Guia Del Trotamundos - Galicia

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Transcript of Guia Del Trotamundos - Galicia

GUAS AZULES DE ESPAA S.A., 1997 Marqus de Monteagudo, 29. 28028 MADRID Reservados todos los derechos ISBN: 84-8023-134-3 Depsito Legal: M-19102-1996 Imprime: Grficas Rama, S.A. - Madrid

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Esta gua ha sido elaborada por: JESS GARCA MARN

Para la presente gua hemos contado con la valiosacolaboracin de doa CRISTINA MARA BAUZA DE MIRAB LPEZ. Prlogo J. Incio Alonso Surez. El captulo "Unas notas sobre el Camino de Santiago (y breve esbozo del mismo'lue escrito "sobre el terreno" por don Jos Mara Corts Verdaguer y, por un servidor, J.G.M. Agradecimientos: a don Manuel Fraga Iribarne, siempre interesado en todo lo que concierne a Galic a, por atendernos con su habitual cortesa en diversas ocasiones. Dedico el volumen a mis queridos, y adorados, P.A. GARCA MOLINA y T. MARN MUOZ, naturales de La Puerta de Segura.

La cartografa corri a cargo de Joaqun Gonzlez y Gloria del Rey.

PROLOGO

Abandonar Galicia es empezar a echar de menos los almiares y los hrreos. Es un particular mundo hecho de verde y de barrizal que va sucumbiendo ante el avance de la civilizacin uniformadora y mecnica. Es una suerte ser todava vctima de la torcida sonrisa de un gallego en medio de una escalera o de aquella seora de la aldea que se ofende si el plato no se vaca. An quedan romeras con empanada y gaita o procesiones del santio que toca con viejos endomingados con el paraguas colgado del cuello de la camisa o del bolsillo del pauelo. Es la Galicia donde subsiste el saludo a cinco pasos con un "Ola!" sonoro y con sonrisa. Pero no todo es miel sobre hojuelas; los acostumbrados al sol encontrarn la lluvia y el cielo encapotado y los enamorados de la lluvia no sern comprendidos, los que busquen Irlanda encontrarn Sicilia y los que busquen "primitivismo'' se encontrarn mucho siglo XX. Ya se ve poco zueco y testigo de excepcin ser quien vea un paisano con una coroza de paja en vez de chubasquero de plstico. Sin embargo, a estas alturas an sorprenden ciertos rasgos difciles de erradicar, como el sentido de la fiesta. Parece mentira que en un mundo de estirpe judeocristiana, justamente en uno de los ms potentes feudos del Vaticano (para mover Roma con Santiago) a veces la moral sea as de relajada, es como si la confianza de los jerarcas no se viera inquietada por la brisa pagana que lo envuelve todo. Ya se quej en su tiempo san Martn Dumiense, y es como si su labor se hubiera quedado a medias... y menos mal. Un buen recorrido por Galicia es de romera en verbena. Todas tienen su bandita de pasodobles y grupillos pachangueros a base de baffles desmelenados. Si uno se mueve bien encontrar fiestas del vino, fiestas del aguardiente y bastante ms. ltimamente resurgen las gaitas y los tamboriles y lleva a que el pblico agradezca unas cuantas mueiras, fandangos y jotas entre salsa caribea y baile espaol, coronadas por los aturuxos, ufidoso azos, gritero agudo indgena. Las iniciativas amorosas tampoco desmerecen, a la gente de all le gusta el calor humano, aunque todo bien aderezado con su rito, que tampoco es Jauja.

6 / GALICIA Se dice que Galicia tiene algo mgico, en el ambiente, en la connotacin que tradicionalmente se le ha prodigado, en su paisaje. Cuidado en las encrucijadas, pues no solo la Santa Compaa puede salir al paso. Deus bo, pero o demo non mau como se suele decir, y ello demuestra que conviven los opuestos, como la vida y la muerte, el mundo y el trasmundo. Ello supone que an persisten rasgos primitivos retracucidos por las mltiples influencias que ese pas recibi a lo largo de los siglos. Naturalmente algo complicado va a ser encontrarse con melgas, pero no sera difcil padecer alguna de esas enfermedades del alma de difcil comprensin para los de fuera como son las sombras, el tngano-mngano, el tangarao, los distintos males de corpo, de morto, de vivo o de aire, que no salen en los vademcums ni en tratados de medicinas y ante las que conviene estar vacunado. La magia de Galicia no es una cuestin de parapsiclogos agremiados, sino ms bien parte de su cultura y por tanto, pasin de etnlogos. As mismo se pueden encontrar distintas Galicias. no nicamente la martima y la terrestre, sino la montaesa, la ciudadana, la atrasada y la olvidada por todos, la exterior y la del exilio interior. Tal vez alguien ser capaz de darle las gracias al subdesarrollo y a la incomunicacin en que se sumi a los gallegos por haber conservado lo autntico, pero ello no fue en su tiempo la razn esgrimida por la autoridad. Si subsisten poblaciones sin luz elctrica al lado de embalses no es porque haya habido escasez de agua, y si para llegar a algn lugar o parroquia es necesario ir en todo-terreno no es por querer conservar los valores paisajsticos intactos. Es menester recordar que aquello es una periferia a la que se acude por movimiento pendular, y no exactamente el del Talgo. Otros pases guardan sus tradiciones porque su abundancia se lo permite y por eso se defiende su arquitectura y sus nombres, su economa tradicional y su gastronoma, y a Galicia le queda todava bastante que conseguir. Las ciudades grandes del reino, Vigo, La Corua, crecieron durante este siglo una enormidad. La primera no era ms que un pueblecito, no mucho ms grande que su parte antigua, y hoy es una urbe industrial y comercial. La Corua conserva el aire de ciudad de veraneo, ms elegante, que caracteriz a algunas villas tursticas del siglo pasado. As estas dos entran dentro de dos tipos de ciudades norteas, las del grupo de Bilbao, Gijn, Avils y las del grupo de San Sebastin, Santander, etc. Ourense y

PRLOGO/7 Lugo, junto con Pontevedra, Mondonedo, Betanzos, Ty, pertenecen a las ciudades provincianas (sin intencin de ofensa), como Len, Oviedo, Vitoria... cuyo crecimiento apenas empez en las ltimas dcadas y que todava conservan mucho de su encanto y tranquilidad. Ahora bien, aparte est el caso de Compostela, la perla de la cristiandad. Algo tiene que enamora, y por ello se dice que los gallegos estn enamorados de Compostela, mientras que las gallegas lo estn de Santiago. Es la ciudad ms autntica en muchos sentidos, todava se pasean los mayores con su boina y las mayores con su pauelo y con la cesta de la compra en la cabeza. En sus puestos del mercado se encuentran zuecos y chancas, justo al lado de edificios universitarios; no entra vergenza hablar gallego por la calle, cosa inusual entre el ciudadano de otras villas; hay una gran feria de ganado y sus calles rezuman de gente joven. Es una ciudad monopolizada por la Iglesia y otros poderes tcticos, pero est de continuo reivindicada por sectores que no comulgan, que inciden en la teima de sacudirse algunos yugos de encima. Es una ciudad inclasificable dentro de los grupos anteriores y con gran poder de atraccin. Desde luego, visitar Galicia sin caer por Compostela es como un bocadillo sin compango. La Galicia montaesa es la ms solitaria (tiene un crecimiento demogrfico negativo), no es una alta montaa cubierta de nieves eternas ni bosques de hayas (que, por cierto, es un rbol muy raro en Galicia), es la parte ms desconocida, si exceptuamos la fama que adquiri la serra dos Aneares, y la ms impenetrable. All todava hay lugares donde los visitantes pueden ser mal recibidos si llegan a horas nocturnas, porque no se sabe quin puede ser o qu cosa. Pero por suerte los eucaliptos no se aclimatan (por ahora) y todava ronda el lobo (y no por mucho). Sus hrreos son cuadrados y de madera como en Asturias y sus valles tienen un verde de otro color. Puede que sea la parte ms primitiva del pas que no acaba en su frontera, se adentra en el Bierzo hasta cerca de Ponferrada y por el norte hasta el ro Navia, y por ello tambin es la transicin entra Galicia y el resto del mundo. Conocidos son muchos gallegos como marineros y se disputan la fama con los vascos, los noruegos, los feroeses y los isleos. La costa es la zona ms fervorosa, ms colorista y ms folclrica. Los rostros de sus paisanos parten desde las oscuras mejillas pobladas de negras barbas cerca de los ojos y llegan a blancos rostros de ojos verdes y pelo claro. Se dice de ellos que

8 / GALICIA son muy solidarios entre s, y que al mismo tiempo son gente de poco fiar. Los veranos ya se han convertido en concurridos y el turismo masivo amenaza con plantar sus horrsonos hoteles con vistas a la puesta de sol. Mas todava las mujeres mariscan en horas de bajamar y defienden contundentemente su lugar de trabajo si algn turista osa buscar navajas bajo la arena en poca de veda, que curiosamente coincide con el verano. Con el verano tambin coincide el mejor clima y las visitas a las islas {Ces, Ons... ) donde hasta hace bien poco se poda estar lejos del mundanal ruido. Lo suyo es ir en da de mala mar y quedar aislado una semanita entera, de esta manera las islas son casi un paraso lleno de gaviotas, araos, cormoranes y otras aves pescadoras. Uno puede imaginar Amrica y cuntas millas marinas median, cuntos pasos por los caminos submarinos que cuentan las leyendas y que esperan el da en que se seque el ocano para mostrar las ciudades sumergidas en las que suenan las campanas las noches de temporal. Arriba, en la costa, los contrabandistas han reciclado ya sus negocios e incluso disponen de lanchas veloces para despistar a las autoridades, los petroleros encallan como por encanto y las fbricas de papel... qu se puede decir de las fbricas de papel? Decan los cronistas romanos que siguieron el avance de Dcimo Junio Bruto que un gran terror se apoder de sus huestes cuando haban de cruzar el ro Lethes, puesto que entre los indgenas galaicos exista la creencia segn la cual todo humano que atravesase sus aguas en llegando a la orilla, ms all, se olvidara de todo, incluso del universo. Eso sigue vigente hoy en da respecto a la fuente de Celanova: si uno bebe en su agua, durante los dos segundos siguientes perder la conciencia de existir, y famoso es el caso de un turista francs que en seguida que bebi mat a una seora que pasaba por su lado sin saber el pobre lo que estaba haciendo. Es el ineludible fin de los caminos, de la tierra. Para los antiguos esta afirmacin era ms trascendental que para los que acostumbran a viajar al Caribe en unas cuantas horas. A saber cuntos peregrinos del alma culminaron su viaje interior en la antesala de las aguas de la Estigia, cuntos hicieron su propio camino de Santiago y al llegar observaron con gozo que todo lo que qued atrs no era ms que recuerdo, que todos aquellos obstculos solo eran parte del pasado que nunca ms volver. Parecer increble que ms de dos millones de personas habiten en un pas que se olvid del mundo (y del que el mundo se olvid); por ello se debe de explicar

PROLOGO / 9 seguramente eso que los gallegos nombran como saudade, morria, seardade o sodades cuando estn lejos, ausentes. Tal vez por eso se explique que abandonar Galicia es empezar a echar de meros los almiares y los hrreos en los prados junto a las casas. J. Incio Alonso Surez

ANTES DEL VIAJE

PREFIJOS TELEFNICOSLa Corua/A Corua: 981. Lugo:982. Orense/Ourense: 988. Pontevedra: 986

OFICINAS DE INFORMACIN Y TURISMO FUERA DE GALICIA Casa de Galicia. Casa de Alisal, 8; tel. 595 42 14. Madrid. Tras los Jernimos. Personal sumamente amable.

DESPLAZARSE A GALICIA "Volando voy" Aeropuertos. La Corua-AWedro, a 9 km; tel. 23 22 40. Sanf/ago-Lavacolla, a 11 km: tel. 59 74 00. \Z/'go-Penador, a 7 km; tel. 48 74 10 48 74 09. Iberia. Inforiberia (91) 329 57 67. La Corua, Teresa Herrera, 1; tel. 22 60 24. Santiago, General Pardias, 36; tel. 59 41 04. Vigo, Marqus de Valladares, 17; tel. 25 28 66. Aviaco. A Corua, tel. 24 79 66. Vigo, tel. 48 76 25. Tren Al viajar con Rente no olvidis que hacen descuento los "das azules" para los billetes de ida y vuelta: desde un 20% hasta el 40% para universitarios, y el 60% para los que dispongan de la Tarjeta Joven de Rente. Tambin ofrecen rebaja con el carn Joven Euro 26. - Billetes a domicilio: Alicante, 96-520 13 42. Almera,

12 /GALICIA951-25 11 22. Cdiz, 956-26 21 04. Cartagena, 968-50 39 99. Castelln, 964-22 62 34. Ciudad Real, 926-23 05 43. Guadix, 958-66 06 25. Granada, 958-22 71 70. Huelva, 955-24 56 14. Murcia, 968-25 19 51. Puertollano, 926-41 14 50. Sor/a, 975-23 02 02. Valencia, 96-352 33 33. - Centrales de informacin. Barcelona, tel. 93-490 02 02. B//bao; tel. 94-423 86 23. Len, tel. 987-27 02 02. Madrid. 91-530 02 02. Sevilla, 95-441 41 11. Valencia, 96-352 02 02, Zaragoza. 976-28 02 02. - Reserva telefnica: Madrid: (91) 527 33 33. Sevilla: (95) 442 15 62. Estaciones de la RENFE en Galicia La Corua A Corua. Plaza de San Cristbal, s/n; tel. (981) 15 02 02. Informacin entre las 7:00 y 23:00 h (tel. 15 02 02). Consigna automtica (abierta de las 7:00 y las 22:00 h). Betanzos-Cidade. Informacin: tel. 77 24 02. Ferrol. Paseo de la Estacin, s/n; tel. 31 60 99. Consigna automtica (entre las 7.30 y las 20.30 h). Padrn, tel. 81 08 59. Santiago de Compostela. Hrreo, s/n; tel. 59 06 50. Consigna automtica (abierta de las 7.30 y las 22.30 h). Tui. Avenida de la Concordia; tel. 60 08 13 (Guillarei, tel. 60 11 09). Lugo Lugo. Plaza del Conde Fontao, s/n; tel. (982) 22 21 41. Consigna automtica: desde las 6:40 hasta las 14:40 y desde las 15:15 a las 23:25 h. Monforte de Lemos. Plaza de la Estacin, s/n; tel. 40 20 96. San Clodio-Quiroga. Carretera de San Pedro, 2. San Clodio de Ribas de Sil; tel. 42 88 01. Sarria. Calvo Sotelo, s/n; tel. 530 07 87. Ourense Ourense. Avenida de Marn, s/n; tel. (988) 21 35 36. Informacin: tel. (988) 21 02 02. A Ra-Petn. Circunvalacin, s/n; tel. 31 07 06. O Barco de Valdeorras. Calle Eloy Rodrguez Barrios, 2; tel. 32 03 30. Pontevedra Pontevedra. Alfrez Provisional, s/n; tel. (986) 85 13 13. Consigna automtica abierta desde las 6.00 h hasta las 22 h.

ANTES DEL VIAJE/13 Guillare}. Plaza de la Estacin, s/n; tel. 60 12 55. O Porrino. Estacin Rente, s/n. Tel. 33 03 07 Redondela. Avenida del Ferrocarril, s/n; tel. 40 06 07 40 18 18. Tui. Avenida de la Concordia, s/n; tel. 60 08 13. Vigo. Plaza de la Estacin de Ferrocarril, s/n; tel. 43 33 69. Informacin, tel. 43 11 14. Consigna automtica abierta desde las 6:00 hasta las 22:00 h. Vilagarcia de Arousa. Plaza de la Estacin, 2; tel. 50 16 01. Algunas rutas ferroviarias Os adelantamos algunas rutas. Los horarios, como sabis, varan y lo mejor es confirmarlos en los telfonos que os hemos adelantado. - Desde Madrid por Zamora, a Orense y desde all hasta La Corua pasando por Santiago. Desde Orense y Redondela arribaris a Vigo y dejando Redondela a Pontevedra. - Desde Alicante hasta Vigo o la Corua atravesando Albacete. Madrid, vila, Medina del Campo, Zamora, Orense y desde este enlace hasta Vigo por Redondela o bien hasta Santiago y La Corua. - Desde Barcelona a La Corua o Vigo por Zaragoza, Len, Monforte y desde all hasta La Corua y Vigo. - Desde Bilbao hasta La Corua por Miranda, Len, Monforte, Lugo u Orense y llegada a La Corua. - Desde Bilbao hasta Vigo por Miranda, Len, Monforte, Orense y... Vigo. - Desde Irn/San Sebastin hasta La Corua por Miranda, Len, Monforte y desde all, empalmando en el buen sentido, hasta Lugo, Orense, Vigo o La Corua. Regionales (trayectos en Galicia) Descuentos: Bono 10: abono mensual; por sacar el billete de ida y vuelta; carn Joven (20%)... G1.- A Corua / Vigo (ida y vuelta). Unas quince salidas diarias. Segn la hora pasa por los siguientes pueblos: Uxes, Bregua, Meirama... Padrn, Pontecesures, Catoira, Vilagarcia, Rubins, Pontevedra, Arcade, Cesantes, Redondela, Chapela, Vigo. G2.- Santiago / Orense (ida y vuelta). Cuatro trayectos (Santiago, Vedra... Laln, O Carballio, Maside, Ourense). G3.- Vigo / Orense / Monforte de Lemos (ida y vuelta).

14/GALICIAUnas seis salidas diarias (dos desde Monforte). Pasa por Redondela, O Porrino, Guillarei, Tui, Caldelas, Salvaterra, As Neves, Sela, Arbo... Ribadavia, Orense. Ferrocarriles de Va Estrecha Desde Santander hasta Oviedo, y desde Oviedo a Ferrol: dos al da (y otros dos para hacer el trayecto inverso). En general, una salida es por la maana temprano y otra pasado e medioda. Estaciones de la FEVE en Galicia: Ferrol, tel. 37 04 01. Narn, Estrada de Castela, tel. 39 03 13. Ortigueira tel. 42 22 01. San Sadurnio, tel. 49 03 10. Relaciones con Portugal Trayecto Vigo-Oporto. Unas tres salidas diarias. En unas tres horas os podis plantar en Oporto. El tren se detiene en Redondela, O Porrino, Guillarei, Ty, Valenca do Minho (Portugal), Vila Nova de Cerveira, Caminha, Ancora Praia, Viana do Castelo, Brraselas, Barcelos, Nine. Trofa, Ermesinde, Oporto. Autobuses Combinaciones prcticamente desde toda Espaa. Informacin sobre los horarios la obtendris con facilidad en los siguientes telfonos: La Corua. Estacin de autobuses; tel. 23 96 44 23 90 99. Calle Caballeros, s/n. Santiago. Estacin en San Caetano, s/n. Junto a uno de los macroedificios de la Xunta; tel. 58 77 00. Ferrol. Plaza de la Estacin, tel. 32 47 51. Lugo. Tel. 22 39 85; plaza de la Constitucin. Orense. Carretera Nacional de Vigo, barrio del Pino, s/n; tel. 21 60 27. Pontevedra. Tel. 85 24 08; Alfreces Provisionales, s/n. Vigo. Tel. 37 34 11; avenida de Madrid, s/n. Por carretera Si necesitis informacin puntual sobre las carreteras, los nuevos tramos, las obras que ltimamente se han terminado y los accesos o recesos hacia Galicia, podis llamar al MOPU (91 -553 16 00) o al 900-12 35 05 o a Tele Ruta: tel. 98-577 17 27 al (91) 535 22 22. Ayuda en Carretera: tel. (91) 742 11 13 742 12 13.

ANTES DEL VIAJE/15 Accesos por: el norte: N-632, N-634, N-640 y C-630 desde Asturias. Centro. N-VI desde Madrid y N-120 desde Len. Sur. N-525 desde Zamora.

DISTANCIAS KILOMTRICAS EN GALICIA

Desde La Corua hasta: ; Ares Arteixo Arza Baroa Betanzos Boiro Buo Cabana Camarias Cambre Camelle Carballo Cario Camota Carral Corme Corrubedo Culleredo Curts Cain Cedeira Cee Corcubin Escravitude Espritu Santo zaro Fene Ferrol Finisterre Iria Flavia Irixoa 60 km 11 km 90 km 116 km 23 km 108 km 43 km 67 km 85 km 12 km 83 km 33 km 115 km 114 km 19 km 63 km 127 km 6 km 56 km 22 km 95 km 93 km 95 km 77 km 18 km 100 km 54 km 67 km 105 km 81 km 37 km

16 /GALICIA

Labacolla Laracha Laxe Malpica Melde Mio Monfero Mugardos Muxa Muros Neda Negreira Noia Oleiros Ordes Ortigueira Oza de los Ros Padrn Perlo Pobra do Caramial Pontedeume Pontes de Garca Rodrguez Porto do Son Rianxo Ribeira (Santa Uxa) Sada San Andrs de Teixido San Sadurnio Santa Comba Santiago Serra de Outes Sobrado dos Monxes Suevos Trazo Valdovio Vila de Bares Vilarmaior Vimianzo Xubia

72 km 22 km 67 km 52 km 74 km 25 km 42 km 65 km 90 km 133 km 57 km 96 km 99 km 20 km 38 km 103 km 32 km 83 km 54 km 115 km 44 km 91 km 114 km 102 km 124 km 20 km 105 km 62 km 80 km 63 km 104 km 67 km 10 km 52 km 84 km 132 km 30 km 68 km 59 km

ANTES DEL VIAJE/17

Desde Lugo a : Barreiros Cervantes Cervo Chantada Folgoso do Courel Foz 0 Incio Meira Mondoedo Monforte de Lemos Pantn Pedrafita A Pontenova Portomarn Ribateo Samos Sarria 0 Valadouro 0 Vicedo Vilalba Viveiro Xove Burela (Cervo) 0 Cebreiro (Pedrafita) Desde Ourense a: Allariz Bande Baos de Molgas Barco de Valdeorras 0 Carballio Castro Caldelas Castromao Celanova Cortegada Entnmo Xinzo de Limia 21 km 42 km 36 km 112 km 29 km 51 km 31 km 29 km 54 km 72 km 40 km 84 km 57 km 116 km 58 km 105 km 90 km 49 km 35 km 64 km 64 km 72 km 73 km 56 km 29 km 104 km 42 km 31 km 86 km 113 km 35 km 95 km 104 km 101 km 80 km

18 /GALICIA

A Gudia Leiro Lobios Maceda Manzaneda Maside Montederramo Ose ira Portela d'Home Pobra de Trives Ponte Barxas Ribadavia Ra-Petn Santa Comba de Bande San Esteban de Ribas de S. San Pedro de Rocas Vern Viana do Bolo Desde Pontevedra a: Argolada Arbo Baiona Barro Bueu Caldas de Reis Cambados Campo Lameiro Cangas A Caiza Catoira Cerdedo Cotobade Covelo Crecente Cuntis Dozn A Estrada Fo rca rey

111 km 40 km 60 km 27 km S5 km 25 km 45 km 35 km 84 km 76 km 61 km 30 km 98 km 57 km 32 km 23 km 73 km 116 km

97 km 74 km 55 km 12 km 19 km 21 km 26 km 20 km 26 km 60 km 35 km 35 km 19 km 68 km 85 km 29 km 100 km 42 km 48 km

ANTES DEL VIAJE/19

Fornelos de Montes Gondomar 0 Grove A Guarda Laln A Lama Marn Meao Meis Moaa Mondariz Mondarz Balneario Morana Mos As Neves Nigrn Oa Poio Ponteareas Pontecaldelas Pontecesures Porrino Portas Redondela Ribadumia Rodeiro 0 Rosal Salceda de Caselas Salvatierra de Mio Sanxenxo Silleda Soutomaior Tomio Tui Valga Vigo Vilaboa Vila de Cruces Vilagarca de Arousa Vilanova de Arousa

28 km 53 km 31 km 75 km 86 km 24 km 7 km 19 km 14 km 26 km 45 km 43 km 21 km 35 Km 64 km 49 km 74 km 4 km 46 km 17 km 35 km 34 km 22 km 20 km 22 km 89 km 76 km 46 km 54 km 17 km 65 km 15 km 60 km 47 km 33 km 34 km 8 km 84 km 25 km 28 km

22 / GALICIA Autostop Si os decids por este medio de transporte, elegiris entre dos opciones. La primera, quedarse al borde del camino y salga el sol por Antequera; ya sabis que en este caso debis tomar algunas precauciones al elegir vuestro chfer y si sois chicas extremar la prudencia al mximo. La segunda consiste en una especie de autostop concertado; esto es, buscar las agencias que se dedican a poner en contacto a "gente con coche" y a los viajeros, generalmente compartiendo gastos de gasolina. Algunas direcciones son las siguientes: A Dedo (Estudio, 9; tel. 265 65 65; Madrid); Barnastops-Comparco (Pintor Fortuny, 21; Barcelona); Iberestop Sevilla (Marco Sancho, 24; tel. 438 82 80); Astustop Asturias (tel. 521 01 15); Iberstop Santiago (tel. 59 95 12).

CARNES PARA OBTENER DESCUENTOSCarn de estudiante. Se puede obtener en el TIVE, oficinas de viaje que dependen del Instituto de la Juventud y para ello se requiere estar cursando BUP, FP, estudios superiores o idiomas a curso completo. Os proporcionar algunos descuentos que merecen la pena. Carn de alberguista. A sacar en el departamento de Juventud o de Cultura de cualquier comunidad autnoma o en el TIVE. Tiene un ao de validez. Carn Joven Euro 26. Para conseguir ofertas "tanto culturales como deportivas y musicales". Adems podis conseguir descuentos en los transportes. Carn Internacional de campings. Gracias al que se obtienen rebajas en algunas de estas instalaciones y en la compra de material deportivo o de acampada (Federacin Espaola de Campings, tel. 91-542 10 89).

TIVE Y OFICINAS DE INFORMACIN JUVENIL Algunas direccionesMadrid. Jos Ortega y Gasset, 71 (tel. 401 95 70). Fernando el Catlico, 88; tel. 543 02 08. Barcelona. Gravina, 1;

ANTES DEL VIAJE / 23 tel. 302 06 82. Bilbao. Gran Va, 50, 7S; tel. 441 42 77. Sevilla. Avenida Reina de las Mercedes, 53; tel. 461 31 88. Zaragoza. Residencia Paraso, 4. Local 40; tel. 21 83 15. Las Palmas. Toms Morales, 48; tel. 36 91 96. Len. Conde Guillen, 2; tel. 36 91 96. En Galicia La Corua. Duran Loriga, 9; tel. 23 13 36 22 19 54. Santiago de Compostela. Centro de Coordinacin Juvenil; praza Matadoiro, s/n; tel. 58 39 00. Consello Galego da Xuventude: Repblica del Salvador, 1; tel. 56 28 05. Lugo. Pintor Corredoira, 1; tel. 22 54 51. Ourense. Avda. de la Habana, 107; tel. 25 00 25 25 07 07. Pontevedra. Benito Corbal, 47; tel. 85 07 08. Vigo. Repblica del Uruguay, 15; tel. 22 61 17. Ferrol. Magdalena, 123; tel. 35 68 94.

ALBERGUESSi habis decidido utilizar los albergues juveniles, necesitaris la tarjeta de la Asociacin de Albergues (R.E. A. J. - I.Y.H.F.). En La Corua Gandaro (a 2 km de Sada, direccin a Betanzos). En la orilla de una amplia playa. Capacidad: 300. Cocina-comedor, anfiteatro para fuego de campamento, biblioteca. Reservas: Cultura (Xunta), calle Duran Loriga, 9. La Corua. Tel. 79 10 05. Marina Espaola. Corbeiroa, 40 (Sada- Bergondo). En la ra de Betanzos. Capacidad: 110. Habitaciones con seis camas, cocina, comedor, sala de juegos... Informacin: tel. 62 01 18. Monte do Gozo (Santiago de Compostela). Carretera de Santiago, km 3. Tel. 55 89 42. Permanece abierto todo el ao. Trescientas plazas. En Lugo Area. En la playa de Area (limpia y con su bandera azul). Cerquita de Viveiro. En la entrada de la ra. Cocina, comedor, enfermera, habitaciones de cinco o seis plazas. Ms informacin y para apuntarse: Cultura (Xunta), calle Pintor Corredoira, 1. Tel. 56 08 51.

24 / GALICIA Benigno Quiroga. En Portomarn. Plazas: 30. Junto al embalse, a 315 m. Cocina, comedor, cafetera, servicios higinicos. Zona de acampada. Informacin: tel. 54 50 22. Hermanos iPedrosa. Espacio para 120 cabezas. Pintor Corredoira, 2 (a 200 m de la estacin de autobuses). Cuartos de cinco camas. Tel. 22 10 90. En el centro de la capital. Residencia juvenil Eijo de Garay. Pintor Corredoira, 4. Capacidad: 120. En las habitaciones caben tres. Cocina, comedor, enfermera, servicios higinicos, calefaccin. Tel. 22 04 50. Situado en Lugo. En Ourense Residencia Juvenil "Florentino Lpez Cuevillas". Avenida Prez Serantes, s/n. En el centro de la ciudad. Plazas: 100. Comedor, biblioteca, TV, calefaccin. Informacin: te!. 25 24 12. A Penalba. Nogueira de Ramun. Tel. 20 01 96. Abierto todo el ao, excepto julio y agosto. Treinta plazas. Monasterio de San Estevo de Ribas do Sil. Nogueira de Ramun. Tel. 22 10 54. Treinta y dos plazas. En Pontevedra As Sinas. Vilanova de Arousa. Con casi 150 plazas a cubierto. Cocina y comedor. Tel. 55 40 81 55 44 55. Residencia Juvenil Altamar. Unas cien plazas Cuartos con dos o con cuatro camas. Tel. 20 08 08. Vigo.

CAMPAMENTOSLa Corua Furelos. En Furelos (Melide). Cien plazas para tiendas de campaa. Comedor y enfermera. Tel. 50 74 12. Espieira. En Boiro. A 2 km de la playa y a 30 m de altitud. Cocina, almacenes, comedor de fortuna, talleres. Tel. 84 52 60. Caben, 125. Virgen de Loreto. Capacidad para 150. En la playa de la Aguiera (ra de Noia). Cocina, comedor, servicios higinicos. Tel. 76 75 87.

ANTES DEL VIAJE/25 Lugo Os Chacotes. En Palas de Re. Cien plazas en tiendas de campaa. Cocina y comedor. A Devesa. A 500 m de la playa. Plazas: 250. Tres pabellones dobles con 170 lechos, el resto puede dormir en tiendas de campaa. Cocina, comedor. Tel. 12 33 00. Ourense Entrimo. En el pueblo del mismo nombre. Cien pazas. Cocina y cernedor. Tel. 43 47 72. Slo abren durante los meses estivales. Pontevedra As Sinas. Altamar. Ponte Maril. En Forcarei. Doscientas plazas; cocina y comedor. Abierto en julio y agosto. Tel. 75 50 45. Illa de Ons. Plazas: 150. A nivel del mar. Cocina, comedor, playa, enfermera. Tel. 32 50 25. Campo de trabajo "Illas Ces". Cuarenta plazas; cocina. Hay que escribir a: Campo de Traballo "Illas Ces", Vigo. Pontevedra.

TURISMO ACTIVOAlqueidn: Os Anxeles. Brin, La Corua. Rutas ecuestres. Arrepins: Apdo. 119, tel. 60 30 09. Tui, Pontevedra. Rafting, kayac. Braa: Ctra. San Pedro de Rocas, tel. 29 01 37. Tarreirigo-Esgos, Orense. Excursiones por la Ribera Sagrada. Catamaranes: tel. (982) 24 29 22. Recorridos en catamarn (dos o tres horas) por los ros Mio y Sil. Galiciaventura: Manuel Pereira, 10; tel. 24 18 10. Orense. Senderismo y cicloturismo. Centro Granja O Castelo: Urziz, 91; tel. 42 59 37. Vigo. Ratting, rutas ecuestres, etc. Manzaneda: Pobra de Trlves; reservas, tel. 30 97 47. Montaismo, cicloturismo, senderismo, esqu, etc. Monroa: Carballeira, 1; tel. 73 00 32.0 Grove, Pontevedra. Rutas martimas por la ra de Arousa. Nortrek: Ins de Castro, 7; tel. 15 16 74. La Corua. Alpinismo, cicloturismo, excursiones.

26 / GALICIA O Almacen: Ctra. de Sargadelos, 2: tel. 55 78 36. Cervo, Lugo. Rutas en diligencia, rutas ecuestres. Polimar: en el muelle, tel. 24 84 22. Sada, La Corua. Viajes martimos por los alrededores de Sada. Reatur: Castelao, 11; tel. 44 20 06. Allariz, Orense. Piragismo, senderismo, rutasa caballo. Santa Apolonia: A Rocha-Posa Real; tel. 52 02 73. Santiago. Equitacin, cursos de hpica. Turnauga: Vilar, 14 (Callobre); tel. 55 6424. A Estrada (Pontevedra): descenso en piragua, cursos de submarinismo, etc. Turisverd: Apdo. 899; tel. 57 45 80. Santiago. Senderismo, mountain bike, equitacin. Federaciones Caza: Hrreo, 94; tel. 56 27 77, Santiago. Deportes Areos: Mar Verdiales, 18: tel. 22 53 94, Vgo. Montaismo: Celso Emilio Ferreiro 0: tel. 42 43 31, Vigo. Pesca: Riego del Agua, 9; tel. 22 28 92, La Corua. Piragismo: avda. de Corbaceiras, 58: tel. 84 21 06, Pontevedra.

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA

Tendida junto a mar... Galicia: dulce pena, encrucijada, confn. Lmite del mundo musulmn y fins terrae bordeado por peregrinos cristianos que caminaban sobre las mismas aceifas. Tierra de Historia y de mil y una historias. Galicia, la Portugal de Espaa, no muy lejos de Espaa, es uno de los pocos lugares donde el viajero todava, y desde hace mil aos, puede seguir s ntindose viajero. En Galicia os espera el comercio, el bebercio y si tenis suerte -que mritos no os faltan- el buen folgar, Y srvaos este nuevo Cdice Calixiino. orientativa gua del peregrino moderno o de Trotamundos, para que retocis a vuestras anchas en este "querido y melanclico reino". Palabras previas No vamos a intentar abordar en esta gua toda la riqueza que atesora Galicia, que es mucha. Ni explicaremos en su totalidad los monumentos, ni haremos recuentos; varios volmenes seran insuficientes. Solamente, y por poner un ejemplo, la descripcin pormenorizada de los monasterios e iglesias entre Monforte y la Ribeira Sacra exigira un centenar de pginas. Por otra parte, no queremos agobiar al viajero convirtiendo la gua en un farragoso e interminable vademcum. Quede claro que el trotamundos tendr aqu algo que leer y en Galicia mucho que descubrir y no digamos que husmear. Sirvan pues estas desenfadadas notas, con las carencias, omisiones y abusos que en sucesivas ediciones aadiremos y corregiremos, slo para abrir boca. Unos datos Mil doscientos kilmetros de costa, doscientos setenta y cinco kilmetros de arena y ochocientas playas; casi tres millones de habitantes y cien por km, un 70% viven en La Corua y Pontevedra. Ms de la mitad de los gallegos moran en el campo y la poblacin es denssima en las franjas costeras o prximas al

28 / GALICIA litoral. Trescientos municipios o concellos 3.786 parroquias y 30.000 pueblecitos... Actualmente tienen os gallegos su Xunta, o gobierno autnomo, y su divisin que viene de 1833 en La Corua (A Corua), Lugo, Orense (Ourense) y Pontevedra. Las citamos aqu por el orden alfabtico con que se suelen nombrar, pues dejando se probablemente no hay iiotivo para adelantar unas provincias sobre otras; ni su superficie: Lugo es mayor que La Corua, mientras Orense empequeece territorialmente a Pontevedra.

A Corua.- 7.930 Lugo.9.980 Ourense.7.278 Pontevedra.-4.477

km2 km2 km2 km2

Poblacin: Poblacin: Poblacin: Poblacin:

1.097.511 384,365 353,491 896,847

Galicia antes de ser Galicia No 1ue siempre una provincia-regin; los hrreos, el marisco, los percebes... y de postre Franco y otras gaitas, todo eso vino despus. En la Antigedad y para Estrabn, por poner un caso, era bien distinta cosa. Para ser exactos, la Lusitania se extenda entre La Corua y el Tajo. La romana Gallaecia llegaba hasta el Duero y ocupaba las tierras bercianas anteriores al botillo. Y como el mencionado, otros ejemplos enriquecen un pasado caracterizado por la frugalidad y en muchas pocas por carecer de fronteras y bordes... Clima Alta pluviometra, media 1,000 mm, que se acenta, por la altura de las montaas, en el corazn de la regin: Galicia es la zona de Espaa en la que ms llueve, de ah sus elevados ndices de humedad mecida por los vientos atlnticos. El clima, templado, es ligeramente continental en el interior y fro en las alturas. Podra calificarse de suave con oscilaciones trmicas inferiores a los 10 en la costa y cercanas a los 15o tierra adentro. Hace ms sol en el litoral sureo que en la costa norte; y un nmero de horas que, pese a lo que se piensa, no es pequeo. Agradable es recogerse en el invierno gallego al cuidado de una

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 29 lareira, y en verano este pas ofrece un buen refugio para quienes deseen escapar del extremoso calor. Galicia fuera de Galicia Aunque, con la precisin de la geografa poltica limita con Asturias, Len, Zamora; Galicia ''no tiene (por decirlo de alguna manera) fronteras precisas". Como nos contaban en el cole, sus casi 30.000 km2 de "Espaa hmeda", hoy salvo honrosas excepciones de "Espaa cada da ms desforestada", se prolongan sentimentalmente por la lengua (el galaico portugus) "y a la fuerza" er las tierras que separan al Mio del ro Azureira (cerca de Zamora) y a Galicia de Portugal. Lo portugus-galaico El pasado comunica nuestra regin con Portugal. Un lenguaje comn en la "poca de los celtas" -el lusitano- o una misma capital durante la monarqua sueva. La cultura megaltica tambin aliment esta relacin; y en el perodo romano, en ocasiones, territorios comunes y calzadas que unan umbllicalmente Astorga con Braga (Brcara, ciudad clave en la historia de Galicia). Haba, adems del francs, un Camino portugus para peregrinar hasta Compostela, etctera. Para que tengis una dea de las pocas fronteras histricas que separan a Galicia de Portugal os contaremos como Idacio "el Lmico", obispo de Chaves (ncleo lusitano prximo a Vern) aparece como gallego en casi todos los manuales (este individuo vivi entre el 395 y el 470 d. C. y tuvo el valor de viajar a Tierra Santa). Amrica, Amrica Los miembros e pedazos de Hespaa, que estaban por muchas partes derramados. Nebrija,1492 Adems de tener lazos con Portugal, Galicia estuvo unida al Nuevo Continente por la emigracin, de donde regresaron numerosos indianos o naturales enriquecidos en tierras de Ultramar, a la par que muchos campesinos abandonaban sus casas para buscar fortuna en la por entonces prspera Latinoamrica.

30 / GALICIA A "hacer las Amricas" fueron los gallegos en diversas oleadas. Eligieron principalmente Argentina, Cuba, Uruguay, Venezuela y Brasil. Entre 1861 y 1914, la emigracin alcanz su punto lgido. Muestra de lo sealado son las saudosas casas o crculos galleguistas que salpican el Nuevo Mundo. Lugares propicios para el folclore y el recuerdo. Eso s, entre hilillos de ribeiro para que cnticos y morria entren en calor; aunque, mediando la aoranza, la pregunta sigue en el aire: por qu los gallegos no son capaces de establecer en su tierra los 'imperios'' que si levantan fuera de ella?. Un amigo dice que el gallego trabaja fuera, pero que su tierra ni se loque: all el domin, la queimada, el pasado y la arcadia... La casa comn Tomaron, las casas galleguistas americanas, nuevo impulso con la llegada de exiliados gallegos durante o tras la guerra civil. Se fundan unas y se relanzan otras. Con claro origen antifascista naci la Casa de Galicia en Nueva York o las de Mjico y Uruguay: en Venezuela se cre la ermandade Galega. An hoy, de vez en cuando, los Amigos da Cocina Galega celebran semanas gastronmicas en Buenos Aires o Ro. Para los costarricenses la acepcin o voz gallego define a una especie de lagartija que vive en las orillas de los ros y nada con mucha rapidez (por algo ser). En Amrica, particularmente en Argentina, Bolivia y Puerto Rico, llaman ocasionalmente gallego a todo "espaolito andante", sin distinguir el origen autonmico o la procedencia exacta del gentilicio. Hecho, ste, de ningn modo inslito pues hay casi ms americanos de origen gallego que "gallegos en Galicia". El mtico Fidel Castro, o el ex presidente argentino Alfonsn, son ejemplos de tan singular estirpe. Exagerando o acertando, Buenos Aires o Montevideo son las grandes metrpolis gallegas (el mismsimo don Manuel Fraga tiene familiares en aquellas dos ciudades). Casos de varia historia Las fundaciones gallegas en Amrica conformaran lista interminable, como las urbes que en el Nuevo Mundo se llaman "Santiago" (unas veinticinco). Los PP dominicos en 1532 constituyeron la provincia de Santiago de Nueva Espaa. Tambin el Apstol, probablemente sin sospecharlo, hizo

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 31 milagros en Amrica. Hacia 1531, en picaziana batalla contra los chichimecas. se par el Sol eclipse dijeron los cientficos mas parece que el Santiago que menos nos gusta apareci en brioso coree!. En otras ocasiones, hasta los indios vean al Matamoros armado a caballo, con espada ensangrentada... tenanle por dios muy valiente. La ciudad de Rocha (Uruguay) fue fundada por gallegos y asturianos. En Mjico, aun siendo menos importante, la emigracin gallega tambin cuaj. Un buen ejemplo podra ser fray Jos Luis Soto, archivero de San Francisco de Celaya en Michoacn. Hay muchos ejemplos de gallegos esparcidos por esos mundos, que han hecho alguna cosa curiosa y tambin, otros, excepcionales, que han levantado en su tierra grandes empresas entrando posteriormente en Amrica por la puerta grande. Ejemplos: - En la dcada de los cuarenta don Luis Calvo Sanz. comerciante entonces dedicado a la distribucin de alubias que la comarca de Bergantios produca en cantidad y calidad, mont una pequea empresa conservera. Hoy, Calvo es una "multinacional" espaola (que raro suena) y el primer grupo atunero de nuestro pas. Trabajan con lomos del mejor atn (el llamado Yelowfin) que se pesca en el Atlntico y en el ndico; tienen una flota en las islas Seychelles. Los lomos de atn se preparan en Guanta (Venezuela), planta inaugurada en 1990. - Don Eliseo Torres, sobre quien hizo un reportaje Eduardo Lago, tiene ms de un milln y medio de libros en el Bronx, el barrio ms peligroso de Nueva York. Algunos consideran que tal amasijo de volmenes convierten a este local en el almacn con ms escritos en lengua castellana del mundo a la venta. Don Eliseo es, por supuesto, gallego y, como tal, hijo de emigrantes. Naci en Sameira(1920), muy cerquita de Pontevedra. Su padre fue a USA a buscarse la vida, trabaj en el gremio hostelero y ms tarde mand llamar a la familia. Lleg don Eliseo a los diecisiete aos, empez a comprar libros y a trapichear con ellos en la ciudad de los rascacielos: setenta aos despus como salido de un relato de Borges, acumula y acumula libros hasta que Dios quiera. Abrir Espaa Vicente Risco lleg a decir en 1917 que Orense estaba ms cerca de Nueva York que de Madrid. Y don Manuel Fraga ha

32 / GALICIA escrito, con razn poltica, que los gallegos son americanos por geografa y europeos por historia. Parece fundamentado aquel risquiano pensamiento. En ese sentido, antes de que Europa existiera como "dea", se cice que Santiago de Compostela fue la ms "europea" de las ciudades del Occidente, y su Camino -autntica arteria gallega- era frecuentado por legendarios y romnicos trotamundos, gente que, como vosotros, se acomodaron (hace "mil aos!") en las posadas de la ruta. Viajeros aqullos de mucho andar y ver, que peregrinaban a Compostela como los musulmanes a La Meca, viniendo desde los ms apartados confines. Las otras Galicias Os diremos tambin que son muchos los que asocian paisajsticamente a la pennsula de Cornualles, Gales, Bretaa o Irlanda con el norte espaol. Los elementos clticos o pre-clticos (castros, tmulos funerarios) o el llamado "bronce atlntico'' en algn case... invasiones normandas, los bosques, la frecuencia de las lluvias, la antigedad y desgaste de las montaas, el pastoreo... las relaciones histrico-martimas, lo escarpado (y profundo de algunas costas atlnticas), entre otros, son elementos que permiten tan urdida similitud. Una caracterstica que muchas veces se recuerda (en la relacin Galicia-Irlanda-Bretaa) es la abundancia de cruceiros en esos tres lugares. Con Gales y La Galia, Galicia tiene probablemente en comn la raz celta, si bien conviene precisar que la bonita historia por la cual hay pasado o comunidad sentimental de naciones con druidas, guerreros, bardos y jabales es de momento fbula.

GEOGRAFA, GEOLOGA Y PAISAJEAbunda lo verde, de acuerdo; pero no hay una Galicia sino varias: las tierras del Eo difieren de las lomas peladas de O Courel. Las Ras Bajas poco tienen en comn con Melide o Triacastela. Se puede comparar la Costa de la Muerte con la Chaira lucense o con la cuenca miota? Algo de geologa Extraordinariamente salvaje, se hace cada vez ms acci-

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 33 dentada, as describi Galicia el viajero Davillier (s. XIX). A lo sugerido por el gabacho habra que aadir otra caracterstica: los quinientos metros de altitud media de la regin, los contrastes, accidentes, lo variopinto del Macizo Galaico (aqu est el relieve ms viejo de Espaa), etc. Tierra de contrastes En genera -y son palabras de A. Prez Alberti- los contrastes se dan entre "la ribeka, las tierras que se emplazan en los valles de los ros, y la montaa, aquellas que estn por encima de ellos. O sea, que montaa es en Galicia todo aquello que no es valle ni costa". Veris que las montaas cuando chocan con el literal se recortan violenta o suavemente por accin de la erosin o de las ras... Lo que pisamos... Algo ms que pastos. Sobre todo es del primario. Se trata de materiales gneos y metamrficos antiguos y sobre ellos un paisaje muy roturado por el hombre. Bajo dicha alfombra descansan viejos macizos gastados por la erosin. Galicia es adems, geolgicamente, el resultado de muchas cosas y. sobre todo, de los pliegues hercinianos sobre los que actu la orogenia alpina. Os lo explicaremos en cristiano: un trozo de suelo, sobre todo grantico ese material del que estn hechos pazos e iglesias surgido por plegamientos que comenzaran hace mil millones de aos. Montaas El pas de los gallegos ms o menos se form hace unos 250 millones de aos, alcanzando con cierta influencia del movimiento alpino su actual configuracin. Las montaas aqu tambin muestran sus diferencias. Ejemplo: si vais por el centro-oeste, por Carballio, Chantada o el Val de Camba, estaris en la Serrado Faro, con una vertebracin de un millar de metros (Faro, 1.181 m). Continan estas elevaciones con altibajos en la Serra da Falaidora, con el Eume, entre Peota (871 m) y Cadramn (1.056 m), ya en las cercanas de la mtica punta de Estaca de Bares.

36 / GALICIA Galicia es, en resumidas cuentas, un gran zcalo de granito, con rocas cristalficas y algunas manchas de arcilla que rebrotan en terrenos ms jvenes camino de la Cordillera Cantbrica, de los Ancares y de los Montes de Len en el borde meseteo. Por cierto, el granito rosa de Porrio, pongamos por caso, se exporta a Italia. Como dato anecdtico os contaremos que son algunos ios edificios importantes que estn hechos con granito gallego; as ocurre con el Republic National Bank de Nueva York, y probablemente con la horrible ampliacin del Congreso de los Diputados (Madrid), una de as arquitecturas, cada madrugada obligados a verla, ms feas del orbe. Adems, no olvidemos que el granito, junto con la pesca y la Citroen, es una de las primeras fuentes de riqueza pontevedresas. Las mximas alturas de la regin son Pena Trevinca (Orense), Pea Rubia (Lugo) y en ei interior Cabezade Manzaneda. Por otra parte. Lugo y Orense poseen cimas que en numerosas ocasiones superan los mil metros. Las venas fluviales del "pas de los mil ros" Al tener abundantes precipitaciones surcan esta autonoma una nada desdeable y caudalosa red fluvial, generalmente, de curso corto. El Sil, Tambre, Eo... el Limia que mira a Santa Luca antes desaguar bajo pontana verde en la portuguesa Viana do Castelo; el Xallas que hasta hace poco verta torrencialmente sus aguas en el ocano... El Mio era (sigue siendo?) el primer ro espaol que, afortunadamente, nos obligaban a memorizar en el colegio. Desde su nacimiento recorre tres provincias y divida dos pases. Por la distribucin montaosa de la regin es caudal mayor, de ricas riberas y de buen vino y "ro muy cristiano en tiempos de moros". En su afluente, el Sil, que forma una ribera sagrada, aparecan monjes a cada paso y pepitas de oro con cierta asiduidad. Lleg a ser navegable hasta ms arriba de Ty. Sin embargo, las arenas, que han ido subiendo el lecho, lo han cegado para la navegacin con calado desde prcticamente su anchurosa y mesetea desembocadura de Caminha, vigilada por Santa Tecla. Los ros gallegos tienen mucho de mgicos. Bien que lo saba lvaro Cunquerio, recogi y pudo transcribir nada menos que la Epstola de Santiago Apstol a los salmones del Ulla:

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 37Los salmones rodeaban la barca, y saltaban unos sobre otros para mejor ver al Apstol, En aquella ocasin el Zebedeo predic a la poblacin fluvial: Y, si sabis alguna vez que viene a mi tumba, en Compostela, un peregrino fatigado y con el apetito que da el largo camino, no vacilis en sacrificaros, y no os importe que os cuezan, os pongan en parrilla, os trufen o empapilloten, o enteros vayis a un solemne pasteln envueltos en esa masa invernada en Alejandra y que llamamos hojaldre,

A propsito de lo anterior, escribe Torres Enciso, que San Antonio de Padua, est por ver si era de Padua, tambin predicaba a los peces en gallego. En el460 d. C, el cronista Idacio sealaba que se haban pescado en el Mio cuatro peces de aspecto nunca viste, con letras hebraicas y nmeros en latn. Con peces, tambin, aliment Pedro Gonzlez (San Telmo), tras hacer milagro, a unos albales suponemos que tudenses... Peces en los monasterios Ribera Sacra a un lado, muchos monasterios nacen en Galicia junto a los ros. El Mio comienza su vida junto al de Meira; el Tambre surge de la tierra mirando a los frailes de Sobrado. Otra de las cosas importantes de Galicia es su riqueza pisccola. Slo por ir a pescar a los pubs, o a los ros, vale la pena darse un corrido por estas tierras. Sin duda, la captura del salmn o la trucha en el Eume o en el Jubia constituyen un buen antdoto para los que tengis estrs. Los ros, por ltimo, han cegado puertos, cubierto pueblos y abiertos paisajes. Sin los ros, sin el Guadalimar, qu sera de nuestra infancia y de la costa gallega! Ras En imagen tpica, tras hacer el Mundo, y tomar una copa de albario, Dios se sent en l para descansar apoyando su mano en Galicia y formando con sus dedos las ras. No todas ellas tienen el mismo origen geolgico, unas nacieron a causa de los hundimientos hercinianos, posteriormente erosionados (Pontevedra, Vigo...); otras se han formado por corrosivas fuerzas fluviales, es el caso de la ra de Arousa, o por la transgresin marina. Uno de los primeros en entender cmo haban ido perfilndose estos brazos de mar fue el viajero alemn Ferdnand von Richthofen, quien public en 1866 una "Guia del viajero investigador".

38 / GALICIA Los nombres de las ras La primera, viniendo desde Asturias, por el largo puente de los Santos, es la de Ribadeo. Al occidente de este brazo se encuentran las ras de Foz, Viveiro, Barqueiro, la del Ortegal, Cedeira, Ferrol, Ares y Betanzos. Le sigue la de Corua y ms al sur encontraris las de Laxe, Camarias, Corcurbin, Lires, Muros, Noia, Arousa, Pontevedra, Vigo y Baiona. Tales arterias de agua o amorosas penetraciones del mar en la tierra, o de la tierra en el mar, son excelentes puertos naturales sobre todo en el caso de las calmosas Ras Bajas. En contraste con el interior, las ras estn densamente pobladas. El territorio Imaginad: las tierras de cultivo y los prados ocupan el 31 % de toda la Comunidad. La propiedad es minifundista, hay cerca de 360.000 explotaciones. El 6 1 % son terrenos forestales, aunque la regin ha sufrido histricamente una gran deforestacin (por ejemplo, en Foz los bosques fueron devastados, siglo XVII, para desarrollo de los astilleros). Los rboles autctonos se sustituyen por grandes manchas de eucaliptales al servicio de la industria papelera que, como es sabido, destroza el paisaje (ej.: las que hay cerca de Pontevedra). Por ir al grano, stos son algunos de los rboles que veris en Galicia, en la Sierra de San Mamede pongamos por caso:

Abriota Acebro o acebo Ameiro Arandeira Bido Cancereixo Carballo Carpaza Carqueixa Carrasco Castiero

Asphodelus abus vel ramosus llex aquifolium Alnus glutinosa Vaccinium myrtillus Betula alba Sorbus aucuparia vel Pyrus aucuparia Quercus toza Cistus hirsutus Pterospartum tridentatum Castanea sativa

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 39

Cerdeira Codeso Chougazo Edre o edra Fento Fial Freixo Merendeira Piorno Poitega Queiruga Salgueira Silvarda Sobreira Teixo Toxo Uz Xencia Xesta Xunquia d'algodon

Cerasus Cytisus Halimirum occidentale Heder Pteridium aquilinum Fraxinus Crocus vel Colchicum P us pinaster Cyiisus hypocistis Erica cinrea Salix aurita Rucus acuelatus Quercus sber Taxus baccata Ulex europaeus Erica arbrea Gentiana Sarothamus scoparius Eriophorum angustifolium

Puertos Galicia es la regin donde se concentran ms puertos de toda la Unin Europea. Riqueza pasada, pobreza presente. Pensamiento: pinta algo Espaa en la CEE o en las aguas internacionales cercanas al Canad?

LOS GALLEGOS, MANERAS Y COSTUMBRES Ser gallegoComo es de suponer, no hay, en lo humano, un tipo gallego, s un mestizaje de varias oleadas y un flujo de gentes: eso es el gallego:De dnde sois? Soy gallego Y yo, hablando con perdn Por cierto, buena nacin

40 / GALICIA Las definiciones del carcter de los naturales de un pas suelen estar llenas de tonteras. Se ha dicho que el gallego es cauto, conformista, zorro, desconfiado. Los gallegos son los parias de Espaa, los que hacen los peores trabajos, los humildes segadores que tras la labor depositaban la hoz gastada a los pies de la Virgen. Los galaicos, tambin se argumenta, son escpticos, con sentido del humor. El gallego ha escrito atinadamente Jorge Vctor Sueiro es insolldario sobre la propia tierra (capaz de ir a la ruina por el lindero de una finca) y profundamente solidario fuera de ella. Adems, son individuos tradicionales, dialogantes con sus antepasados y nimas; amantes, por ser sociedad rural, de la familia. Tal vez resulte excesiva la opinin de Baraja cuanao los calific de maliciosos y suspicaces. Vicente Risco (1937) sostena, amargamente, que los gallegos llegaron a formarse un complejo de inferioridad, sintieron vergenza de ellos mismos y de Galicia; vergenza de su lengua, costumbres y vestidos, de sus casas. Se convirtieron en un pueblo suplicante... fueron dejando morir sus tradiciones (todo aquel mundo parece que ha cambiado). Pobreza y riqueza Hoy coyunturalmente prspera, ayer sta fue una de las regiones ms pobres de Europa. Vsnga el gallego a segar miserable jornalero que los hombres de Castilla tienen el trabajo a menos. Todos los viajeros dedicaron muchos prrafos a glosar el subdesarrollo de Galicia. Mnzer, en 1494, tachaba a los gallegos de "gente perezosa y puerca". Abulfeda (1321) de ellos contaba que "no se limpian en agua fra sino una o dos veces al ao". A mediados del siglo XIX algunos escritores encontraron a los gallegos andrajosos, con jirones y harapientos, ms pauprrimos que los irlandeses indigentes. Misero mundo que lanz al galleguio fuera de su patria y explica su secular emigracin. Cadalso (1770) escribi que "en medio de la pobreza de su tierra son robustos; se esparcen por toda Espaa a emprender los trabajos ms duros". Tan cochambrosas opiniones se dieron a partir del si-

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 41 glo XIV. Antes, en el medioevo, los gallegos eran lo contrario. En el Codex Callixtinus leemos que tenan costumbres cultas como los franceses. Segn Alonso Montero, cuando las visitas al Apstol decaen, comienza el xodo de una parte del pueblo galaico (segadores, emigrantes, afiladores...). No obstante, es la realidad la que acierta: en 1837 todava abundaban los casos de lepra en Galicia, la poca alimentacin y la falta de higiene eran la causa de muchos males: Vendronlleosbois vendronlleas vacas, O pote do caldo Y-a manta da cama ARQUITECTURAS DE GALICIA Ciudades sumergidas Cunqueiro es el gran mitlogo que se ha ocupado de recoger cuanto se supone sobre numerosos pueblos y urbes pasadas por agua. El rio Limia nace en la laguna de Antela, bajo ella estara sumergida la Antioqua de Galicia. En la falda de Monte Faro, la laguna de Carracedo ocult la ciudad de Arenas o Estaban. La Costa de la Muerte esconde la fantasmal civitas romana de Dugium, ciudad intuida o soada, asolagada. La casa rural En este punto damos la palabra a nuestro especialista, Manolo Prez Buide: la casa rural gallega, en general, utiliza granito y pizarra para sus muros y tejados; y pino, roble y castao para suelos, tabiques y vigas. A grandes rasgos podemos encontrar tres tipologas bsicas: Casa lucense: rectangular, sobria y uniforme; de lnea simple y dos plantas. Hasta hace unos aos, la planta baja ocupaba la cocina y los establos; en la actualidad, el espacio para el ganado se extiende en cuerpos adosados con ms o menos acierto (frecuentemente uralita, ladrillo y cemento). Muros y cubierta de pizarra, y como caracterstica unas piedras de forma cnica o piramidal que se ponen en el tejado para asegurar las lajas de pizarra. Estas viviendas las veris en vuestros paseos por Castro de Rei, Cospeito, Xusts... por la Chaira, etc.

42/GALICIACasa coruesa: rectangular, habitualmente compuesta por dos plantas y con construcciones auxiliares adosadas. Cubierta a dos aguas, muros de manipostera, y hrreo de piedra o madera, ms granero-pajar-garaje. Pueden hallarse en tode la provincia. Casa marinera: tambin de planta rectangular, de dos o tres pisos, fachada lisa dotada de acristaladas galeras. Piedra, y pizarra de la costa lucense, tanto para los muros como para tejados; arcos, columnas y vigas de granito que forman acogedores soportales donde se desarrollan las diarias actividades sin temor a los persistentes orballos. Sobra decir que de estas tradicionales construcciones cada vez quedan menos ejemplos en favor de las porqueras que suelen construir los arquitectos modernos. Galeras y cristaleras Media Galicia litoral e interior, por lo de la lluvia constante, muestra casas con miradores. Las galeras, desde mediados del siglo XIX, son el signo de identidad edilicia de, por ejemplo, La Corua. Algunos estudiosos sospechan que su origen habra que buscarlo en la construccin naval ferrolana. Suelen mostrarse de blanco y con ventanas de guillotina. Por su tipologa favorecen la luminosidad, hacen ms espaciosas las moradas y ms agradable la vida veraniega. Comenzaron a decorar la costa atlntica y cantbrica espaola durante el primer cuarto de la pasadla centuria. El hrreo Lo comprobaris, buena parte del paisaje gallego relaja la vista... excepciones?: los acostumbrados desastres urbansticos, incendios, cambios en los cultivos arbreos autctonos (proliferacin del pino y del eucalipto sobre el roble y el castao, por ejemplo), y tambin su contrapeso: los pueblecitos, hrreos, pazos, pallozas, los conjuntos monumentales (Allariz) o los mgicos (San Andrs de Teixido), etctera. Fijaos, tambin, en cmo articulan el grantico espacio galaico rsticas casas desparramadas por la marina y los valles. Se trata de minsculos y dispersos "lugarejos de pizarra", ms o menos rodeados de minifundios, con castras en las cercanas, toscamente cercados, entrelazados los unos con los otros por la

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 43 parroquia y casi siempre por una construccin caracterstica: los hrreos coronados por una o dos crucecitas, hay ms de cien mil en Galicia. Efectivamente, para madurar y proteger el maz, la cosecha y el grano de la aldea, de humedades y ratas, el portugus, el asturiano y el gallego -cada uno a su manera- reinventaron o adaptaron el granero cercano a su vivienda. Sobre cuatro pilares en el aire o pegollos, o sobre podios o celeiros. dispusieron una base reciangular, cuadrangular en la Galicia ms Interior, y sobre ella una caja de madera o de piedras, con rendijas o pasaventos. cubierta con tejado a dos aguas, o a cuatro aguas, y en ocasiones con capas de paja. A ttulo de curiosidad, noticias sobre el hrreo se leen en las clebres Cantigas de Alfonso X el Sabio. En un pie miniado de tan maravilloso e Iluminado manuscrito "descrbese como los monjes se encontraron el otro da los hrreos llenos de trigo". En los siglos medievales muchos hrreos eran comunales. Os orreos. adems, son parcos en ornamentacin, suelen estar decoradas por una cruz y en el otro extremo llevan frecuentemente motivos paganos (conos, pirmides, smbolos flicos o relativos a la fecundidad). De hecho, algunos piensan que su origen procede de los palafitos. El mayor hrreo de Galicia no est, como habltualmente se escribe, en Camota, le supera, por ejemplo, el de Arao (no lejos de Rlanxo). Pazos Los gallegos han tenido sobre sus cabezas dos afiladas espadas: la Iglesia y los seores. La primera levant monasterios, los segundos terminaran edificanzo pazos. Ambas tipologas constructivas deambulan y caracterizan el paisaje y constituyen un smbolo ms de las relaciones sociales de produccin. Fueron primero los pazos fincas de nobles para terminar en manos de nuevos ricos. Comenzaron a levantarse en el siglo XVI y se desarrollaron en el siglo XVII, aunque su "aparato ornamental" alcanz refinamiento con el impulso que para la vida agraria signific la revolucin tcnica dieciochesca. Pazos: verdaderos ncleos desde donde los seores repriman o expriman al campesinado, algunos tienen su origen estructural -distinto segn dnde y cmo se encuentren- en torreones de defensa o edificaciones medievales. Desde ellos, el

44 / GALICIA dueo como un perro con sus orines marcaba territorio y habitadores con particular precisin... Durante vuestro viaje veris lo que muchos artistas annimos han sido capaces de remozar o levantar en los pazos, recurriendo para ello a la escenografa gtica o barroca, o historicista as descrita por don Carlos Martnez Barbeito:arcadas, columnatas y balaustradas historiadas, palmes para ascender por fuera a la planta superior, escudos ostentosos (...) y les aadieron abundantes cuarteles expresivos de las alianzas familiares, potentes mnsulas sustentadoras de balcones, fuertes ms o menos monumentales, capillas, jardines de buena traza..."

Curiosamente, desde mediados del siglo XIX, los seores, en ocasiones hidalguillos sin guita, se empiezan a aburrir en estas autnticas "torres de cristal" o no pueden mantenerlas. Las abandonan, las despachan o les dan el consabido aire de segunda residencia marchndose a marear a las ciudades. Hecho, ese de irse a la urbe, que de ningn modo equivale a sealar el carcter exclusivamente rural de los pazos. Los hay tambin "ciudadanos". Un ejemplo lo tenis en Cambados (Pontevedra); otro, en el pazo de Cstrelos (Vigo). Resumiendo: son tan labradas arquitecturas vestigios del esplendor pasado y, hoy, razn suficiente para que merodis por Sistallo, Alio, Gondomar, Oca, Marin, lo que queda de Meirs, Fefianes. En general, los de la costa son ms refinados que los montaeros o los del interior. Hay tantos como hubo amos y en todas partes. Si no los buscis, igualmente los encontraris. Encrucijadas y cruceiros O cruz de piedra que se coloca en el cruce de los caminos o en las plazas, huertos, atrios o espacios porticados de las iglesias. Algunas son muy vistosas y estn tallados en una o en pocas piezas de piedra. Siguiendo las tradiciones populares, las meigas o brujas utilizaban los cruceiros para invocar al Mal y poner en prctica sus hechizos y an hay quien afirma que oler a cera en una encrucijada anuncia la muerte. Para los trotamundos de otra poca, este poste era punto de referencia en sus desventuras camino de Compostela o de donde fuere... pues entonces -y los primeros cruceiros gticos datan de los siglos XIV/XV- no haba sealizaciones y el trfico en

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 45 carro o "en el coche de San Fernando" se regulaba piadosamente avistando tmulos con escenas relativas a las nimas, a os ngeles y otros santios, a la Virgen o a a Pasin de Jesucrito.Para os artistas canteiro -cuenta Castelao-, Xesucristo sempre pequeo, sempre c Neno, porque o Filio...

Adems del arte que llevan implcitos, los cruceiros fueron inmortalizados por el mencionado Castelao (1886-1950) en As cruces de pedra na Galiza, estudio cientfico, artstico y literario de tan peculiares monumentos. Castelao escribi:Onde hai un cruceiro hubo sempre un pecado, e cada crucei rounha oracin de pedra que fixobaixar jn perdn doCeo...

En los cruceiros puede aparecer la Santa Compaa, frente a ellos se detienen los entierros. La cruz protege al viandante, pues en las encrucijadas, ojo avizor, anda el diablo en busca de algn desprevenido... Por ltimo, se reparten Galicia numerosos petos de nimas, en los que el viandante, sin pensarlo dos veces, debe dejar una limosna para las almas en pena. Otras construcciones Adega: donde se elabora y se tiene el vino. Albariza: muro circular que protege las colmenas de los animales y del viento. Alpendre o combarrizo: lugar para amontonar la lea y guardar los aperos de labranza. Batanes: las correntas mueven unos mazos con los que se golpea el lino. Corte: sirve de cobijo para el ganado. Forno: donde se hace el pan. Hrreo: tambin denominado cabazo, sequeiro, piorno, etc. Muos o molinos: repartidos en toda Galicia; sus rodicios giran al ritmo de ros y arroyos, y mueven la moa que tritura el grano. Palleiras: espacio para almacenar la hierba. Poleiro: morada de aves. Pombales: palomares, tan numerosos como los hrreos Socalcos: terrazas en las que se cultiva la vid

46 / GALICIA LAS TRADICIONES POPULARESEstamos en una regin rica en tradiciones ancestrales, aunque stas se van perdiendo y casi no se practican Una embarazada, por ejemplo, debe cumplir a rajatabla todos sus antojos y no comer trucha para que el futuro nio no duerma con los ojos abiertos. En algunos sitios al nacer el beb -lo cuenta Antonio Fraguas- se le prepara el primer bao y se pone en l una moneda de plata. Cuando al infante le cae el primer diente hay que tener cuidado no vaya a ser que se lo coma una gallina. Si ei nene est muy delgado, la creencia dice que una chupptera bruja es la culpable. Para los casamientos y para solicitar la necesaria descendencia es imprescindible que el ramo de los consortes sea de color verde. Afectan, las tradiciones, a los aspectos ms cotidianos. Los nios, por ejemplo, son rapaces hasta que se convierten en mozos, condicin que se adquiere cuando uno es aprendiz, empalma y puede asistir a las fiestas de su comarca a toquetear a las mozas (o a los mozos). La muerte, por ltimo, es una de las manifestaciones que ms impregna la mitologa gallega, la predicen ciertos aullidos de perro, un cuervo sobrevolando el lugar y multitud de visiones del extramundo con difuntos. Santa Compaa Viene a ser la crnica de una muerte anunciada. Procesin de fantasmas y almas en pena que recorren caminos y corredoiras. Son cinco espritus, individuo cojuelo inclusive, que todas las noches recorren, partiendo desde la iglesia, la parroquia. Acompaan los cortejos fnebres y quien los ve contempla la figura del que va a morir tras el atad. Hay muchas formas de librarse de ella (con agua bendita o colgando un farol en el cuello de un perro, etc.). Brujas y meigas Durante la Historia Moderna (s. XVI-XVIII), para muchos inquisidores Galicia, era en un lugar de supersticiones y encantamientos.

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA/ 47 Agua bendita vente aqu, sapos y meigas "ueraaeaqu. Como sabis estamos en el pas de las meigas que haberlas al menos las hubo tal y como se deduce de algunos procesos inquisitoriales y pegatinas que pueden comprarse, por ejemplo, en las tiendas de souvenirs de Santiago. Los curanderos La brujera en Galicia est popularmente relacionada con el curanderismo (curandeiros) y las necesidades por las que pasaba el personal en unas centurias en las que casi nada tena remedio. Nosotros, que somos medio curanderos, propondremos algunas soluciones "a la gallega": si os hacis una herida poneos una infusin de malvas; de quedarse calvos convendra llenar los claros con cagarros de palomo previamente convertidos en suculento caldo; siete trapos rojos pasados por la boca terminan con una infeccin bucal etc. Raz d anciana todo sana, menos dor da morte que e moi forte

Lobishomes y duendes Figuras fantsticas de la iconografa gallega, lobishomes lucenses u hombres alobados. Ese gran actor que es Jos Luis Lpez Vzquez represent en una memorable pelcula a uno de esos simpticos licntropos con quien conviene no cruzarse. Otro ilustre representante de la geografa mgica gallegas es el gnomo o mouro, una especie de mago sempiterno que sigue arreglando o complicando entuertos en el Tiempo y en el espacio gallego (vinieron os mouros arrenegados). Curandeiros, narcos, montaas mgicas (como los Ancares), mouros, meigas, druidas, polticos... la magia en la Galicia cotidiana est bien reflejada en la novela del dickensiano Wenceslao Fernndez Flrez, El bosque animado; recrea parajes frondosos de Cecebre (puede ser tan extraordinario libro un buen compaero en vuestras anderas por Galicia).

48 / GALICIA Los entroidos (carnaval) Acontecen coincidiendo con los das del carnaval, aunque no tiene relacin con doa Carnal. Se trata de una celebracin milenaria y pagana, seguramente de origen romano. Colorido y cencerradas, festejos que cubren buena parte de las aldeas gallegas. Se ha dicho que es la fiesta de la Galicia profunda: las mascaradas al son de los tambores, bombos, panderos, binchas y esquilas. El territorio en el que con ms furor y atavismo se celebra el carnaval es el triangulo comprendido entre Xlnzo de Limia. Verin y Viana do Bolo (con a aldea de Laza). Los holgorios duran de domingo a martes de entroido, en algunas comarcas pueden alcanzar el mes. A la hora de la pitanza es obligado tomarse unas cabezas de cerdo, lacn, chorizos y la androia o btelo (un embutido). Algunos personajes del entroido - Felos (Maside, Orense). Visten guerreras con doradas y muy vistosas charreteras, montan sobre potros con plumacho. - Gamainchinos(Betanzos). Diabletes emperifollados que castigan divirtiendo a la concurrencia. - Generales del Ulla. Trotan en los amplios alrededores de Compostela (en Silleda por ejemplo): jinetes con uniformes napolenicos. - Piliqueiros o peliqueiros (Laza). Lucen una pulcra chaquetilla goyesca, corbata, calzas cortas con pompones colgantes, cinturn de cencerros, careta coloreada y gorro napolenico. - Sbanas (Viveiro). El populacho se envuelve con sbanas blancas, zascandilea y entretiene a la concurrencia. - Volantes. Personaje que aparece en los entroidos de la ribera del Mio y en las hondonadas verdes de Chantada. Llevan mscaras y pantalones al estilo florentino y cinturn de esquilas que tintinea sin cesar.

UN POCO DE HISTORIA Los "primeros gallegos" Pocos datos hay sobre el primer hombre y las primitivas

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 49 comunidades humanas asentadas en Galicia, aunque en esta regin se concentr, al parecer, buena parte de la poblacin europea. Por ahora, cientficamente, no se puede buscar ocupacin humana anterior al complejo achelense. Los gallegos del 26.000 a.C. pudieron subir del sur, desde la costa portuguesa, fueron cazadores y recolectores que resp raron entre los cambios climticos cuaternarios. Sobre la fauna que recorra este norte de Espaa casi nada se sabe. Se ha encontrado un molar de caballo y en la tierra lucense restos de un mamut. No obstante, abundan los cantos rodadcs y los yacimientos paleolticos. Las ltimas excavaciones de E. Aguirre en As Gndaras, ha escrito Blanco Freijeiro. revelar, ta evidencia de Galicia como piedra angular de la fachada atlntica en que se cobija de las inclemencias de! tiempo durante los fros del Paleoltico Superior una gran parte de la humanidad. El megalitismo El mesoltico (5.000-3.000 a. C.) trajo consigo la pesca y el marisqueo, o una racionalizacin de estas actividades productivas. Durante el neoltico (3.000-2.000 a.C.) ms evidentes son las grandes piedras: menhires dispuestos de diferentes maneras, los dlmenes, mmoas y los tmulos funerarios. De todas formas, estamos ante una cultura remontable, por ahora, al 4.000 a. C. y cuyo origen, ms que en el Mediterrneo oriental habra que buscarlo en la fachada atlntica. El desarrollo del megalitismo, por ganaderos y agricul:ores, est probablemente unido a la ruta atlntica del estao. Galicia, rica tierra metalfera, con cobre, el mencionado estao y oro, era un lugar de frecuente visita y de cruce. En este mbito mtico de riquezas aurferas habra que instalar las posibles relaciones entre el pas gallego y Tartesos. Costumbres neolticas Todava se mantienen en algunos ncleos de nuestra querida Galicia costumbres a lo mejor neolticas: los bailes en noche de luna, los cultos de plenilunio. "Las gentes sensatas ha escrito Fernando Snchez Drag evitan raparse en cuarto creciente o novilunio, porque con ello se arriesga la calvicie (lo saba, y lo dijo, hasta el picaro Estebanillo Gonzlez). La madera,

50 / GALICIA en cambio, tiene que cortarse aprovechando el menguante y as no se quebrar ni astillar..." De modo que el neoltico pervive y podris deducirlo en la vida cotidiana de ios galaicos: en la importancia del matriarcado, en el cabazo o mujeres que cargan la cabeza con lardos, etc. Tesoros y tesorillos Aunque debieron ser valiosos por la riqueza metalfera del pas, mucho se ignora sobre los ajuares. A principios del siglo XVI un bachiller comentaba que de los ros galegos se sacaba mucho oro, mayormente del Sil. Bastantes de los tesoros hallados son del 2.000 a.C. Se trata de diademas, gargantillas, pulseras y otros ricos ajuares localizados en sitios como Golada, Caldas de Rei. Laln. El profesor Blanco Frejeiro ha recordado como muchos fueron "profanados" por buscadores. Felipe III permiti, pongamos por caso, que el indiano Vzquez, a partir de 1609, despojase sin lmite alguno, los suelos dolmnicos del oro que atesoraban. Muchos siguieron el ejemplo de Vzquez y, se supone, dejaron a Galicia sin tesorillos. As ocurri tambin en Menorca con los alucinados o espintadosque en el XVII hurgaban en las entraas de la tierra al encuentro del vil metal. Las riquezas encontradas por tan oficiosos procedimientos debieron ser sustanciosas. Mas no todas cayeron en las manos de los avariciosos buscadores; algunos ejemplares han sobrevivido y pueden contemplarse tras las vitrinas de los museos, as ocurre con la clebre diadema de Ribadeo o las joyas del tesoro del castro Elvia. Los celtas irlandeses y los tesoros La necesidad de ocultar tesoros se dio tambin en otras comunidades del mundo celta. As en Irlanda tenan por lo visto la costumbre de enterrar pequeos tesoros (hoard), quiz por motivos religiosos. En los siglos sucesivos, los irlandeses se han tropezado con cientos de estos tesorillos cuando extraan la turba. Los pueblos galacios en la Edad del Bronce Leemos en un panel del Museo Arqueolgico Nacional que

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA/ 51 la "zona noroeste de la Pennsula alcanz una gran expansin econmica a partir de la Edad del Bronce. Fue entonces cuando se comenzaron a explotar sus importantes recursos minerales; principalmente oro, cobre y estao. Su desarrollo puso a esta regin en contacto con las culturas de los pueblos situados a lo largo de las costas atlnticas, con los que se realizaron intensos intercambios comerciales. Son famosos los legendarios viajes de los oestrimnicos, que navegaban por las costas atlnticas en barcas de piel". SOBRE LOS CELTAS La metalurgia Aparece en Galicia tardamente. Ms o menos hacia el 1.800 a.C. se desarrolla la del bronce y entre aquella fecha y el 600 a.C. se graban en la roca petroglifos (cruces, espirales o formas de animales). Es entonces cuando los estudiosos dicen que Galicia se mediterraneiza, recibiendo influjos tan fructferos como el metal o incluso algunos de los tipos de inscripciones raras en piedra... pero el metal va en Galicia, fundamentalmente, unido a los celtas. Quines fueron? Muchos gallegos, sobre todo los ms romnticos y progres, se creen descendientes directos de los celtas. Pese a los festivales de msica celta, como el de Cedeira, y a grupos tan dinmicos como Milladoiro, no conviene exagerar las races clticas en lo gallego. El panceltismo tiene mucho de iluminacin. En Irlanda, por ejemplo, el gran poeta WiIIiam Butler Yeats escribi El crepsculo celta (1893), ensayos en los que se remarcaban las races clticas de lo irlands. Escritores decimonnicos, como Murgua y Pondal, afirmaron que los gallegos descendan solamente de los celtas. Sin embargo, hay motivos para que los actuales galaicos se sientan sugestionados por tan falseada imagen mtica, o por los varios tipos celtas para ser exacto: stos no eran autoritarios, s "un pueblo feliz", con ilusin, que se expandan sin conquistar a lo bestia, etc. Los celtas ocuparon buena parte de Europa central (desde

52 /GALICIAIrlanda hasta la Estambul), La pennsula ibrica constituy su bastin ms occidental. Introdujeron en la vieja piel de toro cierto estado de! bienestar (como hoy nos venden los politicastros): utilizaron el hierro, mejoraron bastantes aspectos relacionados con la vida en comunidad, etc. Cundo llegaron? Durante la Edad del Hierro; ms o menos en siglo VIl a.C. De aquel perodo datan los numerosos castros galaico portugueses (hay ms de 5.000), que tienen su antecedente en construcciones de anteriores etapas. Es la poca de la cultura castrea o castrexa, de los torques (joyas de oro) y de los poblados fortificados. Los castros reproducen la tipologa de los rinwall clticos del centro de Europa o de las llamadas citanias. En general, se levantaron entre los siglos VI y IV, en ellos vivan los indgenas y los grupos de procedencia centroeuropea, celtas inclusive. En algunos castros han aparecido insculturas labradas en las rocas que representan a la serpiente, animal probablemente totmico para aquellos hombres y mujeres. Tambin, los celtas, desarrollaron los tmulos con entrada y dlmenes n forma de letra pi. Castros en otras partes Pues, por ejemplo, hay igualmente castros en Asturias. Los de Coaa y Mohas no estn muy lejos de Galicia. El primero de ellos se arruina a unos cinco kilmetros de Navia y fue muy utilizado por los romanizados. El de Mohas, a diferencia de sus hermanos gallegos, no se halla en alto sino en la planicie. Vida cotidiana de los celtas Por las leyendas parece que cuando el indgena enfermaba, y sus parientes o amigos cercanos no saban curarlo, exponan al enfermo en el sendero, por si algn caminante conoca remedio. Escribe Otero Pedrayo que los celtas vivan en pequeas agrupaciones, se alimentan de carne y bellota molidade laque hacen una especie de pan, y si reciben vino

UNAS P A L A B R A S SOBRE GALICIA / 53 lo consuman en grandes banquetes, sentados en bancos adosados a las paredes de sus moradas, segn el orden de nacimiento y dignidad guerrera. En estas fiestas pasan los alimentos en torno, jsan vasos de madera y al beber se acorrpaan con msica de flautas y canzan en coro Usan manteca y no aceite. Celebran certmenes guerreros... visten sayos oscuros y las mujeres trajes bordados de colores... despean a los condenados a muerte y laaidan a os parricidas fuera de los lmites de las ciudades.

Probablemente tenan los celtas barcas de cuero, entonaban cnticos antes de combatir y, en materia religiosa, danzaban durante los plenilunios: adoraban las corrientes de agua y lean en las entraas de los animales lo que la providencia de sus dioses (Banduo, Endovellico...) les auguraba. La vivienda castrea o prerromana El poblado, defendido por fosos y terraplenes, se divida en una especie de barrios autnomos. Adems de viviendas, cada unidad tena molinos, cuadras, almacenes. Para la construccin del hogar, probablemente los prerromanos utilizaban argamasa, el centro de la casa estaba presidido por la lareira o espacio donde se encenda fuego para cocinar. Las construcciones, generalmente con planta oval o circular, aparecan cubiertas casi con toda seguridad por techumbres cnicas hechas de materias vegetales. Cuando llegaron los romanos a Galicia siguieron utilizando estas edificaciones y, naturalmente, levantaron otras. Cerveza celta Segn Estrabn, los celtas pasaban la noche saltando y bailando en las puertas de su casas en honor de un dios sin nombre. Cuenta Luis Sastre, que se alimentaban sobre todo con carne, beban un vino mezclado con miel, y cerveza obtenida mediante la fermentacin del trigo... Hay que aclarar que los celtas en toda Europa se dividan en numerosos grupos o formaban subgrupos de pueblos o, en cualquier caso, no eran los habitantes exclusivos de la Galicia prerromana. Haba una treintena de "etnias" en territorio hoy gallego. Sus nombres son preciosos: supertamricos, prestamarcos o presamarcos, etc.

54 /GALICIA Joyas castreas En los comienzos del Bronce final florece la orfebrera que amalgamaba saberes mediterrneos con otros procedentes de la por entonces tarda cultura de la Hallstatt. Los aluviones aurferos del Sil, y de sus afluentes, permitieron obtener oro con cierta facilidad. Los pueblos gallegos fabricaron, y muy bien, lo dijo en un epigrama Marcial brazaletes, arracadas, torques o collares rgidos, cascos, articulados y anillos con espiral. Las diademas, capricho de hombres y mujeres, les servan para recogerse el cabello antes de entrar en combate. UNA DE ROMANOS Si bien los fenicios recalaron y, probablemente, se guiaron por la torre de Hrcules, fueron los romanos quienes dieron a esta tierra cierto sentido de unidad, y el nombre de Gallaecia. Entraron, oficialmente, el 137 a.C, estando al mando Dcimo Junio Bruto, tambin llamado el Galaico. Realmente, antes que en territorio gallego, las legiones estaban en lo que actualmente es Portugal. Finalmente tuvo que venir en persona Julio Csar (61 a.C.) a terminar aquello que el procnsul Junio empez. La romanizacin de Galicia no se inici hasta el final de las guerras cntabras (19 a.C). Mujeres guerreras "Los pueblos gallegos se caracterizaban por una gran belicosidad. Las fuentes clsicas cuentan que las mujeres intervenan en la guerra al igual que los hombres y que antes de caer prisioneras preferan suicidarse con sus hijos." La pacificacin Csar desembarc en La Corua, pero no debi dejar el pas pacificado, pues en el 29 a.C. se sublevaron los galaicoastures. Tras la victoria militar romana, se dice que consumada en las islas Ces, y la paz octaviana, Galicia pas a formar parte del mundo romano con bastantes focos no romanizados durante cuatro siglos. Nuestra Gallaecia llegaba por el sur hasta el Duero y por el este hasta Cantabria; con Caracalla se convierte en provincia.

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 55 Augusto fund tres ciudades en esta parte de Hispania: Bracara Augusta (Braga), Asturica Augusta (Astorga, en Len) y Lucus Augusti (Lugo). Los indgenas siguieron habitando algunos castras, pero poco a poco la romanizacin avanz. Desde entonces tuvo Galicia una red de calzadas, nuevas fundaciones como La Corua o Iria Flavia (al lado de Padrn). Algn camino atravesaba, per loca martima, la Costa de la Muerte, etc. Adems de calzadas, la poca romana dej en Galicia grandes obras de ingeniera, como las murallas lucenses (ms cloacas y termas), la torre de Hrcules, el puente sobre el ro Bibey, etc. A cambio, de Galicia, los centuriones se llevaron cargamentos de metales, plomo y bermelln. El perodo bajoimperial es, sin duda, uno de los ms interesantes y enigmticos de la historia gallega y con numerosos restos arqueolgicos, especialmente laudas y detalles decorativos. En aquella poca comenz a gestarse lo que acabara siendo el fabuloso mundo jacobeo. VNDALOS Y MOROS Godos Tras los romanos, a principios del siglo V entran los vndalos y suevos. Echan los segundos a los primeros y en el ao 409 establecen la primera monarqua, quedndose eminencialmente en Galicia y poniendo su capital en Braga (Portugal). Los brbaros se convirtieron al cristianismo (449) y tuvieron su adalid en San Martn Dumiense, quien intent a todas luces acabar con los cultos paganos; mas, como dice nuestro admirado prologuista, parece que, afortunadamente, el santo no las tuvo todas consigo. Posteriormente, y tras innmeras vicisitudes, los suevos van cayendo en la rbita visigtica, hasta que en el 585 son conquistados por Leovigildo y se incorporan polticamente al conciliar reino toledano. Musulmanes Antes que ocupar (no les gustaba el pulpo) slo llegaron a merodear por el norte de Espaa. En el Poio (Pontevedra) todava, el 25 de junio, se venera a Santa Trahamunda, monja martirizada por mahometanos.

56 / GALICIA Muchas incursiones o razzias acaudillaron los agarenos en el siglo VIII, algunas demoledoras, tambin las hubo normandas. Despus del 824 apenas se vieron moros, hasta que en el 997 Aimanzor abre de par en par las puertas de Compostela. Casi con toda probabilidad algn antepasado de don Camilo, tal y como figura en el escudo de armas de los Cela, se enfrent a la morisma, aunque, eso s, tardamente. As cont el hecho nuestro Premio Nobel a Juan Manuel de Prada (ABC Cultural): Un antepasado mo secruz en el camino con un moro, allpor e! siglo XV, y se dijo: "Cono, este to no es gallego". As que lo decapit, sin ms prembulos, ensart su cabeza con la espada y le robo un par ae chilabas que llevaba en las alforjas.

Pese a todo, los reyes galaico-astures lentamente fueron avanzando. Mas los distintos reinos cristianos, y los que se iban formando, pronto entraron en una serie de comprensibles luchas intestinas. NACE GALICIA A raz de la constitucin de Portugal como reino, Alfonso Vil dona el condado de Galicia a Ramn de Borgoa, marido de doa Urraca. En ese tiempo florecieron los monasterios. Bastantes iglesias actuales, en sus orgenes, formaron parte de stos, incluso grandes hacendados cedieron sus propios territorios para montar su conventual tinglado; alcanzaron, en justa recompensa, la canonizacin: San Rosendo o San Ero fueron dos de estos santos varones, que dira su seora Tip. Al final del siglo XII, el Maestro Mateo concluye el Prtico de la Gloria, y la catedral de Santiago acaba por terminarse (la primera fase) un siglo despus, hacia 1211. Circulaban, en aquella poca, nobles y obispos que subyugaban al pueblo. El cardenal Cisneros qued impresionado por el poder del obispo de Santiago, realmente Galicia, que tena hasta marina de guerra, era casi un seoro de esta gran jerarca de la Iglesia.

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 57 HISTORIA MODERNA La revuelta irmandia Estall en el siglo XV. Como en lasGermanas de Mallorca o Valencia, o la castellana guerra de las Comunidades (s. XVI), se trataba, por lo que sabemos, de una lucha antiseorial y antinobiliaria. Los Ozores, Castro, Andrade y alguna que otra familia aristocrctica se repartieron feudalmente Galicia. Los vasallos, escribe Victoria Armesto: Por nacer pagaban asjseoruntributo lagoyosa: por mor r otro, la luctuosa: su mejor animal pasaba a las cuadras feudales Losvasallosestabanobllgadosaauxiliary mantener a su seor si a ste se le ocurra declarar la guerra a su vecino. Tambin deban ayudarle a construir fortalezas y castillos en donde desde luego, si no se cuidaban mucho, les estropeaban a sus mejores muchachas. En tal caldo de cultivo se origin la insureccin de los irmandios a partir de 1431 y hasta, prcticamente, 1469. Ernest Belenguer ha resumido magistralmente, en su muy recomendable libro El Imperio Hispnico (Colecc. Libro de Mano, Mondadori, 1995), la esencia de la revuelta: Contrariamente, en Galicia haba que asentar definitivamente el poder de la monarqua en unos territorios que, fronterizos con Portugal, nose haban carcterizado durante la guerra civil por su absoluta fidelidad a la causa isabelina; el portuguesista conde de Camina haba sido un claro exponente. Adems, Isabel y Fernando no olvidaban que en un pasado reciente toda Galicia se haba conmovido bajo el fuerte terremoto de una autntica rebelin social: campesinos, menestrales y sectores de la pequea hidalgua se haban alineado, junto a Enrique IV, contra la gran aristocracia y el alto clero, y la Santa Irmandade (Santa Hermandad), nervio institucionalizado del movimiento, durante dos aos, entre 1467 y 1469, haba procedido a la sistemtica demolicin de las fortalezas de los nobles, amenazando su sempiterno poder con una revuelta antiseorial. El siglo XV En efecto, la primera guerra Irmandia tuvo su paisaje en

58 / GALICIA las picas tierras de la marina lucense pertenecientes a los Andrade. La segunda (1467-1469) afect a todo el pas gallego. Durante el gobierno de los Reyes Catlicos. Galicia pasa a forma parte de un estado mocerno, con nobleza controlada y donde la realeza si es ya punto de referencia. Isabel y Fernando, adems, reorganizaron la vida monstica (mandaron se concentraran casas en torno a grandes abadas), crearon el cargo de gobernador de Galicia y la Audiencia, marco jurdico con el que superarn la anarqua. Tambin hay que decir que los gallegos sufrieron todo tipo de epidemias en aquella centuria. No es casual que, e martes de Pentecosts, los mugardeses se planten ante la Virgen: ella intercedi y mitig una peste que asol Mugardos. Siglos XVI y XVII Carlos I necesita dinero y unta a las Cortes en La Corua. Y Felipe II dispone de Galicia para lanzar contra los ingleses, que venan hostigando con sus acciones los Pases Bajos, la Armada Irvencible. En el siglo XVII haba un servicio de correos entre Inglaterra y Galicia: signo de modernidad que contrastaba con las cargas o foros que pagaban los campesinos al seor. Siglo XVIII Por el manuscrito Descripcin del reino de Galicia (ms. 17.981 de la Biblioteca Nacional), que incluye el informe firmado por don Miguel Bauelos, sabemos que en Galicia haba registradas en 1787 nada menos que 1.349.805 almas:

Curas . . Hidalgos . Oficiales de pluma Artesanos Criados Comerciantes Fabricantes

2 640 13 783 392 22.512 18 968 . . . 2.980 2 028

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA/ 59 En lo referente al mundo de la ciencia, a finales del XVII public Andrade su Excelencia antigedad y nobleza de la arquitectura (1695). Francisco Seixas, mindoniense. naveg en el siglo XVIII por todos los mares, dej hasta tratados de nutica y matemticas. Mas es en Ferrol dcnde florecer la ingeniera setecentista, con tcnicos como Cosme lvarez o Julin Snchez Bort. Entre los personajes que Galicia ha dado a la divulgacin cientfica citaremos al corus Jos Quiroga, jesuta trotamundos que estuvo con los patagones y ya exiliado en Bolonia escribi un tratado de nutica. Los padres Sarmiento, defensor del gallego, Feijoo y don Jos Crnide son otros tres sabios a tener en cuenta. Siglo XIX La lnea ferroviaria ms antigua de Galicia fue trazada por el ingeniero Mould, cubra 42 km, llegaba a Santiago, Osebe. A Escravitude. A Matanza, Cesures y a Carril. En Compostela tambin se hizo (1847) la primera operacin con anestesia de Espaa. Mas no todo fue progreso. Las hambrunas seculares, a mediados del siglo XIX, fueron catastrficas: los campesinos, huyendo del campo, intentaban obtener algn alimento en las ciudades. Durante la pasada centuria hubo, tambin, mucho caciquismo y debi surgir una burguesa gallega, dnde est?: sa es una de las cuestiones que los historiadores debaten (o sea, la existencia de una burguesa gallega y la relacin de dicha clase social con el nacionalismo). Ortega, antes de que negociaran Aznar y Pujol, se pregunt en ms de una ocasin por el nihilismo nacional de Galicia o de Andaluca frente ai de Catalua o Vasconia. En definitiva, por las autonomas de primera y aquellas de sptima u octava categora. Parece ser que slo hoy existe una burguesa gallega. En el pasado fueron catalanes quienes montaron las industrias conserveras, las de salazn, los astilleros. Adems, los gallegos indianos que hicieron cuartos edificaron mansiones y no promovieron, como era de esperar, la industrializacin de su patria: defendieron la Galicia ms pura y dura. Tal vez por ello, a dilerencia del vasco y del cataln, y pese a los esfuerzos del BNG, el nacionalismo gallego es tan dbil y slo en los ltimos tiempos comienza su resurgimiento. Comprobamos en una exposicin organizada en la Biblio-

60 / GALICIA teca Nacional que la masonera tuvo, en la tierra nata de Franco, cierta raz. Ante la guerra civil espaola, los masones neoyorquinos de Brooklyn regalaron a sus compaeros vigueses una paletilla, plomadas y otros instrumentos de lujosa abailera, tan imprescindible, por otra parte, en las logias. En 1929 se constituy la ORGA u Organizacin Republicana Gallega Autnoma, semillero del galleguismo ms nacionalista. Duran:e la Repblica se desarroll, al igual que el vasco y el catatn, el Estatuto Gallego aprobado en la Asamblea de La Corua y sancionado posteriormente en las reuniones organizadas en el Ayuntamiento de Santiago. Nace el Partido Galleguista (1931) y la cultura patria vive una tercera edad de oro. Un ao despus, y en perodo republicano, se elabora el Estatuto de Autonoma, plebiscitado en 1936. Desde 1933 el proceso se retiene hasta que se relanza con el Frente Popular, quedando lgicamente truncado tras la guerra civil. En efecto, la victoria del gallego Franco termin con los anhelos de sus paisanos. Ramn Pieiro defini la posguerra como perodo en el que la cultura gallega enmudeci por una violenta represin. Las instituciones dejan de hablar en gallego, la cultura languidece mientras Buenos Aires se convierte, simblicamente, en la capital de Galicia. Hacia 1950 se crea la editorial Galaxia con muchas dificultades y algunas suspensiones gubernativas, como sucedi con su coleccin "Grial". Desde 1960, la industria gallega crece anrquicamente. Los campesinos emigran a los centros urbanos y la regin se descasta. En 1964 naci la Unin do Pobo Galego, partido independentista. Tras la muerte de Franco en la cama, y la transicin en los despachos, se desarroll nuevamente el Estatuto a travs de la Xunta y del gobierno autonmico que hoy preside don Manuel. La Galicia profunda Por increble que parezca, sigue existiendo. Un caso os ilustrar: en 1991 la guardia civil inicia el desalojo de arrendatarios que llevaban siglos en "su" tierra. Muchos protestaron, mientras estos campesinos retrocedan a la Edad Media. El caso ms extraordinario se produjo cuando por razones jurdicas de los

UNAS PALABRAS SOBRE GALICIA / 61 propietarios, doa Carmen Villar, una campesina de casi setenta aos, ciega, en espera de que la operasen de cataratas, fue desahuciada. Aclual presidente de la Xunta e incansable poltico es don Manuel Fraga Iribarne. Fraga duerme slo cuatro horas, fue ministro de