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SUMARIOnº 5

Samuel Melián director de la revista Zona 2-3

Darío Storminsky diseño portada

Rosa Mª Jiménez diseño y maquetación

Colaboradores revistaAna Fernández del CampoDaniel MoyaEdgar LópezFernando RobledanoIván OrtizJesús MoralesJonathan AntaJosé Francisco MartínezJosé Luis SosaJuanjo SeguraManuel PeñaMontserrat MillánRaúl Ciudad

E-mail de contactozonadostres@zonadostres.com

La Tribuna de Lalo Alzueta

La Columna de Carlota Reig

Entrevista a Sergio Scariolo

Entrevista a Rodrigo de la Fuente

Entrevista a Moncho Fernández

La Pizarra del entrenador

Entrevista a Rafa Vecina

Entrevista a Alba Torrens

Entrevista a Arantxa Mallou

Entrevista a Gianluca Basile

Reportaje Los 7 de Indiana

Artículo Star System

Reportaje Thomas Robinson

Artículo Baloncesto en Sevilla

Galería fotográfica

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Revista trimestral

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La tribuna

Ecos de una final Por Lalo Alzueta

Tan sólo días después de que el Barça Regal levantase de nuevo la Copa de campeón de liga, quiero recordar algunas de las imágenes que nos ha dejado la gran final ACB. Un bella colección de argumentos y partidos con los que los aficionados al baloncesto hemos vuelto a creer. Dejo para los expertos el análisis técnico, y táctico de lo sucedido (todos los pronostica-dores que he leído han reconocido que nunca hubiesen predicho una final así) y me centro en las exquisitas muestras de lo que el baloncesto nos puede ofrecer.

Con el Madrid liberado (Pablo Laso mediante) de sus complejos tras alzarse con la Copa del Rey, por fin el Barça tenía un rival al que de verdad podía te-mer. Un Madrid fresco, confiado y en crecimiento. La confrontación de dos es-tilos, dos formas de entender este deporte. Dos formas de sacar por unos días al baloncesto patrio del preocupante hastío al que se había visto abocado.

Lucha, tensión, emoción, acierto e incertidumbre nos dejan la mejor serie final de la década. Una montaña rusa en la que todos caían y ascendían a velocidades de vértigo y donde nadie se quería bajar. El lunes Pascual es-taba cesado, el martes era el fin de ciclo de Navarro, el miércoles Chacho Selección, el jueves reinaba Carroll y así hasta un quinto partido que termi-nó por coronar al Barça.

Me quedo con esa emoción, de ver al mejor 4 de Europa, Lorbek ante el que será su más duro competidor sin duda Mirotic...

La final tuvo duelos al sol como el de Jaycee y Navarro, y a la sombra como el de Suárez y Mickeal. Todos los aderezos posibles para un choque

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Lalo Alzueta

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La columna

Ecos de una final Por Lalo Alzueta

de titanes que ha revitalizado el basket. Los más de 2 millones de media por partido, son un espal-darazo al deporte y sobre todo a estos dos grandes equipos que nos han llevado al límite.

Y sobre todo a la calle, a los bares, a las plazas, a los taxis... Esos modestos foros sociales donde sólo sonaba la voz del ba-lompié... Y todo gracias a estos tíos altos.

Sólo un sabor amargo tras estos días, que hasta los Juegos no tendremos más basket oficial, así que deseando estoy que empiece ya, no sea que este maravilloso ritmo quede en el sueño de una noche de verano, o de primavera ya me enten-déis...

Enhorabuena al Barça, enorme campeón y también al Madrid,

que ya sabe el camino a seguir para alcanzar la gloria.

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La columna

Los 11 valientes... y Sergio Por Carlota Reig

“Navarro, Pau Gasol, José Manuel Calderón… y Sergio Rodríguez”. El titular fue unánime: “Sergio Scariolo confirmaba el bombazo”. Quizás cabe pensar que no hubo tanto bom-bazo, si tenemos en cuenta el expediente del Chacho esta temporada. Las miras de España no escatiman en absoluto con el tinerfeño al timón. El objetivo es pelearle el oro a un equi-po extraplanetario, Estados Unidos. Y para ello necesitamos al Chacho. La explicación es sencilla: además de a los Gasol reboteando, anotando y marcando talento, de Calderón llevando la batuta, de Navarro acribillando desde el perímetro... necesitamos un punto de locura. Y la locura es la seña de identidad de Sergio Rodríguez.

La locura que llega a sacar de quicio en algunos partidos; la misma que nos provoca cara de asombro ante algún pase de magia. Cuando quiere, es el base más talentoso y creativo de la ACB. Cuando no quiere, a veces también.

Y os preguntaréis, ¿por qué es tan irregu-lar? Probablemente, porque si supiéramos cuándo sale, el arco iris dejaría de sorpren-dernos. Quizás lo interesante no es subrayar su intrínseca irregularidad: sino que ha ma-durado un 200% en los últimos playoff. Y no hablo de acierto, que también, sino de saber leer e interpretar el juego. Ahora corre con más sentido, se la juega con valentía y asiste como el mejor malabarista. Pero, sobre todo, si no le sale la primera jugada, esto no influye en la segunda. Rodríguez puede ser la mejor arma secreta si hay un momento en que los yankees se creen dominadores del partido.

El Chacho no es parte de esta lista de Scariolo por la baja del mago Ricky Rubio. Al menos, no sólo. Su temporada ha sido igual, si no mejor, que la de Víctor Sada. Su cualidad de dinamita a punto de estallar es nuestra me-jor noticia para Londres.

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Estamos a poco más de un mes para el comienzo de los Juegos de Londres. Ateniéndonos a la tempo-rada que acaba de terminar, ¿qué evaluación global hace el seleccio-nador del estado del grueso de ju-gadores que acudirán a la cita?No se puede hacer una evaluación global, y esta vez menos que nunca porque no ha habido un descanso homogéneo como era normal an-tes de otras citas. Hay jugadores, como Ibaka, que han llegado casi al día siguiente de competir y otros, como Rudy o Calderón, que no dis-putan un partido oficial desde hace meses. Es muy difícil hacer una eva-luación colectiva.

Teniendo en cuenta esa desigual-dad, ¿es peor o mejor ese estado global en comparación con even-tos anteriores?Seguramente es peor, pero es algo que sabíamos. Es obvio que si tie-nes menos recuperación y dos ju-gadores muy importantes tocados

y otros que necesitan respirar un poquito con una semana de des-canso, no es lo mismo que cuando empiezas con todos los jugadores al completo, sanos y en forma, por-que la opción de empezar últimos en Europa, penúltimos cuando es-taba Estados Unidos de por medio, se daba bien porque los jugadores llegaban perfectos a la concentra-ción al no necesitar mucho tiempo para ponerse en forma. Este año ha sido muy atípico. No conocemos bien el mar que vamos a navegar: hay que estar pendiente de las ro-cas que pueden salir.

La lesión de Ricky, ¿ha trastoca-do mucho sus planes? ¿Es España otro equipo sin él?Sí, seguramente somos otro equi-po sin él. Es un jugador que desde que llegué a la Selección ha tenido un rol prioritario, aunque ya lo ha-bía tenido el año anterior (2008). Es un jugador especial, único. No buscamos un sustituto con el que

suavizar el efecto de la ausencia de Ricky. Simplemente será otra cosa.

La inclusión de Sergio Rodríguez parece un verdadero cambio de piezas muy parecidas: un base imaginativo y con talento, con gus-to por el juego rápido y vistoso, por otro similar. ¿Se ha intentado con ello trastocar lo menos posible el esquema del equipo?Sencillamente hemos considera-do que cuando hay que sustituir a un base hay que tener en cuenta la temporada que acaba de terminar y el futuro, y sumando rendimiento de la temporada y visión de futuro, no hemos dudado. Independiente-mente de la lesión de Ricky, jugando con mi equipo (el Armani Jeans Mi-lano) contra el Real Madrid a princi-pios de temporada, me había dado cuenta en seguida que Sergio había empezado a dar un paso adelante en cuanto a madurez. Desde entonces lo hemos seguido con mucha aten-ción durante todo el año.

SERGIO SCARIOLO

Sergio Scariolo (Brescia, 1961) afronta su cuarta gran cita al frente de la Selección. A sus espaldas, dos oros europeos, la decepción del Mundial de 2010, la satisfacción del trabajo bien hecho, un puñado de críticas y, por encima de todo eso, la sensación de haber dirigi-do a un equipo que ha hecho historia. Y quiere seguir haciéndola. Los Juegos de Londres pueden ser la última oportunidad olímpica para este excelso grupo de jugadores. A un mes vista, el seleccionador reflexiona acerca del evento baloncestístico más importante de 2012: Los Juegos, donde reside la gloria.

“Ha sido un año atípico. No conocemos el mar que vamos a navegar”

| Por Raúl Ciudad

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Uno de los focos principales de preocupación es Rudy. Usted, que está permanentemente al tanto de la evolución de su lesión, ¿es optimista o pesimista respecto al estado en que pueda llegar a los Juegos?No soy médico, así que sólo puedo ser optimista a nivel técnico y per-sonal, porque allá donde vaya me encantará tener a Rudy en mi equi-po. Ahora bien, es una cuestión mé-dica y por parte de un entrenador sería arriesgado hablar de cuestio-nes estrictamente médicas. Parece que la cosa va bien, hay que tener las precauciones normales después de cualquier operación, pero tene-mos un cuerpo médico que cuida muy especialmente a los jugado-res, y tenemos también un jugador muy competitivo capaz de apretar los dientes cuando toca apretarlos. Hay optimismo, pero moderado. ¿Dudó si llevarle a pesar de que es posible que no esté al cien por cienNo, dudas no hemos tenido nunca, al menos las dudas que no nos pon-gan los médicos y los propios juga-dores reconociendo una situación físicamente deficitaria.

El caso de Mirotic es especial. Está claro que Ibaka, por calidad y pre-sencia física, estará, además de en Londres, seguramente durante muchos años. Si la FIBA no cambia la regla de un nacionalizado por país, ¿qué futuro le espera a Miro-tic en la Selección? ¿Le preocupa?

Esa regla se cambiará, es una cues-tión de tiempo. Todos tenemos cla-ro que es una norma que caerá por su propio peso, la cuestión es cuán-do. Cuando ocurra, el primer can-didato para entrar en la Selección será Mirotic, teniendo en cuenta además que Felipe, que juega en la misma posición, ha dicho más o menos oficialmente que la de Lon-dres será su última convocatoria con la Selección. Esperemos que para ese momento hayan cambia-do la norma.

Esta es una pregunta que se em-pieza a hacer el aficionado: ¿cuán-to recorrido le queda a este equipo histórico? ¿Ha pasado ya su mejor momento, o el culmen puede dar-se en Londres? ¿Qué hay más allá de esta cita olímpica?Realmente no hay un equipo igual a sí mismo que empezara con los mismos jugadores y vaya a terminar con esos mismos jugadores. De los famosos Juniors de Oro y de los ju-gadores más mayores que estaban completando el equipo desde hace años (Garbajosa, Mumbrú, etc.) sólo quedan tres jugadores, y uno de ellos, como he dicho, se conside-ra a sí mismo al final de su camino con la Selección. Ha habido muchas incorporaciones de jugadores que no eran de la generación del 80, habrá algunas otras, y realmente no creo que haya un inicio y un fi-nal, sino un rejuvenecimiento pau-latino, una evolución, que se está llevando a cabo bien. Es obvio que

hay jugadores, como Gasol y Nava-rro, los líderes de nuestro equipo, que sí pertenecen a ese grupo del 80, pero no estoy seguro de que después de los Juegos no vayan a tener cosas que dar a la Selección.

¿Será el último campeonato que jueguen juntos Pau Gasol y Nava-

“Para ganar a EE.UU. hay que hacerlo perfecto y

esperar que ellos no tengan el día”

EL PROTAGONISTA

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rro, los dos mejores jugadores de nuestra historia?Esperemos que no. Es lo único que puedo decir. Es una pregunta a la que sólo ellos pueden responder.

De cara a unos juegos y cualquier competición en que participe Esta-dos Unidos con sus jugadores NBA,

parece obligatorio hablar de ellos. ¿Hay opciones reales de que, no sólo España, sino cualquier equipo pueda arrebatarles el oro? ¿Hay antídoto en el mundo FIBA con-tra su mezcla de físico y talento, o aquellos años en que mordían en polvo ya pasaron?En teoría no existe un equipo in-

vencible. En la práctica, creo que cualquier equipo que quiera ga-nar a Estados Unidos debe hacer un partido perfecto y esperar que ellos no tengan el día, o hacer mu-chas cosas para poner las condi-ciones para que ellos no tengan el día. Basta con mirar la lista para darse cuenta de que la realidad es

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que será muy difícil. Ello no quiere decir que en los demás equipos no haya ambición. Grecia fue capaz de ganarles hace seis años, pero Estados Unidos está más fuerte que hace seis años. Por tanto pa-rece muy difícil.

¿Se han acortado realmente dis-tancias entre Europa y la NBA, o estamos asistiendo a un nuevo repunte de la superioridad ameri-cana?Se han acortado las diferencias en-tre el baloncesto europeo y los ju-gadores europeos y el baloncesto NBA y los jugadores NBA. Es obvio que si el 90 por ciento de los me-

jores jugadores europeos juegan en la NBA se seguirá manteniendo una diferencia importante, pero el mero hecho de que tantos jugado-res europeos vayan allí, quizá no en el último draft, pero sigue habiendo jugadores que irán -entre ellos Cla-ver-, el mero hecho, decía, de que exista ese trasvase quiere decir que cada vez hay más nivel en Europa y más jugadores capacitados para jugar en la NBA.

Como técnico de élite, ¿cuál es, en su opinión, la principal diferencia entre ambos baloncestos?La físico-atlética. La velocidad de ejecución de los movimientos en

función de las cualidades atléticas de los jugadores.

En fútbol está muy en boga el deba-te Messi-Cristiano sobre quién es el mejor. Es un debate que puede parecer ocioso, pero que alimenta pasiones y enciende el espectáculo. ¿Quién es para usted el mejor juga-dor de baloncesto del mundo?Creo que es justo decir que LeBron James. Siempre esperas un gran triunfo para que en un deporte de equipo un gran solista, un gran ta-lento, se convierta en un gran cam-peón. Este año lo ha conseguido, y mucha culpa del anillo de Miami Heat ha sido suya.

EL PROTAGONISTA

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España jugará ocho partidos de preparación. El primero será el 9 de julio, en Valladolid contra Gran Bretaña, y el último, el 24, en Barcelona contra Estados Uni-dos. ¿Cuantos más partidos me-jor? Después de una temporada tan dura, ¿no se corre el riesgo de que el jugador llegue cansado a los Juegos, no tanto física como men-talmente?Vamos a tener que dosificar bas-tante y ajustarnos a las condiciones individuales de los jugadores que encontraremos sobre la marcha. Es evidente que una temporada de la Selección consta de fases: la

preparación, la gira de amistosos, la competición de grupo y los cru-ces. Cada una tiene una idiosincra-sia muy diferente, y si este año la fase de preparación es muy corta, la gira se mantiene más o menos igual que otros años. La lectura es que no sólo hay motivaciones de-portivas a la hora de diseñar una preparación para la competición, sino que hay que tener en cuen-ta muchos factores, como el de promoción del baloncesto. Y ahí la Selección tiene la obligación de llegar a muchos lugares de España. Esto hay que asumirlo de inicio. Es así, y ya está.

¿Seguirá unido el matrimonio FEB-Scariolo después de los Juegos Olímpicos?Todos tenemos una buena dispo-sición. Hasta ahora hemos traba-jado muy bien. Ha sido una etapa no sólo de éxitos deportivos, sino también de mucha sintonía entre jugadores, cuerpo técnico y Fede-ración, algo que se buscaba cuando me propusieron hacerme cargo de este trabajo. Es verdad que cuando acompañan los éxitos deportivos la sensación de poder seguir jun-tos es mayor, pero por otro lado todavía tenemos que afrontar defi-nitivamente el tema, y yo lo tengo que afrontar con mi familia, por-que francamente los sacrificios son grandes. Para un apasionado del baloncesto como yo estar aquí es un privilegio; para mi familia es un sacrificio. Es verdad que tiene una compensación, pero entre el presi-dente, mi familia y yo tenemos que analizarlo profundamente.

“Mi continuidad tengo que analizarla con el pre-

sidente y mi familia; para ellos es un sacrificio”

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AGENDA SELECCIÓN

HORARIOS Y TELEVISIÓN

Madrid10 de julio

España - Francia

Valladolid9 de julio

España - Gran Bretaña

Granada17 de julio

España - AustraliaMálaga18 de julio

España - Australia

Salamanca13 de julio

España - Túnez

A Coruña20 de julio

España - Argentina

BARCELONA24 de julio

España - EEUU

PARÍS15 de julio

Francia - España

PARTIDO FECHA TVESPAÑA - CHINA 29 julio 16:45 La1

ESPAÑA - AUSTRALIA 31 julio 11:15 La1

ESPAÑA - GRAN BRETAÑA 2 agosto 20:00 La1

ESPAÑA - CLASIFICADO 1 4 agosto 11:15 La1

ESPAÑA - BRASIL 6 agosto 20:00 La1

CUARTOS DE FINAL 8 agosto

SEMIFINAL 10 agosto

FINAL 12 agosto

PARTIDO FECHA TVESPAÑA - GRAN BRETAÑA 09/07 Valladolid 22:15 La1

ESPAÑA - FRANCIA 10/07 Madrid 22:15 La1

ESPAÑA - TÚNEZ 13/07 Salamanca 22:15 La1

FRANCIA - ESPAÑA 15/07 París 14:30 TDP

ESPAÑA - AUSTRALIA 17/07 Granada 20:45 TDP

ESPAÑA - AUSTRALIA 18/07 Málaga 22:15 La1

ESPAÑA - ARGENTINA 20/07 A Coruña 22:15 La1

ESPAÑA - EEUU 24/07 Barcelona 22:30 La1

JUEGOS OLÍMPICOS LONDRES

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Su regreso a la ACB se produce tras 4 años disputando la Lega, ¿Cómo cambió Italia su juego?Tuve más responsabilidad de la que solía tener en el Barcelona porque las plantillas normalmente eran más largas. En mi época de Roma recuerdo el poder disputar la Euro-liga como hacía en Barcelona, pero sobretodo mi mayor cambio fue te-ner mayor responsabilidad donde incluso llegué a jugar de cuatro en algunos momentos. La verdad es que tengo un buen recuerdo de esa etapa.

Realizó durante dos años la pre-temporada con Estudiantes has-ta que finalmente fichó este año, ¿cada temporada era el objetivo volver a España?Sí, la verdad es que estoy muy contento de haberlo podido hacer con el club donde me formé. Es un club al que me siento muy ligado, un club muy especial, todos mis hermanos han jugado en el club,

tengo un sobrino en la actualidad que está jugando también y bueno mi padre incluso es accionista y le tenemos un cariño muy especial a Estudiantes y para mí sin duda era muy especial el poder jugar allí.

¿Nunca hubo conversaciones a este respecto?No, no, esta fue la primera vez. Des-de que salí de la cantera para ir a Estados Unidos esta ha sido la pri-mera oportunidad de poder jugar en Estudiantes.

Creo que le pilló bastante por sor-presa que Pepu se acercara a ha-cerle esta proposición.Sí, la verdad es que me pilló bastan-te de sorpresa. Fue Pepu la persona que se aproximó a mí para propo-nérmelo.

¿Tenía esa espinita de haber juga-do en categorías inferiores pero nunca con el primer equipo?Claro, porque había pasado cuatro

años en la cantera y desde enton-ces ya me fui a EEUU y luego hice mi carrera tanto en el Barça como en Italia y para mí era especial. Me quedaba el recuerdo de haber ju-gado de pequeñito en La Nevera y no haber estado nunca en el primer equipo.

¿Cómo vivió aquel debut ante Ges-crap Bizkaia que precisamente se-ría —junto con el partido ante la Penya— su mejor valoración de la temporada?Recuerdo que tenía muchas ganas de jugar y no sabía lo que me espe-raba. Siempre el primer partido de la temporada te lo tomas con mu-chas ganas y la verdad es que esta-ba francamente contento ese día.

Que ha sido una temporada difícil para el equipo es innegable pero, ¿qué valoración personal hace de su juego?Sí. Ha sido una temporada a nivel general difícil porque el equipo se

RODRIGO DE LA FUENTE

Rodrigo De La Fuente (Madrid, 1976) es uno de esos jugadores que puede pasar desaper-cibido ante las estadísticas al uso. Sin embargo, su trabajo resulta vital a la hora de crear un equipo con garantías. Trabajador como pocos, aprendió desde pequeño que en el balon-cesto no todo es anotar y que ponerse el mono de trabajo también le llevaría lejos. Tan lejos como jugar 10 temporadas en el F.C. Barcelona o durante 4 años en Italia para volver de nuevo a España de la mano de un Asefa Estudiantes que llevaba en su corazón.

“Me hubiera gustado aportar un poco más, haber ayudado más al equipo”

| Por Rosa Mª Jiménez

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había marcado muchos objetivos que al final no se consiguieron. Por mi parte, estoy contento aunque reconozco que me hubiera gustado aportar un poco más y haber ayu-dado un poco más al equipo pero aun así, orgulloso con todo lo que he hecho tanto en los entrenos como en los partidos que he dado el máximo y la pena es no haber conseguido el objetivo.

Pasa 10 temporadas en el F.C. Bar-celona y se marcha a Italia. Sin embargo, este hecho no hace que los gestos de apoyo por parte de la afición cesen.Sí, la verdad es que cuando fiché por el Barça jamás pensé que esta-ría 10 temporadas jugando allí. El hecho además de ser de Madrid… pues muchas veces me lo pregun-taban pero la verdad es que me

adapté muy bien tanto a la ciudad como al club, su filosofía… y tuve mucha suerte de jugar con grandes jugadores, ganar muchos títulos y el recuerdo, la verdad es que no lo voy a olvidar jamás.

¿Le llegaba esto a Italia?Sí, porque además una vez que salí del club he vuelto. Por ejemplo, la pasada temporada estuve hacien-do la pretemporada con el Barça y he recibido el cariño de la gente y lo mejor de todo es que aunque hayan pasado 5 años desde aquel entonces todavía noto todo esto y es de agradecer.

Es un jugador de intangibles por excelencia. ¿En algún momento ha sentido que no se valoraba su juego?El baloncesto es muy rico y lo bue-no que tiene es que puedes hacer muchas cosas. Yo de pequeño tenía un entrenador que me escenifica-ba como si hubiera en una cancha billetes y cada rebote que cogías, cada balón que robabas o cada buena defensa o canasta que me-tías pues ibas cogiendo esos bille-tes y al final consistía en qué cogía más que al final lo que querías era ganar. Y un poco la filosofía era esa.Respecto a la valoración de este as-pecto quizás está más valorado el tema de los puntos o la valoración a tener que es casi lo único que se mira hoy en día. Pero creo que los buenos conocedores de este deporte saben que no depende solo de los puntos, que hay más cosas pero que por su-puesto los puntos son fundamenta-les y claves en este deporte.

¿Dónde cree que ha estado la clave, los errores que ha cometido Asefa Estudiantes esta temporada?Sobre todo nuestra irregularidad. Hemos estado muy irregulares du-rante toda la temporada y lo hemos pagado caro. Y también, cuando hay

ENTREVISTA

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“El recuerdo de mi etapa en Barcelona no lo

voy a olvidar jamás”

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cambios de entrenador, tema ficha-jes, americanos… suelen ser tempo-radas complicadas. Yo llegué con la temporada ya empezada, detrás de mí llegaron creo que fueron tres ju-gadores, se cambió el técnico, inclu-so quedando dos semanas se siguió haciendo cambios... y se está ha-blando de hacer cambios quedando solo dos semanas... normalmente es complicado una temporada así. También hemos pecado de inten-tar reaccionar al final. Hemos sido un poco malos estudiantes, hemos querido estudiar mucho al final y normalmente cuando haces eso lo pagas. Nosotros estuvimos cerca pero al final no lo conseguimos.

Precisamente, se ha apuntado mu-cho a esos fichajes que no han cua-jado.Creo que aquí tenemos culpa to-dos, no solo los americanos. Cuan-do las cosas no van bien se intenta reaccionar y un proyecto necesita estabilidad, es lo de siempre, y hay muchas veces que en nuestro de-porte se tiene muy poca paciencia, sobre todo cuando las cosas no van bien.

Con la Selección, en la que tomó parte, ya concentrada, ¿qué valo-ración hace de los convocados?Es un poco la continuación del pro-yecto que se está construyendo desde la generación, es la línea que se venía construyendo estos últi-mos años. Sigue habiendo un super equipo que puede aspirar a lo máxi-mo.

Un año con muchos tocados pero al mismo tiempo el año que menos invitados van –dejando a un lado la Selección 2014.Es cierto que llegan varios jugado-res tocados pero creo que es una selección con muchos jugadores de gran calidad y lo importante es que hagan una buena preparación

y estoy seguro de que la van a hacer y habrá tiempo más que suficiente para que cuando llegue el campeo-nato estén al 100%.

¿Qué opina del proyecto ‘Selec-ción 2014’?Es muy buena idea porque aunque yo soy de los que cree que aún esta generación puede durar bastantes años más pero llegará la época en que poco a poco vaya desapare-ciendo algún jugador y habrá que ir incorporando y que mejor que em-piecen ya a ver el método de tra-bajo y la dinámica y hacerlo cuanto

antes. Creo que va a ser muy positi-vo y espero que este ciclo de éxitos de España continúe.

Otro de los temas de máxima ac-tualidad es la renuncia de Menor-ca Bàsquet a disputar este próximo año la ACB, algo que previamente ya hizo el Canarias. ¿Cree que la ACB debería replantearse las co-sas?Para el Estu nos ha venido bien pero es una pena que los equipos que han estado luchando tanto para subir... pues no lo puedan hacer. Es una verdadera pena y la verdad

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es que desgraciadamente tenemos esta situación económica en la ac-tualidad y la verdad es que al final sale todo el mundo perjudicado.

¿Qué le queda por conseguir a Ro-drigo de la Fuente?La verdad es que quiero seguir disfrutando del baloncesto, seguir jugando y voy a empezar a prepa-rarme porque sé que este deporte no dura mucho y sé que llegará el momento que tenga que dejar de

ser jugador y por ello me he empe-zado ya a preparar. He comenzado a hacer cursos de gestión deportiva y mi objetivo es seguir ligado a este deporte en un futuro. Pero de mo-mento me gustaría seguir jugando seguro este próximo año.

Ha acabado contrato con Estudian-tes, ¿hacia dónde se perfila su fu-turo?En la actualidad todavía no lo sé. Estaba esperando si finalmente el

Estu iba a jugar en la ACB o no y hay que ver un poco que va a suceder dentro del club. Ya mi agente ha recibido alguna llamada de algún equipo. Hay por ejemplo un equi-po griego muy interesado, luego sé que en Italia también andan inte-resados... pero bueno, me gustaría también saber qué pasa con Estu-diantes y, a partir de ahí, decidiré qué hacer.

Este año ha compartido club con uno de sus sobrinos, ¿le da mu-chos consejos?Sí, le encanta el baloncesto y saber cosas sobre este deporte. Yo le digo que estudie, que disfrute mucho y llegará el momento de pensar otras cosas porque tiene 15 años y aún es muy joven para pensar más allá.

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“Quiero seguir disfrutando del baloncesto,

seguir jugando”

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“El Estu es un club al que me siento muy ligado, un club

muy especial”

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MONCHO FERNÁNDEZ

Moncho Fernández afronta la tercera temporada en el club de su ciudad, San-tiago. Profeta en su tierra, nos desvela cuáles son los pequeños principios que busca en un jugador, qué sentimientos despierta en él su hobby preferido: Ba-loncesto y ante todo de un sentimiento unido al deporte de la canasta denomi-nado pasión.

“El entrenador es un encargado de gestionar el talento que tiene en sus manos”

Lo primero de todo, enhorabuena por la temporada y la permanencia. ¿Las vacaciones se saborean mejor, no?Sí, la verdad es que sí. Estamos muy satisfechos por lo que hemos logrado, hemos conseguido nuestro obje-tivo, el cual para nosotros era muy ambicioso, conse-guir por primera vez la permanencia en la ACB.

Dentro de su trabajo como entrenador, ¿hay hueco para el baloncesto como hobby?Sí. En mi caso el hobby se ha acabado transformando en mi trabajo, pero mantengo pequeñas válvulas de escape como es la lectura, viajar...

¿Cuánto sudor y cuántas lágrimas ha costado conse-guir cada una de las 13 victorias de esta temporada 2011/12?Nombrando un poco a Churchill “sangre, sudor y lágri-mas”. Sin estas tres premisas no hubiésemos conse-guido nuestro objetivo máximo y ante todo la pasión.

En las malas rachas -apelando a la primera vuelta del campeonato- se llega uno como entrenador a plan-tear qué es lo que está fallando de su trabajo diario?El proceso de reflexión va unido a cualquier persona en su puesto de trabajo. Reflexión diaria y evaluación de tu tarea. Todo esto te lleva a una serie de ideas y pautas básicas que tienes que seguir a pies juntillas, un entrenador no puede cambiar cada día buscando el sobrevivir.

¿Cómo se pueden mejorar los mimbres con los que se cuenta en forma de plantilla?Yo creo que es bidireccional. El entrenador es un en-cargado de gestionar el talento que tiene en sus ma-nos y a su vez los jugadores tienen que poner sus facultades a favor del grupo. Es un camino de ida y vuelta, todos los estamentos que forman parte de un grupo deportivo al final lo que hacen es poner lo me-jor de sí mismos, oséase talento y esfuerzo, en la con-secución de un objetivo. Y al final todo eso hace que cada uno mejore.

Siguiendo la senda de esa palabra llamada talen-to. ¿Mantiene el jugador de hoy en día esta virtud o se prima más el baloncesto físico-táctico?

| Por Jonathan Anta

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No tienen por qué ser antagónicos. Muchas veces utilizamos los térmi-nos físico o táctico como antónimo de espectáculo o buen hacer. El baloncesto se adapta como cual-quier otro deporte a la evolución de los jugadores, la cual en los úl-timos veinte años ha sido espec-tacular. Por lo tanto esos nuevos cuerpos, perfiles físicos, lo que ha-cen es aportar dimensión al juego. Por ejemplo, siempre se habla de contraataque y pista abierta como sinónimo de espectáculo, pero sin

ese avance físico no podrían verse acciones como alley-oops, accio-nes por encima de aro o jugadores de 2.07 botando como un base.

¿Entonces se sigue premiando la inspiración de un jugador dentro de una pista de baloncesto?Uff le invito que vea entonces a ju-gadores como Jaycee Carroll o Juan Carlos Navarro.

Sí, por supuesto, me está citando a jugadores de una calidad incues-

tionable, pero me refería a que si hoy en día cada jugada tiene un estudio previo en el que cada juga-dor tiene un papel definido.Creo que hay mucho tópico en eso. Al final, el sistema o la juga-da como tú le llamas lo que hace es generar unas oportunidades que sin el aporte individual no sir-ven para nada. Es bueno que un entrenador deduzca o planifique para que un jugador quede aisla-do o solo en una posición de tiro porque al final lo que cuenta es su puntería o capacidad para generar en un 1 contra 1. Los entrenado-res, somos gestores del talento. Otra cosa es que entendamos el talento simplemente en el plano ofensivo, porque en el plano de-fensivo es fundamental en el de-porte, si hablásemos o utilizára-mos la metáfora para un concierto de violín, pues hay un violinista principal que interpreta de mara-villa la melodía correspondiente, pero es fundamental el encargado de los timbales o del triángulo que marca el ritmo apropiado y el tem-po para que ese violinista pueda saborear su talento al mayor nivel posible.

Sin centrarnos en nombres, ni po-sibles bajas ni altas, ¿qué conside-ra primordial que hay que mejorar de cara a la próxima campaña para seguir luchando de tú a tú en la ACB?Lo que no se puede es cambiar el concepto filosófico del grupo. Hace dos años, cuando me embarqué en este proyecto se marcaron unas pautas donde la profesionalidad y el factor humano está por encima de todo, donde hay una serie de valores que queremos transmitir como equipo y colectivo, donde el todo sea más que la suma de las partes y donde el jugador y todo aquel que forme parte del Obradoi-ro pongamos lo mejor de nosotros

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mismos en la consecución de los objetivos del club. Estas líneas van a seguir considerándose maestras que marcarán la configuración de la plantilla sin obviar el aspecto eco-nómico el cual marcará que puedas tener acceso a determinados juga-dores.

Remarcando sobre el aspecto eco-nómico y la situación actual, ¿es difícil la supervivencia de un “pez pequeño” en una pecera tan in-mensa?Nuestros recursos son limitados en cuanto los comparas con un equi-

po grande sin duda, pero el mero hecho de los tiempos que corren que un club como Obradoiro se mantenga arriba es un gran éxito. Detrás contamos con el apoyo de mucha gente, un grupo empresa-rial y una afición que apoya, sufre y da lo mejor de sí misma para que este proyecto triunfe. Esa es la verdadera razón de nuestro equi-po y aunque seamos pequeños en comparación con otros dentro de la modestia somos conscientes de nuestra realidad, así que lo bueno de competir contra equipos como Barcelona, Madrid, Baskonia...

hace que aquello que consigamos tenga más mérito todavía.

¿Cuántas horas de scouting o de reflexión se pueden llegar a dedi-car para dar con la tecla adecuada en forma de jugador?Sinceramente todas las que pue-das dedicarle. La profesión de en-trenador es maravillosa porque tu capacidad de mejora es ilimitada, es decir, existen tantos campos en los que puedes mejorar que prácticamente tu aprendizaje es continuo hasta que te retiras, en-tonces cuanto mayor sea tu capa-cidad de dedicación, cuanto más seas consciente de ello pues más vas a mejorar. Un amigo mío suele decir que “si no mejoras, empeo-ras”, por lo que no existe el man-tenerte, tienes que dar siempre

“La profesión de entrenador es maravillosa por-

que tu capacidad de mejora es ilimitada”

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ese paso más. Tu capacidad de conocimiento, jugadores, aprendi-zaje, visionado junto con la táctica, técnica, estratégica, dominio de lo psicológico además de la experien-cia vital.

Un hombre como usted, profe-ta en su propia tierra, ¿cómo le podría explicar a un aficionado del resto de España el fenómeno Obradoiro que se ha creado en tres años?Muy difícil. Creo que aquí vale el dicho de que una imagen vale más que mil palabras. Simple-mente ver un partido en lo que denominan A Caldeira do Sar (La Caldera), escuchar el “miudiño” pues entiende que tanta pasión reflejada en nuestro público que llena las gradas es el mejor in-dicativo para explicar lo que es nuestro club. Aquí el público nun-ca va a reprocharte que fallen un triple, bandeja o tiro libre, pero ten por seguro que premiarán más el esfuerzo y lucha que cual-quier acción espectacular.

Además se puede decir que sin ce-rrarse en las fronteras de la ciudad de Santiago, la pasión por el club se palpa por gran parte de Galicia, que en un principio acudían a ver ACB tras varios años en la comuni-dad y que han quedado atrapados dentro de la idiosincrasia del equi-po.Y además existe un obradoirismo en la diáspora, gente que está fue-ra de Santiago que no puede venir a Sar y sin embargo es socia. Creo que aquí encontramos dos aspec-tos, por un lado lo que te explicaba en la respuesta anterior de senti-miento, pasión y es muy fácil hacer tuyos esos valores de gente que lu-cha que pelea. Y luego hay otro fac-tor que seas de donde seas el ba-loncesto es maravilloso y un juego francamente divertido.

Quién le iba a decir cuando acudía de pequeño al viejo Sar que iba a acabar llevando el timón del club en un futuro...En mi carrera como entrenador me inicié porque amo el baloncesto, es un deporte que me encanta y mi hobby fundamental, pero nunca me planteé que llegase a ser mi modo de vida. Las cosas van ocurriendo y en un momento cuando te paras y echas la vista atrás te sorprendes y ese ejercicio de reflexión y mirar al pasado es bueno para recordar de dónde vienes y olvidar quién eres. Todavía no creo en la reencarna-ción y vida creo que solo voy a dis-frutar una que es importante tanto disfrutar el viaje como la llegada a tu destino.

Entonces, ¿más que nunca está vi-gente que Obradoiro es un club de amigos no?Es muy bonito, la siglas CAB (club de amigos del baloncesto) realmen-te son significativas de lo que son este equipo. La gente ve el balon-cesto como una forma de pasión, de divertimento, crea amigos val-ga la redundancia. Tengo muchos ejemplos cercanos de pandillas que se han creado por este depor-te y que no tenían ningún tipo de relación previa y ese es uno de los puntos maravillosos que tiene este deporte como vehículo social.

Muchas veces el deporte profesio-nal te lleva a lugares en los que uno se puede sentir en cierta soledad. ¿Se siente afortunado de poder salir por la puerta del pabellón y entrar prácticamente en cinco mi-nutos en su casa de toda la vida?Tiene mucho de positivo eviden-temente pero también sus cosillas malas. Cuando las cosas van bien tu entorno más cercano como son familia, amigos lo disfrutan pero cuando es al revés lógicamente su-fren contigo. No es lo mismo por

ejemplo ver cómo sufre mi madre cuando pierdo en Sar que cuando lo hacía en Los Barrios por así de-cirlo. Pero es cierto que la balan-za de Santiago sobre 100 pesa 95 a favor y menos uno las cosas en contra.

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¿Se piensa en un corto-medio pla-zo en un proyecto de cantera?Se necesitan dos cosas básicamen-te: tiempo y estructura incluido dentro de ello el aspecto económi-co. Además existen dos proyectos, a corto plazo una versión social,

es decir, niños y niñas, padres y madres que sus hijos quieran que participen del básquet, crear unas escuelas y unos equipos, porque está claro que para que en el futu-ro puedan aparecer jugadores lo que hace falta es mucho tiempo.

No es plantar para que una semilla te crezca en un mes, si no hacerlo para que dé sus frutos a largo plazo. El club es consciente que con pe-queños pero firmes pasos la punta de la pirámide se sostendrá con una base fuerte.

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Hablando de pequeños proyectos, ¿se peca a veces de falta de pa-ciencia en el crecimiento de ciertos jugadores?El entorno influye mucho. Tiene mucho que ver la paciencia, el en-torno deportivo. A veces el nivel de exigencia es tan grande que da lugar a que no se puedan ocupar plazas de un primer equipo, pero es evidente que la salud del balonces-to español es excepcional, solo hay que echar un vistazo a cada verano donde los resultados conseguidos por nuestras selecciones son de pri-merísimo nivel mundial.

¿El baloncesto ACB tiene proyec-ción e imagen dentro de un mer-cado tan americanizado, llámese NBA?Solo hay que ver los pabellones que cada año aumenta el aforo de pú-blico que acude a disfrutar de un partido. Está claro que la ACB es un producto muy atractivo.

¿Cómo definiría el deporte que representa o que tanto enamora como usted predica?El baloncesto tiene tantos valores que tendríamos que estar charlan-do horas y horas para poder enu-merarlos. No puedo en mi caso ser objetivo porque siempre hablaré de elementos como pasión, diverti-mento, dinamismo... cada segundo es espectáculo, es uno de los pocos deportes, desde mi punto de vista, en el que la defensa también forma parte del espectáculo. Un tapón, un robo de balón, un jugador que se tira al suelo... no existe un con-dicionamiento defensivo negativo como si existe en otros deportes, pero por supuesto el juego ofensivo es maravilloso, el simple hecho de meter un balón en un aro.

Si la defensa es espectáculo, ¿el Limoges del 93 fue su máximo ex-ponente?Pregunta a los aficionados del equi-

po francés a ver qué te responden... Ver a Young y Dacoury... Recomien-do por ejemplo mencionando los 90 al Kentucky de Rick Pitino con presión a toda pista, continuos 2 contra 1, partidos en el que se lle-gaban a lanzar más de 35 triples un puro espectáculo, cómo defendían y luchaban por cada balón los Tony Delk y compañía y eso hacía que el aficionado disfrutase tanto de una bandeja como con los triples de los llamados bombinos pitinos.

¿Qué momento o recuerdo guarda con más cariño en su trayectoria profesional?Buenos hay muchos. Los dos últi-mos años están cargados de mo-mentos muy especiales pero hay otros como cuando entrenaba por ejemplo en un equipo de primera autonómica en A Estrada y conse-guimos ascender en su momento, pasando por los Barrios, Gijón, Lugo... pero sin duda valoro más el encontrarme con gente de 35-36 años que son los primeros que entrené siendo niños que te vean, saluden y traten con tanto cariño.

Para ir finalizando que podrá es-perar el aficionado del Obradoiro para la campaña 2012/13?Lo mismo que mis dos años. Gente que se esfuerce, trabaje, que pon-ga su talento a favor del colectivo, profesionalidad en su grado máxi-mo. Quiero equipos bravos e inte-ligentes.

Para terminar defíname en pocas palabras los siguientes nombres:Hopkins: Leyenda, Andrés Rodrí-guez: Dinamismo e inteligencia, Cabanas: Tesón, Bulfoni: Coraje, Ere: Profesional con mayúsculas, Palacio: Experiencia, Washington: Espectacularidad, Kendall: Talento, Junyent: Sacrificio, Nguema: Pun-donor e inteligencia táctica, Lasme: Intimidación, Corbacho: Punteria.

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La pizarra

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Hace unos años se abusaba mucho más de balones en el poste bajo, pero ahora no es que no se juegue esta acción; hemos evolucionado jugando esto desde otros mo-mentos de juego o alargando ese poste bajo hasta el “short corner” (espacio entre la esquina y el nombrado poste bajo), jugando muchos pívots desde ahí buscando la cara, como Nik Caner Medley, o aleros como Mumbrú. En este artículo vamos a reflexionar un poco sobre el ¿cómo llega el balón?, ¿cuándo?, ¿a quién?; y después comentaremos el posible movimiento de otros jugadores, determinando y desenmas-carando de esta manera casi una filosofía de juego, combinándolo contra diferentes defensas. Porque hay algunos equipos que dependiendo cómo, con qué jugadores y cuánto juegan con balones interiores, crean ya su propia ideología.

En principio empezaremos con el desa-rrollo del balón en el poste bajo, con pie dentro de zona, de un hombre interior. Acción que es vista en llegada por algu-nos equipos como Madrid este año si el

contraataque puro no sale; pero otros equipos también lo han jugado en llega-da como CSKA con Kirilenko. A partir de un balón interior podemos pasar y cortar (podemos ver una acción clara en este ví-

Pincha en el video para verlo

31Pincha en el video para verlo

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con un corte y una rotación con los juga-dores exteriores. El corte se podrá reali-zar además por encima del balón o entre balón y línea de fondo, dependiendo los espacios, las lecturas de ventajas y el ob-jetivo de los cortes.

Otra circunstancia que se da es la recep-ción fuera de la zona, sin llegar a estar más allá de los 5 metros pero con más espacio. Dependerá del jugador que sea para po-der jugar el 1c1; por ejemplo Tim Duncan realiza con gran efectividad el pivote so-bre el pie más alejado de la línea de fondo hacia dentro, girándose agresivamente con el balón si botarlo, consiguiendo es-tar de cara y a partir de ahí probar a ganar el centro; mientras el resto de compañe-ros, le crean el espacio y en el lado débil hay movimiento para evitar las ayudas.

Situaciones defensivas que se dan en estos casos son antes de recepción ne-gar el pase (simplificando mucho), y esto puede hacer que se busquen trian-gulaciones como posibles soluciones. Una vez el balón está en el poste bajo, el defensor del exterior de la cara pue-de negar la salida de balón, para lo cual puede ser interesante el corte o la bús-queda de la posición central base; pero también puede saltar al 2c1, para lo cual puede ser también recomendable salir a la esquina. En este sentido también puede haber 2c1 desde el otro lado, por ejemplo en el siguiente vídeo pertene-ciente a los cursos de entrenadores de Argentina, explica Daniel Maffei, cono-cido entrenador celeste que estuvo en España con el “Aguas de Calpe” de LEB, cómo prepara esta acción con su otro hombre grande.

Fig.1. Un jugador recibe interior y desde el exterior, hay una rotación de los jugadores de fuera para ir a la cara de balón.

deo), pero dependerá desde donde pasa-mos el balón y habrá que ver los espacios que crean el resto de jugadores. Una si-tuación clásica es la que vemos en la fig.1

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Pero antes de todo esto están los detalles de la recepción. Conceptos importantes son la mano de blanco, la llegada desde la vertical o desde la horizontal, para clavar un pie y luego el otro (normalmente exte-rior y después interior); y dicha llegada la marcará en general la pizarra de cada en-trenador. En la fig.2 se puede observar una recepción de Pau Gasol.

En el blog Pick&Roll de Alex Asensio se pue-den ver acciones desde poste bajo en un post específico (http://aasensio.blogspot.co.uk/2012/04/que-hago-despues-de-poner-la-pelota-en.html?spref=tw). Por otro lado Raul Jiménez, entrenador que este año ha estado en Hungría, que tam-bién tiene blog y es alguien muy activo en las redes sociales, tiene varios vídeos en Youtube sobre movimientos desde el pos-te bajo, que pensamos son bastante intere-santes, donde propone también hombres bajos en el poste bajo como Diamantidis del Panathinaikos o Mendiburu del Estu-diantes; dos jugadores exteriores de dife-rentes características y acciones defensi-vas, desde cambios que en 2010 hacía el Barcelona, hasta anticipaciones. Y es que

el poste bajo es una posición para todos, sabiendo cómo se puede optimizar a cada jugador desde ahí.

Volviendo a la ocupación de los espacios de los jugadores sin balón, podemos ver como otra solución tras meter el balón dentro es ir a bloquear al jugador que esté en el exterior, pudiendo ser en algu-na ocasión algún interior en poste alto, de esta manera se eliminan ayudas y se ofre-ce una salida del balón.

Para muchos sistemas meter el balón den-tro es sinónimo de finalización de jugada, para otros muchos, el balón interior respon-de a una cuestión de equilibrio necesaria y el juego se debe iniciar tras un balón dentro para generar más peligro desde el inicio de la jugada. Hay muchas filosofías y lo mejor es que cada entrenador en función de sus jugadores pueda adaptar sus conocimien-tos para saber a quién hay que darle el balón dentro, para qué, cuándo y cuánto. En este artículo se ha intentado dar una visión gene-ral de posibilidades desde el poste bajo con ejemplos concretos esperando que sea de interés y haya resultado interesante.

”Ganar es mi único objetivo”

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“Es un orgullo ser llamada por la selección”

LEON

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DRÍGU

EZ“Siempre ha sido un honor para mí defen-der los colores de España. La experiencia siempre ha sido genial con las categorías inferiores, y ahora el poder convivir con las mejores jugadoras de España, ha sido una experiencia inolvidable.”

“Después de una canasta así, no tienes tiempo para pensar”

G. P

RINT

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“Realmente, no tengo palabras suficientes para describir a Ivkovic. Él, aparte de en-trenador, es un profesor, que creyó en mí y le estoy muy agradecido. Es para mí un honor decir que él ha sido mi entrenador”.

Lee la entrevista completa

“Aunque es una selección, se com-portan como un equipo. Esa es

nuestra fortaleza”

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MAT

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“EEUU es el rival a batir, pero cometeríamos un error grave si menospreciamos el carácter argentino, el descaro de los brasileños, lo im-predecible de los chinos, el talento físico de los franceses o la ambición de Gran Bretaña, el equipo de casa”.

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“Mi sueño es llegar a la NBA y trabajo para conseguirlo”

TOM

ABER

CROM

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“Disfruté y adoré cada minuto que pasé en Turquía, en aquel Mundobasket, y la expe-riencia que me dio disputarlo. Sabía que era capaz de hacerlo bien en aquel nivel y esa fue la primera oportunidad que tuve de de-mostrarlo”.

Lee la entrevista completa

”Ganar es mi único objetivo” JE

REMI

AH M

ASSE

Y“El entrenador Maljkovic tiene diferentes modos de llevar los entrenamientos. Nunca hemos tenido un entrenamiento que no sir-viera para algo, hemos entrenado y prepara-do cada encuentro centrados en nosotros y no en nuestros oponentes”.

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NUESTRAS RECOMENDACIONES

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Poseedor de una muñeca de oro, un juego de pies virtuoso, amigo de las fintas, ade-más de gran pasador y con un físico que engañaba, ya que parecía que en cada bloqueo o en cualquier disputa por la posición se iría al suelo, pero salía ileso de cada encontronazo. Pudiendo batirse con jugadores como Lavodrama, Davis...

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RAFA VECINA

“Pasé de ser el mejor jugador nacional junior a estar 18 meses sin jugar”Destacó en las categorías inferiores del Joventut de Ba-dalona, así como con la Selección Española Juvenil, con la que consigue una cuarta plaza en el Mundobas-ket de 1983. Destacando sobre jugadores como Sabo-nis, Tikhonenko o Villacampa, entre otros. Pero pronto le llegaría un mazazo en forma de lesión, que le tendría apartado más de un año de las canchas. Pasó de ser el futuro del Joventut junto a Jordi Villacampa a estar prácticamente descartado para la práctica del balon-

cesto profesional. Tras 18 meses de “sangre, sudor y lágrimas” logra volver a jugar de la mano del recién des-cendido a Primera B (actual LEB Oro) Caja de Ronda Málaga. Aquí vuelve a sentirse jugador, debiendo adap-tar sus limitaciones físicas a su juego. Más tarde llegaría su etapa en Estudiantes, en el Baloncesto Salamanca y nuevamente en el Estudiantes, donde se retiraría. En-tre tanto, le da tiempo de sumar 24 internacionalidades con la selección absoluta.

¿Qué es lo que hace que Rafa Ve-cina se decante por el balonces-to?Fue a los 14 años y medio, cuando después de haber probado suerte en otros deportes como el fútbol, decido jugar a baloncesto. Los fac-tores que más me ayudaron a se-guir fueron el hecho de sentirme a gusto practicándolo, al estar dota-do y por tratarse de un deporte di-námico y divertido. También influ-yó mucho el cariño con el que me trató la gente desde el principio.

Pasas por el Sant Josep, luego por las categorías inferiores del F.C. Barcelona y llega al Joventut. Aún destacando con la selección juve-nil, ¿qué es lo que te aparta de contar con minutos en el primer equipo?En aquella época es cuando se pro-ducen mis dos segundas operacio-nes y tengo que estar 18 meses sin jugar. Además, los médicos me dicen que no hay ningún jugador

que hubiera tenido mi lesión y que hubiera seguido jugando. Yo pude superar esto a base de mucho es-fuerzo, ya que recuerdo que en los entrenamientos acababa lloran-do del dolor y por lo tanto, estaba prácticamente finiquitado. ¿Es difícil destacar si a tu lado tie-nes a Jordi Villacampa, o por el contrario es una ayuda?Yo lo veo como complementario, ya que éramos escolta y pívot y no entiendo el baloncesto de otra ma-nera. En la Penya apenas coincidi-mos por mi lesión pero sí jugamos juntos en la selección junior y fue una suerte poder compartir equipo con uno de los mejores jugadores de Europa en aquella época.

Tras 2 años te marchas al Caja de Ronda, que había descendido de la ACB esa misma temporada, ¿qué te hace tomar esa decisión?En esa época existía una norma en la Liga ACB que se llamaba “pacto

de caballeros”, lo que me impedía fichar por otro equipo de la compe-tición porque la Penya me retenía. Entonces, sale la opción de ir a Má-laga y aunque era bajar un peldaño en mi carrera fichar por un equipo de categoría inferior, recibí un trato excelente por parte de varias per-sonas del club como el entrenador, Arturo Fernández, el fisioterapeu-ta, Juan Amat, o el presidente, Paco Moreno. La experiencia fue impre-sionante, ya que entre otras cosas, conseguimos el ascenso y fui nom-brado como mejor jugador de la competición.

Colaboras en el ascenso de mane-ra brillante y lográis consolidar al equipo en la liga y en los playoffs por el título en los años siguientes, ¿cómo se consigue ese éxito?Hubo mucho trabajo previo, ya que antes de esos éxitos también vivimos momentos duros como tener que jugar dos playoffs por el descenso. Por suerte, nos sobre-

| Por Edgar López y Juanjo Segura

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pusimos y pudimos construir los cimientos de lo que es el actual Unicaja. Cuando te digo estos nombres, Fede Ramiro, Ricky Brown, Joe Arlauckas, Mario Pesquera... ¿qué recuerdos te vienen a la ca-beza?De Fede Ramiro puedo decir que es el mejor base con el que he jugado, además de ser el padrino de mi hija, lo que hace que to-davía tengamos una gran amistad. Ricky Brown destacaba por su pro-fesionalidad y creo que si jugara actualmente, sería uno de los me-jores de la liga. En cuanto a Joe, decir que ha sido con el jugador que más me he reído en toda mi

carrera, aparte de ser un anota-dor compulsivo. Por último, Mario Pesquera fue un entrenador inno-vador, ya que su baloncesto era lento pero muy rápido a la hora de meter canastas, pero lo que más destacaría de él, es su gran conocimiento táctico. Después de estos, también me vienen a la ca-beza otros nombres como Antonio Benítez o Juanma Rodríguez, que también contribuyeron a que pa-sara los dos años más felices de mi vida.

Debido a la fusión del Caja de Ronda con el Mayoral Maristas (de donde nace el Unicaja Mála-ga), sales del club con destino a Madrid para jugar en otro históri-

co como es el Estudiantes. ¿Cómo se vive el baloncesto ahí? ¿La exi-gencia en un club como el Estu-diantes era mayor que con el Caja de Ronda?En primer lugar, he de decir que me quería quedar en Málaga, ya que entre otras cosas, mi hija había nacido allí y estaba muy adaptado a la ciudad. Aunque tenía una oferta superior econó-micamente del entonces Taugrés, decidí declinarme por la de Estu-diantes, debido a que conocía a Pepu Hernández, Alberto Herre-ros o Juan Antonio Orenga, y me hablaron muy bien del club. Ellos me ayudaron bastante a que me integrara rápido en la filosofía del equipo, en el cual iba a tener un rol algo diferente, ya que venía de ser el mejor jugador nacional de la competición.

Dos años después tomas rumbo a Salamanca para jugar en el C.B. Salamanca, novato en la compe-

“Fede Ramiro es el mejor base con el que he

jugado, además de ser el padrino de mi hija”

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tición. ¿qué te lleva a decantarte por este club? ¿te ayudó que Fede Ramiro estuviese en el equipo?Venía ese verano de estar en la se-lección española y por lo tanto, no voy a negar que buscaba un contra-to elevado económicamente, por la seguridad familiar. Por otro lado, me atraía mucho el proyecto de Salamanca, donde estaba Fede Ra-miro y también Manolito Aller. Con ellos dos, me senté a hablar antes de firmar y fueron los que más me ayudaron a tomar la decisión. El primer año fue un hito porque no descendimos y en el segundo año, el equipo se va asentando e incluso conseguimos meternos en la Copa Korac.

En el año 1996 regresas al Estu, donde eres un ídolo para buena parte de la afición. ¿Era el lugar idóneo para retirarse?La verdad es que sí, porque el entorno del club sabe reconocer a los jugadores que se entregan por unos colores. La historia de ese fichaje fue cómica, ya que un 29 de julio y sin tener ni idea de donde iba a jugar en esa tempo-rada, me encuentro jugando un partido de tenis en el momento que me llama Pepu Hernández y me dice: “¿Te vienes a jugar al Estu?”. Esa misma mañana, llegué a mi casa, hablé con mi mujer y me puse rápidamente a buscar casa y colegio para los niños en Madrid, ya que yo residía en Má-laga. Fui el tío más feliz del mun-do y la prueba de ello, es que

ni siquiera le pregunté a Pepu lo que iba a cobrar. De todo lo que viviste como juga-dor, ¿podrías decirnos con qué te quedarías y qué descartarías?Destacaría por encima de todo, el ver la cara de felicidad de la gente, y el sentirte partícipe de ello. Como éxito individual no voy a destacar nada porque para mí tiene más importancia lo colecti-vo, y lo que más guardo en mi memoria, es el ascenso con el Caja de Ronda. Si puedo descartar algo, son todos los problemas que he tenido con las lesiones, por-que cuando te ves que no pue-des jugar, es cuando más te das cuenta de lo que estás perdiendo. Por suerte, no me rendí y luché hasta el final, que fue lo que le recomendé a Henk Norel cuando se lesionó la última vez.

¿Cómo te definirías como juga-dor?Pues según los “dichos” de la ACB, un jugador simple e inteligente. He de decir que nunca he estado satis-fecho con mi juego y que nunca me gustaba verme jugar, es más, sólo tengo dos partidos míos y los tengo porque me los enviaron.

¿Con qué jugador te gustaba en-frentarte por lo que te exigía?Me he enfrentado con grandí-simos jugadores como Arvydas Sabonis, Audie Norris o Stanley Roberts, pero hay jugadores que me marcaron el hecho de enfren-

tarme a ellos como es el caso de Quique Andreu, al que le tengo una gran estima y con el que me he dado “tortas” hasta debajo del sobaco. También destacaría a Da-rryl Middleton, que era un juga-dor que te obligaba a emplearte al máximo hasta en la rueda de calentamiento.

Tras su grave lesión de rodilla, ¿pensó en dejarlo? ¿Qué le hizo seguir?Los médicos eran muy pesimis-tas con mi lesión y fue todo muy duro. Pasé de ser el mejor jugador nacional junior a estar 18 meses sin jugar. Yo soy una persona pro-cedente de un barrio humilde y creo que esa humildad combinada con esfuerzo, fue lo que me per-mitió no rendirme. También tengo que destacar la figura de mi mu-jer, que la conocí en ese momento tan duro para mí y fue la persona que más me ayudó a salir hacia adelante. ¿Se aprende de una lesión como la suya? ¿Qué se saca de positivo de ello?Te enseña a ser mucho más fuerte, ya que si de por sí era un tipo con carácter, tuve que sacar más y sa-crificarme lo incalculable. También me obligó a madurar antes, a ser más responsable, a aprender de que siempre se puede hacer algo más por todo.

De todos los jugadores con los que has compartido cancha, ¿cuál te ha sorprendido más?La verdad es que sorprenderme, pocos, siempre he sido muy es-tudioso y solía conocer a los ju-gadores antes de enfrentarme a ellos. Me acuerdo de mi etapa en Málaga cuando Martín Urbano nos ponía vídeos de los equipos y me fijaba en todos los jugadores, no sólo en los de mi posición. Sí

“Nunca he estado satisfecho con mi juego,

nunca me gustaba verme jugar”

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que es verdad que solía pasarlo mal con los jugadores zurdos. En cuanto a los jugadores actuales, el que más me sigue sorprendien-do es Juan Carlos Navarro, por to-das las cosas que puede llegar a hacer. ¿Crees que Carlos Jiménez se me-recía otro final para su carrera?Creo que se merecía haber gana-do la liga, pero las circunstancias le han llevado a otra cosa. Yo siempre he sido un admirador de Carlos en todos los sentidos y como anécdo-ta, recuerdo que cuando éramos compañeros, sus padres cuidaban de mis hijos en los partidos. En mi opinión, se merece todo el recono-cimiento, ya que para mí ha sido el jugador más ejemplar del balonces-to nacional. Sabemos que ves todo el balonces-to que puede, ¿qué destacarías de las grandes ligas?Es difícil, ya que de cada cosa abs-traes algo. Por un lado está el ba-loncesto europeo, donde existe más seriedad, más tablas en los jugadores y entrenadores, y en definitiva, más baloncesto táctico. Mientras que por otro, está la NBA, donde primero existen 82 partidos que pueden tener una parte diver-tida u horrorosa, y después están los playoffs, donde se ven grandes partidos, con unos jugadores muy dotados físicamente y luchando por el anillo con una gran intensi-dad.

Para terminar, ¿cuáles son los ob-jetivos de Rafa Vecina para el fu-turo?Es complicado decirlo, pero sí que tengo claro que tengo 48 años y que para empezar, mi mujer y yo tenemos una empresa, lo que hace que esté muy vinculado a la familia. En cuanto al baloncesto,

tengo que decir que me encanta y que me gustaría mucho seguir vinculado a él de alguna manera, ya que son 32 años dedicados a este deporte y es lo que más me apasiona, ya que he probado otros oficios como comercial o incluso, subido en un andamio. Podría es-tar incluso separado de Pepu Her-nández, ya que algunos piensan que siempre tengo que trabajar con él y he de señalar que tengo algunas ofertas de la Adecco Oro, pero me retrae mucho el hecho de que por todos los problemas

que hay, no puedan hacer frente al contrato y no cobre. Mirando otros retos, no me importaría ser ayudante de algún entrenador de la Liga Endesa, aunque también me veo capacitado para ser primer entrenador o director técnico de algún club. Por supuesto, también me apasiona el trabajo en un me-dio de comunicación, ya que lle-vo en la televisión desde el 98 y es una cosa que me encanta. Con todo esto, lo que sí tengo claro, es que no le recomiendo a nadie picar piedras.

“Me apasiona el trabajo en un medio de

comunicación”

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“Las ganas de volver a jugar son la máxima motivación”

A FONDO...

ALBA TORRENS

Es sin duda una de las caras más reconocidas del basket femenino, una auténtica estrella con muchísimo futuro por delante para seguir dando alegrías al baloncesto español. Una grave lesión de rodilla ha impedido a los aficionados disfrutar de su juego durante unos meses. Una espera que Alba recompensará cuando vuelva a la cancha con su juego espectacular y su mentalidad ganadora que seguro que le llevará a seguir ampliando sus logros en este deporte.

A sus 22 años ha conseguido ganar la Liga Femenina y la Euroliga con Perfumerías Avenida de Salamanca en la campaña 2010/11, una tempo-rada inolvidable. En el plano indivi-dual, consiguió el MVP de la Euroliga y ha sido designada como la mejor jugadora Europea del 2011. Tras lo-grarlo todo en Salamanca decidió poner rumbo a Turquía para jugar en el todopoderoso Galatasaray.

Lo primero, ¿cómo va la recupera-ción de tu rodilla?Es una recuperación larga y hay que ir paso a paso. La rodilla va mejo-rando cada día. Aún quedan unos meses de rehabilitación en los que hay que seguir trabajando duro y ver cómo va avanzando la rodilla.

La última campaña que estuviste con Perfumerías Avenida fue im-presionante ganando la Euroliga y la Liga. ¿Con qué recuerdos te que-das de ese año?Tengo muy buenos recuerdos de Salamanca. Ganar un título como la Euroliga fue algo increíble. Creo que hicimos una gran temporada, ha-

ciendo un buen juego. También ten-go un recuerdo especial de la cele-bración de los títulos con la afición.

A nivel personal también has con-seguido premios importantes, MVP de la Euroliga y mejor juga-dora Europea del año. ¿Qué ha sig-nificado para ti?Fue una alegría recibir este premio y a la vez una motivación para se-guir trabajando y mejorando. En estos momentos, una motivación para seguir trabajando con la rodi-lla y volver cuanto antes a jugar.

Este año decidiste dar el salto al Galatasaray. ¿Qué diferencia ves entre la liga turca y la española?Las dos son ligas de gran nivel en Europa, con equipos punteros en la Euroliga y jugadoras importantes. Como se ha demostrado estos últi-mos años con Perfumerías Avenida, Ros Casares y Rivas Ecópolis. La Liga Turca tiene una muy buena organi-zación y están apostando por el ba-loncesto femenino. En los diferen-tes campos que he jugado se ve una gran afición.

¿Cómo fue tu adaptación tanto deportiva como personal a Tur-quía?La adaptación fue muy buena, tan-to a nivel deportivo como personal. El club y mis compañeras me ayu-daron a que fuese así. Poco a poco fui adaptándome al nuevo equipo y a la nueva ciudad. Después de es-tos meses la valoración que hago es muy positiva.

¿Qué es lo que más has echado de menos de España en esta nueva etapa?Suena a tópico pero lo que más he echado de menos estos meses en Turquía ha sido mi familia y mis amigos. ¿Y lo que más te ha gustado de Tur-quía?Lo que más me ha gustado de Tur-quía ha sido Estambul, es una ciu-dad impresionante, muy bonita, con muchas cosas para conocer. En estos meses también hice de “turis-ta” y pude descubrir la ciudad. Y la comida típica turca está muy bue-na!!!

| Por Montserrat Millán

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Una lesión siempre es dura pero este año todo parecía perfecto, gran equipo, Galatasaray, clasifi-cado para final de la Euroliga en Estambul como anfitrión, y llegó el momento donde la mala suerte te tocó. ¿Cómo ha sido llevar todo esto?Una lesión nunca llega en un buen momento y una lesión como ésta es un momento duro. Hay que ser fuerte y saber que queda mucho trabajo por delante. Ser consciente que en una recuperación tan larga hay altos y bajos. Es importante es-tar animado y ser constante. Las ga-nas de volver a jugar son la máxima motivación.

El baloncesto español se volcó contigo tras saberse el alcance de la lesión y la respuesta de la ini-ciativa “una sonrisa para Alba” ha

sido impresionante. ¿Cómo te has sentido?Una sonrisa para Alba fue algo in-creíble y un golpe de ánimo en un momento duro. Una idea de Álvaro Paricio y Maribel en que muchísima gente participó. Con todas las son-risas que me llegaron de jugadoras, mi familia, afición... es imposible no estar animada! Y desde aquí una vez más agradecer todo el apoyo y fuerza.

En Galatasaray has compartido equipo con Diana Taurasi, que para muchos es la mejor jugadora del mundo, ¿cómo ha sido la experien-cia de compartir cancha con ella y cómo la describirías?Compartir vestuario con una de las mejores jugadoras del mundo ha sido muy positivo para mí. Tanto en el día a día, en cada entrenamiento

como compartiendo pista con ella. Taurasi es una líder dentro y fuera de la cancha. Es capaz de hacer co-sas increíbles y a la vez hace mejor a sus compañeras.

La temporada que viene el equi-po va a cambiar bastante, ¿cómo afrontas el año próximo con Gala-tasaray?Galatasaray vuelve a plantear un proyecto ambicioso para el año que viene, tanto en Liga Turca como en la Euroliga. En las dos competicio-nes el objetivo será pelear por el título, sabiendo que es muy difícil. Hay que ir paso a paso, conjuntar el nuevo equipo, mucho trabajo por delante y muchas ganas de hacerlo bien.

Eres muy joven y ya has vivido mu-chas experiencias en este deporte

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consiguiendo grandes cosas. ¿Te apetece dar un paso más y probar la experiencia de la WNBA?Jugar en la WNBA, una de las me-jores ligas del mundo con las mejo-res jugadoras, sería una experiencia muy buena. Ojalá en algún momen-to tenga la oportunidad de vivirlo.

Lucas Mondelo fue entrenador en tu etapa en Salamanca y este ve-rano se ocupará de la selección, ¿qué te parece su nombramiento y qué destacas de él?Lucas ha conseguido grandes lo-gros, con el Perfumerías Avenida y con las selecciones de categorías inferiores, creo que es una bue-na elección. Destacaría que sabe transmitir muy bien lo que quiere a sus jugadoras y tiene muchas op-ciones en el juego, para poner en práctica, según el partido o en dife-rentes momentos del partido para buscar la mejor solución.

¿Qué te ha parecido su primera convocatoria?Tenemos un gran equipo, con gran-des jugadoras y la combinación de jugadoras veteranas y jóvenes ha funcionado. Estos últimos años se han conseguido grandes éxitos. Es verdad que el año pasado no se consiguió el objetivo y fue un mo-mento muy duro.

Después de la decepción que su-puso el último europeo con la selección, ¿te da rabia no poder ayudar al equipo este verano en el Pre-europeo?Sí, da rabia no poder estar e inten-tar ayudar al equipo. La recupera-ción es el partido que me toca ju-gar.

¿Cuál sería actualmente tu quinte-to ideal de jugadoras?Sue Bird, Diana Taurasi, Tamika Catchings, Tina Charles y Sylvia Fowles.

¿Cómo es un día normal en tu vida, tienes algún hobby en espe-cial?Un día normal ahora mismo son muchas horas de rehabilitación. Durante estos meses, libros y pe-lículas han sido una buena com-pañía. También he aprovechado, estando en Barcelona, para ir a al-guna obra de teatro y estar cerca de mi familia y amigos.

¿Cómo empezaste a jugar al ba-loncesto?Cuando tenía 7 años empecé ju-gando al fútbol. Un profesor de educación física de mi colegio me preguntó si quería jugar a balon-cesto, yo no lo tenía muy claro. Me convencieron para que lo probara, y empecé jugando en el Basquet Inca y así empezó todo, en el pri-mer entrenamiento ya me quedé con el baloncesto.

¿Cuál es tu mejor recuerdo en una cancha de baloncesto?Los mejores recuerdos que tengo son la Euroliga con el Perfumerías Avenida, el bronce en el mundial con la selección y un recuerdo es-pecial del primer europeo que ga-namos con la selección sub16 en Italia.

¿Y el peor?Uno de los peores momentos fue el año pasado en el Europeo. Y otro momento del que no tendré buen recuerdo fue el partido en el que me lesioné.

¿Cuál es la jugadora que más te ha impresionado al enfrentarte a ella?Diana Taurasi.

¿Con cuál de las jugadoras con las que has compartido vestuario has aprendido más?He tenido la suerte de jugar con grandes jugadoras, en los equipos

y en la selección. En cada momento he aprendido de alguna jugadora, no solo dentro de la pista también fuera de ella. Siempre se puede se-guir aprendiendo.

¿Qué medidas tomarías para pro-mover el basket femenino?Creo que apuestas como la de Tele-deporte, televisando partidos cada fin de semana de Liga Femenina o los partidos de la selección, es una buena medida para promocionar el

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baloncesto femenino, ya que es una manera de llegar a más público.

¿Qué consejos darías a las jóvenes que están empezando a jugar a este deporte?No sería un consejo... lo único que puedo decir es que disfruten del baloncesto y de todo lo que le ro-dea, conocer a gente, las compa-ñeras y todas las experiencias que puedes vivir. Trabajar duro día a día y disfrutar del momento.

Una comida: Canelones.

Una película: Hacia rutas salvajes, Sean Penn.

Una serie: A dos meses bajo tierra.

Un libro: Kafka en la orilla, Haruki Murakami.

Un lugar para vivir: Barcelona.

Un sueño por cumplir: Volver a las pistas!!!

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“Ojalá tenga la oportunidad de jugar en la WNBA”

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¿Cómo empezaste a jugar?Empecé a jugar a los 8 años en el que era mi colegio, Compañía de María, en Santiago de Compostela. Solía ver a los niños jugar al balon-cesto y me enganché enseguida, pasaba el día en el pabellón.

¿Qué te motivo a jugar al balonces-to y no a otro deporte?Mis padres eran jugadores de ba-loncesto y desde el principio me animaron a jugar porque era con lo que más feliz me sentía. Mi herma-no también es jugador, tenemos el baloncesto en la sangre.

¿Cómo te definirías como jugadora?Sacrificio, ambición, cabeza y el in-tento de ser lo más creativa posible.

¿Y como persona?Soy una chica responsable pero sin perder ese espíritu divertido en cada cosa que hago. Intento llevar una vida lo más organizada posible y disfrutar de cada mo-mento. Soy muy sociable aunque necesito también tener mis mo-mentos de soledad y soy bastan-te arriesgada, sin tener miedo a nuevas experiencias.

¿Qué personas te han ayudado más dentro del mundo baloncestistico?Mi padre, mi madre y mi hermano

Diego. Es cierto que he tenido en-trenadores que me han marcado y también amigos muy importantes, pero la familia ha sido mi pilar fun-damental.

¿Cuál es tu mejor recuerdo como jugadora?Los veranos en USA, jugar en Eu-ropa con el Extrugasa, la fase de ascenso y el Europeo U20 son recuerdos impresionantes, pero además, cuando juego, tengo muy presente todos los campeonatos jugados en categorías inferiores, hacen que recuerde la “jugadora” que llevo dentro.

¿Tienes algún sueño dentro de este mundo?Sueños claro, me encantaría lle-gar a jugar una olimpiada e inclu-so una NBA. Pero sin prisa, todo llega cuando lo quieres con mu-chas ganas.

¿Alguna manía deportiva?Pasta antes del partido, mi música para motivarme y siesta.

¿Qué sueles hacer durante tu tiem-po libre?En mi tiempo libre he de estudiar para mi carrera que me ocupa mu-cho tiempo e ir a ver a mis amigos cuando tengo un hueco.

¿Qué tal te ha resultado esta tem-porada en Las Rozas?Ha estado bien. El equipo ha man-tenido la categoría pero sin llegar a disputar la fase de ascenso. Es un equipo novato y todavía necesita adaptarse.

En relación a la fase de ascenso a LF disputada hace poco, ¿esperabas que subieran Bembibre y Conquero?Había equipos buenos y estaba bas-tante disputada la fase, pero ambos equipos han trabajado bien duran-te la liga y se merecían el ascenso.

El verano pasado te proclamaste junto a tu equipo campeona de Europa, ¿cómo fue esa sensación al subirte al podio?Es el mejor de los premios. Un re-conocimiento al esfuerzo. Somos un equipo estupendo, tanto a nivel profesional como personal y está-bamos realmente orgullosos de lo conseguido.

Por último, ¿qué les dirías a todas esas personas que día a día siguen el baloncesto femenino?Que sigan manteniendo esa ilusión que caracteriza nuestro baloncesto porque cada vez son más los mo-mentos mágicos que vivimos y las alegrías que este deporte nos pue-de dar. Muchas gracias.

“Las Rozas es un equipo novato y todavía necesita adaptarse”

ENTREVISTA

ARANTXA MALLOU

La escolta Arantxa Mallou ha disputado su primera temporada en el equipo madrileño Las Rozas. La joven jugadora nos cuenta cómo ha sido esta temporada junto a su equipo y lo que sintió el año cuando se proclamó junto a su equipo campeona de Europa Sub 20.

POR ANA FERNÁNDEZ DEL CAMPO

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HACIENDO BALANCE

GIANLUCA BASILE

Gianluca Basile (Ruvo di Puglia, 1975) es un jugador todoterreno. A sus 37 años asegura seguir haciendo lo mismo que cuando tenía veinte siempre y cuando su físico se lo per-mite. Recordado por muchos como el autor de aquel triple inverosímil en la final en Vitoria y por muchos otros como un auténtico artille-

ro y ‘perro de presa’ que no deja un metro de respiración, hoy hace balance de su carrera. Entre sus hitos personales, entre los que se encuentran Ligas ACB, Euroligas... uno difícil de lograr en el cambiante baloncesto actual: ser el extranjero que más tiempo ha vestido la camiseta del F.C. Barcelona.

“La lesión del pasado año no me permitió demostrar que aún podía competir a ese nivel”

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Tras 6 temporadas jugando en la ACB vistiendo la camiseta del F.C. Barcelona, ¿cómo ha sido el regre-so a la Lega?Ha sido un poco traumático. Des-pués de un año sin jugar, coger el ritmo de partido ha sido un poco di-fícil, pero al final ha salido todo bien.

¿Ha notado mucho el cambio de jugar en la ACB a la liga italiana? ¿Es tanta la diferencia entre am-bas ligas? Hay más jugadores de talento en la ACB... en Italia ganar fuera de casa es bastante difícil, quitando Siena, que es un nivel superior a todos, los demás estamos más o menos en el mismo nivel. La ACB está un paso por delante en todos los sen-tidos.

No ha sido el único cambio que ha vivido este año. ¿Cómo fue su adaptación al equipo? Y, sobre todo, ¿cómo ha sido el hecho de jugar en algunos momentos comobase?La adaptación sin problema. La ver-dad que me sorprendí mucho ya que solamente necesité unos me-ses para adaptarme, esta vez salió perfecto. Me ayudó mucho tanto el equipo como también tener rápido el papel de protagonista. En cuanto a lo de jugar de base... fue un poco raro. Me gusta pen-sar como un base, pero jugar es otra cosa. No tengo un buen bote, entonces me cuesta mucho subir el balón si me meten presión, por eso el entrenador prefirió cambiar y ponerme como alero. Además Andrea Trinchieri necesitaba un ju-gador que aportara puntos y yo ju-gando de base gastaba demasiada energía.

Quedan terceros en la Liga Regular y se meten en playoff donde son

eliminados en el último encuen-tro, ¿qué valoración haría de la temporada tanto a nivel colectivo como individual?Ha sido una temporada muy rara, jugando muy bien la Euroliga y muy mal en la Lega. No tuvimos la misma capacidad de concentra-ción y perdimos muchos partidos con equipos que sobre el papel tenían un nivel más bajo que no-sotros. Cuando acabó la Euroliga tuvimos muchos lesionados, pero también tuvimos la capacidad de centrarnos y ganar 10 partidos de los 13 que quedaban. Sólo en la última jornada perdimos el par-tido que no nos permitió acabar segundos. En los playoffs no re-cuperamos ningún jugador y juga-mos con 7 jugadores, 3 de estos 7 con 37 años. Aguantamos los primeros dos partidos en casa, ju-gando muy bien. Luego no hemos tenido la capacidad de cerrar la serie en Pésaro. En el quinto par-tido ya flaqueaban las piernas. Es dificil jugar un playoff con pocos jugadores.

Volvamos a España. Hace unos meses el Top 16 de la Euroliga le llevaba de nuevo a jugar en el Pa-lau pero en una situación muy di-ferente, ¿cómo vivió aquel partido y sobre todo el recibimiento que le dieron?Al principio no me gustó mucho la idea de volver al Palau con otra camiseta, pero al final cuando aca-

bó todo, me sentí muy feliz. No me esperaba un recibimiento así, fue muy emocionante. Lo recordaré toda la vida.

¿Qué es lo que más echa de me-nos de su etapa en Barcelona?Echo de menos jugar para ganar la Euroliga.

¿Qué sintió cuando se enteró que era el jugador extranjero que más tiempo había vestido la camiseta de un club de la importancia del F.C. Barcelona?Quedarse mucho tiempo en un club como el Barça no es fácil. El hecho de conseguirlo es como ga-nar un título más.

Aquí vivió grandes momentos, consiguió muchos títulos. pero hay un momento que seguramen-te quedará para siempre en la me-moria de los aficionados culés y esaquel triple in-extremis en la Final del Playoff de la ACB en Vitoria. ¿Qué sintió cuando entró? ¿Ha cambiado sus sensaciones en los años que han pasado?Aquel año fue muy duro. El Basko-nia nos tenía comida la moral. Es verdad que conseguimos la Final Four contra ellos, pero no es como ganar un título. Fue el triple de la li-beración. Desde este triple empezó la era del Barça. Un triple así te da una inyección de confianza, pero al mismo tiempo no cambió la mane-ra de estar en la pista.

“El hecho de ser el extranjero que más veces

ha vestido la camiseta del F.C. Barcelona es

como ganar un título más”

POR ROSA Mª JIMÉNEZ

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“En el deporte tienes que tener siempre objetivos si no no puedes jugar.”

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Y de uno de los momentos más bonitos a quizás el peor de su vida profesional: la lesión del pa-sado año que le apartó durante meses de la cancha. ¿Cómo vivió esos meses? ¿se le llegó a pasar por la mente el dudar que volve-ría a poder jugar al mismo nivel?No fue un año fácil, nunca había pasado por el quirófano en mis 16 años de profesional. Al pasar dos veces en el mismo año, te vienen un poco las dudas, pero al final salió bien. Fue una pena, porque aquella lesión no me permitió de-mostrar que aún podía competir a ese nivel.

Aunque en esos momentos no lle-garan a reconfortar del todo, no le faltaron las muestras de cariño por

parte de sus compañeros y todo eso quedó plasmado en la final de Copa del Rey de Madrid cuando Roger Grimau le hizo levantar el título.Fue un detalle muy bonito, venía de la segunda lesión y mentalmen-te fue un golpe muy duro para mí. No tenía fecha para volver a jugar y, cuando no tienes un objetivo por delante, es muy difícil trabajar. Con aquel gesto me dieron ganas de volver a jugar con el equipo.

Todos los días vemos como los ju-gadores de los equipos año tras año cambían y es complicado que un jugador esté mucho tiempo en un club. En Barcelona estuvo du-rante 6 temporadas pero si echa-mos un vistazo a su trayectoria ha

sido un jugador de pocos equipos, ¿dónde cree que ha estado la cla-ve?Hay muchos jugadores con más talento que yo, pero es increíble cómo cambian muy rápido de equi-po... La clave es la profesionalidad y la relación que se crea con toda la gente que está a tu alrededor.

¿Qué le queda por ganar a Gianlu-ca Basile?En el deporte tienes que tener siempre objetivos si no no puedes jugar. Me gustaría ganar algo con Cantú, es un equipo que se mere-ce un título. No será facil, hay dos equipos en la Lega que son supe-riores que nosotros, pero tengo la sensación que se puede conseguir algo. Este año hemos tenido mala

“Aquel ‘triple ignorante’ fue el triple de la liberación. Desde ese triple em-

pezó la era del Barça”

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suerte, aunque Siena aún es supe-rior a nosotros. A ver qué pasa la próxima temporada.

En ocasiones ha afirmado que a veces piensa que tiene 24 años y que luego la realidad le frustra, ¿hasta dónde ha llegado este he-cho?Aún tengo la mentalidad de cuan-do era joven. El problema es que no tengo un gran talento, necesito el fisico para jugar y si no tengo las piernas a punto no puedo jugar.

Cuando físicamente estoy bien, aún puedo hacer lo que hacía 10 años atrás. El problema es que empiezan las pequeñas molestias y el tiempo de recuperar se ha alargado.

¿Tiene algún ritual, manía?No tengo nada en especial, pero intento hacer siempre las mismas cosas en cada partido. Hablo de comida, calentamento... todas las cosas que se hacen antes de un partido.

Dos de las virtudes que más des-tacan son su tiro exterior y su de-fensa, ¿qué cualidad le hubiera gustado tener?Me hubiera gustado tener el físico de Lebron James... tiene que ser fá-cil jugar a baloncesto con ese físico.

Se tiene una idea clara de cómo es jugador pero, ¿cómo es Gianluca cuando abandona la cancha y lle-ga al vestuario?Muy tranquilo, me gusta bromear, lo que se hace habitualmente.

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¿Por qué el número 5?No tengo la manía de los núme-ros, en Bolonia cogí el 5 y lo l le-vé también en el Barça. En Can-tú tengo el 55 porque alguien se equivocó.

El entrenador con el que más có-modo se ha sentido.Más o menos con todos. He tenido buena relación con todos.

Un compañero que destacaría.Me he llevado bien con todos, no tengo uno que destacaría, han sido todos importantes.

El momento más dulce de su ca-rrera y el más amargo.Hay muchos momentos dulces en mi carrera, destacaría la plata con la selección en los Juegos Olímpi-cos de Atenas del 2004 y la Euroli-ga con el Barça.También hay muchos momentos amargos, lo que me quedó para mucho tiempo es la final de la Liga ACB 2010 contra el Caja Laboral. Aún no tengo una explicación de cómo se puede perder una final de esa manera.

Tres momentos de su vida que no olvidará.El nacimiento de mis 3 hijas, cuan-do me fui de mi pueblo para in-tentar ser un profesional y cuando firmé el primer contrato como pro-fesional.

Si volviera a nacer, ¿elegiría la misma profesión?Visto que el baloncesto ya sé cómo funciona, intentaría ser un profesional del fútbol.

Por último, hace poco anunciaba que se retiraría antes de cumplir los 40 años. Ac-tualmente con 37 y con un año más de contrato con el Bennet Cantú todo hace presagiar que cuando se acabe su contrato se planteará la posible retirada ¿no es así?Bueno, aún no sé, tengo el objetivo de ganar algo con Cantú. En toda mi carrera he conse-guido algo con todos los equipos que he juga-do, quiero hacerlo también en Cantú, pero no tengo mucho tiempo por delante... voy des-pacio. Cada final de temporada decidiré qué hacer. Todo dependerá de cómo me encuen-tre físicamente.

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REPORTAJE

i hay algún estado nor-teamericano que tenga un vínculo especial e in-

trínseco con el baloncesto, ese es el de Indiana. Casa de los legen-darios Hoosiers, de Larry Bird y de Reggie Miller -al menos adoptiva-, Indiana es baloncesto. No hay más. La canasta ha unido a todo un estado deprimido en muchas etapas de su reciente historia, y ya sea mediante los Pacers o me-diante jugadores de la tierra, el orgullo siempre ha estado ahí.

A comienzos de este siglo, el ba-loncesto de high school en Indiana estaba en boca de todos. Algunos pueden pensar que se exagera en un nivel como este, pero el

tiempo justificó todas las expec-tativas que creaban los duelos de aquellos chavales y sus institutos. Como si de una serie deportiva ja-ponesa se tratara, los chavales se conocían desde pequeños, y cam-biaban su amistad por la rivalidad más enemistada cuando pisaban el parqué.

Ya ha pasado más de una déca-da de aquellos enfrentamientos. Eran siete chavales que maravilla-ron no solo a Indiana, sino a toda Estados Unidos. Siete hombres en universidad, y siete profesionales al final. La prensa local los definió como ‘’Los siete magníficos de In-diana’’, y hoy repasamos qué ha sido de ellos:

Eric Gordon (25 de diciembre de 1988). Gordon jugó en el North Central High School de Indianá-polis. Promedió 29 puntos allá, y asombró a todos con sus increí-bles capacidades anotadoras. En verano jugó muchas veces en AAU (Amateur Athletic Union), y com-partió equipo con su vecino Greg Oden.

Muchas universidades apostaron por él, y tras un verano lleno de polémicas, finalmente decidió ju-gar con la Universidad de India-na (IU). En casa solo pasó un año más, anotando 20,9 puntos por partido en NCAA. Su aparición en el NCAA Tournament fue testi-monial: IU cayó en primera ronda

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ante Arkansas con un mal partido de Gordon.

Los Clippers apostaron por él en el draft de 2008, seleccionándo-lo en la posición 7 a pesar de que algunos analistas señalaban ne-gativamente su falta de centíme-tros. Demostró su gran potencial ya en su primer año: 16,1 puntos, 2,8 asistencias, 2,6 rebotes, quin-to mejor rookie, miembro del se-gundo quinteto de novatos,... La temporada de 2009/2010 siguió mejorando y fue el jugador de la franquicia angelina con más mi-nutos por partido. Ese verano ganó el oro mundialístico con Es-tados Unidos. En su tercer año, aumentó su anotación hasta los

22,3 puntos por noche, y las 4,4 asistencias.

El pasado año fue el gran sacrifi-cado por parte del equipo de Los Angeles en el traspaso de Chris Paul. Fue mandado a Nueva Or-leans. Allí siguió anotando con gran facilidad, y se ha confirma-do como uno de los grandes es-coltas de la liga. Con la llegada de Anthony Davis, número 1 del draft de este año, los Hornets adquieren una nueva dimensión baloncestística. Gordon es agente libre restringido, y si bien al prin-cipio de la época estiva parecía que quería probarse en la agencia libre, finalmente dice que quiere quedarse.

George Hill (4 de abril de 1986). En un artículo para Indystar, Hill recuerda haberse enfrentado a Gordon cuando solo tenía 13 años -y Eric 10 y medio-. “Uno de mis padrinos, Mike Saunders, era muy buen amigo del padre de Eric, y decidió montar un pequeño parti-do, un sano pique entre familias” rememora en el artículo de 2008. “Supongo que pensaban que no podía ganar a Gordon porque yo no jugaba al baloncesto. Pero le di una buena paliza, y hoy nos reí-mos cuando lo recordamos”.

Hill jugó en Broad Ripple, y en-frentó al resto de los seis magní-ficos de Indiana salvo a Eric Gor-don, precisamente, que estaba

POR JESÚS MORALES

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lesionado en aquel partido. Allí, se convirtió en el quinto máximo anotador de la historia de la In-diana High School Athletic Associ-tation History en una temporada al promediar 36,2 puntos. Sus ini-cios en el baloncesto fueron tar-díos, pero pronto demostró de lo que era capaz.

A pesar de recibir varias becas de universidades de conferencias grandes, como Indiana o Temple, decidió matricularse en la mo-desta Purdue University Indiana (IUPUI), honrando así la memo-

ria de su abuelo. Disputó cuatro temporadas sin poder medirse a las grandes estrellas universitarias de su generación. Fue el líder ab-soluto de los Jaguars, y acabó su periplo con un balance de 61-30, pero sin mostrarse a los grandes ojeadores de la NBA.

Esto hizo que en el draft de 2008 cayera hasta la vigesimosexta posición, donde los San Antonio Spurs decidieron escogerle sor-prendiendo a todos, pues veían a la franquicia texana apostan-do por Mario Chalmers. Se forjó

como jugador de banquillo en su año rookie, para en los dos si-guientes años disputar un total de 153 partidos como jugador spur, 48 de ellos como titular, prome-diando 12 puntos, 2,7 asistencias y 2,6 rebotes.

Los Spurs decidieron traspasarle por el novato Kawhi Leonard en la noche del draft de 2011, y Hill acabó en casa, en los Indiana Pa-cers. Allí se ha confirmado como un buen base anotador, con cier-tas carencias de lectura de juego pero de gran capacidad anotado-

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ra. Ha sido titular indiscutible en los últimos Playoffs.

Rodney Carney (5 de abril de 1984). El más viejo del grupo, y el que menos suerte ha tenido en su carrera como profesional. Car-ney recuerda jugar en el instituto contra George Hill. “Ese renacuajo llega y empieza a anotar todo tipo de triples, y dije: “¿Quién es este niño?” Supe que iba a ser algo importante en cuanto le vi tirar así y manejar la bola como lo ha-cía”. Jugó para el Northwest High School.

En la universidad se fue hasta Memphis, su ciudad natal -se mudó de pequeño a Indiana- y allí pasó cuatro años con los Tigers, devolviéndolos a una fase final del NCAA Tournament tras diecisiete años de ausencia. Se consolidó como un ‘3’ fuerte, muy físico y trabajador. No obstante, no tenía un tiro fiable y su capacidad de-fensiva se ponía en entredicho a pesar de esas condiciones físicas.

En el draft de 2006 fue escogido por los Chicago Bulls en el pues-to dieciséis. No llegó a jugar con Chicago, y fue traspasado a los Si-xers. Allí, tras las marchas de Iver-son y Webber, pudo hacerse con un puesto de titular. Sin embargo, no brilló todo lo que debió, y en 2008 fue mandado a Minnesota. Desde ahí, Warriors, Grizzlies y, actualmente, Liaoning Dinosaurs.

Josh McRoberts (28 de febrero de 1987). McRoberts jugó en el Car-mel High School de Indiana. Allí se erigió como una de las figuras in-teriores del baloncesto estadouni-dense, promediando 17,9 puntos, 11,4 rebotes, 4,2 asistencias y 3 tapones. Por aquel entonces, los

especialistas le situaban como una de las primeras elecciones del draft de 2005.

Tocó irse a la universidad, y no pudo elegir mejor: Duke. Con los Blue Devils bajó sus prestaciones, como es lógico, pero mantuvo unos números muy buenos. En los últimos cuatro partidos de su pri-mer año, promedió 10,4 puntos y 6,3 rebotes. Decidió no presen-tarse al draft de 2006 a pesar de ser considerado como un lottery pick, y volvió a jugar con Duke en su año sophomore, promediando 13 puntos, 7,9 rebotes y 3,5 asis-tencias por encuentro. Entonces sí, se presentó al draft.

En 2007 cayó hasta el trigesimo-séptimo puesto del sorteo. Los Blazers le escogieron, aunque en enero ya le habían mandado para los Idaho Stampede. Luchó en las horas más bajas, aunque en Port-land nunca encontró lugar y acabó traspasado a Indiana en la noche del draft de 2008. Con los Pacers demostró ser un jugador interior

muy válido para cualquier rota-ción de la NBA, y para la tempo-rada de 2011/2012, como agente libre, firmó un contrato de 6 mi-llones por dos años con los Lakers.

Courtney Lee (3 de octubre de 1985). Jugó en el Pike High School y ganó el torneo estatal de 2003 ante Eric Gordon, en las semi-finales, y Greg Oden en la final. Escolta habilidoso y anotador, en la etapa de instituto pareció des-puntar por encima de todos sus compañeros exteriores.

Se matriculó en la Western Kentuc-ky University en 2004. En su primer año estableció un record anotador al conseguir 461 puntos en 31 par-tidos. Durante sus tres años univer-sitarios, Lee evolucionó como un anotador incansable, apoyando su juego sobre todo en el tiro exterior. A veces jugaba minutos como ale-ro, pero con su 1,96 esto se antoja-ba imposible en NBA. Por ello, y por jugar en una conferencia no muy competitiva de NCAA, creó muchas dudas entre los ojeadores NBA.

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Finalmente fue elegido por los Or-lando Magic en el puesto 22 del draft de 2008. En su primer año gozó de muchos minutos, apare-ciendo por pista una media de 25,2 por noche. Llegó a superar la vein-tena de puntos con facilidad en varios encuentros, incluido uno en el Madison con 22. También anotó 24 en el segundo partido de las se-ries ante Sixers en Playoffs. Llegó a la final de la NBA en su primer año, siendo una pieza importante y ano-tando 8 puntos por encuentro en la postemporada.

Luego fue traspasado a New Jer-sey Nets por Vince Carter y Ryan Anderson. Allí lideró al equipo en robos y triples anotados, además de establecer su máxima anota-ción con 30 puntos ante Memphis. Sin embargo, el siguiente verano volvió a cambiar de camiseta, yén-dose a Houston Rockets. Las dos últimas temporadas ha jugado en Texas, contando con muchos mi-nutos como sexto hombre.

Greg Oden (22 de enero de 1988). Estaba destinado a conseguirlo todo. El jugador con más potencial de este grupo de hermanos y ene-migos del estado de Indiana. Pasó su adolescencia en el Lawrence North High School, y ganó tres campeonatos estatales antes de graduarse en 2006. El pívot re-cuerda enfrentamientos contra estos jugadores en aquellos años. “Jugamos un partido por la ESPN2 ante el equipo de Eric Gordon, y recuerdo que el chaval cogió un balón suelto, corrió la pista en segundos y acabó con un mate espectacular. Espectacular” diría hace unos años para Indystar.

La envergadura de Oden, desde joven, fue abrumadora. En NCAA jugó para Ohio State, y en su úni-co año NCAA llegó a la gran final del NCAA Tournament. En el parti-do firmaría 25 puntos, 12 rebotes y 4 tapones, pero perdería ante los Florida Gators de Noah, Hor-ford, Brewer y Taurean Green, en-

tre otros. Tanto aquel año como todos los de instituto, Oden no perdió ni un partido como local.

Fue el número uno del draft de 2007, por delante del alero Kevin Durant, que acabó yendo a Seatt-le. Sin embargo, se lesionó de gra-vedad en la pretemporada y no pudo jugar ni un partido de aquel curso. Se estrenó en la 2008/09, pero siguió teniendo problemas físicos. En estos cinco años de profesional, ha disputado solo 82 partidos. Ha declarado reciente-mente que se quedará fuera de las canchas la próxima temporada para recuperarse completamente de sus rodillas.

Mike Conley Jr. (11 de octubre de 1987). El escudero inseparable de Greg Oden. Jugó siempre con él, tanto en Lawrence North como en Ohio State. Conley también guarda muy buenos recuerdos de aquellos años, sobre todo de sus enfrentamientos veraniegos con

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Eric Gordon. “Jugamos varias ve-ces en la liga municipal de vera-no, yo estaría en sexto o séptimo grado. Le di unas cuantas palizas aquel entonces” ríe. “Nunca pen-sé que aquel chavalín crecería hasta convertirse en el jugador atlético y fuerte que es hoy. Era bueno, pero ha seguido trabajan-do y se ha convertido en un juga-dor totalmente diferente. En una superestrella”.

Conley siempre estuvo a la som-bra de Oden. Era el base del equi-po de Oden. Era el que abastecía de balones a la gran estrella del país. En Ohio State las cosas no cambiaron mucho, si bien acabó por demostrar que él también te-nía futuro en la NBA. Pasó un úni-

co año allá y promedió 11,7 pun-tos y 6,1 asistencias.

Se presentó al draft de 2007 y fue escogido por los Memphis Grizzlies en el puesto 4, por de-trás de Oden, Durant y Horford. Jugó 53 partidos en su primer año, 46 como titular, con unas medias de 9,4 puntos, 4,2 asis-tencias y 2,6 rebotes. Registró varios doble-dobles y se confirmó como un buen proyecto de base. En su segundo año, la competen-cia de Kyle Lowry y Javaris Crit-tenton, así como la inestabilidad en el banquillo de los Grizzlies, le hizo zozobrar un poco. Sin em-bargo, acabó el año como titular y jugó todos los partidos de la temporada.

En los siguientes cursos se ha confirmado como el base de los Memphis Grizzlies. Se le ha acha-cado en ocasiones no saber leer el juego y abusar del bote. Esta última temporada disputó 62 par-tidos, 61 de ellos como titular, promediando 12,7 puntos, 6,5 asistencias -tope-, 2,5 rebotes y 2,2 robos -tope-.

Indiana es baloncesto. El buen año de los Pacers de Granger, Hib-bert y compañía ha devuelto al es-tado a los titulares de la NBA. Sin embargo, no hay que olvidar a es-tos ‘’siete magníficos de Indiana’’, que desde pequeños han jugado entre ellos y que, en la actualidad, representan con orgullo el estado más baloncestístico del país.

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La NBA es una realidad muy cercana a la ficción. Nada más lejos, algunas franqui-cias actúan como las grandes produc-toras de cine y construyen sus películas con el deseo de que algún día pasen a la historia. Hubo una época en la que Ho-

llywood hacía lo mismo, contrataban sus propios jugadores-franquicias para ocu-par el rol de actor estrella. El ‘star system’ no sólo es un periodo cinematográfico de gran esplendor hasta los años cincuenta. También tiene cabida en la NBA.

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S e dice que todo proyecto debe tener una estrella que ayude a culminarlo. Esta ley,

en el deporte, es más esencial aun si cabe. Las franquicias NBA son blo-ques construido alrededor de una pieza única que aúna un elemento especial que hace que se pueda considerar como tal. Pero, no siem-pre esa pieza garantizó el éxito. En muchos casos, más que ayudar a tocar con la yema de los dedos el cielo, enseñaron las escaleras de entrada al insignificante y olvidado infierno. En efecto, no todas las es-trellas sirven. Igual que no todas las estrellas en el cielo tienen ese brillo único en cada madrugada.

Jugarlo todo en esa luz que debe asumir los galones en los momen-tos más difíciles no siempre es una buena idea. A veces, es en esas rampas cuesta arriba cuando el ju-gador no se descubre como la es-trella presupuesta. A veces, cuando ese talento sufre una ausencia, el equipo no sabe levantar la cabeza sin el rebufo de su estela.

En Memphis tienen un grandísimo dilema. El ‘star system’ no funcio-na como debiera y eso siempre siembra dudas en el entorno de una franquicia. Ya el año pasado emergieron pequeños brotes que daban a entender que aquello podía ser cierto. En los pasados Playoffs, los Grizzlies se presen-taron en la postemporada sin el actor protagonista, Rudy Gay. Le-jos de resentirse, como dictan las normas de este sistema, el equi-po evolucionó y encontró mundos hasta entonces desapercibidos. Sin el alero, los de Lionel Hollins hicieron un baloncesto vistoso, con un juego colectivo tan extra-ño como agradecido para todo el planeta NBA. La química era tal, que por momentos aquel equipo

parecía jugar de memoria y poder alcanzar todo lo que se propusie-se. El resultado fue delatador. Los Grizzlies, últimos clasificados en el oeste de cara los Playoffs, deja-ron en la cuneta a las primeras de cambio al mejor equipo de su con-ferencia en la temporada regular. Y lo más importante: lo hicieron con un estilo propio.

En la siguiente ronda esperaban los Thunder, uno de los grandes favoritos a hacerse con el anillo. Nada más lejos de doblar la rodilla, Memphis forzó hasta el séptimo partido guiados por la ilusión de llegar a unas finales de conferen-cia. La fuerza de conjunto hacía que los focos brillaran menos que el logo del equipo en la camiseta. No consiguieron la doble hazaña, pero dejaron señalado el camino a seguir. Además, sembraron so-bre la ciudad el principio de una pregunta que aún no podía tener respuesta.

No tardó mucho en tenerla. O al menos eso parece un año más tar-de. El tiempo, caprichoso, siempre pone las cosas en su sitio. O eso dicen. Memphis ha vuelto a dis-frutar de unos Playoffs y, en esta ocasión, esa luz que les debe guiar estaba en perfectas condiciones para hacer frente a la batalla. La temporada regular ha sido más exitosa y los Grizzlies llegaron con el factor cancha. Ni siquiera eso sirvió. La presencia de Rudy Gay debilitó tanto el juego de equipo que a la hora de la verdad todas las opciones se reducían a la mis-ma, buscar al ‘22’ para salir de los apuros. Gran error. La gran diversi-dad de opciones para hacer daño en los Grizzlies se vio por comple-to anulada. Rebelde, ese espíritu colectivo apareció en algunos ins-tantes de la serie, lo que hizo que

se llegara al séptimo encuentro. Mero espejismo. Las sensaciones se encargaron de demostrar que los Clippers tenían demasiadas op-ciones para convertirse en el ver-dugo de Memphis.

En la franquicia todo son dudas ahora. Desprenderse de un juga-dor con tanto talento es muy difí-cil. Pero asumir que las opciones del equipo disminuyen con él en pista, también lo es. El ‘star system’ es tan orgulloso que siempre se miran las piezas complementarias aun a sabiendas de que ése no es el error. Reconocer una equivoca-ción es una opción apta sólo para valientes. ¿Asumir los pecados o esperar a que uno de esos escasos golpes de suerte se convierta en redentor? La respuesta es clara. La decisión a tomar, fácilmente la contraria.

Los problemas no sólo llegan cuan-do la estrella no responde como tal. También puede darse el caso de que ésta brille tanto en las can-chas de baloncesto que, cuando falta, hay una excesiva dependen-cia del ‘star system’. Eso ha pasado en Chicago precisamente en estos Playoffs. Derrick Rose, a falta de poco más de un minuto para el final del primer partido de la se-rie, se destrozaba los ligamentos de la rodilla. Más de nueve meses de baja. Un drama digno de las mejores plumas literarias. Su equi-po, uno de los máximos aspirantes en el Este, incapaz de doblegar a los Philadelphia 76ers. Sin él, los Bulls no se encontraron cuando la bola ardía en pasiones. Sin él, los Sixers se crecieron para ir más allá de sus sueños. Fueron hacia una realidad.

Los Bulls tienen un gran equipo de conjunto, grandes complementos

EN PROFUNDIDAD POR DANIEL MOYA

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para un jugador que sí hace bue-no a los que están a su alrededor, norma número uno para ser con-siderado una estrella. Sus compa-ñeros son muy buenos jugadores, pero sin su compañía, el estatus baja considerablemente. Sin Rose, el plantel de Chicago, además del mazazo durísimo, demostró que no está capacitado para afrontar grandes retos. El ‘star system’, vol-cado en exceso, no cuenta con un seguro que cubra los sueños. El esquema del equipo se rompe y, además, en esa burbuja rota empiezan a fallar unos intangibles que antes estaban garantizados al completo. La línea es tan delicada que una jugada decide la diferen-cia entre el éxito o el fracaso. Fiel reflejo de la vida.

Una lesión tan inoportuna hace que todo cambie de repente. En Chicago, aunque no sean cons-cientes, el rumbo de una franqui-cia en progresión se ha podido ver truncado preocupantemente. Rose puede que nunca vuelva a ser el mismo y el proyecto está enfocado en el base de los Bulls. Si no se recupera bien como para regresar a su nivel, el sistema habrá fallado y Chicago se quedará estancado como ha estado tantos años has-ta que apareció el propio Rose. Si aquello, por desgracia para los de Illinois, ocurre, deberán en-frascarse en otra aciaga búsqueda por encontrar esa pieza especial. O bien, apostar por la opción de crear un equipo en el que nadie destaque, pero todos aporten de sobremanera. Difícil.

Difícil porque la historia, que se ha encargado de demostrar que este sistema cuando falla lo hace de manera irreversible, también ha enseñado que ningún equipo sin esa luz en el cielo haya llegado de-masiado lejos como para acariciar

el éxito en una mágica tarde-no-che de verano. Equipos como los Nuggets o los Sixers han demostra-do que se pueden ganar muchos partidos, pero que les falta aquel destello que lance un flash y gane un campeonato. Proyectos en evo-

lución a los que les hace falta el golpe certero para triunfar.

Quizás, en otro baloncesto, sí pue-da ser posible ganar un título sin alguien que destaque, pero en la NBA, donde el juego colectivo aún

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está a años luz de poder triunfar, es una quimera. No se tiene esa con-cepción del juego y los jugadores son incapaces de adaptarse a un rol variable. Están malacostumbrados a trabajar para una referencia, a servir al ‘star system’.

Pero, por si fuera poco encontrar la estrella idónea, está de moda en los tiempos actuales juntar varias para formar una auténti-ca galaxia que, muchas veces, no termina de congeniar. El éxito en el baloncesto exige, como depor-

te de equipo, que las piezas no se solapen una tras otra y que en-cajen con el mínimo margen de error posible. Un bar con dema-siados gallos, como el que está de moda en New York, está condena-do a la falta de química y al ren-

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dimiento ínfimo. Los Knicks llevan vagando años y años en busca de apoyarse en ese ‘star system’ que han querido completar con una doble pareja de vértigo y a la que le falta, todavía, una tercera pieza mágica. Una locura que tiene un alto porcentaje de no funcionar, pues sin buenos complementos las estrellas se quedan obsole-tas en el firmamento. Es un peli-gro constante, pero esa amenaza puede volverse demasiado pre-visible. Los errores de los Knicks no vienen de un dúo que no se entiende – que también – sino de una falta de banquillo y una ines-

tabilidad que tambalea cualquier proyecto que anhela ser domi-nante en la liga.También se han dado casos en los que el ‘star system’ ha fallado no por culpa de su sustento principal, que brilló en cada noche casi sin excepción. Actúo de esa amante perecedera y fiel en cada aventu-ra nocturna. Pero eran luces en el techo del planeta demasiado ais-ladas de las demás. Les faltó un buen equipo que imprimiera be-lleza a la estampa. Les faltó con quien compartir éxito. El caso más sonado es, probablemente, el de los Sixers de 2001, un equipo en

el que Allen Iverson hizo de todo y bien, que llevó a un equipo con no tantas virtudes y algunas ca-rencias acusadas a las mismísimas Finales donde sucumbieron a los Lakers de Shaquille O’Neal. De-jaron huella, a aquella hazaña le faltó la culminación en forma de anillo, pero memorable fue la con-quista del Staples Center en el pri-mer partido. LeBron también hizo algo parecido con sus Cavaliers en el año 2007, aunque en general era un equipo más completo que, paradójicamente, evolucionó en años posteriores pero no repitió Finales.

EN PROFUNDIDAD

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Nunca nadie ha ganado un anillo solo. Eso es un reto imposible por-que el éxito se basa en el funcio-namiento de distintos engranajes que pongan a punto una maquina-ria digna de ser vencedora. Ni si-quiera los más grandes lo hicieron. Larry Bird, Magic Johnson e inclu-so Michael Jordan. ‘Air’ necesitó muchos años para atravesar esa barrera que se le atragantaba y al-canzar ese sueño que el ansiaba, por encima de tantos galardones individuales que adornan la carre-ra de un jugador que con sólo ver-le un segundo en cancha ya hacía honorable el cartel de mejor juga-

dor de la historia. Las estrellas y un buen equipo a su alrededor es una simbiosis innegable e insepa-rable hasta ahora. Quizás algún día llegue el hito que rompa con esta certeza impoluta. Quizás algún día alguna estrella no será un luce-ro obsoleto pese a que no tenga acompañantes brillantes a su lado. Quizás algún día esas acompañan-tes que tanto brillan a su lado no precisen de ese lucero que haga de una imagen hermosa, algo in-olvidable.

El Star System será durante mu-cho tiempo la estructura válida

para ganar campeonatos. El dog-ma indiscutible para colocarse un anillo en la mano. Esa verdad ab-soluta legado de toda la historia de la liga. Lo será pese a sus ries-gos irreversibles. Lo será porque es mucho más arriesgado probar algo diferente en un mundo tan normalizado. Lo será hasta que al-gún conjunto de buenos jugadores triunfe. Al fin y al cabo, las fran-quicias son como grandes produc-toras de cine. Los grandes actores, que también erran ese lanzamien-to decisivo, hacen las mejores pelí-culas. La NBA es una realidad muy cercana a la ficción.

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Ja más, ni en la peor y más angustiosa de sus pesa-dillas podría haber ima-ginado Thomas Robinson que su segunda tempora-

da en Kansas iba a convertirse en una trágica historia de la que pare-cía no haber escapatoria posible. Y todo esto fuera de las canchas de baloncesto.

Tres semanas, ese fue el lapso de tiempo en el cual Thomas Robin-son perdió a sus dos abuelos ma-ternos, pues había desarrollado su infancia junto a su madre Lisa y su hermana pequeña Jayla. Ro-binson valoraba a su familia por encima de todo y de todos, pero una vez tuvo que decidir su fu-turo universitario, se decantó por hacerlo en Kansas, muy alejada de su Washington natal. La pér-dida de sus dos abuelos fue un golpe muy duro que Robinson, a pesar de todo, encajó con entere-za, pero por desgracia solo mar-caba el primer punto de toda esta historia.

Cinco días después de la muerte de su abuelo, concretamente el 21 de Enero de 2011, Lisa, la madre de Thomas, fallecía de manera re-

pentina e inesperada. Un ataque al corazón sesgaba su vida con apenas 37 años de edad. Jayla, su hermana pequeña, fue quien le comunicó la noticia a su her-mano. Tres familiares que se ale-jaban para siempre en apenas un mes de diferencia. Tan solo unos minutos más tarde, Bill Self cono-cía la desgarradora noticia, y en una hora, todos sus entrenadores, compañeros, y familiares de estos apoyaban a un desolado Thomas Robinson, que no entendía cómo el destino se había cebado sobre-manera sobre su persona y sus fa-miliares más queridos.

Lisa había sido siempre la referen-cia de Thomas y la correcta direc-tora del futuro de su hijo, un futuro que tuvo que vislumbrar lejos de los suyos, con tal de alejarse de un entorno que le hubiese puesto en el mal camino. Así, cambió el Eas-tern Senior High de Washington por Riverdale Baptist en Maryland, y durante un tiempo, la Brewster Academy de New Hampshire, antes de pasar a Kansas.

El mismo día del fallecimiento, Kansas tenía un compromiso ante Texas. La afición del Allen Field-

house le tributó tanto a Lisa como a Thomas un sentido silencio, a la misma vez que su compañero Mar-cus Morris no podía contener la emoción. Thomas Robinson estuvo allí, con sus compañeros. Disputó ocho minutos, anotando dos pun-tos y capturando cinco rebotes. La victoria se escapó, pues Texas re-montó en la segunda mitad y se lle-vó la victoria por 74-63, rompiendo así una racha de 69 encuentros sin conocer la derrota en el Allen Field-house. “Tenía que estar en la pista, era mi única escapatoria”.

Thomas Robinson, que cerró su se-gunda temporada con 7,6 puntos y 6,4 rebotes en 14,6 minutos por encuentro, aceptó la sugerencia de Bill Self, su entrenador, y plantó un árbol en memoria de su madre a la entrada del Allen Fieldhouse. Plan-taba así la primera sólida semilla de un destino que le debía un futuro más brillante.

La nueva temporada brindaba un reto completamente distinto a Thomas Robinson. Después de una segunda temporada donde lo deportivo se limitó a salir des-de la segunda unidad, a la som-bra de Markieff y Marcus Morris,

El camino que Lisa marcó“Todo lo que hago cada mañana sigue siendo todavía para ella, y para mi hermana. Nada de eso va a cambiar”.

| Por Iván Ortiz

REPORTAJE

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a Robinson le tocaba liderar al equipo, un conjunto que había sufrido pérdidas, y que se había reconstruido a marchas forzadas y teniendo que recurrir a hombres menos habituales. Así, pasó de los 14,6 minutos por encuentro a unos 31,8, y de la misma mane-ra que los minutos aumentaban, sus prestaciones crecían como su influencia en sus compañeros. Firmó 17,7 puntos y 11,9 rebotes por partido con un 50,5% en tiros de campo.

Por desgracia, a pesar de la exce-lente temporada de Kansas, don-de suplieron la falta de talento de primer nivel con un juego muy correoso, y sobre todo, mental-

mente muy fuerte, remontando partidos que parecían perdidos en la primera mitad, alcanzaron una Final Four donde lograron ac-ceder a la final, pero en la que se toparon con los Kentucky Wil-dcats, que privarían a Thomas de acabar la temporada con un títu-lo nacional. Un torneo donde los rivales aprendieron a defender a Robinson, cerrándose sobre él y limitando en muchos momentos su aportación a ser un referente en la pintura sobre el que mover el balón.

A pesar de todos los cuidados, Robinson, con la ayuda de otros compañeros como Tyshawn Ta-ylor, Jeff Withey, o Travis Releford,

junto a la excelente dirección de Bill Self, que se confirmó no solo como el excelente entrenador que es, sino como un gestor emocio-nal y un apoyo individual excelen-te. Hombres que aumentaron su aportación rindieron por encima de lo normal, recién llegados que se adaptaron a su rol, hombres de banquillo muy regulares, y con todo esto consiguieron demostrar al mundo que a pesar de quedar-se cerca, no se debe subestimar a ningún equipo por el nombre ni por los números.

La progresión de Thomas Robinson

El 4 de Marzo de 2012, Robinson era nombrado jugador del año en

REPORTAJE

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la BIG-12, siendo un día después galardonado con el mismo premio por Associated Press. Este mismo medio le incluía, junto a CBS y Sporting News, en el All-American First Team. Acabó además como Finalista del John R. Wooden y el Naismith Player of the Year, el año en el que Anthony Davis acaparó prácticamente todas las conside-raciones individuales. El día 9 de Marzo, Thomas Robinson decidía seguir adelante con su vida, con su carrera, y dar el salto a profesiona-les, incluyendo su nombre en el lis-tado de elegibles para el Draft de la NBA. Renunciaba, de esta manera, a su último año en Kansas.

Thomas Robinson es un interior enérgico, con un físico privilegia-do y una potencia fuera de lo nor-mal para una persona de su edad. Un cuatro clásico, con muy buen sentido reboteador, que ha mos-trado durante sus tres temporadas una curva de progresión realmen-te sorprendente. Tiene capacidad para asumir el mando ofensivo, y en ataque ha desarrollado un buen tiro de media distancia, aunque es cerca de la canasta donde genera mucho más peligro. Potencia tras rebotes, recibir y entrar sin miedo, buscar el toque a canasta cercano, tiene diversas vías para anotar. En defensa, su simple presencia es motivo de intimidación para los ri-vales.

Robinson sigue así, su camino ha-cia el éxito. Un camino que se está formando lejos de casa, pero que nunca camina solo, pues Lisa sigue velando de manera eterna por la se-guridad y firmeza de Thomas en su vida.

“Cuando paras a pensarlo, tan solo le queda una hermana de nueve años en la familia, y está a medio

país de distancia”. Por supuesto no es la única historia de este estilo, pues entre más de 300 universida-des, pueden existir casos muy simi-lares o incluso peores a los que ha vivido Robinson, pero no deja de

ser una muestra muy bella de cómo uno se puede sobreponer a las ad-versidades del entorno y continuar siendo una referencia para miles de personas. Thomas, el futuro es todo tuyo.

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AJE CLUB NATACIÓN

SEVILLA La cuna del baloncesto sevillano

Muy posiblemente no sea uno de los clubes amateur más conocidos fuera de Andalucía. Sin embargo, es uno de los clubes sevillanos que más jugadores ha tenido en la ACB. Un auténtico criadero de baloncesto en estado puro. Un vivero que, con las horas del sol sevillano y el río Gua-dalquivir, ha producido a diversos ilustres del baloncesto español.

Las grandes civilizaciones de la his-toria se han erigido a orillas de un caudaloso río. No ha habido en la historia un imperio poderoso que no diera sus primeros pasos cerca de un brazo acuático que trajera fertilidad a sus tierras. Tierras férti-les para poder cultivar y conseguir

alimentos e ir construyendo una civilización imponente y que ter-minaría pasando a la historia.

El Guadalquivir permitió que a sus orillas se creara una ciudad por la que pasarían diversas culturas y to-das la enriquecieron: Sevilla.

Sevilla fue construyendo a las orillas del Guadalquivir su civilización del baloncesto. El deporte de la canas-ta ya había entrado en la ciudad hace unos años de la mano de los Maris-tas. La prensa denominaba a los que practicaban el baloncesto “los afi-cionados a este simpático deporte”.

| Por José Luis Sosa

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Suena raro, pero es verdad: la pista de balonces-

to del Club Natación Sevilla está en una azotea. Justo

encima de una piscina en la que los jóvenes nadadores

trabajan sin descanso.

En un principio fue concebida para complementar la

oferta deportiva, sin pensar en crear una sección propia.

Hoy en día, es uno de los clubes referencia en Sevilla, y su

pista es una de las más históricas y singulares de la ciu-

dad.

Además, allá por 1952 algunos socios decidieron

trasladar los deportes que se ofertaban en el Club

Natación Sevilla a un emplazamiento mucho más

cercano al río. Así nació el Club Naútico Sevilla.

Pronto empezó a destacar un equipo distinto. Al menos en cuanto al nom-bre. El Club Natación Sevilla, abría la sección de baloncesto. Una decisión muy acertada por todo lo que el de-porte de la canasta le daría.

La sección de baloncesto se crearía para complementar la oferta depor-tiva. La natación era el plato fuerte, pero pronto el balón de cuero se haría con un papel protagonista. El número de jugadores iba creciendo de forma exponencial. Había mucha materia. Día a día, eran muchos los que entrenaban en el Club Natación Sevilla.

A pesar de todo ello, el espacio jugó en contra. En la calle Trastamara, cerca del ilustre barrio de Triana, y en un edificio antiguo. Allí, en la azotea, se instaló la cancha de ba-loncesto. Aprovechar los espacios, dar rienda suelta a la imaginación. La azotea terminó siendo un sitio

de referencia en el baloncesto se-villano. Un lugar especial y algo mágico. Tan mágico que se llegó a entrenar allí durante un tiempo sin canastas. No hacía falta para entrenar, mejorar o progresar. La ilusión y las ganas eran máximas.

El emplazamiento, aunque escon-dido, era ideal. A la orilla del río Guadalquivir y con muchísimas horas de sol. Nada mejor para que la materia prima creciera y se de-sarrollara con mucha fuerza y muy saludable.

Entre esa materia prima, algunos nombres ilustres del baloncesto es-pañol de la década de los ochenta y noventa: Nino Morales, Rocky Ja-rana, Raúl Pérez, Rafa Monclova, y o Antonio Martínez entre otros tan-tos. Baloncesto puro.

Además, el Club Natación Sevi-lla fue pionero en su época. Si

hoy las equipaciones de Cajasol Banca Cívica nos parecen arries-gadas por usar magenta, hay que decir que no fueron los primeros en tener unos colores tan atrevi-dos. Al menos, en Sevilla. El Club Natación Sevilla, patrocinado por Novias Cira, ya vistió de rosa. Arriesgados como pocos, pero el dinero primaba, y esto suponía un gran respiro para la economía del club, para poder mantener viva y con buena salud a la sec-ción. Antes, en 1973, “Canódromos de Sevilla” era el patrocinador de la sección. Aquel año y, aprovechan-do que en Sevilla se estaba ro-dando la primera película del cine andaluz (“Manuela”) protagoniza-da por Charo López, el Club Na-tación Sevilla nombró a la actriz madrina de honor y que lanzara el balón al aire en alguno de los saltos iniciales.

La cancha en

una azotea

(De izquierda a derecha) El equipo junior del club antes de un partido. Momentos después de ascender a 1ª Nacional. Los cadetes durante un partido de liga.

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En abril de 1983, organizó el II Trofeo “Novias Cira”. Serviría como cierre de la temporada, y era de carácter nacional. En aquel momento era la única oportuni-dad de ver a los equipos de la ACB en Sevilla. El cartel, de lujo: Caja de Álava, Caja de Ronda y Estudiantes de Madrid. Los asis-tentes pudieron disfrutar de Essie Hollis y Dan Cadwell entre otros. Esto sirvió para que Caja de Ála-va se fijara en Rocky Jarana. El espigado jugador sevillano era un base de otro tiempo. A sus pa-res le sacaba varios centímetros y eso hacía más espectacular su juego.

En 1984, ABC informaba del ficha-je del cuadro alavés. El capitán del

(izquierda y arriba): Nino Morales (6) con el Real Madrid. (abajo) Nino Morales (6) con el Caja Madrid.Derecha (despiece del color). El rosa y el Club Natación Sevilla han ido siempre muy ligados.

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Novias Cira viajaba a Vitoria tras haber pasado toda su vida deportiva en el Club Natación Sevi-lla. Con 22 años dejaba Sevilla para embarcarse en un sueño: jugar en la ACB. Con su 1’97 cau-tivó a los vitorianos, que le tuvieron a prueba unos meses. Así, Rocky Jarana era el tercer se-villano en la ACB junto a Andrés Jiménez y Nino Morales.

Rocky Jarana compartió vestuario con Essie Hollis, Therry White, Iñaki Garayalde, Josean Querejeta o Pablo Laso entre otros. El sevilla-no disputó 30 minutos en ACB, repartidos en 5 partidos.

Nino Morales fue otro sevillano que salió desde el vivero del Club Natación Sevilla. Un alero alto y físico, que estuvo durante muchos años en la ACB. Ganó diversos títulos, como una Copa del Rey donde destacó en la final o campeonatos de categorías inferiores. Defendió los colores de muchos equipos y las ilusiones de muchas ciuda-des. Y muchas anécdotas.

El periódico Mundo Deportivo del 3 de abril de 1987 contaba la polémica que se creó por la decisión arbitral de no conceder dos tiros libres a Nino Morales en el partido contra el Oximesa. El centro de las iras fue el comisario de mesa ferrolano Avelino Ribas. Fue tal la polémica que a Avelino Ribas le retiraron el saludo algunas personas. Otras le insultaban por la calle, y has-ta la policía tenía que escoltar a sus hijos al colegio.

Más histórico fue otro ex del Club Natación Se-villa: Raúl Pérez. El fino triplista dio sus prime-ros pasos en el Club Natación Sevilla y fue allí donde sus tiros con nieve empezaron a entrar. La azotea disfrutó del fino tirador durante su etapa de formación; sin embargo más tarde pasó por el CB Coria y la cantera del Caja San Fernando para disputar luego muchos minutos en ACB.

Incluso jugó un partido con la selección es-pañola absoluta frente a Inglaterra, siendo el máximo anotador en ese encuentro. Después, misteriosamente, desapareció.

Más misterioso resulta al recibir elogios de Lolo Sainz tras terminar el partido: “Me ha

Corría el año 1984. La FEB decidía aplicar una amnis-tía a los jugadores, técnicos y delegados que tuvie-ran una sanción menor de 10 partidos o seis meses de suspensión. Esta medida coincidía con la despedida de Ernesto Segura de Luna de la presidencia. Entre los jugadores amnistiados, Essie Hollis o Fernando Martín. Junto a ellos, otros 17 jugadores y cinco entrenadores y delegados.

Uno de ellos era el delegado del Novias Cira, José Per-digones. El delegado fue sancionado con ocho en-cuentros por “insultos y amenazas graves a un compo-nente del equipo arbitral” en un encuentro entre Coria y Novias Cira. Por parte coriana Antonio Martínez con 5 y Andrés Blanco con 3 partidos de sanción fueron también amnistiados.

Usar el rosa como seña de identidad es algo arries-gado. Sea el momento en el que sea. Y más en la década de los 70 y 80. En aquel momento, el Club Natación Sevilla cambió su denominación y pasó a llamarse Novias Cira, el patrocinador.

La casa de novias hizo que el color rosa fuera el ele-gido para las equipaciones. Algo que causó una gran controversia y que hacía a los jugadores del Novias Cira el blanco perfecto de diversas bromas y mofas. Sin embargo, el color elegido permitía que el equipo no pasara desapercibido, además de contar solo con una equipación, y ahorrarte una segunda. Pocos equi-pos más vestirían de rosa...

Actualmente el rosa se ha dejado a un lado, pero son muchos los que recuerdan esos colores que se mantu-vieron durante muchos años.

EL COLOR,una seña de identidad

1984,amnistía también para el Novias Cira

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gustado mucho la garra que ha puesto en la cancha y el des-parpajo con el que ha actuado” dijo el seleccionador. El jugador de Carmona actuó 25 minutos y anotó 18 puntos con 5/5 en tiros de dos, 2/3 en triples y 2/2 en tiros libres, a los que le añadió 3 rebotes defensivos y un balón

perdido y otro robado. Con esos números, Raúl Pérez fue el mejor jugador español en la abultada victoria: 91-70.

El fino triplista, se convertiría en histórico en la ACB al anotar 770 tri-ples en su carrera. Una marca muy difícil de batir.

Debutó también en las mejores competiciones españolas Rafael Monclova, un base zurdo y que disfrutó del baloncesto en diver-sas ciudades hasta que se retiró y se pasó al banquillo. Una vez allí, este año se ha proclamado campeón de España cadete con el equipo del Cajasol Banca Cí-vica.

En la cancha, Monclova pasó por Sevilla, Murcia, Alicante, Córdoba o Huelva entre otros tantos des-tinos.

Pero no solo jugadores y entrena-dores. También árbitros han salido de la azotea. Antonio Martínez, más conocido como West, arbitró durante varios años en ACB. Y cre-ció en la cantera sevillana.

Nuevos cambios:

Aparece el CDB Sevilla

Con la creación del CB Sevilla, la importancia del Club Natación Se-villa fue siendo cada vez menor. El nuevo club ganaba en interés a los anteriores, especialmente por estar en ACB. Y eso trajo que las noticias que antes iban dedicadas al Club Natación Sevilla, Club Ami-gos o Círculo Mercantil, serían to-das para el CB Sevilla. Con ello, los patrocinadores se fijaban más en el nuevo equipo al tener un mayor y amplio mercado.

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A principios de la década de los 80, la normativa de los extranjeros no permitía que estos jugaran en según qué categorías. Y eso pasó factura a los sevillanos, que tenían al alero americano Richard Groves como pilar fundamental. El jugador ame-ricano fue fundamental en el ascenso a Segun-da, pero no pudo jugar en esa categoría.

El equipo le despidió en el II Trofeo Novias Cira, reconociendo su gran aportación en el ascen-so. Su espectacularidad todavía es recordada por quién lo vio en acción. Una pena que la normativa privara de su calidad a las canchas sevillanas.

Richard Groves y la normativa de los extranjeros

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ACB PHOTOPoco a poco Sevilla fue “monopo-lizándose” en el baloncesto. Algo lógico por otra parte al ser el CB Se-villa, Caja San Fernando, el equipo con mayor categoría en la provin-cia. Además de los patrocinadores, el público y las más que posibles ayudes institucionales serían para el equipo en ACB, luchando el resto por una tarta pequeña a la que esta-ban invitados muchos comensales.

Hubo quién desapareció con el tiempo. Hubo quién buscó otras opciones. Hubo quién se regeneró. Hubo quién se reinventó. El Club Natación Sevilla siguió con el apo-yo de sus socios.

Socios que a día de hoy todavía le apoyan. Aunque con la situa-ción económica, cada vez es más difícil mantener el número de

socios. Y aún más mantener una sección que ha sido muy produc-tiva para el baloncesto sevillano y para el Club Natación Sevilla. No hay que olvidar que hasta que apareció el Caja San Fernan-do, hoy Cajasol Banca Cívica, el Club Natación Sevilla, o Novias Cira, era uno de los equipos que mayor categoría había tenido en la ciudad andaluza. Había sido un referente en el baloncesto en Andalucía y Sevilla.

La temporada pasada el senior consiguió el ascenso a 1ª Nacio-nal, categoría inmediatamente in-ferior a EBA. Y en esta temporada consiguió la permanencia depor-tiva. Aunque tal y como está la situación económica, nadie ase-gura que eso te permita seguir en esa categoría la temporada siguiente.

Sin embargo, la pérdida de pa-trocinadores fue mermando cada vez más al baloncesto en el Club Natación Sevilla. Únicamente con el dinero de sus socios, la sec-ción no vive en su mejor momen-to de salud. Desde este histórico del baloncesto sevillano, espe-ran que alguien les insufle algo de vida. Que alguien les ayude económicamente para volver al lugar que ocupaban hace no mu-chos años. Alguien que apueste por ellos. Apuesta segura a una de las mejores materias prima de Sevilla.

Materia prima vuelve a haber en las categorías inferiores. Tan-to jugadores como entrenadores están identificados con el club y cada jugador que pisa esa cancha histórica la hace propia. Un sen-timiento. Una historia vivida, con-tada y que todavía no ha termina-do. El vivero de Sevilla todavía no ha cerrado.

REPORTAJE

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ZONA

Fernando Robledano José Luis SosaAna Fernández del Campo José Francisco MartínezFotografía

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Fase de Ascenso Liga Femenina

Fotos de José Luis Sosa

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