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ipos de Cirugía¿Qué es el diagnóstico quirúrgico?Usted analizará con el médico de su hijo la posibilidad de realizar una cirugía para corregir el problema de salud del niño.
Esta decisión estará basada en una evaluación precisa de los antecedentes médicos de su hijo y en la realización de
exámenes médicos, como análisis de sangre, radiografías, IRM, tomografías computadas, electrocardiograma u otras
pruebas de laboratorio realizadas para determinar el diagnóstico exacto.
¿Cuáles son los diferentes tipos de cirugía?La cirugía puede ser clasificada como mayor o menor, de acuerdo con la gravedad de la enfermedad, las partes del cuerpo
afectadas, la complejidad de la operación y el tiempo de recuperación esperado.
cirugía mayor
Son las cirugías de cabeza, cuello, tórax y abdomen. El tiempo de recuperación puede ser largo y exigir la
permanencia en terapia intensiva o varios días de hospitalización. Luego de estas cirugías, existe un riesgo mayor
de que se presenten complicaciones. En los niños, los tipos de cirugía mayor pueden incluir, entre otros, los
siguientes:o extirpación de tumores cerebrales
o reparación de malformaciones óseas en el cráneo y la cara
o reparación de cardiopatías congénitas, trasplante de órganos y reparación de malformaciones intestinales
o reparación de anomalías de la espina dorsal y tratamiento de lesiones sufridas en traumatismos contusos
graveso corrección de problemas en el desarrollo fetal de los pulmones, los intestinos, el diafragma o el ano.
cirugía menor
Algunas cirugías a las que son sometidos los niños se consideran menores. El tiempo de recuperación es corto y
los niños retoman rápidamente sus actividades normales. Generalmente, estas cirugías no requieren
hospitalización y los niños retornan a sus hogares en el mismo día. Es extraño que surjan complicaciones con
estos tipos de cirugía. Los ejemplos de los tipos más comunes de cirugía menor son, entre otros:o de tubos ("diábolos") de timpanostomía
o reparación de hernias
o reparación de fracturas de los huesos
o extirpación de lesiones en la piel
o biopsia de tumores
cirugía electiva
Son los procedimientos, que pueden ser útiles pero no esenciales, a los que el niño se someterá por decisión de
los padres. Un ejemplo es la extirpación de marcas de nacimiento o la circuncisión en el bebé de sexo masculino.
cirugía necesaria
Son los procedimientos que necesitan practicarse para asegurar la calidad de vida de su hijo en el futuro. Un
ejemplo es la realización de una fusión vertebral para reparar una curvatura severa de la columna vertebral. A
diferencia de la cirugía de emergencia, no es necesario realizar la cirugía necesaria de inmediato, por lo que usted
tendrá tiempo suficiente para preparar a su hijo.
cirugía de emergencia o urgencia
Este tipo de cirugía se realiza como resultado de una necesidad médica urgente, como en el caso de la reparación
de una malformación cardíaca congénita que pone en peligro la vida o la reparación de órganos internos
lesionados luego de un accidente automovilístico
COLELITIASIS:.
En medicina, la colelitiasis, comúnmente conocida como cálculos biliares o litiasis biliar, se refiere a la
formación de cálculos en la vías biliares, sobre todo en la vesícula biliar. Son acrecencias de materias
sólidas que pueden ser tan pequeñas como granos de arenilla o, en ocasiones excepcionales, tan grandes
que ocupan toda la vesícula. La mayor parte, sin embargo, suelen ser de tamaño intermedio, es decir de
menos de 20 mm, aproximadamente una pulgada. La mayor parte de estos cristales —cerca de un 80%—
están constituidos por cristales de colesterol, el resto son cristales pigmentados de color negro.1
Clases de cálculos biliares[editar]
Hay dos clases principales de cálculos biliares:
Los de colesterol, compuestos en su mayor parte por esa sustancia, que representan alrededor del
80% de todos los casos diagnosticados en los Estados Unidos.
Los pigmentarios, constituidos en su mayor parte por sales cálcicas de pigmentos biliares y otros
compuestos, a los que corresponde el 20% restante de los casos diagnosticados.
Puesto que la mayoría de los pacientes tienen cálculos de colesterol, la clase de cálculo es importante, ya
que sólo los cálculos de colesterol pueden tratarse por métodos no quirúrgicos.
Clasificación[editar]
Los cálculos biliares habitualmente están formados por una mezcla de colesterol, bilirrubinato cálcico,
proteínas y mucina. En función de sus compuestos predominantes se clasifican en:
Cálculos de colesterol, son los más frecuentes en los países industrializados.
Cálculos de pigmento negro, formados fundamentalmente de bilirrubinato cálcico a partir de la
hemólisis.
Cálculos de pigmento marrón, se forman a partir de infecciones bacterianas o helmínticas en el
sistema biliar, son frecuentes en poblaciones orientales.
Cálculos mixtos, constan fundamentalmente de pequeñas cantidades de calcio y sales de bilirrubinato.
El empleo generalizado de la ecografía abdominal para el estudio del dolor abdominal, la enfermedad
pélvica y la alteración de las enzimas hepáticas, ha provocado la identificación accidental de litiasis biliar
en muchos pacientes con ausencia de los síntomas típicos de esta enfermedad. Cerca del 30% de estos
casos desarrollarán síntomas a lo largo de su vida, en una proporción del 1,5-2% anual. Los pacientes
sintomáticos con litiasis biliar sin tratamiento tienen una mayor probabilidad de recurrencia de síntomas,
así como de complicaciones como la colecistitis, pancreatitis o coledocolitiasis.
Epidemiología[editar]
La colelitiasis es más frecuente en las mujeres que en los hombres con una proporción de 4 a 1, y hay
factores que predisponen a la enfermedad como la obesidad, la toma de anticonceptivos, las dislipemias,
la diabetes.
Factores de riesgo[editar]
Las 4 F: fatty, female, forty, fertility (obesidad, mujer, alrededor de 40 años, en edad fértil).
Los principales factores de riesgo para el desarrollo de litiasis biliar son:
Edad: más frecuente a partir de los 40 años, cerca del 20% de los adultos a partir de esta edad y del
30% en los mayores de 70 años.
Sexo femenino.
Embarazo, sobre todo para el desarrollo de cálculos de colesterol, normalmente son formas
asintomáticas de litiasis biliar y tanto el barro biliar como los cálculos menores de 10 mm
habitualmente desaparecen tras el parto.
Anticonceptivos orales y terapia hormonal sustitutiva con estrógenos, en este caso con mayor riesgo
en mujeres menores de 40 años y las que reciben una dosis mayor de 50 microgramos de estrógenos.
Otros fármacos como losfibratos y la ceftriaxona.
Antecedentes familiares de litiasis biliar.
Obesidad .
Pérdida rápida de peso.
Nutrición parenteral.
Diabetes Mellitus .
Cirrosis hepática .
Enfermedad de Crohn .
Cuadro clínico[editar]
Puede ser asintomática como ocurre en la mayoría de los pacientes, o presentar síntomas, con un cuadro
de dispepsiabiliar, que se caracteriza por: intolerancia a las comidas grasas, flatulencia, inflamación
abdominal, náuseas, vómitos, etc. Los cálculos pueden causar colecistitis (inflamación de la vesícula)
aguda, crónica, cólicos biliares, pancreatitis e ictericia obstructiva.
La manifestación principal es el cólico biliar, se produce al obstruir con un cálculo un conducto biliar, y se
suele asociar a la inflamación de la vesícula (colecistitis). La colecistitis aguda se caracteriza por: dolor
abdominal en el epigastrio o hipocondrio derecho, náuseas, vómitos, fiebre, peritonismo local o
un plastrón de vesícula biliar, etc. en el caso de la colecistitis crónica produce cólicos intermitentes e
inflamación crónica.
Pero el cuadro clínico clásico de colelitasis es dolor en hipocondrio derecho tipo cólico (intermitente),
mejora con analgesia. No se acompaña de ictericia, no fiebre, el vomito es raro, y tiene signo de
Murphy negativo, a diferencia de la colecistitis que tiene este signo positivo.
Síntomas[editar]
Son muchas las personas que, teniendo cálculos biliares, carecen de síntomas. Cuando los síntomas se
hacen evidentes, la persona portadora de cálculos biliares puede experimentar:
Dolor fuerte y seguido en el abdomen superior (hipocondrio derecho); este dolor puede propagarse
al tórax, hombros y espalda y se confunde a veces con los síntoma de un ataque al corazón.
Indigestión , náuseas o vómitos.
Dolor intenso de abdomen y sensibilidad al tacto en el lado derecho del abdomen cuando la vesícula
biliar está inflamada.
Se observa que cuando el líquido queda obstruido puede haber un ataque de dolor. Este dolor en el
abdomen, va en aumento, durando de una media hora hasta varias horas.
Complicaciones de los cálculos biliares[editar]
En muchos pacientes, los cálculos permanecen "mudos," es decir asintomáticos y plantean pocos
problemas de importancia. No obstante, cuanto más tiempo hayan estado presentes, mayor será la
probabilidad de que causen complicaciones. En un paciente determinado, la probabilidad de que un
cálculo mudo produzca malestar es de aproximadamente el 3% por año. Así pues, al cabo de 20 años la
mayor parte de las personas que tienen cálculos asintomáticos acabarán por experimentar síntomas. Una
vez aparecidos, los síntomas persisten. Y si el problema afecta a personas mayores, el tratamiento puede
hacerse mucho más difícil, sobre todo si la persona tiene otros problemas médicos.
A medida que aumentan de tamaño, los cálculos pueden obstruir el orificio de salida de la vesícula biliar y
con ello dar lugar a trastornos de carácter serio. La obstrucción puede comenzar en forma gradual u
ocasional, acompañada de inflamación de la vesícula (colecistitis crónica), y terminar en obstrucción total,
con inflamación aguda de la vesícula (colecistitis), cuadro que exige intervención quirúrgica.
En la vesícula biliar[editar]
Cólico biliar .
Colecistitis aguda y crónica.
Empiema .
Mucocele .
Carcinoma .
En los conductos biliares[editar]
Ictericia obstructiva.
Pancreatitis .
Colangitis .
En el intestino[editar]
Íleo por cálculos biliares.
Diagnóstico[editar]
La mayoría de los cálculos biliares pueden describirse mediante técnicas sencillas e indoloras. Los
pacientes que se quejan de dolor abdominal o de malestar gastrointestinal reciben a menudo análisis
específicos destinados a diagnosticar la presencia de cálculos.
Con frecuencia, basta una radiografía ordinaria del abdomen para descubrir los cálculos, sobre todo si son
ricos en calcio.
Hay otra técnica más sensible, denominada, ultrasonografía, con la que se produce una imagen o
fotografía de la vesícula y de los conductos biliares, permitiendo al médico determinar si hay algún cálculo
presente, cualquiera que sea su clase. Este método es el que más se emplea, por no emitir radiaciones.
Una tercera técnica se denomina colecistografía y requiere la deglución previa de unas pastillas que
contienen colorantes. El colorante pasa del torrente sanguíneo a la vesícula y pone de relieve el contorno
de ésta de manera que puedan detectarse los cálculos mediante radiografía.
Cuando se sospecha la presencia de cálculos en los conductos biliares son necesarios procedimientos
más complicados.
En la CPER (colangiopancreatografía endoscópica retrógrada) se introduce en el intestino delgado un tubo
flexible que se pasa al conducto biliar; seguidamente se inyecta en los conductos un colorante y se toma
una radiografía.
Cuando se emplea la técnica llamada CPT (colangiografía percutánea transhepática), se atraviesa el
abdomen con una aguja muy delgada que se hace pasar hasta la red de conductos del hígado.
Seguidamente se inyecta colorante y se toma una radiografía.
Tratamiento[editar]
Si las litiasis biliar llega a producir síntomas el tratamiento debe ser quirúrgico,
una colecistectomía (extirpación de lavesícula biliar). Aunque la vesícula biliar es un órgano importante, no
es esencial para la vida. Muchos pacientes con cálculos biliares -o con complicaciones resultantes de los
cálculos- se someten a la extirpación quirúrgica de la vesícula (colecistectomía), operación sin grave
peligro que es una de las practicadas con mayor frecuencia en todo el mundo. En los Estados Unidos, se
hace más de 500.000 veces al año.
El riesgo quirúrgico aumenta con la edad y si el paciente padece otras enfermedades. Extraída la vesícula,
la bilis fluye directamente del hígado al intestino delgado. El efecto sobre la digestión puede ser escaso o
nulo. Sin embargo, en algunos pacientes es posible que no desaparezcan los síntomas de flatosidad,
dolor, distensión por gases del abdomen, o náuseas. Hay un medicamento oral, el ácido ursodesoxicólico,
que disuelve los cálculos de colesterol y en muchos casos puede usarse con seguridad y eficacia como
substituto de la extirpación quirúrgica de la vesícula. El ácido ursodesoxicólico es un ácido biliar natural
que reduce la concentración de colesterol en la bilis y que en mucho casos disuelve lentamente los
cálculos, según el tamaño de éstos, en el plazo de 6 a 24 meses.
Numerosas personas que presentan cálculos de colesterol y en quienes no hay obstrucción alguna de los
conductos de entrada o salida de la bilis en la vesícula, son susceptibles de tratamiento con
ursodesoxicólico. El fármaco se tolera sumamente bien, siendo raros los casos observados de diarrea, que
suele ser leve y pasajera. Ha sido ampliamente utilizado y ensayado en Europa, Asia y los Estados
Unidos.
Otra posibilidad de sustituir la cirugía es la de valerse de la exploración con fines de investigación.
La litotricia extracorpórea por ondas de choque es una nueva técnica que utiliza ondas sonoras de origen
externo para fragmentar finamente los cálculos biliares. Los fragmentos se disuelven después con el ácido
ursodesoxicólico administrado por vía oral, si bien es posible que algunos cálculos pasen al exterior de
forma espontánea.
Nada menos que la mitad de los pacientes que se sometieron a estos procedimientos no quirúrgicos -que
dejan intacta la vesícula- no experimentaron reincidencia de cálculos al cabo de 5 años de observación.
Entre los que sí tuvieron recidiva, sólo un pequeño porcentaje manifiesta sintomatología, según se
desprende de un estudio reciente. Y para estos últimos, la repetición del tratamiento proporciona alivio.
colelap: colicestecomia por laparoscopia, es la extracción de la vesícula biliar por laparoscopia, es decir el cirujano entra al abdomen a nivel del ombligo por medio de un laparoscopio (un pequeño telescopio) conectado a una cámara especial proporcionándole al cirujano una imagen magnificada de los órganos internos del paciente en una pantalla de televisión.
indicaciones- cálculos biliares- inflamación por infección- dolor abdominal intenso debido a un dolor de cólico de vesícula- bloqueo de los conductos biliares
complicaciones postoperatorias- complicaciones en la herida- infección- cicatrices hipertrofias y queloides- eventracion- hemorragias- urinarias y renales