Don Ihde revisa el libro de Michele Don Ihde revisa el libro de Michele Marsonet: Marsonet: Idealism and Praxis: Idealism and Praxis:

The Philosophy of Nicholas RescherThe Philosophy of Nicholas Rescher

Jaime Ernesto Vargas MendozaJaime Ernesto Vargas MendozaAsociación Oaxaqueña de Psicología A.C.Asociación Oaxaqueña de Psicología A.C.

20102010

El volumen de “Idealismo y Praxis” es el tercero de una serie titulada Reading Rescher y el segundo que escribe Michele Marsonet, quien es Decano de la Facultad de Artes y Profesor en el Departamento de Filosofía de la Ciencia en la Universidad de Genoa, en Italia.

Marsonet cuenta con un Doctorado de la Universidad de Pittsburgh, de donde ha sido un visitante estudioso en el Centro de Filosofía de la Ciencia, durante la época en que Nicholas Rescher, Wilfrid Sellars y otros personajes, estaban en su máxima actividad. Al escribir este libro, su intención era la de ofrecer una breve introducción al amplio trabajo de Rescher (lo que no es una tarea fácil). La objeción más frecuente en contra de Rescher es que “escribió mucho”. Actualmente, con 80 años, ha publicado sobre 120 libros (8 libros más su colección de escritos publicada en 2005), lo que es una tasa como de un libro y medio por cada año de su vida. Claramente la tarea de Marsonet es enorme.

El contexto en el que Marsonet elige ubicar a Rescher es el que él y otros describen como neopragmatismo, el pragmatismo post-clásico asociado largamente con las filosofías analíticas.

Y aunque Marsonet no use este término, lo que ha mostrado en diversas revisiones del neopragmatismo (o filosofía post-analítica), es que Rescher resulta, lo que en economía se describe como un “opositor”. Por lo que no solo su gran producción constituye un problema, sino que también lo es la postura contraria que adopta Rescher frente a sus colegas.

Pero, antes de pasar a lo que yo considero como lo mejor de este libro, vamos a hacer un resumen de lo que contiene la obra.

Marsonet inicia con una historia del pragmatismo, sobretodo durante el Siglo XX, mencionando la llegada del positivismo y del movimiento analítico. El Capítulo Uno es un análisis descriptivo excelente y claro del arribo del positivismo y de la filosofía analítica, particularmente la filosofía de la ciencia, mismo que rápidamente produjo el declive y el desplazamiento del pragmatismo clásico.

Este análisis es seguido por una amplia introducción de los grandes personajes, incluyendo a Rescher como figura clave, en la segunda mitad del Siglo y la re-adopción analítica del pragmatismo, así como del “surgimiento y la caída de la Filosofía Analítica”.

Marsonet encuentra que es principalmente la práctica, lo que de alguna manera mantiene unidas las “variedades del pragmatismo”.

La postura oposicionista de Rescher empieza a surgir en su enfoque idealista, difícilmente una postura popular entre un consenso anti-metafísico, anti-idealista dominando en la filosofía lógica y lingüística del momento.

Marsonet nos proporciona un análisis temático de casi todos los tópicos de la filosofía: la ontología, la racionalidad, la verdad, el conocimiento, la metafísica, la ciencia y sus límites, así como la ética y la filosofía política. Esto es, como diría Rescher en sus palabras introductorias al libro de Marsonet, un viaje forzoso.

Veamos ahora. En su relato Marsonet vincula el empirismo lógico con la filosofía analítica. Frege considera al análisis lingüístico como la tarea principal, posiblemente la única, junto con los aspectos centrados en la ciencia por parte del empirismo lógico, siendo ambos movimientos los dominantes históricamente en la filosofía Americana de la primera mitad del Siglo XX.

Marsonet nos dice que este complejo tiene una ideología analítica y una metodología analítica cuyas trayectorias pretende identificar. Pero yo creo que descuida la existencia de una sociología analítica (o cultura), que también esta en juego.

Por ejemplo, si regresamos a la crítica de que Rescher escribió mucho, Marsonet nos indica que es la filosofía analítica la que propone el paradigma de que los filósofos escriban lo menos posible.

Pasemos ahora al asunto de los caracteres y el drama de los acuerdo y los desacuerdos que ocupa mucho de la dinámica de este libro.

Rescher, al escribir el Prefacio, admite que buena parte de su escritura es debida a su desacuerdo con muchos de sus contemporáneos, entre los que enlista a Davidson, Feyerabend, Habermas, Popper, Putnam, Kripke y sobre todo, con Rorty.

Marsonet, como su interprete, enfatiza una lista un poco diferente, parcialmente porque se enfoca más en el pragmatismo y en la paulatina distancia entre Rescher y la filosofía analítica. Los actores principales de Marsonet son: Rorty (sobre todo), Quine, Sellars (en menor grado), Davidson y Habermas.

En el fondo, por supuesto, están los abuelos del pragmatismo, principalmente Dewey, James, C. I. Peirce, C. I. Lewis, quienes juegan un rol prominente.

Cuando estaba leyendo “Idealism and Praxis”, recordaba el famoso libro de Rorty “Philosophy and the Mirror of Nature” (1979). Cuando apareció, fue revisado por todas las revistas intelectuales. Mucho del “ruido” que causó tenía que ver con cómo es que la filosofía analítica llegaba a su final, cómo es que la remplazaba una filosofía hermenéutica, con el resultado de que Rorty era efectivamente exiliado, terminando sus días en el Departamento de Literatura Comparativa de Stanford.

Sin embargo, cuando lo leí descubrí que tenía que ver más con cómo es que Sellars, Quine y Davidson habían abandonado el viejo análisis clásico y efectivamente se convertían en neopragmatistas.

Marsonet revisa esta misma escena, pero con una perspectiva más tardía, una en la que Rescher juega un papel mayor.

Así pues, Marsonet le presta mayor atención a Rescher y a Rorty que a los demás y siguiendo a Rescher distingue un neopragmatismo de izquierda (Rorty) de un neopragmatismo de derecha (Rescher).

A Rescher le preocupa que el enfoque de izquierda (completamente anti-fundacionalista, anti-esencialista y más evocador de Dewey en ciertos aspectos) llegue a estar muy cerca del relativismo. Todas las “conversaciones” de Rorty están ecualizadas, desplazando a la filosofía (y a la ciencia también) de cualquier posición privilegiada. Pero, como Marsonet reconoce, Rorty mantiene una ideología central para la filosofía analítica: la comunicación y el análisis centrado en lo lingüístico.

En contraste, Rescher se mantiene cercano a la afirmación de que la ciencia es la mejor de las actividades humanas que producen conocimiento. Para Rescher, aunque la capacidad auto-corregible de la ciencia solo puede encontrarse en una concepción idealista, la práctica científica mantiene su papel principal. Y contrariamente a Rorty, Rescher no privilegia lo lingüístico.

De esta manera Rorty y Rescher son polos opuestos del neopragmatismo contemporáneo y ambos comparten el ser, en cierto grado, marginados.

Marsonet también hace un magnífico trabajo analizando lo que está en medio de estos dos polos, cuando compara a Quine, Davidson y Sellars con Rescher.

Este libro es recomendable precisamente pues revisa todo el espectro del neopragmatismo.

Para terminar, quiero expresar una queja y esta es que los Editores no deberían elevar tanto los precios (89 euros), en libros que deberían leer muchas personas.

REFERENCIA:Notre Dame Philosophical Reviews (2004)