La Fe que es aprobada por Dios -...
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▶ 2009. 8. 16.
La Fe que es aprobada por Dios
Genesis 22:1-3, NIV
Pasado cierto tiempo, Dios puso a prueba a Abraham y le dijo:
— ¡Abraham!
—Aquí estoy —respondió.
Y Dios le ordenó:
—Toma a tu hijo, el único que tienes y al que tanto amas, y ve a la región de Moria. Una
vez allí, ofrécelo como holocausto en el monte que yo te indicaré.
Abraham se levantó de madrugada y ensilló su asno. También cortó leña para el holocausto y,
junto con dos de sus criados y su hijo Isaac, se encaminó hacia el lugar que Dios le había
indicado.
Cuando nosotros creemos en Jesucristo y vivimos como hijos de Dios la cosa más
importante nosotros es el vivir una vida que es aprobada por Dios. Los creyentes
deberán de ser aprobados por Dios en todos los sentidos y vivir una vida que le
agrade. ¿Si es así, que tipo de fe es aprobada por Dios?
1. Dios, que probo a Abraham (v.1-2).
Abraham amó entrañablemente a su hijo Isaac, que le nació a la edad de 100. Dios
probó a Abraham para ver si amaba a su hijo más que a Dios (Ge 22:1), por lo que
Dios ordenó a Abraham sacrificar a su único hijo Isaac como holocausto (Ge 22:2).
Todos los creyentes encontramos pruebas mientras estemos viviendo en este mundo.
Cuando somos probados, tenemos que mantener nuestra fe y confianza más en Dios.
Iglesia del Evangelio Completo de Yoido
Orador: Rev. YOUNGHOON LEE, Pastor Principal
Website: http://spanish.fgtv.com/, Seúl - Corea
Sermón dominical: 2009. 8. 16.
Así como Job no culpo a Dios cuando él lo puso a prueba (Job 1:22, 2:10), también
tenemos que pasar la prueba de ser aprobado por el Señor (Ro 5:3-4).
2. La obediencia de Abraham (v.3).
Abraham obedeció rápidamente la palabra de Dios y sin demora. Temprano en la
mañana, Abraham tomó a Isaac y le llevo al lugar en que Dios le había dicho (Ge
22:3). Fue un viaje de tres días. En su camino, Abraham fue completamente
quebrantado delante de Dios (Ge 22:4). Asimismo, estaremos fluyendo con la gracia
de Dios si elegimos primeramente ser quebrantados delante de Dios (Gálatas 2:20, 1
Co 15:31). Dios vio la obediencia de Abraham y lo bendijo (Hebreos 11:8; Ge 12:1-3).
3. La fe de Abraham (v. 5).
Cuando Abraham llegó a la montaña para ofrecer su sacrificio, les dijo a sus siervos
que esperaran a que "nosotros" regresemos junto a ustedes. (Ge 22:5). Creía que Dios
le daría un hijo de nuevo, aunque él se llevara a su hijo que le había nacido a la edad
de 100. Abraham le dijo a Isaac, " —El cordero, hijo mío, lo proveerá Dios —" (Ge
22:8). Nunca puso en duda la palabra de Dios, «Tu descendencia se establecerá por
medio de Isaac.» (Hebreos 11:17-19). Abraham era un verdadero hombre de fe.
4. La decisión de Abraham (v.10).
Cuando Abraham llegó al lugar que Dios le había dicho, tomó un cuchillo para
matar a su hijo Isaac, como Dios le había mandado hacer (Ge 22:10). Luego un ángel
de Dios se le apareció y dijo: —No pongas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas
ningún daño. Ahora sé que temes a Dios—. (Ge 22:12). Dios aprobó la fe de Abraham.
Además, Dios preparó un carnero como holocausto. Y Abraham lo sacrificó como el
holocausto (Ge 22:13). Dios ha preparado todo lo necesario durante toda nuestra vida.
Pero el exige nuestra fe y obediencia antes de darnos lo que É l nos ha preparado (Ge
22:16-18). Las bendiciones de Dios vendrán como resultado de nuestra fe y
obediencia.
La fe que es aprobado por Dios es una fe que cree y obedece. Vamos a recibir las
bendiciones de Dios cuando nos determinemos a superar todas las pruebas, teniendo
absoluta fe y absoluta obediencia al Señor.
Desarrollo del sermón
La fe que es aprobada por Dios.
Hoy quiero compartir con ustedes el texto de Génesis 22:1-3 con el titulo la fe que es
aprobada por Dios.
Repetimos, la fe que es aprobada por Dios, la fe que es aprobada por Dios.
¿Quién es la persona más feliz del mundo? Son las personas que creen en Jesús y son
hijos de Dios. No existe mayor felicidad, bendición, satisfacción como el ser hijo de
Dios y ser salvos por la sangre de Jesucristo.
Lo más importante después de recibirle a Jesús en nuestros corazones y siendo hijos
de Dios, es vivir una vida reconocida por Dios. Tenemos que vivir una vida que sea
reconocida por Dios en todos los asuntos y en cada cosa, y agradarle a Dios en todo
momento. Cuando somos reconocidos por Dios, Dios bendice esa vida y la guía.
Sin embargo, como hijos de Dios, debemos pensar ¿Cómo podemos reflejar la gloria
de Dios mientras vivimos? O ¿Cómo podemos vivir una vida victoriosa y bendecida?
Este secreto se encuentra, en vivir una vida de fe aprobada por Dios. Es cierto, es
importante recibir el elogio y la aprobación de las personas, pero lo más importante y
primordial, es vivir una vida aprobada delante de Dios. Cuando alegramos a Dios,
cuando somos aprobados por Dios, Dios mismo se llega a responsabilizar y a guiar
nuestras vidas, nos guía paso a paso por las sendas de gracia y de bendiciones. Que
nuestra oración sea: Dios Padre, deseo que mi vida sea una vida aprobada por ti, lo
único que deseo es agradarte a ti Señor, deseo que a través de mi vida tu nombre sea
glorificado y enaltecido.
Al ver la Biblia, vemos que Abraham es llamado el padre de la fe, para que Abraham
fuese llamado el padre de la fe, hubo un gran motivo.
Hoy, a través del texto de Génesis 22 encontraremos el motivo y de cómo Abraham
logro llegar a ser el padre de la fe y como pudo alcanzar a vivir una vida de fe
aprobada por Dios.
Dios probó la fe de Abraham, y no solo eso, Dios también deseo saber cuánto le
amaba Abraham.
Primero, hoy quiero hablar de Dios, que probo a Abraham.
1. DIOS, QUE PROBO A ABRAHAM
Génesis 22:1-2 1Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo:
Abraham. Y él respondió: Heme aquí. 2Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a
quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los
montes que yo te diré.
Dios probó a Abraham.
El motivo por el cual le puso en prueba a Abraham era para saber si amaba más a su
único hijo Isaac que a Dios. Dios le ordenó diciendo “ofrece a tu único, Isaac, a quien
amas”.
Abraham amaba a su único hijo pues lo tuvo a los 100 años. Cada vez que abría los
ojos era para ver a Isaac, siempre buscaba a Isaac, Isaac era su hijo amado, siempre lo
tenía abrazado a su pecho. Aunque Isaac iba creciendo, Abraham siempre lo tenía
sentado a su lado, siempre lo tenía cerca de él, siempre lo mimaba. Isaac era la fuerza
y alegría de vida de Abraham. Por lo tanto, el Señor quería saber cuál sería la actitud
de Abraham al escoger entre Dios e Isaac.
Es normal que el padre ame a su hijo. Pero, si se ama más al hijo que a Dios es cuando
empieza a haber problemas. No hay que cambiar la prioridad, primero es amar a Dios
sobre todas las cosas. Dios es la prioridad máxima sobre todas las cosas. Lo más
importantes es que Dios esté ocupando el primer lugar, nunca este orden debe
cambiarse. Dios debe ser primero antes que la familia, antes que nuestro trabajo,
antes que nuestra empresa, antes que en nuestras relaciones humanas. Después de
Dios, esta la familia, después de Dios la fabrica, después de Dios esta nuestra vida.
Sin Dios no podemos tener una familia feliz, sin Dios no podemos tener un trabajo
feliz, sin Dios no podemos tener una empresa feliz. Pero Abraham amaba
extraordinariamente a Isaac, por eso le dijo Dios, “ofrece a tu único, Isaac, a quien
amas como holocausto sobre uno de los montes de Moriah que yo te diré”.
El pueblo de Israel lo primero que le enseñan a sus hijos cuando empiezan a hablar es
Dt 6:4-5 y lo hacen memorizar.
Dt. 6:4-5 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. 5Y amarás a Jehová tu Dios
de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
El pueblo de Israel enseña a sus niños a escuchar a Dios, con esto le enseña desde su
niñez a obedecer solo a Dios, por esta razón Dios bendice al pueblo judío.
Hay veces que las personas aman más el regalo que a Dios, quien fue el proveedor
del regalo. Muchos solos viven siguiendo los regalos. Todo el universo lo creo el
Señor, este mundo lo creo el Señor. Todo honor y fama es porque el Señor nos ha
concedido.
En los Estados Unidos tenemos a un famoso cantante llamado Elvis Presley, este
hombre cada vez que cantaba, era el orgullo de los Estados Unidos, murió por una
sobredosis de medicamento. Sin embargo, al ver la historia de Elvis Presley el
pertenecía a las Asambleas de Dios. En sus primero años de cantante, grabo varias
músicas cristianas. Pero, después que empezó a lograr la fama en el mundo, sus
prioridades empezaron a cambiar, lo que anteriormente su prioridad era Dios, paso a
segundo puesto, luego al tercer puesto, todo esto porque su honor, fama y
popularidad en el mundo habían alcanzado llegar hasta el cielo. Supuestamente vivió
en una vida esplendida, pero lleno de desesperación y murió miserablemente.
Cuando cambia el orden de nuestras prioridades pasa esto. Cuando Dios nos da de su
regalo, nosotros debemos agradecer y glorificar a Dios, pero cuando nos desviamos
por querer tener poder, fama, dinero, moriremos miserablemente.
Vivamos teniéndole al Señor ocupando el primer lugar en nuestras vidas y que sea el
único Dios en nuestros corazones.
Nosotros no podemos servir a dos señores.
Lc. 16:13 Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y
amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a
las riquezas.
No podemos amar mas el regalo de Dios que a Dios. Algunas veces el Señor nos pone
a prueba. Dios desea saber si nuestras prioridades están en ordenes.
Para Abraham, su hijo Isaac era su vida, la herencia más apreciada, era su única
alegría y esperanza. Dios le probó a Abraham para saber quien ocupaba el primer
lugar en su vida, Abraham amaba mucho a su hijo, y Dios quería saber a quién
amaba más, a Dios o a Isaac.
Por eso, le dijo que ofreciera a su único hijo, lo que más amaba.
Esto era todo lo que podía pedirle a Abraham. Hay veces que Dios nos pide algo
único e importante, que no poseemos dos igual. La prueba de Dios en nuestras vidas
es para renunciar a las cosas que amamos más que a él. Tenemos en nuestras vidas
algo que amamos más que a Dios, algo que pensamos más que en Dios, tenemos
algún Isaac? Bajémos todo delante de Dios. Si amamos mas al dinero que a Dios,
dejemos el dinero. Si amamos el honor que a Dios, dejemos el honor. Si amamos mas
el poder del mundo que a Dios, dejemos el poder.
Dios nos dice que le entreguemos y ofrezcamos el Isaac que hay en nuestros
corazones. Si nosotros no bajamos y no nos despojamos de la cosa más importante
delante de Dios, no podemos decir que somos verdaderos cristianos.
“Bajando” del Misionero Lee
El autor del libro “Bajando” es el misionero Lee quien se graduó de la Universidad de
Seúl en historia oriental. Luego de terminar su post grado fue a los EEUU a estudiar
en la Universidad de Harvard Historia del Oriente Medio y se graduó como Doctor.
Sin embargo, luego de graduarse él bajó todo ante Dios esa vida cómoda, ese futuro
garantizado y toda expectativa del hombre. Él confesó y dijo “Yo solo en mi Dios
estoy satisfecho” y luego su esposa y sus dos hijos fueron con él a Mongolia a servir.
(Él fue enviado como misionero a Mongolia por la Iglesia Presbiteriana Cambrige de
Boston y ahora es Pastor de la Iglesia Yireh. También ahora es profesor de la
Universidad Internacional de Mongolia y Director del Instituto de Investigación de
Chingiz Khan.
El misionero Lee a través de su libro “Bajando” dice que es necesario que nosotros
nos vaciemos y tenemos que decidirnos para vivir llenos de Dios. También el motivo
por el cual Dios nos dice que bajemos es porque cuando bajamos a los pies de Dios
nuestras vidas es que estamos vaciando para llenarnos de él, y cuando hacemos esto
es porque Dios quiere darnos algo mejor.
Si nosotros entregamos al Señor nuestros bienes materiales, el nos dará mas, cuando
nosotros bajamos el deseo del poder, Dios nos dará más poder. Cuando por amor
entregamos y bajamos todas las cosas ante Dios, Dios mismo se encarga de darnos en
abundancia sus bendiciones y en llenarnos en todas nuestras necesidades.
É l experimentó la llenura de Dios cuando bajó totalmente a los pies de Cristo su
familia, su escolaridad, su iglesia, etc. Confesó que llegó a ser feliz cuando Dios
empezó a llenar su corazón vacío. Cuando nosotros bajamos a los pies de Dios, es
cuando Dios empieza a obrar.
Sal 37:5 Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará.
En una parte del libro “Bajando” dice así.
Algunos de los frutos del trabajo es planear el futuro y la dirección del mañana,
abastecer las necesidades diarias, vida y seguridad, experiencia y sabiduría, ser
reconocidos y apreciados. Tener la gloria. Cuando todo esto bajamos a los pies de
Dios nosotros podemos encontrar el momento justo de Dios, y cuando pensamos que
necesitamos de la fuente del suministro que es Dios ahí podremos experimentar
personalmente su llenura. Y sabremos que una vida con Dios es una vida segura
Es así, el Señor quiere que nosotros confesemos que “Él es TODO en nuestras vidas”
Qué es la cosa que más apreciamos? El trabajo, el dinero, el poder, la gloria, la salud,
los hijos, la esposa, el marido? Si todo eso amamos y consideramos más importantes
que a Dios, a través de eso hay pruebas.
Hermanos si amamos las cosas más que a Dios, esto puede llegar a ser nuestros
dioses, si amamos a los bienes materiales, los bienes materiales pueden llegar a ser
nuestros dioses, si amamos más a las personas, las personas pueden llegar a ser
dioses en nuestras vidas, también esto puede pasar con el poder. Hermanos bajemos
todo ante el Señor. Cuando bajamos y entregamos todo al Señor es porque el Señor
nos llenara de cosas más grandes y en abundancia.
Si vemos en Mateo 19, vemos que hay un joven rico interesado sobre la vida eterna.
Por eso, un día este joven va junto a Jesús y le pregunta. “Maestro, ¿qué bien haré
para tener la vida eterna? (ver. 16) É l era un joven que se esmeraba mucho para vivir
una vida devota, era una persona que cumplía todos los mandamientos. Pero, amaba
el dinero y se aferraba a él como si fuera su propia vida. El Señor conocía el corazón
de ese joven y le dijo. “Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los
pobres, y tendr{s tesoro en el cielo; y ven y sígueme.” (ver. 21). En la Biblia podemos
ver que al escuchar eso el joven, “se fue triste”. En fin, el joven no pudo despojarse
del dinero y tampoco pudo seguir al Señor. Si este joven hubiese bajado y entregado
todo al Señor, el hubiere sido grandemente usado por Dios. Pero esto no paso, solo
dice que agacho el rostro y se fue desanimado y triste.
La prueba del Señor consiste en bajar y entregar la cosa más importante, lo que más
amamos ante la presencia del Señor.
Nosotros no podemos server a dos señores. No tiene que haber cosa alguna que
amemos más que a Dios.
Job era un hombre justo y rico entre los ricos. Tenía muchos bienes, hijos y mucha
salud. Sin embargo, un día todo lo que Job poseía se desvaneció. Todos sus ganados
murieron. Todos sus hijos murieron. Job se enfermó. Será que hay una persona que
haya pasado por esta circunstancia todo a la vez?
Job como persona humana la situación por la cual estaba pasando no era fácil, pero en
toda esa situación él en ningún momento se enojó contra Dios.
Job 1:22 En todo esto no pecó Job, ni atribuyó a Dios despropósito alguno.
Job 2:10 Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado.
¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó
Job con sus labios.
Job era rico pero no se aferraba al dinero. Tuvo muchos hijos pero no se aferró a ellos.
Estaba lleno de salud pero tampoco se aferró a la salud. Solamente se aferró en Dios.
El resultado de todo eso fue que el pudo obtener todas sus pertenencias y no solo eso
sino que todo por doble. Obtuvo el doble de sus bienes, y tuvo hijos hermosos e
inteligentes por doble. Esto es la bendición para todo aquel que aprueba las pruebas.
La prueba de Dios es entregarle a Dios lo que yo considero más importante en mi
vida.
Mt 22:37 Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu
alma, y con toda tu mente. Aleluya.
Cuando nosotros servimos a Dios con gozo y alegría, Dios en nuestros días de
tribulación, nos protege, hace crecer nuestra fe, y llegan a acontecer milagros en
nuestras vidas.
No con el 99% sino con el 100% de nuestra vida cristiana tenemos que servirle al
Señor. Espero que cada uno de nosotros aprobemos toda prueba.
Cuando llegan los momentos de prueba guardemos nuestra fe. Aferrémonos más en
Dios. Seamos personas reconocidas por el señor. A través de las pruebas la fe crece,
todo es renovado, y empieza a sobreabundar la bendición de Dios.
Ro 5:3-4 Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo
que la tribulación produce paciencia; 4y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza.
Aleluya.
¿Cómo debemos actuar cuando estamos en medio de prueba?
En Segundo punto quisiera hablar sobre la obediencia de Abraham.
2. LA OBEDIENCIA DE ABRAHAM
Cuando nos encontramos en pruebas lo único que debemos hacer es obedecer
plenamente a la palabra de Dios. Debemos seguir la voluntad de Dios y es ahí que
acontecen los milagros de Dios.
Génesis 22:3 Y Abraham se levantó muy de mañana, y enalbardó su asno, y tomó
consigo dos siervos suyos, y a Isaac su hijo; y cortó leña para el holocausto, y se
levantó, y fue al lugar que Dios le dijo.
Dice en la Biblia que se levanto muy de mañana y se dirigió al lugar en donde daría
su holocausto. La obediencia de Abraham fue una obediencia rápida.
Para Abraham practicar los mandamientos de Dios no era hacer pasar el tiempo.
Después de escuchar los mandamientos de Dios no debemos titubear ni demorarnos,
debemos actuar al instante. Cuando Dios había sentenciado con fuego y azufre a
Sodoma y Gomorra por toda la maldad que estaban haciendo, Lot había perdido todo
lo que tenia, hasta a sus yernos, en ese día solo salieron de esas ciudades rápidamente
Lot, sus hijas y su esposa. La esposa de Lot al demorarse miro atrás y llego a
convertirse en estatua de sal. Jonás también, por no obedecer el mandamiento de Dios,
tomo el barco para Tarsis, llego una tormenta y al final fue lanzado al mar para ir a
caer en el estomago de un pez.
Bienaventurado es aquel que es obediente plenamente a la Palabra de Dios.
Cuando vamos a obedecer la palabra de Dios, lo debemos hacer sin contratiempos.
No debemos demorar ni vacilar.
Cuando Abraham recibió el mandamiento de Dios, no hablo ni consulto con las
personas. La verdad es que Dios entrego esa orden solo a Abraham, y no era tema
para recibir asesoramiento ni de su esposa ni de las personas. Si Sara lo hubiese
escuchado, capaz que diría mi esposo tiene pérdida de memoria. Este hijo que lo has
tenido en tu vejez a los 100 años lo entregaras como holocausto. Abraham estas
escuchando palabras vanas. Porque crees que Dios te quitaría lo que te dio. Si vas a
matar a Isaac mejor mátame a mí. Si esto hubiese sucedido capaz que Abraham no
hubiese llevado a Isaac, y diría al Señor: Yo lo quiero sacrificar, pero esta mujer dice
que la mate si esto va a pasar, así que no podría hacerlo. Si esto hubiese pasado, la
historia que encontramos en la Biblia hubiese cambiado completamente. Pero
encontramos en la Biblia que Abraham no busco consejos de nadie. Existe a veces
tiempo que debemos buscar asesoramientos con otras personas o y algunas debemos
callar sin buscar a nadie. Esto es uno de los ejemplos. Porque si lo hubiese consultado
solo traería problemas. La obediencia de Abraham era práctica y rápida.
¿Cómo estamos nosotros? Decimos: ¡Voy a estar orando por un tiempo!, ¡dame
palabra! Tratamos de todas las maneras y de todas las formas para salir de una
situación, pero al procurar y al darnos cuenta que no podemos nada por nosotros
mismos, ¿No! empezamos a obedecer?
¿Cómo somos? Contestamos si directamente sin pensar cuando el Señor nos ordena.
O solo a cada rato ponemos pretextos antes el Señor y damos la vuelta.
Las generaciones actuales han cambiado muchísimo, yo me acuerdo en nuestra época
que cuando nosotros estudiábamos el instituto bíblico y luego nos graduábamos, el
pastor Cho nos decía ve a tal lugar, nadie pensaba dos veces, solo decíamos si, y
salíamos. Aunque no hablábamos ni una palabra en ingles y nos decía ve a Estados
Unidos, nos íbamos, aunque no hablábamos ni una palabra en español y nos decía ve
a latino America solo decíamos sí. Aunque no sabíamos ni una palabra en ruso, y nos
decía ve a Rusia, nos íbamos. Pero en este tiempo nuestros pastores jóvenes, son tan
sabios, que cuando le decimos vaya de misionero a tal lugar, nos responde podre en
oración esta propuesta. Y después de una semana, vienen y nos dicen; parece que no
es la voluntad del Señor. Es muy diferente todo. Pero Abraham no fue así. El
obedeció directamente. Se levanto temprano, tomo a su hijo, y se dirigió para
sacrificarlo.
Hermanos el obedecer a Dios es una obediencia directa y sin contratiempos. Es una
obediencia absoluta plena. Cuando somos obedientes plenamente vienen los milagros
y bendiciones de Dios.
El rey Saúl empezó a titubear sobre la orden que recibió de eliminar todo lo que fuera
de Amalec diciendo: ¿Por qué matar a todos los animales? Saúl lo bueno dejaba vivo
y lo escondía, el resultado de esta desobediencia fue que le sacaron el trono y perdió
el amor de Dios.
La palabra de Dios es obedecer incondicionalmente.
En el libro “El Señor es mi refugio, escrito por Corrie Ten Boom.
Toda la familia de Corrie Boom fue arrestada por esconder a los judíos, hasta el final
de la segunda guerra mundial, pasaron sus vidas en el campamento de concentración.
En el campo de concentración del terror Ravensbrück muere toda la familia, después
de la derrota de Alemana Boom sale viva milagrosamente. Esta mujer que había
salido de la cárcel Dios le había puesto en su corazón una misión. Dios le había
puesto el de predicar el evangelio de perdón a los alemanes, quienes habían
perseguidos brutalmente y asesinado a su familia. Esta mujer obediente a la misión
de Dios, empezó a testificar en los pueblos y ciudades sobre el poder de Dios y el
perdón.
A través de las reuniones todos los alemanes que se encontraban sumergidos en la
culpabilidad, recibieron la libertad sobre el pecado y el perdón y se levanto un gran
avivamiento. Una vez Boom culminando la reunión de testimonio y de la Palabra de
Dios, en un pueblo, entre todas las personas que se encontraba saludando, una
persona le dejo completamente paralizada.
Esta persona era el que decidió matar a su hermana Bessi en la cárcel y fue la guardia
que le hacia la vida imposible a las prisioneras y la que cuidaba la prisión. En ese
momento, esta mujer, al ver a la carcelera que ni en sueños podía olvidar, empezó a
hablar desde su corazón al Señor: Señor a esa persona no, yo no puedo perdonar a esa
persona, no lo puedo hacer, a esa persona no.
Sin embargo, el Señor cada vez que sentía corazón la maldad, le decía amala. Esto es
una orden.
En ese momento ella se dio cuenta de la orden de Dios y dijo: Dios, yo no deseo
amarla. Y no tengo la fuerza para amarla. Pero, como es una orden tuya Señor, tratare
de hacerlo.
Esta persona llego frente a Boom, Boom sin tener ni un sentimiento le dio la mano y
la abrazo, en ese momento, Dios le dio un sentimiento para poder amarla
abundantemente.
Ella fue sincera con su sentimiento a Dios, pero por obedecer la orden de Dios, el
Señor le dio el poder de poder amarla.
El titubear crea una excusa para no hacerlo, la palabra inmediatamente significa hacer
las cosas sin pensarlo, al instante. Abraham no tuvo necesidad de pensar. El no pensó
primero profundamente sobre la obediencia y luego obedeció. Abraham no tuvo ni
tiempo para excusarse. Solo obedeció plenamente. La obediencia es el primer
elemento inmediato. Para poder escuchar la palabra y entenderla es necesario la
obediencia inmediata. Solo hay que obedecer la palabra de Dios, porque es la palabra
de Dios. Por 3 días camino Abraham con su hijo, si Abraham hubiese dado
inmediatamente en sacrificio a Isaac iba a ser mejor, pero camino por 3 días.
Génesis 22:4 Al tercer día alzó Abraham sus ojos, y vio el lugar de lejos.
Por tres días, Abraham fue quebrantado totalmente delante de Dios.
Hermanos, ¿Cómo habrá sido para Abraham este camino de 3 días? Habrá pensado
constantemente, debo matar a Isaac, derramar su sangre y quemar su cuerpo como
holocausto. Fue un tiempo muy difícil que ni nosotros podemos imaginarnos. Capaz
que cada momento que veía a Isaac solo lloraba y lloraba. Cuando llega la palabra de
Dios, cuando debemos hacer la voluntad de Dios, llegan las pruebas, el sacrificio, el
dolor. Algunas veces hay tiempo que nadie puede llegar a entender nuestra
consagración y lealtad a Dios. Algunas veces nos esforzamos y trabajamos de mas,
pero no valió la pena. Muchas veces buscamos mas del Señor, pero en esos momentos
llegan más dificultades y más dolor.
Cuando estuve en Washington, un hermano había consagrado su casa para el Señor.
Este hermano por 1 año no tuvo trabajo. La familia pasó por un tiempo duro y las
demás personas solo hablaban de lo que había hecho, decían: si iba a consagrar algo a
Dios, porque no lo hizo cuando tenía, ahora anda viviendo como mendigo. Este
hermano por la palabra de Dios, con amor, entrego su casa a Dios, por un año el
Señor lo estuvo quebrantando, para que luego no diga con aire de grandeza yo
consagre y entregue mi casa. Después de un año yo he visto como el Señor le abrió la
puerta de las bendiciones.
Hermanos, si deseamos que el Señor nos use, primeramente nosotros debemos ser
quebrantado.
Yo debo morir primeramente para que la gracia de Dios sea manifestada.
Abraham por 3 días fue quebrantado y vuelto a ser quebrantado consecutivamente.
Ga 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en
mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y
se entregó a sí mismo por mí.
1Co 15:31 Os aseguro, hermanos, por la gloria que de vosotros tengo en nuestro Señor
Jesucristo, que cada día muero.
Abraham fue un hombre de obediencia, por su obediencia fue bendecido.
Hermanos, todo nuestra rebeldía, rencor, ira, contienda, terquedad debe ser
quebrantado delante del Señor. Debemos morir a nuestra mentalidad humana,
cuando hacemos todo esto, el Señor usara nuestras vidas extraordinariamente.
Cuando cada vez somos más humildes y nos quebrantamos mas delante del Señor, el
Señor mismo se ocupara de exaltarnos y de mostrarnos el milagro de Dios. No somos
nosotros lo que hacemos las cosas, es Dios el que hace la obra.
He 11:8 Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de
recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba.
Génesis 12:1-3 Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y
de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2Y haré de ti una nación grande, y te
bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3Bendeciré a los que te
bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las
familias de la tierra.
Abraham a través de la palabra de la obediencia pudo recibir en abundancia la
bendición de Dios.
En tercer punto quiero hablarles sobre la fe de Abraham.
3. LA FE DE ABRAHAM
Génesis 22:5 Entonces dijo Abraham a sus siervos: Esperad aquí con el asno, y yo y el
muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros.
Abraham era un hombre de gran fe. Cuando Abraham llego al monte Moriah dijo a
sus siervos: esperad que nosotros iremos a adorar y volveremos. Les dijo nosotros
volveremos a sus siervos. Abraham tenia la fe que si Dios le sacaba a su hijo que lo
había tenido a sus 100 años, que lo volvería a dar. Aleluya.
Ro 4:17-18 (como está escrito: Te he puesto por padre de muchas gentes) delante de
Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como
si fuesen. 18El creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas
gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia
La fe de Abraham es la fe de creer en las cosas que son imposibles, no era una fe débil,
era una fe solida, él creyó convencido que se cumplirían las promesas de Dios.
Cuando caminamos con fe sin haber visto nada, sin haber palpado nada, sin haber
escuchado nada, y solo avanzamos con fe, es ahí cuando podemos comprobar y
experimentar los milagros de Dios.
Cuando subían al monte, Isaac por curiosidad pregunto estamos yendo para
sacrificar ¿pero por qué no está la oveja que será sacrificada?
Cuando el hijo pregunto por el holocausto Abraham contesto confiado: Dios proveerá
el cordero para el holocausto.
Génesis 22:8 Y respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto,
hijo mío. E iban juntos.
Abraham era un hombre de fe verdadera. El nunca dudo ni un poco de la palabra de
Dios. En este momento, cuando el hijo le pregunto ¿en dónde está el animal que serás
sacrificada? Abraham sin dudo, valientemente, con una respuesta solida y llena de fe
le respondió a su hijo: Dios proveerá.
He 11:17-19 Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había
recibido las promesas ofrecía su unigénito, 18habiéndosele dicho: En Isaac te será
llamada descendencia; 19pensando que Dios es poderoso para levantar aun de entre
los muertos, de donde, en sentido figurado, también le volvió a recibir.
Dios le había concedido a Abraham a los 100 años un hijo, Isaac y aun así tuvo fe que
si Isaac moría, lo volvería a resucitar. Abraham fue un hombre de gran fe.
Dios hasta hoy día trabaja y esta junto a las personas que tienen fe.
Dios ya había aceptado este sacrificio de Abraham, porque Abraham hacia salido
para Moriah convencido para matar a su hijo Isaac. Por 3 días Dios estuvo
observando a Abraham, Dios estaba viendo el corazón quebrantado de Abraham que
estaba decidido en entregar a Isaac como holocausto. Si Abraham se hubiese
debilitado en la fe capaz que le podía decir a Isaac, Isaac la verdad es que yo te voy a
matar, así que, mejor sería que huyas. Y la respuesta de Abraham viste Señor yo te lo
quería entregar pero este jovencito huyo de mis manos. Abraham tenía muchas
maneras de salvar a su hijo, podía a ver hablado a su esposa, podría haber dicho a su
hijo, podría haber hablado con sus siervos, les podía haber dicho, miren mis siervos
yo voy a matar a Isaac, huyan con Isaac. Sin embargo, Abraham fue obediente
incondicionalmente, y tenía fe absoluta, aleluya. No tambaleo, la verdadera fe no
tambalea, no vacila. Solo es creer e ir adelante, avanzando. Es tomar la cruz de Jesús y
marchar con valentía.
Actualmente nuestra iglesia es la iglesia más grande del mundo, es una bendición y
gracia de Dios, esto pudo pasar porque nuestro pastor emérito Cho es un hombre de
fe. Dios trabaja a través de la fe de los hombres.
Tenemos al amigo de nuestro pastor Cho a Robert H. Schuller en 1955 con 500 dólares
comenzó una iglesia alquilando el cine Garden Grove Drive-In. Este es un lugar en
donde entran los carros y desde el carro se puede ver la película. Los hermanos
venían en sus carros y podían dar el servicio desde sus carros, y también habían
hermanos que daban el servicio dentro de la iglesia, si vemos en la foto a la derecha
se encontraban lo carros y a la izquierda la gente en la iglesia, esto fue un continuo
avivamiento. Este pastor fue el primer hombre de fe que compro este cine, porque,
porque actuó con fe. En 1968 comenzó la nueva construcción de la iglesia, en 1980 la
iglesia fue completamente construida.
Solo la fe, solo la fe solo la fe, es por la fe que el Señor derrama su bendición.
Oremos diciendo al Señor: Dios padre deseo tener una gran fe, yo sé que no tengo
nada en la mano, pero con la fe y con tu ayuda se que acontecerán los milagros.
La fe es la que obra milagros en la vida.
Hermanos, tengamos fe sobre las vidas de nuestros hijos, es cierto seguramente
muchos están pasando por tiempos difíciles en la crianza de sus hijos, son quebrantos,
no estudian, solo desobedecen, y lo único que se dedicar es jugar juegos por internet,
pero tengan fe, mírenlos con fe, bendígalos, confiesen y digan este hijo mío será
prosperado, será un gran hombre, Dios levantara como hombre importante. Aleluya.
Hermanos, seamos con Dios, que nunca nos desesperemos, cuando salimos con fe,
Dios ve nuestra fe y nos bendice.
Por último punto quiero hablarles sobre la decisión de Abraham
4. LA DECISION DE ABRAHAM
Dice la Biblia que Abraham llego al monte y que tomo el cuchillo para degollar a su
hijo.
Génesis 22:10 Y extendió Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo.
Abraham, al llegar al monte, edifico el altar, puso sobre el altar a Isaac y tomo el
cuchillo para degollar a su hijo. La fe sin obra es una fe muerta. Si tenemos en el
corazón fe, actuemos en fe, es ahí cuando se levantan los milagros.
La fe sin obra es una fe muerta, dice en Santiago 2:26Porque como el cuerpo sin
espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta.
Al ver la obediencia y la fe de Abraham, el ángel de Dios le dijo.
Génesis 22:12 Y dijo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada;
porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste tu hijo, tu único.
Dios dijo a Abraham que “ahora” reconocía plenamente su fe. ¿Qué quiere decir esto?
Quiere decir que Abraham fue aprobado del examen. Que ingreso del examen.
Felicitaciones!!!! Este es el mensaje que Dios le trasmitió a Abraham.
Así como Abraham, nuestra fe y lealtad deben ser reconocidas primeramente ante
Dios para que pueda decir el Señor “ahora conozco”
Que nuestras fe lleguen a ser aprobadas por Dios, que pueda decir el Señor ahora
conozco tu fe. Haz aprobado el examen de fe.
A través de la obediencia y de la decisión Dios bendijo a Abraham, ¿Cuál es la
bendición que recibió Abraham? Fue el tener a su lado a Jehová Jire.
Jesús dijo por el centurión: “De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta
fe”(Mt 8:10). La fe de la mujer cananea que vino ante Jesús para que sanara a su hija
del tormento del demonio “Oh mujer, grande es tu fe; h{gase contigo como quieres”.
Jesús reconoció la fe de esta mujer (Mt 15:28). Jesús reconoció a Natanael cuando se
acercaba para agradecerle (Jn 1:47). El apóstol pablo reconoció la fe no fingida de
Timoteo (2Ti 1:5). Así como todas estas personas nuestra fe debe ser reconocida
primeramente por el Señor y luego por nuestros prójimos.
El resultado de la obediencia y de la decisión es la bendición. Jehová Jire es el que nos
bendice. Dios ha proveído. Dios ha preparado todas las cosas que necesitamos en
toda nuestra vida, lo único que nosotros debemos hacer es mostrar a Dios
primeramente es la fe y la obediencia.
Génesis 22:13 Entonces alzó Abraham sus ojos y miró, y he aquí a sus espaldas un
carnero trabado en un zarzal por sus cuernos; y fue Abraham y tomó el carnero, y lo
ofreció en holocausto en lugar de su hijo.
El libro de la editorial moderna llamado Las personas que pertenecen al cielo. Entre
los misioneros había nacido en 1958 en China un hombre que sería conocido como el
hermano Luin llamado Ying Liu en una isla de Honan, zona pobre rural. En 1974 su
padre había sido sanado milagrosamente de un cáncer, al ver este milagro decidió
aceptar a Jesús como su salvador, desde ese momento empezó a caminar el camino de
evangelista. El gobierno Chino lo ha perseguido extremadamente y más de 30 veces
fue detenido y torturado salvajemente y aun en medio de esta etapa fue llamado el
hombre del cielo.
El régimen comunista de China para mantenerse firme había formado un tercer
movimiento, sin embargo Ying Liu rechazo formar parte de ese movimiento, para
Ying Liu lo importante eran las iglesias que se formaban en los subterráneos y las
reuniones de familia, su ministerio fue muy perseguido. Sin embargo, a donde iba
Ying Lui sucedían muchos milagros y sanidades, por lo cual, muchas personas
aceptaban el evangelio. En septiembre de 1997 para salvar su vida, salió de China,
actualmente se encuentra viviendo en Alemania, viaja por todo el mundo y
trasmitiendo la visión sobre la iglesia de China, formo un movimiento llamado volver
a Jerusalén.
Lo importante fue el encuentro y la fe que tuvo en Jesús desde su niñez. El gobierno
chino en el periodo de la revolución cultural confiscaba todo, por lo cual era
imposible leer y tener la Biblia, pero el joven Liu quería tener una Biblia. Por lo tanto,
cuando comía una vez al día oraba a Dios fervientemente diciéndole, dame una Biblia.
El corazón ferviente de este jovencito abrió la puerta del cielo que en un día, vio una
visión. El había visto que un anciano le estaba entregando una Biblia. Llego un día, y
así como había visto en su visión, un anciano había llegado y le había entregado la
Biblia. Cuando el anciano y el estaban platicando, el anciano le había dicho a Liu que
él lo había visto en la visión.
El anciano volvió a ver una visión, en donde todas las Biblias que él había guardado y
cuidado que se le debía entregar al hermano Liun. Por lo tanto, Dios para cumplir su
obra, al mismo tiempo le había dado la misma visión al hermano Liun y al
evangelista que se encontraba bien lejos.
Así mismo, Dios tiene todas las cosas preparada para su pueblo. Dios para responder
la oración de su pueblo ya tiene de antemano preparado todas las cosas para suplir
las necesidades de su pueblo. Dios ya tiene todo preparado para salvar a sus hijos del
peligro. Dios tiene preparado todas las cosas para realizar su voluntad en nuestras
vidas.
Dios tiene preparado hoy, la sanidad y la salud para todo aquel que se encuentra
enfermo, tiene preparado el consuelo del cielo para el hombre quebrantado, tiene
preparado la paz del alma para aquel hombre que se encuentra en conflictos y
atormentado. Jesús tiene preparado para todo aquel que cree en él, la vida eterna y el
cielo.
Dios da nuevas fuerzas a aquel que se encuentra cansado y fatigado, tiene preparado
la paz para todo aquel que se encuentra preocupado. Este es nuestro Dios! Toda
persona que se encuentra sufriendo por el pecado, Dios tiene preparado su enorme
gracia salvadora. Dios tiene preparado y se encuentra esperando a toda persona que
se encuentra cansada de la pobreza para entregarle su bendición. Jehová Jire, hasta
hoy día, se encuentra solucionando los problemas, solo debemos creer en su ayuda.
Cuando Abraham decidió caminar en fe y obedecer, prometió que su descendencia
será prosperada en gran manera. El resultado de la obediencia fue la gran bendición
de Dios que vino sobre Abraham.
Génesis 22:16-18 y dijo: Por mí mismo he jurado, dice Jehová, que por cuanto has
hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu único hijo; 17de cierto te bendeciré, y
multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la
orilla del mar; y tu descendencia poseerá las puertas de sus enemigos. 18En tu simiente
serán benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste a mi voz.
La bendición de ser el padre de la fe (17), la bendición espiritual a los descendientes
(17), por ser descendientes espirituales de Abraham tenemos la bendición de victoria
(salud, sabiduría, bienes materiales, honor, poder y victoria). La bendición de la
simiente de Abraham, que a través de ella vino el Mesías (18).
¿Se encuentra tu camino en oscuridad? ¿Existe la prueba en el camino que nos lleva a
la promesa de Dios? ¿Hay muchas cosas que hacer, pero solo tenemos necesidad?
Dios en los momentos de crisis, desea que tengamos una fe y un valor verdadero.
Cuando la fe obediente que se encuentra estable en los momentos de paz y de gozo, y
llega los momentos difíciles y trata de escabullirse, entonces no es una fe madura. Si
mi razón y experiencia no se ajustan en confiar en Dios y deseo desecharlo, quieres
decir que nuestra es una fe que ha naufragado.
La verdadera fe es la que esta activa en las situaciones que no se pueden entender. Es
resaltante cuando se es obediente en las situaciones imposibles. Es ahí cuando nuestra
fe crece grandemente. Es cuando nuestras vidas empiezan a ser preparadas para
recibir la bendición de Dios. ¿Nos encontramos en una gran crisis? Quiere decir que
ha llegado la oportunidad de mostrar y activar nuestra gran fe. Quiere decir que ha
llegado el momento de recibir grandes bendiciones de parte de Dios. Quiere decir que
ha llegado la ocasión de poder conocer más a Dios que provee todas las cosas. Jehová
Jire – llego el tiempo de confiar absolutamente en Dios. Llego el tiempo y la
oportunidad de la bendición. Avancemos en fe y obediencia.
Dios desea que seamos hombre de fe.