Más de lo mismo

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Ayuntamiento de Zuera 2011 –2015: Más de lo mismo. La formación del gobierno municipal que ha administrado los últimos cuatro años (2007-2011) el Ayuntamiento de Zuera vino precedido de un pacto entre PP y Par cuyos desastrosos resultados son evidentes. Desde el punto de vista político fue algo más parecido a un “trato”, nunca hecho público, en el que los tratantes se repartían de forma inversamente proporcional a los resultados electorales obtenidos el gobierno y la administración de los recursos municipales. El pacto, o trato, no respondía a la exigencia de llevar a cabo conjuntamente un proyecto político consensuado, algo perfectamente legítimo, sino al propósito exclusivo de desalojar al PSOE del gobierno del municipio. Para el PP ese era el objetivo fundamental, por eso cedió en todo aquello que le propuso el PAR. Para Nasarre, la asociación con Larqué le permitía obtener un influencia por encima de lo razonable, dados sus resultados electorales, y la seguridad de que nadie pondría trabajas a sus pretensiones políticas y personales; algo que, sabía, con el PSOE no habría conseguido. No sabemos a qué otros compromisos se obligaban los “trato-pactantes”, si es que hubo algo más que reparto de cargos. Los datos objetivos, independientemente de los juicios personales, es que los proyectos que fueron incorporando a los sucesivos presupuestos municipales quedaron en su inmensa mayoría sin ejecutar; que no hubo impulso político conjunto, dado que en la práctica han existido dos gobiernos diferentes en el Ayuntamiento; y que, como consecuencia, desde el punto de vista de la gestión los frutos de la misma han sido aquellos que se dan cuando dos aliados tiran en direcciones opuestas, cero Igualmente, subproductos de esa praxis política, que combinaba incoherencia y falta de liderazgo, han sido las actitudes sectarias y la falta de transparencia, caldo de cultivo de irregularidades, clientelismo y corruptelas. Los resultados de las elecciones municipales del 22 de mayo no ha variado la correlación de fuerzas: 6 concejales el PSOE, 6 concejales el PP y 1 concejal el PAR. Las combinaciones posibles para formar gobierno municipal eran las mismas que el mandato que terminaba. Con una importantísima excepción: el Partido Socialista no ha estado en ningún momento dispuesto a recibir el voto del concejal del PAR Sr. Nasarre. El PP podía haber conseguido la alcaldía y gobernado sin problemas al ser la lista más votada. Por eso, que el PP reedite con el PAR, corregido y aumentado, semejante dislate para el periodo 2011-2015 sin tener en cuenta ni la experiencia anterior ni sus evidentes desencuentros, eludiendo las irregularidades cometidas y ofreciendo de nuevo a minoría tan exigua tanto poder municipal sin medir su costo económico y político, es la muestra de lo que ya en otras ocasiones hemos manifestado: una concepción instrumental de la política que pone por delante los intereses personales a las necesidades objetivas del Ayuntamiento de Zuera, una de las cuales, y muy principal, es recuperar una moralidad pública lesionada por cuatro años de pasividad, dejar hacer y mirar para otro lado. Es también posible que esa decisión haya sido decepcionante para una parte de los afiliados y votantes del PP que no ven bien la privatización del 50% del ayuntamiento a mayor gloria del concejal del PAR señor Nasarre, pero no ha sido para nosotros ninguna sorpresa. Vean.

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Organización y funcionamiento del Ayuntamiento de Zuera 2011-2015

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Ayuntamiento de Zuera 2011 –2015: Más de lo mismo.

La formación del gobierno municipal que ha administrado los últimos cuatro años (2007-2011) el Ayuntamiento de Zuera vino precedido de un pacto entre PP y Par cuyos desastrosos resultados son evidentes. Desde el punto de vista político fue algo más parecido a un “trato”, nunca hecho público, en el que los tratantes se repartían de forma inversamente proporcional a los resultados electorales obtenidos el gobierno y la administración de los recursos municipales.

El pacto, o trato, no respondía a la exigencia de llevar a cabo conjuntamente un proyecto político consensuado, algo perfectamente legítimo, sino al propósito exclusivo de desalojar al PSOE del gobierno del municipio. Para el PP ese era el objetivo fundamental, por eso cedió en todo aquello que le propuso el PAR. Para Nasarre, la asociación con Larqué le permitía obtener un influencia por encima de lo razonable, dados sus resultados electorales, y la seguridad de que nadie pondría trabajas a sus pretensiones políticas y personales; algo que, sabía, con el PSOE no habría conseguido.

No sabemos a qué otros compromisos se obligaban los “trato-pactantes”, si es que hubo algo más que reparto de cargos. Los datos objetivos, independientemente de los juicios personales, es que los proyectos que fueron incorporando a los sucesivos presupuestos municipales quedaron en su inmensa mayoría sin ejecutar; que no hubo impulso político conjunto, dado que en la práctica han existido dos gobiernos diferentes en el Ayuntamiento; y que, como consecuencia, desde el punto de vista de la gestión los frutos de la misma han sido aquellos que se dan cuando dos aliados tiran en direcciones opuestas, cero

Igualmente, subproductos de esa praxis política, que combinaba incoherencia y falta de liderazgo, han sido las actitudes sectarias y la falta de transparencia, caldo de cultivo de irregularidades, clientelismo y corruptelas.

Los resultados de las elecciones municipales del 22 de mayo no ha variado la correlación de fuerzas: 6 concejales el PSOE, 6 concejales el PP y 1 concejal el PAR. Las combinaciones posibles para formar gobierno municipal eran las mismas que el mandato que terminaba. Con una importantísima excepción: el Partido Socialista no ha estado en ningún momento dispuesto a recibir el voto del concejal del PAR Sr. Nasarre.

El PP podía haber conseguido la alcaldía y gobernado sin problemas al ser la lista más votada.

Por eso, que el PP reedite con el PAR, corregido y aumentado, semejante dislate para el periodo 2011-2015 sin tener en cuenta ni la experiencia anterior ni sus evidentes desencuentros, eludiendo las irregularidades cometidas y ofreciendo de nuevo a minoría tan exigua tanto poder municipal sin medir su costo económico y político, es la muestra de lo que ya en otras ocasiones hemos manifestado: una concepción instrumental de la política que pone por delante los intereses personales a las necesidades objetivas del Ayuntamiento de Zuera, una de las cuales, y muy principal, es recuperar una moralidad pública lesionada por cuatro años de pasividad, dejar hacer y mirar para otro lado.

Es también posible que esa decisión haya sido decepcionante para una parte de los afiliados y votantes del PP que no ven bien la privatización del 50% del ayuntamiento a mayor gloria del concejal del PAR señor Nasarre, pero no ha sido para nosotros ninguna sorpresa.

Vean.

Otros cargos del Sr. Nasarre Sus:

• Primer Teniente de Alcalde

• Presidente de Zuera de Gestión Urbanística

• Delegación de Servicios Sociales

• Delegación del Centro de Iniciativas Empresariales

• Vocal de la Comisión Especial de Cuentas

• Vocal del Servicio Municipal de Deportes

• Representante en la Comunidad Central de Zaragoza

• Representante en la Mancomunidad Intermunicipal del Bajo Gállego

• Representante en la Caja de Ahorros de la Inmaculada.

COMISIÓN INFORMATIVA PERMANENTE DE URBANISMO Y MEDIO AMBIENTE CONCEJAL: Francisco Nasarre Sus

Urbanismo Medio Ambiente

Gestión y aprovechamiento forestal del monte

Coordinadora concejalía

Aparejador

Ingeniero Agrónomo Técnico en Urbanismo

Auxiliar Administrativo

Guardia Montero

Zuera de Gestión Urbanística

Brigada de obras

Auxiliar Administrativa

Arquitecto

Administrativo

Falta, naturalmente, el costo económico de este disparate que llegará, al menos, a 7.000 € al mes (392.000 € en todo el mandato) en sueldos para el concejal y su personal de confianza; al que habrá que añadir otros que se generen en Zuera de Gestión Urbanística, empresa municipal en estos momentos sin actividad conocida pero que ha pagado en los últimos cuatro años diversas cantidades fijas a colaboradores del Sr. Nasarre.

¿Podemos permitirnos econòmicamente este pacto?. No. ¿Qué gana el municipio?. Nada. ¿Sobre qué bases programáticas se ha organizado este acuerdo?. Ninguna. ¿Era necesario para la estabilidad del Ayuntamiento?. La respuesta es no, rotundamente no.

Y, por cierto, ¿cuáles van a ser las funciones del alcalde de Zuera?. Una vez delegadas a su asociado aquellas que corresponden a las áreas más importantes de gestión quedaban otras, policía, deportes, cultura, etc. que pasan a los concejales de su partido. ¿Quiere esto decir que su labor se desarrollará fundamentalmente en la DPZ?. ¿Desde Zaragoza va a marcar el camino de este nuevo ayuntamiento demediado?. Esperamos, sinceramente, que al menos sea capaz de coordinar ese 50% del ayuntamiento que controla.

Se ha perdido una gran oportunidad. Los tropiezos que podían haberse superado abriendo las ventanas, gobernando con austeridad y valentía, buscando acuerdos en todo el espectro político zufariense reaparecerán más pronto que tarde para vergüenza de todos. Nos tememos que van a seguir las mismas consignas, las mismas políticas, o mejor la falta de ellas, y el mismo santo y seña. Solo que ya no generan, si es que en algún momento lo hicieron, ni un gramo de convicción siquiera en los “trato-pactantes”.

Se conocen demasiado bien.