Las dificultades de aprendizaje dentro de un marco contextual deficitario.

Los profesionistas que se encuentran involucrados dentro de la educación especial, y más

específicamente quienes trabajan directamente con el alumnado en las escuelas regulares tienen

la obligación de determinar y diagnosticar a los alumnos con dificultades de aprendizaje, sin

embargo, esta labor en ocasiones puede llegar a complicarse en algunos casos, que si bien son

atendidos o no, depende del criterio de los especialistas a cargo.

Esos casos que son difíciles de diagnosticar, son aquellos que resulta relevante analizarlos a través

de todos los factores involucrados, para determinar con la mayor precisión posible que tipo de

necesidades presenta el alumno y principalmente, si es necesaria la intervención del equipo de

especialistas o no.

A partir de las ideas previas, es por ello, que el presente escrito pretende orientar en, qué es una

dificultad de aprendizaje, cuáles son sus causas y establecer una estrategia para la determinación

del diagnóstico en casos donde sea difícil concretar los resultados.

Revisando diferentes textos y libros es fácil darse cuenta que este tema es poco preciso debido a

que la labor en el apoyo de alumnos con dificultades de aprendizaje es multidisciplinaria y es por

ello que existe diferentes enfoques que en ocasiones pueden llegar a contradecirse, situación

misma que ha repercutido en la práctica de investigadores y especialistas que atienden a los

alumnos.

Algunas definiciones que se han hecho desde hace décadas como la de Kirk quien desarrolló el

conocido test ITPA define a las dificultades de aprendizaje como “retraso, desorden o inmadurez

en uno o más procesos: del lenguaje hablado, de la lectura, de la ortografía, de la caligrafía o de la

aritmética, resultante de una posible disfunción cerebral y/o trastornos de la conducta, que no

dependen de una deficiencia mental, de una privación sensorial (visual o auditiva), de una

privación cultural o de un conjunto de factores pedagógicos”. (tomado de Fonseca Pp. 96).

Como se puede apreciar desde esta perspectiva queda claro desde un inicio que las dificultades de

aprendizaje se vinculan directamente con el lenguaje y los procesos cognitivos que se relacionan a

este, quedando excluido la posibilidad de una discapacidad sensorial, un trastorno de tipo

psiquiátrico, un contexto privativo de estímulos o deficiencias pedagógicas por parte de los

docentes de grupo.

Otra definición interesante es la que aporta Fonseca desde 1974, la cual establece que: “Las DA se

pueden definir como una falta de armonía en el desarrollo y normalmente se caracterizan por una

inmadurez psicomotora que incluye trastornos en los procesos receptores, integradores y

expresivos de la actividad simbólica.”

De tal manera que las dificultades de aprendizaje se vinculan al desarrollo según ambos autores y

que afecta procesos cognitivos básicos que se relacionan con la percepción, el procesamiento y la

ejecución de una actividad.

Es por ello, relevante que se evalúe el desarrollo de los alumnos a partir de evaluaciones y de la

observación en la ejecución de actividades principalmente académicas, esto debido al punto que

se refiere a la actividad simbólica.

Es común que un alumno que se encuentra bien adaptado a su entorno, con la observación

superficial no sea identificado adecuadamente, principalmente porque algunos de ellos cuando se

les evalúa presentan un buen nivel cognitivo en el área de ejecución, lo cual les permite realizar

actividades cotidianas y mecánicas dentro de términos razonables, sin embargo, estos alumnos en

las evaluaciones van a presentar por lo regular dificultades y un bajo nivel cognitivo en el área

verbal.

Por otra parte, una de las últimas definiciones encontradas es la del Comité Nacional Conjunto

para Dificultades del Aprendizaje (NJCLD).

“Las dificultades del aprendizaje representan un término genérico que se refiere a un grupo

heterogéneo de altercaciones que se manifiestan por dificultades importantes en la adquisición y

utilización del lenguaje, la lectura, la escritura, razonamiento o habilidades matemáticas. Estas

altercaciones son intrínsecas al individuo, y se considera que se deben a una disfunción en el

sistema nervioso central. Aun cuando una dificultad de aprendizaje puede ocurrir junto a otras

condiciones deficitarias (como deficiencias culturales, instrucción inadecuada o emocional) o

influencias ambientales (como diferencias culturales, instrucción inadecuada o factores

psicogénicos), no son el resultado directo de estas condiciones o influencias”

Ante esta definición más completa, se pueden encontrar otros puntos a tratar:

Nuevamente se hace énfasis en el área de lenguaje, por lo que las evaluaciones en el área de

comunicación y lenguaje son fundamentales para la determinación de las dificultades de

aprendizaje, además de las evaluaciones en diversos procesos cognitivos básicos, principalmente

aquellas evaluaciones que permiten ver la integración de diferentes procesos cognitivos que se

dan en el lenguaje oral y escrito y/o que arrojen indicadores de lesiones neurológicas que estén

afectando el desarrollo normal del alumno.

Por otra parte, también se consideran a los alumnos que presentan dificultades de aprendizaje

aún cuando sus dificultades se mezclan con condiciones deficitarias o ambientales, siempre y

cuando éstas no sean la única causa. Y es aquí, que cuando se trabaja con alumnos que se

encuentran en medios empobrecidos, resulta difícil determinar en algunos casos, cuando se trata

de una verdadera dificultad de aprendizaje y cuando es sólo el efecto de varios factores externos

al alumno, considerando que es requisito que sea una condición intrínseca al alumno.

Con base en lo anterior se puede agregar que los autores presentan ciertas coincidencias para la

identificación de un alumno con dificultades de aprendizaje, entre estas se pueden mencionar:

Una discrepancia entre el nivel intelectual y la ejecución de actividades escolares.

Presentan dificultad en habilidades y competencias académicas que se vinculan con procesos

cognitivos encargados de recibir, integrar y expresar la actividad simbólica.

Dificultades en su desarrollo e indicios de una afectación neurológica que puede resumirse en una

disfunción cerebral y dificultades en su adaptación social y/o emocional.

Por otra parte, una vez revisada la definición y sus implicaciones es importante señalar que existen

autores que han propuesto diversas clasificaciones sobre las dificultades de aprendizaje, sin

embargo, estas clasificaciones en ocasiones varían de acuerdo al concepto de dificultad de

aprendizaje en el cual se basen para la elaboración de las mismas.

Fonseca propone una clasificación básica, muy adecuada para determinar e identificar las

dificultades de aprendizaje en la cual sólo se exponen dos categorías que a continuación se

mencionan:

Se dividen en dificultades de aprendizaje primarias y secundarias, las primeras incluyen como

características que no existe una causa orgánica específica, también se Incluyen trastornos

conductuales y simbólicos como el lenguaje oral, escrito y cuantitativo. Con un potencial sensorial,

intelectual, motor y social dentro de la norma, pueden incluir trastornos mínimos que no siempre

se detectan por exámenes médicos o psicológicos y se detectan trastornos en el lenguaje oral,

escrito y cuantitativo.

En cambio las dificultades de aprendizaje secundarias son el resultado de una discapacidad,

deficiencia orgánica específica o como consecuencia secundaria de deficiencias neurológicas,

sensoriales, psíquicas o ambientales. En este caso el potencial sensorial intelectual, motor o social

es anormal; pueden existir trastornos secundarios ocasionados por deficiencias sensoriales,

psíquicas o ambientales y trastornos secundarios en el lenguaje oral, escrito y cuantitativo.

De esta clasificación es destacable que las dificultades de aprendizaje que se consideran como tal

son las primarias, en las cuales pueden estar vinculadas a disfunción cerebral, en las que la causa

orgánica no siempre es posible especificar; las secundarias en cambio son clasificadas para su

atención como discapacidades y otros trastornos orgánicos entre los que se pueden contemplar

las lesiones cerebrales, en las cuales un área del cerebro definitivamente no funciona.

Ahora bien, también es preciso determinar los factores que pueden incidir en la aparición de una

dificultad de aprendizaje, cabe agregar, que Fonseca oportunamente presenta algunas categorías

para la presentación de las mismas, las cuales se consideran viables para el análisis cuando se

presenta un caso, de igual modo, es importante contemplar que estos factores no aparecen en las

dificultades de aprendizaje de manera exclusiva, de manera regular aparecen mezclados entre sí.

Las áreas en las que se pueden agrupar los factores son tres: el biológico, el psicológico y el social,

de las cuales, el que ocupa mayor relevancia es el primero y es del que en ocasiones menos

información precisa se tiene en los casos que por lo regular se atiende.

Aquí se puede subdividir en prenatales, perinatales y postnatales, los primeros incluyen:

incompatibilidad de rh, ambientes intrauterinos desfavorables, malformaciones congénitas,

variaciones genéticas, anemia, diabetes y eclampsia.

Los factores perinatales giran en torno al parto donde se pudo presentar anoxia – hipoxia, parto

prolongado, bradicardia, reflejos lentos, preclampsia, hipertensión, hemorragia vaginal y

nacimiento prematuro.

Por último, en los factores postnatales se contemplan la disfunción social o educacional,

intoxicaciones, traumatismos, anemias, desnutrición, padecimientos infecciosos, hemorragias

cerebrales y disfunción cerebral adquirida.

Los factores psicológicos sólo incluyen los motivacionales y emocionales, mismos que pueden

afectar el rendimiento del alumno de diversas formas, entre las cuales se puede mencionar una

autoestima baja, que incluye un autoconcepto pobre y falta de interés en la tarea.

Y finalmente, los factores sociales se pueden dividir en dos grupos, los que se relacionan con

factores ambientales y sociales privativos, que en general estimulan muy poco el desarrollo y por

ende en un ambiente escolar puede observarse que el alumno presenta un retraso en el

desarrollo, lo cual puede encontrarse en familias que tienden a presentar relaciones caóticas y la

interacción de la herencia con el medio.

El otro grupo puede incluir la pobreza extrema, siendo en zonas marginadas puede existir

dispedagogía en las instituciones escolares y atrasos de la maduración neurobiológica.

Como se puede observar, al presentar los factores que inciden en la aparición de las dificultades

de aprendizaje, junto con las definiciones presentadas que puede apreciarse el reto del

diagnóstico en los alumnos que se encuentran inmersos en un contexto marginado

socioeconómicamente.

Es necesario establecer la diferencia ente un rezago educativo y una dificultad de aprendizaje y es

por ello, que algunos casos pueden resultar de difícil diagnóstico. En el caso de un rezago

educativo, es primordial tener presente que su causa principal es el contexto educativo como

factor determinante, así como la falta de compromiso de la familia para el apoyo del alumno, sin

embargo, es probable que continuamente se puedan encontrar estas situaciones en zonas

marginadas, incluidos los alumnos que presentan dificultades de aprendizaje.

De acuerdo a lo observado por diversos investigadores, existe una dificultad de aprendizaje

cuando el alumno ha tenido todas las oportunidades educativas y aún así presenta la dificultad,

pero en una zona marginada es común que los alumnos que presentan dificultades vivan en

ambientes poco favorables, lo cual establece que coexisten con los factores sociales.

Observando de manera global todos estos factores también se puede inferir que todo es una

cadena de consecuencias, por lo regular son familias de escasos recursos, mismas que no tienen

los cuidados ambientales y médicos para llevar un embarazo controlado, así de la misma forma

sucede en el parto, esto a su vez favorece cualquiera de los factores biológicos que se presentaron

y por tanto, conforme va creciendo el niño, los factores psicológicos y sociales tienden a mezclarse

con los anteriores.

Es así que, para la identificación de un alumno con dificultades de aprendizaje es fundamental

realizar una revisión profunda de todos y cada uno de los factores que se exponen a través de la

entrevista, y junto con las pruebas psicológicas, se debe encontrar resultados que lleven el caso a

una posible disfunción neurológica.

De acuerdo a la experiencia adquirida en la revisión de diversos casos, es mejor un diagnóstico

acertado posterior a un año y principalmente después de haber cursado el primer ciclo escolar de

educación primaria, esto excluiría a aquellos alumnos que por cuestiones ambientales presentan

retrasos en el desarrollo favorecidos por la falta de estimulación y de un ambiente empobrecido.

Si bien el diagnóstico de un alumno con dificultades de aprendizaje, en la práctica puede volverse

rutinario, son esos casos que requieren más atención los que en este texto se hace un mayor

énfasis, cuando la disfunción neurológica no es posible identificarla con estudios médicos y bien

puede verse el conjunto de características en sus habilidades perceptivas, integradoras y

expresivas deterioradas o bien limitadas, es ahí, donde la identificación de alumnos es un reto.

Bibliografía Da Fonseca, V. (2004). Dificultades de aprendizaje. México: Trillas.