La Esperanza de Amor

21
La esperanza de amor Capítulo 1: Un amor oculto Soy Rebeca, una chica de tan solo 16 años, estoy muy enamorada del mejor amigo de mi papá, desde que tenía 10 años, él logro entrar en mi corazón, con su sonrisa maravillosa, su forma de ser, sus grandes ojos grises y su gran altura. Él en estos momentos tiene 36 años, sé que es mucho mayor para mí pero no lo puedo evitar, cada vez que me habla no sé qué hacer, no soy capaz de mirarlo a sus lindos ojos, no me atrevo a hablarle, ni mucho menos de contarle lo que siento por él. Un día mientras hacia mi tarea mi papa me pidió el favor de que le ayudara a Santiago, a abrir un correo, yo estaba en una pijama muy corta, el me quedo mirando, yo me puse muy roja y no fui capaz de hablarle, mi papa se fue, y quedamos los dos solos en la oficina, me dije a mi misma que debía sacar fuerzas y ser valiente. Rebecca: emmmm oye Santiago: si, dime Rebecca: ¿cómo quieres tu correo? Santiago: pues sería algo como hilarysantiago@.... En ese momento supe que nunca tendría una posibilidad con él, pues se le veía que amaba a Hilary, su mujer. Santiago: ¿por qué te quedaste tan callada?, ¿Esta malo?. Rebecca: no por nada, así está bien. Santiago: si creo que si

description

Historias

Transcript of La Esperanza de Amor

Page 1: La Esperanza de Amor

La esperanza de amorCapítulo 1: Un amor ocultoSoy Rebeca, una chica de tan solo 16 años, estoy muy enamorada del mejor amigo de mi papá, desde que tenía 10 años, él logro entrar en mi corazón, con su sonrisa maravillosa, su forma de ser, sus grandes ojos grises y su gran altura. Él en estos momentos tiene 36 años, sé que es mucho mayor para mí pero no lo puedo evitar, cada vez que me habla no sé qué hacer, no soy capaz de mirarlo a sus lindos ojos, no me atrevo a hablarle, ni mucho menos de contarle lo que siento por él.

Un día mientras hacia mi tarea mi papa me pidió el favor de que le ayudara a Santiago, a abrir un correo, yo estaba en una pijama muy corta, el me quedo mirando, yo me puse muy roja y no fui capaz de hablarle, mi papa se fue, y quedamos los dos solos en la oficina, me dije a mi misma que debía sacar fuerzas y ser valiente.

Rebecca: emmmm oye

Santiago: si, dime

Rebecca: ¿cómo quieres tu correo?

Santiago: pues sería algo como hilarysantiago@....

En ese momento supe que nunca tendría una posibilidad con él, pues se le veía que amaba a Hilary, su mujer.

Santiago: ¿por qué te quedaste tan callada?, ¿Esta malo?.

Rebecca: no por nada, así está bien.

Santiago: si creo que si

Al cabo de un rato, cuando termino de hacerle el correo…

Santiago: gracias Rebecca

Rebecca: de nada

Santiago: bueno, creo que ya es hora de irme, aunque no quiera.

Page 2: La Esperanza de Amor

No comprendí lo que me quiso decir, o tal vez si lo entendí, pero no quería aceptarlo.

Rebecca: creo que lo mejor es que te vallas de pronto papá se enoja.

Santiago: está bien, adiós, descansa pequeña.

En ese momento no le dije nada solo hice que ponerme roja y salir de la oficina dejando el computador encendido y a él con las palabras en la boca.

Capítulo 2: La gran oportunidad que me da la vida

El tiempo pasa rápido, y pronto ya ha pasado un mes desde la última vez que lo vi, estaba muy extrañada de que no se volviera a pasar por la casa, pero pensé que sería lo mejor para no verlo y así poder de dejar de sentir lo que sentía por él, o al menos eso creía yo.

Un día estaba en la salida del colegio, esperando a mi padre quien no llegaba, estaba muy extrañada, pues él nunca llegaba tarde. Espere una hora, ya estaba muy cansada, así que decidí irme, cuando me dispuse a pasar la calle, vi el auto de papá acercándose, fruncí el ceño mientras me acercaba al auto, iba dispuesta a darle un sermón a mi padre, cuando lo note, el que manejaba el carro, no era específicamente mi progenitor.

Santiago: hola, mira tus padres se fueron a hacer una diligencia y me pidieron el favor de que te recogiera.

Rebecca: Está bien, pero veo que tu vicio por llegar tarde nunca se pierde ¿no es así?

Santiago: olvidemos ese detalle, mejor sube al auto.

Después de estar en el auto Santiago arranco, luego de un rato vi que no se dirigía hacia mi casa.

Rebecca: Oye ¿te puedo preguntar algo?

Santiago: ya estas preguntando, pero dale dime ¿Qué sucede?

Rebecca: ¿para dónde vamos?

Santiago: lo siento, olvide decírtelo, debo hacer una cosa antes de llevarte a casa.

Page 3: La Esperanza de Amor

Rebecca: Esta bien.

La verdad me sentí algo triste, estúpidamente llegué a pensar que sería algo así como una cita, pero tristemente, no lo era. Cuando llegamos a un lugar muy retirado a la ciudad apaga el auto, Santiago sale de este, da la vuelta y pide que me baje, salgo del auto, pide que me siente en una banca debajo de un árbol y sin decir ni una palabra, sencillamente lo hago, siento como mi corazón late cada vez más rápido, puedo sentir mis pulsaciones en mis oídos, pero solo respiro y espero el porque me hizo salir del auto.

Santiago: Lamento tanto misterio, lamento haberte mentido, no existe ninguna cosa que deba hacer, sencillamente sentí que hoy era el mejor momento para hablar contigo…-toma aire por un momento- dime que sientes por mí.

Rebecca: ¿eh? no comprendo.

Santiago: si, lo que sucede es que el día que te fuiste y me dejaste en la oficina, una amiga tuya hablo por el correo y dijo: "hola amiga, como vas con ese amor prohibido tuyo “Santiago”"; con eso comprendí porque siempre huías cuando te hablaba o solo agachabas tu mirada cuando estabas cerca de mí, el porqué de tu nerviosismo cerca de mí.

Rebecca: oye, no, no… no es lo que tú piensas.

Solo logro decir esas cuantas palabras, sentía como mi rostro se colocaba cada vez más caliente.

Santiago: ¿no?, entonces necesito que me lo expliques.

Su voz era suave. Sabía que ese era el mejor momento para decirle que lo amaba y no lo podía evitar, aun así tenía miedo al decírselo, porque sonaría como la loca chica que se fija en el amigo de su padre, así que sabía que sería rechazada por este, mi cuerpo comenzó a temblar poco a poco, sentía ese enorme nudo en mi garganta, aquello que había guardado por tantos años, al fin fue descubierto.

Rebecca: Eeeeh…

No pude decir ni una sola palabra completa.

Santiago: no tiembles, quédate tranquila solo quiero saber la verdad.

Rebecca: está bien, mira todo comenzó hace algunos años, pensé que solo era una estúpida atracción, pero al paso de los años, esa atracción se fue

Page 4: La Esperanza de Amor

convirtiendo en algo más, y ahora, significas más de lo que deberías para mí, pero sé que lo que siento por ti y el futuro que me imagino contigo nunca va a hacerse realidad pues eres mucho mayor que yo además tienes mujer y se te nota que la amas.

Cuando caigo en cuenta de todo lo que había soltado en unos solos segundos, solo guardo silencio y miro a otro lugar, la vergüenza que sentía en ese momento era enorme, un gran silencio se propagó entre nosotros por un largo tiempo. Luego de unos minutos, Santiago rompe aquel silencio tan incómodo.

Santiago: bueno, no me imaginaba que hubiera una pequeña que sintiera eso tan profundo por mí.

Después de que dijera eso sentí como mi piel se volvía caliente de nuevo, pero esta vez no era por pena, esta vez era por rabia, rabia conmigo misma, comprendí que solo era una pequeña para él, así que me pare y me fui al carro de lo tonta que me sentía por haberme ilusionado con él, él me siguió y luego de unos segundos también subió.

Santiago: ¿por qué me dejaste hablando solo? ¿Te enojaste?.

Rebecca: ¿pequeña?

Santiago: solo te digo así de cariño

Rebecca: ¿cariño? ¿Por qué cariño?

No pude lograr no sentirme tonta al hacer la cara que hice, pero la verdad la palabra cariño me tomo por sorpresa, pero luego me dije a mi misma, que solo era cariño por lo que era la hija de su mejor amigo, por nada más.

Santiago: bueno, es que, lo que sucede es que tú a mi…

Rebecca: ¿yo a ti qué?

Santiago: Rebecca, llego la hora de decirte la verdad, creo que ya eres algo mayor para saberla.

Rebecca: ¿de qué verdad me hablas?

Page 5: La Esperanza de Amor

No comprendía nada, ahora nada tenía sentido, mi cabeza daba muchas vueltas, pero solo quería saber una cosa, esa verdad de la que tanto hablaba.

Santiago: es que tú… tu... –toma un poco de aire- … tú me pareces una niña muy linda desde hace algún tiempo, y aunque intente negármelo, me atraes demasiado, aunque sé que yo podría ser tu padre, no puedo obligar a mi corazón que sienta algo que él no quiere sentir además sé que tú crees que amo a Hilary, pero no es así, luego de un tiempo nuestras cosas comenzaron a ir mal, y ahora solo estoy con ella para no pensar en ti.

En ese momento no supe cómo reaccionar, no supe que hacer o que decir, lo que había esperado por tantos años, aquello que sólo sucedía en mis sueños, ahora estaba pasando en mi realidad, sentí un enorme vacío, sin darme cuenta comencé a llorar.

Santiago: ¿por qué lloras? ¿No te gusto lo que te dije? ¿Te asuste?

Rebecca: no, todo lo contrario eso que acabas de decir, es lo que he esperado a que saliera de tu boca por tantos años, y lloro porque nunca había llegado a pensar que esto sucedería en verdad, y ahora que lo pienso, nunca he pensado en mis…

No me dejo terminar de hablar, solamente dirigió su dedo hacia mis labios, luego me abrazo, y sin decir ni una sola palabra me miro a los ojos y se fue acercando poco a poco a mis labios, no sabía qué hacer, sentía una enormes ganas de besarlo, pero sabía que si lo hacía, no podría volver atrás, así que me calme y me deje llevar, pero justo en el momento en el que él estaba a unos cuantos centímetros de mis labios, le sonó el celular. Así que se alejó de mi rápido.

Rebecca: contesta

Santiago: no, en estos momentos, solo quiero estar contigo.

No pude evitar sonreír por como sonaban esas palabras en su boca.

Rebecca: contesta debe ser algo importante

Santiago: está bien, "… Hola, ¿ya estás en casa?, claro, ya misma la llevo.”

Rebecca: era mi padre, ¿verdad?

Santiago: si lo era, dijo que ya era hora de llevarte a casa.

Page 6: La Esperanza de Amor

Sentí como algo se clavaba en mi estómago, eso amargo que me llenaba por haber sido interrumpidos.

Rebecca: está bien, pero hare de cuenta que lo que paso en este lugar nunca paso.

Quizá fue lo más estúpido que pude haber dicho en toda mi vida, pero fue lo que sentí más correcto.

Santiago: ¿por qué?

Su cara de asombro, me hizo sentir algo mal.

Rebecca: es que el mundo se empeñará en que no estemos juntos y creo que es lo mejor.

Él solo bajo su mirada y encendió el auto, en todo el camino de regreso a casa no dije ni una sola palabra, él solo me miraba de vez en cuando, pero no decía nada; podía sentir como su mirada estaba encima mío, cuando llegamos a casa solo baje del auto y no me despedí, el solo me miro y no dijo nada.

Al otro día, él lo único que hacía era llamarme al celular pero yo no le contestaba, me mandaba mensajes diciendo que no había podido olvidar el casi beso, no sabía qué hacer, en poco tiempo me volvería loca, le conteste y le dije que me dejara en paz, apague el celular y salí de mi cuarto. Me dolía demasiado serle indiferente, pero era lo mejor.

En el colegio le conté a mi amiga Rosa todo lo sucedido el día anterior, ella solo me miraba, al cabo de un rato, cuando terminé, le pedí ayuda, pero no supo que decir, se quedó callada, solo se le ocurrió algo hasta el descanso.

Rosa: prende el celular, y si llama yo hablare con él por ti.

Rebecca: está bien.

La verdad, pensé que no volvería a llamar, que lo que le había dicho había bastado, pero como siempre, no acerté, unos minutos más tarde el celular sonó.

Rosa: Hola…

Santiago: hola, sé que no eres ella, reconozco su voz, así que por favor, pásamela.

Page 7: La Esperanza de Amor

Rosa: ella no quiere hablar contigo.

Santiago: pásamela, necesito decirle que lo que sucedió ayer no fue mentira, además es el único momento que puedo llamar, mientras Hilary esta trabajando.

Rosa: no insistas, no te la pasare olvídala, adiós

Santiago: que tercas son, está bien pero dile que todo fue verdad y que luego de alguna manera hablaré con ella.

Rosa me dio la razón, se me partió el corazón, porque en verdad me hacía feliz lo que decía, pero por otro lado, sentía pánico de lo que podría llegar a suceder y llore, no volví a saber nada de él durante un largo tiempo.

Capítulo 3: El paseo familiarAl tiempo de no volver a ver a Santiago, mi corazón se llenó de tristeza y sufrimiento, al saber que el sentía lo mismo por mí, pero que no podíamos estar juntos por la diferencia de edad, sabía que la vida era injusta en ese momento pero no sabía lo que me deparaba el futuro.

Pasan unos meses y mi amor se volvió cada vez más fuerte al no volverlo a ver, sé que quizá suene estúpido, amar a quien no tienes y mucho menos ves, pero no había nadie más, ninguno de los chicos del colegio me agradaban, y aunque lo intentaba, siempre volvía al mismo pensamiento, Santiago siempre sería el primero en mi lista, quería verlo, tenerlo en mis brazos y besarlo, al pensar en lo que pudo pasar hace unos meses mi corazón se agita, comprendía el por qué pues llevaba años amándolo.

Después de estar un largo rato en mi habitación, mi padre regresa de su trabajo y entra a mi cuarto, para decirme que mañana iríamos a un paseo con sus amigos y que debía ir, no tenía opción, así que solo asentí. Cuando mi papá sale del cuarto y vuelvo a estar sola, siento una pequeña sensación en mi estómago, quizá sea porque podré ver a Santiago, pero quizá no, quizás él prefiera no ir y evitarme, total ya lo ha hecho durante estos meses, y si fuera, llevaría a su esposa con él, así que mejor me duermo antes de seguir pensando en ello.

Al otro día muy temprano en la mañana mis padres me levantan para que me arregle para el paseo, debido a que donde íbamos era algo retirado, me alisto, desayuno y salimos en el auto, todos nos veríamos en ese lugar, así que aún tenía

Page 8: La Esperanza de Amor

un poco más de tiempo para pensar. Cuatro horas después llegamos, me bajo del auto y sin darme cuenta busco a Santiago entre los amigos de mi padre, pero como lo sabía desde ayer, no estaba.

El lugar era bastante hermoso, todo era tranquilo, luego de un rato decido cambiarme a ropa más cómoda, me pongo un short corto y una la parte superior de mi vestido de baño, me hago cerca a la orilla a tomar el sol, un poco de sol no me caería mal, siento como mi cuerpo se relaja, y poco a poco voy quedándome dormida. Un momento después logro escuchar aquella voz fría pero hermosa de Santiago, abrí los ojos en un par de segundos, pero para mí desgracia no estaba, quizá estaba paranoica o en su defecto volviéndome loca.

Decidí que lo mejor era dejar de pensar en él y disfrutar de ese rato con mi familia, me metí a la piscina, sumergiéndome lo más profundo posible, me encantaba nadar, pero me golpeo con algo, así que saco mi cabeza del agua para poder ver que era. Sentí como el frio recorría todo mi cuerpo, no podía creer aquello que mis ojos estaban viendo, Santiago, enfrente mío sin camisa, podía observar como su cuerpo aún estaba tenso a pesar del tiempo, reaccione, me di cuenta de lo estúpida que me estaba viendo, así que di media vuelta dispuesta a ignorarlo, pero algo, mejor alguien me cogió del brazo y me halo con fuerza, todo mi cuerpo se congeló en ese momento. Sentí como todos podían estar mirando nuestra escena, así que miro a nuestro alrededor, y para mi sorpresa no hay nadie cerca, quizá estaban ya pasados de tragos, como solían hacer mis padres y sus amigos.

Intente solarme del agarre, pero lo único que logre, fue que él me halara en su dirección y me abrazara por la espalda, un rayo recorrió todo mi cuerpo inmediatamente.

Santiago: Hola, quisiera saber porque una chica tan hermosa está nadando tan sola.

Me hablaba muy cerca al oído y sus palabras entraban en él haciendo cosquillas.

Rebecca: Hola, no lo sé, quizá es mejor la soledad después de todo, pero según veo ya no estoy sola.

No sé porque se me ocurrió decir tremenda estupidez, pero ya la había dicho, no había nada que pudiera hacer, así que doy media vuelta y lo veo a la cara.

Santiago: ¿Sabes?, alguien con tu belleza nunca debería estar sola, así que de eso me encargare yo.

Page 9: La Esperanza de Amor

Solo puedo sonreír, mi cuerpo es solo sensaciones en ese momento. Pero recuerdo que hace mucho no lo veo y que no hizo nada para volver a verme.

Rebecca: No es necesario, gracias, he estado muy bien sola en estos últimos m…

No me deja terminar de hablar, coge mi rostro con sus dos manos, y se acerca poco a poco, yo no digo nada solo me quedo mirándole, sus labios rozan lentamente los míos, y siento como la emoción estalla dentro de mí, lo sigo, y aquel roce, se vuelve un beso, un beso lento, pero apasionado, no recuerdo haber dado algún beso tan apasionado como este, me siento feliz, por fin aquello que tanto esperé se había realizado. Cuando para, siento pena así que agacho mi cabeza.

Santiago: me quisiera quedar toda mi vida aquí, besándote.

Rebecca: yo también, ¿Sabías que te amo?

No puedo creer que siga con mis estupideces, no sé cómo sigo haciéndolo, después de un beso, como le digo aquello, mis mejillas se tornan rojas y sonrió penosamente.

Santiago: Quizás sepa algo como aquello, pero sabes que sé con exactitud, no sé cómo lo lograste, pero no dejo de pensar en ti.

Sonrió, aquella confesión me hace feliz, luego de eso, salgo de la piscina y voy a ver que están haciendo mis padres y sus amigos, para mi sorpresa, todos están dormidos, así que vuelvo a la piscina con Santiago.

Rebecca: todos están durmiendo

Santiago: mejor, así tengo tiempo para seguir besándote

Él sonríe, cuando lo hace puedo ver sus hermosos dientes, a pesar de ser mayor que yo, mucho mayor, no se ve tan mayor, comienzo en creer eso de que nuestro cuerpo refleja cómo es nuestro espíritu, y el de él sigue siendo joven. Pasamos gran parte de la tarde hablando, pero la mayoría del tiempo besándonos, creo que no me cansaré de hacerlo.

Unas cuantas horas después mis padres despiertan y deciden que debemos irnos, debido a que ellos habían bebido, Santiago se ofrece a llevarnos, así que el conduce y yo voy atrás con mi madre, por momentos nuestras miradas se cruzan por el espejo retrovisor, y yo solo sonrió.

Page 10: La Esperanza de Amor

Cuando por fin llegamos a casa, solo puedo decirle adiós, mis padres están cerca y mi cuerpo se retuerce al pensar que se enteren, así que parezco lo más normal posible, subo a mi cuarto y me acuesto, cuando estoy a punto de dormirme, recibo un mensaje.

“Me encantó pasar esta tarde contigo, me haces feliz, quizá sea una locura, quizá lo más sincero que he hecho en toda mi vida, no sé qué sea ni como logras, pero

algo enorme crece dentro de mí por ti, descansa ángel.”

Capítulo 4: Los cumpleaños de RebeccaPronto llegaron mis cumpleaños, me sentía rara, con todo lo que había sucedido en estos últimos meses, me sentía feliz, aunque había algo que no dejaba de inquietarme pero no sabía que era, esta noche tendría mi fiesta de cumpleaños como es costumbre en mi familia, celebrar todos los cumpleaños a lo grande hasta que cumplas 18 años, cuando te conviertes en un adulto, me siento nerviosa porque sé que él vendrá y no sé si todos nuestros sentimientos se noten, estoy feliz también, otra tradición es que debo bailar con mis amigos y luego con los de mi padre, es una rara costumbre, pero viene de generaciones anteriores y creo que jamás la entenderé, lo bueno es que eso significa que podré bailar una parte de canción con Santiago sin levantar sospechas.

Todo el día estuve ocupada arreglándome y pronto llegó la noche, el salón estaba repleto de personas, papá y mamá habían invitado a Santiago pero cuando llegué, él aún no estaba ahí, pasaba y pasaba el tiempo y él no llegaba, estaba triste lo debo reconocer, me sentía algo triste porque sabía que no lo podría besar ni estar cerca de él, quizás había decidido no ir a mi fiesta. Había llegado la hora de bailar con los hombres era la parte que más ansiaba de la fiesta, al final la fila no resultó ser tan larga, todos mis amigos eran muy penosos, en la fila no se encontraba Santiago y cada vez me sentía más triste; primero baile con papá como es debido, en mi rostro se notaba la tristeza.

-¿Por qué estás tan triste?- pregunta papá

-No me sucede nada papá, no te preocupes- respondo inmediatamente fingiendo una sonrisa

Me sentía mal por tener que mentirle, pero era lo mejor para todos.

Page 11: La Esperanza de Amor

Después seguí bailando, el último en la fila era Andrés, ya me aproximaba a él y Santiago no llegaba, pronto llegue donde Andrés así que baile con él, le pregunte por Santiago, pero me contesto lo mismo que todos, no sabía dónde estaba, solo faltaba un hombre en la fila y era el más importante para mi esa noche, mis ojos se llenaron de lágrimas, estaba recordando todo lo vivido con él, por un momento me desconecte de este mundo y todo era silencio y de repente escuché la voz fría de él, cuando mire hacia atrás no había nadie, tal vez, solo tal vez estaba alucinando.

-¿Me permites bailar?-  dijo Santiago

Pude reconocer esa bella y sexy voz, sabía que esta vez si era él, mi rostro dejo a un lado la tristeza, me limpie mis lágrimas, Andrés me dio media vuelta y me entrego a Santiago.

-¿Por qué llorabas?- pregunta Santiago

-Porque creí que no vendrías- Respondo agachando la cabeza

- Lo siento, me retrase un poco, solo eso, estaba comprando tu regalo- dice Santiago con una gran sonrisa en su rostro

-¿Así de grande es?- bromeo

-No, en realidad te traje dos regalos, uno material y uno personal- dice Santiago

-Dime de que trata el persona- respondo ansiosa

-Antes de venir yo…-

En ese momento llega papá y Santiago no puede decirme nada.

-Hola Santiago, ya casi acaba la canción, supongo que la debo terminar de bailar con mi pequeña- dice mi padre algo serio

-Si, claro, por cierto, tu hija está muy hermosa esta noche- dice Santiago

- Gracias- dice papá

Termine de bailar con papa, todas las personas nos aplaudieron, me sentía feliz aun lloraba pero era de alegría, mi sueño se había hecho realidad, Santiago había ido. Fui a buscarlo pero no lo encontré por ninguna parte, me preguntaba que sería mi regalo, Salí del salón por un momento y me senté en un muro que había en el jardín.

Page 12: La Esperanza de Amor

Sabía que amaba a Santiago; pero también sabia las dificultades que tendría con mis padres, recordé el supuesto regalo de Santiago  -¿Qué seria?-   , no quería imaginar cosas, no quería hacerme ilusiones, pensé en como seria la vida si mis padres aceptaran a Santiago como mi novio…

-¿Qué hace la dueña de la fiesta fuera de ella?- dijo Santiago trayendo consigo una rosa y entregándomela, e interrumpiendo mis pensamientos

-Gracias no hacía falta, oye ahora que lo recuerdo… ¿Cuál es mi regalo?- digo con una sonrisa en mi rostro

-El regalo material es esto, es un pequeño detalle que quiero que uses para que me recuerdes, la otra parte… Antes de venir, el verdadero motivo por el que realmente llegué tarde, fue porque…-

Se detiene toma aire y siento una gran tensión en mi cuerpo

- Fui a ver a Hilary antes de venir y terminé todo con ella, le dejé claro que no podía estar con ella cuando no sentía nada más- Lo dice por fin Santiago

No podía decir palabra alguna, me habían dado demasiados regalos y dinero, pero este, este era el mejor de todos, él solo sonrió, lo abrace y él a mí, recordé donde estábamos así que lo solté inmediatamente.

-Gracias, es el mejor regalo de todos, no sabes lo feliz que me haces, ahora debo regresar adentro antes que se preocupen por mí-  digo parándome inmediatamente

-Tranquila, lo comprendo, pero antes de que entres quisiera saber si te gustaría… si te gustaría ser mí... mi novia- dice Santiago con una enorme sonrisa en su rostro –sé que es algo pronto, pero no quiero estar un segundo más lejos de ti- completa Santiago

-Sí, por supuesto que sí, había esperado este momento, lo había soñado demasiado tiempo y nunca pensé que fuere a suceder fuera de mis sueños, te amo, ahora si me debo ir, mis padres me deben estar buscándome- digo dando media vuelta y dejándolo ahí solo era lo malo de nuestra situación, no podía demostrar mucho, no podría despertar curiosidades.

Entré al salón, siendo vista por todos, mis padres me hicieron una cara no muy bonita, les mentiría.

Page 13: La Esperanza de Amor

-¿Dónde estabas?- pregunta mamá

-Disculpa mamá, me sentía algo cansada y decidí salir a tomar un poco de aire fresco-  respondo algo nerviosa

-Esta bien, ahora diviértete, es tu fiesta- dice mi madre no muy convencida

-Bueno mamá- digo con una gran sonrisa en mi rostro

En ese momento apareció Santiago detrás de mí

-Buenas noches, ¿me permitiría bailar con su hija?- dice Santiago algo seguro

-Hola Santiago, por mí no hay problema, la decisión es de ella- responde mi mamá en un tono serio

Baile con Santiago mientras sonreíamos mucho, hablábamos demasiado, espero que mis padres no lo hubieran notado, de ser así ya me hubieran prohibido bailar con él, esa noche la pase muy bien, casi todas las canciones las bailaba con él, éramos el centro de atención, me imagino lo que todos pensaban, pero en particular no me interesa, quisiera gritarle al mundo entero que lo amo, pero aun no puedo, así paso la noche, mi fiesta se acabó a las 4 a.m. y la pase muy bien, por fin mis sueños se habían hecho realidad, no tenía motivos para estar triste, estaba rodeada de las personas que más quería, reunidas por una sola causa, mis cumpleaños, bailé y me ennovie con el amor de mi vida, a escondidas de mis padres, pero aun así lo hice, me sentía algo mal, pero apenas había podido tener a Santiago a mi lado, no lo quería perder, y así pronto termino todo.

buff espero que no les haya dado sueño xD deveras jajaja dejenmen reviews asi me daran inspiracion proque se que les gusta adios y gracias por leerlo, espero que no se arrepientan bye.. besos

Chapter 5: Un final inesperado

Hola y como toda bella historia tiene su fin creo que es hora de que se acabe esta, por fin despues de tanto luchar y luchar lo consegui, se que es un final raro, ni yo misma se de donde lo saque pero en fin xD espero que les guste y no se aburran, no digo nada porque es sorpresa, ademas hablar mucho al principio aburre xD... aqui les va el gran final...

Page 14: La Esperanza de Amor

Cap 5: Un final inesperado

Han pasado tres años ya, han pasado algo rápido, me parece que mis quince hubieran sido ayer, ahora soy una mujer, estoy independizada, llevo tres felices años con kakashi, claro a escondidas de mis padres, pero hemos tomado una decisión, hoy un día después de cumplir mis 18 años les contaremos todas la verdad a mis padres, ya soy una mujer y puedo hacer lo que quiera.

Hemos llegado a casa de mis padres, estamos seguros de lo que vamos ha hacer, toco la puerta, me tiembla todo, mama abre.

-¿sakura, kakashi? ¿Qué hacen ustedes dos juntos?- dice tsunade

-buenas tardes Sra. tsunade- dice kakashi

-Hola mama, venimos a comentarles algo a ti y a mi padre, ¡podemos pasar?- dice sakura

- buenas kakashi, y claro pasen-

Mientras entrábamos a la casa, a mama pareciera que no le importara que kakashi y yo fuéramos a buscarlos para hablar con ellos

-siéntense, ya llamo a jiraiya- dice tsunade

Mama subió, llamo a papa, ambos bajaron sonriendo, como si supiera para que fuéramos.

-hola amigo kakashi, hola hija, ¿Qué los trae por acá?- dice jiraiya

-Hola jiraiya, veníamos a hablar con ustedes- dice kakashi

-si papa, veníamos a contarles algo que debimos haberles contado hace mucho tiempo- dice sakura

-si claro coméntenos- dice jiraiya

Definitivamente mis padres estaban raros, ¿Por qué no les aterraba que fuera con kakashi?... ¿Acaso sabían algo?...

-bueno en realidad nosotros veníamos a decirles que…-

Page 15: La Esperanza de Amor

-no sakura yo les diré…- dice kakashi tomando aire – jiraiya, tsunade, los que sucede es que sakura y yo…-

Hubo un silencio el cual lo interrumpió kakashi

- lo que sucede es que sakura y yo llevamos una relación de tres años, yo a sakura la amo- dice kakashi

En ese momento, mis padres comenzaron a reírse, ¿acaso en verdad sabían algo?

-¿Por qué se ríen?, ¿Qué les causa risa?- pregunta sakura

-jiraiya, creo que es la oportunidad para decirles la verdad- dice tsunade

-¿de que verdad hablas mama?- dice sakura

-hija veras, tu padre y yo, ya sabíamos que entre ustedes dos ya había algo, a ustedes dos se les nota que se aman, al mirarse sus ojos brillan- dice tsunade

- ¿Por qué no habían dicho ni hecho nada?- dice kakashi

-porque no habíamos querido, pensamos que era mucho mas romántico que lo tuvieran en secreto- dice tsunade

-además, nosotros queremos que nuestra hija sea feliz y si ella es feliz a tu lado, la aprecias y la valoras, eres bienvenido a mi familia- dice jiraiya

No podía creer que después de tres años de tener oculto nuestra relación oculta, ellos ya supieran todo, y no hubieran dicho nada, todos sonreímos.

-kakashi, se que eres la mejor persona para cuidar de mi hija, espero que no le hagas daño y espero que sean felices- dice jiraiya

-gracias papa, pero aun me queda una duda, ¿hace cuanto lo saben?- pregunta sakura

-en la fiesta de tus quince comenzaron nuestras sospechas- dice tsunade

-en verdad muchas gracias, pero sakura y yo nos debemos ir, ya se nos hizo tarde para irnos de viaje- dice kakashi

-¿de viaje? ¿Para donde van?- pregunta jiraiya

Page 16: La Esperanza de Amor

-nos iremos a descansar, no diremos a donde vamos porque queremos estar solos y que nadie nos moleste, así que adiós, volveremos entre d meses- dice kakashi

-¿tanto?- pregunta tsunade

-si, queremos descansar y bueno adiós los amo- dice sakura

-y nosotros a ti hija- dice tsunade y jiraiya

Salimos de la casa de mis padres, arrimamos por nuestras maletas, en realidad no iríamos de vacaciones, nos iríamos a vivir halla, pero no quería dañar el momento, salimos al aeropuerto, nos demoramos una hora en salir y llegamos, este lugar e hermoso, se que fue el mejor lugar que pudimos escoger, algo lejos de casa, Alemania no queda a la vuelta de la esquina, al principio fue algo duro acostumbrarme a estar sin mis padres, pero después me acostumbre, y aquí un año después, estoy viviendo mi propio cuento de hadas, al lado de el amor de mi vida, en un lugar maravilloso, descubrí que si no luchamos por nuestros sueños nunca los aremos realidad, también descubrí que ino solo estaba con kakashi por interés, algo tarde, pero es bueno saberlo, descubrí que la maternidad es algo difícil y mas cuando se tienen gemelos, pronto visitaremos nuestra tierra, conocerán a nuestros gemelos, aun tiene tres meses, esperaremos que cumplan un año, los amo, adiós, y espero que no les disguste que de esta manera le contamos que nos quedamos aquí viviendo, y no tuvimos el valor para contarles nuestra historia en persona, pero aun así los amo., les mando un beso enorme.

Att: Sakura, Kakashi y los gemelos