Hoja Parroquial del 13 de mayo de 2012

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13 de mayo de 2012 Nº 2.620 El Patrono de la Diócesis Semanario de la Diócesis de Segorbe-Castellón hoja parroquial San Pascual Baylón. Cerámica de Alcora, s. XVIII. Museu del Pouet. Basílica de San Pascual (Vila-real)

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San Pascual Baylón, patrono de la Diócesis. Mons. López Llorente: "San Pascual Baylón, nuestro patrono". En casa de San Pascual. Celebración San Félix de Cantalicio

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13 de mayo de 2012Nº 2.620

El Patrono de la Diócesis

Semanario de la Diócesis de Segorbe-Castellónhojaparroquial

San Pascual Baylón. Cerámica de Alcora, s. XVIII. Museu del Pouet. Basílica de San Pascual (Vila-real)

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Vida Diocesana

Castellón celebra el III Centenario de la Canonización de San Félix de CantalicioEl 22 de mayo de 1712, -se cumplen ahora tres-cientos años-, el papa Cle-mente XI canonizaba a San Félix de Cantalicio. Los documentos de los archi-vos afirman que la comu-nidad de frailes capuchinos de Castellón y toda la ciu-dad lo celebraron con fies-tas extraordinarias, puesto que era el primer santo de la Orden. Los religiosos, que ya tenían convento en Valencia desde 1597, se habían establecido en Castellón en 1608, por iniciativa del Patriarca San Juan de Ribera, fundando su convento de Sant Josep y San Ponç cerca de la que hoy es conocida por este motivo como “Avenida de Capuchinos”.

En torno a aquel con-vento, como eje vertebra-dor, comenzó a configu-rarse a lo largo del todo el siglo XVIII el arrabal labrador por excelencia de la ciudad. Años más tar-de de la canonización, en 1725 una de las calles más amplias de este Raval, -“el carrer llarguer”-, recibió el nombre de San Félix, de-nominación que pronto se extendería a todo el barrio, que había comenzando a celebrar su fiesta el segun-do domingo de octubre. En el Castellón tradicio-nal, es uno de los santos mas populares y queridos.

El santo de las calles de Roma

San Félix nació en el pueblecito italiano de Cantalice, de familia muy humilde. Durante cuarenta años vivió en su convento de Roma. San Carlos Borromeo y San Felipe Neri iban a buscarle a menudo para escuchar sus consejos. En Roma se conoce a San Félix de Cantalicio como el santo de la alegría. Una de las fuentes de las que brotaba su alegría era su humildad. El pueblo romano lo “ado-raba”.

Fray Félix era de for-ma especial muy amigo de los niños. Mientras el santo recorrió las calles de Roma, los niños en-contraron en él un amigo bueno y potente. El fraile de la alforja era para ellos una institución. Le tenían simpatía, descubriendo en aquel sencillo religioso un hombre siempre dispues-to a escuchar y hacer el bien. Fray Félix descubría en la inocencia de los ni-ños la humanidad benigna y santa del Niño Jesús y cuenta la historia, que un día cerca de Navidad, la Virgen Maria le puso su Hijo en sus brazos. Hoy es la forma tradicional de representar a éste humilde religioso capuchino. Mu-rió el 18 de mayo de 1587. Ese día se celebra su fiesta litúrgica.

REDACCIÓN. CASTELLÓN.

Actos del III centenarioParroquia de la Sagrada Familia (Padres Capuchinos)Triduo. Días 16, 17 y 18 de mayo. 19’30 Santo Rosario. 20’00 h. Celebración de la Eucaristía. (El viernes, día 18 fiesta del santo, reparto de pan ben-decido)

Basílica del LledóDomingo, 20 de mayo. 11’00 h. Misa Solemne can-tada por la Coral “Veus de Lledó” y reparto de pan bendecido.

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San Pascual Baylón, nuestro PatronoQueridos diocesanos: El próximo 17 de mayo celebra-mos la Fiesta de San Pascual Baylón, Patrono de nuestra Diócesis de Segorbe-Castellón. La vida mortal de Pascual co-mienza y termina en Pascua de Pentecostés (Torrehermosa, 1540 - Villarreal, 1592). Hijo de una humilde familia arago-nesa, a los siete años ya es pas-torcito; y mientras cuida de sus ovejas, teje guirnaldas de flores y plegarias a la Virgen. Cuando no puede asistir a Misa, se arro-dilla y ora con los ojos fijos en el lejano santuario de Nuestra Señora de la Sierra, donde se celebra el santo Sacrificio. A los dieciocho años, Pascual pide ser admitido en la Orden de los Frailes Menores. Años más tarde entra en el convento de Nuestra Señora de Loreto, fun-dado por los reformados de San Pedro de Alcántara, para pasar en 1589 al convento de los frailes alcantarinos en Villareal, donde vivirá hasta su muerte como el apóstol y bienhechor

de esta Ciudad. El Papa, Juan XXIII le declaró Patrono de nuestra querida Dió-cesis de Segorbe-Cas-tellón el 12 de Mayo de 1961.

San Pascual des-taca por tres virtudes, que son de enorme actualidad: la humil-dad, el amor a la Eucaristía y la devoción a la Santísima Virgen. Estas tres virtudes están ínti-mamente unidas entre sí. La Eucaristía es sacramento de hu-mildad, fruto de la humillación de nuestro Dios, que se abajó e hizo esclavo y siervo de todos, y se quedó real y sustancialmente presente en la sencillez del Pan eucarístico. La Eucaristía, a la vez, hace crecer a quien con fe y humildad se deja unir a Cristo Jesús, se alimenta del Pan vivo bajado del Cielo, y la adora de-jándose empapar por el amor y sentimientos de Cristo. Y en la Eucaristía se acrecienta la devoción a María, la Virgen,

la Mujer eucarística, pues Ella es el modelo de cómo cada uno de nosotros está llamado a recibir el don que Jesús hace de sí mis-mo en la Eucaristía y a darse a Dios y a los hermanos como la Virgen.

La Eucaristía era para nuestro santo Patrono el manantial de todos los bienes y la escuela donde aprendió a vivir tras las huellas de Cristo y de María. Su vida estuvo entre-tejida de humildad y de silen-cio, de sacrificio y de servicio, de entrega y de amor, que él aprendió en la Eucaristía y en la Virgen. Pascual no dudaba en recurrir a la Virgen para obte-ner por su mediación la gracia de prepararse dignamente para recibir la sagrada comunión. En su estela podemos aprender a creer en la Eucaristía, a cele-brarla asiduamente, a adorar a Cristo, realmente presente en ella, y a hacer de nuestra vida

una existencia eucarística; es decir, una existencia marcada por el amor entregado y servi-cial a Dios y a los más pobres.

Como en mi encuentro con San Pascual, al comenzar mi ministerio episcopal en nuestra Diócesis, quiero pedir-le de nuevo: “Enséñanos a to-dos a acoger con gozo tus dos pasiones: adorar la Eucaristía y contemplar a María. ¡Que aprendamos a adorar en espíri-tu y en verdad, como Pascual, a Cristo presente en la Eucaristía! En ella encontraremos la fuente inagotable del amor de Dios y a los hermanos; en ella aprende-remos a amar y entregamos en extremo. Queremos aprender de nuestro Patrono a contem-plar a la Virgen, para mirarla, hablar con Ella y rezarla con amor intenso y comprometido; queremos, sobre todo, acoger de sus manos a su Hijo, para caminar siempre desde Cristo”.

Con mi afecto y bendición,

Tribuna

(*) ObispO de segOrbe-Castellón

pOr Juan Manuel gil

María, modelo de oraciónLa Iglesia desde sus albores oró a Dios en compañía de María. Y siempre se esforzó por orar a Dios como lo haría María. Bien pode-mos afirmar que la Iglesia trató siemrpe de orar en María, por María y con María. Así lo ha visto un autor de nuestros días:

“La Iglesia, como ‘virgen orante’ (Pablo VI), ha seguido siempre la pauta mariana. Es la invitación de Cristo: ‘He aquí a tu Ma-dre’. (Jn 19,27). Siguiendo esta invitación, la Iglesia se adentra en al oración de Cristo o en su diálogo con el Padre en el Espíritu Santo. La oración mariana de la Iglesia es una fe más profunda en Cristo, a modo de en-trega incondicional (Jn 2,5.11). Es la mejor preparación para hacerse fiel a la acción del Espíritu Santo que la hace madre universal (Hch 1,14).

La oración mariana de la Iglesia se expresa principalmente viviendo el Misterio de Cris-to a través de todo el año litúrgico. Este es el sentido de las antífonas marianas, así como de otros tantos textos marianos de adviento, cuaresma, pascua y pentecostés. La oración de

los fieles o de la comunidad manifiesta este sentido mariano también en los sábados del año; en este día la liturgia recuerda a María como señal de Cristo presente cuando parecer que está ausente (Cristo en el sepulcro).

Las oraciones marianas, que la Iglesia ha ido elaborando durante la historia, vienen a ser una continuación del saludo del ángel y de la felicitación de Isabel. Así se cumple la predicción de María: ‘Me llamarán bienaven-turada todas las generaciones’ (Lc 1,48). Casi siempre se expresa en ellas el deseo de unirse a Cristo como María. Otros aspectos frecuentes son: actitud filial, confianza en la misericordia de Dios, alegría y alabanza por las gracias que María ha recibido, vivir la presencia de María, pedir su intercesión, sentir necesidad de su ac-ción materna en el proceso de santidad, pedir su protección en los momentos de dificultad, entrega y consagración a la acción de la gracia como Ella…

Estas oraciones marianas tienen siempre alguna de estas dimensiones: vida trinitaria, configuración con Cristo, fidelidad a la acción

del Espíritu Santo, comunión eclesial. Son, pues, como en todo el campo de la devoción y culto mariano, una garantía de autenticidad en al vivencia del Misterio de Cristo.

La oración mariana de la Iglesia expresa el tono de fidelidad eclesial a la propia misión que no tiene fronteras. En un sentido de to-talidad en la entrega a los planes salvíficos de Dios. Los períodos históricos fecundos de la maternidad y misionariedad de la Iglesia, han sido períodos en los que ha habido santos y apóstoles que alcanzaron una experiencia de Dios, por medio de una vivencia mariana que es de diálogo con ella. Es ella quien abre el camino de respuesta al diálogo iniciado por Dios en la creación, en la revelación y en la encarnación de su Verbo o Palabra personal.

Llevados de la mano de María, ‘los po-bres’ aprenden a decir ‘Padre’, con la voz de Cristo que vive en nosotros comunicándonos su Espíritu. De los ‘pobres’ es el reino de los cielos. María es la ‘pobre’ del Señor que, con su Magníficat, traza la pauta de la oración eclesial” (Juan Esquerda Bifet).

MOns. CasiMirO lópez llOrente *

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San Pascual 2012

En Casa de San Pascual

El Pouet del Sant. El mismo año de la muerte del santo, 1592 se excavó este pozo en el centro del claustro. Según tradición, San Pascual participó en los trabajos y pudo llegar a beber de sus benéficas aguas. Hoy los devotos solicitan esta agua, que nos recuerda el “pozo de agua viva” que es Jesucristo para los creyentes. En torno al “pouet” se encuen-tra el Museo de la Basílica.

Asiento de San Pascual. En los últimos lugares del refec-torio y cerca de la “Sala de Profundis”, donde los religiosos rezaban este salmo antes de las comidas, se sentaban uno frente al otro San Pascual Baylón y el beato Andrés Hiber-nón, ambos hermanos legos. El asiento, significado con una bellísima cerámica de Manises del siglo XVIII, es un lugar de devoción popular.

En este sitio Pascual, reglas de templanza dio,pues sólo se alimentó, con el manjar celestial.Meditando en lo mortal, de su cuerpo se olvidaba,y tanto a su Dios amaba, que en éxtasis se veíay con lo que no comía, sus pobres alimentaba

El refectorio. Los religiosos alcantarirnos, orden religiosa de inspiración franciscana a la que perteneció San Pascual, se reunían a comer en este lugar, admirablemente conser-vado por la piedad a pesar de las numerosas destrucciones. Sentados en un banco corrido de ladrillo, compartían la mesa humilde.

Escalera de tiempos de San Pascual. Próxima a la celda donde vivió y murió el santo, se encuen-tra esta escalera de acceso desde la planta baja del convento, hasta las celdas superio-res. San Pascual la utilizaba a diario para acceder has-ta su celda, loca-lizada muy cerca. Se conserva en toda su antigua sencillez.

Con motivo de la fiesta del Patrono diocesano, el próximo jueves 17 de

mayo, Hoja Parroquial ofrece un número espe-cial con los lugares pas-

cualinos menos conoci-dos, o inaccesibles por la clausura. Que él nos

enseñe la humildad, el amor a la Eucaristía y la devoción a la Virgen.

Verso que se encuentra en la cerámica del asiento de San Pascual

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San Pascual 2012

Pasillo y celdas del convento. El interior del convento donde vivió San Pascual, no es visitable en la actualidad por la clausura. Se conservan intactas las celdas de los frailes, dispuestas a lo largo de un pasillo, igual que en tiempos del santo. La celda siguiente a la que nos muestra la fotografía, es la habitación donde murió San Pascual.

Sepulcro actual de San Pascual, desde la celda. El 17 de mayo de 1992, con motivo del IV centenario de la muerte del santo, los restos fueron deposita-dos en un nuevo sepulcro de plata. Es una estatua ya-cente, labrada en 300 kg de plata. La escultura está inspirada en el cuerpo incorrupto, que se veneraba antes de la per-secución religiosa de 1936 y se en-cuentra delante de la antigua celda donde murió.

Sepulcro antiguo de San Pascual. La capilla del an-tiguo sepulcro en la iglesia del con-vento, constituía una joya artística del barroco valen-ciano. La principal obra era el retablo barroco de ma-dera dorada, con la urna de cristal que contenía el cuerpo incorrupto del santo. En el camarín se podía observar y venerar de cerca los restos del santo de la Eu-caristía.

Celda donde murió San Pascual. En esta sencilla celda del convento del Rosario de Villarreal, vivió San Pascual entre 1589 y 1592 y aquí murió el día 17 de mayo de aquel último año. El acceso a este lugar durante siglos fue imposible por la clausura. Desde 1952 y hasta 1992, se conservaron en esta celda los restos del santo, dentro de un relicario tallado por el escultor Ortells.

Los Hospitales públicos, así como el Hospital Rey Don Jaime de Castellón,

cuentan con servicio religioso católico.

Pida el servicio cuando acuda a cualquiera de ellos, contactando con el control de planta o información.

Delegación Diocesana de la SaludTlf.: 657 35 79 56 - [email protected]

Servicio Religioso Católico en los Hospitales

Invita a la conferencia“La demencia: aspectos físicos y psicológicos”

(continuación)

A cargo de Montserrat Vizcarro, psicóloga

Lunes 21 de mayo a las 17h30

Palacio Episcopal de Castellón

Asociación de Ntra. Sra. de Salus Infi rmorum

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Reliquias de San Pascual Baylón en Villarreal

“Cartapacio” de San Pascual”. Afirma el santo en la primera pá-gina: Yo, fray Pascual Baylón, natural de la villa de Torrehermosa, de Santa María de Huerta, escribí este Cartapacio para mi recreación espiritual, el cual saqué de muchos libros fielmente”. En sus páginas aparecen versos, oraciones, reflexiones piadosas y pensamientos del santo. Recogido de la celda tras su muerte, estuvo en Jumilla y Va-lencia. Desde 1992 se expone debajo del altar, junto a su sepulcro.

“Cordón”. Fragmento del cordón franciscano de San Pascual. Los tres nudos recuerdan a los religiosos los tres votos de pobreza, cas-tidad y obediencia. Hoy las clarisas confeccionan los “cordonets de Sant Pasqual”, muy apreciados por los devotos.

“Pañuelo”. Por antigua tradición se conserva en el convento este pañuelo, propio de los agricultores y pastores. San Pascual lo usó durante su tiempo de pastor en Torrehermosa y Alconchel, en Aragón y posteriormente en Monforte y Orito, en tierras alicantinas.

Tijeras. Según antigua tradición, estas fueron las tijeras usadas por el santo, en su condición de hermano lego y limosnero del Convento.

“Cayado”. Se considera que fue utilizado por San Pascual durante sus años como pastor en su tierra natal. Está recubierto de plata en la parte superior. El cayado y el sombrero forman parte del escudo del santo.

San Pascual 2012

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El Evangelio del Domingo

“Como el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor”

Primera LecturaHe 10,25-26.34-35.44-48. Cuando iba a entrar Pedro, salió Cornelio a su encuentro y se echó a sus pies a modo de homenaje, pero Pedro lo alzó, diciendo: -«Levántate, que soy un hombre como tú.» Pedro tomó la palabra y dijo: -«Está claro que Dios no hace distin-ciones; acepta al que lo teme y practica la justicia, sea de la nación que sea.» Todavía es-taba hablando Pedro, cuando cayó el Espíritu Santo sobre todos los que escuchaban sus palabras. Al oírlos hablar en lenguas extrañas y proclamar la grandeza de Dios, los creyentes circuncisos, que habían venido con Pedro, se sorprendieron de que el don del Espíritu Santo se derramara también sobre los gentiles. Pedro añadió: -«¿Se

puede negar el agua del bau-tismo a los que han recibido el Espíritu Santo igual que noso-tros?» Y mandó bautizarlos en el nombre de Jesucristo. Le ro-garon que se quedara unos días con ellos. Palabra de Dios.

Salmo responsorialSal 97. R/. El Señor revela a las naciones su salvación.

Segunda Lectura1Jn 4,7-10. Queridos herma-nos, amémonos unos a otros, ya que el amor es de Dios, y todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. Quien no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. En esto se manifestó el amor que Dios nos tiene: en que Dios envió al mundo a su Hijo único, para que vivamos por medio de él.

En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y nos envió a su I-lijo como víctima de propiciación por nuestros pecados. Palabra de Dios.

EvangelioJn 15,9-17. En aquel tiem-po, dijo Jesús a sus discípu-los: -«Como el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor. Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; lo mismo que yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vues-tra alegría llegue a plenitud. Éste es mi mandamiento: que os améis unos a otros como

yo os he amado. Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos. Vo-sotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os Ramo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a vosotros os llamo amigos, por-que todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer. No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto dure. De modo que lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo dé. Esto os mando: que os améis unos a otros.» Palabra del Señor.

Próxima semana: Ascensión del Señor He 1,1-11 / Sal 46 / Ef 4,1-13 / Mc 16,15-20

Domingo VI de Pascua (2ª Semana del Salterio)

Agenda DiocesanaJueves 17. San Pascual Baylón.* 11h Solemne eucaristía en la Basílica de San Pascual.* 19h Procesión general en Honor de San Pascual.* 19h Clausura del Instituto Diocesano de Ciencias Re-

ligiosas. Misa en la parroquia de San Vicente Ferrer de Castellón.

Viernes 18.* 19h Confirmaciones en la parroquia de la Asunción de

Alcora.

* 19h El Espejo de la Iglesia Diocesana en COPE.Sábado 19.* Confirmaciones en la parroquia de la Asunción de Vi-

lafamés.

Domingo 20. Solemnidad de la Ascensión del Señor.* 9h45 Iglesia Viva en COPE.* 12h Rito de iniciación cristiana de adultos en la parro-

quia de la Purísima Concepción de Higueras.* 15h Encuentros en Popular Televisión.

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Pascual Sebastià, pastor de San Pascual

Dep. Legal: CS97-1960Suplemento del B.O. del Obispado

Edita: Obispado de Segorbe-Castellón Director: Juan Manuel Gil Coordinador: Josep Miquel Francés Redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: Teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / [email protected] / [email protected] / www.obsegorbecastellon.es

Impresión y reparto: Gràfiques Color Imprés, s.l.u. Pol. Ind. Fadrell, nave 75. 12005 Castellón / Teléfono 964 255 100

hojaparroquial

“San Pascual vivió entre dos cimas: la Eucaristía y los pobres, y puede ser el lazo de unión entre ellas”Pascual Sebastià (1966, Vila-real) es la segunda generación de pastores de San Pascual en su familia, y su hijo ya está cogiendo el relevo. Los pastores recuer-dan que el Santo también lo fue en su juventud. Son los portadores de la peana en las fiestas de mayo y en las de la Virgen de Gracia en septiembre. Pero su vin-culación con la basílica es constante: responde a un compromiso personal.

− ¿Cómo se hace uno pastor?

− Pasa de padres a hijos o a yernos. Mi abuelo fue portador. Mi padre no lo sacó porque el abuelo mu-rió siendo él muy pequeño y pasó a otro familiar. Des-pués salí yo, y ahora ya está también mi hijo.

− ¿Cómo se transmite la devoción al Santo de ge-neración en generación?

− Es la tradición fami-liar, el hablar en casa, el llevar los hijos desde pe-queños a hacer la visita a san Pascual... Hay el papel del hombre pasando de pa-dres a hijos, pero la mujer siempre está presente, entre otras cosas porque suelen

ser las madres o las abuelas que hacen y mantienen los vestidos.

− ¿Y cómo impregna de fe el resto de la vida?

− Siendo un referente de devoción y recogimien-to que tienes como propio y donde puedes ir a mani-festar tu fe. Muchas veces las familias acudimos aquí cuando tenemos proble-mas, porque sabes que tie-nes un lugar donde reco-gerte e interiorizarte; Si lo haces con los hijos también lo aprenden. Igualmente

hay que venir aquí a dar las gracias por las alegrías: cuando nace un hijo, hace la primera comunión o hay una boda, se traen los ra-mos de casa como prenda de devoción y como para hacer partícipe al Santo de la alegría familiar.

− Romper la separa-ción entre sagrado y pro-fano.

− Yo me considero igle-sia doméstica, como decía el Concilio Vaticano II, y de manera especial en una población pequeña, lo im-

portante no son las grandes estructuras, sino la iglesia que tienes en casa, el párro-co que está cerca…

− ¿Qué nos enseña San Pascual?

− Para mi, la caracte-rística más importante es la humildad. Una persona que llega a la santidad desde la portería de un convento, siendo lego, demuestra has-ta dónde se llega siendo hu-milde, desde el trabajo, la dedicación a los demás, sin ningún afán de apariencia ni de inflar el ego. Cuadra mucho como patrón de Vila-real: un pueblo traba-jador, humilde que piensa que en el esfuerzo propio pueden conseguir todas las metas que desee.

− ¿Y a vivir más inten-samente la Eucaristía?

− Que sea un momen-to de recogimiento cierto, real, íntimo y creyendo en lo que se celebra.

− ¿Y el compromiso con los necesitados?

− Va unido con lo an-terior: Ser un sirviente fiel de la Eucaristía y, al mismo tiempo, darse a los pobres desde la humildad. San Pascual vivió entre estas dos cimas y puede ser el lazo de unión.

G. F. VILA-REAL.

Pascual Sebastiá, junto al sepulcro de San Pascual