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EXCURSIÓN A LA PENOUTA (Boal) - SOCIEDAD ASTURIANA DE MICOLOGIA (S.A.M.)

En la naturaleza todo esta interrelacionado, las diferentes especies de setas dependen del tipo de bosque en el que salen y los diferentes tipos de bosque, dependen de la naturaleza del subsuelo o de los suelos sobre los que se asientan. Por ello existe una relación muy importante entre la geología del lugar y las diferentes especies de setas.

Como una primera aproximación a la geología, decir que existen 4 tipos fundamentales de rocas, dependiendo de su origen:

- Rocas magmáticas (volcánicas y plutónicas), las procedentes de un magma que viene del interior de la Tierra. Si cristalizan en superficie de forma rápida (sin presión) son rocas volcánicas y si cristalizan en el subsuelo, a gran profundidad y de forma lenta (con presión) son rocas plutónicas. - Rocas sedimentarias, las que se forman por consolidación de un sedimento producido por la alteración de una roca anterior. - Rocas metamórficas, son rocas que fueron sedimentarias, recristalizaron y se transformaron en metamórficas por la acción de la temperatura y la presión. (proximidad de un magma, o por mucha profundidad, metamorfismo de contacto o metamorfismo regional respectivamente). - Rocas Filonianas, son rocas que cristalizan en el interior de grietas o fractura que se originan en las zonas de esfuerzo.

Desde el punto de vista químico, llamamos rocas ácidas las que tienen gran presencia de cuarzo y rocas básicas aquellas en las que el cuarzo es muy minoritario. Saber que el cuarzo es un mineral muy estable física y químicamente.

En el principio de la historia de la Tierra, las rocas eran magmáticas, no había rocas sedimentarias, posteriormente con el tiempo se formaron rocas sedimentarias a partir de la descomposición de rocas magmáticas más antiguas. Los materiales geológicos que dieron origen a la Península Ibérica, en principio se originaron como consecuencia de una gran cordillera que se formó por la colisión de 2 grandes continentes Laurasia en el Norte y Godwana en el sur al cerrarse el antiguo océano que algunos llaman Iapetus y Rerum. De esta colisión en tiempos anteriores a la explosión de la vida (Precambrico) se originó un gran continente único que llamamos Pangea. Del borde externo de la cordillera de colisión que produjo Pangea , proceden los materiales originarios de la península Ibérica , que son los que constituyen el Macizo Ibérico o Macizo Hespérico, materiales que se sitúan en la mitad occidental de la Península (Galícia, Zona occidental de Asturias, y mitad occidental de la Península Ibérica (Portugal , Zona occidental de España , Salamanca y Extremadura) son materiales de edad Precámbrica constituidos por granitos y granitoides (rocas cristalinas muy resistentes física y químicamente, constituidos por minerales cuarzo feldespato y micas – silicatos) . Con el paso del tiempo se fueron añadiendo en la zona más oriental del macizo Ibérico, materiales sedimentarios (pizarras, areniscas y cuarcitas) de edad paleozoica Cámbrica, Silúrica Devónica y después Carbonífera. Posteriormente a partir del pérmico y después el mesozoico y Terciario se añadieron sucesivamente al macizo Ibérico materiales sedimentarios que hacían crecer el continente hacia el oriente hasta constituir en la actualidad la Península Ibérica. Es decir en otras palabras que la Península Ibérica se formó de un núcleo precámbrico del macizo Ibérico originario en la zona gallega creciendo sucesivamente hacia el Este.

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Una primera observación del mapa geológico de Asturias permite reconocer la existencia de dos conjuntos de rocas que se diferencian por su edad y su modo de afloramiento.

El conjunto más antiguo está constituido por rocas precámbricas (periodo en el que aún no se había desarrollado la vida) y sobre todo paleozoicas, que ocupa la mayor parte del territorio asturiano. Sus afloramientos presentan una disposición alargada y sinuosa.

El conjunto más moderno está constituido por rocas pérmicas, mesozoicas y terciarias, que ocupan la parte norte y central de Asturias, en un área situada entra Oviedo Gijón y Ribadesella y vuelven a aparecer en el límite con Cantabria, prolongándose hasta los Pirineos. Sus afloramientos presentan una clara discordancia angular con el conjunto de rocas más antiguas (paleozoicas y precámbricas) y constituyen manchones irregulares.

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Discordancia Angular

Depositos antiguos (Paleozoico), que sufren un plegamiento por orogenia y posteriormente una erosion a continuacion se depositan materiales más modernos en parte alta en disposición horizontal.

Sobre ambos conjuntos de rocas, se sitúan sedimentos recientes, en disposición horizontal, que son los sedimentos cuaternarios que enmascaran los afloramientos de rocas más antiguas. Estos sedimentos cuaternarios adquieren una cierta entidad en la proximidad de las áreas costeras, ocupando una franja estrecha producida por la abrasión marina cuaternaria.

El conjunto constituido por las rocas precámbricas y paleozoicas (rocas más antiguas de la Península Ibérica), forma parte del denominado Macizo Ibérico o Macizo Hespérico, el cual ocupa la mayor parte de la zona occidental de la Península Ibérica, además de pequeñas áreas de la Cordillera Ibérica. Este macizo está constituido por rocas que presentan la particularidad de haber sido intensamente plegadas por DOS OROGENIAS la Varística o Hercínica (periodo en el que además se produjeron importantes procesos de magmatismo y metamorfismo), y la Alpina.

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El macizo Ibérico, fue dividido por Lotze en 1945 y posteriormente por Julivert en 1972, en las siguientes subdivisiones:

- Zona Cantábrica - Zona Astur –occidental Leonesa - Zona Centroiberica - Zona de Ossa Morena - Zona Surportuguesa.

La zona Cantábrica, ocupa la zona oriental y central de Asturias, hasta el meridiano de Cudillero (aproximadamente) Son rocas sedimentarias de edades entre el ordovícico y el pérmico (recubiertas por los manchones mesozoicos terciarios y cuaternarias. Son rocas constituidas por areniscas, pizarras, calizas y dolomías y margas, más básicas (con menos presencia de cuarzo).

La Zona Asturoccidental Leonesa, ocupa la zona occidental de Asturias, desde el meridiano de Cudillero hacia Galicia. Son rocas constituidas principalmente por areniscas, cuarcitas y pizarras de edad precámbrica, cámbrica, silúrica y ordovícica, que conforme se acercan a Galicia, van aumentando el grado de metamorfismo, por su acercamiento a los granitoides de esa zona (Metamorfismo Regional).

Luego hay otro tipo de metamorfismo que es de contacto por estar estas rocas sedimentarias muy cercanas a intrusiones o plutones o batolitos (como el caso que ahora vamos a visitar en Boal).

El Plutón de Boal

El primero que estudió la zona de Boal, fue un geólogo alemán que en el siglo XIX vino a Asturias a estudiar posibles Yacimientos mineros, este fue Guillermo Schulz. Posteriormente le siguió otro geólogo francés Barrois y casi al mismo tiempo inicio estudios geológicos en Asturias Luís Adaro, todos ellos siguiendo intereses mineros

En el año 1950 Noel Llopis LLado, cuando hacía estudios sobre las minas de hierro y wolframio de la zona, realiza un estudio geológico del Plutón granítico de Boal y su cobertera metamórfica, a raíz de una excursión sobre las minas de wolframio de Moneira en Villar de San Pedro y en el año 1953 cuando hace el estudio de las minas de La Penouta.

Un Plutón, es una intrusión de magma en rocas sedimentarias (como un grano en nuestra piel).

El Plutón de Boal es uno de los dos afloramientos graníticos más importantes de Asturias, (El otro Plutón se encuentra en Salave).

El Plutón de Boal, está enclavado en una zona de grandes pliegues de materiales del occidente Asturiano sobre materiales cámbricos y Ordovícicos como resultado de una removilización de tipo siálico (Silicatos de Aluminio procedente de la corteza de la Tierra), producida durante la orogénesis hercínica (en tiempos devónicos- carboníferos).

El afloramiento está ubicado en el flanco W de un amplio sinclinorio (pliegue del terreno que forma como un valle) de pizarras con flancos de cuarcitas armoricanas. Toda la masa plutónica esta por tanto dentro del ordovícico, aunque la aureola del Plutón alcanza 1000 m de la bóveda del Plutón y llega hasta los materiales cámbricos del vecino valle de las Rozadas y Vegadouria.

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La cobertera del Plutón es fundamentalmente Ordovícica aunque la aureola llega al cámbrico, (aureola de metamorfismo de contacto por alta temperatura procedente de la intrusión granítica). Sobre las Cuarcitas Armoricanas aparecen las Pizarras de Luarca.

La cabecera del valle de Boal, esta excavada en su totalidad en un Plutón de granadiorita que hizo su intrusión en estado magmático en el conjunto de pliegues hercinianos que constituyen la estructura del occidente de Asturias. El espesor de la excavación es de 400 m, lo que permite observar hasta esta profundidad la masa granítica, (ver corte geológico), además aparecen a partir de la zona de contacto las pizarras de Luarca y la Cuarcita Armoricana que son sedimentarias antes de la intrusión del Plutón y en la actualidad debido al metamorfismo de contacto que sufrieron estas rocas pasarían a ser rocas metamórficas. (Ver evolución general en la historia Geológica).

El Plutón se ve surcado por filones escasos de cuarzo y pórfidos (granitos con gran cantidad de grandes cristales de feldespatos). En estos filones se han explotado pequeños yacimientos de minerales de wolframita , como las de la Penouta

En la zona de la Penouta se han reconocido más de 10 filones graníticos y de pegmatitas, con espesores entre 0,2 y 1,80 m que son en los que se han explotado la wolframita con disposición N30º-50º E.

Por todo ello esta zona de la Penouta, estará recubierta por suelos de alteración y rocas eminentemente ácidas (con gran procentaje de cuarzo).

Se puede destacar que en la zonas de afloramiento de estas rocas filonianas pueden aparecer minerales asociados como Sheelita y Andalucita en su variedad denominada Quiastolita que es un Nesosilicato (Al2OSi4), de dureza 7,5 y densidad 3,2 gr/cms2.

La Quiastolita son cristales de andalucita con inclusiones carbonosas en forma de cruz, que al corte perpendicular se deja ver y por ello suele llamarse vulgarmente piedra de la cruz muy utilizada por los peregrinos que van a Santiago de Compostela y en otras culturas pasadas. (ver figura).

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