Fomento y mejora de pequeños regadíos³n con agua de pie. les, se llevaron a cabo, además de una...

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Así se regaban los pequeños huertos. Fomento y mejora de pequeños regadíos José JAPON QUINTERO Agente comarcal del S. E. A. LA Agencia de Chipiona, hoy asentada en la localidad de Sanlúcar de Barrameda y con juris- dicción en los citados términos municipales, Rota y últimamente Trebujena, funcionó desde su crea- ción en 1956, como Agencia piloto para la reali- zación de las prácticas de la primera promoción de futuros Agentes, hasta noviembre del citado ario, en que, con la función de Subagencia, pasó a depender de la Agencia de Trebujena (Cádiz). Fué a primeros de octubre de 1957 cuando se le confirió la categoría de Agencia que hoy os- tenta. Y es a partir de esa fecha en que confec- ciona su primer Plan Anual de Trabajo, cuando comienza a desarrollar algunos de los problemas que la afectan. LA COMARCA. La comarca, que goza de excelentes condiciones climatológicas, muy parcelada, está dividida en dos zonas de desiguales características. La primera, que comprende la parte interior, de gran extensión y de tierras albarizas, está de- dicada al cultivo de la vid y cereales. La segunda, está integrada por la franja cos- tera, arenosa y rica en aguas subálveas, donde están asentados los navazos y pequeños regadíos. Vistas, pues, por un lado, las condiciones de clima privilegiado de que goza la comarca, y de otra, sus posibilidades de captación de agua, se pensó que gran número de agricultores estable- cidos en aquella zona costera podrían asegurar sus cosechas y aumentar los rendimientos de és- tas con la creación de pequeños regadíos o la mejora de los ya existentes. También se pensó y se vió que estas transfor- maciones no acarrearían, en su día, problemas de baja de precios, por superabundancia de produc- tos, pues, además de ser zona de las más tem- pranas de España, lo que equivale a poner en el mercado los primeros productos hortícolas de la temporada, la exportación ofrece magníficas perspectivas, a juzgar por los ensayos realizados hacia los mercados alemanes e ingleses. Sopesadas, pues, estas circunstancias, y con el solo fin de elevar el nivel de vida del agricultor, se puso en marcha este proyecto, denominado «Fomento de pequeños regadíos». RIEGO A MANO CON JARRAS. Escasísimos, por no decir nulos, eran los mo- tores de riegos existentes en la comarca ; nulas, también, las norias, y sí el caso más sencillo y elemental del regadío es el clásico del productor 6

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Así se regaban los pequeños huertos.

Fomento y mejora

de

pequeños regadíos

José JAPON QUINTEROAgente comarcal del S. E. A.

LA Agencia de Chipiona, hoy asentada en lalocalidad de Sanlúcar de Barrameda y con juris-dicción en los citados términos municipales, Rotay últimamente Trebujena, funcionó desde su crea-ción en 1956, como Agencia piloto para la reali-zación de las prácticas de la primera promociónde futuros Agentes, hasta noviembre del citadoario, en que, con la función de Subagencia, pasóa depender de la Agencia de Trebujena (Cádiz).

Fué a primeros de octubre de 1957 cuando sele confirió la categoría de Agencia que hoy os-tenta. Y es a partir de esa fecha en que confec-ciona su primer Plan Anual de Trabajo, cuandocomienza a desarrollar algunos de los problemasque la afectan.

LA COMARCA.

La comarca, que goza de excelentes condicionesclimatológicas, muy parcelada, está dividida endos zonas de desiguales características.

La primera, que comprende la parte interior,de gran extensión y de tierras albarizas, está de-dicada al cultivo de la vid y cereales.

La segunda, está integrada por la franja cos-tera, arenosa y rica en aguas subálveas, dondeestán asentados los navazos y pequeños regadíos.

Vistas, pues, por un lado, las condiciones declima privilegiado de que goza la comarca, y deotra, sus posibilidades de captación de agua, sepensó que gran número de agricultores estable-cidos en aquella zona costera podrían asegurarsus cosechas y aumentar los rendimientos de és-tas con la creación de pequeños regadíos o lamejora de los ya existentes.

También se pensó y se vió que estas transfor-maciones no acarrearían, en su día, problemas debaja de precios, por superabundancia de produc-tos, pues, además de ser zona de las más tem-pranas de España, lo que equivale a poner enel mercado los primeros productos hortícolas dela temporada, la exportación ofrece magníficasperspectivas, a juzgar por los ensayos realizadoshacia los mercados alemanes e ingleses.

Sopesadas, pues, estas circunstancias, y con elsolo fin de elevar el nivel de vida del agricultor,se puso en marcha este proyecto, denominado«Fomento de pequeños regadíos».

RIEGO A MANO CON JARRAS.

Escasísimos, por no decir nulos, eran los mo-tores de riegos existentes en la comarca ; nulas,también, las norias, y sí el caso más sencillo yelemental del regadío es el clásico del productor

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malo

Con la barrena de sondeo se localiza el agua.

que dispone de un minúsculo huerto, un agujerocon agua, casi a flor de tierra, y por todo meca-nismo elevador un rústico cigüeñal. tampoco dis-poníamos en la comarca de ellos.

¡ Y. no obstante, se regaba! Rústico, primitivo.He aquí el sistema : riego a mano con jarras.

Esta operación, sumamente penosa, por realizar-la el obrero descalzo, corriendo por la abrasa-dora arena, es una de las que más llaman la aten-ción, por la rapidez y habilidad con que se rea-lizan. Desciende el obrero al «toyo» (ho yo conagua) para llenar de agua unas jarras de hoja-lata con cabida para 12 litros, o bien introduceésta, con la ayuda de un «garabato» (especie debastón largo), en un pozo de 60 centímetros dediámetro. Una vez llenas, corriendo con sus ja-rras, vierten el agua en la pequeña poceta quehace instantáneamente con el pie en el lugar, cen-tro de cada cuatro matas. Y así, en este ir y venirdel «toyo» a la parcela, va repartiendo el aguapor toda la superficie sembrada. Labor, como seye. ésta. ímproba y digna de admiración.

El clásico riego con jarras, por la pérdida detiempo que supone y la gran y penosísima manode obra que absorbe, encarece de una manera so-brenatural la obtención del producto. No siendo,en la mayoría de los casos, los resultados satis-factorios.

Por todo ello, y puesto que el asunto bien me-

El «paladeo» le sirve al práctico para conocer la sali-nidad del agua hallada.

recia un detenido estudio, se pensó mejorar estosregadíos. Para ello, el proyecto se dividió en dospartes: primera, mejora de los regadíos existen-tes; segunda, fomento de nuevos regadíos.

ESTUDIO DEL TERRENO.

Como queda dicho, la mayor parte de la zonaregada está asentada en terreno más o menosarenoso, cuya composición física suele ser, en al-gunas partes, de un 86,07 por 100 de arena y0,50 por 100 de arcilla.

En estos lugares, la capa freática se suele en-contrar a una profundidad que oscila entre los7 y 12 metros. Pasada la citada profundidad, co-mienza a aparecer una capa arcillosa de barroazul, denominado «viscornil», impermeable y deespesor no delimitado, llegado a la cual se danpor finalizadas las perforaciones. por ser ya casiimposible encontrar agua.

En los «navazos» estas arenas son inertes ysólo sirven de soporte para la planta, ya que elácido fosfórico, la potasa y el nitrógeno, así comola materia orgánica encontrada, son residuos delos abonos aportados. La profundidad a que seencuentra el agua y la calidad de ésta son losprincipales factores que influyen en la bondad deun «navazo».

POSIBILIDADES TÉCN I CAS.

Dada la naturaleza del terreno, salvo raras ex-cepciones en que se encuentran estratos rocosos,las perforaciones no ofrecen mucha dificultad:además, la llanura de la zona facilita las posibi-lidades técnicas para la puesta en riego.

Sólo se han encontrado problemas en las tie-rras de «navazo» y costa de Rota, con los riegos

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por pie, pues para ello se requieren mayores can-tidades de agua y una gran velocidad de éstapara que no se filtre rápidamente y lleguen alos extremos de las parcelas regadas ; y esto oca-siona grandes arrastres de las arenas y el consi-guiente destrozo de las acequias, que, por otrolado, le ocupa mucho terreno del poco que parariego disponen.

Los ensayos con aspersores han venido a pa-liar el problema, hasta el punto de que dicho riegose va imponiendo. En otras zonas menos arenosasy de mayor extensión, el problema se ha solu-cionado mediante la instalación de acequias.

También hemos tropezado en ocasiones, sobretodo en zonas del interior limítrofes a Rota, conresultados desalentadores al efectuar las perfora-ciones, como consecuencia, no ya del terreno ensí o de la cantidad de agua, sino de la calidad ycantidad de sales en ésta, que han imposibilitadoel riego de los cultivos.

INICIACIÓN-.

La Agencia comenzó en un principio, comoantes se dice, con las mejoras de los «navazos»y regadíos existentes, iniciándose más tarde lasegunda parte «fomento de regadíos», que desdeentonces marchan conjuntamente.

Al dar los primeros pasos, y puesto que las ven-tajas de la transformación saltaban a la vista, nohubo necesidad de confeccionar ningún proyectopara la puesta en marcha del primer punto. Sólo

un anteproyecto mental bastó para ello. Fué mástarde, al iniciar la implantación de nuevos rega-díos, cuando se precisó tirar de lápiz y hacer nú-meros para convencer a los más reacios de lasventajas de estas transformaciones.

DESARROLLO DEL TRABAJO.

La labor que en un principio se desarrolló enla Agencia fué consecuencia de los ininterrum-pidos contactos personales ; y aunque, sin previoplan de trabajo, los problemas de regadíos y susposibles mejoras captaron la atención del perso-nal, influyendo activamente para que se llevara acabo la desecación de la Laguna de Regla, obraque se consiguió y que hoy está en cultivo deregadío.

Para la puesta en marcha de este proyecto—me-jora y fomento de pequeños regadíos—hacía faltaalgún material de sondeo con que realizar lostrabajos. Problema éste que rápidamente fué re-suelto por el asesor del S. E. A., señor Tejada,mediante la fabricación de una barrena de son-deo, cuyo coste fué subvencionado por las Her-mandades y Ayuntamiento de Chipiona. Esta ba-rrena fué un magnífico auxiliar para nuestro tra-bajo, ya que con ella se fueron realizando multi-tud de demostraciones prácticas. Una segunda ba-rrena de percusión completó todo nuestro mate-rial disponible para las perforaciones.

La búsqueda de la capa freática se realizabamediante perforaciones llevadas a cabo con lacitada barrena. Una vez tocado el preciado líqui-do, se procedía a determinar su salinidad y cali-dad para riego, bien por procedimientos rústicosde «paladeo» o, en casos dudosos, mediante suanálisis efectuado en la Jefatura Agronómica Pro-vincial. En los casos en los que el resultado delanálisis era satisfactorio, se procedía a la aperturadel pozo. Más tarde se determinaba el caudal.Posteriormente se procedía a la puesta en riegode las hectáreas que, con arreglo a ese caudal,podían atenderse, ya directamente o por cons-trucción de albercas.

Al mismo tiempo, la divulgación no cejó enningún momento, se celebraban reuniones sobreel tema y se repartían publicaciones.

En la feria de Rota, ario 1958, se estableció unstand y, con la colaboración de casas comercia-

La construcción del poro y la albercafacilitan el riego.

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Demostración con agua de pie.

les, se llevaron a cabo, además de una exposiciónde motores de riego y equipos de aspersión, múl-tiples demostraciones de métodos sobre el empleode los mismos, así como sistemas y modalidadesde riegos. De idéntica forma se realizó en Sanlú-car de Barrameda y en distintos pagos de la co-marca.

A los agricultores que lo requerían, se lesorientaba en la nivelación de los terrenos y se lesseñalaba el trazado de las acequias, aconsejándo-les también en las dimensiones de las tuberíaspara riego.

A petición de los interesados se tramitaron so-liictudes de crédito para transformación de susfincas en regadío, ante el Instituto Nacional deColonización, y constantemente se les ayudaba entodo cuanto se refería a las altas de sus motores ypeticiones de carburante a la jefatura Agronó-mica.

Las fincas transformadas han sido la piedra detoque para la divulgación de éste y otros proyec-tos, pues en ellas se han realizado campos dedivulgación de abonos, semillas selectas, etc.. etc.

Se ha trabajado y se continúa trabajando enla implantación de barreras vegetales cortavien-tos, que, paso a paso, se van extendiendo por lacomarca.

Y. por último, y a petición de los mismos agri-cultores, se celebraron dos cursillos sobre «Ma-nejo y cuidados de los motores de riego».

La atajea completa el sistema.

RESULTADOS.

Desde la fecha en que la Agencia viene funcio-nando, y como resultado de la intensa labor dedivulgación que se ha dado al proyecto, merecendestacarse las siguientes actividades:

Fincas visitadas 1.104Visitas a oficina 260Reunlones 10Consultas 908Demostraciones de método con grupos 30Asesoramientos en fincas 92Gestiones 22Peticiones al I. N C. 28Motores adquiridos 288Altas de motores 113Peticiones de carburante 113Sondeos realizados 69Aspersores adquiridos 12Pozos abiertos 83Visitas colectivas 3Hectáreas puestas en regadío, más de 700

Demostración de riego por aspersión.

Bastarían por sí solas estas cifras para podercalibrar la magnífica labor llevada a cabo parael desarrollo del proyecto.

Quizá parezcan insuficientes y se llegue a pen-sar que se podría haber hecho algo más, no cabeduda, mas ha y que tener en cuenta un hecho quehace modificarl muchas de las actividades previstas.Este es el carácter individualista de los agricul-tores, que, acentuado en grado superlativo en estacomarca, es obstáculo con el que hay que lucharla mayoría de las veces que se pretende modificaro implantar un moderno sistema o técnica, cual-quiera que sea su índole.

No obstante, hemos de tener en cuenta que eséste un proyecto que, encaminándolo concienzu-damente desde un principio, se expansiona por símismo, debido a los resultados tan sorprenden-tes obtenidos con la transformación de extensaszonas de secano en regadío.

Lo realizado hasta ahora reporta un beneficioincalculable a los propietarios de las fincas me-joradas, no sólo por el incremento de valor queéstas han tomado, sino porque bajo nuestro con-trol v asesoramiento han modificado sus sistemasde cultivo, introduciendo semillas desconocidasen la zona, abonado racionalmente hasta obtener

mayores resultados, y, lo que es más esencial, hanfacilitado la tarea de que el Servicio les ayude aayudarse a sí mismo.

VENTAJAS DE LOS PEQUEÑOS REGADÍOS.

Por sí solos, sin necesidad de más amplias expli-caciones, saltan a la vista las imponderables ven-tajas que para todos tiene la puesta en marcha deestos pequeños regadíos.

l'ara los particulares, porque de los beneficiosinseguros de un monocultivo, pasen con el riegoa unos ingresos más estabilizados, sin tener quesujetarse a las eventualidades climatológicas, noinfluyendo grandemente en él las diversas ape-tencias del mercado, así como la superabundanciade productos, ya que la posibilidad de cultivarplantas distintas son más amplias.

Y para la colectividad, porque sin gastos ni con-flictos para el Estado, se transforman en regadío,parcela a parcela, superficies considerables que nosolamente hacen posible una inmediata y variadaproducción, fundamental en la alimentación hu-mana, sino que puede llevar aparejado la creaciónde riquezas tan considerables como son la cons-trucción de acequias, canales, caminos y otrasmejoras íntimamente ligadas a aquéllos.

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