La Coronelía Guardas del Rey - Ministerio Defensa · 2015. 6. 24. · realizamos una barrera de...

La CoronelíaGuardas del Rey

Año IV NUMERO 24 2007Año IV NUMERO 24 2007

“Hijos somos del ínclito Marte”

Premio Internacional 2005

Jura de Bandera de Civiles 2007Jura de Bandera de Civiles 2007

Regimiento de Infantería Inmemorial del Rey nº 1

RReeddaacccciióónn

Desposito Legal: M-54.655.2002

Http://www.et.mde.es/inmemorial/

Http://www.coronelia-guardas-del-rey.com

Esta revista está abierta a todoel personal que desee colaboraren la misma. Los trabajos publi-cados representan, únicamente,la opinión personal de los auto-res.

DIRECTORCoronel D. Juan Valentín-Gamazo de Cárdenas

COORDINADOR Y REDACTORTeniente D. José Román del Álamo Velasco

COLABORACIÓN ESPECIALProfesor Dr. D. Guillermo Calleja Leal

COLABORADORESTeniente Coronel D. Carlos Ruiz LaprestaSoldado 1ª D. Óscar Sevillano Vergara

FOTÓGRAFOSdo. Dª Monica Blazquez García

CORRECTOR DE ESTILOCapitán D. Jesús María González del Saac

DISEŃO GRÁFICO Y MAQUETACIÓNTeniente D. José Román del Álamo Velasco

La Coronelía Guardas del Rey 2

Con este número nos despedimos hasta después de las vacaciones de verano. Aparte de exponer lasdiferentes actividades que hemos tenido durante estos meses tenemos un artículo sobre el origen delCESEDEN.

La fotografía de la portada corresponde a la Jura de Bandera de personal civil que tuvo lugar en alAcuartelamiento General Cavalcanti, los cuales gentilmente nos cedieron para realizar este emotivo acto al que asis-tieron alrededor de 350 civiles, entre los que juraron y sus familiares. Cabe señalar que entre el personal que juróBandera estaba el Inspector Jefe de la Policía Municipal de Madrid, acompañado de dos Subinspectores y sus fami-liares.

Aprovechamos para desearles unas felices y merecidas vacaciones de verano, que sirven fundamentalmentepara cargar las pilas.

La redacción



SSuummaarriioo

Regimiento...... 4Bon de Honores...8U. Musica............ 9Colaboraciones..11Regimiento de Patricios

Nuestra Historia..14La enseñanza Militar en el

Ateneo Militar de Madrid

WWW ..............38Tecnología ......... 40Cine ....................42¿Sabias Que? ..... 43Humor ............... 45



RReeggiimmiieennttooIII Aniversario

celebracion batalla deAlmansa

El pasado día 29 de abril secelebró en la ciudad deAlmansa un acto conmemora-

tivo del III centenario de la Batallaque tuvo lugar en esas tierras. Conobjeto de recrear la batalla asistieronuna serie de grupos históricos derecreación de diversos países, siendola participación Española la másimportante. El acto en el cual partici-pó el Regimiento consistió en unaparada militar con interpretación demarchas, un izado de bandera de los10 países europeos participantes,sobre las 13:00 horas se realizó unarecreación histórica finalizando a las15:00 con una comida de hermandadcon todos los participantes.

Nuestro Coronel con el Tercio de Morados Viejos

ACTO A LOSACTO A LOSCAIDOS DECAIDOS DECARÁCTERCARÁCTERPERIODICOPERIODICO

Alf. D. Jorge Fernández-Ordás

El pasado 8 de junio, presididopor el Ilmo. Sr. Coronel Jefedel Regi-miento y con la asis-

tencia de los Cuadros de Mandofrancos de servicio, tuvo lugar en elpatio del edificio de Plana Mayor yApoyo del Palacio de Buenavista unemotivo acto de homenaje a los quedieron su vida por España. Dichoacto, en el que participó unaCompañía de Honores, cincoGuiones del Batallón de Honores,Banda de Guerra y la Unidad de

Música del Inmemorial, comenzópor la lectura de la reseña históricadel Regimiento, relativa al nombra-miento en 1924 de S.A.R. el Príncipede Asturias como Alférez delRegimiento y a la heroica participa-ción de la Unidad en la decisiva

Batalla de Almansa acaecida durantela Guerra de Sucesión, cuyo tercercentenario se ha celebrado reciente-mente. A continuación se realizó eltradicional acto de homenaje a loscaídos, depositándose una corona delaurel en el monolito, para finalizarcon la interpretación del himno delRegimiento.

Esta celebración es la terceravez en los últimos meses que se rea-liz. Este acto, al que se ha bautizadocomo “viernesina”, comenzando suandadura para que con el paso deltiempo se convierta en una tradiciónconsolidada en el Regimiento y ensímbolo y muestra del respeto yagradecimiento de sus integrantes aaquellos que generosamente handado su vida por la Patria.

RReeggiimmiieennttoo



Otro año más conOtro año más conel Colegio Públicoel Colegio Público

“Regimiento“RegimientoInmemorial delInmemorial del

Rey”Rey”

El pasado día 13 dejunio tuvimos laoportunidad de pasar

una mañana musical, como todos losaños, con el Colegio Público“Regimiento Inmemorial del Rey nº1”, este colegio está situado enMoratalaz y lleva el nombre de nues-tro Regimiento desde su creación amediados de los 60, concretamenteen 1967.

Actualmente es de Infantil yPrimaria y tiene alrededor de 400alumnos entre los 3 y 12 años.

Los niños disfrutaron con“Paquito el Chocolatero” saliendo abailar en el patio del colegio, al fina-lizar el concierto el profesorado nosofreció, como todos los años, un vinode honor, el cual sirvió para mante-ner una amena conversación con losprofesores y estrechar los lazos entrelos “dos” Regimientos Inmemorialdel Rey.




Jura deJura deBandera deBandera de

Civiles 2007Civiles 2007

El pasado día 16 secelebró en el Acuar-telamiento General

Cavalcanti la Jura de Bandera dePersonal Civil de este año 2007. Esteacto fue acompañado por la lluviaque no nos abandonó durante todo elacto. Debido a esta climatologíaadversa hubo que variar el desarrollodel mismo, teniendo que realizarlobajo las tiendas parque montadas alefecto.

A esta jura asistieron alrede-dor de 350 personas entre personalque juró Bandera e invitados. El actofue presidido por el Teniente GeneralJefe del MALE Excmo. Sr. D.Ignacio Romay Custodio y consistióen la Jura de Bandera, Acto a los quedieron su vida por España, conciertoofrecido por la Unidad de Música yun Vino de Honor.




La Sección deLa Sección deArtilleríaArtillería

Tte. D. Juan Carlos RecioRueda

La sección de artilleríaTeniente Ruiz; perteneciente alBatallón de Honores del Regi-miento de infantería Inmemorialdel Rey nº 1 del C.G.E. Participóla semana del 9 al 13 de abril enunas EPART conjuntas con labatería real.

Dichos ejercicios se des-arrollaron en el campo de tiro delTeleno, integrándose personal delInmemorial con personal de laguardia real en los puestos delínea de piezas, observadores ,topografía y centro director defuegos (F.D.C.) . El objetivo dedichas EPART era poder realizarfuego real con dos unidades cuyamisión fundamental es rendirhonores. El lunes día 9 fue de

traslado a la zona y reconoci-miento del terreno. El martes 10se iniciaron ls trabajos previos,como son declinación de aparatostopográficos, levantamiento deasentamientos y observatorios,homogenización de la línea detiro de las piezas con la visual delgoniómetro de dicha pieza ypuesta en vigilancia e integraciónde todos los elementos que actúanen una acción de fuego.

El miércoles 11 se rompióel fuego a las 10:00 de la mañana,con un tiro experimental, necesa-rio para obtener los errores mete-orológicos y poder realizar suce-sivas acciones de fuego en efica-cia. A las 12:00 se recibió la visi-ta del Teniente General Jefe delcuarto de S.M. el Rey. El cualpudo designar in situ objetivosque serían batidos en eficacia. Almediodía fuimos invitados por laguardia real, al tradicional cocidomaragato típico en la zona, y queningún artillero se marcha sinprobarlo después de realizar su“bautismo de fuego”. Por la tardese continuaron los ejercicios defuego real, realizando un trans-porte láser con el observador des-orientado, que consiste en realizarun disparo de señalamiento, adicho disparo el observador nostransmite una orientación y iunadistancia. Con todo lo anteriorconseguimos situar topográfica-mente al observador, y éste a con-tinuación nos transmite una peti-ción de fuego a un objetivo queserá batido en eficacia. Este méto-do es tradicionalmente llamadométodo israelita, por ser ellosquienes lo desarrollaron. También

realizamos una barrera de fuego ydiversas eficacias, consumiendoese día un total de 46 disparos.

El jueves día 12 hubo queesperar a que se levantase labruma que existía en la zona decaída ya que la visibilidad impe-día la observación y correccióndel tiro. Aproximadamente a las10:00 comenzamos los ejerciciosque consistieron primero un tiroexperimental, para posteriormen-te realizar una barrera de conten-ción en eficacia.

Con estos últimos ejerci-cios se consumió toda la muni-

ción, dado por finalizadas lasescuelas prácticas de artillería. Latarde la dedicamos a realizar eltan importante mantenimiento alas piezas. Este tipo de piezas per-mite el poder ser desmontado encargas y que no tan antiguamenteeran transportadas por mulos. Locual permite una fácil limpieza yposterior engrasado.

El viernes 13 fue el día deregreso al acuartelamiento Gene-ral Cavalcanti. Aunque primerotoda la columna de viaje se pasópor El Pardo, para después despe-dirnos de los mandos y tropa de labatería real.

BBoonn ddee HHoonnoorreess



Mayo florido Mayo florido

y y

“sonoro”“sonoro”

Dejábamos la últimacrónica con ciertoaroma a semana

santa, y nos encontramos ahora enplena primavera donde la activi-dad de la Unidad de música seincrementa debido a sus numero-sos compromisos.

Comenzaremos este paseode actividades días antes del mesde mayo, momento en el que laUnidad de música participó en losactos de homenaje y recreación dela histórica Batalla de Almansa,celebrada el 25 de abril de 1707.Esta conmemoración recrea unacontecimiento de la Guerra deSucesión española que involucró amedia Europa dividiéndola entrelos partidarios de dos casas la aus-tracista y la borbónica dándosecita en la gran batalla librada entierras manchegas.

El día del tercer centenario,y tras la recepción de autoridadesy los grupos históricos que partici-paron en la recreación la Unidadabrió un desfile que condujo atodos hasta el punto exacto dondese celebró la batalla, cercano a suespléndido castillo. En el transcur-so de este desfile, banda y músicainterpretaron marchas típicas decada uno de los países que comba-tieron. Llegados a un punto deter-minado sonó el toque de Oraciónmilitar rindiendo así cumplidohomenaje a los combatientes falle-cidos en dicha batalla.

Ya en el mes de mayo, laintensa actividad de la Unidad,comienza con la participación enlos actos de la Retreta militar deMadrid del día 2 en su ya XXVedición. Acto desarrollado por dis-tintas calles de Madrid, incluyen-do distintas paradas en lugaresrelevantes. De entre esos puntostiene especial significación la

parada efectuada frente al edificiode sede de la 1ª SUIGE. Allí cadaunidad participante interpreta pie-zas características de su ejército,en nuestro caso, la Unidad del“Freno” interpretó AdelanteInmemorial marcha característicadel Ejército de Tierra y representa-tiva de nuestro Regimiento.Aunque si hay un momento espe-rado por el numeroso público asis-tente es la interpretación en laplaza Mayor de la Retreta deBurón por parte de todas las unida-

UUnniiddaadd ddee MM˙̇ÚÚssiiccaa



des participantes.

Tras distintos actos de dis-tinta índole castrense, es tradicio-nal que la Unidad de música parti-cipe en la cuestación con motivodel Día contra el Cáncer, efectua-da el día 10. En el Palacio deBuena-Vista se ofrece un conciertocon un repertorio ameno y que enesta ocasión estuvo dirigido por elsuboficial mayor D. HeliodoroCantarero. Una vez más la músicase une a este magnifico gesto quees la lucha contra esta terribleenfermedad tan presente en nues-tras vidas.

Otro acto de especial sin-gularidad tuvo lugar el día 24 par-ticipado en el nombramiento delJEMAD, como Halconero hono-rario, tuvo lugar en el Club de tirode Cantoblanco El gremio de hal-coneros del reino nombró a distin-tas autoridades como Halconerosentre los que se encontraba elExmo. Sr. D. Félix Sanz Roldán.La Unidad de música participó en

la citada ceremonia interpretandodistintas marchas militares. Al díasiguiente, el viernes 25 tuvo lugarel Relevo de la Guardia, antes deéste la Unidad ofreció un pequeñoconcierto a destacar de el la simpá-tica obra Cacería Real que tuvouna más que notable aceptaciónpor el público asistente.

Para finalizar el mes otracita importante cumplida el día deS. Fernando patrón del Arma deIngenieros. La Unidad participó enla parada militar presidida por ElExmo Sr. JEME D. Carlos VillarTurrau en la Academia deIngenieros en Hoyo de manzana-res.

El mes de junio comienzacon un acto importante, la activaparticipación de nuestro Regi-miento y su Unidad de música enlos actos centrales del día de lasFuerzas Armadas. La ciudad de

León ha sido elegida este año paradisfrutar durante una semana dedistintas actividades y exhibicio-nes con motivo del día de las FAS.

El acto central, presididopor SSMM los reyes, y organizadoeste año por el Ejército de Tierra,tuvo lugar en la soleada mañanadel 3 de junio. En éste se rindehomenaje a la Enseña Nacional y alos soldados que dieron su vidapor España, concluye esto con eltradicional desfile. En el transcur-so del desfile se pudo constatar elcariño del pueblo leonés alEjército.

De lo que acontezca deaquí en adelante daremos cuentaen el siguiente número de nuestrarevista después de un más que pre-visible caluroso verano.

Sargento 1º Alberto VillaLozano

UUnniiddaadd ddee MM˙̇ÚÚssiiccaa



Preámbulo de este artículo:

Coronel D. Fernando SánchezFernández

Por el interés que paranuestro Rgto. tiene este artículopublicado en la Revista Legión,sobre la historia del Regimientode Patricios de Buenos Aires, creoconveniente remitirlo a laRedacción de la misma, sin omitirla fuente.

Por la recíproca, he envia-do un artículo sobre la historia delInmemorial a la Revista Legión,para su publicación, conocimien-to de sus lectores, aun no tenganque preguntarse quien es eseRgto. de Infantería Inmemorialdel Rey Nº1 que sería el equiva-lente al de los Patricios de BuenosAires. Con la diferencia al equili-brar, de que el nuestro, por su ori-gen como Unidad, es el más anti-guo del Mundo, por lo que tam-bién remito a la Legión, la conti-nuidad de aquel ya escrito:

“El final feliz de la Unidad másveterana”

y la paz

EL PRIMERO DEEL PRIMERO DELA INFANTERIALA INFANTERIA

ARGENTINA:ARGENTINA:REGIMIENTO DEREGIMIENTO DE

PATRICIOS DEPATRICIOS DE

BUENOS AIRESBUENOS AIRES

La Revista “La Legión”continúa su repaso de unidadesdistinguidas de países latinoame-ricanos. En este número, nuestrorecorrido se detiene en laRepública Argentina para presen-tar a la unidad mas antigua, y unade las mas representativas y que-ridas, de su infantería: elRegimiento de Patricios nº1.

Antecedentes históricos

A principios del sigloXIX, la región del Río de la Plata,colonia de la monarquía española,presentaba una gran importanciaeconómica y estratégica. Por elPuerto de Buenos Aires, pasaba lamayor parte de los metales pre-ciosos procedentes de las minasamericanas, principalmente delAlto Perú, que proporcionabanriqueza a los países europeos. Deahí que su control resultara tras-cendental, convirtiéndose enobjeto de las ambiciones colonia-

listas británicas. Este objetivo seconcretó con el asalto y capturade Buenos Aires, en junio de1806, hecho que se ha conocidocomo la primera invasión británi-ca.

La respuesta no se hizoesperar e la mano del capitán denavío Santiago de Liniers,Comandante Militar delVirreinato del Río de la Plata. El12 de agosto, las fuerzas deLiniers, apoyadas por el fervorpopular, reconquistan la ciudad.Sin embargo, los motivos econó-micos-políticos que habíanimpulsado la primera incursiónmantenía su vigencia, por lo queLiniers, teniendo un nuevo ata-que, además de apoyarse en uni-dades españolas con nombres tanevocadores como Tercio deAndaluces, Tercio de Castilla,etc., emitió un bando por el queinvitaba a los ciudadanos locales

CCoollaabboorraacciioonneess



a formar batallones y compañías.Nace así, el 15 de septiembre,integrada por hijos de la Patria,nativos del virreinato (de ahí sunombre), la Legión de PatriciosVoluntarios Urbanos, antes inclu-so que la nación misma.Compuesto por tres batallones de1356 hombres, su primer jefe fueel teniente coronel CornelioSaavedra, que sería en 1810, elpresidente de la Primera Junta deGobierno Argentino.

Los temores de Liniers seconfirman y el 28 de junio de1807, los británicos atacan denuevo Buenos Aires en la segun-da invasión. Durante la lucha quesigue, los Patricios conocen subautismo de fuego, el 5 de juliode 1807. el Regimiento quedó

señalado como el guardián deBuenos Aires, cuyo nombre serefleja en el escudo del mismo.(un célebre verso lo resume así:Escudo glorioso/ de olivo y lau-rel/ le dio Buenos Aires/ alPatricio fiel).

Los Patricios estuvieronpresentes en las decisivas jorna-das de mayo de 1810, participan-do en el nacimiento de lo que hoydía es Argentina. El 29 de mayo,la primera Junta de Gobierno dis-puso la creación de Regimientode Infantería de Línea, siendo elde Patricios el primero de ellos.

Independencia argentina

El Regimiento tomó parte,a continuación, en todas las bata-llas decisivas de la guerra de laindependencia, siendo las másconocidas las de Tucumán ySalta. El 27 de febrero de 1812, alas órdenes de otro ilustro argenti-no, el coronel Manuel Belgrano,enarbolan por primera vez laBandera Nacional.Posteriormente, intervino en laguerra contra el imperio Brasil(1833-34) y en el rechazo de lassucesivas incursiones anglo-fran-cesas a las costas argentinas,ganando la gloria en el famosocombate de Vuelta de Obligado,el 20 de noviembre de 1845.Después de la guerra de la TripleAlianza contra Paraguay y sucampaña contra los indios, elRegimiento se instala, de maneradefinitiva, en su actual cuartel delelegante barrio bonaerense dePalermo.

Época reciente

Más próximos en el tiem-po han sucedido otros aconteci-mientos que han marcado el espí-ritu del Regimiento. En 1982, lacompañía A “Buenos Aires” parti-cipó en la guerra de las Malvinas,

principalmente en la defensa dePuerto Argentino y en el combatedel Monte Longdon. El únicomuerto de Patricios fue el soldadoClaudio Bastidas, excluido delservicio militar, pero voluntariopara luchar en Malvinas.

Más tarde, el 23 de enerode 1989, el Regimiento tomóparte en la reconquista del Cuartel




de la Tablada, sede delRegimiento de InfanteríaMecanizado “General Belgrano”nº 3, que había sido ocupado porel grupo subversivo “Todos por laPatria”, liderado por Jorge Bañosy el Padre Pujante. El violentocombate dejó 39 muertos y 60heridos.

Finalmente, en uno de losepisodios mas tristes de la historiamilitar argentina, el 3 de diciem-bre de 1990, el Cuartel dePalermo fue ocupado por ungrupo de militares disidentes, los“carapintadas” al mando del coro-nel Mohamed Seineldín, quehabía combatido junto a losPatricios en Malvinas. En la luchaque siguió a la ocupación se pro-dujeron 14 muertos y 50 heridos;entre los muertos, en cumplimien-to de su deber, el Segundo Jefe,teniente coronel Pita, y el oficialde operaciones, mayor Pedernera,del Regimiento. Todavía hoy se

puede ver, como recuerdo de loque sucedió, los impactos de balaen las paredes de los edificios delcuartel.

Actualidad

En la actualidad, a pesarde su lógica preparación demiembros del Regimiento como

observadores en misiones demantenimiento de la paz en todoel mundo, la principal misión delos Patricios es la escolta y segu-ridad del Jefe del Estado MayorGeneral del Ejército Argentino.También realizan, luciendo suvistoso uniforme, el ceremonialmilitar del Gobierno de la Ciudadde Buenos Aires, a la que tan liga-do está desde su creación y de laque su símbolo militar. (la escoltay ceremonial del Presidente de laRepública la realiza elRegimiento de Granaderos). Suequivalente en el Ejercito Españolsería el Regimiento Inmemorialdel Rey nº1.

Próximo a cumplir subicentenario, este año 2006,hablar del Regimiento dePatricios es hablar del testigo yprotagonista de la historia denuestra querida nación hermanala República Argentina.




LA ENSEÑANZAMILITAR EN EL

ATENEO MILITARDE MADRID(1871-1874) 1

Profesor Dr. Guillermo CallejaLeal

ANTECEDENTES

El Casino Militar deBarcelona

Desde muy antiguo losmilitares españoles siempre hansentido un gran interés en reunir-se para mejorar su formación; yde ahí la constante presencia dejefes y oficiales en las SociedadesEconómicas de Amigos del País,en el siglo XVIII. Además, inclu-so antes de la propia fundacióndel Ateneo del Ejército y laArmada, más conocido comoAteneo Militar, hallamos un ante-cedente efímero y cercano: elCasino Militar de Barcelona.

En la primavera de 1845,las condiciones de la CiudadCondal para el establecimiento deun centro cultural militar resulta-ban inmejorables, gracias al deci-dido apoyo del Capitán Generalde Cataluña, don ManuelGutiérrez de la Concha, futuroMarqués del Duero, y del generaldon Ramón María Narváez, elEspadón de Loja, a la sazón pre-sidente del Consejo de Ministrosy ministro de la Guerra desde elaño anterior, quien ya había dado

no pocas muestras de su enormeinterés por la ilustración delEjército.

Al poco tiempo de tomarel mando de la Capitanía General,Concha dispuso el establecimien-to de unas academias prácticas

para su guarnición militar, dondese impartieran clases de táctica,ordenanzas militares, matemática,tiro de pistola, gimnasia (novedo-sa en España como deporte) yescuela de instrucción primariapara la tropa. Los resultados satis-ficieron a Concha y así lo comu-nicó a Isabel II: “En lasAcademias de Matemáticas, enlas clases de Esgrima y deGimnástica han acreditado elmás laudable celo y un deseoardiente de aprender y de distin-guirse rivalizando la tropa y ofi-ciales con laudable estímulo”.

Animado por el enormeinterés que los militares habíanmostrado por la instrucción,Concha propuso al Gobierno lacreación de un casino militar alque podrían asociarse los oficia-les del Ejército y los de laArmada. Tal como figuraba en el“Reglamento del Casino Militarde Barcelona”, su propuesta con-

sistía en fundar un centro “dondela comunicación frecuente ymodo fraternal del trato de lasclases entre sí produjese, sin las-timar en nada los fueros de lasubordinación gradual, el comer-cio y comunicación de ideas quelleva a la instrucción más fácil yrápidamente, que el estudio aisla-do y las lecturas”. Por otra parte,los propios Estatutos garantiza-ban un férreo control por parte delas autoridades militares, al puntode que la Junta Directiva no podíareunirse sin estar presente suPresidente, que era el CapitánGeneral, o bien un representantesuyo.

La Reina autorizó la crea-ción del Casino de Barcelona (25-06-1845) y su ubicación en laplanta principal del antiguo con-vento de la Merced, que entoncesiba a ser transformado para acuar-telamiento. Tras la rehabilitacióndel edificio, aquel centro dispusode salones comunes, salas debillar y de esgrima, biblioteca ycomedores; y además, dos salonesexclusivos: el de los generales yel de los jefes.

Pero entre todas aquellasdependencias que Concha creíanecesarias, centró su atención enla Biblioteca, para la que creó unprimer fondo básico compuestocon 151 obras, 65 escritas en cas-tellano y las 86 restantes en fran-cés. Entre las primeras se encon-traban las escasas obras técnicasescritas por militares españoles,varias de literatura, historia gene-ral, historia militar y geografía; ytambién dos tratados de táctica

NNuueessttrraa HHiissttoorriiaa



Instituto Homeopático y Hospitalde San José. Madrid

traducidos de Jomini y Jaquinot.Y entre la colección de librosfranceses, la mayoría de ellos tra-taba sobre las campañas deNapoleón, porque el Ejércitofrancés y las campañas napoleó-nicas ejercían una poderosa fasci-nación a los militares ilustradosde aquella época; aunque asimis-mo había traducciones al francésde algunos tratadistas militaresque no eran precisamente france-ses, como el mencionado Jomini,Müller y Okoneff.

Pero sucedió que cuandoel Casino de Barcelona iba a serinaugurado, todo aquel magníficoproyecto se vino abajo por el cesedel general don Manuel Gutiérrezde la Concha, quien fue relevadoen el mando por el general donManuel Bretón, conde de la Rivay de Picamoixons (24-08-1846).Entre sus primeras medidas,Bretón dispuso instalar laCapitanía General de Cataluña enel antiguo convento de la Mercedy que las salas y salones que habí-an sido ricamente decorados parael Casino pasaran a ser la vivien-da de los Capitanes Generales.

Por otra parte, elPresidente del Consejo de Minis-tros y Ministro de la Guerra, elgeneral Narváez, accediendo a losruegos de Bretón, ordenó que labiblioteca del Casino quedara enel Estado Mayor.

Tras este intento fallidodel Casino Militar de Barcelona yantes de la Gloriosa del 68, algu-nos militares como Puig y Salazarintentaron crear centros culturalesen los que se estimulara el estudio

en las clases militares.

La Guerra franco-prusia-na y el nacimiento delmovimiento intelectual

militar español

Unos años más tarde, alinicio de la década de los años 70,surgió en España un importantemovimiento intelectual militarcaracterizado por tres actividades:una literatura militar en auge, conuna prolífera y valiosa bibliogra-fía de carácter técnico; unaextraordinaria prensa periódicamilitar; y sobre todo, la fundacióndel Ateneo del Ejército y laArmada. Como veremos después,dicha institución, más conocidacomo Ateneo Militar, desarrollóuna actividad muy intensa yejemplar, pese a su corta duraciónde tres años (1871-74), porquesentó las bases de un movimientointelectual militar que englobó laformación profesional castrense yque luego se extendería por todaEspaña en torno a centros socialesque canalizarán las inquietudesprofesionales y culturales de unabuena parte de la oficialidad.

Los orígenes de esteimportante movimiento intelec-tual castrense se remontan a 1870.Aquel año fue cuando el Ejércitode Prusia aplastó al de Francia,cuya resistencia sólo consiguiódemorar unas semanas el hundi-miento total y la proclamaciónsimbólica del Imperio alemán enVersalles, en enero de 1871, comouna institución supranacionaleuropea. Prusia había logrado

convertir toda una constelaciónde Estados alemanes en una uni-dad política, un Estado federal demúltiples soberanos bajo la auto-ridad imperial de Guillermo I.

El Ejército prusiano cons-tituía una formidable maquinariamilitar, por su armamento y porsu Estado Mayor, de ahí que no esde extrañar que su victoria crearaun movimiento de profesionaliza-ción militar que se generalizó enEuropa. En cuanto a los militaresespañoles, al relacionarse con losdemás ejércitos y sobre todo conlos europeos, a través de viajes deinstrucción, traducciones delibros y noticias vertidas en laPrensa, entendieron que no podí-an permanecer al margen de losavances militares prusianos.

El Ejército de Prusia sehabía impuesto en Europa esen-cialmente por las innovacionesrealizadas por su Estado Mayor,tanto en organización como entáctica. Primero había derrotado aAustria (1866) con el genialHelmuth Moltke; y luego humillóa Francia (1870-1871), demos-trando su superioridad frente a lasviejas tácticas militares napoleó-nicas y su excelente aprovecha-miento de las nuevas tecnologías,como el fusil de aguja, el telégra-fo eléctrico y el ferrocarril.

Si bien el Ejército prusia-no disponía de un magníficomaterial bélico, no menos ciertoes que su enorme poder se basabauna instrucción sólida y férrea,(heredera de la de Federico II, elRey Sargento), que le daba unaunidad que carecía el francés.




Además, sus mandos y oficialesnunca dejaban de estudiar y ensa-yar reformas para luego llevarlasa la práctica. Así por ejemplo, trasla campaña contra Austria, losprusianos realizaron grandesavances en Artillería que provo-caron el asombro general,mediante reformas técnicas y tác-ticas, cuyo estudio condujo a unainnovación de gran relevancia: lacreación de la Artillería de reser-va.

Por otra parte, además delos mencionados contactos denuestros militares con sus colegasde otros países, que les facilitabaninformaciones sobre la recienteguerra franco-prusiana, las noti-cias también llegaban a España através las revistas españolas quetraducían todo cuanto se publica-ba en la prensa extranjera.

Una vez incorporadosnuestros jefes y oficiales al pujan-te movimiento intelectual militareuropeo, la redacción de ElCorreo Militar intentó divulgarlos adelantos militares experi-mentados en la guerra franco-pru-siana. Por entonces, este influyen-te diario madrileño había empren-dido una campaña de ataquesmuy duros contra el Gobierno,acusándolo de mantener una pasi-vidad inaudita a diferencia de losgobiernos de otros países. Entresus acusaciones figuraban: nohaber creado ninguna comisiónpara el necesario estudio de laguerra; ningún centro oficialhabía mostrado el menor interéspor traducir la extensa bibliogra-fía existente al respecto; y aunque

el embajador español en Berlínhabía ofrecido al Ministerio de laGuerra, a través del de Estado, uncatálogo mensual de las publica-ciones y memorias técnicas delEjército alemán, con el fin de quelas Direcciones Generales de lasdistintas Armas solicitaran libros,su iniciativa apenas había desper-tado interés.

Era cierto. El Ministeriode la Guerra era insensible a estaproblemática y su pasmosa pasi-vidad causaba no poca preocupa-ción en el seno del Ejército. Esmás, cuando por fin el EstadoMayor mostró en 1872 un ciertointerés por la guerra franco-pru-siana, nombrando una comisiónpara traducir la memoria de lacontienda titulada La guerra ger-mano-francesa de 1870-1871,redactada por la prestigiosaSección de Historia del GranEstado Mayor de Prusia, tan sólose tradujo un único tomo.Aunque, por lo general, la apatíaministerial existente contrastabacon las iniciativas particulares.Aquel mismo año 1872 se publi-caron en España dos obras muyimportantes: Los fallos estratégi-cos de los franceses en la últimaguerra” de Vickede y “El artemilitar en el siglo XIX de WilhelmRüstow. Ambas fueron traduci-das, respectivamente, por dos ate-neístas militares ilustres: donArturo Cotarelo y don EduardoLópez Carrafa.

En aquellos turbulentosaños del Sexenio Revolucionario(1868-1874) se publicaron enEspaña numerosos libros, artícu-

los de prensa y folletos sobre laabolición de las quintas, temapolémico y escandaloso en extre-mo que enlazaba con la necesidadde la creación de los Ejércitospermanentes y la propia reorgani-zación castrense.

Hubo asimismo algunasobras en las que, ya sea por inicia-tiva oficial o bien particular, sequiso recoger los avances técni-cos de los ejércitos extranjeros.Baste recordar aquí la Comisiónformada por jefes y oficiales de laAdministración Militar, que a ins-tancias de su Director General,don Joaquín Jovellar, realizó unviaje por varios países centroeu-ropeos (1870), cuyos resultadosfueron luego publicados en unamemoria titulada Organizaciónadministrativa de varios Ejércitosde Europa comparada con la deEspaña; y también el viaje de ins-trucción de don Francisco Elorzay don Augusto Plasencia, quienespublicaron Noticias varias sobrela artillería de diferentes nacio-nes (Madrid, 1871).

Tampoco debemos olvidarvarias obras de relevante impor-tancia que reflejan hasta quépunto la capacidad militar delrecién instaurado Imperio alemánatrajo poderosamente la atencióne impresionó a nuestros militaresintelectuales. Podríamos citar lasobras de tres insignes ateneístasmilitares: Noticias referentes a laorganización y fuerza del Ejércitode la Confederación de laAlemania del Norte en general yde las tropas de Ingenieros enparticular, con un apéndice que




trata del nuevo imperio alemán,del coronel don Emilio Bernáldez(1871); La guerra entre Francia yAlemania en 1870-1871, del capi-tán de Infantería don CándidoVarona (Madrid, 1871); y Cartasescritas con motivo de la guerrafranco-alemana, de don EmilioPrieto (Madrid, 1872).

Entre los numerosos estu-dios técnicos realizados por arti-lleros, ingenieros y miembros delEstado Mayor, podríamos asimis-mo citar, entre otros: Nociones deArtillería, obra colosal del briga-dier don Cándido Barrios(Madrid, 1870-1871, dos tomos);La guerra y la geología, del coro-nel de Ingenieros don ÁngelRodríguez de Quijano y Arroquía(Madrid, 1871), estudio muy inte-resante traducido al francés ylibro de texto en las EscuelasSuperiores de París y Turín; y elProyecto de organización de unaBrigada de telegrafía de campa-ña, del capitán de Ingenieros donJosé de la Fuente.

Digna de mención es lamagnífica obra del general donJosé Almirante, Guía del oficialde campaña; y sobre todo, sumonumental Diccionario militaretimológico, histórico y tecnoló-gico (Madrid, 1869), una de lasobras más indispensables de lahistoriografía militar del sigloXIX y lectura obligada para cual-quier estudioso de HistoriaMilitar.

Almirante gozó de unenorme prestigio como intelectualen su época y su pensamiento esde un enorme interés. Por todo

ello, no puede resultarnos extrañoel que don Luis Vidart continua-mente intentara convencerle paraque se hiciera socio del AteneoMilitar de Madrid cuando aún eracoronel, dándose además la cir-cunstancia de que ambos compar-tían la misma idea de que el Artede la Guerra debía considerarsecomo ciencia. Para él, el estudiode la Historia Militar exigía elnecesario conocimiento demuchos factores, entre otros: lascausas que han provocado unaguerra, cómo eran los ejércitos ylos campos de batalla, las opera-ciones que han conducido al des-enlace de una contienda, etc.;como asimismo el estudio combi-nado de las distintas Armas. Deahí que arremetiera con durezacontra todos cuantos en su épocacultivaban el estudio de laHistoria Militar interesándosesólo por los uniformes, las conde-coraciones, los emblemas y elbello romanticismo que despren-dían las batallas.

Por último, sólo añadirque el general Almirante se anti-cipó a su tiempo al intentar llevarla Historia Militar a los centros enlos que se discutía el método cien-tífico; e incluso abrigó la idea deimpartir un curso de HistoriaMilitar en la Universidad Centralde Madrid, muy similar al que yaexistía en algunas prestigiosasuniversidades extranjeras.

La Prensa Militar

La prensa militar tuvo ungran desarrollo. Entre sus publi-

caciones más señeras podríancitarse las siguientes: El CorreoMilitar, antes mencionado;Revista del Ateneo Militar; LasAcademias de Regimiento, revistamensual fundada en 1870 por donSerafín Olave, comandante y bri-llante diputado federalista, y quecerró en 1872; La FuerzaPública, diario fundado por elcélebre ateneísta militar donFrancisco Villamartín, y cuyosaños de fundación y cierre fueronlos mismos años que el anterior;El Propagador del Arte Militar,diario semanal fundado por donEduardo de Mariátegui, coman-dante de Ingenieros, que sólo tuvo18 números en 1872; MemorialCientífico del Ejército y de laArmada, excelente revista dirigi-da por el ateneísta militar donMiguel Ángel Espina, de la quepor desgracia sólo se publicaron 5únicos números en 1871; laRevista Militar Contemporánea,fundada en 1872 por don CándidoBarrios, artillero de la Armada yateneísta militar de pro; etc.

Mas no queremos ni pode-mos extendernos más al tratar elmovimiento literario militar espa-ñol y la Prensa Militar, porqueaquí no es el tema en cuestión.Tan sólo hemos pretendido des-cribir muy someramente elmomento en que surge el AteneoMilitar de Madrid, que es el tér-mino de la guerra franco-prusia-na. Una guerra que influyó deforma decisiva en el movimientointelectual militar y que guardauna estrecha relación con la fun-dación del Ateneo Militar, al que




pertenecen o simpatizan todos sussocios, quienes abarcan todas lastendencias políticas.

FUNDACIÓN DEL ATE-NEO MILITAR

El período comprendidoentre la Revolución de LaGloriosa de 1868 y el pronuncia-miento del general don ArsenioMartínez Campos, que proclamaRey a Alfonso XII de Borbón en1874, estuvo caracterizado poruna fuerte inestabilidad en loreferente al Ejército. De ahí queen sólo 6 años hubiera ¡29 minis-tros de la Guerra! Además, todoello se vio complicado en aquelmismo año 1868 por el estallidode la Guerra de los Diez Años oRevolución de Yara, que fue laprimera y la más duradera de lastres guerras independentistas quese libraron en Cuba. 2

Hacia 1871, en aquellaépoca de incertidumbre, laRevolución liderada por el gene-ral don Juan Prim y Prats, condede Reus y marqués de LosCastillejos, se cuestionaba entodos los cuarteles y la moral cas-trense estaba por el suelo, pueslos militares que habían apoyadola Revolución creían que ésta sehabía vuelto contra ellos, por losataques que recibían de ciertaprensa de izquierdas y los debatesdel Congreso por la incumplidapromesa de la abolición de lasquintas. Además, con los movi-mientos anarquistas existentes enEuropa y en España, se había ini-ciado la consolidación del antimi-

litarismo, cuestionándose la nece-sidad o no de un Ejército perma-nente.

Pero pese a este ambientetan contrario, un sector minorita-rio del Ejército tenía un enormeinterés por la formación y mayorprofesionalización de los mandosmilitares. Creía que urgía la nece-saria la cohesión en un colectivodesunido por la política, y sobretodo, exigía que se pusiera térmi-no a la práctica desastrosa de losascensos indiscriminados y de lasrecompensas injustas que mina-ban la moral militar.

Tras el triunfo de LaGloriosa había surgido en Madridun buen número de sociedades,como el Club Revolucionario dela calle de la Yedra, el Club delCongreso de la calle del Lobo, elCasino Republicano de la CalleMayor, la Tertulia Progresista yotras. Pero al margen de tales aso-ciaciones, tan dadas a las reunio-nes políticas y que en muchoscasos resultaban esperpénticas,una media docena de intelectualesmilitares vio con claridad y com-prendió que era el momento opor-tuno para fundar un ateneo militarque, basándose en contenidosintelectuales, fuera capaz de pro-mover un cambio profundo en elámbito castrense, para que losmilitares modificaran sus actitu-des y comportamientos, y sobretodo, abandonaran para siemprela política y se centraran sólo enlos asuntos profesionales propiosde la Milicia. Su modelo ideal erael ya prestigioso AteneoCientífico y Literario de Madrid,

y precisamente su influencia seríatal, que la futura institución se lla-maría Ateneo Científico delEjército y de la Armada, aunquefuera conocido como “AteneoMilitar”.

En definitiva, se trataba decrear un centro cultural generadorde ideas, como un núcleo activoregeneracionista dentro de unEjército rutinario y desmoraliza-do. Pero en realidad no era ungrupo de presión militar contra elGobierno que pretendiera defen-der unos intereses comunes; puesprecisamente para eso, un añodespués de su fundación nacerá laAsociación Mutua del Ejército yde la Armada.

El capitán don NicolásEstévanez, muy apreciado en losambientes intelectuales castren-ses, se había distinguido en laguerra de África (1859-1860)antes de ser miembro fundadordel Ateneo Militar (1871), fuemiembro del Directorio republi-cano (1872) y ministro de laGuerra (1873). 3 Pero lo que aquínos importa es que en 1868 publi-có La milicia, tipos y costumbresmilitares, un libro que se convir-tió en un verdadero best selleralcanzando su tercera edición en1870. Su cuento titulado “El apli-cado” comienza de esta críticabrutal que reclama a gritos laregeneración del abatido espíritudel Ejército:

“Cuando un oficial jovense incorpora a un cuerpo, losantiguos le preguntan si tieneparientes generales o buenasrelaciones en Madrid.




Si el oficial novel dice queno cuenta con más protección quesu derecho, no estudie usted, leresponden, no estudie usted, por-que es inútil. Usted no ascenderáaunque invente otra pólvora.

Pero si el joven oficialmanifiesta que tiene protectores,no estudie usted, le replican; noestudie usted, porque de todas lasmaneras V. será pronto general”.

En 1870, el teniente donEugenio de la Iglesia escribió enEl Correo Militar sus reflexionessobre la urgente necesidad decrear un Ateneo Militar enMadrid para la regeneración delEjército: “La inmediata creaciónen Madrid de un Ateneo Militar,donde confundidas las diferentesjerarquías de la milicia, se llega-se a conseguir esa unión y com-pañerismo que hoy por desgraciano existe entre nosotros; dondereunidos grandes elementos deinstrucción, se hiciese ésta fácil yagradable y, finalmente, dondepor medio de conferencias públi-cas para discutir sobre todos losramos de la difícil ciencia de laguerra, se hiciese conocer y apre-ciar debidamente las notabilida-des del Ejército”.

Poco después, tras unaserie de reuniones, el mencionadopequeño grupo de militares deci-dió que había llegado el momentode fundar el Ateneo Militar. Entreellos estuvieron: el capitán donMiguel A. Espina, director de ElCorreo Militar; algunos del con-sejo de redacción del mismo dia-rio, como el comandante don JoséCampos y los capitanes don

Arturo Cotarelo y don MelchorPardo; el teniente don EmilioPrieto, director de El Memorial deCaballería; y el inquieto coman-dante don Luis Vidart. Así pues,el capitán de Infantería donEduardo López Carrafa publicóen El Correo Militar un artículo(26-03-1871) que constituía unverdadero manifiesto colectivo amodo de declaración de intencio-nes y punto de enganche dirigidoa sus compañeros de Armas, a losgenerales y a los jefes y oficialesde Mar y de Tierra, con lassiguientes ideas:1º.- Durante siglos, toda iniciati-

va del Ejército o de laArmada siempre había parti-do desde arriba, lo que habíaconducido a la apatía gene-ral ante los problemas. Poreso el Ateneo Militar teníaque fundarse por iniciativaprivada y no oficial.

2º.- El Ateneo Militar deberíaservir de estímulo para laregeneración y europeiza-ción del Ejército y de laArmada.

3º.- Se ocuparía sólo de la for-mación profesional cas-trense. Por tanto, la necesi-dad de unidad entre losmilitares que había mani-festado el teniente de laIglesia fue cuidadosa eintencionadamente omiti-da.

4º.- Una vez fundado el AteneoMilitar, se crearían centrossimilares en todas las capi-tales de distrito, para asímejorar la formación pro-

fesional del Ejército y de laArmada, y mejorar lasrelaciones con la sociedadcivil.

5º.- En la redacción del periódi-co habría una lista abiertapara quien quisiera inscri-birse en el proyecto; yluego, una vez recogidas50 firmas, se procedería ala fundación del Ateneodel Ejército y la Armada. Un mes después se cele-

bró la primera reunión ateneísta(23-04-1871), en los locales pres-tados por la Fundación InstitutoHomeopático en el Hospital deSan José. Desde entonces se fue-ron formando distintas comisio-nes para la redacción de los regla-mentos y estatutos, participandoalgunos militares que habían des-tacado o destacarían después en eltratado militar o la literatura cas-trense, como: el comandante donFrancisco Villamartín, el capitándon Nicolás Estévanez, el enton-ces teniente don Federico deMadariaga, el coronel donAntonio Vallecillo, don Eduardode Mariategui, el coronel Pérez deRozas y los capitanes Gómez deAvellaneda y Fernández Pascual,entre otros.4 Poco después seformó la primera Junta Directiva(14-05-1871), presidida por elgeneral don Manuel Gutiérrez dela Concha, marqués del Duero, elmismo que años antes habíaintentado promocionar la funda-ción del Casino de Barcelona.

Una vez redactados losreglamentos y estatutos, el 16 dejulio de 1871 tuvo lugar la sesión




inaugural del Ateneo de Madriden su sede, ubicada no lejos de laPuerta del Sol y de la plaza deIsabel II, y concretamente en elnúmero 2 de la céntrica plaza deSanta Catalina de los Donados,paralela a la calle Arenal, que esla pequeña plaza donde está la tancastiza iglesia del Santo Niño delRemedio. Aquella célebre sesióninaugural contó con la presenciade varios miembros del CuerpoDiplomático, representantes delas cinco Reales Academias, de laUniversidad Central, del Ateneode Madrid 5 y de la Prensa, exministros, senadores y diputados,y oficiales generales del Ejércitoy de la Armada. Entre estos últi-mos asistieron: los DirectoresGenerales de las Armas, elCapitán General de Castilla laNueva, el Gobernador Militar dela provincia de Madrid, elVicepresidente del Almirantazgo,el Vicario General Castrense, suAuditor y el Intendente Militardel Distrito.

El éxito de la convocato-ria para la fundación del AteneoMilitar fue arrollador entre laguarnición militar de Madrid,pues pasó de 50 a 249 socios enlos cuatro meses escasos quetranscurrieron desde el manifiestodel capitán López Carrafa y susamigos (26 de marzo) a su inau-guración (16 de julio). 6

Pero pese a que la funda-ción del Ateneo Militar obedecíaa una iniciativa privada de ungrupo de socios fundadores, éstossiempre quisieron vincular a lasmás altas autoridades militares.

Por eso nombrarán copresidenteshonorarios a los Ministros deGuerra y Marina; y como socioshonorarios a los Directores detodas las Armas y Cuerpos, alCapitán General de Castilla laNueva y a una serie de capitanesgenerales como: don JoséGutiérrez de la Concha, marquésde La Habana; su hermano donManuel Gutiérrez de la Concha,marqués del Duero; donBaldomero Espartero, marqués dela Victoria; don Manuel Pavía yLacy, marqués de Novaliches; ydon Francisco SerranoDomínguez, duque de la Torre yconde de Santovenia; entre otros.7

Por otra parte, aunque losprincipales protagonistas de laconvocatoria para la fundacióneran de ideas avanzadas, no porello podría calificarse al AteneoMilitar como un “club de ideolo-gía liberal”. El Ateneo Militarnunca fue un club político de unaideología concreta, sino que estu-vo abierto a todos los militaresinteresados, sea cual fuere su ide-ología; por tanto, allí se mezcla-ron liberales tan distinguidoscomo don Nicolás Estévanez, donFernando Pierda, don JoséNavarrete, don FranciscoVillamartín o don José LópezDomínguez, con muy ilustresconservadores como donFernando y don Rafael Primo deRivera, don Antonio López deLetona o el Marqués de LaHabana.

LOS HOMBRES DEL

ATENEO MILITAR

Muchos fueron los milita-res que tuvieron una participaciónbrillante y relevante en la funda-ción, la organización y las activi-dades del Ateneo Militar. Por ello,aquí vamos a tratar sólo a cuatrode ellos y someramente: donEduardo López Garrafa (quien sehabía firmado el manifiesto), donLuis Vidart, don FranciscoVillamartín y don ArturoCotarelo.

Eduardo López Carrafa

El comandante deInfantería don Eduardo LópezCarrafa había demostrado tenerinquietudes intelectuales muytempranas, pues siendo cadete(1856-1859) había participado enel movimiento literario que habíaen el Colegio de Infantería.Además, había fundado laSociedad Literaria junto conCotarelo y varios compañeros, eincluso editado un diario. 8

En 1859 abandonó elColegio de Infantería; y un añodespués ascendió a teniente porsus méritos militares contraídosen África, concretamente en lascélebres batallas de LosCastillejos (01-01-1860) y Tetuán(04-02-1860), sirviendo a lasórdenes del general don AntonioRos de Olano.

La preparación de la revo-lución de 1868, conocida comoLa Gloriosa o La Septembrina,comenzó en agosto de 1866. 9




El movimiento revolucionario,liderado por el general Prim, nocesó en sus actividades conspira-tivas hasta que la Revolución seinició en septiembre de 1868 conel pronunciamiento de la flotasurta en Cádiz. Pronto sumaronfuerzas militares y también lasjuntas revolucionarias, extendién-dose el movimiento con granrapidez por toda España, hastaque por fin se dio el encuentromilitar de Alcolea, entre las tropassublevadas y las fieles a la Reina,que supuso el triunfo de las pri-meras, la salida de ella haciaFrancia y el inicio del períodoconocido como el SexenioDemocrático.

Antes del pronunciamien-to de Cádiz, el entonces tenienteLópez Carrafa confraternizó conel pueblo malagueño en la nochedel 21 de marzo de 1868 y loarengó en varios puntos delvecindario, sobre todo ante elmonumento erigido al liberal donJosé María de Torrijos. Por talacción, la Junta Revolucionariade Málaga le recompensía des-pués con el empleo de Capitán(09-10-1868).

Pero tal ascenso no agradóal entonces capitán LópezCarrafa, pues le parecía muy pocopara sus grandes “servicios a lalibertad”; por lo que en noviem-bre pidió el empleo de comandan-te en recompensa por su compor-tamiento en los años 1860, 1866 y1868. Además, en su instancia desolicitud adjuntó una carta de supadre, el teniente don MarcelinoLópez, escrita (08-05-1848) poco

antes de ser fusilado por su parti-cipación en la sublevación contrael gobierno de Narváez en el cen-tro de Madrid. 10 Aunque elgobierno de Serrano dio la calladapor respuesta a la petición deLópez Carrafa, Prim, ministro dela Guerra, ratificó su ascenso aCapitán en diciembre.

López Carrafa participócon don Nicolás Estévanez, tam-bién ilustre republicano e íntimoamigo suyo, en la insurrecciónrepublicana de Béjar, lo que lecostó a ambos la huida a Portugal.Allí permaneció exiliado LópezCarrafa hasta que pudo acogerse ala amnistía promulgada por elgobierno de Prim para delitospolíticos (09-08-1870). Poco des-pués, cuando a los 31 años deedad acababa de solicitar su read-misión en el Ejército, publicó enEl Correo Militar (26-03-1871)su famoso artículo que dio paso ala fundación del Ateneo delEjército y de la Armada, másconocido como Ateneo Militar.

Fue uno de cuantos parti-ciparon en la redacción del regla-mento y de los estatutos y uno delos secretarios de la primera JuntaDirectiva, en mayo de 1871.Luego, en 1872, siendo el directordel Boletín militar y naval, 11 tra-dujo El arte militar en el sigloXIX de Wilhelm Rüstow para quefuera el primer tomo de unacolección que quería editar titula-da Biblioteca Militar Española,con la idea de vender cada libro alprecio módico de 12 reales y larevista gratis a todos los suscrito-res. Pero aquel mismo año fue

destinado a Cataluña a las órde-nes del general don JuanContreras 12, por lo que tuvo queabandonar su colaboración en elAteneo Militar y su proyecto edi-torial.

Proclamada la I República(11-02-1873), el capitán LópezCarrafa se convirtió en uno detantos militares que por su trayec-toria más o menos liberal se verí-an recompensados con una carre-ra de ascensos meteórica. Talsituación creó una indignacióngeneral en el ámbito castrense y eldeseo de que todas las hojas deservicio fueran revisadas. Losmilitares conservadores porque seveían postergados por otros cuyoúnico mérito era servir a la causaliberal; y los liberales, porque nose veían lo bastante recompensa-dos, tal como le había ocurrido alpropio López Carrafa en 1868.Precisamente la gran desuniónexistente en el Ejército y en laArmada fue uno de los motivosque había animado la fundacióndel Ateneo Militar.

Así pues, unos días des-pués de instaurarse la República,la Fortuna sonrió al capitán LópezContreras al ascender directamen-te a teniente coronel a propuestadel general Contreras. Además,por si fuera poco, el presidentedon Estanislao Figueras le nom-bró Oficial Primero de laSecretaría del Ministerio de laGuerra; y desempeñando dichocargo, muy poco después colabo-ró con su gran amigo Estévanez,entonces Gobernador Civil deMadrid, en la neutralización de un




intento revolucionario producidoen la cercanía de la plaza de toros(27-02-1873). Por dicha acciónfue recompensado con el empleode Coronel.

Habían pasado sólo cuatromeses desde que Prim había rati-ficado su ascenso a Capitán y yaera Coronel; y además, desempe-ñaba un cargo de responsabilidaden el Ministerio de la Guerra.Pero su carrera meteórica no ter-minó ahí, pues su amigoEstévanez recibió la cartera dedicho Ministerio y le nombróSecretario General, logrando condicho cargo su tan ansiado ascen-so a Comandante con fecha de 3de diciembre de 1868, tal comoconsta en su hoja de servicios quese conserva en el Archivo GeneralMilitar de Segovia.

Cuando Estévanez convo-có la Comisión de Reorganiza-ción del Ejército para el estudiode las reformas militares, LópezCarrafa colaboró en la misma;pero ni su alto cargo ni tampocosu nuevo cometido le hicieronolvidar a su querido AteneoMilitar, al que favoreció cuantopudo y recompensó a todos cuan-tos convirtieron la idea de su fun-dación en una realidad. Aunque,por desgracia, su importanteapoyo duró muy poco al dimitiren julio de 1873, quedando dereemplazo hasta su tempranamuerte en 1879.

La aportación organizati-va de don Eduardo López Carrafaal Ateneo Militar fue enorme ymucho más que como intelectual,que lo fue. Pero sobre todo quisié-

ramos destacar su espíritu atene-ísta, ya que aun siendo un hombrefiel y entregado por entero al par-tido republicano, siempre aceptócon agrado el carácter apolíticodel Ateneo Militar y el que prima-ra la instrucción profesional cas-trense entre sus miembros.

Luis Vidart y Schuch

Si don Eduardo LópezCarrafa puede considerarse comoel gran organizador del AteneoMilitar, el artillero don LuisVidart Schuch fue el ideólogo porexcelencia y por ello ocupa unlugar importante en su historia.Además, desarrolló una impresio-nante actividad intelectual al mar-gen de su carrera castrense, quefue corta y poco brillante.

Por otra parte, si un mili-tar intelectual es aquel que se con-sidera militar por encima de todoy su calidad intelectual quedarefrendada por las necesidades desu profesión, Vidart es un buenejemplo del intelectual militar,que es aquel militar profesionalcuyas orientaciones son esencial-mente académicas y no castren-ses, pudiendo incluso abandonarla Milicia por la docencia univer-sitaria.

Siendo cadete del Colegiode Artillería, demostró tenerinquietudes intelectuales (1849-1853), como años después LópezCarrafa en el Colegio deInfantería. En aquellos años, elColegio de Artillería tenía comoórgano oficial al diario ElFotogénico, en el que Vidart

escribió sus primeros artículos ycolaboró junto a don JoséNavarrete y don Serafín Olave. 13

Participó en el pronuncia-miento de Vicálvaro (30-06-1854) - La Vicalvarada -, dondelogró su ascenso a Capitán. Dosaños después, durante la

Revolución de 1856 protagoniza-da por la Milicia de Madrid y quepuso término al BienioProgresista del Ministerio delgeneral Espartero, duque de laVictoria (19-07-1854/14-07-1856), se unió a la guarnición deMadrid, que estaba al mando delos generales O´Donnell, Serranoy Concha.

Vidart, arrastrado por elentusiasmo que sentía por la filo-sofía alemana, publicó un folletotitulado El panteísmo germano-francés (1864). Luego, abandonóel servicio militar activo en situa-ción de supernumerario (junio1865/ abril 1871) trabajando en laCompañía de Ferrocarriles delMediodía, mientras se dedicaba aformarse intelectualmente y apublicar. Aunque se reincorporóal Ejército en dos momentosexcepcionales: cuando Primintentó destronar a la reina doña




Isabel II (22-06-1866), lo que lellevó a unirse de inmediato a lastropas gubernamentales de laguarnición de Madrid; 14 y duran-te los cuatro meses en los queviajó en comisión de servicios porFrancia y Alemania, para infor-mar sobre la guerra franco-prusia-na (1870-71).

En su condición de super-numerario y por tanto ajeno alservicio militar activo, Vidartpudo conocer a fondo el movi-miento intelectual alemán quedon Julián Sanz del Río habíaintroducido en España a travésdel krausismo 15 y que se desarro-lló durante los años 1854-1868.Tal fue así que asistió puntual-mente a todas las clases de donFrancisco Giner de los Ríos, 16

quien le aceptó como discípulo yle distinguió con su amistad. Allí,en la Universidad Central, pudorodearse de toda una pléyade decondiscípulos ilustres: donGumersindo de Azcárate, donAugusto González de Linares,don Federico de Castro, donManuel Sales y Ferré, donNicolás Salmerón, don Fernandode Castro y otros.

Gracias a Vidart y suscompañeros, el krausismo tuvouna enorme influencia en elAteneo Militar en tres aspectosmuy importantes:

Primero. Si el krausismo tuvoen España un fuerte carácterde regeneración moral, sepuso un especial empeño deforma análoga en que elAteneo Militar fuera esen-cialmente regeneracionista

para el Ejército. Segundo. Según Vidart, la lucha

del krausismo por la libertadse empleó en el AteneoMilitar 17 contra un ampliosector de militares: los quese aprovechaban de lasarmas para sus ambicionespersonales; los contrarios ala Ciencia y defensores de laidea de que la ignorancia yla Milicia deberían marcharsiempre juntas; los militaresque hacían gala de su igno-rancia; y los que seguían elmodelo de “líder heroico”menospreciando al militarorganizador o “tecnólogo” yacusando de antimilitar alestudioso.

Tercero. El movimiento krau-sista puso de moda la aficiónpor asociarse para adquirirformación intelectual, locual promovió y desarrollóVidart en el Ateneo Militar yposteriormente lo hará elCentro del Ejército y laArmada.

Siendo Vidart supernu-merario, publicó La filosofíaespañola (Madrid, 1866), unaobra clásica en su especialidad. Alaño siguiente ingresó en la RealAcademia de Buenas Letras deSevilla (22-04-1867) y lo hizo dela mano de su camarada y buenamigo don Fernando de Gabriel yRuiz de Apodaca, capitán deArtillería. 18 Vidart quedó muyimpresionado por el funciona-miento de tan prestigiosa acade-mia, en la sus miembros presenta-ban memorias que leían y discutí-

an; como también por sus concur-sos públicos, sus excelentespublicaciones y su magníficabiblioteca. Pero Vidart brillaríamuchísimo más en el AteneoCientífico y Literario de Madrid,19 y en el Ateneo Militar.

Según don Rafael MaríaLabra, principal biógrafo delAteneo de Madrid, en 1864 había2.678 ateneístas y si en 1879 sepasó a 4.290 fue por la afiliaciónde muchos militares y marinos.Por ello, Vidart estuvo rodeado decompañeros militares que com-partían con él sus inquietudesintelectuales; colaboró con susamigos krausistas en muchas acti-vidades; y formó parte del claus-tro de profesores que iniciaron lascátedras del Ateneo tras laRevolución de 1868, junto a sumaestro Giner de los Ríos,González Linares, Silvela, Fabie,Moret y muchos otros.

En 1871 abandonó ladocencia en el Ateneo de Madridpor varios motivos: en abril sereincorporó al servicio activo enel Ejército; el 14 de mayo entró enla primera Junta Directiva delAteneo Militar, como GarcíaCarrafa; y al año siguiente dejó denuevo el servicio activo militar,aunque esta vez por haber recibi-do acta de Diputado por los distri-tos de Balmaseda (Vizcaya) yAlbocacer (Castellón).

A partir de sus inicialesplanteamientos filosóficos, Vidartsintió un gran interés por todorelacionado con el hombre y suobra, lo que le llevó con frecuen-cia a escribir biografías de milita-




res insignes para neutralizar eltópico que existía sobre la escasacultura de los militares.Precisamente en 1871 publicó“Letras, armas y otros varios”(Madrid, 1871), una de sus mejo-res obras y que constituye unamagnífica recopilación de biogra-fías de escritores militares. Y añosdespués escribirá la biografía dedon Francisco Villamartín(Madrid, 1877) y la de donVicente de los Ríos (Madrid,1889).

En 1873, Vidart recibió elempleo de Teniente Coronel deCaballería por sus méritos y estu-dios científico-militares y dos desus obras: “Ejército permanente”y el mencionado “Letras, armas yotros varios”. Es decir, fuerecompensado por su brillantetrayectoria como intelectual mili-tar.

Se incorporó a la docenciadel Ateneo de Madrid en el curso1873-74 con el tema “La cienciade la guerra en relación con elestado actual de las demás cien-cias”; y luego disertaría sobreotros temas en cursos sucesivos:“Estudios sobre la ciencia mili-tar” (1874-1875), 20

“Introducción al estudio de la his-toria militar en España” (1875-1876) 21 y “Organización delEjército alemán, en el curso 1877-78”.

En 1874 desapareció elAteneo Militar y Vidal aquelmismo año contrajo matrimoniocon la hija de un rico aristócrata,decidiendo entonces poner fin asu corta carrera militar como ofi-

cial retirado del servicio activocon el empleo de teniente coronelde Caballería y comandante deArtillería, para dedicarse en cuer-po y alma al Ateneo Científico yLiterario de Madrid.

Integrado de pleno en elmovimiento krausista, Vidartsiguió a sus amigos Giner de losRíos y Azcárate en la fundaciónde la Institución Libre deEnseñanza (I.L.E.), de la que fueuno de los primeros accionistascomo también lo fueron los gene-rales de la Gándara y Pieltain.Pero conviene destacar que suparticipación en la I.L.E. fue lacausa principal por la que dichainstitución mantuvo excelentesrelaciones con los dos centrosculturales militares en cuya fun-dación intervino: el AteneoMilitar y su sucesor el Centro delEjército y de la Armada.

Don Luis Vidart y donMarcelino Menéndez Pelayomantuvieron una relación muycordial y de sincera amistad, loque no impidió que ambos, juntocon don Gumersindo de Azcárate,mantuvieran una correspondenciaen la que polemizaron sobre laCiencia: Azcárate y Vidart comodefensores del krausismo yMenéndez Pelayo como enemigo.

En 1894, Vidart ingresóen la Real Academia de laHistoria y su discurso de ingresose tituló “La utilidad de las mono-grafías para el cabal conocimien-to de la historia de España”, quefue contestado por el marino ycélebre historiador y tratadistanaval don Cesáreo Fernández

Duro. Además, con su entrada entan señera institución académica,se propuso fomentar el interés porla Historia Militar.

Como quedó antes reseña-do, el artillero Vidart fue un inte-lectual militar y no un militarintelectual. Pero tal condición nofue óbice para que mantuviera sucompromiso con las FuerzasArmadas durante toda su vida,como sus propios hechos lodemuestran: Fue autor de cientos de artículosde prensa, libros de ensayo, folle-tos y numerosas conferenciassobre temas militares. Al igual que la gran mayoría delos diputados militares, sus prin-cipales intervenciones en elParlamento fueron sobre asuntoscastrenses. Influyó sobre los militares de suépoca, a través de su labor docen-te en el Ateneo Militar y despuésen el Centro del Ejército y laArmada.

Uno de los asuntos milita-res que más le preocupó fue elproblema de las quintas, que pesea que los revolucionarios del 68habían prometido su abolición, lasituación política de España no lopermitía en absoluto. Si los políti-cos del partido radical propusie-ron la creación de un Ejército for-mado sólo por voluntarios, él ensu libro Ejército permanente yarmamento nacional (Madrid,1871) abogó por un modelo mixtoen el que los voluntarios profesio-nales, en caso de necesidad, secomplementaran con una reservabien organizada e instruida.




La figura de Vidart esinmensa y en muchos aspectos seadelantó a su época. Por ejemplo,en “Ejército permanente y arma-mento nacional” defendió elreconocimiento de la objeción deconciencia para todo aquel quetuviera una verdadera vocaciónpacifista, que debería ser debida-mente probada y sometida a dis-posiciones legislativas.

Otra idea moderna queVidart defendió y que nos parecemuy importante es la del carácterapolítico que debía tener elEjército, pese a defenderla taldesde su escaño del Congreso; yel que las dos instituciones cultu-rales militares a las que pertene-ció y colaboró en su fundación (elAteneo Militar y el Centro delEjército y la Armada) fueran tam-bién apolíticas y abiertas a la coo-peración entre militares y civiles,lo cual es un claro antecedente delactual Centro de EstudiosSuperiores para la DefensaNacional (C.E.S.E.D.E.N.).Además, siguiendo la tradición delos militares de talante liberal,mantuvo que el Ejército no debe-ría dejarse arrastrar por carlistas,alfonsinos y republicanos, puestoque su obligación consistía enapoyar la legalidad vigente, man-tener la subordinación y discipli-na y probar que las tropas buenasno eran las del absolutismo y que“las bayonetas están más limpiasal sol de la libertad”. Al igual queintentó que los militares confiaranen Amadeo I de Saboya y en elgeneral Serrano.

Vidart reflexionó mucho

sobre la ciencia de la guerra 22 yen muchos de sus escritos intentóque la Sociedad Civil diera a losestudios militares el tratamientode ciencia. 23 Para él, la cienciade la guerra podría tener las cua-tro divisiones siguientes

1ª.- La Filosofía de la guerra.2ª.- La Política de la guerra.3ª.- La Teoría del arte de la

guerra, que comprende losestudios sobre estrategia,táctica, logística y otrosconceptos.

4ª.- La Historia de la guerra,que trata de la guerra comohecho transitorio dentro delas condiciones generalesdel tiempo y del espacio. 24

Por último, sólo añadirque don Luis Vidart fue uno delos principales referentes delmovimiento intelectual castrenseque animó al Ateneo Militar, alAteneo de Madrid y al Centro delEjército y la Armada. Además, sufuerte personalidad le convirtióen un hombre polémico entre suscolegas militares y muy dado a lascontroversias. Falleció el 9 deseptiembre de 1897 y sus compa-ñeros del Arma de Artillería lededicaron un recuerdo entrañableen el “Memorial de Artillería”(edición de 1897):

“Estas líneas bastan paradesvirtuar algunas aseveracionesnecrológicas en que se traslucenconatos de poner en pugna lasideas del finado con las delCuerpo de Artillería y con otrasde un orden más elevado.

Nosotros vimos y todo elmundo pudo ver en ambos actos

fúnebres (se refiere al entierro y alfuneral) figurar muy ostensible-mente el ros de Artillería, cuyouniforme le sirvió de mortaja pormandato expreso”.

Arturo Cotarelo yValenzuela

Don Arturo Cotarelo,capitán del Cuerpo de Inválidos,participó desde el principio en laconstitución del Ateneo Militar,pues perteneció a la llamada“Comisión iniciadora” y luegoestuvo en la primera JuntaGeneral del Ateneo Militar, presi-dida por el Marqués del Duero yque se reunió por vez primera el14 de mayo de 1871. Cotarelo,ocupó en esta Junta el puesto debibliotecario.

Siendo cadete participó enel movimiento literario delColegio de Infantería (1856-1859) junto con su amigo íntimodon Eduardo López Carrafa; ycomo la mayoría de los tenientesde su época recibió su bautismode fuego en la Campaña deMarruecos (1859-1861), distin-guiéndose en las célebres batallasde Wad-Ras y Tetuán (1860).Pero combatiendo en Marruecos,algo le ocurrió que le produjo unafuerte sordera, por lo que unosaños después se le recompensócon el ascenso a Capitán y a lavez ingresó en el Cuerpo deInválidos 31-01-1867). Dentro deeste Cuerpo llegaría a TenienteCoronel, graduado de Coronel. 25

Su obra fue muy prolífera,mereciéndose destacar sus magní-




ficos artículos de El CorreoMilitar, 26 sus ensayos y sus tra-ducciones de obras militares ale-manas. Por otra parte, creemostambién oportuno destacar quefue un germanófilo furibundo.Para él, el Ejército prusiano eraperfecto en la carrera de lasarmas, de ideas elevadas e imbri-cado en el seno de la SociedadCivil. Admirador de Guillermo IIy defensor a ultranza del milita-rismo prusiano, creyó que la gran-deza de Prusia se debía a que suEjército no se imponía al país,sino que por el contrario constitu-ía su brazo fuerte, se le exigíanconocimientos profesionales y enél estaban todas las clases socia-les sin excepción. 27

Cotarelo publicó unaexcelente biografía de LazareCarnot (Carnot, Madrid, 1870)brillante militar y político francés(1753-1823) que fue miembro delDirectorio y ministro de la guerrade Napoleón. Poco después, en1871, al fundarse el AteneoMilitar, apoyó con decisión la for-mación intelectual de los milita-res y obtuvo el reconocimiento asu labor formativa entre sus com-pañeros de armas. Años después,en 1878, el comandante Cotareloenvió tres de sus obras a la JuntaConsultiva de Guerra para obte-ner el ascenso a Teniente Coronel,que en su dictamen se lo concedióen premio a su trabajo y a suesfuerzo en pro de la necesariaregeneración militar.

Apasionado de la HistoriaMilitar, la consideró de una enor-me utilidad y dio clases y confe-

rencias para difundir su conoci-miento en el Ateneo Militar, pro-curando además como biblioteca-rio que dicha institución dispusie-ra de un buen fondo de libros dedicha materia. En su obraAcademias de guerra (Madrid,1881) manifestó: “Una clase dehistoria militar, bien dirigida,tiene tanta importancia comoatractivo, y ayuda de un modopoderosos al desarrollo de lasfacultades intelectuales”. Dosaños después, publicó Bocetosmilitares (Madrid, 1883), su últi-mo libro.

Además de las obras rese-ñadas, Cotarelo publicó un núme-ro ingente de artículos sobre laprofesión castrense y temas deactualidad en El Correo Militar.Pero su labor de divulgacióncomo traductor de obras francesasy alemanas quizás sea su mayormérito. Sobre todo, dos obrascolosales: Historia de la campañade 1815. Ligny. Waterloo, deVaulabelle, en 1869; y Sistemadel ataque de la infantería pru-siana durante la última guerra,del duque Guillermo deWurtemberg, en 1874.

Francisco Villamartín

Don Francisco Villamar-tín fue otro de los fundadores delAteneo Militar, pues tambiénestuvo en las primeras discusio-nes que mantuvo el grupo inicialy en la primera reunión que acor-dó la Comisión que elaboraría elprimer reglamento y los estatutos;pero aunque resultó elegido para

formar parte de ella, se excusópor sus numerosas ocupaciones.Pese a todo, continuó asistiendo alas posteriores reuniones funda-cionales.

Su participación en la fun-dación del Ateneo Militar resultódecisiva por su enorme prestigio.Para los militares intelectualesespañoles, Villamartín no sólo erael mejor tratadista militar español,sino que estaba a la altura de losmejores pensadores militaresextranjeros, siendo con todomerecimiento su obra Nocionesdel arte militar (Madrid, 1862)muy comentada y con grandeselogios en todos los ambientescultos del Ejército. Otras obrassuyas fueron: Napoleón III y laAcademia de las Ciencias(Madrid, 1864) e Historia de laOrden Militar de San Fernando(Madrid, 1865).

Pero lo cierto es queVillamartín, muy decepcionadode la profesión castrense, por laque tanto había luchado y tantosinsabor le había ocasionado, nollegaría a colaborar con el AteneoMilitar porque falleció un añodespués de su fundación.

No vamos a tratar aquícon detalle su vida y su obra, queson bien conocidas, tan sólo vere-mos someramente su relación conel Ateneo Militar por su ascen-dencia sobre los protagonistas desu fundación.

La trayectoria profesionalde Villamartín como militar vinomarcada por su destino de ayu-dante del general don ManuelPavía y Lacy, marqués de




Novaliches. Pese a sus ideasavanzadas, se distinguió comba-tiendo junto a su general y las tro-pas gubernamentales en la peque-ña batalla de Alcolea (1868).Aunque Novaliches le ascendióen el mismo campo de batalla, alvencer el general Serrano noreconoció por tanto su ascenso yquedó de reemplazo con elempleo de Comandante. Luego,sin destino, con media paga, muyendeudado por la mala venta desus obras y la escasa ayuda que lebrindó el gobierno, su profundoresentimiento agravado por lapérdida de su única hija le hizoabandonar su relativismo políticopara pasarse al republicanismo ensus artículos del diario LaDiscusión (1870) y malvivióhasta su muerte (16-07-1872). 28

A través del pensamientoy la obra de Villamartín podemoscomprobar cómo le dio rango deciencia a sus estudios militares, alrealizarlos con una visión queestaba más allá del ámbito cas-trense. En Nociones del arte mili-tar (su principal obra), aclara quesu objetivo fue hacer un estudiode las relaciones del arte militarcon la política y las ciencias; yexplica que no puede analizarseuna guerra como si se tratara deun hecho fortuito, sino de formainterdisciplinar y siendo concebi-da como el resultado de numero-sos factores como la educación, lapolítica, la economía, las ciencias,etc. Precisamente, tal pensamien-to interdisciplinar hizo que losfundadores del Ateneo Militarabrieran sus cátedras a los profe-

sores universitarios y a los inte-lectuales civiles, para que unieransus estudios, investigaciones yreflexiones a las de los militares,y se incorporaran los estudiosmilitares a otras disciplinas. Estaconcepción de la necesidad deestudiar el Arte de la Guerra y laDefensa de forma interdisciplinares algo análogo a lo que hizo donLuis Vidart al explicar cienciamilitar en el Ateneo Científico yLiterario de Madrid; como tam-bién es un claro antecedente delC.E.S.E.D.E.N.

Villamartín dedicó Nocio-nes del arte militar al general donManuel Gutiérrez de la Concha,marqués del Duero, al que explicasu pretensión de hacer “un cursocompleto de arte militar, peroescrito para España, con la histo-ria de nuestras guerras gloriosasen la mano, con la historia denuestras guerras gloriosas en lamano, con la presencia de lascualidades físicas y morales denuestro soldado, el caráctergeneral de nuestra raza, la formapolítica y las necesidades denuestra sociedad”.

Algunas otras figurasseñeras del Ateneo Militar

En la primavera de 1871,el antes mencionado capitán donNicolás Estévanez participó consus amigos López Carrafa yVillamartín en las discusionesprevias a la fundación del AteneoMilitar; aunque sin sospechar quedos años después sería ministrode la Guerra. De espíritu rebelde

y muy duro en sus protestas con-tra la arbitrariedad crónica de laburocracia y el caciquismo,muchos años después será quientraerá desde París la bomba que elanarquista Mateo Morral lanzaráel 31 de mayo de 1906 en la calleMayor de Madrid a la comitivaregia nupcial.

El general don ManuelGutiérrez de la Concha, marquésdel Duero, fue uno de los sociosfundadores del Ateneo Militar yel Presidente de su primera JuntaDirectiva. Su elección se debió aque se creyó que dicho cargo ten-dría que corresponder al mejortratadista militar del momento,que eran Villamartín y él; peroConcha le aventajaba en prestigioy debió asimismo pesar su mayorexperiencia en la gestión de unainstitución cultural militar, alhaber presidido antes el Casino deBarcelona como vimos. Prueba desu amor profundo al AteneoMilitar fue su donación de 1.000reales y un porcentaje de dos desus obras: Táctica de Caballeríay Táctica de División. Pese a seruno de los mayores defensores delas instituciones liberales, en1874 colaboró con don AntonioCánovas del Castillo en laRestauración; y tal circunstanciafue recordada aquel mismo añopor el general Serrano, al dispo-ner los honores de su muerte.

El almirante don JuanBautista Topete y Carballo, unode los mejores marinos de suépoca, se había distinguido en laguerra de España contra Chile yPerú, participando en los bombar-




deos de Valparaíso y El Callao(1866) a las órdenes del almirantedon Casto Méndez Núñez.Hombre de La Gloriosa (1868),29 fue nombrado Vicepresidentedel Ateneo Militar en un clarointento de atraer a los marinos a lainstitución, ya que éstos, debido asu escaso número en Madrid,siempre recelaban a integrarsecon los militares de Tierra por sufundado temor a perder su identi-dad propia. Aunque en el Ateneosiempre hubo pocos marinos,Topete no fue el único que huboen la Junta Directiva del AteneoMilitar, ya que entre otros mari-nos ilustres estuvo el intendentedon Ignacio Negrín y también elentonces capitán de fragata donCesáreo Fernández Duro, uno delos tratadistas más prolíferos eimportantes de nuestra Armada.

Otro ateneísta ilustre fueel coronel de Infantería donAntonio Vallecillo y Luján, quienestuvo al frente de la mesa deedad que presidió todas las sesio-nes preparatorias para la funda-ción del Ateneo Militar. Hombreculto y de un enorme prestigio enel ámbito castrense, fue el autorde su monumental obra tituladaLegislación militar de Españaantigua y moderna; 30 por lo queno es de extrañar que su apoyo ala institución estuviera en elcampo legislativo militar.

El Ateneo Militar contótambién con la valiosa colabora-ción de la prensa militar y, sobretodo, El Correo Militar con sudirector don Miguel A. Espina,miembros de su redacción y cola-

boradores como López Carrafa,Cotarelo y Pardo, entre otros; ytuvo a don Emilio Prieto, directorde El Memorial de Caballería.

El capitán don Miguel A.Espina, siempre preocupado porla formación técnica del Ejército,promovió desde su periódico laedición de obras militares (espa-ñolas y extranjeras) y una recopi-lación legislativa militar en fascí-culos; y también publicó numero-sos artículos de temas castrenses.Tenemos que destacar que el capi-tán Espina propuso en el AteneoMilitar la idea regeneracionista deque el Ejército contribuyera a laeducación nacional, de forma quetodo soldado instruyera a su pro-pia familia, con el fin de que lainstrucción parta del Pueblo haciala Milicia y luego vuelva de éstaal Pueblo. Y tampoco podemosolvidar que su periódico fue pre-cisamente el que tuvo el honor depublicar el manifiesto firmadopor López Carrafa, para el pro-yecto de la fundación del AteneoMilitar. 31

Don Emilio Prieto, tenien-te de Caballería y periodista, fueilustre miembro de la primeraJunta Directiva del AteneoMilitar. 32 En 1869 envió una ins-tancia al general Serrano solici-tándole su ascenso a Capitán, enrecompensa por sus serviciosprestados a la Revolución, adjun-tando además el aval de los gene-rales don Juan Contreras y donJosé Laguno; pero Serrano dene-gó por escrito su petición adu-ciendo que “sus servicios a larevolución no han pasado de

deseos”. Aun siendo de ideasavanzadas, tal negativa le radica-lizará aún más, por lo que partici-pará en la insurrección del gene-ral don Manuel Villacampa delCastillo (la última del siglo, 19-09-1886), y marchará luego conRuiz Zorrilla al exilio.

OBJETIVOS DEL ATE-NEO MILITAR

Los miembros del AteneoMilitar se marcaron tres objetivosprincipales que a su vez estabaninterrelacionados:1º.- Promover la instrucción de

los socios y de todos cuantosaccedieran a los medios decomunicación del AteneoMilitar.

2º.- Procurar la unión fraternal delos miembros de la Milicia,excepto las clases (suboficia-les y tropa), intentando evitarque existieran diferenciasentre Ejércitos, Armas yCuerpos, o las de tipo perso-nal.

3º.- Neutralizar la politización delos militares.

Si Giner de los Ríos pre-tendía que el Ateneo Científico yLiterario de Madrid fuera lo quellamaba “la gran universidad librede España”, era por los males queaquejaban entonces laUniversidad estatal y algo análo-go debieron pensar los socios fun-dadores del Ateneo Militar res-pecto a la situación en que sehallaba el Ejército. Por ello nodebe extrañarnos que don LuisVidart, en el primer número de la




Revista del Ateneo Militar, insis-tiera en que el Ateneo Militartenía que seguir el modelo delAteneo de Madrid; 33 y tambiéninsistió en numerosas ocasionesque el Ateneo Militar tenía queser un foro de discusión e inter-cambio de ideas, más que un“centro docente” en el sentidoriguroso de la palabra.

Pero además, convienetambién destacar que Vidart ytodos sus compañeros ateneístasse impusieron la obligación rege-neracionista de promover la ins-trucción del Ejército en un dobleobjetivo: la adaptación a las nue-vas normas de la guerra modernaque Prusia había impuesto en todaEuropa; y la búsqueda de unamayor integración social del mili-tar.

Como podemos compro-bar, nuestro actualC.E.S.E.D.E.N. y el Ateneo deMadrid guardan muchas similitu-des y analogías. Sin duda, nuestroC.E.S.E.D.E.N. constituye tam-bién un verdadero foro deencuentro y abierto a militares yciviles, en el que militares, profe-sionales, profesores universitariosy estudiantes de muy distinta pro-cedencia, formación y condición,pueden expresarse, colaborar,estudiar, trabajar en equipos deforma interdisciplinar y compartirconocimientos y experiencias.Todo ello es muy importante,como también el que el Ateneo deMadrid tuviera un carácter estric-tamente apolítico, ya que todoello nos permite establecer quefue un claro antecedente del

C.E.S.E.D.E.N.

Formación Profesional

En el discurso inauguraldel Ateneo Militar, el generalManuel Gutiérrez de la Concha,propuso una teoría de la instruc-ción del militar basada en estoscuatro puntos: 1º.- La guerra franco-prusiana

había demostrado sobrada-mente que la amplitud delos frentes plantea en todomomento serios problemasde comunicación con elmando superior; y también,que la toma de decisionesacertadas por iniciativa pro-pia resulta de una relevanciaenorme, justo cuando seproducen cambios rápidosen los combates.

2º.- Para la toma de decisiones,los jefes y los oficialesdeben poseer conocimientossuficientes de topografía,algo hasta entonces exclusi-vo del Cuerpo de EstadoMayor al encargarse dellevantamiento de planos.

34

3º.- El estudio en los militares detodos los campos de conoci-miento (incluido el de laHistoria Militar) siemprelevanta la moral, concreta laidea del deber y conduce ala más absoluta abnegación.

4º.- Todas las clases sociales (elcientífico, el industrial, elcomerciante, el jornalero,etc.) tienen que estar inte-gradas en el Ejército, sin

distinción alguna. Todasellas deben permanecerestrechamente unidas en elhonor de servir a la Patria.

En definitiva, el Marquésdel Duero abogaba por una oficia-lidad muy instruida y capaz dedemostrar su superioridad moral;y también por la completa des-aparición del llamado “ejércitoaristocrático”, caracterizado porla diferencia abismal existenteentre los mandos y la tropa. 35

El carácter apolítico delAteneo Militar no pudo

evitar la polémica sobre larevisión de las hojas de

servicio y sus efectos en elmismo

En cuanto al logro de unamayor integración social del mili-tar, se quiso que el Ejército y elPueblo estuvieran completamenteidentificados con intereses comu-nes. Para los iniciadores delAteneo Militar la instrucciónsería un elemento de integraciónsocial y, por tanto, un claro prece-dente de lo que hoy conocemoscomo Cultura de Defensa.Precisamente, la aplicación de losmétodos científicos al arte de laguerra, aliando las Armas con lasCiencias, constituía una formaeficaz de integración social comose había hecho con éxito enAlemania.

El ilustre general donFederico de Madariaga, siendoentonces un joven teniente, resul-tó elegido para pronunciar el dis-




curso conmemorativo del primeraniversario del Ateneo de Madridante Amadeo I de Saboya. Enaquella memorable noche del 23de abril de 1872, defendió queresultaba necesario el reconoci-miento público de la ciencia mili-tar, para así poder demostrar,entre otras cosas, la necesidad deque existieran ejércitos perma-nentes frente a quienes queríansustituirlos por milicias provin-ciales.

Baste recordar que enaquella época se habían produci-do movimientos anarquistas enEuropa y existía la polémicageneral sobre la necesidad de quehubiera o no ejércitos, tal como siel pacifismo fuera incompatiblecon la Defensa Nacional. Talplanteamiento, que se repetiría enel Siglo XX en los países occiden-tales durante la época de laGuerra Fría, hizo que los ateneís-tas militares creyeran necesaria lapresencia de intelectuales civilesque colaboraran en las activida-des de las cátedras del AteneoMilitar. Pero si bien sólo fueronmuy pocos los que colaboraron,esta feliz iniciativa tendrá un granéxito nueve años después en elCentro del Ejército y de laArmada, su sucesor. Se trataba deun problema de información yespecialmente de comunicaciónen las relaciones Ejército-socie-dad civil que había que superar,como supo explicarlo en 1872don Manuel Becerra, ilustre ate-neísta militar, en su artículo“Organización de la fuerza arma-da, en sus relaciones con la civili-

zación”. 36

Pero si el Ateneo Militarcomo institución perseguía lainterrelación entre el Ejército y laSociedad Civil, otro de sus objeti-vos consistía en contribuir a lasuperación de la división existen-te entre los militares por dos pro-blemas:La politización existe entre lospropios militares.El favoritismo y la injusticia en laconcesión de recompensas yascensos.

El Ateneo Militar nació enunos momentos muy críticos parael Ejército debido a su crecientedivisión interna. Por una parte sedebía a que los programas de losdistintos políticos suscitaban sim-patías y rechazos por parte de losmilitares; y por otra parte, estadivisión también la generaban lasdiferencias que había entre lasArmas Generales y CuerposFacultativos. Desde los tiemposde la Guerra de la Independencia,la politización existente en elEjército ya era un mal endémico ymuy generalizado; al punto deque el general Fernández deCórdova, ministro de la Guerra,se vio obligado a ordenar la sepa-ración del servicio a todos losmilitares que se habían negado areconocer la Constitución y ladinastía que había sido votada porlas Cortes Constituyentes.

Sin embargo, en los años1871 y 1872 lo que más preocu-paba y dividía a los militares erala concesión de recompensas yascensos injustificados, comoforma de pago de lealtades y

favores. La situación era tanescandalosa que el 13 de julio de1871, el general Contreras inter-peló al general Serrano,Presidente del Consejo deMinistros, para que justificase los129 ascensos concedidos desde elmes de noviembre del año ante-rior hasta entonces. A lo que elDuque de la Torre replicó que elestado turbulento que se habíavivido, provocado por las conti-nuas revoluciones, no había per-mitido la concesión de recompen-sas y ascensos de forma justa eimparcial para todos.

Aquel malestar generó unmovimiento de militares empeña-dos en la necesaria y urgente revi-sión de las hojas de servicios; yademás, el influyente diario ElCorreo Militar abrió una consultasobre tan espinoso asunto y reci-bió unas 7.000 firmas de jefes yoficiales que solicitaron tal revi-sión.

Aunque el Ateneo Militarcomo institución tenía un carácterapolítico, el problema suscitadopor la concesión de recompensasy ascensos, que tanto dividía a losmilitares, tuvo por fuerza que sertratado. Así, don Luis Vidart, ensu discurso con motivo de la cele-bración del segundo aniversariode su fundación, manifestó deforma acusatoria: “Los ascensosen la milicia española sólo seconsiguen en las antesalas dondese adula a los poderes llamadosconservadores, o en los clubsdonde se adula igualmente a lospoderes llamados revoluciona-rios, de todos modos por medios




injustos y bajamente indecoro-sos”.

La formidable polémicaque suscitó en el seno del AteneoMilitar la revisión de las hojas deservicio tuvo efectos muy negati-vos para la institución, ya quedicho incidente dividió a sussocios y originó fuertes ataquesde la prensa civil.

La Junta de Gobierno delAteneo Militar, presidida por elgeneral Serrano, se vio forzada aintervenir mediante la programa-ción de conferencias que recogie-ran los criterios de los socios. Así,el capitán don Eduardo LópezCarrafa defendió con ardor lanecesaria revisión de las hojas deservicio el 29 de agosto de 1872,lo que provocó que numerosasvoces se alzaran contra el AteneoMilitar acusándolo de ser un cen-tro politizado, contrario a la uniónde los militares y fomentador dela indisciplina castrense. Perocomo era de esperar, LópezCarrafa fue duramente contestadoel 5 de septiembre por el coronelde Caballería don Fernando deSotomayor.

Finalmente, la Junta deGobierno emitió un comunicadodefendiendo el derecho de expre-sión de sus socios e hizo especialhincapié en que la opinión sobrela revisión de las hojas de servicioera un asunto personal de cadasocio y no a nivel institucional.Pero tal comunicado no fue sufi-ciente para poner término a unagrave crisis que supondría el prin-cipio del fin del Ateneo Militar.

El desencadenante fue el

30 de agosto, al día siguiente de laconferencia de López Carrafa, porla carta que el general don RafaelPrimo de Rivera envió al generalSerrano, Presidente del Ateneo,en la que solicitó su baja comosocio por varios motivos: todoaquel asunto destruía la disciplinacastrense; también dividía alEjército; y no sólo desprestigiabaa los gobiernos habidos, sino tam-bién a todos los generales en jefey comandantes de tropa que habí-an hecho propuestas de recom-pensas y ascensos por acciones deguerra; y había sido utilizado porla Prensa como arma de partidopolítico, tomando parte el AteneoMilitar en la polémica y no que-dando al margen.

El Duque de la Torre res-pondió por carta al general acep-tando su baja, aunque insistiendoen que la responsabilidad era sólode los conferenciantes y no insti-tucional. Y en cuanto a LópezCarrafa, al verse aludido, escribióuna carta a Primo de Rivera con-testándole lo que considerabainexactitudes y la publicó en eldiario El Imparcial (07-09-1872).

Los miembros fundadoresdel Ateneo Militar siempre qui-sieron que dicha institución fueraapolítica y fomentaron la forma-ción intelectual con el propósitode que los militares suavizaransus ideas, no intervinieran en lapolítica y que estuvieran centra-dos en lo profesional.

El artículo primero delEstatuto provisional del AteneoMilitar decía: “El Ateneo es unasociedad científico-militar, cuyo

objetivo único y exclusivo es laadquisición, aumento y propa-ganda de todos los conocimientosque se relacionan con la profe-sión de las armas: en su conse-cuencia, es ajeno a su institutotodo acto que tenga tendenciapolítica o religiosa”. Pero unavez aprobado este artículo, no sehizo referencia alguna a que elAteneo Militar fuera o no ajeno alos asuntos políticos y religiosos.

Según don Pablo Gonzá-lez-Pola de la Granja, que es elmejor conocedor del AteneoMilitar, el cambio realizado endicho artículo primero delEstatuto debió ser uno de lostemas más discutidos. Tuvo queserlo y él mismo nos dice que elgeneral J. Guillén Buzaran, carta-genero de ideas políticas muyconservadoras y miembro de laAcademia Sevillana de lasBuenas Letras, publicó un artícu-lo en la Revista de España titula-do “El Ateneo del Ejército y de laArmada” (17-09-1871) 37 en elque manifestó que el artículo pri-mero del Reglamento provisionalera improcedente e impracticable,pues vedaba las discusiones polí-ticas y religiosas en la institución,a no ser que se quisiera convertirel Ateneo Militar en una acade-mia oficial y esencialmentedidáctica.

En realidad, como loexplica muy bien González-Pola,Guillén Buzaran pretendía instru-mentalizar políticamente el Ate-neo Militar y por eso escogió eltema de las recompensas y ascen-sos precipitados e injustos. Como




militar muy conservador, para élla Revolución de La Gloriosa del68 era la gran responsable de ladesastrosa situación política enaquellos tres años que habíanpasado, como asimismo de la des-moralización del Ejército. Portanto, resultaba necesario para elEjército el afrontar la situación yla revisión de las hojas de servi-cio, para así denunciar los abusospolíticos, las corruptelas, el nepo-tismo y demás irregularidades einjusticias que se habían cometi-do y que tanto habían afectado alEjército.

En definitiva, aunque elAteneo Militar tuviera un carácterapolítico, según lo establecido enel Artículo 1º de su Estatuto, cual-quier socio estaba en su derechosi trataba un tema o asunto militarpara atacar o defender la situaciónpolítica o al mismo gobierno deturno, responsabilizándose deforma personal. Pero esta libertadde expresión nada tenía que vercon la idea de convertir el AteneoMilitar en un movimiento de pre-sión al gobierno de turno, talcomo lo sí lo fue la AsociaciónMutua del Ejército y la Armada.

Pese a su corta vida, desde1871 hasta 1874, en el AteneoMilitar se hicieron grandesesfuerzos para que no cayera en elcorporativismo reivindicativo.Por ello, en marzo de 1873, laJunta Directiva decidió potenciarla unidad de todos los militares yla defensa de la legalidad vigente,pasando a un segundo plano lorelativo a la instrucción. Perotales directrices no deben de

extrañarnos si tenemos porque laindisciplina era entonces el mayorproblema del Ejército en todos losfrentes de la guerra carlista.

FUNCIONAMIENTO YMEDIOS DEL ATENEO

MILITAR

El Ateneo Militar ofreciólos siguientes servicios:

1.- Conferencias periódi-cas.

Las conferencias fueronconcebidas como enseñanzaspúblicas y gratuitas; y los confe-renciantes, que recibían el trata-miento de “profesores” delAteneo Militar, eran todos dereconocida capacidad y aptitud.Además, ser profesor de esta ins-titución proporcionaba un enormeprestigio como intelectual y cien-tífico, no sólo en el ámbito cas-trense, sino también en la socie-dad civil.

Al principio se programa-ron tres conferencias semanales,aunque luego se creyó oportunoque fueran dos. Por otra parte,muchas de las lecciones que seimpartían en las cátedras eranciclos de varias conferencias quese impartían en días diferentes ycon una temática muy variada.Por ejemplo:Sobre Historia Militar:“Adelantos de la Artillería desdesu origen hasta nuestros días”,impartida por el capitán artilleroVerdes Montenegro.Sobre problemas militares deactualidad: “Las causas de laactual decadencia de la caballe-

ría española”, a cargo del coman-dante Maturana; o “Ideas sobreleyes de ascensos en el Ejército”,del capitán de Infantería donMelchor Pardo.Sobre las relaciones Ejército -Sociedad Civil: “Instrucción delpueblo y del Ejército”, pronun-ciada por el comandante Garcíadel Canto.

Todas las conferenciastuvieron una gran difusión, ya queno sólo fueron publicadas en laRevista del Ateneo Militar, sinotambién como folletos o separatasen la imprenta de El CorreoMilitar y en revistas técnicascomo: El Memorial de Artillería,El Memorial de Ingenieros, laRevista Técnica de Caballería ola Revista de Marina.

2.- Clases preparatorias deingreso en las distintasAcademias militares.

Estas clases preparatoriaspara el examen de ingreso en lasdistintas Academias Militares seimpartían a los hijos, hermanos yhuérfanos de militares socios paraformar a futuras generaciones demilitares. No obstante, también seadmitía a todos los sargentos,cabos y soldados interesados en lacarrera superior, cuyos jefes certi-ficaran que su conducta era inta-chable.

Dichas clases eran gratui-tas y dadas por socios voluntarios,comprendiendo las siguientesasignaturas: Aritmética, Geome-tría, Física y Química, HistoriaUniversal y de España e Idiomas(francés, inglés y alemán). Susresultados no pudieron ser mejo-




res. 38

3.- Concurso anual sobretemas propuestos.

Sólo se convocó en 1873con dos temas a elegir: “¿Quéconocimientos deben de reuniral ascender a oficiales los delas diversas armas e institutosdel Ejército?” y “¿Qué organi-zación más conveniente debedarse a los estudios militaresdentro del espíritu de la libertadde enseñanza?”.

4.- Tertulias.Cada una de las tres sec-

ciones del Ateneo Militar 39 pro-ponía un tema determinado deinterés general para una tertuliaque podía durar uno o varios días.A veces la tertulia servía paracomentar la publicación de unpequeño ensayo sobre un tema deactualidad; por ejemplo:Abolición de las quintas y organi-zación del Ejército (Madrid,1869) de don José Guzmán.

5.- Biblioteca y salas delectura.

De acuerdo con losEstatutos del Ateneo Militar, 40

cada socio admitido tenía queentregar una obra de valía y utili-dad a la Biblioteca o entregar 10pesetas para su compra. Así serecaudaron 454 obras para laBiblioteca, que unidas a las 67donaciones de la UniversidadCentral de Madrid, las 14 de laSociedad Económica Matritense,otras 14 del Depósito de Guerra ylas 3 del Ateneo Científico yLiterario de Madrid, crearon unfondo de 929 obras en total a fina-les de 1871. La temática de casi la

mitad de todo este fondo era mili-tar; y en su mayoría, se tratabande libros técnicos seguidos porlibros de Literatura, HistoriaMilitar, Administración yLegislación Militar.

Por otra parte, las salas delectura del Ateneo Militar dispo-nían de una colección excelentede revistas y periódicos naciona-les y extranjeros.

La mayoría de las revistasespañolas de tema militar erantécnicas y no faltaba ninguna dedicha clase: El Memorial deArtillería, El Memorial deInfantería, El Memorial deCaballería y El Memorial deIngenieros; el Boletín Oficial dela Guardia Civil y la Guía delCarabinero; etc. En cuanto a lasrevistas extranjeras, estaban lasprincipales de de Francia,Inglaterra Suiza, Portugal, Italia yAlemania. 41

También hay que destacarque el Ateneo Militar, tratándosede un centro cultural militar apo-lítico, tuvo que suscribirse a losdiarios de todas las ideologíaspara satisfacer a sus socios: libe-rales como El Imparcial y conser-vadores como La Época, carlistascomo La Esperanza y alfonsinoscomo El Tiempo, constitucionalesunionistas como La Política yconstitucionales progresistascomo La Iberia, republicanosfederalistas como La Igualdad, oanticlericales como El Universal.

6.- La Revista del AteneoMilitar.

A finales de 1872, laRevista del Ateneo Militar conta-

ba con 959 suscriptores: 229 deMadrid, 467 de provincias y 263en Ultramar. Se publicó concarácter quincenal desde el 1 demarzo de 1872 hasta el 1 de enerode 1874, que fue cuando elGobierno ordenó que fuera clau-surada; y si bien al principio tansólo publicaba conferencias,luego a mediados de 1873 pasó apublicar dos conferencias y artí-culos que trataban de los avancesque estaban haciendo los ejércitosmodernos. Precisamente es amediados de 1873 cuando puedeapreciarse la decadencia delAteneo a través de la escasez deconferencias y de artículos de lossocios, y sobre todo, por la inclu-sión de publicidad.

Una vez vistos los servi-cios que ofrecía el Ateneo Militar,también hay que destacar que dis-puso de magníficas instalacionesformativas: Gabinete de Física, deTopografía y Geodesia; Labora-torio de química; Gimnasio; Salade armas; Escuela de equitación;y Galería de tiro de pistola y cara-bina.

DECADENCIA Y FINDEL ATENEO MILITAR

La fundación del Ateneo fueun éxito en el verano de 1871,siendo su acogida fue excelenteen las Armas Generales:Infantería: 27 regimientos delínea y 11 de cazadores; varioscentros de Armas, como laEscuela de Tiro; y los Depósitosde Bandera de Barcelona y Cádiz.




Caballería: todos los cuerpos deCoraceros, Carabineros,Lanceros, Húsares y Cazadores; yalgunos centros como laAcademia de Caballería y lasRemontas de Granada y Córdoba,entre otros.

Sin embargo, llama laatención el que la respuesta fuemuy inferior en los CuerposFacultativos:Artillería: sólo 2 regimientos: el3º de a pie y el 5º montado.Ingenieros: 1 único regimiento: el2º.Estado Mayor: ningún regimien-to.

En cuanto a la Armada, laparticipación de los marinos fuemuy discreta. Tal circunstanciapuede explicarse por su pequeñonúmero en relación con los mili-tares de Infantería existentes enMadrid y cuya superioridadnumérica era aplastante; lo cual,lógicamente despertaba el temorde los marinos a ser en ciertomodo absorbidos o dominados enel Ateneo Militar por los militaressocios de Infantería:Infantería de Marina: 1 solo regi-miento.Los jefes y los oficiales de losdepartamentos de Cádiz yCartagena.Los jefes y oficiales de la EscuelaNaval Militar.

Y hay que añadir variascomandancias de la Guardia Civily de Carabineros. 42

Tratándose de una institu-ción cultural militar que buscabasobre todo la instrucción militar,pudiera parecer extraño que los

Cuerpos Facultativos no partici-paran en el Ateneo Militar; esdecir, que se abstuviera la partemás técnica del Ejército. ¿Fueporque dichos Cuerpos tenían unexceso celo por mantener sus pro-pias peculiaridades? Quizás huboalgo de ello, pero no fue la causaprimordial. En realidad no partici-paron debido a que desde antes desu fundación siempre hubo ungran temor a que esta instituciónmilitar terminara arrastrada muy asu pesar a tomar parte en la políti-ca.

Por otra parte, puede com-probarse que desde abril de 1872se produjo una fuerte baja desocios, que se incrementaría enotoño tras la dimisión del generaldon Rafael Primo de Rivera.Según el Doctor Coll y Astrell, elAteneo Militar tuvo aquella dimi-sión masiva de socios en abril de1872 por el levantamiento carlistay ése fue el argumento empleadopor la Junta Directiva cada vezque solicitaba con desesperaciónayuda económica al Gobierno deturno para sobrevivir. Pero aun-que la revuelta carlista tuvo ciertarepercusión, el motivo esencialfue la mencionada polémica enor-me que estalló por el espinosoasunto de la revisión de las hojasde servicios. Es decir, la politiza-ción del Ateneo Militar por partede algunos socios fue lo que endefinitiva provocó aquel impor-tante número de bajas y por tantode las cuotas; y todo ello, unido ala ayuda insuficiente por parte delGobierno, acarreó la inevitabledesaparición del Ateneo Militar

hacia el 10 de agosto de 1874 porfalta de medios económicos.

Dos años después, hacia1876 y coincidiendo con el finalde la tercera guerra carlista, huboun gran interés por la preparaciónprofesional del Ejército y de laArmada. Así lo asegurará el capi-tán francés De Serignan, autor deL´Armée Espagnole (París, 1883),43 quien viajó a España a princi-pios de los 80 para estudiar nues-tro Ejército, al asegurar que setrataba de un Ejército que trabaja-ba y de una oficialidad dispuesta ano quedarse rezagada con respec-to a sus colegas europeos.

En aquella época, hacia1880, esta preocupación por lapreparación intelectual y profe-sional de nuestras FuerzasArmadas quedará muy bien refle-jada en la fundación de clubes deoficiales, revistas militares y cam-pañas a favor de la reforma delreclutamiento y de la instrucciónmilitar.

Precisamente en junio de1881 resurgió de nuevo la idea defundar en Madrid un nuevo centrocultural castrense, entre las perso-nalidades más relevantes delmovimiento intelectual español,entre las que figuraban numero-sos socios del antiguo AteneoMilitar: don Luis Vidart, donFrancisco Barado, los hermanosdon Juan y don Federico deMadariaga, el ilustre marino donCesáreo Fernández Duro, el granexplorador y geógrafo don EmilioBonelli, Muñiz y Terrones, donJacinto Hermua, don CándidoVarona, don Eduardo Reylen y




muchos otros. De dicha iniciativanació el Centro del Ejército y laArmada, cuya primera JuntaGeneral se celebró el 26 de juniode 1881, pero en este caso el prin-cipal objetivo no fue la instruc-ción de los jefes y oficiales, por-que la situación había cambiado;ya que el corporativismo castren-se de entonces necesitaba articu-larse de una forma mucho másorganizada y esta nueva institu-ción quiso ir más allá que elAteneo Militar, promoviendo lacreación de círculos culturalesmilitares por toda la geografíanacional, incluso en los lugaresmás apartados.

Por último, sólo destacarque hoy cobran actualidadmuchos aspectos del AteneoMilitar y que, como vimos, nostrasladan a nuestroC.E.S.E.D.E.N. Y es que el espí-ritu regeneracionista de aquelentrañable Ateneo Militar teníamuchos aspectos que se adelanta-ron a su época y hoy serían de unamodernidad ejemplar. Nos referi-mos, muy especialmente al haberconcebido al Estamento Militar ya la Sociedad Civil como elemen-tos indisolubles en una unidad,entendiendo que la Patria es patri-monio de todos y la Defensa esuna obligación y un derecho quenos compete a todos. Es decir,Ejército y Sociedad Civil soncomo las dos caras de una sola yúnica moneda. Pero para elloresultaba entonces indispensableel resolver un problema de infor-mación y sobre todo de comuni-cación en las relaciones entre

ambas partes, lo cual se lograrácon éxito nueve años después conel Centro del Ejército y de laArmada, sucesor del AteneoMilitar.

Queremos terminar conDon Manuel Becerra, ilustre ate-neísta militar, quien en 1872, enuno de sus lúcidos artículos(“Organización de la fuerza arma-da. En sus relaciones con la civi-lización”), insistía en dicha ideay abogaba por el que se hiciera unesfuerzo por ambas partes: “ElEjército y el país es preciso que seconvenzan mutuamente, el prime-ro, de que sin una patria rica,próspera, libre, inteligente, nohay Ejército, y la bandera quesostengan los militares, a pesarde su heroísmo, no llegará a laaltura que le corresponde; y elsegundo, que sin un Ejército quedefienda la patria, sin un Ejércitoque sostenga su bandera, y queesté mandado por jefes inteligen-tes, ni la honra de la patria, ni laintegridad del país, ni la seguri-dad individual, ni la libertad, nila propiedad, ni nada estarájamás asegurado”. 44

1 El texto de este artículo es el de unaconferencia que el autor dio con elmismo nombre título en las XI Jornadasde Historia Militar, organizadas por laComisión Española de Historia Militar(CEHISMI) en el Centro Superior deEstudios de la Defensa Nacional (CESE-DEN), en los días 13 al 23 de noviembrede 2006, con el título La Enseñanza dela Historia Militar en las FuerzasArmadas.

2 La Guerra de los Diez Años, la Guerra

Larga o Revolución de Yara (1868-78);la Guerra Chiquita, del Camagüey o deCalixto García (1879-80); y la Guerradel 95 ó del 98 (1895-98). 3 Al caer la I República, don NicolásEstévanez marchó exiliado a Portugal yluego a los Estados Unidos, Méjico yParís, donde murió en 1914.4 Don Antonio Vallecillo era uno de losmejores jurisconsultos de entonces y elpolígrafo don Eduardo de Mariateguiposeía una de las mejores bibliotecas detema militar. 5 El Ateneo Científico y Literario deMadrid estaba presidido por donAntonio Cánovas del Castillo. 6 Don Pablo González-Pola de laGranja, Decano de la Facultad deCiencias Sociales y Jurídicas del CEU-Universidad Cardenal Herrera, (CEU-UCH), es el mejor conocedor del Ateneode Madrid y de su sucesor, el Centro delEjército y la Armada. Sus estudios einvestigaciones las reunió en su magnífi-ca Tesis Doctoral, que defendió brillan-temente la Universidad Complutense deMadrid, en 2001, y que lleva por título“La configuración de la mentalidad mili-tar contemporánea y el movimiento inte-lectual castrense: el siglo crítico”. Dichatesis fue publicada como tal en la UCM(2002). También puede consultarse suobra La configuración militar contempo-ránea (1868-1909), Madrid, Ministeriode Defensa, 2003. No existe una mono-grafía completa del Ateneo Militar adiferencia del Centro del Ejército y laArmada (desde su fundación en 1881hasta al menos 1902), cuyo autor fue eldoctor don Joaquín Coll y Astrell:Monografía histórica del Centro delEjército y de la Armada. Madrid, 1902. 7 No existe una monografía completadel Ateneo Militar a diferencia de susucesor, el Centro del Ejército y laArmada (desde 1881 hasta al menos1902), cuyo autor fue el doctor donJoaquín Coll. 8 Según Vidart, el diario de LópezCarrafa, joven cadete del Colegio deInfantería, se llamaba El Bombo; mien-tras que para A. Espina era La Bomba.




9 Cuarenta y cinco dirigentes progresis-tas y demócratas (Prim, Sagasta, RuizZorrilla, Cautelar, Pi y Margall, etc.) sereunieron en Ostende. Allí acordaronunir sus esfuerzos para el trounfo de unmovimiento revolucionario que acabaracon la monarquía de Isabel II y el régi-men político de 1845, y estableciera unrégimen liberal democrático. Las carac-terísticas precisas, sobre todo la opciónmonarquía o república, las definiríanunas Cortes constituyentes elegidas porsufragio universal masculino y directo.Serrano, jefe de la Unión Liberal a lamuerte de O´Donnell, decidió la adhe-sión del partido al Pacto de Ostende. Elnuevo socio aseguraba el apoyo militaral movimiento revolucionario y, enbuena parte, su triunfo efectivo; asuntoimportante tras las anteriores experien-cias fallidas; y a la vez, se diluía elcarácter radical de la revolución. ParaPrim (liberal progresista), alma de laoperación, todo eran ventajas: se robus-tecían su posición de árbitro entre losaliados y las posibilidades del éxito ini-cial del movimiento. 10 El teniente don Marcelino López sehabía sumado a la sublevación delcomandante Buceta en Madrid (07-05-1848) contra el gobierno del generalNarváez, duque de Valencia. EnCataluña se produjo el levantamiento deAmetller y Belleza; y en Sevilla, el delos comandantes Portal y Gutiérrez. 11 El Boletín militar y naval era unarevista trimestral de noticias literarias,profesionales y oficiales. 12 El general don Juan Contreras yMartínez fue un excelente militar.Siendo capitán se distinguió en la batallade Alcolea (1868) y luego, como coro-nel, en la batalla de Treviño (1875).13 Años después Navarrete será un bri-llante diputado republicano y Olavepasará al Arma de Infantería. 14 El general don Juan Prim y Prats,huido y condenado a muerte tras su últi-mo pronunciamiento en Villarejo deSalvanés, se encargó desde el exilio de laorganización militar del movimientorevolucionario. Los partidarios de derro-

car a la Corona designaron a donRicardo Muñoz como responsable deagitar a los barrios obreros y pobres deMadrid, para acompañar el golpe conuna reacción popular (Sagasta estabaentre los civiles). Se fijó la fecha para lasublevación (26-06-1866), nombrándoseal mando de la misma a los generalesdon Blas Pierrad y don Juan Contreras,mientras Prim entraba por la fronterafrancesa para hacer una proclama enGuipúzcoa. La primera unidad que teníaque sublevarse era el Cuartel deArtillería de San Gil (situado en Madrid,en la actual Plaza de España), que juntoa unidades de Infantería debía tomar elPalacio Real y secuestrar a la Reina.Como el gobierno del general O´Donnellestaba informado de ciertos movimien-tos militares en el Cuartel de San Gil, sustropas se sublevaron al mando del capi-tán don Baltasar Hidalgo de Quintanacuatro días antes de la fecha acordada(22-06-1866). La Revolución fue aplas-tada. Entre sargentos y soldados del SanGil, 66 militares fueron fusilados. 15 Don Julián Sanz del Río(Torrearévalo, 1814 - Madrid, 1869).Filósofo introductor del krausismo enEspaña. Catedrático de Historia de laFilosofía de la Universidad Central, fueexpedientado en 1865 y repuesto en1868. Entre otras obras destacamos dos:Lecciones sobre el sistema de filosofíaanalítica de K. Ch. F. Krause y El idealde la Humanidad para la vida. 16 Don Francisco Giner de los Ríos(Ronda, 1839 - Madrid, 1915).Pedagogo, discípulo del filósofo Sanzdel Río y continuador del krausismo,fundó la Institución Libre de Enseñanza(I.L.E.). Escribió diversas obras sobretemas jurídicos, pedagógicos y filosófi-cos. 17 VIDART, Luis: Discurso pronuncia-do en el segundo aniversario de la fun-dación del Ateneo de Madrid. Madrid,1873.18 Por deferencia, la solemne recepciónen la Real Academia de Buenas Letrasde Sevilla fue presidida por el CapitánGeneral.

19 Ignoramos cuándo ingresó comosocio en el Ateneo de Madrid, pero almenos sabemos varias cosas: que erasocio en la etapa más liberal progresistade tan prestigiosa institución (1859-1865); que en 1866 era el socio más anti-guo en 1866 y desempeñaba el cargo deSecretario de la Sección de CienciasMorales y Políticas; y que seguía siendosocio en 1867, cuando el Ministerio delgeneral Narváez (10-07-1866/23-04-1868) ejerció la mayor represión quehabía sufrido dicha institución a lo largode su historia. 20 Vidart cultivó, fomentó y escribiósobre Historia Militar en su anterioretapa del Ateneo Militar. 21 A finales de 1875 y durante 1876, elAteneo de Madrid pasó una crisis tanprofunda que casi estuvo a punto de des-aparecer; pero la institución logró sal-varse gracias a los esfuerzos de Amadorde los Ríos, Moreno Nieto, Shaw,Vicuña, Vidart y otros. 22 En su obra “Las reformas militares”,Vidart abordó el concepto disuasorio dela fuerza al plantear que la ciencia de laguerra se divide en dos partes bien dife-renciadas: la que persigue evitar la gue-rra mediante la organización de losEjércitos, para defender el orden en elinterior y mantener el respeto en el exte-rior; y la que tiene por objeto vencer enla guerra cuando es inevitable. 23 Obsesionado por la Ciencia Militar,Vidart escribió una carta a MenéndezPelayo (30-06-1879) rogándole queincluyera la Ciencia Militar en el grupode las Ciencias Morales y Políticas. 24 Revista del Ateneo Militar. T. I, 1872,p. 159. 25 Al inicio de la década de los 90,Cotarelo sufrió continuos y serios apuroseconómicos y acumuló numerosas deu-das debido a su escaso sueldo y a sufamilia numerosa. Entre 1887 y 1892tuvo retenciones en la paga por vía judi-cial y por la elevada cifra de 28.226pesetas, correspondiente a cinco acree-dores y con un interés de entre 2% y el2,5%.




26 Cotarelo fue redactor de El CorreoMilitar desde su fundación. 27 Revista de España. T. XLIX, marzo-abril, 1876, p. 230. 28 Unos días después del fallecimientode Villamartín, el Ateneo Militar le dedi-có un emotivo homenaje y el joventeniente don Federico de Madariaga pro-nunció un emotivo panegírico. El Centrodel Ejército y la Armada le homenajeóen 1888, con motivo del 40º aniversariode su muerte; y también en 1926 recibióen Madrid un gran homenaje, presididopor Alfonso XIII, que contó con la parti-cipación del Centro del Ejército y laArmada en la persona del ya entoncesgeneral don Federico de Madariaga. 29 Topete luchó después contra los car-listas en la guerra civil. Fue Ministro deMarina y ascendió a Vicealmirante en1881. 30 Legislación militar de España anti-gua y moderna es una ingente recopila-ción legislativa que se remonta a LasSiete Partidas de Alfonso X el Sabio. Lefue encargada en 1853 por el generalLara, ministro de la Guerra, para llenarel vacío producido por el incendio de1846 en el Archivo del Ministerio. 31 El capitán Espina marchó al Ejércitode Filipinas en 1884 y en el Casino deManila puso en práctica sus experienciasdel Ateneo Militar. Allí publicó varioslibros y el principal de ellos fue La civi-lización y la espada (Manila, 1886). Elcapitán don Melchor Pardo, que asimis-mo fue miembro de la primera JuntaDirectiva del Ateneo Militar, le relevó enla dirección de El Correo Militar desde1874 hasta 1892. 32 Partidario del periodismo profesional,a lo largo de su vida fundó tres diarios:Memoria de Caballería, LaCorrespondencia Militar y El Ideal, losdos primeros militares y el último civilde tendencia liberal. De ellos tres, LaCorrespondencia Militar fue el másinfluyente durante más de treinta años yestuvo en todas las salas de banderas delos regimientos. Dichas salas eran lasdependencias donde solían reunirse los

jefes y oficiales cuando estaban libres deservicio. 33 Revista del Ateneo Militar. 1872, T. I. 34 Según el mariscal Bugeaud, Franciahabía perdido muchas batallas por eldesconocimiento del terreno. 35 En lo que respecta a la función educa-dora del Ejército, Manso de Zúñigapublicó años antes su famoso artículo“Educación intelectual que debe dedarse al Ejército” (1860), en el que pro-puso crear una escuela permanente deinstrucción y civilización para dar clasesa quienes tienen menos recursos econó-micos. 36 Revista del Ateneo. T. I, 1982. 37 Revista de España. T. XXII, 1871, p.544. El artículo está firmado con fechade 17-09-1871. 38 En un examen de ingreso en laAcademia de Infantería, los 11 alumnospresentados fueron aprobados; pero sólo8 de ellos pudieron ocupar las 8 únicasplazas vacantes de cadete convocadas. 39 Al igual que el Ateneo Científico yLiterario de Madrid, el Ateneo Militarestaba organizada en tres secciones ytodo socio debía de decidirse por una deellas: 1ª Sección de Ciencias Exactas,Físicas y Naturales; 2ª Sección de Artesde guerra en sus distintos ramos y aplica-ciones; y 3ª Sección de Literatura mili-tar, idiomas y otros temas (como laHistoria Militar).40 Ateneo del Ejército y la Armada,Estatutos y Reglamentos de estaSociedad. Madrid, 1972. Art. 12º, cap.III. 41 Spectateur Militaire, RevueBritannique, Revue Militaire Suisse,Revista Militar Portugueza, Army NavyGazette, Gazzetta Militaire y AllgemeineMilitär Zeitung.42 Revista del Ateneo Militar. T. I, 1872,pp. 29 y 30. 43 DE SERIGNAN: L`Armée espa-gnole. París, 1883, pp. 165-166. 44 Revista del Ateneo Militar. T. I, 1872,p. 294.




WWWWWW



Intentando mejorar la cartografía en la RedIntentando mejorar la cartografía en la Red

Durante cientos de años, los mapas nos han ayudado a llegar desde un punto A hasta un puntoB, pero su naturaleza plana y en dos dimensiones (2D) no siempre resulta útil en el mundo“real” en tres dimensiones (3D).

Durante siglos los cartógrafos han reducido kilómetros a milímetros y han movido y situadocontinentes con la punta de los dedos. Los mapas, pese a el carisma de los nombres exóticos que con-tienen, te pueden volver loco con su letra diminuta y su gran tamaño.

Los mapas en internet no han mejorado mucho la situación. Pese a todas las promesas, lospíxeles se parecen demasiado al papel. Pero ahora, los mapas online están empezando a mejorar.Tanto Google como Microsoft han lanzado mapas en 3D, dando al usuario la posibilidad de mover-se tanto de arriba a abajo como de derecha a izquierda.

Según el responsable de Microsoft para “Virtual Earth”, Stephen Lawler, “va a producirse uncambio en la manera en que la gente interactúa con sus computadoras, por lo que queremos que esteentorno sea lo más real y tenga la mayor calidad posible”. “Somos conscientes de todo lo que nosrodea. Pero si nos dan una cámara en 2D, nos será muy difícil capturar la esencia del entorno en elque nos movemos”, concluye Lawler. “Las 3D dan la fluidez necesaria para navegar, para volar a tra-vés del entorno, así como el sentido más natural de que se trata deun entorno familiar”.

Modelo aéreo

En las películas, los efectos especiales se hacen a mano,“moviendo los píxeles”, según explican los que se dedican a estetrabajo, pero el programa de Microsoft “Virtual Earth” funcionaautomáticamente, mediante el procesado de los datos fotográficosque recopila la compañía. La textura de sus 3D es el resultado deuna resolución fotográfica de 10 centímetros.

Microsoft no ha utilizado fotografías tomadas por satélite, sino aviones que han volado alre-dedor de las ciudades del mundo. Incluso llegaron a hacerse con la compañía austriaca que diseñó elsistema de la cámara para llevar a cabo las animaciones en 3D. El objetivo de la compañía: acabarcon la película fotográfica en el último campo en el que se utiliza.

Según el director de fotogrametría de Microsoft, el doctor Franz Leberl, el campo de la carto-grafía aérea era uno de los pocos en los que la película fotográfica aún tenia un papel importante. Enotras áreas, la película fotográfica ha desaparecido, por lo que con esta cámara lograremos hacer des-aparecer la película fotográfica de la cartografía aérea”.

WWWWWW



“Cuando se mira una escena urbana y el sol está brillando, se obtienen a menudo áreas dema-siado brillantes, como sucede con los tejados metálicos o con lassombrillas en la plaza de un mercado. Se trata de un desafío quecon la película fotográfica no se puede resolver: captar el detalletanto en la sombra como en la luz. “Si no se tiene resolución, no setiene relieve, por lo que no se puede hacer un modelo en 3D por-que no se ve nada”.

Oportunidades “virtuales”

Una de las primeras reglas de los grandes imperios, es quesi quieres reivindicar como propio un trozo de tierra, pones a tra-bajar a los cartógrafos para que hagan un mapa de la zona. Esa esla razón por la que los “conquistadores” del ciberespacio, Google y Microsoft, están tan contentos dereivindicar la parte digital del espacio en el que vivimos, cartografiándolo.

Microsoft creó el software para mejorar el rendimiento de las computadoras y Google la herra-mienta para buscar en Internet. Ahora ambos se están moviendo hacia el mundo real para explotar supotencial. “Virtual Earth”, de Microsoft, no solo permite ampliar la imagen como un superhéroe enMetrópolis, sino que parece que existen muchas oportunidades para los anunciantes.

Controversia

A cambio de una determinada cantidad, las compañías pueden utilizar la plataforma paramejorar sus sitios de internet. Una empresa inmobiliaria puede ahorrar a sus clientes muchas cami-natas mostrando los terrenos alrededor de una casa o de un apartamento. Pero la lucha para la digi-talización del planeta no está exenta de controversia.

La sensibilidad de algunas aplicaciones de Google Earth hace que se capten bases militares ycentrales nucleares, que han tenido que ser eliminadas de los mapas como una medida de la luchaanti terrorista. Pronto ambas compañías tendrán que enfrentarse a asuntos relacionados con la censu-ra y la privacidad de las personas, asuntos que pueden surgir con una tecnología tan intrusiva.

TTeeccnnoollooggííaa



Cómo protegerte de los timos para móvil

Seguro que has recibido alguno, o quizás lo hayas visto en alguno delos millones de anuncios que salen en TV sobre politonos, fondospara tu móvil, juegos, etc. Te explicamos cuál es la trampa de lapalabra ALTA y cómo salir del embrollo si ya estás dentro.

Lo peor que te puede pasar con los timos a través de Internet es que destus datos bancarios o de tarjeta de crédito, así que con no darlos nunca,podemos decir que estamos más o menos a salvo del “phishing”. Perocon los móviles es diferente, el “smishing“ es una manera mucho másmaquiavélica de timarnos a través de mensajes SMS. Si bien puedenpedirnos datos bancarios y que caigamos tal como lo podríamos hacer con un e-mail, los timos más peligro-sos son los que tienen que ver con la palabra ALTA.

Puede que decir “timo” sea algo fuerte, dado que si lo fuera, cómo podrían poner tantos anuncios en televi-sión sobre este tipo de servicios, ¿no? Pero lo cierto es que la inmensa mayoría de las compañías que ofrecenservicios en los que te piden que envíes un SMS con la palabra ALTA a un número determinado, se basan enel engaño para sacarnos el dinero, poniendo trabas (ocultando información) para que nos resulte difícil dar-nos de baja y dejar de pagar.

Estos servicios se basan en que una vez que enviamos un mensaje con lapalabra ALTA, quedamos suscritos a un servicio que nos envía mensajesqueramos o no, con un coste “premium” por cada SMS recibido. Así, reci-biremos varios fondos de pantalla, tonos, avisos, etc., al día, con costes quepueden llegar perfectamente a los 18 Euros mensuales, o incluso más.

El problema es que cuando lo detectamos, vemos impotentes como, en lamayoría de ocasiones, no se nos han facilitado instrucciones para darnos

de baja, o estas son incorrectas. En muchos casos, nisiquiera sabemos qué empresa nos está ofreciendo esteservicio.

La solución más fácil, como siempre, es la prevención. Darse de ALTA en un servicio es ligarse contractual-

TTeeccnnoollooggííaa



mente (aunque sin contrato) con una compañía que no nos garantiza cuálva a ser el gasto mensual del servicio, y a menos que tengamos muy cla-ras las condiciones del servicio, y cómo darse de baja, no es ni muchomenos recomendable. Existen decenas de compañías que nos permitenbajarnos una canción o juego enviando SMS pero sin tener que darnosde alta en ninguna parte.

Pero lo más común es encontrarse ya con el problema cuando llega laprimera factura o la primera remesa de mensajes. En estos casos, no esnecesario dar de baja la línea delmóvil o dar orden de impago al

banco. Lo primero es determinar qué empresa nos está enviando losSMS. Si no sale ya el anuncio por la televisión o ni sabemos dónde noshemos dado de alta, podemos comprobar en la base de datos de laAsociación de Empresas de Servicios a Móviles si figura el númerodesde el que recibimos los mensajes.

Si no figura en su listado, el nom-bre de la empresa debería figurar enla factura del móvil, o tambiénpodemos exigir al servicio de información de nuestro operador de móvilque nos facilite el nombre de la empresa que nos ofrece el servicio nodeseado.

Una vez localizada la empresa, una búsqueda por Google nos deberíafacilitar una dirección de contacto y un número de teléfono, al que pode-mos llamar para que nos den las instrucciones de baja del servicio. Encaso de que no nos contesten o que no nos quieran facilitar esta informa-ción, recomendamos que expongais vuestro caso en el foro de móviles deTerra para que os podamos facilitar la información de baja del servicio

en cuestión, y que os dirijais a la web de la Agencia de Protección de Datos

y formuléis una denuncia contra esa compañía.

De igual manera, si la compañía no ha facilitado las instrucciones de bajacorrectas, os animamos a que la denuncieis a Autocontrol, el organismoregulador de la publicidad en España.

CCiinnee



Transformers

TITULO ORIGINAL: Transformers

DIRECTOR: Michael Bay

REPARTO: Tyrese Gibson, Jon Voight, Bernie Mac,Josh Duhamel, Shia LaBeouf, Megan Fox, RachaelTaylor, Kevin Dunn, Amaury Nolasco.

GÉNERO Y CRÍTICA: Ciencia-Ficción. Aventuras.Acción. Extraterrestres.

SINOPSIS: Historia sobre una guerra extraterres-tre que tiene lugar en la Tierra. Dos razas de robotstransformables -los villanos decepticons y los amis-tosos autobots- llegan a nuestro planeta en buscade una fuente de energía. Aquí entablarán una dis-puta con los humanos de por medio, que tomaránpartido por los autobots. La Tierra es la salida para estas máquinas, pues rica en mine-rales y químicos, representa la salvación para los autómatas, quienes emprenderánuna terrible guerra por el preciado combustible...

Harry Potter y la Orden del Fénix

TITULO ORIGINAL: Harry Potter and the Order of the Phoenix

DIRECTOR: David Yates

REPARTO: Daniel Radcliffe, Emma Watson, Rupert Grint,Ralph Fiennes, Jason Isaacs, Helena Bonham Carter,Robbie Coltrane, Michael Gambon, Brendan Gleeson,Richard Griffiths, Gary Oldman, Alan Rickman, Fiona Shaw,Maggie Smith, Emma Thompson.

GÉNERO Y CRÍTICA: Fantástico. Infantil.

SINOPSIS: Harry Potter regresa por quinto año aHogwarts tras otro infeliz verano con los Dursleys...

¿¿SSaabbiiaass qquuee..................??



INTERNET POR LA TUBERÍA DEL GAS

Septiembre 2006.- La competencia para suministrar internet de alta velocidad ha llegado hastala tubería del gas. La empresa Nethercomm en San Diego dice tener la tecnología(Broadband-in-Gas o BiG) para enviar internet de banda ancha y TV por el gas (no por el tubo) avelocidades superiores a las ofrecidas vía telefónica o cable.

VUELVE A USAR SU CORAZÓN DESPUÉS DE 10 AÑOS

Londres, abril 2006.- Hace 10 años cuando Hannah Clark tenía 2 años, fue sometida a unpeculiar transplante de corazón ya que su órgano no fue retirado, permaneciendo desconecta-do junto al corazón donado. Sin embargo, en noviembre pasado, los médicos británicos notaronque Hannah estaba rechazando el corazón injertado por lo que decidieron intentar reactivar elcorazón de la niña. En una operación inédita retiraron el corazón trasplantado y reconectaron elsuyo.

ALCALDE BRASILEÑO PROHIBE LA MUERTE EN SU DISTRITO

Diciembre 2005.- El alcalde de Biritiba-Mirim, Roberto Pereira da Silva, propuso la idea luego deque el cementerio completara su capacidad. Según el proyecto de ley presentado por elgobernante, aquellos familiares de personas que mueran “antes de tiempo“, deberán afrontarfuertes multas o bien una condena en prisión. Tras la presentación del proyecto de ley, las ins-cripciones a los gimnasios se han multiplicado, al igual que las visitas a los médicos.

UN BALDE DE AGUA SE VENDE A 425 DÓLARES

2003.- Justin Kelly de Bristol, Inglaterra, colocó al mejor postor un balde de agua en el sitio deremates eBay. Su intención era ver si la gente compraba cualquier cosa. A medida que lasofertas empezaron a subir decidió que el dinero recolectado se destinaría a obras de caridaden Sudán. Más de 20,000 personas visitaron la página durante el remate y 33 hicieron su ofertapor el “Fabuloso balde de agua de Bristol”.

RECIBE FACTURA TELEFÓNICA POR 218 BILLONES DE DÓLARES

Malasia 2006.- Luego de pagar el saldo de 23 dólares, Yahaya Wahab canceló la línea telefóni-ca de su difunto padre. Sin embargo, días después recibió una factura por 806 billones de lla-madas con la amenaza de pagar en 10 días para no tomar acciones legales.

HOSPITAL LE AVISA A UN ANCIANO QUE ESTÁ EMBARAZADO

Febrero 2006.- Brian Spencer, un anciano de Sneinton a las afueras de Nottingham, en el ReinoUnido, recibió una carta del hospital de la localidad en la que se le informaba: “Estás embaraza-do”. Divertido con el error, el hombre se comunicó con la clínica y solicitó que se le realicen losestudios correspondientes y se prepare una sala para el nacimiento de su presunto hijo.

FINGE SU MUERTE PARA NO PAGAR MULTAS DE TRÁNSITO

Marzo 2006.- Kimberly Du, una mujer estadounidense de 36 años, publicó en diciembre su falsoobituario y escribió una carta al juzgado informando de su propia muerte, para evitar pagar la

¿¿SSaabbiiaass qquuee..................??



gran cantidad de multas de tránsito que adeudaba. Pero la policía de Des Moines, en el esta-do de Iowa, comenzó a sospechar cuando en enero cometió una nueva infracción, un mesdespués de su supuesta muerte. Fue localizada, arrestada y juzgada por cargos de falsifica-ción, multada con 500 dólares y condenada a cinco años de prisión.

MUJER BRITÁNICA CONTRAE MATRIMONIO CON UN DELFÍN

Enero 2006.- La ceremonia se llevó a cabo en Eliat, Israel, donde Sharon Tendler, una mujerlondinense de 41 años, contrajo matrimonio con “Cindy”, un delfín de 35. La historia de amorse remonta a principios de los 90, cuando ambos se conocieron durante una visita de Sharonal acuario. Desde entonces, la mujer viajó año tras año para compartir tiempo con su adora-do delfín. El “amor” fue creciendo y ella le propuso matrimonio, a lo que el delfín respondióafirmativamente (o al menos eso suponen).

UN GATO, EL ÚNICO PASAJERO DEL VUELO

Noviembre 2005.- Todo comenzó cuando un gato logró salir de su jaula en la sección decarga del avión. Se pidió a los pasajeros bajar para buscar al gato. Los técnicos revisaron laaeronave, sin encontrar a la mascota y consideraron peligroso dejar abordar a los pasajeros,por lo que el vuelo de Frankfurt a Praga de Czech Airlines partió solamente con el personaldel avión y el gato fugitivo. Tras arribar, una nueva inspección logró dar con el felino.

750 MIL TELÉFONOS DE HERENCIA

Al fallecer Robert Prosser en 2003, sus familiares recibieron una herencia muy particular: másde 750 mil teléfonos. En su mejor momento, la colección de Prosser había alcanzado más deun millón de aparatos, la colección privada más grande del mundo. “El segundo lugar espara un tipo que tiene 10 mil teléfonos que me compró a mí”, alardeaba Prosser. Los teléfo-nos estaban unos sobre otros ocupando miles de metros cúbicos en 6 edificios de Turtle Lake,un pueblo de Wisconsin, EU.

CURIOSOS ROBOS BANCARIOS

Octubre 2005.- Tras una serie de robos perpetrados por un hipnotizador, los empleados ban-carios de Moldova han recibido instrucciones de atender a los clientes sin mirarlos directamen-te a los ojos. Según informaron las autoridades, el misterioso ladrón logra poner en trance a losempleados antes de pedirles que le entreguen todo el dinero de la caja.

GANÓ EL MARATÓN Y SALIÓ CORRIENDO

Luego de cruzar la meta en el primer lugar, una joven atleta continuó corriendo y desaparecióante la sorpresa de los organizadores del maratón de Viena. Parece que para poder partici-par la joven había llamado al trabajo diciendo que estaba enferma. Temiendo que la vieranpor TV, aceleró el paso una vez finalizada la carrera, alejándose de las cámaras.

HHuummoorr



La Coronelía Guardas del Rey - Ministerio Defensa · 2015. 6. 24. · realizamos una barrera de...

Documents

Transcript of La Coronelía Guardas del Rey - Ministerio Defensa · 2015. 6. 24. · realizamos una barrera de...