UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA

Escuela de Humanidades

Lengua y Literatura de Hispanoamérica

Ayala Constantino, Marcelino

132 / turno vespertino

Ensayo sobre

Tiempos verbales

Morfología

Impartida por Gabriela Preciado Almonte

Tijuana, Baja California, 7 de junio del 2010

Calificación:

Tiempos verbales

Es bien sabido que el ser humano logra identificarse a sí mismo mediante una serie de

oposiciones. Sabemos quiénes somos e identificamos nuestra individualidad mediante

observar diferencias entre nosotros y los demás, lo que crea el sentido de otredad que Mijaíl

Bajtín emitió alguna vez. En la lengua española ocurre lo mismo con la categoría

gramatical correspondiente al verbo. El verbo adquiere su estructura en base a una serie de

oposiciones que le dan diferentes formas. Las formas se distinguen entre sí por rasgos que

les perteneces únicamente a ellas y que están ausentes en las demás.

Podemos hablar formas verbales que poseen morfemas de número y persona, como

las formas no personales del verbo, el infinitivo, el gerundio, los participios. Pero dejando

fuera estas formas no personales del verbo, aquellas que si poseen morfemas de número y

persona presentan características que las distinguen entre sí: las formas que poseen

morfema de modo indicativo, de modo subjuntivo y de modo imperativo.

Ahora bien, dentro de cada uno de los diferentes modos (indicativo, subjuntivo,

imperativo) se establecen diferencias nuevamente: estas provienen por el tiempo que

expresan, que puede ser presente, pretérito, futuro y condicional. Veamos a continuación

cada uno de los modos y de los tiempos.

Modo indicativo

Esta forma de es muy abierta, es flexible, y puede abarcar períodos de tiempo muy

extensos o muy cortos. Su característica principal es el gran intervalo de tiempo que puede

llegar a expresar. Puede encontrarse en tiempo presente:

Presente actual: Nos dice la acción en relación al momento en que se realiza, que es

simultáneamente al tiempo en que se enuncia la oración.

Ejemplo: Ahora como lentejas

Presente permanente: Nos indica hechos que están ocurriendo en el momento en que se

expresa la oración, pero que jamás terminarán.

Ejemplo: La Tierra gira alrededor del Sol

Presente habitual: Nos indica una acción que suele realizarse constantemente, no

necesariamente tiene que estarse realizando en el momento que la oración se enuncia.

Ejemplo: Por las noches salgo a correr alrededor del parque.

Presente histórico: Nos indica un tiempo presente en la oración, sin embargo refleja un

presente que ocurrió tiempo atrás, tiene como función hacer un acercamiento al tiempo en

que sucedió el acontecimiento dicho.

Ejemplo: La Primera Guerra Mundial empieza en 1914.

Presente con valor futuro: Posee el tiempo presente en la oración, pero refleja una acción

que no se ha efectuado aún.

Ejemplo: Mañana nos vamos de esta horrible ciudad.

Presente con valor de mandato: Funciona como sustituto del imperativo.

Ejemplo: ¡Regresas en media hora!

El modo indicativo también puede encontrarse en tiempo pasado o pretérito,

subdividiéndose en dos formas: pretérito imperfecto y pretérito indefinido.

Pretérito imperfecto: Nos indica un hecho pasado respecto a un contexto presente, se

habla pues, desde el presente de algo pasado. Tiene algunos usos secundarios interesantes,

por ejemplo sirve para expresar una situación hipotética, para crear una expresión

concesiva, o hacer suposiciones.

Ejemplo: Ayer granizaba muchísimo, creía que me enfermaría.

Ejemplo: Quería pedirte un pequeño favor.

Pretérito indefinido: Nos marca anterioridad al momento de expresarnos, también

podemos llamarlo pasado absoluto.

Ejemplo: Ayer granizó muchísimo y me enfermé.

En el modo indicativo encontramos tiempo futuro, sin embargo es mucho menos

complejo, el futuro simple (aunque el condicional es una forma de futuro también pero no

refleja una acción segura):

Futuro simple: Nos indica un hecho en un tiempo posterior al enunciado, puede usarse

para dar un mandato o para expresar duda, suponer algo:

Ejemplo: En diez años seré un viejo cascarrabias.

Ejemplo: ¿Dónde estará tu padre?

Existe otro tipo de futuro dentro del modo indicativo, este es, el condicional simple:

Condicional simple: Expresa una acción futura no asegurada, hipotética. Se prefiere

llamarle condicional en vez de futuro condicional debido a que aparece en oraciones

condicionales. También puede expresar acciones de un tiempo posterior a algo pasado o

ayudar a construir oraciones que suenen corteses.

Ejemplo: Si fueras más obediente no te pasarían tantos problemas.

Ejemplo: ¿Podrían prestarme atención por favor? (en vez de: Pueden prestarme atención

por favor. La primera forma no suena imperativa).

Una característica del modo indicativo es que puede construir formas compuestas,

es decir, tiempos dentro de otro tiempo, veamos las formas compuestas.

Pretérito perfecto: Indica la perspectiva actual de un hecho pasado.

Ejemplo: Antier fuimos a molestarte, y hoy vienes a vengarte.

Pretérito pluscuamperfecto: Indica un hecho pasado dentro de otro ya ocurrido, pasado

dentro del pasado.

Ejemplo: Cuando fui por ti, ya te habías ido.

Pretérito anterior: Nos indica una acción ocurrida inmediatamente después de otra.

Ejemplo: En cuanto le dije se fue de mi habitación.

Futuro compuesto: Indica una acción futura dentro de otra futura.

Ejemplo: Para cuando acabes el plato fuerte yo iré por el postre.

Condicional compuesto: Nos indica una acción futura respecto a una ya pasada.

Ejemplo: Cuando yo llegue tú deberías haber acabado el quehacer.

Modo subjuntivo

El modo subjuntivo se encuentra en las oraciones subordinadas, aunque puede

aparecer en oraciones de forma independiente cuando se expresa un deseo o una duda. Su

característica principal es que tiene un carácter hipotético, dudoso, subjetivo. Es muy difícil

identificar los tiempos verbales dentro del modo subjuntivo. Pueden clasificarse en tres

tiempos:

Presente: Puede diferenciarse del tiempo pasado con facilidad, pues jamás expresará una

acción pasada, aunque deja abierta la posibilidad de confundirse con una acción futura.

Ejemplo: Necesito que vengas cuando todos se vayan. (Puede observarse como se puede

referir a una acción inmediata o una acción futura).

Pretérito imperfecto: Expresa un deseo o una duda.

Ejemplo: Ojalá venga a comer temprano.

Futuro simple: Se puede decir que es una forma arcaica ya, es muy raro escucharlo fuera

del marco jurídico.

Ejemplo: El que causare daño al testigo tendrá penitencia.

Modo imperativo

Como su nombre lo dice, expresa un mandato o una orden. Existen solo dos formas

de modo imperativo, una que es más directa (o golpeada por así decirlo) como: “¡Come!”, y

otra que es de un estilo más antiguo, “Comed”. En el modo imperativo no encontraremos

primera persona, pues uno no se ordena a sí mismo. Como explicamos antes, este modo

puede ser sustituido por formas del modo indicativo y del subjuntivo.

En conclusión, podemos observar como el tiempo verbal influye significativamente

en la interpretación de las oraciones. Sabemos que el sintagma verbal es fundamental para

la correcta comunicación humana. En cierto modo, los tiempos verbales reflejan el orden de

nuestros pensamientos, por ello es interesante conocerlos y de este modo ver como nuestra

mente capta el tiempo mediante el habla cotidiana.

Bibliografía:

Rodríguez-Vida, Susana. Los tiempos verbales. Barcelona: Octaedro, 2000

Linderos, Rocío. Modos y tiempos verbales. Disponible en línea [citado en 5 de

Junio de 2010]: http://www.contraclave.org/lengua/modos.pdf