Los celtas y sus Mitos.pdf

download Los celtas y sus Mitos.pdf

of 118

Transcript of Los celtas y sus Mitos.pdf

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    1/118

    La presente obra nos ofrece una visin amplia y penetrante de los pueblos clticos, desde sucristalizacin en la noche de los tiempos, hasta su impetuosa entrada en la Historia. Las correras,las luchas, las costumbres, la religin, el arte y la extraa mitologa de una raza dotada de unapersonalidad fulgurante y nica, sin parangn posible con los otros pueblos de la antigedad.

    Para nosotros, el conocimiento de los celtas a los que un famoso autor calific de alegres,poticos, piadosos, crdulos, sagaces, patriotas, gregarios, valientes, indisciplinados, indolentes,amables, avisados y tercos, es ms apasionante, si cabe, porque su sangre dej honda huella enla Pennsula.

    El autor, Mariano Fontrodona, ha publicado ya otras obras en Editorial Bruguera: Rusia entinieblas. El fin de los Romanov yLa Larga Marcha. El nacimiento de la nueva China. Doctor enDerecho, Licenciado en Ciencias Polticas y en Sociologa, graduado en Periodismo y Estudioseuropesticos, ha colaborado en las revistas Testimonio, Destino, Revista de Estudios Polticos,Revisione, y actualmente sigue publicando trabajos sobre cuestiones diversas enHistoria y Vida yNueva Historia.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    2/118

    Mariano Fontrodona

    LOS CELTAS YSUS MITOS

    EDITORIAL BRUGUERA, S. A.Barcelona Bogot Buenos Aires

    Caracas Mxico

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    3/118

    Mariano Fontrodona - 1978Texto

    Luis Albors - 1978Cubierta

    La presente edicin es propiedad deEDITORIAL BRUGUERA, S. A.Mora la Nueva, 2. Barcelona (Espaa)

    1a. edicin: febrero, 1978

    Impreso en Espaa Printed in Spain

    ISBN 84-02-05502-8Depsito legal: B. 48.962 1977

    Impreso en los Talleres Grficos deEDITORIAL BRUGUERA, S. A.

    Carretera Nacional 152, Km. 21,650Parets del Valles - Barcelona - 1978

    Scan: UrijennyRevisin: Warlok72

    Agosto/2004

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    4/118

    1

    LOS PUEBLOS CELTAS HACEN SU APARICIN EN LAHISTORIA

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    5/118

    5

    El enigma de los celtas

    Con muy escasa precisin y un cierto tono, habitualmente despectivo, los escritores clsicosllamaron celtas o galos de manera indistinta a los pueblos de tez blanca que habitaban alnorte de sus fronteras. Recordemos la lapidaria frase de Tcito, para quien eran brbaros, es decirextranjeros, todos aquellos pueblos que coman pan de centeno en lugar de pan de trigo, quecocinaban con grasas de animales en vez de hacerlo con aceite de oliva, y que beban cerveza uotros brebajes fermentados, pero no vino. Dicho en otras palabras, que no posean las tres plantasbsicas de la cultura mediterrnea, a saber, el trigo, la vid y el olivo.

    Posteriormente como ha escrito Fay-Cooper Col1, el trmino celta qued restringido aciertos grupos de habla afn, lo cual, en conjunto, constitua una ramificacin de la lengua aria oindoeuropea. Y con el tiempo vino a darse el nombre de celtas a un grupo tnico, o subraza,poseedor de una lengua caracterstica y distinta. Aunque la verdad es que ellos jams se dieron as mismos el nombre de celtas.

    Parece ser que la primera denominacin que recibieron los celtas fue la de hiperbreos, queles atribuyeron los griegos, y as llama Herclides del Ponto a los galos que invadieron Roma,all por el ao 390 a.C. No obstante, hay que tener en cuenta que los griegos designaban de lamisma manera a todos los pueblos del noroeste de Europa.

    A partir del siglo v de nuestra era los griegos comenzaron a usar el trmino keltoi, as comokeltai y galatai. Por su parte, los autores romanos usaron las denominaciones celtae, celtici ygalatae, tomadas evidentemente de los griegos, a las que aadieron un nuevo vocablo: galli.

    El erudito Arbois de Jubainville2 afirma que las voces keltoi y keltai equivalen a loscalificativos altos y nobles, pero que la palabra latina galli quiere decir guerrero. Laverdad es, empero, que no hay unanimidad alguna en este terreno. Algunos investigadores3creenfirmemente que galli es sinnimo de montas. Y otros autores sostienen la teora de que, enun principio, se usaban las palabras keltai y keltoipara sealar a todos los pueblos de raza celta.Luego, en una diversificacin ya de los conceptos, con la voz galli se defini a los celtas deEuropa, y con la palabra galatae a los del Asia Menor. No cabe duda, en todo caso, de que fueCatn el que primeramente us el trmino galli. En cuanto a Julio Csar, consideraba como galosa todos los pueblos de este lado del Rin, y crea que galos y celtas equivalan a lo mismo.

    En el campo de la antropologa, el confusionismo y la disparidad de los criterios no sonmenores. La escuela de Broca4, apoyndose en el testimonio de los historiadores antiguos,considera como el solar de la ms pura raza celta a la regin comprendida entre los ros Sena yCarona, por un lado, y el mar y los Alpes por otro. Por consiguiente, estos antroplogos francesesopinan que los actuales habitantes de Auvernia son el arquetipo de aquella raza. Describen sutalla como menos elevada que la de los belgas y otros pueblos celtas ms septentrionales, con elcabello negro o castao, los ojos grises, verdes o claros. Son braquicfalos, de considerablecapacidad craneal, frente ancha, aunque con el crneo anterior poco desarrollado si se les

    1Fay-Cooper Col: Artculo "Celtas" de la Gran Enciclopedia Durvan. Bilbao, 1962.2H. Arbois de Jubainville:Les Celtes. Pars, 1903.3A. Fernndez Guerra: Cantabria. Madrid, 1873.4Pierre Paul Broca: Antroplogo francs, fundador de la famosa cole dAntropologie, considerado como el padrede la moderna craneologa.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    6/118

    6

    compara con otros individuos de inferior capacidad craneal. El occipucio alcanza casi la vertical,y las protuberancias superciliares son muy marcadas. El arco zigomtico el formado por laapfisis zigomtica del hueso temporal, en su cara externa es de los ms ocultos entre losconocidos. La cara aparece ensanchada con relacin al crneo, algo aplastada y de forma

    rectangular. Los pmulos suelen ser muy marcados y separados, y la mandbula inferior presentauna forma cuadrada. El conjunto da la sensacin de una cabeza grande, sobre un cuellorelativamente estrecho. Por lo que respecta a los miembros, son fuertes, de bastante grosor y per-fectamente musculados.

    Frente a esta teora, excesivamente perfilada, un gran prehistoriador, como Pedro BoschGimpera5, entre otros autores6, apunta la hiptesis de que los celtas fueran un pueblo resultantede la fusin de muy variados elementos, muchos de ellos incluso ni siquiera indogermanos, y sinninguna unidad antropolgica. Con esta teora se explicara que, no obstante el carcterindogermnico de la lengua a caballo entre las lenguas germnicas y las itlicas e ilricas ypese al tipo antropolgico netamente nrdico de los esqueletos hallados en las grandes sepulturasde caudillos Clticos de la Champaa (segunda Edad del Hierro en Francia), en todos los

    territorios clticos abunden tipos antropolgicos variados y diversos. Bosch Gimpera pone en lapicota el excesivo dogmatismo de la escuela antropolgica francesa de Broca, que ha configuradoa los celtas como braquicfalos, tomando como sus indiscutibles representantes o sucesores a losbraquicfalos de la actual regin de la Auvernia, cuando lo ms probable es que dichos tiposraciales no sean otra cosa que los descendientes de los primitivos pobladores indgenas de aquellazona, antes de los movimientos y migraciones de los celtas.

    Entre los actuales tratadistas se suele considerar a los celtas como una subdivisin de loscaucsicos. Se describe a los sujetos de tipo cltico como gentes de cabello castao o rojizo, algomenos rubios y no tan dolicocfalos como los nrdicos puros, bastante altos y esbeltos, con ciertacaracterstica de agudeza en las facciones. Coon7, acertadamente, los cataloga como tipoperifrico de los nrdicos.

    Pero, raza o subraza, con unidad antropolgica o sin ella, fueran o no resultado de la fusin demuy variados elementos, los celtas tenan una naturaleza especial. Quines eran realmente?, sepregunta un historiador. Eran idnticos a los brbaros germanos de las invasiones de comienzosde la Edad Media? Eran teutones que emprendieron la aventura migratoria con mil aos deanticipacin?

    La mejor contestacin a todas estas preguntas slo puede ser dada por las obras y la ejecutoriade los propios celtas; por sus correras, sus instituciones y costumbres, su religin, su arte. Lostestimonios que dejaron de su paso por la historia demuestran, sin dejar lugar a dudas, que losceltas tenan una personalidad extraa y nica. El carcter y hasta los gustos de los celtas revelanun alma distinta, sin parangn posible con los de otros pueblos de la antigedad.

    5Pedro Bosch Gimpera:Las razas humanas. Captulo "Los pueblos de Europa". Barcelona, Instituto Gallach, 1956.6Jos de C. Serra-Rfols. Alberto del Castillo Yurrta.7S. C. Coon: Prehistoriador britnico; realiz excavaciones en Europa, frica del Norte y Afganistn.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    7/118

    7

    El origen de los celtas

    El proceso de las formaciones tnicas ha escrito Bosch Gimpera 8 parte de un estado enque la personalidad tnica no se halla todava definida, de lo que puede llamarse un estado fluido,

    con posibilidades de evolucin en diversos sentidos. Poco a poco se destacan grupos con unacierta personalidad embrionaria, que podramos considerar como una etapa de coagulacin, queva afirmndose hasta cristalizar en verdaderas familias de pueblos, o en pueblos en el sentidoestricto de la palabra.

    En el neo-eneoltico, segn el gran prehistoriador citado, y a travs de grandes perodos detiempo, aparecen ya formadas diversas familias tnicas. En el norte de frica han cristalizado yalos pueblos llamados camiticos, y en el Prximo Oriente las familias semtica y asinica.Entretanto, en Europa se han formado los pueblos denominados indoeuropeos.

    El parentesco de las lenguas indoeuropeas, junto con las analogas de las instituciones ycaracteres, hizo que muchos creyeran en la existencia de una gran familia tnica. Mientras que enel paleoltico o Edad de la Piedra las formaciones tnicas se hallaban todava en estado

    fluido, en el mesoltico perodo de transicin entre la piedra tallada y la piedra pulimentada,comenz la coagulacin de los pueblos europeos, cristalizando la familia indoeuropea. En eloccidente de Europa, la indoeuropeizacin cltica en frase del profesor Bosch Gimperaborr los sustratos tnicos anteriores, de los que subsistieron nicamente los pictos y los escotos,en el norte de Escocia. El centro y el norte de Europa qued indoeuropeizado, borrndose lasdiferencias tnicas y comenzando muy pronto la coagulacin, con algunos grupos ya en vas decristalizacin.

    Durante el pasado siglo estuvo de moda, por decirlo as, entre los prehistoriadores, la teora deun pueblo primitivo indoeuropeo al que se denominaba Urvolk, con una lengua primitiva,Ursprache, y una patria comn Urheimat. Schrader busc esta mtica patria originaria en lasregiones ntico-danubianas, Kossinna la persigui en el norte de Europa. De esta lengua y este

    pueblo primitivos segn sostena Schleicher9,

    en su divulgada hiptesis del rbolgenealgico se haba diferenciado un grupo occidental las lenguas del grupo centum, yotro oriental escitas y eslavos, con el grupo de lenguas satem.

    Hoy da, apenas hay ya nadie que sostenga esta simplificacin de gabinete. Schmidt hademostrado que la difusin de los fenmenos lingsticos indoeuropeos no solan seguir lasdirecciones del famoso rbol genealgico, y que a veces se haba difundido por oleadas, quepodan haber sido borradas por otras que se entrecruzaban, como el movimiento del oleajemartimo (Wellentheorie). Por otra parte, siempre fue extremadamente difcil localizar el sitio deaparicin de la lengua primitiva imaginada por los citados investigadores, as como el solar de lapatria originaria o Urheimat.

    Los antroplogos, buscando afanosamente un tipo indoeuropeo, ayudaron tambin a complicar

    las cosas. Durante un tiempo, pretendieron identificar este tipo antropolgico indoeuropeo con laraza nrdica alta estatura, ojos azules, pelo rubio, crneo dolicocfalo, etc.. Pero los hechos,esas cosas tan molestas e implacables, como dijo un humorista, no se prestaron a serdescoyuntados en el lecho de Procusto de las teoras. Sucedi que, entre los esqueletos deculturas supuestamente indoeuropeas, haba muchos de baja estatura y con crneos que nadatenan de nrdicos.

    8Pedro Bosch Gimpera: Prehistoria de Europa. Madrid, Ediciones Istmo, 1975.9August Schleichr:Die Sprachen Europas in systematischer Ubersicht. Bonn. 1848-1850.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    8/118

    8

    A mayor abundamiento, la quiebra de las hiptesis que identificaban a los indoeuropeos con laraza nrdica se precipit con las derivaciones polticas del pangermanismo y luego deltristemente famoso nazismo. Para los tericos del Tercer Reich, los arios eran un pueblo deguerreros y de seores Herrenvolk, que tenan perfecto derecho a imponer su dominio a las

    llamadas razas inferiores. Todo lo cual era un puro dislate, porque no se puede confundir a losindoeuropeos con los arios, puesto que los arios son los indoiranios que sos s se llamaban a smismos nobles y seores. Adems, no es exacto que los pueblos indoeuropeos hubiesen sidosiempre guerreros o pastores nmadas, ya que muchos de ellos Bosch Gimpera seala a losdanubianos fueron pacficos agricultores. Los descubrimientos arqueolgicos han evidenciadola imposibilidad de reducir todos los pueblos del neo-eneoltico, del centro, norte y este deEuropa, a un origen comn. Originariamente slo se pueden considerar como indoeuropeos a losgrupos danubianos, y al grupo de la cultura de los llamados vasos de embudo.

    Los movimientos de los pueblos de las estepas interrumpi la cristalizacin de losindoeuropeos del norte y del centro de Europa; proceso que se reanud en la Edad del Bronce. Yes precisamente en este perodo donde pueden encontrarse los antepasados de dos grandes

    pueblos indoeuropeos, que ya tienen nombre histrico: los celtas y los germanos.Los ms eminentes investigadores actuales de la Prehistoria estn de acuerdo en afirmar, porotra parte, que la indoeuropeizacin de la Europa occidental se produjo a lo largo de diversasetapas, que van desde el final de la Edad del Bronce, a la Edad del Hierro. En aquellos remotosdas, las expansiones y movimientos de los celtas borraron a los antiguos pueblos.

    La cultura de los tmulos

    La arqueologa ha rastreado las huellas de los pueblos celtas hasta lo ms profundo de la nochede los tiempos. Dentro de la Edad del Bronce, las llamadas culturas de los tmulos franceses y delos tmulos alemanes (Hgelgraberkultur), han sido atribuidas unnimemente a los pueblosclticos en proceso de formacin, que incidieron sobre los antiguos grupos indgenas de diversanaturaleza y los unificaron.

    En una obra reciente de Mara Gimbutas10, se agrupan las culturas del centro de Europa: lacultura Unetice de Checoslovaquia, la de los tmulos y, ya en la transicin a la Edad del Hierro,la cultura de los campos de urnas (Urnenfelder). En las dos ltimas est enraizado el origen ydesarrollo de los celtas.

    Aproximadamente entre los aos 1600 a 1300 a.C., se desarroll la cultura de los tmulos entierras de Alemania, estudiada concienzudamente por Reinecke y Schumacher. Se extendi porBaviera, el Palatinado superior y Bohemia, y luego pas a Francia. Hacia el oeste, entr enBlgica, el Franco Condado, Lorena, Borgoa y la regin de Langres, alcanzando hasta Charentey, Normanda. Por el norte, lleg a Holanda, Westfalia, el Harz, Austria, la meseta suiza yTuringia.

    Este perodo de los tmulos se puede denominar ya protocltico, lo que significa que losgrupos celtas estaban ya en trance de cristalizacin y fijacin definitiva. Los prehistoriadoresdividen la cultura de los tmulos en diferentes zonas: el Bajo Rin, Rin medio, Alsacia,Wrtemberg, Hessen, Luneburg, Baviera, Palatinado superior, etc. En muchos de estos enclaves

    10Mara Gimbutas:Brome Age Cultures in Central and Eastern Europe. Pars, 1965.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    9/118

    9

    geogrficos han aparecido poblados fortificados sobre las colinas, con sepulcros de inhumacinbajo tmulos. Los esqueletos descubiertos se hallan en posicin encogida. En la meseta de Suiza,el esqueleto se encuentra en ocasiones depositadas en atades construidos mediante el mtodo devaciar troncos de rboles.

    En este tipo de sepulturas se han encontrado enseres y armas, caractersticos de los inicios dela Edad del Bronce, a saber: puales triangulares sin mango, hachas planas con bordes salientes,brazaletes de lminas de bronce enrollados en espirales, espadas de lengeta con agujeros paraser adaptadas a las empuaduras, etc. En Checoslovaquia, Austria y Hungra se han hallado enlos tmulos espadas de empuadura maciza, ligeramente abombada. En las tumbas de mujeresabundan los ornamentos, collares de bronce adornados con espirales y cuentas de mbar,pectorales colgantes, alguno de ellos integrado por ocho cadenitas entrelazadas en espiral, etc.

    La cultura de los tmulos alemana se extendi hasta las tierras donde actualmente se asientanAustria, Hungra, Eslovaquia, e incluso Rumania.

    En el norte de Francia, y concretamente en la Bretaa, existen grandes tmulos, que pueden si-tuarse cronolgicamente en los comienzos de la Edad del Bronce. Paradjicamente, estos

    tmulos, de enormes proporciones, contienen sepulturas de menor tamao y pequeas cmaras,construidas con piedras secas y con una falsa cpula; as sucede, por ejemplo, en el de ManRumentur. En otros grandes tmulos situados por lo general en la costa atlntica, aparecencmaras muy reducidas, hechas con losas de piedra, o simples cofres, como en el del Mont-Saint-Michel. El mobiliario, que es el trmino usado por los arquelogos, no presenta las riquezas delos tmulos alemanes. Tan slo se encuentran flechas de slex, triangulares y muy alargadas, conanchas aletas que no terminan en punta, llamadas flechas armoricanas.

    La influencia centroeuropea se manifiesta poderosamente en los tmulos franceses de LeCheylounet (Haute-Loire) y Le Castello (Ctes-du-Nord), en los que las hachas de bronce de filosemicircular, las espadas cortas y los puales triangulares suponen una transicin hacia el perodopleno de la cultura de los tmulos. Ms tarde, en el grupo de sepulturas de Haguenau, en

    Alsacia, se encuentran ya vasos de forma esfrica y cuello cilndrico, con decoraciones mediantesurcos y acanalados detalle plenamente cltico. Tambin en la cuenca del Rdano existentumbas con abundante cermica, que presenta las tpicas decoraciones clticas de meandros,zigzags, espirales, etc. A este grupo pertenecen las sepulturas de Grotte du Cimetire, enTharaux, Baume Longue, en Dions, y Grotte Nicols, en Russan.

    En la poca de la cultura de los tmulos, penetraron en tierras francesas, desde Alemania, estu-pendas piezas de orfebrera: los macizos y extraos brazaletes de Vieux Bourg Quentin y deMazignon, en Ctes-du-Nord, las sortijas y brazaletes con espirales de Rongres (Allier), etc. Laforma espiral obsesion siempre al pueblo celta.

    En un profundo estanque de Nesny, en La Vende, se encontraron cucharas y varias tazas sinasas. Probablemente fueron arrojadas al agua durante el curso de una de aquellas ceremonias delas que trataremos ms adelante, en las que los celtas impetraban el favor de los dioses, mientrasentonaban cnticos religiosos y hacan sonar sus largas y curvadas trompetas, de posicinvertical.

    A partir del ao 1200 a.C., y en trminos de aproximacin, claro est, porque este tipo de cro-nologa se mueve siempre en un campo de imprecisiones, comenz a producirse un fenmenoproto-histrico importantsimo. La cultura de los tmulos se convirti, lentamente, en la culturade los campos de urnas, que los alemanes llaman Urnenfelder. En el centro de Europa hubograndes movimientos de pueblos, empujados, yo me atrevera a decir que electrizados, por unaraza que iba a realizar cosas asombrosas y a crear una leyenda imperecedera. Los celtas van

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    10/118

    10

    saliendo de las nieblas de la Prehistoria y van adquiriendo forma ante nuestra mirada atnita. Enel seco lenguaje de los investigadores, se dice que los celtas estaban asentados ya en la Europacentral, y que haban cristalizado, surgiendo de una amalgama de antiguos pueblos.

    Nos imaginamos a los celtas alegres, poticos, crdulos, valientes, indisciplinados, amables,

    indolentes y tercos, como los ha definido un historiador, pugnando por salir de las filasannimas de la Humanidad y por situarse en primer trmino en calidad de protagonistas.

    Los campos de urnas

    Toda esta parte de nuestro estudio es como una gran danza de la muerte. Para saber cmovivieron los hombres de aquellas remotas edades hemos de observar la forma en que fueroninhumados. La muerte nos ha dejado testimonios slidos, ptreos, indelebles. La vida ha de serimaginada, reconstruida idealmente sobre la base de los hallazgos arqueolgicos.

    En la cultura de los tmulos, los cadveres eran sepultados en tumbas, de mayor o menortamao, en cmaras, cofres o troncos de rbol ahuecados. Se les rodeaba de objetos y de armaspara afrontar el gran viaje, A veces eran colocados horizontalmente, en otras ocasiones quedabanen extraas posiciones encogidas. Luego se alzaba sobre la sepultura un imponente dosel depiedra.

    En la cultura de las urnas, que se generaliz por casi todo el continente, prevaleci laincineracin, que no es, desde luego, un invento moderno. Los cadveres eran quemados y suscenizas puestas en urnas, que se enterraban en hoyos no muy profundos. Una macabra siembra deurnas cubri los campos de Europa. Los Urnenfelder son grandes cementerios en los que, decuando en cuando aparece algn tmulo conmemorativo. Generalmente, cerca de estoscementerios encontramos grandes plataformas de piedra, donde los cuerpos eran previamentequemados. Y no lejos de los Urnenfelder, sobre algn cerro, aparecen las moradas de los vivos,rodeadas de fosos defensivos. Estas defensas, tpicas de la cultura cltica, tienen forma de anillo yhan sido denominadasRingwall.

    Behrens ha estudiado y catalogado la forma de esas urnas. Las ms generalizadas tienen elcuello cilndrico, con borde plano. El cuerpo es de forma globular o bicnica. Otras son bicnicaso esferoidales, sin cuello, pero con un borde saliente y la abertura muy ancha. Los pies de lasurnas suelen ser muy estrechos, y junto a ellas no faltan nunca los platos troncocnicos, que seutilizaban como tapaderas.

    Los motivos decorativos de las urnas suelen ser anchos surcos paralelos, acanalados, a vecesformando semicrculos, y situados normalmente en el cuello de la vasija. A menudo no existemobiliario alguno, al revs de lo que suceda en los tmulos. Pero tambin se han halladoespadas de bronce, de lengeta o de empuadura maciza, cuchillos curvados, agujas con una raracabeza en forma de vaso y hachas tubulares. Todo ello en bronce; el hierro brilla por su ausencia,aunque en realidad esta cultura de los Urnenfelder es ya un perodo de transicin a la nueva Edaddel Hierro. Segn Bosch Gimpera, la excepcin se da en Catalua, en la necrpolis de CanMissert, de Tarrasa.

    Los campos de urnas no son, empero, privativos de los celtas. Se dan tambin en la llamadacultura de Lusacia, situada al este de Europa, que al infiltrarse por Austria, Hungra y Moraviaorigin, probablemente, desplazamientos de los grupos clticos hacia el sur y hacia Italia.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    11/118

    Sobre el mapa de Europa, la expansin de los campos de urnas funerarias dibuja un inmensocuadrado, algo ladeado hacia el oeste, y con el lado superior paralelo a la costa atlntica deFrancia, los Pases Bajos y Alemania. El lado sur se proyecta desde el estrecho de Mesina, alfinal de la bota italiana, hasta el mar Negro. Pero se han hallado campos de urnas fuera de estaslindes. Los arquelogos distinguen varios grupos regionales, con ciertas diferenciaciones: el deBohemia, el de Hungra, el del Palatinado bvaro, el del Tirol septentrional, el de Badn, el deSuiza, el del norte de Italia, el de la cuenca del Danubio, el del Mosela, el de Lorena, los deBlgica y Holanda, etc.

    11

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    12/118

    En Oldenburg y Hannover se han encontrado urnas funerarias con unos extraos dibujos,

    estudiados concienzudamente por Hoernes, pero cuyo significado no est muy claro. Son figurashumanas, con brazos, piernas y una cabeza diminuta. Suelen llevar los brazos alzados y abiertos,

    o bien sujetando algn objeto inidentificable. Pero lo ms curioso es el cuerpo, o vestido, de lasfiguras, compuesto por un tringulo regular con crculos pintados o una especie de cuadriculados.

    La gran expansin de los campos de urnas es una clara demostracin de la prosperidad y,

    paradjicamente, de la vitalidad de los pueblos clticos que los crearon. Es evidente que los celtashicieron retroceder los lmites de los germanos hasta el norte del ro Elba. Para algunosprehistoriadores, los celtas llegaron hasta aquellas regiones septentrionales en busca de losmercados de mbar, que codiciaban grandemente.

    Hacia el sur, la cultura de los Urnenfelder se derram por toda Francia. Hay necrpolis enSaboya, Borgoa, Saone-et-Loire, Allier, Languedoc, Toulouse. Haut-Garonne, PyrenesOrientales, etc.

    Los pueblos clticos de las urnas funerarias llegaron al Valle de Aran (necrpolis del Pa deBeret, prxima a Salard) y a Navarra (necrpolis de Cortes). Parece ser que penetraron enCatalua por el camino del Perthus (necrpolis de Agullana) y por el puerto de Bauls(necrpolis de Vilars). Se han hallado campos de urnas en la Punta del Pi y en las cuevas del

    Mont Bufadors, cerca de Port de la Selva; en Parrali (La Escala); en la Bauma de Can Eures(Perafita), en Can Roqueta, Sabadell, y en otros lugares.La ms importante de estas necrpolis es, sin duda alguna, la de Can Missert, de Tarrasa. Pero

    los pueblos de las urnas penetraron ms a fondo en la regin catalana. Alcanzaron las comarcasdel Alto Llobregat, (Santa Maria de Marls), la Cerdaa, el Pallars, el Peneds (Vilafranca),Tarragona (Cornudella), las mrgenes del Ebro (con el importante hallazgo de la Cova den Janet,en Tivissa; y el poblado del Molar). En Lrida aparece el poblado de Guissona y la necrpolis deLlardecans; en Huesca, el sepulcro de Presiena, etc.

    12

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    13/118

    Bosch Gimpera hace notar que en Catalua y Navarra existen nombres toponmicosterminados en -du(dunum, equivalente a castillo), de claro origen celta: As, por ejemplo: Verd,Salard, Besal, Navard. Tambin tienen procedencia cltica indudable Cogolls, Cogs, LaCogullada, y los nombres terminados en -ac(-acum), como Reixac, Masarac, Vulpellac, etctera.

    Perafita, o sea piedra que seala lmite o frontera, procedente igualmente de los celtas. Se

    encuentra justo donde terminaba en Catalua el territorio de la tribu de los bergistanos, y en lalinde entre ausetanos y laietanos. En cuanto al resto de Espaa, los nombres que establecenfronteras entre las tribus de los celtas son frecuentes: Piedrahta, El Hito, Cofial.

    Los prehistoriadores han rastreado y fijado, a todo lo ancho de la cultura de los campos deurnas, varios nombres de tribus clticas. Veamos algunos de tales nombres. Los bibroci, queostentaban, como muchos celtas, una denominacin totmica (el pueblo del castor), y que fueronencontrados por Anbal en los Pirineos Orientales cuando marchaba contra Roma. Los lemovices,de Limoges, en Francia, que en tierras alemanas se denominaban lemovii, y que Tcito menciona.Los menapios, de Blgica; los ambrones, de Jutlandia; y posiblemente los rauracosy sequanos,de Francia.

    Es evidente que, en la poca de los campos de urnas funerarias, los pueblos clticos haban

    conseguido ya una cultura notablemente desarrollada, y estaban bien organizados poltica ysocialmente. Henri Hubert11 afirma que la importancia y el podero de los celtas en aquelloslejanos das se deducen de la introduccin y aclimatacin de muchas palabras celtas entre lospueblos germanos, como rey, embajador, rehn, juramento, y varios otros nombresrelativos al contrato matrimonial, a las alianzas y federaciones entre tribus, y al comercio.

    13

    11Henri Hubert:Los germanos. Mxico, UTEHA, 1955.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    14/118

    14

    Las tribus clticas en la pocade la cultura Hallstatt

    En el centro de Europa, durante la primera Edad del Hierro, floreci la cultura que se ha

    denominado de Hallstatt. Los investigadores establecen su momento de apogeo entre los aos800 y 700 a.C., y un perodo posterior que va desde el 700 hasta el 500. Reinecke, cuyacronologa difiere de la de otros autores, denomina a estas dos etapas Hallstatt C y Hallstatt D,aplicando los trminos de Hallstatt A y B a la anterior cultura de las urnas.

    En todo caso, es incuestionable que el centro y hogar de la cultura Hallstatt radic en Austria ylas regiones limtrofes de Hungra. La explotacin de las minas de cobre de Mitterberg, y de lasminas de sal gema de Salzkammergut y Hallstatt que ha dado nombre a esta cultura,permitieron un floreciente y activo comercio con los pueblos de Italia etruscos, y hasta conlos griegos.

    Caractersticas de los pueblos clticos de Hallstatt son las ciudades fortificadas, algunas deellas fuera de los lmites de Austria, como la de Heuneburg, en Badn, prxima a Sigmaringen,

    con bastiones cuadrados que se proyectan fuera del muro, construido todo ello a base de ladrillos.La necrpolis ms importante de esta cultura es la del mismo Hallstatt, que contena ms de

    dos mil sepulturas. Debajo de los cadveres fueron hallados restos de maderas. Algunos de lossarcfagos son de tierra cocida, denominados baeras por los arquelogos. Con frecuencia, enuna misma sepultura se renen dos o ms cadveres; en ocasiones hasta seis. Lo extrao es queapenas se hallan enterramientos de mujeres o de nios.

    Junto a las tumbas aparecen espadas, largas y cortas, correspondientes a perodos distintos,con la empuadura en forma de seta e incrustaciones de oro. Las vainas de estas armas sontambin de gran riqueza y netamente clticas.

    Del estudio detenido de estas tumbas, principalmente de las de Klein-Klein, en Estiria, losprehistoriadores deducen la existencia de una sociedad estratificada, con unas clases superiores

    de prncipes y guerreros, y otras inferiores de agricultores y mineros. G. Clark ha reconstruidogrficamente el poblado de Wasseburg Buchaum, en Wrtemberg, que debi estar ntegramentededicado a la agricultura y a la complementaria ganadera.

    Se ha observado tambin que slo las sepulturas de gentes de las clases superiores contienenarmas, y an no todas. Pero abundan la cermica, los cuchillos de bronce y de hierro, las fbulas,etc.

    La altura fortificada de Sopron, Oedenburg, contiene unos doscientos tmulos, con algunasurnas parecidas a las de los Urnenfelder. Hemos hablado ya anteriormente de las extraas figurasde algunas urnas, con cuerpo y vestido de forma triangular. En otras aparecen parejas humanas,jinetes cazando ciervos, hombres tocando el arpa, mujeres orando, carros agrcolas de cuatroruedas, etc. En una tumba de Strettweg, de Estiria, se encontr un objeto de bronce muy raro.

    Consiste en una plataforma cuadrada, provista de cuatro ruedas, y sobre la cual hay varias figurashumanas. En el centro de la plataforma, y por entre los personajes, se alza un soporte rematadopor un disco.

    En las sepulturas de Vace, en la Eslovenia yugoslava, se han hallado frisos con escenasdomsticas, muy bien desarrolladas, combates, y hasta un verdadero encuentro pugilstico. Y enHesse, en la regin forestal de Langen, cerca de Francfort del Main, ha aparecido unafortificacin bastante complicada, a base de fosos y vallas de tierra, destinado todo ello, segnparece, a proteger los sepulcros del centro.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    15/118

    15

    Se supone que todos los dispositivos defensivos, que tanto abundan en la poca Hallstatt,estaban destinados a detener las tremendas invasiones de los pueblos cimmerios, que procedande Ucrania, y posteriormente, por las incursiones guerreras de los escitas, tambin venidas deleste de Europa. Como puede observarse, la historia se repite a lo largo de los siglos. Recordemos

    la genial frase del gran Tcito, al principio de su Germania: Toda la Germania est separada delas Galias, de Retia y de Panonia, por el Rin y el Danubio; de Sarmatia y de Dacia, [ahoradiramos Rusia y la Europa oriental], por algunos montes y por el mutuo temor...

    Del mismo modo que la cultura de las urnas, en la poca de Hallstatt tambin puedenidentificarse los nombres de varias tribus clticas. Los prehistoriadores se han esforzado enreconstruir los grupos celtas, ya cristalizados y fijados en dicha cultura. Pero hay que tener encuenta que los nombres de dichas tribus nos han venido por fuentes muy posteriores. No obstante,la arqueologa ha hecho retroceder la historia de los celtas en ms de cinco siglos. Tngase encuenta que el primero en hablar de esta raza, es Herodoto, en el siglo Va. C.

    En la Alta Austria podemos localizar las tribus de los tauriscosy de los ambisontes; en Estirialos amhidravi; en Carintia, los carni; en el sur de Austria, lospannoni, los osiy los aravisci.

    En tierras alemanas estuvieron asentados los boios, al sur del Main, sobre ellos estaban lossantones; al norte de Badn los helvecios, que all tuvieron su solar originario antes de pasar a laactual Suiza; en Wrtemberg los vindelictos; en el Ruhr los insubrios y los rauracos; en laconfluencia del Rin y el Mosela, los bituriges; junto a la frontera de Holanda, los pelendones,entre otros varios.

    Los grandes movimientos delos celtas hacia Occidente

    Los pueblos celtas eran ya, de por s, inquietos y andariegos. No permanecieron mucho tiempoen los lugares de origen, donde cristaliz la raza, para usar un trmino caro a losprehistoriadores. Pero las presiones de los pueblos del este de Europa y luego las de los germanosles empujaron hacia el Occidente, en la poca de la cultura Hallstatt.

    Algunas tribus clticas, en sus movimientos migratorios, se cuartearon y dividieron, debido alo cual encontramos sus huellas en zonas muy separadas entre s. Los bibroci, de los que ya noshemos ocupado, se bifurcaron hacia las tierras de Francia, dejando rastros de nombrestoponmicos entre el Aisne y el Oise, y en Dijon. Uno de sus grupos pas a Inglaterra y seestableci junto al Tmesis, al oeste de Londres. Tambin llegaron a la Bretaa francesa y aIrlanda. Varios clanes de los bibroci, que tenan como ttem protector al castor, llegaron hasta elRosselln y levantaron sus poblados en la regin del Conflent, donde, como ya hemos indicado,

    Anbal los encontr en su celebrrima marcha contra Roma. Parece ser que algunos bibrocientraron en Catalua y siguieron descendiendo hasta el Maestrazgo.Los senonesbajaron hasta el Sena y hasta el actual emplazamiento de Pars desde las regiones

    selvticas de las Ardenas y los Vosgos, mientras los sequenosse extendan desde Suiza al FrancoCondado.

    Un verdadero puzzle de tribus clticas de Alemania, se dirigi a regiones ms al sur y ms aloeste.

    Los nemetes se asentaron en Nemours; los aulercos llegaron a Orlans y a Chartres; los

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    16/118

    16

    turonesdieron nombre a la Turena; los eduosse dirigieron a Borgoa, los segusiavosa Lyon; losalbrogosse quedaron en la Saboya y el Delfinado.

    Las tribus de los voconcios levantaron su hbitat en la orilla izquierda del Rdano; mientraslos arveni escogan las tierras de la Auvernia, a la que dieron el nombre, los petrocorii se

    asentaban en el Perigord.En el sur de Francia se produjo una mezcla de las poblaciones indgenas preclticas con lastribus migratorias. En la Gascua aparecen los tarusates, en Tarbes, los tarbellii, en Toulouse, lostolosates, que son, probablemente, grupos pirenaicos celtizados.

    En la segunda Edad del Hierro, los voleos conquistaron la Provenza y el Languedoc. En elmismo perodo las tribus celtas de los belgas se extendieron hasta el Sena y el Marne. Luego,probablemente inquietados por los germanos, se movieron hacia el sur, marcando el camino deposteriores invasiones. Siguieron la ruta Pars-Poitiers-Angulema-Burdeos-las Landas-Barn,hasta alcanzar los pasos del Pirineo vasco. Desde estos pasos siguieron el camino de Pamplona-Vitoria-Miranda de Ebro, hasta llegar a la meseta castellano-aragonesa. Parece que algunospequeos grupos belgas penetraron hasta tierras extremeas.

    Algunos de los grupos belgas no eran de sangre celta pura, por haber entroncado con losgermanos. Ya Julio Csar, con su proverbial perspicacia, dice que los belgas se distinguen de losrestantes celtas de la Galia, por tener mezcla de sangre germnica. Entre estas tribus figuran loseburones, los segni, los poemaniy los condrusii, establecidos cerca de la costa de Flandes, losnervii, de la regin de Bruselas, y los tungri, del norte de Blgica, son tambin tribus mixtas. Esun hecho curioso que el actual territorio de Blgica de habla flamenca coincide con las zonashasta las que lleg la penetracin germnica.

    Es evidente que los celtas de la tribu belga eran grandes viajeros. Uno de sus grupos, loscassi, pas el canal de la Mancha y lleg hasta Irlanda. En antiguas leyendas irlandesas se hablade los Fir Bolges decir hombres belgas. El denominativo irlands de Eire parece ser quederiva de otro clan belga, los iverni, que con los bibrociy los menapiosgrupos pregermnicos

    de Holanda, arribaron a la Verde Ern a finales de la poca de Hallstatt. Hay que sealar quetambin en Irlanda anduvieron entreverados los pueblos clticos y los germanos. El clan Clan-na-Morna, perteneciente a los mencionados Fir Bolgu hombres belgas estaba constituido por losmorini, germanos desplazados del norte de Blgica, que se haban mezclado con elementosceltas.

    En el norte de Francia ha podido registrarse igualmente el paso de las tribus belgas. EnAmiens (Bajo Somme) se establecieron los ambiani; por la costa, hasta la desembocadura delSena merodearon los caletes, y algo ms hacia el interior vivieron los veliocasses. Entroncadoscon estos ltimos figuran los cassi, que como ya hemos dicho, cruzaron el canal de la Mancha yse extendieron por el sur de Inglaterra y por Irlanda.

    En otras regiones francesas han sido identificados, tambin, grupos de celtas belgas, como losbellovacien Beauvais, los viromanduien las riberas del Oise y los suessionesdonde actualmentese levanta Soissons. Para Bosch Gimpera es muy probable que fueran igualmente belgas losautrigones, que desde Francia, y en considerables contingentes, pasaron a Espaa.

    Despus de las migraciones de los pueblos belgas, que ya hemos descrito aunquesomeramente, y cuando las presiones y las infiltraciones de los germanos en tierras clticashubieron remitido, el continente europeo tuvo un par de siglos de relativa calma. En el perodoque va desde el siglo VIal Va.C., parece como si los hombres estuvieran un poco cansados deluchas y de correras, como si la sangre cltica y la sangre germnica motores de tantasagitaciones en la larga historia de Europa, se hubieran enfriado sensiblemente.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    17/118

    17

    La frontera cltico-germana fue fortificada en evitacin de posibles invasiones. Anteriormente,en la poca de la cultura llamada del EifelHunsrck, en el este de Francia, se haban dispuesto yafortificaciones en Lorena, Mosela superior y Borgoa, abandonadas en el siglo VI. Luego seestableci una nueva lnea de fortalezas defensivas a lo largo de las Ardenas, Eifel, Westerwald y

    Taunus, continuada por la parte oriental del Vogelsberg y al sur del Thringer Wald. Los celtasde Francia vivieron durante largo tiempo en granjas y poblaciones abiertas de escaso nmero dehabitantes. Pero al producirse nuevas tensiones con las tribus germnicas prximas, las viejasfortificaciones fueron ocupadas otra vez y hasta se construyeron algunas nuevas. En algunas deestas oppida o fortalezas se puede apreciar la superposicin de dos construcciones, como porejemplo, en Fort Harrouard, Normanda.

    Ya es sabido que, en tiempos de paz, florecen la cultura y las artes. Entre los siglos VIy Vaparecen en Francia los llamados sepulcros de prncipes (Frstengraber), en Turena y en lastierras clticas del Rin, as como en ciertas regiones de Suiza y de Alemania.

    En la cultura final del perodo Hallstatt, y en una transicin hacia la segunda Edad de Hierro,es decir, la cultura de La Tne que examinaremos luego, llegan al mundo cltico muchos

    objetos procedentes del comercio con los griegos, e incluso del mundo etrusco. Marsella, fundadaya all por el ao 1600, es el eje de tales relaciones comerciales.Por tierras de Francia, las rutas mercantiles a lo largo del Rdano se bifurcan en Lyon.Una

    ruta va hacia el interior de Francia y la otra se remonta hacia Suiza. En el Periplo Masaliota12sedescribe el curso superior del Rdano hasta el lago Leman, y se menciona una ruta de mercaderesque, partiendo de Narbona, remontaba el ro Garona llegando a la regin de Burdeos, en la costaatlntica. En dicha costa, ms al norte, se asentaba el mercado de estao de las islasOestrmnidas, de Bretaa. Los celtas seguan este derrotero martimo, y tambin los tartesios, queiban a comprar el metal de Cornualles.

    No cabe duda de que los celtas hispanos, sobre todo los de la regin gallega, frecuentaban losmercados bretones, como se demuestra por las semejanzas notorias entre la cermica y a lgunos

    objetos de la Pennsula Ibrica y de la Bretaa. Algunos historiadores, como Taracena

    13

    , hansealado el parecido extraordinario entre los castros o poblados de Soria con piedras hincadasa modo de glacis defensivo, y algunos hill forts de Irlanda.

    Todo este movimiento comercial queda evidenciado en los hallazgos efectuados en la costa deProvenza, hasta Narbona. En las cercanas de Marsella se han encontrado piezas jnicas, enNarbona cermica corintia y etrusca, en Montlaurs cermica tica con figuras negras, en el valledel Rdano bronces griegos, etctera.

    El descubrimiento ms importante en este sentido tuvo lugar en Vix (Chatillon-sur-Seme), enla Cte-dOr. Cerca de un oppidumo poblado fortificado, de los ltimos tiempos de la culturaHallstatt, apareci una gran tumba, con un tmulo de piedras de cuarenta y dos metros dedimetro por unos seis de alto. En la cmara funeraria, medio excavada en el suelo y cubierta porentablado de madera, se hallaron objetos hallsttticos junto a fragmentos de cermica tica defiguras negras. En uno de los ngulos de la cmara haba una gran crtera o recipiente de bronce,de ms de metro y medio. En el centro de la tapadera que la cubra apareci la estatuilla de unamujer cubierta con un manto. La figurita es de gran belleza y se supone que puede tratarse de ladiosa Artemisa, que en Siracusa simbolizaba a la patrona de los caballos de batalla. Adems de la

    12Se denomina Periplo Masaliota al relato del viaje de Piteas de Marsella, por las costas occidentales de Europa yhasta el mar Bltico. Masalia o Massalia es el antiguo nombre de Marsella.13B. Taracena: Tribus celtibricas: Pelendones. Homenaje a Martins Sarmento, 1933.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    18/118

    crtera, haba en el recinto copas de plata, copas ticas, jofainas de bronce y, alineadas en lapared opuesta, cuatro ruedas de carro con sus tambores.

    Justo en el centro de la cmara mortuoria se encontr un esqueleto humano femenino,correspondiente a una mujer de unos treinta y tantos aos, ricamente enjoyada. En la cabezaostentaba una diadema de oro, sobre el abdomen un gran collar de bronce, brazaletes de perlas dembar y de pizarra, torques y anillos en los tobillos, etc. Los restos de la llamada Dama de Vixdebieron haber sido sepultados sobre la caja del carro, ya muy destrozado, que corresponda a lasmencionadas ruedas. Los adornos de la crtera y las figuras de hoplitas y cuadrigas pertenecen,sin duda alguna, al arte griego arcaico. Los investigadores han argumentado que dicho recipientepudo haber sido fabricado en Laconia, o en alguna colonia griega de Italia, posiblemente Tarento.

    18

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    19/118

    19

    2

    LA CULTURA DE LA TNE

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    20/118

    20

    La TneLa Tne es una antigua poblacin, actualmente deshabitada, situada junto al lago de

    Neuchtel, en Suiza. Los prehistoriadores discuten todava si era un verdadero palafito esdecir, si tena caractersticas totalmente lacustres y estaba asentada sobre una plataformasoportada por pilastras, o si estaba en tierra firme, constituyendo una minscula pennsularodeada de agua por slo tres de sus lados. En los lagos de Suiza y del norte de Italia abundanestos palafitos, Pfahlbauten, algunos de los cuales tenan bastante cabida y permitan albergar aun considerable nmero de habitantes. El de Hagneck, que es prototpico, est enclavado cerca dela orilla, en el lago de Bienne, y se comunica con el exterior por un puente o malecn de sesentametros de largo.

    En todo caso, se trata sin duda de un puesto militar, en un paraje estratgico, muy bienescogido desde el punto de vista de la defensa, un oppidum helvtico, como lo ha definidoGross. Poco antes de nuestra era, segn las ltimas apreciaciones, y despus de una existencia deunos cuatrocientos aos, fue abandonado y destruido.

    Algn historiador ha insinuado la hiptesis de que podra tratarse de lo que el doctor Keller hadenominado viviendas enfajinadas, frecuentes tambin en los lagos de Suiza y parecidas a lasfortificaciones de los galos que describe Julio Csar, o a los tpicos crannogs de Irlanda y deEscocia. En ellos, la plataforma base descansaba sobre fajinas amontonadas y sumergidas en elagua.

    Desde mediados del pasado siglo se han venido recogiendo, y estudiando, materialesarqueolgicos procedentes del antiqusimo poblado de La Tne. Sin embargo, los mayoresdescubrimientos, que dieron pie a los ms profundos anlisis, datan de los aos 1907 a 1917. Nosreferimos a los trabajos inapreciables de Vouga y Wavre. De ellos, los estudiosos han deducidoque La Tne estuvo habitada por un grupo militar celta, que impona su autoridad a placer sobreel territorio cercano, y que obligaba a cuantos pasaban por all a pagar el peaje del ro Rdano alRin. En efecto, al norte de La Tne las aguas se dirigen hacia el lago de Thoune y, en unasegunda fase, hacia el Rin. Por otra parte, las del lago de Neuchtel entroncan con el lago deGinebra, y desde l con el Rdano.

    Como ha dicho un autor, los celtas no tenan un ritual, un estilo fijo de urbanizacin, como porejemplo, los etruscos y los romanos. Puesto que solan ser minora en las tierras que ocupaban oinvadan, se vean obligados, por puro instinto defensivo o de conservacin, a protegerse conmurallas o con el astuto sistema de construir sus viviendas dentro del agua; esto es, los palafitos.Naturalmente, estos tipos de hbitat no eran exclusivos de la raza cltica. Otros pueblosprehistricos los utilizaron, e incluso en la actualidad siguen hacindolo algunos pueblosaborgenes.

    Los celtas adoptaron las edificaciones lacustres, como es obvio, en los lugares que seprestaban a ello, como Suiza y el norte de Italia. En otros terrenos, secos y pedregosos, comoEspaa, es decir, la Iberia de entonces, o la Galia, construan poblados sobre colinas y losfortificaban concienzudamente.

    Ahora bien, de los palafitos celtas nos han llegado, a travs de los tiempos, muchos msobjetos arqueolgicos que de los poblados. Los fortines clticos de las colinas, tpicos de la

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    21/118

    21

    Pennsula Ibrica y de Francia, fueron saqueados y quemados por los romanos maestros enestos menesteres, y luego por las restantes razas guerreras. Apenas quedaron reliquias declase alguna en las que el futuro historiador pudiera hincar el diente de su curiosidad cientfica.En cambio, de los palafitos cayeron al agua de los lagos y se hundieron en el cieno, da tras da,

    enseres, armas, objetos de la vida comn y corriente. Y el cieno los conserv para delicia de losarquelogos modernos. Los conserv, todo hay que decirlo, incluso mejor que el aire, que oxidael hierro implacablemente.

    He aqu cmo la estacin lacustre de La Tne representa el apogeo de esa edad. Haba recibidoinfluencia escita por medio de la cultura de Hallstatt, griega a travs de Massilia (es decir,Marsella, a lo largo del Rdano), y etrusca a lo largo del ro Po (ruta de los argonautas).

    Desde La Tne, la cultura cltica irradi en todos los sentidos de la rosa de los vientos: HaciaBohemia, hacia las Islas Britnicas, hacia Francia, la Pennsula Ibrica, etc. Incluso en Grecia yen Asia Menor se encuentran fbulas de La Tne. La industria prehistrica de este pobladoimprimi un peculiar sello al segundo perodo de la Edad del Hierro. Cabe aadir, tambin, queesta cultura presenta muchas semejanzas con la aportacin cultural de los galos en la cuenca del

    Marne.Tischler1ha dividido la cultura de La Tne en tres grandes perodos, a saber: La Tne I, II yIII, basndose en la forma y caractersticas de los objetos hallados, principal y esencialmente lasespadas y las fbulas (agujas imperdibles).

    La Tne del primer perodo presenta espadas de hierro, con espiga y vaina de bronce. En lasfbulas aparece una pequea cabeza de animal y un pie alto.

    En el segundo perodo la vaina de la espada no tiene anilla, sino un simple reborde adherido alcuerpo de la vaina. Las fbulas se aproximan ms a la forma de arco.

    Finalmente, el tercer perodo nos proporciona unas espadas con la vaina formada portravesaos de hierro, y la contera redondeada. En las fbulas, el pie se une al arco, formando unsolo cuerpo y terminando, por lo comn, con una cabeza de serpiente.

    Estos tres perodos de La Tne se sitan, aproximadamente, en los aos 500, 300 y 100 a.C.No obstante, Reinecke2se inclina por la divisin en cuatro perodos, que enumera A, B, C y D.En realidad se trata de la misma sistematizacin de Tischler, pero con el perodo I subdividido endos etapas.

    Las espadas y los cascos celtas

    Parece ser que este enjambre de gentes y de tribus diversas a las que llamamos celtas,permaneci establecido en la Europa Central desde los primeros das de la poca neoltica. En laEuropa infrapoblada del segundo milenio antes de la era cristiana, las diversas tribus celtasvivan, aletargadas, en las tierras que modernamente han constituido la nacin alemana. Hacia elfinal de la Edad del Bronce, como ha explicado elocuentemente Schaeffer3, Europa disfrut de unraro y largo perodo de paz. En los tmulos funerarios de la regin de Hagenau, en Alsacia,

    1Prehistoriador y arquelogo alemn. Realiz estudios sobre La Tne, y en especial sobre la evolucin de las fbulasencontradas all.2P. Reinecke:Zur Chronologie der zweinten Biilfte des Bronzealters. Leipzig, 1902.3F. A. Schaeffer:Les tertres funraires prhistoriques dans la Foret de Hagenau. Pars, 1926.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    22/118

    22

    correspondientes a la mencionada Edad del Bronce, apenas si se encuentran armas. En realidadno haba enemigos, ni guerras. Para qu hacan falta las espadas?

    Pero, de pronto, en medio de estas gentes, ms entregadas a la pacfica agricultura que a otracosa, comenzaron a moverse grupos de soldados y guerreros. Eran los celtas, inicialmente

    tambin dados al cultivo de la tierra y al pastoreo, pero que rechazaron la vida sedentaria. Comoel halcn sobre su presa, los aguerridos celtas cayeron sobre los ilirios, los latinos, los ligures, losiberos, etc. Avanzaron y retrocedieron, lucharon con varia fortuna, saquearon Roma y hasta elsantuario de Delfos, llegaron a regiones casi remotas, dada la poca, como Irlanda, Hispania yAsia Menor.

    Ignoramos todava, pese a la copiosa bibliografa y al notorio avance de la arqueologa, siestos celtas inquietos y luchadores constituan un tipo tnico nico o eran una aglomeracincircunstancial de varias razas. Parece que no exista una absoluta unidad tnica. Algunos celtasfueron, al parecer, braquicfalos y morenos, mientras qu otros eran dolicocfalos y rubios. En elPas de Gales abundaban los morenos y en Irlanda predominaron los rubios. Sin embargo exista,claro est, lo que hoy llamaramos el tipo estndard.Para los romanos un celta tena que ser,

    reglamentariamente, muy rubio y muy alto. Suetonio

    4

    , que no tena pelos en la lengua y leagradaba poner a los divinizados Csares como chupa de dmine, cuenta que Calgula, paracelebrar una imaginaria campaa contra los germanos y los celtas, haba mandado traer a unoscuantos cautivos galos, de gran talla, y les haba hecho teir el cabello del color del trigo maduro.

    Pero, con unidad tnica o sin ella, los pueblos clticos tenan una lengua uniforme, o una seriede formas lingsticas esencialmente semejantes. Las inscripciones celtas confirman esa unidaddel lenguaje. No obstante, aparecen ciertas diferencias en el habla de los celtas de distintasregiones: Galia, Hispania, Italia, etc. Son diferencias de menor cuanta escribe con gracejoPijoan5, pero a veces originan confusin. Acaso la ms importante de estas malasinterpretaciones es la que se encuentra en las primeras lneas de los Comentarios de Julio Csar,al describir sus guerras con los celtas de la Galia. Dice, o parece decir, que los habitantes del

    norte de Francia se llamaban a s mismos celtas, pero que los romanos les llamaban galos: Quiipsorum lingua Celtae riostra Galli appellantur.Se han hecho infinidad de suposiciones sigue diciendo Pijoan para explicar la

    etimologa de la voz celta, todas descabelladas, y an ms para explicar la voz galo. Pero logracioso es que, finalmente, nos hemos dado cuenta de que celta o galo son dos variantesdialectales de una misma palabra; mejor dicho, dos pronunciaciones provinciales de una mismavoz, y que, hasta es probable que, lo que Csar quiso decir, en buen latn, es que lo que losbrbaros pronuncian celta, los romanos lo pronuncian galo.

    El temperamento inquieto, aventurero y aguerrido de los celtas les una por encima de la raza,de la lengua y de la distancia. En todas las ruinas arqueolgicas de los celtas y, desde luego, enLa Tne se encuentran armas y principalmente espadas.

    La mayor parte de los objetos descubiertos por Vouga6 y Wavre, desde 1907 a 1917, en elpoblado de La Tne, fueron espadas. El xido y el moho las haban adherido de tal manera a lavaina que fue prcticamente imposible separar ambas partes. Los mangos y empuaduras, quedebieron ser de madera, desaparecieron rodos por el tiempo implacable. Del fondo de las vainassale el fleje o punzn de hierro que penetraba en el puo de la espada. La caracterstica de tales

    4Cayo Suetonio Tranquilo:Los doce Csares.5Jos Pijoan: Summa Artis tomo VI Madrid, Espasa Calpe, 1953.6P. Vouga:La Tne.Neuchtel, 1923.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    23/118

    23

    espadas es su extraordinaria longitud. Las espadas de La Tne contrastan con las cortas espadasde bronce de la cultura de Hallstatt. Parece probado que los celtas de La Tne se aprovecharon, eincautaron, de las antiguas fundiciones que otras tribus con conocimientos metalrgicos habaninstalado en los prximos montes del Jura.

    La larga espada de hierro debi ser uno de los motivos de las fulgurantes victorias clticas. Suarma secreta, como diramos ahora. El historiador romano Polibio, cuando describe la campaadel cnsul Cayo Flaminio contra los celtas insubres, o insubros que fueron los primeros encruzar los Alpes, establecindose en la Galia Transpadana, en Mediolanium (Miln) all por elao 223 a. C, cuenta que las espadas de los guerreros brbaros se plegaban o torcan, y quequienes las esgriman se vean obligados a enderezarlas con el pie. Lo cual puede ser indicio deque el hierro no estaba bien templado. Pero sea como fuere, lo cierto es que los romanos acabaronpor adoptar estas largas armas, que permitan herir al enemigo desde ms lejos. Por su parte, TitoLivio explica que, en la famosa batalla de Cannas, los iberos y los galos usaban largos man-dobles; pero que los segundos se dedicaban a repartir tremendos tajos.

    Otro autor romano de enjundia, Plinio el Viejo, ensalza a los celtas como grandes

    metalrgicos. Cuenta que, en la gran invasin de los galos del ao 387, bajo el mando deBelloviso, los atacantes disfrutaban de muchos datos relativos al dispositivo romano de defensagracias a un herrero helvtico precursor de los modernos y sofisticados espas llamadoElicn, que haba ejercido su oficio en la propia Roma.

    Lo tpico de las espadas clticas encontradas en La Tne son los adornos cincelados en lavaina, o las aplicaciones de fundicin sobre la misma. En cambio, son rarsimas las vainas quemuestren grabados. Esencialmente, la decoracin se concreta a lneas espirales, geomtricas, conpocas rectas y muchos crculos. Est dispuesta en la parte alta de la vaina, o en la contera o parteinferior. Las curvas son simplemente lineales, sin tomar formas de animales, ni apenas de plantas.Bienkowski7dice que los rizos y las curvas recuerdan a veces vagamente los tallos de la vid o delas enredaderas, y hasta acaso algunos animales herldicos, pero tan estilizados que son

    irreconocibles. Existen tambin algunas vainas, las ms elaboradas, que presentan piezasrepujadas aadidas, y aplicaciones de esmaltes y corales.Los celtas de la poca de La Tne llevaban las espadas al costado derecho, colgando de un

    amplio cinto mediante slidas anillas. A fin de que no se arrastraran por el suelo, entorpeciendolos movimientos del combatiente, parece ser que las sujetaban con la mano, empujando laempuadura hacia abajo hasta que quedaban casi horizontales. En la otra mano, los guerrerosceltas empuaban las armas arrojadizas. No parece que hubieran adoptado las armaduras, y losautores romanos se complacen en decir que los celtas gustaban de pelear desnudos, cosa queparece un tanto exagerada. Ahora bien, lo que s usaban era el escudo, de enormes proporciones,acarreado frecuentemente por un auxiliar, esclavo o escudero, y sobre todo, el casco.

    Los cascos celtas son en extremo interesantes. Son de bronce y presentan dos protuberanciaslaterales a modo de cuernos. Es criterio de los historiadores que esta forma de los cascos estabadestinada a dar a los guerreros un aspecto de gran ferocidad. En muchas tumbas de jefes celtas ygalos se han encontrado cascos ms o menos bien conservados. Pero el ms clebre, y de granbelleza, es el llamado casco del Tmesis, que fue descubierto por unos obreros mientrasconstruan los cimientos del puente de Waterloo, en Londres. Est formado con piezasensambladas, o roblonadas entre s, y parece que originariamente se adornaba con esmaltes yadesprendidos. Las curvas que lo adornan, delicadamente trazadas, tienen una vaga reminiscencia

    7P Bienkowski:Les Celtes dans les arts mineurs greco romains, 1928.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    24/118

    vegetal, sin concretar nada. Son asimtricas y fantsticas, al modo celta, y nos demuestran elpeculiarsimo espritu de aquel gran pueblo.

    No es el casco del Tmesis el nico casco cltico con apndices en forma de cuernos. Algunospresentan, adems de las piezas corngeras, un tridente central, que deba dar aspecto imponente aquienes los llevaba. Parece que se fabricaron en la Galia Cisalpina, y en algn raro ejemplar hay,ensamblada, una corona urea netamente etrusca.

    Aparte de los cascos de guerra se han encontrado otros de ms pacficos usos. Tienen forma degorro y estn provistos de una corta visera por delante y un protector para la nuca en la parteposterior. En el museo del Louvre se exhibe uno de ellos, hallado en Amfreville-sous-les-Monts,literalmente cubierto de adornos asimtricos. Las espirales enlazan una con otra, sin orden nimrito aparente. Probablemente en su origen deba ser policromado, con esmaltes engarzados, loque debi conferirle una suprema belleza. A cada uno de sus lados llevaba adosada una piezaprotectora de las orejas.

    Este tipo de cascos serva, probablemente, como adorno para fiestas y paradas militares, oacaso para honrar y embellecer a los jefes muertos en combate. En el tambin famoso cascoprocedente de la tumba de La Gorge-Meillet hay una elevada punta cnica, que rememora ciertoscascos orientales. El motivo central y reiterado de los adornos es la famosa esvstica aria,smbolo solar. Los alvolos laterales debieron encerrar adornos de coral. El temperamentoartstico y colorista de los celtas les induca a poner una nota de rojo coral sobre el dorado bronce.

    En ciertos cascos galos, tambin hechos de bronce, los cuernos superiores adoptan formaestilizada de alas, y el centro est rematado por un tridente o un doble aguijn. En la parteinferior, justo sobre la corta visera, una corona de hojas de oro magnifica estas piezas soberbias.

    En los cascos de las sepulturas celtas de Berra, en el Mame, los motivos de decoracinrepujados adoptan la tpica forma de espirales, pero parece que quieren imitar los adornos

    24

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    25/118

    25

    griegos. Da la impresin de que los celtas se hubieran esforzado por helenizarse, aunque, a lapostre, se vieron obligados a volver a los estilos propios y a ser fieles a s mismos.

    Es una caracterstica general de los cascos celtas el no adoptar formas funcionales, es decir,adaptadas a la lucha y a las necesidades militares, como los griegos y luego los romanos. Los

    cascos celtas son altos, imponentes, rematados por cuernos o tridentes. Sus portadores nobuscaban una utilidad inmediata, sino que pretendan, ante todo, espantar al enemigo. En el arcode Tiberio, en Orange, se aprecian unos relieves que representan guerreros galos, o celtas,tocados por impresionantes cascos. Los cuernos superiores son de forma retorcida e irregular,muy adecuada a la mentalidad de estos pueblos.

    Los escudos decorados de losceltas

    Ya hemos indicado que las dos nicas armas o piezas defensivas de los celtas eran el casco yel escudo. Este ltimo sola ser largo, de forma elptica. Su espcimen ms famoso es el llamadoescudo del Tmesis, o de Battersea, que se puede admirar en el Museo Britnico. Se compone deuna placa alargada, elptica, de bronce repujado, con otras placas menores soldadas. En el anvsdel escudo hay tres crculos, de arriba abajo, de mayor tamao el central, con medallones internosde esmaltes rojos y blancos. El tiempo ha robado, como es natural, esplendor y brillo a esta piezaexcepcional; pero an as, es una obra de arte que nos arrebata. El escudo de Battersea escribeJos Pijoan es un verdadero eptome del gusto celta. Nos comunica un sentido deinterpretacin de las lneas geomtricas y regulares enteramente nuevo en la historia del esprituhumano. El Oriente nunca habra imaginado la posibilidad de una decoracin tan precisa y tanimprecisa al mismo tiempo. Nunca el Occidente se ha superado en exquisitez, al producir un arte

    geomtrico y abstracto.Los tratadistas de arte han observado que el escudo de Battersea puede ser dividido,idealmente, en dos mitades idnticas, tanto en sentido vertical como transversal. Sin embargo, elefecto que produce a primera vista es de que carece de toda simetra. Los artistas celtas secomplacan en tales efectos. En otras dos piezas magistrales, tambin conservadas en el MuseoBritnico l disco de bronce, para un centro de escudo, encontrado en Irlanda, y la placahallada en el ro Withan, la impresin de falta de simetra, de vibracin de las curvas, casi demovimiento, es agobiante. Si se las mira fijamente, durante un rato, las placas parecen girar yoscilar de manera no uniforme.

    Los fragmentos de bronce para decoracin encontrados en La Tne, que pueden verseactualmente en el Museo de Ginebra, difieren de todo el arte de aquella remota poca y parecen

    adelantar conceptos futuros. Los celtas eran, sin duda alguna, distintos a los restantes pueblosprimitivos. La cultura de La Tne nos apasiona y nos intriga a la vez.Los collares o torques de bronce y de oro son las piezas ms significativas de la orfebrera

    cltica. Al parecer eran adornos muy extendidos entre los celtas, hombres y mujeres, y nodenotaban una especial categora social, militar ni religiosa. La estatua del galo del Capitolio,denominada tambin galo moribundo, lleva un collar alrededor de la garganta; particularidadque tambin se aprecia en otras esculturas del ciclo helenstico. Lo cual significa que todo galoera representado con un collar como distintivo. La palabra latina torcus nos ndica que estaban

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    26/118

    26

    hechos con una barra retorcida. La verdad es que en las tumbas de la poca de Hallstatt tambinaparecen collares semejantes, pero su momento de esplendor y mxima difusin se sita en lacultura celta de La Tne. Con el tiempo, las torques se convirtieron en objetos sagrados, hasta elpunto de que todos los dioses celtas eran representados con ellas. El dios galo hallado en Pars,

    del Museo del Louvre, lleva sendas torques en los cuernos. Para los pueblos clticos era unaespecie de joya nacional. Quintiliano testimonia que los galos ofrecieron a Csar Augusto, comopresente y tributo a la vez, un collar retorcido de oro macizo que pesaba cien libras. Y Tito Liviocuenta que en la poca de las grandes invasiones galas sobre Italia, el senador Manlio seacostumbr a llevar, alrededor del cuello, una torque de oro. Debido a lo cual en Roma fuellamado desde entonces Manlio Torcuato.

    Algunos de estos collares son valiosas joyas, por estar hechos de oro, y por el primor delretorcido y de los adornos. As, por ejemplo, los de Fenouillet, en el Alto Carona, y losencontrados en Espaa, que se conservan en el Museo Arqueolgico de Madrid y en el Institutodel conde de Valencia de Don Juan. En ciertas ocasiones los collares se cerraban con unacharnela, pero otras veces presentaban una abertura delantera y se colocaban en el cuello

    forzando el aro, para no volverlos a quitar ni durante la vida ni en la muerte de su portador.En La Tne han sido hallados tambin collares de bronce que a veces presentan serpientes enrelieve. La presencia de estos reptiles ha sido interpretada por algunos arquelogos como lacreencia de que la serpiente posee cualidades teraputicas, es decir curativas, idea existente ya enla cultura griega.

    Para Schaeffer, las serpientes de los collares celtas tienen carcter religioso, son seressemidivinos, relacionados con hroes y dioses. Alguna de ellas presentan cuernos, que les danaspecto de carnero. Sobre todo en las torques halladas en Alsacia, aparecen unas cabezas deserpientes, grandes y abultadas, que no son las de un reptil. En Alsacia, la palabra sclang(serpiente), se utiliza para designar ciertas pcimas o infusiones de herbolarios, destinadas a curarlas enfermedades infantiles. Posiblemente la serpiente lleg a la cultura de La Tne como rito

    superviviente de antiqusimas civilizaciones de comienzos del neoltico.En el Museo de Hagenau se conservan torques con remates de figuras humanas de enormesojos. Aqu el ojo humano realiza las consabidas funciones de talismn.

    En resumen, los collares o torques han aparecido no solamente en La Tne, sino en todosaquellos lugares en que los inquietos y andariegos celtas pusieron el pie. Son, por lo tanto, comoun smbolo unificador y revelador del espritu cltico.

    Estrechamente relacionados con los collares, hemos de citar los colgantes que los celtas solanllevar sobre el pecho. La estatua de un guerrero galo encontrada en Grzan (Gard) apareceadornada con torques y un colgante de gran tamao, en el que se dibuja el signo solar. Para losarquelogos, es la nica posible representacin de un personaje real celta -quiz un retratofunerario. Todas las dems esculturas que poseemos de los galos son obra de los artistasclsicos. Pero lo curioso es que griegos y romanos representaron siempre a los celtas desnudos, osea, en accin de combate. Por el contrario, la estatua de Grzan est cubierta de ropas y de joyas,como ya queda dicho. Incluso luce una capucha.

    En el reducto celta de Alesia en Borgoa, no lejos de Dijon, y evidentemente relacionadacon La Tne, exista una famosa metalurgia del bronce. All se concentraron los galos y otrospueblos celtas del otro lado del Rin para resistir a los conquistadores romanos en el ao 52 a.C.De la misma manera, unos aos antes el 133 a.C., los celtberos se juntaron en Numanciapara un ltimo y denodado esfuerzo.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    27/118

    27

    Los adornos de los diosesceltas

    Han llegado hasta nosotros pocos objetos artsticos relacionados con la religin de los celtas.

    El ms importante de ellos es el famoso vaso de Gundestrup, actualmente en el Museo Nacionalde Copenhague. Parece ser que originariamente era un gran recipiente litrgico, literalmentecubierto de relieves de bronce repujado. Fue hallado en una turbera, deshecho pero con todos losadornos alrededor, de manera que fue factible montarlo con un nuevo cuerpo de madera dura.Hay ocho planchas repujadas exteriores, y otras ocho interiores.

    Los fragmentos interiores representan al dios Taranis o Thor, a la diosa de las palomas, osea, la Venus celta, al dios de la caza, con la cabeza rodeada de cazadores y pequeos jabalescapturados, a una diosa guerrera, etc. En cuanto a los relieves exteriores, mucho ms ricos ynutridos, muestran a los dioses celtas cercados de una variadsima fauna. El dios cornudo Cernunnos, con el reglamentario collar y con las piernas plegadas, parece estar efectuando laexaltacin de la serpiente con cabeza de carnero. Hay ciervos, jabales, toros y leones en las

    proximidades.En otra de las placas exteriores, un druida, con casco de cuernos, presenta a un dios la rueda

    de los adivinos. Algunos de los relieves presentan escenas violentas, relacionadas con lossacrificios humanos. Una de las placas, que es de plata dorada, describe un sacrificio en honor deldios Teutates, al que era preciso resucitar ofrecindole vctimas humanas. Guerreros a pie y acaballo presencian la escena. La vctima est representada, cabeza abajo, sobre un odre o caldero.

    Para Pijoan, el vaso de Gundestrup revela el alma cltica tal como era, sin haber sido pulida ysuavizada todava por la cultura clsica y luego por el cristianismo. Pero las restantes figuras dedioses celtas son ya muy distintas. Estn, por decirlo as, adulteradas y censuradas. As, porejemplo, el relieve del Museo de Reims, donde Cernunnos, con una gran cornamenta de crvido,aparece haciendo brotar frutos ubrrimos de una cornucopia. Un buey y un corderillo comen

    mansamente los frutos que van cayendo.La estatua del dios celta hallada en Sommercourt (Alto Marne), va adornada con collares y

    torques de serpientes con cabeza de carnero. Se cree que los dos agujeros de la cabeza de lafigura debieron servir para sostener los cuernos. En la localidad de La Roquepertuse (Bocas delRdano), fueron halladas dos estatuas sin cabeza de dioses celtas. Estn sentados, con las piernaplegadas, y vestidos con unas tnicas o casullas, con adornos de grecas y cruces gamadas. Lafigura en bronce de un dios hallada en Bouray del Museo de Saint-Germain presenta pies deciervo y un peinado clsico, sin cuernos. Lo nico realmente celta son los collares. Es muyinteresante, sin embargo, el gran parecido del rostro de este dios celta con el busto de bronce,tambin provisto de torques, y que es considerado como la efigie de Vercingetrix.

    En Eufigneux (Saboya) apareci una rara imagen de un dios celta menor, probablemente el de

    la caza, con un collar y un enorme jabal en relieve sobre el vientre.Hay varias representaciones zoomrficas de dioses celtas menores: la diosa Epona, venerada

    por los celtberos de Espaa, se relaciona estrechamente con el caballo; el dios de la noche,Rudiobos, tiene plena forma equina; Cernunnos lleva siempre aparatosos cuernos de ciervo;Begomo va acompaado, invariablemente, de la serpiente con cabeza de carnero.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    28/118

    28

    La cermica celta, los esmaltesde La Tne

    De lo dicho anteriormente se desprende que las espadas, los cascos y los escudos celtas son

    muy superiores a las escasas esculturas. El genio creador de aquella raza se revela principalmenteen la decoracin de objetos, donde su estilo es absolutamente original, incluso cuando imita,transformndolos completamente, ciertos motivos clsicos. En la orla decorativa del tmulo galode Rodenback aparecen tres fajas, en las que las palmetas, ovas, grecas, volutas ydems formas de la Grecia clsica estn interpretadas de una manera tan original y personalsimaque apenas son reconocibles. Pero es en las espirales donde el artista celta da libre curso a sufabuloso poder creador. Como ha dicho un historiador del arte, las decoraciones celtas parece quese mueven y que nos invitan a descifrar un acertijo. Las curvas y las espirales celtas no tienen unaanchura uniforme. Ya hemos dicho que muchas veces se inspiraron en las algas y en los helechos,que sin duda impresionaron poderosamente la imaginacin cltica.

    La cermica experiment un gran desarrollo, formando grupos regionales localizados. Al

    comienzo de la cultura de La Tne, aparecen centros de cermica en Francia las Ardenas yregin del Marne, en la que predominan decoraciones incisas a base de espirales y meandros.Se trata de los llamados vasos de lujo, pintados con motivos tpicos de La Tne, y condecoraciones florales y geomtricas. Son muy conocidos los vasos con caballos del Marne, y losvasos con pjaros. La cermica policromada es bastante abundante en todo el mbito de La Tne.En los ltimos perodos de La Tne las piezas de cermica imitan los vasos de plancha metlicaes decir de hierro, que prcticamente es el metal predominante de aquel momento, e inclusopresentan las junturas de las partes ensambladas o roblonadas. Se imitan, en los cuencos y vasosde arcilla, las seales del martillo sobre los objetos de hierro, y hasta se imita el relieve de losrepujados. En los vasos celtas que se exhiben en el Museo de Saint-Germain pueden apreciarseestas curiosas caractersticas. En algunas de estas piezas de cermica, halladas en las tumbas del

    valle del Marne, se observa una absoluta imitacin de las vasijas de cobre batido. Pero no slo sehan imitado la forma y las seales y repujados del metal, sino que los artistas celtas procurarondar a la arcilla el brillo del cobre. Para ello utilizaron pastas muy pulidas y capas de arcilla finareluciente, es decir, con gran parte de areniscas.

    Ciertos vasos celtas y galos presentan zonas hundidas, rellenadas con pintura espesa. Es algoas como la tcnica de los esmaltes, aplicada a la arcilla en lugar de los objetos de metal. Otrosvasos y cuencos estn pintados con cenefas amarillas, ocres, y de tono bermelln. En la cultura deLa Tne no abundan las pinturas de colores vivos, sino amarillentas y parduscas. Los motivos sonlas consabidas espirales, curvas en forma de helechos y de trompeta. En el mbito cultural de LaTne no son frecuentes las piezas de cermica con animales pintados. En uno slo de los vasosdel Museo de Reims aparece un caballo, de larga cola, cabeza erguida y hermosa crin. Las dos

    tcnicas empleadas en la cermica celta se concretan a la de dibujos y huecos rellenados de pastacoloreada, y a la de pintura superficial con brochas.

    En los primeros perodos de La Tne, los objetos de metal se decoraron con corales. Losartfices dejaban alvolos para poder introducir en ellos las pequeas piezas de coral tallado. Deesta tcnica naci la de los famosos esmaltes cloisonnses decir, divididos en tabiques, conla que se lograron piezas bellsimas.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    29/118

    29

    Segn Dchelette8, los corales desaparecen del arte celta en el siglo III a.C., debido a lainterrupcin del comercio cltico con los lejanos pases del sur y de Asia, por causa,probablemente, de las campaas militares de Alejandro Magno. Entonces la necesidad les llev ainventar sustitutivos de los corales, por lo que crearon las pastas de vidrio o esmaltes.

    Un prrafo de una conocida obra de Filstrato de Lemnos, escrita en Roma all por el primertercio del siglo III de nuestra era, se refiere a los esmaltes celtas: Son los brbaros que habitanlos bordes del Ocano quienes saben poner capas de color sobre el cobre; y, por lo que se dice, localientan al fuego, hasta el rojo vivo; y despus las pastas de color fundido se hielan y seconvierten en un esmalte duro como la piedra, que conserva la figura exacta que ha sidoestucada.

    Para que las pastas no se corrieran en la fundicin, los celtas repujaban el metal, haciendohuecos en el mismo. La pasta de esmalte, al fundirse, se depositaba en tales cavidades. Tanto enla tcnica de los esmaltes tabicados, como en la de los esmaltes champlevs o de superficielevantada, los efectos de policroma que se conseguan eran magistrales.

    Los celtas, en realidad, hicieron maravillas con la tcnica del esmalte. No slo la emplearon

    con los vasos de metal, sino en los collares, colgantes, cascos de guerra, escudos, fbulas, y hastaen objetos tan funcionales como los cinturones y los frenos de los caballos. A veces las pastas sonopacas, pero en otras ocasiones mezclaban con ellas pedacitos de vidrio, de diversos colores, conlo que se conseguan efectos estupendos. Es la tcnica que hoy se denomina de mille fiori, y queha creado obras de gran belleza.

    En el Museo de Saint-Germain hay un bellsimo vaso esmaltado, en blanco, verde y rojo. Y enel Museo Britnico se conserva otra pieza, nica: un vaso celta con decoracin repujada yesmaltes depositados en los alvolos.

    En los objetos cilndricos, o de formas y tamaos que se prestaban poco a la tcnica de los es-maltes, stos no tenan ms finalidad que la de un mero revestimiento. En el Museo Britnicopueden admirarse algunos objetos suntuarios celtas encontrados en Drummond y en Polden Hill

    anillos y placas de mero adorno con esmaltes rojos, blancos y azules, que parecen fundidoshace unos pocos aos.No podemos dar fin a este captulo dedicado a la cultura de La Tne sin hacer una breve

    referencia a los vasos celtas de bronce que imitaban la forma de las piezas griegas. En la culturade Hallstatt, y en la posterior de La Tne, aparecen numerosos vasos de bronce fundido de tiponetamente griego. Dchelette hizo el catlogo de estos recipientes, entre los que destaca elstamnos olla con dos asas, encontrado en el tmulo de La Motte (Saint-Valentin, AltoMarne). Las dos placas en que se apoyan las asas estn decoradas con unas extraas curvas queimitan un par de ojos burlones. La forma es evidentemente griega acaso hecha por encargo,pero los adornos dejan traslucir el inquieto y extrao espritu celta.

    Algunas de estas vasijas o jarros stamnos, de dos asas, y oenochoe, de una sola, segn lasdenominaciones griegas encontrados en tumbas, contenan restos del producto que los llen enotro tiempo. Era vino que los celtas compraban a los mercaderes del sur, pero mezclado conpimienta blanca, para aumentar la fuerza del alcohol y el ardor del brebaje. As, a travs de losabismos del tiempo, nos ha llegado este mensaje del alma salvaje, brava y alegre de los celtas.

    8J. Dchelette:Manuel d'Archologie prhistorique. Pars, 1908.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    30/118

    30

    3VIDA Y COSTUMBRES DE LOS PUEBLOS CLTICOS

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    31/118

    31

    Las literaturas clticas como

    fuente de datosEl gran prehistoriador cataln Pedro Bosch Gimpera1dice que conocemos la sociedad cltica

    y sus instituciones familiares y polticas, as como tambin su economa, tipos de cultivo agrcola,artesanado, comercio y religin, gracias a la literatura galica y a las restantes literaturas clticas.Los cantos heroicos y, sobre todo, los textos legales que fueron reelaborados y puestos por escritoen una poca bastante tarda, pero que hunden sus races en la noche de los tiempos, nos dan unaidea muy aproximada de la sociedad celta, una idea mucho ms fidedigna que las descripciones,siempre subjetivas, delos conquistadores romanos.

    Segn Prampolini2, la ms antigua de las literaturas clticas es sin duda alguna la irlandesa,cuyos testimonios arrancan ya del siglo V de la era cristiana. Las grandes compilaciones

    manuscritas y las glosas elLibro amarillo de Lecan, elLibro de Ballymote, elLibro salpicado,etc. son un verdadero arsenal de datos, un cajn de sastre en el que aparecen genealogasfamiliares, poemas picos, relatos geogrficos, listas de reyes y de santos, cuentos y leyendas,jurisprudencia y hasta reglas gramaticales. Tambin encierran gran inters los ciclos mitolgicos,de los que slo se han conservado fragmentos, como el curiossimo que narra la batalla deMoytura, probablemente la ms antigua narracin blica de la Europa occidental.

    Aunque no es nuestro propsito detenernos en tales pormenores, cabe mencionar los primerosversos de la lengua irlandesa, atribuidos a un personaje, medio real medio fantstico, llamadoAmergin Glngel, es decir Rodilla Blanca. Los traemos a colacin porque exhalan unpenetrante aroma de libertad, de rebelda, de pantesmo o, dicho en breves palabras, del almacelta. Algunos historiadores han sealado dicho fragmento como una demostracin de que los

    celtas crean con ahnco en la metempsicosis:

    Yo, el viento sobre el mar,yo, una onda poderosa,yo, el circulo del ocano.Yo, un toro enardecido,yo, el halcn sobre la roca,yo, la ms bella entre las plantas.Yo, un jabal perseguido,yo, un salmn de ro,yo, un lago en la llanura.

    Yo, la fuerza del canto,la punta de la lanza guerrera.

    Por lo que respecta a la literatura galica de Escocia, de aparicin mucho ms tarda, y quefloreci tambin en la isla de Man, nos ha dejado un nmero de datos muy inferior al procedentede las letras irlandesas. En cuanto al manx, otra lengua del grupo cltico, est entreverado de

    1Pedro Bosch Gimpera: Prehistoria de Europa. Madrid, Ediciones Istmo, 1975.2Santiago Prampolini:Historia Universal de la Literatura. Buenos Aires, UTEHA, 1958.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    32/118

    32

    influjos nrdicos debido al largo dominio de los vikingos.Mucho ms rica es la literatura del pas de Gales. El poema Gododin, elLibro rojo de Hergest,

    el Libro de las leyes de Hywel Dda, la recopilacin de narraciones de los Mabinogion, etc., nosproporcionan una visin muy directa de las costumbres y la vida de los celtas.

    Las lenguas del grupo britnico el cmbrico, el crnico y el bretn aparecen en glosasmarginales, y hasta interlineales, en los manuscritos latinos del siglo VIII.Pero su trascendencia,como fuente de informaciones, es mucho menor.

    Todas estas literaturas, con base en lenguas tan diferenciadas que hoy da, por ejemplo, unirlands no comprende en absoluto a un gals, tienen sin embargo un nexo de unin, un origencomn, la desaparecida cultura de los celtas. La vitalidad y el ardoroso temperamento combativode los antiguos celtas se patentizan en esas obras literarias. En un manuscrito del cenobio deSaint-Gall o Sankt Gallen, un desconocido monje, celta e irlands, desde luego, escribi unacuarteta marginal, que nos suena como un grito alegre desde el fondo de los siglos:

    spero es el viento esta noche,

    despeinada la blanca cabellera del ocano:por eso no temo a los feroces guerrerosque recorren el mar de Irlanda.

    La sociedad cltica y susinstituciones

    La sociedad cltica se fundamentaba en la clula bsica de la familia. La prctica general era

    la monogamia, aunque existen testimonios que demuestran la existencia, en ciertos casos ysiempre en estratos elevados de la sociedad, de varias esposas legtimas y de concubinas quehabitaban en el hogar. La familia giraba bajo la omnmoda autoridad del padre, que tena derechopleno de vida y muerte sobre sus hijos y sobre su mujer.

    El matrimonio era, como en tantas otras culturas, un contrato expreso y formal, revestido deciertas ceremonias de tipo religioso. Sin embargo, en un principio consista en una mera comprade la esposa por el marido. La mujer tena la ineludible obligacin de llevar a la uninmatrimonial una dote consistente en una cantidad de plata, labrada o sin labrar. En todo caso, elmarido deba doblar dicha cantidad, o peso, que pasaba a constituir un patrimonio familiar,garanta para la familia futura y cobertura contra los avatares del destino.

    Al producirse el fallecimiento de uno de los cnyuges, el superviviente entraba en la plena

    posesin de aquel patrimonio o dote. Los celtas admitieron y practicaron la separacin o divorciopor simple consentimiento mutuo, pero nunca por voluntad de uno solo de los cnyuges. Si elmarido falleca en circunstancias sospechosas el temor al envenenamiento obsesionaba a losceltas, la esposa poda ser torturada para que confesara, o condenada a muerte.

    El suizo Bachofen3, en su monumental estudio sobre el matriarcado primitivo, hace variasalusiones a los celtas. La mujer, en aquellos pueblos, tena una gran consideracin social y no era,

    3 Hans J. Bachofen: Das Mutterrecht. Eine Untersuchung ber die Gynekokratie der alten Wlet, nach ihrerreligisen und rechtlichen Natur. Basilea, 1897.

  • 5/28/2018 Los celtas y sus Mitos.pdf

    33/118

    33

    como en otras sociedades, una simple pertenencia del marido. La mujer celta casadadesempeaba ciertas funciones en la comunidad, como la de actuar como arbitro en las querellasentre familias y entre tribus. Sola acompaar a su marido en las expediciones militares, en lasmarchas y hasta en los combates.

    Ammiano Marcellino escribi unas lneas, medio admirativas, medio atemorizadas, sobre lasmujeres celtas y su denodado valor. Una patrulla entera de extranjeros dice no podraresistir al ataque de un solo galo, si ste se hiciera acompaar y ayudar por su esposa. Estasmujeres son, generalmente, fortsimas, tienen los ojos azules, y cuando se encolerizan hacenrechinar sus dientes, y moviendo los fuertes y blancos brazos comienzan a propinar formidablespuetazos, acompaados de terribles patadas.

    Julio Csar testifica que, en Inglaterra, los hombres pobres solan tener una sola esposa, perolos que eran lo bastante ricos para permitrselo podan mantener varias. Los hijos ilegtimos slopodan ostentar el nombre de la madre, y jams el paterno, aunque conocieran y trataran a suprogenitor.

    Era una tpica costumbre de los celtas, para que sus hijos crecieran ms fuertes, viriles e

    inteligentes, no tenerlos siempre a su lado, sino cederlos, al llegar a la pubertad, a una familiaamiga y de confianza, a veces vecina y a veces alejada. De esta manera, los adolescentesaprendan a obedecer a sus nuevos, aunque temporales familiares, y se acostumbraban a tenerresponsabilidades, quedando apartados del exagerado amor maternal.

    Las familias unidas por lazos de parentesco formaban un clan bajo la autoridad de un caudillo,el rix o rey del grupo. Los miembros ms caracterizados de un clan se reunan en consejo y seconsideraban solidarios de las obligaciones contradas por cualquiera de los componentes delclan. Tambin eran responsables, solidariamente, del castigo a los culpables convictos de undelito. El acusado de un asesinato, despus de haber sido juzgado, era expulsado de su clan, locual, entre los celtas, constitua una vergenza y una desgracia tremenda.

    La agrupacin de varios clanes integraba una tribu tref, regida igualmente por un jefe o

    conductor. Las familias nobles y poderosas tenan a su alrededor, aparte de los familiares ydeudos, una clientela constituida por gentes que buscaban proteccin de los fuertes y realizaban,a cambio, diversos servicios. Sin embargo, como observa Bosch Gimpera, no se trataexactamente de la conocida clientela romana.

    Polticamente, los celtas nunca llegaron a formar un verdadero estado, ni una nacin. Estabanorganizados en grupos aislados, semifeudales, aunque unidos por el temperamento racial, y lasnecesidades ofensivas y defensivas. La aristocracia jugaba un papel primordial, de tipo directivoy consultivo, en este esquema rudimentario de organizacin poltica.

    Nunca llegaron a crear grandes ciudades, en el sentido clsico y actual de la palabra. A veces,sin embargo, los diversos clanes y tribus se agrupaban o, para hablar con mayor propiedad, seorganizaban enpagi (aldeas). Y de la unin de varias aldeas, cercanas, o contiguas, nacieron lasagrupaciones que los autores romanos denominaron civitates. No obstante, es preciso hacerhincapi en que las civitates celtas no se parecan en nada a lo que entendemos por ncleosurbanos, grandes o medianos. Eran, en realidad, federaciones de clanes y de tribus, con lafinalidad de aunar esfuerzos y tener, sobre todo, ms hombres sobre las armas en casos blicos.

    En casos muy excepcionales, algunas de estas federaciones elegan a