Ensayo Wagner.

7/21/2019 Ensayo Wagner.

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El drama del porvenir en el Anillo del Nibelungo.

En este trabajo pretendo hacer una suerte de relación entre la tercera parte de la obra de

Wagner que tiene por nombre Ópera y drama, que lleva por título “La oesía ! la "#sica

en el drama del porvenir$, ! por otro lado retomar% algunos elementos que se ven

representados en el Anillo del Nibelungo de mismo Wagner. arece ser que Wagner nos

o&rece al Anillo como la ejempli&icación de lo que debe ser el drama del porvenir, pues

claramente vemos características de lo que %l pretende hacer con la poesía, la m#sica, ! en

general con el arte. Wagner nos deja ver que para %l la obra de arte debe volver a sus raíces

en el ideario griego, retomando así varias características de %ste, como lo es la proporción,

la mesura, lo no grotesco, al igual que la cuestión acerca del destino humano que se ve

determinado por los dioses.

En este respecto tambi%n me servir% de algunas ideas que quedan e'puestas en la &iloso&ía

de (chopenhauer que versan sobre el su&rimiento, el dolor ! la miseria humana, pues, como

lo veremos m)s adelante, son temas que atraviesan todo el Anillo del Nibelungo.

odemos ver que Wagner busca que la obra de arte, ! en especial el drama, tenga ciertas

características &undadas en algunos ideales antiguos. En Arte y revolución Wagner !a nos

anunciaba su pretensión para que el arte se convirtiera en el medio por el cual el pueblo pudiera tomar conciencia ! de esta &orma poder crear la revolución que iba encaminada

hacia la armonía social ! una mejor educación, principalmente. Ahora, en Ópera y drama

nos da las características de lo que la obra de arte tiene que ser ! hacer para poder mirar con

vistas hacia una sociedad di&erente. *e esta manera, vemos en el Anillo la e'posición de los

elementos que deben con&ormar la obra de arte del porvenir, que cuenta con cierta

adecuación en la intención po%tica, la m#sica, la armonía, los gestos, entre otros

componentes que deben estar presentes.

or otro lado, tambi%n la trama o el tema que guía a la obra debe estar adecuada a la

naturale+a humana, pues podemos ver que la necesidad ! el destino juegan un papel

importante a lo largo de todo el Anillo. No podemos deja de pensar, adem)s, en el tema del

amor que vemos e'puesto en varios pasajes del Anillo ! aunado a este tema nos

encontramos con el su&rimiento de la e'istencia humana. Estos temas son los que se hallan



presentes en la obra escrita ! representativa de Wagner ! es por esto que tratar% de

e'ponerlos retomando algunas escenas del Anillo del Nibelungo !, por otro lado, tratando

de e'plicarlas a la lu+ del escrito de Wagner Ópera y drama.

En Ópera y drama debemos empe+ar reconociendo que para Wagner la poesía es una de las

artes m)s acabadas que puedan e'istir puesto que nos lleva a un estado de %'tasis est%tico,

si así lo podemos llamar. a desde la antig-edad podemos ver que ha! dos sentidos

corporales que son los m)s importantes para la apreciación del arte, es decir, la vista ! el

oído por medio del oído podemos apreciar la poesía o cualquier arte que sea susceptible de

ser declamada en p#blico, ! por medio de la vista nos percatamos de la belle+a en la

representación !a sea del cuerpo humano, de la naturale+a, etc. El Anillo del Nibelungo nos

deja ver que Wagner busca atrapar estos dos sentidos con los que se aprecia el arte por un

lado, el argumento ! la vo+ de los actores debe ser entonada con armonía para que pueda

captar la atención, ! por otro lado, la escena en sus totalidad debe dejarnos una impresión

visual con la que podamos sentir la empatía con la situación representada.

*el oído, Wagner nos dice que “este órgano sensorial es, &rente al que se le comunica

a&ectuosamente, tan apasionado ! tan rebosante de capacidad de amar que puede restablecer

como puramente humano lo original ! sempiternamente #nico, desunido ! separado en

millones de peda+os por el entendimiento sedicioso, ! o&recerlo al sentimiento para el goce

supremo m)s hechicero.$/ 0on esto, tambi%n podemos decir que, a lo largo del Anillo del

Nibelungo escuchamos los &amosos leitmotiv que nos dan cuenta de los estados de )nimo o

la situación que est) sucediendo, pues cada personaje tiene un leitmotiv particular. Esto lo

veremos m)s adelante.

ero debemos empe+ar observando que Wagner no busca el lenguaje corriente, sino la rima

consonante, la cual es un “intento de comunicar un objeto elevado de manera que %ste

produ+ca en el sentimiento una impresión correspondiente, ! en verdad de tal modo que la

e'presión del lenguaje se comunique de una manera distinta a la de la e'presión

cotidiana.$1 *ebemos despojarnos de lo cotidiano ! adentrarnos en un lenguaje m)s

1 Wagner, 2ichard. Ópera y drama, p)g. /34

2 Ibídem, p)g. /56



so&isticado que nos pueda elevar a ese sentimiento de %'tasis en el que se aprecia la obra de

arte. arece que Wagner nos pide despojarnos de lo m)s pró'imo a nosotros e incluso

parece que el arte sólo puede ser apreciado entonces solamente por algunos cuantos que

sean “so&isticados$ diríamos, pues, que Wagner se torna en cierto sentido elitista, pero no

creo que esta sea su postura en un primer momento. ")s bien lo que Wagner pretende es

que nos eduquemos en lo que sobresale de lo cotidiano, es decir, la belle+a es un momento

e'cepcional, pues no la encontramos en todo lugar ni en todo momento es un instante que

parece ser &uga+ ! que sale &uera de lo cotidiano. or esto, Wagner nos pide que dejemos de

lado lo com#n ! nos centremos en eso que est) en un grado m)s elevado.

*espu%s, Wagner pasa al tema del ritmo, el comp)s, la mesura, la proporción ! dem)s en la

poesía, ! es en este conte'to donde tambi%n se evoca a los preceptos griegos acerca del arte,

pues el arte debe tratar de no caer en lo grotesco ! m)s bien mantener un temple. Esto lo

podemos observar en las escenas donde se alude a la muerte, como en la cuarta parte del

Anillo, cuando 7agen da muerte a (ig&rido pero no es una muerte grotesca ! de gran

su&rimiento, sino un su&rimiento mesurado. Al principio de esta misma sección del Anillo

nos encontramos con 8runhilde ! (ig&rido enamorados cuando (ig&rido cru+a el anillo de

&uego que rodea a la roca donde est) presa 8runhilde, pero de nuevo vemos que el amor

que e'presan estos dos personajes no se acerca al e'ceso desmedido del amor.

Esto hace que podamos sentir una empatía con los personajes que protagoni+an las escenas

! qui+) con ellas podríamos llegar a ese estado de catarsis que se pretendía en el teatro

griego. Es por esta ra+ón por la que Wagner nos dice del poeta que es “sólo el sabedor del

inconsciente, el relator intencionado de lo instintivo el sentimiento que %l quiere comunicar

a la simpatía le ense9a la e'presión de la que %l ha de servirse: pero su entendimiento le

muestra la necesidad de esta e'presión.$; Lo que el poeta hace es e'teriori+ar los instintos

inconscientes que se albergan dentro del pensamiento, pero que se hallan ocultos a la ra+ón.

ero

En esta e'teriori+ación del sentimiento interior est) tambi%n la ra+ón constrictiva de su

e&ecto por estimulación del correspondiente sentimiento interior del otro ser humano al

que llega aquella e'teriori+ación ! esta presión del sentimiento, si el poeta quiere

3 ibídem, p)g. /3<



ejercerla sobre otro tal como %l mismo la sintió, llega a ser posible sólo por medio de la

ma!or plenitud en la e'teriori+ación del sonido sonante, con el cual puede

comunicarse #nicamente, de la manera m)s completa ! persuasiva, el sentimiento

interior singular.6

Es decir, si el poeta desea e'presar de manera plena ! acabada los sentimientos que se

resguardan en el inconsciente, entonces debe recurrir a la persuasión. El instrumento del

poeta para lograr su cometido, es indudablemente el lenguaje, ! desde esta perspectiva

notamos que debe ser un e'perto en el manejo del mismo ! sobre todo darle una proporción

a las palabras para poder comunicar el sentimiento. Evocando a la mismísima lengua

griega, que bien a bien no se sabe cómo era la pronunciación, tenemos la probabilidad de

que se hablaba con una entonación de acentos largos ! breves que le daban una tonalidad

armoniosa ! por esta misma ra+ón

El poeta que, para la comunicación de un sentimiento con la ma!or precisión posible,

buscaba !a llevar a una comprensión sensorial &)cilmente comunicable al sentimiento,

por medio de la aliteración consonante, la serie de palabras mani&est)ndose en el

comp)s musical seg#n los acentos ling-ísticos, har) plenamente posible siempre esta

comprensión del sentimiento si re#ne de nuevo las vocales de las palabras raíces

acentuadas, como antes sus consonantes, en una rima que descubra al sentimiento su

comprensión de la manera m)s determinante.<

ero para Wagner ha! dos tipos de poetas. =no es al que corresponde lo que acabamos de

mencionar, es decir, el poeta de las palabras, que nos lleva al plano del entendimiento por

otro lado, tenemos al poeta de los sonidos que busca principalmente el contenido

sentimental. arece que este m#sico alem)n al que tratamos en este escrito busca la

conjunción de los dos tipos de poeta ! lo deja plasmado en su Anillo. Lo que nos dice es

que la di&erencia entre uno ! otro poeta es que

4 Ídem.

5 ibídem, p)g. 1>>



El poeta de las palabras concentraba en un punto lo m)s reconocible posible al

sentimiento elementos de la e'presión, de la sensación ! de la acción ?in&initamente

dispersos@ perceptibles sólo por el entendimiento contra lo cual el poeta de los sonidos

tiene ahora que e'tender el punto prietamente comprimido hasta la m)'ima plenitud

seg#n su pleno contenido sentimental.

")s adelante, uno de los elementos m)s importantes es la melodía en la cual el sentimiento

se e'presa en su m)'imo esplendor, en donde se conjuntan lo consciente ! lo inconsciente

es con esto a lo que se re&iere el leitmotiv. *e esta &orma podemos ver en la parte primera

del Anillo del Nibelungo que Alberich nunca obtiene nada de la vida ! para poder obtener el

oro del 2in tiene que renunciar al amor, seg#n le han indicado las hijas del 2in la escena

nos en&rasca en una melodía tenue de acuerdo a su su&rimiento la vo+ tambi%n es baja !

tranquila hasta que Alberich se apodera del oro, pues la vo+ ! la melodía se tornan ahora en

ascenso e incluso parecen triun&ales acompa9adas de trompetas.

La m#sica no puede pensar pero sí puede reali+ar pensamientos, es decir, mani&estar

su contenido emotivo como un contenido !a no recordado sino hecho presenteB =n

motivo musical puede entonces producir en el sentimiento una impresión determinada,

model)ndose en actividad pensante, sólo si la sensación e'presada en el motivo &ue

mani&estada ante nuestros ojos por un individuo determinado a un objeto determinado

como asimismo determinada, es decir, bien condicionada.4

La musicali+ación es parte importante para poder llevar a cabo la obra, en este caso del

Anillo, vemos que se conjuntan las dos partes, es decir la parte hablada ! la melódica, pues

ambas se complementan cuando el argumento queda interrumpido, la melodía aparece de

&orma m)s sobresaliente para poder interpretar el silencio de algunos personajes.

6 ibídem, p)g. 1>/

7 ibídem, p)g. 115



Ahora bien, la orquesta es, para lo anterior, una parte &undamental para el propósito po%tico

del drama, es condición de posibilidad para que se realice una empresa como la que Wagner

e'puso.

En la orquesta, la armonía desnuda, de ser algo sólo pensado por el poeta en bene&icio

de la armonía ! no reali+able en el drama por la misma masa de sonido cantado en que

aparece la melodía, deviene algo real ! especialmente capacitado, por cu!o au'ilio

llega a serle &actible en verdad al poeta el drama per&ecto. La orquesta es el

pensamiento reali+ado de la armonía en su m)s alta ! viva movilidad.5

No debemos perder la relación que ha! con lo antes !a dicho acerca de la parte auditiva de

la obra, pues vemos que el oído ser) uno de los sentidos privilegiados para poder apreciar la

obra Cagneriana, ! por ello insiste en algunos temas como la melodía, la armonía, la

orquesta, la poesía ! dem)s. *e esta parte auditiva, Wagner salta a la parte visual en donde

se aprecia la e'presión corporal de los personajes. Es necesario observar que Wagner

invierta el orden de importancia que se tenía establecido desde el arte griego, pues

recordemos que para el griego, el sentido m)s dichoso para poder apreciar el arte era la

vista, la cual estaba relacionado con lo m)s alto, es decir con lo divino.

Ahora, los ojos pasan a ser despla+ados por el oído debido a la importancia de las melodías

producidas por la orquesta. *e esta &orma, en Ópera y drama ! en especial en su tercer

apartado nos encontramos con que Wagner se ocupa en primer lugar de la parte auditiva !

en un segundo momento pasa a hacer un an)lisis de la parte visual que est) con&ormada

principalmente por los gestos ! las e'presiones corporales.

Wagner reconoce que

El gesto del cuerpo, tal como se mani&iesta, como determinado por una emoción

interior, en el movimiento signi&icativo de los miembros m)s aptos para la e'presión !

&inalmente de la cara, es algo per&ectamente ine'presable por cuanto que el lenguaje

sólo puede describirlo, e'plicarlo, mientras que justamente sólo aquellos miembros o

aquella cara podrían realmente e'presarlo. Algo que el lenguaje de las palabras puede

8 ibídem, p)g. 1/4



per&ectamente participar, es decir, un objeto participable por el entendimiento al

entendimiento, no necesita en modo alguno del acompa9amiento o del re&or+amiento

por el gesto, es m)s, el gesto in#til tan sólo podría perturbar la comunicación.3

Aquí vemos que en ocasiones el gesto puede ser primordial cuando las palabras nos son

su&icientes para describir el sentimiento, pero ha! otras tantas en que el movimiento

entorpece la e'presión de la palabra. Lo que har) que el drama sea un conjunto bien

&ormado es la comunicación recíproca entre ambas partes. *e nuevo recurro sobre el tema

de la armonía, pero ahora re&lejada en el gesto ! en los movimiento corporales ! lo tenemos

presente hacia el &inal de la parte tercera del Anillo del Nibelungo, que lleva por nombre

Sigfrido, ! es justamente cuando (ig&rido ha penetrado en el anillo de &uego que rodea la

roca donde ha sido condenada a dormir la hermosa 8runhilde, en la espera del beso de un

hombre que sea digno de despertarla del sue9o ! de esta &orma es (ig&rido, el h%roe ! el

hombre m)s valeroso, quien merece el amor de 8runhilde. Al despertarla, ambos, (ig&rido

! 8runhilde se &unden en un arrebato de amor, pero no un amor que ra!e en lo e'travagante

ni desmesurado, sino una pasión controlada.

Dtra e'presión del gesto lo encontramos hacia el #ltimo acto de toda la obra, es decir, en la

parte del Ocaso de los dioses, en donde aparece (ig&rido en el lugar donde comen+ó toda la

trama, es decir, en el lugar donde habitan las hijas del 2in. Es simbólico ! mu! signi&icativa

la imagen que se nos o&rece: la obra comien+a con Alberich ! las hijas del 2in anunci)ndole

la maldición de robar el oro la #ltima escena de toda la obra se desarrolla en el mismo

lugar donde se da inicio, ! esta &igura nos da la idea de un retorno, un movimiento circular,

el &in ! el comien+o, pues donde se da inicio, ahí tambi%n acaece el &inal. En esta #ltima

parte, las hijas del 2in le anuncian a (ig&rido la maldición que envuelve al poseedor del

anillo.

En la parte primera, cuando le comunican a Alberich el presagio sobre el oro, lo hacen

incluso de una &orma burlona, cre!endo que el gnomo no renunciar) al amor, pues todos los

seres vivientes necesitan de %l, pero en esta parte, la #ltima, las hijas del 2in se muestran

angustiadas por la vida de (ig&rido, pero %ste no sabe sobre la maldición del anillo ! m)s

bien lo tiene por un tro&eo obtenido al vencer al dragón a&ner. Las hijas del 2in le ruegan

9 ibídem, p)g. 111



que devuelva el anillo de una &orma angustiada, tiradas sobre la arena ! dando vueltas con

sus cuerpos, arrastr)ndose alrededor de %l suplic)ndole. Estas s#plicas no las pronuncian de

una &orma e'agerada ni desgarradora, m)s bien angustiadas por su muerte que le vendr) al

poco tiempo a manos de 7agen.

=n #ltimo componente para con&ormar el drama del porvenir es lo que respecta a la

naturale+a humana el drama tiene que estar vivo pero en una &orma di&erente a la

humanidad pues

El drama es un cuerpo siempre nuevo, en constante &ormación, que sólo tiene en

com#n con el humano que est) vivo, ! su vida est) condicionada por la necesidad

íntima de vivir. "as esta necesidad de vivir del drama es una necesidad di&erente, pues

no se &orma desde una materia que permanece siempre igual, sino que toma esta

materia de los &enómenos in&initamente variados de una vida, e'traordinariamente

m#ltiple ! compleja, de hombres di&erentes en circunstancias di&erentes que de nuevo

tienen una sola cosa en com#n, esto es, que son justamente hombres ! circunstancias

humanas. La individualidad de los hombres ! de las circunstancias, jam)s igual, recibe

por medio del contacto mutuo una &isonomía siempre nueva, que o&rece

constantemente al propósito po%tico nuevas necesidades, para su reali+ación. *esde

estas necesidades tiene que &ormarse el drama siempre otro ! nuevo, correspondiente a

aquella individualidad cambiante./>

El drama tiene que renovarse constantemente, como un todo org)nico que deviene, ! a la

ve+ tiene que re&lejar las cuestiones humanas que al igual est)n en constante cambio ! no

son siempre las mismas para ning#n pueblo. Estos son los elementos que debe reunir el

drama que Wagner pretende, por ello, el Anillo del Nibelungo es una empresa por

representar el su&rimiento ! la miseria humana. El su&rimiento, el amor ! desamor, la

muerte ! dem)s se encuentran presentes a lo largo de toda la saga ! lo podemos notar

cuando, desde un principio Alberich se halla desdichado por no poseer nunca nada ! por

tener que renunciar al amor. *espu%s, se ve despojado del anillo, pues Wotan ahora es

10 ibídem, p)g. 1;<



quien lo posee pero de igual &orma los gigantes, que constru!eron el Walhalla, se lo

arrebatan. El anillo va de mano en mano ! es la causa de muerte ! desamor.

El poder que otorga el anillo es el que causa avaricia, ! así vemos que a&ner, uno de los

gigantes, mata a su hermano por la codicia de poseer el anillo. (ig&rido, por su parte, da

muerte a a&ner para conseguir el anillo que lo har) poderoso. =na ve+ que (ig&rido posee

el anillo rescata a 8runhilde ! se declaran su amor ! ahora quien posee el anillo es esta

#ltima. La codicia se apodera ahora de 7agen, el hijo de Alberich ! desea poseerlo todo

esto da paso a un trió amoroso entre 8runhilde, Futrune ! (ig&rido, pues %ste &ue enga9ado

por medio de una pasión para volver) poseer el anillo ! entregarlo a 7unter, quien en

recompensa le dar) a Futrune como esposa. La maldición que aparece al principio acerca

del amor se va cumpliendo en los personajes que poseen el anillo, así, vemos que Alberich,

Wotan, a&ner, (ig&rido ! 8runhilde, en sus respectivos momentos se ven privados del amor

o en constante su&rimiento, pues est)n sometidos al vaticinio que pronunciaron las hijas del

2in.

*e esta &orma vemos que el anillo signi&ica la completud, dado que proporciona poder a

quien lo posea. Esto parece recordar al an!uete platónico que versa sobre el tema del

amor ! es justo el amor la &igura de la completud, principalmente, en el discurso que

Aristó&anes pronuncia en &avor de Eros, en donde relata el mito del andrógino. La

completud entre el g%nero humano es lograda por medio del amor, pero cuando no se est)

incompleto viene el su&rimiento ! la pena por no conseguir lo anhelado. ara Wagner “el

elemento del amor es lo que arrastra al sujeto &uera de sí mismo ! le obliga a la vinculación

con otro.$//

No podemos dejar de pensar en (chopenhauer cuando se habla del tema del su&rimiento

humano, e incluso podemos a9adir que %ste &ue uno de los pensadores m)s in&lu!entes para

Wagner. 8ajo la lu+ de la &iloso&ía de (chopenhauer podemos ver muchos elementos que se

relacionan con el Anillo del Nibelungo, pues el tema del su&rimiento ! la incompletud est)

presente a lo largo de toda la saga por otro lado, en un momento dado parece que el amor

se culmina cuando (ig&rido ! 8runhilde se unen en amor, pero despu%s le sigue el

su&rimiento debido al enga9o que maquina 7agen en contra de (ig&rido. Godo esto nos da

cuenta de los ideales de (chopenhauer acerca del su&rimiento perenne de la vida humana.

11 ibídem, p)g. 1>3



Lo que descubrimos con gran es&uer+o en la naturale+a inconsciente ! en la consciente

se nos revela con toda claridad en la vida animal, cu!o eterno dolor es &)cil demostrar.

(in embargo, sin detenernos en este escalón intermedio, queremos dirigir nuestra

atención a aquella es&era en que reina la m)s deslumbrante claridad, a saber: la vida

humana. orque a medida que la voluntad se hace m)s intensa, el dolor se nos revela

de un modo m)s evidente./1

El conocimiento racional nos da cuenta de los su&rimientos pero no los evita. or ello,

(chopenhauer pre&iere una %tica estoica sustentada en la atara"ia, pues con ella se evita la

alegría ! la triste+a, no se produce ni dolor ni placer, es la imperturbabilidad entre las

pasiones del hombre, como un justo medio aristot%lico el dolor es causado por algo

presente, ! la alegría o el deseo por algo &uturo.

or otro lado, la necesidad a la que est) sujeta la vida humana tambi%n est) puesta en

escena en la #ltima parte del Anillo, en el #rólogo al Ocaso de los dioses, nos encontramos

con las tres Nornas, que evocan el recuerdo de las tres $oiras griegas: 0loto, L)quesis !

Atropo, quienes son las que toman es sus manos los hilos de la vida ! deciden el destino de

los hombres. Las Nornas anuncian el &in de los dioses !a desde esta parte se anuncia el

destino, que es algo a lo que no se puede escapar, es decir, es inevitable rehuir al designio

del destino.

Hemos que tambi%n acude una hermana de 8runhilde para convencerla de que devuelva el

anillo, pues al parecer todos est) enterados de los e&ectos que puede causar si no regresa a

donde pertenece, pero ella no hace caso, a pesar de que la miseria invade al Walhalla.

8runhilde considera que el anillo es una prenda de amor que la une con (ig&rido ! por ello

se niega a deshacerse de %l.

Esta #ltima parte, nos o&rece una historia m)s emocionante, si así lo podemos cali&icar, es

decir, contiene elementos como los presagios de parte de las Nornas, ! tambi%n de las hijas

del 2in sobre la muerte de (ig&rido, el amor, desamor ! traición entre (ig&rido, 8runhilde !

Futrune, ! por supuesto, el elemento que est) patente a lo largo de toda la obra, la

maldición del anillo que aquí tiene su desenlace con la muerte del h%roe ! el &in de los

12 (chopenhauer, Arthur, %l mundo como voluntad y representación, p)g. ;/;.



*ioses. Godos los elementos que se veían venir desde las anteriores partes de la obra se

conjuntan en esta parte &inal.

La parte m)s signi&icativa es, sin duda, que la escena &inal tiene lugar en donde comen+ó la

puesta en escena, como !a se había mencionado. El presagio se cumple en el lugar donde

&ue pronunciado ! vemos que el poseedor del anillo tiene que renunciar al amor: (ig&rido

tiene que renunciar al amor de 8runhilde. todo terminar) con su asesinato por parte de

7agen con una lan+a enterrada en la espalda. Hemos el su&rimiento de 8runhilde por la

muerte de su amado ! ella toma el anillo para llevarlo con las hijas del 2in ! que todo sea

puri&icado con el poder del amor, pero se9ala como culpable de todo lo sucedido a Wotan,

quien al &inal terminar) por perecer con la destrucción del Walhalla.

0on lo observado a lo largo del Anillo del Nibelungo ! Ópera y drama de Wagner, podemos

concluir que la intención del autor es plasmar la condición humana a la lu+ de la &iloso&ía

schopenhaueriana ! otras m)s, pero la que se muestra de una &orma m)s evidente es %sta

por lo antes !a dicho acerca del su&rimiento, la muerte ! el destino. Ópera y drama es, en

cierta manera, un escrito que contiene la descripción de los elementos con los que debe

contar un drama verdadero. arece que Wagner intenta una revolución en la &orma en que

anteriormente se comprendía al drama, ! es por esta ra+ón por la que la llama el drama de

porvenir. Es decir, Wagner quiere sentar las bases sobre las cuales se erigir) una nueva

&orma de hacer representaciones artísticas.

Nuestro autor pretende una revolución al arte en general, pero en este escrito sólo nos

avocamos al tema del drama ! las representaciones esc%nicas ! para que quedara

ejempli&icado se e'pusieron tambi%n algunos pasajes que con&orman el Anillo del

Nibelungo, una obra e'tensa pero que encierra muchos elementos ! bebe de muchas &uentes

en todo sentido para poder llegar a ser una obra tan acabada ! que indudablemente se presta

a una in&inidad de interpretaciones. Es este escrito trat% de relacionar a la doctrina de

(chopenhauer con la obra Cagneriana, puesto que encuentro que ha! muchas coincidencias

! semejan+as entre los pensamientos de estos dos personajes, pero por supuesto deben

haber muchas m)s diversas interpretaciones.

Lo que sí es cierto es que la trama del Anillo nos lleva a pensar en el g%nero humano, pues

%ste se ve sujeto a un ciclo que debe cumplir ! del cual no puede escapar. La naturale+a



marca la necesidad en el &in de la vida, ! esto es lo #nico a lo que no podemos huir.

7eidegger retomar) esto ! nos dir) que la muerte no se encuentra al &inal del ciclo, sino que

es algo que nos acompa9a desde el nacimiento ! lo encontramos patente en todo momento

de la e'istencia. El su&rimiento no se puede evitar ni aunque la ra+ón nos guíe ! m)s bien le

encontramos en cada instante que pasa.

No debemos olvidar que esto no es nuevo, sino desde la %poca griega !a nos hallamos con

la concepción sobre una vida que es una carga ! un padecimiento que sólo nos produce

dolor. lo mejor que le puede pasar al hombre es que su vida sea breve para evitar

prolongar el su&rimiento de la e'istencia. A pesar de la racionalidad no podemos evitar el

su&rimiento. Es el su&rimiento algo inherente al g%nero humano, algo que parece dictado

por las mismas $oiras griegas, como un presagio que no podemos ignorar ! que en alg#n

momento determinado de la vida suceder) a pesar de que intentemos evitar su

cumplimiento.

8ibliogra&ía.

• Wagner, 2ichard, Ópera y drama. http:IIjuliobeltran.Cd&iles.comIlocal@@

&ilesIcursos:ebooJsIWagner@DperaK!K*rama.pd& • (chopenhauer, Arthur, %l mundo como voluntad y representación. Grad. Eduardo Dvejero !

"aur!, "%'ico, orr#a, 1>><.

http://juliobeltran.wdfiles.com/local--files/cursos:ebooks/Wagner-Opera_y_Drama.pdf




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