La edad Moderna

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Historia. Panorama completo del mundo desde el Renacimiento hasta la Revolucion Francesa

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    INTRODUCCIN

    1. PR EMB ULO

    Una de lus funciones de los historiadores parece se r la de trazar el curso de lasvicisitudes humanas en los ritmos sucesivos que res ulten apropiador. a los gi rosefec tivos de esas mismas vicisitudes . Estas ltimas . sin embargo. no slo soncomplejas. sino que se desarrollan tambi n en una multiplicidad de planos: poresto es casi imposible concreta r fechas en tomo a [as que lodos o casi todos losfactores concu rran o se com binen para indicar important es cesuras. Sea por estadificultad ti por e l tipo de historia que tradicionalmente ha prevalecido hasta nohace mucho cmpo. se han aceptado de hecho unas parti ciones que tienen muchode convencionales, adems de ser eurocntricas. La periodicidad, no obstante, noes s lo la obra de los es tudiosos que la han establecido en teora, a posterori opur vfa de compromiso. Esta periodicidad es tambin y sobre todo el efecto. aun-que sea aproximado. de autnticos procesos de concienciacin colec tiva verifica-dos en detenninadus ambientes o elites. Esas tomas de conciencia se han concre-tado obviamente en la dimensin cultural, en la anbtica o en la poltica.

    Asr. ha habido diversos modos de establecer perodos. que han partido de pre-mi..a.. diferentes y que no han llegado a resultados concordames. Las tornas deconciencia hace poco evocadas -que han dado lugar. por ejemplo. 3 las nocio-nes de Renacimiento y de Ilustracin- son por s mismas los acomectrnemoshistricos de relieve que se han tenido en cuenta. Pero esas lomas de concienciatraducen las visiones. y por lo tanto proponen sus ritmos. principalmente cuhura-les. que tienen poco o nada en cuenta las realidades econ mica... tecnocieru ificar..e incluso sociales . En otros trminos. la periodicidad se revela desde luego comoun hecho no .'>( ln convencional. por un lado. sino tam bin ideolgico. por otro,que sucesivas investigaciones pueden poner en cuestin con fu ndados urgumen-tos. Por otra parte , la misma vida intelec tual -y no s lo la acadmica o pcdag -gica-c- tiene su propi o peso y paga un fuerte tributo a la fuerza de inerci a. Cuan-do una nocin hist rica se ha consolidado o ha echado rafees. aunque se impugnecon j ustas razones, resulta sumame nte arduo llegar a ex purgarla o a hacerla aban-donar. Es decir, esa nocin no es slo un nom bre o una etiqueta sustituible. por-que la adhesin que ha obtenido durante tanto tiempo y tan ampliamente se hatransformado en un dalU fctico, aunque sea cultural. tenazmente transmitido einculcado. un dato que es ca...i irremovible.

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    INTRO D UCCI N 9.-

    medida en que se I;IS precise y se las art icule. El Medievo. en efecto. no ha perd.do nunca xu carcter fic ticio de ex pediente para denominar un perodo de la his-toria europea. A parece constituido por una larga serie de siglos cuya.. principales 'vic isitudes tienen un grado limitado de coherencia entre s. Desde este punto devista. el Medievo aparece en primer lugar como un contenedor de materia.. di-versas y moderadamente congruentes. Mientras que en algunos planos se advier-len ciertas lneas de continuidad. en otros sta es ms bien escasa; numerosos fe-nmenos del perodo prccarolingio tienen muy poco en comn con lo :'> de la faseposterior a las cruzadas. Ahora bien, as como en la historia europea hay aspec tosque, mctuso despus del ao 1500. pueden hacerse remontar al mundo antiguo,no es de extraar quc algunos ot ros aparezcan como la prolongacin o la super-vivencia de cuanto se denomina medieval . Sin embargo. si las parti ciones his-tricas tienen un sentido. esto deri va de la posibilidad de revelar carac teres sufi-cientemente nuevos y determ inantes durante un largo perodo y en un rea por lomenos vasta. Se ha subrayado ya que tales divisiones son en realidad bastantecontrovertidas o controvertibles y que panl salir del atolladero hay que recunir aaque llas que se han afirmado tradicionalmente. Sin embargo. los resultados con-vergentes de un gran nmero de indagaciones ms actualizadas han puesto de re-lieve una suma ta l de cambios alrededor de 1350 que hace considera r es ta fechacomo ms adaptada pnru sealar el inicio de la modernidad (y no tant o el ao1700 aproximadamente. como giro que sanciona la madurez de tal fase).

    En todo caso. los mismos es tudiosos del Medievo han considerado indispen-sable articular sus fenmenos en sectores que equivalgan a las particiones msapropiadas . Es cierto que esos estudiosos han dado prueba de muy escasa imagi-nacin limitndose a distinguir una Alta Edad Media de una Baj a Edad Media.De todas maneras, no puede extraar e l hecho de que, tras una larga se rie de va-rios siglos. precisamente el siglo XIV y el xv mani fi esten vnculos muy estrechoscon los que los siguieron inmediatamente. Por otra parte. como es obvio. no tic-ne sentido imaginar que de una dcada a otra se pase verdaderamente de una po-ca a otra diversa. Por esto. e l ao 1500 hay que considerarlo como una fecha queno tiene ms significado que tantas otras y que son sobre todo convencionesexentas de relieve las que hacen considerarla an como aceptable u al menosorientativa. Con todo. aun querindola tomar como punto de referencia. no se po--drn dejar de evocar aquellas otras fechas. anteriores a 1500 . que ya haban ma-nifestado nuevas orientaciones y nuevos caracteres de temple bien diverso delconsiderado medieval. Co mo corresponde a una introduccin. no se proceder auna presentaci n adecuada del siglo o siglo y medio que precedi al siglo XVI.pero s al menos a una refe rencia de lus factores notables que ya haban comen-zado y que s iguieron luego actuando como elementos de la modernidad.

    2 . L A CRISTIAN DAD

    El mundo cristiano del siglo XIV y del xv apareca. sobre todo en algunos sec-tores, fi r memente ancl ado en sus doctrinas y en sus tradic iones o intuiciones.

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    toa c videnciaLlo )'3 que el inlerlOl..'Ulor laico drl ~prnnopoder religioso no estabal'q'I1:'!'oCtllado ya solamente por el emperador- germnico, sino por muchos ecosprnci pes y grandes ciudades-es tado . El nuevo tipo de relaciones entre la Iglesia yel estado en los diversos pafscs del Occidente europeo caracteriz esta rea en 1'o Uconjunto y. a l mismo tie mpo. coestu uy un fe nmeno lk pan rcheve . El trnsitodel dilogo priv~giadodel papa con ti emperador a 10' lJ'alo!;, del primero con loto;otros poeres d'leranus fue acompaado de' una comrk'ja e innnediabk Jegrada..cin del prt'StiJio Yde la autoridad de loto; ponliflCeS romanos. Incluso los enfmu.a-miemos m.. llamativos que se produjeron despus con el mm imicnm prcrestantehay que considerarlos desde esa pcrspccnva. El triunfo de la Reforma en el siglo.\\'1est encuadrado en una nueva relacin de fuerzas que se remonta al siglo XIV.De e..re modo. el papaoo pagaba. por Jo menos en pancolas consecuencias de unaejeccn hecha en los enentamieruos prodecioos en la penn...ula italiana, una ejec-cin en la que lanlO se haba comrmmetido poIiticamrnte.

    Como ya wbny6 Maquia\'clo~ comienzos del siglo )1;"'. la conflumciade mltiples elementos hizo del papado un tipo de poder muy singular. Por cuan-to no residi en Roma durante setenta aos aproximadamente e n ct rranscurso dels ig lo xrv, preci samente desde e nto nces su dominio cam bi el apelati vo de ..patri-monio de san Pedro.. por el de ..es tado de la Iglesia ... Ni las fuerzas polrncas ita-lianas ni las de las dem:b pote ncias occidentales contemplaron jam:b la evenrua-Iidad de pri\ar al pontiCtee de e~t.iI dote y ni ..iquiera de disminuir ...u con..i..tencia.En eae caso. tambin jug a faHw del papa la costumbre milenaria de asociar elejercicio de la profesin y del ministerio sacerdotal a la propiedad de bienes. so-bre todo terrenos. Desde siglos atrs se haba constituido en lUJa Euro pa una au-tntica soc iedad eclesist ica, de slidas bases econm icas y de pri vil egio s reco-nccidos. sustancialmente respetados y mantenidos. El papa no era sino el mayO!"detentor de cce panicular g oerc de poder eccpcaoo como habitual; coispos, aba-des. canni~ y sacerocees con....itufan sus beneficiarios rnenoees, aunque mu-cho ms nu merosos. En conju nto. la fuerza econmica y pe-.. tanto poltica. ~ms de social. del clero en Europa durante ~ s ig los XIV y X\ era grande y sertaim pos ible determinar su fic ie nte mente su entidad. l.a obstaculizaban so lamenteraros promotore s de una Iglesia ms scparuda de lo.. bie ne s te rre nos y semejantea la imaginada com unidad cristiana de la... primeros siglos. Pero tendan ms a in-

    ~idiarta peligrosamente ~ prncipes que -por motivos sobre todo poIitirotto-n6miC&.>- consideraban excesivo su poder.

    Poroua pene. la IgJo,i a de Occidente no era slo no. La regfa una organiza.cin scpranacional que tenia en su cspide al papado romano y a su curia e n \ 'a 'ide avan zada estructuraci n. Este poder centra l dese m peaba funci one s que nu n-ca podan ser e stric tamente re lig iosas y q ue se re ferian simu lt neament e a la eco-nom a. la polica y la cultura. El ttulo con el que cI papa ejercfa su au toridad erael de Vicario de Cri....o . Entre e l met\.(,3je atribuido a l Hombre Dios y el armaznjuridirodoctrinal de la Iglesia de los siglos XIV y xv haba toda la distancia quehabia producido un mik'ntu de historia, de ~peculacinfilO!'ofica)' In)lgica. deprctica lit lirgica. de compromisos cu lturales y de a mbiciones temporales. Lasuma de exenciones. inmunidades y pri vilegi os acumulada d urante tanto tiempo

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  • l"'lJ1UDUCC I~

    rea cultural e uropea. Se constatara que desde aquel momento. durante los lti-mos diez sig los . la civilizacin occidental -e-q ue no se encontraba entonces a unnivel mental o tecnolgico muy superior al de la... otras civilizaciones extracuro-peas ms evoluc ionadas-e- se distanci cada vez ms de e llas. hasta e l punto depoderlas di sgregar o destruir con su simplc contacto.

    Sin duda alguna, e l Occidenre precarolingio no tard en sacar provecho degran patrimonio clsico. heredado en parte precisamente grectas al cristianismo oa trav s de ~1. Muy pronto. adems. las exigencias fundamentalmente religiosa,de este himo asumieron tambin un nmero creciente de instancias laicas. Estees el sentido de los distintos ..renacimientos.. que se han pretendido concretar enla cultura e uropea desde el siglo IX en adelante. Se puede evocar al respecto unfenmeno significativo. que no es muy anterior al periodo comprendido entre elsig lo xv y el xvi. En e l ari stotelismo y sobre todo en eltomismu de l siglo XIII . e lpeso especifico de las instancias no propiamcme cristianas contrabalanceaba yael de los contenidos marcadamente religiosos. aunque la forma de estos ltimosse presentase a n no !IIl'lO como cristiana. sino tambin como ortodoxa. Los re-sultados. no obstante. fueron muy distintos. Precisamente aquel imponente com-promiso revel en pocas dcadas sus conuu dicciones internas y desemboc en lacris is filosfica de mediados del siglo XIV (marcada por el nominalismo de Ros-celno y de Guillermo de Ockbam). En otros trmi nos - lo que no es ms que unejemplo-e, el cristianismo haba llegado ya entonces a un atolladero. por obra deaquella misma intelligemsia que l mismo haba producido.

    Es verdad que 1O!i mecani smos de aceleraci n de la civilizacin europea de-ben buscarse sobre todo en otros sectores. Sin embargo. era indispensable subra-yar que a esos sectores tampoco se sustraa el naturalmente ms indinado al tra-dicionalismo y a la inmo vilidad. Por lo dems. precisamente al intentar mantenerla direccin de todas las actividades humanas y afirmar su magisterio. el pcnsa-miento cristiano y eclesistico lleg a encontrarse preso en la dinmica del de-sarrollo hi strico. En su intento de encuadrarte para no dejarlo escapar. la reti -gin se iba secularizando cada vez ms. igual que en el mbito organizador laIglesia se iba convirt iendo cada vez mas en una institucin terrena y econmica.No ha de ex tra ar que e l resultado de tal proceso. que se haba hecho todava msintenso, fuese un malestar mltiple y profundo.

    Una pequea parte del clero intentaba rec urrir a remedios y propugnaba unaserie de re formas . Su programa. dictado tambin por la concienc ia de la distanciacada vel mayor entre el organismo eclesial existente y e l de los orgenes. se ins-piraba en un retorno a la mtica pureza de l cristianismo primiti ...o. En todo caso.incluso antes que por los laicos. la bsqueda del lucro y la pe rsecucin de las ren -las por parte de los ministros del culto fueron denunciadas abiertamente por al-gunos eclesi sticos. Como las voces. a menudo italianas. de los franciscanos ..es -piri tuales.. (es decir. panidarios de una conducta econmica ms severa. inclusopor parte de su orden religiosa). las voces m-

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    ro renta en el brazo secular, se tradujo en constantes tragedi as, sobre todo en la..regiones a lpinas.

    Poco arriesgada. y de implantacin precommarncmcnte urbana. era la pracu-ca de la astrotogfe. El demonio e ra por antonomasia el enemigo de Cristo y la en-camacin del mal en el espritu y con ('1lenguaje tradicsenales. Les astros. en cam-bio, eran criaturas de D ios. Y los pI3nt1a... eran considerados como I~ regidoresde la... di versa.. esferas coocnmcas que, segun la doctrina aristotlica. !iC pensa-ha que envolvan la Tierra. La jerarqufa cristiana pona por debajo de la Trinidada los apocotes. a los principale .. ..anlm.. a la densa corte de loJo.> 1()1i, bearos y fi -nalmente a los innumerables ngeles. F..sa jerarquia nu ten a nexos precisos con laestructura animada que se atribua al cocmos. sino que esta estructura era tambi n- ce teste-. de modo que en el nico cielo no se imaginaba que pudieran situarse(uer7a.'io opeesta... A los a...uos y a los plan.=laS se ~ atribufa tambin influenciasreales sobre los acontecimientos terre..tres. M:h que advenir un contraste entreaqullos y la providencia divina. e.i ..tia la tendencia a admitir una especie dealianza o de unin matrimonial entre talcos inuencias.

    Se consolid as a gran escala la proliferacin de loo. intermediarios: entre elalma y Dios. entre el hombre y e l cosmo... Bajo innumerables formas se reforzy se intens ific el ya amplio recurso a la intervenci n de la virgen. de 1~ santos.de lo.. ngeles. de lo-, demonios. El antropomorfismo triunfaba bajo las especiesm.. divervav. Lo sobrenatural. lo blblico y lo evanglico no han estado quiznunca tan representados y senndcs de una manera tan inmediata y sencilla. tanasimilados a los rasgos propios de la vida cotidiana. tan vividos y. por decirlo as.implcitos en el mbito de la ni-.tencia terrena. Esta sed de lo concreto. esta an-sia de identificacin sensible lleg a 'oCf - por vas en parte )a frazadas. en parte

    nue\' lL~ la imagen del propio destino ind.i\idual. de la propia suerte Ilsica y dela fuerza que interviene para de~irla .

    Por un lado. se representaba como se poda la entrada de la propia alma en laultratumba. la lucha e-ntre los lSnge-Ie y lo-. demonios que conte-ndan por ella. eljuicio que detNa decidir ..u suerte individual. Por otro. precedida de representa-clones ba...teme groseras del cuerpo muerto y putrefacto. no mucho ms larde de1350 apareci una especie de nueva diosa. ba...tame menos instrumento de Diosque encamacin de una ley inexorable : la Muerte . La nueva simbolizacin de supoder. sin embargo. no se limit a la de un ser que sobrevolaba por encima de unamultitud de vctimas de toda clase social (como queriendo concretarlo y convide-rar lo como el fan tasma y el autor de l Flage lo colectivo que significaban la.. epi-demias de la poc a). Al principio. esa forma de persun ificaci(\n fuc propia cxctu-stva mcnrc de la pennsu la italia na. En el siglo xv. su fi gura vino a constituir otrolema iconogrfico. probablemente de origen teatral , duran te mucho tiempo repe-tido en amplios ciclos de frescos. sobre lodo en el norte de los Alpes y de los Pi-rineos: la llamada ..danza macabra . En ella fueron personificada.. casi toda.. lascategoras sociales. incluyendo a los ms alto.. representan tes del poder laico oec lesistico. cada uno en compa a de un cadver que venta de repente a invitar-lo irnicamente y a llevrselo consiso.

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    suba en el centro de las mayores plazas. La formacin de los prrocos y de [os saocerdotcs del siglo xv no se apoyaba en una seleccin bien organizada. a l tiempoque sus instituciones tampoco los preparaban de manera adecuada para las fun-ciones doctrinales de su magisterio. Esta care ncia era compensada en gran partecon la intervencin en la predicacin. sobre todo urbana. de los franciscanos y delos dominicos. que salan de un aprendizaje conventual mucho ms amplio y s -lido. Se trataba en la prctica de autnticos especialistas en el magis terio ora l. al-gunas de cuyas inte rvenciones reunidas en colecciones en lengua vulgar revelansu eficacia y su pericia. Sus predicaciones eran normalme nte organizadas en el-clos (de Cuaresma. de Adviento. ctc .) y la eleccin del orador corres ponda a rne-nudo a las autoridades ci viles ms que a las religiosas. La predicacin constitura.en efecto, una manifestacin pb lica de ml tiples reflejos -c-policos. socia les,econmicos . adems de morales- o po r cuanto se refera a (Oda suerte de com-portarn ientos .

    La importancia del plpito se haba acrecentado singula rmente por el hechode ser la nica tribuna desde la que se hablaba verdaderamente en pblico a losmiembros de todas las clases sociales. con suficiente frecuencia y de una maneraparticularizada. El predicador compona ciertamente su discurso sobre la tramade la doctrina religiosa y de las ex igencias ticas crist ianas. pero procuraba norehuir ninguna cuestin que fuese de actual idad. De este modo. e l predi cadorconstituy el principal artfice de la opin in al menos durante todo el sig lo XVI.Aunque sus se rmones estaban marcados por un con formi ...mo fundamental, lopoco que se perm ita de personal o de original era naturalmente lo que llamabams la ate ncin. En la lista de predicadores renombrados y a menudo celebrri-mos que destacaron en el plpito antes del ao 1500 hay que mencionar al menosa Ju an Nepomuceno (t 1393). Vicente Ferre r

  • INIItODU(T IN '9Salvo algunas excepciones. los mismos eclesisticos no e sta ban animado."

    por una hostilidad hacia el patrimonio antiguo. A su vez, los humanistas no in-rentaban de hecho poner en duda los dogmas religiosos ni me nos an criticar afondo la estructura de la Ig lesia de su tiempo. Par" ellos, lo esencial era dar fi-nalmente derecho de ciudadanfa a los valores en que la civilizacin laica en par-ncular crea firmemente: la importancia de la vida activa, la legitimidad de loshonores terrenos. la uti lidad de tes vi rtudes cvicas y polticas. Si bien se mira.ex i!

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    El surgimiento de los nuevos hori zornes arsncos lIparece sustancialmentevinculado a la person alidad de Filippo Bnmcllcschi ( 1377 1446). l fue a sumodo un hombre universal..: orfebre. innovador de la representacin en pers-pectiva. arquitecto y urbanista. as como ingeniero militar. A l va unido en pri-mer lugar el nuevo modo de construir y de representar que se ha calificado de re-n:lcentista. Esto no concierne solamente al siglo xv y al XVI. ya que encontrde...arrol les coherentes y directos en las fases siguientes definidas como manie-rista, clasicista. barroca y neocl sica. Ha..ta la primera mitad del siglo XX. susdestacados reflejos se encontrarn en lodo el con tinente europeo. as como en lascu as reas culturales en las que este ultimo tU\'Oinfluencia.

    Este movimiento artstico. que innegablemente se inici en la regin de Tos-C:IOa. se difundi por el resto de Italia en el transcurso del siglo xv. En cambio.re.o,uh cronolgicamente escalonado y geogrficamente diferenciado el caminode su compleja propagacin por el resto de Europa. Segun en qu pases. duranteuna primen, fase. sus manifestaciones coexistieron con las gticas (hasta plenosiglo XVII). Un nuevo arte fue elaborado en todas panes a part ir de talleres y gru-prn. de artfices que todava eran considerados como - mecnicos... Aunque plas-nu; el gusto colectivo y respondi a una demanda cada vez ms amplia. la verdade... que este arte no result casi nunca popular. E... decir. hay que subrayar que. adife rencia del arte medieval. el renace ntista en sentido lato. de refinada factura.fue ms bien de cuno docto e intelectual . De ah que. en cierto sentido. ese arte se

    ~eparara de la vena espontnea de los estratos sociales inferiores, una "coa que seencontr marginada en una dimensin securaaria.jcrgal o provincia!. Fue el va...ro sector del arte producido para responder a la.. exigencias religiosas el que per-maneci m.s cercano a la sensibilidad colectiva. hasta el punto de seguir sie ndodurante mucho tiempo la zona de encuentro cultural de los distintos es tratos de la..ociedad en la dimensin Iconogrfica. Hay que hacer constar, no obstante. quetambin la Iglesia catlica e-como a continuac in lo hizo igualmente. a! menosen parte. la protestante- acept sin resistencia el nuevo arte . La misma reor-ganizacin eclesi stica postridentina -

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    antigua, ellx co obligado & 10lla co n..uuccin nobl~)' dl~n3 de 00 perecer. unafuncin complementaria. "In embargo. fue reconocida tamhi~n en e l llamado.. rstico toscano ... Un conjunto de relaciones volumtrica.. ) espaciale... de inspi-rac in simblico-filosfica nUlk.Jue tambi n matcru nco-musicnl. fue a...umido almi..mo tiempo para establecer la.. proporcione", iikale~ ce In.. diversos tipos de,ann. EMe ampl",imo recur-o sern raico a la Antigedad no vincul. ..in embar-go. la.. e-uucturas coecretas de os edificiO'>. inslinliV3mcnle intuidos como neoC('san arnenle C'OITeSpondienlt'S a un tipo diferente de~ Y de retacoeeshu mana... Ningtin e...fuerzo. plJe'. fue llevado a cabo para reproducir la tpolograarquirectnica d i...ica. salvo excepciones margt nales. El u...) del l xico grecolati-110 y de la.. relaciones vol umtricas ideales.. no indujo a imi taciones anacrnicasni limit la fantas a creadora de los. consuuctore... E...ta fanw (a se de..pleg de unmuJ o no menos ininterrumpido y dinmico q ue la de los pinlurc:'>. dando lugar aun proceso arqui tectnico y urban stico q ue se extendi ('Iur Europa hasta finesdel ..igjo xvm aprox imadamer ue.

    La penetraci n de esos modelos de co nstruccin fue relati vamente rn s res-tringida y lenta que ta propagacin de los paradigmas figurati vos. Edificar o ree-difi car co mportaba unos gastos mucho mayores e implicaba problemas concretosmd.. numerosos que la ejecuc in de un tapiz. de una tel a o de un fre sco . En la rua-y"r parte de los casos. no slo lo... ed ificios sino aun m.. las ciudade.. tardaron e n-omererse a I()!' dictados de la perspectiva. M ucho.. centros. incluso ricos e im-portante .....igu ieron siendo medievales. Otros rsobre lodo e n e l rea CO~IXJDd iente grosso modo a la de la Hansa ) se jesarmllaron y engnlld ..-cieron sin alterarla f ...momta urbana heredada del pasado. E.s decir, la Irun..formaci n arqui tect-nica choc no -.610 con obstculos econmicos y urhanf..ricos. sino tambi n condificultades sociolgicas )' de gu..to colectivo. La fuerte tradicin municipal y re-publicana ev a los ricos comcrcanres de la.. ciuda&s gennniea.. y sobre todoholandc~" a identificar \ti." tdeales civiles con los modck.... de la peopia cons-lruccin tradicional. a la que permanecieron rteks inclu'>tl en el periodo del o-rec meuro producido entre el si!!lo X\'I )' el xvn. E"h'" reflejos actuaren simtri-came nte . aunq ue e n sentido opuc..to . en el seno de la burguesre de negocio..merid io nales, Antes Incluso que para los nobles. el palacio oc ciudad concebidode forma renacentis ta (en mucbas zonas. tambin la casa tk campo) con..tiluy elsigon v..ible del rango conqutsredo por la familia del gsan co merciante. E..te fe-nmeno tuvo el desarrollo ms significativo e n Ital ia. aunque con fuertes diver-gencias cronolgica... Florencia y luego Venecia vieron surgir hacia el siglo xv loq ue se reali 7 en G no va y Roma entre e l siglo XVI y e l XVII.

    El aspecto polti co y socia l de la llueva arquitectura ",e revela de un modo nome nos claro en el hec-ho de qu e sta fue adoptada (con sign if'lcauvas modifica-c iones segun los par-es ) pnr la nobleza . por el alto clero y sobre todo pur los prin ..cpes de cualq uier rango. aunque partic ularmente pur los monarca v. La s forma..renace ntista..-y lue go manicrsras y barrocas-e- (1(' inspirddrl clsica se hic ie-ron di ...umvus &= la o,uprcmada y del ptl!kr plfiuco o re ligioso. empicando pamIDnume r.thlcs edificios rnon umentak's y co!too.os (o ioclu!>O ndminislra tivO'i) una"urna re levante de invcr...iunes...Con..lrulr a lo grande .. 'oC l."o nvin i6 e n una len-

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    to importaba no

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    perfeccion . Por lo demcs. e l recurso al seguro martimu Iprimern form a de esetipo de garanta en ponerse en prctica a gran escala) se hizo haslullle frecuente apanir de ese periodo. empezando por el Mediterrneo. donde aumentaba la pira-ten a y la guerra corsaria .

    Tan to por todo lo que se refera al contrato de seguro como por la estipulaci no la prctica de otras obligaciones crediticias, la clase mercantil lleg a chocarcon algunas JUI.'lri na.... econmicas y con cierta j urisprudencia subunlinada aellas. Su cultura eminentemente emprica y la conciencia ideol gica demasiadod bil de sus propias funciones no le permitieron rebatir abiertamente lus argu-mentos de los adversarios . As, los comerciantes tuvieron a menudo un complejode inferioridad con respecte al magisteri o eclesistico. que condenaba algunos desu.. comportamientos como usureros o incluso contraries a Ins prc."CCpIUS religio-

    ~. Mucho ms que su capacidad de reaccin terica. lo q ue ..in duda sustrajoprogresivamente a c,,", burgueses a las censuras cleri cales fue la crecien te}' am-plia tendencia de lo.. prelados y de la Curia rumana a e nriquecerse a base de in-gresos financieros . Muy pronto. tos pontfices se vieron obligados a recurrir a losservicios bancarios de los cornerciarnes y. como los otros prncipe... a pedirlesprstamos. A debili tar e l morali..mo originario contribuy tambin la di sponihili-dad de los agentes econmicos al compromiso. Sin saber hacer algo mejor. stosintentaron expiar por adelantado las pertas uhrarerrenas qu e consideraban habermerecido con su conduela. dando dinero para obras piadosas y ceremonias reli-g iosas o disponiendo para la hora de su muerte generosos legados rcstamcnturios.Entre sus di vCNi' secciones de contabilidad. algunos llegaron a institui r la ak lasde udas para con Domineddio, Dios Nuestro Seor (en la que acredi taban su ma...correspond ientes a los pecados. inevitables cometido... en el ejercicio normal desu actividad ). Es obviamente ard uo averiguar e n qu medida los comerciantes es-tuviero n verdaderamente convencidos de haber incurrido e n culpas digna, de pu-nicin . Con todo. un a...pccro de su mentalidad e ra precisamente e l de intentar pre-caverse ante los riesgos . ms o menos reales.

    La art iculacin funcional de la maquinari a econmica fue aculIlpaada por lade la... nue vas formas de armamento. En e fec to . preci samente a partir de la mitaddel siglo XIVse co nstata. e n los tipos ms diversos de comba te y e n la l

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    manes y Franceses en particular . En e l mbno murimo, lo s pa ses arlmicos pre-cedieron tambi n a los mediterrneoc, y se dis laociamn de ellos cada vez ms.La.. gateras de combare de estos ut mos. boIja-" de amurada. c!>(ahan (JOI.'O adap-lada.. pa ra la instalaci n de las nuevas pie7a.s, a l contrario que las un idades de eneburdo de la marina ocenica. S in ninguna duda, la introduccin de la artillera in-nuy con be-teme lenti tud e n el ane de la guerra: con todo. SU~ progresos fueronregulares. de modo que ames del ao 1:'00 empezaron a percib rse llamativa-mente sus e fectos. Por OIrU lado. la no vedad no residfu tamo e n e l can romo enel aprovechamiento de la plvora de d isparo para lanzar proyectes a distancia.El rubo metlico que lo-. diriga sobre el ohjcli vo asumi prontO Ia.\ Iongit~ms variada..y un peso capaz de hal.-crlo maniohrable por parte de oos hombres cinc luso por uno -.010. EMa.. armas concretas. c uyo U\O se difundi bastante a partir del ao 1500 aproximadamemc. resultaron oeci..i ..'as. Esto se verifk no sola-mente en 1," luchas erare europeos o contra los turcos (que supieron pro"-OCfse deesas armas bastante bien). sino tambin en aquellas que 10\ occidentales no lar-daron en entablar ron los pueblos ultramarinos de I~ lkm:i.s continentes.

    Si la, armas lralJirionales dominaron todava en los !>ig~ JI'\-' Y xv, Iana.s.alabardas y flecha.. continuaron ..iendo empleada.. amp'iame-m~ en el siglo "'" einclu..u en el xvn (igual que 1""escudl~. los yelmos y la.. corazas). No obstam~. lacaballcrfa entr en crisis repcnunameme. No es necesario insis.tir en el hecho deque ya nadie poda dudar Chile la, anna... blanca'!. y I~ arma.. de fuego. con tal dedi..poner del equipamiento adecuado y de la capacidad de procurarse la.. segundas.Desde entonces. lo r. prncipes 00 pudie ron dejar de proveerse de aniuerta, cuyapoesra a punto y cuyo empleo superaban en gent.nl1 Ia... posibilidades de los parti-culares. Bastante dferenre fue la ..ituacK'in en el mar. donde cada barco. aunquefuera mercante. cm capaz de transportar e~ tipo de anna... y de usaras. Poco apoco. casi ninguna unidad de cierta importancia se rudo permitir estar desprovis-ta de ellas, Puesto que en 13 prictka los CUOI4k.1o.. con los paises exrraeuropeosslo tuvieron lugar por vfa maritima. perece c\--Klenle el rebeve que a..umi duran-le siglos el armamento de los barcos occidentales en su.. con icros bliCO'i,

    Por lo que respecta 3 Europa . ya !OC ha observado que las nuevas posibilida-des bahsrlcas impusieron muy pronto una renovacin radical de las obras defen-sivas fija, . Murull a!>. torreo nes y f0l13IeJ'.a!> o ciud.aJela e mpezaron en seguida acambiar su aspecto a parur de la ~gunda milalJ del siglo xv, en un proceso queprosi gui Inin terrumpidame nte hasta el siglo XVIII. Los muros de pied ra cedie ron..u puesto a anchos terraplene.. () glac.. recubiertos de lad rillos: desaparecieron lastorres y aparecieron los ba..tienes o baluartes cada ver. mejor di seados por lo s in-gemcros mili tares, Asaltnlla flor cualquier panc. sohre todo a partir de l inic io delsiglo XVI. la pen nsula ita liana co nce ntr sus esfuerzos en este sector de las nue-vas obras defensiva... (que. e n cambio. casi fueron ignoradas cn Inglaterra}. Italia -nos fueron e n general los ingenieros ms competentes e n la materia hasta el si-g lo XVIt . desde Francesco d i G iorgo Marl ini ( t 150 I ) hasta Michcle Sammicbcf(t 1559 ) Ydesde Fr-IOCCs.cU Man:hi et 1577) ha..ta Fmnce sco Paciouo (t 1591).

    De manera similar a la artillera, a unque ba...tante mcn~ anni ma. la impren-ta. cronolgicameme ms tardra. "C' impuso e ntre la mitad del siglo xv y Ias pn-

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  • INT){OOlJ(''( "IN 29

    octos. Apenas hace falla ai\.adir que la imprenta hada nacer una nueva y espcc-recetar dimensi n para todo tipo de propaganda (sobre lodo reftgosa y polica).IX informacin o de intimidacin. Las primeras generacooes de Impresores nopudieron. en general. vislumbrar o aprovechar adecuadamenle todas las poslbil-Jades implfcitas en el nuevo descubrimiento, Tambin por esto. al marcharse desu lona alemana originaria. estos artcr...anos iniciaron a menudo su propia actividaden plazas sin porvenir o pocu udapladas al incremento de la produccin upogr-ca. Cuando les pareca que I~ negocios no iban suficienteme nte bien. volvan apartir, Aunque al principio fueron e llo.. mismos los que elegan y vendrn lasoIlras, MJ actuacin no m.pondi en general a eur nricas directiva..editoriales. sino!oObre lodo a las ganancias. Pero una produccin de este tipo 00 poda prescindir dela.. exgeecas culturales ni de una tsUlJClUT'aCin econmica ms articulada. !\oluypronto se quiso hacer tarnllttn del libro una obra de calidad, De un modo total-mente semejante a los de los manuscri tos (y en gererat gcos. dado el origen nr-dico de los tipgra fes). los primeros~.. de imprmta no tardaron en ceder..u puesto a otros ms legibles. En Italia. aunque tambin poco 3 poco en otrospases. fueron susnnnoos por los tipos en redonda y en cursive.Los caracteres y lapresentacin externa del texto en la superficie de la pgina -como tambi n de la..1cU"'..... mayscula.. a l inicio de 1()Io capulos-c-egaron a ser pronto y a menudo au-rr aicas realizaciones ani.-.lica'i. Los proJuetos de tas distintas imprentas Iueronco ntrase ados con imgt:ncs emblemnca.. ). de propaganda. anloga.. a las queenarbolaban los dem... I.3llern artesanos, aunque m.. n:finadas y al msmo tiem-po m.. ambiciosas. Sin embargo. esto no na suficiente para proteger la exclusivi-dad de la produccin de cada npgrafoctampoco lo consigui el privilegio de im-presin. que no se tard en in-airuir, aunque \1o fue concedido en general para unperiodo b-......tantc breve.

    La imprenta constituy una de la.s producciones m.. caractersticas de Occi-dente. donde permurcct pr cncamenre concentrada durante mucho tiempo.Pronto atrajo el inters de q uien. d isponiendo de los medios adecuados. deseabadifund ir ciertos tipos de obras m s que o tros. A este propsito se puede citar a doserntnenres editores: williarn Caxton (t 149 1). gran promotor de la lengua ingle-ca, y Aldo Manuzio (t 1515). difusor de obras latina... y griegas (el primero insta-lado entre Brujas y Londres. el segundo en Venecia}, Aun cuando ya la segundage neraci n de impresores.

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    ~I a medioda aparecieron en 1509 en Lisboa. Ta11l0 e n el siglo XI \' como en elvv. capitanes y pilotos siguieron dirigiendo sus barcos t'la ...ndose en daros, senso-ria les. no e n clcu los elaborados. los marinero!'> poseten la brjul a. que se hat'liahccho de uso corriente en los mares europeos a lrededor del ao 1300. Dispon an"dems de las tab las trigonomtricas llam adas de decl inaci n magntica. quepcrmitfan co rregir aproximadamente la d iferenc ia e ntre el norte y el polo rnagn-neo ind icado por la brjul a, Estaban provistos en fi n de carta s marina s Ipon ula-nos) cuya produccin haba florecido particularmente a partir de la primera mitaddel "iglo XIV. No se trataba. sin embargo . de autntica... cartas marinas. qu e nosur,gicron hasta fi nale s del sig lo X\1. cuando se generaliz la proyecci n de Mer-cator ( 1569 ). En cuanto al astrolabio. co nocido por los doc tos a fines del sig lo XII ."l.' introdujo en la prctica nutica en la segunda mirad de l sig lo xv. Serva paramedir a bordo la alt itud de 111" a....tres. es decir. para establecer e l punto exacto dela situaci n de la nave. An tes de l ao 1500. si n e mbargo . ni siquiera los nave-gantes ms expertos lograban establecerlo en gene ral . fuese por la fulta de cart asmarinas o por la d ificultad de mantene r un a ruta regular. las lat itudes. por co ns-eurcrne. se o btuvieron sistemticamente sobre todo con el progre so del co noc-miento emprico de la costa atlntica de frica.

    Los grandes descubrimientos, en suma. preced ieron a la navegacin astron-mica y. ames del siglo XVI. la difuvin de ! saber nutico IOOl cue rpu co n notablelcnntud . A pesar de esto. los grandes viaje.. que se e fec tuaron entre el sig lo XIVyel xv fuero n la base de la intensificacin de los in tercambios y de las co munica-ciones mund iales. Su instrume nto principa l fue un nuevo tipo de nave. qu e res-pondia a la... necesidades de la exploracin oce nica; la carabela . Antes de questa apareciese. se haban creado en la pen nsula ibrica y en Portugal en panicu-lar la.. condiciones preliminares para los descubrimientos. A partir de la mitad deliglo XI\'. e n erecto. fueron alcanzados -y progresivamente inse rtos en regularescircu itos marit imos- los arch ipilagos de Canarias y de las Azores. La fase queva desde 1340 hasta 1420 aproxi madamente fue muy importante por la.' pcrspec-livas econ micas que se abrieron (e n prime r lugar. el c ultivo de la caa de UZ-car), y a n ms po r la prctica nu tica que se impuso a los navegantes. El reco-noci miento a gran escala de las costa." africanas se verific a partir de 1420.cuando los marineros se Iucron adaptando a las caractersticas del espacio mari-timo conquistado.

    Ha.sta el siglo XVI. la navegacin ocenica de los europeos permaneci sus-tanci almente vinculada al rgimen de los vientos y de la.s corrientes. De ah q uela experiencia que los navegantes ibricos haban acumulado poco a poco - re-co rrie ndo aquel la especie de Medite rr neo particu lar que se halla entre las Cana-rias y las A 1.nrcs- se revelara como insust ituible y de terminant e. Desde la islams oriental de l primer archipilago hasta la mas occidenta l del segundo hay msde 2.200 kil me tro!' y soplan sobre todo vientos estacionales que los marinero!'euromcdirerrncos ignoraban. Cua ndo su paciente audacia intuy y asi mil la pe-riodicidad de stos. se atrevie ron a lanzarse ms lejos. Con todo . hasta la realiza-cin de los mximos descubrimientos, esos archipilagos continuaron siendo lospuntos de referenci a. de part ida y de llegada de sus empresas ocenicas. Acto res

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    nativas. En el terreno financiero, en Francia surg lcron c ircun..cripcionce localesde ex tensin mod esra Ilamedas ilt'(' r;onJ. que 8 "u 'l/CL loe reagrupaban en conjun-

    1 0~ ms amplios llamados :bllralirfs . grupos dc consejeros generales (ci nco osei s e n total). Desde fina les del sig lo XIV cxsua una duce na de secreta rios de fi -nanzas; un s iglo ms tarde . se convcrtirtan en los grandes responsables del sectoryen el prototipo de los futuros mini stros del sig to XVI.

    El reino de Francia hebra ido aceptando un siste ma fi scal bajo la presin delas necesidades impuestas por la gucrra de los C ien Aos. Este sistema se basabaen el monopolio de la sal {gabclal, el impuesto directo { talla} y e l subsid io (aidt') .a los que se aadieron despus los derechos de aduanas y los diezmos eclcsi sti-ces. Todos esos impuestos fueron poco regulares al principio. pero lo fueron ya apartir de 1430 apro ximadamente. La adminis traci n fij ab a los importes. mientrasque las asambleas que deban conceder tallas y subsidios se limita ban a aprobar-los a posteron. Desde 1451 . el rey los exigi de manera autoritari a. La coronatena en la ta lla "u fue nte de ingresos mas conspicua: stos era n fijados por unaordena nza : su can tidad era repart ida entre las provincias y pagada parroqui a porpa rroquia (la contribucin de cada fami lia era fijada seg n ese cmputo). Pcro ta l... lsrern a de impuestos daba lugar a una relevante falta de equidad. puesto que noestaban obligados a e llos los sbditos ms ricos: los nobles. el c lero y los altosfuncionarios. comu tampoco los prorcstonales y las pe rsonas influyentes . Tam-hin estaban exentos algunos pueblos. di st ritos y ciudades (como Ru m . En laprctica. la tall a vena a ser un impuesto reservado a la masa de las clases mediase infe rio res . ya que no pagarla era sin nimo de distincin social y el hecho de es-tar exento dc clla se adujo luego como prueba de la condicin noble de la fami-lia. Had a la mi tad del siglo XVI. la monarqufa pe rfeccion 1\U sistema de controlatribuy ndose la supervisi n de 1:1 \ finanzas urbanas ( 1555) y confiando a suspropios funcionarios la jurisdiccin c ivil de las c iudades ( 1567).

    La administraci n francesa resulta ba la ms compleja y tambin la ms cos-tO'3. aunque indudablcmente tambi n era m.s capaz que las dems de respondera los impulsos y a las solic itudes del aparato centra l. En e l terreno eclesistico. elconcordato de Amboise ( 146 1). si bien reservaba a l papa la potestad de concederlos beneficios ms importantes. subord inaba esta concesi n al beneplci to de lrey. (Los bene fi cios menores dependan alternati vamente de las dos uutoridudes.un mes de cada una. j M s tarde. el concordato de 151 6 entre Fran cisco f y Len Xconfiri a l soberano e l derecho de nombrar alrededor de seiscientos cargos cele-sisuccs de mayor relieve. Este acuerdo sancion adems que poda aprobar o nola publicaci n de las bulas papales e n su re ino.

    La situacin espa ola result bastante dist inta. La unin de las coronas ara-gonesa y caste lla na sobre vino relativame nte tardc y. hasta el linal del siglo xvn.las autonomas de las regiones mediterrneas se opusieron con xito al central is-mo. En Catalua, la Gencralitat - supre mo rgimen locat-c-, adems de o tra..atri buciones fisca les y financieras . as umi pronto prcrrogarvas.. judiciales y mili-tares. Ms all de la au toridad de Castilla. esa instanc ia personific los privile-gios locales. co mo ocurri an logamente en Arag n. e n Navarra y e n la Lona deValencia. En A rug n. las Cortes era n ms potentes y estructuradas que en Casti-

  • LOS rSrAUOS l:lJ J(O "I()~' I.AS GlJE RRAS UF: llAl lA

    porque les era pocible ~guir los diClildn~ de la iml:li,gencia 'Inlitlcu. Como COf1I:-cano de carrera y hucn consejero oe J"rinciIYs que haba ..100 - primero en la coe-11: de Carlos el Temerario. lue~o oe Lul' XI Yde los ~an~-. ntab3 ccoverct -Jo oe que el homm: tiene la posibilidad &: arreOOer) alcanzar 1.. raciooalidadprofunda e interna de 1( ", scoorecumenroc Para l. con igUlcntcmenlc. oocui -d.1rla o mfringjrla sil!nlfic-dtya transgredir un orden divino y a la vez causar inevi-rablememe su propia prdida. Una minm-ioo;,.a rellc~in. un debate rpido y unaIndagacin sin pre-unciones deban pemunr al pol tico escoger el mejor caminoparu realizar sus prop ios planes. lo cual [',,",uponfa que esto- ltimo.. fueran legi -timados simplemente por sus resu ltados positivos. E!>ta, convicconcs no slo(Oran propias de Connnynes. sino que se hahlan genera lizado en los gabinetes dell" prrncpes. particularmente en aque llo.. que los axistfun y lo.. secundaban en laconduc ta re ferente al manejo L1cl e...tudo. No todos lo... prtncipe-, eran pcrvcnal-me nte tan frios )' calcoladore.. como Filippo Maria visco nu o Pranccsco Sfcrzaen Italia, Luis XI en Franc te y Fernando el Catlico en Espa"a. Pero el remedio a...us eventuales in..uficiencas )"a se haba encontrado y se praclkaba cada vezm..: con..i ..ta en mdeaoe de hhilo mini..eos )" de fidc... cceeejeros, que a . u\e'- 'ot valan & un cuerpo de funcionarios .

    En los estados europeos de ese periodo no exista un ~oberno en el senuoomoderno del r rmtno . por cuanto los confidente, del soberano no eran personal-mente respon-abje-, an te la.. asambleas ni meno-. an e~~~ban 10'> podere.. o 1,"enalicio nes de esa.. mi...ma.. asamblea... . En general. no haha ministros con com-pete ncia.. muy especificas y sectoriales. salvo en e l terreno financiero. Se tratabade colaborado res laicos que podfan desempear diversas funciones y acumula rvarias incumbencias. n bien parientes con..angurneos que asl..tfun al monnrcn entanto que miembros de ..u familia. o inc lu..o a lto.. d ignatari os eclesi stico.. nom -brado.. por l a causa de ..u gran capacidad y prestigio. Nu -c haban suprimidotodavia los cargos mas excelsos que hahan caracterizado al periodo precedentee0 010 el de senescal. maestro de ceremonia... chambeln o conoestabe. aunquecsla... funciones, reservadas a los nobles. ~ estaban conviniendo cada vez m.. enhonot ficaso

    A medida que organi7aban)" se articulaban 10'> con joc mil:'>. se iba per-filando una aut nuca lucha entre qu~"tr.. podan pretcO!.k.,. formar parte de euospnr su sangre o por su rango y homhre... de procedencia mi.... modesta, es decir,burguesa. C uando "hn:salfan por ..us cualidades personales. estos lli~eran amenudo los preferidos. sea porque sah{an que lo deban todo al ...oberanc. sea pur -que ..e solidarizaban m~ con los intereses de xu seor. mediante el servicio al quehnbfan ..ido llamados. El triun fo de los d istintos patrones del nparmo burocrticolue lento . La fi gura tradicional del canciller domin todava e n e l siglo XIV y e nel ..iglo xv. y los secretarios se impusie ron en el siglo XVI en grandes monarquruscorno la ingfesa y la francesa, El secretario de Enrique VIII . Thoma.. Crom we.se co nvin en la (lCNma m.. importante del ~tado e n 1533. cuando su..otuy al("3rdenal Wo lsey . el canciller que le precedi. En Francia. tu.. secretarios del re)'entruro n a formar poane de '>ti consejo sohlmt=nte en 1~7_

    En la mayora de lolaS, capa-

  • r UIS J-.SI Al>O S F.URO"UIS y I.AS (iUrRRAS u u IrA UA 5 1tcrico,- y los administradores del c!>lado. en un lransfl"rt c ult ural m.. o menoscon"iCi.,: nlc_

    Lo que contribuy en mit)'or medida a irk.TCmcntar la autoridad del priociptfue la nigna...;oo tk~ di,ntlb cargos y funciones pblicos. Se trat de un~cc..o le nto.. aunque irreversible. que Ikg a ,,"u plcna mecuree ~Io a finales dd -glu X" II. precisamente con el triunfo del abMllutismo. Controlar las prelaturas era.k1:isivo en la medida en que consm uia un medio sobrt'manc.-ra ecaz panI ~nc.-rbajO control a las familias nobI~. cuyos miembros mas jovenes tenan la impe-n0-.3 necesidad de lo-. beneficios que reciban. Con todo. el fa\'or principesco noera menos apio para eegurar la fortuna de la burguesa. Desde la primera mitaddd ",ig lo xv se haha manifestado con claridad que las grandes ganancias se ree-!liahan sobre lodo con los monopolios y I~ contratos pblicos. cuya concesinJependa del soberano. I.>cMJe los Mdicis a los Pazzi . de Jecqucs Coeur a losFuggcr. Spnola. PaJ1avicieo, Bon... isi , etc. todas las v icisitudes y peripecia... polt-cica.' y militares aparec an conectadas con las, retacioees entre el prncipe y losgrandes empresarios o barqueros. Durante dcada... la interdepende nc ia fue ha-

    l:inJo~ ms . trecha. Y en el siglo xvr se impuso de una manera flagrante . De es-le modo. la va de acceso a los diversos tipos de fortuna personal y familiar de-penda e n general del soberano y de su corte. de aquellos que aventajaban a 1O!iJem:i.. en prestigio y poder. asumiendo la... funciones del gran mecanismo quemovfa la "ida es tatal.

    Se observar. sin embargo. que an entre el siglo xv y el XVI. aunque sin idcn -t lfka~ entre s. la corte y el soberano se d istingu an bastante mal una del otm.En e..le aspecto. pUl' ejemplo. el reino de Npoe, con..lilu a casi una excepcin .t-uera dc la corte. e n efecto. Alfonso el Magnnimo haha instituido rganos au-tnomos como la Camera dclla Sornmaria (para las cuestiones econmicas y ed-mini..uauvasj . la Gran Corte dclla Vicaria (para la justicia c ivil y criminal) y elSacro Regio Consigo, adems de 0U'a." canc iUeri:n del mismo soberano. La ..i-luacin no era me~ clara en las cudades-olado (dnde Italia hasta Jos Patse..Baj

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  • LO S ESTADOS U JROI'F.OS y LAS GUI'.RRAS 0 1: rTAI.ll\ 53

    nobleza. claramente por encima tamo de las actividades comerciales como de lasartesanales o rurales. As. a partir del siglo xv se impuso a una escala bastanteamplia una clase ms bien desigual y heterognea desde: el punto de vista de laprocedencia y de las atribuciones. pero que constituy una de Ia.s categoras m.sdelerm inantes en el desarrollo de las sociedades europeas en la Edad Moderna.

    Al irse formando, segn las necesidades contingentes y sobre todo externas aun mbito verdaderamente orgnico, la administrac in central de los estados eu-ropeos. y especialmente tambin la perifrica. dio vida a un conj unto enmara a-Jo y confuso de competencias. La di stincin entre dominio privado del prncipey patrimonio naci onal... casi inexistente al principio. se fue precisando con ex-trema lentitud. Las atribuciones de los cargos administrativos podan ser tanto pe-nales como fiscales y sobre todo estaban poco armonizadas entre se. de maneraque el sbdi to poda encontrarse simultneamente sometido a jurisdicciones con-uupues tas. Por otra parte. fallaba tambin el debido acoplamiento entre los pode-res locales y los centrales. lamo ms cuanto que el estado se encontraba lejos dehaber triunfado sobre las autonomas feudales y municipales. por no hablar de lasecles isticas. Era por otro lado relevante el margen de discrecionalidad propio delos funcionarios y no solamente de los jueces . En el ambiente del Anden R gime,el ejercicio de los cargos reales estaba marcado amplia men te por la impronta dela me ntalidad feudal . favorable a los abusos y a las malversaciones. La incohe-rencia de las situaciones se vea favorecida naturalmente por la vigencia simult-nea de sistemas jurdicos diversos. tales como el derecho romano, el derecho ca-n nicc y el consuetudinario. De todos e ..tos elementos result en gran parte elincremento de la fortuna de las profesiones j urdicas. cuyos especialistas eran engeneral los nicos capaces de orientarse en el laberinto de la.s normas y de los tr -miles regl amentarios. Los hombres de leyes y los ahogados. en efecto. cmcrgie-run paralelamente a l afianzamiento de los rganos administrativos y la burocra-cia. La articulaci n de las magistraturas ya existentes y la institucin de ot rasnuevas eran fenmenos necesariamente am bivalentes. y sus objetivos de ecien-ca pblica no podan dejar de ir acompaados de complicaciones de funciona-miento o de escasa eficac ia del personal.

    Eso no impidi a la mquina del estado articular cada vez ms sus engrana-jes. ni al prncipe y a su corte consti tu irse como sus primeros motores. Los car-gos m... elevados no fueron nunca vendidos y siguie ron dependiendo siempre dela concesin soberana. Su di sponibilidad equivala a la posibilidad de un go-bierno efec tivo y se revel como una de las vas maestras del absolutismo. Na-die pona en duda que las incumbencias administrativas, ejecutivas o j udicia lestenan que ser otorgadas, igual que las militares, por aquel que encarnaba la au-roridad ms elevada. Era sin duda un fenmeno corriente que el prnci pe no tu-viese ms en cuenta los mritos o las capacidades objetivas que sus preferenciaspersonales o el deseo de recompensar servicios. s in que hubiera re lacin algunaCon las funciones otorgadas. A menudo. entre los primeros y segundo.. cargosexista slo una di stancia anloga a la que haba entre e l estipendio oficial. o elCoste de la persona contratada, y el rdito efectivo del cargo. No exista ningunaestabilidad en el ejercicio de los cargos ms ele..-ados: la muerte del soberano

  • LO S ESTADOS lOUII.OI' loOS y I.AS
  • LOS f-Sl ArKIS E UROI'UIS" I.AS ( iU U l: ll. ...S UI IIAlI'" 57

    bldst:L"i que saban emplear sus esfuerzos a fa~or y en elogio o.k los soberano.. y.al menos indirecta mente , de sus propios pases. Peoro Emilio recibi de Le .. XIIde Francia el encargo de ilustrar la... em~.. de su reino ) Pulidora Virgilio oh-IU\'O una comi...in anl~a por parte de Enril.JUC VII dl= lnglalema. La.. gestai deLui.. XII e n el Milancllalo haban sido ce~brada.. de hecho por un escntce de lacone alrededor del ao 15(X). con acentos que diferan poco de J~ empleadoe porlo.. cronistas del siglo anlcTOf. tOOa\ a e rnbe bidos de loo. vejcees caballeresco,

    n~ie\'alo. Incluso ~I~ ltimos podan ser retomados sagazmente para e nsal-l ar a los prncipes comemporneos. corno supe hacerlo magnficamente Ari(~t()en su Orlando furioso e n honor de la familia 11c lo.. E...te .

    Sin embargo. Ja vfu maestra segua siendo la humanista , c uyo espritu corres-pond a mejor a la cvahacicn de In.. valores colectivos naclonalc... Lo haban com-prendido muy bien. por ejemplo. el polaco Giovann Dlugosz l t I-lSO). aulnr deIfj{toriro polonicae Jibri duodecim y el alemn Jacoh Wimpfe ling ( tI5:!8). Por111 J ems, la hhturin;rafa espaola conrempornea estaba haciendo an ms fun-cional este upc de producci n. por cuanto alternaba ya la redaccin en le nguavulgar co n el lann . En espa ol. en efecto. fueron escritas las obras Crnica ti,.Fernunda ~ Isa bel, de Hernando del Pulgar (tI500 aproximadamente). ms tar-de la Historia J,J emperador Carlos V, de Pedro Med a. y ,\ ,raJn de la corona d,\ r a.rtIl. de Jernimo Zuriu (t 1580). Todas estas obn. enaltccran lo'i valores na -cronales. fas glorias militares y la.. acciones personales de los soberanos. Pc ro nodebe o lvidarse e l hecho de que tras sus huella... surgieron otras obras que. en cam-bio. investigaron con mucho cuidado las memorias antigua... las creencias y tascostumbres de 1", puchltl'o germnicos. como lo hicier on justamente el hamhu r-};us Krantz (t 151 7 ). J uan Turmair (llamado Aventno. t 1534) Y a continuacinJuan Srurnpf (tI576).

    Por lo dems. hubo toda una serie de indicios significativos del progre..ivor obcsrecimienro de IlI.'> conciencias nacionales. Del siglo XI\' en adelante se ecen-lu el sentrmemo de solidaridad erare los habitames, de un mi ..mo reino. que ha--da considerar como ilci18 una relacin de vasallaje con respecte a seores esa-blecjdcs fuera de sus frontera" , Tambin deMJe el siglo xrv se deS3lToHa el gu"'oflOr Jo.. especicuos r~tUOSOSque \ 'CNlJ1 ....lbn: la \'ida de los pstocipes )' parn-cc tarmerue !>Obre su ascensin al trono y su muerte. Si en mucha!> de esasf~..predominaba la gOI:~a explosin de la colecuvidad. OIrU" e..taban canalizada...deliberada mente parol subrayar objetivos estaretes y monrqucos. Tras la apari-cin de la imprenta. la propaganda poltica no dud e n servirse de e lla con gru-hado ", o impresos laudatorio.. y tambin polmicos.

    Se observur igua lme nte qu e e l crime n de lesa mujcstud. existente hasta co-nnenzos del ...ig lo xrv slo con respecto a It IS c mpcrudorc.... desde 1356 se extcn-J i tambi n a aquellos que hubieron ate ntado contra lus prncipes electores delImperio. Es evidente que e n el resto de Europa eso fue evocado tambi n con ~Srecto a los dems soberanos. En tre OIms lIoigJKb de la afirmacin estatal se re-cue rda la evolucin que !>igui el Imperio germmco. Aunttue tal proceso no tU\'Ocoeseccences dunMkra... se proclam una paz perpetua en 1495. S imultnea-mente se in:dituy en Frankfurt un tribunal competeme para lodos los miembros

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  • r l OS ESTADOS EURO PEO S Y l AS (,U U I RAS U I> II''' I-IA 59

    sino q ue la preocupacin principal de las mayores entidades pol ticas y econmicasque la componan era la de que ninguna de ella.. se hiciera tan potente como paraamenazar la libertad y la independencia de las dems. Desde la mirad del siglo XIV.nin guna potenci a e uropea. salvo la de Aragon. hebra lo grado entromete rse perma-rerueme nte en 10.

  • l O S l'STAUOS EURO I'EOS y l AS ( i IJEIUIAS DE ITi\I.li\ 6 1

    lan un tim oblicuo en dist intas d ireccio nes, de modo que las tro pas ene miga.. nopodan eludirlo, Aunque por monvos econmicos no todas las vieja.. murallasfueron abandonadas. las ciudades y los estados q ue posean medios par.! hacerloIa.s sustituye ron a pesar de sus inmensos costes.

    Como sucede a menudo. nadie hahra sabido evaluar cul podra ser la capa-cidad potencial de impacto y destrucci n de los DUe\ 'OS ejrcitos () el nuevo tipode g uerra ni sospechar q u engranaje iba a poner cn funcio namiento e l primeroque rompiera las hostilidades. En realidad. el mecanismo se mont y se compli -cc en fases sucesiv a-... con un progreso imparable q ue los hombres no supierondo mi nar. Su prembulo no era ciertamente apto par.! il uminarlo suficientemente.

    En efecto. un conf licto autnticamente internacional se hahiu pe rfi lado e n elhorizonte en 1 ~87_ El emperador Ma ximiliano . tras la muerte de Lui.. XI de Fran-cia. haba concebido e l designio de desposar a la heredera del du cado de Bretaa.No sl\lo la fa lta de continuidad territorial e ntre aquella regi n y sus domi nios nole pareci un obsrcufo. sino que consider oportun a aquella jugada. quc habrarepresentado un a insid ia para la mo na rqua francesa. sta no pudo dejar de reac-c ionar: a pe sar de la presencia de un co ntingente ingls a l lado de su .. tropa s.Francisco 11 . d uq ue de Bre ta a. fue c turamcntc derrotado en 148S y o bligado acomprometerse a no desposar a su hija Ana sin el co nsentimiento de Francia. En1489 . Maxlmilinno pe rsuadi a l rey de Ing laterra a hace rse guruntc jun to a l dela inde pendenc ia bretona: a l ano sigu ien te se una a esa alianza Ferna ndo el Ca-tlico . feliz de contrarrestar de ese modo las apetencias francesas con respecto aCen e a y Rosc tlo n. Maximilianc hizo ms todava: estipul el matri monio conAna. que se celebr e n Reunes por procuraci n. la... hostilidades se reabrieron y

    l a~ tropa.s de Carlos VIII ocuparon sin d ificu ltad Reune s. capi ta l .x Bretaa. A suvez; Ana decidi renunciar al lejano marido y acept la o ferta de matrimonio de lrey francs : un tratado sancion la unin del ducado bret n a su reino 11 491 ). Re 4sue lta la crisis bretona . Carlos VIII log. r restablecer momentneamente l a~ bue-na.. relaciones co n Fernando e l Cat lico. a l q ue resti tuy Cerde a y Ro-elln, ytambin con el rey de lngtarerra. El joven rey tena las manos libres: aprovechan-do su alianza co n Ludo vico el Moro. se dej inducir entonce s a COCT'C'r una aven-tura. seducido por la inv itacin del papa Inoce nc io VI II pam que interviniera e nel rei no de N poles.

    S in embargo. Itali a no era Bretaa : 10 supieron por propia experiencia tantoel rcy franc s como los italianos. Estos ltimos. e n e fec to . viero n con preoc upa-ci n el avance de l mo narca sobre su suelo (otoo de 1494 e invierno siguiente ).seguido po r la flor de sus caballeros y por numerosas piezies de ertillcrta de bron-ce montadas sobre cure as. con proyecti les de hierro. Superados los Alpes. Car-los VIII atraves los Apcnnos por el desfi ladero de la Cisa y desemboc e n laTesce na septentriona l e n territo r io de la rep blica dc Florencia. El jo ven Ped ro deM dicis , hijo de Lorenzo e l Magnfi co . corri al encuentro del rey y le pe r miti ocupar las fo rtaleza.. de Sarza na y Pietra santa. as como Pisa y Liorna . Esto bus-t par.! caretizar e l descontento de los ciudadanos co n respecto a su se or y paradejar al descubierto la fragilidad del dominio de los M dicis sobre la d udad. Eldesdn de k florenti nos por su condescendencia impidi a Pedro tomar de nuc-

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  • LOS l'.SIAnoS JO UMO I'F.OS l' LAS ("JJORRA" UI'. IlAUA

    que mayomariamenre ~ impona po.- entonces era la prueba renovada y mani-lie~ta de la falta de solidaridad entre 1O'i di~tintu ) e lotadrn. italianos. En este plano.no slo un prncipe inclinado a la.. intri gas como Ludovico e! Moro sino tambinun ponuce severo y convencido de su justo derecho co mo Julio 11 habian de-molotrado la mayor ligereza. El papa. en efecto. se hahfa dejado llevar al principiopor lous resentimiento .. co n respecto a venecta. instalada ciertamente en algunas..tierra... sometidas a su lejana jurisdiccin...in considerar que ella era la nica po-icncia capaz de oponerse a la... ingerencias forasteras . La Liga que logr poner ensu contra no arrebat de hecho a la Scrc:n)ima la posesin de la Tierra Firme. an-re-, bien demostr que la.. miopes discordi:u internar.. eran el mod vo principal dela fragilidad italiana A pesar de lodo. Venecia co nsigui rs.Va~ a s misma

    ~ ms tarde recuperar ca..i todo lo que haba perdido. pero la pennsula ya no semostr capaz ni siquiera de renovar con viro la unin provisional realizada con-1(3 Carlos VIII.

    Ante la presencia extranjera, que l mismo h:lba contribuido tanto a acrecen-tar. Julio n ment aprt::o.uradamente reparar lo ..ucedido formando una cooJicinl.711n los restame, estados de la pennsula para liberarla de les transalpinos (vera-DO de 15 10 ). Sin embargo . esta lmtativa frac-.l.!. miserablemente)' e l mismo pon-uce. dndo-.e cuenta de eo. se re~ipl a hacer una alianza ron 10:0. espaolesrara echar del pas a los franceses, como 'loi los primeros fUC'!ooCSl menos peligrososque los segu ndos (Liga Santa del 5 de: octubre de: 1511).

    6 LA LUCHA POR LA PaEPOSDERA~CIA E..... 1"'11"

    Entre' finales del siglo xv y pri~ aos del '1(\1, Francia haba demostrado-e t , a pesar de la prdida del reino napolitano.fa potencia ms emprendedora enla pennsu la. Controlaba una buena parte del Piamonre, dominaba el ducado de

    ~1 i ln y. deMle abril de 1507. ocupaba tambin Gnova. La poltica de J ul io li lehabia permitido consolidar an ms su preponderante presencia : Ferrura y Man-tua eran sus fieles a liadas y . a pesar de su red ucida consis tencia territorial. le ofre-eran una cu a estratgicamente preciosa en la llanura ba.u1a por e l Po.

    Su fuerza m ilitar. ..in embargo. tena ~U!'o luces y su~ sombrars. Por un lado.d ispona de un aguerrido grupo de artillera y de una caballera pesada formadapor la flor de su numerosa nobleza; por OU'O. no obstante. le faltaba todava unainfantera moderna y slo dispona de grupos de infantes compuestos de cadetesindisciplinados. Por esto Franci a se: orientaba hacia los suizos y los alemanes, en-tre quie nes reclutaba como mercenario s a millares de hombres par.i cualq uiercampa a. gracias a los no tables recu rsos financieros de q ue dispona. E n la in-ramera helvtica. formada por pasto res o campesinos. a menudo vasallos de pe-queos seores rurales o sbdi tos de oliganurao, ciudadanas. se verificaba todocuanto no lograba obtenerse en Francia y en Ita lia : es decir, que los nobles ao=p-tasen no hacer ya la gucrrol a caballo y asumiesen la funcin de oficiales a pie paradirigi r a los infantes. En los cuadros de piqueros suizos, nobles, caballeros. arte-"Unos y campesino.. se encontraban e ficazmente fundidos y esto, juntamente con

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  • l OS ESTADOS F UR OPEO S v l.AS {;UF Il RAS [lE ITAI.lA 69

    que veinte a o s atrs, el gobierno hizo algunos esfuerzo," posteriores, pero slouna quin ta pune de las tropas que defendan la ciudad estaba formada JXlr Floren-tinos, e n tanto que los sbdito!'o del territorio de la repblica permanecan pa...ivos.Demasiado tarde . e n diciembre de 1529 , se decidi armar a I~ ci udadanos de lacapita l asediada. ..ta tuvo que capitu lar e n agosto de 1530 y renunciar para siem-pre a los o rde namientos republicanos para acoger a un prncipe . el duque Alejan-dro de Mdics. Constitua en cieno modo e l smbolo del destino de toda la pc-nn!'oula.

    Francia haba acabado suscribiendo la paz de Cambrai (5 de agosto de 1529).a la espera de ser capaz. de reemprender la ofensiva. A escala europea y mundialel conflicto no estaba ni much o menos terminado. pero en Italia el triunfo de Es-paa y dc la casa de Habsburgo pareca evidente . Lo sancion e l coronamiento deCarlos V. que tU\'O lugar en el corazn del pas. en Bolona. ante los representan-tes de cas i todos los estados italianos. Incl uso Venecia renunci a la alianza fran -cesa y se dispuso a afrontar la invasin de los imperiales intentando tratar cond ios de igua l a igual con vis tas a un pos ible acuerdo anuturco. Tras haberseopuesto entre e lla... en e l tran scurso del siglo XIV y el xv. las potencias de la pe-nnsula italiana haban seguido hacindolo en de fin itiva a favor de los ejrcitosextranjeros. Su equilibrio ines tab le tena que resu ltar de finitivamente ru to. por ladesaparic in de dos de las principales (el reino de N poles y e l ducado de Miln )y por e l puso de otras dos al bando del ven cedor. Antes todava de que Florenciase viese obligada a hace r esto ltimo. en efecto. en 1528 Andrca Doria ya habaseparado bruscamente a Gnova del bloque francs y haba su scrito un acue rdocon el emperador. Tal vez Italia era vfclima de una coyuntura adve rsa: tal vez, siIas potencias e uropeas hubiesen continuado sosteniendo su actitud de no interfe-rir seriame nte e n sus asuntos. se hahria llegado a una mayor consistenc ia na-cional? De todos modos. el peso del pasado se haba revelado determinante y la..ujeci6n poltica que haba resultado de eIJo no habra podido verdaderamente serpuesta e n c uestin antes del ..iglo XIX.

  • 2. LA REFORMA PROTESTANTEY LOS CONFLICTOS EUROPEOS

    l . PREll4BULO

    Ningn gran acontecimiento de la historia occidental es tan complejo como laReforma, e n parte porque ha sido reducida sobre todo a un fenmeno de la rcli -giO'ioidad. An hoy - y probablemente ha...rante ms e n los ltimos tiempos queames-e-. el' consilk-rada como propia de 1a esfera e piritual (tamo ms cuanto eldesarrollo de la conciencia europea ha Uevado a sentirla bajo v~ aspectcomo un hecho personal m.. que como una dimeno in colectiva). Si resulta algoinstintivo observar desde semejante ngulo visual las definidas manifestacionesreli giosas precedentes. seria ms apropi ado al mundo medieval tardo y del An-cien Ri gimt' verlas como partes tmegranrcs de un ludo y elementos inseparable..lamo del conjunto d.= las vi veocias como de los conceptos C entrelazaban y se sosrenran el uno al otro.

    En el clima propio de la Reforma. se e ncontraban incrustados. Inrerpe netra-dos y estrechamente unidos lo polico. lo econrmco. lo social, lo reli gioso y \0cultural, a pesar de nuestra tendencia a distingu irlos de un modo dema..iado pre-cso. A su manera. las disnncioees operadas actualmente son e n cierta medidacomprensibles y aplicables tambin a los siglos XI..XV o XV)X\'II. Los viajes deexploracin. la consiguiente ampliacin del rea martima europea y la... re lativascolonizaciones constituyeron procesos del sig lo XVI ha...terne autnomos. apartedel impacto de la llegada de los metales peecioso-, americanos que instauro fuer-lO. nexos entre aqudloo;, fenmenos . La Reforma represent una especie de coc-

  • LA kF.fOR~" I'Ro r F.STAN"1 iO ' " I.OS n)NFUCI(IS l .lJItUI'UJ"i 7 1

    cin en la que casi todo aparec a implicado, de modo que 10 que se califica de re-Iigio:

  • 72 F.L S UH.O XVI

    dores lid siglo XVI. E.s obv io que e n la lectura de los fe nme nos no hay que o lor-gar mayor prioridad a una visi n o a un punto de visra que a o tros. Ni siquieracua ndo un hi stori ador afi rma q ue en tre los cristianos de t siglo xv y el XVI el sen-tido del pecado se hizo particularmente agudo y doloroso es posible certificarlocon pruebas ind irectas o parciales ni puede bastar e l hecho de que eso se verifi-case en Lutero. Con argumen to.. de no menor importancia se puede sostener queen aquel periodo se hizo spero y decisivo el sentido de la muerte fsica msque la es piritual. aunque ambo.. sen timientos poseyeran un nexo y una re lacinrecprocerrenre esenciales. Sin du da alguna se han investigado 10!i0 motivos de losecos y de las repercusiones que susc itaron las tesis del rcfonnador alemn. peroel problema se plantea ms all de la visin puramente cristiana. dado que en lasociedad de e monces no actuaban solamente condiciona mientos o exigencias denatu raleza religiosa o estrictame nte cristiana,

    Por poner slo un eje mplo. es sabido que a partir de Lutero la ac titud de o sre formadores con respec to a la mendicidad se revel severa e incl uso hostil. Alreconocimie nto de la figura de Cristo en el pobre y en el indigente o miserablevino a opone rse la conv iccin de la usccsis santifica nte y del valor en s mismudel trabajo . As. las suc iedades protestantes e n gene ral, diferen cindose de las ca-tlicas. pusieron e l acento e n la rea lizacin progresiva de l reino de Dios sobre latie rra. persiguiendo de modo ms taj ante y convencido el xito de las propiasiniciativas individua les y de clase. Pe ro no ser fcil sostener qu e semejantes ten-dencias fue ran bsicamenre de naturaleza re ligiosa ms que dic tados de exigen-c ia especficamente mundana. S in ninguna duda. un fiel que deba sentirse siem-pre como pecador ame Dios. a la veo: que estaba convencido de su salvacin pnrla fe gracias a Cristo. era lle vado a una especie de activisrno terrenal (aunque estose tradujese en fonnas y medidass d iferentes e ntre luteranos, por un lado. y calvi-nistas. por otro). Pero semejantes formulaciones espirituales y teolgicas son pre-cisamente interpretables tambin. si no ms egimamenre. cumo e xpresiones deslidas convicciones terrenas. econmicas y sociales, No es e xtrao que la Re-forma atrajera particularmente a la..s clases e n ascenso. sobre lodo e n las zona... anogfosajooass, desde los comerciantes )' los burgueses hasta los artesanos y cua ntoshaban llegado al gobierno de las comunidades ciudadanas. En la., nueva.s lomasde posicin religiosas 00 se podian dejar de ve r el reco nocimiento y la consagra-c in de al me nos una igual d ign idad de los laicos frente a los miembros del esta-do eclesial.

    Siempre desde una perspectiva simi lar. hay qu e hacer o tras observaciones.independientemente de los apoyos sociales y de las jus tific aciones ideolgicasqu e las te sis refo rmadoras pudieran ofrecer. en primer lugar a los campesinos.Los d iezmos y la fiscalidad eclesis tica gravaban en ge neral amplios estratos delmundo laico. hasta el punto por eje mplo de que los obispos imponan una mu ltaan ual por concubinato . En particu lar e n los pases de lengua a le mana. aunqu ems amplia mente en los ang losajones. esos grav me nes suscitaban un malestarcada vez mi... acentuado. Mucho an tes que Lute ro. no obs tante. se asent la con-vicclcn de que e l diezmo se fundase e n la ley humana. no e n la divina ni lampo-ca en la natural: su aplicacin formaba parte de las costumbres. aunque basando-

  • lA RHOIlM I\ I' llmlOSTI\NTF y L.O S CONf LlCl"OS I,U 5I: O PEOS 73

    se e n el consent imiento de los fieles. Por un lado. los reformudores admitieronque corresponda a esos lu mos contribuir incurso en el mbito materi al al fun-ctonamento de su iglesia. Por o tro. sin embargo. es claro que la base de la noobligacin de pagar los d iezmos promovi una jus tificaci n terica que sirvitambi n al vasto proceso de secularizacin de los bienes eclesisticos en los pa-ces refonnados. Siendo campesina gran parte de la poblacin. adems. no podadejar de parecer una injusticia la tentativa de extender los d iezmos a las cosechasy hacer de e llos una especie de canon de arrendam iento. Con todo. otras clases-ocales estaban directamente afectadas por los privilegios del clero. que incluanImpuestos sobre los productos en ve nta en el mercado y sobre las actividadesmercantiles.

    Se har evide nte, en suma. que e n las sociedades de la Europa septentrional ycentra l. bastante ms que en la.. meridionales, e ntre el siglo xv y e l xvr se era yacapaz. de hacer va ler las exigencias de la vida civil inclu so e n detrimento de lastradiciones favorables a l clero. EsIO se verific naturalmente de mudo ms visi -ble entre los gobiernos y los prncipes. quienes tuvieron un papel decisi vo y muynotable en la conso lidacin de la Reforma. Tales actitudes se apoyaban en unaamplia base re ivindicativa, presente e n cua lquie r estame nto la ico. de modo queincluso despus permaneci en la parte catlica. que hizo vale r con vigor scme-juntes ins tancias. Se podra citar e l caso de Juan Bck. campe n de la o rtodoxia ro-mana y gran adversario teolgico de los reformadores. A()~ antes de la revue ltaluterana, este hombre despleg su propia competencia bfblica y cannica para re-solver la cuestin de la legitimidad o como mnimo de los intereses sobre el di-nero invertido. Tanto su DOra como sus intervenciones se desplegaron con e l re-traso propio de les ambientes financieros de la Alema nia meridional respecto a10... italianos. aunque tambin con la expresa solici tud de lolo Fuggcr de quedarresguardados y sin duda con una conviccin tcdavfa ms fuerte de no tener yaque someterse 3 ciertas prevari caciones o presunciones eclesisticas.

    No se podr decir. pues. que de la Reforma se haya dado prioritariame nte unaversin econmica y social. ni que ese movimiento haya tenido que ver con el es-pritu capita lista. Todava menos se puede compartir la opinin de que pudo tenerxito en c ua nto se dedic a combatir y e liminar lao pretensiones del clero. su-primiendo su supuesto fundamento en la ley divina . Ni se puede pensar que laaccin de los mismos ectesi ..ricos que animaron semejante contes tacin fuerasostenida nicame nte por moti vos espiri tuales y cristianos. dado que loe conside-raban los intrpretes de todos los fie les y en panicu lar de aquellos que estabancomprome tidos con la vida activa . Asf. no fue un fen meno exclusivo so lamentede Alemania el de proporcionar una hase terica y una legitimacin a la prcticade los negocios y de las transacciones de capital liquido. El mundo de los ncgc -eles requera una finan ciacin cada vez ms gil de las inversiones y sobre tododel comercio a gran distancia, entonces en expansin. Ni la matriz alemana ni elmpetu de Lutero habran sido suficie ntes para hacer de la Reforma un rnovi-mie nto victorioso y menos au n europeo: los presupuestos de su x ito, e n efecto,estaban ya muy presentes en amplias zonas cemroscpremrionales del continentc .Si algo hay que expcer c-corno ya ha sido hecho por lo dems de un modo bas-

  • 74 H . S IC; . o XVI

    rante convincente- es en definitiva cmo 'i por qu la Rcfonna no se impuso enlos es tados ibricos ni en los italianos, dado su pronunciado ruvel de evolucinecon mica y social. Obviamente no sorprende que ese movimiento no penetraseen la mayor parte de la pennsula balcnica. no slo ampliamente dominada porlos turcos. sino tambin calificada de zonu todava subdesarrollada.

    Si adcm... se fija la atencin en la esfera ms propiamente cultural. uno se en-cuentra con la imposibilidad de verificar !'o la instruccin fuc de verdad mol..intensamente difundida en 1M reas que se hicieron protestantes respecto a lasque siguieron siendo catlicas. La vasta expansin de la lectura que parece ha-terse verificado hacia fines del siglo X\' constituy sin duda un elemento poten-cialmente favorabl e a la Reforma: con todo. hasta su manifestacin detonante lofue en una medida primordialmente indirecta. Fue propiamente el mensaje de losreformadores el que se con-..irti en un poten te factor de promocin cultural y noslo pUf el puesto eminente y esencial asignado por e llos alconocimieruo de lasEscrituras y por la adopcin de las lenguas vulgares para su goce colectivo. Porun lado. cuantos en la sociedad estaban deseosos de aprender o haban tenido yala instruccin adecuada se encontraban entonces con la capacidad de articular suspropias necesidades religiosas -c-uunque en rea lidad no fueran las nicas-omientras que en el pasado solamente el clero haba tenido en gran medida los me-dios para hacerlo. Pero las necesidades culturales fueron entonces mucho msque exclusiva y preemineruemente cristiana". La elite de los reformadores csruv'ocompuesta. en efecto. no slo de predicadores y telogos . sino tambin de peda-gogos. de juristas . de consejeros de prncipes e incluso de arti stas.

    Se ha puesto ya de relieve que en el siglo XVI el estudio del derecho conquis-t un mbito es pecifico propio en contraposici n a la teologa. Pero. dejando estoaparte. hay que recordar que al menos durante todo el siglo XV en la mayor partede las religiones cenrrooccidentalcs europeas. desde Lishoa a Riga y desde Lon-dres a Ragusa. subsista una articulada. slida y vasta cultura rncrcaruil, hecha now lo de prctica cotidiana vino tambin de consciente racionalidad y de valoresticos propios. Sin el apoyo de esa cultura y sin el recurso a los ct scos paganosantiguos. difcilmente los juristas pudran haberse convertido en los mejores in-rrpretes de los gobiernos civiles ni de sus reivindicaciones ancclesiasucas. Si nlas convicciones aur nornameme maduras en la" esferas de las magistraturas delas c iudades-estado y de las eon es de los soberanos. las Instancias policas del si-glo XVI no habran podido dar prueba de tanta seguridad en el hecho de entrome-terse en cuestiones dogmticas y de leg islar sobre problemas en apariencia es-trictamente re ligiosos.

    Se ha debido subrayar. pues , que el volcn de la Reforma no ex puls su lavadesde un magma de simple espi ritualidad y que la mar..a de sus lt'f,i1/i no fue ex-ctusvamcr uc de naturaleza teolgica. La Reforma protestante goz de un sustru-lo no menor y quiz ms amplio y enraizado que la Revolucin francesa de casitres siglos despus. sta coron una fase de caracteres que ya no eran definiblescomo medi evales. dado que sus estructuras. aunque fueran desarticuladas. ya noeran tales. En todo caso. se avino plenamente con la calificacin de revoluciona-ria. aunque pasados los primeros dec enios su CUN) se canalizara entre renovados

  • U RU OR MA p ROTLSIAN1E \' LOS CUN H .IC10S n JRUPLOS 75

    y firmes muros de conTencin Icomo sucede babuualmente en coyunturas simila-rrs). La Reforma constituy un vuelco oe pocas que con todo derecho pudo con-cretar un antes nc::tamrnte lJJ~inlo del de~pu . En ella particip en gran parte di-recta o indirectamente al meO' todo el Occoenre europeo. en todo mbito y encualqu ie r esfera. y. a d iferencia de kl'i movimientos telricos, sus se smos sguie-ron transmiti ndose a lo tergo de un sig lo de una zona a otra, sin dejar de salir ala superficie hasta el ..iglo XVIIl.

    2 . Los PRDROMOS DE loA R U U I.MA

    La cristiandad occidental acariciaba desde hada mucho tiempo el proyectode reformar la Ig lesia. Tal exigcncta fue sentida al~nulo desde el siglo XI y pocoo mucho ~e satisfizo de vez e n cuando. aunq ue nunca de modo co mpleto. La ideagerm in en cuanto el funcionamiento de la Iglesia empez a resultar decepcio-nan te - al meno s para algu nos tic sus membros-c-. lo que hizo aparecer clara-mente la ruptua existente e ntre la vida atribuida a 10'. primeros cristianos y la que'ioe tena ante los ojos. La imagen de un cristianismo primiti vo ejemplar era en P."U"4te mtica y en parte ideolgica. Es e vidente . en efecto . que la preparacin mentalpropia del Medievo no permita a los cristianos ir rigu rosamente en busca de losdocumentos y los ve "'ligios de los comportarrnenros de sus antecesores: la mves-ugacon de carcter hist rico y cientfico tena a n que renacer. Pero la idea deuna primera fase de pureza y de virtud se haca necesaria para reaccio nar mejorfrente a las que parecan se r forma... de decadencia y de adultcrncin. Se verific.e n efecto. entre el siglo XI y el XIV. u n fenmeno que no tcna nada de peradji-ro: cuanto ms peso haba gando la Iglesia en la esfera politica. cuanto mi... in-di 'oCUtido na su pre~i~o cultural y m.. aumentaban sus recursos temporales.tanto ms una parte del clero y luego tambin de los laiCO!i se convencta de qurhaba degenerado y haba dcj..oo de cumpl ir sus comendos m.. importantes, Deeste modo. la idea de reformarla se nutri de una image n del cristianismo que sefue forjando progresivameme por reaccin fre nte a aquello en que el cristianismo"C' haba convertido efectivamente. Sera. sin embargo. un acto de parcialidadsostener que ti cristiani!>mo propuesto por loe. refoemeoores fuera m... genuino:sus adversarios no creran menos que e lloc, pero se hacan una idea distinta de lafunci n de la Iglesia. Una concepcin ms. espiritual c hoc durante sig los ronuna concepcin ms temporal y poltica en el in terior de la misma Iglesia Comolos partidarios de la primera con..ritufan una minora y lo s partidarios de la SC4gunda tenan cn su poder la organizacin ecfe sla.. rica , ms de una ve z los segundos co nde naron e hicieron perseguir como herejes a los primeros.

    Las dos tendencia.. se enfrentaron durante mucho tiempo y. a medida que pa-saban los aos. grupos de laicos iban acercndose a los clrigos que defendan lareforma. La tendencia de los laicos no puede sorprender porque la concepcinpoltica de la Iglesia los situaba en un nivel claramente inferior al de ~ miem-bros del clero. Los n:Jet.i....icos no dudaban en reivindicar para si toda suerte deprivilegios. haciendo de la comunidad cristiana un conjunto del que ellos enun I~

  • gobernantes y los fieles los s bditos. El fenmeno se ecentuaba hasta lal puntoque los sacerdotes no deseaban que JO'i laicos leyeran y conocieran los libros saogrados: todav a menos habran luleradoque discutieran su contenido y sus impli_caciones. La Iglesia se arrogaba el monopolio de la interpretacin de la... Escritu,ras, de la definicin de las creencia.. y an ms de la pm.Iicacin. El culto estabaorganizado de modo que 1O'i sacerdotes resultasen los intermediarios indispensa,bk's entre el hombre Y Dios. entre )(K, fieles )' Cristo. la virgen o los santos. Lamau de los creyentes aceptaba este planteamiento de la "ida. rcligKKa porque nodi ..ponfa de los medios inrejectuales o morales para orientarse por l'f sola ni paracontestar la funcin de los eclesi sticos. El sacerdol:e a.pareda al mmno tiempocorno el ho mbre docto y el ser con..agrado. aquel que viv a distin tamente de losdems sin contraer vnculos de fami lia. que saba sumin istrar los medios para ha-cer propicia la divinidad y provocar su augurada intervencin. que poda conju-rar tambin la.. insidia.. de las fuerzas malficas y demoniacas. Por esto parectanormal que el clero ocupase el primer rango social. que se le pagasen los diez-mos , que se le legasen los bienes inmuebles y tes propiedades terri toriales de im-ponencia notable, que legislara e n materi a de comportamiento. El a.scendente dela Igle sia era tanto muyor cuanto. e n nombre de Dios y de la fe. ejerca un altocontro l sobre la cultura. sobre e l arte y sobre la enseanza. adems de supe rvisaro incluso administrar directamente las principales obra.. de asistencia social.

    El intente de los reformadores 1M) era el de sustraer a la 1~ le ia el ejercicio deesa.... funciones. sino de disciplinarlo segn determinados criterios. Por su parte. laIglesia haba rechazado algunos y casi absorbido ceros, ya que se trataba sobretodo de oposiciones internas: la autoridad poltica 1M) se habia propuesto apenasinvadir este campo y en general sostena las posiciones o ficia les de la jerarqufaeclesl suca.

    Despees de que la curia pontificia se hubiera estructurado entre el !i.iglo XIII YelXIV como un potente organismo burocrtico y centralizador. muchos intentaronapeovectcrse de la crisis del papado producida con el gran cisma de Occidente paralimitar sus poderes. El llamado partido conciliar (que sostena la superioridad delconcilio sobre el papa) encauz los esfuerzos de quienes queran instaurar una for-ma de gobierno ms colegial y menos autoritaria Los xitos de esa te ndencia fue-ron ms aparentes que reales. aunque durante muchos aos permaneci reunido e nBasilea un concilio de preleoos que. sin la panicipacirl del papa e incluso contrasu voluntad. intentaron proponer una serie de reformas (1431-1~9). Como ya S(! ha

    ~ode manifiesto. lCK papas de la segunda mitad del siglo xv y del inicio del XVise hallaron absorbidos en gran medida por la poltica italiana y no llevaron a caboninguna accin de gmn alcance para responder a las exigencias reformadoras . .s-tas, .... in embargo, siguieron manifest ndosc e n el interior de la Iglesia. Durante todoe l siglo xv se sucedieron una serie de iniciativas y de tentati vas encaminadas a re-primir abusos disciplinarios manifestados en las rdenes mun...tices. a introducirformas m... sobrias de piedad a fundar cofradas y asociactoncs religiosas.

    Muy pronto. algunos reaccionaron de modo radical. Desde la segunda mitaddel siglo XIV. John Wyclif (1330-1384) haba sostenido que los prncipes rentanet oerecbo de expropiar al clero y de distrihuir y administrar sus bienes en inters

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  • LA 1tE!:ORMA PROT ESTANT I: y LO S CON I Lll'lIS rU ROPUlS 77

    de la colectividad; por- otro lado. consideraba contrario a la ley divina e l voto decastidad de la.s monjib y reprobable la mendicidad de 1m. monjes. Aunque era untelogo. el terico ingls expresaba la.. reacciones de la sociedad laica fren te a laIglesia y sus obras ejercieron una influencia notable : una gran parte de su!> cr-cas haban de ser reasumidas por 101> re formadores del siglo X' -I. Wyclif atac yaa fondo las indulgencias. la pretensin de los eclesisticos de expenderas y trafi-car en cierto modo con ella...: no slo se opuso a la infalibilidad pontificia. sinot.ambtn a la utilidad de tener un papa. Estos punlo! de \-i!>la se difundteron desdeInglaterra (donde. sin embargo. su xito inmediato no fue rele ' "ante) hasta el con-uneme y en particular hasta Bohemia. donde fueron inuoducicos en l -WI por Je-rnimo de Praga. Joan Hus ( 1369- 14 15) y su'> seguidores los corroboraron e ngran parte, afinnando por eje mplo que nadie 'oC poda hacer pasar por represen-tante de CriMO o de Pedro si no imitaba su comportamiento"

    Lo que las personas religiosamente sensibles consideraban relevante era laIlOIahle ruptura entre el incremento del sis tema de prcticas y devociones exrer-na". a que parec a reducirse el cristianismo, y la relativa despreocupacin oficialpor la adh esin interior a la comunin espiritual con Dins. Int rpretes de esa in-satisfaccin fueron los ..Herman os de la vida com unita ria, fundados por OeenGroore ( 1340- 13R4), que inicialmente se d ifundieron sobre lodo en el rea holan-desa y flamenca. asi como e l movimiento de la Devotio moderna . Ambos ponianen primer plano la necesidad de una ex periencia religiosa ms intima y personal.reavivada por la lectura de los textos sagrados. Frente al c uila de la innumerablecohorte de santos protectores y a la ostentosa veoereci n de sus reliquias. se que-ra reafirmar la centralidad del papel salvador y del ejemplo moral dado por Cris-ro. A este propsito hay que ci tar la importancia de la ohm titu lada precisamenteImitacin de Cristo. A esas corrientes de reavi vada piedad no tardaron en unirse.-.obtt todo en el noroeste de Europa. instancias humanistas que propugnaban elretorno a las fuentes originales de la inspiracin cri!>liana. Del mismo modo queel humanismo laico haba digniftcado de nuevo las obras descuidadas. deforma-das o transmitidas fragme mariameme de los d..ices antiguos y ensalzaba los va-lores que conten an, el humanismo cristiano se aplic al estudio ms riguroso delos textos sagrados para captar su fonna ms autntica o rara extraer mejor su es-pritu. Junto a esta lectura mas atenta del Antiguo y del Nue vo Testamento seconsolid el conocimiento y la autoridad de la literatura patrtsnca. part icular-mente de los escntos de san Agusun.

    La espiritualidad de la Devotio moderna y tambi n e l e vangelismo de cuohumanista --que tu vo su mayor exponente en Erasmo-c- estaban reservados msbie n a las e lites que a las musas. La lenta y constante bsqued a de una perfecciny elevacin moral se truducfu a l menos implcitamente en un itinerario tico ar-duo, que slo unos pocos e ran capaces de recorrer. Esta bsqueda se fundaba tan-lo en una disciplina interior como en la confianza de poder recorrer con las pro-pias fuerzas el camino de la virtud y de la salvacin. Un prolongado hhitocolectivo. al contrario. habla acostumbrado a los eie, a l logro de las meras reli -giosas por vas m~ fcile,. e inmediata.s, como las prcticas piadosas . las timos-na.s, los votos. las indulgencias o el recurso a la intercesin de la Virgen y de los

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    samos. Quien hubiera qeerico impugnar la validez de tales forma de piedad ysu..tiruirtas, slo podra haber obtenido un xtto amplio y popular indicando a I()

  • Ut. RUOR)'I " PROIF!>'TAS n: , l.OS CO~ fl. ICTOS EU ROPt .OS 79

    sus iniciuuvas econmica.. y sociales, En el tra nscurso del siglo X \ 'I . e incluso delX" " y del XVIII, la naturaleza llegar u ser gradual mcme la instanc ia suprema. ten-lo en las dimensiones de la polica y del derecho como en la... de la moral y delconocimiento c ientfico. convirtindose fina lmente en un criterio de referenciapara la verdad relig iosa.

    3 . L UTERAS lS MO y ANA BAI'1 IS Jot O

    Mientras el nuevo emperador Carlos V se estaba apoderando de modo defini-tivo de Lombardfa y preparaba su supremacra sobre la pennsula italiana. e l Im-pcrio del que apenas acababa de tomar posesin era pre"a de agitaciones a las queel soberano internaba hacer frente.

    La ca usa oc asional de los desrdenes fueron las tomas de posicin de unmonje agustino. Ma rtn Lutero ( 1483 1546). que entr en pol mica con un domi-nico a propsito de la asignac in de indu lgencias en elterritorio alemn. Ames depresentar y hacer circular SU" 95 _tes is_ (otoo de 1517). Lute ro haba pasadouna cri..i... interior que le haba llevado a aproximarse a convicciones dogmtica"contrarias a la doctrina tradicional. Impugnaba el derecho del papa a di stribuir losfruto-, de los mritos de Cristo y de los sant os. aunque esto se encuadraba en tedauna visin de conjunto a la que no pensaba renunciar. En la primavera de 1518.ultmnsruitir 111 ponuflce 97 jus tificaciones de sus tesis propuestas el ao anterior.no dejaba de subrayar a modo de conclusin que no se haba retractado de e llas.Para Lutero. todo cristiano no poda ser vino un pecador. digno de ser condenadosin ape lacin posi ble si no crea profundamente poderse salvar solamente graciasa la misericordia de Dios (sta era la justificac in para la fe ). Por consiguiente.los sacramentos como canales de distribucin de la gracia di vina perdan su im-porrancia: lo que contaba era una iluminacin interior por la que cada uno se ase-guraba de que la propia miseria moral no le seria imputada. Tal dialogo directoentre e l creyente y Dios no ..lu devaluaba los sac ramentos. sino tambin la.'> bue-nas obras como ttulos de mrito. as como la accin de los intermediarios entreel Salvador y lo" fi ele