INSTITUTO DE EVANGELISMO LAICO FIEL - Pr. Allan Machado · 1" " Pr. Allan Machado " “Al...
Transcript of INSTITUTO DE EVANGELISMO LAICO FIEL - Pr. Allan Machado · 1" " Pr. Allan Machado " “Al...
1
Pr. Allan Machado
“Al recapacitar en nuestra historia pasada, habiendo recorrido cada paso de su progreso hasta nuestra situación actual, puedo decir: ¡Alabemos a Dios! Mientras contemplo
lo que Dios ha hecho, me siento llena de asombro y confianza en Cristo como nuestro caudillo. No tenemos nada que temer en lo futuro, excepto que olvidemos la
manera en que el Señor nos ha conducido, y sus enseñanzas en nuestra historia pasada”
(EGW. Joyas de los testimonios, t. 3, pág. 443)
2
Contenido del Seminario: o Raíces Teológicas del Adventismo o El “Pueblo del Libro” o El Santuario o Desarrollo de la Teología del Sábado (1845-‐1855) o Congreso de la Asociación General de Minneapolis en 1888
o La Justificación por la Fe o La Deidad y la Iglesia Adventista (La Trinidad y la Naturaleza de Cristo)
o La Inspiración (1919) o El perfeccionismo de la “última generación”(1930-‐1960) o EGW y la inspiración. “The White Lie” Walter Rea (1982)
El adventismo no nació del vacío
Douglas W. Frank en su libro “Less than conquerors: How Evangelicals entered the twentieth century” escribió:
“Una vez leí acerca de unos aborígenes primitivos que cuando se les preguntó cómo se habían establecido en aquel remoto lugar, les informaron al interesado antropólogo que sus antepasados habían descendido del cielo por una enredadera.” (pág. 35)
Raíces teológicas del adventismo
o Los anabaptistas § Reforma Radical: Fueron más allá en los conceptos de los reformadores Lutero,
Calvino y Zuinglio. § No practicaban el bautismo infantil. § Introdujeron por primera vez el concepto de separación entre iglesia y estado. § Predicaban un retorno completo a las enseñanzas de la Biblia. Rechazo a las
tradiciones de la iglesia romana y a las fórmulas de credos. Regreso a los ideales de la iglesia del N.T.
§ El espíritu del anabaptismo filtró literalmente las tendencias religiosas en Norteamérica a principios del siglo XIX. Entre ellas: El Restauracionismo, la Conexión Cristiana, y el Metodismo.
o Los Puritanos (Parte del espíritu de los anabaptistas llegó a los E.U. a través de los puritanos)
§ Énfasis en la autoridad de la Biblia y en la obligación de guardar la ley. § Recalcaron la estricta observancia del día de reposo como pacto de obediencia a
Dios (el primer día de la semana, el día del Señor). § Abogaban por leyes dominicales. La santidad del domingo se convirtió en tema
social, político y religioso. § Presentaban el tema del día de reposo como la base del gran conflicto que se haría
manifiesto en los últimos días respecto a los mandamientos de Dios (Apoc. 12: 17; 14: 12)
3
o El Restauracionismo o Primitivismo
§ Enfoque radical del concepto “Sola Scriptura”. La Biblia debía ser la única guía en asuntos de fe y práctica.
§ Rechazaban la idea de que la reforma había acontecido exclusivamente en el siglo XVI. Su tarea era completar la obra de los reformadores.
§ No tenían iglesias organizadas, pero el espíritu del movimiento influyó profundamente en la teología de varias denominaciones de la época: los Discípulos de Cristo, las Iglesias de Dios, la Iglesia de Cristo, la Conexión Cristiana, entre otros.
o La Conexión Cristina
§ No creían en la Trinidad. “La Biblia no utiliza el concepto de un Dios manifestado en tres personas”. Llegaron a la conclusión de que la Trinidad fue una de las doctrinas que la iglesia adoptó en la Edad Media, como fruto de la gran apostasía.
§ Eran arrianos. “Cristo fue creado por Dios en algún momento de la eternidad antes de la creación del mundo.”
§ Rechazo a la doctrina de la inmortalidad del alma. § Jaime White y Joseph Bates (dos de los tres fundadores de la Iglesia Adventista) eran
miembros de esta denominación.
o El Metodismo, “Movimiento Wesleyano” § Era la denominación de más rápido crecimiento en la sociedad norteamericana del siglo
XIX. § Énfasis en el libre albedrío. § Cristo murió por toda la humanidad, no solo por una minoría predestinada (Calvino v/s
Arminio-‐Wesley) § Concepto de santificación (reacción ante el antinomianismo, gracia barata) § La justificación es algo momentáneo, la santificación un proceso que toma toda la vida
(justicia imputada e impartida). § Desarrollo del concepto de “perfección cristiana del carácter”. “El individuo vive en un
creciente estado de amor perfecto a Dios y a sus semejantes.” (Wesley) § Elena G. de White creció en la Iglesia Metodista Episcopal.
EL Pueblo del Libro
Después del chasco los pocos adventistas (milleritias) que perseveraron en el mensaje tomaron tres posiciones diferentes:
§ El grupo de los de la “Puerta Abierta” (nada ocurrió el 1844, Miller, Himes) § Los espiritualistas: Interpretación espiritual de la venida de Cristo (Cristo vino el
10/22/1844 de forma espiritual). Fanáticos y carismáticos. § El grupo de la “Puerta Cerrada” (algo ocurrió el 1844). La purificación del Santuario no
era la venida de Cristo. Interpretación de Daniel 7:13 “que vino hasta el Anciano de días” Apoc. 14: 7 “la hora de su juicio ha llegado”.Se volcaron a la Palabra buscando luz y revelación del cielo, tomándoles casi una década para desarrollar completamente la doctrina del Santuario y la interpretación del Juico Pre-‐advenimiento. En este grupo se encontraban los futuros adventistas del 7mo día, llegados a ser conocidos como el Pueblo del Libro.
4
Desde los comienzos de la Iglesia Adventista se reconoció a la Biblia como la única fuente de toda autoridad.
“Cada cristiano está de hecho obligado a utilizar la Biblia como una norma perfecta de fe y responsabilidad… No tiene la libertad de apartarse de ellas para aprender acerca de sus deberes mediante alguno de los dones que haya recibido. Afirmamos que en el momento que lo haga, colocara dichos dones en un pedestal equivocado, y asumirá una posición en extremo peligrosa. La Palabra debe estar al frente, y la iglesia debe contemplarla como la única regla por la cual hay que guiarse.”(James White: RH, 21de agosto, 1851) Dios tendrá en la tierra un pueblo que sostendrá la Biblia y la Biblia sola, como piedra de toque de todas las doctrinas y base de todas las reformas. Para poder soportar la prueba que les espera deben comprender la voluntad de Dios tal cual está revelada en su Palabra… Sólo los que hayan fortalecido su espíritu con las verdades de la Biblia podrán resistir en el último gran conflicto. Toda alma ha de pasar por la prueba decisiva: ¿Obedeceré a Dios antes que a los hombres? La hora crítica se acerca. ¿Hemos asentado los pies en la roca de la inmutable Palabra de Dios? (EGW. Conflicto de los Siglos, Cap. 38 Pág. 542) “Cuando la verdadera vida espiritual declina, aparece la tendencia de que decline también el avance del conocimiento de la verdad. El hombre descansa satisfecho con la luz que ya ha recibido de Dios y entorpece toda investigación progresiva de la Escritura. Se convierten en conservadores y buscan evitar la investigación… Muchos hoy, como en tiempos pasados… se aferrarán a tradiciones y adoran lo que ellos mismos no conocen... Cuando el pueblo está distraído y satisfecho con la luz que tiene, podemos estar seguros que no cuentan con el favor de Dios”. “Aquellos que creen que nunca tendrán que abandonar una idea aceptada por la mayoría, que nunca tendrán que cambiar de opinión, sufrirán desilusión.” (EGW. Counsels to Writers and Editors Pág. 38-‐41) “No hay excusa para que alguien tome la posición de que no hay más verdad para ser revelada y que no hay error en todas nuestras exposiciones de las Escrituras. El hecho de que muchas doctrinas hayan sido aceptadas como verdad por muchos años por nuestra gente no es prueba de que nuestras ideas sean infalibles. El tiempo no va a encontrar errores en la verdad y la verdad siempre será verdad. Ninguna doctrina verdadera perderá nada si se investiga profundamente” (EGW., 1888. Counsels to Writers and Editors, Pág. 35). “Habrá desarrollo en nuestro entendimiento, porque la verdad es capaz de constante expansión... nuestra exploración de la verdad todavía está incompleta. Hemos encontrado solamente algunos pocos rayos de la luz.” “There will be a development of the understanding, for the truth is capable of constant expansion . . . . Our exploration of truth is yet incomplete. We have gathered up only a few rays of light.” (EGW to P. T. Magan, Jan. 27, 1903)
5
“Los Adventistas del 7mo Día aceptan la Biblia como su único credo y sostienen ciertas creencias fundamentales como las enseñanzas de la Sagradas Escrituras. Estas creencias constituyen la comprensión y expresión de la iglesia de las verdades bíblicas. Pueden esperarse revisiones en una Sesión de la Asociación General cuando la iglesia es guiada por el Espíritu Santo a una comprensión más completa de la verdad bíblica o encuentra un lenguaje mejor en el cual expresar las enseñanzas de la Palabra de Dios.” (Creencias de los Adventistas del 7mo Dia, 2006, pag. 5, 6)
El Sábado
Raquel Oaks, bautista del 7mo día, compartió la verdad del sábado con un grupo de milleritas en la primavera de 1844 en Washington, estado de New Hampshire. En 1845 Joseph Bates leyó un articulo del Pr. Preble titulado “La Esperanza de Israel” y se convenció que nunca había habido cambio alguno del sábado al 1er día de la semana. En 1846 Bates presentó la verdad del sábado a Elena Harmon y ella la rechazó argumentando que tenía poca validez. Ella escribió:
“Por mi parte no le daba a esto gran importancia, y me parecía que el Pr. Bates se equivocaba al dedicar más consideración al cuarto mandamiento que a los otros nueve” (Notas Biográficas 103)
En 1846 Bates publicó el libro titulado “El Sábado, una Señal Perpetua”, donde expresó un enfoque del tema mayormente Bautista del 7mo día. Manifestó que el verdadero sábado era el 7mo día y que el papado había intentado cambiar la ley (Dan. 7:25). Sin embargo, aparecieron por primera vez dos aspectos de interpretación a la luz de la teología adventista:
§ El séptimo día debe ser restablecido antes del regreso de Jesucristo (Restauracionismo).
§ Relacionó el sábado con Apoc. 14:12. “Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesus”. Llegó a la conclusión que sustituir el sábado por el domingo constituía “la marca de la bestia.” (Apoc. 14: 9-‐12)
Después de haber estudiado cuidadosamente los argumentos de Bates, Jaime y Elena White, decidieron comenzar a guardar el 7mo día como día de reposo. Siete meses después, el primer sábado de Abril de 1847, Elena G. White recibió una visión confirmando la importancia del sábado. (Early Writings, pág. 22)
“Pero el Señor me dio una visión del santuario celestial. El templo de Dios estaba abierto en el cielo, y se me mostró el arca de Dios cubierta con el propiciatorio… Jesús levantó la cubierta del arca y vi las tablas de piedra en que estaban escritos los diez mandamientos. Me asombré al ver el cuarto mandamiento en el mismo centro de los diez preceptos, con una aureola luminosa que lo circundaba. El ángel dijo: “Este es, entre los Diez Mandamientos, el único que define al Dios vivo, que creó los cielos y la tierra y todas las cosas que en ellos hay.” (EGW. Notas Biográficas, pág. 103, 104)
Carencia de conocimiento en cuanto a los bordes demarcatorios del tiempo del día de reposo. ¿Cuándo comenzaba y cuándo terminaba el sábado? Algunos observaban el sábado de media
6
noche a media noche. Otros en Maine dedujeron que comenzaba al amanecer y terminaba al amanecer (Mat. 28: 1) Otros de la hora 18 a la hora 18 (6:00 p.m.). Joseph Bates defendía esta posición. Jaime White escribió: “Dios suscitó al hermano Bates para darnos la verdad del sábado. Debemos confiar más en su opinión que en las otras personas” (J. White, Carta 2 de junio 1848). Por diez años la mayoría de los adventistas guardaron el día de reposo de 6 p.m. a 6 p.m. Los hermanos adventistas procedentes de la Iglesia Bautista del 7mo Día cuestionaban la validez bíblica del principio defendido por Bates. Jaime White solicitó a J. N. Andrews que hiciera un estudio más exhaustivo del tema. En noviembre de 1855 Andrews, basándose en textos del A.T., determinó que la palabra “tarde” significa “puesta del sol”. Bates y los Whites rechazaron la nueva luz hasta que Elena recibió una visión confirmando los límites del sábado (desde la puesta del sol hasta la puesta del sol). La unidad de la iglesia, en lo tocante a este asunto, fue consolidada.
La Iglesia se organiza
o Mayo 21, 1863, en Battle Greek se organiza la Asociación General de los “Adventistas del 7mo Día”.
o Para 1863 la iglesia tenía 5 doctrinas pilares o distintivas conocidas como las “5 (Ss) del Adventismo”
§ Segunda Venida de Cristo § Santuario § Sábado § State of the dead: Inmortalidad del Alma § Spirit of Prophesy: Espíritu de Profecía
Justificación por la Fe
En el Congreso de la Asociación General de Minneapolis en 1888 existía un ambiente de disensión. La agenda estaba cargada de temas que desafiaban las interpretaciones tradicionales. Después de 40 años de haberse constituido la iglesia algunos dirigentes habían olvidado sus raíces bíblicas de Sola Scriptura y estaban usando sus posiciones de autoridad a fin de determinar la doctrina. El tema principal de las discusiones, entre otros, era el papel de la ley en Gálatas “la justificación por la fe”. Elena G. de White escribe una carta a los dirigentes antes del congreso expresando lo siguiente:
“Escudriñad las Escrituras cuidadosamente a fin de determinar que es verdad. La verdad no pierde nada cuando se la investiga cuidadosamente. Dejad que la Palabra de Dios hable por sí misma, que sea su propio intérprete. (EGW. Carta a los delegados, 5 agosto, 1888)
Cuatro principios teológicos tratados en el Congreso de Minneapolis:
1. Reconsiderar las instancias de autoridad para aclarar disputas de índole bíblica y teológica.
7
2. Comprensión más bíblica de la justificación por la fe. 3. Revisar la actitud adventista con relación a la Trinidad. 4. Indagaciones acerca de la naturaleza humana de Cristo.
La justificación por la fe no fue un tema de discusión en la iglesia por los primeros 40 años. El énfasis estaba en las “5 Ss”. Los pioneros creían en la justificación por la fe, pero entendían que ésta se aplicaba solamente al pasado; en el presente lo que contaba era la obediencia a la ley. En el año 1974 se publicó en la revista “Signs of the Times”:
“Como todos hemos violado la ley de Dios, y no podemos obedecer por nosotros mismos sus justos requerimientos, por tal razón dependemos de Cristo, primero para obtener justificación, y segundo, para recibir gracia con la ayuda de la cual, de ahora en adelante, obedecer en forma aceptable su santa ley (Solamente por fe, p. 97)
La posición de George Butle (Presidente C. G.) y Uriah Smith (Editor de la Review) con relación a la justificación por la fe se pueden resumir en el siguiente párrafo del artículo “Gospel Sickle” y publicado por U. Smith el 15 de Septiembre, 1888:
“EL plan de salvación tiene por objeto colocar a cada individuo de la familia humana bajo su propia responsabilidad en lo que tiene que ver con su destino futuro… Cristo murió para proveer un medio de perdón para el pecado Adámico, pero ahora cada uno depende de sus propios méritos”
Posición de G. Butler y U. Smith:
“Todo el objetivo de la obra de Cristo por nosotros es traernos otra vez a la ley, para que su justicia sea cumplida en nosotros por medio de nuestra obediencia, que es la base del juicio, y podamos aparecer en perfecta armonía con ella… Hay una justicia que nosotros debemos tener para poder ver el reino de Dios, la cual se llama ‘nuestra justicia,’ y esta justicia se obtiene estando en armonía con la ley de Dios.” (U. Smith, “Nuestra Justicia” Abril 11, 1889)
Posición de J. F. Ballenger: “Para hacer satisfacción por los pecados pasados, la fe es todo. Pero el deber presente es tarea nuestra “present duty is ours to perform” (J. F. Ballenger, Justification by Works)
Aportes de A. T. Jones y Ellet J. Waggoner:
§ La Biblia es el único árbitro respecto a la fe cristiana. § Énfasis en la justicia de Cristo. § Relación entre la ley, el evangelio y la justificación por la fe. § El cristiano justificado “vivirá por la fe…” § Los adventistas debían ser los primeros en exaltar a Jesús ante el mundo. § La ley de Dios al mismo tiempo que condena al pecado señala al evangelio.
Posición de Elena G. de White con referencia al tema de la justificación por la fe:
8
Primero: “No puedo asumir posición alguna, ni de un lado ni de otro, hasta que no haya estudiado el asunto” (MS 9, 1888). Dos días más tarde le escribió a Butler: “la Biblia y solo la Biblia, puede enderezar a los hombres y mantenerlos en rectitud.” (EGW a GIB y esposa, 11 dic. 1888)
Segundo: Respaldó el mensaje de Waggoner y Jones. “En su gran misericordia el Señor envió un preciosísimo mensaje a su pueblo por medio de los pastores W. y J. Muchos adventistas habían perdido de vista a Jesús. Este es el mensaje que Dios ordenó que fuera dado al mundo.” (TM 91-‐92)
Sermón de Elena G. de White en Battle Creek (6 de Febrero, 1890)
“¿Quién aceptará la luz del cielo? Dejen que la ley se ocupe de sí misma. Hemos estado enfatizando la ley a tal punto que nos hemos secado como los montes de Gilboa, sin rocío y sin lluvia. Confiemos en los méritos de Jesús de Nazaret. Que Dios nos ayude y unja nuestros ojos con colirio para que podamos ver. Salgan como salieron los discípulos después del Pentecostés, y vuestro testimonio sea una sacrificio vivo, y que muchas almas puedan conocer a Dios.” (White, E. G. “Who Will Accept the Light from Heaven? February 6, 1890)
Con relación al tema de la Justificación por la Fe necesitamos mencionar a M. L. Andreasen y su teología de la última generación (perfeccionismo) desarrollada en la década del 1930 al 1940.
§ El pueblo de Dios en la tierra necesita purificar el templo del alma, mientras que Cristo está purificando el Santuario Celestial.
§ La última generación tendrá que afrontar el tiempo de angustia sin un mediador. § Cristo regresará cuando su carácter sea perfectamente reproducido en su pueblo. § Cristo asumió la naturaleza caída de Adán (naturaleza post-‐lapsaria) § La expiación de Cristo no había terminado en la cruz. La obra de salvación no había sido
completada en la cruz. El hombre necesitaba completarla a través de una vida perfecta de manera que Dios fuera finalmente vindicado.
“En la última generación, Dios presenta la prueba final de que los hombres pueden guardar la ley de Dios y que pueden vivir sin pecar… Dios es finalmente vindicado mediante la última generación de santos. Mediante ellos él derrota a Satanás y gana su caso… La purificación del Santuario celestial depende de la purificación del pueblo de Dios en la tierra. (M. L. Andreasen. “The Sanctuary Service”, pág. 319-‐321)
Los adventistas del 7mo Día creen:
Con amor y misericordia infinitos Dios hizo que Cristo, que no conoció pecado, fuera hecho pecado por nosotros, para que nosotros pudiésemos ser hechos justicia de Dios en él. Guiados por el Espíritu Santo, experimentamos nuestra necesidad, reconocemos nuestra pecaminosidad, nos arrepentimos de nuestras transgresiones y ejercemos fe en Jesús como Señor y Cristo, como sustituto y ejemplo. Esta fe que recibe salvación nos llega por medio del poder divino de la Palabra y es un don de la gracia de Dios. Mediante Cristo somos justificados, adoptados como hijos e hijas de Dios y liberados del señorío del pecado. Al permanecer en él somos participantes de la naturaleza divina y
9
tenemos la seguridad de la salvación ahora y en ocasión del juicio. (“Creencias de los Adventistas del 7mo Día”, Pacific Press P. A., 2006, pág. 131).
La Deidad y la Iglesia Adventista
Rechazo original a la doctrina de la Trinidad. El grupo de milleritas que finalmente se transformó en la Iglesia Adventista del Séptimo Día había pertenecido a distintas denominaciones. Una de estas iglesias, la Conexión Cristiana, se destacaba especialmente por negar rotundamente la doctrina de la Trinidad. Durante los primeros años formativos de la iglesia, dos de los tres fundadores (Jaime White y José Bates) provenían de la Conexión Cristiana y, por lo tanto, eran Anti-‐trinitarios. Jaime White era pastor de la iglesia Conexión Cristiana.
Sin embargo, J. Bates y J. White no estaban solos en su concepción Anti-‐trinitaria: J. N. Andrews, J. N. Loughboroug, R. F. Cotrell , Urías Smith. Todos estos negaban tanto la divinidad y la eternidad de Cristo como la personalidad del Espíritu Santo (según ellos, el Espíritu Santo es una influencia, una energía del poder de Dios, pero no una persona). Declaraciones de J. N. Loughborough: “
“¿Qué objeciones serias hay en contra de la doctrina de la Trinidad? Hay muchas objeciones que podríamos alegar; pero, al considerar el poco espacio con el que contamos, las reduciremos a las tres siguientes: es contraria al sentido común. Es contraria a las Escrituras. Su origen es pagano y está basada en fábulas."(Loughborough. “Review and Herald”, 5 de Noviembre, 1861)
Declaraciones de Jaime White:
“Ese viejo credo trinitario no bíblico.” (DS, 24 enero1846) “El antiguo y absurdo trinitarismo que afirma que Jesucristo es el mismo Dios eterno.” (RH, 5 agosto1852) “La mayor falta que podemos encontrar en la Reforma es que los reformadores dejaron de reformar. Si hubieran continuado, e insistido, hasta que el último vestigio del papado hubiera quedado en el pasado, como la inmortalidad del alma, la aspersión, la Trinidad, y la observancia del domingo, la iglesia hoy estaría libre de todos los errores que contradicen a las Escrituras.” (RH, 7 febrero 1856) “La inexplicable Trinidad, una enseñanza de poca utilidad.” (DS, 29 noviembre 1877)
Declaraciones de J. N. Andrews:
“El Hijo de Dios tenia a Dios por Padre, y en algún momento pasado de la eternidad tuvo su origen.” (RH, 7 septiembre 1869). “Solamente Dios el Padre posee la inmortalidad y le había dado vida al Hijo. Por lo tanto, la inmortalidad de Cristo es derivada y no original.” (RH, 27 enero 1874)
10
Declaraciones de Uriah Smith:
“El Espíritu es esa misteriosa emanación mediante la cual el Padre y el Hijo llevan a cabo su inmensa e infinita obra.” (Boletín de la C. G. 146, 1891)
Todavía en 1898, el mismo año de la publicación del Deseado de Todas las Gentes, U. Smith mantenía una posición arriana con relación a la naturaleza de Cristo.
“Únicamente Dios, no tiene principio. En una época inicial cuando hubo un comienzo, un período tan remoto que para las mentes humanas equivale a la eternidad, apareció el Verbo.” (Thoughts on Revelation 1898, pag. 59)
Declaraciones de Elena G. de White:
1850: “Cristo y el Padre son seres personales con forma tangible” (Primeros escritos, pp. 54,77). 1869: “Cristo es igual a Dios” (Testimonios para la iglesia, t. 2, p. 181). 1872: “Cristo no fue creado” (Review and Herald, 17 de diciembre de 1872). 1878: “Cristo era el Hijo eterno” (Review and Herald, 08 de agosto de 1878). 1887: “Cristo preexistía con el Padre desde toda la eternidad” (Review and Herald, 05 de julio de 1887). 1888: “Una comprensión más amplia de la justificación por la fe demanda la plena divinidad de Cristo” (El conflicto de los siglos, p. 579). “Cristo es uno con el Padre Eterno: uno en naturaleza, en carácter y designios” (Ibíd., p. 547); “Gozaba de la misma autoridad y poder que el Padre” (Ibíd., p. 549). 1897: “El Espíritu Santo es la tercera persona en la Deidad” (Special Testimony, serie A. nº 10, p. 37). 1898: "En Cristo hay vida original, que no proviene ni deriva de otra” (El Deseado de todas las gentes, p. 489); El Espíritu Santo es “la tercera persona de la Divinidad” (Ibíd., p. 625). 1901 y 1905: “Los eternos dignatarios celestiales –Dios, Cristo y el Espíritu Santo”, “Los tres poderes más elevados del cielo: El Padre, El Hijo y el Espíritu Santo” son uno en naturaleza, carácter y propósito pero no en persona (citados en El Evangelismo, pp. 446,447).
La posición clara de Elena G. de White en cuanto al tema de la Trinidad y la naturaleza de Cristo contradice rotundamente a quienes expresan que la doctrina de la Trinidad es una desviación que obró la iglesia muchos años después de la muerte de la hermana White. Muy por el contrario, Elena de White hizo explícita su posición con respecto a la Trinidad 17 años antes de su muerte, en sus años de mayor lucidez.
Los adventistas del 7mo Día creen:
“Hay un solo Dios, que es la unidad de tres personas coeternas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Dios es inmortal, todopoderoso, omnisapiente, superior a todos y omnipresente. Es infinito y escapa a la comprensión humana, no obstante lo cual se puede conocer mediante su propia revelación que ha efectuado de si mismo. Es eternamente digno de
11
reverencia, adoración y servicio por parte de toda la creación” (Creencias de los Adventistas del 7mo Día” Pacific Press P. A., 2006, pág. 23).
Los adventistas del 7mo Día creen:
“Dios el Hijo Eterno fue encarnado en Jesucristo. Por medio de él fueron creadas todas las cosas; él revela el carácter de Dios, lleva a cabo la salvación de la humanidad y juzga al mundo. Aunque es verdaderamente Dios, sempiterno, también llegó a ser verdaderamente hombre, Jesús el Cristo. Sufrió y murió voluntariamente en la cruz por nuestros pecados y en nuestro lugar, resucitó de entre los muertos y ascendió al Padre para ministrar en el Santuario celestial en nuestro favor. Volverá otra vez con poder y gloria para liberar definitivamente a su pueblo y restaurar todas las cosas.” (Creencias de los Adventistas del 7mo Día” Pacific Press P. A., 2006, pág. 23).
Los adventistas del 7mo Día creen:
“Dios el Espíritu Santo estuvo activo con el Padre y el Hijo en ocasión de la creación, la encarnación y la redención. Inspiró a los autores de las Escrituras. Infundió poder a la vida de Cristo. Atrae y convence a los seres humanos; y a los que responden, renueva y transforma a la imagen de Dios. Enviado por el Padre y el Hijo está siempre con sus hijos, distribuye dones espirituales a la iglesia, la capacita para dar testimonio a favor de Cristo, y en armonía con las Escrituras conduce a toda verdad.” (Creencias de los Adventistas del 7mo Día” Pacific Press P. A., 2006, pág. 67).
La Inspiración (1919)
Para 1919; cuatro años después de la muerte de Elena G. De White, apareció un nuevo tema de discusión: ¿Es la Palabra de Dios verbalmente inspirada o usó Dios el lenguaje de los escritores para expresar la verdad divina? Dos teorías:
1. Inspiración Verbal: “La Biblia fue inspirada palabra por palabra. Los escritores eran como grabadoras que reproducían las palabras exactas de Dios. La Biblia es infalible e inerrante.” (W. W. Prescott, Haskell, C. P. Bollman)
2. Inspiración de ideas y conocimiento a través del Espíritu Santo: “Estas revelaciones fueron incorporadas en el lenguaje humano con todas sus limitaciones e imperfecciones, sin embargo, permanecieron como el testimonio de Dios. Dios inspiró a los hombres no las palabras.” (C.A.S.D. pág. 14) A. D. Daniells, EGW.
Posición de Elena G. de White:
“La Biblia está escrita por hombres inspirados, pero no es la forma del pensamiento y de la expresión de Dios. Dios no está representado como escritor. Los escritores de la Biblia eran los escribientes de Dios, no su pluma. No son las palabras de la Biblia las inspiradas, sino los hombres son los que fueron inspirados. La inspiración no obra en las palabras del hombre ni en sus expresiones, sino en el hombre mismo que esta imbuido con pensamientos bajo la influencia del Espíritu Santo. Pero las palabras reciben la
12
impresión de la mente individual. La mente y voluntad divinas se combinan con la mente y voluntad humanas. De ese modo, las declaraciones del hombre son la palabra de Dios. (EGW. Mensajes Selectos, Tomo 1, pág. 24)
Fue A. T. Jones, el primero que comenzó a usar los escritos de Elena G. de White como inspirados verbalmente e infalibles. Esta posición nunca fue aceptada por ella:
“Dependo del Espíritu del Señor tanto al escribir mis ideas como cuando las recibo; sin embargo, las palabras que utilizo al describir lo que he visto son las mías” (RH, 8 de octubre de 1867).
Elena G. de White no rechazó solamente la inspiración verbal sino que también negó que ella fuera infalible. En el año 1919, solo a cuatro años de la muerte de la hermana White, el ambiente adventista ya estaba formulando conceptos que levantaron varias luces rojas dentro de la dirección de la iglesia.
El 30 de Julio de 1919 se llamó a una reunión que ya había tenido precedente en la historia adventista (esta discusión comenzó en Battle Creek, años antes) para discutir el uso del Espíritu de Profecía en las clases de Biblia en nuestras escuelas y colegios. Aparentemente los educadores adventistas estaban enseñando conceptos muy peligrosos en cuanto al Espíritu de Profecía con relación a la Palabra de Dios.
Elena G. de White nunca pretendió que sus escritos estuvieran por encima de la Biblia. Prefería que la llamaran sierva de Dios en lugar de profeta. Prohibió el uso de sus escritos para dilucidar temas teológicos y para ser leídos en el pulpito en lugar de la Palabra de Dios. Ella era la luz menor que apuntaba a la Luz Mayor.
“¿Cómo el Señor puede bendecir a aquellos que manifiestan un espíritu de indiferencia que los lleva a caminar contrario a la luz que se les ha dado? Yo no pido que tomen mis palabras. Pongan a la hermana White a un lado: pónganla a un lado. No quiero que citen mis palabras otra vez mientras vivan, hasta que sean obedientes a la Biblia. Cuando tomen la Biblia y hagan de ella vuestra comida, vuestra carne y vuestra bebida, y hagan de ella los elementos de vuestro carácter, cuando hagan esto entenderán mejor como recibir los consejos de Dios. Aquí está la Palabra, la preciosa Palabra, exaltada delante de vosotros hoy. Y no quiero que vuelvan a decir que, ‘la hermana White dice’, ‘la hermana White dice esto’, ‘la hermana White dice aquello’ y ‘la hermana White dice lo otro’. Pero digan: ‘Así dice el Dios de Israel’ y entonces hagan lo que el Dios de Israel hace y dice.” (EGW, Spalding and Magan Collection, pág. 167)
La reunión contó con 25 participantes dentro de ellos estaba el Pr. Arthur G. Danilles, amigo cercano de los Whites y presidente de la Conferencia General. Entre los presentes se encontraban los más altos representantes de la iglesia en el área de publicaciones y educación: Director de la revista “Christian Educator” W. E. Howell, Jacob N. Andreson, profesor de Biblia del “Washington Foreign Mission Seminary” (hoy en día Columbia Union College,) Calvin P. Bollman y Leon L. Caviness respectivamente, editores de la revista “Liberty” y “Review and Herald”, Thomas M. French, el director de la cátedra de teología del Seminario Teológico Emmanuel (hoy en día Andrews University), Asa O. Tait, el editor de la revista “Signs of the
13
Times”, George B. Thompson, secretario de la Conferencia General. (La lista completa de los presentes y las minutas del documento se puede adquirir en “1919 Bible Conference/History Teachers Council” en www.whitestate.com).
Recomendaciones del Congreso:
A.G.Daniells: ¿Cuál debe ser la actitud del pueblo en este movimiento hacia la Biblia? Sabemos que deber ser nuestra autoridad sin credos y sin altos criticismos. Este es el Libro. La posición que mantenemos hoy es la posición correcta. Creemos magnificar al Libro, tomar nuestra instrucción de este Libro y predicar este Libro. Todo el plan de salvación, todo lo necesario para la salvación está en este Libro, y no necesitamos ir a buscar algo fuera de este Libro para ser salvos. Esta ha sido la actitud del espíritu de profecía hacia este Libro desde el comienzo, ¿verdad? [Voces: Yes.] Y yo supongo que podemos dar crédito al don de profecía por nuestra actitud hacia el Libro tanto como cualquier influencia que alguien hubiera podido ejercer. (“1919 Bible Conference/History Teachers Council”, Pág. 3, 4)
La posición de que la Biblia, y la Biblia sola, es la regla de nuestra fe y práctica no cancela los dones que Dios da a la iglesia. Rechazarlos es rechazar la parte de la Biblia que los presenta. Nosotros decimos, tengamos la Biblia, y dejemos que la Biblia sola sea nuestra regla de fe y práctica. Pongamos los dones donde ellos pertenecen, y todo estará en armonía. (White, James. Review and Herald, Octubre 3, 1854)
Los adventistas del 7mo Día creen:
“Uno de los dones del Espíritu Santo es el de profecía. Este don es una de las características de la iglesia remanente y se manifestó en el ministerio de Elena G. White. Como mensajera del Señor, sus escritos son una permanente y autorizada fuente de verdad, y proveen consuelo, dirección, instrucción y corrección a la iglesia. También establecen con claridad que la Biblia es la norma por la cual deben ser evaluadas todas las enseñanzas y toda experiencia.” (Creencias de los Adventistas del 7mo Día. Pacific Press P. A., 2006, pág. 246)