La comunicación en la experiencia cristiana

Estar al servicio de la comunicación catequética.

Adoptar los mecanismos que configuren la comunicación grupal.

Adaptar el mensaje de Jesús a los modos de comprender y expresarse.

Jesús es el más perfecto audiovisual de Dios.

Esta Palabra-Imagen de Dios que es Jesús sólo es comparable con las palabras-imágenes humanas.

Jesús no es sólo un representación o expresión de la realidad de Dios; es el lenguaje de Dios por excelencia.

Jesús hace audible y visible el mensaje (1Jn. 1)

Él es el mensajero en quien Dios se comunica.

El mensaje se identifica con el mensajero: Dios no sólo está en Jesús, sino que Jesús es el Hijo de Dios encarnado. No sólo es el audiovisual de Dios sino Dios mismo hecho audiovisual, que hace visible al Dios invisible.

Este audiovisual es el lenguaje original y fundante de los diversos lenguajes eclesiales.

Jesús ya no está físicamente entre nosotros; pero está presente y se hace audiovisual en la vida y en la experiencia de la comunidad cristiana que, como Jesús, anuncia con su palabra, con su testimonio y con su compromiso.

La comunidad es el audiovisual de Dios en el mundo actual.

Esta es la base donde se asienta el valor de los medios en la catequesis.

El lenguaje audiovisual tiene sus raíces en la misma pedagogía de Dios, una pedagogía de signos.

¿Cómo hacer hoy visible y audible la Palabra?

1. Se encuentra en la audiovisualidad básica y original de la comunidad eclesial.

2. Renovación de los lenguajes eclesiales. ¿Cómo hacer hablar de forma significativa el lenguaje de una tradición?

3. Posibilidades:

a. La audiovisualidad de la Biblia: formas expresivas de narración que evocan encuentro, acción que salva, que celebra, que compromete. Lenguaje bíblico aliado del lenguaje audiovisual.

b. El valor simbólico de la liturgia: elementos con valor expresivo: sensible, emocional, corporal, imaginativo, icónico, sonoro. Se ubica en el plano de lo emocional, de la analogía y de la experiencia.

c. El credo, expresión de la acción salvadora de Dios en la historia: confesión de fe e inteligencia de la fe ( lo visto, oído, palpado).

d. Lenguaje de la experiencia: la Palabra de Dios se cumple, implica a la persona, penetra en su interior y la transforma en todo su ser, es el lenguaje esencial de la comunicación catequética.

Todo mensaje requiere un lenguaje pero no todo lenguaje es capaz de transmitir el mismo mensaje.

De ahí que la Catequesis requiera el concurso de los diferentes lenguajes y medios, a fin de conseguir una acción integradora.

Carmita Coronado 2009