Una competencia es una habilidad, producto del dominio de conceptos, destrezas

y actitudes, que el estudiante demuestra en forma integral y aun nivel de ejecución

previamente establecido por un programa académico que la tiene como su meta.

(Villarini, 2008) Están deben ser adquiridas por los estudiantes durante su vida

desarrollando de igual manera la dimensión cognitiva, la valorativa y la práxica; es

decir que debe comprender lo que hace, cómo y por qué se hace, debe involucrar

la responsabilidad consigo mismo y los otros y por ultimo debe transferir a otros

contextos los aprendizajes, operar con los conceptos adquiridos.

Existen así mismo competencias para la vida que deben ser adquiridas:

Competencia para el aprendizaje permanente.

Competencia para el manejo de la información.

Competencia para el manejo de situaciones.

Competencia para la convivencia.

Competencia para la vida en sociedad.

Dicho lo anterior, se pide la construcción de programas por competencias,

requiriendo que los diseñadores dispongan previamente de un conjunto de

situaciones por competencias, este mismo permitirá ir saliendo paulatinamente de

las situaciones. Cuando estos analizan, reagrupan y completan las situaciones, su

preocupación es encontrar en cada situación prevista el “conocimiento” que debe

de enseñarse. Estas mismas situaciones que se plantean son situaciones abiertas

que permiten ser modificadas.

El desmantelamiento de lo antiguo y la inscripción del futuro encarnaron una

individualidad cosmopolita en la que la acción inteligente y el voluntarismo para la

solución de problemas contribuyeron a la configuración del carácter nacional.