibujosanimadosseconvierteentoncesenunniño,enunadultoyenunanciano.Lizimaginaeltranscursodesuvidailustradoenformadedibujosanimados.Mividasólodaríaparalosfotogramasquehayentreelniñoyeladulto,piensa.Yluegosepreguntasienesteprocesoloschicossiguensiendosiemprechicos,silaschicassiguensiendosiemprechicasysilosperrossiguensiendosiempreperros.
ElvídeotambiénabordauntemasobreelqueLizyBettynohanhabladoconmuchodetalle.Lizaprendeacalcularahoralaedadquetiene:hadeañadirasuedadactuallacantidaddeaños
quellevaEnOtroLugar.Demodoqueahora tiene15-0años.Yaaprender tambiénacalcularpormediodeunliosocálculoquesunuevocumpleañosesel4deenero,alsumarlacantidaddedíasquehanpasadodesdelafechadesuúltimocumpleañosaldíadesumuerte.
TambiénaprendequeEnOtroLugarnonacenimuerenadie.Sushabitantesavecesenfermanyselesionan,peroaquíeltiempotodolocura.Poresolasenfermedadesnosonningúnproblema.
YseenteradequeestáprohibidoentrarencontactoconloshabitantesdelaTierra(«¡Nopuedescontactarconellos!¡Deningunamanera!»,graznaPollysacudiendoenérgicamentesupicoamarillo
de un lado a otro), pero uno puede, si lo desea, contemplar la Tierra desde las Cubiertas deObservaciónencualquiermomento.LasCubiertasdeObservación,comolasquehayenelNilo,quenosólosirvenparaverelfuneraldeuno,seencuentranenlosbarcosdelpuertoyenlosfarosquehayesparcidosporellugar.PorsólouneternimLizpuedeverdurantecincominutosaquienquieraosealoquesealoquedeseeverenlaTierra.DecidepedirleaBettyquelalleveestamismanochealaCubiertadeObservaciónmáscercana.
También aprende que aquí todo el mundo ha de elegir un pasatiempo. Por lo que ha podidodeducir,unpasatiempovieneasercomountrabajo,laúnicadiferenciaesquesesuponequelohacesporque tegusta.Lizsacude lacabezaenestapartedelvídeo.¿Cómopuedesaberella loquedeseahacer?¡Yademássólotienequinceaños,aúnnohaelegidounaprofesión!
Pollyprosigueexplicandoagritosladefiniciónoficialdelapalabraaclimatación:«AclimatacióneselprocesoatravésdelcuallosqueacabandemorirseconviertenenresidentesdeEnOtroLugar.Asíque¡bienvenido,bienvenido,bienvenido,difunto!»
YLizaprendemuchas,muchas,muchasotrascosasdelasqueestáseguraseolvidará.El final del vídeo trata sobre todo de algunas cuestionesmetafísicas de EnOtro Lugar.Habla
acercadequelaexistenciahumanaescomouncírculoyunalíneaalmismotiempo.Esuncírculoporquetodoloqueeraviejosevuelvenuevoytodoloqueeranuevosevuelveviejo.Yunalínea,porqueelcírculoseextiendeindefinidamente,conunainfinitacontinuidad.Lagentemuere.Nace.Yvuelveamorir.Cadanacimientoycadamuerte soncomounpequeñocírculo,y la sumade todosesoscírculosconstituyenunavidayunalínea.DurantelaexplicaciónsobrelaexistenciahumanaLizsequedadormidasinquerer.
SedespiertasobresaltadaalcabodepocosminutosaloírlavozdeYettaBrownamonestándola:—¡Espero que no haya estado dormida todo el tiempo! ¡Vamos, levántese! ¡Levántese ahora
mismo!—Losiento—sedisculpaLizponiéndoseenpiedeunsalto—.Esqueelhechodehabermuerto
mehadejadoagotaday…—¡No soy yo sino usted la que se está perjudicando con su conducta! —la interrumpe Yetta
Brown y luego lanza un suspiro—. Ahora tiene la cita de aclimatación con Aldous Ghent, suorientador.ElseñorGhentesunhombremuyimportante,asíqueesmejorquenosequededormidadurantesuentrevistaconél.
—Nocreoquemehayaperdidodemasiadainformacióndelvídeo,deverdad—sedisculpaLiz.—¡Muybien!Entonces,dígameporquélaexistenciahumanaescomouncírculoyunalínea—le
exigeYetta.Lizseestrujalossesos.—Es un círculo porque, mmm… La Tierra es una esfera, una especie de, mmm… ¿círculo
tridimensional?Yettasacudeindignadalacabeza.—¡Yamelosuponía!—Mire, siento haberme quedado dormida —dice Liz hablando muy deprisa para evitar ser
interrumpida—.¿Quizápodríaverelfinaldelvídeodenuevo?YettaBrownlaignora.—Nos quedamucho por hacer hoy, señoritaHall. Las cosas le iránmuchomejor si consigue
mantenersedespierta.
—Ésta esElizabethMarieHall, señorGhent—diceYettapronunciandoel nombredeLiz como sifueratandesagradablecomolapalabragingivitis.AldousGhentlevantalamiradaalverlasentrarensudespacho.
—Gracias,señoritaBrown—Yettaprácticamenteledaconlapuertaenlasnaricessindignarseresponderle—.¿Quizánomehaoído?Creoqueestáunpocosorda.Siempremeestáinterrumpiendo.
Lizríeamablemente.—Hola,ElizabethHall.SoyAldousGhent, tuorientadordeaclimitación.Siéntate,por favor—
dice señalándoleuna silla frente a suescritorio.Pero la silla está cubiertadepapeles.En realidad,todosudespachosinventanasestárodeadodepapeles.
—¿Puedosacarestosexpedientesdelasilla?—preguntaLiz.—¡Oh,sí,porfavor!—respondeAldoussonriendoyluegoechaunatristemiradaasuabarrotado
despacho—. Tengo demasiado trabajo administrativo. Me temo que estos papeles están llenos depapeleo.
—Quizánecesitaundespachomásgrande—sugiereLiz.—Hacemuchoquemeestánprometiendounonuevo.Esloqueconmásansiasespero,apartede
quemevuelvaacrecerelpelo—observadándoseunascariñosaspalmaditasensupeladacalva—.Empecéaperderloalosveinticincoaños,oseaquesupongoqueaúnhabrédeesperarunostreintayseisañosmásparaquevuelvaacrecermedeltodo.Perolotristedelcasoesquealconvertirnosenbebésvolvemosaperderelpelocasiporcompleto.Oseaque,porloqueveo,sólodisfrutarédeélduranteveinticuatroañosantesdequesemevuelvaacaer.¡Quéselevaahacer!—exclamaAldouslanzandounsuspiro.
Lizsepasalosdedosamododepeineporelnuevopeloqueleestácreciendo.—Elañopasadomevolvieronasalirlosdientes.¡Fueunaauténticatortura!Mimujernopodía
pegarojoporlasnochesporculpademislloriqueosygemidos—leconfiesaAldousmostrándolelosdientes—.Estavez losvoyacuidarbien.Lasdentaduraspostizassonunasco.Uncoñazo.Sonmmm…
—¿Unamierda?—sugiereLiz.—Sí,unamierda—diceAldousechándoseareír—,deveras.Elruidoquehacescuandocomes
conellasescomoeldeunaventosa.En medio del escritorio hay una pila de papeles, Aldous coge con cuidado el expediente de
encima.LoabreypreguntaaLizleyéndoloenvozalta:—¿EresdelasislasBermudasyfallecisteallíenunaccidentemarítimo?—Mmm…,puesno—diceLiz.—¡Disculpa!—exclamaAldouseligiendootrodossier—.Entonces,eresdeManhattanytuviste,
¡oh!,uncáncerdemama.¿Verdad?Lizseloniegaconlacabeza.¡Siapenastienepecho!Aldouseligeuntercerexpediente.—¿Eres deMassachusetts? ¿Falleciste de un traumatismo craneal al tener un accidente cuando
ibasenbicicleta?Lizasienteconlacabeza.Éstasíqueesella.—Bueno—diceAldousencogiéndosedehombros—,almenosfueunamuerterápida.Salvopor
losdíasenqueestuvisteencoma,aunqueprobablementenoteacuerdasdeello.
No,norecuerdanada.—¿Cuántotiempoestuveencoma?—Cerca de una semana, pero ya estabas clínicamentemuerta.Demodo que tus pobres padres
tuvieronquedecidirdesconectartedelamáquina.MimujerRowenayyotambiéntuvimosquehacerlomismoconJoseph,nuestrohijo,cuandoestábamosenlaTierra.Sumejoramigolepegóuntirosinquerermientrasjugabaconunaviejaescopetaqueyoteníaguardada.Fueelpeordíademivida.Sialgunaveztieneshijos…—Aldoussedetienedegolpe.
—Sialgunaveztengohijos,¿qué?—Losiento.Noséporquélohedicho.EnOtroLugarnadiepuedetenerhijos—observaél.Liztardaunosmomentosenasimilarlainformación.PoreltonodevozdeAldous,sabequeél
creequeestanoticialaentristecerá.Peroellanisiquierahapensandoentenerlos.—¿Vesatuhijoahora?—preguntaLiz.Aldousloniegaconunmovimientodecabeza.—No, cuando Ro y yo llegamos aquí, él ya había regresado a la Tierra.Me hubiera gustado
volveraverlo,peronopudoser—diceAldoussonándoselanariz—.Esporlaalergia—sedisculpa.—¿Quéclasedealergia?—inquiereLiz.—¡Oh!—respondeAldous—,soyalérgicoalosrecuerdostristes.Esdelopeorcitoquehay.¿Te
gustaríaverunafotografíadeRowena,mimujer?Lizasienteconlacabeza.—ÉstaesmiRowena—diceconorgullomostrándoleunafotografíaconunmarcodeplatade
unaencantadoraseñorajaponesadelaedaddeAldous.—Esmuyelegante—observaLiz.—Sí,¿verdad?Fallecimoselmismodíaalestrellarseelaviónenelqueviajábamos.—Eshorrible.—No—diceAldous—,enrealidadtuvimosmucha,muchísimasuerte.—Yotardémuchotiempoencomprenderquehabíamuerto—leconfiesaLiz—.¿Esnormal?—¡Claro que sí! —responde Aldous tranquilizándola—, cada persona tarda su tiempo en
aclimatarse.Algunas,alllegaraEnOtroLugar,aúncreenestarsoñando.ConozcoaunhombrequeestuvoaquídurantecincuentaañosyluegoregresóalaTierrasinsaberquehabíamuertoentodoesetiempo—añadeencogiéndosedehombros—.Dependedecómounomuera,delaedadquetenga…Dependedemuchosfactoresytodoelloformapartedelproceso.Alosjóvenessobretodooscuestadaroscuentadequehabéismuerto.
—¿Porqué?—Porque tendéis a creer que sois inmortales.Amuchos de vosotros, Elizabeth, ni siquiera os
cabeenlacabezaquepodáismorir.Aldous se dispone a explicarle todas las cosas que deberá hacer en los siguientes meses. Al
parecer,elhechodemorirsecomportamuchomástrabajodelqueLizhabíacreído.Enciertomodo,noestandistintodeiralinstituto.
—¿Tienesalgunaideadecuálpodríasertupasatiempo?—lepreguntaAldous.—Puesno—diceLizencogiéndosedehombros—.EnlaTierraaúnnoejercíaningunaprofesión
porquetodavíaibaalinstituto.—¡Oh,no,no,no!—exclamaAldous—.Unpasatiemponoesuntrabajo.¡Eltrabajotienequever
conelprestigio!¡Eldinero!Encambiounpasatiempoesalgoquehacesparaquetualmasesienta
completa.Lizponelosojosenblanco.—Portuexpresiónyaveoquenomecrees—diceAldous—.Porlovistoestoytratandoconuna
cínica.Ellaseencogedehombros.¿Quiénnoseríauncínicoensusituación?,piensa.—¿HabíaenlaTierraalgunaactividadqueteapasionara?Lizseencogedehombrosdenuevo.EnlaTierraseledabanbienlasmatemáticas,lascienciasy
lanatación(inclusoelveranopasadosehabíasacadoelcarnédebuceo),peronosepodíadecirquesintierapasiónporestasactividades.
—¿Cualquiercosa,algunaenespecial?—Losanimales.Quizáalgoquetengaqueverconlosanimalesolosperros—respondealfinLiz
pensandoenLucy,laqueridaperritaqueteníaenlaTierra.—¡Estupendo! —exclama Aldous—. ¡Estoy seguro de que encontraremos alguna fabulosa
actividadparatirelacionadaconlosperros!—Hedepensarunpocoenello—observaLiz—.Aúntengoqueasimilarmuchascosas.AldouslepidequeleexpliqueunpococómoerasuvidaenlaTierra.Aldisponerseacontarlesu
antigua vida, Liz tiene la sensación de estar hablando de otra persona. Había una vez una jovenllamadaElizabethquevivíaenMedford,Massachusetts.
—¿Erasfeliz?—inquiereAldous.Lizreflexionaunmomentoantesdecontestar.—¿Porquéquieressaberlo?—Notepreocupes.Noesningúntest.Sóloesalgoquehedepreguntarosatodos.Enrealidad,Liznuncahabíapensadoenellohastaahora.Yalnohabérseloplanteado,suponeque
debíaserfeliz,porquecuandoeresfeliznonecesitaspreguntartesiloeresono,¿verdad?Eresfelizypunto,piensaella.
—Supongoquedebíaserlo—respondeella.Yencuantoacabadedecirlo,sabequeescierto.Enesemomentounaabsurdalagrimitaerrantesedeslizaporelrabillodeunodesusojos.Lizselasecarápidamenteconeldorsodelamano.Yluegoapareceotra,yotra,yalcabodeuninstantedescubrequeestállorando.
—¡Vaya,porDios!¡Vaya,porDios!—exclamaAldous—.Losientosimipregunta tehahechollorar—diceexcavandobajounadelaspilasdepapelesbuscandosucajitadepañuelosdesechables.Ibaadarleuno,perodecideofrecerlelacajitaentera.
Lizcontemplalacajitadepañuelosdecoradacondibujosdemuñecosdenieverealizandovariasactividades navideñas. Uno de los muñecos está metiendo felizmente en el horno una bandeja degalletasdejengibreenformadesonrienteshombrecitos.Hornearestaclasedegalletas,ocualquierotra cosa, es un suicidio para un muñeco de nieve, piensa Liz. ¿Por qué lo hace si sabe que sederretirá al acercarse al horno? ¿Puede un muñeco de nieve incluso comer? Se queda mirandopensativamentelacajita.
Aldous saca un pañuelo y, poniéndolo en la nariz de Liz, le ordena como si fuera una niñapequeñadecincoaños:
—Suénate.Lizobedece.—Últimamentelloropornada—sedisculpaella.
—Esnormal.HasidofelizenlaTierra.¡Quéasombroso!,piensaLiz.Durantetodoeltiempoquehabíaestado
en ella, nunca se había imaginado ser una chica especialmente feliz. Comomuchas jóvenes de suedad, se había sentido malhumorada y triste por unas razones que ahora le parecían totalmenteabsurdas:pornoserlamáspopulardelinstituto,pornotenernovio,porsuhermanoqueaveceslamolestaba y por sus pecas. En muchos sentidos ahora veía que había estado esperando que leocurrieralamejorpartedelavida:vivirsola,iralauniversidadyconducirsupropiocoche.Peropor finhabíavisto la verdad.Había sido feliz en laTierra.Feliz, feliz, feliz.Suspadres la habíanqueridomucho,sumejoramigahabíasidolachicamáscomprensivaymaravillosadelmundo,enelinstitutonohabíatenidoningúnproblema,suhermanonosehabíaportadotanmalconella,aLucyleencantabadormirjuntoasucamay,sí,suscompañeroslahabíanconsideradounachicaguapa.Lizsedacuentadeque,hastaunasemanaantes, suvidahabíasidouncaminode rosas.Había tenidounaexistenciafelizysencilla,peroahoratodohabíacambiado.
—¿Teencuentrasbien?—lepreguntaAldousenuntonopreocupado.Ellaasienteconlacabeza,aunquenoestébien.—EchodemenosaLucy,miperra—dicepreguntándosejuntoaquiénestarádurmiendoahora.—Porsuertelosperrosvivenmuchomenosquelaspersonas—observaélsonriendo—.Talvez
vuelvasaverlaalgúndía.Aldousseaclaralagarganta.—Queríadecírteloantes.Laspersonasquemueren,comoentucaso,alosdieciséisañosoauna
edadmástemprana,puedenserenviadasantesalaTierra.—¿Aquéterefieres?—inquiereLiz.—AlosjóvenesavecesoscuestamuchoelprocesodeadaptarosalavidadeEnOtroLugaryno
lográis aclimataros. Así que, si quieres, puedes volver antes a la Tierra. Sólo has de exponer tuintencióndehacerloduranteelprimerañoenqueestésaquí.SellamalaCláusuladelEvasor.
—¿Podríaentoncesvolveramiantiguavida?Aldousseechaareír.—¡Oh, no, no, no!—exclama él—. Tendrías que empezar de nuevo como un bebé. Como es
natural, quizá vuelvas con tus padres, pero ellos no te reconocerán ni tampoco tú te acordarás deellos.
—¿Hayalgúnmododevolveramiantiguavida?—Escucha,Elizabeth—lediceAldousmirándolacondureza—.Yanopuedesvolveratuantigua
vida ni tampoco debes intentar hacerlo.Tu antigua vida ha terminado y nunca podrás recuperarla.QuizásoigashablardeunlugarllamadoelPozo…
—¿QuéeselPozo?—leinterrumpeLiz.—Estáterminantementeprohibidoiraél.YahoradejaquetehabledelaCláusuladelEvasor—
añadeAldous.—¿Porquéestáprohibido?Aldoussacudelacabezanegándoseadarlemásexplicaciones.—Loestáypunto.EncuantoalaCláusuladelEvasor…—Nocreoque esté hechaparamí—le interrumpeLiz.Pormásque echedemenos laTierra,
ahoracomprendequeloquemásechaenfaltasonlaspersonasquehaconocidoenella.Perosinovanareconocerla,notieneningúnsentidoregresar.Yademástodavíanoquiereserunbebé.
Aldousasienteconlacabeza.—Porsupuesto,aúntienesunañoparadecidirte.—Loentiendo—Lizhaceunapausa—.Mmm…Aldous,¿puedopreguntarteunacosamás?—¿QuieressabersiDiostienealgoquevercontodoesto,verdad?—inquiereél.Lizsequedamuysorprendida.Aldouslehaleídoelpensamiento.—¿Cómosabíasqueeraesoloqueibaapreguntarle?—Digamosqueyallevovariosañosenestetrabajo—diceélsacándoselasgafasconmonturade
careyy frotándolas en sus pantalonespara limpiarlas—.Dios sigue siendo tal como tú antes te loimaginabas.Nadahacambiado.
¿CómopuedeAldousdecireso?,sepreguntaLiz,yaqueparaellatodohacambiado.—Creo que acabarás descubriendo—prosigue él—quemorir forma parte de vivir, Elizabeth.
Con el tiempoquizá llegues a ver tumuerte comounnacimiento.Considéralo simplemente comoElizabethHall:lacontinuación—observavolviéndoseaponerlasgafas—.¡SantoDios!—exclama—.¿Sabes lahoraquees?Hede llevarte a tiempoalDepartamentode lasÚltimasPalabras, sinoSarahmevaacortarlacabeza.
LasÚltimasPalabras
EnelDepartamentodelasÚltimasPalabrasLizseencuentraconunaeficientemujerquelerecuerdaalamonitoradeuncampamentodeverano.
—¡Hola,señoritaHall!—ledice lamujer—.SoySarahMilesysólonecesitoconfirmarcuálesfuerontusúltimaspalabras.
—Nosésipodrérecordarlas.Mehepasadomuchotiemposinsabersiquieraquehabíamuerto—sedisculpaLiz.
—¡Oh,no tepreocupes!Noesmásqueunaformalidad—respondeSarahconsultandoun librodeltamañodeunaenciclopediaquehueleaviejo—.Puesaquíponequetusúltimaspalabras,omásbientuúltimapalabra,fue«mmm…»
LizesperaqueSarahterminedehablar.Enrealidadsienteunagrancuriosidadporsabercuálesfueron sus últimas palabras. ¿Fueron profundas? ¿Tristes? ¿Patéticas? ¿Desgarradoras?¿Iluminadoras?¿Airadas?¿Horrorizadas?Despuésdeunosmomentosdesilencio,LizsedacuentadequeSarahlaestámirando.
—¿Y?—inquiereLiz.—¿Y?—repiteSarah—.¿Fue«mmm…»?—¿Sifuemmm…qué?—preguntaLiz.—¿Fue«mmm…»laúltimapalabraquedijiste?—¿Meestásdiciendoqueloúltimoquedijefue«mmm…»?—Esoes loqueaquíponeyel libronuncaseequivoca—contestaSarahdandounascariñosas
palmaditasalvolumen.—¡Dios,nopuedocreerquefueratanpatética!—exclamaLizsacudiendolacabeza.—¡Oh!,noestanmala—diceSarahsonriendo—.Heoídopeores.—Ojaláhubieradichoalgomás…—Lizhaceunapausa—.Algomás,mmm…—suvozseapaga.—¡Muy bien! —exclama Sarah después de compadecerse de Liz durante exactamente tres
segundos—.Demodoquesólonecesitoquemeechesunafirmita.—Siyasabes loquedije,¿porquéhede firmarqueésas fueronmispalabras?—preguntaLiz
mosqueadaporqueloúltimoquedijoenlaTierrafue«mmm…».—Nolosé.Sonlostrámitesquehayqueseguiraquí.Lizlanzaunsuspiro.
—¿Dóndetengoquefirmar?Mientrasseva, reflexionasobresusúltimaspalabras.Si loúltimoquedicesalmorirencierto
modo refleja toda tu existencia, entonces mmm… le parece una palabra extrañamente adecuada,porque no significa nada.Mmm… es lo que dicesmientras estás pensando en lo que vas a decir.Mmm…sugiereaalguienaquienhaninterrumpidoantesdeempezarahablar.Mmm…esunachicade quince años arrollada por un taxi delante del centro comercial cuando se disponía a elegir unvestido para una fiesta a la que ni siquiera iba a ir, ¡por Dios!Mmm… Liz sacude la cabeza,haciéndoselapromesadesacarmmm…ytodaslasotraspalabrassinsentido(esto…,espero,¿qué?,pues,supongo,oh,eh,quizá)desuvocabulario.
CuandovuelvealvestíbulodelaOficinadeAclimatación,Lizsealegraalverunacaraconocida.—¡Thandi!Éstasedalavueltayesbozaunagransonrisa.—¿Tútambiénacabasdeconfirmartusúltimaspalabras?Lizasienteconlacabeza.—Porlovistotodocuantodijefue«mmm…»,aunqueestabademasiadohechapolvocomopara
recordarlo.¿Ytúquedijiste?—Pues…—diceThandidudando—,nosésideborepetirlas.—Venga—laanimaLiz—,yotehedicholamía,queporciertonopodíasermásridícula.—¡Vale, te lodiré!Dije:«¡SantoDios!, ¡Flaco, creoquemehanpegadoun tiro en la cabeza!»
Sóloqueademásexclamé«joder»unpardeveces.Yluegolapalmé.Lizsueltaunasrisitas.—Almenosfuistedescriptivayprecisa.Thandisacudelacabezanegándolo.—Ojalánolohubieradicho.Normalmentenosuelohablarasí,peroahoraestapalabraquedará
archivadaparasiempreenellibro.—Venga, Thandi, no te pases. ¡Te acababan de pegar un tiro en la cabeza! Creo que en estas
circunstanciasescorrectodecir«joder».—¡Nomelorecuerdes!—exclamasuamigainterrumpiéndola.EnesemomentoAldousGhentirrumpeenelvestíbulo.—¡Oh!, siento interrumpir vuestra conversación—dice—, pero he de hablar unmomento con
Elizabeth.—¡Notepreocupes!—exclamaThandi—,yoyaestabaapuntodeirme.Mehealegradomuchode
verte—lesusurraaLiz—.Mequedépreocupadapensandoquequizátehabíasquedadoenelbarcoparasiempre.
Lizloniegaconunmovimientodelacabeza.—¿Dóndevivesahora?—lepreguntaLizcambiandodetema.—VivoconmiprimaShelly…Creoqueyatehehabladodeella.—¿Seencuentra…—Lizhaceunapausa—mejorahora?—Sí, gracias por preguntarlo—responde Thandi sonriendo—. Has de venir a vernos. Le he
contadoaShelly todosobre ti.Venavernoscuandoquieras.Ellaescasidenuestramismaedadysiempreesagradablequealguientehagaunavisita.
—Lointentaré—diceLiz.—Esperoqueseamásqueeso—respondeThandidirigiéndosehacialasalida.
—¡Bonitopelo!—observaAldouscontemplandoaThandimientrassealeja.—Sí—asienteLiz.—Elizabeth,acabodetenerunafantásticaidea—diceél—.Antesmemencionastequetegustaría
trabajarconanimales,¿verdad?—Sí.—Hay un puesto libre de trabajo y en cuanto me enteré pensé en ti. «¡Caramba, Aldous, es
providencial!»,medije.¿Loaceptarás?—inquiereplantadoanteellaconunasonrisadeorejaaoreja.—Mmm…¿dequésetrata?—¡Otravezhepronunciadoesapalabra!,piensaLiz.—¡Oh,sí,claro!Dejaquemeocupedeengancharelcaballoalacarreta.Omásbien,lacarretaal
caballo.Supongoqueelcaballovadelantedelacarretaynodetrás.Tengotanpocaexperienciaconloscaballosylascarretas.¡Ah,sí,eltrabajo!PuesesunpuestoenlaseccióndeanimalesdomésticosdelDepartamentodeAclimatación.
—¿Yenquéconsiste?—En realidad se parece al trabajo que hago yo —dice Aldous Ghent—, sólo que habrás de
ocupartedelasmascotasdelaTierraqueacabandemorir.Estoysegurodequeeresperfectaparaesepuesto.
—Mmm… —murmura Liz. ¿Es que no puedo dejar de decir «mmm»?, piensa de nuevo—.Mmm…,pareceinteresante.
—Apropósito,hablascanino,¿verdad?—¿Canino?—inquiereella—.¿Quésignifica«canino»?—El lenguajede losperros. ¡Santo cielo! ¿Aúnno lo enseñanen las escuelasde laTierra?—
Aldousparecerealmentehorrorizadoantetamañaposibilidad.Lizmuevelacabezanegativamente.—¡Quélástima!—exclamaél—,porqueesunadelaslenguasmásbellasqueexisten.¿Sabíasque
tienemásdetrescientaspalabrasparareferirseal«amor»?LizpiensaensudulceLucyquedejóatrásenlaTierra.—No,peronomesorprendeparanada—responde.—Siempremehaparecidoundefectode la educaciónde laTierra elque sólo se enseñea los
niñosacomunicarseconlosdesupropiaespecie,¿nocrees?—observaAldous.—¿El no saber hablar, esto…, canino significa que ya no puedo trabajar en el Departamento
de…?¿Cómodijistequesellamaba?—DepartamentodeAclimatación,enlaseccióndeanimalesdomésticos.Nonecesariamente.¿Se
tedanbienlosidiomas,Elizabeth?—¡Muybien!—mienteLiz.Elespañoleralaasignaturaenlaquepeoresnotassacaba.—¿Estássegura?—lepreguntaélladeandolacabezapensativamente.—Sí,yporsiteinteresasaberlo,cuandoestabaenlaTierraqueríaserveterinaria.—Unamaravillosaprofesión, peropor desgracia, o quizápor suerte, aquí no es necesaria.En
este sitio el tiempoy el descanso lo curan todo.Es unode losmuchosbeneficios de vivir enunacultura en la que uno se va volviendo cada vezmás joven. EnOtro Lugar tampoco haymédicos.Aunquesíhayenfermeras,tantoparalosanimalescomoparalaspersonas,yunabuenacantidaddepsicólogos, terapeutas, psiquiatrasyotrosprofesionalesde la saludmental.Aunque el cuerpo estésano, descubres que lamente…Lamente tiene su propias ideas—diceAldous riendo—.Peromeestoyapartandodeltema.¿Quémedices?¿Tegustaeltrabajo?—lepreguntasonriendo.
AlprincipoLizcreyóquedisfrutaríaconesetrabajo,peroahorayanoestátansegura.¿Dequélesirveprepararseparaunnuevo trabajo (yaprenderademásunanueva lengua) sihadevolvera laTierraalcabodequinceaños?
—Noestoysegura—admiteporfin.—¿Noestássegura?Perosihaceunmomentoparecíastan…—Tienepinta de ser unbuen trabajo—le interrumpeLiz—,pero…—se aclara la garganta—.
Estoypensandoqueantesnecesitounpocodetiempoparamí.Aúnnoheacabadodeasimilarlaideadeestarmuerta.
Aldousasienteconlacabeza.—Es lógico—observa él volviendo a asentir con la cabeza, peroElla se da cuenta de que los
cabeceosdeAldousocultanenrealidadsudecepción.—Nohededecidirlohoy,¿verdad?—preguntaLiz.—No—respondeél—.Notienesporquéhacerlo.Podemosvolverahablardeello lapróxima
semana.Peronoolvidesquequizáselpuestoyanoestévacanteentonces.—Locomprendo—diceLiz.—Hedeavisarte,Elizabeth.Cuantomástardesenempezartunuevavida,mástecostaráhacerlo.—¿Minuevavida?¿Quénuevavida?—lavozdeLizsevuelvedeprontoduraysumiradafría.—Puesésta—diceAldous—,lanuevavidaquetienes.Lizseechaareír.—Estásbromeando,¿verdad?Aunquelallamesvida,noesmásquelamuerte.—Siestonoesvida,¿quéesentonces?—lediceAldous.—MividaestáenlaTierraynoaquí—diceella—.Conmispadresymisamigas.Mividayano
existe.—No,Elizabeth,estásmuyequivocada,nopuedesestarlomás.—Estoymuerta,¡MUERTA!—gritaella.—Lamuertenoesmásqueunestadomental—observaAldous—.HaymuchagenteenlaTierra
quevivesuvidaestandomuerta,perotúprobablementeeresdemasiadojovenparaentenderloquequierodecir.
Sí,piensaLiz,¡esomismo!Oyeelrelojanunciandolascinco.—Hedeirme.Miabuelameestáesperando.—Prométemequeteplantearáslodeltrabajo—legritaAldousmientrasellasevacorriendo.Liznoleresponde.VeelcochedesuabuelaaparcadodelantedelRegistro.Abrelaportezuelay
entraenél.Antesdequeasuabuelaledétiempodedeciralgo,Lizlepregunta:—¿PodríamosirahoraaunadelasCubiertasdeObservación?—¡Oh,Liz,estuverdaderaprimeranocheaquí!¿Noprefiereshaceralgunaotracosa?Podemos
hacerloqueatiteapetezca.—Loquedeverasquieroesveramamá,apapáyaAlvy.YaZooey,mimejoramiga.Ytambién
aalgunasotraspersonas.¿Mellevarás?Bettylanzaunsuspiro.—¿Estássegura,cariño?—Sí,esloquemásdeseodelmundo.—Deacuerdo—diceBetty—.Hayunacercadecasa.
Lavisitaturística
—Siquieresqueteacompañe,dímelo—diceBettydeteniendoelcocheenlaestrechacarreteraqueseextiendealolargodelacosta.
—HacemuchotiempoquenoveoaOlivia.—Mamáesmayorahora—respondeLiz—.Mayorquetú.—¡Qué increíble! ¡Cómo pasa el tiempo! —observa Betty suspirando—. Siempre odié esta
expresión, porque parece como si el tiempo se hubiera ido de vacaciones y pudiera regresar encualquiermomento.Ylade«eltiempopasavolando»también.Aunqueporlovistoeltiempoviajabastante—añadesuspirandodenuevo—.¿Deverdadnoquieresqueteacompañe?
LoúltimoqueLizdeseaesirconsuabuela.—EstaréunbuenratoenlaCubiertadeObservación—respondeella.—Estoslugarespuedenserpeligrosos,cielo.—¿Porqué?—Porquelagenteseobsesionaconellos.Soncomounadroga.Lizcontemplaelfarorojo,rodeadoenlapuntaporunahileradeventanasdecristaliluminadas
conunapotente luz.Lasventanas le recuerdanunosdientes.Nosabríadecirsiel faropareceestarsonriendoogruñendo.
—¿Dóndeseencuentralaentrada?—preguntaLiz.—Sigueelcaminitohastaquelleguesaella—diceBettysacandolamanoporlaventanillapara
señalárselo: un paseo marítimo entablado, cuya madera está ya gris por el efecto del agua y eltiempo,unedelicadamenteelfarorojoconlacosta—.Cuandolleguesalapuerta,tomaelascensorhastaelúltimopiso.AllíesdondeestálaCubiertadeObservación.
Bettysacaelmonederodelaguantera.CogecincoeternimsdelcompartimentodelasmonedasyselosdaaLiz.
—Conestedineropodrásusarlosprismáticosduranteveinticincominutos.¿Tebastará?Lizsequedapensativa,notieneniideadecuántotiempovaanecesitar.¿Cuántotiemponecesita
uno para despedirse de todo y de todas las personas a las que ha conocido? ¿Venticincominutos,pocomásdeloqueduraunacomediasincontarlosanuncios?¡Quiénsabe!
—Sí,gracias—dicecerrandolamanoalrededordelasmonedas.EnelascensorLizsefijaenunaesbeltarubiaconunvestidonegrosueltoquetambiénsedirigea
laCubiertadeObservación.Lamujersollozasilenciosamente,perodeunmodoqueenelfondoesparallamarlaatención.
—¿Seencuentrabien?—lepreguntaLiz.—No,enabsoluto—respondelamujermirándolaconsusenrojecidosojos.—¿Hacepocoqueacabademorir?—Nolosé—respondelamujer—,peroprefieroestarsola,sinotemolesta.Lizasienteconlacabeza.Searrepienteinclusodehaberlepreguntadosiseencontrababien.—Estoyllorandopormividaysoymásinfelizdeloquenuncapodríasimaginar—prosiguela
mujeralcabodeunosmomentoscubriéndoselosojosconunasgafasdesolestiloojosdegato.Conesteaspectotancuidado,siguellorandohastaquelleganalúltimopiso.
LaCubiertadeObservación,oCO,escasicomoladelNilo,sóloquemáspequeña.Lasala,conventanasportodoslados,estárodeadaporunahileradeprismáticosmuybiencuidados.LizadviertequenotodoslosvisitantesdelaCOestántantristescomolamujerdelascensorquelloraba.
Juntoalascensorhayunataquilladecristalenlaqueestásentadaunamujerregordetademedianaedad con una horrible permanente. Al pasar la mujer que llora por el torniquete que separa elascensor de laCO, la empleada la saluda con lamano.Lamujer asiente con la cabeza demaneracortantealtiempoquecontemplaconcoqueteríasupropioreflejoenlataquillaacristalada.
—Esa mujer está enamorada de su sufrimiento —comenta la encargada de los prismáticossacudiendolacabeza—.Aalgunaspersonaslesencantatodoesedrama.Comoveoqueeresnueva—añadevolviéndosehaciaLiz—tesoltarémipequeñorollo.Nuestrohorarioesdesietedelamañanaadiezde lanoche,de lunesaviernes;dediezadocede lamañana, lossábados;yde lassietede lamañana a las siete de la noche, los domingos. Abrimos todos los días del año, incluyendo losfestivos.Conuneternimtienesderechoausarlosprismáticoscincominutosypuedesutilizarlostodoel tiempo que desees. No hacemos descuentos. Tanto si deseas usarlos cinco minutos comoquinientos,elprecioeselmismo.Estosprismáticossoncomolosqueyautilizasteantes.Sólohasdepulsar el botón lateral para cambiar de escena, girar los oculares para enfocar los prismáticos ymoverloshaciaunladooelotrosiesnecesario.Apropósito,mellamoEsther.
—Yyo,Liz.—Acabasdellegarhacepoco,¿verdad,Liz?—lepreguntaEsther.—¿Cómolosabes?—Porquetieneslatraumatizadaexpresióndelosreciénllegados.Notepreocupes,cariño.Sete
pasará,créeme.¿Dequéfalleciste?—Uncochemeatropelló.¿Ytú?—lepreguntaLizcortésmente.—DeAlzheimer,perosupongoqueloquedeverasacabóconmigofuelapulmoníaquecontraje
—respondeEsther.—¿Sufristemucho?—Pueslaverdadesquenomeacuerdo,comoesdesuponer—observaellaechándoseareír.Liz elige los prismáticos número 15, que miran hacia la tierra firme. Después de estar tanto
tiempoenelNilo,estácansadadeveragua.Sesientaeneldurotaburetedemetalymeteuneternimporlaranura.
Lizcontemplaprimeroasufamilia.Suspadresestánsentadosunofrentealotroenlamesadelcomedor.Sumadreparececomosihicieradíasquenohubieradormido.Estáfumandouncigarrillo,apesardehaberlodejadodesdequesequedóembarazadadeLiz.Supadrepareceestarhaciendoel
crucigrama del New York Times, pero no es así. No hace más que trazar la misma respuesta(CHOVINISMO),hastaqueagujereaelpapelconelbolígrafoysigueescribiéndolaeneltapetedelamesa.En la salade estarAlvymiradibujos animados en la tele, y esoquemañana tieneque ir alcolegio.AntessuspadresnuncadejabanaLizniasuhermanomirarlateleporlanochelosdíasdeescuela bajo ningún pretexto. El teléfono suena. La madre de Liz se apresura a cogerlo. En esemomentolaslentesdelosprismáticossecierranemitiendounchasquido.
CuandoLizacabademeterelsegundoeternimenlaranura,sumadreyahacolgadoelteléfono.Alvyentraenelcomedorconuntiestodecerámicasobrelacabeza.
—Soyuncabeza-de-tiesto—anunciaconorgullo.—¡Sácateloahoramismo!—legritasumadre—.¡Arthur,hazquetuhijosecomporte!—Alvy,sácateeltiestodelacabeza—diceelpadredeLizenuntonomesurado.—¡Perosisoyuncabeza-de-tiesto!—insisteAlvy,aunquesuspadresnolesiganeljuego.—¡Alvy,quiereshacermecasodeunavez!—exclamaelpadredeLizponiéndoseserio.—¡Ah,vale!—respondeelniñosacándoseeltiestodelacabezaysaliendodelcomedor.Treintasegundosmás tarde,vuelveaentrarenél.Estavez llevacolgadade laboca lacestade
mimbrequeutilizaronenPascuas.—Zzzoyulachhessa—diceAlvy.—¿Yahoraqué?—lepreguntalamadredeLiz.—Zzzoyulachhesta—repiteelpequeñoconunamejorpronunciación.—Alvy,sácatelacestadelaboca—diceelpadredeLiz—.Nadieteentiende.Elniñoobedece.—Soyunacesta,¿meentiendesahora?—dice.Alvysólosetopaconmiradasvacías.—Comolallevoagarrándolaconlaboca,soyunacesta…ElpadredeLizlequitalacestaconunamanoylealborotaelpeloconlaotra.—TodosechamosdemenosaLizzie,peroéstanoesunaformaderendirhomenajeatuhermana.—¿Porqué?—preguntaAlvy.—Porquelacomediadeobjetossiempresehaconsideradolapeorclasedehumor,hijo—diceel
padredeLizeneltonoqueempleaconsusestudiantes.—¡Perosisoyunacesta!—exclamaAlvylastimeramente—.Comomamá—añade.LaslentessecierranconunchasquidoantesdequeLizpuedaverlareaccióndesumadre.Decide
usarlasiguientemonedaparaveraalgunaotrapersona.EligecontemplaraZooey.Suamigaestásentadaensucama,hablandoporteléfono.Tienelosojosenrojecidosdellorar.—Nopuedocreerquenoshayadejado—diceZooeyporelauricular.Esoyamegustamás,piensaLiz.Almenosalguiensabecómollorarsupérdidaadecuadamente.
Liznopuedeoíralapersonaqueestáalotroladodelalínea,peroeldolordeZooeylacomplacelosuficientecomoparadesearseguirescuchandolaconversación.
—HerotoconJohn.Porquesinomehubierapedidoqueleacompañaraalbailedelinstituto,nohabría quedado con Liz en el centro comercial y ella no estaría…—su voz se apaga—. ¡No!—exclamaZooey tajantemente—. ¡Noquiero ir!Yademásno tengonadaqueponerme…—añadealcabodeunmomentoconunavozmáscalmada,enroscándoseconelpieelcordóndelteléfonoeneltobillo—.Aunquehevistounvestidonegrosintirantes…—eneseinstantelaslentessecierranconunchasquido.
Liz acaba de gastarse sus dos últimos eternims.No está segura de si Zooey irá o no al baile.Durante el tiempo que la ha estado escuchando, su amiga ha llorado dos veces. Las lágrimas deZooeylasatisfacen.(Sólosesienteunpocoavergonzadadeello.)
AlprincipioLizsesientemalporescuchar lasconversacionesdesusseresqueridos,peroestasensaciónledurapoco.Sejustificaasímismadiciéndosequeenelfondoloestáhaciendoporellos.Seimaginacomounángelhermoso,bondadosoygenerosocontemplandoatodoelmundodesde…,¡desdedondequieraqueesté!
Alirseesanochedelfarosabequevaanecesitarmáseternimssiquiereseguirviendoloquesusamigasysufamiliahacen.(Sóloescucharlabreveconversacióndesuamigaporteléfonoyalehacostado tres eternims.) Calcula que para ponerse al día necesitará al menos veinticuatro eternimsdiarios,odoshorasdeCO,locualequivaleacincominutosporcadahoradelavidareal.
—Meharánfaltaalgunoseternimsmás—anunciaLizaBettyduranteelcortotrayectodevueltaacasa—,¿creesquemelospodrásprestar?
—¡Claroquesí!¿Paraquélosnecesitas?—lepreguntasuabuela.—EsquemegustaríaircadadíaalaCOunrato.—¿De veras crees que es una buena idea?—inquiere su abuela mirándola con una expresión
preocupada.ALiz lemolestaesta reacción—.¿No teparecequeaprovecharíasmejorel tiemposipensarasencuálpuedesertupasatiempo?
Perocomoya sehabíapreparado la respuestaque ibaadarle, le respondeconunconvincenteargumento.
—¿Sabes,abuela?,comomemorídeunaformatanrepentina,creoquesipudierahacerlaspacesconlaspersonasdelaTierra,mesentiríamejor.Teprometoquesólovaaserporuntiempo—laexpresión«hacer laspaces» leparecede lomás cursi, pero sabeque los adultos respondena estaclasedepalabras.
Su abuela asiente con la cabeza. Y luego vuelve a asentir en silencio. Sus cabeceos parecenayudarlaasopesarloqueLizacabadedecir.
—VealaCOtodoeltiempoquetehagafalta—diceporfinsuabuela.Yademásaceptadarlemásdinero.
Con los veinticuatro eternims diarios que recibe de Betty, Liz establece una rutina. La CO seencuentralobastantecercadelacasadesuabuelacomoparairandando.Cadamañanallegaalfaroalahoradeabrirysequedahastaquelocierranporlanoche.
Liz sigue llevando el pijama que usó en el Nilo. Lo sigue odiando, pero no quiere ponerseningunaotracosa.Tambiénduermeconél,sóloseloquitadosvecesalasemanaparaquesuabuelapuedalavárselo.
CadadíarepartelasdoshorasdeCOalolargodelajornada,peroavecesdecidederrocharunpar de eternims de golpe.Y si está pasando algomuy interesante en la Tierra, se gasta todos loseternimsdeunatirada.
Normalmenteasíescomopasaeldía:porlamañanamiraasuspadresyasuhermanodurantequinceminutos(treseternims),luegoasusamigasenelinstitutoyasuclasedurantecuarentaycinco(nueveeternims),aZooeyalsalirdelinstitutodurantemediahora(seiseternims)y,porúltimo,usalamediahoraquelequeda(seiseternims)dependiendodeloqueleapetezcaverenesemomento.
ALizleencantacuandoalguienlamencionaenelinstituto.Alprincipiosuscompañerasdeclasehablabandeellamuyamenudo,peroamedidaquevanpasandolosdías(nodemasiados)cadavezhablanmenosdeella.SóloEdward,suexnovio,yZooeyhablandeellaconregularidad.ZooeyyEdward no eran amigos cuando Liz vivía, Zooey incluso la animó a dejar a Edward. Ahora lacomplaceverquesehanvueltotanbuenosamigos.
Lizsabequesufamilianolahaolvidado,peropocasveceshablandeella.Aunquelegustaríaquelohicieranmásamenudo.Sumadrenormalmenteduermeen la camadeLizyaveces incluso seponelaropadesuhija,aunquelevayaunpocoestrecha.Supadre,unprofesordeantropologíaenlaUniversidad de Tufts, ha pedido una excedencia. Y ahora se dedica a mirar los programas deentrevistas día y noche. Justifica su desenfrenado deseo diciéndole a su esposa que estádocumentándose para escribir un libro sobre por qué los programas de entrevistas tienen tantaaudiencia. Pese a la aplastante evidencia de que nadie se divierte con sus bromas, Alvy sigueintentandoentretenera la familiacon sucrípticoypeculiar estilohumorístico.Lizcontemplaa suhermano representando «saliendo del armario», «pescando peces a tiros en un barreño» y«contemplandocómonopasaeltiempo».Elladisfrutasobretodoconlarepresentaciónde«cabeza-de-melón»unavariaciónde«cabeza-de-tiesto»,enlaqueAlvysaleconuncantalupovaciadoenlacabezaysinpantalones.
UndíaLizcontemplaasuspadreshaciendoelamor.Laescenalepareceasquerosayfascinantealmismotiempo.Alterminar,sumadregritaysupadreenciendeeltelevisorparaverlaúltimamediahoradeMontel.Estaescenalecuestamenosdeuneternim.
Despuésdehabervistoasuspadres,Lizpiensaqueprobablementenuncavaahacerelamoryquesevaapasarlossiguientesquinceañossola.
Enlosintermedios,despuésdecontemplarlossegmentosdecincominutosdesuantiguomundo,avecesjugueteaconlospuntosquetieneencimadelaoreja.Nosedecideapreguntarleasuabueladóndepuedeirparaqueselossaquen.Legustasentirquesiguenahí.
VatanamenudoalaCOqueacabaconociendoalosclientesasiduos.Lasancianasqueechanacadahoramásomenosunamiraditaporlosprismáticosmientrastejen
unjersey.Las frenéticas madres jóvenes con su al parecer inacabable cantidad de monedas. A Liz le
recuerdan a las aficionadas a las máquinas tragaperras que vio en Altantic City durante unasvacacionesdeverano.
LosempresariosquemiranporlosprismáticosgritandoinstruccionesasusantiguosempleadoscomosiéstospudieranoírlesdesdelaTierra.ALizlerecuerdanasupadrecuandomiralospartidosdefútbolporlateleyseponeagritarcomounposeso.
Unjoven(algomayorqueella)queacudeunavezalasemana,losjuevesporlanoche.Aunqueseadenoche,nodejaporellodellevargafasdesol.Siempresesientaantelosmismosprismáticos,losnúmero17.E invariablementeacarreaunabolsitadepielquecontienedoceeternimsy losusaduranteunahoraexacta,nimásnimenos.
UnanocheLizdecidehablarconél.—¿Aquiénvienesaver?—lepreguntaella.—¿Cómodices?—inquiereeljovensorprendidovolviéndosehaciaLiz.—ComoacudesalaCOcadajueves,mepreguntabaaquiénveníasaver—leconfiesaella.Eljovenasienteconlacabeza.
—Amiesposa—respondealcabodeunmomento.—¿Noeresdemasiadojovenparaestarcasado?—preguntaella.—Nosiemprefuitanjoven—respondesonriendocontristeza.—¡Quésuerte!—diceLizmientrascontemplacómoél sealeja—.Hastael juevesqueviene—
susurrademodoquenopuedaoírla.Como Liz visita ahora a diario la CO y se pasa todo el día en este lugar, se da cuenta de lo
incómodosquesonlostaburetesdemetaldelosprismáticos.Unanoche,alsalir,lepreguntaaEsthersobreellos.
—Liz—respondelaempleada—,cuandounasillalepareceincómodaaunoesporquehaestadosentadodemasiadotiempoenella.
El tiempopasa con lentitud y rapidez a la vez.Las horas, losminutos y los segundos parecendurarunaeternidady,sinembargo,yahatranscurridounmes.DuranteestetiempoLizsehavueltounaexpertaenecharlasmonedasporlaranuraparainterrumpirelmínimoposiblelosespaciosdecincominutosaquetienederechoconcadaeternim.Comohaestadounmontóndetiempoconlosojospegadosalosprismáticos,tieneunasprofundasojeras.
Suabuelalepreguntadevezencuandosisehaplanteadoenalgúnmomentolodesupasatiempo.—Todavíanecesitounpocomásdetiempoparamí—respondesiempreLiz.Bettylanzaunsuspiro.Noquierepresionarla.—ThandiweWashingtontehavueltoallamar.YAldousGhenttambién.—Gracias.Intentaréllamarlosestasemana—mienteLiz.EsanocheveaBettyarrodilladajuntoalacama.EstárogandoalamadredeLiz:—Olivia—susurrasuabuela—,noquieroserunacargaparati,yaquesospechoquetuvidayaes
demasiadodifícilenestemomento,peronosécómoayudaraElizabeth.Teruegoquemeenvíesunaseñaldiciéndomequépuedohacer.
—Elizabeth,hoyvamosasalir—leanunciaBettyalamañanasiguiente.—Yoteníaotrosplanes—protestaLiz.—¿Quéplanes?—IralaCO—mascullaella.—Puedesirmañana.Hoyvamosahacerunavisitaturísticaporellugar.—Pero,Betty…—Nohayperosquevalgan.Llevasaquícuatrosemanasytodavíanohasvistonada.—Síquehevistoalgunascosas—afirmaLiz.—¿Ah,sí?¿Comoqué?YlasescenasdelaTierranocuentan.—¿Porquéno?—lepreguntaLiz.—Porqueno—respondesuabuelaconfirmeza.—¡Noquieroirahacerunavisitaturística!—protestalachica.—¡Malasuerte!—leespetasuabuela—.HoynovoyadartedineroparalaCO,oseaquenote
quedaotraelección.Lajovenlanzaunsuspiro.—Ysinofuerademasiadopedir,¿podríasponertealgunaotracosaquenoseaeseviejoysucio
pijama?—añadesuabuela.
—Puesno.—Pontealgomíoosiloprefierespodemosiracomprarropaparatide…—No—lainterrumpeLiz.Bettysalefueraybajalacapotadelcoche.—¿Quieresconducirtú?—lepreguntaasunieta.—No—respondeellaabriendolapuertadelasientodelpasajeroysentándoseenél.—Deacuerdo—diceBettyabrochándoseelcinturón—.¿Porquéno?—lepreguntaalcabodeun
momento—.Deberíagustarteconducir.—Puesnoesasí—respondeLizencogiéndosedehombros.—Noestoy enfadada contigopor lo que te pasó la primeranoche, si eso es lo quepiensas—
observasuabuela.—Betty, no quiero conducir simplemente porque no quiero. No es por ninguna otra razón.
Además,sivasallevarmeaverestelugar,nopodréverelpaisajesiestoyconcentradaconduciendo,¿noteparece?
—Escierto,supongoquetienesrazón—admiteBetty—.¿Novasaponerteelcinturón?—¿Porquéhedeponérmelo?—preguntaLiz.—PorlamismarazónqueenlaTierra:paraevitarquetedesdebrucescontraelsalpicadero.Lizponelosojosenblanco,peroseabrochaelcinturón.—Hepensadoquepodíamosiralaplaya.¿Quéteparece?—diceBetty.—Loquetúdigas—respondeLiz.—EnOtroLugarhayunasplayasmaravillosas.—¡Fantástico!Despiértamecuandolleguemos.—Paraevitartenerqueconversarmás,Lizcierra
elojoizquierdoyfingeestardurmiento.Peroconelderechocontemplaelpaisajeporlaventana.Piensaqueeste lugarseparecemuchoa laTierrayesto lehacequedarsesinrespiración.Pero
hayalgunasdiferencias,yesasdiferenciassesuelenmanifestarenlosdetalles.Porlaventanaveunautocine,nuncahabíavistoninguno,salvoenlasfotografíasantiguas.Enlaautopistaveaunaniñadeseis o siete años llevando un traje chaqueta y conduciendo un todoterreno moderno. A lo lejoscontemplaunosarbustosrecortadosenformadelaTorreEiffelylaEstatuadelaLibertad.Juntoalacarretera,veunaseriedecartelitosdemadera,aunosdiezmetrosdedistanciaunosdeotros.Encadaunoponeunadeestaslíneas:
QUIZÁSUSTEDESTÉMUERTO,PEROSUBARBASIGUECRECIENDO,
YLASSEÑORASODIANLOSROSTROSSINAFEITAR,INCLUSOENELMÁSALLÁ.
BURMASHAVE.
—¿QuéesBurmaShave?—preguntaLizasuabuela.—Unaclasedecremadeafeitar.Cuandoyovivía,enEstadosUnidoshabíaestaclasedecarteles
enlasautopistas—observaBetty—.Peroalnacer túyaloshabíanreemplazadoensumayoríaporvallaspublicitarias,sinembargohubounaépocaenquefueronmuypopulares,buenotanpopularescomo un cartel puede llegar a serlo—añade riendo—.Descubrirás que EnOtro Lugar es dondemuchasmodaspasajerasvanaparartambiénalmorir.
—¡Ah!—Creíaqueestabasdormida—ledicesuabuela.—Loestoy—respondeLizvolviendoacerrarelojoizquierdo.LizadviertequeEnOtroLugaresmássilenciosoquelaTierra.Ytambiénqueesunsitiomuy
belloasumanera.Tieneunaatmósferaencantadoradeformanatural.Peropormásencantadoraquesea,ellasigueodiandoestelugar.
AlcabodeunahoraBettydespiertaasunieta,queestavezsehabíadormidodeverdad.—¡Yahemosllegado!—exclama.Lizabrelosojosymiraporlaventanilla.—Vaya,pareceunaplaya—observa—,escomolaquehabíaalladodecasa.—Lo importanteeshacerunpocode turismo—diceBetty—.¿Quieresquevayamosadaruna
vuelta?—Nomeapetece—respondeLiz.—Almenossalgamosdelcocheparairalatiendaderegalosyestirarunpocolaspiernas—le
suplicaBetty—.¿Quieresquetecompreunsouvenir?Lizcontempladudosalacabañacontechodepajaquehayenlaplaya.Porellugarenelqueestáy
su frágil aspecto,parececomosi se lapudiera llevarelvientoencualquiermomento.Encambio,curiosamenteelcarteldemetalquecuelgaenlaentradaesdelomássólido:
OJALÁESTUVIERASAQUÍBARATIJAS,NONADAS,BAGATELAS,
CHUCHERÍAS,MINUCIAS,TONTERÍAS,CAPRICHOS,FRUSLERÍASYOTROSARTÍCULOSDIVERSOSPARAELCOMPRADOREXIGENTE
—¿Quémedices?—preguntaBettysonriendo.—¿Yaquiénlevoyaregalarelsouvenir?—Esparati.—Perolossouvenirssonpararegalárselosaalguiencomorecuerdo—gruñeLiz—.Yyoaquíno
conozcoanadie,nitampocovoyavolveralaTierra.—Nosiempreesasí,yademásundíavolverásalaTierra—respondeBetty—.¡Vengaentremos,
tecompraréloquequieras!—¡Noquieronada!—exclamaLizmientrassigueasuabuelaquesedirigehacialacutretienda
de regalos.Enel interiornohaynadie.Sobreelmostradorde lacaja registradorahayuna latadesopaconunanota:«Heidoacomer.Dejeeldineroenlalata.Hágaseustedmismounabuenarebajita,peroquequedeentrenosotros».
Paracomplacerasuabuela,LizeligeunpaquetedeseispostalesdeEnOtroLugaryunglobodenievedeplástico.ElglobodenievecontieneelNiloenminiaturasumergidoenunapegajosaaguaazul.Enlabasedelgloboponeenletrasrojas:OJALÁESTUVIERASAQUÍ.
—¿QuieresunatoallaparaplayadeEnOtroLugar?—lepreguntasuabuelamientraselladejalosdosartículosquehaelegidoenelmostrador.
—No,gracias.—¿Estássegura?—Sí—diceLizalgotensa.
—¿Yunacamiseta?—¡No!—grita—.¡Noquieroningunamalditacamiseta!¡Niunatoallaparalaplaya!¡Nininguna
otracosa!¡Sóloquieroirmeacasa!—De acuerdo, cariño—dice su abuela lanzando un suspiro—.Espérame fuera que ahora voy.
Sólohedecalcularcuántodinerotengoquedejar.Lizsalefuriosadelatiendaconsuglobodenieve.EntraenelcocheyesperaaBettyenél.Sacude el globo de nieve. El diminuto Nilo se zarandea violentamente dentro de la bola de
plástico.Lizvuelveasacudirloinclusoconmásfuerzaaún.Unaguaazulviejaypegajosasedeslizaporsumano.Hayunapequeñagrietaen las juntasde labola.Abre lapuertadelcocheyarrojaelglobodenievealpavimento.Enlugarderomperseoresquebrajarse,rebotaporelparkingcomounapelotitadegomaysedetienealospiesdeunaniñapequeñaconunbiquinirosaatopos.
—Lahastirado—ledicegritandolaniña.—Sí—admiteLiz.—¿Laquieres?—lepreguntarecogiéndoladelsuelo.Lizledicequenoconlacabeza.—¿Melapuedoquedar?—inquierelaniña.—¡Adelante,estodatuya!—Aquí el cielono cae casi nunca—observa la niñadando la vuelta al globoparaque toda la
nieveseconcentreenlabóvedacelesteytapandolafugadelajuntaconelmeñique.—¿Aquéterefieresaldecircielo?—preguntaLiz.—Aesto—respondelaniñadándolelavueltaalabola.—¡Ah,alanieve!Quieresdecirqueaquínonieva—diceLiz.—No demasiado, no demasiado, no demasiado—canturrea la niña acercándose a ella—. ¡Qué
grandeeres!Lizseencogedehombros.—¿Cuántosañostienes?—preguntalaniña.—Quince.—Yotengocuatro—diceella.—Eresunaniñapequeñadeverdadounaniñapequeñafalsa—inquiereLizcontemplándola.—¿Quéquieresdecir?—lepreguntalaniñaabriendolosojosdesmesuradamente.—Quesitienescuatroañosdeverdadosólofingestenerlos—lepreguntaLiz.—¿Quéquieresdecir?—insistelaniñaalzandolavoz.—¿Siempretuvistecuatroañosoantesfuistemayor?—No lo sé.Tengocuatroaños. ¡Cuatro!—grita laniña—. ¡Eresmala!—exclamaarrojandoel
globodenievealospiesdeLizyechandoacorrer.Ellalorecogedelsueloyvuelveaagitarlohastaquelovacíadellíquidoazulysóloquedaenél
unmontóndefalsoscristalesdenieve.Bettysaledelatiendaconunabolsitadepapelenlamano.—Tehecompradoesto—ledicesuabuelaentregándolelabolsa.Dentrohayunacamisetaconel
lemaMIABUELAFUEAENOTROLUGARYMECOMPRÓESTAHORRIBLECAMISETA.Lizsonríeporprimeravezentodoeldía.—Noeshorrible,megusta—reconoceponiéndoselasobreelpijama.—Penséque tegustaría—dicesuabuela—.Medijeamímismaqueno ibaa tenerdemasiadas
oportunidadesparapoderregalarestacamisetaaalguien—añadeechándoseareír.PorprimeravezLizcontemplarealmenteaBetty.Suabuelatieneelpelodecolorcastañooscuro
yunas arruguitasde reír alrededorde losojos.Piensaque su abuela esguapa,que separece a sumadre,aella.Que tienesentidodelhumor…Deprontocomprendequesuabuelapuedeque tengamejorescosasquehacerquepreocuparseporunahoscaadolescente.Quierepedirleperdónporsucomportamiento de hoy y por el de los otros días. Quiere decirle que no tiene la culpa de estasituación.
—Betty—diceLizenvozbaja.—¿Sí,cariño?—Yo…Yoestoy…—empiezaadecir—.Elglobodenievequemehasregaladogotea.AquellanocheLizescribelasseispostalesdeEnOtroLugar:unaasuspadres,otraaZooey,otra
aEdward,otraaLucyyotraaAlvy.Laúltimaselaescribeasuprofesordebiología,quenoasistióasufuneral.
QueridodoctorFujiyama:Aestasalturasprobablementeyasehabráenteradodequehemuerto.Poresonopodréiralaferiaregionaldecienciasdeesteaño,locualesunagrandecepciónparamíyestoyseguradeque para usted también lo es. En la época en que fallecí sentía que estaba progresando deverdadconesaslombrices.Megustabanmuchosusclasesylascontinúosiguiendodesdeellugardondeahoraestoy.Ladisección de aquel cerdomepareciómuy interesante y pensé que yo también iba a intentarhaceruna,peropordesgraciaaquínohayningúncerdomuertoparadiseccionar.Este lugar no estámal. Lamayor parte de los días hace un tiempo agradable.Vivo conmiabuelaBetty,queesmayor,aunqueparecejoven.(Unalargahistoria.)Medecepcionónohaberlevistoenmifuneral,yaqueustederamiprofesorpreferidoinclusoenlaescuelaprimariayenlosotroscursos.Aunquenoselodigoparaquesesientamalninadaparecido.Sualumna,
ElizabethMarieHall
Lizpegaunselloalasseispostalesylasechaalbuzónsabiendoquenuncallegaránasudestino.Alnoincluirunremitente,almenostampocoselasdevolverán.Piensaqueseríabonitoescribirleunapostalaalguienquedeveraspudierarecibirla.
Al reanudar su rutinade ir cadadía a laCOycontemplar suvidaencortos espaciosdecincominutos, empieza a sentirse frustrada. En cuanto comienza a disfrutar con una historia, losprismáticos se cierran conun chasquido.Siente como si siempre se estuviera perdiendo algo.Porejemplo,elbailedelinstitutoestáapuntodecelebrarse.ZooeyhacepocoquehadecididoiraélconJohn.Y ya que su amiga va a asistir al baile, Liz prefiere verlo de una tirada, sin interrupciones.¿Quizási tuvieracuarentayochoeternimsen lugardeveinticuatropodríaseguirlomejor?Decidepedirleasuabuelamáseternims.
—Betty,¿podríasdarmealgunoseternimsmáscadadía?—¿Comocuántosmás?—preguntasuabuela.
—Puesquizáunoscuarentayochoaldía.—Estoyaempiezaaserunabuenacantidad,cielo.—Telosdevolveré—leprometeLiz.—Noespor los eternims.Sólomepreocupaquevayas a pasar tanto tiempoen laCubierta de
Observación.—Betty,yasabesquenoeresmimadre.—Sí,Liz,losé,peroestonosignificaquenomepreocupeporti.—¡Dios,odioestasituación!—gritaLizsaliendofuriosadelahabitaciónyechándoseenlacama.
Mientrasestátumbadaenella,decidenoiralaCOdurantetresdíasparatenermáseternimsparaelbaile.Locualesungransacrificio.Alnoteneramigasniningunaotradiversión,sepasatodoeldíaenlahabitación,preocupadaporloquesedebeestarperdiendoenlaTierra.Lostresdíasselehaceneternos,peroconsigueahorrarelsuficientedinerocomoparavertodoelbaile.
LiztambiénconvenceaEstherparaqueladejequedarsedespuésdecerrar.Lamujernoledicequesíabiertamente,perolemuestradóndeestánlosinterruptoresparaapagarlaluz.
EnlanochedelbaileLizcontemplacómoZooeycomefresasbañadasenchocolate,sehaceunafoto-llavero para conservarla como recuerdo, y baila un baile lento al compás de una sensiblerabalada.Alcabodepoco,veasuamigaperdiendolavirginidadenunalujosahabitacióndelmismohotel donde se había celebrado el baile. Por respeto a su amiga, Liz sólo la mira durante treintasegundosy luegosecubreelojoderechocon lamano.Se fija sobre todoenelvestidodeZooey,aquelqueellateníaqueayudarleaelegir,hechoahoraunovilloenunrincóndelahabitación.
Lizsevaantesdequelosprismáticossecierrenconunchasquido,inclusodoshorasantesdequelaCOcierre.Comonotieneganasdeverasuabuelaperonotieneningúnotrolugaralqueir,decidesentarseenelparquequehaycercadelacasadeBetty.
Alcabodeunratounbichonfriséblancoylanudosesientaenelbancojuntoaella.—Hola—parecedecirleelperro.Lizledaunaspalmaditasenlacabezapararecibirlo.SiempreselohacíaaLucyyahoraañora
inclusomásaúnqueantessuantiguohogar.—Meparecequeestásunpocotriste—observaelperroladeandolacabeza.—Quizásunpoco.—¿Quétepreocupa?—inquiereelperro.Lizpiensaenlapreguntaantesderesponder.—Mesientosola.Yademásodioestelugar.Elperroasienteconlacabeza.—¿Podríasrascarmeporfavorelpescuezo,debajodelcollar?Nollegoconmispatas.Lizselorascacongusto.—Gracias.¡Ahoramesientomuchomejor!—exclamaelperroresoplandodeplacer—.¿Asíque
tesientessolayodiasestelugar?Lizasientedenuevoconlacabeza.—Te aconsejo que dejes de sentirte triste y de odiar este lugar.Amí estemétodo siempreme
funciona—observa el can—. ¡Ah, y sé feliz! Esmás fácil estar contento que triste. Estar triste damuchotrabajo.Esagotador.
—¡Arnold!—gritaunamujerllamándolodesdeelotroladodelparque.—¡Hedeirme!¡Mibípedomeestállamando!—exclamaélsaltandodelbanco—.¡Hastapronto!
—¡Hastapronto!—diceLiz,peroelperroyasehaido.
Eltaxidelabuenasuerte
Despuésdeseguirelbaile,LizdejadecontemplaraZooeyoacualquierotrapersonadelinstituto.Ahorasólosededicaamirarasufamilia.
Unanoche,cuandolaCOestáapuntodecerrar,lepreguntaaEsther:—¿Cómofuncionanlosprismáticos?Estherponemalacara.—Aestasalturasyadeberíassaberlo.Echasunamonedayentonces…—Merefieroacómofuncionanrealmente—lainterrumpeLiz—.Mepasolamayorpartedeldía
aquíynisiquierasénadasobreellos.—Supongoquefuncionancomocualquierotropardeprismáticos.Unaseriedelentesconvexas
endostuboscilíndricossecombinanparaformarunaimagen…—¡Sí, ya conozco esta parte!—la interrumpeLiz de nuevo—.Me enseñaron todo eso en el…
quintocurso.—Puessilosabestodoacercadelosprismáticos,noentiendoporquémepreguntassobreellos.LizignoraelcomentariodeEsther.—PerolaTierraestámuylejosyestosprismáticosnoparecenserdemasiadopotentes.¿Cómoes
posiblequepuedaverconelloslasescenasquesucedenallí?—Quizáahíestéelsecreto.TalvezlaTierranoseencuentretanlejoscomocrees.Lizsemuestrasorprendida.—¡Quéideamásbonita,Esther!—Sí,¿verdad?—observalamujersonriendo—.Paramíescomounárbol,porquecadaárboles
enrealidaddosárboles:lasramasquetodospodemosverylaraíz,elotroárbolinvertido,creciendoen el sentido contrario. Así que las ramas creciendo hacia el cielo son la Tierra, y las raícescreciendohacialadirecciónopuestasonEnOtroLugar,aunqueenunaperfectasimetría.Lasramasnopiensandemasiadoenlasraíces,yquizálasraícestampocopiensandemasiadoenlasramas,peroestánunidasentodomomentoporelmismotronco,¿sabes?Aunquelasraícesparezcanestarlejosdelasramas,noesasí.Túsiguesconectadaalasramas,loúnicoquenoeresconscientedeello…
—¡Esther!—lainterrumpeLizporterceravez—.Pero¿cómofuncionanlosprismáticos?¿Cómosabenquéesloqueyoquierover?
—Esunsecreto—respondeEsther—.Podríadecírtelo,peroentoncestendríaquematarte.
—Esonotienegracia—diceLizempezandoaalejarse.—Deacuerdo,Lizzie,telodiré.Siteacercas,telosusurraréaloído.Lizobedece.—Pídemelodenuevodiciendoporfavor—diceEsther.—Esther,porfavor,¿cómofuncionanlosprismáticos?—Es…porartedemagia—lesusurraellaaloídoechándoseareír.—¡Noséporquételohepreguntado!—exclamaLiz.—Porquenotienesningunaamigaytesientesmuysola.—¡Gracias!—lesueltaLizsaliendohechaunafuriadelaCO.—Hastamañana—legritaEstheralegremente.Llegael12deagosto,eldíaqueLizhabríacumplidodieciséisañosenlaTierra.Y,aligualque
losotrosdías,selopasaenlaCO.—HoyLizziecumpliríadieciséisaños—dicelamadredeLizasumarido.—Losé—respondeél.—¿Creesqueencontraránalhombrecausantedelaccidente?—Nolosé—respondeél—.Peroesperoqueasísea—añade.—¡Fueuntaxi!—gritaLizmirandoporlosprismáticos—.¡UNVIEJOTAXIAMARILLOCON
UN AMBIENTADOR EN FORMA DE TRÉBOL DE CUATRO HOJAS COLGADO DELRETROVISOR!
—Nopuedenoírte—lediceunamujermayorconaspectodeabuelita.—¡Yalosé!—lesueltaella—.¡Chsss…!—¿Porquénosedetuvo?—preguntalamadredeLizasumarido.—Nolosé.Peroalmenos llamóa lapolicíadesdeunacabina,aunqueyanohubieranadaque
hacer.—¡Peroaunasídeberíahabersedetenido!—exclamaellaechándoseallorar—.Quierodecirque
cuandoatropellasaunachicadequinceañosteparas,¿verdad?Esloquecualquierpersonadecenteharía,¿nocrees?
—Nolosé,Olivia.Esloqueyocreía—respondeelpadredeLiz.—¡Y me niego a creer que nadie viera nada! Me refiero a que alguien debe haber visto el
accidente,alguiendebesaberquiénhasido,alguiendebe…EltiempodeLizseacabaylaslentessecierranconunchasquido.Peroellanosemueve.Sigue
conlosojospegadosaellas,aunquelaslentessehayancerrado,conlamenteenblanco.Estáfuriosaporqueahorasabequefuevíctimadeunconductorquesedioalafuga.Quienquiera
quelohayahechodebepagarporello,piensa.Quienquieraquemehayaatropelladohadepasarunabuena temporada entre rejas. En ese momento decide encontrar el taxi y descubrir una forma dedecírseloasuspadres.MeteuneternimporlaranurayempiezaaregistrarlagranzonadeBostonpara localizar taxis amarillos antiguos con ambientadores en forma de trébol de cuatro hojascolgandodelretrovisor.
Lizsededicaabuscarsistemáticamenteeltaxidelabuenasuerte(elnombrequeellalehapuesto)revisando todos los garajes y las compañías de taxis que trabajan en la zona que cae cerca de laCambridgesideGalleria.Aunquehayasólocuatrocompañíasquetrabajanenestazona,hadeinvertirtodaunasemana—ymásdequinientoseternims—paralogrardarconeltaxidelabuenasuerte.Lizconsigue los eternimsque le faltan pidiéndole aBetty dineropara comprarse ropa.Su abuela está
felizdepodercomplacerlaynolehacedemasiadaspreguntas.Sólocruzalosdedosydeseaqueasunietaseleestépasandoyaladepre.
EnlalicenciadeltaxistaponequesellamaAmadouBonamy.Conduceeltaxinúmero512paraunacompañíade taxis llamadaTresAses.Liz reconoceel taxienseguida.Tieneelambientadorenforma de trébol de cuatro hojas y el automóvil es más viejo que Alvy, e incluso que Liz. Alcontemplarelcocheellasesorprendedequeinclusohayaaguantadoelimpactoquerecibióalchocarconsucuerpo.
Aldíasiguientedehaberlocalizadoeltaxi,sededicaacontemplaraltaxista.AmadouBonamyesalto y tiene el pelo negro y rizado. Su piel es del color de la cáscara de coco. Su mujer estáembarazada.ÉlvaalasclasesnocturnasdelaUniversidaddeBoston.Cuandollevaaalgúnpasajeroal aeropuerto, siempre le ayuda con las maletas. Nunca toma el trayecto más largo a propósito,aunque los pasajeros no sean de la ciudad. Liz advierte que no va a demasiada velocidad y queademás parece respetar las normas de tráfico religiosamente. A pesar de que el taxi está en lasúltimas,locuidamuchoypasacadadíaelaspiradorporlosasientos.Cuentaestúpidoschistesalospasajeros.EscuchalaRadioPúblicaNacional.Compraelpanenlamismapanaderíaalaquevasumadre.Tieneunhijoquevaalmismocolegioquesuhermano.Él…
Liz se aparta de los prismáticos. Se da cuenta de que no quiere saber más cosas de AmadouBonamy.¡AmadouBonamyesuncriminal!Lapersonaquelahaasesinado,piensa.Yhadepagarporello.Talcomosumadrehadicho,noestábienatropellaraunapersonaconundestartalado taxiydejarla tirada en el suelo para que se muera en la calle. A Liz se le acelera el pulso. Tiene quedescubrirlaformadedecirasuspadresquehasidoAmadouBonamy.Selevantadeltabureteysevade laCubierta deObservación, su deseode venganzahaceque se sientamásviva de lo que se hasentidoenunabuenatemporada.
Alsalirdeledificio,pasapordelantedeEsther.—Mealegraverqueporunaveztevasdeaquícuandoaúnesdedía—observalamujer.—Sí—respondeelladeteniéndose—.Esther,¿sabescómosepuedeentraren«contacto»conlos
vivos?—añade.—¿Entraren«contacto»?—preguntaEsther—.¿Porquédiantresquieressaberlo?Sóloloslocos
intentan hacerlo. No sacarás nada bueno de hablar con los vivos. Sólo te causará sufrimiento ypreocupaciones.YDiossabequeyahemostenidobastantedeambascosas.
Liz lanza un suspiro. Por la respuesta de Esther sabe que no puede hacerle esta pregunta acualquiera. Ni tampoco a Betty, que ya está bastante preocupada por ella. Ni a Thandi, queprobablementeestáenfadadaporquenohacontestadoasusllamadas.NiaAldousGhent,quenolaayudaría ni loco a entrar en «contacto» con los vivos. La única persona que quizá la ayudaría esCurtisJest.PeropordesgraciaLiznohavueltoaverlodesdeeldíaquecontemplaronsuspropiosfuneralesenelNilo.
AlllegarCurtisaEnOtroLugar,empezaronacircularvariasnuevashistoriassobresumuerte.Comoeraunaestrelladerockyunacelebridad,lagenteseinteresóporél.Perolocuriosodelcasoesque lamayoríade laspersonasdeEnOtroLugarnuncahabíanescuchadosumúsica.Curtiserapopular en la generacióndeLiz, peroEnOtroLugarhabíamuypocaspersonasque fuerande sugeneración.OseaqueelinterésporCurtisseesfumórápidamente.Desdeeldíadesucumpleañosyanohabíaoídohablarmásdeél.
LizdecidearmarsedevaloryllamaraThandi,queahoratrabajacomolocutoraenunacadenade
televisiónyseencargadeleerlosnombresdelaspersonasquelleganaEnOtroLugar,paraquelagentepuedairalmuellearecibirlas.LizpiensaqueThandidebetenernoticiasdelparaderodeCurtisJest.
—¿Porquéquiereshablarconél?—lepregunta.Suvozeshostil.—Porquemeparecióunapersonamuyinteresante—respondeLiz.—Dicenquesehahechopescador—diceThandi—.Probablementeloencontrarásenelmuelle.¿Pescador?,piensaLiz.Pareceuntrabajotancorrientequenoentiendeporquélohaelegido.—¿PorquéCurtisJesttrabajacomopescador?—preguntaLiz.—Notengoniidea.¿Quizálegustapescar?—sugiereThandi.—PeroEnOtroLugarhaymúsicos.¿Porquénosiguesiendomúsico?Thandilanzaunsuspiro.—EnlaTierrayalofue,Liz.Yesobvioqueestaprofesiónnolehizodemasiadofeliz.Lizrecuerdalas largasmarcasylosmoradosdelosbrazosdeCurtis.Noestáseguradepoder
llegaraolvidarlosnunca.Perosiguepensandoqueélsehaequivocadoaldejarsucarreramusical.Quizácuandolovealepregunteporquélohahecho,piensa.
—Graciasporlainformación—diceLiz.—Denada—respondeThandi—.Pero¿sabes,Elizabeth?,noestábienquenomedevuelvaslas
llamadas durante meses y meses y que cuando por fin me llames sea para preguntarme por otrapersona.Sindisculparte.Sintansiquieradecirme«¿Cómoestás,Thandi?»
—Losiento,Thandi.¿Cómoestás?—inquiereLizmásbienporcompromiso,yaquepeseatodonosesienteculpableporhaberignoradoasuamiga.
—Muybien—respondeella.—Heestadopasandounamalatemporada—sedisculpaLiz.—¿Ytúcreesqueparamíhasidofácil?¿Creesqueloesparacualquieradenosotros?—pregunta
Thandiyluegolecuelgaelteléfono.
Lizcogeelautobúsquellevaalmuelle.LocalizaallíaCurtisenseguida,conunacañadepescarenunamanoyunatazadecaféenlaotra.Llevaunadescoloridacamisetarojaysupálidapieldeantestiene ahora un sano tono dorado.El color de su cabello apenas es ya azul, pero sus ojos celestessiguensiendotanvivoscomosiempre.Liznosabesiseacordarádeella,peroporsuerteéllesonríeencuantolave.
—Hola,Lizzie—diceCurtis—.¿Cómoteestátratandolavidaenelmásallá?—añadevertiendoenunatazacafédeuntermorojoyofreciéndosela.Lehaceunaseñalparaquesesienteasuladoenelmuelle.
—Queríapreguntartealgo—diceLiz.—Parece un asunto serio—observa Curtis enderezando la espalda—. Intentaré responderte lo
mejorquesepa,Lizzie.—Enelbarcofuistemuysinceroconmigo—empiezaLiz.—Dicenqueunhombresiempredebeserlomássinceroposible.—Necesito entrar en «contacto» con alguien de la Tierra —le confiesa Liz en voz baja—.
¿Podríasayudarme?—¿Estásseguradesaberloqueestáshaciendo?
Ellayasehabíapreparadoparaestapreguntaysehabíainventadovariasmentirasconvincentes.—Noesqueestéobsesionadaninadaparecido,sinoquetengounasuntopendienteenlaTierra
quedeboresolver.—¿Dequésetrata?—preguntaél.—Tienequeverconmimuerte—diceLizdudandoporunmomentodesidebecontarleaCurtis
lahistoriadeltaxistaquesedioalafuga.Despuésdeescucharlahistoria,élsequedaensilenciounmomento.—Noséporquépensastequeyopodríaayudarte.—Porqueparecesserunapersonaqueseenteradelascosas—respondeLiz—.Ademásnopuedo
preguntárseloanadiemás.Curtissonríe.—He oído decir que hay dos formas de comunicarse con los vivos. La primera es intentar
encontrarunbarcoquetellevealaTierra,aunquedudodequeestasoluciónseademasiadoprácticapara ti, yaquepor loqueheoído se tardamuchoen llegar a ellay tiendea alterar elprocesodevolversecadavezmásjoven.Además,nocreoquequierasconvertirteenunfantasma,¿verdad?
LizsacudelacabezaacordándosedequeyasehabíaplanteadoestaeleccióneldíadesullegadaaEnOtroLugar.
—¿Cuáleslasegundaopción?—Heoídohablardeunlugarqueseencuentraaunamilladelaplayayavariasdeprofundidad.
Porlovistoesellugarmásprofundodelocéano.LagentelollamaelPozo.LizrecuerdaqueAldousGhentmencionóelPozodurantelacitadeaclimatación.Ytambiénque
ledijoqueestabaprohibidoiraeselugar.—Creoqueheoídohablardeél—diceella.—AlparecersiconsiguesllegaralPozo,locualesmuydifícil,encuentrasunaventanaporlaque
puedespenetrarenlaTierra.—¿EnquésediferenciadelasCubiertasdeObservación?—preguntaLiz.—Con los prismáticos sólo tú puedes ver a los vivos, en cambio dicen que en el Pozo ellos
tambiénpuedensentirte,verte,oírte.—¿Oseaquepuedohablarconellos?—Sí,esoesloqueheoídodecir—contestaCurtis—,perolescostaráentenderte,yaquetuvozno
seoyeconclaridadalestartúdentrodelagua.Necesitarásunbuenequipoparabucearyserademásunabuenanadadora.
LizreflexionasobreloqueCurtisacabadecontarlebebiendounsorbodecafé.Sabequeesunaexpertanadadora.ElpasadoveranoellaysumadresesacaronjuntaselcarnédebuceoenCapeCod.¿Cómoesposiblequesólohayapasadounañoynounaeternidad?,sepregunta.
—Noestoysegurodesihehechobiendándoteestainformación,peroprobablementelahabríasconseguido de cualquier otra persona.Me temo que nunca seme ha dado bien el saber qué debíahacer.Oalmenosnolohesabidonilohehecho.
—Gracias—diceLiz.—Tencuidado—respondeCurtisdándoleunabrazoysorprendiéndolaconestecálidogesto—.
Perdona,pero¿estásseguradequedebeshacerlo?QuizálomejorseríaolvidartedelPozo.—Sí,Curtis.Notengootraelección.—Lizzie,cariño,unosiemprepuedeelegir.
EllanoquierediscutirconCurtis,sobretododespuésdequehasidotanamableconella,peronopuedeevitardecirle:
—Yonoelegímorir,oseaqueenestecasonotuveotraopción.—No,claroqueno—respondeél—.Supongoquemereferíaaquesiemprepuedeselegirenlas
situacionesenquepuedeshacerlo,siesqueestotienealgúnsentido.—Puesno—diceLiz.—Entonces tendré que perfeccionar mi filosofía y volver a verte cuando lo haya hecho. He
descubiertoqueeltrabajodepescadortedejamuchotiempoparapensar.Lizasienteconlacabeza.Mientrassealejadelmuelleseacuerdadequehaolvidadopreguntarle
porquéhadecididoconvertirseenpescador.
Lagraninmersión
Lizseentregaporcompletoaprepararseparalagraninmersión.Aunquenosehayadadocuenta,larutinadiariadeiralaCubiertadeObservacióncadavezlasatisfacemenos:cadadíasemezclaconelanterior,lasborrosasimágenesparecennublarsecadavezmásytienelosojoscansadosylaespaldadolorida.Ahorasientelarenovadaenergíaqueunoexperimentaaltenerunamisión.Lizcaminaconun paso más ligero. El corazón le late con más fuerza. Su apetito ha aumentado. Se levanta mástempranoyseacuesta tarde.Porprimeravezdesdeque llegóaEnOtroLugar se sientecasiviva,bueno,siesquepuedellamarseasí.
CurtislehabíadichoqueelPozoquedabaa«unamilladelaplaya»,peronohabíaespecificadodóndeseencontrabaexactamente.DespuésdehabersepasadodosdíasescuchandoenlaCubiertadeObservaciónlasconversacionesdeotroseintentandoaveriguarlopreguntándoseloindirectamenteaEsther,LizdescubrequeelPozoestárelacionadodealgúnmodoconlosfarosdelasCubiertasdeObservaciónyqueparallegaraélhadeseguirnadandolatrayectoriaquemarcaconsuluzunodelosfaros.
Para comprar el equipo de buceo Liz le pide a su abuela que le «preste» otros setecientoscincuentaeternims.
—¿Paraquélosquieres?—preguntaBetty.—Paracomprarmeropa—mienteLiz,aunquepiensaqueenparteesverdad,porqueuntrajede
buzoesenelfondoropa,¿noesasí?—.Sivoyaejercermivocación,necesitarétenervariaspiezasderopa.
—¿Quéhicisteconlosúltimosquinientoseternimsquetedi?—Aúnlostengo—vuelveamentirLiz—.Nomeloshegastado,peroprobablementenecesitaré
más,porquenotengonadaqueponerme,salvoelpijamaylacamisetaquemeregalaste.—¿Quieresqueteacompañe?—preguntaBetty.—No,gracias,prefieroirsola—diceLiz.—Siquierespuedohacertealgúnvestidoahoraquesoycosturera—dicesuabuela.—Mmm…,graciasporofrecérmelo,peroprefierocomprarmelaropaenlastiendas.Así que Betty cede, aunque está segura de que Liz miente acerca de los últimos quinientos
eternims.Bettyestáhaciendotodoloposiblepor(1)serpaciente,(2)daraLizelespacioquenecesitapararecuperarsey(3)esperarquerecurraaella.AlmenosesoesloquesediceenCómohablarcon
unaadolescentequeacabademorir,ellibroqueestáleyendo.Bettysonríedemaneraforzada.—Tellevaréencochealcentrocomercialdelaparteeste.Lizacepta(latiendadebuceoestáenesecentrodetodosmodos),peroporunasrazonesqueson
obviasledicequecogeráelautobúsparavolveracasa.LabotelladeoxígenoqueLizadquiereesmáspequeñayligeraquecualquierotraqueellaysu
madrehayantenidonuncaenlaTierra.SellamaTanqueInfinitoyelvendedorleaseguraqueconélnuncaseleacabaráeloxígeno.Parademostrarasuabuelaquehainvertidobiensudinero,tambiénsecompraunostejanosyunacamisetademangalarga.
Liz esconde el equipo de buceo bajo la cama. Se siente culpable por mentir a Betty, peroconsideraqueesunamentirapiadosa.Habíapensadocontárselo,perosabequeellasequedaríamuypreocupadaporlainmersión.Ysuabuelanonecesitaestármáspreocupadadeloqueyaestá.
HapasadounañodesdelaúltimavezquebuceóenlaTierra.Sepreguntasisehabráolvidadodealgunodelospasosquesetienenquerealizarparabucear.Seplanteahacerantesunainmersiónparacomprobarqueseacuerdadetodosellos,peroalfinaldecidenollevarlaacabo.QuiereiralPozoloantesposible.
ComoiralPozoestáprohibido,Lizdecidesalirdecasadespuésdeponerseelsol.Meteelequipodebuceoenunabolsadelabasura,seponeeltrajedebuzo,yluego,encima,losnuevostejanosylacamisetademangalarga.
—¿Eslaropaquetehascompradohoy?—lepreguntasuabuela.Lizasiente.—Mealegrodequeyanolleveselpijama—Bettyseacercaparaobservarlamejor—,perocreo
que la camiseta demanga larga te va un poco justa—añade intentando arreglársela, pero Liz seapartadeella.
—¡Mevaperfecta!—dice.—¡De acuerdo, de acuerdo! ¿Me enseñarás las otras piezas de ropa que te compraste por la
mañana?Lizasienteconlacabeza,peromirahaciaotraparte.—¿Adóndevasaestashoras?—lepreguntaBetty.—AunafiestaquehaorganizadoThandi,lachicaquemellamóelotrodía—mienteLiz.—¡Diviértetemucho!—respondesuabuelasonriéndole—.¿Quéllevasenesabolsa?—Comidaparapicaren la fiesta—ahoraqueLizhaempezadoamentir, le resulta fácil seguir
haciéndolo.Elúnicoproblema(comoyahabíadescubiertoantes)esque,unavezempiezas,cadaveztienesquedecirmásymásmentiras.
DespuésdequeLiz seha ido,Bettydecide ir a suhabitaciónparaver la ropanuevaque sehacomprado.Alabrirelarmario,descubrequeestávacío,perodebajodelacamaencuentraunacajadecartónenlaquepone:TANQUEINFINITO.AlrecordarquelaropaquevestíaLizleibamuyjustaylavoluminosabolsadeplásticoquellevaba,decideirabuscarasunieta.EnCómohablarconunaadolescente queacabademorir también se dice queunodebe saber cuándoyanodebedarlemásespacioaunaadolescente.
Antes de ir al Pozo, Liz vuelve a la Cubierta de Observación para echar un vistazo a AmadouBonamy.Quiereverloporúltimavezantesdehacerquelometanenlacárcel.
—Hacíayavariosdíasquenovenías—observaEstherfrunciendoelceñodesdeelinteriordelataquillaacristalada—.Esperabanovolveravertemásporaquí—añade.
Lizpasapordelantedeellasinresponderle.Comoalguienestásentadoantelosprismáticosnúmero15,losqueellasiempreusa,utilizalos
delnúmero16.IntroduceunsoloeternimporlaranurayseponeamiraraAmadouBonamy.Vequeeltaxistase
dirigeatodapastillahaciaunlugar.Aparcadelantedeuncolegiodeenseñanzaprimaria,elmismoalquevaelhermanodeLiz.Seapresuraasalirdelcoche.Entraeneledificio.Recorreelrecinto.Alfinaldelpasilloleesperaunmaestroconunniñopequeñocongafas.
—Havomitadoenlapapelera—diceelmaestro—.Noqueríaquelellamásemos.—¿Te duele la barriguita, cielo?—le pregunta Amadou a su hijo doblando una rodilla para
quedarasualtura.Hablaconundulceacentofrancéshaitiano.Elniñoasienteconlacabeza.—Tellevaréacasa,wibébé?—¿Hoynotienesquetrabajarconeltaxi?—preguntaelniño.—Non,non, ya recuperarémañanael dineroquenohepodidoganarhoy—respondeAmadou
cogiéndoloenbrazosyhaciendounguiñoalprofesor—.Graciasporhabermellamado.Losprismáticossecierranconunchasquido.Elcorazónlelateconfuerza.Liztieneganasdedarunpuñetazoaalguienoderomperalgo.Pero
debeirsedelaCubiertadeObservación,sinoseleharátarde.Alsalirvequelaplayaestádesierta.Sesacalostejanosylacamiseta,peroenlugardemeterseen
elaguayempezarasumergirseenelmar,sesientaenlaarena,conlasrodillaspegadasalpecho,yseponeapensarenAmadouysuhijopequeño.Cuantomáspiensaenellos,másconfundidasesienteymásdeseadejardepensarenambos.
Oyequealguienlallamaporsunombre.—¡Liz!EsBetty.—¿Cómosabíasqueestabaaquí?—preguntasinatreverseamirarlaalosojos.—Nolosabía.PeroestabaseguradequenoteencontraríaenlafiestadeThandi.Lizasienteconlacabeza.—¡Eraunabroma!—dicesuabuelaobservandoeltrajedeneoprenodesunieta—.Enrealidad,
encontrélacajadeltanquedeoxígenobajotucamaypenséquequizáestabasplaneandoestablecer«contacto».
—¿Estásenfadadaconmigo?—preguntaLiz.—Al menos ahora sé en qué te has gastado el dinero—dice Betty—. ¡Estaba bromeando de
nuevo!Enellibroqueestoyleyendodicequeesbuenoafrontarunasituacióndifícilconsentidodelhumor.
—¿Quélibro?—preguntaLiz.—SetitulaCómohablarconunaadolescentequeacabademorir.—¿Yteestáayudando?—Pueslaverdadesqueno—respondeBettymeneandolacabeza—.Yahorahablandoenserio,
megustaríaquenomehubierasmentido,peronoestoyenfadadacontigo.Ojalámehubieraspedidoconsejo,peroséquenoteresultafácilhacerlo.Probablementetengastusrazones.
Liz,conmovidaporlaspalabrasdesuabuela,piensaqueAmadouseguramentetambiéntuvosusrazonesparanodetenerse.
—Vialhombrequeconducíaeltaxi.Merefieroalcochequemeatropelló—diceLiz.—¿Cómoes?—Pareceunabuenapersona—haceunapausa—.¿Sabíasquesedioalafuga?—Sí—respondeBetty.—¿Porquénosedetuvo?Unabuenapersonalohabríahecho.Yéltienepintadeserlo.—Estoyseguradequeloes,Liz.Laspersonasqueconocemosnosonbuenasnimalas.Algunas
vecessonunpocobuenasybastantemalas.Yotras,unpocomalasybastantebuenas.Ylamayoríadenosotroscaemosenuntérminomedio.
Lizrompeallorarysuabuelalaabraza.Deprontosabequenolediráanadie—hoynicualquierotrodía—queAmadoueraelconductordel taxide labuenasuerte.Sabequenoserviríadenada.SospechaqueAmadouesunabuenapersona.Debehaberunabuenarazónporlaquenosedetuvo.Yaunquenolahubiera,Lizseacuerdaderepentedeundetalle,dealgoquenohabíaqueridorecordarentodoesetiempo.
—Betty—diceentresollozos—,eldíaquefuialcentrocomercialnomiréaambosladosdelacallealcruzar.Laluzdelsemáforoyaestabaenverde,peroyonolaviporqueestabapensandoenotracosa.
—¿Enquépensabas?—inquiereBetty.—¡Enunaestupidez!Pensabaenmirelojdebolsillo,enquehabíaolvidadocogerloparallevarlo
aarreglaralcentrocomercial.Yamelohabíadejadoencasaenvariasocasiones.Estabapensandosimequedabatiempoparadarmediavueltaeirabuscarlo,peronoacababadedecidirme,porquealnollevarningúnrelojencima,nosabíalahoraqueera.Fueungrancírculovicioso.¡Oh,Betty,fuepormiculpa!¡Sólopormiculpa,yahoraestoyatrapadaaquíparasiempre!
—Aunqueteparezcaquevayaaserparasiempre,sóloseránquinceaños—dicedulcementesuabuela.
—Elque él vaya a la cárcelnomedevolverá lavida—susurraLiz—.Nohaynadaquepuedahacerlo.
—Entonces,¿leperdonas?—No lo sé, quiero hacerlo, pero…—su voz se apaga. Se siente vacía. La ira y el deseo de
venganzaledabanfuerzas.Peroalnotenerasusantiguasamigasparaquelaapoyen,ahorasólolequedaunasolapregunta:¿quévaahacer?
—Volvamosacasa—dicesuabuelacogiendolabolsadeplásticoconunamanoysacudiendolaarenadeltrajedeneoprenodeLizconlaotra.
Tomanelcaminomáslargoparavolveracasa.Elaireestivalescálidoyeltrajedeneoprenoselepegaalapiel.
Enun jardínunniñoyunaniñacorreteanporel céspedentre losaspersoresaunqueya seadenoche.
Enunporcheunhombremuyanciano,encorvadoyenjuto,sentadoenunamecedora,agarradelamanoaunabellajovenpelirroja.Lizpiensaqueelancianodebeserelabuelodelajoven,hastaquelos ve besarse. «Te amo», susurra la mujer al oído del anciano. Lo contempla como si fuera lapersonamásmaravillosadelmundo.
Enotrojardínotrosdosniñosmásomenosdelamismaedadjueganalanzarselapelotaconun
desgastadoguantedebéisbol.—¿Quieresqueentremosyaencasa?—lepreguntaunodelosniñosalotrohaciendounapausa.—No,papá,sigamosjugando—respondeelotro.—¡Sí,juguemostodalanoche!—exclamaelprimero.LizcontemplarealmentelacalledeBettyporprimeravez.Sedetienenenlaentradadelacasadepiedrarojizadesuabuela,pintadaenunvivotonopúrpura.
(Porextrañoqueparezca,Liznosehabíadadocuentadeellohastaahora.)Elaireestivalestácargadodelperfumede las floresdeBetty.Elaroma,piensaLiz,esdulcey
melancólico.Separeceunpocoalamuerteyalenamoramientoalmismotiempo.—NovoyairmásalasCubiertasdeObservación,Betty,voyabuscarmivocación,ycuandola
encuentretedevolverétodoeldineroquemehasprestado,teloprometo—diceLiz.—Te creo —responde su abuela mirándola a los ojos—. Y te lo agradezco mucho —añade
tomandolamanodesunietaentrelassuyas.—Sientomucho lo del dinero—diceLiz sacudiendo la cabeza—.No sé si te has dado cuenta,
perotodoestetiempo…Creoqueestabaunpocodeprimida.—Losé,cielo—replicasuabuela—,losé.—Betty,¿cómohaspodidoaguantarmetodoestetiempo?—inquiereLiz.—Supongoque,alprincipio,porOlivia—respondeBettydespuésdereflexionarunosmomentos
—.Teparecesmuchoaella.—No creo que a nadie le guste que le digan que le aprecian porque se parece a sumadre—
observaLiz.—Hedicho,«alprincipio»—puntualizasuabuela.—¿Asíquenolohicistesólopormamá?—¡Claroqueno,cariño!Lohiceporti.Ypormí.Sobretodopormí.Durantetodoestetiempo
mehesentidomuysola.—¿DesdequellegasteaEnOtroLugar?—Me temo que ya lo estaba mucho antes—confiesa Betty lanzando un suspiro—. ¿Te contó
algunaveztumadreporquédiscutimosellayyo?—Tuviste una aventura amorosa —afirma Liz—, y durante mucho tiempo mamá no te lo
perdonó.—Sí,escierto.Enaquellaépocamesentíamuysolaydesdeentoncesmehesentidoasí.—¿Tehasplanteadovolverasalirconalguien?—inquiereLizcondelicadeza.Bettysacudelacabezayseechaareír.—Yahetenidobastanteconelamor,merefieroalamorromántico.Hevividodemasiadosañosy
hevistodemasiadascosas.—Mamáteperdonó,¿sabes?Delocontrarionomehabríapuestotunombre.—Quizá. Creo que se sintió triste cuando yo fallecí. Y ahora te sugiero que nos vayamos a
acostar.PorprimeravezLizduermeprofundamente,sinsoñar.AntessiempresoñabaconlaTierrapor
lasnoches.Aldespertarseporlamañana,llamaaAldousGhentparapreguntarlesiaúnestálibreeltrabajo
delDepartamentodeAnimalesDomésticos.
Sadie
—¡Tu primer trabajo verdadero! —exclama orgullosa Betty—. ¡Qué maravilloso, cariño!Recuérdame que te haga una foto cuando lleguemos. Esta mañana estás muy callada —añadeechándoleunarápidaojeadaalverqueLiz,sentadaenelasientodelpasajero,noleresponde.
—Sóloestabapensando—diceellaesperandoquenoladespidanalprimerdía.Apartedehacerdecanguro,Liznuncahabíatenidoun«verdaderotrabajo»antes.Noesqueno
quisiera,inclusoqueríatrabajarenelcentrocomercialcuandoaZooeylesalióuntrabajoenél,perosuspadresnoladejaban.«Tutrabajoeselinstituto»,solíadecirlesupadre.
Y sumadre también era de lamisma opinión: «Ya tendrás tiempo de trabajar», le decía. PeroahoraLizpiensasonriendoburlonamentequesumadresehabíaequivocadodellenoestavez.
Pero lo quemás le preocupaba era lo de aprender canino. ¿Y si no era capazde entender estalenguayacababandespidiéndolatardeotemprano?
—Meacuerdodemiprimerempleo—dicesuabuela—,cuandotrabajéenelguardarropadeunclubnocturnodelaciudaddeNuevaYork.Enaquellaépocateníadiecisieteañosytuvequementirydecirlesqueteníadieciocho.Ganabacincuentaydosdólaresalasemana,locualmeparecíaentoncesundineral—sonríealacordarsedeello.
CuandoLizsaledelcoche,BettylehaceunafotoconunaantiguaPolaroid.—¡Sonríe, cielo!—le ordena su abuela. Liz fuerza los músculos de su boca en un gesto que
esperaqueparezcaunasonrisa—.¡Quételopasesmuybien,cariño!¡Vendréarecogertealascinco!—añadeBettydespidiéndoseconlamano.
Liz,tensa,asienteconlacabeza.Contemplacómoelcocherojodesuabuelasealejaytienequereprimirsudeseodeecharacorrertrasél.ElDepartamentodeAnimalesDomésticosseencuentraenungran edificio de forma triangular, en la acera opuesta en la que está elRegistro.El edificio seconocecomoelGranero.Lizsabequedebeentrareneledificio,perosehaquedadoparalizada.Estásudando y tiene una extraña sensación en el estómago. Se siente como el primer día que fue alinstituto.Respirahondoysedirigealaentrada,porquesillegastardeaunacitaseguroquelascosasteiránmal.
Abrelapuerta.Veaunaapresuradamujerconunosafectuososojosverdesyunamasadepelorizadopelirrojo.Visteunpetotejanocubiertodepelodeperroydegato,ydealgoqueparecenserplumasverdes.
—SoyJoseyWu,ladirectoradelDAD—dicetendiéndolelamano—.¿EresElizabeth,laamigadeAldous?
—Liz—puntualizaella.—Esperoquenotemolesteelpelodeperro.—¡Quéva!,noesmásqueunregalitoquedejan.Joseysonríe.—Hoynostenemosunmontóndetrabajoquehacer,Liz,oseaquepuedesempezarponiéndote
estaropa—dicelanzándoleunpetotejano.CuandoLizvaalcuartodebañoparaponerseelpantalón,veaunaperradelgadaylarguirucha,
detallamedianaypelajerubio,deunarazaindeterminada(esdecir,unchucho),bebiendodelváter.—¡Eh,preciosa!—lediceLiz—,nobebasdeahí.Laperralevantalamiradayladealacabezacontemplándolaconcuriosidad.—¿Acasonoeselbebedero?—lepreguntaaLiz—.¿Paraquéserviríasinoestechismetanbajo
lleno de agua? Incluso puedes conseguir agua fresca tirando de este asidero, ¿verdad? —dicehaciendounademostraciónytirandodelacadenaconsupataizquierda.
—No—lediceLizconsuavidad—.Enrealidadesunváter.—¿Unváter?—preguntaelcan—.¿Quéeseso?—Puesesunlugaralquevalagente.—¿Alquevalagente?¿Paraqué?—Puesyatelopuedesimaginar—diceLizcondelicadeza.Laperracontemplaasombradalatazadelváter.—¡Rayos!¿Quieresdecirquetodoestetiempoheestadobebiendodeunlugardondeloshumanos
hacen pis y…?—exclama asqueada, a punto de vomitar—. ¿Por qué nadie me lo ha dicho hastaahora?¡Heestadobebiendodelváterduranteaños!Nosabíaloqueera,porquesiemprecerrabanlapuertaalentrarenél.
—Tepondréaguadelapila—diceLizlocalizandounpequeñocuencoyllenándolodeagua—.¡Toma,preciosa!
Laperralameelaguaconfruición.DespuésdebeberledaaLizunlametónenlapierna.—Gracias—exclamaagradecida—.Ahoraquelopienso,creoquemisbípedosintentaronevitar
quebebieradelváter.Billy,miamo,siempreprocurabacerrarlatapa—admitedándoleunlametón,ydespuésotro,yotro—.Silohubierasabido,habríadejadodehacerlohacemucho.Porcierto,mellamoSadie.¿Ytúcómotellamas?
—Liz.—Encantadadeconocerte,Liz—respondeSadieofreciéndole lapataparaquese laestreche—.
Lapalmélasemanapasada.Estelugaresmuyextraño.—¿Cómoperdistelavida?—Mientrascorríatrasunapelotauncochemeatropelló—cuentaSadie.—Amitambiénmeatropellóuncoche—explicalachica—,loúnicoesqueyoibaenbicicleta.—¿Teníasunperro?—inquiereSadie.—¡Oh,sí!Lucy.Eramimejoramiga.—¿Quierestenerunnuevoperro?—preguntaSadieladeandolacabeza.—¿Terefieresaquesiquieroadoptarte,preciosa?—diceLiz.Sadiebajalacabezatímidamente.
—Nosésimiabuelamedejará,peroselopreguntaréestanoche,¿vale?Joseyentraenelcuartodebaño.—¡Estupendo,Liz,mealegrodeverqueyaosconocéis!—exclamarascándoleaSadie lazona
entrelasorejas—.Eselprimerperrodelqueteocuparás.Sadieasienteconsusuaveyrubiacabecita.—Porcierto,Aldousnomedijoquehablarascanino—señalaJosey.—Esque…—tartamudea—,enrealidadnolohablo.—¿Qué quieres decir?—pregunta Josey—. Si acabo de oírte mantener una conversación con
Sadie.YentoncesLizsedacuenta.¡EstabahablandoconSadie!Sonríe.—Nuncalohabíahabladoantes.Oalmenosnosabíaquepudierahablarcanino.—Pues parece que lo hablas sin haberlo aprendido. ¡Qué increíble! En toda mi vida sólo he
conocidounpuñadodepersonasconestafacultadinnata.¿Estásseguradequenoteenseñaronestalenguaenalgunaparte?
Lizniegaconlacabeza.—Siempreheentendidoa losperrosyellosmehanentendidoamí—admiteellapensandoen
Lucy y en el perro del parque—.Aunque no sabía que fuera una lengua, una habilidad que debíaaprenderse.
—Puesparecequeestásdestinadaatrabajaraquí,Liz—observaJoseydándoleunaspalmaditasenlaespalda—.Ven,vamosairamioficina.Discúlpanos,Sadie.
—Teacordarásdepreguntárseloatuabuela,¿verdad?—diceSadiemirandoaLiz.—Teloprometo—respondeellarascándoleentrelasorejasantesdesalirdellavabo.
—ComoorientadoradelDepartamentodeAnimalesDomésticos, tucometidoconsistebásicamenteenexplicarleacadanuevoperroquelleguetodosobrelavidadeEnOtroLugaryenencontrarleunnuevohogar.Tenencuentaqueparaalgunosperrosserá laprimeraconversaciónquemantendránconunserhumano.Puederesultarunpocohirsuto,enambossentidosdelapalabra—señalaJosey,obviamentenoeralaprimeravezquehacíaestabromaaalguien.
—¿Esuntrabajomuydifícil?—preguntaLiz.—No.Losperrossonmuchomásflexiblesqueloshumanosyaunquenosotrosnosiemprelos
entendamos, ellos nos entienden lamar de bien—responde Josey—.Lomás importante es hablarcaninoytúyasabeshablarlo.Oseaquenotepreocupes,Liz.Todolodemáspuedesaprenderlosinningúnproblema.
—¿Yquéhaydelosotrosanimales?—inquiereLiz.—ComoorientadoradelDepartamentodeAnimalesDomésticos,tratarássobretodoconperros,
peroaquítambiénnosocupamosdetodoslosotrosanimalesdomésticos:gatos,algunoscerdos,ydevez en cuando una serpiente, conejillos de Indias o algún otro animal.Aunque los peores son lospeces,porquesemuerentandeprisaquesepasanlamayorpartedeltiemponadandodeunmundoalotro.
EnesemomentoSadieasomalacabezaporlapuertadelaoficina.—¿Noteolvidarásdepreguntárselo,verdad?
—No,peroahoraestoyocupada,Sadie—respondeLiz.Laperritabajalacabezayseva.JoseyseechaareírylesusurraaLiz:—¿Sabes?Nopuedesllevartetodoslosperrosqueconozcasacasa.—¡Heoídoloquehasdicho!—gritaSadiedesdelaotrahabitación.—Ytambiéndescubrirásquetienenunoídomuyfino—añadeJosey—.Ven,mostrarétuoficina.
DespuésdeSadie,LizseocupadeuninseguroypequeñochihuahuallamadoPaco.—Pero¿dóndeestáPete?—preguntaPacomirandoconsusintensosojitoslaoficinasinventanas
deLiz.—Losiento,peroprobablementenoloverásduranteunabuenatemporada.Éltodavíaestáenla
Tierra—leexplicaella.—¿Crees quePete está enojado conmigo?—inquierePaco—.A vecesmemeo en sus zapatos
cuandosevadecasaymedejasolomucho tiempo,peronosésisedacuenta.¿Quizáni lonota?¿Creesquesedacuenta?Soyunperromalo,muymalo.
—EstoyseguradequePetenoestáenfadadocontigo.Nopuedesverleporquehasmuerto.—¡Oh!—exclamaPacoenvozbaja.Porfinlohacomprendido,piensaLiz.—¿Loentiendesahora?—preguntaella.—Creoquesí—respondePaco—,pero¿dóndeestáPete?Lizlanzaunsuspiro.Unosmomentosdespuésvuelveaexplicárselounavezmás.—¿Sabes,Paco?,yodurantemuchotiempotampocoestabaseguradedóndemeencontraba…
CuandoLizsaledetrabajarporlanoche,Sadielasiguehastaelcoche.—¿Quéhaceesteperroaquí?—preguntaBetty.—EsSadie—respondeLiz—.¿Puedollevármelaacasa?—añadeellaenvozbaja.SadiecontemplaexpectanteaBetty.LaabueladeLizsonríe.—Porloqueparece,Sadieyahatomadoladecisión—laperralameelrostrodeBettylocade
alegría—.¡Ay!—exclamaella—,bienvenidaalafamilia,Sadie,mellamoBetty.—¡Hola, Betty! —le saluda Sadie saltando al asiento trasero—. ¿Sabías que me pusieron el
nombre de una canción de los Beatles?Mi nombre entero es Sexy Sadie, pero no tienes por quéllamarmeasí,anoserquequieras.Quierodecirqueesunnombreunpocopresuntuoso,¿nocrees?
—¿Quéestádiciendo?—preguntaBettyaLiz.—SadiedicequelepusieronelnombredeunacancióndelosBeatles—traduceLiz.—¡Oh,sí,laconozco!Lacancióndice«SexySadie,¿quéhashecho?»oalgoparecido,¿verdad?—¡Sí,exactamente!Ésaeslacanción!—gritaSadieponiendounadesuspatitassobreelhombro
deBetty—.¡Eresungenio!—exclamamientrasinterpretaladrandolacanción.Lizvuelveareírconunabonitayfrescarisa.—¡Quérisamáspreciosa tienes,cariño!—dicesuabuela—.Creoquees laprimeravezque la
oigo.
ElPozo
Pese al modesto sueldo que cobra en el Departamento de Animales Domésticos, Liz le devuelverápidamenteasuabuelaloseternimsqueledebía.Prontodescubrequeaúnlesobranunoscuantosyqueenrealidadnohaynadaenloquepuedagastárselos.Viveconsuabuelaylepagaunapequeñacantidad por la habitación y la comida; pero no necesita un seguromédico, ni un seguro para elcoche (pordesgracia), ni un seguro contra todo riesgo, ni ningunaotra clasede seguro; tampocotienequeahorrarparapagarlaentradadeunacasa,niparalajubilación,niparalauniversidad,niparalosestudiosdesushijos,niparacelebrarunaespléndidabodaounnacimiento,niparaningunaotra cosa.Tampocoha vuelto a ir a laCubierta deObservación.Le gustaría comprarse un coche,pero¿dequéleserviríasinotieneelcarnédeconducir?Cuandonoteestáspreparandoparalavejez,lasenilidad,lasenfermedades,lamuerteniloshijos,hayrelativamentepocascosasenlasquepuedesgastarteeldinero,piensaLizlanzandounsuspiro.
—Aldous ¿qué se supone que debo hacer con todos esos eternims? —le pregunta Liz a suorientadorduranteunadelasreunionesquehacencadamesparahablardesusprogresos.
—Comprartealgoqueteguste—sugiereél.—¿Comoqué?—¿Comounacasa?—preguntaAldousencogiéndosedehombros.—Nonecesitounacasa.YatengoladeBetty—respondeella—.¿Dequémesirveiratrabajarsi
nonecesitorealmenteloseternims?—Vasatrabajar…—Aldoushaceunapausa—porquetegusta.Poresosellamaunavocación.—¡Ah,entiendo!—AtiElizabethtegustatutrabajo,¿noescierto?—Nomegusta—respondeLiztrasreflexionarunosmomentos—,meencanta.Hacesólounmesquehaempezadoaponerenprácticasuvocaciónyyasehaconvertidoenuna
delasmejoresorientadorasdelDepartamentodeAnimalesDomésticos.Seencuentraenunainusualyenvidiablesituación:esexcelenteensutrabajoyleencantahacerlo.EltrabajolehaayudadoaquesuprimerveranoEnOtroLugarpasararápidamente.Lehahechoolvidarsedequeestámuerta.
LiztrabajamuchashorasyelpocotiempolibrequelequedalopasaconBetty,SadieoThandi.(Al cabo de poco de empezar a trabajar en el Departamento de Animales Domésticos, le pidiódisculpasasuamigayéstalaperdonórápidamente.)Intentanopensarensuspadresniensuhermano
alláenlaTierra.Ylamayorpartedeltiempo,loconsigue.InclusolograconvenceraThandiparaqueadopteaPaco,elconfundidochihuahua.Alprincipio
elladudaba.—¿Estásseguradequeesunperro?Amímeparecemásbienunarata—diceThandiaLiz.Pacotambiéntienesusdudas.—Noquierosergrosero,pero¿quiéneres?TúnoeresPete—preguntaelchihuahuaalachica.—No,soyThandi,perosiquierespuedesconsiderarmetunuevoPete.—¡Ah!—exclamaPacopensativamente—.Creoqueporfinloentiendo.Estásqueriéndomedecir
quePetehamuerto,¿verdad?—Elchihuahuasehabíaahogadoenunapiscinainfantil,peropor lovistosehabíavueltoaolvidardeello.
—Puedesverlodeesaforma,siloprefieres—diceThandipalmeándoleconsuavidadlacabeza.Cadanoche,despuésdesalirdetrabajar,lasdosvanapasearconPacoySadieporelparqueque
haycercadelacasadeBetty.UnadeesasnochesLizlepreguntaaThandi:—¿Eresfeliz?—Estartristenosirvedenada—respondesuamigaencogiéndosedehombros—.Aquíhaceun
climamuyagradableymegustatrabajarenlatele.—¿Te acuerdas de cuando yo creía que todo era un sueño?—diceLiz—.Me cuesta creer que
llegaraapensaralgoparecido,porqueahoratodomeparececomolavidaenlaTierra,ytodocuantomeocurrióantes…avecesmeparececomounsueño.
Thandiasienteconlacabeza.—Algunosdías—diceLiz—mepreguntosiestoestodoloquehay.Silavidaconsistesóloen
trabajarysacarapasearalperroynadamás.—Ysifueraasí,¿quétienedemalo?—preguntaThandi.—¿Esquenoechasenfaltaunpocodeaventura?¿Ounarelaciónamorosa?—¿Morirnofuepara tiunaaventura losuficientementeexcitante?—diceThandisacudiendola
cabeza—.Amíyamebastaymesobraconello.—Sí—respondeLizalfin—.Supongoquetienesrazón.—Creoquetúyaestásviviendounaaventura,peronisiquieratedascuenta—señalasuamiga.Y,sinembargo,hayalgoqueLiznopuedesacarsedelacabeza.Dentrodedossemanassupadre
cumplirácuarentaycincoaños.VariosmesesantesdesucumpleañosLizhabíaestadoenlasecciónmasculinadeLord&TaylorconZooey.MientrassuamigahabíaestadocomprandounosboxersdesedaquequeríaregalarleaJohn,sunovio,eldíadeSanValentín(nosabíasicomprarleunosconunosdiminutoscupidosquebrillabanenlaoscuridadounosconunpardeosospolaresbesándoseabrazadosparatodalaeternidad),Lizhabíavistounjerseydecachemirdecolorverdemarqueeradelmismotonoquelosojosdesupadre.Eljerseycostabacientocincuentadólares,peroeraperfectopara él. Ella había ahorrado esta cantidad trabajando de canguro durante varios meses. Su partelógicadelcerebrohabíaempezadoaprotestar.«Aúnfaltamuchoparaelcumpleañosdetupadre—ledecía—.Eljerseyesunpocoextravagante—insistía—.Quizápuedasconvenceratumadreparaquelocompre.»Peroellahabíaignoradolavoz.Sabíaquesinocomprabaeljerseyahora,alvolveralatienda probablemente ya no lo encontraría. (Nunca se le ocurrió que podía ser ella la quedesapareceríadelmapa.)Además,noqueríaquelocomprarasumadresinoregalárseloellaconsupropiodinero.Asíseríaunregalomásauténtico.Despuésderespirarhondo,habíadejadoeldinerosobre elmostrador y lo había comprado. En cuanto llegó a casa, había envuelto el jersey con un
bonito papel y había escrito una tarjeta de cumpleaños para su padre.Después había escondido elregalo en el estrecho espacioquequedabadebajodeunaplanchademadera sueltade su armario,dondeestabaseguraquenadieloencontraría.
Detodaslascosasporlasquesepodíapreocupar,laideadequesupadrenuncaibaarecibireljerseyqueellalehabíacompradolatorturabadeunamanerairracional.Supadrenuncasabríaqueellasehabíagastadocientocincuentadólaresenél.Quizásufamiliaacabarayéndoseaviviraotrolugary supadrenuncaencontraseel regaloni sabríaqueella loamaba tantoque incluso lehabíacomprado el perfecto suéter de color verdemar. Seguiría oculto en aquel lugar, hasta atraer a laspolillas y acabar convirtiéndose en unas inidentificables hebras de lana de chachemir de colorverdemar.Lizpiensaqueunjerseytanbonitonosemereceunfinaltantrágico.
Sabequeestablecer«contacto»esilegal,peroseniegaacreerqueuninsignificantejerseypuedacausarle grandes problemas. Si de algo está segura es de que al regalárselo ayudará a su padre aaceptarmejorsumuerte.
AsíqueporsegundavezLizdecideirbuceandoalPozo.Yatieneelequipoyestavezloharáporunabuenarazón.Además,lavidaesmejorconunpocodeaventura.
Llega a la playa al ponerse el sol. Bucear hasta el Pozo es el proyecto más ambicioso que haemprendidohastaahora.Nosabelaprofundidadquetendrá,niquéesloqueencontraráalllegaralpuntomásprofundo.Perodecideolvidarsedetodasesaspreocupaciones.CompruebaelindicadordeoxígenodesuTanqueInfinitoporúltimavezyselanzaalagua.
Cuantomásdesciende,másoscura está el agua.Liz siente a su alrededor la presenciadeotraspersonas.SeguramentetambiénestányendoalPozo,piensa.Durantesudescenso,distinguedevezencuando vagas formas y misteriosos susurros que le producen una extraña y casi espeluznantesensación.
Por fin llega al Pozo. Es el lugarmás triste y silencioso de todos los que ha conocido.Da laimpresióndesereldesagüedeunfregadero.Delaaberturaemanaunaintensaluz.Lizmetelacabezaen ella, dentro de la luz. De pronto ve su casa en Carroll Drive. La imagen de su hogar apareceborrosa,comounaacuarelaabandonadaalsol.Enlacocina,sufamiliaestásentadaalamesaparacenar.
LizhablaconlacabezadentrodelPozo.Suvozsuenadistorsionadaalestarbajoelagua.Sabeque debe elegir las palabras cuidadosamente para que puedan entenderla. «SOY LIZ. BUSCADDEBAJODELASTABLASDEMADERADELARMARIO.SOYLIZ.BUSCADDEBAJODELASTABLASDEMADERADELARMARIO.»
De pronto, todos los grifos de la casa de Liz se abren de golpe: el agua empieza a salir aborbotones de las duchas y las pilas, del lavavajillas e incluso del váter. Su padre, sumadre y suhermanosemiranunosaotrosperplejos.Lucyseponealadrarconinsistencia.
—¡Quéextraño!—dicesumadrelevantándoseparacerrarelgrifodelacocina.—Debehaberalgúnproblemaconlastuberías—añadesupadreantesdeiralbañoparacerrarla
duchayelgrifodellavabo.SóloAlvysiguesentadoenlamesa.Depronto,oyeundébilyagudosonidosaliendodelgrifo,
peroaúnnosabeaquésedebe.LizvedesdeelPozocómosuhermanoserecogeelpelodetrásdelasorejas.¡Quélargololleva!,piensa.¿Porquénoselohabrácortado?
Después de cerrar los grifos, sus padres se sientan de nuevo a la mesa. Al cabo de cincosegundos,elaguavuelveasaliraborbotones.
—¡Malditascañerías!—exclamasupadrelevantándoseparacerrarlosgrifosporsegundavez.Cuandosumadreestátambiénapuntodelevantarse,Alvyapartadeprontosusilladelamesay
grita:—¡CALLAD!—¿Quépasa?—preguntaalarmadalamadre.—Nohagáisruido—ordenaAlvyconunaseguridadquenoeshabitualenunniñodeochoaños
—,yporfavornocerréislosgrifos.—¿Porqué?—preguntansuspadresalunísono.—EsLizzie—diceAlvyenvozbaja—.Creoquepuedooírla.Eneseinstantesumadreprorrumpeensollozos.ElpadremiraatónitoaAlvy.—¿Esalgunaclasedebroma?—lepregunta.Elniñopegalaorejaalgrifo.LograentenderlavozdeLiz.«ALVY,SOYLIZ.HAYALGOPARAPAPÁDEBAJODELASTABLASDEMADERADEMI
ARMARIO.»Élasienteconlacabeza.—Selodiré,Lizzie.¿Estásbien?Liz no puede contestarle, porque en ese instante alguien le echa una red encima y empieza a
sacarladelagua.Intentazafarsedelaredmoviendofrenéticamentelosbrazosylospiernas.Perosusesfuerzosson
envano.Cuantomás intenta librarse,conmás fuerza leaprieta la red.Lizcomprende rápidamentequeesinútilintentarescapar.Lanzaunsuspiro,aceptandoconeleganciasumomentáneaderrota.Almenossaldrámásdeprisaalasuperficiequesilohubierahechobuceando.
La red la saca del agua con una asombrosa velocidad, casi como si fuera la escena de unainmersiónvistaalrevés.Alprincipiolepreocupaquepuedacontraerlaenfermedaddelbuzo.Peroprontodescubrequelaredpareceprotegerlaconsupropiosistemadepresurización.¡Quéextraño,piensa ella, que En Otro Lugar las redes tengan un mecanismo tan avanzado! ¿Por qué unacivilizaciónquerríadesarrollarunasredestansofisticadas?Quizáseapara…Lizintentaolvidarsedetodosestospensamientosparaconcentrarseenlasituaciónenlaqueseencuentra.
Aunque lahayanatrapado in fraganti, suestadodeánimoesbueno.Estácasi seguradeque sumisiónhasidotodounéxito.Porsupuesto,nadielahabíaavisadodelaextrañaformaenlaquesecomunicaríacon losvivosdesdeelPozo: suvozdistorsionada sehabíaoídoporel ruidosogrifocomounaairadatetera.¿Serunfantasmaeraesoenelfondo?
Liz se agarra a la red. Se pregunta adónde la están llevando. Sin duda su viaje al Pozo la hametidoenproblemas.Peroalpensarenello,sealegradehaberido.
Al llegar a la superficie, se prepara para afrontar el frío aire nocturno. Aunque su traje deneoprenoseadebuenacalidad,seponeatemblar.Alsacarselasgafasdebuceo,veunremolcadorblanco enmedio del agua y la borrosa figura de un hombre de pelo negro de pie en la cubierta.Cuandoseencuentrayamáscercadelbarco,Lizvequeesapersonallevagafasdesol,aunqueseadenoche.CalculaqueprobablementeesmayorqueellaymásjovenqueCurtisJest.(AunqueEnOtroLugar calcular la edad de alguien es un asunto muy peliagudo.) Su cara le es familiar, pero norecuerdadóndelahavisto.
LaredseabreyLizesarrojadasinmiramientosalaembarcación.Encuantoentraencontactoconladuracubierta,elhombrelesueltaconvozsevera:
—ElizabethMarieHall,soyeldetectiveOwenWelles,delDepartamentodeDelitosyContactosSobrenaturales.¿Sabesqueal intentarestablecer«contacto»con losvivoshasviolado la leydeEnOtroLugar?
—Sí—respondeLizconseguridad.OwenWellesparecesorprendidopor la respuesta.Estamujer,omásbienestachica,admitede
buengradohabervioladola ley,cuandolamayoríadelagentealmenosintentafingirnosaberlo,piensa.
—¿Podrías,porfavor,quitartelasgafas?—lepideLiz.—¿Porqué?—Porquequierovertelosojos.Quierocomprobarhastaquépuntomehemetidoenunproblema
—explicaellasonriendo.AldetectiveOwenWellesnolegustala ideadesacarselasgafas.Nuncavaaningunapartesin
ellas,porquecreequeledanunaspectomásautoritario.¿Yporquésonríeellaalpedírselo?—Aestashorasyanolasnecesitas.Despuésdetodo,esdenoche—añadeLiz.Owenestáempezandoairritarse.Odiaquealguienlepregunteporquéllevagafasdesolporla
noche.Ahorasíquenopiensaquitárselas.—OwenWelles—repiteLizenvozalta—.O.Wellessuenacomo¡Oh,Pozos!—diceriéndosede
supropiabroma,aunsabiendoquenoesdemasiadobuena.—Exactamente,yamelohabíandichoantes—observaélsinreírse.—¡Oh,Pozos!—repiteellayluegoseríedenuevo—.¿Notepareceextrañoqueunapersonacon
unapellidoquesignifica«Pozos»eninglésseocupedevigilarelPozo?—¿Quétienedeextraño?—preguntaOwen.—Que es una rara coincidencia, supongo—alegaLiz—.Mmm…, ¿podrías decirme cuál es el
castigoquemerezco,olamulta,loquesea,paraquepuedairmeacasa?—Anteshedemostrartealgo.Sígueme—lediceél.OwencruzaconLizlacubiertaprincipalparaacompañarlaauntelescopioquehayenlapopa.—Miraporél—leordena.Ellaobedece.EltelescopiofuncionadeunaformasimilaralosprismáticosdelasCubiertasde
Observación.Almirarporél,veelinteriordesucasadenuevo.Suhermanoestáarrodilladofrentealarmariodesuspadresbuscandofrenéticamenteunasplanchasdemaderasueltas.Alvynodejademurmurarseasímismo«Medijoqueestabaenelarmario».
—¡Oh, no! —exclama Liz—. Lo está buscando en el armario equivocado. ¡Alvy, está en miarmario!
—Nopuedeoírte—lerecuerdaOwen.LizpuedeveratravésdeltelescopioasupadregritandoalpobreAlvy.—¡Saldeahí!—gritasupadretirandoasuhijoporelcuellodelacamisacontantafuerzaquese
lodesgarra—.¿PorquéteinventasestashistoriassobreLizzie?¡Ellaestámuertaynoquieroqueteinventesesoscuentos!
Alvyseechaallorar.—¡Noselahainventado!¡Sólomehaentendidomal!—gritaLizconelcorazónacelerado.—¡Nomelaheinventado!—protestaAlvy—.Lizmelohadicho.Ellamedijo…—seinterrumpe
alverquesupadrelevantalamanoparadarleunbofetón.—¡NO!—gritaLiz.—ElizabethHall,nopuedenoírte—lerecuerdaOwen.Enesemomentosupadresedetienedegolpe.Respirahondoybajalentamentelamano.Lizve
cómosedesplomayseechaallorarenelsuelo.—¡Oh,Lizzie!—exclamasollozandoinconsolablemente—.¡Lizzie!¡MipobreLizzie!¡Lizzie!Laimagendeltelescopiosedesdibujayluegodesaparece.Lizseapartadeél.—Mipadrenuncanoshapegado—diceconunhilodevoz—,ysinembargohaestadoapuntode
darleunbofetónaAlvy.—¿Lovesahora?—preguntaOwenconsuavidad.—¿Siveoelqué?—Quenoesunabuenaideahablarconlosvivos,Liz.Creesque losestásayudando,perosólo
empeoraslascosas.EllasevuelvedeprontohaciaOwen.—¡Esportuculpa!—exclama.—¿Pormiculpa?—HabríahechoqueAlvyentendieraloqueleestabadiciendositúnomelohubierasimpedido
capturándomeconlared—LizseacercaaOwen—.¡Quieroquemellevesdevueltaallugar!—¡Nilosueñes!Esincreíble,¡quémorro!—Sinomeayudas,loharéyomisma—diceellacorriendoalextremodelremolcador.Owenla
persigueparaevitarqueselancealagua.—¡SUÉLTAME!—gritaella.PeroélesmásfuertequeLizyéstayaha tenidoun largodía.De
súbitosesientemuycansada.—Losiento—sedisculpaOwen—.Losientomucho,peroasíescómotienequeser.—¿Porqué?—preguntaLiz—.¿Porquédebeserasí?—Porquelosvivostienenqueseguirconsuvidaylosmuertosconlasuya.Lizmuevelacabezamostrandoincredulidad.Owen,comprensivo,sequitalasgafasdesolrevelandounosojosnegrosenmarcadosporunas
largaspestañas.—Porsitesirvedeayuda—dice—,sécómotesientes.Yotambiénfallecíjoven.Liz contempla su rostro.Al no llevar las gafas de sol, ve que él sólo es algomayor que ella,
probablementetieneunosdiecisieteodieciochoaños.—¿Cuántosañosteníascuandollegasteaquí?Owenhaceunapausa.—Veintiséis—respondealfin.Veintiséis,piensaLizamargamente.Tenerveintiséisañosesmuydistintodetenerquince.Alos
veintiséisestáshaciendotodoaquelloconloquesoñabasalosquince.CuandoporfinLizhabla,lohacecon lamelancólicavozdeunapersonamuchomásmadurade loque lecorrespondepara suedad.
—Yotengoquinceaños,señorWelles.Nuncacumplirédieciséis,ydentrodepocotiempovolveréatenercatorce.Noiréalbailedelinstituto,nialauniversidad,niaEuropa,nianingúnotrolugar.NisiquieramepodrésacarelcarnédeconducirenMassachusettsniterminarelinstituto.Nuncaviviréconalguienquenoseamiabuela.Nocreoquepuedassaberloqueyosiento.
—Tienesrazón—admiteélenvozbaja—.Sóloqueríadecirqueaningunode losqueestamosaquínosresultafácilseguirconnuestravida.
—Yo ya estoy siguiendo adelante con la mía —dice Liz—. Sólo necesitaba dar este últimomensaje a mis padres. Dudo que hubiera hecho que las cosas cambiaran, salvo para mí, peronecesitabahacerlo.
—¿Dequésetrataba?—preguntaOwen.—¿Porquétendríaquedecírtelo?—Es por el informe que tengo que redactar—responde él.Aunque por supuesto, esto sólo es
verdadenparte.Lizlanzaunsuspiro.—Puessetratadeunjerseydecachemir,decolorverdemar,quehabíaescondidodebajodeunos
listonesdemaderasueltosdemiarmario.Queríaregalárseloamipadreeldíadesucumpleaños.Elcolordeljerseyhacejuegoconsusojos.
—¿Unjersey?—preguntaOwenincrédulo.—¿Quéhaydemaloenello?—preguntaasuvezLiz.—Noquieroofenderte,perolamayoríadelagentedecideiralPozoporquetieneunosasuntos
másimportantesqueresolver—explicaélmoviendolacabezaconincredulidad.—Puesparamíeraimportante—insisteLiz.—Merefieroaunasuntodevidaomuerte.Comolalocalizacióndeunoscuerposenterrados,el
nombredeunasesino,untestamento,dinero.¿Entiendesloquequierodecirte?—Losiento,peroparamíeslomásimportantequemehapasadoentodamivida—confiesaLiz
—.Sólosoyunachicaqueseolvidódemiraraunladoyaotroantesdecruzarlacalle.Lospitidosdeunasirenaenmediodelanieblaindicanqueelremolcadorhallegadoalpuerto.—¿Estoyahorametidaenunproblema?—preguntaintentandoquesuvozsueneanimada.—Comohasidotuprimerdelito,notepasaránada.Perotendréquecomunicárseloatuconsejero
deaclimatación.¿EsAldousGhent,verdad?Lizasienteconlacabeza.—Ghentesunbuenhombre.DurantelasseispróximassemanasnopodrásiralasCubiertasde
Observaciónyademástengoqueconfiscarteelequipodebuceoduranteesetiempo.—¡Deacuerdo!—diceLizaltiva—.¿Puedoirmeyaacasa?—Si vuelves a ir al Pozo, temeterás en un serio problema.Espero no volver a verte por ahí,
ElizabethHall.Lizasienteconlacabeza.Mientrassedirigeandandoalaparadadelautobús,piensaenAlvyyensupadre,yentodoslos
problemasquelehacausadoasufamilia.Abatidayconlaropaligeramentemojada,sedacuentadequeprobablementeOwenWellestienerazón.Debepensarquesoyunaestúpida,sediceLiz.
PeroOwenWellesnotieneenabsolutoestaopinióndeella.LaspersonasquetrabajabanparaelDepartamentodeDelitosyContactosSobrenaturaleseran,la
mayoría de las veces, las que más problemas tenían para aceptar su propia muerte. Aunquesimpatizaran mucho con los violadores de la ley, comprendían demasiado bien que habían demantenerse firmescon losque intentabanestablecer«contacto»porprimeravez. Intentarcontactarconlosvivoseraunjuegomuypeligroso.
Porextrañoqueparezca,OwenWellessedescubrepensandoenesejerseydecachemirdecolor
verdemar.Nosabeporqué,peronopuedesacárselodelacabeza.SuponequesedebeaqueLizlehapedidoalgomuyconcreto.LamayoríadelaspersonasquevisitabanelPozonecesitabanqueselesimpidierahacerloporsupropiobien,sinoacabaríanobsesionándoseconlosdelaTierra.PeroelcasodeLizeradistinto.
¿QuéhaydemaloenqueelpadredeLizrecibasujersey?,sepreguntaOwen.Talveztrashaberperdidoasuencantadorahijaquefallecióenlaflordelavidasuspadressesientanunpocomejoraltenerlo.
Unpedacitodehilo
CuandosesentíaestresadaLizacariciabainstintivamentelospuntosdeencimadesuorejaylanochequehabíaidoalPozohabíaacabadosiendounaexperienciamuyestresanteparaella.Almeterseenlacama,descubrequeelhilode lospuntoshadesaparecido.Porprimeravezenmeses, lloray lloradesconsoladamente.
Supone que debe haberlo perdido durante la inmersión, probablemente a causa de la intensapresiónydelagrancantidaddeagua.Lizestádesesperada,porquehaperdidoparasiempreelúltimoobjetoquelequedabadelaTierra.Inclusoseplanteairabuscarlo.Perorechazaenseguidalaidea.Enprimer lugar, porque le hanprohibidobucear, y en segundo, aunqueno se lo hubieranprohibido,porque sería una locura intentar encontrar un hilo (que en realidad era de poliéster) demenos deochocentímetrosdelargoydeunmilímetrodegrosorenmediodelmar.
Se toca la cicatriz con el dedomeñique.Apenaspuede sentirla.Sabeque tambiéndesaparecerápronto.Ycuandoestoocurra,serácomosinuncahubieraestadoenlaTierra.
Lizseechaareíralpensarenelmardelágrimasquehaderramadoporunpedacitodehilo,eneldramaquehamontadoporunjersey.Suvidasereduceauncarretedehilo.Ahoraquelopiensa,noestáseguradecuándoloperdió.Laverdadesquenohanecesitadotocárselodemasiadodesdequehaempezadoadedicarse a suvocación.En realidad,ni siquiera se acuerdade cuándo se lo tocóporúltimavezantesdeestanoche.Quizáyahicierauntiempoquelohabíaperdido(¿otalvezlospuntosestabancosidosconesehiloquesedisuelveynisiquieralohabíaadvertido?).Lizseechaareírdenuevo.
Aloírlareír,Bettyasomalacabezaporlahabitación.—¿Dequéteríes?Dímelo,asíyotambiénmepuedoreírunpoco.—Hoymehandetenido—comentaellariendo.Bettyseechaareír,peroluegoseponeseriadegolpeyenciendelaluzdelahabitacióndeLiz.—¿Esunabroma?—No.MehandetenidoporirbuceandohastaelPozo.Estabaintentandoentraren«contacto»con
papá—confiesaellaencogiéndosedehombros.—¡Liz!—¡Notepreocupes,Betty!,heaprendidolalección.Elviajehasalidomal.Siquierestecontaré
todalahistoria—diceella.
BettysesientaenlacamadeLiz.Despuésdehaberlaescuchado,ledice:—¿Sabíasquealgunaspersonasseahoganeneselugar?Nadievuelveaencontrarlas.Sequedan
enelfondodelocéano,mediomuertas.—Notepreocupes,yonovoyaahogarmeporquenopiensovolver—leaseguraLizconfirmeza
—.Lopeorde todoesqueelúltimorecuerdoqueAlvy tendrádemíesque lehementidoy lehemetidoenproblemas.Sihubierasabidoquenoibaaencontrareljersey,sólolehabríadicho:«¡Hola,Alvy!,eresungranhermanoytequiero».
—Élyasabequelequieres—diceBetty.Lizvuelveatocarselospuntos,peroyanoestánahí.—Betty,¿cómopuedodejardeañorarlaTierra?—Nopuedes—respondesuabuela.—Oseaquenotengoremedio—diceellalanzandounsuspiro.—¡Liz,yonohedichoeso!—exclamaamonestándolasuabuela—.Tengounaidea.Hazunalista
contodoloquemásechasdemenosdelaTierra.Piénsalobienantesdeescribirla.Noincluyasenellaunmontóndenombres,sinosólolosdelaspersonasquemásechasenfalta,porqueaquítambiénhayunmontóndegente.
—Vale,ydespués¿quéhagoconella?—Laarrojasalabasurayaceptasquenuncavasarecuperartodoesoointentasrecuperarlo.—¿Ycómopuedorecuperarlo?—preguntaLiz.—¡Ojalálosupiera!—respondeBetty.—¿Cuántascosaspuedecontenerlalista?—Detresacuatro.Cincocomomáximo.—Betty,noesciertoquepuedarecuperarloqueescribaenlalista,¿verdad?—¡Recuerda que acabas de pedirme consejo! —dice su abuela—. Y ahora es mejor que nos
vayamosadormir.Suabuelaapagalaluzysaledelahabitación.—¡Eh,Betty!—gritaLiz—.¡Gracias!—¿Porqué,cariño?—Por…—suvozseapaga—.Pornoestarhaciéndolonadamalcomoabuela—susurraLiz.
AldíasiguienteLizhacelalista.
1)Losbollosyel salmónahumadoque tomabaconmamá,papáyAlvy losdomingospor lamañana.2)Lasensacióndequeprontovaapasarmealgomuybueno.3)Variosolores:eldulceoloragalletasdemamá,elacreypenetranteolorajabóndepapá,elolorapandelevaduradeAlvy.4)Mirelojdebolsillo.
Liz lee la lista.Al ver lo que ha escrito, no está segura de lo que debe hacer con ella. ¿La tiro ointentorecuperartodocuantohayenlalista?¿Nopodríaserunacombinacióndeambascosas?
¿OquizáBettysóloestababromeandoconmigoaldecirmequepodíarecuperarlo?
Lizdaconlarespuesta.Seechaareírytiralalista.Porunmomentopiensaensurelojdebolsillo.¡Quéextrañoqueapenassehayaacordadodeél
desde que está En Otro Lugar! Había pertenecido a su padre y ella había estado soñando con élduranteañosantesdeobtenerlo.En laparte frontalhabíagrabada la figuradedosamantesenunagóndola, y en el interior, las iniciales de su padre: A. S. H. El reloj de plata hacía un peculiar yagradablesonido,casicomoeldeunatenuecampanitaysupadrelopulíatanamenudoqueteníaelcolordela luna.Alcumplir treceañossupadrelehabíadichoqueyaeralobastantemayorcomopara tener el reloj y se lo había regalado. Ella le había prometido que siempre lo limpiaría y lomantendríaenbuenestado.Perounmesantesdemorir,elrelojhabíadejadodefuncionaryahoraella se siente culpable por no haberlo llevado a reparar.Odia imaginar que su padre lo encuentreestropeadoypiensequenosehapreocupadodecuidarlocomoesdebido.
LainmersióndeOwenWelles
LamadredeOwenWelleseraprofesorauniversitariayelpadreunpintorde la ciudaddeNuevaYork.Laparejaadorabaaesteniñotansonriente,parlanchínyguapo,suúnicohijo.Owentuvounainfanciaagradableysintraumas.Alos treceañosconocióaEmilyReilly,unaniñapelirrojadesumismaedad.Emilyvivíaenlapuertadeallado.Owenresidíaenelpiso7CyEmilyenel7D.Losdormitoriosdeambosteníanunaparedencomún,demodoqueporlanoche,cuandosesuponíaqueestaban durmiendo, se enviabanmensajitos enmorse.Al cabo de poco aOwen le pasó lo que lesocurreamuchoschicosqueentablanamistadcon lavecinade lapuertadeal lado:seenamoródeEmily.Fueronjuntosalosbailesdelinstitutoyaotrasoportunidadesidealesparasacarseunabonitafoto,hastaqueterminaronelinstituto.
DespuésEmily fuea laUniversidaddeMassachusettsyOwena ladeNuevaYork.Trascuatroaños de estar pagando unas exorbitantes facturas telefónicas por las interminables conversacionesquemantenían,secasaronalosveintidósaños.
Enunarrebatodetradicionalismoquesorprendióatodoslosimplicados,EmilyinclusoadoptóelapellidodeOwen.EmilyReillyseconvirtióportantoenEmilyWelles.
Para ahorrar dinero, Owen y Emily se fueron a vivir a Brooklyn. Ella fue a la Facultad deMedicinayél seconvirtióenbombero.Noestabasegurodequerer ser siemprebombero,pero legustabaestetrabajoyerabuenoenél.
En el añoqueOwencumplíaveintiséis años falleciómientras combatía un incendiode lomáscomún.Unamujerdeochentayunañossehabíadejadoelfogóndelacocinaencendidoysupisoacabóardiendo.Owen localizó tresde losgatosde laancianafácilmente,peronopudodarconelcuarto, un joven gato blanco llamadoKoshka, que se había quedado dormido en un armario sinadvertirelfuego.NopudoencontraraKoshkahastalamañanasiguiente.Elgatoseestabalamiendofelizmente las patas a los pies de la litera de Owenmientras viajaban en elNilo. Tanto él comoKoshkahabíanmuertoasfixiados.«Tengosed»,maullóelgato.PeropordesgraciaOwennohablabagatuno.
Nosetomósumuertenadabien.Cuandoestásenamoradoteresultamuchomásdifícilmorirte.AcausadeEmily,OwenhizotodoloposibleporvolveralaTierra.Intentóregresarconelbarco,
perolodescubrieronantesdequezarpara.No fue laprimerapersonaenvolverseadictaa losprismáticosde laCubiertadeObservación.
GastóunaenormecantidaddeeternimsquelehabíanprestadocontemplandoaEmilyhastaquelosojosseleponíanvidriosos.
Intentó ir al Pozo ciento diecisiete veces, batiendo el récord de inmersiones ilegales. A vecesconseguíacomunicarseconEmily,peroloúnicoquelogróeshacerlacasienloquecer.Ellaloechabamuchísimo demenos y sus visitas semirregulares sólo hicieron que las cosas empeoraran. EmilydejódeiralaFacultaddeMedicina.SequedabaencasaesperandoaqueOwenregresara.Alfinalélcomprendióqueestabahaciendodañoasumujeryquedebíadejardeverla.Noqueríaarruinar lavidadeEmily.Comoeraunexpertoenestablecer«contactos»ilegales,lepareciódelomásnaturaleratrabajareneldepartamentoqueseocupabadeellos.
Owenteníaahoradiecisieteañosyhacíayanueveque trabajabaenestedepartamento.Noteníademasiadosamigosysólocontabaconalgunosparientesquerarasvecesveía.Unavezalasemana(nimás,nimenos)sepermitíairacontemplaraEmilyconlosprismáticos.Cadajuevesporlanocheveíacómoellaenvejecíamientrasélsevolvíacadadíamásjoven.Ellateníatreintaycincoañosysehabíaespecializadoenquemaduras.(ElotoñoquesiguióalamuertedeOwenvolvióalaFacultaddeMedicina.)Nuncasecasódenuevoyaúnseguíallevandolaalianza.Owentambiénllevabauna.LahabíacompradoEnOtroLugarparareemplazarlaquehabíadejadoenlaTierra.
EnundeterminadomomentocomprendióqueprobablementenuncavolveríaaveraEmily.Habíahecholoscálculos.LomásseguroeraqueparacuandoEmilyllegaraaEnOtroLugar,élyahabríaregresadoa laTierra.Habíaaprendidoavivirconestacerteza,peroaunquehubieran transcurridodiezaños,EmilyReillyseguíasiendolapersonamásimportantequehabíaensuvida.
Cuando la gente le preguntaba si estaba casado, él respondía que sí. Al hacerlo le daba lasensacióndeestarmintiendoydiciendo laverdadalmismotiempo.Comoes lógicoOwen teníaamenudolasensacióndeserunfarsante.¿Cómopodíaaconsejaralosdemásquehicieranloqueélhabía sido incapaz de hacer? Al conocer a alguien como Liz, se sintió muy avergonzado. En suopiniónelladeseabadeverasseguirconsuvidayél lehabíafrenadoeneseproceso.Owensentíaquedebíasubsanareldañoquelehabíacausado.
Así que decidió ir buceando al Pozo, la primera inmersión que iba a realizar por una razónpersonalenmuchosaños.
Al echar un vistazo desde el borde del Pozo, localiza rápidamente la casa deLiz enMedford,Massachusetts. Descubre a Alvy sentado a la mesa de la cocina, bebiendo un vaso de zumo demanzana.
Como Owen ha hecho ya tantos viajes al Pozo, tiene mucha experiencia en cómo establecer«contacto».PoresocuandohablaatravésdelPozo,sóloseabreelgrifodelacocina.
—Hola—diceOwen.Alvylanzaunsuspiro.—¡Tehasequivocadodecasa!LaúnicapersonamuertaqueconozcoesmihermanaLizzie.—YotambiénconozcoaLiz.—¿Ah,sí?—exclamaAlvy—.Cuando laveasdilequeestoymuyenfadadoconellaporqueno
encontrénadaenelarmarioymemetióenungranproblema.—Lobuscasteenelarmarioequivocado—diceOwen—,estádebajode los listonesdemadera
sueltosdelarmariodeLiz.Alvydejaelvasosobrelamesa.—¡Québien!¿Yquiénerestú?
—SupongoqueunamigodeLiz.Porcierto,ellasientemuchohabertemetidoenproblemas.—Puesdilequelaechodemenos—respondeAlvy—.Yquelamayorpartedeltiempofueuna
buenahermana.¡Ah!,ydiletambién¡felizdíadeAccióndeGracias!demiparte.ElpadredeLizentraenlacocina.Cierraelgrifo.—¿Porquéhasvueltoaabrirelgrifo?—lepregunta.—Seabriósolo—lerespondeAlvy—.Papá,noteenfadesconmigo,perohedemostrartealgoen
elarmariodeLiz.Owen se queda para ver a Alvy subiendo las escaleras y conduciendo a su padre hasta la
habitacióndeLiz.Observacómoapartaunlistóndemaderasueltoquehabíaenlaparteizquierdadelarmarioysacaunacajaenvueltaenpapelderegaloyconunatarjetaquepone:PARAPAPÁ.
Cuando Owen sale a la superficie una hora más tarde, sus colegas del departamento le estánesperando.
—Penséquetegustaríasaberquetupadreyatieneeljersey—explicaalgoincómodoOwenporlanochefrentealescritoriodelaoficinadeLiz,antesdelacenadeldíadeAccióndeGracias.AunqueEnOtroLugarnoseaundíafestivo,muchosamericanossiguencelebrandoestedíadetodosmodos.
—¿FuistealPozopormí?—Tuhermano…¿SellamaAlvy,verdad?Lizasienteconlacabeza.—Alvyme ha dicho que te desee «feliz día deAcción deGracias» de su parte—añadeOwen
volviéndoseparairse.—¡Espera!—exclamaLizsujetándoloporelbrazo—.Esperaunminuto,aúnnopuedes irte—
añadeelladándoleunabrazo—.¡Gracias!—Denada—respondeélconbrusquedad.—¿Legustómijersey?—preguntaLiz.—Leencantó.Hacíajuegoconsusojostalcomodijiste—alpronunciarestaspalabrasOwense
dacuentadequeeljerseytambiénhacejuegoconlosojosdeLiz.Ellasesientaenlasilladesuescritorio.—Nosécómoagradecértelo.—Sólohehechomitrabajo.—¿Darleamipadreunjerseyformapartedetutrabajo?—Bueno,técnicamenteno—admiteOwen.—¿QuémástedijoAlvy?—Medijoquefuisteunabuenahermana.Quelofuistelamayorpartedeltiempo.LizseechaareírycogeaOwendelamano.—VenacenaramicasaparacelebrarconnosotraseldíadeAccióndeGracias.Bueno,noes
mía,sinodeBetty.Bettyesmiabuela.—Yo…—empiezaadecirélmirandoaotraparte.—¡Claro!—exclamaLiz—,comoestantardeyadebestenerotrosplanes.Owen lopiensaduranteunmomento.Nunca tieneotrosplanes.Siempre suele evitar las fiestas
como el día de Acción de Gracias, las celebraciones en las que la gente se reúne con sus seresqueridos.Aunquehayan transcurridoyadiez años, tener cualquierotroplan leparece traicionar a
Emily.Normalmentesuelepasarlasfiestasespecialescenandosoloencasa.—¡EstodeldíadeAccióndeGraciasesmuyextraño!—diceOwenporfin—.¿Porquétantosde
nosotrosloseguimoscelebrandoaquí?¿Lohacemossóloporinercia?¿Osimplementeporquesehahechosiempre?
—Escucha,notienesporquévenirsi…—Ylagente—le interrumpeOwen—,apenaspiensaenel significadode la fiestapara losdel
país,y en realidadesta celebraciónno tienenadaquever con loqueocurre aquí.Y, sin embargo,cuandollegaeldíadeAccióndeGracias,siempre,peseatodo,meapetececelebrarloyquierotenerbuenospropósitosycomerpastel.Esalgoqueestágrabadoenmicabeza.¿Porqué?
—Sé loquequieresdecir.Esteúlimomesde septiembreyoaúnseguíaqueriendocomprar loslibrosdetextodelinstituto,aunquesabíaqueyanoibaairmásaél—confiesaLiz—.Sinembargo,estecasoesunpocodistintodelqueestamoshablando.YocreoquelohacemosparaseguirsiendocomolaspersonasdelaTierra.Oparasentirnoscercadeellas.Comemospastelporquesabemosqueellasestánhaciendolomismo.
Owenasienteconlacabeza.Laconversaciónsobrepasteleslehaabiertoelapetitoy¡ahoralehanentradoganasdecomerseuno!
—¿Aquéhoravoyentoncesatucasa?—lepreguntacontodatranquilidad.
EldíadeAccióndeGracias
—Esperoquenoteimporte,peroheinvitadoaunapersonamás—leanunciaesanocheasuabuela.LizyahabíainvitadoaAldousGhentyasuesposaRowena;aThandiyShelly,laprimadesuamiga;aPaco, el chihuahua, y a varios consejeros del Departamento de Animales Domésticos. TambiénhabíainvitadoaCurtisJest,peroéldeclinósuofertaalegandoqueerainglésyquelafiestaleparecía«másbiensensiblera».
—¡Cuantosmásseamos,másreiremos!—exclamaBetty.EnlaTierrasiemprelehabíangustadolasfiestasyahora,enelmásallá,inclusolegustabanmásaún—.¿Quiénes?—pregunta.
—OwenWelles.—¿Has invitado a ese desagradable joven que te creó todos esos problemas en el Pozo? —
inquieresuabuela.El«episodioqueLizhabíatenidoconlaley»(talcomoBettylollamaba)lehabíadolidomucho.
—Sí—respondeLiz.—Creíquenotecaíabien—observasuabuelalevantandolacejaizquierda.—Yasíes.Peromehahechounfavoryalsaberlomedejéllevarporlaemoción—comentaLiz
lanzandounsuspiro—.Laverdadesquenomeimaginéquevendría.Ycuandoaceptó,yanopodíaecharmeatrás,¿verdad?
—No—asienteBettyechándoseareír—.¿Yquiénvaaserelsiguiente,Liz?¿Talvezinvitarásaunexasesinojubilado?
—¡Voyaversiencuentrouno!—exclamaLizriendo—.Porcierto,¿loshayaquítambién?
EldíadeAccióndeGracias,aligualqueocurreenlaTierra,oalmenosenEstadosUnidos,caeenjueves.
Aldous yRowenaGhent son los primeros en presentarse, y luego lleganThandi yShelly, quetraenunospasteles,yPaco,ataviadoconunbonitovestidoparacelebrarlaocasión.
ElúltimoenllegaresOwenWelles.Sehapasadolamañanainventandounasbuenasexcusasparanoacudiralafiesta(¿lafosasépticahaestallado?,¿unaemergenciaeneltrabajo?).Peroenelúltimomomento decide ir. Estos días tienemás tiempo libre del habitual, porque le han sancionado porhaberidoalPozoacausadeljerseyylehanprohibidotrabajarduranteunmes.Alllegar,leregala
unaplantaenunamacetaalaabueladeLiz.EnOtroLugareldíadeAccióndeGraciasescomoelquesecelebraenlaTierra,salvoporel
detalledequetodoslospresentesestánmuertos.ComoaBettylegustanlasfiestas,peroodiacocinar,ha encargado la cena a una empresadecatering, curiosamente a lamisma a la queOwen recurrecuandopideunacenaenundíaespecial.Bettysirvealoscomensalessalsadearándano(detarroycasera), puré de patatas, boniatos, relleno de pan de maíz, salsa, panecillos de levadura, judíasestofadas, setas rellenas, los cuatro pasteles de Thandi y Shelly (de manzana, pacana, calabaza yboniato)ypavovegetalhechocontofu(unplatovegetarianodesabormuypeculiar).
Bettysirveelvinoblanco llenando losvasosde los invitadoshastaelborde.AunqueLizyahaprobadoelvinoantes,eslaprimeravezquesuabuelaseloofrece,yestedetallehacequesesientacomounapersonaadulta.
—Me gustaría hacer un brindis—diceBetty después de servir el vino—.Un breve brindis—añadeaclarándoselagarganta—.Todoshemostenidoquehacerunlargoviajeparallegarhastaaquí—prosigueyluegohaceunapausa.
—¡Brindemos!¡Brindemos!—gritaAldous.—¡Aúnnoheterminado!—exclamaBetty.—¡Oh,losiento!—sedisculpaAldous—.Creíquehabíasdicho«unbrevebrindis».—Sí,peronomereferíaaunotanbreve—protestaBetty.—Ycomoademáshashechounapausa…ObservaAldous.—¡Eraparacausarunmayorefecto!—exclamaBetty.—Puesunbrindistanbrevehabríasidoperfecto—diceRowenaGhent.—Yo prefiero los brindis breves—confiesa Thandy—. Algunas personas hacen unos brindis
interminables.Ylavidaesmuycorta,comoyasabéis.—Ylamuertetambiénloes—terciaOwen.—¿Esunabroma?—lepreguntaLiz.—Sí—respondeOwen.—Mmm…—murmuraLizdespuésdereflexionarenellounmomento—.Noestámal.Owenlehaceunguiño.—Cuandotienesquepensartantoenunabroma,significa…Bettyseaclararuidosamentelagargantayvuelveadecir:—Todoshemostenidoquehacerunlargoviajeparallegarhastaaquí—yluegohaceunapausa,
peroestaveznadielainterrumpe.MiraaRowena,aAldousyaOwen,sentadosasuderecha,yaLiz,a Shelly y a Thandi, sentadas a su izquierda. Luegomira debajo de lamesa, dondePaco ySadietienensuspropiosplatosdecomida.ASadielegruñeelestómago.
—¡Losiento!—ladraSadiedisculpándose.—Yanomeacuerdode loquequeríadecir.Brindemosentonces—prosigueBettyechándosea
reír.—Brindemosporlarisa—diceShellylevantandosuvasoenalto—.Enlacasadenuestroabuelo
siempresolíamosbrindarporella.—¡Oh,quéideamásbonita!—exclamaRowena—.¡Porlarisa!—¡Porlarisayelolvido!—añadeLizdirigiendounatraviesasonrisaaBetty.—¡Porlarisayelolvido!—dicentodosacorolevantandosusvasosenalto.Lizsaboreaelvino.
Loencuentraamargoydulcealmismotiempo.Altomarelsegundosorbo,leparecemásdulceque
amargo.
Despuésde terminardecomerydepasaral tradicionalestadodecomade lasobremesa,OwenseofreceparaayudaraLizalavarlosplatos.
—Vale,túloslavasyyolosseco—lediceella.—¡Perolavarloseslapeorparte!—protestaOwen.Lizsonríe.—Mehasdichoquequeríasayudarmeynoquesóloibasasecarlos.Élsearremangalamangaizquierdaydespuésladerecha.Lizadvierteuntatuajeensuantebrazo
derecho. Es un gran corazón rojo con las palabras «Siempre te querré, Emily» grabadas en elinterior.
—Nosabíaquefuerasasí—observaélenuntonotravieso.—¿Quefueracómo?—Pueslaclasedechicaquehacelavarlosplatosaloschicos—puntualizaOwen.Lizobservacómoélsequitalaalianzaylacolocaconcuidadoenelbordedelfregadero.Aúnno
haacabadodeacostumbrarsealaideadequealosdiecisieteañosOwenpuedaestaryacasado.PeroEnOtroLugarestosindudaocurreconrelativafrecuencia.
LizyOwenempiezanalavaryasecarlosplatosaunbuenritmo.Mientrasloslava,élseponeasilbarunamelodía.AunqueLiznoseaexactamenteunafandeestaprácticanileguste,almenoslatolera.Enrealidad,loquelegustanoeslamelodía,sinoelquelasilba.
Despuésdeestarsilbandovariosminutos,OwensevuelvehaciaLizyledice:—Siquierespuedesacompañarme.—Graciaspor tubonitoofrecimiento,peroen realidad…—Lizhaceunapausa—nomegusta
silbar.Élseechaareír.—¡Perosiheestadosilbandodurantemásdediezminutos!¿Porquénomelohasdicho?—Bueno,comoyatehehecholavarlosplatos,noqueríaprohibirteencimaquesilbaras.—¿Prefieresquetararee?—No,no,pormípuedesseguirsilbando.—¡Eh, qué sólo estoy intentando entretenerte! —exclama él echándose a reír de nuevo. Un
segundomástarde,LizseuneaOwen.Aunquenohayandichonadaespecialmentedivertido,losdosnopuedenevitarreírseacarcajadas.Lizinclusotienequedejardesecarlosplatosysentarseacausadelataquederisa.Hacíamuchotiempoquenosereíaasí.Intentarecordarcuándofuelaúltimavez.
La semana antes demorir, ella y Zooey se habían estado probando unos jerseys en el centrocomercial. Al contemplarse en el espejo del probador, Liz había dicho a su amiga: «Mis pechosparecenpequeñostipis».Zooey,queteníaunospechosinclusomáspequeños,habíareplicado:«Silostuyossonunostipis,losmíossonunostipisquemadosporloscowboys».Poralgunaextrañarazón,estaobservaciónleshabíaparecidomuydivertidaaambas.Sehabíanestadoriendotantoycontantafuerzaquelavendedorahabíaidoaverquélespasabayleshabíapreguntadosinecesitabanayuda.
Esteepisodiohabíaocurridoenmarzo,yahoraeraelmesdenoviembre.¿Eraposiblequehicieraochomesesquenosereíatanto?
—¿Quétepasa?—lepreguntaOwen.
—Estaba pensando que hacíamucho tiempo que nome reía tanto—admite Liz—.Muchísimotiempo—añadelanzandounsuspiro—.Fuecuandoyoaúnvivía,mientrasestabaenunatiendaconZooey,mimejoramiga.Ylomáscuriosoesqueaquelloquenoshabíahechotantagracianisiquieraeradivertido,¿sabes?
Owenasienteconlacabeza.—Lasmejoresrisassonporcosasporelestilo—comentaélmientraslavaelúltimoplatoyselo
entregaparaqueloseque.Cierraelgrifoyvuelveaponerseelanillo.—Supongoqueechodemenosmihogar—admiteLiz—.Peroesunasensaciónhorrible,porque
séquenuncapodréregresaraélnivolveréaveramifamilia.—Liz,estonosólonosocurrea losquevivimosEnOtroLugar—diceOwen—.Inclusoen la
Tierra es difícil poder volver siempre a los mismos lugares o seguir estando con las mismaspersonas.Encuantotedaslavuelta,aunqueseaporuninstante,alvolvertedenuevodescubresquetodohacambiado.
Ellaasienteconlacabeza.—Intentonopensarenello,peroavecesmevienedeprontoalacabezay,¡zaaasss!,meacuerdo
dequeestoymuerta.—Loestáshaciendomuybien,¿losabías?—observaOwen—.CuandoyolleguéaEnOtroLugar
estuveenganchadoalasCubiertasdeObservaciónunañoentero.—Amímepasólomismo—confiesaLiz—,peroahorayaestoymejor.—Enrealidadesunareaccióndelomásnormal.Sellamaelsíndromedelespectadoryalgunas
personas nunca se curande él—deprontoOwenmira su reloj—. ¡Ya son las nueveymedia y laCubiertadeObservacióncierraalasdiez!Losientomucho,Liz,perohedeirmeahoramismo,cadajuevesporlanochevoyaveraEmily,miesposa.
—Yalosé—respondeLiz—.HacevariosmesestevienlaCubiertadeObsservaciónsentadoamiladoytepreguntéaquiénibasaver.
Owen seacuerdaahoravagamentedeunachicamarchita conel cabello sucioyundesgastadopijama.Alcontemplaralajovendelímpidosojosquetienedelantesepreguntasipuedeserlamismapersona.
—¿Llevabasunpijama?—pregunta.—Enaqueltiempoestabaunpocotriste.—Ahora tienesmuchomejoraspecto—observaOwen—.Muchasgraciaspor lacenaydáselas
tambiénatuabuelademiparte.SadieentraenlacocinajustoenelmomentoqueOwenseva.Apoyasudoradacabecitarizadaen
elregazodeLizparaindicarlequequierequeselaacaricie.—Nadiemeamaránuncadeesemodo—lecomentaLizasuperra.—Tequiero—respondeSadie.—Yotambiéntequiero—lediceLiz.Losperrossonlosúnicosquemequieren,piensaella.
OwenllegaalaCubiertadeObservacióncincominutosantesdequecierren.AunqueEsthernopuededejarentraranadiediezminutosantesdelcierre, como loconoce lo saludaalverlocon lamanodiciéndole:
—Estanochellegastarde,Owen.
Élsesientafrentealosprismáticosdesiempre,meteuneternimporlaranuraypegalosojosalaslentes.DescubreaEmilyenunadesustípicasposturas:sentadaanteelespejodelcuartodebañocepillándosesulargacabellerapelirrojaconuncepillodeplata.Lacontemplacepillándoselodurantetreintasegundosmásyluegoseva.
Estoymalgastandomimuerte,sediceasímismo.Soycomounadeesaspersonasquesepasanlavidamirandolateleenlugardemantenerunasrelacionesverdaderas.HacecasidiezañosqueestoyaquíyEmilysiguesiendolapersonamásimportantedemivida.Yellacreequeyoestoymuerto.Ydehecholoestoy.Miactitudnoleestáhaciendoningúnbienaellanitampocoamí.
Alirse,OwenlediceaEsther:—¿Quéestoyhaciendoaquí?—¡Notengoniidea!—respondeella.Mientrassedirigealcoche,decidellamaraLizaltrabajolapróximasemana.Quizáadoptarun
perroseaunbuencomienzo,piensa.
Unmisterio
¿Porquéseenamorandospersonas?Esunmisterio.CuandoOwenllamaaLizelmartes,vadirectoalgrano.—¡Hola,Liz!,estabapensandoenadoptarunperro—diceél.—¡Claro!—respondeella—.¿Haspensadoenalgunoenespecial?—Pueslaverdadesqueno.Supongoquemegustaría tenerunperroquepudierallevármeloal
trabajo.—¿Unopequeño?—Mientrasnoloseademasiado,yamevabien,ytambiénmegustaríapoderllevármelocuando
salgoacorrer,deexcursiónocuandohagoalgunaotracosaporelestilo.—¿Asíquequieresunolobastantegrandecomoparaquenoseapequeño?—preguntaLizriendo.—Exactamente,quierounpequeñogranperro—diceOwen tambiénriendo—.Ypreferiríaque
fueramacho.—¿Porquénotepasasporaquí?—lesugiereLiz.AlllegarOwenporlatarde,Lizlepresentavariosposiblescandidatos.Paraqueunaadopciónse
lleveacaboEnOtroLugar,elperroyelhumanohandeestardeacuerdo.Enrealidad ladecisióndependemásdelcanquedelhumano.
LosperrosseacercanunoporunoaOwenylehuelenlamanoyelrostro.Algunoslelamenunpocolamanosiloencuentranaceptable.Comoélnohablacanino,Lizletraduceloquelosanimaleslepreguntan.
—¿Puedodormirensucamaoéltienepensadohacermedormirenuncolchónparaperros?—preguntaunahembragoldenretrieverllamadaJen.
—¿Quédice?—preguntaOwen.—Quieresabersipuededormirentucama.Owencontemplaalagoldenretrieverylerascalacabezaentrelasorejas.—¡Caramba!, no había pensado en ello, pues no sé, ¿nopodríamos decidirlo sobre lamarcha,
preciosa?—¡Claro!—respondelagoldenretrieverasintiendoconlacabeza—,peromegustamuchoverla
teleacostadaenelsofá.Nomeharásbajartodoeltiempodeél,¿verdad?—Quieresabersiladejarásestarenelsofá—traduceLiz.
—¡Porsupuesto!—contestaOwen—,nohayningúnproblema.—¡Deacuerdo!—diceJen, lagolderretriever,despuésdepensarlounmomento, lamiéndolela
manoaOwentresveces—.Dilequemeiréconél.—Dicequeteacepta—traduceLiz.—¿No es un poco precipitado?—pregunta él—. No quiero herir sus sentimientos, pero… ya
sabes,preferíaunperromacho—añadeenvozbaja.Lizseencogedehombros.—Ellayalohadecidido.Peronotepreocupes,losperrosnoseofendenporestetipodecosas.—¡Ah!—exclamaOwensorprendidoporlodeprisaqueestáyendotodo.—Además —añade Liz alegremente—, Jen ya te ha lamido la mano tres veces. Después de
hacerlo,eltratoestáhecho.—Nolosabía—respondeOwen.—Asíquesólotienesquerellenarunpardeformulariosylaadopciónestaráenregla.—Vale,pero¿podríaspreguntarlesisemareaalirenbarco?,porquepasomuchotiempoenuno
debidoamitrabajo—diceOwen.—Entiendo la lengua humana, ¿sabías?No todos los perros la entienden, pero yo soy uno de
ellos.Loúnicoquenoséeshablarla—terciaJen—.Yademásadorolosbarcosynomemareoenellos.Almenosnodemasiado,anoserqueelaguaestémuymovida.
—Jenentiendenuestroidiomaydicequeleencantanlosbarcos—traduceLiz.Lagoldenretrieverprosigueconsusinstrucciones.—Dilesobretodoquemegustabeberaguafrescatresvecesaldíayqueprefierocomidablanda
ynodura.Tambiénmegustan laspelotasde tenis, los largospaseosporelparquey jugarconunFrisbee.¡Ah!,ytambiénséutilizarelváter,oseaquedileporfavorquedejelapuertadelcuartodebañoabierta.¡Yayyayyayyay!¡Quécontentaestoy!—exclamaJenponiendounadesuspatassobreelhombrodeOwen—.¡Vamosallevarnosmuybien,Owen!
—¿Quéestádiciendo?—Quevasaocupartemuybiendeella—resumesabiamenteLiz.Despuésderellenartodoelpapeleodelaadopción,LizlosacompañaaljeepdeOwen.Jen salta
enseguidaalasientotraseroyseechaenél.—Graciasportodo—diceOwen.—Denada—respondeellasonriendo—.Apropósito,¿porquédecidisteadoptarunperro?—Aúnnomehabíadecididodeltodoaadoptarlohastaquelleguéaquí—respondeélsonriendo
—yJenhatomadoladecisiónpormí.Lizasienteconlacabeza.—ConSadietambiénmepasólomismo—admiteella.—Queríapreguntarte—diceOwentrasladandoelpesodesucuerpodeunpieaotro—siquieres
volveralavarlosplatosconmigo.—¿Lavarlosplatos?—inquiereLizdesconcertada.—Sí—respondeél—.Esmiextrañaformadedecirtesiquieresveniracasaacenar.—¡Ah!,¿setratabadeeso?Nolohabíaentendido—yesverdad,porqueLiznotienedemasiada
experienciaenestaclasedesituaciones.—EsparaagradecertelodeJen,¿sabes?Notendrásquelavarlosplatos,anoserquequieras,en
esecasoyonoteloimpediré.
—Hmmm…empiezaadecirella.—¡Liz,tienesunallamada!—legritaSadiedesdeelotroextremodelparking.—¡Tengo una llamada! —se disculpa dirigiéndose hacia su despacho, pero al cabo de un
momentosedetiene—.¡Llámamecuandoquieras,siempreestoyeneltrabajo!—añade.Owenlaobservamientrassedirigeasudespacho.Surubiacoladecaballo(elpelolehacrecido
yalosuficientecomoparallevarlorecogidodeesemodo)sebalancearítmicamentearribayabajoacadapasoqueda.Sucoladecaballomeproduceunasensaciónagradableyesperanzadora,piensaél.EsperaaqueLizentreeneledificioyluegosubealcocheyseva.
Devueltaacasa,Jenasomalacabezaporlaventanilladelcocheydejaquesusdoradasorejasondeenalviento.Sepasatodoelviajeladrando.
—Noséporquémegustatantosacarlacabezaporlaventanilla—diceJenaldetenerseelcocheen un semáforo en rojo—. Pero lo he hecho siempre, desde que era un cachorro. ¿No te pareceextraño?Esmuyraroquetegustealgosinsaberporqué,¿nocrees?
Al oírla Owen piensa que Jen está ladrando de excitación y en realidad su interpretación estotalmenteacertada.
¿Porquéseenamorandospersonas?Esunmisterio.AlcabodeunasemanaLizySadiesedescubrenenelapartamentomásbienpequeñodeOwen
Welles.Jenlasrecibebrincando.—¡Hola,Liz!¡Hola,Sadie!—exclamaexcitadísimaalverlas—.¡Mealegrodeveros!¡Owenesun
buenchico!¡Medejadormirensucama!¡Estoyintentandoconvencerloparaquesevayaaviviraunlugarmásgrandeconjardín!¡Intentacocinar,peronocreoqueseauncocinerodemasiadobueno!¡Aunquenoselodigáis,paranoherirsussentimientos!
OwensonríealveraLizyaSadieenlapuerta.—Pasad,vamosacenar.Esperoqueosgustelapasta.ApesardelaopinióndeJen,Owennoesunmalcocinero.(Todossabemosquelosperrosnoson
unosexpertosencocina.)YademásLizapreciamuchosusesfuerzos.Eslaprimeravezquealguienquenoesdesufamiliacocinaparaella.
DespuésdecenarLizseofreceparalavarlosplatos.—Estavezloslavaréyo,peronoesnecesarioquetúlosseques.Niquesilbesningunamelodía.Alterminardelavarlosplatos,Liz,Owen,SadieyJenvanalparquequehaycercadelacasa.—¿CómotevaconJen?—preguntaLiz.—¡Es fenomenal!—responde él sonriendo—.Nopuedo creer que yono haya tenido unperro
hastaahora.—¿NoteníasunoenlaTierra?—Nopodíamos—diceél—.Emilyeraalérgica.Ysupongoqueaúnloes.Lizasienteconlacabeza.—Dicessunombredeunaforma…—observaella—.Nopuedoimaginarquealguienpronuncie
nuncaminombredeesemodo.—¡Oh,yaverascomosíocurre!—exclamaél.—Lodigoenserio.—Temoriste siendo demasiado joven—observaOwen pensativamente—.Lomás probable es
que los chicos se sintieran intimidados por ti. Quizás alguien lo pronuncie de ese modo cuandovuelvasalaTierra.
—Talvez—diceLizconpococonvencimiento—.Tengomuchosplanesparacuandovuelva.—Dehaberlosabido,habríapronunciadotunombredeesemodo—señalaOwen.—¡Ah!—exclamaLiz—,perounapersonasólopuededecirdeesaformaelnombredesupareja.
Yasabes,esunaregla.Owenasienteconlacabeza,peronodicenada.SusilencioproduceenLizunextrañosentimiento,aunquenoesdeltododesagradable.Haceque
sesientamásatrevidaydecidepedirleaOwenunfavor.—Sinoquiereshacerlo,dímelo—empiezadiciéndoleella.—¡Nomeasustes!—exclamaOwen.Lizseechaareír.—Notepreocupes,notienesporquéasustarte,almenosesocreo.—Yademásyaséquepuedonegarmeaello.—EsqueestoyunpococansadadequeBettytengaquellevarmeconelcocheatodaspartes,pero
parasacarmeelcarnétengoqueaprenderahacerlaeleyaaparcarenparalelo,porquefallecíantesde…
—¡Claroquesí!—respondeOwenantesdequeLizhayaterminadodehablar—.Nohayningúnproblema.
—PodríapedírseloaBetty,perotuvimosunamalaexperienciaconelcoche…—Yatehedichoquenohayningúnproblema—lainterrumpeél.—¡Oh,muchasgracias!—diceLiz.—Sinembargo,nome importaríaquemecontaras esamalaexperienciaque tuvistéis—señala
Owen—.Enrealidad,quizádebaoírlaantesdeempezar.
¿Porquéseenamorandospersonas?Esunmisterio.DurantelasiguientesemanaLizyOvenseencuentrancadadíadespuésdeltrabajo.Ellaaprendea
hacerlaeleconrelativafacilidad,perolecuestamuchoaparcarenparalelo.—Sólohasdevisualizarteenelespacio—observaOwenconpaciencia.—Peropareceimposible—diceLiz—.¿Cómoalgoqueseestámoviendohaciadelanteyhacia
atráspuededesplazarsedeprontodeunladoaotro?—El truco está en los ángulos—señala él—.Tienesquegirar el volante lomáximoposible y
luegohasdemetertelentamentedandomarchaatrásenelespaciodelquedispones.TranscurreotrasemanayLiznohaaprendidoaúnnimuchomenosesadifícilmaniobra.Casiha
perdidolaesperanzadelograrloalgúndíayestáempezandoasentirsecomounainepta.—Liz—diceOwen—,estoycomenzandoapensarqueesalgopsicológico.Nohayningunarazón
porlaquenopuedashacerlo.¿Hayalgoqueteimpidaquereraprenderaaparcarenparalelo?Creoqueesmejorquelodejemosporhoy.
EsanocheLizcavilaenlarazóndesuineptitudydecidellamaraThandi.—¡Alfindasseñalesdevida!—exclamasuamiga.—He estado trabajando mucho —replica Liz—, y Owen Welles me ha estado enseñando a
conducir.
—Seguroquesí.—¿Quéquieresdecirconeso?—preguntaLiz.—Cuandofuimosapasearconlosperros,SadieledijoaPacoquetúhabíasestadoviendomucho
alseñorWelles.LizmiraaSadie,queestátumbadabocaarribaparaqueleacaricielabarriga.—¡Traidora!—lesusurraasuperra—.Thandi,élestáenamoradodeotrapersonayademásno
somosmásqueamigos—puntualizaLiz.—¡Yunrábano!—respondeThandi.Lizlecuentaquenoconsigueaparcarenparaleloylepreguntaasuamiga,unaconductoracon
casioncemesesdeexperienciaasusespaldas,sipuedesugerirlealgo.—Yocreoquenoquieresaprenderahacerlo,Liz.—¡Claroquequiero!—insiste ella—. ¡Pero es demasiadodifícil! ¡No es como todo lo demás!
¡No es lógico! ¡Tienes que visualizarte en el espacio, confiar ciegamente en ti y hacer juegos demanos!¡Escomoserunmalditoprestidigitador!
Thandiseechaareír.—¿Quizá no quieres que tus lecciones con Owen se acaben? Me captas, ¿verdad? Porque si
realmenteloquequeríaseraaprenderaaparcaryahacerlaele,melopodíashaberpedidoamí.—¿Ati?¡Sinisiquierahaceunañoqueconduces!—OaBetty—sugiereThandi.—¡Vengaya!¡Yaconoceslaexperienciaquetuveconella!—CreoqueteestásenamorandodeOwen—lediceThandienuntonosocarrón—.Enrealidad,
¡creoqueyatehasenamoraaadodeél!—añaderiendo.Lizlecuelgaelteléfono.Thandieraunaincreíblesabelotodo.Avecesnisiquierapodíacreerque
fuerasumejoramiga.Lasiguientenoche,lograaparcarenparalelotresvecesseguidassincometerningúnfallo.—¡Tedijequepodíashacerlo si teconcentrabasenello!—exclamaOweny luegomirapor la
ventanilla—.Supongoqueyahemosterminadoconlasclases—añade.Lizasienteconlacabeza.—Apropósito,¿quécreesqueeraloqueteimpedíahacerlo?—inquiereOwen.—Esunmisterio—respondeLizydespuésleentregalasllavesysaledelcoche.
Lizestáenamorada
—¿Cómosabesquetehasenamoradodealguien?—lepreguntaLizaCurtisJestduranteeldescansoquetienenparadesayunar.
—¿Meestásdiciendoquetehasenamoradodealguien?—inquiereéllevantandounaceja.—Setratadeunamigo—respondeellafríamente.Curtissonríe.—¿Me estás diciendo que te has enamorado de un amigo? ¿Me estás intentando decir algo,
Lizzie?Lizsesonroja.—Miinterésespuramenteantropológico—respondeella.—¿Antropológico? —repite él con una alegre expresión en los ojos que Liz considera
inapropiada.—¡Sinovasatomárteloenserio,mevoy!—exclamaellaindignada.—¡Caramba, que susceptibles estamos! ¡Sólo era una pequeña broma entre amigos, Lizzie!—
Comoellanoestáparabromas,Curtisseponeserio—.Deacuerdo,cariño,hablemosdeamor.—¿Yquéopinas?—Enmihumildeopinión,elamorescuandoalguiencreequenopuedevivirsinlapersonaque
ama.Túeresunachicainteligenteysupongoqueyalohabíasoídoantes.—Pero,Curtis—protestaella—,¡estamosmuertos!Tenemosquevivirsinlosseresqueridostodo
eltiempo,sinembargonodejamosporellodeamarlosniellosdeamarnosanosotros.—Hedicho«cuandounapersonacree».Enrealidad,nadienecesitaaotrapersonanitampocosu
amorparasobrevivir.Elamor,Lizzie,escuandounoestáconvencidodeunmodoirracionaldequeesasí.
—Pero, Curtis, ¿acaso el amor no tiene que ver con ser feliz, con hacerse reír uno al otro ypasárselobien?
—¡Oh,Lizzie!—exclamaCurtiesriendo—.¡Ojaláfuerasóloeso!—Esunagroseríareírsedeunapreguntatannatural—observaella.Curtisdejadereírse.—Lo siento—dicede todo corazón—.Esque sólo alguienquenunca se ha enamoradopuede
hacerunapreguntatanabsurda.Hacemuchotiempoquedecidímantenermelejosdelamorydesde
entonceshesidounhombremuchomásfeliz.Mientras viaja en el autobús de vuelta al trabajo, Lizmedita en lo que Curtis le ha dicho. En
realidad,élindirectamenteharespondidoaloqueelladeseabaenelfondosaber.¡ClaroquenoestáenamoradadeOwen!Alverloahoraen retrospectiva, casi se sientecomounaestúpida.Porqueenprimerlugarélestáenamoradodesumujer.Yensegundolugar,reír,divertirseyserfeliznotienenadaqueverconestarenamorado.Lizsesientealiviada.AhorapuedeseguirviendoaOwentantocomoquiera,yaquelaideadequeellanoestáenamoradadeélniéldeellalatranquiliza.Yademástodoeseasuntodel amorno traemásqueproblemas.Lizdecidequeprobablementeesdemasiadojovenparamantenerunarelaciónamorosa.Secentraráeneltrabajoyensusamigosyasíseolvidarádelamor.
Sí,porunladoLizsesientealiviada.Peroporotro…EnelfondolegustabalaideadequeOwenpudieraamarla,aunquesólofueraunpoquito.
LanochesiguienteaqueLizaprendieraaaparcarenparalelo,Owendescubrequenotienenadaenquéocuparse.SehapasadocasidiezañosestandosoloysólotressemanasconLiz.Y,sinembargo,nopuederecordarquésolíahacerporlanocheantesdeesastressemanas.Vagaporelapartamentocomounalmaenpena.Hacelaclasedetareasdomésticasqueunollevaacabocuandonotieneotracosa que hacer: limpia el espacio entre el horno y la nevera con una larga cuchara de maderademasiadocortacomoparacumplirsuobjetivo;barredebajodelacama;intentaleerLoshermanosKaramazov,lanuevatraducciónqueestabaintentandoleerinclusoantesdemorirsinllegarnuncaapasar de la página sesenta y dos; trata demantener un huevo apoyado sobre uno de sus extremosponiendounpequeñomontículodesalen laencimerade lacocina(fracasa); tallaunbarcoenunapastillade jabóny tiraa labasura todos loscalcetinesdesparejados.Tardasólounahoraenhacertodasestastareasydespuéssedesplomaabatidoenelsofá.
—Deberías llamaraLiz—observaJen, lagoldenretriever.PeropordesgraciaOwennohablacanino,demodoquenopuedeaprovecharlasabiduríadesuperra—.EstoyseguradequeLizySadieestánhaciendoalgodivertido.¿Porquénovamosaverlas?—sugiereJen.
Owennoresponde.—Owen,tienesqueaprenderahablarcanino,porqueasípodríadecirteunacosillaodos—ladra
Jenexasperada—.¡EstásenamoradodeLiz!,¿sabes?¡Sevealalegua!—gritarascandolapuertadelaentradayaullando—.¡Miraloquemeestásobligandoahacerparaquemeentiendas!
—¿Quieressaliralacalle?—lepreguntaOwen.—¿Túquecrees?—respondeJensarcásticamente—.¡Venga,vamos!Teestoysacandoapasear.JentiraconfuerzadeOwenhaciéndolecruzarlaciudadhastaquealcabodepocosedescubren
antelacasadeLiz.Liz,SadieyBettyseencuentranenlaentradadecorandolacasaparalasfiestasqueseaproximan.
Liz está encaramada en una escalera, fijando con grapas las guirnaldas de luces navideñas en eltejado.AlveracercarseaJenyaOwen,Sadieseponealadrar.
—¡Hola,Jen!¡Hola,Owen!—exclamaSadie.ÉllesonríetímidamenteaLiz.—Jenmehaobligadoavenir.Yonoqueríaserunestorbo,chicas.—¡Noeresningúnestorbo,Owen!—diceBetty.Ellalehacogidomáscariñodesdequeenseñóa
sunietaaaparcarenparalelo.AdemáshaobservadoqueLizestámáscontentadesdequehaestadoaprendiendoconélaaparcarelcoche—.Liz,yaloacabarédehaceryo.¿Porquénovasasaludaratuamigo?
Ellabajadelaescalera.—Detodosmodosibaahacerunpequeñodescanso—observaconfrialdad.—Losiento—sedisculpaél—,fueideadeJen.Debíahabertellamadoantesdevenir.—Graciasporlaslecciones—respondeellaenuntonomáscordial—.Sientohabersidotanlenta
enaprender.—Mehaencantadodártelas—respondeélsintiéndosedeprontotensoeincómodo—.¿Cuándote
daránelcarnédeconducir?—Alpareceren la jefaturade tráficodeEnOtroLugarestánmásacostumbradosa retirarteel
carnéqueadártelo.Losnuevoscarnéssóloseexpidenelsegundoycuartomartesdecadames,peroendiciembrelajefaturadetráficocierra,oseaquetengoqueesperarhastaenero.
Owenasienteconlacabeza.—Te deseo buena suerte —dice él haciendo girar su alianza alrededor del dedo, uno de los
nerviososticsdeOwenqueLizencuentradelomásirritante.—TengoqueayudaraBettycon las luces—observaella—.¿Porquénovuelvesapasartepor
aquícualquierotrodía?—añadesonriendomientrassealeja.—¡Quizámepaseportucasacadadía!—comentaOwen.Lizsevuelveylepreguntamirándolealosojos:—Creíqueyahabíamosterminadoconlaslecciones,¿noesasí?—Aúnnoteheenseñadoaaparcarenparaleloenunapendiente.Dudodequesedéestaocasión,
pero…—¡No!—leinterrumpeLiz—,esmejorquemecureensaludyaprendaaaparcarenparaleloen
cualquiercircunstancia.—Esloqueyosiemprehepensado—admiteOwen.
AlllegarlasNavidadesLizleregalaaOwenunlibrotituladoAprendaahablarcanino.Yélleregalaunpardeesponjososdadosparaqueloscuelguedelretrovisordesucoche.(Omásbiendeldesuabuela,yaqueeselúnicocochequeporelmomentoLizconduce,apartedeldeOwen.)
Variassemanasantesdelexamendeconducir,élsededicaaenseñarleaaparcarenparaleloentodaclasedesuperficies.Lizaparcaencaminossinpavimentar,al ladoderíos,bajopuentes,enlaautopista,cercadeestadios,enlaplayay,sí,tambiénenlaspendientesdelascolinas.Amedidaqueeldíadelexamensevaacercando,Lizsedescubrecasideseandosuspender.
Lanocheanterioralexamen,cuandoellaestásaliendodelcoche,Owenlecogedelamano.—Liz,megustasmucho—dice.—¡Oh!—exclamaella—,amítambiénmegustasmucho.Élnoestásegurodesiellahapronunciadola«O»deOwenosinohasidomásqueun«¡Oh!».
Aunquenoestásegurodecuálesladiferenciaentreunacosaylaotra.Piensaquedebeexpresarseconmásclaridad.
—Aldecirtequemegustasmuchomereferíaa«quetequiero».—O—exclamaLiz—,yotambién—añadecerrandolapuertatrasella.
—¡Caramba!—sedice a símismomientras conduce de regreso a su casa—, ¡nome lo puedocreer!
Alamañanasiguiente,Lizllegaalajefaturadetráficoalassieteenpunto,eselprimerexamendeldía.Loapruebafácilmente.ElexaminadorcomentaqueelestacionamientoenparalelodeLizhasidoel«mejorquehavistoentodasuvida».
—¡Enhorabuena!—le dice Owen esa noche—, pero aún te falta aparcar en paralelo en un lugar.Aunqueyatehayandadoelcarné,nomequedarétranquilohastaquelopractiquemos.
—¿Deveras?¿Dóndees?—inquiereLiz.—Tenpaciencia.Eresmialumnaytengolaresponsabilidaddepreparartebien,nopuedopermitir
quetelancesalmundodeltráficohastaquenohayasaprendidoestaúltimalección.—¡Deacuerdo!—respondeLizencogiéndosedehombros—.¿Peroteimportaríadecirmedónde
vaatenerlugareseritodepasajedelaconducción?—No—respondeélconunasonrisa—,novoyadecírtelo.AsíqueOwenyLizsemetenenelcocheunavezmás.Ellaconduceyéllevaindicandoelcamino
quetienequeseguir.Alfinalledicequesedetengafrentealcarteldeneónrojodeunautocine.—¿Vamosairalcine?—preguntaLizcontemplandolaenormepantalla.—No —contesta Owen mientras compra las entradas—, sólo estamos haciendo prácticas de
conducción.—Creoquemeestásllevandoalcine—insisteella—,yanuestraprimeracita.—Siquieresverloasí,túmisma,yoveolascosasdeotromodo—respondeOwenriendo.—Apropósito,quépelículavamosavermientrasyohagoprácticasdeconducción—inquiere
Liz.—Es la nueva versión de una historia de amor. NatalieWood hace el papel de la chica y se
enamoradeRiverPhoenix,elchico.—Pareceinteresante—comentaLiz—,peroodiolasnuevasversiones.—Porsuertenoestásaquíparaverlapelícula.Despuésdedetenersebrevementeparacomprarpalomitasyrefrescos,Lizaparcaenlaprimera
hileradecoches.Secomenlaspalomitasyesperanaquelapelículaempiece.—¡Quéextraño!—diceella—,túnuncallamaslascosasporsunombre.—¿Aquéterefieres?—Cuandomeinvitasteacenar,lollamaste«lavarlosplatos»contigo.Yahoraquehastenidola
bonitaideadellevarmeaverunapelícula,dicesqueesparaque«hagaprácticasconelcoche».—Losiento—diceOwen.—¡Oh!,noestoyenojada,enrealidadmegusta—respondeLiz—.Escomosihablarasenclave.
Asímeentretengo,porquetengoqueintentardescifrarloquedicestodoeltiempo.—Apartirdeahoraprocuraréhablarteconmásclaridad—diceél.Alempezarlapelícula,Owenlesusurraaloído:—Penséqueahoraqueya tehassacadoelcarnédeconducir, talveznovolveríaavertenunca
más.
—¡Aveceserestantonto,Owen!—exclamaellaponiendolosojosenblanco.
AlcabodeunasemanaOwenyLizvuelvenalautocine.Ylasiguientesemana,también.Ylasiguiente.—¿No crees que es extraño que durante todo el tiempo que hemos pasado en el coche nunca
hayamosestadoenelasientotrasero?—preguntaLiz.—¿Meestáshablandoahoraenclave?—respondeOwen.—Contéstamealapregunta.¿Notepareceextraño?—Liz,nocreasqueesasíporquenosientonadaporti,porqueestodolocontrario.—Owenhace
unpausa—.Loquepasaesquenosésiestaríabien.—¿Porqué?—Enprimerlugaryosoymayorquetú.—Sólodosaños—replicaella.—Sólodosañosymásomenosunavidaentera.Peronoessóloeso.—Owenrespirahondo—.
Yaheestadoantesenasientostraserosdecoche.Ylociertoesquelaverdaderaintimidadnotienedemasiadoqueverconellos,sinoconlavartelosdientescontupareja.
Owensequitalachaqueta.Lizobservaeltatuajedesubrazoenelquepone«Siempretequerré,Emily», el cual por alguna razón le hace comprender queOwen hizo el amor con Emilymuchotiempoatrás.Depronto,adviertequeeltatuajeparecemásintensoyvívidoquenunca.Escasicomosibrillara.
—Owen—lepreguntaLiz—,¿cómotehicisteeltatuaje?—¡Oh!,me lo hicieron cuando tenía dieciséis años, en laTierra, en aquella época yo eramuy
estúpido.—Nomereferíaaeso,sinoaporquébrillatanto.Owensecontemplaelantebrazo.—Ya me había dado cuenta. Es extraño, ¿verdad? Solía creer que se acabaría difuminando y
desapareciendo,peroencambioseestávolviendocadadíamásbrillante.—Podríastatuarteminombreentubrazo,siquieres—añadeLiz.—Podría, pero los tatuajes no funcionanEnOtroLugar.Sevan casi en cuanto te los haces—
respondeOwen—.Novalelapenaeldolorqueproducen.—Seríaunbonitogesto.Yasabesaloquemerefiero—bromeaLiz.—Si te he entendido bien, ¿me estás diciendo que quieres que soporte horas de dolor y de
sufrimientoporunbonitogesto?—Sí—afirmaellaconseriedad—.Quierover«AmoaLiz»tatuadoentuculo.—¿Enmiculo?—Sí,entuculo.Sinosonmásquesieteletras.Nocreoqueteduelandemasiado.—¡Eresunasádica,Liz!—exclamaOwen.—¡YyoquecreíaqueeraunabuenapersonapornohacerteescribirElizabeth!—¡Quégenerosa!—respondeél.LiztomaelbrazodeOwenentresusmanosyestudiaeltatuajedeEmilydemáscerca.Piensa:«Él
enunaocasiónamóaunamujerlosuficientecomoparatatuarsesunombreenelbrazo».
—Notieneningunaimportancia—señalaél—.Enaquellaépocaerajovenyestúpido.—¿Deverdadtedoliótanto?—inquiereLiz.Owenasienteconlacabeza.Lizlecogeelbrazotatuadoypegasuslabiosaél.Lebesaelbrazoydespuésselomuerde.—¡Ay!—exclamaOwen.Oseaqueestoeselamor,piensaLiz.
Lasllegadas
S i estuviéramos leyendo el libro de Thandi, aparecería en él la historia de un lejano y olvidadoepisodio (delquenadieseacordabaya, salvoella)enelqueunaniñadeletreaenunacompeticiónescolarlapalabrae-c-o,yenelúltimoydecisivomomento,seequivocayañadeuna«o»demásalfinal;ytambiéncontaríaqueelprimeramordeThandifueunchicorechonchoalquellamabanFlacoqueempezóasalirconBeneatha,laprimasegundadeThandi,alasemanasiguientedecelebrarseelfuneraldeThandi;narraríacómounabalaenlacabezadeunapersonalocambiatodo,cómomuchotiempodespuésdehabersecuradolaherida,loscoloresparecendistintos,losoloressepercibendeotramaneraeinclusolosrecuerdossondiferentes;ytambiénnoshablaríadeunpadrealquenuncaconoció,deunpadrequeahoraviveEnOtroLugaryalqueThandinotieneganasdever.PerocomoestahistorianoesladeThandi,nosunimosaellaenundíacomocualquierotro.Almenos,paraella.
En la cadena de televisión donde trabaja,Thandi recibe la lista con los nombres de los reciénllegados a EnOtro Lugar cada día después de almorzar, hacia eso de la una. Como no tiene queleerlosendirectohastalascinco,aprovechalashorasquelequedanparaestudiarlapronunciacióndecadanombre.Aunqueestaprácticaescasisiempreinnecesaria,yaqueThandipocasvecescometealgúnerror,porquetieneunacapacidadinnataparapronunciarinclusolosnombresextranjerosmásraros.Y,sinembargo,esedíaenparticulartienedificultadesparapronunciarunnombresencilloenconcretoydecidellamaraLizparacomentárselo.
—¿CómosellamabalamujerconlaqueOwenestabacasadoenlaTierra?¿Teacuerdas?¿EraEllenyquémás?—Thandiesperaquenosetratedelamismapersona.
—Emily Welles —responde Liz, que lo conoce tan bien como el suyo—. ¿Por qué me lopreguntas?
—EmilyWellesdebeserunnombremuycomún.—Thandi,¿quéesloquemeestásqueriendodecir?—preguntaLiz.—Iréalgrano.Sunombreseencuentraenlalistadelasllegadasquemehandadohoy.Ellallega
enelbarcodemañana.DesúbitoaLizlelateconfuerzaelcorazónysequedasinhabla.—Notieneporquésignificarnada—observaThandi.—No,yalosé.¡Claroqueno!Tienesrazón—respondeLizrespirandohondo—.Mepreguntosi
Owenlosabe.Haceañosquenomiralasnoticiasdelatele.
Decideiradecírselopersonalmente.Duranteeldíanopuedeverloporquealparecerestásiempreenelmar.Peroavecesvuelvealpuertoparaalmorzar,demodoquehacialasdosellaseacercaalmuelleparaversiloencuentra.
Owensonríealverla.—¡Quésorpresa!—exclamaabrazándola.LizteníalaintencióndedecirlelodeEmilyencuantoloviera,peronoconsiguehacerlo.—¿Vatodobien?—preguntaél.Liz asiente con la cabeza, pero se queda contemplando el agua sin decir nada durante unos
momentos.—MepreguntabasihayalgúnEnOtroLugarencualquierotraparte—dicealfin—.Esextraño
nohaberpensadoantesenello,pero¿todoelmundovieneapararaquí?Debenhaberotrosbarcos,¿nocrees?Yquizávanaotraspartes.
Owenniegaconlacabeza.—TodosacabamosllegandoaEnOtroLugar.—Peroestesitioesmásbienpequeño.¿Cómopuedecabertantagenteenél?—Enrealidadesmuygrande,sólodependedelaperspectivadeuno—dicecogiendolamanode
Liz y girándosela de modo que la palma le quede hacia arriba—. De hecho es una isla—añadedibujandoconunodesusdedosunmapadeEnOtroLugarensupalma—.Aquíesdondelleganlosbarcos—dice—,yahíestáelRíoquellevaalaTierra.Nosésilosabías,peroelRíoseencuentraenmediodel océano.El océano sólo se separaunavez al día paradejar que los bebés regresen a laTierra—observadibujandoelserpenteantecursodelRíosobrelasazulesvenasdelamuñecadeLiz—.YestoeselPozo,ellugardondenosconocimos—agregaseñalándoloenelpulgardeLizconsudedo.
Ellasequedamirandofijamentelapalmadesumano.AúnpuedesentirloslugaresdondeOwenhadibujadolasinvisiblesfronteras.Deprontocierralamanoyelmundoenterodesaparecedegolpe.
—Emilyestáapuntodellegar—anuncia.—¿Hamuerto?—preguntaOwenenuntonomoderadoysolemne.—Thandihavistosunombreenlalistadellegadas.Estaráaquímañana.—¡Nopuedocreerlo!—exclamaélsacudiendolacabeza.—¿Quévasahacerahora?—inquiereLizcasiconunsusurro.—Iréaesperarlaalmuelle—respondeOwen.—¿Yluego?—Melallevaréacasa.—¿Oseaquecreesqueellaquerrávivircontigo?—¡Claroquequerrávivirconmigo!—¿Yquéhaydenosotros?—preguntaLizconunhilodevoz.Owensequedacalladoduranteunbuenrato.—Tequiero,Liz,peroaEmilylaconocíantesqueati—lerespondealfinponiendounadesus
manossobrelasuya—.Noestoysegurodequéesloquedebohacer,dequéeslocorrecto.LizcontemplaaOwen.Sevemuyabatidoyellanoquiereserlacausadesusufrimiento.Aparta
sumanodeladeélylerespondeconfirmeza,enuntonodeunapersonaadulta:—Esverdad,Owen,sóloacabamosdeconocernos.Túeresresponsabledetumujer—dicepara
vercómoreacciona.
—Noquieroperdertuamistad—respondeél.—Seguiremossiendoamigos—letranquilizaLiz,aunqueestádecepcionadaporqueélhatomado
ladecisióntandeprisa.—¡Oh,Liz, eres lamejor!—exclamaOwenabrazándoladenuevo—.Emilyesunagranchica,
estoysegurodequetegustará.Mástarde,aquellanoche,hechaunovilloenlacamajuntoaSadie,Lizsepreguntacómoalguien
puededecirleaunapersonaenunmomentoquelaamayalsiguientedejardeamarla.Sin embargo, Liz no tiene demasiada experiencia en el amor. Y como tantas personas han
descubierto,es totalmenteposible(aunquenoseademasiadodeseable)amarcon todo tucorazónadospersonas a la vez.Es totalmente posible desear vivir dosvidas, sentir queuna sola vidano tebasta.
Elbarco llegaalatardecer.OwensepreguntasiEmily loreconocerá.Despuésde todohanpasadocasidiezañosdesdelaúltimavezquesevieron.Adviertequelagentedelmuellellevaunoscartelesdecartónhechosamanoconelnombredelapersonaalaquehanidoaesperar.Quizáyotambiéndebíahaberhechouno,piensa.
Emily es la segunda pasajera en bajar del barco. Aunque él se encuentre en el muelle, a casiquinientos metros de distancia de la pasarela del barco, la reconoce enseguida. Al ver sucaracterísticopelopelirrojoleentranganasdeponerseacantar.Emilyahoradebetenertreintayseisaños,peroestáigualquecuandoélmurió.
AldivisaraOwen,Emilysonríeylesaludaconlamano.—¡Owen!—legrita.—¡Emily!—respondeélabriéndosepasoentrelamultitud.Encuantoseencuentran,seabrazanysebesan.AOwenleparececomosifueraunapelícula.Ha
estadoesperandotantotiempoestemomento,yahoraellayaestáaquí.—¿Mehasechadodemenos?—preguntaEmily.—¡Oh,sólounpoco!—respondeél.Emilyloapartaparapodercontemplarlodearribaabajo.—Tienesmuybuenaspecto—observaella.—Ytútambién—respondeOwen.Emilylerecogeelpelodetrásdelasorejas.—¡Quéjovenestás!—dicefrunciendoelceño.Miraasualrededor—.¿Todoslosqueestáisaquí
soistanjóvenes?—Alfinal,sí—diceOwen.—¿Quéquieredecir«alfinal»?—inquiereEmily.Élsonríe.—Notepreocupes.Alfinaltodosalebien—respondeél—.Yateloexplicarémástarde—añade
cogiéndoledelamano.Mientraslallevaalparking,sientequeporfinhadejadoatrásunaépocadetristeza.
—¿Cómofuncionanlascosasaquí?—lepreguntaEmilydespuésdeentrarenelcoche—.¿Voyavivircontigo?
—¡Claroquesí!Eresmimujer—respondeOwen.
—¿Losoy?¿Todavía?—Claro—diceélriendo—.¿Porquénohabríasdeserlo?—¿Yquéhayde«hastaquelamuertenossepare»ydetodolodemás?—inquiereella.—Siemprehepensadoqueseguíamosestandocasadosyahorayanadavolveráasepararnos—
respondeél.Emilyasienteconlacabeza,peronodicenada.—¿Tútambiénpensabasqueseguíamosestandocasados?—preguntaOwen.—Sí,enciertomodosupongoqueasíera—respondeEmily.—¿Tehedicholofelizqueestoydevolveraverte?—preguntaél.
Aquellanoche,enlacama,OwenlediceaEmily:—¿Esmaloquemeencanteahoralagripe?¿Creesqueestámalquedeseecantarlecancionesde
alabanza?—Mealegrodequemimuerte saqueal trovadorquehayen ti.Peroestoymuerta, ¿sabes?Un
poco de seriedad. ¡De una gripe!—exlama ella echándose a reír—. ¡Qué formamás estúpida demorir!—dice,yluegoestornuda—.¡Eh,creíaqueaquínoexistíanlasenfermedades!
—Escierto—afirmaOwen.Sinembargo,Emilyvuelveaestornudar.Yentoncesélseacuerdadequeesalérgicaalosperros.
(HadecididodejaraJen conLiz esta primeranochequeEmily está en la ciudad, porqueprefiereestarasolasconella.)
Emily…—empiezaadecirOwen—,tengounperroyséquetúsolíasseralérgicaaellos,pero…Ellalointerrumpe.—¿Quizáyanosoyalérgica?Quierodecirquetalvezaquíyanolosea.Élloduda.—Quizá—responde.—Talvezsóloestornudoporquemeestoyrecuperandodelagripe.¿Creesquepodríasereso?Owennocreequeseaposible,peroprefierenodecírselo.—Talvez—contestaél.Aldíasiguiente,mientrasEmilyseencuentraenlacitadeaclimatación,OwenvaarecogeraJen.
AunquelagoldenretrieveresfielaLiz,tambiénespragmática.Sabequeesimportantecausarleunabuena impresión a Emily la primera vez. Según su experiencia, hay muy pocas personas que seresistanasumeneantecola,yencuantoEmilyentraacasa,Jenempiezaamoverlafrenéticamente.
—¡Hola,Emily!SoyJen,elperrodeOwen.Encantadadeconocerte.—Hola,Jen—respondeEmily.JenleofreceunapataparaqueselaestrecheyEmilyestornudasobreella.—¡Quéasco!—exclamaJen—.¡Salud!—añadedespuésintentadosermásdelicada.—Gracias—diceEmily—.Owen,quéextraño,tuperrohabla,¿losabías?—¡Estupendo, Emily, entiendes canino! —responde él—. Yo no, pero ojalá pudiera. Algunas
personasloentiendendemaneranatural,como…—haceunapausa—miamigaLiz.Emilyvuelveaestornudar.—¿Eresalérgicaalosperros?—preguntaJen.—SolíaserloenlaTierra—admiteEmily—,peronocreoqueloseaaquí,¿verdad?
Jenlacontemplapococonvencida.—Piensoqueprobablementesoyalérgicaporqueantesloera—prosigueella—,peroquizásólo
seaunareacciónpsicosomática.—Emilyvuelveaestornudar.—¿Quéquieredecirunareacción«psicosomática»?—preguntaJenpreocupada.—Significaquesóloestáenmicabeza.Oseaquealfinalyanomedarásalergia,estoysegura.—¿Túcrees?—inquiereJenladeandolacabeza.—Mmm…,talvez—respondeEmilyvolviendoaestornudar—.Esperemosqueasísea.PeroalamañanasiguienteEmilyselevantaconlosojoshinchadosyenrojecidosysepasatodo
elratoestornudandoytosiendo.Peseasualergia,sigueactuandodetraductoraentreJenyOwen.—Mira,Owen,yonoquierovivirconunapersonaqueestátodoeldíatosiendocuandoyoestoy
cerca—diceJenbajandolacolapatéticamente—.Mehacesentirmal.—Jen, sientomucholodemialergia—sedisculpaEmily—.Tuperradicequenoquierevivir
conmigoporquemisestornudoslahacensentirseincómoda—ledicedespuésaOwen.—¡Deacuerdo!—respondeél.EnelfondosealegradequeJenselohayasugeridoantesdetener
quehacerloél.—Owen,¿novasaprotestarnisiquieraunpoco?—inquiereJenbajandolasorejas—.Yoestaba
aquíantesqueella.¿QuizásEmilypodríairaviviraotraparte?—Jen sugierequeyomevayaaviviraotraparte,porqueellaestabaaquíantesqueyo.Owen,
quizátuperratengarazón—diceEmilyvolviendoaestornudar.—No—respondeOwen—.Túeresmimujer.Yasenosocurriráalgunasolución.EsanocheJen,quenuncahadormidofueradecasa,tienequehacerloenelporche.—Yasenosocurriráalgunasolución—repiteOwentratandodetranquilizaraJen.—¿Ynopodríadormiralmenosenelsofá?—sugiereJenquejándose—.Cuandonosconocimos
meprometiste quepodría estar en él siempre quequisiera—por desgraciaOwenno entiendeunapalabradeloqueleestádiciendo.
Tresdíasmás tarde,OwendejaaJen encasadeLiz.Emilysiguecreyendoquesualergiaes sólotemporal,peroJenestácansadadedormirenelporche.
—¿Cómo va todo?—pregunta Liz aOwen. Ella cree que él tiene un aspecto cansado, aunquefeliz.
—¡Fenomenal!—exclamaél—.EsperopodervenirarecogeraJendentrodeunpardedías—lesusurradespués—,esqueEmilyloestápasandofatalconlaalergia.
—¡Claro!—respondeLizconunatensasonrisa.—¿Cómotevaconelcoche?—preguntaOwen—.Porquesitienesalgúnproblemaalaparcaren
paralelo,yopodría…—No—leinterrumpeella.—GraciasporquedarteconJen.—Denada—respondeLizencogiéndosedehombros—.Aveceslascosasnofuncionan.Owensedamediavueltaparairse.—Apropósito,¿dequémurióEmily?—lepreguntaLiz.—Deunagripe.—¡Perosieramédico!Seguroquesehabíavacunado.
—Sí,peronolesirviódenada.Comoyasabes,lascosasnosiemprefuncionan.—Sí,yalosé—respondeella.MientrascontemplaaOwenalejándoseconelcoche,piensaenlagripe.Todaslaspersonasalas
queconocesehanmuertodeunascausasmásrespetables:Aldousysumujer(alestrellarseelavión),Betty(cáncerdemama),ellaySadie(arrolladasporuncoche),CurtisyShelly,laprimadeThandi(sobredosis de drogas), Thandi (al recibir un balazo en la cabeza), Owen (asfixiado), Esther(Alzheimeryotrascausasafines),Paco (ahogado). ¡Esosíquesonmuertes!,piensaella. ¡Sólo laspersonasmuyancianassemuerendeunagripe!LizpiensaencómotodoestácambiandosóloporquelaestúpidadeEmilynosepreocupódelavarsebienlasmanos.
Cuando Owen regresa, Emily está leyendo un folleto fotocopiado titulado «Guía de profesionesalternativasdelDepartamentodeServiciosVocacionalesdeEnOtroLugar».
—Por lo visto yano ejerceré comomédiconuncamás.Aunqueno estoy segurade si deseabaseguirhaciéndolo.Supongoquepodríatrabajarenalgúncentromédico,peroestetrabajoseparecemásaldeunaenfermera.
—Losiento—respondeOwen.—Noimporta.Aunquepudierasermédico,noestoyseguradesiquerríavolveraserlo.—¿Hayalgunaotracosaalaquetegustededicarte?—inquiereél.—Quizámegustaría serunadeesaspersonasquecaptadesde lasCubiertasdeObservación lo
queleelagentedelaTierrayqueluegotranscribenaquíeltextodeesoslibros.—¿Terefieresaunaconservadoradelibros?—¡Sí,aesomerefiero!Parahacerlotienesqueserhábilconlaortografíaybuenaescuchando,y
yolosoy,yademástienequegustarteirteadormirtarde,porqueescuandolamayoríadelagentelee,yamíestotambiénmegusta.
—Pareceuntrabajobastanteaburrido—observaOwen.Emilyseencogedehombros.—Cuandoeradoctoranuncateníatiempoparaleer.Yademásnopiensodedicarmetodalavidaa
ello,sóloesalgotemporal.Owenmuevelacabezamostrandoincredulidad.—Túsiemprefuistemuyambiciosa.¡Unaconservadoradelibros!Parecesotrapersona.—Quizáhecambiado—afirmaEmily.Owendecidecambiardetema.—¿Cómoestántuspadres?—Bien—respondeElla.—¿Ytuhermana?—AllieseestádivorciandodeJoe.—Perosiestabanmuyenamorados—observaOwen.—Puesyanoloestán,O.—¡Nopuedocreérmelo!—exclamaél.—Hacebastantesañosquenolosves—comentaEmily—,tehasperdidoalgunascosas.—Vale—respondeOwen—.Explícame todo lo que ha ocurrido en estos últimos diez años en
treintasegundos,¡adelante!
—Mmm…—diceella—.Yo…—Apresúrate—diceélmirandosureloj—,tequedanveinticincosegundos,veinticuatro…Emilyseechaareír.Intentahablarlomásrápidoposible.—Acabé la carrera de medicina. Me especialicé en quemaduras en tu honor. Me gustaba mi
trabajo.Enfermedades,accidentes,muertes.Hepasadomuchosratosconmihermana…—¡Tequedandiezsegundos!—¡Caramba,entoncesesmejorquemeapresure!Allietuvounbebé,unniñoalquellamóOwen.
Yoeraunabuenatía.¿Sabíasquecuandotúfallecisteyoestabaembarazada?—lepreguntaenotrotonodevoz—.Tuvimosunhijo;loperdí,O.
—¡Sehaacabadoeltiempo!—gritaOwenconpocoentusiasmo—.Nolosabía.—¿Quélesocurrealosbebésquemuerenantesdenacer?—preguntaEmily.—CreoquenoconsiguenterminareltrayectodelRío,ysequedanflotandoenélhastaquetienen
lafuerzasuficienteparavolveralaTierranadando.Noestoyseguro.—¿Oseaqueelbebéseconvierteenotrobebé?¿Enelbebédeotrapersona?—Másomenos—diceOwen.—¡Oh,ojalálohubierasabidoantes!Deesemodonomehabríasentidotantriste.—Ojaláhubierapodidoayudarte—diceél.Emilylanzaunsuspiro.—Tuvimosunhijo—repiteOwen—.¿Cómoesposiblequenolosupiera?—Porqueme enteré después de que túmurieras. Lo perdí en el segundomes y apenas seme
notaba.—¡Pero de todos modos debería haberme enterado! ¡Me he pasado todo este tiempo
contemplándote!—Hayalgunascosasquenosepuedenver.Algunascosasnoqueremosverlas—diceella.—Yyoquecreíqueestabastristepormí—susurraél.—Yescierto.—Mehubieragustadoconoceranuestrohijo—diceOwen—.¿Lepusisteunnombre?—Sí—respondeEmilyasintiendoconlacabeza.—¿Cómosellamaba?Emilyselosusurraaloído.—Megusta—respondeélenvozbaja—.Noesdemasiadorebuscadonidemasiadocomún.Creo
queaéltambiénlehabríagustado.PorlanocheEmilyduermeporprimeravezenelsofáyOwenlohaceenlacama.Comotienen
unos horarios distintos, descubren enseguida que así les resultamás fácil.Además, él ya se sientecontentoalsaberqueellaseencuentraalotroladodelapared.LehacerecordarcuandoeranvecinosenNuevaYorkysecomunicabanenmorsedandogolpecitosenlapared.
CadadíaquepasaconEmilyescomounmilagroparaél.Lavesentadaensusilla.Llevandounadesuscamisetas.Lavandolosplatos.Durmiendo.Laveportodaspartes.NopuedecreerqueEmilyestéahoraportodoslados.Quierepegarleunmordiscoparacomprobarqueesreal.Quieresacarlefotos porque ahora por fin puede hacerlo.Y se queda sentado contemplándola embobado, cuandodeberíaestarhaciendootrascosas.YEmilyademásestanincreíble.Comoellaquieresalirunpoco,éllallevaaversuslugaresfavoritos.Yellalehaceunmontóndepreguntas.(Élhabíaolvidadoesacostumbresuya.)Intentarespondérselaslomejorposible,peroellasiemprehasidomáslistaqueél
(yahora loes inclusomás),asíquenisiquieraestásegurodesi sequedasatisfechacon todassusrespuestas.
HayunpardecosasqueaOwenlemolestanunpoco.Leavergüenzainclusomencionarlas.Ellaesdesordenada.Ylegustaempezarnuevosproyectosenlacasa,peronuncalosacaba.Yseacuestamuytardeyhacemuchoruidoaunqueintentenohacerlo.Ydespuésdeducharse,nuncasacalospelosquequedaneneldesagüe.Yesverdadquehacemuchaspreguntas.Yavecesnosabendequéhablar,porqueloúnicoquetienenencomúneselpasado.Poresomuchasdesusconversacionesempiezancon«¿Teacuerdasdecuando…?»Ylascosasqueaélmáslemolestan,aellanoleimportan.
PeroOwenintentaignorartodasestascosas.Despuésdetodo,Emilysiemprehasidoasí.
UnsábadoporlatardeLizsepasaporcasadeOwenpararecogerlapelotafavoritadeJen.Haceunasemanaque laperra se lohaestadopidiendo,peroLizhaestadobuscandounaexcusauotraparaevitarhacerlo.Cuandoporfindecideir,sóloencuentraaEmilyencasaysepreguntasilamujerdeOwensabequiénesella.
—SoyLiz—dicetensamente—.LapersonaqueestácuidandodeJen.TúdebesserEmily.—¡Oh,Liz,mealegromuchodeconocerte!—exclamaEmilyestrechándolelamano—.Muchas
graciasporocupartedeJen.Esperoqueyodejedeseralérgicaalgúndíaypuedaregresaracasa.Lizasienteconlacabeza.—Sólohevenidopararecogersupelota.—¡Claro,voyabuscarla!—alcabodeunosmomentosEmily regresacon lapelota.Observaa
Liz.Piensaquelerecuerdaaalguien,peronosabeaquién—.¿CómoconocisteaOwen?—preguntaEmily.
—Yo…—Liz hace una pausa—, le ayudé a adoptar a Jen. Trabajo para el Departamento deAnimalesDomésticos.SupongoqueacabamoshaciéndonosamigosatravésdeJen.
—Eslógico—respondeEmily—.¿Teapetecetomarunasodaoalgunaotracosa?EsqueOwennomehapresentadoaúnaningunodesusamigosytengocuriosidadporconocerlos.
—Losiento,perohedeirme—respondeLiz.—Deacuerdo.Entonces,podemosvernosalgúnotrodía.¿Teparece?Liz asiente con la cabeza. Entra en el coche lomás deprisa posible, lo pone enmarcha y sale
disparada.—¡Eh,Liz!—legritaEmily—,¡tehasdejadolapelotadeJen!
Alllegaracasa,Lizsearrojaalacamayseechaallorarsobrelaalmohada.Bettyintentaconsolarla.—Nollores,cielo.Yapescarásotrospeces—ledicesuabuela.—¡Porsinotehabíasdadocuenta,cadavezsoymásjoven!—exclamaLizconabatimiento—.Ya
nomequedatiempoparapescarningúnotropez.¡Yademásnisiquieramegustan!¡Odiolospeces!—Entonces,puedesseguirsiendoamigadeOwen,¿noteparece?Liznodicenada.—¿Quieresquelosinviteacenar?—preguntasuabuela.—¿Aquién?—AOwenyasumujer,naturalmente.
—¿Porqué?—Porqueesunbonitodetalleyélesunbuenamigotuyo.—Yocreoqueesunamalísimaidea—diceLiz.—¿Quéteparecesilosinvitamoselpróximosábado?Sientounagrancuriosidadporvercómo
esella—diceBetty.—Hoylaheconocido—admiteLiz.—¿Ah,si?¿Ycómoes?—Esmuybonita—admiteLiz—,ymuyadulta.Lizse levantade lacamaysecontemplaenelespejoquehayensucómoda.Sepreguntasisu
aspectoyaestáempezandoasereldeunaniña.AlcabodeunasemanaEmilyyOwenvanacenaracasadeBetty.ÉlsealegradeveraJenyestá
orgulloso de poder presentarles aEmily.Betty yEmily se pasan casi toda la noche charlando. SuconversaciónestásalpicadaporlosestornudosdeEmily,aunquehayanencerradoalosperrosenlahabitacióndeLizmientraslosinvitadosestánencasa.Lizsepasatodalacenasinapenasdecirnada.Owenintentaestablecercontactovisualconella,peroLizloevitaapropósito.AcausadelaalergiadeEmilyydelhurañosilenciodeLiz,lavisitaesmásbiencorta.
AlmarcharseOwenyEmily,BettylepreguntaaLiz:—¿Notesientesmejordespuésdehaberlosinvitado?—Puesno—respondeella.—Emilyesunapersonamuyagradable—añadeBetty.—Yonohedichoquenolofuera—mascullaLizentredientes.
Mientrassedirigenacasaenelcoche,EmilypreguntaaOwen:—TegustaLiz,¿verdad?Élnoresponde.—Notienesporquésentirtemalporello—prosigueEmily—.Siasífuera,seríalomásnatural
delmundo.Ellatienetuedadytúnopodíassaberqueyoacabaríaviniendoaquí.Élniegaconlacabeza.—Tequiero,Em.Ysiempretequerré.—Losé—respondeella.
Esamismanoche,cuandoLizestáapuntodemeterseenlacama,advierteuncharquitoamarilloenella.
—¿Quéhapasadoaquí?—lepreguntaaSadie.—¡Nomemiresamí!¡HasidoJen!—respondeSadie—.Creoquesesienteabandonada.Pensaba
queOwenvendríaabuscarlaestanoche.—¡Owen se está pasando!—grita Liz—. ¡Voy a verle ahora mismo!—añade cogiendo de un
manotazolasllavesdelcochedesuabueladelarepisaycerrandolapuertadeunportazo.
LiztocaeltimbredelacasadeOwenconelcorazónacelerado.
—¿PiensasvenirabuscaralgúndíaaJen—legritaLiz—,opiensasdejarlaconmigoporelrestodetuvida?
—Owen,¿quiénes?—gritaEmily.—SóloesLiz—lecontestaéltambiéngritando.—¡Hola,Liz!—exclamaEmilydesdeelinteriordelacasa.«¿SóloesLiz?»,quéincreíble,piensaindignadaella.OwencierralapuertatrasélysellevaaLizfueradelporche.—¡Nomedicesunapalabraentodalanocheyluegovienesaquísóloparagritarme!—Owen—respondeLiz—,nomeparecejustoloqueestáshaciendoconJen.Laperrasesiente
abandonadaytriste.—¡Venga,Liz!,estoysegurodequeestámuyagustoviviendocontigo.Jen tequieremucho—
señalaOwen.—Jen,talvezmequieramucho,peroyonosoysupropietaria.Sehameadoenmicama.Ylos
perrosenseñadossólosemeanenlacamadealguiencuandotienenproblemas.—Pueslosiento—respondeOwen.—¿Cuándopiensasvenirabuscarlaentonces?—leexigeLiz.—Pronto,muypronto,encuantoEmilysehayaaclimatado.—Yahanpasadodossemanas.¿Nocreesqueyahatenidotiempodehacerlo?—SabesqueEmilyesalérgica—diceOwenlanzandounsuspiro—.Yonoséquéhacer.—¡TútecomprometisteconJen!¡Dijistequeteocuparíasdeella!—exclamaLiz.—PeromuchoantesdeconocerlayamehabíacomprometidoconEmily.—¡Otravezella!¡EstoyhastaelmoñodeEmily!—gritaLiz.—¡PuesyonocreoqueestésasíporlodeJen!—gritaOwenasuvez.—Puesparaqueteenteres,yonoquierotenernadaquevercontigo,¿sabes?¡Nisiquierahabría
venidosinomehubierasdejadoatuperra!—¿Ah,sí?—respondeOwen.—¡Sí!Y, entonces, comoyano lesquedanadamáspordecirse, sebesan.Lizno está segurade si es
Owenelquelabesaodesiesellalaquelohace.Decualquiermodo,elapasionadobesoquesedannoescomoelprimerbesoqueLizhabíaimaginadoqueélledaría.
CuandoellaseapartaalfindeOwen,vequeEmilylaestámirando.Peronotieneunaexpresiónfuriosa,sinomásbiencuriosa.
—¡Hola!—diceEmily—.Heoídogritosyhesalidoaverquépasaba—añadesonriendodeunamaneramuyextraña—.Supongoqueesmejorqueosdejesolos—observaamablemente.
—¡Emily…!—exclamaOwen.Peroellayasehaido—.¡Hasidoportuculpa!—legritaaLiz.—¿Pormiculpa?¡Perosihassidotúelquemehabesado!—Sí,porqueestásaquí,viviendoeneste lugar,haciendoquemividaseamuchomásdifícil—
gritaOwen.—¿Quéquieresdecir?—preguntaLiz.—¡Yo quería a Emily! ¡La quiero!—exclamaOwen—.Y quizá si no te hubiera conocido, las
cosasseríandistintas.Peroahoratodohacambiado.Owensedejacaersobrelospeldañosdelporche.Estáabatido.—Esmiesposa,Liz.Nopuedohacernada.Aunquequisiera,nopuedohacernada.
—SeguiréocupándomedeJen—diceLizantesdeirse.
LacláusuladelEvasor
Unanochedespuésdeltrabajo,AldousGhentsepasaporelDepartamentodeAnimalesDomésticos.Deentretodaslaspersonasalasqueasesora,Lizessufavoritayamenudovaaverlaparacharlarunpococonellaalfinaldeldía.EsanochelaencuentraencerradaensudespachoconSadieyJen.Haestadolloviendotodoeldíaylastresestándemuymalhumor.Alpelearseporuncuencodeaguaquesedisputaban,SadiehamordidoaJenenlapartetraseradeunapata.Aunqueelmordiscohasidoleve,elorgullodeJenestáheridoyahoranoledirigelapalabraaSadie.
—¡Hola, chicas!—les saludaAldous alegremente.Por suerte, es la clasedepersonaqueno sedejainfluirporelmalhumordelosdemás,yaquecasisiempreestádebuenhumor—.Jen,Sadie,necesitohablarconLizasolasunrato—aloírlolasperrasselevantanysevanaregañadientes.Jensimulacojearparahacerselaimportante.
—¿CómoestáOwen?—lepreguntaAldousconunasonrisadecomplicidad.—¿Cómoquieresquelosepa?—respondeLiz.—Como dice Shakespeare, «El curso del verdadero amor nunca fue tranquilo y sereno» —
observaéltomándoleelpelo.—¡Medaigual!—Sinomeequivoco,esunpasajedeSueñodeunanochedeverano.—EnlaclasedeinglésyosólolleguéaleerMacbeth,despuéslapalmé.—Puesparaquelosepas,Elizabeth,aquítambiénhaylibrosdeShakespeare.—Yalosé,peroeslaclasedeautorquesóloleescuandoalguienteobligaaello—confiesaLiz
—. Y En Otro Lugar nadie te obliga a leer a Shakespeare o a ningún otro autor —agrega ellalanzandounsuspiro—.¿Porquéhasvenidoaverme,Aldous?
—Estoysegurodequeenseguidaosolvidaréisdelapeleaquehabéistenido—observaAldous.—Lodudo—afirmaLiz—.LaesposadeOwenhallegadodelaTierra.—¡Caramba, qué golpemás duro!—exclama él desconcertado por la revelación de Liz. Pero
enseguida recupera sueterna sonrisa—.Cuando tengasmiedaddescubrirásqueelmundo tiene supropiamaneradehacerquelascosasfuncionen—observaél.
—Sitúlodices—murmuraLizenvozbajaparaqueélnolaoiga.—HevenidopararecordartequelapróximasemanaharáunañoquellegasteaEnOtroLugar.
¡Enhorabuena,Elizabeth!—diceAldous.
—¿Esoestodo?—respondeella.Aldoussueledarmuchasvueltasantesdeiralgrano.ALizesterasgosuyonormalmenteledivierte,perohoyleestádandoganasdegritar.
—Noesmásqueunasimpleformalidad,peronecesitoquemeconfirmesquenoquieresrecurriralacláusuladelevasor.
—¿Enquéconsiste?—Un«evasor»esunadolescenteounniñoquequierevolver a laTierraantesde tiempo—le
explicaAldous—.Hastenidounañoparadecidirte.¿Teacuerdas?Yelañoestáapuntodefinalizar.LizconsideraloqueAldousleestádiciendo.Dealgúnmodotodaesaexperienciaquehatenido
conOwenyEmilylehahechosentirseagotadaypesimista.¿Dequésirveamaraalguien?ParaLiztodoelesfuerzodetrabajar,vivir,amaryhablarleestáempezandoaparecerprecisamenteeso,unesfuerzo.Yademásdentrodequinceaños (en realidad,menos) seolvidaráde todo.Al considerartodosestosfactores,estáempezandoapensarqueesmejoracelerarunpocoelproceso.
—¿Oseaqueaúnpuedoirmedeaquí?—preguntaella.—¿Meestásdiciendoquequieresirte,Liz?—inquiereélperplejo.Lizasienteconlacabeza.Aldousselaquedamirando.—Noloesperabadeti,Elizabeth.Nuncapenséquellegarasaseruna«evasora»—exclamacon
losojosempañados—.¡Yyoquecreíaquetehabíasaclimatadotanbien!—¿Quétengoquehacer?—preguntaLiz.—Informaratusamigosyseresqueridosdetudecisión.Pormediodeunacartaocontándoselo
personalmente,hazloqueprefieras.Quizádeberíasconsultarloantescontuabuela,Elizabeth.—Yalohedecidido,Aldous—respondeLiz—.¿Noseloirásadecir,verdad?Élniegaconlacabeza,conunaexpresióntorturadaquenoesusualenél.—Todo cuanto hablamos entre nosotros es confidencial. No podría decírselo aunque quisiera.
Peroprobablementedeberíahacerlo.Aldousprorrumpeensollozos.—¿Esporalgoqueyohehecho,Liz?¿Oporalgoquenohehecho?—lepregunta—.¡Notengas
reparosendecírmelo!—No,elproblemaestáenmí—diceellaintentandohacertodoloposibleparatranquilizarlo.
Sedecidequela«liberación»deLiztendrálugareldomingoporlamañana,enelprimeraniversariodesullegadaaEnOtroLugaryenelúltimodíaquepuederecurrira lacláusula.Lizvolveráa laTierradescendiendoporelRíojuntocontodoslosbebésliberados.¡Quéextraño!,piensaella,viajarentretantosbebés.Ademástendráquehacerloenvueltaenvendas,¡quéhumillanteseríasialguienmevieraconellas!Peroporsupuesto,nadielaverá.
CurtisJesteslaúnicapersonaalaquedecidecontárselo.Esevidentequelasotrasopcionesquetiene—Betty, Thandi oSadie— intentarían hacerla desistir y Liz no está de humor para soportarningún otro drama.Y conOwen no se habla.O sea que sólo puede recurrir a Curtis. Él siempreparecedivertirsecon lavidade losdemásyademásesdesapegadoe indiferente.Seentristeceráalsaberqueellahadecididoirse,peronoharánadaparaimpedírseloniintentaráhacerlacambiardeidea.YesoesexactamenteloqueLizquiere.
Sinembargo,selodiceporsiacasoenelúltimomomento,elsábadoporlanoche,antesdeirse.
—¿Supongo que no puedo hacerte cambiar de idea?—pregunta Curtismientras los dos estánsentadosenelmuelleconlaspiernascolgandosobreelagua.
—No—respondeLiz—.Yalohedecidido.—¿LohacesporOwen?Ellalanzaunsuspiro.—No—respondealfin—.Enrealidad,no.Peroojalápudieratenerloqueéltiene.—Noentiendoquéquieresdecir,Lizzie.—OwenyateníaaEmilydesdeantes,desdequevivíaenlaTierra.Encambioyonotengonadade
laTierra.EmilyfueelprimeramordeOwen,yyo tambiénquieroserelprimeramordealguien.¿Tandifícilesentenderlo?Avecesmedalasensacióndequetodoloquemeocurreenestavidaquevahaciaatrásesviejo.Todocuantomehaocurridoenellayalehabíapasadoantesaalguienmás.¡Mesientocomositodoloqueconsigofueradesegundamano!
—Liz—dice Curtis con seriedad—, yo creo que acabarás viendo que aunque estuvieras en laTierra,viviendounavidahaciadelante,todoloqueteocurriríaenellayalehabríapasadoaalguienmás.
—Sí—admiteLiz—,perolascosasnoestaríantanpredeterminadas.Yonosabríacuándoibaamorir.Niqueenmenosdequinceañosvolveríaaconvertirmeenunestúpidobebé.Podríaserunamujeradulta.Tenermipropiavida.
—Aquítienestupropiavida.Ellaseencogedehombros.Nocreequeseanecesarioseguirconlaconversación.—Liz,tengoquedecírtelo,creoqueestáscometiendoungraveerror.Deprontoellasevuelvehaciaél.—¡Miraquiénhabla!Mírate,Curtis,estássentadoenestemuelletodoeldía,undíatrasotro,¡sin
hacernada!¡Sinveranadie!¡Nisiquieracantas!¡Siestásmediomuerto!—Enrealidad,estoymuertodeltodo—afirmaelmúsicobromeando.—Paratitodoesunabroma,todoesdivertido.¿Puesporquénoestáscantandoentonces?¿Por
quénocantasalgunavez,Curtis?—Porqueyalohiceantes—respondeélconseguridad.—¿Ynoloechasdemenos?¿Acasoesperasquemetraguequeeresfelizsiendounpescador?¡Si
nuncatehevistopescarnada!—Pescopeces,perovuelvoaarrojarlosalagua.—¡Estoeslacosamásestúpidaeinútilqueheoídoentodamivida!—No creas. Así enviamos a los peces de vuelta a la Tierra y además el muelle queda más
pintoresco.Pescaresunaprofesiónútilynoble—observaCurtis.—¡Anoserquesesupongaquetengasquehacerotracosa!Curtissequedacalladoduranteunosmomentos.—LasemanapasadaconocíaunjardinerollamadoJohnLennon.—¿Quétienequeveresoconloqueestábamoshablando?—preguntaLiz.Noestádehumorpara
lasgilipollecesdeCurtis.—Nada.Sóloqueríadecirqueaunquehayashechoalgoantes,nosignificaquetengasqueseguir
haciéndolo.—¿Sabes lo que pienso?—dice ella—. ¡Que eres un cobarde!—exclama poniéndose en pie y
marchándose.
—¡Sólouncobardepuedereconoceraotrocobarde!—legritaCurtis.
LizsepasatodalanocheenvelaescribiendoelborradordelacartaaBetty.
QueridaBetty:
Cadadíaescomoelanterioryyanopuedosoportarlomás.Mesientocomosinuncahubieradisfrutadodelomejordelavida.Lamuertenoesmásqueunagranrepetición,¿sabes?
NolohagoporOwen.
CuandoleasestacartaprobablementeyahabrévueltoalaTierra.
HeregresadoalaTierracomouna«evasora».
Porfavor,notepreocupes.
Sientoquehayasidodeestamanera.
Losiento.
CuidadeSadieydeJenpormí.
Tequiero,
Liz
Omitiendolapartetachada,vuelveaescribirlacartaenunanuevahojadepapelyseacuesta.
Aaltas horasde la nocheOwenoyeunosgolpecitos en la pared.Al ver que suenan conun ritmoconstanteyfamiliar,seponeaescucharlos:esEmilycomunicándoseenmorseconél.
«¿Quieresquemevaya?»,lediceellaconlosgolpecitos.Élnoleresponde.«Quieroirme»,insisteella.Élnoleresponde.«Hazdosgolpecitos,asísabréquemehasoído.»Élrespirahondoygolpeadosveceslapared.«Lonuestronofunciona»,lediceella.«Yalosé»,respondeélenmorse.«Siempre te querré, pero nuestra vida está ahora descompasada», dice ella por medio de
golpecitos.«Losé»,respondeOwendeigualmodo.«Soyunamujerdetreintaycincoaños,nosoylamisma»,observaEmily.
«Losé»,respondeél.«Tútienesdiecisiete»,diceellaenmorse.«Dieciséis»,puntualizaélconlosgolpecitos.«Dieciséis»,repiteella.«Losiento»,diceélconunossuavesgolpecitos.«Túnotieneslaculpa,O.Asíeslavida»,respondeEmily.«¡Peroestamosmuertos!»,diceélenmorse.Owenlaoyereírsedesdelaotrahabitación.Peroyanooyemásgolpecitos.Ellavaaverle.—Cuando tú falleciste, yo tambiénquisemorirme.Noquería vivir sin ti—diceEmily—.Eras
todamivida.Yonoteníaniunsolorecuerdoenelquetúnoestuvieras.Owenasienteconlacabeza.—Perotuvequeseguiradelanteconmivida.Dejédeesperarte.Enrealidad,estabaseguradeque
novolveríaaverte—admiteEmily.—Nuncatecasaste—observaOwen.—Yamehabíacasadocontigo.Ysabíaque sivolvíaahacerlocompararíaaminuevomarido
contigoyqueseríaundesastre—confiesariendo—.Lodivertidodelcasoesquedosmesesantesdemorir acababa de conocer a alguien. Aún no manteníamos una relación seria, pero teníaposibilidades.
—¡Yonuncalovi!¡Nuncateviconningúnotrohombre!—exclamaOwen.—Puessupongoquefueporqueenesaépocanomeestabascontemplandodemasiado.Élmirahaciaotraparte.—Enelfondopodíasentirquemeestabascontemplando,Owen,ytambiénnotécuándodejastede
hacerlo—lediceella.Élnolecontesta.—Tienestodoelderechodelmundodehaberteenamoradodeotramujer.Notesientasculpable
porello—diceEmilycondulzura.—Alprincipiocreoqueellamegustabaporquemerecordabaati—admiteélenvozbaja.—Oamíhaceveinteaños.OwenmiraaEmilyy,porprimeravezdesdequeellallegóaEnOtroLugar,lavetalcomoes.Es
bonita, quizá más que cuando era una adolescente. Pero ahora es distinta. Tiene un aspecto másmaduro,másanguloso.Susojostambiénhancambiado,peroélnopuededecirexactamenteenqué.
—Yanoteconozco,¿verdad?—dicecontristeza.Emilylebesaenlafrenteyaélleentranganasdellorar.—Algunasparejasfuncionan,algunasparejassiguenviviendojuntasaquí—añadeOwen—.¿Por
quénopodemossercomoellas?—Yonomepreocuparíademasiadoporello—respondeEmily—.Yenmicaso,mealegrode
volveraverte.—Pero¿notepareceinjusto?Sesuponíaquedebíamosenvejecerjuntosytodolodemásquese
dice.—Puesnovaaserasí.Almenosaquí—señalaEmily—.Yyocreoquehemossidomásfelices
quelamayoríadelasparejas.Hemossidomuyfelices juntosytambiénhemostenidounasegundaoportunidad.¿Cuántasparejaspuedendecirlomismo?
—¿Esporloquepasóaquellanocheenelporche?—preguntaOwen.
—No,enabsoluto—letranquilizaella—.Peroyaquelohasmencionado,¿quieressaberquéfueloqueviesanoche?—Emilyhaceunapausa—.Viadosadolescentesenamorados.
Owen cierra los ojos y al volver a abrirlosEmily ya se ha ido. Siente un extraño dolor en elantebrazo.Al examinar su tatuaje, ve que estámás vívido de lo que nunca recuerda haber estado,inclusomásquecuandose lohicieron.Elcorazóngrabadolateypalpitacasicomouncorazóndeverdad.Yentoncesdepronto el tatuajedesaparece.Aparte deun ligero enrojecimiento, yanohaynadaensupiel.Escomosieltatuajenuncahubieraestadoallí.
Justoantesdedormirse,seprometequeloprimeroqueharáallevantarseporlamañanaseráiraveraLiz.
HacialaTierra
El día de su «liberación»Liz se despierta a las cuatro de lamadrugada. Todas las partidas tienenlugarenelalba,cuandolamareadejaaldescubiertoelRío,yellallegaquinceminutosantesdelahoraseñalada.
Ungrupodeenfermerasestápreparandoa losbebéspara«liberarlos»enelRío.LaenfermeraasignadaaLizsellamaDolly.
—¡Caramba! —exclama la enfermera al contemplar a Liz—, no solemos ver unas niñas tancreciditascomotú.
—Soyuna«evasora»—respondeella.—Bien.Joleneslaquesueleocuparsedelosevasores,peroestádevacaciones.Tantosieresuna
«evasora»comosino,tienesquequitartetodalaropaparaquepuedaenvolvertecomoalosreciénnacidos.
—¿Nopuedoalmenosdejarmepuestalaropainterior?—preguntaLiz.—Losiento,todoelmundotienequevolveralaTierratalcomovinoalmundo—diceDolly—.
Yaséqueatuedadesunpocoembarazoso,peroasíescomotienequeser.Lamayoríadebebésnisiquierasedancuentadeestedetalle.Ademáscuandoteenvuelvacomounreciénnacidonadiesabráqueestásdesnuda—añadeentregándoleunabatadepapel—.Demomentopuedesponerteesto.
Liz,totalmentedesnudasalvoporlabatadepapel,setiendesobreunamesaequipadaconruedas,comolasquehayenlasmaternidades.Laenfermeraqueseocupadeellaempiezaaenvolverlaconunasblancasvendasde lino.Comienzapor lospies,vendándole laspiernas juntasydespués siguehaciéndolohastallegaralamitaddelcuerpo.Entonceslequitalabatadepapelyempiezaavendarleeltorsoconlosbrazospegadosalcuerpo.
—¿Porquémevendastambiénlosbrazos?—preguntaLiz.—¡Oh!,porqueteayudaaquelacorrientetearrastreconmásrapidezhacialaTierrayademás
mantienealosbebéscalentitos—diceDolly.Laenfermeralevendafuertementetodoelcuerpo,dejándolesólolacaradescubierta.Lizparece
unamomia.Sienteunahorriblesensación,apenaspuederespirarcontodasesasvendas.Dolly la hace rodar hasta la orilla de la playa y la mete en el mar. Liz siente la fría agua
empapándolelasvendas.—¿QuélesocurriráalasvendascuandolleguealaTierra?
—No te preocupes.A esas alturas lamayoría de las vendasya se habrándeshechoy elRío sellevarálasquequeden—respondeDolly—.Cuandoelsolempieceasalirporelhorizonte,podrásverelRío.Yo tedaréunempujoncitoy lacorriente tearrastraráentonceshacia laTierra.Mehandicho que el viaje parece durar una semana, pero probablemente perderás la noción del tiempomuchoantes.
Lizasiente.Vequeelhorizonteempiezaateñirsedeunaluzroja.Prontosaldráelsol.—¿Puedohacerteunapregunta?—lediceDolly.AlasentirLizconlacabezapararesponderle,prácticamentetodosucuerposemuevetambiéna
causadelasapretadasvendas.—¿QuéesloquehaceaunapersonaquerervolverantesdetiempoalaTierra?—preguntaDolly.—¿Aquéterefieres?—respondeLiz.—Aquetodalavidaesigual,¿noescierto?¿Porquétenéistantasganasdevolver,entonces?En ese momento el sol sale por el horizonte. El océano se separa en dos y queda el Río al
descubierto.—Está amaneciendo—observa Dolly—. Ha llegado el momento de irte. ¡Que tengas un buen
viaje!—diceempujándolahaciaelRío.
CurtisJestnopuededormir.Davueltasymásvueltasenelcatredemadera.Alverquenoconsiguedormirse,selevantadelacama.
Semueredeganasdecruzar laciudadpara ir acasadeLiz.Sabequeellaviveconsuabuela.DecidequedebeinformaraBettydeladecisióndesunieta,aunquetraicioneaLiz.Porprimeravezdesdehaceañoslamentahaberperdidolosprivilegiosdeserunaestrelladerock.(Lasestrellasderocktienencochesveloces.)
Alas6.15delamañanaCurtistocaeltimbredelacasadeBetty.—Hola,queríaveralaabueladeLizzie.¡Caramba!—exclamamirandofijamenteaBetty—.¿No
serássuabuela,verdad?—Sí,soyElizabeth,laabueladeLiz.¿Yquiénerestú?—Yosoy…—empiezaadecirél.Porunmomentoseolvidadesunombreydelarazónporla
quehaidoalacasa.Enlugardeello,observalosojosdeBettyeintentaaveriguardequécolorsonexactamente.Sondeuncolorgrisazulado,decide.Grisazulados,comolaniebladelamañana,comoelaguadeunmanantialdemontaña,comolalunaotalvezcomolasestrellas.Betty,ladelosojosgrisazulados.Podríahacerunabuenacanciónconestaletra…
—¿Quédeseas?—lepreguntaellainterrumpiendolasensoñacionesdeCurtis.Élseaclaralagarganta,seponederechoylediceconvozgrave:—SoyCurtisSinclairJest,elexcantantedeMachine,unconjuntomusical.Elizabeth,queconfía
totalmenteenmí, ayermehizounaconfesión,poresohedecididoveniraestashoras.TengoquedecirtealgomuyurgentesobreLizzie.
—¿Quées?—preguntaOwenmientrassaledelcocheyseacercaaél—.Tengoquehablarconellaenseguida.
—Lizziesehametidoenunproblema,Betty.Necesitaremostucoche—respondeCurtis.Bettyrespirahondo.—¿Quélehapasado?¿QuélehapasadoaElizabeth?—Nisiquieraintentaocultarelterrorque
reflejasuvoz—.¡Quierosaberquélehapasadoaminieta!—grita.Curtislecogelamanoparatranquilizarla.—LizseestámarchandoalaTierra,debemosintentarimpedírselo—respondeél.—¿Quieresdecirqueseestáevadiendo?—preguntaOwen.Curtisasienteconlacabeza.—¡Perosiyaesdedía!—exclamaBetty.Los tres levantan la cabeza para contemplar el cielo amarillento, que se está iluminando por
momentos.—Subidamicoche,deprisa—diceOwenechandoacorrerhaciaél.—¡QueDiosnosayude!—susurraBettyantesdeseguirle.
AmedidaquelacorrientelavaarrastrandoconmásfuerzahacialaTierra,LizseponeapensarenEnOtroLugaryen todos losseresquehaconocidoenél.Tambiénpiensaencómosesentiránaldescubrirqueellasehaidosindecirnada.
PiensaenThandi.PiensaenBetty.PiensaenSadie.PiensaenPaco,enJenyentodoslosperros…YtambiénpiensaenOwen.Perosobretodopiensaenella.SeguirdescendiendoporelRíosignifica,aefectosprácticos,el
finaldeLiz.Yalverlodeesemodosepreguntadeprontosinohabrácometidouncolosalerror.Ydespuéssepreguntasinoseráyademasiadotardeparacorregirlo.PorquesielladecidevolveraEnOtroLugarnoesporOwenniporningunaotrapersona.Con
Owenosinél,vivircasiquinceañosesmuchotiempo.Esunregalo.Porqueaquí,EnOtroLugar,dondesesuponíaquelavidadeLizhabíallegadoasufin,podíaocurrircualquiercosa.
Siinterrumpoestavidanuncasabrécómohabríasido.Unavidaesunabuenahistoria,piensaLiz,aunqueseaunavidaabsurdaquevahaciaatráscomolamía.AferrarseasuantiguavidadelaTierranoteníaningúnsentido.Nuncapodríarecuperarla.Ahoraalpensarmásdetenidamenteenello,sedacuentadequesuvidahaciaatráseraenrealidadunavidahaciadelante.Aúnnolehabíallegadolahorademoriryteníamuchasganasdesabercómoseríasuvida.
Yademás,piensaLiz,noséporquétengotantasganasdevolveralaTierra.Alentrarencontactoconelagua,lasvendasdelinosehanvueltotandurascomoelyeso.Lizse
balanceadeunladoaotroparaintentarromperlas.Perosusmovimientosenlugardeliberarlahacenque gire ciento ochenta grados hasta quedar de cara a la corriente.Ve que a su alrededor hay unmontóndebebésflotandoenelagua.
Lasolas legolpean lacara.Losojos lepicanpor la sal.Suspulmonesempiezana llenarsedeagua.Lizsientequesuspiernassehunden.
Doblaelcuellohaciadelanteeintentaromperconlosdienteslasvendas.Despuésdeesforzarsemucho, consigue hacer un agujerito de lo más pequeño, pero suficiente para permitirle girar elhombro una y otra vez. La maniobra le duele muchísimo, pero por fin logra liberar el bícepsizquierdo,yluegoelantebrazoylamanodelmismobrazo.Sacalamanofueradelagua.
Luchaporsaliralasuperficieconlamanolibre,peroesdemasiadotarde.Suspulmonessehan
llenadodeagua.Liz se hunde. Tardamucho tiempo hasta llegar al fondo del océano. El agua es cada vezmás
oscura.Hastaquechocaconelfondodelmaremitiendoungolpeseco.Asualrededorseformaunanubedearenaydeotrosrestosmarinos.Yentoncessedesmaya.
Alamañanasiguiente,cuandorecuperaelconocimiento,nopuedemoverseysepreguntasiestámuerta.Perodescubrequepuedeabrirlosojosyqueelcorazónlelate,pordespacioquelohaga.Seleocurrequequizásehaquedadoatrapadaenelfondodelmarparasiempre.Quenoestámuertaniviva.Queesunfantasma.
—Losiento,peroesdemasiadotarde—diceCurtisaOwen—.Sehaido.—No puedo creer que Liz haya hecho algo así—respondeOwen sacudiendo la cabeza—.No
parecíaserlaclasedepersonaquefueraahacerlo.—Yo tampoco puedo creérmelo—admiteBettymoviendo también la cabeza con incredulidad.
Lanzaunsuspiro—.Alllegaraquíestuvounatemporadadeprimida.Despuéspenséqueyasehabíarecuperado,perosupongoquenofueasí.
—Voyabuscarlaconelbarco—diceOwen.—Se ha ido, Owen. La enfermera encargada de echarla al mar nos lo ha confirmado. Ya no
podemoshacernada—señalaBettyfulminandoaCurtisconlamirada.Élmirahaciaotraparte.—Detodosmodosvoyabuscarlaconelbarco—repiteOwen.—Pero…—replicaBetty.—Talvezhacambiadodeidea.Ysiesasí,puedequenecesitenuestraayuda—diceOwen.—¡Teacompañaré!—exclamanCurtisyBettyalunísono.DurantedosdíasydosnochessededicanarastrearconlaembarcacióndeOwenlascostasdeEn
OtroLugarparaencontraralgúnindiciodeLiz.Peronoencuentrannada.EnlasegundanocheOwenlesdiceaCurtisyaBettyqueesmejorqueregresenacasa.
—Puedoseguirbuscándolayosolo—dice.—Seráinútil,Owen.Odiotenerquedecirlo,peroellasehaido.Sehaidoparasiempre.Esmejor
quetútambiénvuelvasacasa—diceBetty.Élniegaconlacabeza.—No—responde—.Voyaintentarloundíamás.Conelcorazónroto,BettyyCurtisdecidenvolveracasa.
—¿Creesquedeberíamoshabernosquedadoconél?—preguntaCurtisenlacocinadeBettyalvolveracasa.
Ellalanzaunsuspiro.—Creoqueestabaintentandohacer laspacesconsigomismo,quequeríaestarsolo—responde
ella.Curtisasienteconlacabeza.—Sientomuchonohabervenidoaverte el sábadopor lanoche.Nospeleamosyellamehizo
jurarqueyonodiríaanadiequeibaaevadirse.—Nohasidoportuculpa.Yodeberíahabervistoquealgoibamal.OjaláLizmehubierapedido
consejo.EnesemomentoCurtisveunanotapegadaenlaneveraconelnombredeBetty.—Mira,Betty,creoquetehadejadounanota.Ellacruzalacocinacorriendoyarrancalanotadelanevera.¿Porquénolahabrévistoantes?,
piensa.CurtisseponeamirarporlaventanaparaqueBettypuedaleerlaenprivado.Cuandoaúnnoha
pasadoniunminuto,ellasedesplomasobreunasilla.—¡Nodiceporquélohahecho!Enrealidad,nodicenada—exclamaconlosojosempañados—.
Túfuisteelúltimoquehablóconella.¿Porquécreesquelohizo?—No estoy del todo seguro—responde al cabo de unmomento—. Creo que pensaba que no
podíallevarunavidanormalaquí.Queríaserunadulto.Queríaenamorarse.—¡Sipodíahaberseenamoradoaquí!—protestaBetty—.Yocreíaqueyalohabíahecho.—Creoqueenpartesefueporesto—observaCurtiscondelicadeza.—¡Peropodíahabervueltoaenamorarse!DeOwenodecualquierotrapersona.—Creo que pensaba que las condiciones que habían aquí no ayudaban en nada a que el amor
durara—explicaCurtis.Bettyloabraza.Alolerélelsuavearomadesupelo,piensaquehuelearosasyasalmarina.—Adecirverdad—diceCurtisenvozbaja—lascondicionesrarasvecessondemasiadobuenas
enningunaparte,peroaunasíelamorsiguesurgiendotodoeltiempo.
Lizcomprendequenuncapodrátenerfuerzassuficientesparasaliralasuperficie.Seguiráviviendosuvidahaciaatrásyrespirandoenelfondodelmar,perosinolaencuentra,serácomosiestuvieramuerta.Estavezsíqueserácomoestarmuertadeverdad.
Y,sinembargo,noestámuerta.Aunquecasiseríamejorqueloestuviera.RecuerdalahistoriaqueenunaocasiónOwenlecontódeunhombrequesehabíaahogadomientrassedirigíaalPozo.Nadievolvióaencontrarlodurantetreintaañosycuandoporfindieronconél,yaeraunbebéytuvoqueregresaralaTierra.
Si nadie sabe que estás viva, si ninguna persona de las que te quieren lo sabe, es como siestuvierasmuerta,piensaLiz.
Seponeacontemplarelaguaquehayencimadeella,enelfondodelmarnopuedeshacerotracosa.
En la segundanochequepasabajoel agua,dos sirenas,unaespelirrojay laotra rubia,pasanjuntoaellanadando.Sedetienenparaobservarla.
—¿Eresunasirena?—lepreguntalapelirroja.Liz nopuedehablar porque su laringe se cerró demanera refleja al empezar a hundirse en el
agua.Parpadeadosvecesparaintentarcomunicarseconellas.—¡Nocreoquelosea!—exclamalasirenarubia—.Noesmásqueunserestúpidoquenisiquiera
habla.—Yademástieneunospechosmuypequeños—añadelapelirrojariéndose.—Yocreoqueesuncaracol—dicelarubia.—¡Oh,nodigaseso!—respondelapelirroja—.Creoquehasheridosussentimientos.Mira,está
llorando.
—¡Meda igual! ¡Qué deprimente es!Vámonos—exclama la rubia.Y las dos sirenas se alejannadandofelizmente.
Lassirenas(unascriaturascruelesyvanidosas)sonunosdelosnumerososseresquevivenenelfondodelmar,enelmundoquehayentreEnOtroLugarylaTierra.
Enelfondodelmar,enelmundoquehayentreEnOtroLugarylaTierra
Eltercerdíaqueestábajoelagua,sedespiertaaloírunextrañosonidoquepodríaserunadistantesirenaenmediodelaniebla,elgravetonodeunacampanaoquizásinclusoelruidodeunmotor.Lizabre losojos.A lo lejosparpadeaunfamiliar reflejoplateado.Losentrecierraunpocoparaverlomejor.¡Esunagóndola!Yluegodescubrequelagóndolaestágrabadasobreunalunaplateada,yquelalunaestáunidaaunacadenitadeplata.Yqueelsonidoqueproduceseparecemuchoaldeunreloj.Elcorazónlelateconfuerza.Esmiantiguorelojdebolsillo,piensa.Alguienlohaarreglado,ysiconsiguierasacarelbrazofueradelagua,podríarecuperarlo.
Asíquereúnetodassusfuerzas.Ylevantalamanoquetienelibre.Peroelrelojestámáslejosdeloquehabíapensado.Asíquereúnemásfuerzasaún.Yconsiguedespojarsedealgunasvendasyliberarlaotramano.Seimpulsaconlosbrazos.Peronopuedenadarconlospiesatados.Porfinconsigueliberarsedetodaslasvendas,hastaquedartotalmentedesnuda,talcomovinoal
mundo.Asíqueestádesnuda.Peroalmenostienelosbrazosylaspiernaslibres.Yempiezaanadar.Liz nada, y nada, y nada, y nada, sin perder nunca de vista la luna plateada. Y la góndola va
volviéndosemásymásgrande.Yelrestodelrelojparecedesaparecer.Yporfinllegaalasuperficie,luchandopararespirar,luchandoparavivir.
Ycuandoalfinsusojosseadaptanalaluzdeldía,noveporningúnladolagóndola.Ensulugardescubreunfamiliarremolcador.
—¡Liz!—gritaOwen—.¿Estásbien?Ella no puede hablar. Tiene los pulmones demasiado llenos de agua y está congelada. Owen
adviertequetieneloslabiosmorados.
Lasacadelaguay,trastenderlaenelbarco,lacubreconunamanta.Liztoseduranteunaeternidad,intentandoexpulsarelaguadesuspulmones.—¿Estásbien?—preguntaOwen.—Porlovistoheperdidotodamiropa—diceLizconunavozroncayquebrada.—Yalohevisto.—Ycasimehemuerto—diceella—.Denuevo—añade.—Losiento.—Yestoymuycabreadacontigo—observa.—Losientomucho.Esperoquealgúndíameperdones.—¡Yaloveremos!—respondeella.—¿Quieresqueahoratelleveacasa?Lizasienteconlacabeza.Exhausta,setiendeenlacubierta.Loscálidosrayosdelsolacariciándolelacaraleproducenuna
agradable sensación. Piensa que es fenomenal estar en un barco que se dirige a casa. Enseguidaempiezaasentirsemejor.
—Quizámegustaríaaprenderallevarunbarco—diceLizcuandoestánapuntodellegar.—Si quieres puedo enseñarte a hacerlo—responde Owen—. Se parece mucho a conducir un
coche.—¿Quiénteenseñóamanejarunbarco?—inquiereLiz.—Miabuelo.HasidocapitándebarcotantoaquícomoenlaTierra.Acabadejubilarse.—Nuncamedijistequetuvierasunabuelo.—Puesahoratieneunosseisaños…—¡Esperaunmomento!¿EratalvezelcapitándelNilo?—Sí.Exactamente—respondeOwen.—¡Eselbarcoenelqueyoviajé!¡Leconocíelprimerdíaquelleguéaquí!—exclamaLiz.—Elmundoesunpañuelo—respondeOwen.
Larecuperación
Lizserecuperadurantedossemanasenunhospital.Aunquealcabodevariosdíasyasesientemejor,disfrutadesuperíododeconvalecencia.Esagradablevercómolosamigosylosseresqueridosseocupandeti(sobretodocuandosabescontodacertezaquevasarecuperarte).
AldousGhentesunadelaspersonasquevanaverla.—Alparecer,querida,noestásenlaTierra—declara.Lizasienteconlacabeza.—Esoparece.—Estasituaciónexigeunmontóndepapeleo,¿losabías?—preguntaAldouslanzandounsuspiro
yluegolesonríe.—Losiento—diceLizdevolviéndolelasonrisa.—Notepreocupes—respondeélabrazándola.Deprontosesorbelosmocossonoramente.—Aldous,¡estásllorando!—Espormialergia.Aparecesobretododurantelasreunionesfelices—observasonándose.—AlfinheleídoSueñodeunanochedeverano—diceLiz.—CreíaqueunosóloleíaaShakespeareporobligaciónenelinstituto.—Últimamentetengounpocomásdetiempolibre.Aldoussonríe.—¿Yquétehaparecido?—Meharecordadoaestelugar—respondeLiz.—¿Enquésentido?—preguntaAldous.—Parecesunprofesor—lereprendeella.—¡Muchasgracias!Puesantesloera.¿Quémeestabasqueriendodecir?Lizsequedapensativaduranteunosmomentos.—Puesqueenesaobrahayelmundodelashadasyelmundoreal.YShakespeareescribedeuna
formaqueparecequenohayaningunadiferenciaentreambos.Lashadassoncomolaspersonasdelmundoreal, tienen losmismosproblemasy losmismossentimientosquenosotros.Yelmundodelos humanos se encuentra al lado del de las hadas. Están juntos y al mismo tiempo separados. Yaunqueelmundodelashadasseaquizásunsueño,elmundorealtambiénpuedeserlo.Yestaideamegusta—observaLizencogiéndosedehombros—.Laclasedeinglésnuncasemehadadodemasiado
bien.Labiologíayelálgebraeranlasasignaturasquemásmegustaban.—Unasmateriasexcelentes.—AhoraestoyleyendoHamlet.PeroyaveoquenomegustarátantocomoSueñodeunanochede
verano—confiesaLiz.—¿Ah,no?—No, porque Hamlet está demasiado obsesionado con la muerte, como si fuera a resolverle
todossusproblemas—diceLizmoviendolacabezaenungestodenegación—.¡Siélsupieraloqueyosé,nopensaríalomismo!
—¡Tienestodalarazón!—asienteAldous.
UndíaCurtisJestvaavisitarla.—Lizzie—lediceconuntonodevozmuyserioqueellanuncalehabíaoído—,hedepreguntarte
algo.—Sí,¿dequésetrata?—EssobreBetty—susurraCurtis.—¿Quéquierespreguntarmesobremiabuela?—inquiereLiz.—¿Sabessihayalgúncaballeroquelavisiteamenudo?—preguntaCurtisinclusomásbajitoaún.—No,nocreo,¿yporquémelopreguntassusurrando?—observaLiz.—¿Sigueenamoradadetuabuelo?—vuelveasusurrarél.—No,miabueloJakevolvióacasarseyahoraviveenunbarcocercadeMonterrey,California.Curtisrespirahondo.—¿Meestásdiciendoquequizátengounaoportunidad?—¿Unaoportunidaddequé,Curtis?—DesalirconBetty.—¿DesalirconBetty?—gritaLiz.—Liz,porfavor,bajalavoz,noquieroquenadieseentere—lesuplicaélmirandoasualrededor
coninquietud—.Tuabuelaeslacriaturamásdeliciosaqueheconocido.—Curtis,¿meestásdiciendoquetegustaBetty?—lesusurraLiz.—Estoybastantecoladoporella.Sí,sí,supongoqueasíes.—¿No es un pocomayor para ti?—inquiere Liz—.Almorir tenía cincuenta años, ¿sabes?Y
ahoratieneunostreintaytres.—¡Sí,exactamente!¡Ellatieneunmontóndesabiduría!¡Ydecalidez!Yalmenos,porahora,yo
tengoveintinueveaños.¿Creesquemeencontrarádemasiadoinmaduroparaella?—No,Bettynoesasí—respondeLizsonriendo—.Dimeunacosa,¿sabeellaquelegustas?—No,aúnno,peroestabapensandoquequizápodríaescribirleunacanción.—¡Curtis, me parece una maravillosa idea! —exclama Liz sonriendo de nuevo—. ¡Ah!, y si
mientraslaescribestequedascortodeideas,mencionasubonitojardín.—¡Sí,sí,sujardín!Loharéymuchasgraciasportuconsejo,Lizzie.
CuandoaLizledanelaltayvuelveacasadeBetty,sepasaeldíaholgazaneandoeneljardíndesuabuelayrecuperándose.MientrasBettyseocupadeljardín,ellapermanececómodamenterecostada
enlahamaca.Bettyvaacomprobar,amenudo,queLizsigueenlahamaca,dondedebeestar.—Nomeheidoaningunaparte—diceellatranquilizándola.Suabuelarespirahondo.—Esquecreíquetehabíaperdidoparasiempre.—¡Oh,Betty!¿Acasonosabesqueel«parasiempre»noexiste?—observaLizcolumpiándoseen
lahamaca.Suabuelavuelveadejarlasolaparaocuparsedeljardín.Alcabodecincominutos,CurtisJestsepresentayvuelveainterrumpirlas.
Llevauntrajeblancoyunasgafasdesolredondas,comosisehubieraataviadoparaunaocasiónespecial.
—Hola,Lizzie—saluda—.Hola,Betty—añadeenvozbaja.—Hola,Curtis—respondeLizimitandoeltonodevozdesuamigo.Curtisleguiñaelojo.Lizsedamediavueltaenlahamacayfingeecharunasiestecita.Sadie se
enroscadetrásdeella.DesdequeLizhavuelto,laperranosehaseparadodeellauninstante.—¡Caramba,Betty!—exclamaCurtissacándoselasgafas—,¡quéjardínmásbonitotienes!—Gracias,señorJest—contestaella.—¿Teimportasimequedounratito?—preguntaél.—EsqueLizestádormidayyoibaaentrarencasa.—¡Ah!,¿estásocupada?—Sí.—Entonces,yavolveréotrodía—tartamudeaCurtis—.Adiós,Betty.SaludaaLizziedemiparte.Bettyasienteconlacabeza.—¡Adiós!—respondeella.—¡Oh,Betty!—exclamaLizencuantoCurtisyanopuedeoírla—,hassidomuycruelconél.—¡Hassidotúlaquesehadormidoencuantoélhallegado!—Creoquehavenidoparaverteati—diceLiz.—¿Amí?¿Porquéhabríadehacertalcosa?—Creoqueélvenía,mmm…—haceunapausa—paracortejarte.—¿Cortejarme?—Bettyseechaareír—.¿Porqué?¡Eslacosamásabsurdaqueheoídoentoda
mivida!CurtisJestesunjovenyyosoylobastantemayorcomoparasersu…—Novia—añadeLizterminandolafrase—.Enrealidadsólooslleváiscuatroañosbiológicos.—Querida,yahetenidobastanteconelamor,yaheestadoenamoradavariasveces.—Decirqueyahastenidobastanteconelamorescomodecirqueyahasvividobastante,Betty.La
vidaesmejorconunpocodeamor,¿nolosabías?—Despuésdetodoloquetehapasado,¿aúnpuedesdecireso?—preguntaBettyarqueandouna
ceja.Lizsonríeligeramenteydecideignorarlapregunta.—DaleunaoportunidadaCurtis,Betty.—Dudomuchoquelerompaelcorazónsinoseladoy.Estoyseguradequemañanayasehabrá
olvidadodemí—señalaBettyconescepticismo.Unasemanamástarde,sedespiertanlasdosenmediodelanochealoírelsonidodeunaguitarra
acústica.—Estacanciónesparati,Betty—gritaCurtisdesdeabajo,eneljardín.
Seponeacantarporprimeravezdesdehacecasidosaños.Esunanuevacanción.EslaprimeravezqueLizlaoye,ymásadelanteseacabaráconociendocomo«LacancióndeBetty».
Curtis Jest no está en sumejormomento como cantante, ni tampoco se encuentra en sumejormomento como compositor de canciones. La letra es (debe reconocerse) más bien trillada, hablasobretododelospoderestransformadoresdelamor.Enrealidad, todaslascancionesdeamorsoniguales.
OwensevuelcaporcompletoenLiz.Vaavisitarlacadadía.—Liz,cuandoestabasenelfondodelmar,¿quéesloquetediofuerzaparasaliralasuperficie?
—inquiereOwen.—Creívermirelojflotandoenelagua,peroalfinalnoeramásquetubarco.—¿Quéreloj?—preguntaélalcabodeunmomento.—ElqueteníacuandovivíaenlaTierra.Enrealidad,teníaquellevarloaarreglar.Élmuevelacabezamostrandoincredulidad.—¿Unrelojestropeadofueloqueteempujóasaliralasuperficie?Lizseencogedehombros.—Yaséquequizánoparecetanimportante.—EnOtroLugarpuedescomprarteunreloj,¿sabes?—Quizá—respondeLizencogiéndosedehombrosotravez.AldíasiguienteOwenleregalaunrelojdeoro.Elotroquetantolegustabaeradeplata,peroLiz
no le dice nada.Tampoco es un reloj de bolsillo, sino un reloj de señora conuna pulsera de oroformadadeeslaboncitos.Noeslaclasederelojquehabríaescogidoparaella,perotampocoselodice.
—Gracias—dicemientrasOwenleajustalapulseradelrelojalrededordesudelgadamuñeca.—Hacejuegocontupelo—observacontemplandoconorgulloeldelicadorelojdeoro.—Muchasgracias—repiteella.
AquellamismatardeJenvisitaaLiz.(PudovolveracasadeOwendespuésdequeEmilysemarcharaparacursarlosestudiosdeconservadoradelibros.)
—¿Tehagustadoelreloj?—lepreguntaJen—.Yoleayudéaelegirlo.—Esmuybonito—respondeLizrascándoleentrelasorejas.—Élnoestabasegurodesielegirunodeplataodeoro,peroyoleaconsejéquelocomprarade
oro,porquetieneuncolormuybonito,¿nocrees?—diceJen.—Eselcolormásbonitodetodos—asienteLiz—.¿Vosotroslosperrospodéisverloscolores?
Creíaquenoeraasí.—¡Claro!¿Quiénhadicholocontrario?—PuesenlaTierralagentediceesodelosperros.—La gente de la Tierra que dice eso es muy rara—dice Jen moviendo la cabeza mostrando
incredulidad—.¿Cómopuedensaberquenovemosloscoloressinuncanoslohanpreguntado?¡Sinisiquierasabenhablarnuestroidioma!
—Tienestodalarazón—afirmaLiz.
—Cuando estaba en la Tierra vi en una ocasión un reportaje que afirmaba que los perros notenemosemociones.¿Notepareceincreíble?—preguntaJenladeandolacabeza—.Liz,queríadartelasgraciaspordejarmeestarentucasatodoestetiempo.
—Hasidounplacer.—Ysientomucho—diceJenbajandolavoz—habermemeadoentucamaaquellavez.—Yanimeacordaba—latranquilizaLiz.—¡Oh,québien!Nopodríasoportarquetehubierasenfadadoconmigo.Lizniegaconlacabeza.—Nomeenfadécontigo.—Owenahorahamejoradomucho—explicalaperra—.Estáaprendiendoahablarcaninoyestá
máspendientedemí.—¿Ytúnoestásenojadaconél,aunquesóloseaunpoco?—Alprincipioloestabaunpoquito,peroyasemehapasado.Séqueesunabuenapersona.Yme
hapedidoperdón.Ademáslequiero.Ycuandoquieresaunapersona,hasdeperdonarlaaveces.Almenosesoesloqueyopienso.
Lizasienteconlacabeza.—Esunabuenafilosofía—afirma.—¿Teimportaríaacariciarmelabarriga?—lepideJenechándosepatasarriba.
Aquella noche Liz contempla el reloj de oro. El reloj no se parece en nada al que tenía, pero laintención es lo que vale. Mueve la muñeca haciendo que los eslabones del reloj produzcan unagradabletintineo.Seacercalamuñecaaloídoydisfrutaescuchandoeltic-tacdelsegundero.Cincotic-tacsmástarde,decideolvidarlasimperfeccionesdelreloj.Besalaesferaconternura.Realmenteesunregalomaravilloso,piensaella.
PocotiempodespuéstambiénperdonaaOwen.Sí,éltienesusdefectos,perotambiénesexcelenteenseñandoaconducir.Sivasaperdonaraalguien,decideLiz,esmejorhacerloprontoynodejarlopara más tarde. Más tarde, y esto ella lo sabe por experiencia, puede ser más pronto de lo quequisieras.
Lasantiguastierras
Eltiempopasavolando
Habráotrasvidas.Habráotrasvidaspara losadolescentesnerviososa losque lessudan laspalmasde lasmanos,
paralosagridulcesescarceosenlosasientostraserosdeloscoches,paralastogasybirretesdecolorazul real y carmesí, para lasmadres rodeando el liso cuello de sus hijas con un bonito collar deperlas, para que lean tu nombre y apellidos en voz alta en un auditorio, para las maletas reciéncompradasquetellevasparadescubriraextrañaspersonasenextrañastierrasdesconocidas.
Yhabráotrasvidasparasaldarlasdeudaspendientes,paralosliguesdeunanoche,paravisitarPragayParís,paralucirunosdolorososzapatosdepunta,paralasindecisionesylasmodificaciones.
Yhabráotrasvidasparalospadresacompañandoasushijashastaelaltar.Yhabráotrasvidasparalosdulcesbebésdelechosapiel.Yhabráotrasvidasparaconvivirconunhombrealqueyanoreconoces,paracontemplarenel
espejo un rostro que ha dejado de ser el tuyo, para asistir a los funerales de las personas máspróximas, para encogerte, para perder los dientes, para que te salgan pelos en la barbilla, paraolvidartedetodo.Detodo.
¡Oh, cuántas vidas nos quedanpor vivir! ¡Cuánto nos gustaría poder vivirlas todas a la vez enlugardeunaauna!Porqueentoncespodríamoselegirlasmejorespartesdecadaunayengarzarlascomouncollardeperlas.Peronoesasí.Lavidahumanaesunbellamaraña.
ElañoqueLizcumpletreceañosdenuevo,lesusurraaloídoasuabuela:—Lafelicidadesunaelección.—¿Quéhaselegidotú?—lepreguntaBetty.Lizcierralosojosyenunamilésimadesegundotomasudecisión.Transcurrencincoaños.Cuandounoesfeliz,eltiempopasavolando.Lizsesientecomosisehubieraidoalacamauna
nocheconcatorceañosyalamañanasiguientesehubieradespertadoconnueve.
Dosbodas
—Alguien de la Tierra está intentando entrar en «contacto» contigo —anuncia Owen una nochedespués de volver del trabajo. Ahora que es el jefe del Departamento de Delitos y ContactosSobrenaturales,sueleserelprimeroenenterarsedeestaclasedeasuntos.
—¿Qué?—dice Liz sinmirarlo apenas para poder seguir leyendo.Hace poco le ha dado porvolveradevorarsuslibrosfavoritosdecuandoaprendióaleerenlaTierra.
—¿Quéestásleyendo?—preguntaOwen.—LastelarañasdeCarlota—respondeella—.Esunahistoriamuytriste.Unodelosprincipales
protagonistasacabademorir.—Tienesqueleerloslibrosdelfinalalprincipio—diceélbromeando—.Asínadiesemuereyla
historiasiempreacababien.—¡Eslacosamásestúpidaqueheoídoenmivida!—exclamaLizponiendolosojosenblancoy
retomandolalectura.—¿Noteinteresasaberquiénestáintentandoentraren«contacto»contigo?—inquiereOwen.Se
sacadelbolsillodelabrigounabotellaverdedevinovacíaycerradaconuntapóndecorcho,conlapegajosahuelladeunaetiquetaquehadesaparecidoenparteporlosefectosdelagua.Dentrodelabotella hay un sobre enrollado de color marfil. (En realidad el sobre está más aplastado queenrollado,porqueesdepapelgrueso)—.Lahemosencontradohoyenlasaguasdelmuelle—diceentregándole la botella—.Los chicos que se ocupan de los artefactos de la Tierra han tenido queabrirlaparaveraquiénibadirigida,peronohantocadoelcontenidodelsobre.CuandoencontramosunMEBintentamosrespetaralmáximolaintimidaddelapersonaalaquevadirigido.
—¿QuéesunMEB?—preguntaLizdejandoellibroaunladoparaexaminarlabotella.—Unmensajeenunabotella—respondeOwen—.Esunadelaspocasformasderecibirelcorreo
procedentedelaTierra.Nadiesabeexactamentecómofunciona,peroasíes.—Eslaprimeravezquerecibouno—diceLiz.—Yanosontancomunescomoantes.—¿Porqué?—inquiereLiz.—PorquelagentedelaTierrayanoescribetantascartascomoantaño.Probablementeniseles
ocurreescribirunmensajeyenviarloenunabotella.Yademásnoesunsistematotalmentefiable.Liz abre la botella. Saca el grueso sobre, que sigue en muy buen estado a pesar de su viaje
marítimo.Enelsobrehayunadirecciónescritaconunaelegantecaligrafíatrazadaconunaintensatintaverdinegra:
SeñoritaElizabeth«Liz»«Lizzie»MarieHallqueresideenlosCieloso
enelPaísSinDescubriroenelPaísdelasSombrasoenelPaísdelGranReposooenelGranDesconocidooenelGranMásalláo
enlosCamposElíseosoenValhallao
enlasIslasAfortunadasoenlaIsladelosBienaventuradosoenelReinodelGozoydelaLuzo
enelParaísooenelEdéno
enelFirmamentooenelCieloo
dondequieraqueestés,seacomoseacomosellame
—Elquelahamandandohasidomuymeticuloso—observaOwen—,peronuncaselesocurreescribir«EnOtroLugar».
—NadiedelaTierralollamaasí—lerecuerdaLiz—.Dalavueltaalsobre.Enelremiteponeconlamismaelegantecaligrafía:
192ReedStreetMedford,Massachusetts02109
—¡EsladireccióndeZooey!—exclamaLizmientrasabreelsobre.Enelinteriorencuentraunainvitacióndebodaenformadetrípticodecolormarfilyunalarganotaescritaamano.Lizseguardalanotaenelbolsillo.
—«EstásinvitadaalabodadeZooeyAnneBrandonyPaulScottSpencer»—leeLizenvozalta—.¿Mimejoramigasecasa?
—Querrásdecirtumejoramigaantesdeconocerme,¿verdad?—diceOwenbromeando.Lizignorasucomentario.—Labodasecelebraráelprimerfindesemanadejunio.Faltanmenosdedossemanas—observa
Lizarrojandolainvitaciónalsofá—.¡Haesperadoalúltimomomentoparainvitarme!—gritaella.—Creoquedeberíasperdonarla.Esmuydifícilenviarmensajesaquí,¿sabías?Probablementete
enviólainvitaciónhacemeses—diceOwencogiéndola—.Elpapelesdemuybuenacalidad.—¿Nocreesqueesdemasiado jovenparacasarse?—preguntaLiz—.Tenemos lamismaedad,
quiero decir: teníamos—se corrige—.En realidad era unmesmayor que yo, supongoque ahora
tienecasiveintidósaños.Owencogeunbolígrafoyseponearellenarlatarjetaderespuesta.—¿Irálaseñoritaconalgúnacompañante?—No—replicaLiz.—¿Yyo?—preguntaélabriendolosojosdeparenparfingiendoestarofendido.—Sientodefraudarte,O—respondeellaquitándole la tarjetaderespuestadelasmanos—,pero
creoquetenemosunpequeñoproblemaparatrasladarnosallugardelaboda—añademetiendoconcuidadolatarjetaderespuestaylainvitaciónenelsobre.
—PodríamosverladesdelaCubiertadeObservación—sugiereOwen.—Noquieroverla—respondeLiz.—Entonces,podríamosirbuceandohastaelPozo—diceOwen—,desdeallípodríasfelicitarlay
decirletodoloquesesueledecirenestasocasiones.—¡Nopuedocreerquemeestéssugiriendoesto!—exclamaLizmoviendolacabezamostrando
incredulidad—.¡Precisamentetúquetrabajasparaeldepartamento!—¡Venga,Liz!¿Dóndeestátuespírituaventurero?¡Demosatuamiganuestroúltimohurraantes
dequeseamosdemasiadopequeñosynopodamoshacerlo!¿Quémedices?Lizreflexionaunmomentoantesderesponder.—SicuandofallecíZooeynofueamifuneral,noveoporquétendríaqueiryoahoraasuboda.
Esanocheenlacama,Liz lee lanotadeZooey.Adviertequela letradesuamigaes lamismaquecuandolasdosteníanquinceañosysolíanpasarsenotitasenelinstituto.
QueridaLiz:Yaséquetepareceráextrañorecibirestacartadespuésdehaberestadosinsabernadademídurantetantotiempo,peroesque¡voyacasarme!Teheechadomuchodemenos.Mepreguntodóndeteencuentrasyquéesloqueestáshaciendo.YoestoyestudiandoprimerodederechoenChicago,ellugardondeahoravivo,telodigoporsiacasotútambiénquieressaberloqueyohago.Sitienestiempoyteapetece,ysiporcasualidadteencuentrasenBoston(queríamoscasarnosenChicago,peromamáganó),venavernoseldíadenuestraboda.Michicose llamaPaul,huelemuybienytieneunosbonitosantebrazos.Séquequizánuncarecibasestacarta(medalaimpresióndeestarescribiendoaSantaClaus,lo cual es de lo más descabellado, teniendo en cuenta que yo soy judía), pero tenía queintentarlo. Ya traté de decírtelo antes pormedio de unmedium,B’naiB’rith, el rabino quecantaenlasinagogaalaquemispadresvanenBrookline.Mamáypapátemandansaludos.FueideadePaulenviarlainvitacióndentrodeunabotella.Aunquecreoquelasacódeunapelícula.Tequiero,TumejoramigaenlaTierra(espero),
Zooey
P.D.:Sientonohaberidoatufuneral.
—Quierohacerunbrindis—anunciaLizlamañanasiguienteaOwen.—Meparece estupendo—dice él sentándose a lamesamientras levanta su tazade café—.Soy
todooídos.—¡Nomereferíaaahora,tonto!—respondeLiz—.QuierodecirenlabodadeZooey.Tuideade
iralPozoquizánoseatanmalacomoyocreía.—¿Me estás diciendo que quieres ir al Pozo? —inquiere Owen con los ojos brillantes de
excitación.—Sí, y necesito queme ayudes en el brindis. La última vez que intenté comunicarme desde el
Pozofueundesastre—recuerdaella.—Supongoquefuelanochequenosconocimos.—Comoyatehedicho,fueundesastre—diceLizbromeando.—Estonotieneningunagracia—señalaélmoviendolacabezahaciéndoseelofendido.—Todoslosgrifosdelacasaseabrierondegolpey…—prosigueella.—Unerrordeprincipiante—leinterrumpeél.—Ynadiepudoentenderloqueyolesestabadiciendo—terminadedecirLiz.—Ytearrestaron—añadeOwen.—Sí,ymearrestaron—admiteella—.Asíquedimequépuedohacerparaquelosdostortolitos
meentiendanynohuyandelasalagritando.—En primer lugar tienes que acordarte de no gritar. En cuanto hayas conseguido captar su
atención,teentenderánmuchomejorsileshablassusurrándoles.Losfantasmaschillonesasustanalagente,¿sabías?—observaOwen.
—¡Unbuenconsejo!—Yademásdebeselegirungrifoycentrarteenél.Tambiéndebessabercontrolarturespiración
—agrega—.Yopuedoircontigo,perosólositúquieres.—¿Notedespediránsiaveriguanquemeestásayudandoaentraren«contacto»conellos?—Ahoraquesoyeljefedeldepartamento,miscolegassuelenhacerlavistagorda—diceOwen
encogiéndosedehombros.Lizsonríe.—Entonces,supongoqueyaestádecidido.¡Pornuestrainmersión!—proclamalevantandoenalto
suvasodezumodenaranja.—¡Pornuestrainmersión!—repiteéllevantandosutazadecafé—.Meencantanlasaventuras,¿a
tinotepasaigual?
LanochedelaceremoniadelabodadeZooey,OwenyLizseencuentranenlaplayaalasocho.Lafiestaempiezaalasochoymediay,segúnloscálculosdeOwen,tardaráncuarentaminutosenllegarbuceandoalPozo.
—Encuantolleguemosaél,sólodispondrásdepocomásdemediahora—leadvierteOwen—.Leshedichoamischicosquevenganarecogernosalasnueveymedia.
—¿Creesquetendrésuficienteconmediahora?—preguntapreocupada.—Liz,noesunabuenaideaestardemasiadotiempoahíabajo.Porsinolosabíassiguesiendoun
actoilegal.Ellaasienteconlacabeza.—Noquierosergrosero,pero¿nocreesqueeltrajedeneoprenotequedaunpocograndeenel
trasero?—preguntaOwen.—¿Ah,si?—diceLiztirandodelflexibletejidoquerodeasutrasero—.Eltrajedeneoprenodebe
estarestropeándose,hacecasiseisañosquenolouso.—Parececomosillevarasunpañal.—Sí,bueno,supongoquetambiénesporquemeestoyencogiendo.Porsinoteacuerdas,tengo
nueveaños—respondeLiz.—¡Quépoquitos!—Aunqueenrealidadtengonueve-seis,yahoratendríaveintiuno,oseaquenoeslomismoque
sólotenernueve—puntualizaella—.Además,túsólotienesonce.Nomellevasdemasiadosañosquedigamos.
—¿Tengoonce?—preguntaOwen—.Puesnomesientocomounniñodeestaedad.—Puesmuchasvecesactúascomosilatuvieras—diceLizbromeando.—Ysinomehubieramuertoahoratendríacuarentayuno—añadeOwen.—¡Anda, qué mayor serías!—exclama Liz moviendo la cabeza. ¿Te imaginas? Si tú tuvieras
cuarentayunoyyoveintiunoysiguiéramosviviendoenlaTierra,seguramentenuncanoshabríamosconocido.
La inmersión transcurre sin incidentes. Al haberla realizado en tantas ocasiones, Owen es unexcelenteguía.
AlllegaralPozosólopuedenencontrarunasalidadeaguaquedéalasaladondesecelebralafiestadelaboda:unagranfuentealairelibrequeseencuentraalfondodelpatio.Desdeestelugar,atravésdelahileradeventanalesdecristalquecubrenlasparedesdelsalóndebaile,puedenvercasiporcompletolafiestadelabodadeZooey.
—No estamos muy cerca que digamos—se queja Liz—. Si sólo hubiera querido verlos, mebastabaconhaberidoalaCubiertadeObservación.
—Notepreocupes.Yaencontraremosunlugarmejorparahacernuestrobrindis—latranquilizaOwen.
Desde el fondo del patio Liz ve, a través de los ventanales, una fiesta de bodas que se parecemucho a las otras que había visto antes: abundantes rosas amarillas, damas de honor ataviadas derosa,uncantanteconunaspectodelomástradicionalyaburrido,Zooeyluciendountrajedenoviaacampanadodecolorhuesoyelnovioconunfracgris.EntrelamultitudLizdivisaalamadreyalpadredeZooey.Ydetrásdeellos,asuspropiospadres.
—¡Mira,Owen,mamáypapá!Papáhaenvejecidoymamállevaotropeinado—diceLiz—.¡Hola,mamá! ¡Hola, papá!—exclama saludándolos con la mano—. ¡Oh, y allí está mi hermano! ¡Hola,Alvy!
—¿QuiénesZooey?—preguntaOwen.—¡Quéleloeres!—exclamaella—.Eslaquellevaeltrajeblanco.—¡Oh,esverdad!Lizponelosojosenblanco.
—Cuantosmenosañostienes,mástontotevuelves,O—lesueltaLizcontemplandoaZooey.Suamigatieneveintiúnaños,yaestodaunamujer.¡Quéextrañoqueyotenganueveyellaveintiuno!,piensa.
—Liz,debemosbuscarun lugardesdeelquepuedasofrecerleunbrindis—diceOwen—.Sólonosquedanveinticincominutos.
Primerolointentanatravésdelgrifodellavabodelcuartodebaño.—¡FELICIDADES, ZOOEY! ¡SOYELIZABETHMARIEHALL!—grita Liz. Pero el cuarto de
bañoquedademasiadolejosdelasalaynadielaoye.—¿QuizápuedoesperaraqueZooeyvayaalbaño?—lesugiereaOwen—.Almenosasípodré
hablarconella.—Notenemostantotiempo.Ylasnoviassiempresequejandequenuncatienentiempodecomer
nideiralbaño.Probemosenlacocina—proponeél.Lacocina,aunqueseencuentramáscercadellugardondesecelebralaboda,esincreíblemente
ruidosa debido a la preparación de los platos, los temporizadores y otros sonidos típicos de estaestancia.
—¡TEQUIERO,ZOOEY!TEFELICITOATIYAPAUL—gritadenuevoLizestavezdesdeelgrifodelacocina.
Unayudantedecamareroaloírlapegaungritodeterroryselecaealsuelolabandejallenadeplatossuciosdelaensalada.
—¡LOSIENTO!—sedisculpaLiz—.Estoestáresultandoridículo—diceaOwen—.Todocuantohe conseguido ha sido asustar a un pobre chico.Hemos de comunicarnos desde algún puntomáspróximoaellos.
Espoleadaporladesesperación,Lizsugiereelsamovar,peroOwen,quesabemásdeesascosas,rechazalaideaalegandoquelafuentedeaguaporlaquesecomunicanhadeestarconectadaalascañerías.Pesea lasadvertenciasdeOwen,Liz intentacomunicarsea travésde lacafetera,peronofunciona. (Ella se alegra de que no haya funcionado, porque se habría sentido totalmente estúpidafelicitandoasuamigadesdeunacafetera.)
—Volvamosalafuente—diceLizdesalentada—.Quizásilosdoslafelicitamosgritandojuntos,nosoirá.
—¡FELICIDADES!¡FELICIDADES!¡FELICIDADES!—gritanOwenyLizdesdelafuente.Siguengritandodurantecincominutosmás,peronadielosoyeporqueelruidodelafuenteylas
gruesasparedesdelsalóndebaileloimpiden.—Bueno—diceLizlanzandounsuspiro—,almenoshevistoaZooeyluciendosutrajedenovia.
SupongoquetambiénpodríamoshaberlovistodesdelaCubiertadeObservación.—Peronohabríasidotandivertido—puntualizaOwen.—¿Creesqueyadebemosirnos?—No,esmejorqueesperemos—respondeél—,mischicosvendránarecogernosconelbarco
dentrodeunosdiezminutos.Mientras esperan,Liz contempla aZooeyen el salóndebaile.Desde la fuentepuedever a sus
padresbailando.—Tumadreesclavadaati—observaOwen.—Mamátieneelpelomásoscuro.EnrealidadAlvyseparecemásaellaque…—suvozseapaga.
Conelrabillodelojoveasuhermanosaliendodelsalóndebaileporunadelaspuertaslaterales.Se
dirigehacialafuente.—¿Liz?—diceOwenalverqueellatieneunaextrañaexpresión.—Creoquemihermanoseestáacercando—observaella.Alvyvadirectoalafuenteyseponeacontemplarelagua.Lizretienelarespiración.—Lizzie—Alvylesusurraalafuente.—Acuérdatedenogritar—leaconsejaOwen.—Soyyo—susurraLiz.—Meha dado la impresión de haberte oído—diceAlvy—.Primero creí que tu voz venía del
cuartodebaño.Despuésdelacocinayluegodelpatio.ALizseleempañanunpocolosojos.¡ElbuenodeAlvy!,piensa.—Alvy,nosabescuántomealegrodepoderhablarcontigo.—¡IréabuscaraZooey!Hasvenidoparafelicitarla,¿verdad?Irétambiénabuscaramamáya
papá—diceAlvy—,seguroquequierenhablarcontigo.—Mischicosvanallegarencincominutos—lerecuerdaOwenaLizsacudiendolacabezapara
indicarlequenotienetiempoparahablar.—Tengoqueirme,Alvy,yanomequedatiempo.DilesaZooey,amamáyapapáquelesquiero.
Deunmodoquenoflipen,claro.—Voyabuscarloscorriendo.—¡No!—gritaLiz—.Cuando ellos lleguen, puede que yo ya no esté aquí.Aprovechemos este
momentoquemequedaparacharlarunpoco.—Vale—asienteAlvy.—¿Cómotevaeloctavocurso?—preguntaella.—Enrealidadestoyenelnoveno.Logréaprobarlo.—¡Alvy,esfabuloso!Túsiemprefuistemuyinteligente.¿Cómotevaelnovenocursoentonces?—¡Me gusta!—responde él—. Este año participo en los debates escolares, lo cual es mucho
mejorqueestarenlabandacomoelañopasado.Venga,Lizzie,nopuedocreerquetengasganasdeenterartedeestaclasedecosas.
—Puesasíes.Teloaseguro.Alvymuevelacabezamostrandoincredulidad.—Piensomuchoenti,¿sabes?—Yotambiénpiensoenti,Alvy.—¿Tegustaellugardondeestásahora?—Esdistinto.—¿Distintoenquésentido?—Es…—ella hace una pausa— difícil de explicar. No es como tú crees. Pero me gusta. Me
encuentrobienenél,Alvy.—¿Eresfeliz?YporsegundavezdesdequeestáEnOtroLugar,Lizseparaapensarenello.—Losoy—responde—.Tengomuchosamigos.YunaperrallamadaSadie.YveoaBetty.Ellaes
nuestraabuela,laquefalleció.Silaconocieras,teencantaría.Tieneunsentidodelhumorigualitoaltuyo.Osechomuchodemenos todoel tiempo. ¡Oh,Alvy,hay tantascosasde lasquemegustaríahablarcontigo!
—¡Losé!Yotambiénqueríaexplicarteypreguntartemuchascosas,peroahoranomeacuerdode
cuáleseran.—Sientomuchohabertecausadoproblemasconeljerseylaotravez.—Liz,¿noseguiráspensandoenello,verdad?—exclamaAlvyencogiéndosedehombros—.Ni
siquieralomenciones.Alfinalfuncionó.—Sientomuchohabertemetidoenproblemas.—¡Porfavor!Despuésde tumuertemamáypapáeranunabsolutodesastre.Cualquiercosa les
sacabadequicio.Yoséqueapapálehaayudadomuchorecibirtujersey.—Sientoquepasarasunmalratopormiculpa.—Lizzie,loúnicodifícilparamíhasidoperderamihermana.—Tienesmuybuencorazón,¿sabes?Siemprefuisteelmejorchicodelmundo.Siyoavecesme
enfadaba contigo era sólo porque tú eras mucho más joven que yo y también porque estabaacostumbradaaserhijaúnica.
—Losé,Lizzie,yyotambiéntequiero.OwenoyeelsonidodelaredacercándoseaellosylesusurraaLiz:—Estánaquí.—¿Quiénestácontigo?—preguntaAlvy.—EsOwen.Éles…—Lizhaceunapausa—minovio.—¡Quéguay!—exclamaAlvyasintiendoconlacabeza.—Encantadodeconocerte,chico—diceOwen.—Ya nos conocemos, ¿verdad? Tu vozme resulta familiar. ¿Eres el tipo queme dijo en qué
armarioestabaeljersey?—preguntaAlvy.—Sí—respondeOwen—,elmismo.—Porcierto,¿cómomehaspodidooírestanoche?—lepreguntaLiz.—Yosiempreescuchoelagua.Laheestadoescuchandodesdequeerapequeño—respondeAlvy
—.Yahorasiempreesperopoderoírteenella.EnesemomentoLizsienteunafamiliarredquelesenvuelve,alejándolosdelPozo.Lanzaunsuspiro.Labodanohaidotalcomoellaimaginaba,pero¿acasoenlavidahayalgoque
nossalgacomoesperábamos?—Tuhermanoesunchicoestupendo—observaOwenmientraslaredlossacaalasuperficie.—Loes—asienteella—.Despuésdetodofueunabonitaboda,¿nocrees?—Lofue—afirmaOwen.—YZooeyestabapreciosa—añadeLiz.Élseencogedehombros.—Nohepodidoverlabien.Detodosmodostodaslasnoviastienenelmismoaspecto.—Avecesmegustaríapoderponermeuntrajeblanco—confiesaellaagarrándosealared.—Yatienesunaprendablanca,Liz—observaOwen—,aunquetengamáspintadepijamaquede
cualquierotracosa.—Yasabesaloquemerefiero.Auntrajedenovia.Laredseestáacercandoalasuperfice.Cuandoestánapuntodeentrarencontactoconelfríoaire
nocturno,OwensevuelvehaciaLizyledice:—Siquieres,puedocasarmecontigo.—Soydemasiadojoven—respondeella.—Yalohabríahechoantes,perotúnoquisiste—diceél.
—Enaquellaépocaerademasiadojovenyaúnnonosconocíamoslosuficiente.—¡Oh!—exclamaOwen.—Además—añadeLiz—,noteníasentido.Túyaestabascasadoylosdossabíamosdóndenos
encontrábamos,supongo.—¡Oh!—respondeOwen—,peromehabríacasadocontigodetodosmodos.—Yalosé—diceLiz—,yamímebastaconsaberquelohabríashecho—enesemomentolared
salealasuperficieyalcabodeunosmomentoslosdepositanenlacubiertadelremolcador.—¡Hola,jefe!—exclamaundetectivedeldepartamentosaludandoaOwen—.¿Quierequelolleve
yodevuelta?OwenmiraaLiz.—Siquierespuedesllevarlotú—observaLiz—.Detodosmodosestoymuertadesueño—añade
bostezando.Hasidoundíamaravilloso,piensayluegosedirigehaciaunapiladeimpermeablesysetiendesobreellos.
OwencontemplaaLizusandounodelosimpermeablesamododemanta.Eneseprecisoinstantedecidedecirlequequierecasarseconellamañana,lapróximasemanaoloantesposible.
—¡Liz!—grita.Perohaydemasiadoruidoenelbarcoyellanopuedeoírle,yOwenyanovuelveasacareltema.
AlsiguientelunesCurtisJestsedirigealDepartamentodeAnimalesDomésticosparaveraLiz.Esmuyinusualenéliraverlaaltrabajo,peroellanohaceningúncomentarioalrespecto.
—¿Cómofuelaboda?—preguntaCurtis.—Fue una boda como cualquier otra —responde Liz—, pero me lo pasé muy bien. Es muy
agradablepoderverapersonasalasquehacíatiempoquenoveías.Élasienteconlacabeza.—Enelfondotodas lasbodassoniguales,¿noteparece?Flores,esmóquines, trajesblancos,y
pastelycafé—observaLizechándoseareír—.Enciertomodo,escomosiapenasvaliera lapenacelebrarlas.
Curtisasienteconlacabezadenuevo.Lizvuelveamirarloyadviertequeestámáspálidodelohabitual.
—¿Quétepasa?Curtisrespirahondo.EslaprimeravezqueLizlovetannervioso.—Esqueunabodaapenasparecequevalgalapena,Lizzie,anoserquesealatuya.—Noteentiendo.—Hevenidoaverte—Curtisseaclaralagarganta—parapedirtepermiso…—¿Permisoparaqué?—¡Dejadeinterrumpirme,Liz!¡Nomelopongasmásdifícil!—exclamaCurtis—.Hevenidoa
verteparadecirtesimedaspermisoparacasarmeconBetty.—¿QuierescasarteconBetty?¿ConmiBetty?—tartamudeaLiz.—Comosabeshacecincoañosquelaconozcoyhacepocoviconclaridadqueteníaquesersu
esposo—confiesaCurtis—.Como túeres su familiarmáscercano,hepensadoqueprimerodebíapreguntárteloati.
—¡Caramba,Curtis,enhorabuena!—exclamaLizabrazándole.
—Bettynomehadichoquesítodavía—respondeél.—¿Creesqueaceptará?—preguntaella.—Esperemos que así sea, querida. Esperemos que así sea—dice él cruzando los dedos. Los
mantienecruzadoscasidosdías,hastaquevaaveraBettyyellaacepta.Planean celebrar la boda la última semana de agosto, dos semanas después del día en queLiz
habríacumplidoveintidósaños.Lizeslaprimeradamadehonor,yaqueBettyselohapedido.YThandieslasegunda.Lasdos
llevan unos vestidos de shantung de seda de un vivo color dorado queBetty les ha hecho para laocasión.
LabodasecelebraeneljardíndeBetty.Aunqueéstaponeunacondición:quenosecorteningunaflorparalaunión.
Bettyllora,yCurtistambién,yOwentambién,yThanditambién,ySadietambién,yJentambién,yAldousGhenttambién.PeroLizno.Sesientedemasiadofelizparallorar.Dosdelaspersonasalasquemásquieresevanacasarylovanahacerenelmismodía.
Al final de la ceremonia Curtis canta la canción que escribió para Betty cuando Liz se estabarecuperando.
LizseacercaaThandi,queestácomiendounagranporcióndepasteldebodas.—Laprimeravezquetevipenséqueparecíasunareina—lediceasuamiga.—Puesmedespertastedetodosmodos—replicaThandi.—¿Teacuerdas?—preguntaLiz—.Estabasmediodormida.—Me acuerdo perfectamente. Tengo una memoria de elefante —observa Thandi sonriendo,
revelandoquelefaltanlosdosdientesdedelante.—¿Quéleshapasadoatusdientes?—preguntaLiz.—Se cayeron —responde su amiga encogiéndose de hombros—. Como ya sabes, no puede
decirsequenoshagamosmayores.—¿Noteparecequealosnueveañosesunpocotempranoparaperderlosdientesdeadulto?—Amimesalieronmuytarde—respondeThandi.Lizasienteconlacabeza.—¡Quéextrañoesirsevolviendocadadíamásjoven!,¿noteparece?—Pueslaverdadesqueno.Paramísólosignificaperderalgoquenotieneningunaimportancia.
Comounaserpientedesprendiéndosedesupiel—observaThandipegándoleotrobuenmordiscoalpastel—.Hacersemayoresmuypesado.Encambioyomesientomás livianaacadadíaquepasa.Algunasvecesmepareceinclusocomosipudieraecharavolar.
—¿Tedaenalgunaocasiónlasensacióndequeesunsueño?—preguntaLiz.—¡Oh, no! —exclama Thandi sacudiendo la cabeza—. ¡Es mejor que no empecemos con el
mismorollodeantes!Lizseechaareír.CurtisJestestáinterpretandounaantiguacancióndeMachine.—Meencantaestacanción—diceLiz—.VoyapedirleaOwensiquierebailarcomigo.—¡Adelante, soñadora! —exclama Thandi sonriendo y luego le pega otro buen mordisco al
pastel.LizlocalizarápidamenteaOwen.—Teestababuscando—diceél.—Vamosabailar—respondeellatirandodeélparallevarloabailarenmediodel jardíndesu
abuela,transformadoparalaocasiónenunapistadebaile.Owen y Liz se ponen a bailar. Desde el otro lado de la habitación, Betty sostiene su copa de
champánenalto.—Mazeltov!—legritaLizasuabuela,deseándolebuenasuerteenhebreo.—Hoyestáspreciosa—lesusurraOwenaloído—.Megustaelvestidoquellevas.—Noesmásqueunvestido—respondeLizencogiéndosedehombros.—Puestesientamuchomejorqueeltrajedeneopreno.Liz se echa a reír.Cierra losojos.Escucha lamúsicay aspira la dulce fraganciadel jardínde
Betty.Unafrescabrisaleempujalafaldadelvestidodedamadehonorcontralaspiernas,llevándoseelverano.
Paramaloparabien,éstaesmivida,piensaella.Éstaesmivida.Mivida.
Elcambio
ElañoenqueLizcumpleochoaños,Sadiesevuelveuncachorritodenuevo.Unosmesesantesde su«liberación»,Sadie vavolviéndose cadadíamáspequeña, supelaje se
vuelvemás suave, sualientomásdulcey susojosmás límpidos.Cadavezhablamenos,hastaquedejadehablar.Antesdequeselecaiganlosdientes,mordisqueavarioslibrosdeLiz.AunqueSadiese pasa casi todo el tiempo durmiendo en el jardín de Betty, también tiene extraños ataques deactividadmaníacaenlosquetodocuantoquierehaceresjuguetearluchandoconPacoyJen.AmbosperrostoleranlosataquesdeactividaddeSadieconunaconsiderableserenidad.
Unassemanasantesdesu«liberación»,Sadiesevuelvecadavezmáspequeñahastaelpuntodeparecercasiungranratónenlugardeuncachorro.YanoabrelosojosyLiztienequealimentarladándolegotitasdelecheconelmeñique.PerocuandoLizlallamaporsunombre,Sadie todavía loreconoce.
En el amanecer de su «liberación»,Liz yOwen llevan en coche aSadie alRío. Es la primeraliberaciónalaqueLizasistedesdequeparticipóenlasuyatruncadahaceahoraseisaños.
Alromperelalba,elvientoempiezaasoplar.Lacorrientesevallevandocadavezmásdeprisaalos bebés hacia el Río, de regreso a la Tierra. Liz contempla a Sadie siendo arrastrada por lacorrienteduranteelmáximotiempoposible,hastaqueelcachorroseconvierteenunpuntoyluegoenunamanchita,yporúltimosedesvaneceenlalejanía.
DevueltaacasaOwenadviertequeLizestámuycallada.—¿EstástristeporlodeSadie?—lepregunta.Lizniegaconlacabeza.Nohalloradonisesienteespecialmentetriste.Nitampocosesientefeliz.
En realidad, lo único que ha estado sintiendo es una extraña sensación en el estómago, como situvieraunnudoenél.
—No—respondeella—,noestoytriste.—Entonces,¿quéteocurre?—lepreguntaOwen.—Noestoytriste—respondeella—,porqueSadiehaceyauntiempoquenoeralamismayyo
sabíaqueestoacabaríaocurriendo.—Lizhaceunapausa intentandoexpresarconprecisión loqueestásintiendo—.Creoqueloquesientoesunamezclademiedo,felicidadyexcitación.
—¿Sientestodasesasemocionesalavez?—inquiereOwen.—Sí.EstoyfelizyexcitadaporquemealegrodequemiamigahayavueltoalaTierra.Megusta
pensarenunaperraqueseguirásiendomiSadie,aunqueleponganotronombre.—Tambiénmehasdichoquesentíasmiedo.—EstoypreocupadaporlagentequeseocuparádeellaenlaTierra.Esperoqueseportenbien
conSadie, que la traten con alegría y cariño, que la cepillen cada día, y le den cosas de comervariadas,porquenolegustacomersiemprelomismo.—Lizlanzaunsuspiro—.Alpensarenellotedascuentadeloterriblementepeligrosoqueesserunbebé.¡Haytantascosasquepuedensalirmal!
Owenlabesaenlafrentecondulzura.—Sadieestarábien—latranquiliza.—¡Y túqué sabes!—protestaLiz—.Sadie podría acabar con gente que lamantenga encerrada
todoeldíaoquelatorturequemándoleelcuerpoconcolillas—exclamaconlosojosempañados.—SéqueSadieestarábien—repiteOwenconcalma.—Pero¿cómolosabes?—Loséporquemegustacreerqueasíserá—lerespondeél.—¡Aveces,Owen,puedessertanbobalicón!—exclamaLizponiendolosojosenblanco.Élsesienteherido.Novuelveahablarduranteelrestodeltrayecto.
EsanocheLizlloraporSadie.LloratanfuertequedespiertaaBetty.—¡Oh,cariño!—dice suabuela—,siquierespuedes tenerotroperro.Yaséqueno serácomo
Sadie,pero…—No—respondeLizsollozando—.Nopuedo.Nopuedo.Nopuedo.—¿Estássegura?—No volveré a tener ningún perro—asegura Liz con firmeza—, y te pido que no vuelvas a
decírmelonunca,nuncamás.
AlcabodeunmesLizcambiadeideaalenterarsedequeunaperritallamadaLucyvaallegaraEnOtro Lugar. Lucy ha muerto apaciblemente de viejecita a los trece años mientras dormía en lahabitacióndeLiz.(LascosasdeLizyanoestabanallí,suspadreslashabíanguardadoeneldesvánañosatrás,peroLucynuncahabíadejadodedormirenesahabitación).
DesdelaorillaveaLucy,quecaminabalanceándoseporlaartritisytieneelpelodelrostromásgrisáceoacausadelaedad,cruzandolapasareladelpaseomarítimo.Laperrasedirigedirectahaciaella y, al llegar, la saluda meneando tres veces su flexible cola curvada. Lucy ladea la cabeza ycontemplaaLizentornandosussaltonesojosmarronesparaverlamejor.
—¿Dóndehasestado?—lepregunta.—Memorí—respondeLizencanino.—¡Oh, es verdad!—contestaLucy asintiendo con su cabecita arrugada—.Yo intenté nopensar
demasiado en ello. Fingí que habías ido a la universidad antes de tiempo y que no podías ir avisitarme con demasiada frecuencia. Todos nosotros, Alvy, Olivia, Arthur y yo, te hemos echadomuchísimodemenos.
—Yyoavosotros—respondeLizlevantándoladelsueloysosteniendoalapesadaperritafalderaenbrazos—.Hasengordado—observabromeando.
—Sólo he engordado medio kilo o un kilo, o quizá uno y medio —responde Lucy—.
Personalmentecreoqueestoymejorconestoskilitosdemás.—Multum in parvo—responde Liz en latín bromeando, una frase que significa «tanto en tan
poco»,el lemade laperritay labromapreferidade la familiadeLiz,porqueLucy tiendeaganarpeso.
—Liz—preguntaLucycontemplandoconlosojosentrecerradoselcielo—,¿esestoahíarriba?¿Estoyen…elcielo?
—Nolosé—respondeella.—Noestoyahíabajo,¿verdad?—Estoyseguradequeno—contestaLizriendo.—Pueshuelecasi comoen laTierra—concluyeLucy husmeando con suavidad el aire—, sólo
queaquíesunpocomássalado.Mealegrodequeahorapuedashablartanbienconmigo—lesusurraenlaoreja—.Tengounmontóndecosasquecontartedetodoydetodoelmundo.
—¡Memuerodeganasdeoírlas!—exclamaLizsonriendo.—Peroprimerovayamos a comer algoy luego a echaruna siestecita.Ya tomarunbaño, y a
hacerotrasiestecitaydespuésacomerdenuevoyquizáadarunpaseo.¡Perosindudaacomer!LizdejaaLucyenelsueloylasdossedirigencharlandoacasa.
Amadou
Elmismo día queLiz se jubila delDepartamente deAnimalesDomésticos un hombre al que ellaconocemuybien,aunquenohayahabladoconélpersonalmente,vaaverlaasudespacho.Elhombrevistoenpersonatieneotroaspectodelquemostrabaa travésdelosprismáticos.Sumiradaesmásdulce,perolaslíneasdelentrecejosonmásprofundas.
—SoyAmadouBonamy—diceélconprecisión,conunligeroacentofrancéshaitiano.Lizrespirahondoantesderesponderle.—Yaséquiéneres.AmadousepercatadelosglobosdelafiestadejubilacióndeLiz.—Veoqueestáscelebrandounafiesta,volverémástardeentonces—diceél.—Estamoscelebrandomijubilación,oseaquesivuelvesmástardeyanomeencontrarás.Entra,
porfavor.Amadouasienteconlacabeza.—Fallecí hace pocode un cáncer—cuenta él—.De cáncer de pulmón, yo no fumabaperomi
padresílohacía.Lizasienteconlacabeza.—Hacemuchosañosqueyano trabajode taxista.Conseguí licenciarme trasasistira lasclases
nocturnasdelauniversidadymeconvertíenprofesor.Lizasienteconlacabezadenuevo.—Nopuedesimaginarloquehesufridodurantetodosesosañosporqueteatropelléconeltaxiy
nisiquieramedetuve.—Almenosllamastealhospitaldesdeunacabina,¿noesasí?—preguntaella.Amadouasienteensilencio.Bajalacabezaclavandolavistaensuszapatos.—He estado pensando en ello, supongo que más que nadie en el mundo. Y he llegado a la
conclusióndequeaunquetehubierasdetenido,lascosasnohabríancambiado—diceLizponiéndoleunamanoenelhombro.
—Nodejabadedesearquelapolicíadieraconmigo—confiesaélconlosojosempañados.—Nofueculpatuya—observaLiz—,yonomiréalosdosladosalcruzarlacalle.—Dímelocontodasinceridad,¿lohaspasadomuymalaquí?LizmeditalapreguntadeAmadouantesderesponderle.
—No,enrealidadmelohepasadomuybien.—Perodebeshaberechadodemenosmuchascosas.—Hellegadoaverquemividahabríasidolamismatantoaquícomoencualquierotraparte—
respondeLiz.—¿Estásbromeando?—inquiereAmadousorprendido.—Siestotehacefeliz,asíes—diceLizriendounpoco—.Amadou,¿puedopreguntarteporqué
notedetuvisteaqueldía?Siemprehequeridosaberlo.—Lo que hice no tiene perdón, pero mi pequeño había estado muy enfermo, y las facturas
médicas eran exorbitantes. Si hubiera perdido mi trabajo de taxista o si tus padres me hubierandemandado exigiéndomeuna indemnización, no habría podido sacar adelante ami familia.Estabadesesperado.Aunque sé que esto no sirve como excusa—afirmaAmadoumoviendo la cabeza—.¿Podrásperdonarmealgúndía?
—Yateperdonéhacemuchotiempo—respondeLiz.—¡Perosierasmuyjoven!—exclamaAmadou—.¡Yoterobélosmejoresañosdetuvida!—Lavidanosemideenhorasniminutos.Loqueimportaessucalidadynosuduración.Altener
encuentatodoslosfactores,hellegadoalaconclusióndequehetenidomássuertequelamayoríadepersonasporqueyohevividocasidieciséisañosmaravillososenlaTierrayotrosochoestupendosañosaquí.Yesperovivirochomásantesdedejardetenervoznivotoenello.Entotalsontreintaydosaños,unacantidadquenoestánadamal.
—¿Tienessólosieteaños?Nadielodiría,parecesmuymadura.—Bueno, ahora tengo siete-ocho, que es distinto de tener sólo siete. En la Tierra yo tendría
veinticuatro años—observaLiz—.Algunos días realmente siento quemevoyvolviendo cadavezmásjoven.
—¿Quésensaciónteproduce?—preguntaAmadou.Lizreflexionaunosmomentosantesderesponderle.—Escomoquedartedormidaenunmomentoydespertartealsiguiente.Avecesolvidolascosas.
Yavecesmepreocupaolvidarlas—confiesaLizechándoseareír—.Recuerdoelprimerdíaenquemesentírealmentejoven.FuecuandoAlvy,mihermanopequeño,cumpliódoceaños.Esemismoañoyocumplíaonce.
—Esteprocesodevolvertecadadíamásjovendebesermuyextraño—observaAmadu.Lizseencogedehombros.—Te vuelvesmás vieja,más joven…No estoy segura de que ambas cosas sean tan diferentes
comocreíaantes.¿Quieresungloboparatuhijo?—Gracias—respondeAmadoueligiendoungloborojodelmontónquehaysobreelescritorio
deLiz—.¿Cómosabíasquemihijoestáaquí?—preguntaél.—Heestadocontemplándotedemaneraintermitenteduranteaños—admiteLiz—.Yséqueéles
unniñomuybuenoyquetúeresunabuenapersona.
Lainfancia
OwentieneseisañosyLiz,cuatro.Cuandohacebuentiempo,pasanlastardeseneljardíndeBetty.Élllevaunacoronadepapel,ella
untutúrosa.Al final de dos agradables semanas, Liz deja en el regazo de Owen un viejo volumen deEl
misteriodelmanantial.—¿Porquémelodejasaquí?—preguntaél.—Paraqueleasunahistoria—diceLizsonriendodulcemente,revelandolosdientesdelecheque
acabandesalirle.—Noquieroleertuestúpidolibrodeniñas—respondeOwen—,léelotúsiquieres.Lizdecideseguirsuconsejo.Cogeellibroylosostienefrenteaella.Yentoncesleocurrealgo
delomásextraño.Descubrequenopuedeleer.Quizásespormisojos,piensa.Ylosentrecierraparavermejoreltexto,peronolesirvedenada.
—Owen—diceLiz—,mepasaalgomuyraroconestelibro.—Déjamelo ver—responde él.Abre el libro, lo inspecciona y luego se lo devuelve—.Liz, al
libronolepasanada—declara.Liz sostiene el libro lomás cerca que puede de sus ojos y a continuación lo aleja lomáximo
posible.Deprontoseechaareír,aunquenosabeporqué.YselodevuelveaOwen.—Léemelo—ordenaella.—¡Oh!,vale,Liz—respondeOwen—.¡Peroqueconstequeeresunplomo!—exclamasacandoel
puntodellibrodelapáginayempezandoaleerElmisteriodelmanantialcondesgana—:«Papácreequeesalgoquesehaquedadoolvidadode,enfin,dealgunaotraplanificaciónsobrecómodeberíahaber sido elmundo—dijo Jesse—.Algún plan que no funcionó bien, por lo que todo tuvo quecambiarse.Todomenosestafuenteque,deunamanerauotra,fueolvidada.Alomejor,tienerazón.Nolosé.Pero…»
—Owen—leinterrumpeLiz.—¿Yahoraqué?—preguntaélfrustradoarrojandoellibro—.Nodeberíaspediraunapersona
queteleaunlibrosóloparainterrumpirledespués.—Owen—prosigueLiz—,¿teacuerdasdeesejuego?—¿Dequéjuego?
—Éramosmayores—empiezaLiz—.Yoeramuuuuymayor,cadadíaloeramásynuestrascarasteníanestaexpresióntodoel tiempo—dicefrunciendoelentrecejoyarrugandolafrentedeformaexagerada—.Yhabíaunacasayuninstituto.¡Yuncoche,untrabajoyunaperra!¡Yyoeramayor!¡Mayorquetú!Ytodopasabarápido,muyrápido,yeradifícil,muydifícil.—Lizseechaareírdenuevo,conunarisitadepajarito.
—Sí,meacuerdo—respondeOwenalcabodeunmomento.—¿Porqué…—inquiereella—,porquéeratandifícil?—Sóloeraunestúpidojuego,Liz.—Esverdad—asienteella—.Noquieroquejuguemosmásaél,¿vale?—Vale—respondeOwenasintiendoconlacabeza.—Creoqueyoestaba…creoqueyoestaba…yoestabamuerta—diceellarompiendoallorar.Él no puede soportar verla llorar y la coge en brazos. ¡Qué pequeña es Liz ahora! ¿Cuándo
empezóavolversetanpequeña?,sepreguntaél.—Noteasustes,Liz—latranquiliza—,noeramásqueunjuego,¿teacuerdas?—¡Oh,esverdad!¡Lohabíaolvidado!—respondeella.—¿Quieresquetesigaleyendoelcuento?—lepreguntaOwenvolviendoacogerellibro.LizasienteconlacabezayOwensigueleyendo.—«…Pero,WinnieFoster,quieroquesepasque,cuandoantestedecíaquetengocientocuatro
años,teestabadiciendolaverdad,aunque,realmente,sólotengadiecisiete.Y,porlaimpresiónquetengo, seguiré teniendodiecisietehastael findelmundo»—Owendejael libroaun lado—.Eselfinaldelcapítulo.¿Quieresqueteleaelsiguiente?
—Sí,porfavor—respondeLizmetiéndosefelizmenteeldedoenlabocaparachupárselo.Owenlanzaunsuspiroysigueleyendo.—«Winnie no creía en cuentos de hadas. Jamás había soñado con tener una varitamágica, no
esperabacasarseconningúnpríncipey, lamayorpartede lasveces,nocreíaen losduendesdesuabuela.Asíqueahoraseencontrabasentada,boquiabierta,conlosojoscomoplatosysinsaberquéhacerconaquellahistoriatanextraordinaria.Nopodía,niunapizcadeella,serverdad…»
Lizcierralosojosyalcabodepocosesumergeenundulceyapaciblesueño.
Elnacimiento
Enunatempladamañanadeenero,justoantesdelamanecer,BettyentregaaLizalaenfermeraqueseocuparádeecharlaalagua.
—Tucarameresultafamiliar—diceDollycogiendoconsuavidadelbebédelosbrazosdeBetty—.¿Noshabíamosvistoantes?
Bettyniegaconlacabeza.—Lacaradelbebétambiénmeresultafamiliar—observalaenfermerasosteniendoenaltoaLiz
paraverlamejor—.Separecemuchoati.—Sí—respondeBetty—,sí.DollylehacecosquillitasaLizbajolabarbilla.—¡Qué niña más bonita!—le susurra la enfermera al bebé y luego lo deja sobre la mesa y
empiezaaenvolverloconlasvendas.—Por favor —dice Betty poniendo su mano sobre la de la enfermera—, no se las aprietes
demasiado.—Notepreocupes—respondeDollydulcemente—,noeslaprimeravezquelohago.
Alasegunda«liberación»deLizacudenmuchasmáspersonasquealaprimera.AdemásdeBetty,haidoAldousGhent,queestácasiigualquelaprimeravezqueLizloconoció,
sóloqueahoratienemáspelo.YShelly,que llevaaThandienunmoisés.Thandi tambiénhará supropioviajepronto.Ahora
tiene,comoesnatural,menoscabello.YCurtis,ataviadoconuntrajeoscuro,aunquelacostumbreseairdeblancoenlosnacimientos.Y,porsupuesto, tambiénhaidoOwen.AcompañadodeEmilyReilly(laexseñoraWelles),que
ahoraavecesessucanguro.EllaintentaqueOwenseintereseporelacontecimiento,peroélprefierejugarconsubarcodejugueteenuncharco.
—No te alejes demasiado, O—le dice Emily antes de unirse a los demás para contemplar la«liberación».
OwennocontemplasinembargoalaenfermeradejandoaLizenelRíojuntoatodoslosotrosbebés que nacerán ese día.Ni tampoco cuando la empuja desde la orilla hacia la corriente que la
llevaráalaTierra.VistodesdefueraparecececomosilapartidadeLiznoleafectaraenabsoluto.CurtisJestloobservaantesdedecidiracercarseaél.—Owen,¿teacuerdasdequiéneraesebebé?—lepreguntaCurtis.Él,queestá jugandoconsubarquito, levanta lavistaconunaexpresiónconfundida,comosi la
preguntaqueacabandehacerlefueramuydifícilderesponder.—¿Lizzie?—pregunta.—Sí—respondeCurtis—,eraLizzie.Unaamigamía.Ytambiéneratu…tuamiga.OwensiguejugandoconelbarquitoyseponeacantarelnombredeLizconladespreocupada
actitudconlaquelosniñosavecestarareanunnombre.—Lizzie,Lizzie,Lizzie—canta.DesúbitoOwendejalacantinelaylevantalacabezamirandoa
Curtisconunaexpresiónhorrorizada—.¿Seha…ido?—Sí—respondeCurtis.Owenasienteconlacabeza.—¡Sehaidosehaidosehaidosehaidosehaido!—gritaOwenponiéndoseaberrear,aunquenoestádel
todosegurodeporquéestállorando.Curtislocogedelamanoyloalejadelcharco.—Puedequevuelvasaverlaalgúndía,¿sabes?—lediceparatranquilizarlo.—¡Québien!—respondeOwendejandodellorar.—¡Volvamosacasaparacelebrarloconpurosychampán!—gritaBettydandounapalmadadesde
elfondodelaparcamiento.
EnlacasadeCurtisyBettycuelgadelapuertaunapancartarosayblancaquepone:«¡Hasidounaniña!»Curtisrepartepurosadornadosconlacitosrosas.Ademásdelchampányelponche,celebranlaocasiónconunatartadehojaldreenlaqueselee:«Feliznacimiento,Liz».
AldousGhentalprobarelprimerbocadodelatartaseechaallorar.—Lospastelesdecumpleañossiempremedeprimen—dicecomosihablarasolo,sindirigirsea
nadieenespecial.CuandoBettydaunosgolpecitosensucopadechampánconlacucharillaparahacerunbrindis,
todoelmundodejadehablarparaescucharla.—Sinoosimporta,megustaríadecirunaspalabrassobreLiz—anuncia—.Comotodossabéis,
eraminieta,perosinohubieravenidoaEnOtroLugarnuncahabríallegadoaconocerla,porqueyofallecíantesdequeellanaciera.
»Lizhasidominietayalmismotiempounabuenaamiga.Cuandollegóaquínoeramásqueunaniña,peroseconvirtióenunaadmirablemujer.Legustabareíryleencantabaestarconsusperrosysusamigos.Denoserporella,yonuncahabríaconocidoamiesposo—añadeBettycogiendodelamanoaCurtis.
»En Otro Lugar nos engañamos creyendo que sabemos cómo será nuestra existencia porqueconocemosconexactitudeltiempodevidaquenosqueda.Peroaunqueloconozcamos,nosabemosrealmenteaquelloquenosespera.
»Nopodemossaberquéesloquenosocurrirá—prosigueBetty—,peroyocreoquecadadíanossucedencosasbuenas.Aunqueestemospasandoporunasituacióndifícil.Yademáscreoqueenundíatanfelizcomohoy,tambiénpodemossentirnosunpocotristes.¿Yacasolavidanoesasí?¡BrindoporLiz!—concluyeBettylevantandoenaltosucopadechampán.
LoqueLizpiensa
Hetenidounavidaagradable,piensaLiz.Aunquenoseacuerdadelosacontecimientosquehavivido,intuyequeleocurrióenellaalgomaravilloso.Ylanuevavidaqueleesperaleproducetambiénunabonitasensación.
Alcontemplaralosbebésflotandodelanteydetrásdeella,yasuizquierdayderecha,adviertequelamayoríapermanececonlosojoscerrados.¿Porquémantienenlosojoscerrados?,sepregunta.¿Esquenosabenquehayunmontóndecosasquever?
AmedidaqueLizsedeslizaporelRíoalejándosecadavezmásdesuhogar,deEnOtroLugar,piensaenmuchascosas.Enrealidad,cuandoeresunbebéqueestáiniciandounlargoviaje,tequedamuchotiempoparacavilar.
Unavidavividahaciadelante tiene lamismacalidadqueunavividahaciaatrás,piensaella.Alfinallehabíaacabadogustandoesavidavividahaciaatrás,porquedespuésdetodoeralaúnicaquetenía.
Ademásnoestátristeporelhechodeserunbebé.Comolaspersonasmássabiasdeaquísaben,envejecernotieneporquésermotivodetristeza.EnlaTierralosintentosdeconservarlajuventudalafrontar la madurez son inútiles. Y volverse cada vez más joven tampoco tiene por qué causartristeza.HubountiempoenqueaLiz ledabamiedoolvidarsedelascosas,perocuandoempezóaolvidarsedeellas,seolvidódesumiedoaolvidar.Lavidaescompasivaconuno,piensaelbebé.
Lasolasacunanymecenalosbebéshastaquelospequeñossequedandormidos.Yestebebétambiénsucumbealsueñoalcabodepoco.
Duermeyduerme.Ymientrasduerme,sueña.Ymientrassueña,sueñaconunaniñaqueestáperdidaenelmarperoqueundíallegaalaorilla.
Epílogo:Enelinicio
Elbebé,unaniña,nacealas6.24.Pesatreskilosycincogramos.—¿Quiénerestú,pequeñamía?—preguntalamadrecogiendoasubebéenbrazos.Yelbebé,queesynoesLizalmismotiempo,leresponderiendo.
Agradecimientos
Unexcepcionalgrupodepersonasfabulosas,bondadosasyencantadorassonresponsablesdellibroquetienesen tusmanos.Desearíadar lasgraciasaJanineO’Malley,mieditoradeFarrar,StrausyGiroux, una mujer incansable que siempre tiene razón y la persona más divertida del mundo.También doy las gracias a mis agentes literarios: Jonathan Pecarsky, de un optimismo y unasinceridadatodaprueba,yAndyMcNicol,quesiempreluchaporunabuenacausa.DesearíaexpresarmiagradecimientoaSarahOdedina,mieditoradeBloomsburyUK,cuyoentusiasmoyconvicciónfueronelsolquealumbróEnOtroLugar.TambiénmegustaríadarlasgraciasaRichardyaAeRanZevin, ya que me siento muy afortunada al tener unos padres que son también unos excelenteslectores.DoylasgraciasalaMrs.DeWinter(D-Dub),midoguilla,queintentaenseñarmeellenguajedelosperroscadadía,aunqueyohayademostradoserunamediocrealumna.TambiénquierodarlasgraciasaHansCanosa,miparejadurantelosúltimosdiezaños,queleyóhastaelúltimoborradordellibroyquesiemprecreyóenél.
Tambiénme gustaría expresarmi agradecimiento aKerryBarden,AnnaDeRoy,TracyFisher,EugenieFurniss,StuartGelwarg,NancyGoldenberg,ShanaKelly,MaryLawless,BrianSteinbergyatodoslosmiembrosdeWilliamMorris,Bloomsbury,ysobretodoaFarrar,StrausandGiroux.