Moquegua Patrimonio Monumental

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El tiempo causa transformaciones. El libro Moquegua: Patrimonio Monumental del profesor Jorge Gutiérrez Valdivia nos muestra la riqueza arquitectónica de nuestra tierra; pero al contemplar en la actualidad este patrimonio, notamos que ha sufrido cambios. ¿Está perdiendo Moquegua este rico patrimonio? Ud., estimado lector, establezca conclusiones sobre esta interrogante.

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  • LIBRO DIGITALIZADO POR GRUPO SUR

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    Agradecimiento Al Pro! Hugo Isaas Quispe Mamani, Alcalde Provincial, a la Municipalidad Mariscal Nieto, a Vctor Arpasi Flores, Luis Kuon Cabello, Aurelio Mir Quesada y a Franklin Pease.

    . @ Jorge Gutirrez Fotografas: Luis Maquera

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    Jorge Gutirrez

    MOQUEGUA

    PATRIMONIO MONUMENTAL

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    NDICE Palabras iniciales Prefacio 13

    CASONAS MOQUEGUANAS

    1. Casona de las seoritas Sara y Ame1ia Tumba Valdivia 13 2. La Quinta de los Limoneros 14 3. Hermosa Casa de don Augusto Chocano y doa Julia Valdivia de

    Chocano 15 4. La Casa de1 Conde de Alastaya 17 5. Casona de don Francisco Valdivia Carbonera y doa Herminia

    Acosta de Valdivia 18 6. Espao1sima Casona de don Carlos Alberto Fernndez Dvi1a 7. Torres y doa Rebeca de la F1or 19 8. Casona de doa Martina Fernndez Cornejo y Fernndez de

    Crdova y don Jos Carlos Mendoza y Arguedas 20 9. Casona de la filantrpica matrona gueda Vizcarra Gngora de

    Angulo 21 10. Casona de Corte virreinal de don Domingo Barrios 23 11. Casa de don Mariano Lino Urquieta Ampuero 25 12. Casona de don Attilio R. Minuto 28 13. Casona de doa Juana Cornejo Vda. de Roncal 29 14. Casona de doa Isabel Vizcarra Vda. de Angulo 30 15. Casona de la Municipalidad de Moquegua 31 16. Hermosa Casona de don Ricardo de la Flor y doa Amelia Angulo

    de la Flor 33 17. La Casa del Correo 34 18. Casona de doa Mara Isabel Daz F Fernndez Dvila y de don

    Lisandro Diez Canseco 35 19. Casa de don Mateo Alayza Quesada 37 20. Hermosa Casona de don Nicols Jacinto Chocano y doa

    Gertrudis del Solar de Chocano 39 21. Casona de don Manuel Zeballos 41 22. Casona de la Colonia del Imperio Celeste 42 23. Casona de don Victorio Porcella y de doa Carmen Angulo de

    Porcella 43 24. La Casa de la Serpiente 44 25. La Casa de Asilo de los Ancianos 45 26. La Casa de don Juan Antonio Montenegro y Ubaldi 46

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    MONUMENTOS ARQUEOLGICOS

    27. La Crcel- Hoy Museo Arqueolgico Regional 50 28. La Antigua Iglesia - Convento de San Francisco - EI Colegio Santa

    Fortunata 51 29. La Iglesia Matriz 55 30. La Pila de la Plaza de Armas 56 31. La Iglesia de Santo Domingo - La Virgen Santa Fortunata 58-60 32. El Reloj Pblico de Moquegua 62 33. La Iglesia de Beln 64 34. La Capilla de Samegua 66 35. Placa conmemorativa a Csar A. Cosio Becerra 68 36. Jos Carlos Maritegui 69 37. Bibliografa 72

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    Palabras iniciales

    Los conquistadores espaoles cuando llegan a Amrica no slo dominan el espacio y se pasean bravamente por territorios de leyendas, sino tambin fundan ciudades. Para fundar las ciudades se proceda de acuerdo con reglas especiales. Las Leyes de Indias aconsejaban buscar sitios sanos, cerca de cursos de agua que sirvieran al mismo tiempo para la bebida, para la higiene y para el riego, y en una zona provista de lea, no muy en alto para evitar los vientos, ni muy en bajo para prevenir enfermedades. Escogido el asiento, venan luego las ceremonias de fundacin. Se trazaban sobre el papel los cuadros " islas " que iban a hacerse realidad con calles tiradas a cordel en la tpica forma de las casas de ajedrez. El lugar principal se asignaba a la Plaza; y en ella se escogan terrenos para la iglesia, la casa de gobierno, el cabildo y la crcel; se clavaban el rollo y la picota, como seal de autoridad; y se repartan solares a los fundadores, ms cerca o ms lejos de la plaza segn la importancia de cada uno.

    Sentada el acta de la fundacin, y publicada extensamente por la

    sonora voz del pregonero, se elevaban preces al Seor para que protegiera la ciudad, a la que se bautizaba de inmediato o se le daba luego el nombre por sorteo, por decisin de los caudillos, ms a menudo por la fecha en que la poblacin era fundada.

    Sin embargo la fundacin y la organizacin de las ciudades en los

    siglos XV y XV \ como la ciudad de Moquegua, tiene caracteres distintos dentro del proceso general de los establecimientos urbanos habituales, que lo caracteriza una unidad esencial tanto en su aspecto, externo traza la plaza central o principal, cercana de fuente de agua, lugares para las casas de Dios, del gobierno y del pueblo, cuanto en su significacin interna introduce en el Nuevo Mundo de las ideas, las costumbres, las formas de la cultura de Occidente. Pero dentro de esa unidad fundamental hay una rica y compleja variedad, determinada por la localizacin geogrfica, las circunstancias histricas, los elementos tnicos, la realidad prehispnica de la regin en que las nuevas poblaciones se asentaban. Y desde el punto de vista social y comercial la ciudad de MOQUEGUA, fue notable por su notoria importancia durante la poca colonial. Los espaoles que se asentaron construyeron sus viviendas, introdujeron los cultivos de trigo y vid; animales como ovejas, caballos, mulas, etc.; y otros sistemas de trabajo (molinos).

    Sobre todo las vias se extendieron favorecidas por la bondad del

    clima y la riqueza soleada de las tierras, y con sus uvas excelentes se

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    prepararon vinos que tenan un mercado seguro, por el puerto de Arica, no, en la regin de Charcas y en el asiento de Potos.

    En el Archivo de la Sub-Regin de Moquegua existen documentos

    que revelan las viviendas y las iglesias que son motivo de este libro. Tambin hay informacin del desarrollo de la cosecha de las vides y del prestigio de los primeros vinos moqueguanos. Se precisan las tres etapas del rpido crecimiento de la produccin vinera en el clido valle de Moquegua (11 horas diarias de sol): en 1567 se plantan ya vias; en 1587 hay constancia de la venta de vinos; y en 1593 ya se habla de bodegas, o de cantidades suficientes para ser almacenadas. Por algo en 1596 el casi legendario Gaspar Fernndez de Lugo Cabeza de Vaca erigi una ermita en el cerro, a la salida de Moquegua, en honor de San Bernab patrn de las vias.

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    PREFACIO De la fundacin espaola de Moquegua, no se tiene lo menor noticia, slo se sabe que fueron trece sus fundadores, descubridores o conquistadores. Uno de ellos fue don Pedro Cansino, casado con doa Ana de Bilbao, que vino de lo ciudad de Len de Nicaragua, e hijo legtimo de Garca Alonso Cansino y Aldonsa, y el General Juan de la Torre Maestre de Campo, uno de los Trece del Gallo, capitane la expedicin que inici la dominacin hispana en estas tierras, que hasta entonces haban permanecido al margen de la autoridad de los conquistadores. Se ha credo poder sealar como fecha de fundacin el da 25 de noviembre de 1541, aunque solo dentro del terreno amable pero peligroso de los conjeturas.

    La conquista espaola signific el establecimiento de castas y

    discriminaciones sociales. Antonio Pereyra Ruiz, Notario del Santo Oficio, dice refirindose a Moquegua; "Es uno de los poblaciones de este obispado que encierra ms nobleza y donde ms se cuida el enlace en las familias. El ayuntamiento es compuesto por las mejores y ms pudientes casas y guarda en todo lo mayor circunspeccin".

    La ciudad de Moquegua presenta una arquitectura civil original,

    homognea, inconfundible, que an logra perdurar, incluye una caracterstica: el mojinete y los patios solariegos; constituye un Patrimonio Monumental. Est concebida al modo de vida y a las necesidades propias, con elementos arquitectnicos y decorativos provenientes de diversas regiones, que se integran de una manera local, donde la gala externa no es corriente. Una de sus principales caractersticas son los inmuebles de techos a dos aguas con cumbreras planas o en punta, los cuales poseen altillo localizados en el espacio producido por las pendientes del techo mismo. Esta techumbre es llamada en lo zona "mojinete ", estructura que se puede ver adems en Tacna y Arica, aunque en esta ltima ciudad chilena, debido a la idea de la "modernidad" ha ido desapareciendo en gran nmero.

    Los mojinetes, encargados de adornar el paisaje urbano, suben o bajan por las calles segn el declive o la perspectiva que tenga en ese momento el transente y se recortan con gracia ante el azul intenso del cielo.

    La casa moqueguana, que puede ser de uno o de dos pisos es, en sus mejores ejemplos, de anchos muros de adobe o de quincha pintados de azul ail, de ocre o de rojo.

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    Los vanos de puertas y ventanas son adintelados o bien solucionados con arcos escarzanos. Los de las ventanas mayoritariamente son lisos, pero en los vanos de las portadas es ms frecuente encontrar adornos, a veces sencillos o completos, en estos ltimos se aprecian amplias cornisas con relieves de medallones, palmas, anagramas, conchas o bien una flora exuberante y enmaraada que todo lo cubre.

    Las portadas neoclsicas son lisas y sobrias, con portones finos tallados con mesura y tachonados de clavos de bronce. Pilares chatos que podran clasificarse dentro de los toscanos, estn encargados de sustentar los ya descritos dinteles. Dichos pilares, de piedra blanca denominada sillar, hacen las veces de anchas jambas donde la mayora tiene fustes lisos, aunque hay ocasiones en que lucen una rica talla fitomorfa. Rejas de fierro forjado al estilo peninsular sirven para proteger los bajos ventanales. Algo muy particular es el portn grueso de madera por el cual se ingresa a la vivienda desde la calle, singularidad que se puede observar en todas las casas sin excepcin. Son dos grandes y pesadas hojas, generalmente trabajadas en cuatro paos, aunque hay algunos apanalados en los que se ve una talla suave conformada por arabescos: en ciertos cosos o este decorado se le aaden clavos de bronce denominados tetillas.

    Otra caracterstica moqueguana se presenta en las casas de dos niveles con sus balcones de madera que corren de extremo a extremo, con repisas cuadrangulares, balaustres de madera apanalada o de fierro, interrumpidos cada cierto trecho por delgadas y talladas columnas encargadas de sustentar la cubierta. Pero, quizs la trivialidad que podra tener, se rompe cuando en la parte superior surge el mojinete a manera de remate. Aunque no siempre este ltimo detalle se produce, el balcn es en todo caso muy peculiar.

    Al ingresar a los inmuebles se puede encontrar en algunos el zagun a veces abovedado que irrumpe a un patio cuadrangular lleno de agradable vegetacin, lo cual produce un micro clima capaz de aliviar los rigores del calor, a este patio dan altas y amplias habitaciones principales de la casa y por un pasadizo lateral se arriba a otras.

    La entrada para animales o de servicio, localizada en la calle

    posterior y por la que se tena acceso al huerto, no existe hoy da pues los terrenos han sido vendidos y urbanizados. As eran las casas tradicionales en el centro de la ciudad hasta mediados de este siglo, cuando por causas de los sismos se comenz la reconstruccin, cambindose tanto el modelo interior como el exterior. Por ejemplo, el mojinete es reemplazado por techo plano, la puerta es modificada en casas para instalar otro ambiente, la pared es recubierta de piedras. Felizmente, a pesar de estos cambios no

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    le han arrebatado a Moquegua su originalidad y su diferencia con otras ciudades peruanas.

    Refirindose a Moquegua nos dice don Aurelio Mir Quesada: " se convirti en uno de los centros de ms prestigio y ms decorados de blasones de nuestra vida virreinal, profusin de familias de abolengo, entre las que se contaron, como presidiendo el largo coro de sus apellidos resonantes, los Marqueses de Casa Caldern o Villa Hermosa, los Condes Alastaya, de los Torres o de Velasco y del Portillo. No slo los salones se iluminaban con el boato y la cultura, sino tambin los claustros conventuales saban difundir las hondas palabras del espritu".

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    CASONAS MOQUEGUANAS

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    1. CASONA DE LAS SEORITAS

    SARA Y AMELIA TUMBA VALDIVIA

    CASONA ubicada en la calle Lima No. 474, solariega, amplia, de techos elevados en forma de mojinete, de anchas paredes de adobe, de una sola planta, con dos patios rectangulares, uno al ingresar a la vivienda y otro Intermedio; tiene trece ambientes y jardines con rboles frutales. En la entrada sobresale la puerta amplia de madera con enormes clavos de bronce.

    Fue duea de esta vivienda la seora Elvira Turcke de la Flor, quien la vendi a la educadora seorita Sara Tumba Valdivia, que naci en Moquegua el 13 de noviembre de 1899. La Srta. Tumba Valdivia se desempe como Profesora de la Escuela Adelaida Mendoza de Barrios durante 42 aos. Tambin prest sus servicios ad honorem en el Colegio Parroquial Juan XXIII, durante 10 aos. En 1986 fue galardonada con las Palmas Magisteriales. Tambin presidi el Asilo de Ancianos, donde reparta alimentos mensualmente a las personas ms necesitadas. Tambin presidi la Congregacin Santa Fortunata al fallecer la seora ngela Barrios de Espinoza, y asumi la gran responsabilidad de desarrollar el culto de esta Santa Mrtir desde 1961 hasta 1987. Adems

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    era la encargada de abrir cada ao la urna de Santa Fortunata para su cuidado y orden. Form lo Congregacin "Hijos de Mara. Falleci el 12 de octubre de 1988 en las vsperas de los festejos de la Santa de su corazn.

    Actualmente ocupa la vivienda su hermana Elena Amelia de los ngeles Tumba Valdivia, docente jubilada.

    2. LA QUINTA DE LOS LIMONEROS

    Se ubica en la calle Lima No. 441. Uno de los ms acogedores ambientes tursticos de Moquegua, lo constituye el Hotel de La Quinta de los Limoneros"; su creacin sobrepasa las necesidades de esta hermosa ciudad.

    Para el turista o para el visitante que viene de afuera, este acogedor Hotel resume la tradicin ms genuina del Departamento de Moquegua y es presentacin de buen gusto y la visin de futuro de don Luis Velsquez, su primer propietario, en el nombre de La Quinta de los Limoneros", por tener varios rboles de limones muy bien distribuidos, adems de numerosas plantas, una piscina con bar y jardines que semejan un pequeo balneario, mesas redondas con bancos de cemento rodeados de floridos jardines, apropiado lugar para practicar la lectura, el

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    descanso, la distraccin y todo acompaado por un cielo azul y un sol radiante que conforma el clima primaveral de Moquegua.

    La Quinta de los Limoneros no slo marca historia por su arquitectura, tambin recuerda el paso de sus huspedes Ilustres como los Presidentes Manuel Prado Ugarteche, Fernando Belande Terry, el Gral. Juan Velasco Alvarado, don Aurelio Mir Quesada, Augusto Tamayo, Manuel Scorza, Pablo Macera, Antonio Cisneros, Csar Calvo, Arturo Corcuera, Guillermo Rouilln, Jorge Daz Herrero, Enrique Lpez Albjar, Franklin Pease y otras personalidades. Su frente por la calle Lima tiene muros de sillar, un enrejado de madera y unos maceteros con cactceas en lo alto de los muros que le dan el aspecto especial al estilo de arquitectura.

    En el centro del Hotel se levanta el amplio saln comedor y de fiesta con su terminacin superior en mojinete o techo de dos aguas, como son las casas de toda la ciudad de Moquegua, en cuyo interior se exhibieron las primeras pelculas de la cinematografa. A lo largo del recorrido se ve una amplia terraza donde se puede apreciar la zona marginal de la ciudad con la campia, el ro Moquegua con su vegetacin natural y sus cultivos.

    Hoy en da el Hotel est en manos de la familia Arenas - Fierro.

    3. HERMOSA CASA DE DON AUGUSTO CHOCANO

    Y DOA JULIA VALDIVIA DE CHOCANO HERMOSA CASA situada en la calle Moquegua, con el nmero 364. Posee hermosos jardines, en los dos patios; al ingresar puede notarse las hermosas plantas llenas de flores, como as tambin en el segundo patio. De la calle se notan las plantas y flores que le dan un ambiente de campo; el piso es de piedra de calicanto lo mismo que sus gradas para ingresar a los ambientes que se encuentran a un costado.

    En el segundo patio los rboles y las flores dan una imagen de

    campia florida; sus trece ambientes son de anchas paredes de adobe y techo de mojinete a tres aguas, de caa con barro; tiene puerta falsa que da a la calle Ayacucho y el piso es de madera. Cada ambiente tiene en la parte alta una ventanita en forma de claraboya que le da ventilacin y luminosidad. Adems tiene un amplio corral con piso de tierra.

    En la vivienda vivieron doa Julia Valdivia, Elvira Valdivia y Dina

    Valdivia,' doa Julia Valdivia fue casada con don Augusto Chocano y tuvieron tres hijos/ Csar, Leonor y Carlos Chocano Valdivia

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    Hoy en da la casona es de propiedad de la seorita Florencia Chocano Chambilla quien la conserva en forma fascinante.

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    4. LA CASA DEL CONDE DE ALASTAYA

    Esta Casona la encontramos en la esquina formada por la cuarta cuadra de la calle Moquegua con la tercera de Libertad, tiene los nmeros 404 - 414 por la calle Moquegua. Fue construida en 1750, como lo indica la fecha grabada en la portada, es de dos plantas de primorosa ornamentacin mestiza, con un gran escudo herldico central, medallones con bustos a diestra y siniestra, y decoracin de cuadrifolios tropicales, lleva una inscripcin en castellano antiguo Nuestra Noblesa Blasona que Su Santidad se encierra "

    Las ventanas exhiben la tpica reja de hierro forjado de reminiscencia vizcana, con candeleros Importados. Esta casona de dos plantas fue del Regidor Perpetuo de la Ciudad don Ignacio Nieto y Roa, Conde de Alastaya, ttulo que le fue conferido por el Rey Carlos III el 10 de octubre de 1769, se le declar exento de las contribuciones de lanzas y medianata, respecto a haber entregado en la tesorera general de Madrid 160,000 reales para su redencin.

    Don Ignacio muri sin hijos y recay el ttulo en su hermano don Antonio Nieto: se le despach cdula de sucesin el 2 de setiembre de 1776. Fue el ltimo poseedor del ttulo y falleci el 26 de agosto de 1803. Era Caballero de la Orden de Santiago, natural de Moquegua, Teniente Coronel de Ejrcito y Coronel del Regimiento de Milicias de dicho provincia.

    Actualmente en la casona vive el seor Felipe Yez Pinazo.

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    5. CASONA DE DON FRANCISCO VALDIVIA

    CARBONERA y DOA HERMINIA ACOSTA DE VALDIVIA

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    CASONA ubicada en la calle Moquegua No. 478. Casa colonial amplia de una sola planta, con dos patios de piso de piedra menuda, frente a la calle y el otro al fondo de la vivienda, el portn de fina madera con adornos, cuartos amplios con piso de madera, paredes anchas de adobe; el techo es de caa y barro en forma de mojinete.

    La vivienda fue del seor Francisco Valdivia Carbonera casado con doa Herminia Acosta de Valdivia, quien la vendi a don Juan Malatesta que representaba a la Sociedad Comercial Malatesta Hermanos" por la cantidad de 1.911 soles, moneda nacional, por escritura pblica del 29 de mayo de 1909 ante el Notario Pblico Juan A. Fernndez Dvila.

    Esta hermosa casa inicialmente fue de don Mariano Samuel Barrios que fue adjudicada en remate pblico a don Francisco Valdivia Carbonera. La vivienda tena una extensin de 684 metros.

    ltimamente las seoritas Zoila y Rosa Luna estuvieron en posesin de la casona.

    Hoy funciona como La Casa del Jubilado".

    6. ESPAOLSIMA CASONA DE

    DON CARLOS ALBERTO FERNNDEZ DVILA TORRES y DOA REBECA DE LA FLOR

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    En la calle Moquegua, a la altura de la cuadra 6 y la calle Tacna No. 303, se forma una esquina frente a la Plaza de Armas, donde se halla esta espaolsima casona que tiene tres puertas de ingreso, una por la calle Moquegua y las otras dos por la calle Tacna, puertas de madera gruesas y altas.

    Inicialmente tena una hermosa ventana frente a la calle Moquegua, llamado tambin "del medio" o "del Comercio". Aqu vena funcionando la Farmacia "Francesa" de don Carlos Alberto Fernndez Dvila Torres, conocido como el "mdico de los pobres". Su padre don Armando Fernndez Dvila fue Agente Consular representante de la Colonia del Celeste Imperio, y su madre fue doa Esther Torres de Fernndez Dvila. El francs, como cariosamente se le llamaba, estuvo casado con doa Rebeca de la Flor, dama muy elegante y humana. El pueblo de Moquegua no olvida la sensibilidad y el apoyo dado a la gente humilde por esta caritativa familia.

    Hoy en da, la propiedad es del seor Flix Huarilloclla Mestas y

    funciona uno Librera y estudio fotogrfico.

    7. CASONA DE DOA MARTINA FERNNDEZ

    CORNEJO Y FERNNDEZ DE CRDOVA Y DON JOS CARLOS MENDOZA Y ARGUEDAS

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    CASONA ubicada en la esquina de la calle Moquegua con los nmeros 605 - 609- 613 - 617, a un costado de la plaza de armas; vivienda de una sola planta, con cuatro puertas de acceso al interior; piso de madera, con paredes anchas de adobe, techo de madera que termina en mojinete, sus ambientes amplios luminosos, con paredes altas.

    Una de las primeras propietarias fue doa Mara Martina Fernndez Cornejo y Fernndez de Crdova, dama de mucha fortuna, don treinta mil pesos para reedificar la Iglesia Beln, tambin siete mil pesos para concluir la sala del Hospital para mujeres, trece mil pesos para la edificacin de la portera, sacrista, la botica, haciendo una donacin total de cincuenta mil pesos.

    . Su esposo el Capitn don Jos Carlos Mendoza y Arguedas edific

    el crucero del Hospital Betlemtico y la Comisaria del cercado.

    Doa Mara Martina fallece el 13 de octubre de 1839, en su testamento de fecha 28 de agosto de 1839, ante el Notario Pblico don Francisco Borja Vizcarra, pidi que su cadver vistiera el hbito de la Orden Betlemtica y se le sepultara en el lugar que ella haba convenido en la iglesia que reedific, contando para ello con licencia v permiso del Obispo de la dicesis.

    La vivienda pas a propiedad de don Alcibades Chocano y Cornejo sobrino de doa Mara Martina. Y por testamento del 20 de setiembre de 1911 la vivienda pas a doa Fortunata Alczar de Gil por una deuda de don Alcibades le tenia. Despus a la familia Ghersi y hoy en da es duea la familia Flor-Bedoya.

    8. CASONA DE LA FILANTRPICA MATRONA

    GUEDA VIZCARRA GNGORA DE ANGULO

    CASONA ubicada en la calle Moquegua con los nmeros 650 - 656 - 646, tiene tres puertas de acceso a su interior, de dos plantas, con un balcn construido con mucha elegancia. En la primera planta el piso es de cemento con dos patios, al ingresar y al medio de la vivienda. Posee nueve ambientes altos y amplios con paredes de adobe y techo de caa con barro, al fondo existen tres bvedas de piedra. Al segundo piso, se ingresa por una escalera de madera en forma de caracol; existen diez ambientes algunos de ellos deteriorados por el tiempo, el piso es de madera, paredes de quincha y techos de caa con barro, con dos ventanas amplias que dan

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    a sus dos balcones construidos con mucha elegancia de barrotes de fierro y barandas de madera.

    En esta vivienda vivi la filantrpica matrona doa gueda Vizcarra Gngora Vda. de Angulo, moqueguana de nacimiento, casada con don Fermn Angulo. Dama con mucho amor a los humildes y preocupada por el ornato de la ciudad. Integr la delegacin de damas que sali del templo de Santo Domingo, el 8 de octubre de 1880 (Da de la Mujer Moqueguana), a pedir al oficial chileno Mayor Salvo, las garantas para los indefensos y dbiles de la ciudad, amenazada de ser incendiada. Acto con el cual dej constancia para la historia que las moqueguanas sabamos defender la santidad de nuestros hogares y el honor de nuestros hijos".

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    Dotada de notable fortuna en propiedades y efectivo, se preocup por ayudar a los que sufran hambre y privaciones, lo que le mereci el ttulo de "Benefactora de los Pobres por la Sociedad de Beneficencia Pblica de Moquegua, el ao de 1900. Con su peculio edific en 1904 el Mercado Antiguo La Recova"; en 1906 colabor con el mejoramiento del Asilo de la Infancia y la Capilla del Cementerio General que hoy lleva su nombre en gratitud. Edific dentro del Hospital San Juan de Dios un local para los hermanos de la Caridad encargados de dirigir el nosocomio, que se inici con el producto de la rifa de unas alhajas que obsequi para tal fin. Lo seora Vizcarra Gngora Vda. de Angulo hizo venir del Puerto de Ilo una balandra de madera para proseguir los trabajos de edificacin del hospital.

    Don testamentariamente a la Sociedad de Beneficencia Pblica de Moquegua sus principales propiedades que tena en Yacango, Samegua, Yaracachi y Locumbilla, cuyas rentas sostuvieron al Hospital de San Juan de Dios" hasta 1967. Falleci en 1909 en su casa construida en 1849; que hoy es ocupada por los juzgados de Instruccin, de Primera Instancia, y de Tierras. La Casona fue adquirida por la Corporacin de Desarrollo y de Rehabilitacin de Moquegua, siendo su Presidente el Ingeniero Luis Pinto Fernndez Dvila, para que funcionen los juzgados y se imparta una buena justicia.

    9. CASONA DE CORTE VIRREINAL

    DE DON DOMINGO BARRIOS

    Esta casona se halla en la calle Moquegua No. 732 - 735; tiene dos plantas, un portn de ingreso y una puerta angosta que da tambin ingreso al interior de la casa de la planta baja y los altos; en la planta baja tiene dos salones amplios y altos y uno ms pequeo, su piso fue Inicialmente de madera, hoy en da es de material noble, sus paredes son gruesas y de adobe. A la segunda planta se ingresa mediante una escalera de madera, tiene ocho ambientes y una terraza, con piso de madera y las paredes de quincha (caa con barro), el techo es de dos aguas y de madera. A la calle da por medio de un hermoso balcn colonial con rejas metlicas, tiene piso de madera.

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    Inicialmente la casa fue de don ngel Blanco que en remate pblico de fecha 12 de octubre de 1890 fue adquirida por don Domingo Barrios por la cantidad de dos mil novecientos noventa soles con noventa centavos, ante el Notario Pblico Norberto Dvila, hoy la vivienda es de propiedad de la familia Vargas-Quintanilla.

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    10. CASA DE DON MARIANO LINO URQUIETA

    AMPUERO La casa donde vivi don Mariano Lino Urquieta est ubicada en la calle Moquegua, con los nmeros 817 821; es de dos plantas y dos puertas con salida a la calle; paredes amplios, unas de piedra y otras de adobe, el piso de la primera planta es de piedra, y la del segundo piso es de madera, lo mismo su techo, tiene balcn con barandas de madera.

    En esta abrigada vivienda naci Mariano Lino Urquieta Ampuero el 16 de setiembre de 1865, hijo de un humilde agricultor Juan Urquieta y de una modesta mujer, Petrona Ampuero; fue bautizado en la Parroquia de Santa Catalina Virgen y Mrtir (Iglesia Matriz) el 22 de setiembre del mismo ao.

    Sus primeros estudios los realiz en una escuela de primaria y la secundaria en el Colegio Nacional "La Libertad" hoy "Simn Bolvar. Termin exitosamente sus estudios secundarios gracias a la innata inteligencia y prodigiosa memoria que posea.

    En su hogar reinaba la extrema pobreza; se dice que estudiaba aprovechando lo claridad lunar o la mortecina luminosidad de los faroles.

    Viaj a Lima con la intencin de seguir Derecho, pero ante su humanitario impulso de ser til a la clase desvalida de su tierra, en forma brillante ingres a la Escuela de Medicina. A los 20 aos cursaba el Primer ao de Medicina. A la muerte de Daniel Alcldes Carrin, Urquieta con sus convincentes dotes de oratoria, represent a sus compaeros en su homenaje, lo que abri los ojos a Lima, porque Urquieta se dio a conocer que s era un joven estudioso de figura pequea y dbil pero tena mucha calidad humana.

    Termin su carrera de mdico en 1892 a los 27 aos y atrado por el cario lleg a Moquegua a servir a sus paisanos, dejando de Iado ofrecimientos de trabajo en la capital. Cumpli su juramento hipocrtico aliviando y curando las dolencias de los enfermos y en muchos casos con su generosa ayuda costeando las medicinas de sus pacientes pobres. Ingres a la poltica y en su modo de actuar fue un libre pensador. l se defina: Por libre pensador me tengo empeado he de estar -no tan slo en sacudir de mi conciencia toda carcoma de supersticin, sino adems en lograr que tambin los hombres todos la sacudan. Para un libre pensador,

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    mal pudiera ser la Biblia una aspiracin idealista; ms para todo el pueblo catlico siempre constituir un gigantesco paso, avanzado en el camino de la libertad del espritu.

    Urquieta, despus de cerca de 8 aos de ejercer su profesin de mdico caritativo en su querida Moquegua, viaj a Arequipa donde el 8 de julio de 1890 se le encuentra pronunciando un discurso en la Plaza de Armas.

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    En Arequipa funda un rgano poltico, "Ariete ", cada vez fue ms

    violento en sus ataques contra Roma y el clero catlico. Era antipapista y anticlerical. Atentan contra su vida el 25 de febrero de 1904, algunos revoltosos hicieron llover piedras sobre su casa; al da siguiente un grupo de amigos lo insta a denunciar el atentado ante los autoridades e insistieron para que hablara parado sobre una silla, que alguien sac; con valenta Urquieta dijo: "Hasta hoy hemos tenido que combatir con ladrones, desde hoy tenemos que combatir con asesinos. Y que conste que cuando he dicho asesinos, la autoridad se ha dado por aludida".

    Luis Alayza y Paz Soldn concretiza lo que Urquieta represent y encarn en su tiempo: "Moquegua es liberal; lo que contrastaba con Arequipa de mediados del siglo XIX que era intolerante y clerical en grado sumo, hasta que un moqueguano lustre, el doctor Mariano Lino Urquieta, emprendi la campaa innovadora con las invencibles armas de que dispona, pues fue talentoso mdico de magnnimo corazn y curaba de balde a los pobres, por donde iba era amado de las multitudes, su palabra admirable y sus gestos de orador de raza proporcionronle enormes xitos en las plazuelas primero y en el parlamento despus; sus actitudes de abnegado apstol y hasta la generosidad de que haca gala, a pesar de la enconada lucha en que viva y de la ardenta de su carcter todo contribua a convertirle en dolo de los turbas y orculo del elemento joven. Se propuso renovar las ideas del medio en que viva, combatir la intolerancia e inyectar oxgeno en el ambiente de stano de la ciudad mistiana para ponerla a tono con el siglo; y de esa manera la pequea y anticuada Moquegua hizo marchar por las sendas nuevas a la orgullosa Arequipa, tierra tradicional de cerebros luminosos y preclaros estadistas".

    Fue parlamentario por Arequipa y destac por sus cualidades de brillante orador y defensor de los derechos de la libertad. Falleci el 14 de agosto de 1920, antes de cumplir los 55 aos de edad. Arequipa llor su muerte, y el 16 de agosto fue el sepelio, el comercio cerr sus puertas, los tranvas dejaron de circular, las fbricas paralizaron y una imponente manifestacin de doce mil personas siguieron el fretro conducido en hombros y envuelto en la Bandera Nacional.

    En su tumba se puede leer: "Fue todo corazn y el corazn lo

    mat". Urquieta a la juventud le deca: "La rebelda, el carcter levantisco y altivo, es y debe ser siempre atributo inseparable de la juventud". Despus de este breve parntesis referido a la vida del ilustre moqueguano, anotaremos que en la actualidad la casa es de propiedad de la Familia Len-Mamani.

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    11. CASONA DE ATTILIO R. MINUTO Esta Casona, ubicada en la calle Moquegua No. 818 - 822, exhibe una extraa portada con doble ojiva. En ella vivi don Pacfico Barrios. La casona presenta dos patios elegantes, al ingresar se siente el clima colonial por sus ambientes altos iluminados, de paredes anchas y de adobe.

    Aqu tambin vivi el Bachiller don Attilio R. Minuto, quien naci en la ciudad de Moquegua un 19 de octubre de 1887, as como sus padres don Augusto Minuto, italiano, la dama moqueguana, doa Fortunata de la Flor. Don Atillo Minuto fue maestro de espritu amplio y de brillante inspiracin; investigador de la Historia moqueguana, en cuyas pginas han quedado prisioneros la belleza, el prestigio y la grandeza de Moquegua que tanto amaba y tan bien conoca. Ejerci la presidencia de la Sociedad de Artesanos Luz y Progreso" desde 1912, cuyo primer bibliotecario fue don Carlos Antonio Hurtado.

    El espritu de avanzada de don Attilio R. Minuto le hizo formar el grupo de partidarios que recibieron al Doctor Mariano Lino Urquieta, en mayo de 1915, como muestra de apoyo que daban a su candidatura para Senador por Moquegua.

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    Al morir Urquieta en Arequipa, Minuto represent a Moquegua en

    su entierro donde despidi al preclaro hijo de esta tierra con un encendido discurso de homenaje.

    Fue tambin docente del Colegio de La Libertad" y su Director durante 12 aos, de 1925 a 1937; logr la refaccin del local y que todos los alumnos diariamente saludaran a la Bandera antes de comenzar su tarea, hizo componer el Himno al Colegio. Como literato e investigador escribi Rpido Bosquejo Monogrfico de la Provincia Litoral de Moquegua", indito y obsequiado en originales a lo Biblioteca Nacional. Fund el peridico El Farol"; colabor con varios artculos histricos sobre Moquegua en el Ferrocarril", La Tribuna" y El Comercio" de Lima.

    Falleci a los 70 aos en la ciudad de Lima el 1 de octubre de 1957.

    En la actualidad, en esta Casona vive lo familia moqueguana, Daz Fernndez Dvila.

    12. CASONA DE DORA JUANA CORNEJO

    VDA. DE RONCAL

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    CASONA ubicada en la calle Moquegua No. 831, anteriormente en 1907 tena los Nos. 121, 123 Y 125; posee una magnfica puerta de madera tallada, con dos extensos patios y ocho ambientes claros, el piso de los patios es de piedra y de los ambientes de cemento. Aqu en esta casa vivi la seora Juana Cornejo Vda. de Roncal que la heredara de su padre don Manuel Segundo Cornejo y de su to Mariano Florencio Cornejo. Tena una extensin de 260.52 m2, medida tomada por el Ing. David Antonio Daz, fue vendida a la seora Juana Portocarrero Vda. de Dvila por la cantidad de mil ochocientos bolivianos de plata equivalente a mil quinientos sesentaicinco soles con veintids centavos en moneda nacional.

    La seora Juana Portocarrero Vda. de Dvila confiesa que para realizar dicha compra haba recibido prestado de su hija poltica, doa Rosala F. Dvila Vda. de Snchez Moreno la cantidad de quinientos bolivianos de plata o sea cuatrocientos treintaicuatro soles con sesenta y nueve centavos peruanos por el trmino de un ao. La venta se realiz el 3 de agosto de 1907, y actuaron como testigos don Juan Podest, Mariano Romero y Jacinto Alipio Castro ante el Escribano Juan A. Fernndez Dvila.

    El inmueble, actualmente es de propiedad de la Cooperativa de Ahorro y Crdito "Santa Catalina Ltda." No. 140, en donde viene prestando sus servicios de crdito a la colectividad moqueguana.

    13. CASONA DE DONA ISABEL VIZCARRA

    VDA. DE ANGULO

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    CASONA ubicada en la calle Moquegua No. 848 838; tiene tres puertas de Ingreso, con un portn al centro, las paredes son de piedra calicanto, las que dan frente a la calle, tiene dos plantas, y dos patios amplios, uno al ingresar y el otro al fondo; su piso es de piedra, presenta seis ambientes amplios, altos en la primera planta; las gradas son de piedra para subir al segundo piso, que tiene seis cuartos de piso de madera y paredes de quincha (barro y caa) y techo de caa y madera, con un hermoso balcn que corre de extremo a extremo con balaustre de metal y piso de madera.

    Esta casona tena puerta falsa que daba a la calle Tarapac, su superficie era de 821 metros cuadrados. Inicialmente fue su propietaria doa Isabel Vizcarra Vda. de Angulo y don ngel Vizcarra, despus pas a la propiedad del doctor Ricardo lvarez Linares, conocido abogado que naci en la Villa de San Salvador de Puquina, quien destac como catedrtico de la Universidad de San Agustn" de Arequipa, as como docente y despus como Director del Glorioso Colegio Simn Bolvar" de Moquegua (1937 - 1940). Fue presidente de la Corte Superior de Justicia de Moquegua y Tacna. Estuvo casado con doa Rosa Amalla Manrique.

    Hoy el dueo de esta casona es el seor Julio Simauchi Miquichichi, y se ha convertido en conventillo" y est declarada como Monumento Histrico".

    14. CASONA

    DE LA MUNICIPALIDAD DE MOQUEGUA CASONA ubicada en la calle Moquegua con el No. 851. Inmueble de dos plantas amplio, con una puerta gruesa de madera llena de adornos y con clavos de bronce en forma de tetilla.

    En la primera planta se notan los dos patios tradicionales tanto al ingresar como en el medio de la vivienda. Desde su construccin inicial, hasta la fecha ha sufrido modificaciones. Su piso es de cemento; sus paredes, anchas y de adobe; posee catorce ambientes, ventilados y llenos de luz, con techos de caa y barro tipo mojinete.

    Para subir a la segunda planta tiene gradas de piedra de calicanto. Esta planta posee cuatro ambientes, piso de madera, paredes de quincha y techos de barro con caa. Su construccin data del ao de 1799.

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    En el patio del interior hay un tinajn, que lleva muy cerca de su cuello la Inscripcin: "SAN ANTONIO AO DE 1540".

    En la vivienda, inicialmente vivi don Domingo Barrios y su familia. Fue donada por los hermanos Mara A. Barrios y Augusto Barrios a la Municipalidad de Moquegua el 5 de setiembre de 1945 ante el Notario de Lima don Jos A. de Leuchl.

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    15. HERMOSA CASONA DE

    DON RICARDO DE LA FLOR Y DORA AMELIA ANGULO DE LA FLOR

    CASONA ubicada en la calle Ayacucho con los nmeros 540 y 548. En esta edificacin se distinguen las dos ventanas de reja del primer piso y el original balcn de la segunda planta; los dos patios llenos de flores. Es una hermosa casona solariega, frente a la Plaza de Armas. La puerta que da ingreso est construida con fina madera, piso de piedra en los dos patios, ambientes altos luminosos con piso de madera, paredes anchas de adobe y techos de caa con barro, gradas de piedra de calicanto unen al original balcn de la segunda planta con piso de madera y barandas que corren de extremo a extremo, restaurado y bien conservado.

    Don Ricardo de la Flor y doa Amelia Angulo de la Flor, adquirieron el inmueble del doctor Carlos Gmez Morn por escritura pblica otorgado el 11 de Setiembre de 1913 ante el Notario Juan A. Fernndez Dvila. El doctor Gmez Morn, Agente Fiscal, adquiri la casa de las seoritas Mara Josefa Maldonado Morn y de doa Elvira Maldonado Morn, cuya propiedad les vena por herencia de sus padres doctor Eliseo Maldonado y de doa Julio Morn de Maldonado.

    Actualmente vive aqu el seor Herbert de la Flor Angulo conocidsimo personaje de Moquegua que ha dedicado su vida a la actividad cultural y el ornato de lo ciudad.

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    16. LA CASA DEL CORREO

    La casa del Correo est ubicada en la calle Ayacucho con los nmeros 550 - 560 - 570. Esta edificacin est construida en dos plantas, los cimientos y sobre cimientos son de piedra con mortero de cal, el muro frontal hacia la calle Ayacucho es de piedra cantada, asentada con mortero cal y arena. Los muros de la primera planta son de adobe asentado con barro, las jambas y dinteles de puertas y ventanas que dan a la calle son de piedra labrada y martellinada; los muros de la segunda planta en su integridad son de quincha (columnas de madera de pino y entrepaos de caa y barro). Los pisos de todos los ambientes de la planta en su mayor parte son de pino oregn sin machihembrar, adems, el piso de un ambiente sin techo es de piedra, la techumbre en general est construida por una estructura de madera, estilo colonial del tablero encajado. Las ventanas de la planta baja llevan rejas de fierro. La escalera de acceso al segundo piso es de dos tramos, el primero es tramo de piedra y el segundo de madera de pino oregn con balaustres de madera torneada, los corredores de la planta tienen barandas con pasamanos de madera de pino y balaustres de fierro vaciado; muros de quincha y un balcn colonial.

    Fue propietaria de esta casona doa Fortunata Alczar Arguedas de Gil y segn testamento de fecha 2 de setiembre de 1914, ante el Notario Pblico Orestes Rivero se la entreg en pago de una deuda a don Alcibades Chocano quien dispuso que sea vendida al mejor postor y que su valor se distribuya a sus herederos y legatarios.

    La casa fue subastada el 30 de abril de 1925. Participaron varios postores: don Francisco V. Flores, Norberto Villegas, Csar A. Gasco, Dr. Adolfo Gmez Carrera y don Jos V. Jimnez Pomareda, este ltimo present la mayor oferta: 450 libras peruanas.

    Don Jos V. Jimnez Pomareda estuvo casado con doa Gumercinda Gmez. Al fallecer stos en 1963 y 1962, respectivamente, sus herederos, Jos Lucas Germn, Julia Irene, Jos Eduardo David, Hilda Teresa, Jos Julio, Isabel Graciela Ada y Julia Bertha Jimnez Gmez, venden la casa, al Organismo Regional de Desarrollo de Tacna y Moquegua, a travs de la Direccin Regional de Transportes y Comunicaciones, representado por su Director Regional, el Ing. Jorge Cabrera Ferreyros, mediante Resolucin Jefatural No. 260-80-0rdetam de fecha 24 de diciembre de 1980. El inmueble tiene una extensin de 478.16 mts. Cuadrados. Actualmente funciona la Oficina de Correos

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    17. CASONA DE DORA MARA ISABEL DAZ

    FERNNDEZ DVILA y DE DON LISANDRO DIEZ CANSECO

    CASONA ubicada en la calle Ayacucho con el nmero 828; tiene una atrayente puerta labrada de madera, con clavos de bronce en forma de tetilla que adornan todo el portn. La valiosa portada relieva el motivo de ngeles tallados junto a tallos trenzados con flores y hojas.

    En esta soleada vivienda por los aos de 1920 vivi la seora Mara Isabel Fernndez Dvila, casada con don Lisandro Diez Canseco y de cuyo matrimonio nacieron sus hijos: Vctor, Heradio, Mercedes, Cristina, Salvador, Cecilia y Fernando Alberto Diez Canseco y Daz.

    Doa Mara Isabel, dama piadosa y humana, ayudaba a la gente necesitada que le solicitaba ayuda. Tuvo muchas propiedades, inmuebles, casas, adems de la que viva en la calle Tacna que figuraba con el No. 16; en la calle Lima No. 102, en la calle Ayacucho No. 18 y 20, en la calle Arequipa No. 3 y 5 y otra en la calle Lima No. 136, algunos fundos y

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    alfalfares: "El Bollo " y la "Pampa "del alto de la Villa y los fundos "Ocollita" y "El Palmo".

    En la casa motivo de esta nota naci y falleci su hija Mara Jess Alicia Diez Canseco Daz de Talledo casada con don Pedro Talledo.

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    Doa Mara Isabel de Daz de Diez Canseco, test el 6 de agosto de 1925 a las 3:30 de la tarde en su casa, en presencia del Notario Pblico Orestes Rivero Maldonado y como .testigos los seores: Coronel Manuel Diez Canseco, Modesto Vera Tudela y Francisco David Velsquez.

    Actualmente la vivienda ha sido modificada convertida en "Conventillo" por el dueo don Amaro Cullar Flor.

    18. CASA DE DON MATEO ALAYZA QUESADA

    Ubicada en la calle Cuzco No. 544. Tiene dos patios amplios llenos de plantas, once ambientes construidos de adobe con el encanto inefable de mojinete, de una sola planta. Aqu vivi su dueo don Mateo Alayza Quesada, hijo de don Pedro Jos Alayza y de doa Manuela Quesada.

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    Don Mateo contrajo matrimonio primero con doa Tomasa Solar con quien no tuvo hijos, porque falleci a los siete meses de casada. En su segundo matrimonio se cas con doa Maximiliana Angulo con quien vivi cerca de diez aos sin tener hijos, fue dueo tambin del fundo "La Chimba",

    El 17 de enero de 1885, a las 4 de la tarde test ante el notario

    doctor Manuel Sols a favor de don csar Delgado Bellido y doa Elvira Maldonado.

    Actualmente vive en la casona el seor Jaime Delgado, su

    propietario.

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    19.

    HERMOSA CASONA DE DON NICOLS JACINTO CHOCANO y

    DOA GERTRUDIS DEL SOLAR DE CHOCANO. CASONA ubicada en las esquinas de la calle Ancash No. 408 - 417 y Ayacucho No. 474.

    El tratamiento de la fachada fue aparejada con piedra de calicanto enmarcante de la portada. Hay un vistoso y alegre patio central resguardado por elegantes columnas abalaustradas, confeccionadas en madera de cedro procedente de Cochabamba, todava se conservan los ambientes con aires virreinales. Casona de una sola planta. Fue su propietario don Nicols Jacinto Chocano y doa Gertrudis del Solar de Chocano en el ao 1877. Al fallecer, los herederos vendieron sus pertenencias, la del lado de calle arriba a don Julio Csar Chocano y la otra fue adquirida en 1895 por don Jos Benigno Chocano Zela hijo de don Jos Santos Chocano y de doa Ignacia Zela.

    Don Jos Benigno hombre acaudalado casado con doa Mara Magdalena Alczar y de cuyo matrimonio nacieron Mara, Benigno, Mara Ignacia, Emilio y antes del matrimonio Augusto Chocano, todos reconocidos. Al fallecer don Jos Benigno dej como albacea a su esposa Mara Magdalena, quien vivi junto a sus hijos.

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    En el testamento de fecha 13 de julio de 1899, don Jos Benigno,

    menciona que tiene seis cuartos en la alameda, una casa en la calle Tacna con su casern, la casa en que vive en la calle Ancash con una casa contigua al lado de arriba que es parte integrante de ella, una casa tienda en la calle Arequipa que forma la esquina con la de Ayacucho, un casern en la calle Ayacucho prximo a la Alameda, varias fincas y haciendas como 'Yaracachi ", Yaravico", Bellavista", Santa Ana", Calaluna", etc.,

    Actualmente la casona est en propiedad de la seora Teresa Delgado Vda. de Podest y se le conoce por los sugestivos platos de comida y postres, distinguindose por la sazn y calidad del lugar denominado La Posada.

    La casa contigua al lado de arriba vive la conocida familia Mercado Artieda-Benel Glvez.

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    20. CASONA DE DON MANUEL ZEBALLOS

    En la calle Callao, con el nmero 360, se halla esta Casona que exhibe una hermosa portada de piedra caliza, tallada con figuras que representan la vid y la granada como smbolos de la fecundidad; destacan tambin los relieves de nios que llevan sobre su cabeza una canasta con flores y frutos del lugar, a la manera de mitolgicas canforas griegas. Esta portada resume una evidencia clsica del barroco mestizo en Moquegua.

    La casona fue adquirido por don Manuel Zeballos, el 24 de diciembre de 1890, de don Jos Santos Oviedo por la cantidad de ciento noventaids pesos que en esa poca equivaldra a ciento cincuentaitrs

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    soles con sesenta centavos, ante el Notario Pblico Norberto Dvila y como testigos don ngel Ghersi, Juan E. Jimnez.

    Hoy en da la casa se encuentra derruida y cerrada; es urgente que reciba la mano restauradora que la haga revalorar en las nuevas generaciones los aejos aos de esplendor y fortuna de esta grata tierra surea. Su propietario es el seor Antonio Hurtado.

    21. CASONA DE LA COLONIA DEL IMPERIO CELESTE

    Esta Casona, ubicada en la calle Tarapac, signada con el No. 280; se halla sumamente deteriorada por el transcurso del tiempo, aspecto de abandono que reclama una pronta atencin de restauracin para darle la prestancia que tuvo en sus mejores aos. Esta casa es de dos pisos que se comunican mediante una original escalera.

    La casa fue de doa Mara Barrios de Murazzi, y segn escritura pblica de 27 de setiembre de 1902 fue vendida a Pablo Malatesta dueo de la Sociedad Comercial Malatesta. Sealamos como dato curioso que a la calle Tarapac se le conoca con el nombre de calle del partero segn se desprende de la escritura de venta.

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    Despus fue adquirida por el seor Armando Fernndez Dvila el 8 de agosto de 1907, como representante de la Colonia del Imperio Chino a los seores Malatesta Hermanos, por la cantidad de dos mil soles moneda nacional, ante el escribano Juan A. Fernndez Dvila en presencia de los testigos seores Manuel Zeballos Enrique Angulo y Mariano Romero.

    22. CASONA DE DON VICTORIO PORCELLA

    Y DE DOA CARMEN ANGULO DE PORCELLA

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    CASONA ubicada en lo calle Tarapac No. 383, con portada de madera y ventana de fierro, con dos patios amplios, a la entrada y al medio, con siete amplios ambientes con paredes gruesas de adobe y techo de caa con barro.

    Uno de los primeros propietarios fue don Victorio Porcella casado con doa Carmen Angulo, quienes la vendieron al Coronel Manuel Francisco Diez Canseco el 22 de agosto de 1900 por la cantidad de dos mil quinientos bolivianos, y tena una extensin de 586 metros cuadrados, ante el Escribano Pblico Fermn Angulo. ltimamente fue adquirida por don Martn Flor y doa Marina Villanueva de Flor. Actualmente la vivienda se encuentra convertido en conventillo".

    23. LA CASA DE LA SERPIENTE

    Esta casona la encontramos ubicada en la esquina de la calle Tarapac con los nmeros 390 398 y Ayacucho No. 861. Se le conoce como La Casa de la Serpiente; dicho nombre se debe a la cabeza y parte del cuerpo de una serpiente tallados en madera que sobresalen en la parte inferior de una pequea ventana; destaca la fachada por la cabeza del ofidio frente a la calle Tarapac. Esta edificacin configura el tpico solar virreinal con portadas ptreas, zagun abovedado, patio embaldosado, amplias habitaciones fabricadas con gruesos muros de adobe, sobre cimientos de calicanto, enlucidos de clido rojo que dotan del siglo XVIII.

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    Las molduras talladas, los querubines que exornan las viguetas y

    los entablamientos de la techumbre, responden al barroco mestizo. Como indica Kuon Cabello, (en) posesin del inmueble estuvo don Mariano Maldonado y Llosa, durante los aos de 1864 a 1866. Esta casona sufri los efectos del terrible terremoto que azot a Moquegua y todo el sur del pas, el 13 de agosto de 1868, y probablemente a consecuencia del mismo se vinieron abajo los altos y don Mariano Maldonado tuviera que reconstruir la finca y parte de la fachada. De ah que en el centro del dintel de la puerta principal y en alto relieve destaca la letra M", inicial de Maldonado apellido de su dueo en esa poca. Despus vivieron en esta renombrada casona los Jimnez de la Flor y los Chocano, entre sus primeros propietarios. Fue Cuartel de Gendarmera durante la Guerra del 79, Escuela Parvulario bajo lo gida de don Rafael Daz. En 1942, fue adquirido por doa Grimanesa Diez Canseco Vda. de Vargas, quien la ocup hasta 1962 y luego la vendi a los esposos Martn Flor Jurez y Marina Villanueva de Flor. Finalmente fue adquirida por el Banco Central Hipotecario del Per, cuya sucursal de Moquegua funcion en dicho local desde el 12 de julio de 19771 despus de varios meses de restauracin y embellecimiento en sus diferentes ambientes interiores y exteriores por el Arquitecto Luis Felipe Calle para que recuperara su aeja prestancia. El Banco ha proporcionado dos ambientes para que funcione el Archivo Sub-Regional de Moquegua.

    24. LA CASA DE ASILO DE LOS ANCIANOS

    CASONA ubicada en la esquina de la calle Tarapac No. 490 - 429 y 9 de Ayacucho tiene tres puertas de acceso a la vivienda, conjuntamente con una ventana de fierro que da a la calle Tarapac, y tres ventanas chicas Y una grande dan a la calle Ayacucho. Es una casona impresionante, con un sobrio acabado de sus lneas como la sobresaliente distribucin de los patios llenos de sol y color (en el fondo tiene una Palmera proyectada al infinito). Residencia muy acogedora: tiene quince ambientes.

    Inicialmente duea de esta casona fue doa Francisco Angulo de Fernndez Maldonado y de su esposo don Toms Zapata, despus por herencia a doa Eliza Alayza de Fernndez Maldonado, segn escritura pblica de 27 de setiembre de 1899, ante el Escribano Pblico Juan A. Fernndez Dvila. Y ltimamente de doa Mara Rosa Jimnez de lvarez nacido en Moquegua, el 5 de setiembre de 1906, hija legtima de don David Jimnez de la Flor y de doa Mercedes Vargas de Jimnez. De su matrimonio no tuvo hijos. Antes de su fallecimiento, test el 31 de marzo

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    de 1963, en la ciudad de Lima, ante el Notario Pblico Dr. Guillermo Balln Torres, donando dicho Inmueble a la Pa Unin de San Antonio de la ciudad de Moquegua, para que las seoras ms pobres puedan pasar los ltimos das de su existencia, y que con las otras dos casitas de la misma calle paguen los gastos que demande el sostenimiento de dicha propiedad. Falleci, el 9 de junio de 1963 a las 14:20 horas en la Clnica Internacional a la edad de 56 aos.

    En cumplimiento de su deseo hoy funciona como Asilo de Ancianos.

    25. LA CASA DE DON JUAN ANTONIO

    MONTENEGRO y UBALDI CASA ubicada en la calle Cajamarca No. 274, bella vivienda con una portada de madera llena de adornos, de dos plantas, con dos patios al ingresar y al medio, con un balcn de madera que da a la calle Cajamarca. Aqu vivi y muri don Juan Antonio Montenegro y Ubaldi, primer historiador moqueguano, abogado de las Repblicas de Bolivia y el Per. Examinador Sinodal del Obispado de Arequipa, Cura Primero y Vicario Forneo de la ciudad de Moquegua. En 7878 fue Cura de la Santsima

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    Trinidad de Conayca, obispado de Guamanga; despus en 1825 Cura de San Pedro de Ilabaya y fue promovido a la Iglesia Matriz de Moquegua.

    Naci el 27 de Junio de 1722, sus padres fueron don Manuel Montenegro y Quesada, Teniente Coronel de Milicias y doa Catalina Ubaldi y Zeballos.

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    Fueron catorce hermanos, Juan Antonio era el menor y mellizo, fue enviado por sus padres al Real Convictorio de San Juan Bautista de Chuquisaca, en donde termin sus estudios de Filosofa, Teologa y Derecho Cannico, que en los ltimos meses de 1806, conoci a la seora Manuela Uriarte, la que le dio una hija llamada Mara Francisca Uriarte.

    El 29 de diciembre de 1828, coloc la piedra fundamental" de la construccin de piedra y cal de la nueva Iglesia de Beln y el 29 de marzo de 1830, bendijo la misma obra concluida en esa fecha. El 11 de abril de 1844, recibi los restos de su amigo el Mariscal Domingo Nieto trados desde el Cusco.

    Su obra, manuscritos Noticia de la Ciudad de Santa Catalina de Guadalczar de Moquegua"; que comprende aspectos histricos ms importantes de Moquegua, fue publicada en la Revista Histrica No. 1 del Instituto Histrico del Per, Tomo I, Marzo 1906.

    De sus doce tomos manuscritos, fueron obsequiados nueve por la seora ngela Barrios Vda. de Espinoza y tres por la seora Zelmira Valdivia Vda. de Morn, al Primer Obispo de la Dicesis de Tacna y Moquegua, Mons. Carlos Alberto Arce Masas, en la que ejerci su sagrado ministerio desde el 15 de julio de 1945 hasta los primeros das de marzo de 1957.

    Juan A. Montenegro y Ubaldi falleci el 11 de marzo de 1854.

    Actualmente la vivienda donde fue el aposento del historiador Montenegro y Ubaldi es de propiedad del seor Francisco Caldern Mendoza.

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    MONUMENTOS ARQUEOLGICOS

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    26. LA CRCEL. HOY MUSEO ARQUEOLGICCO

    REGIONAL

    Se encuentra frente a la Plaza de Armas en la calle Ayacucho No. 530; es un MONUMENTO construido en piedra, posiblemente entre 1773 - 1778, con la finalidad de recluir a los delincuentes y polticos que atentaran contra el orden jurdico establecido. ES una de las pocas edificaciones que inicia la distribucin de sus ambientes con un sistema abovedado.

    Por los aos de 1842 y 46, los moqueguanos hicieron ostentacin

    de patriotismo y de sufrimiento. El General don Ramn Castilla, en setiembre de 1842 acantonado

    en Tacna, quiso retirarse a Arica, pero los tacneos le rogaron que los defendiera y se vio en la necesidad de acceder. Reuni una compaa de Granaderos cvicos y otra de Caballera y se agregaron voluntariamente los espaoles vecinos, armados cada uno como se pudo. Llegado el General la Fuente fue derrotado y Castilla march inmediatamente con la Compaa de Cazadores, la de Granaderos y la de Caballera, se apoder de Moquegua sin resistencia. Coloc sus dos Compaas de Infantera una en la CRCEL y la otra en un costado de la plaza. Los moqueguanos no

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    pudieron sobrellevar que los tacneos ocupasen Moquegua, y al arriero Jos Beltrn, joven de bro extraordinario, habl con algunos de sus paisanos y pudo reunir 29 valientes, con los cuales desde Samegua emprendi en da claro la avanzada sobre Moquegua. Los vecinos quedaron atolondrados al ver marchar este puado de hombres con carabinas, escopetas y fusiles descompuestos hacia la plaza para apoderarse de los cuarteles. Llegaron y emprendieron el ataque. Castilla que recin se sentaba a comer, tom inmediatamente su espada y corri hacia la plaza siguindole cuatro o seis de sus asistentes. En el trnsito le mataron dos y cuando lleg a la plaza, un balazo le llev un bocado de su espada, otro le quit la charretera izquierda, otro le perfor la charretera derecha y le hiri el hombro. Pero el General march firme y lleg a la puerta de los cazadores que tena el postigo abierto observando que una mitad de sus soldados se batan en la esquina de Santo Domingo. Castilla a espada trat de sacar la compaa, pero como todos los tiros los dirigan al postigo y caan varios muertos, que llegaron hasta quince, no le fue posible sacar ms que unos pocos soldados. El Cuartel de Granaderos no abri la puerta a Castilla porque se haba atascado y tuvo que partir en medio de los fuegos a pie hasta la alameda donde encontr felizmente la Caballera, que su Jefe Castan haba preparado en ese punto desde que oy los tiros.

    Castilla se salv y se retir con la Caballera. Esto sucedi el 29 de

    Setien7bre de 1842, y en ese da parece que Castilla y los moqueguanos quisieron ostentar hasta que punto pueden llegar el valor y la serenidad de dos contendientes que tienen por divisa el honor.

    Hoy da los presos son recluidos en el CRAS San Ramn ubicado

    en Samegua, y la casona es habilitada para el Museo Arqueolgico Regional.

    27. LA ANTIGUA IGLESIA-CONVENTO DE SAN

    FRANCISCO - EL COLEGIO SANTA FORTUNATA

    El espaol Gaspar Fernndez de Lugo Cabeza de Vaca radicado en Moquegua, en su testamento de fecha 13 de octubre de 1604, en una de sus clusulas, dispone: "mando que la casa en que vivo con su puerta y sito de ella se de en propiedad a la Cofrada del Santsimo Sacramento de este valle para ser entregadas a los Padres Recoletos de San Francisco". Ms de un siglo despus el piadoso benefactor don Jos Hurtado Zapata y

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    Echagoyen, por testamento de 10 de setiembre de 1708, dispone que con su hacienda de via de Yaravico y su casa, que representaban un caudal de 117 mil pesos con 6 reales, la compaa estableciera en Moquegua un Colegio para la enseanza de la juventud, disponiendo al mismo tiempo, que si en el trmino de ocho aos no se fundara el colegio se hiciese una casa para los Recoletos Franciscanos.

    El Cabildo, con fecha 17 de enero de 1709, solicit al Rey de

    Espaa la fundacin del Colegio San Jos, a cargo de la orden de los Jesuitas, autorizacin que lleg por Cdula Real firmada en Corella el 5 de octubre de 1711, imponindose en ella la condicin de que las dos terceras partes de religiosos que habiten el Colegio fuesen misioneros. Antes de recibirse dicha autorizacin, desde el 25 de agosto del mismo ao, ya se encontraba en funcionamiento, "el Colegio, Residencia, Hospicio o Misin de los padres jesuitas", en el sitio, que segn Juan A. Montenegro y Ubaldi, dejara en 7604 Gaspar Fernndez de Lugo Cabeza de Vaca.

    Los jesuitas estuvieron en Moquegua hasta el 75 de Diciembre de

    7767, en que salieron nueve padres, que dejaron con el colegio, una Iglesia.

    A pedido del Obispo de Arequipa al Rey de Espaa para que autorizara poner un convento de San Francisco en la ciudad de Moquegua, el soberano decide conceder a los frailes franciscanos Observantes de

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    Propaganda Fide, la posesin del Inmueble a medio construir dejado por los jesuitas.

    Al hacerse cargo los franciscanos, la capilla del Convento estaba

    arruinada a pesar de su reparacin parcial, pues sus techos estaban destrozados y no resistan las lluvias. En su Interior, el retablo de madera que adornaba el altar mayor, luca cuatro esculturas que representaban a Francisco de Borja, San Jos, San Ignacio de Loyola y San Francisco Xavler, adems de un nicho donde se vea la Imagen de Nuestra Seora de Loreto, veintisis lienzos terminaban de decorar la nave. La torrecita de adobe rehecha desde el nacimiento de los arcos, eran dos varas y media ms alta de su antiguo tamao. La nueva Iglesia que se estaba construyendo con calicanto gracias a la ayuda del vecindario, es tomada en su construccin por los franciscanos. Por los efectos del terremoto de 1868 se viene abajo la bveda, hecho que convierte al templo en un montn de escombros, que se mantienen hasta hoy. De las ruinas se aprovecha la junta de refaccin del Templo de Santo Domingo la que, merced a los permisos del 26 de abril y del 9 de agosto de 1899 otorgados por la Direcci6n de Obras Pblicas, empieza de all a extraer las piedras necesarias paro reparar la mencionada Iglesia, actual parroquia de Moquegua.

    En el ao de 1942, se poda observar ms la fachada de gruesos

    muros con tres puertas de acceso, una a cada lado, la mayor de ellas se encontraba en buen estado de conservacin, meda tres metros con veinticinco centmetros de ancho. Tambin se vean las paredes laterales con una altura de nueve metros hasta la amplia cornisa de un metro veinte de grosor en su remate, la que serva de arranque a la bveda de can corrido de ms de nueve metros de largo. En el interior se apreciaban an los nichos de los altares que la Iglesia tena a los costados, al igual que restas de la pintura al leo que todava conservaba su brillo. La Iglesia termina de caerse con el terremoto del 11 de mayo de 1948 que debilita totalmente tos restos de los muros, este hecho motiva a la comisin nombrada por el gobierno a determinar necesario derrumbarla enteramente por el peligro que ofreca de venirse abajo.

    En lo que respecta al Convento, ste haba corrido mejor suerte, pues todava se conservaba en parte. En 1767, tena ocho aposentos, ocho cuartos, refectorio, cocina, otras oficinas, aparte de la huerta, cuatro jardines en el claustro, donde existan plantaciones de naranjos, jazmines y duraznos y la letrina de cal y piedra.

    Cuando los franciscanos se hacen cargo del Inmueble conocido como Colegio, algunos de los techos de madera y caa estaban a medio

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    construir, la portera posea suelo de piedra labrada y asiento de adobe. En la anteportera estaba un trascoro pequeo con su ventana; en uno de sus costados se encontraba una escalera que iba al coro y torre hecha con gradas de piedra labrada. Las paredes del claustro principal estaban desplomadas, adems que la comunicacin con el ruinoso claustro interior, que se haca por uno de los ngulos, se hallaba prcticamente demolida. El refectorio era corto, su techo destrozado en tanto la sacrista estaba deteriorada, motivos por los cuales los peritos acuerdan reconstruir todo el conjunto arquitectnico, cercano a la nueva Iglesia y en el que se utilizaran parte de los materiales existentes.

    El terremoto de 1833 afecta parte del edificio reedificado, pero el de 1868 y el de 1948 le causan mayores daos. De all slo se rescata la organizacin general y algunos muros y bvedas. Sin embargo, a pesar los maltratos de los terremotos de las modificaciones, de la falta de mantenimiento, las construcciones hechas de manera arbitraria sin respetar nada, an se puede observar gran parte de los que fuera otrora este edificio.

    En lo que respecta al primer claustro que en sus orgenes tena cuatro jardines, hoy da es una cancha de deporte. All quedan vestigios de cuatro corredores y en las esquinas los arranques de las bvedas que los cubran ahora la caa brava descansa frgilmente sobre los gruesos pilares.

    Se accede al segundo claustro a travs de uno de los pasillos del primero, o bien por uno de las trece escaleras ubicadas en otro de los pasillos. Los que bajan a un corredor, al que la fantasa popular ha convertido en catacumbas del convento ", por el que se arriba adems o varios cuartos, ya que el segundo claustro est construido en un nivel ms abajo que el primero, aprovechando los accidentes geogrficos que brinda el mismo desnivel de la ciudad de Moquegua.

    Cuando el convento cumpla la finalidad de Colegio Nacional, dicho desnivel fue aprovechado poro construir una piscina cuando era Director el Prof. Humberto Oliveros Mrquez.

    Las diferentes habitaciones que conformaban el convento son ahora, en su mayora, salones de clase del Colegio Santa Fortunata. Hay evidencias de un tercer claustro, el que es difcil identificar a raz de las construcciones actuales que se han superpuesto sobre las antiguos.

    Este conjunto arquitectnico a pesar de sus construcciones a travs de los aos, conserva an sus lineamientos originales, por lo que sera oportuno una adecuada restauracin.

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    28. LA IGLESIA MATRIZ

    La levant el Primer Teniente de Corregidor que tuvo Moquegua, don Pedro Len de Guevara y Siso, con tres mil pesos en 1595, conocido como la Capilla Son Pedro que fue abatida por sucesivos terremotos hasta quedar completamente abandonada desde el siglo pasado. Segn don Aurelio Mir Quesada Soso, el terremoto de 1606 la hizo caer por tierra, para ser edificada en otro sitio por el mayordomo ecnomo de lo parroquia, don Alonso de Estrada, seguramente el mismo que elogiara Cervantes en el Canto de Calope de La Galatea ". En 1715 fue derrumbada por otro temblor; quien la reedific fue el mayordomo Capitn Pedro Antonio de Salcedo.

    En 1782, volvi o caer y lo mismo sucedi en 1831, 1833, y por fin ya definitivamente, en 1868.

    Ahora slo quedan en pie sus paredes de piedra, el atrio refrescado por lo sombra propicia de frondosos ficus, y en lo calle Tacna, antes llamada Lo Soledad, existe una pequea imagen en un nicho siempre adornado con cirios y flores. Lo Iglesia Motriz fue declarada Monumento Histrico por Resolucin Supremo No. 2900-72-ED de 28 de diciembre de 1972.

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    29. LA PILA DE LA PLAZA DE ARMAS

    Lo Pila de la Plaza de Armas de Moquegua es una obra artstica, considerado por propios y extraos como uno de los ms preciados y decorativas joyas que tiene la ciudad.

    Algunos personas sostienen que en el siglo pasado, la pila destinada a Moquegua y procedente de Francia, fue desembarcada en Arica y transportada a Tacna. Ante la falto de medios de transporte para conducirla a Moquegua, el Prefecto de Tacna, en esa poca, dispuso su instalacin en lo que hoy es el Paseo Cvico de eso ciudad. Los moqueguanos repuestos del ingrato y sorpresivo destino de la pila, y contando con la Ley de 28 de enero de 1868, que autoriz al Ejecutivo la compra de uno pila y su colocacin en la plaza, la juventud de Moquegua, mediante veladas teatrales y colectas pblicas, reuni dinero para mandar a construir otra pila de fierro o Pars, habiendo sido diseada por el Ingeniero Francs G. Eiffel. A .pedido de los vecinos de Moquegua, la pila fue liberada de los derechos de Aduana en el Callao, y transportada a instancias del Prefecto de Moquegua en uno de los vapores de lo Compaa Sudamericana a Ilo, de donde fue conducida gratis por el ferrocarril que se haba construido por el Gobierno de Balta hasta el Alto de la Villa, de cuyo estacin la comisin nombrada la retir. Se levant la pila en el sitio que en lo actualidad ocupa en la Plaza de Armas en 1877, o un costo de 4.150 soles y doce aos antes que Eiffel construyera en Pars la famosa Torre que lleva su nombre. Los mismos informantes aseguran que para la inauguracin de la pila y relievndose lo importancia que para Moquegua significaba lo admisin de tan artstica obra, los hacendados obsequiaron una buena cantidad de vino que vertindolo en la tubera, fluy luego el lquido por los surtidores de la pila, ante el alboroto de los moqueguanos y deleite provechoso de los cultores del dios Baco.

    La Pila tiene una altura aproximada de siete metros y medio, tres cuerpos: taza y grupo escultrico central, plataforma intermedia con su grupo escultrico y coronacin. La taza de forma de rosetn de cinco metros de dimetro y ochenta centmetros de altura lo conformaron ocho arcos, en cuyos intersecciones superiores, cuatro cisnes y cuatro sapos intercalados vierten por sus bocas, hacia arriba chorros de agua que caen

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    en el recipiente. La plataforma circular Intermedia de unos tres metros de dimetro y veinte centmetros de altura con una concavidad en su cara superior, vierte hacia la taza, el agua que cae por ocho delgados pilones. En el centro de dicha plataforma y adosadas al eje piramidal, en tamao natural lucen su belleza las Tres Gracias de la Mitologa Griega: Aglaya, Tala y Eufrslne.

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    La coronacin de la Pila la conforma otro disco de un metro de dimetro que desagua su concavidad por seis pitones. En el centro del disco contino uno estructura de forma de copa deportiva. Luego otro pequeo. disco de medio metro de dimetro, y a continuacin un delgado tubo terminado en cribas, por donde aflora graciosamente el agua en sombrilla.

    30 A. LA IGLESIA DE SANTO DOMINGO

    En 1652, se reuni un Cabildo abierto, en el cual se acord la conveniencia de fundar un convento. El Cabildo cedi un sitio: Don Fernando Caldern, Alfrez Real del Cabildo de Moquegua, compr a don Luis Antonio Pealoza una finca que don a los dominicos, obsequindoles al mismo tiempo mil cuatrocientos pesos y dos esclavos.

    Establecida por los dominicos como Hospedera de la Orden de los

    Predicadores construccin que fue hecha de Caa y Barro, con el ttulo de Nuestra Seora del Rosario, el 6 de diciembre de 1652. El primer Capelln fue don Diego Fernndez de Santiago quien deba de hacer 50 misas cada ao por las almas de don Rodrigo Vsquez Chinarro y don Bartolom Martnez que dejaron a favor del convento un censo de 2,600 pesos sobre Escapalaque y Charsagua.

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    El Rey Felipe IV, por Real Cdula de 18 de diciembre de 1653, prohibi lo creacin de conventos y hospederas sin su licencio, disponiendo se suprimiera y demolieron los que sin el requisito sealado se hubieron establecido, por lo que en dicho ao el Corregidor de la Villa Santa Catalina de Guadalczar, don Rodrigo de Paz y Orihuela, pretendi demoler la Hospedera de Santo Domingo, por no disponer de la respectivo licencia real. Don Francisco Gutirrez Daza y don Agustn Fernndez Maldonado, Regidores del Cabildo de la Villa, presentaron ante el citado Corregidor fianza de todos sus bienes y sus mismas personas, para que siguiera funcionando la Hospedera, mientras ocurran ante su Majestad en demanda de la licencia requerida. Por gestiones del Sndico Procurador General de la Villa, el 26 de febrero de 1663, concedi el permiso para el funcionamiento del Convento Hospedera. Y se estableci una escuela de primeras letras, cuya enseanza comprenda lectura, escritura y latn. Tal beneficio se mantuvo slo hasta antes de 1684 en que fue suspendido sin causa alguna, y a esa obligacin que tenan los dominicos de ensear a leer, escribir y mantener abierta el aula de gramtica.

    Este beneficio fue restablecido despus hasta el ao de 1800, segn da fe Juan A. Montenegro y Ubaldl en su manuscrito Marges de Oficio Pblico y de Cabildo.

    La Hospedera de Nuestra Seora del Rosario fue confirmada en

    Convento y Monasterio de Santo Domingo, el 10 de marzo de 1717. Se derrumb por el terremoto del 13 de mayo de 1784, aprovechndose de este suceso para hacerla de nuevo, de piedra y cal como existe en la actualidad pero ms larga y ancho que la anterior.

    Esta construccin fue afectada por varios movimientos ssmicos ocasionando que los moqueguanos mostraran su generosidad aportando cuantiosos donativos para refaccionarla. Destacan don Domingo Barrios y la filantrpica matrona Agueda Vizcarra de Angulo, quienes dieron 14 mil pesos paro la refaccin.

    El 11 de mayo de 1948 sufri la Iglesia de Santo Domingo nuevamente serias resquebrajaduras en su estructura y en su fachada. Una vez ms el pueblo de Moquegua colabor en la reconstruccin bajo la direccin tcnica del Ingeniero Roberto Caldern Goycochea, quien realiz una exacta reproduccin de la fachada anterior, a excepcin de la coronacin de dos torres que lucan antes de la refaccin de 1946, las que por tener estructura de madera, caa y barro, le otorgaban mayor esbeltez con sus cruces que las de ladrillo en la actualidad. Finalmente, con una inversin de seis millones quinientos mil soles, la Corporacin de

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    Moquegua, efectu la refaccin total. La Iglesia de Santo Domingo es amplia y clara, con una sola nave y colores alegres, en ella se conservan dos retablos y un trozo de Lignum Crucis, trasladados de la vieja matriz. En uno de los altares se halla el Cuerpo de Santa Fortunata con el rostro protegido por una especie de mscara extraa y envuelta en un albo traje con adornos dorados, como el que describe la Cdula de autenticidad fechada en 1793, que se conserva en el mismo templo.

    30 B. SANTA FORTUNATA

    La nica Iglesia en el Per y posiblemente una de las pocas en el mundo en la que se venera a un santo de cuerpo presente, es la Iglesia de Santo Domingo; donde est permanentemente expuesto en una urna el cuerpo de Santa Fortunata, virgen y mrtir de los primeros siglos del cristianismo.

    Es admirable la devocin que existe en Moquegua por Santa Fortunata, a la que se le atribuye muchos milagros y segn la tradicin ha prevenido los grandes acontecimientos que han ocurrido en Moquegua a travs de milagrosos fenmenos como el crecimiento de las uas y de los cabellos. Se dice que comenz a sudar antes de que el ejrcito chileno, a rdenes del Comandante Salvo entrara en la ciudad, este militar impuso crueles cupos de guerra a los moqueguanos.

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    Su fiesta que se celebra todos los aos el 14 de octubre da un

    verdadero acontecimiento de fe y devocin al que se unen numerosos peregrinos de toda la regin.

    Santa Fortunata figura entre los mrtires del cristianismo, pero es muy poco lo que se conoce de su vida; nacida en Cesarea, Palestina, ciudad de la que no quedan sino ruinas, es probable que su nacimiento acaeciera en la penltima dcada del siglo III del cristianismo, entre los aos 281 y 287 de nuestra era.

    Segn versiones, fue de noble estirpe y fue sacrificada junto con sus hermanos Carponio, Evaristo y Prisciano por proclamar pblicamente su cristianismo durante la persecucin del Emperador Diocleciano, por orden del cual fueron muertos todos los que se negaron o adjurar del cristianismo.

    Su cuerpo, sepultado en las catacumbas de Calepldo permaneci

    all durante quince siglos, hasta que el Papa Po VI autoriz su exhumacin a Marlo Antonio, Vicario General de su Santidad y al Cardenal Santiago, Secretario Custodio. El Papa dio permiso para que el cuerpo de la Santo fuera conservado y donado, expuesto o lo veneracin pblica, junto con el vaso con su sangre que se conservaba en la tumba de Santa Fortunata. Estos hechos sucedieron en 1793, poca en la que fue nombrado custodio de las sagradas reliquias Jaime Severino, cannigo de la Iglesia de San Marcos de Romo, quien decidi donarlas al padre Tadeo Ocampo, Prefecto y Comisario de Misiones del apostlico Colegio de Menores Franciscanos de Moquegua.

    Se asegura que Tadeo Ocampo fue el que hizo el peregrinaje en el

    mismo ao de 1793, recorriendo Espaa, Brasil y Argentino, pases en donde se rindieron grandes honores o lo reliquias, poro finalmente llegar o Moquegua.

    Cuenta la tradicin que en todos los puertos, en que quisieron desembarcarla, el cuerpo de la Santa ponase ton pesada que era Imposible que fuerza alguna la movilizara para desembarcarla, no ocurriendo lo mismo cuando su destino fue Moquegua, pues la pesada carga trocose ton liviana como una pluma. Igual resistencia opuso la Santa a la tentativa de Fray Tadeo Ocampo o de los padres franciscanos moverla de Moquegua. Dentro de la urna se encuentra an el vaso que contiene la sangre de la Santa que segn afirmacin de sus devotos se ha licuado en varios oportunidades.

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    A los dos aos de su partido de Cdiz, Ocampo con los 25 religiosos que lo acompaaban hicieron su entrada a .Moquegua, el 8 de octubre de 1798, por El Portillo" en donde se levant un arco de flores, alfombrndose adems la calle principal para el paso de la Santa que conducida en hombros por las matronas de Moquegua, fue seguida en medio de una lluvia de flores y de mstico recogimiento por el clero, congregaciones religiosas y todo lo feligresa que se congreg o lo entrado de lo poblacin. Los restos estn cubiertos por uno copo de yeso que le don el aspecto de uno Imagen.

    Fueron venerados primero en la Iglesia Matriz y a causa del terremoto se la traslad a San Francisco y despus a Santo Domingo donde se encuentro actualmente.

    31. EL RELOJ PBLICO DE MOQUEGUA

    Moquegua adquiri el Reloj por sus propios medios, al parecer con 805 pesos o aumentados, tal vez, con otras erogaciones. En lo Memoria que en 1862, presentaba al Congreso Nacional el Ministro de Gobierno y Polica, se daba cuento que en cumplimiento de lo Resolucin Legislativa del 20 de enero de 1858, el Gobierno haba mandado construir en uno de los mejores fbricas de Londres doce relojes para los departamentos que carecan de ellos, e informaba asimismo que ya haba llegado al Callao los destinados o Amazonas, Ancash, Huancavelica, junn e Ica.

    Adquirido el reloj, el Prefecto fue autorizado por Decreto de 4 de enero de 1854 para hacer un gasto de 1.600 pesos con cargo a los sobrantes de las rentas nacionales para colocar el reloj trado de Londres y que lleva la inscripcin Hecho en Londres por Gmo. French, Relojero S. H. C. Ao 1853", cuando gobernaba Inglaterra la Reina Victoria.

    Es de mecanismo sencillo; la cuerda que se da a la maquinaria para su funcionamiento, tiene una duracin de ocho das. Con una manezuela se mueve un tambor central, provisto de un pin que engrana en dos piones laterales ms pequeos que mueven otros dos tambores.

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    En uno y otros, se van enrollando en su movimiento tres sogas, cada una de las cuales, en el momento preciso al levantar grandes pesas, accionan un muelle que con martillete, golpean en dos campanas ms pequeos para dar los medios y los cuartos de hora. Una graduacin en la intensidad de los golpes de los martilletes, determinara la mayor o menor sonoridad de los campanas. La esfera de bronce y los campanas llevan tambin lo inscripcin de haber sido fundidos en Londres por el mismo relojero Guillermo French.

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    32. LA IGLESIA DE BELN

    En el ao de 1652, en la calle del Medio, como se le llamaba a la calle Moquegua, haba u no hermosa Capilla llamada I San Juan ", la que el 11 de abril de 1656, por mandato del Juez Eclesistico, y por causas que se desconocen, se demoli. Juan Antonio Montenegro y Ubaldl, en su Marges de Oficio Pblico y de Cabildo de Santa Catalina de Guadalczar de Moquegua, consigna la nota de venta de un solar que el Bachiller Jos de Arana hace a Alonso del Ro y su mujer, aadiendo "y las tierras que por esta escritura se venden por el Huaico, en donde fue la primera Capilla que hubo en esta banda con el nombre de "San Juan ".

    Con el nombre de "El Huaico "se conoca el terminal de la calle

    Moquegua, en donde se halla la Iglesia de Beln, es probable que el sitio ocupado por la antigua Capilla, San Juan, sirviera para edificar la Iglesia llamada Beln, que fue construida por la Orden Hospitalaria Betlemtlca, que tena a su cargo el Convento Hospital Betlemtlco de San Antonio de Padua.

    La primera piedra fue colocada el 29 de setiembre de 1828 por el Vicario y Cura Primero Juan A. Montenegro y Ubaldi lo que dio lugar a sonados actos religiosos.

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    En 18 meses se dio trmino a la nueva Iglesia, pues el 29 de marzo de 1830 se bendeca el templo por el mismo Vicario Montenegro y Ubaldi, luego siguieron tres das de misas solemnes con prdicas religiosas; cuyos gastos corrieron a cargo de Fr. Jos Cayetano Fernndez Maldonado, del Colegio de Propaganda Fide de Moquegua, despus Rector del Colegio "La Libertad" de Moquegua,

    Al parecer, desde esa poca lleva el nombre de Iglesia de Beln, pues la Orden Betlemtica renda especial veneracin a Nuestra Seora de Beln, cuya imagen durante muchos aos se hallaba en uno de sus pasillos.

    Doa Mara Martina Fernndez Cornejo y Fernndez de Crdova invirti en la edificacin 30 mil pesos, dejando tambin concluida la sala del hospital para mujeres, la portera, la sacrista y una botica, con una Inversin total de ms de 50 mil pesos. En su testamento doa Martina dispuso que su cadver se sepultara en el lugar que ella haba convenido en la Iglesia que reedific, contando para ello con la licencia y permiso del Obispo de la Dicesis.

    En 1846, por el mal estado en que se encontraba la media naranja

    de la Iglesia, la Sociedad de Beneficencia acord su refaccin; y sealose como fondos 2,800 pesos y el valor de unos diamantes que pertenecan a la Virgen de la Iglesia, para la cual se solicitaba el permiso del Obispo de la Dicesis.

    Por varios movimientos ssmicos fue daada otra vez la Iglesia, principalmente por el terremoto del 13 de agosto de 1868, fue destruida la bveda de la iglesia. Se hizo una nueva techumbre con madera machihembrada, que es la que se conserva en la actualidad.

    En 1894, se hacen pequeas reparaciones en las paredes con el producto de la rifa de unas alhajas que alcanz la suma de 200 soles aproximadamente.

    En 1945, debido a la labor desplegada por la Madre Mara Salcedo, Superiora de la Congregacin de las Franciscanos Misioneras de Mara, se llev a cabo por el constructor Reynaldo Peralto la refaccin total de la Iglesia o Capilla como tambin se le llama, el Altar Mayor, el Ostensorio donde se expone el Santsimo, el Plpito, las Repisas de los Santos y la traslacin de la escalera del coro hacia la parte exterior en el patio del Hospital.

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    Invertir la suma de 17.634 soles, de los cuales el acaudalado agricultor Toms Rondn don 7 mil soles, el Estado aport 3.750 soles, la Beneficencia Pblica 1.077 soles y el resto se reuni con veladas, tmbolas y verbenas.

    El 6 de enero de 1946, en presencia de las autoridades y de

    numerosa feligresa, se efectu la bendicin de las obras efectuadas que Incluan piso de losetas, por el Monseor Carlos Alberto Arce Masas, Primer Obispo de la Dicesis de Tacna y Moquegua. Don Toms Rondn y su esposa doa Narcisa Acevedo de Rondn, apadrinaron la bendicin del Altar Mayor, Igualmente para las dems obras construidas se tuvo con el padrinazo de personas notables y distinguidas damas de la localidad.

    Los pequeos daos ocasionados por el sismo del 11 de mayo de

    1948, fueron reparados con el producto de limosnas y rifas organizadas por las Madres Franciscanas Misioneras de Mara.

    Hoy la Iglesia de Beln se halla regentada por los Padres Franciscanos de la Parroquia de Santa CatalIna.

    33. LA CAPILLA DE SAMEGUA

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    El Visitador General de Oratorios y Notario del Santo Oficio, Antonio Pereyra y Ruiz visit Moquegua por 7874, y encontr a lo largo de la Villa "36 adoratorios ricamente adornados y habilitados para celebrarse en ellos el Santo Sacrificio". Uno de ellos era la Capilla de Sancara, que al Igual que otros, fueron construidos por los hacendados en sus propiedades del valle en el siglo XVIII. Destruido la Capilla de Sancara por el movimiento ssmico de 1868 no fue reparado; esto dio motivo para que los hacendados y labriegos de Samegua se preocuparan por tener una Capilla donde pudieran celebrar los oficios religiosos.

    Cuando estaba en el gobierno el General Pedro Diez Canseco, se autoriz por Ley del 28 de enero de 7868, para concluir la Capilla de Samegua, disposicin que fue confirmada por el Presidente Balta, mediante Ley de 37 de octubre del mismo ao, destinando dos mil soles para su construccin.

    Con fecha 8 de setiembre de 1870, el Prefecto del Departamento de Tacna, en comunicacin cursada al Ministerio de Gobierno y Polica, sobre obras pblicos de su Departamento, le manifestaba que lo Capilla de Samegua estaba concluido.

    Con el cristiano propsito de levantar una nueva Capilla, despus de demoler la existente en 1965, conservando el Altar Mayor, sin lucimiento de ningn valor artstico y contando con 40 mil soles, reunidos con limosnas y erogaciones, bailes y otros actividades, la comisin Pro-Templo de Samegua, por Intermedio del Vicario de Moquegua, Padre Fortunato Medina entreg dicha suma de dinero a la Corporacin de Rehabilitacin y Desarrollo de Moquegua, presidido por el ingeniero Moqueguano Germn Becerra de la Flor, en 7967, para que construyera dicha Capilla, el que dentro de sus posibilidades" levant el actual edificio de ladrillo, con columnas de concreto y fierro, terminndose lo construccin en 1968.

    En 7977; la Comisin que vela por el progreso de Samegua, construy anexa al templo, una sacrista de material noble y techo de etermit, con uno Inversin de ms de 100 mil soles.

    Son protectores espirituales de los sameguanos, Son Isidro

    Labrador, cuyo pequeo imagen con su yunta, es festejado el 15 de mayo, y principalmente, la Inmaculada que cada 8 de diciembre congrega comparsas de morenos" con sus llamativos atuendos y su montono msico peculiar. En su fiesta la virgen luce sus reliquias de oro y la corona del mismo metal, adornada de pedrera fina, que fuera adquirida en Lima, por la suma de 20 mil soles en lo dcada del 40; por la seora Luzmila

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    Averanga Vda. de Cano, encargada por la Comisin que presida. Pasados los festejos, corona y reliquias son guardadas hasta lo fiesta del prximo ao, por lo persona designada por la Comisin.

    El recorrido de la procesin, es por los principales calles de Samegua y tambin abarca parte del Pueblo Joven; San Isidro y la Virgen Inmaculada, son llevados en hombros por sus devotos.

    34. CSAR A. COSO BECERRA

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    Teniente de aviacin, ilustre moqueguano que se inmortaliz el 14 de diciembre de 1922 en la tragedia ocurrida en Huaytar", al pretender inaugurar la ruta area Lima-Cusco, en una poca en que la aviacin daba sus primeros pasos como elemento til de aproximacin entre los pueblos. Coso acompaado de su inseparable y competente mecnico Octavio Mndez, se propuso despus de un concienzudo estudio y preparacin del avin Ansaldo A-300" llegar a la capital del glorioso imperio. Fue un vuelo proyectado con el afn de superacin por dar glorias a la naciente aeronutica.

    Este gesto heroico es rememorado mediante una placa colocada en el muro de la Iglesia Matriz, frente al atrio, que resalta el rostro del audaz aviador moqueguano, cuyos restos descansan en el cementerio de Moquegua.

    35. JOS CARLOS MARITEGUI

    Jos del Carmen Eliseo Maritegui Lachira naci en Moquegua el 14 de Junio de 1894, en el jirn Junn No. 4. Sus padres don Francisco Maritegui Requejo y doa Mara Amalla Lachira Ballejos.

    Guillermo Rouilln, afirma: "He descubierto que en el libro de Bautismos, nmero XXXV, a fojas 6, de la Parroquia Santa Catalina de Moquegua, est sentada la partida de bautizo de Jos Carlos con fecha 16 de julio de 1894. Maritegui, segn reza el documento pertinente, tena treintids das de nacido cuando fue bautizado".

    Dado el carcter de esta obra, no voy a ocuparme de la vasta, profunda y revolucionaria labor de Jos Carlos, cuya vida dramtica es bastante conocida en el pas y en el extranjero, por sus comentaristas y bigrafos.

    Maritegui durante su corta y fructfera vida no visit Moquegua, ni estuvo atado a su recuerdo, ni a su lenta cronologa provinciana. Se dice, que para ser universal, primero debes ser local, pero con Jos Carlos no ocurri este fenmeno. Maritegui fue un ciudadano del mundo, pero claro est sin dejar de ser profundamente peruano. Su frase acuada con su inteligencia, su sentimiento y su amor profundo a nuestro pueblo, resume

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    el clamor de nuestra historia: "Peruanicemos el Per". Y hoy sigue siendo una bandera de justas reivindicaciones populares.

    Periodista que empezara como alcanza rejones en el diario "La Prensa "de Lima, el ao 1909, y que ms tarde le tocara jugar un papel protagnico en nuestro despertar histrico tiene, sin embargo, una elevada y noble coincidencia, con otro gran moqueguano nacido en Ilo, el Gran

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    Mariscal Domingo Nieto. En efecto ambos lucan la misma sencillez espiritual, el mismo valor para enfrentarse a los retos del abuso de la prepotencia y de la miseria moral.

    Maritegui no fue un hombre de campanario. Su inteligencia

    portentosa y su espritu de vastas proyecciones mundiales no lo ataban a la dictadura del terruo. Venci los prejuicios chauvinistas y los seudos nacionalismos, deca: "Creo que no hay salvacin para Indoamrica sin la ciencia y el pensamiento europeos y occidentales.

    Luego agregaba: "Por los caminos de Europa encontr el pas de Amrica que yo ha