LA SEGUNDA DERROTA DE LA CABALLER+ìA

2
LA SEGUNDA DERROTA DE LA CABALLERÍA Hauser Shakespeare y Cervantes no son nada más que portavoces de su tiempo, únicamente anuncian lo que la realidad denota a cada paso. Rasgos fundamentales del Manierismo: la transpa rencia de lo cómico a través de lo trágico y la presencia de lo trágico en lo cómico. También la doble naturaleza del héroe, que aparece ora ridículo, ora sublime. Es Manierista lo grotesco y caprichoso de la representación, la mezcla de los elementos realistas y fantásticos en el estilo. Shakespeare por razones estilísticas no renuncia al realce social de sus héroes: tienen que ser príncipes, y grandes señores, para levantarse de sus contemporáneos, y caer desde una altura suficiente, para causar, con la peripecia de su destino, una impresión tanto mayor. Contexto histórico de Shakespeare: la reina Isabel favoreció en todos los aspectos la economía capitalista, la burguesía rica y la nobleza terrateniente s formaban la nueva clase señorial, y en la alianza de la corona con ella se expreso la estabilización de la sociedad. El principio de orden, la idea de la autoridad y la seguridad se convierten en fundamento de la ideología burguesa, una vez que las clases adquirientes se han convencido de que para ellas nada es más peligroso que una autoridad débil y la conmoción de la jerarquía social. El monarquismo de Shakespeare, se explica por su miedo al caos. El pensamiento del universo y la disolución de que tal orden parece amenazado siempre es un tema fundamental en su pensamiento y en su poesía. Expresa opiniones políticas que arraigan la idea de los derechos humanos, condena los abusos del poder y la opresión del pueblo, pero condena también lo que él llama la arrogancia y prepotencia del populacho, y coloca, en su temor burgués el principio del orden por encima de todas las consideraciones humanitarias. Shakespeare insulta al pueblo con visible satisfacción. Shakespeare había comprendido lo crítico e insostenible de la situación. Expresa una visión trágica del mundo y un pesimismo profundo, demuestra su sentido de responsabilidad social y su convencimiento de que no todo estaba bien tal cual estaba. Hamlet es una figura en Shakespeare de tipo quijotesco, su idealismo alejado del mundo, su ingenuidad, y su credulidad. Característico solamente de Shakespeare es el terrible despertar de la ilusión y la pena sin fondo que les causa el tardío descubrimiento de la verdad. Contexto histórico: enemistad entre Isabel y María Esturado, la persecución de los puritanos, la progresiva transformación de Inglaterra en un estado policiaco, el fin del gobierno relativamente liberal y la nueva dirección absolutista de Jacobo I, la agudización del conflicto entre la monarquía y las clases medias, de ideas puritanas, son causas del cambio de Shakespeare hacia el pesimismo. La crisis que Shakespeare sufrió, conmovió todo su equilibrio y le dio un modo nuevo de ver el mundo, el poeta siente más simpatía ahora por las personas que fracasan en la vida pública que por aquellas que tienen fortuna y éxito. El pesimismo en Shakespeare tiene una dimensión supra personal y lleva en sí las huellas de una tragedia histórica. Shakespeare fue el primer gran poeta en la historia del teatro que se dirigió a un público amplio y mezclado, que comprendía todas las clases de la sociedad, y ante él logro plena resonancia. Shakespeare escribe un drama porque existe una demanda, y él procura satisfacerla. No solo el contenido y la tendencia, sino también la forma de drama shakesperiano están condicionada por la estructura política y social de la época. En su obra se expresa la lucha psicológica, el trágico conflicto de conciencia. Esta lucha psicológica consiste en la inevitabilidad del conflicto, en lo insoluble de su final y en la victoria moral del héroe en medio de su caída, victoria que se hace posible con la concepción de la idea moderna del destino, donde un destino se vuelve trágico solo mediante su afirmación. Principios formales en la obra de Shakespeare son la composición por suma, la discontinuidad de la acción, la sucesión brusca de escenas, la acción libre y cambiante en el espacio y en el tiempo. Es naturalista en la obra de Shakespeare ante todo el dibujo de sus caracteres, la psicología diferenciada de sus figuras y el formato humano de sus héroes que consisten en evidentes contradicciones y están llenos de debilidades.

Transcript of LA SEGUNDA DERROTA DE LA CABALLER+ìA

Page 1: LA SEGUNDA DERROTA DE LA CABALLER+ìA

7/24/2019 LA SEGUNDA DERROTA DE LA CABALLER+ìA

http://slidepdf.com/reader/full/la-segunda-derrota-de-la-caballeria 1/1

LA SEGUNDA DERROTA DE LA CABALLERÍA

Hauser

Shakespeare y Cervantes no son nada más que portavoces de su tiempo, únicamente anuncian lo que la realidad

denota a cada

paso.Rasgos fundamentales del Manierismo: la transparencia de lo cómico a través de lo trágico y la presencia de lo

trágico en lo cómico. También la doble naturaleza del héroe, que aparece ora ridículo, ora sublime. Es Manierista

lo grotesco y caprichoso de la representación, la mezcla de los elementos realistas y fantásticos en el estilo.

Shakespeare por razones estilísticas no renuncia al realce social de sus héroes: tienen que ser príncipes, y grandes

señores, para levantarse de sus contemporáneos, y caer desde una altura suficiente, para causar, con la peripecia

de su destino, una impresión tanto mayor.

Contexto histórico de Shakespeare: la reina Isabel favoreció en todos los aspectos la economía capitalista, la

burguesía rica y la nobleza terratenientes formaban la nueva clase señorial, y en la alianza de la corona con ella se

expreso la estabilización de la sociedad. El principio de orden, la idea de la autoridad y la seguridad se convierten

en fundamento de la ideología burguesa, una vez que las clases adquirientes se han convencido de que para ellas

nada es más peligroso que una autoridad débil y la conmoción de la jerarquía social.

El monarquismo de Shakespeare, se explica por su miedo al caos. El pensamiento del universo y la disolución deque tal orden parece amenazado siempre es un tema fundamental en su pensamiento y en su poesía. Expresa

opiniones políticas que arraigan la idea de los derechos humanos, condena los abusos del poder y la opresión del

pueblo, pero condena también lo que él llama la arrogancia y prepotencia del populacho, y coloca, en su temor

burgués el principio del orden por encima de todas las consideraciones humanitarias. Shakespeare insulta al

pueblo con visible satisfacción. Shakespeare había comprendido lo crítico e insostenible de la situación. Expresa

una visión trágica del mundo y un pesimismo profundo, demuestra su sentido de responsabilidad social y su

convencimiento de que no todo estaba bien tal cual estaba.

Hamlet es una figura en Shakespeare de tipo quijotesco, su idealismo alejado del mundo, su ingenuidad, y su

credulidad. Característico solamente de Shakespeare es el terrible despertar de la ilusión y la pena sin fondo que

les causa el tardío descubrimiento de la verdad.

Contexto histórico: enemistad entre Isabel y María Esturado, la persecución de los puritanos, la progresiva

transformación de Inglaterra en un estado policiaco, el fin del gobierno relativamente liberal y la nueva dirección

absolutista de Jacobo I, la agudización del conflicto entre la monarquía y las clases medias, de ideas puritanas, soncausas del cambio de Shakespeare hacia el pesimismo.

La crisis que Shakespeare sufrió, conmovió todo su equilibrio y le dio un modo nuevo de ver el mundo, el poeta

siente más simpatía ahora por las personas que fracasan en la vida pública que por aquellas que tienen fortuna y

éxito. El pesimismo en Shakespeare tiene una dimensión supra personal y lleva en sí las huellas de una tragedia

histórica.

Shakespeare fue el primer gran poeta en la historia del teatro que se dirigió a un público amplio y mezclado, que

comprendía todas las clases de la sociedad, y ante él logro plena resonancia. Shakespeare escribe un drama

porque existe una demanda, y él procura satisfacerla.

No solo el contenido y la tendencia, sino también la forma de drama shakesperiano están condicionada por la

estructura política y social de la época.

En su obra se expresa la lucha psicológica, el trágico conflicto de conciencia. Esta lucha psicológica consiste en la

inevitabilidad del conflicto, en lo insoluble de su final y en la victoria moral del héroe en medio de su caída, victoria

que se hace posible con la concepción de la idea moderna del destino, donde un destino se vuelve trágico solo

mediante su afirmación. Principios formales en la obra de Shakespeare son la composición por suma, la

discontinuidad de la acción, la sucesión brusca de escenas, la acción libre y cambiante en el espacio y en el tiempo.

Es naturalista en la obra de Shakespeare ante todo el dibujo de sus caracteres, la psicología diferenciada de sus

figuras y el formato humano de sus héroes que consisten en evidentes contradicciones y están llenos de

debilidades.