Neurociencia e inteligencia emocional

2
Neurociencia e Inteligencia Emocional Trabajamos nuestro cerebro emocional Los monstruos son reales y los fantasmas también; viven dentro de nosotros y, a veces, ellos nos ganan Stephen King Poco a poco, pero con pasos agigantados, vamos conociendo nuestro cerebro y nuestra mente: el mundo neuroemocional del ser humano. Ya hemos trabajado nuestras emociones. Sabemos que todas son útiles. No hay emociones buenas y emociones malas, solo una mal gestión de estas. Antes las distintas emociones somos capaces de mostrar diferentes conductas. Ahora es el momento de preguntamos cómo son. ¿Cómo son nuestras conductas? - Impulsiva, no consciente, automática. Estas conductas, a veces no justificables, encuentran en el lóbulo frontal izquierdo de nuestra mente – gracias al intérprete- el

Transcript of Neurociencia e inteligencia emocional

Page 1: Neurociencia e inteligencia emocional

Neurociencia e Inteligencia Emocional Trabajamos nuestro cerebro emocional

Los monstruos son reales y los fantasmas también;

viven dentro de nosotros y, a veces, ellos nos ganan

Stephen King

Poco a poco, pero con pasos agigantados, vamos conociendo nuestro cerebro y nuestra

mente: el mundo neuroemocional del ser humano.

Ya hemos trabajado nuestras emociones. Sabemos que todas son útiles. No hay emociones

buenas y emociones malas, solo una mal gestión de estas. Antes las distintas emociones somos

capaces de mostrar diferentes conductas. Ahora es el momento de preguntamos cómo son.

¿Cómo son nuestras conductas?

- Impulsiva, no consciente, automática. Estas conductas, a veces no justificables,

encuentran en el lóbulo frontal izquierdo de nuestra mente – gracias al intérprete- el

Page 2: Neurociencia e inteligencia emocional

lugar apropiado para justificarlas buscando un equilibrio entre lo que hacemos y

pensamos.

- Reflexiva, equilibrada. Es la conducta humana que se halla en la corteza cerebral, en

los lóbulos prefrontales.

- Reactiva o defensiva está gobernada por el Sistema instintivo emocional (amígdala en

caso de amenaza y núcleo accumbens en caso de placer). Proactiva: Esta conducta no

busca la supervivencia, sino ser feliz.

Esta última actitud haría posible un cambio de paradigma. Estaríamos buscando un mundo

donde todos ganan, frente al actual donde hay un ganador y un perdedor o dos perdedores.

Conociendo el funcionamiento de nuestro cerebro, aprendiendo a no actuar de responder

automáticamente a nuestras emociones, aprendiendo a hacer una pausa para reflexionar,

podemos conseguir dar una respuesta más proactiva a nuestras emociones. Esto nos hará ser

más felices y hacer más felices a los demás

Actividad:

Materiales: folio, velcro, material de dibujo.

Objetivos:

Ser conscientes de cómo nuestra mente está dirigiendo nuestra vida y nuestras conductas.

Decidir, libremente y proactivamente, si mantener una conducta o buscar una más humana,

poniendo en marcha nuestros lóbulos prefrontales más humanos y nuestra creatividad.

Dinámica:

- En el folio dibujamos un cerebro.

- Ponemos uno de los velcros en la zona del sistema instintivo emocional y otro en la

zona de los lóbulos prefrontales.

- Elegimos personajes que representar a los que gobiernan nuestra mente: amígdala,

núcleo accumbens, el intérprete, los lóbulos prefrontales. Los pegamos con velcro

Cada vez que, en el aula o en la casa, surge una situación “difícil” (conflicto, duda,..) sacamos

el dibujo del folio y decidimos quién está dirigiendo está conducta. Pegamos, entonces, al

personaje protagonista (amígdala, núcleo accumbens, intérprete o humano) en la zona

cerebral que está guiando la conducta (sistema instintivo-emocional o sistema cognitivo).

@camachomanarel