La práctica de productores agroecológicos chaqueños. Una discusión sobre lógicas alternativas a...

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1 I Congreso de Estudios Poscoloniales y II Jornadas de Feminismo Poscolonial "Cruzando puentes: Legados, genealogías y memorias poscoloniales" Título de la Ponencia: La práctica de productores agroecológicos chaqueños. Una discusión sobre lógicas alternativas a las del desarrollo moderno. Autor: Lic. María Laura Pegoraro. Pertenencia Institucional: Universidad Nacional del Nordeste Facultad de Ciencias Económicas - Cátedra de Sociología Económica. Mail: [email protected] Resumen: El desarrollo económico es un constante objeto de deseo en las sociedades “subdesarrolladas”. Este concepto se basa en supuestos como el individuo racional, la separación de la naturaleza y de la cultura, la economía fuera de lo social, lo natural y lo político; y la primacía del conocimiento experto por encima de cualquier otro saber. Características propias de la experiencia particular de desarrollo Europeo y de América del Norte. En este trabajo se discuten los horizontes del concepto de desarrollo incluyendo la experiencia situada, resignificándolo desde las lógicas alternativas presentes en aquellos que se han desprendido de la sensatez capitalista en alguna dimensión. Para analizar las prácticas desde un enfoque etnográfico, se presenta el caso de una cooperativa de trabajo y de formación chaqueña, que lleva a la práctica la agroecología. Los principales puntos a destacar son que sus integrantes viven en comunidad, comparten los ingresos, trabajan en forma armónica con la naturaleza, y mantienen una fluida interacción con las personas que consumen sus productos. Es decir, esta cooperativa se maneja con un paradigma de vida diferente, no son una continuidad de lo existente, son lógicas distintas, mundos otros que conviven con el capitalismo. Desordenan el orden de la política moderna instituido sobre la dicotomía entre naturaleza/cultura y entre individuo/sociedad, invitando a repensar los supuestos más profundos del desarrollo.

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La práctica de productores agroecológicos chaqueños. Una discusiónsobre lógicas alternativas a las del desarrollo moderno

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    I Congreso de Estudios Poscoloniales y II Jornadas de Feminismo Poscolonial "Cruzando

    puentes: Legados, genealogas y memorias poscoloniales"

    Ttulo de la Ponencia: La prctica de productores agroecolgicos chaqueos. Una discusin

    sobre lgicas alternativas a las del desarrollo moderno.

    Autor: Lic. Mara Laura Pegoraro.

    Pertenencia Institucional: Universidad Nacional del Nordeste Facultad de Ciencias

    Econmicas - Ctedra de Sociologa Econmica.

    Mail: [email protected]

    Resumen:

    El desarrollo econmico es un constante objeto de deseo en las sociedades

    subdesarrolladas. Este concepto se basa en supuestos como el individuo racional, la

    separacin de la naturaleza y de la cultura, la economa fuera de lo social, lo natural y lo

    poltico; y la primaca del conocimiento experto por encima de cualquier otro saber.

    Caractersticas propias de la experiencia particular de desarrollo Europeo y de Amrica del

    Norte.

    En este trabajo se discuten los horizontes del concepto de desarrollo incluyendo la

    experiencia situada, resignificndolo desde las lgicas alternativas presentes en aquellos que

    se han desprendido de la sensatez capitalista en alguna dimensin. Para analizar las prcticas

    desde un enfoque etnogrfico, se presenta el caso de una cooperativa de trabajo y de

    formacin chaquea, que lleva a la prctica la agroecologa.

    Los principales puntos a destacar son que sus integrantes viven en comunidad, comparten los

    ingresos, trabajan en forma armnica con la naturaleza, y mantienen una fluida interaccin

    con las personas que consumen sus productos. Es decir, esta cooperativa se maneja con un

    paradigma de vida diferente, no son una continuidad de lo existente, son lgicas distintas,

    mundos otros que conviven con el capitalismo. Desordenan el orden de la poltica moderna

    instituido sobre la dicotoma entre naturaleza/cultura y entre individuo/sociedad, invitando a

    repensar los supuestos ms profundos del desarrollo.

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    Introduccin

    Amrica Latina transita un proceso de grandes cambios sociales. Es importante para analizar

    este cambio el aporte del pensamiento decolonial, en especial de la colonialidad del poder,

    del saber y del ser. Estos conceptos brindan elementos que facilitan el anlisis de la realidad

    social latinoamericana, incorporando la herida colonial abierta en 1492. En este contexto

    recobra fuerza la idea de pensar, desde nuestro ser latinoamericano, cmo se generan y

    regeneran la articulacin de las personas que viven en sociedades, los modos de produccin y

    la organizacin social emergente, es decir los procesos de desarrollo.

    Si nos remontamos a los primeros diez aos del siglo XXI, la combinacin de crisis

    econmica, ambiental y cultural crea una mayor conciencia de la necesidad de un cambio

    significativo de modelo; llama a reconstituir el mundo desde la diferencia, desde abajo

    (Escobar, 2010, pg. 22). La nocin de alcanzar el desarrollo se pone en cuestin y con ello

    todos sus supuestos. En esta nueva configuracin de poder emergen actores minoritarios, que

    construyen sus identidades en torno a demandas del orden tnico, sexual, territorial, tico y/o

    ambiental. Las realidades materiales y subjetivas comienzan a poner en juicio la hegemona

    de conceptos. Lo que conocemos y teorizamos como el desarrollo de las sociedades en

    trminos modernos no logra dar cuenta de la diversidad de procesos que engloba este

    concepto.

    En este sentido, surge la pregunta si la prctica de los productores agroecolgicos de la

    provincia del Chaco contiene lgicas alternativas, a las planteadas por el desarrollo de las

    sociedades desde la modernidad. Esta pregunta, forma parte de la tesis que desarrolla quien

    suscribe en la maestra en Gobierno y Economa Poltica, denominada La agroecologa

    como prctica alternativa al desarrollo moderno, una exploracin etnogrfica de la prctica

    agroecolgica chaquea.

    En la ponencia se presenta la experiencia de la cooperativa Los Poriajh, uno de los casos

    analizados en la tesis. Para ello, se realizaron entrevistas abiertas a un interlocutor de la

    cooperativa, como tambin a informantes claves relacionados con el sector. Para analizar las

    lgicas alternativas al desarrollo desde las prcticas concretas, se operativizaron conceptos

    como colonialidad del poder, del saber y del ser.

    El trabajo se estructura mediante un breve recorrido por los conceptos del pensamiento

    decolonial ms aplicables al anlisis, intentando establecer el vnculo entre esta forma de

    entender el mundo con la necesidad de revisar la idea del desarrollo en las sociedades. Es

    decir, se intenta explicitar desde dnde se mira al problema. Luego se indaga rpidamente en

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    los lmites de la conceptualizacin del desarrollo en clave decolonial. Luego, se presenta y

    detalla el caso de la cooperativa Los Poriajh.

    La propuesta decolonial

    En Amrica Latina se han desarrollado ideas del tenor de la Teologa y de la Filosofa de la

    Liberacin, como tambin de la Teora de la Dependencia. Se han llevado adelante los

    debates de modernidad y postmodernidad, las nociones de hibridez en antropologa,

    comunicacin y en estudios culturales. Estos debates son retomados, y profundizados en

    algunos casos por el programa de investigacin de modernidad/colonialidad latinoamericano,

    como lo define Escobar (2003).

    Para lograr articular un anlisis ms complejo de la realidad recurren a diferentes conceptos.

    Uno de ellos es la colonialidad del poder, que es definida por Grosfoguel como una

    interseccionalidad de jerarquas globales mltiples y heterogneas (heterarquas) formas de

    dominacin y explotacin sexuales, polticas, econmicas, espirituales, lingsticas y raciales

    donde la jerarqua racial/tnica de la lnea divisoria europeo/no europeo reconfigura de

    manera transversal todas las dems estructuras globales de poder (Grosfoguel, 2006). A lo

    que detalla Castro-Gmez que la misma importa en tres sentidos: primero, porque hace

    referencia a una estructura de control de la subjetividad que se consolid desde el siglo XVI y

    no apenas en el XVIII; segundo, y como consecuencia de lo anterior, porque coloca en el

    centro del anlisis la dimensin racial de la biopoltica y no solamente la exclusin de

    mbitos como la locura y la sexualidad; y tercero, porque proyecta este conflicto a una

    dimensin epistmica, mostrando que el dominio que garantiza la reproduccin incesante del

    capital en las sociedades modernas pasa, necesariamente, por la occidentalizacin del

    imaginario. (Castro-Gmez, La poscolonialidad explicada a los nios, 2005)

    Esto se traduce en una posicin de superioridad tnica y epistmica de los colonizadores

    por sobre los colonizados amerindios, entonces la dominacin no slo implic una accin

    coercitiva, sino fue la modificacin de la intimidad de los dominados. Por ejemplo, buscando

    que los colonizados naturalizaran el imaginario cultural europeo como forma nica de

    relacionamiento con la naturaleza, con el mundo social y con la propia subjetividad (Castro-

    Gmez, La poscolonialidad explicada a los nios, 2005), mediante la encomienda.

    El poder, en este marco, es definido por Quijano como un tipo de relacin social constituida

    por la co-presencia permanente de dominacin, explotacin y conflictos. El poder entonces,

    es el resultado de la disputa por el control de reas bsicas de existencia socio-natural, como

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    el trabajo, el sexo, la autoridad colectiva/pblica, la subjetividad/ intersubjetividad y la

    naturaleza (Quijano A. , 1997).

    El principal aporte de analizar la realidad social desde este enfoque es que permite visualizar

    la existencia de una articulacin entre diferentes formas de produccin coexistentes bajo el

    sistema mundo capitalista; que se plantea la existencia de una estructura histrica-

    heterognea, es decir, una articulacin imbricada de mltiples jerarquas, en las que la

    subjetividad y el imaginario social no son derivativos sino constitutivos de las estructuras del

    sistema mundo; que la divisin entre cultura y economa, es una dicotoma que oscurece la

    complejidad del sistema mundo (Quijano A. , 1997); que la colonialidad y la modernidad

    constituyen dos caras de la misma moneda; que el capitalismo es la expresin econmica

    dentro de las mltiples expresiones del patrn colonial del poder; por ltimo, que la

    descolonizacin y la liberacin anticapitalista no pueden reducirse slo a una dimensin de la

    vida social, se trata de pensar el cambio y la transformacin en una forma no reduccionista.

    La colonialidad del saber, por su parte, es entendida como el dispositivo que organiza la

    totalidad del espacio y del tiempo de todas las culturas, pueblos y territorios del planeta en

    una gran narrativa universal, en la cual Europa y Estados Unidos (EEUU) son

    simultneamente, el centro geogrfico y la culminacin del temporal del saber.

    Si consideramos que el conocimiento est situado, como plantean Dussel (1977) y Mignolo

    (2000) siempre hablamos desde un lugar en particular en las estructuras de poder, desde una

    la clase social, desde el sexo, el gnero, el espritu, la lingstica, la geografa y las jerarquas

    raciales. El locus de enunciacin condiciona el conocimiento. La ubicacin geopoltica y

    cuerpo-poltica del sujeto que habla estn presentes en el discurso. Cmo pretender entonces

    la universalidad en todo tiempo y lugar de un conocimiento situado, de un conocimiento

    regional?

    El filsofo colombiano Santiago Castro-Gmez (2003) ha denominado a esta estrategia de

    borrar al sujeto que enuncia como la epistemologa del punto cero, caracterstica de las

    filosofas eurocntricas. El punto cero es una forma de generar conocimiento que oculta, o

    intenta separarse de quien lo enuncia. Por medio del encubrimiento de la localizacin

    particular del sujeto de enunciacin, fue posible para la expansin y dominacin colonial

    europea construir una jerarqua de conocimientos superiores versus conocimientos inferiores

    y, por tanto, de seres superiores versus seres inferiores en el mundo. (Grosfoguel, 2006).

    Resume estas ideas Maldonado Torres, exponiendo que si la colonialidad del poder se

    refiere a la interrelacin entre formas modernas de explotacin y dominacin, y la

    colonialidad del saber tiene que ver con el rol de la epistemologa y las tareas generales de

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    produccin del conocimiento en la reproduccin de los regmenes de pensamiento coloniales,

    la colonialidad del ser se refiere, entonces, a la experiencia vivida de la colonizacin y su

    impacto en el lenguaje (Maldonado-Torres, 2007).

    Este concepto puede ser relacionado con la herida colonial conceptualizada por Walter

    Mignolo. sta herida es la marca en los individuos tras el proceso de la conquista y la

    colonizacin, se plantea como el resultado de los grandes proyectos colonizadores, imperiales

    y modernizantes, como pueden ser los proyectos civilizatorios, las campaas cristianas de

    conversin o bien los modernos procesos desarrollistas.

    Por ltimo, el desprendimiento como concepto es el punto de partida para una de-

    colonizacin. Seala Quijano, que es necesaria la descolonizacin epistmica, para dar paso

    luego a una nueva comunicacin inter-cultural, a un intercambio de experiencias y de

    significaciones, como la base de otra racionalidad que pueda pretender, con legitimidad, a

    alguna universalidad (Quijano A., 1992, pg. 447).

    La idea del desarrollo

    Escobar (2010, pg. 22), plantea que desarrollo es un proyecto econmico, capitalista e

    imperial, pero tambin cultural, ya que surge de la experiencia particular de la modernidad

    europea, y subordina a las dems culturas y conocimientos, las cuales pretende transformar

    bajo los principios occidentales. Contina el mismo autor marcando que existen ciertos

    principios que definen y sustentan las prcticas que generan desarrollo, como el individuo

    racional, quien es el principal actor del desarrollo, sin lugar de pertenencia ni comunidad; la

    separacin de la naturaleza y de la cultura, propiciando la apropiacin de la primera como

    mercanca o factor de produccin; la economa separada de lo social y lo natural; y la

    primaca del conocimiento experto por encima de cualquier otro saber.

    Tal es as, que finalizada la segunda guerra mundial, la idea de desarrollo, que se meda

    principalmente por el crecimiento del Producto Bruto Interno de un pas (especialmente en su

    versin econmica), se aplic para los pases del Tercer Mundo (Arocena, 2001). Esta

    acepcin del desarrollo, incorpora la idea de que es necesario recorrer un camino

    predeterminado gracias a un conjunto de leyes naturales que van marcando las etapas, los

    avances y la superacin de bloqueos originarios en ciertas tradiciones locales (). Los pases

    en desarrollo deben seguir la lnea evolutiva cuyo punto de llegada est prefijado: la sociedad

    industrializada (Arocena, 2001, pg. 16). Comeliau (2000), contradice esa hiptesis

    sosteniendo que en trminos simblicos, polticos, ecolgicos y econmicos, resulta

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    imposible de realizar esta convergencia, ya que son sociedades diferentes, con trayectorias

    distintas y ms an, puntos de partida divergentes. (Mignolo, 2008)

    En algunas de estas sociedades del Tercer Mundo, muchos movimientos indgenas, de afro-

    descendientes y de grupos rurales o urbanos con base territorial o comunal fuerte, marcan un

    quiebre mucho ms profundo que un simple giro a la izquierda en la medida que a travs de

    ellos emergen mundos, conocimientos y prcticas que se diferencian de las formas liberales,

    estatales y capitalistas de la Euro-modernidad (Escobar, 2010, pg. 27). Son paradigmas de

    vida diferentes, no lo superan, no son una continuidad de lo existente, son lgicas distintas,

    mundos otros. Desordenan el orden de la poltica moderna instituido sobre la dicotoma entre

    naturaleza/cultura y entre individuo/sociedad, para repensar sus supuestos ms profundos.

    Pensando en prcticas que pudieran dar cuenta de rdenes diferentes, nos encontramos con la

    agroecologa, que es un modo de produccin que considera al hombre, su organizacin social

    y la naturaleza como un sistema, y permite la convivencia de los dos. Es una prctica de los

    hombres para proveerse del alimento y los bienes elementales, segn lo define Altieri (1999).

    La agroecologa puede ser entendida desde una visin amplia entonces, como el manejo

    ecolgico de los recursos naturales a travs de formas de accin social colectiva para el

    establecimiento de sistemas de control participativo y democrtico, en los mbitos de la

    produccin y circulacin (Sevilla Guzmn E., 2006, pg. 223). Esta forma de entender la

    agroecologa, permite un anlisis sistmico, holstico, donde no se separa la produccin, la

    organizacin social y la reproduccin de esta organizacin. Se presenta entonces, como una

    alternativa a las formas de produccin dominante, degradantes del medio ambiente y

    orientadas al consumo. Por otro lado, al revalorizar el saber campesino, tiene el potencial de

    generar un proceso de reconstruccin de las sociedades locales, potenciando la biodiversidad

    ecolgica y sociocultural.

    Esta forma de produccin era utilizada en culturas antiguas, y fue quebrada por la

    colonizacin. Se intentaron destruir los medios de codificacin, regulacin y transmisin de

    las prcticas agrcolas, generando una dramtica transformacin de muchas sociedades

    indgenas y de los sistemas de produccin en que se basaban. Actualmente, este saber es re-

    construido como una forma de produccin y de convivencia armnica con el ambiente, como

    una ciencia que propicia la agricultura holstica.

    La propuesta metodolgica a utilizar

    Para indagar sobre la prctica de productores agroecolgicos y la forma en que se desprenden

    de las lgicas dominantes, se realiz un abordaje cualitativo y un intento de comprensin

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    etnogrfica de las visiones de los actores presentes en sus discursos. La etnografa es utilizada

    solamente como un enfoque, en tanto permite comprender los fenmenos sociales desde la

    visin misma de los actores (Guber, 2011).

    Este enfoque particularmente, se relaciona con la decolonizacin del conocimiento/saber, al

    valorizar el saber de los productores y establecer un dilogo con ellos. Es claro, que no se

    pretende ser la voz de los productores, simplemente realizar un cruce de saberes, y

    escribirlos, con el fin de identificar elementos o lgicas para pensar en las alternativas al

    desarrollo.

    La tcnica de interactuar se estableci a partir de entrevistas abiertas, que se realizaron con

    personas claves en una primera instancia, permitiendo la realizacin de un mapeo del sector

    agroecolgico de la provincia y logrando detectar los casos ms relevantes para la tesis. De

    este mapeo se desprendi la necesidad de interactuar en primer lugar con la cooperativa Los

    Poriajh, por las dimensiones que abarca su organizacin. No se logr al momento de

    presentar este avance, realizar observaciones participantes de los eventos de agroecologa y

    temas afines realizados en la regin, lo que permitira ampliar el anlisis.

    Las variables que se busc observar en el campo pueden dividirse acorde a los conceptos

    propuestos. La colonialidad del poder, ser analizada a partir de la relacin que se establecen

    entre las personas que trabajan en la unidad productiva, la relacin que mantienen con la

    tierra y la interaccin con el ecosistema, como tambin a partir de las relaciones que se dan

    entre hombres y mujeres y la conciencia de las personas respecto al trabajo realizado y su rol

    en la comunidad.

    La colonialidad del saber, se piensa observar a partir de la forma en que se transmite el saber

    hacer y quin es el portador del saber para los integrantes de la cooperativa. As tambin se

    piensa que es clave para entender a la organizacin, indagar sobre cmo se relaciona sta con

    el medio que la rodea, con otros productores de diferentes pases, otras ciudades, otros

    territorios.

    La cooperativa de trabajo y formacin Los Poriajh

    En la Provincia del Chaco, existe un movimiento social fundado en 2009, minoritario hasta el

    momento, que promueve la agroecologa. El Movimiento Agroecolgico Chaqueo adopta

    sta prctica como va de transformacin social, a partir de modos de produccin, de

    transformacin y consumo que sean sustentables, amigables con el ambiente, respetuosos de

    la diversidad natural, cultural y viable econmicamente. Estableciendo la accin colectiva y

    organizada, como contrapuesta a la lgica individual, propia del desarrollo moderno.

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    Uno de los miembros del Movimiento, es la Cooperativa Los Poriajh de la localidad de

    Presidencia Roque Senz Pea. La cooperativa se ubica en las afueras de la localidad, en un

    predio de 25 hectreas, que han sido cedidas a la misma como propiedad colectiva de sus

    miembros, por parte del Municipio. La cooperativa se compone de 20 familias, de las cuales

    9 personas son las que efectivamente cooperativizan su fuerza laboral. Cran y venden pollos,

    chivos, terneros, huevos de gallina, leche de vaca, y verduras cuando las lluvias lo permiten.

    Actualmente han montado tambin una carpintera con la que producen sillas que tambin

    son vendidas en la ciudad.

    Se presentan Toto Galvn y su compaera de vida y lucha Paula, Nosotros somos de la

    Unin de campesinos Poriajh. La unin nace mucho antes que la cooperativa. O sea nace

    en el 89. Por un conflicto de tierras () se luch muy fuerte ac para defender 740

    hectreas que haban sido como una reserva, y que era un asentamiento de campesinos de

    muchos aos y que en un momento el municipio los quiso desalojar. () A partir de ah

    nosotros nos dimos cuenta de que solos los campesinos no podamos avanzar a ningn lado.

    Sino buscbamos articulacin con otras organizaciones, empezar a recomponer un poco los

    lazos organizativos que haba roto la dictadura militar, porque nosotros venamos de una

    derrota de la dictadura muy fuerte. En este sentido, los campesinos retoman la lucha por las

    tierras, pero desde una visin diferente a la de las ligas agrarias, cuando preguntamos a que se

    deba esa diferenciacin, deca Toto: primero se vieron muy golpeadas por la dictadura, por

    la propagandizacin que se hizo de la dictadura, no solamente de los campesinos, sino de

    toda la sociedad organizada que te decan que eras subversivo. Por el otro lado, muchos

    errores de la propia dirigencia de ese momento de las ligas agrarias, que queran conducir

    al movimiento agrario desde afuera fundamentalmente. O sea, no desde los propios

    campesinos () entonces, no se pudo llegar a consolidar una dirigencia campesina

    autctona.

    La cooperativa como tal surge durante la crisis del 2001 en Argentina, cuando los integrantes,

    en general familias campesinas, no disponan de tierra suficiente para la produccin. Se

    juntaron unas 20 familias campesinas para comenzar a delinear una cooperativa de trabajo y

    de formacin, definiendo que cooperativizaran su fuerza de trabajo, poniendo en comn los

    saberes de cada uno, para que mediante el debate puedan constituirse como un colectivo.

    Tambin decidieron que la propiedad de la tierra, las mquinas, y sus productos seran de

    propiedad colectiva, en palabras de Toto Galvn, todos somos dueos de todo y nadie es

    dueo de nada.

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    Agrega Toto nosotros partimos de la necesidad de crear nuestros recursos, generar

    nuestros recursos, y a partir de ah decir bueno, cuando hablamos del buen vivir, es eso.

    Digamos, producir sano, en la cantidad y la calidad para vivir bien las familias que

    trabajamos ac. Segundo, poder compartir con la sociedad un tipo de produccin que tenga

    que ver con la soberana alimentaria. Entonces, decidieron producir en una primera

    instancia para el consumo propio, y el excedente sera vendido a los trabajadores de la

    ciudad. Tal es as que se constituy una categora de socio adherente para estos consumidores

    de la cooperativa, el objetivo de esta cooperativa es producir alimentos y terminar con la

    especulacin del intermediario. Entonces nosotros hacemos una articulacin directa con el

    consumidor. Y nuestra produccin la volcamos hacia esa gente. Que son trabajadores de la

    ciudad, explica Toto. Nos comentaba luego, que se realizan reuniones con los consumidores

    peridicamente, para generar conciencia del tipo de alimento que estn consumiendo. Hay

    entonces una definicin consciente y responsable sobre la salud de los que consumen sus

    productos, como tambin un involucramiento por parte de los consumidores en el proceso de

    produccin. Explicaban respecto a estos socios adherentes hacemos () reuniones para

    que vayan tomando conciencia de la necesidad de porqu producimos de esta manera y

    cuando le estamos hablando de consumir sano digamos, que es lo que le estamos

    produciendo y cmo, sin pesticidas, sin ningn tipo de veneno.

    La cooperativa asume que lo que est en discusin es el modelo de produccin de alimentos,

    dicen, modelo productivo que impulsamos es agroecolgico, que tiene que ver con la

    solidaridad, con la soberana alimentaria, () tiene que ver con una cuestin ideolgica.

    Porque esto no se da dentro del capitalismo. No se puede dar. Nosotros, en todo caso, somos

    alguien que est haciendo algo, mientras que producimos tenemos que ir pensando cmo nos

    organizamos para ir superando todo esto, para superar al capitalismo. Porque en definitiva

    el cooperativismo, la solidaridad, la agroecologa, tienen que ver con una disputa que hay

    fuertemente con los agronegocios. Finalmente, menciona el interlocutor estamos en un

    mundo en el cual, yo le deca muchas veces a los agroecologistas, yo no puedo tener 25

    hectreas haciendo agroecologa, porque me estara mintiendo, mientras los aviones estn

    pasando por al lado mo, por todos lados fumigando.

    En esta disputa por el modelo de produccin y consumo, la coope, como la denominan sus

    miembros, mantiene vnculos con la sociedad de Senz Pea, a partir de los socios adherentes

    como antes mencionbamos. Tambin mantienen relaciones de membreca con

    organizaciones campesinas, como la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del

    Campo Va Campesina (CLOC), con la Coordinadora Nacional de Organizaciones de

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    Mujeres Trabajadoras Rurales e Indgenas (CONAMURI), con el Movimiento Agroecolgico

    Latinoamericano (MAELA), tambin son parte de la Central de Trabajadores Argentinos

    (CTA), entre otras instituciones de las cuales participan activamente. Adems, organizan una

    vez al ao un encuentro de debate en el espacio de la cooperativa construido para tal efecto.

    Al interior de la organizacin, la relacin entre las personas que trabajan es, desde el

    discurso, una relacin entre pares donde no existe diferencia de gnero o raza, pero si existe

    una fuerte identificacin con el ser campesinos. Las decisiones militantes se debaten y se

    consensuan, las productivas no mucho, pues es algo a lo que no le dan mucha importancia.

    La relacin con la tierra, sigue respondiendo a un concepto capitalista, pues constituye para

    ellos un factor de produccin, es una mercanca, que consideran el Estado debera

    proverselas. Ellos se apropian de la tierra y la naturaleza contenida en ella, se busca

    controlarla para obtener un mayor beneficio econmico, cooperativo, incluyendo algn

    grado de armona con el ambiente, pues existe una rotacin de cultivo y la no utilizacin de

    pesticidas, pero sigue siendo intensivo el cultivo en determinadas zonas del emprendimiento.

    Deca Toto, por lo general cuando sembramos sorgo para los animales, tratamos de

    sembrar un ao sorgo en un lugar, maz en otro, y as vamos cambiando.

    La relacin de gnero, es en el discurso igualitaria, pero la lucha de ellos es de clase, no entre

    gneros, mencionan. Tal es as, que expresaba Paula nosotros las vemos ms a las

    organizaciones y al sector como una lucha de clases no de gneros. Ah superamos, donde

    los roles se concatenan digamos, y tenemos las mismas responsabilidades, hasta a veces las

    mujeres tienen que hacer los mismos esfuerzos que nosotros para poder sostenernos. ()

    Entonces tratamos de buscar la igualdad, dentro del movimiento, y no separar una cosa de la

    otra

    En cuanto a la forma de conocer, se desprende de lo dialogado que han logrado revalorizar el

    conocimiento campesino, tambin identificndolo con el saber proveniente de una clase

    social especfica en el marco de la lucha de clases que proponen. Mencionaba Toto Galvn:

    yo creo que es un proceso interesante, yo le deca a los compaeros, no tenemos que

    quedarnos solamente con el discurso latinoamericanista, de la patria grande, todo esas

    cosas, pero como discurso nomas () Hagmoslo carne. Asumamos este proceso que nos

    toca vivir. Un proceso antiimperialista, de articulacin entre los pases latinoamericanos.

    Pero el antiimperialismo no sirve si lo vemos al imperialismo como solamente all en el

    norte. Tenemos que ver que el imperialismo es fundamentalmente capitalista. Y por lo tanto

    al capitalismo si lo tenemos aqu adentro. Tambin expresaban que estamos, como deca

    Evo Morales, colonizados de la cabeza. La descolonizacin esa que hay que hacer, lo podes

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    hacer solamente a travs de los debates y las discusiones, en este sentido es que la

    cooperativa entiende como el proceso ms relevante el de la militancia, militancia dentro de

    las organizaciones y en la vida pblica de las sociedades.

    Conclusiones

    Una de las puertas que abre el concepto de colonialidad del poder, es la posibilidad de

    analizar la realidad social desde una articulacin de modos de produccin y reproduccin

    bajo el mismo sistema, que no necesariamente responden a sus lgicas dominantes. En la

    prctica y bsqueda de conciencia poltica de la cooperativa Los Poriajh, se puede visualizar

    la emergencia de lgicas solapadas con el capitalismo, formas de accionar que cuestionan lo

    establecido. La cooperativa, perteneciendo a la sociedad, intervine en ella con la intencin de

    mostrar otros caminos, de realizar una construccin poltica, y no la maximizacin de los

    beneficios de los integrantes ni el incremento del consumo, an estando dentro del sistema.

    Se hacen responsables de los productos que generan para la sociedad y se vinculan

    directamente con quienes lo consumen, eliminando la intermediacin, la publicidad de sus

    productos. Buscan producir lo que consume, pero no viven para producir, viven para

    interactuar, para dialogar, debatir en la bsqueda de otra realidad. Tienen una conciencia de

    grupo, colectivizan la propiedad privada.

    La interaccin con el ecosistema, se realiza en los trminos convencionales, existe una

    asociacin de cultivos, pero no necesariamente relacionadas con la necesidad del ecosistema,

    sino orientada a satisfacer las necesidades de los integrantes de la cooperativa. No todos los

    miembros que comenzaron a trabajar en la misma continan al da de hoy, el compromiso

    con los objetivos son reconstruidos en el da a da, generando diferentes niveles de

    compromiso entre sus miembros. Esta cooperativa enfrenta los problemas propios de

    enfrentar la realidad, y de buscar que lo que se piensa guarde relacin con el hacer.

    Entonces, para repensar el desarrollo de las sociedades y de las personas que las integran, es

    importante la descolonizacin y desprendimiento de lo capitalista. Como se puede entrever,

    no puede reducirse este cambio slo a una dimensin de la vida social (econmica, poltica o

    social), se trata de pensar el desarrollo de las sociedades en una forma no reduccionista,

    imbricando la prctica con el debate intelectual, con la vivencia de las contradicciones misma

    que la realidad presenta, y superando la idea de que existe un nico modo de produccin y de

    organizacin social deseables. Existen trayectorias, luchas, intereses, juegos de poder, que

    propician la emergencia de distintas formas de enfrentarlos, de incorporarlos, y que son tan

    vlidas como fue el proceso de industrializacin en Europa.

  • 12

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