Etnias de La Amazonia
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FACULTAD DE INGENIERÍA QUÍMICA Y AGROINDUSTRIA
INGENIERÍA QUÍMICA
TRANSFERENCIA DE MASA II
ING. LILIANA GUZMÁN
ETNIAS DE LA AMAZONÍA – PUEBLOS NO CONTACTADOS
SALOMÉ AREQUIPA
PABLO TAMAYO
01-06-2015
ETNIAS DE LA AMAZONIA-PUEBLOS NO CONTACTADOS
1.- INTRODUCCIÓN:
En la Amazonía ecuatoriana, se identifican dos pueblos indígenas en aislamiento: los
Tagaeiri y los Taromenane los cuales se encuentran entre los ríos Napo y Curaray, Estos
pueblos son lingüística y culturalmente relacionados con los Waorani y se rehusaron al
contacto al momento del proceso de pacificación, reubicación y pérdida del territorio
padecido por los indígenas Waorani, debido a la avanzada de la frontera petrolera y a la
obra del Instituto Lingüístico de Verano (ILV) durante la década del sesenta. Si bien la
mayoría de Waorani fueron contactados, algunas familias y grupos conocidos como
Tagaeiri, junto con otros grupos conocidos como Taromenane, con quienes están
relacionados cultural y lingüísticamente, se adentraron más en la selva, huyendo de la
colonización y quedando hasta la actualidad en una vulnerable situación de aislamiento.
La actividad extractiva en el territorio de los pueblos aislados impulsada por el Estado
ecuatoriano representa en la actualidad el mayor peligro para la supervivencia de estos
grupos. Los pueblos aislados del Yasuní, se caracterizan por un tipo de organización en
pequeños grupos dispersos en zonas interfluviales y semi nómadas, con una economía
de subsistencia basada en la recolección, la caza y la horticultura itinerante. Su
organización política se basa en lazos de parentesco endogámicos conformados por
malocas donde convivían en familias extendidas.
2.- PUEBLOS NO CONTACTADOS
2.1.- Pueblos sin contacto, ocultos, libres o aislados
Es sobre todo a partir de los años noventa que los pueblos en aislamiento emergen como
discurso y como “problema” para el Estado y las instituciones públicas y privadas,
especialmente la industria petrolera, que operan en la Amazonía ecuatoriana. En los
comienzos de la extracción petrolera (1960), el tema de los numerosos pueblos que se
encontraban en una situación que hoy definiríamos como “de aislamiento” o de
“contacto inicial”, era enfrentada en términos de salvajismo/civilización y no cabía
ninguna duda sobre el “deber civilizatorio” y la necesidad de establecer un contacto con
estos grupos. Para lograr una plena integración nacional tanto de las personas como de
los territorios en donde habitaban, que resultaba muy ricos en recursos naturales, en ese
entonces el Estado delegó la función “civilizatoria” y la obra de pacificación y contacto
a las misiones religiosas, principalmente a las protestantes norteamericanas. La primera
definición “Pueblos sin contacto”, pone énfasis en la accidentalidad de la condición de
aislamiento, como si estos grupos se hallaran “perdidos” por accidente en la selva al
margen del tiempo y del desarrollo. La segunda definición, “Pueblos ocultos”, no
solamente se refiere a la condición oculta en la selva de estos pueblos, sino que pone
énfasis en el ocultamiento de este tema, que permanece silenciado para la mayoría de la
opinión pública nacional e internacional. La tercera definición, utilizada por la
Confederación de las Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE), es el término de
“Pueblos libres”, para subrayar el carácter de autonomía mantenido por estos pueblos
ante los procesos de civilización y colonización. La cuarta definición, que es la utilizada
por las Naciones Unidas es “pueblos indígenas en aislamiento”.
Una característica particular de los pueblos Tagaeiri y Taromenane en el Yasuní, entre
los ríos Napo y Curaray, es la agresividad que han manifestado reiteradamente desde el
boom petrolero hacia el mundo de afuera y especialmente con las intrusiones de
foráneos en su territorio. Sin embargo, aunque se tiene registro de algunos ataques a
partir del ingreso de compañías petroleras en la zona, la situación se ha agravado en los
últimos años conforme al aumento de la presión sobre el territorio de estos pueblos
causada por la extracción ilegal de madera, la legal de petróleo, y la expansión de la
frontera agrícola.
2.2.- Pruebas de los pueblos no contactados
Los pueblos Tagaeiri y Taromenane se encuentran asentados en la zona que abarca los
ríos Rumiyaku/Tiputini y Curaray, en particular las cuencas de los ríos Tivacuno,
Yasuní, Nashiño, Cononaco, Cononaco Chico, Tiwino y Cuchiyaku. Parte de su
territorio, se encuentra por fuera de la zona intangible, dentro de los límites de los
bloques petroleros 16, 17, 14, Campo Armadillo, Campo Tiwino, Campo Cononaco;
dentro del parque nacional Yasuní; dentro del territorio legalizado de los Waorani; y en
zonas de asentamiento de población colona.
Fig 1.- Ubicación de los pueblos no Contactados
Se puede visualizar en el gráfico distintos números, que son sitios donde hubo contacto
o visualización de los grupos no contactados:
1.- 26 de Mayo del 2003.- Mueren 23 mujeres y niños del grupo en aislamiento
voluntario taromenane en un conflicto con madereros.
2.- 11 de septiembre del 2005.- Maderero falleció lanceado en un enfrentamiento con
un grupo de aislamiento.
3.- 12 de abril del 2006.- 2 madereros fueron atacados y uno de ellos falleció en Quito.
4.- 2 de marzo del 2008.- Maderero muere lanceado dentro del campo marginal
Armadillo.
5 y 6.- abril del 2008.- Se informó al plan de medidas cautelares (PMC) 2
avistamientos de grupos no contactados. El uno cerca de Ñoneno donde se detectó una
casa de los pueblos de aislamiento voluntario. Y el otro fue avistado por habitantes de
Dicapare huellas del pueblo taromenane.
7.- El 8 de octubre del 2008.- Un huaorani junto con su esposa se encuentran a un
grupo de taromenanes a unos 4km del río Tiguiro.
8.-El 3 de diciembre del 2008.- Mediante un sobrevuelo se observó casas de los
indígenas aislados alrededor de las plataformas orbe y Nashiño.
9.- En enero del 2009.- Comunidades huaoranis encuentran huellas de los pueblos en
aislamiento voluntario.
10.- En junio del 2009.- Se encuentran huellas a 20 minutos en canoa de la comunidad
huarani.
11.- El 10 de septiembre del 2009.- Sandra Zavala muere junto con sus 2 hijos en un
ataque con lanzas a 500 metros de la plataforma Hormiguero Sur.
12.- El 5 de marzo del 2013.- Ompure Ornehuay y su esposa mueren en un ataque con
lanzas al interior del bloque 16 en la vía a Maxus, y sus agresores se identificaron
taromenanes.
3.- AMENAZA DE LA FRONTERA EXTRACTIVISTA
Debido a la expansión de la frontera extractiva fruto de la extracción de petróleo, tala
ilegal de madera, expansión de la frontera agrícola, carreteras, tendido de energía,
turismo, periodistas, científicos, fotógrafos, sobrevuelos a sus casas, son actividades que
amenazan la supervivencia de este tipo de grupos.
Las zonas de frontera petrolera se caracterizan por vías de acceso que fueron abiertas
en un bosque primario, provocando la deforestación y la alteración del ecosistema, de
cuyo equilibrio ecológico depende la supervivencia de estos grupos. La abertura de las
carreteras petroleras indujo la colonización, por parte de colonos y de miembros de otras
nacionalidades indígenas como Kichwa y Shuar, situaciones que provocan tensión
permanente con las comunidades wao y el territorio de los aislados.
La presencia de la actividad petrolera significa un riesgo de contaminación y
empobrecimiento constante de los bosques; además trae consigo la presencia
permanente de extraños como son los trabajadores petroleros, el ruido ocasionado por
las maquinarias y generadores, contaminación de las vertientes de agua y del aire
ocasionada por los mecheros que emanan y queman gas, genera un entorno
extremadamente riesgoso para los pueblos aislados en términos de la continuidad de su
reproducción social y cultural como, por ejemplo, su salud, soberanía alimentaria,
espacios de recreación y rituales.
Los grupos del Yasuní son dramáticamente expuestos al contacto de la expansión de la
frontera petrolera, ya que se encuentran dentro y recorren dentro de los límites de los
bloques 14, 17, 16 y en los campos Armadillo, Tiwino y Cononaco, operados por la
empresa estatal Petroecuador.
En este sentido, es preocupante la cercanía que mantienen hacia las instalaciones
petroleras, como por ejemplo los potenciales impactos del derrame de petróleo ocurrido
dentro del Bloque 16 que ha contaminado las aguas de la zona, las que son posiblemente
utilizadas por ellos. También es alarmante que las empresas petroleras conozcan de la
presencia de pueblos en aislamiento en sus áreas de operaciones y que se rehúsen a
socializar esta información.
4.-LA POLITICA ESTATAL
La respuesta, por parte del Estado, ha cambiado en el tiempo. Durante la mitad del siglo
pasado, para resolver el problema de los agresivos Waorani asentados en las futuras
zonas de explotación petrolera, se optó por la pacificación de la mayoría de los clanes y
se logró reducirlos a un espacio geográfico: el objetivo propuesto era la integración de
los indígenas y sus territorios al resto de la nación ecuatoriana. Más tarde, conforme
avanzaba y se desarrollaba el discurso de los derechos de los pueblos indígenas por
parte de organizaciones internacionales e indígenas, la industria extractiva por su parte
se vio obligada a aceptar la delimitación de áreas vedadas a la actividad petrolera para
asegurar la explotación en el Yasuní, y el Estado empezó a adoptar una serie de políticas
que dieran repuesta a los cambios demandados por los diferentes actores.
5.- BIBLIOGRAFÍA
Colleoni P, 2013, Los pueblos de aislamiento de la Amazonía Ecuatoriana, recuperado de: http://www.iwgia.org/iwgia_files_publications_files/0603_aislados_contacto_inicial.pdf, (Mayo,2015)
Lopez E, (2013), Ecuador: peligro de extinción de pueblo no contactados, recuperado de: http://www.dw.de/ecuador-peligro-de-extinci%C3%B3n-de-pueblos-no-contactados/a-16997962